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© 2000. S alvador C arrión López © 2001. De esla edición, E ditoria l ED A F, S-A. E ditoria l E D A F, S. A. Jorge Juan, 30. 28001 M adrid h ttp ://w w w .edaf.net edaf@ edaf.net E d a f y M orales, S. A. O riente, 180, n° 279. C olon ia M octezum a, 2da. Sec. C. P. 15530. M éxico , D. F. h ttp ://w w w .edaf-y-m oraIes.com .m x edafm orales@ edaf.net E d a f del Plata, S. A. C hile, 2222 1227 - B uenos A ires, A rgentina edafdelp lata@ edaf.net E d a f A ntillas, Inc A v. J. T. P iñero, 1594 - C aparra T crrace (00921-1413) S an Juan, Puerto R ico edafantillas@ edaf.net E d a f C hile, S.A. H uérfanos, 1178 -O f. 506 S antiago - C hile edafch ile@ edaf.net Q ueda p rohib ida, salvo excepción p rev ista en la ley, cualquier fo rm a de reproducción , distri bución, com unicac ión pública y transform ación de esta obra sin contar con la autorización de los titu lares de propiedad intelectual. L a infracción de los derechos m encionados puede ser constitu tiva de delito contra la propiedad in telectual (art. 270 y siguientes del C ódigo Penal). E l C entro E spañol de D erechos R eprográficos (C ED R O ) v e la por e l respeto de los citados derechos. 3.0 edición, agosto 2005 D epósito legal: M -33.464-2005 ISBN: 84-414-0938-8 PR IN T ED IN SPA IN ___ IM PR E S O EN ESPAÑA Ibérica G rafic, S. L. - F uen lab rada (M adrid) A los A m ig o s d e la S inceridad . A todos a q u ello s p a ra qu ienes la a m is ta d está p o r enc im a de cu a lq u ier o tro interés. A Indice Págs. Introducción ...................................................................... 11 I. LA INTELIGENCIA EM O C IO N A L 15 II. DINÁM ICA CEREBRAL.................................. 29 III. LA GENERACIÓN DE ESTADOS Y EM O C IO N E S .................................................................. 51 IV. ELEGIR INTELIGENTEMENTE NUESTROS ESTADOS Y EM O CIO N ES............................... 73 V. LO QUE NOS COMUNICAN LAS EMOCIO NES .......................................................................... 83 VI. ESTRUCTURA DE LAS EM OCIONES 104 VIL INTELIGENCIA EM OCIONAL Y LA CON CIENCIA DE SÍ M ISM O .................................. 121 VIII. SELECCIONAR LAS E M O C IO N E S 143 • Técnica para seleccionar las emociones que convienen............................................................ 144 • Seleccionar la emoción que convenga 145 • Limpiando residuos em ocionales................. 148 • Cambiando la emoción que aflo ra ............... 151 • Antes de que se presente la em oción 154 • Cómo tener acceso a la emoción que desees 155 • Cambiando la relación causa-efecto 159 • A m pliando el abanico em ocional.. 162 • Expresando las emociones de forma ecológica 165 1 0 INTELIGENCIA EMOCIONAL CON PNL Págs. • Método para resolver el duelo y la pérdida. 168 • Familiarizándonos con el sueño eterno 171 • Borrando traum as y reordenando recuerdos 175 • Otra forma de expresar em ociones 180 XX. P R E V E N C IÓ N ..................................................... 185 • Técnica para aprender a d isociam os 191 • Técnica para incorporar la ob jetiv idad 193 • Decide tus em oriones....................................... 194 • Otro método para prevenir el regreso de emo ciones no desead as........................................... 196 X. GENERAR SALUD EMOCIONAL, ESPIRI TU A L Y F ÍSIC A .................................................. 199 • Ordenando la m ente......................................... 200 • Dialogando con los sín tom es......................... 203 • Nuevas respuestas de la mente creativa 206 • El Círculo de L u z .............................................. 208 Apéndice ............................................................................ 213 Las anclas............................................................... 213 Nota f in a l ............................................................................ 219 B ib liogra fía ....................................................................... 