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Apuntes de Psicopatologia y Psiquiatria - Figueroa Vargas - Rom Sick

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Texto Revisado – Versión digital ampliada 
Editor 
Herman Figueroa Vargas 
Autores 
 
 
Héctor Carrasco Correa 
Gonzalo Claps Sánchez 
Daniela de la Fuente 
Galdames 
Herman Figueroa Vargas 
Javier Latorre Nanjari 
Nadia Muñoz Navarro 
Alberto Salas Nicolau 
 
Primera Edición 
Apuntes de Psicopatología y Psiquiatría - Manual de bolsillo.
Primera Edición - 2014.
Editor: Herman Figueroa Vargas.
Autores: Héctor Carrasco Correa.
Gonzalo Claps Sánchez.
Daniela de la Fuente Galdames.
Herman Figueroa Vargas.
Daniel Latorre Nanjari.
Nadia Muñoz Navarro.
Alberto Salas Nicolau.
Maquetación: Jaime Barraza Pineda.
Imagen tapa: NLshop - Fotolia.com ©.
Versión impresa: 80 copias, ISBN: 978-956-353-537-2.
Impreso en: Imprenta Gráfica, La Serena, Chile.
Versión digital: 80 cds.
Auspiciado por el Departamento de Clínicas de Facultad de Medi-
cina de la Universidad Católica del Norte, Coquimbo, Chile
Financiado por Universidad Catolica del Norte.
Colaboradores.
Equipo Docente de Psicopatología y Psiquiatría:
Dr. Marisol Alvarado Vergara.
Ps. René Barraza López.
Dr Martín Bustos.
Ps. Robert Cayupe Reyes.
Dr. Gonzalo Claps Sánchez.
Dr. Héctor Carrasco Correa.
Ps. Daniela de la Fuente Galdames.
Dra. Consuelo Gayoso Oyarzo.
Dr. Herman Figueroa Vargas.
Ps. Lilian Hammer Krawczyk.
Ps. Javier Latorre Nanjari.
Ps. Helen Miranda Torres.
Dra. Emilia Monsalve Salazar.
Dra. Nadia Muñoz Navarro.
Dr. Mauricio Paredes Fuentes.
Dra. Viola Pineda Fernadez.
Dra. Jocelyn Pizarro Geraldo.
Ps. Noemí Pol Orellana.
Dr. Alberto Salas Nicolau.
Dra. Rosa Torres Domínguez.
Internos y alumnos ayudantes:
Claudia Aguilera Rojas.
Tamara Araya Araya.
Valentina Ardiles Vega.
Jaime Barraza Pineda.
Antonella Capdeville Suárez.
Daniela Castro Guzmán.
Sebastían Cerda Acevedo.
Susana Márquez Muñoz.
Ignacio Martínez Valdés.
Alexander Miranda Rojas.
Paulina Olivares Araya.
Consuelo Varas Gonzalez.
Makarena Villalobos Monardes.
Roberto Villarroel Godoy.
Alexandra Zepeda Cerda.
Prólogo
Se constituye de cuatro secciones con contenidos relacionados di-
rectamente a la clases que se imparten en las asignaturas de pre-
grado: “Psicopatologia I: Elementos e intrumentos del Vivenciar”
muestra las características psicológicas normales de la persona,
para posteriormente en “Psicopatología II: Semiologia psiquiatría”
poder identificar aquellos aspectos psicopatológicos y ordenarlos
en el Examen mental. Estos capítulos tienen como referencia prin-
cipal al texto Psicopatología y Semiología Psiquiátrcía de Ricardo
Capponi para poder tener un lenguaje común en el estudio de la
psicopatología, sin afán de innovar en esta área y disminuir la con-
fusión que puede producir el amplio conocimiento que se puede
encontrar en psicopatología.
Las últimas dos secciones “Psiquiatría I y II” contienen los princi-
pales trastornos psiquiátricos tanto de adulto como infanto juvenil,
orientadas a diagnóstico y manejo. Dicho capítulo de “Psiquiatría
II” se encuentra disponible en la versión digital para facilitar la visión
de algunos esquemas utilizados en esta sección. Destacamos la
inclusión del manejo de las patologías incluídas en el sistema de
Garantías Explicitas en Salud hasta la fecha: Esquizofrenia, De-
presión, y la recientemente incorporada, Trastorno Bipolar.
Invitamos a la lectura crítica de este libro, y con interés de mejorarlo
para las siguientes generaciones.
Finalmente agradecemos profudamente a cada uno de los colabo-
radores por su esfuezo y dedicación, asi como también al Depar-
tamento de Clínicas de la Facultad de Medicina y a la Universidad
Católica del Norte quienes han permitido dar vida a este libro.
Herman Figueroa Vargas
Editor
A
puntes de Psicopatología y Psiquiatría ha sido des-
arrollo en base a los contenidos de aprendizaje que
se esperan sean logrados por alumnos de Medicina
en su formación durante las asignaturas de Psicopa-
tología y Psiquiatría, de manera tal de facilitar el es-
tudio de la Salud Mental.
Sección I. Psicopatología I: 
Elementos e Instrumentos del Vivenciar.
1. Glosario básico de términos psicológicos. 11
Claudia Aguilera Rojas, Daniela de la Fuente Galdames.
2. Elementos del Vivenciar I: 
Percepción, Representación y conación. 15
Valentina Ardiles Vega, Robert Cayupe Reyes.
3. Elementos del Vivenciar II: Pensamiento. 21
Antonella Capdeville Suárez, Lilian Hammer Krawczyk.
4. Elementos del vivenciar III: Afectividad. 29
Daniela Castro Guzmán, Helen Miranda Torres.
5. Instrumentos del Vivenciar I: 
Conciencia, Orientación y Atención. 41
Paulina Olivares Araya, Noemí Pol Orellana.
6. Instrumentos del vivenciar II: Memoria. 47
Claudia Aguilera Rojas, Lilian Hammer Krawczyk.
7. Instrumentos del Vivenciar III: Inteligencia. 61
Valentina Ardiles Vega, Paulina Olivares Araya, Helen Miranda
Torres.
8. Teorías del Desarrollo Humano: Introducción. 71
Antonella Capdeville Suárez, Daniela Castro Guzmán, Daniela de
la Fuente Galdames.
9. Desarrollo Humano: Etapas del Desarrollo. 79
Paulina Olivares Araya, Daniela de la Fuente Galdames.
10. Psicología de la Personalidad: Conceptos. 89
Claudia Aguilera Rojas, Javier Latorre Nanjari.
Índice de 
contenidos
11. Psicología de la Personalidad: Teorías. 93
Valentina Ardiles Vega, Javier Latorre Nanjari.
Sección II. Psicopatología II: 
Semiología Psiquiátrica.
12. Semiología Psiquiátrica I: Psicopatología de la Sensación,
Percepción, Representación. 105
Daniela Castro Guzmán , Gonzalo Claps Sánchez.
13. Semiología Psiquiátrica II: 
Psicopatología de la Afectividad. 115
Antonella Capdeville Suárez, Daniela de la Fuente Galdames, Gon-
zalo Claps Sánchez.
14. Semiología Psiquiátrica III: Psicopatología de la Psicomo-
tricidad, Psicomotilidad o Conación. 123
Claudia Aguilera Rojas, Gonzalo Claps Sánchez.
15. Semiología Psiquiátrica IV: Psicopatología de la Conscien-
cia, Memoria, Cualidades del Vivenciar. 131
Valentina Ardiles Vega, Paulina Olivares Araya. Gonzalo Claps
Sánchez.
16. Semiología Psiquiátrica V: 
Psicopatología de la Percepción. 136
Claudia Aguilera Rojas, Javier Latorre Nanjari.
17. Semiología Psiquiátrica VI: 
Psicopatología del Pensamiento y del Leguaje. 141
Valentina Ardiles Vega, Paulina Olivares Araya, Gonzalo Claps
Sánchez.
18. Elementos del Examen Mental. 153
Antonella Capdeville Suárez, Alberto Salas Nicolau.
19. Síndromes Psiquiátricos. 157
Daniela Castro Guzmán , Mauricio Paredes Fuentes.
20. Entrevista clínica. 169
Paulina Olivares Araya, Viola Pineda Fernández.
Sección III. Psiquiatría I.
21. Psicofarmacología I: Antidepresivos. 178
Makarena Villalobos Monardes, Gonzalo Claps Sánchez.
22. Psicofarmacología II: Antipsicóticos. 191
Consuelo Varas González, Gonzalo Claps Sánchez.
Apuntes de Psicopatología y Psiquiatría - Manual de bolsillo8
23. Psicofarmacología III: 
Estabilizadores del Ánimo y otros psicofármacos. 207
Alexander Miranda Rojas, Makarena Villalobos Monardes, Alexan-
dra Zepeda Cerda, Gonzalo Claps Sánchez.
24. Psicofarmacología IV: Benzodiacepinas. 221
Susana Márquez Muñoz, Gonzalo Claps Sánchez,
25. Clasificaciones Psiquiatricas Internacionales. 239
Alexandra Zepeda Cerda, Alberto Salas Nicolau.
26. Neurociencias y Conducta. 251
Alexander Miranda Rojas, Jocelyn Pizarro Geraldo.
27. Trastornos de Ansiedad. 263
Roberto Villarroel Godoy, Makarena Villalobos Monardes, Viola Pi-
neda Fernández.
28. Trastornos del Animo I: 
Fisiopatología y Cuadro Clínico del T. Depresivo. 297
Consuelo Varas González, Gonzalo Claps Sánchez.
29. Trastornos del Animo II: 
Tratamiento del T. Depresivo. 311
Makarena Villalobos Monardes, Gonzalo Claps Sánchez.
30. Trastornos del Animo III: Trastorno Bipolar. 317
Susana Márquez Muñoz, Gonzalo Claps Sánchez.
31. Trastornos Psicóticos. 349
Alexandra Zepeda Cerda, Mauricio Paredes Fuentes.
32. Esquizofrenia. 361
Alexander Miranda Rojas, Mauricio Paredes Fuentes.
33. Trastornos Orgánicos I: 
Demencia, Daño Orgánico Cerebral. 374
Roberto Villarroel Godoy, Alberto Salas Nicolau.
34. Trastornos Orgánicos II: Epilepsia, Delirium. 397
Makarena Villalobos Monardes, Alberto Salas Nicolau.
35.Trastornos Personalidad. 407
Consuelo Varas González, Susana Márquez Muñoz, Jocelyn Piza-
rro Geraldo.
