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Libro originalmente publicado por la Editorial Pueblo y Educación. La Habana, 2013. Obra merecedora de uno de los Premios de “Ciencia e Innovación Educativa” (2011), del Ministerio de Educación de la República de Cuba. El arte de enseñar científicamente Consejos útiles para docentes noveles Paul Antonio Torres Fernández Paul Antonio Torres Fernández El arte de enseñar científicamente Libro originalmente publicado por la Editorial Pueblo y Educación. La Habana, 2013. Obra merecedora de uno de los Premios de “Ciencia e Innovación Educativa” (2011), del Ministerio de Educación de la República de Cuba. Índice Prefacio ...................................................................................................... 1 El reconocimiento ...................................................................................... 3 La clase ..................................................................................................... 7 Las funciones didácticas .......................................................................... 21 La actividad cognoscitiva independiente .................................................. 55 La planificación de la enseñanza ............................................................. 68 Breves consideraciones finales ..................................................................... 76 Bibliografía ............................................................................................... 77 Paul Antonio Torres Fernández El arte de enseñar científicamente 49 Libro originalmente publicado por la Editorial Pueblo y Educación. La Habana, 2013. Obra merecedora de uno de los Premios de “Ciencia e Innovación Educativa” (2011), del Ministerio de Educación de la República de Cuba. La actividad cognoscitiva independiente La condición de proceso mental hace de la actividad cognoscitiva una operación sumamente compleja para el acto educativo. Pueden referirse, al menos, dos razones fundamentales. Por un lado, el aprendizaje es una actividad intransferible (nadie lo puede hacer en el lugar de otro) y, por lo tanto, está sujeto a condiciones muy personales, entre las que resalta el nivel de motivación por aprender. Es decir, moviliza –mejor, demanda- diversos y complejos mecanismos afectivos y volitivos del aprendiz. Axiomáticamente dicho: aprender presupone tener disposición para hacerlo. Por otra parte, el aprendizaje no es un fenómeno fácilmente imitable; sus herramientas y procedimientos de trabajo –en tanto internas, subjetivas- no son directamente palpables (como sucede con las actividades manuales del hombre, por ejemplo), sino que están mediadas por signos y mensajes culturales que el estudiante deberá aprender a captar y decodificar. Luego, una conducción eficaz del proceso educativo requerirá del docente habilidades profesionales especiales, tanto para conquistar la atención e implicación voluntaria del alumno, como para cultivar los procedimientos intelectuales necesarios para de un aprendizaje independiente exitoso. La exigencia de la pedagogía contemporánea de lograr un aprendizaje activo y consciente presupone –justamente- laborar intensamente en estas dos direcciones. Para aspirar a conquistar la disposición del alumno para la apropiación de los nuevos contenidos de enseñanza el docente debe acudir permanentemente a elevados niveles de exigencia cognitiva, situados más allá de lo alcanzado por el estudiante, pero en situación de asistencia, de una colaboración razonable. Se refiere –en el contexto del proceso educativo- a lo que se conoce como el trabajo en la zona del desarrollo próximo1; por cierto, todo un desafío a la regla del tercero excluido (se es o no se es; es decir, se está trabajando en la zona del desarrollo real o en la del desarrollo potencial del estudiante), lo que fue resuelto por L. S. Vigotsky dialécticamente, con maestría absoluta. Ya se ha explicado que la clase tiene en la función didáctica de motivación un momento especialmente trascendente para el cumplimiento de este requerimiento, si bien no el único. También se hizo énfasis en que tal motivación resulta de la toma de conciencia de insuficiencias o vacíos (explicativos u operatorios) que constituyen obstáculos para alcanzar demandas superiores, admitidas como retos personales. Es por ello que, si bien no son despreciables los intereses extra-docentes como fuentes generadoras de motivos (contribuir al desarrollo futuro de la nación, 1 Para profundizar, véase (Torres, 1993: 28) (Rico et al, 2001: 2-3) (Rico, 2003: 3) (Castellanos et al, 2005: 21-22) Paul Antonio Torres Fernández El arte de enseñar científicamente 50 Libro originalmente publicado por la Editorial Pueblo y Educación. La Habana, 2013. Obra merecedora de uno de los Premios de “Ciencia e Innovación Educativa” (2011), del Ministerio de Educación de la República de Cuba. corresponder a las