221 Introducción D e s p u é s de más de veinte años trabajando en tera pia y con organizaciones del mundo entero, creo haber encontrado un conjunto de habilidades comunes que pueden ser las que marcan la dife rencia entre una persona competente y otra deficiente, y entre un profesional altamente eficaz y los que no lo son. Por supuesto que no estoy hablando de los seudoaprendi- zajes que otorgan los certificados universitarios, ni tampoco de los años de práctica laboral, ni tan siquiera de la inteligen cia abstracta, me refiero a la capacidad de manejar correcta mente los propios estados internos y, como consecuencia, la propia vida. Todo ser humano posee la capacidad de aprender a utili zar sus habilidades y estados aním icos para alcanzar un grado óptimo de competencia, siempre y cuando haya desa- rroll8% orrectam ente sus diferentes talentos intelectivos, y muy especialm ente el em ocional. Este es un principio del que partimos en PNL y que le otorga al individuo la respon sabilidad y el poder de controlar su destino. El libro que tienes en tus manos en este momento perte nece a esa familia de textos que tiene como fin facilitarle al lector un modelo de aplicación precisa de las técnicas más poderosas de las que disponem os en este m om ento para manejar y desarrollar las respuestas de la actividad cerebral 1 2 INTELIGENCIA EMOCIONAL CON PNL en el área que se conoce como Inteligencia emocional. Las técnicas a las que me estoy refiriendo son las aportadas por la PNL, abreviatura de P rogram ación N euro Lingüística, método que nos faculta para conocer y mejorar las capacida des — o incapacidades— de que disponemos. La PNL tiene la gran ventaja de que puede ser empleada por cualquier persona, en cualquier momento, en cualquier lugar, y para una amplia gama de situaciones o necesidades de cambio o mejora mental. Esta revolucionaria metodología maneja un conjunto de técnicas y modelos adecuados para cada caso, de muy fácil com prensión y utilización. En la mayoría de los casos basta con seguir las instrucciones, los pasos que se indican para alcanzar los efectos deseados. La PN L perm ite que progresivam ente, y con m ínim o esfuerzo, podamos amplificar aquellas áreas de nuestra inte ligencia, entre las que se encuentra la emocional, y alcanzar así mejorías e incrementos de nuestras potencialidades, habi lidades y recursos internos, que por cualquier otro medio tar daríam os m uchísim os años en conseguirlo . A dem ás, los beneficios son tan obvios que podemos recoger sus resulta dos a muy corto plazo. La PNL es conocida com o el «Arte y la Ciencia de la Excelencia», por sus altos grados de eficacia, ecología, ética y valores humanos. Quienes aplican la PNL a sus vidas, se dan cuenta al poco tiempo, y de forma inequívoca, del poten cial, del poder que todos llevamos dentro y de que pueden sacarlo fuera, para utilizarlo en su beneficio, en el beneficio de su familia y en beneficio de la humanidad entera. La PNL, y en ocasiones así lo explico, es una filosofía en su genuina expresión original, en el sentido de que es simple mente como la ciencia de la vida, del vivir, pero del vivir sano, del vivir ecológico, del vivir satisfecho de tus actos, y, en resumen, del vivir consciente. Los patrones que rigen en la actualidad el mundo laboral son muy distintos de los de hace unas décadas. Hoy ya no es suficiente con tener títulos, un alto coeficiente intelectual, o INTRODUCCIÓN 1 3 incluso años de actividad; lo que se demanda actualmente es una óptima capacidad de comunicación, de relación personal y social. Aunque en muchas ocasiones aún se sigue contratan do personal laboral en función a su currículo académico, no es menos cierto que quien progresa y alcanza e l éxito es aquel que adquiere un grado significativo de inteligencia emocio nal. En la mayoría de las ocasiones, es más valorado un buen comunicador que un buenprofesional de cualquier otra área. Tal capacidad de relación ha de estar sustentada por un preci so dominio emocional, o, lo que es lo mismo, por una inteli gencia emocional evolucionada. Es necesario advertir que el desarrollo de la inteligencia em ocional viene determ ina por la adquisición de ciertas habilidades que son muy preciadas tanto en el ámbito perso nal como empresarial: autoestima, dominio de las em ocio nes, motivación, capacidad de establecer rapport, de relacio narse y de comunicar eficazmente. Si