36. Anexo. Resumen Guía Clínica GES: Depresión en personas
de 15 años y más. 419
Consuelo Varas González, Nadia Muñoz Navarro.
37. Anexo. Resumen Guía Clínica GES: Para el tratamiento de
personas desde Primer Episodio de Esquizofrenia. 443
Alexandra Zepeda Cerda, Nadia Muñoz Navarro.
Índice de contenidos 9
Seción IV. Psiquiatria II (disponible en la versión digital).
38. Violencia Intrafamiliar Social. 457
Susana Márquez Muñoz, Javier Latorre Nanjari.
39. Neurobiología de las adicciones. 481
Alexandra Zepeda Cerda, Alberto Salas Nicolau.
40. Dependencia a Drogas y Alcohol. 489
Consuelo Varas González, Rosa Torres Domínguez.
41. Intervención en Crisis. 503
Roberto Villarroel Godoy, Javier Latorre Nanjari.
42. Suicidio. 511
Alexander Miranda Rojas, Rosa Torres Domínguez.
43. Trastornos Sexuales y de Identidad Sexual. 519
Makarena Villalobos Monardes, Alberto Salas Nicolau.
44. Desarrollo evolutivo en niños y adolescentes: Aspectos
conceptuales y procedimentales. 527
Susana Márquez Muñoz, Nadia Muñoz Navarro, René Barraza
López.
45 Trastorno por Déficit Atencional e Hiperactividad. 541
Alexandra Zepeda Cerda, Marisol Alvarado Vergara.
46 Trastorno Generalizado del Desarrollo. 553
Roberto Villarroel Godoy, Martín Bustos.
47 Retardo Mental (Discapacidad Intelectual). 571
Susana Márquez Muñoz, Consuelo Gayoso Oyarzo.
48 Trastornos del Ánimo Infanto-Adolescente. 585
Alexander Miranda Rojas, Emilia Monsalve Salazar.
49 Trastornos Específicos del Aprendizaje. 601
Alexandra Zepeda Cerda, René Barraza López.
50 Trastornos de la Conducta Alimentaria. 613
Consuelo Varas González, Marisol Alvarado Vergara.
51 Trastornos de Eliminación. 627
Roberto Villarroel Godoy, Martín Bustos.
52 Psicosis Infanto Juvenil. 641
Makarena Villalobos Monardes, Emilia Monsalve Salazar.
Apuntes de Psicopatología y Psiquiatría - Manual de bolsillo10
¿Cómo defines la psicología? 
La psicología es el estudio científico del comportamiento y de los
procesos mentales. Vamos a considerar esta definición palabra por
palabra. El término “psicología” proviene de las palabras griegas
psyche (alma) y logos (estudio), y revela que la definición, en sus
orígenes, se refería al estudio del alma (más tarde, de la mente).
Un estudio científico implica el uso de las herramientas tales como:
la observación, la descripción y la investigación experimental para
reunir información y posteriormente organizarla. El comportamiento
incluye, en su más amplia definición, aquellas acciones que se pue-
den observar con facilidad, tales como la actividad física y la ex-
presión oral, así como otros “procesos mentales”, que no pueden
ser observados directamente, tales como: la percepción, el pensa-
miento, el recuerdo y los sentimientos.
Para facilitar el aprendizaje en el recorrido por esta ciencia, te pre-
sentamos a continuación una serie de términos básicos que son
claves para el entendimiento de la psicología en todas sus áreas y
elementos que la componen.
Conducta: 
Toda actividad que puede ser observada. Se manifiesta mediante
la psicomotricidad o conación.
Capítulo 1
Glosario básico
de términos 
psicológicos
Conación: 
Acción y manifestaciones conductuales. Es una expresión resul-
tante de una serie de procesos internos del sujeto.
Procesos mentales: 
Conjunto de actividades psíquicas subjetivas, no observables, en-
cargadas del procesamiento cognitivo y afectivo de la información.
Se dividen en procesos afectivos y cognitivos.
Procesos Afectivos: 
Movimientos de energía psíquica directamente vivenciados por el
propio sujeto.Son movilizados por Necesidades y por Impulsos.
Son de carácter Agradable o Desagradable. Influidos por Ánimo,
sentimiento y emoción.
Ánimo:
Forma más estable de Afectividad. Se encuentra altamente ligada
a aspectos constitucionales
Sentimiento:
Elemento afectivo relativamente estable que surge y desarrolla
ante un conjunto de experiencias y estímulos. 
Emoción: 
Elemento afectivo transitorio. Surge ante situaciones y/o estímulos
específicos. Son vivenciadas de forma intensa por si alto correlato
fisiológico.
Procesos Cognitivos:
Conjunto de procesos mentales encargados de la recepción, pro-
cesamiento y aplicación de la información. Incluyen: Sensación,
percepción, representación, atención, concentración, memoria,
pensamiento, inteligencia, condicionantes y cognitivos
Sensación:
Proceso a través del cual un estímulo actúa sobre un Órgano Sen-
sorial, llamado Receptor, provocando su excitación y con ello una
reacción de transmisión hacia un Centro Integrador (Cerebro). 
Percepción:
Proceso a través del cual se toma conocimientos e Interpreta la in-
Apuntes de Psicopatología y Psiquiatría - Manual de bolsillo12
formación Sensorial
Representación: 
Imagen mental respecto a algo, reconocida como una elaboración
del propio sujeto, como un producto de sí mismo.
Pensamiento: 
Flujo de Ideas, Símbolos y Asociaciones dirigidas hacia un Obje-
tivo, que se expresa a través del Lenguaje o la Acción.
Atención: 
Orientación de la actividad psíquica hacia algo que se experimenta.
Concentración: 
Proceso en el cual la Atención permanece orientada en forma per-
sistente hacia una situación determinada
Memoria: 
Proceso a través del cual una experiencia queda Retenida y Con-
servada en la psique, pudiendo ser posteriormente Evocada.
Inteligencia: 
Facultad personal de adaptarse a nuevas exigencias, utilizando
adecuadamente las pautas de pensar que disponga. Es un aspecto
psicológico Compuesto, en cuanto a que requiere de la participa-
ción de otros procesos y habilidades mentales.
Condicionantes Cognitivos: 
Características mentales que influyen en la funcionamiento cogni-
tivo a través del nivel y calidad en su operabilidad.
Conciencia: 
Proceso a través del cual se toma conocimiento de fenómenos
que ocurren tanto a nivel Externo como Interno.
Orientación: 
Actividad psíquica que permite al sujeto el reconocimiento de sí
mismo, su ubicación respecto a espacios y contextos situacionales,
junto con la organización temporal de los hechos.
Capítulo 1 | Glosario básico de términos psicológicos 13
Personalidad:
Instancia integradora de los procesos psicológicos, proporcionando
de esta forma la individualización y diferenciación entre las perso-
nas.
Cada una de estas característica psicológicas serán caracterizadas
en este libro; se entregarán herramientas para detección de las si-
tuaciones psicopatológicas de cada una ellas, para luego lograr la
conformación de síndromes y trastornos definidos, con su trata-
miento específico.
Apuntes de Psicopatología y Psiquiatría - Manual de bolsillo14
Como vimos en el apartado anterior, tanto la conducta como los
procesos mentales, objetos de estudio de la psicología, constituyen
la personalidad del ser humano. Los procesos mentales correspon-
den a un conjunto de actividades psíquicas subjetivas, no obser-
vables, encargadas del procesamiento cognitivo y afectivo de la
información. De esto último se desprende que estén constituidos
por procesos cognitivos y afectivos. Los procesos mentales pueden
ser clasificados como elementos e instrumentos del vivenciar. En
el presente apartado profundizaremos en los elementos del viven-
ciar.
Los elementos del vivenciar son aquellos elementos básicos cons-
titutivos del aparato psíquico. Entre los elementos del vivenciar, dis-
tinguimos:
1. Sensación, percepción y representación
2. Pensamiento
3. Afectividad
4. Psicomotricidad o Conación
Sensación.
Hablamos de sensación cuando un estímulo que actúa sobre un
órgano sensorial llamado receptor es capaz de excitarlo y provocar
una reacción de transmisión hacia un centro integrador, que en el
caso del hombre es el cerebro. El cerebro registra dicho estímulo
como una experiencia que denominamos sensación. Si bien los re-
Capítulo 2
Elementos del vivenciar I:
Sensación, Percepción, 
Representación, 
Conación
ceptores van a presentar ciertas variables fisiológicas, compartenalgunas características comunes, por ejemplo: todos responden
según la ley del todo o nada, pues si no alcanzan un umbral mínimo
de estimulación, no habrá respuesta alguna. 
Percepción.
Corresponde al acto de toma de conocimientos y de interpretación
de los datos otorgados por la información sensorial. La percepción
es el primer proceso cognitivo y constituye el mecanismo a través
del cual el hombre adquiere el conocimiento del mundo exterior
(“consciencia de objeto”), o de su propio mundo interior.
La percepción está sujeta a múltiples condicionantes, de los que
depende el contenido significativo que se da a la percepción. La
afectividad, las experiencias previas y el contexto en que aparezca
el estímulo son los principales condicionantes. El estado emocio-
nal, los sentimientos y el estado de ánimo organizan nuestra per-
cepción, en el fondo, "vemos lo que esperamos ver". En el mismo
sentido la experiencia previa en el trayecto vital, nuestra biografía,
condiciona la percepción. Estamos más entrenados para percibir
algunas cosas y no otras.
Ahora bien, ¿cómo se organiza el campo perceptivo? Ya conoce-
mos las unidades básicas que constituyen las sensaciones, mas
para lograr la percepción de estos datos es necesario integrar un
“todo”, ese “todo que es más que las sumas de las partes” y que
constituye el principio básico para la organización del campo per-
ceptivo. Al percibir una imagen cualquiera, algunos elementos
pasan a primer plano y estructuran la figura perceptiva. Lo poster-
gado del panorama perceptivo, pasa a constituir el fondo que sos-
tiene la figura. Así, para la misma imagen habrá distintas
percepciones. ¿Qué elementos conformarán el fondo? ¿Qué ele-
mentos conformarán un primer plano? Será relativo a quien ob-
serve la imagen, a los condicionantes que en dicho momento den
más importancia a unos elementos que a otros.
Tipos de percepción:
1. Percepción sensorial: Corresponde a la percepción real y obje-
tiva que se tiene se obtiene y elabora con la observación directa
del estímulo que impresiona a los aparatos receptores sensoriales.
Por ejemplo: el calor del fuego.