aspiraciones de los padres en relación con su futuro profesional o ciudadano, etc.), se aboga por una motivación centrada en el desarrollo mismo de la asignatura, en el cómo funcionaría lo que ya conozco y domino aquí, en esta nueva situación de aprendizaje que –de momento- no sé cómo resolver. Se trata de retos más inmediatos y tangibles2. Ahora bien, una tensión excesivamente prolongada o muy por encima de las posibilidades reales del estudiante será causa, casi seguro, de frustración. Por tanto, una habilidad profesional indispensable será saber, al mismo tiempo, disminuir oportuna y eficazmente la tensión intelectual creada. Claro que la solución correcta no está en darle al estudiante la respuesta definitiva al problema docente generado, como es típico en la enseñanza explicativo-ilustrativa, donde lo esencial es sólo que el alumno comprenda lo que se está tratando de enseñar. En su lugar, debe acudir en auxilio del alumno la reflexión acerca de los recursos cognitivos disponibles y que pueden resultar potencialmente solucionadores del conflicto cognitivo creado; se trata de una postura equivalente a la búsqueda de la respuesta a la pregunta “¿de qué partimos?”, referida en el trabajo con la función didáctica de orientación hacia el objetivo. El docente debe esmerarse –en ese momento- en fortalecer en sus estudiantes la confianza en sus potencialidades, puestas a prueba -con resultados exitosos- en otras muchas ocasiones. Pero inmediatamente después de aliviadas las tensiones, de lograr que el estudiante sopese sus potencialidades y recursos, y alcance –por tanto- reorientar su actividad de búsqueda, el docente debe hacer ver nuevamente que –a pesar de los avances parciales alcanzados- el problema docente, resultante de la motivación, no está aún totalmente resuelto y hay que –por tanto- continuar esforzándose. En consecuencia, nuevas tareas docentes deben precisarse y los estudiantes deben ser convocados otra vez a resolverlas. Ya no se trata sólo de que el docente no le diga al alumno lo que él ya conoce, sino además de que no le transmita al estudiante lo que él, con ayuda de preguntas e impulsos didácticos, puede obtener. Visto así, el decursar de la conversación de clase habrá de seguir una trayectoria sinuosa, con crestas y valles entre puntos extremos de elevado y bajo nivel de exigencia cognitiva. Por otra parte, las ayudas que ofrezca el docente (o incluso otros estudiantes más aventajados, bajo su conducción) están muy ligadas a la lógica interna de la asignatura y, difícilmente, no se correspondan con los recursos heurísticos generales de: establecer analogías con contenidos anteriores, buscar relaciones y dependencias entre los componentes, y reducir el problema a un problema ya resuelto. 2 Véase (Castellanos et al, 2005: 40-41) (Moreno, 2006: 19-20) para ampliar. Paul Antonio Torres Fernández El arte de enseñar científicamente51 Libro originalmente publicado por la Editorial Pueblo y Educación. La Habana, 2013. Obra merecedora de uno de los Premios de “Ciencia e Innovación Educativa” (2011), del Ministerio de Educación de la República de Cuba. El docente debe tratar de identificar esas reglas generales de búsqueda específicas de la asignatura y enseñar de forma explícita cómo emplearlas a los alumnos, lo cual supone una trabajo metacognitivo periódico en clases a través de miradas retrospectivas, una vez resueltos los problemas docentes formulados. Hay que evitar que cada situación de enseñanza sea vista como algo totalmente diferentes a las anteriores. La sistematización de los recursos heurísticos ha de ser tan válida como la de los núcleos básicos del contenido de enseñanza. También debe estructurar inteligentemente el sistema de preguntas e impulsos que contienen dichos recursos de búsqueda. Es decir, no presentarlos tampoco de forma elaborada, sino intentar su aprehensión a través de una implicación activa y consciente de los alumnos en su apropiación. Una regla didáctica esencial para ello es partir de altos niveles de exigencia al formular las preguntas de apoyo o los impulsos didácticos y disminuir dichos niveles sólo en la medida en que los estudiantes no logren vencerlos. Es lo que se conoce en la literatura especializada como principio de las exigencias decrecientes3. De acuerdo con el mismo, el máximo nivel de exigencia se manifiesta cuando, tras formular la pregunta o el impulso –según sea- el docente hace una pausa prudencial; es decir, deja meditar y trabajar a sus alumnos; en cambio, el nivel mínimo de exigencia -al final de la cadena de ayudas sucesivas- consiste en cuestionar la posibilidad de utilización del recurso de búsqueda que se pretende emplear, induciéndolo con su mención. Si aún así los estudiantes no lo proponen, el docente debe identificarlo y explicar cómo utilizarlo en esa situación. Se ilustrará mediante un Ejemplo los aspectos fundamentales que han sido tratados en este penúltimo acápite. Para ello se ha seleccionado la situación de enseñanza obtención de la fórmula de distancia entre dos puntos, de la unidad de Geometría Analítica, de la asignatura Matemática de onceno grado […]. 