algún día, cuando un alto núm ero de ind iv iduos m aneje adecuadamente los principios y técnicas de la PNL y seamos capaces de utilizar la inteligencia emocional, tan efi cazmente como otras inteligencias, tal vez entonces consiga m os hacer de este un m undo en el que a todos nos guste vivir. Con respecto a las emociones o, si gusta más, a la inteli gencia emocional, lo que la PNL aporta es una nueva visión y comprensión de las mismas, de sus estructuras y estrategias operativas. Ya iremos viendo y estudiando a lo largo del libro que las emociones se generan a partir de nuestras representa ciones internas, y que como tal, poseen una pauta, una estruc tura, y que esta es identificable y modificable. Por lo que, a partir de ese punto, podemos ser dueños de nuestras emocio nes: cam biándolas, d ism inuyéndolas, increm entándolas, haciéndolas desaparecer o surgir, etc., con el fin de disfrutar con mayor plenitud y riqueza de nuestra vida. Ahora, tú, amigo o amiga lector, dispones de una magnífi ca oportunidad para comprobar que lo dicho en los párrafos 1 4 INTELIGENCIA EMOCIONAL CON PNL anteriores son verdades, hechos que solo requieren de tu prác tica para que se materialicen. Recuerda que lo importante no es tener una buena mente; lo realmente importante es saber utilizarla bien. Com o cierre de la introducción, m e gustaría recordar unas líneas del insigne Roger Bacon que nos brinda un resu men de lo que yo en mi m odesto conocimiento he querido transmitir en la introducción. E n lo m ás pro fu n d o d e l hom bre hab itan esos p o d ere s adorm ecidos; p o d eres que lo asom brarían , que él ja m á s soñó poseer; fu e r za s que revo luc ionarían su vida si d espertaran y en traran en acción. I La inteligencia emocional El amor nace del recuerdo, vive de la inteligencia y muere del olvido. R a m ó n L l u l l R íos d e t i n t a se han gastado y se seguirán gastando en plasmar diferentes enfoques y métodos para desarrollar lo que se ha dado por llamar inteligencia emocional. Pero lo cierto es que el tema relati vo al dominio de las emociones es tan viejo como el hombre. Si volvem os un poco la vista atrás, recordarem os que los padres de la cultura occidental: presocráticos, socráticos, pla tónicos y aristotélicos, gastaron parte de sus acreditadas vidas en enseñar que el desarrollo del hombre pasaba inexorable mente por el dominio y manejo correcto de sus emociones. Pero vayam os por pasos. ¿Q ué es eso de la inteligencia em ocional? ¿Es que la inteligencia ha de ser em ocional? ¿O es que acaso hay diferentes inteligencias? Para responder a todas estas preguntas hemos de acercar nos primeramente al concepto de inteligencia. Con demasiada frecuencia escuchamos decir eso de que: «La inteligencia es lo que nos distingue de los animales». 1 6 INTELIGENCIA EMOCIONAL CON PNL Pero... ¿Qué es eso de la inteligencia? La definición que más nos acercaría al concepto de inte ligencia podría ser: capacidad de flexibilizar y adaptar nues tras conductas (externas e internas — pensamientos— ) para conseguir aquellos objetivos que nos proponemos. Tal habili dad incluye la disposición para beneficiarse de las experien cias, resolver problemas y razonar con efectividad. De forma sencilla, también respondería a la pregunta previa afirmando: que es la facultad de conocer, comprender y entender. Y entonces estamos hablando de una de las potencias del alma o esencia de la especie, caracterizada por el aprender y proyectar. Se sabe que la corteza cerebral, presente en los mamíferos superiores, y especialmente en el hombre, posee abundantes centros secundarios, desarrollados en función de los estímulos recibidos en el aprendizaje. Es decir, a medida que aprende mos, tales núcleos crecen y se consolidan. Entre estos, los sis temas sensoriales (visual, auditivo, kinestésico*, olfativo y K inestésico : E n PN L usam os preferentem ente este vocablo para referirnos a uno de los canales de perfección dentro del sistem a represen- tacional hum ano — visual, auditivo, olfativo, gustatorio y kinestésico. La sinestesia abarca tanto la som estesia com o la cinestesia, incluyendo las in form aciones particu lares y generales transm itidas por los receptores