2. Percepción consecutiva o post-percepción: Está determinada
por la persistencia de la imagen sensorial después de desaparecido
Apuntes de Psicopatología y Psiquiatría - Manual de bolsillo16
el estímulo, habitualmente cuando éste ha sido muy intenso. Ocupa
un lugar intermedio entre lo perceptivo y lo representativo. Por
ejemplo: las notas musicales, tras dejar de ser emitido el sonido
aún lo podemos percibir; tras mirar fijamente un objeto y luego
mirar una pared blanca, veremos en ella el objeto inicial.
3. Pareidolias: También llamadas ilusiones fantásticas, son produc-
ciones sensoriales difusas que se cree que son reales. Por ejem-
plo: las imágenes que se creen ver en las nubes (caras, animales,
figuras) siempre con conciencia clara de que se trata de una crea-
ción propia y no de una realidad.
Capítulo 2 | Elementos del vivenciar I: Sensación, Percepción,
Representación, Conación 17
Representación
Imagen mental respecto a algo, surgidas en la propia conciencia y
reconocida como una elaboración del propio sujeto, como un pro-
ducto de sí mismo. A diferencia de la percepción (tabla 1), la re-
presentación depende totalmente de la actividad psíquica y se
modifican por la voluntad. Es la materia prima con que trabaja el
pensamiento y, a diferencia de la percepción, se refiere a algo an-
teriormente percibido o a algo inventado.
Tipos de representaciones:
1. Representación mnémica: Son recuerdos evocados por la me-
moria. Por ejemplo: cuando una diseñadora de vestuario diseña
una prenda, se representa en diversas ocasiones la misma prenda
para ir haciendo modificaciones.
2. Representación de la fantasía: Son representaciones que no
obedecen a algo real, son creaciones producto de la imaginación.
Por ejemplo: La historia relatada en “Las aventuras de Alicia en el
país de las maravillas” de Lewis Carroll.
Variantes normales de ambas:
3. Representación eidética: Se da en sujetos que tienen la capaci-
dad de proyectar al espacio objetivo externo imágenes que perte-
necen a su campo subjetivo, existiendo conciencia de que tal
imagen no es real y manteniendo el control de esa capacidad. Por
ejemplo: la transformación de una escoba en un caballo.
4. Representación onírica: Son representaciones que se dan en el
soñar y que son aceptadas como reales en el mismo soñar. Por
ejemplo: un monstruo que intenta atacar, del que se escapa hasta
que, generalmente, se despierta antes de ser devorado.
Tabla 2.1 - Diferencias entre Percepción y Representación.
Percepción.
1. Corpórea, con carácter de objetividad.
2. Aparece en el espacio objetivo exterior.
3. Diseño determinado, con formas completas y todos los detalles
4. Los elementos de la sensación tienen toda la frescura sensorial.
5. Son constantes y se retienen fácilmente de la misma manera.
6. Son independientes de la voluntad y se admiten pasivamente.
Representación.
1. Falta de corporeidad, con carácter subjetivo.
2. Aparece en el espacio representativo subjetivo interno.
Apuntes de Psicopatología y Psiquiatría - Manual de bolsillo18
3. Diseño indeterminado, formas incompletas y sin detalles.
4. Hay pobreza sensorial.
5. Se descomponen al dejar de evocarse y deben crearse cada vez
de nuevo. No hay constancia.
6.Son dependientes de la voluntad y se producen activamente.
Fantasías, representaciones.
Psicomotricidad o Conación
Como se indicó en el inicio, la conducta constituye uno de los ob-
jetos de estudio de la psicología. Definiremos “conducta” como toda
actividad que puede ser observada. Cuando hablemos de psico-
motricidad haremos referencia a la acción, a manifestaciones con-
ductuales que son la expresión de una serie de procesos internos
de cada sujeto y que expresan rasgos de personalidad, percepción
del mundo, pensamiento; y de la funcionalidad del sistema ner-
vioso. Desde la psicomotricidad se puede inferir que estos actos
pueden ser instintivos (hereditarios, escapan al control de la volun-
tad), habituales (basados en el aprendizaje, al inicio son voluntarios
y luego automáticos) o voluntarios (condicionados y dirigidos por
la voluntad).
Bibliografía.
Capponi, R. Psicología, Psicopatología y Semiología Psiquiátrica;
Sensación Percepción y Representación. En Psicopatología y Se-
miología Psiquiátrica (pp. 43-47). Undécima edición. año 2006.
Santiago. Editorial Universitaria. 
Florenzano, R., Zegers, B. Funciones psíquicas, psicopatología de
la percepción. En Psicología Médica (pp. 31-34). Santiago. Editorial
Mediterráneo.
Capítulo 2 | Elementos del vivenciar I: Sensación, Percepción,
Representación, Conación. 19
Apuntes de Psicopatología y Psiquiatría - Manual de bolsillo20
El pensamiento es la capacidad de producción de ideas y concep-
tos y la relación y asociaciones entres estas. Es “un proceso con-
siderado por el observador como un flujo de ideas y asociaciones
dirigidas con un objetivo y expresadas a través del lenguaje y la
acción” (Caponni, 2006). Tenemos entonces un pensamiento dis-
cursivo – verbal y un pensamiento práctico.
La asociación es el nexo que vincula dos ideas entres si, y esto es
el pensamiento, la capacidad de unión que le da sentido y concor-
dancia a las cosas.
Como señalamos el lenguaje es el medio de expresión del pensa-
miento, donde la estructura, la velocidad, el contenido, el control
y el lenguaje de este son las características que nos permiten ca-
racterizar y analizar el pensamiento. 
Si bien el pensamiento es intangible y completamente subjetivo se
manifiesta en la conducta (acciones, palabras etc)
Características del pensamiento normal
a) Estructura: la estructura del pensamiento se conforma por una
serie de etapas que configuran al pensamiento como un proceso
lógico y coherente. Según Luria esta cohesión racional se conforma
de la siguiente forma:
Está la necesidad de pensar, la evocación del pensamiento que es
Capítulo 3
Elementos del vivenciar
II: Pensamiento
producto de una interroganteo problema que necesitamos resol-
ver.
La reflexión a esta interrogante.
La solución y plan de ejecución de la solución ante el problema.
Métodos para implementar el plan.
Se operabiliza el proceso.
Se ejecuta la solución.
Se evalúa la respuesta en función del problema inicial.
Corresponde a la utilización de las palabras, la gramática, síntesis
y sintaxis junto con la forma de dar coherencia y cohesión a lo que
queremos expresar, a la ubicación espacial y temporal (inicio, des-
arrollo y fin) del discurso y al contexto en el cual este se reproduce.
La mantención de todo esto hace un pensamiento estructurado
uniforme y entendible. 
b) Velocidad: la velocidad se entiende como el tiempo necesario
para expresar las ideas correctamente, a modo de lograr crear co-
nexiones y completar juicios inferidos de estas. Es el fluir del dis-
curso en pocas palabras.
c) Contenido: refiere a cómo se configuran las ideas, y estas lo
hacen de acuerdo a las vivencias del sujeto, a su realidad interna
y externa. el contenido se configura en el conocimiento del mundo
que nos rodea y en nosotros mismo. 
Y ya que el contenido es en sí mismo un conjunto de ideas vale
definir los tipos normales de ideas existentes:
Ideas concretas: se refieren al conocimiento captado por los senti-
dos. Las ideas concretas se elaboran mediante la formación de una
imagen mnémica, caracterizada en la memoria, esta imagen favo-
rece la representación mental del objeto en la conciencia y esto a
su vez hace posible el reconocimiento del objeto en sí. Ejemplo:
estoy en una sala cuando escucho el sonido el sonido de la lluvia
caer en el pavimento, estoy acostado y siento la luz del sol en mi
rostro, sé que es de día.
Ideas mágicas: las ideas mágicas se sustentan sobre una base in-
cierta, y se basa en la analogía entre dos objetos ¨cuando dos
cosas son parecidas o presentan caracteres similares, se les con-
sidera como dotados de las mismas propiedades¨ busco la proxi-
midad entre dos objetos, aun cuando estos no tengan relación
alguna, pero yo les atribuyo una. Ejemplo: las supersticiones y cá-
Apuntes de Psicopatología y Psiquiatría - Manual de bolsillo22
balas: “uso siempre mi lápiz azul para contestar los exámenes, uso
el collar de mi abuela porque me da suerte”.
Ideas símbolos: son ideas generalizadas por abstracción. El sím-
bolo es entonces un signo o señal que representa la idea abstracta
de un objeto. Los símbolos pueden ser visuales (en el lenguaje es-
crito, por ejemplo, o en el icónico), auditivos o de diversa índole.
Ejemplo: El encender el intermitente derecho nos señala que el
auto doblará hacia la derecha. La paloma blanca como símbolo de
paz.
Ideas abstractas: en la idea abstracta falta la representación mental
objetiva que determina la construcción de la idea imagen. Ejemplo:
al planear un viaje, ¿con quien iré? ¿cuáles lugares visitare?
¿donde me quedaré?
Ideas intuitivas: se refieren a las creencias, aquellas se sienten
como verdaderas pero que no tienen una base comprobable. Ejem-
plo: una madre presiente que su hijo no llegará a casa luego de
una fiesta y comienza a llamarlo repetitivamente.
Ideas creencias son aquellas ideas que se aceptan como verda-
deras, en base a la cultura o por razones afectivas del individuo.
Ejemplo: La gente del sur de Chile que cree en el Caleuche.
Ideas sobrevaloradas: son convicciones acentuadas desde un es-
tado afectivo del individuo que demuestra su personalidad y cre-
encias. Tienen su origen en la propia creencia, concepciones
filosóficas, religiosas, políticas, éticas o científicas. Ejemplo: Perder
la virginidad antes del matrimonio es pecado según la creencia per-
sonal o religiosa que se tenga.
Ideas supersticiosas: son ideas de raíz cultural asumidas por con-
senso de un grupo y que tienen el carácter de señal, suelen tener
un final desfavorable. Ejemplo: que un gato negro pase por delante
de mí, es signo de mala suerte.
d) Control: Tiene relación con la posibilidad de dirigir el curso del
pensamiento de manera voluntaria.
Obsesiones.
Pensamientos obsesivos: ideas obsesivas.
Impulsos obsesivos: compulsiones.
Temores obsesivos: fobias.
Actos obsesivos: secundarios a temores, de tipo general.
Ritos obsesivos: forma exacta y predeterminada.
Ideas fijas: celotipia. 