3 Para profundizar, véase (Torres, 1993: 82) (Torres, 1997: 20-21) Paul Antonio Torres Fernández El arte de enseñar científicamente 62 Libro originalmente publicado por la Editorial Pueblo y Educación. La Habana, 2013. Obra merecedora de uno de los Premios de “Ciencia e Innovación Educativa” (2011), del Ministerio de Educación de la República de Cuba. La actividad cognoscitiva independiente Fundamentos Psicológicos: Del aprendizaje desarrollador: “El desarrollo humano no sigue un rumbo prefijado o determinado. Lo caracteriza su carácter inconcluso y su maleabilidad; es decir, la cualidad de modificarse en función de las influencias complejas que recibe, dada por la capacidad de adaptación y de aprendizaje del ser humano”. (Castellanos et al, 2005: 73) Del aprendizaje desarrollador: “(…) la actividad cognoscitiva (...) se expresa a través de los procesos, funciones y operaciones del sistema cognitivo humano (de la percepción, la memoria, el pensamiento, el lenguaje, la imaginación, etc.) y de determinados productos. Especialmente, en la base de este sistema se encuentra el desarrollo alcanzado por el pensamiento (...)”. (Castellanos et al, 2005: 35) De la educación y el desarrollo psíquico: “Lo externo, que es cultural, llega a ser interno mediante un proceso de construcción con otros que implica la transformación de lo cultural y, a su vez, la transformación de las estructuras y funciones psicológicas. La utilización posterior de lo internalizado (producto cultural), ya transformado subjetivamente, se manifiesta en un proceso de externalización que conduce a la transformación de los proceso culturales. Esto indica una interacción dialéctica entre lo social y lo individual que no debe interpretarse como un acto de transmisión cultural, unidireccional y mecánico, por cuanto el sujeto es un ente activo, constructor y transformador de la realidad y de sí mismo, y no un simple receptor-reproductor.” (Bermúdez-Pérez, 2007: 34) Del desarrollo intelectual de los alumnos: “Diferentes estudios han demostrado que un elemento esencial que permite el logro de la generalización está relacionado con el nivel de orientación que posee el alumno para la realización de la tarea, con los puntos de referencia que le sirven de apoyo para poder actuar (...)”. (Rico, 2002: 66) Del aprendizaje desarrollador: “El aprendizaje activo, cuyo nivel superior de desarrollo conduce al aprendizaje autorregulado, supone, desde el punto de vista motivacional-afectivo, que en el aprendiz exista una verdadera disposición a aprender de forma activa y estratégica; es decir, la disposición para enfrentar y mantener la concentración y los esfuerzos a lo largo de las tareas para lograr la consecución de sus objetivos de aprendizaje, así como el interés por profundizar en los contenidos utilizando un estilo ´estratégico´; es decir, consciente, orientado a metas y al análisis flexible de cómo lograrlas ”. (Castellanos et al, 2005: 37) Paul Antonio Torres Fernández El arte de enseñar científicamente 60 Libro originalmente publicado por la Editorial Pueblo y Educación. La Habana, 2013. Obra merecedora de uno de los Premios de “Ciencia e Innovación Educativa” (2011), del Ministerio de Educación de la República de Cuba. La actividad cognoscitiva independiente Fundamentos Psicológicos / continuación… Del desarrollo intelectual de los alumnos: “(...) las ´cosas acabadas´ no generan actividad ni motivación, o la generan a niveles muy bajos. Si consideramos la motivación un factor impulsor esencial en la actividad, el logro de esta deberá constituir un requerimiento importante en la concepción y dirección del proceso de enseñanza-aprendizaje”. (Rico, 2002: 73) Del aprendizaje desarrollador: “(…) un aprendizaje eficiente y, más aún, desarrollador necesita de un sistema poderoso de motivaciones intrínsecas para su despliegue. La motivación intrínseca es aquella que se sustenta en la implicación e interés personal por el propio contenido de la actividad que se realiza y en la satisfacción y los sentimientos de realización personal que el sujeto experimenta al llevarla a cabo (...) El desarrollo de motivaciones intrínsecas hacia el aprendizaje constituye la fuente de la que surgen, de manera constante, los nuevos motivos para aprender y la necesidad de realizar aprendizajes a lo largo de la vida (...)”