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El imperio bizantino y su identidad - Jesús Enrique Santiago García

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Martiñón Gómez Vangelis Daniel
Europa Siglos V-XV
18/10/2020
El imperio bizantino y su identidad
La manera de ver y estudiar al Imperio bizantino tiene varios puntos de vista, en las que los especialistas llegan a varias interpretaciones, pues varios estudiosos ven a Bizancio como la decadencia del Imperio romano, pero la historia de Bizancio está llena de “[…] sucesivas etapas de crisis y esplendor”[footnoteRef:1]. [1: Emilio Cabrera, Historia de Bizancio, Barcelona, Ariel, 1998, p.11.] 
Como tal el problema comienza por el nombre, pues le llamamos Imperio bizantino, aunque ellos mismo jamás se llamaron bizantinos, sino que se siguieron llamando romanos, incluso los emperadores tenían como título basileus romaion, y se creen que son los herederos de Augusto (no pensemos en herederos de familia sino de la línea de emperadores). ¿Entonces de dónde aparece el concepto de Bizancio? El concepto de Bizancio es acuñado en el siglo XVI para referirse hacia el Imperio romano de oriente[footnoteRef:2]. [2: Loc. Cit.] 
Otro problema del estudio de Bizancio es su inicio, podríamos enmarcar su inicio en el momento que Roma se convierte en tetrarquía o cuando Constantino al unificar Roma decide poner la nueva capital de Roma en donde estaba Bizancio y llamarla Constantinopla o por último el momento en que a la muerte de Teodosio Roma se divide en dos (Occidente y oriente) dejando a sus hijos como emperadores, Arcadio en oriente y a Honorio en occidente. En mi opinión el inicio del Imperio bizantino tiene como punto de partida con la edificación de Constantinopla por parte de Constantino ya que al ser la nueva Roma, comenzó a tener importancia política, en incluso Constantinopla es una ubicación estratégica pues podemos contemplarla como esa conexión entre el occidente y oriente, esto se ve reflejado en sus rutas marítimas que tenían paso hacia el Mar Negro o hacia el Mar Mediterráneo, también lo podemos notar en las comunicaciones terrestres, teniendo cuatro rutas con sus respectivas ramas, siendo Constantinopla el puente entre dichas comunicaciones.
Debido a esta conexión entre el occidente y el oriente hubo bastantes discusiones sobre la definición de Constantinopla, ¿Era occidental u oriental? La influencia oriental fue una visión realista y modesta mientras que la influencia occidental era una mirada hacia idealista del pasado de la gloriosa Roma[footnoteRef:3]. [3: Idem, p. 17.] 
Periodización
Bizancio con sus diez u once siglos de existencia se encontró con varias pruebas y enemigos (bastantes enemigos) desde su inicio hasta su inevitable fin en 1453.
Época protobizantina (S. IV-VI): Constantinopla comienza a mezclarse con las doctrinas orientales poco a poco, mientras que el Imperio romano de occidente es devastada en el 476, Justiniano trata de reconquistar lo que fue quitado a Roma de occidente, pero este al conseguir menos de lo invertido, la población se descontenta, y termina la etapa con el derrocamiento de Mauricio en el 602 y de Focas en el 610.
El repliegue de Bizancio (610-842): En este punto los persas le quitan a Bizancio provincias, debilitándolo poco a poco, mientras que por el frente de occidente están como amenaza los ávaros, eslavos y búlgaros.
El apogeo (842-1056): La recuperación inicia con el último de la dinastía amoriana, Miguel III, desciende la dinastía macedónica que con sus fuerzas Bizancio recupera lo que había perdido tras las batallas contra Persia, incluso derrota a los búlgaros que tantos problemas habían estado dando.
El declive (1056-1261): En este punto llegan otros enemigos llamados turcos (oriente) y normandos (occidente) pero esto no fue todo pues en la cuarta cruzada las fuerzas cristianas toman Constantinopla en el 1204, debido a esta toma, las cruzadas perdieron fuerzas y se le llamo a esta cruzada como la cruzada infame. Debido a esta toma, el imperio se descompuso en cuatro estados, El Imperio Latino (Constantinopla), El Despotado de los Dukas (Epiro), El Imperio de los Láskaris (Nicea) y El Imperio de los Comneno (Trebisonda).
La lenta agonía de Bizancio (1261-1453): Desgraciadamente los cuatro estados subsisten y todo intento de mejorar será reducido gracias al imperio otomano amenazando constantemente los restos desperdigados de Bizancio.
Bibliografía:
· Cabrera, Emilio, “Bizancio y su marco histórico”, en Historia de Bizancio, Barcelona, Ariel, 1998, pp.11-19.
· Cameron, Averil, “Introducción”, “Imperio”, “Helenismo” en Cuestiones Bizantinas, Barcelona, Bellaterra, 2017, pp. 25-29; 49-85.

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