Pseudo-obsesiones: obsesiones egosintónicas, no absurdas.
Capítulo 3 | Elementos del Vivenciar II: Pensamiento 23
e) Lenguaje: expresión de las ideas mediante el lenguaje. El len-
guajetransmitee mensajes que tienen 3 funciones: señalar la inten-
ción del mensaje (expresión), influir al que los recibe (llamada),
informar sobre los objetos o acontecimientos (representación).
Desarrollo del Pensamiento
Teoría del Desarrollo Cognitivo de Jean Piaget.
Centra su estudio en el desarrollo de la cognición en los niños, es
decir, cómo incorporan, organizan y utilizan la información. Plantea
que el desarrollo cognitivo se organiza en etapas y que estas eta-
pas difieren cualitativamente una de la otra.
Existen dos principios que regulan desarrollo cognitivo:
● Organización: Tendencia a crear sistemas que reúnen el conoci-
miento.
● Adaptación: Interacción efectiva con el Medio. Ocurre a través de
la Asimilación de la nueva información y la Acomodación de esta
información en la estructura cognitiva, pre existente.
○ Asimilación: Incorporación de los datos que proporciona la expe-
riencia.
○ Acomodación: Asimilación mental. Corresponde a la adaptación
de los esquemas ya habidos para reestructurar los conocimientos
con los nuevos datos obtenidos.
○ Equilibrio: El proceso de asimilar y acomodar los conocimientos;
supone la necesidad de una compensación de las estructuras que
se han enriquecido. Esta compensación dará lugar a un nuevo
equilibrio dinámico.
Se caracterizaron cuatro etapas en esta teoría: 
1. E. Sensorio-motriz (0 a 2 años): Relación con el medio es a tra-
vés del contacto Sensorial y las capacidades Motoras.
2. E. Pre-operacional (2 a 7 años): El pensamiento es Egocéntrico
y Semi-lógico
3. E. de las Operaciones Concretas (7 a 12 años): El pensamiento
es lógico, en cuanto establecer relaciones de causa – efecto. Se
realizan actividades mentales como la Clasificación, Conservación,
noción de cantidad, etc. Pero en un plano concreto.
4. E. de la Operaciones Formales (12 en adelante): Se desarrolla
capacidad de Abstracción y pensamiento hipotético.
1. Etapa sensoriomotriz.
Aproximadamente durante los dos primeros años de vida. En este
Apuntes de Psicopatología y Psiquiatría - Manual de bolsillo24
Capítulo 3 | Elementos del Vivenciar II: Pensamiento 25
estadio el niño se presenta al mundo en función de acciones como
chupar, sacudir, lanzar al suelo, mirar, etc., y realiza operaciones o
manipulaciones sobre objetos reales y no sobre representaciones
internas. Durante este período los lactantes aprenden a coordinar
sus sentidos con su comportamiento motor; también se desarrolla
Tabla 3.1 - Etapa del desarrollo Sensoriomotora. Logro fundamental:
función simbólica, capacidad de representación.
la capacidad progresiva para controlar e investigar el entorno.
La relación con el medio es a través del contacto sensorial y la ca-
pacidades motoras, ejercicio y progresivas adquisiciones de des-
trezas (tabla 3.1).
2. Etapa preoperacional.
Corresponde al preescolar. El pensamiento es Egocéntrico y Semi-
lógico. Logra importantes capacidades (conservación). Tiene mu-
chas limitaciones (artificiales, centradas).
Subestadios de la etapa:
● 2 a 4 años: Razonamiento simbólico pre-conceptual, Identidad y
conservación.
● 4 a 7 años: Razonamiento intuitivo, Clasificación, seriación, no-
ción de número.
Limitaciones del pensamiento preoperatorio:
● Intuitivo: contrasta con con su propia percepción (prelógico).
● Egocéntrico: no puede asumir el punto de vista del otro, autorre-
ferencial.
● Transductivo: de lo particular a lo particular.
● Sincrético: razona estableciendo relaciones causales por proxi-
midad temporal.
● Presimbólico: representacional no convencional, función semió-
tica concreta.
● Estático: no puedeasumir más de un punto a la vez (estado de
realización: no comprende el proceso, pero discrimina el estado ini-
cial del estado final).
● Artificialista: atribución de causalidad a factores humanos (antro-
pocéntrico).
● Animista: dar vida a objetos inanimados (atribuciones causales
mágicas).
● Irreversible: la transformación a un estado nuevo es permanente.
● No reflexivo: aún no hay desarrollo de lo metacognitivo, darse
cuenta del propio pensamiento, pero se desarrolla gradualmente
hacia los 6/7 años.
● Centrado: se fija en una parte del todo para concluir
(vasos/agua).
● Concreto: sólo manipula cognitivamente objetos presentes físi-
camente
Logros del pensamiento preoperatorio hacia el final (4 a 7 años).
● Comprensión de identidades: conservación del objeto a pesar de
Apuntes de Psicopatología y Psiquiatría - Manual de bolsillo26
modificaciones en su apariencia material o forma (alta o baja/mesa;
cuerpo/yo); clasificación o agrupación por características comunes.
● Comprensión de funciones: capacidad de establecer relaciones
entre dos eventos).
3. Etapa de las operaciones concretas.
El niño re-descubre las operaciones de la lógica formal: el conjunto,
la adición, sustracción, etc, y continúa manteniendo el egocen-
trismo en la representación de los objetos y en las relaciones so-
ciales. 
El pensamiento es lógico, en cuanto establecer relaciones de causa
– efecto. 
Se realizan actividades mentales como la clasificación, conserva-
ción, noción de cantidad y se aplican a la resolución de problemas,
pero en un plano concreto, presente y materialmente en el espacio
actual.
4. Etapa de las operaciones formales.
Es el paso a la abstracción o capacidad de formular hipótesis y
operar con enunciados verbales, lo que indica la maduración inte-
lectual.
Características
● Pensamiento lógico: hipotético deductivo.
● Pensamiento abstracto: se pueden realizar actividades mentales
para resolver problemas en ausencia de estímulos concretos, en
la representación.
● Moral autónoma, desde convicciones personales que es capaz
de defender, hasta la trascendencia a principios universales.
● Post formal: capacidad de pensar en representaciones sobre re-
presentaciones.
Bibliografía
Capponi, R. Psicopatología y Semiología Psiquiátrica. Undécima
edición. año 2006. Santiago. Editorial Universitaria. 
Pierre Mounoud. El desarrollo cognitivo del niño: desde los descu-
brimientos de Piaget hasta las investigaciones actuales. Université
de Ceneve. Traducción: Sylvia Sastre (Universidad de La Rioja).
CONTEXTOS EDUCATIVOS, 4 (2001), 53-77.
Capítulo 3 | Elementos del Vivenciar II: Pensamiento 27
Apuntes de Psicopatología y Psiquiatría - Manual de bolsillo28
Pareciera que desde siempre hemos escuchado la famosa frase
de Descartes: “pienso luego existo,” asumiéndolo como una verdad
universal. Sin embargo, si hipotéticamente rearmáramos esta frase,
dejándola con el siguiente enunciado: “siento, luego existo”, puede
que se produzca un cambio en nuestra perspectiva respecto de la
frase original. Entonces, valdría la pena preguntarnos de forma in-
trospectiva si ¿alguna vez hemos pensado en cuánto influyen
nuestros sentimientos y emociones al momento de tomar decisio-
nes?; o, al fin y al cabo, cuestionarse si estos procesos son los que
nos definen como seres “existentes” 
Se dice que al momento de tomar una decisión los individuos feli-
ces tienden a sobreestimar la probabilidad de resultados positivos
y a desestimar la probabilidad de resultados negativos; lo contrario
vale para el estado de ánimo triste. Así también se dice que la an-
ticipación del remordimiento y de la desilusión puede influenciar las
decisiones individuales. Por lo tanto, los individuos están motivados
para evitar la experiencia de estos sentimientos y toman decisiones
para minimizar la probabilidad de experimentarlas.
De esta manera hay una clara pista de que los afectos toman un
papel importante en nuestra vida diaria. A respecto, Schneider
(1946) define los afectos como movimientos de energía psíquica
directamente vivenciados por el yo, de gran fuerza impulsora. Estos
intervienen en la dinámica de regulación psíquica y están en inter-
Capítulo 4
Elementos del vivenciar
III: Afectividad
acción constante con otras áreas del vivenciar. Tienen como ca-
racterística el sello de lo agradable-desagradable y de la ordena-
ción bipolar de los contrarios (amor-odio, miedo-confianza, etc.) y
son diferenciables en estados de ánimo o humor básico, emocio-
nes y sentimientos.
Las características que poseen los afectos son básicamente tres:
1. Omnipresente: es decir, están en todas las experiencias que vi-
venciamos. Incluso en estadosclaros de apatía.
2. Proteiforme: adquieren distintas formas y estilos para expre-
sarse. Por ejemplo, el amor se expresa en forma distinta en hom-
bres y mujeres.
3. Necesita de un leguaje: y de uno en especial para poder expre-
sarlo.
Como ya se mencionó, los afectos se diferencian en diferentes es-
tados que si bien suelen confundirse entre sí, tienen claras diferen-
cias semánticas y prácticas:
Ánimo o humor básico. Este se define como la forma más estable
de la afectividad, y la más ligada a los estratos constitucionales y
temperamentales (Capponi, 1987). Puede decirse que es el estado
de la persona en un momento determinado; es persistente y está
determinado por emociones, sentimientos y disposiciones biológi-
cas (más constitucionales y temperamentales). Da la coloración
afectiva más perdurable, más característica de la personalidad a
lo largo de toda su existencia (Capponi, 1987). Se considera en-
tonces como el humor basal.
Otro aspecto lo definen las emociones. Una emoción se llama a un
movimiento afectivo complejo, fundamentalmente como reacción
inmediata a la acción de un estímulo eficiente que puede provenir
del mundo circundante, como del mundo interior del sujeto. Son
complejos afectivos momentáneos, fugaces, de gran intensidad
que se exteriorizan de manera inmedia ta y evidente. Tienen com-
ponentes autonómicos intensos (respuesta fisiológica) y se comu-
nican a través del lenguaje o a través del comportamiento motriz
(Capponi, 1987). De la integración armónica de los elementos
constituyentes de la respuesta emocional: el reporte subjetivo, el
darse cuenta e identificar el estado de ánimo; componente auto-
nómico y conducta, dependerán los alcan ces patógenos del fenó-
Apuntes de Psicopatología y Psiquiatría - Manual de bolsillo30
meno emocional.