. (Castellanos et al, 2005: 40-41) De la estimulación motivacional: “En el desarrollo motivacional, la estimulación intelectual no se relaciona sólo con la asimilación del conocimiento, sino fundamentalmente con la actividad cognitiva y la regulación meta-cognitiva, con enseñar a pensar y enseñar a aprender; es decir, con la apropiación activa, crítica y creadora de los contenidos del proceso de enseñanza-aprendizaje (…)”. (Moreno, 2006: 32) Del desarrollo psíquico: “La solución de (...) contradicciones transcurre mediante alternativas que plantean niveles de desarrollo elevados. Las nuevas necesidades al ser satisfechas, con nuevos tipos de actividades y relaciones, eliminan la contradicción. Pero la necesidad satisfecha origina una nueva necesidad y así sucesivamente. Entonces una contradicción se sustituye por otra y el desarrollo continúa impulsado por estas, como sus fuerzas motrices”. (Moreno et al, 2007: 21) De la escuela histórico-cultural: “Nuestra comprensión de la ZDP (zona del desarrollo próximo) está dado como (...) el espacio de interacción entre los sujetos que, como parte del desarrollo de una actividad, le permite al maestro operar con el potencial en el alumno, en un plano de acciones externas, sociales, decomunicación, que se convierten en las condiciones mediadoras culturalmente que favorecen el paso a las acciones internas individuales (lo interpsicológico pasa a un nivel intrapsicológico de desarrollo individual, al decir de Vigotsky (...)”. (Rico, 2003: 3) Paul Antonio Torres Fernández El arte de enseñar científicamente 61 Libro originalmente publicado por la Editorial Pueblo y Educación. La Habana, 2013. Obra merecedora de uno de los Premios de “Ciencia e Innovación Educativa” (2011), del Ministerio de Educación de la República de Cuba. La actividad cognoscitiva independiente Fundamentos Psicológicos / continuación… Del aprendizaje desarrollador: “El papel de la educación ha de ser el de crear desarrollo, a partir de la adquisición de aprendizajes específicos por parte de los (…) educandos. Pero la educación se convierte en promotora del desarrollo solamente cuando es capaz de conducir a las personas más allá de los niveles alcanzados en un momento determinado de su vida y propicia la realización de aprendizajes que superen las metas ya logradas. Se reconoce, entonces, siguiendo a Vigotsky, que una educación desarrolladora es la que conduce al desarrollo, va delante del mismo –guiando, orientando, estimulando (…)”. (Castellanos et al, 2005: 22) Del aprendizaje desarrollador: “La concepción desarrolladora asumida (...) reconoce el problema como manifestación de las contradicciones del proceso, como punto de partida de su diseño y ejecución y como condición necesaria para el trabajo del profesor con la zona del desarrollo próximo (ZDP) del/de la alumno/a (...) Expresado de manera simple, el problema constituye la expresión de la fuerza que mueve el proceso, de su por qué”. (Castellanos et al, 2005: 50) Del diagnóstico de la ´zona del desarrollo próximo´: “(…) La zona del desarrollo próximo no es una propiedad determinada ni del niño, ni del funcionamiento interpsicológico. por sí solo, sino que se determina por la educación implicada en ella La educación escolar es el motor impulsor del desarrollo del niño (…)” (Akudovich et al, 2006:19) De la educación y el desarrollo psíquico: “(...) para Vigotsky (...), la educación y la enseñanza no pueden esperar a que se produzca el desarrollo psíquico del niño, sino que tienen que convertirse en impulsoras de ese desarrollo; por tanto, la educación, la enseñanza, conducen y guían el desarrollo, van por delante de este y no a su zaga. Pero esto no quiere decir que (...) la educación corra por delante del desarrollo, halándolo como un caballo a una carreta, sino que deben ir un paso por delante, incitándolo, provocándolo (...)” (Bermúdez-Pérez, 2007: 35) De la escuela histórico-cultural: “El carácter diferenciado del desarrollo y de los resultados que se alcanzan en la ZDP no se produce en todos los procesos de apropiación, sino sólo en los que conllevan modificaciones en la estructura de las funciones psíquicas, lo cual permite al sujeto interactuar cognitiva y afectivamente de una manera particular con los objetos, con los otros e incluso consigo mismo”. (Rico, 2003: 10) Paul Antonio Torres Fernández El arte de enseñar científicamente 62 Libro originalmente publicado por la Editorial Pueblo y Educación. La Habana, 2013. Obra merecedora de uno de los Premios de “Ciencia e Innovación Educativa” (2011), del Ministerio de Educación de la República de Cuba. La actividad cognoscitiva independiente Fundamentos Psicológicos / continuación… De la escuela histórico-cultural: “(...) un proceso de enseñanza-aprendizaje resulta desarrollador cuando la transferencia de conocimientos y habilidades lleva por base la acción conjunta (...) donde resulta esencial para el maestro poder discernir en cada momento cuál es el oportuno nivel de ayuda que requieren los alumnos de forma que no se anticipe a sus razonamientos, (...) plantear tareas cuyas exigencias resulten muy elevadas (...)”