Los sentimientos: Son estados vivenciales relativamente persis-
tentes (más estables) que no requieren la presencia inmediata de
estimulación y se integran con las dimensiones más profundas de
la persona. Se caracterizan por tener una “tonalidad” positiva o ne-
gativa pues nunca son neutros; es agrado o desagrado. Sus com-
ponentes autonómicos son mínimos y ocupan un lugar intermedio,
entre el humor básico y la emoción.
Es decir, en resumen, la emoción, es esencialmente un programa
motor no aprendido e innato, al que se añaden algunas estrategias
cognitivas, que en conjunto tienen como finalidad la conducción de
la vida. Por otro lado, un sentimiento, es siempre una cognición
acerca de lo que sucede en la emoción.
Así también, se dice que las emociones son filogenéticamente an-
tiguas, ya que surgen mucho antes que la razón. Cuando una emo-
ción pasa por un proceso de razón, entonces se convierte en un
afecto y a través de la complejidad de la cognición se transforma
en un sentimiento (Damasio, 1994). 
Teorías.
Se han desarrollado distintas teorías para explicar la generación
de una emoción. Que se han dividido en tres grandes grupos:
1) Teorías fisiológicas: esta teoría se basa en 2 modelos propues-
tos por James-Lange (1890) y Cannon-Bard (1934) respectiva-
mente. En el modelo James-Lange (figura 4.1), se describe a la
emoción como sensación corporal. Esta propone que los estímulos
producirían una respuesta por parte del sistema autónomo que se
vería evidenciada por procesos fisiológicos, como por ejemplo la
aceleración de los frecuencia cardiaca,tensión muscular, etc. Que
la corteza percibe e interpreta como una emoción.
Por otro lado, el modelo Cannon-Bard, a diferencia de lo propuesto
por James-Lange, considera que la respuesta al estímulo tiene dos
efectos simultáneos e independientes: por un lado, la corteza ce-
Capítulo 4 | Elementos del vivenciar III: Afectividad 31
Figura 4.1 - Modelo de James-Lange.
rebral interpretaría e identificaría la emoción percibida y, al mismo
tiempo, se produciría una respuesta fisiológica (figura 4.2). Esta te-
oría superó más adelante a la primera.
2) Teorías Cognitivas. Básicamente aquí se interpretan los estí-
mulos entrantes o del medio ambiente en conjunto con la interpre-
tación de estímulos corporales (reacciones fisiológicas) que una
vez integradas en la corteza, darán origen a la emoción.
En este marco, Magda Arnold (1960) propuso que para que un es-
tímulo genere una respuesta emocional, debe existir una evalua-
ción en primera instancia (evaluación primaria). El estímulo ha de
evaluarse en dos niveles:
● En el tono o intensidad de este.
● En comparación con experiencias similares del pasado.
Inmediatamente a dicha evaluación (donde se categoriza como
bueno-malo), se obtendrá lo que es la “emoción sentida” en donde
surge la experiencia del gustar o no, esto finalmente es lo que ge-
nerará una tendencia a la acción.
Complementario a la evaluación primaria, Lazarus (1991) postula
a que cada emoción implica un tipo específico de evaluación (eva-
luación secundaria) y de tendencia a la acción. Por lo que existirán
tantas emociones como evaluaciones, y la cantidad de emociones
dependerá de la capacidad para hacer distinciones cognitivas, de-
nominado como “conocimiento emocional” lo que determinará los
diferentes matices de dicha emoción.
Si esto se considera en un plano clínico, implica que al cambiar la
evaluación de una situación (cognición), cambiaría la emoción aso-
ciada a ella.
Apuntes de Psicopatología y Psiquiatría - Manual de bolsillo32
Figura 4.2 - Modelo de Canon-Bard.
3) Teorías integrativas: La teoría de Schachter (1964) o del arousal
inexplicado, menciona que la emoción es el resultado de la inter-
acción entre una activación fisiológica y la evaluación cognitiva de
la situación.
Funciones de las Emociones.
Todas las emociones, inclusive las más desagradables, se les con-
fiere una función que les otorga algún tipo de utilidad. De ese modo
el sujeto podrá reaccionar de forma eficaz y apropiada, indepen-
dientemente de la cualidad hedónica que estas generen (Chóliz,
2005).
Dentro de este contexto, Reeve (1994) describe tres funciones prin-
cipales que cumplirían las emociones:
1. Adaptativa
2. Social
3. Motivacional
1. Funciones Adaptativas: 
Quizás una de las funciones más importantes, en donde prepara
al organismo para realizar eficazmente una acción que se requiere
dadas las condiciones ambientales, lo cual permite movilizar la
energía necesaria para llevarla a cabo (Chóliz, 2005). Es decir, fa-
cilitan la reacción emocional apropiada, direccionan la atención
hacia la información relevante y además, dirigen los procesos cog-
nitivos a la situación novedosa con intención de iniciar los procesos
adaptativos.
2. Funciones Sociales:
Otro punto importante, tiene que ver con la expresión de las emo-
ciones, esto nos permite de alguna forma predecir el comporta-
miento tanto de los demás, como de nosotros mismos, el cual se
asociará estrechamente a dichas emociones, por lo que en este
contexto además tiene un valor significativo en procesos de rela-
ciones interpersonales (Chóliz, 2005). Según Izard (1989), esto fa-
cilitaría las interacciones sociales, poder comunicar estados
afectivos o promover la conducta prosocial. Las expresiones de
Capítulo 4 | Elementos del vivenciar III: Afectividad 33
las emociones pueden darse tanto en forma verbal como no verbal,
y en cuanto a esta última, es específica y universal, y la está con-
formada por la postura corporal, expresión facial y tono de voz
(Chóliz, 2005).
3. Funciones motivacionales:
Existe una íntima relación entre la emoción y motivación pues se
trata de una experiencia permanente, sea cual sea la actividad, que
presenta las dos características principales de la conducta moti-
vada: dirección e intencionalidad. Por lo tanto, la emoción se con-
sidera que es la energía que motiva (o energiza) la conducta
(Chóliz, 2005). Esto quiere decir que la emoción puede determinar
la aparición de la conducta motivada, generando una movilización
de la conducta hacia una meta determinada y sería la encargada
de ejecutar la conducta con cierto grado de intensidad.
Emociones Básicas.
Según Henry (1986), los “ingredientes” de las emociones estarían
dados por ciertas experiencias que el individuo haya experimen-
tado; a patrones específicos de su respuesta neuroendocrina y a
conductas particulares que este posea. Resume que en cada emo-
ción se localizarían 3 aspectos fundamentales:
1. Subjetivos (dados por las experiencias y cogniciones).
2. Fisiológicos
3. Conductuales
Por otro lado se ha considerado que las emociones implican con-
ductas, estados corporales de activación o desactivación fisiológica
y cogniciones. Estos elementos conformarían la subjetividad de las
emociones y el hecho de que, por ejemplo, entre distintos indivi-
duos, las emociones generadas sean diferentes frente un mismo
estímulo o contexto (Ramos, 2009).
Uno de los puntos más de conflictivos y controvertidos en la actua-
lidad, es la existencia o no de las emociones básicas, universales
de las cuales derivarían en resto de las reacciones afectivas. En
este sentido, quienes aceptan la existencia de emociones básicas
asumen que estos son procesos necesariamente dados por la
Apuntes de Psicopatología y Psiquiatría - Manual de bolsillo34
adaptación y evolución, en donde el sustrato neural sería innato,
universal y un estado afectivo asociado único (Chóliz, 2005).
En un interés por determinar las emociones básicas, se realizó un
estudio transcultural, dirigido por el psicólogo Paul Ekman y otros
en 1987, donde se logró definir al menos 6 emociones básicas:
Alegría, sorpresa, tristeza, temor, repugnancia y enojo (Morris,
1998).
Para Damásio (1994), la cultura sólo puede modular la expresión
de las emociones y orientar a su manifestación. Por lo tanto, de-
terminará el hecho de que el individuo acabe utilizando bien o mal
su capacidad innata para experimentar y expresar estados emo-
cionales.
En congruencia con la perspectiva evolutiva y adaptativa del origen
de las emociones básicas, Plutchik (1984), quien las consideraba
son fenómenos neuropsicológicos específicos, producto de la se-
lección natural, propuso ocho emociones básicas agrupadas en
cuatro pares opuestos (figura 4.3). Estas emociones básicas serían
necesarias para la supervivencia y derivarían de reacciones simi-
Capítulo 4 | Elementos del vivenciar III: Afectividad 35
Figura 4.3 - Modelo de Plutchick.
lares en los animales inferiores desde donde, dada la combinación
entre ellas, surgirían las otras “emociones derivadas” (Morris,
1998).
Aún no existe consenso entre los investigadores respecto a la exis-
tencia de estas emociones básica. Se discute que si existieran
estas emociones claramente distintivas, no debiera existir tal con-
troversia entre los propios autores, quienes no logran coincidir entre
sus propios trabajos. Existen dos corrientes principales que abor-
dan las emociones básicas:
1. Biológica.
2. Cognitiva
1. Perspectiva biológica:
Considera que el estímulo activaría componentes genéticos (es-
tructuras biológicas, anatómicas, fisiológicas, etc) y componentes
adquiridos. Los primeros, determinarían el modo en que el sujeto
puede responder y el segundo determinaría el modo en el sujeto
responde. La activación de ambos componentes genera un subse-
cuente procesamiento a nivel de la corteza y sistema límbico que
daría como resultado la respuesta del individuo (siguiendo la se-
cuencia: activación SNC à activación sistema neuroendocrino à ac-
ción periférica). Engeneral, la perspectiva biológica se sustenta en
que las emociones básicas han permitido la adaptación al medio,
se encontrarían en diferentes culturas y defiende la existencia de
un sustrato neurofisiológico común entre las emociones básicas de
mamífero e inclusive, los vertebrados (Chóliz, 2005).
Varios cuestionamientos surgieron contra esta perspectiva. Pal-
mero, en 1996, cuestiona el control jerárquico de estructuras corti-
cales sobre las subcorticales, como un eje direccional de “arriba
hacia abajo”, en donde los procesos cognitivos superiores deter-
minarían la naturaleza de la experiencia emocional.
Actualmente, y dado el conocimiento de las estructuras implicadas,
se plantea que la activación emocional puede influir y condicionar
la actividad de los procesos cognitivos superiores, lo cual le daría
la direccionalidad de “abajo hacia arriba”.
Otro punto a considerar, y que ha puesto en entredicho esta pers-
pectiva, es que la neurociencia afectiva ha puesto en duda la vali-
dez anatomo-funcional del concepto de sistema límibico. Se
considera la afectividad como una función cerebral representada
Apuntes de Psicopatología y Psiquiatría - Manual de bolsillo36
en todo el eje neural, en múltiples regiones y estructuras.
2. Perspectiva Cognitiva:
Con el desarrollo del neocórtex, los procesos cognitivos entran a
formar parte de la elaboración de las emociones, lo que conocemos
como “procesamiento de información”, hasta un punto en que esos
procesos cognitivos determinan en gran medida nuestras emocio-
nes. Dicho procesamiento no siempre se realizaría de forma cons-
ciente, lo cual explicaría que no entendamos “qué nos pasa” en
ciertas situaciones.
Según Lazarus, la emoción surge de una evaluación cognitiva del
entorno y de nuestro interior. A su vez, distingue 3 tipos de evalua-
ción:
1º Evaluación del entorno según su significado para nuestro bien-
estar.
2º Evaluación de los recursos adaptativos que poseemos para
hacer frente a esa situación (sea una amenaza, beneficio, etc).
3º Realizar una nueva evaluación acerca del éxito o fracaso que
hayamos obtenidos.
Beck (1976) añade que la manera en que los pacientes perciben y
estructuran el mundo (cogniciones) es lo que determina sus emo-
ciones y sus conductas.
A esta perspectiva se le cuestiona que considera el mundo de la
cognición es un sistema independiente y autónomo, cuando no lo
es (error de Descartes), sino que es una actividad psíquica inte-
grada y construida evolutivamente desde la sensación-emoción.
Al paso entre estas dos corrientes (biológica y cognitiva) aparece
Damasio (1994), quien propone su perspectiva y define el proce-
samiento de la emoción como una serie de operaciones cognitivas
que van desde la percepción de un estímulo hasta la percepción
del estado emocional que aquél genera.
Dicho proceso se desarrollaría en cuatro etapas:
1. Percepción y evaluación del estímulo.
2. El disparo de la emoción.
3. La ejecución de la emoción.
4. El estado emocional propiamente dicho.
Todo esto con una constitución de base por estructuras neurobio-
lógicas que hacen posibles dichas operaciones (figura 4.4).
Capítulo 4 | Elementos del vivenciar III: Afectividad 37
Bibliografía.
Arnold, M. (1960). Emotion and personality. New York: Columbia
University Press.
Capponi, R. (2006). Psicopatología y Semiología Psiquiátrica (11°
ed). Santiago: Editorial Universitaria. 
Chóliz, M. (2005). Psicología de la emoción: el proceso emocional
(1º ed). Revisado en Junio 2013. Disponible en: www.uv.es/=cho-
liz
Damásio, A. (1994). Descartes' Error: Emotion, Reason and the
Human Brain. New York: Pan Macmillan.
Lazarus, R. S. (1991.). Emotion and adaptation. New York: Oxford
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Morris, C. & Maisto, A (1998). Introducción a la Psicología (10º Ed).
México: Prentice Hall.
James, W. (1980). The Principles of Psychology. New York: Dover
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Ramos, V., Piqueras, J., Martínez A., & Oblitas L. (2009). Emoción
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27(2), 227-237. Recuperado en 09 de julio de 2013, de
http://www.scielo.cl/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0718-
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Apuntes de Psicopatología y Psiquiatría - Manual de bolsillo38
Figura 4.4 - Modelo de Damasio. 
48082009000200008.
Schachter,S (1964) The interaction of cognitive and physiological
determinants of emotional state. En Advances in Experimental So-
cial Psychology, ed. L. *Berkowitz, pp. 49–79. New York: Academic
Press.
Schneider, K. (1946). Psicopatología clínica (4ta ed). Madrid: Ed.
Paz Montalvo. 
Capítulo 4 | Elementos del vivenciar III: Afectividad 39
Apuntes de Psicopatología y Psiquiatría - Manual de bolsillo40
Los instrumentos del vivenciar son factores generales que permite
al ser humano construir sus vivencias. De estos factores depende
la calidad de la vivencia de un individuo, siendo por lo tanto condi-
cionantes necesarios. Los instrumentos del vivenciar son: Concien-
cia, Orientación, Atención, Memoria e Inteligencia. En este capítulo
se ahondará en los 3 primeros mencionados. 
La Conciencia.
La conciencia proviene del latín “con conocimiento” y tienen que
ver con la capacidad de darnos cuenta de nosotros mismos y del
mundo que nos rodea, de sentirnos como un ser existente. Con co-
nocimiento de nosotros mismos, con conocimiento del entorno, con
conocimiento de cómo me voy sintiendo fisiológicamente y emo-
cionalmente. La conciencia se define como el proceso psicológico
a través del cual se toma conocimiento de fenómenos que ocurren
tanto a nivel externo como interno. 
Permite la interacción, interpretación y asociación con los estímulos
externos e internos, contribuyendo así a la construcción de la no-
ción de realidad, diferenciando la fantasía de la realidad. Por ejem-
plo un paciente psicótico que esta con su juicio de la realidad
alterado, se confunde entre lo que tiene en su mente, fantasía, y lo
que va pasando en su entorno, entonces decimos que este pa-
ciente está con su juicio de la realidad alterado.
Capítulo 5
Instrumentos del 
Vivenciar I: Conciencia,
Orientación y Atención
Es así como la conciencia es la que nos permite tener una claridad
segura de la frontera existente entre nuestro mundo interno y el
mundo externo, es decir, cuando estás en la realidad y cuando
estás en la fantasía; nos ayuda a construir la realidad. 
1. Clasificación de la conciencia
La conciencia se divide en dos grandes áreas:
a) La conciencia de vigilia: Abarca la toma de conocimiento de los
pensamientos, sentimientos y percepciones que ocurren cuando
estamos despiertos y en un estado razonable de Alerta. También
comprende al aprendizaje, memoria, inteligencia y creatividad entre
otros procesos. 
b) Estado alterado de conciencia: Es cuando los estados mentales
difieren mucho de la conciencia normal de vigilia. Algunos de ellos
ocurren de manera ordinaria y espontánea (Ensoñar y Dormir) y
otros se deben al propósito de alterar la conciencia normal (Hipno-
sis, Meditación, por consumo de sustancias como cocaína y/o ma-
rihuana)
2. Funciones de la conciencia
La conciencia se define en relación a sus 3 funciones:
1. Función de interioridad:
Capacidad de diferenciar el mundo intrapsíquico (mundo interno)
del mundo extrapsíquico (mundo externo). Tener una claridad se-
gura de la frontera existente entre nuestro mundo interno y el
mundo externo, es esta función la que hace posible reconocer a
una fantasía como una vivencia interna subjetiva, distinta a la rea-
lidad objetiva exterior. Así también, permite reconocer que el mundo
externo que percibe es absoluta realidad, y no su imaginación. 
2. Función de Alerta:
Se refiere a la capacidad de la Conciencia de interactuar y relacio-
narse con las cosas, con su mundo tanto interno como externo; de
registrar los acontecimientos, de sentirlos, percibirlos, representar-
los, etc. Mantener el contacto con el mundo interno y externo. 
3. Función de Reflexividad: 
Es la capacidad de la conciencia de detenerse en el tiempo y tomar
conocimientode sí mismo, de sus procesos y vivencias Darse
cuenta, saber de sí mismo. La conciencia posibilita la llegada y
contacto de todos los elementos del vivenciar, constituyéndose en
vivencias gracias a la conciencia. La conciencia hace que nosotros
tomemos conocimiento de todos nuestros procesos psicológicos,
Apuntes de Psicopatología y Psiquiatría - Manual de bolsillo42
la inteligencia, las emociones, la percepción, la representación, etc.
Aun cuando estemos totalmente despiertos y alertas, generalmente
sólo estamos conscientes de una pequeña parte de lo que sucede
a nuestro alrededor, ya que para sobrevivir e interpretar el mundo
circundante nos vemos obligados a seleccionar la información más
importante para prestarle atención y filtrar el resto. 
La Orientación.
En un inicio se decía que la orientación no se podía considerar
como un proceso psicológico como tal, sino más bien, formaba
parte de la conciencia, pero posteriormente se concluyó que si era
un proceso psicológico diferente a la conciencia, esto es porque se
observó que algunos pacientes que tienen alteraciones de la me-
moria pero que están conscientes, por ejemplo pacientes con en-
fermedad de Alzheimer, si tiene alteraciones de la orientación. Es
por esto que es importante señalar que no todo trastorno de la
orientación proviene de un trastorno de la conciencia, aunque sí
todo trastorno de conciencia necesariamente compromete en grado
leve o mayor la orientación. 
La orientación se define como el instrumento del vivenciar que per-
mite al sujeto comprender cada uno de los instantes de su vida en
relación al pasado, al presente y al futuro. También permite reco-
nocer la ubicación individual en relación a los espacios de alrede-
dor, respecto a sí mismo y al contexto situacional. La orientación
nos permite darnos cuenta de en qué momento estamos (tempo-
ralmente), dónde estamos y quiénes somos, constituyendo estas
las funciones de la orientación. 
1. Funciones de la orientación.
a) Orientación alopsíquica temporal: Permite la ubicación en el
tiempo (Día, momento del día, Mes, año, etc.). Se refiere a la ca-
pacidad del hombre de tener una noción del tiempo que transcurre,
sin necesidad de aparatos que lo midan.
b) Orientación alopsíquica espacial: Permite identificar y saber el
lugar en el que se está y el que ocupa en el contexto espacial, en
un momento dado.
c) Orientación autopsíquica: Es la percepción de uno mismo. Per-
mite saber quién y que soy.
Capítulo 5 | Instrumentos del Vivenciar I: 
Conciencia, Orientación y Atención 43
La Atención
Al igual que la conciencia y la orientación, la atención es un instru-
mento del vivenciar, por lo tanto es necesaria para lograr un viven-
ciar normal. Ya que el ser humano requiere adaptarse
continuamente, es necesario que saque partido de su medio am-
biente, esto sólo se logra si está atento a lo que sucede en su en-
torno. 
La atención es la orientación de nuestra actividad psíquica hacia
algo que se experimenta, permitiendo así el vivenciar. Acá el estí-
mulo se acepta indiscriminadamente de forma pasiva y sin esfuer-
zos. Se relaciona con la motivación y emoción que influyen y
determinan que elementos del ambiente se atienden en forma prio-
ritaria; la percepción, ya que la atención permite seleccionar más
eficientemente la información que es relevante para el organismo,
y la inteligencia, la atención es un componente estructural de la in-
teligencia. Está implicada en el procesamiento activo de la infor-
mación. 