. (Rico, 2003: 16) De la escuela histórico-cultural: “Las tareas o actividades de aprendizaje se deben caracterizar por ser problémicas; el maestro en el desarrollo del proceso de enseñanza coloca al alumno ante situaciones que hacen necesario buscar el procedimiento general (...) El objetivo fundamental de estas situaciones de aprendizaje radica en lograr, de modo consciente y dirigido (...) que el alumno asimile, se apropie de estos procedimientos generales que le permitirán, ante la presentación de una nueva tarea de este tipo solucionarla”. (Rico, 2003: 58) Del desarrollo psíquico: “(...) la educación y la enseñanza deben tirar del desarrollo hacia formas y niveles superiores. Estas exigencias (...) muestran cómo para que los niños y niñas puedan asimilar nuevas capacidades, formas de actuación y motivaciones, para hacerlo necesitan al principio de graduales niveles de ayuda y dirección por parte del adulto y, posteriormente, una sistemática ejercitación, a fin de que las pueda realizar de forma independiente (...)”. (Moreno et al, 2007: 20) De una didáctica del aprender a aprender: “La escuela ha de ocuparse de unos pocos conocimientos (…) Los restantes ´vendrían solos´ gracias a la búsqueda o indagación provocada por el interés creado (…), todo saber tiene su cúspide, pero allí se puede llegar sólo si la acción nace de una verdadera fuerza afectiva (…)”. (Fariñas, 2008: 84) Del aprendizaje desarrollador: “El desarrollo del componente metacognitivo constituye un elemento central en lo que se denomina ´aprender a aprender´. La activación-regulación del aprendizaje requiere de la conjunción de estas subdimensiones, o sea del componente cognitivo y del metacognitivo funcionando estrechamente unidos con el componente motivacional-volitivo. Sin embargo, es sobre el componente metacognitivo que se construye la ´estructura´ básica para el despliegue autónomo, autorregulado, nivel superior del aprendizaje activo”. (Castellanos et al, 2005: 38) Paul Antonio Torres Fernández El arte de enseñar científicamente 63 Libro originalmente publicado por la Editorial Pueblo y Educación. La Habana, 2013. Obra merecedora de uno de los Premios de “Ciencia e Innovación Educativa” (2011), del Ministerio de Educación de la República de Cuba. La actividad cognoscitiva independiente Fundamentos Pedagógicos: De los principios de la enseñanza: “La actividad cognoscitiva en el proceso de enseñanza abarca distintos niveles: el más alto es en el que los alumnos trabajan independientemente, tanto en la actividad intelectual como manual; en el nivel más bajo, la atención de los estudiantes no se mantiene estable, no pueden concentrar su atención por largo rato en la explicación del profesor o en la lectura del texto, no tienen intereses cognoscitivos desarrollados; por regla general, estos alumnos asimilan mal. Entre uno y otro nivel existen niveles intermedios por los que deben transitar los estudiantes hasta alcanzar el nivel considerado más alto”. (Labarrere-Valdivia, 1988: 65) De la esencia y estructura del proceso de enseñanza: “La enseñanza ha de lograr que los alumnos adquieran no sólo conocimientos, sino también que desarrollen las capacidades, las habilidades y los hábitos que les permitan una elevada formación intelectual y, con ello, el desarrollo de la independencia cognoscitiva. Paralelamente se tienen que formar cualidades del carácter, las normas de conducta y las convicciones que caracterizan a la personalidad socialista”. (ICCP, 1989: 183) De la dirección de la actividad cognoscitiva: “La aceptación del papel activo del escolar en el proceso de enseñanza no significa, en modo alguno, (...) que ella no pueda ser determinada y dirigida desde afuera. La actividad cognoscitiva, correctamente organizada y dirigida, no elimina la iniciativa o la independencia de los alumnos, sino que propicia las más favorables condiciones para la actividad creadora de los escolares y el desarrollo de sus capacidades”.(ICCP, 1989: 203) De las raíces y logros de la Pedagogía Cubana: “Uno de los objetivos centrales del proceso de enseñanza aprendizaje escolar cubano es la asimilación por el estudiante de los conocimientos científicos de su época y la formación en su personalidad de una concepción que implique una actitud científica hacia los fenómenos de la realidad natural y social (...)” (Sánchez-Sánchez Toledo, 2002: 41) Del desarrollo intelectual de los alumnos: “(...) Lograr una posición activa requiere que la participación del alumno haya implicado un esfuerzo intelectual que demande orientarse en la tarea, reflexionar, valorar, suponer, llegar a conclusiones, argumentar, utilizar el conocimiento, generando nuevas estrategias (...)”. (Rico, 2002: 73) Paul Antonio Torres Fernández El arte de enseñar científicamente 64 Libro originalmente publicado por la Editorial Pueblo y Educación. La Habana, 2013. Obra merecedora de uno de los Premios de “Ciencia e Innovación Educativa” (2011), del Ministerio de Educación de la República de Cuba. La actividad cognoscitiva independiente Fundamentos Pedagógicos / continuación... De la pedagogía de la ternura: “La implicación del niño en su propio proceso de aprendizaje resulta decisiva para que siempre continúe con su afán de querer saber. Una alternativa para lograrlo es la utilización no sólo de métodos que estimulen la memorización, la reproducción y la repetición con o sin modelos, sino también y de manera primordial de métodos que propicien una enseñanza dialogada, activa, en que los alumnos descubran las contradicciones que se dan en el camino del saber y trabajen por darle solución (...) y lo que es muy importante, descubrir y plantear nuevos problemas “. (Turner-Pita, 2002: 30) Del principio de la unidad del carácter científico e ideológico del proceso pedagógico: “Este principio demanda a la escuela como influencia rectora en la educación de la personalidad de las nuevas generaciones, que todas sus actividades estén dirigidas a la búsqueda de lo nuevo, de lo desconocido, que favorezca el desarrollo del pensamiento creador que necesitamos (...)”. (Addine et al, 2002: 84) De la dirección de la actividad cognoscitiva: “(...) la actividad cognoscitiva correctamente estructurada, orientada y dirigida produce también el desarrollo del escolar que la realiza. En ello radica un principio pedagógico fundamental: lograr una enseñanza que desarrolle”. (López, 2002: 103) De las categorías fundamentales de la Pedagogía: “Como proceso comunicativo, presupone el diálogo, la comprensión de la información, la relación franca, amistosa, afectiva, motivante, participativa y la creación de un ambiente de trabajo conjunto entre educadores y educandos y de estos entre sí”. (López et al, 2002: 56) Del desarrollo intelectual de los alumnos: “(...) el maestro debe tener en cuenta que lograr la orientación por parte del escolar no significa algo dado de forma completa por el educador, sin la intervención del alumno; por el contrario, esto supone que el maestro (...) exija del alumno el análisis de las condiciones de la tarea, de los datos e información que se ofrece, así como de los procedimientos a emplear para su solución”. (Rico, 2002: 73) Del desarrollo intelectual de los alumnos: “(...) la interacción del escolar con el objeto del conocimiento tiene que ir acompañada de la interacción con los sujetos, con el propósito tanto de plantear exigencias de mayor complejidad (...) como de propiciar niveles de ayuda en el traslado de los procedimientos adquiridos (...) ”. (Rico, 2002: 74) Paul Antonio Torres Fernández El arte de enseñar científicamente 65 Libro originalmente publicado por la Editorial Pueblo y Educación. La Habana, 2013. Obra merecedora de uno de los Premios de “Ciencia e Innovación Educativa” (2011), del Ministerio de Educación de la República de Cuba. La actividad cognoscitiva independiente Fundamentos Pedagógicos / continuación... Del aprendizaje desarrollador: “El equilibrio entre el rigor de la tarea, la exigencia de la meta planteada y la posibilidad de alcanzarlo, constituye uno de los requisitos para la efectividad del trabajo del método con la zona del desarrollo próximo, para el consecuente desarrollo de motivaciones intrínsecas con respecto al aprendizaje y de sentimientos de autoconfianza y autoestima en alumnos y alumnas (...)”. (Castellanos et al, 2005: 61) Del aprendizaje desarrollador: “(...) El empleo de procedimientos analógicos y vivenciales, el uso del error y de la interrogación como estrategias didácticas, la enseñanza multisensorial, la simulación, el apoyo en la realización de proyectos, entre otros muchos, constituyen procedimientos (...) que contribuyen al desarrollo de una enseñanza activa, motivadora, implicativa, dinámica y, por ende, a la proyección de situaciones de aprendizaje desarrolladoras”. (Castellanos et al, 2005: 61) De la teoría y práctica curricular: “(...) es necesario considerar: principios y métodos generales del trabajo en las diferentes esferas, incluyendo el trabajo científico; los métodos y procedimientos fundamentales del pensamiento, de la obtención y la aplicación de conocimientos; las técnicas prácticas usuales del trabajo intelectual, incluyendo las técnicas de aprendizaje; los procedimientos algorítmicos y heurísticos”. (Ruiz, 2003: 35) Del aprendizaje desarrollador: “Los procedimientos de enseñanza heurísticos (...) pueden ser explotados por los profesores y las profesoras en pos de lograr el desarrollo de la profundidad, la racionalidad, la independencia del pensamiento y de estimular el despliegue de acciones de control y autoevaluación en sus estudiantes (...)”