Podemos definir atención como el mecanismo implicado en la ac-
tivación y el funcionamiento de los procesos y operaciones de se-
lección, distribución y mantenimiento de la actividad psicológica. 
1. Procesos implicados en la atención.
a) Procesos Selectivos: Se activan cuando el ambiente exige dar
respuesta a un solo estímulo o tarea en presencia de varias tareas
o estímulos. Se selecciona la información relevante (concepto de
figura y fondo). Ej.: atender al profesor, mientras “otros” hablan
ATENCIÓN SELECTIVA.
b) Procesos de distribución: Se activan cuando el ambiente exige
dar respuesta a varios estímulos o tareas a la vez. Esto es porque
en ocasiones es necesario prestar atención a varias cosas a la vez
(Ej.: manejar) ATENCIÓN DIVIDIDA.
c) Procesos de mantenimiento o sostenimiento: Se produce cuando
tenemos que concentrarnos en una tarea por un período relativa-
mente prolongado de tiempo. Requiere de mayor esfuerzo. Ej.: es-
tudiar… ATENCIÓN SOSTENIDA.
2. Características de la atención.
a) Amplitud: Cantidad de información que el organismo puede aten-
der al mismo tiempo o número de tareas que podemos realizar si-
multáneamente. Puede ampliarse con la práctica (lectura veloz) 
b) Intensidad: Cantidad de atención que le prestamos a un objeto
Apuntes de Psicopatología y Psiquiatría - Manual de bolsillo44
o tarea. Depende del nivel de vigilia y nivel de alerta del individuo.
Los cambios en la intensidad se denominan Fluctuaciones, cuando
éstos son breves y transitorios se denominan cambios fásicos,
cuando son largos y relativamente permanentes, se denominan
tónicos.
c) Oscilamiento: La atención está cambiando u oscilando en forma
continua, sea porque requerimos dividirla o porque nos hemos dis-
traído y requerimos re-atender, etc. 
d) Control: Cuando la atención se realiza voluntariamente en virtud
del logro de ciertos objetivos o demandas ambientales, por tanto
exige cierto esfuerzo del sujeto para mantenerla. Si no está orien-
tada a ningún fin específico se le llama “atención Libre”.
3. Factores determinantes de la atención.
a) Factores internos: Se relaciona con el estado del organismo
(Nivel de activación fisiológica, intereses y expectativas)
b) Factores externos: Tiene que ver con las características físicas
del estímulo. (Tamaño, color, posición, intensidad del estímulo, re-
levancia y novedad)
c) Factores internos: Son aquellos que tienen lugar en un momento
e influyen en su actividad mental. (Sueño, fatiga, estrés, medica-
mentos y drogas).
4. Tipos de atención.
● Atención espontánea: Se genera sin la participación de la volun-
tad del individuo. Tiene que ver con los factores como intereses
propios, educación, cultura, tendencia y experiencia Ej.: belleza,
ropa, animales. 
● Atención espontánea adquirida: Aquello que fue producido por la
voluntad pero después de una serie de ensayos se hace natural. 
● Atención voluntaria: Dirigida por las decisiones conscientes de la
persona.
● Atención involuntaria: Cuando un estímulo se impone a la con-
secuencia. Ej.: temblor.
● Atención selectiva v/s dividida: Dado que los recursos atenciona-
les con los que se cuenta son limitados, el sujeto, ante excesiva
estimulación, o bien se focaliza (selectiva) o distribuye sus recursos
(dividida).
● Interna v/s externa: Orientada hacia objetos o el ambiente o bien
hacia el interior, recuerdos emociones, pensamientos, etc.
● Visual v/s Auditiva: Se evidencian distintas formas de procesa-
Capítulo 5 | Instrumentos del Vivenciar I: 
Conciencia, Orientación y Atención 45
miento a nivel visual
● Atención global v/s selectiva: 
o Global: llevar a cabo una estructura organizada de las partes o
elementos que componen una tarea o situación (busca amplitud).
o Selectiva: se centra en los detalles que componen la información
(busca intensidad)
● Atención consciente v/s Inconsciente: No todo lo atendido se
hace consciente, podemos poner atención sin darnos cuenta que
lo hacemos (actos automáticos). Todo lo que es consciente ha sido
atendido. La atención posibilita el ingreso a la conciencia. 
La Concentración.
Cuando la atención permanece orientada en forma persistente
hacia una situación determinada, se está llevando a cabo la función
de concentración. A través de la concentración, la atención crea las
condiciones para que una determinada situación pase a ser la más
destacada en el campo de la conciencia.
La atención y la concentración son requisitos indispensables para
un buen rendimiento intelectual, siendo una condición necesaria
para que se lleven a cabo losprocesos de asimilación y razona-
miento lógico, propios de la inteligencia. 
Bibliografía.
Capponi M, R. (2006) Psicopatología y semiología psiquiátrica. Un-
décima Edición. Santiago: Editorial Universitaria. 
Apuntes de Psicopatología y Psiquiatría - Manual de bolsillo46
¿Es posible recordar los primeros sucesos de la infancia? ¿Pode-
mos olvidar voluntariamente? ¿Les ha pasado que intentan borrar
un pensamiento, que está allí presente, pero permanece impreso
tal como si fuera un tatuaje? Querer el olvido es un problema an-
tropológico: desde siempre, el hombre sintió el deseo de reescribir
su propia biografía, de cambiar el pasado, borrar sus huellas, las
suyas y las de los demás […] La lucha contra el poder es la lucha
de la memoria contra el olvido. (Kundera, M).
“Ese Gran Simulacro” de Mario Benedetti describe el olvido y la
memoria colectiva de los argentinos en homenaje a los deudos de
los detenidos desaparecidos: 
… El olvido está tan lleno de memoria
que a veces no caben las remembranzas
y hay que tirar rencores por la borda.
En el fondo el olvido es un gran simulacro
nadie sabe ni puede, aunque quiera, olvidar
un gran simulacro repleto de fantasmas,
esos romeros que peregrinan por el olvido
como si fuese El Camino de Santiago
El día o la noche en que el olvido estalle,
salte en pedazos, crepite…
los recuerdos atroces y de maravilla
quebrarán los barrotes de fuego…
arrastrarán por fin la verdad por el mundo
y esa verdad será… que no hay olvido.
Capítulo 6
Instrumentos del 
vivenciar II: Memoria
¿El olvido está lleno de memoria? o la ¿Memoria está lleno de ol-
vido?... Pareciera que cuando pensamos, algunas de esas repre-
sentaciones se registran y guardan, pero no toda información se
registra permanentemente en nuestro ser. Si se pudiera almacenar
sólo lo que realmente deseamos contener y de ésta misma manera
poder recuperarla de forma ordenada no existirían las pesadillas,
la ansiedad, ni las imágenes negativas que se generan de nosotros
mismos ya que simplemente el material que no nos interesa sería
desechado del recuerdo, olvidado, logrando evocar sólo aquellas
representaciones que gustemos. Lamentablemente nuestro cere-
bro no funciona así. Recuperar esa información depende del tipo
de estímulo justo en el preciso instante en que es almacenado y
cómo clasificamos la información para hacer ejercicio de ella. Cons-
tantemente estamos rodeados de estímulos, la mayoría de las
veces no alcanzamos a tomar conciencia de todos ellos en el mo-
mento y no es hasta después de un tiempo (o no) llegar a descubrir
la presencia de aquel estímulo.
La psicología cognitiva pretende comprender la naturaleza y el fun-
cionamiento de la mente humana. Su objeto de estudio son los pro-
cesos cognitivos: la percepción, el aprendizaje y la memoria, que
es el proceso mediante el cual adquirimos, guardamos y recupera-
mos información. La memoria como dice Benedetti, funciona de
manera fascinante, compleja y bien curiosa. En este capítulo vere-
mos una aproximación del concepto general de memoria como pro-
ceso psicológico básico, su funcionamiento, de qué depende que
podamos o no recuperarla, las teorías que lo validan y las causas
de olvido.
Definición.
La memoria ha sido definida como retención del aprendizaje o ex-
periencia. Aquí es importante diferenciar el concepto de aprendi-
zaje que, sin duda no es sinónimo de memoria. Se ha descrito al
aprendizaje como la adquisición del conocimiento y la memoria
como el almacenamiento de una presentación interna, del conoci-
miento o de la experiencia (Blakemore, 1988). El aprendizaje va
más allá del sólo prestar atención, ocurre cuando la representación
se transforma, existe una modificación en la forma permanente de
la conducta. Se conserva de manera que se estabiliza como cono-
cimiento y modificando el comportamiento. Entonces, la memoria
es la capacidad de almacenar representaciones, se refiere a un
Apuntes de Psicopatología y Psiquiatría - Manual de bolsillo48
conjunto de sistemas que permiten adquirir, retener ya sea de ma-
nera temporal o permanente y recuperar la información o conoci-
mientos. Ahora sabemos que la memoria no es un almacén, ni una
biblioteca, sino una facultad que conserva y elabora, es una me-
moria creativa. Además, la memoria no es una realidad unitaria,
sino que la integración de múltiples sistemas. Y no es perfecta, está
sujeta a errores, distorsiones e ilusiones.
Algunos autores atribuyen a la memoria como una propiedad inhe-
rente del hombre para recordar, conservar y reproducir (en la me-
dida de su necesidad) la información recibida, que difiere del resto
de los animales en el sentido que la memoria humana nos permite
actuar sobre la base de las necesidades presentes, contemplar el
pasado e incluso anticipar y planificar el futuro. La memoria animal
estaría limitada sólo a la necesidad para satisfacer su homeostasis
de forma inmediata, para restablecer el equilibrio. Por tanto, la me-
moria animal estaría presente sólo para recuperar aquellos recuer-
dos que son inmediatamente necesarios como registro conductual
adaptativo para la supervivencia y nada más que eso. En otras pa-
labras, si no necesitan un recuerdo (afectivo) no lo evocan.
Finalmente, la memoria es la capacidad de adquirir, almacenar y
recuperar la información. Somos quienes somos gracias a lo que
aprendemos y recordamos. Sin memoria no seríamos capaces de
percibir, aprender o pensar, no podríamos expresar nuestras ideas
y no tendríamos una identidad personal, porque sin recuerdos sería
imposible saber quiénes somos y nuestra vida perdería sentido.
Memoria infantil.