. (Castellanos et al, 2005: 61) Del aprendizaje desarrollador: “(...) Estimule la aventura de la autoexploración y el autoconocimiento en sus alumnos y alumnas y use la diversidad inter- individual para facilitar la misma. Promueva la confrontación y ayude a revelar conflictos y contradicciones a partir del contenido para incitar así el aprendizaje crítico-reflexivo y la motivación”. (Castellanos et al, 2005: 98) Del aprendizaje desarrollador: “Estimule la formulación de metas a corto plazo, que puedan ser supervisadas y evaluadas con relativa inmediatez y que respondan a las necesidades y posibilidades reales de cada estudiante (...) busque siempre un nivel de desafío razonable ubicado dentro de su zona de desarrollo próximo”. (Castellanos et al, 2005: 101) Paul Antonio Torres Fernández El arte de enseñar científicamente 66 Libro originalmente publicado por la Editorial Pueblo y Educación. La Habana, 2013. Obra merecedora de uno de los Premios de “Ciencia e Innovación Educativa” (2011), del Ministerio de Educación de la República de Cuba. La actividad cognoscitiva independiente Fundamentos Pedagógicos / continuación... De la actividad pedagógica: “(...) del lado del maestro queda lo mejor que puede transmitir la educación: no solo conocimientos, sino también la manera de lograrlos, los modos específicamente humanos de actividad cognoscitiva (...)”. (García Ramis et al, 1996: 9) De las categorías del proceso de enseñanza-aprendizaje: “El método de exposición problémica, el heurístico y el investigativo posibilitan que los alumnos intervengan directamente en la elaboración del conocimiento y refleja la naturaleza interna del proceso del pensamiento mediante las tareas cognoscitivas que ellos deben realizar. Estos métodos influyen poderosamente en que se alcancen niveles superiores de desarrollo de la actividad intelectual, de desarrollo del pensamiento; enriquecen la motivación, la comunicación con los coetáneos, la participación activa, el estímulo hacia el enjuiciamiento de lo aprendido, la independencia, el desarrollo de la autoestima (...) la solidaridad, (...) entre otros aspectos valiosos de la formación integral de la personalidad”.(Santos, 2004a: 66) De los ´secretos pedagógicos´: “(...) los métodos que apliquemos deben lograr transformar la actitud puramente receptiva de nuestros alumnos por una posición activa, investigativa, de búsqueda, de disfrute, de creación”. (Pita- Benítez, 2005: 53) De la formación inicial de los profesionales de la educación: “(...) El lenguaje es la más esencial comunicación del pensamiento. El pensamiento y el lenguaje, en su interacción dialéctica, se desarrollan mutuamente y son fuente del desarrollo integral del estudiante. Por extensión también se desarrolla la sociedad. Los fundamentos teóricos de la actividad y la comunicación contribuyen a que se sitúen en el centro del proceso educativo”. (Miranda, 2009: 8-9) Del aprendizaje desarrollador: “(...) si bien el centro del proceso son los/las alumnos/as (a quienes se subordinan los objetivos y el diseño del propio proceso), el proceso de enseñanza-aprendizaje no se reduce a ellos y ellas. El protagonismo del estudiante no se realiza eliminando el de profesores/ras sino delimitando cualitativamente, el papel de cada uno y sus condicionamientos recíprocos”. (Castellanos et al, 2005: 50) De una didáctica del aprender a aprender: “(…) Las personas autodidácticas han saboreado bien el placer de ser ellos mismos, sin desconocer la riqueza cultural que es conocida a través de los demás. La proposición fundamental (…) es la de fomentar un aprendizaje autodidáctico en los estudiantes (…)”. (Fariñas, 2008: 126 Paul Antonio Torres Fernández El arte de enseñar científicamente 67 Libro originalmente publicado por la Editorial Pueblo y Educación. La Habana, 2013. Obra merecedora de uno de los Premios de “Ciencia e Innovación Educativa” (2011), del Ministerio de Educación de la República de Cuba. La actividad cognoscitiva independiente Evidencias empíricas: De los factores áulicos de eficacia escolar: “(...) dos factores realizan aportaciones estadísticamente significativas: por una parte, el uso de metodologías que fomentan la participación activa de los estudiantes (...) y, por otra, la utilización de recursos tradicionales en el aula. Ambos factores tienen una relación directa con el auto- concepto (autoestima del estudiante). Además, la aportación significativa se ha mantenido en el modelo con todas las variables de aula de forma simultánea, lo que muestra su potencia como factor asociado (al auto-concepto)”. (Murillo et al, 2007: 166-168) La actividad cognoscitiva independiente Fundamentos Pedagógicos / continuación... De las condiciones psicopedagógicas del aprendizaje: “La enseñanza debe proporcionar conocimientos científicos de forma activa, consciente y emotiva; para ello, tiene que dotar al alumno de procedimientos generales que pueda aplicar a cualquier situación concreta, de forma que alcance un elevado desempeño intelectual”. (Leal, 2000: 10) Del aprendizaje desarrollador: “El principio didáctico del carácter consciente de la enseñanza remite indudablemente al problema de la reflexión y regulación metacognitivas. Plantea al maestro o maestra altas exigencias en la determinación del contenido de la tarea a resolver (...) Lo debe llevar a pensar prospectivamente en los vínculos de estas habilidades de autorregulación y control con el desarrollo de la independencia y la autonomía personal y, por ende, de la personalidad de sus estudiantes”. (Castellanos et al, 2005: 57) Del aprendizaje desarrollador: “(...) Reflexione acerca de cómo facilitar la adquisición de habilidades generales del pensamiento y estrategias de aprendizaje (cognitivas, metacognitivas y de apoyo) en íntimo nexo con los contenidos y habilidades particulares de la asignatura específica que Ud. enseña (...) organice situaciones contextualizadas, basadas en problemas (...) que ofrezcan posibilidades de colaboración e interacción social (...) No olvide que, al mismo tiempo, estará fomentando el desarrollo de sentimientos, actitudes y valores en sus estudiantes”. (Castellanos et al, 2005: 101-102) Paul Antonio Torres Fernández El arte de enseñar científicamente 68 Libro originalmente publicado por la Editorial Pueblo y Educación. La Habana, 2013. Obra merecedora de uno de los Premios de “Ciencia e Innovación Educativa” (2011), del Ministerio de Educación de la República de Cuba. La actividad cognoscitiva independiente Evidencias empíricas / continuación... Del estudio comparado entre Brasil-Chile-Cuba: “In Cuba, the teaching method can best be described as participative but very directed (…) students in Cuba spend much of their time working individually on math problems handed out by the teacher on duplicated sheets. Once these are completed, the teacher goes over the problems with the students, asking those students who did not get the right answer how they did the problem and then discussing with the rest of the class and the individual student the source of the error (…)”. (Carnoy et al, 2006: 114) Del estudio comparado entre Brasil-Chile-Cuba: “In Cuban classrooms the emphasis in many of the classrooms we visited was on (…) problem solving. In most cases the students were seated individually, and the activity usually required them to work through a series of problems that were either prepared on a sheet (…) or in their workbooks. In the other countries there was less of this (…)”. (Carnoy et al, 2006: 123-124) Del estudio comparado entre Brasil-Chile-Cuba: “Brazilian students were at times noticeably bored with the lesson or totally off task and engaged in an “activity” (talking, playing, spacing-out) that had nothing to do with the lesson. At the other extreme, Cuban students were consistently involved in the lessons and rarely exhibited body language or other signs indicating boredom or lack of interest (…)”. (Carnoy et al, 2006: 127-128) Del estudio comparado entre Brasil-Chile-Cuba: “Our videotapes of Chilean, Brazilian, and Cuban classrooms appear to confirm the first of these conclusions. Chilean and especially Brazilian activities were less demanding in terms of the cognitive skill content of the lessons (…), because so many of the Brazilian lessons we videotaped were similarly less demanding, we think that teacher content knowledge is the more likely explanation. Our analysis supports this conclusion, and by implication (...) provides some support for the relatively low scores in the Laboratorio evaluation of Chilean and Brazilian pupils compared to Cubans”. (Carnoy et al, 2006: 131) Del estudio comparado entre Brasil-Chile-Cuba: “Cuban classrooms attained a mathematical proficiency score of 3.82 out of a possible 5 (…) In general, the gap between Cuban classroom lessons and those of Chilean and Brazilian classrooms stemmed from the use of the proficiency strands of strategic competence and adaptive reasoning. That is, Cuban teachers engaged in continual dialogue with the students, asking them both how and why a given problem should be answered. Without fail, Cuban classroom teachers also maintained a productive disposition (…), in addition to demonstrating conceptual understanding and procedural fluency”. (Carnoy et al, 2006: 132-133) Paul Antonio Torres Fernández El arte de enseñar científicamente 79 Libro originalmente publicado por la Editorial Pueblo y Educación. La Habana, 2013. Obra merecedora de uno de los Premios de “Ciencia e Innovación Educativa” (2011), del Ministerio de Educación de la República de Cuba. Bibliografía 1. Addine, F. et al. (2002) Principios para la dirección del proceso pedagógico. En: García, G. et al. Compendio de Pedagogía. Editorial Pueblo y Educación, La Habana; pp. 80-101. 2. ____________ (2004) La profesionalización del maestro desde sus funciones fundamentales. Algunos aportes para su comprensión. Dirección de Ciencia y Técnica. MINED, La Habana. (ISBN 959-261-149-1) 3. ____________ (2007) Didáctica: teoría y práctica. EditorialPueblo y Educación, La Habana. 4. Akudovich, S. A. (2006) Zona de desarrollo próximo y su proceso de diagnóstico. Editorial Academia, La Habana. 5. Ballester, S. et al. 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