Intente recordar aquel momento más remoto que tenga de su vida.
A menos que sea una persona poco común, no recordará nada que
se remote a un período anterior a los 3 o 4 años de edad, e incluso
es bastante probable que no tenga ningún recuerdo anterior a los
6 o 7 años (Kihlstrom y Harackiewicz). Para muchos de nosotros
los recuerdos de la primera infancia son, por desgracia, fragmen-
tarios y vagos. El teórico de la personalidad, Alfred Adler dice que
el primer recuerdo mostrará la visión fundamental de la vida de un
individuo, la primera cristalización satisfactoria de su actitud… No
descubrirás nunca una personalidad sin preguntar por sus primeros
recuerdos. La investigación de los recuerdos infantiles puede sus-
citar preguntas que lleven a respuestas provechosas para solucio-
Capítulo 6 | Instrumentos del vivenciar II: Memoria 49
nar el enigma de la memoria en general. Por ejemplo, ¿qué impor-
tancia tiene el uso del lenguaje en el almacenamiento y conserva-
ción de recuerdos? Es posible que la razón de que tengamos tan
pocos recuerdos de nuestros primeros años consista en que no
disponíamos de los instrumentos, es decir, las palabras, para or-
ganizarlos de manera que pudieran ser almacenados. O puede que
estén allí almacenados y clasificados en algún rincón de nuestros
archivos mentales, pero no podamos evocarlos porque en realidad
es imposible de codificar por tratarse de un lenguaje preverbal, in-
entendible para ser interpretado con el lenguaje adquirido. O quizás
lo hemos reprimido: Freud sostenía que olvidamos muchos de
nuestros sentimientos y experiencias infantiles porque nos resultan
problemáticos.
Otro asunto importante en el estudio de los recuerdos infantiles se
refiere a la total desconfianza que debemos mostrar frente a lo que
recordamos con absoluta certeza, y a la manera en que los suce-
sos reales llegan a ser distorsionados por historias que hemos oído
o fotografías que hemos visto. En sus recuerdos más tempranos,
por ejemplo, ¿se veía a sí mismo como un niño pequeño, cómo si
se estuviera observando desde afuera? Esto probablemente su-
ceda porque su memoria no se ha formado con lo que realmente
recuerda, sino por fotografías que ha visto o historias familiares que
ha oído.
Procesos básicos de la memoria.
La memoria tiene tres funciones básicas: recoge nueva informa-
ción, organiza la información para que tenga un significado y la re-
cuperacuando necesita recordar algo. El recuerdo de rostros,
datos, hechos o conocimientos consta de tres etapas: 
Adquisición: el individuo memoriza algunas respuestas que se
producen por la exigencia de la situación; esta fase se reduce a un
acto perceptivo y puede mejorar en función de repeticiones suce-
sivas. Este proceso se logra mediante la codificación, es decir, la
transformación de los estímulos en una representación mental. En
esta fase, la atención es muy importante por la dirección (selectivi-
dad) y la intensidad (esfuerzo) con que se procesan los estímulos.
Retención: consiste en almacenar los datos en la memoria para
utilizarlos posteriormente. La organización de la información se re-
Apuntes de Psicopatología y Psiquiatría - Manual de bolsillo50
aliza mediante esquemas, unidades estructuradas de conocimiento
que reúnen conceptos, categorías y relaciones, formando conjunto
de conocimientos. Abarca un período más o menos amplio en el
cual lo que se memoriza está conservado de manera latente.
Reactivación: Es la forma en que se accede a la información al-
macenada. Actualización de las respuestas adquiridas que pueden
dar lugar a conductas mnemónicas observables. Mejor recuerdo
cuando el contexto de recuperación es el mismo o similar al de ad-
quisición. Puede ser espontánea, cuando los recuerdos surgen de
forma casual, o voluntaria.
Teorías de la estructura y funcionamiento de la memoria.
Las dos explicaciones más conocidas de la manera en que ocurren
estos procesos son la del almacenamiento y la transferencia, mo-
delo de memoria propuesto por Richard Atkinson y Richard Shiffrin,
también conocido con el nombre de la teoría de las etapas y la del
modelo de niveles de procesamiento, de Fergus I.M. Craik y Robert
S. Lockhart (1972). 
Teoría de las etapas.
Se enfoca en cómo la información está siendo almacenada en la
memoria. Propone que la información es procesada y almacenada
en tres etapas: memoria sensorial (MS), memoria a corto plazo
(MCP) y memoria a largo plazo (MLP). En primer lugar, el material
atraviesa nuestros sentidos, ojos, oídos, nariz, etc., para llegar a
la memoria sensorial. En menos de un segundo esta información
desaparece o es transferida de la MS a la memoria de corto plazo,
donde puede permanecer alrededor de 20 segundos. Si no des-
aparece en esta etapa, se dirigirá a la memoria a largo plazo, donde
puede permanecer el resto de nuestra vida. Vamos a tratar en pro-
fundidad cada uno de estos tipos de memoria.
MEMORIA SENSORIAL (MS) es como una cámara fotográfica.
Toma una instantánea que es capturado a través de los sentidos.
Es de corta duración, pero su capacidad está siendo aún investi-
gada. Existe una memoria sensorial para cada sentido. Por ejem-
plo, la memoria visual es conocida como memoria icónica, que
registra la información en forma de íconos (imágenes, figuras). Apa-
rentemente, las imágenes icónicas desaparecen más rápidamente
(un segundo) que las que provienen de nuestros oídos, conocida
Capítulo 6 | Instrumentos del vivenciar II: Memoria 51
ésta como memoria ecoica que registra sonidos y palabras. Las
imágenes ecoicas duran un poco más (2 segundos). También exis-
ten memorias sensoriales para los otros sentidos: la memoria olfa-
toria o bien la cinestésica. Entre la gran cantidad de información
recibida, seleccionamos algunos elementos y los retenemos para
procesarlos ulteriormente (en este proceso está implicada la aten-
ción y durante éste también se interpreta la información).
MEMORIA A CORTO PLAZO (MCP). Es la memoria activa. Tam-
bién conocida como la memoria del trabajo. Este tipo de memoria
decae rápidamente y si no se repasa la información se olvida en
un período de 15 a 18 segundos (Peterson) a menos que el estí-
mulo sea demasiado intenso en relación a los significados perso-
nales y no requiera de ser ejercitado para que sea retenido en
nuestra memoria ya que queda inmediatamente almacenado (re-
tención involuntaria). ¿Qué ocurrió la última vez que buscó una di-
rección y no encontró nada con que anotarlo? Probablemente,
repitió la dirección en su cabeza dos o tres veces antes de escribir
la dirección en algún papel o registrarlo en un dispositivo tecnoló-
gico. Por tanto, es el repaso lo que ayuda a retener la información.
“Cuando se descuida la memoria, si no se la ejercita igual que un
atleta hace con sus músculos, ésta se debilita” (Steiner, G.). Su
amplitud tiene que ver con la atención. Esto quiere decir que si se
está más distraído se olvida antes (olvido involuntario). Por ejemplo
si justo antes de anotar la dirección se le hubiera acercado un
amigo para saludarle, probablemente hubiese olvidado la dirección
y hubiera tenido que buscarlo de nuevo. Esto puede ser molesto
algunas veces, pero otras puede ser una salvación. ¿Suponga que
recuerda cada situación trivial en que está inmerso durante el día?
Esta información interferiría su capacidad para dedicarse a otras
actividades y para comprender el nuevo material que necesita. La
experiencia de un famoso prodigio en memoria, conocido como “S”,
era justamente ésta: “S” lo recordaba todo y no olvidaba nada.
Como resultado, no podía leer, la imagen de un pasaje se super-
ponía sobre la lectura siguiente, atrapándole en la espesura de
todas aquellas imágenes solapadas. No podía deshacerse de una
imagen cuando ya no la necesitaba.
La capacidad de recuperación de la memoria a corto plazo es rá-
pida y exhaustiva. La información almacenada en la MCP se puede
obtener rápidamente. Esto ha sido demostrado en los experimentos
Apuntes de Psicopatología y Psiquiatría - Manual de bolsillo52
realizados por Saúl Sternberg. La capacidad de la memoria es li-
mitada. Se pueden mantener siete unidades de información con
una diferencia de +2. También existe la posibilidad de almacena-
miento de la memoria a corto plazo. Existen estrategias desarro-
lladas para expandir la capacidad de la memoria a corto plazo. Un
modo de hacerlo es a través del fraccionamiento (“chunking”) de
los elementos en unidades significativas. Puede recordar los nú-
meros de teléfono más fácilmente, por ejemplo, si los divide en tres
trozos (chunks) el central, más dos grupos de dos dígitos, en lugar
de siete números seguidos. Sin embargo, el fraccionamiento no au-
menta la memoria a corto plazo indefinidamente. Una vez alcan-
zado el límite de la cantidad de información que puede almacenar,
si añadiera nueva información, provocaría un desplazamiento de
la información almacenada, perdiéndose parte de ésta a menos
que haya sido almacenada en la memoria a largo plazo.
Otra manera es por medio de armar patrones, se agrupa la infor-
mación similar en categorías jerarquizadas, por ejemplo medios
de transporte, animales mamíferos, ordenar elementos por colores,
formas etc. Otra forma de organización consiste en combinar dos
o más unidades de información en una unidad simple. Ej. las letras
a, m, o, r pueden combinarse en la palabra Roma; así, condensa-
mos la información a un nivel más profundo. Otros, ante una serie
de elementos que no se relacionan entre sí pueden generar una
secuencia lógica mediante la creación de un cuento o brindarle
sentido. Por ejemplo 36552124313028 ¿puedes recordar esta
cifra? Estúdiala un momento, luego aparta la mirada y escríbela
en un papel. Si descompones esta cifra en unidades con signifi-
cado, seguro que la recuerdas mejor: hay 365 días en un año, 52
semanas, 12 meses, aproximadamente 4 semanas en un mes, y
en un mes puede durar 31, 30 o 28 días. ¿Recuerdas ahora la cifra
con exactitud?
¿De qué manera las memorias a corto plazo y largo plazo funcio-
nan juntas? La memoria a corto plazo contiene una cantidad limi-
tada de material activado, que está siendo utilizado, mientras que
la memoria a largo plazo contiene una gran cantidad de material
codificado, normalmente inactivo.
La importancia de la transferencia de información desde la MCP a
la MLP es vital para poder relacionarnos. Imagine que nunca trans-
Capítulo 6 | Instrumentos del vivenciar II: Memoria 53
fiere

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