sensoriales tales como: propiceptores (receptores para la posición corpo ral, tensión m uscular y tendones), exteroceptores (para el m edio extem o), viceroceptores (área de los órganos internos), interoceptores (m edio inter no), nocioceptores (receptores del dolor) y otros. Por tanto, es un concepto m ucho m ás am plio que el de cenestesia y com pletam ente d iferente de sinestesia. C enestesia: Sensación general de la existencia y del estado del propio cuerpo, independiente de los sentidos extem os, y resultante de la síntesis de las sensaciones sim ultáneas y sin localizar, de los diferentes órganos y sin gularm ente de los abdom inales y torácicos. Diccionario de la RAE. Somestesia: Conjunto de sensibilidades cutáneas y sensibilidad profunda (tacto, presión, calor, frío, etc.), Diccionario de Psicología de Friedrich Dorsch. C inestesia: Sentido m uscular, conjunto de sensaciones que nos infor m an sobre m ovim iento, resistencia al m ovim iento, peso, presión, etc. Diccionario de Psicología de Friedrich Dorsch. S inestesia: Sensación secundaria o asociada que se produce en una parte del cuerpo a consecuencia de un estím ulo aplicado en otra parte del mismo. Diccionario de la RAE. LA INTELIGENCIA EMOCIONAL 1 7 gustatorio), son verdaderos centros cognitivos generadores de representaciones internas donde se reconocen, interpretan, almacenan y evocan las sensaciones. Y los sistemas motores registran y almacenan los movimientos voluntarios aprendi dos, tales como los de la comunicación verbal y no verbal (lenguaje, gestos, utilización de m anos, postura corporal, etc.). Aunque las neuronas de un individuo se forman en una fase muy precoz de su vida, en el transcurso de esta no dejan de perfeccionarse, estableciendo numerosas y complejísimas conexiones, entramados y asociaciones entre las de la corteza cerebral en función de las experiencias vividas. Así pues, considerando lo anterior, estaríamos hablando de la posibilidad de tener existencia en diferentes focos cogni tivos: sensorial, emocional, motor, además de los puramente mentales (analítico, conceptual, relacional, creativo, etcétera), y que tal experiencia, conocida, entendida y comprendida, perm itiría el desarrollo intelectual de tal área en cuestión. Aunque, en mi modesta opinión, todas ellas serían, probable mente, habilidades de la misma. Puede decirse que la inteligencia reside en la facultad de asociar los estímulos — el feedback— nuevos con la compe tencia inconsciente adquirida en el pasado, de integrar los de distintas clases y, sobre todo, de llevar a cabo actos de com petencia conscientes no estrictamente iguales a otros ya reali zados anteriormente, teniendo como fundamente) elementos de conducta adquiridos por aprendizaje. Pero claro, todo ello está en función a las necesidades y condicionamientos culturales. Uno de los mayores vicios de nuestra civilización, alimentada aquí por el fundamentalis- mo psicológico, es su obsesiva manía de medirlo todo, cuan- tificarlo, establecer plusmarca, generar competitividad: «Yo soy más, tú eres menos». ¿Quién es más inteligente, el que sabe hacer cálculos m atem áticos complejos de cabeza y gran velocidad aunque no sirva para nada — hoy en día hay m agníficas calculadoras— , o el que m aneja estrictam ente las cuatro reglas que u tiliza pero es un hábil y próspero 18 INTELIGENCIA EMOCIONAL CON PNL comerciante? Por eso es por lo que digo, en la definición de inteligencia, que esta trata de la habilidad consistente en la disposición a modificar nuestras conductas con miras a con seguir un objetivo. Es, por tanto, la capacidad para disponer de múltiples y variadas alternativas que nos lleven a la meta prevista. La inteligencia es algo así como el arte de gobernar y controlar la mente, y para gobernar y controlar es necesario llevar las reacciones automáticas al plano de la conciencia^ El descubrimiento reciente de que las emociones siguen un circuito diferente al de otros pensamientos para llegar al cerebro, nos apunta que muchas de las respuestas emociona les que tenemos van a ser costosas de manejar. Pero lo que sí podemos hacer es modificar la estrategia que las genera, o utilizar otra diferente. ¿Cómo podremos llevar a cabo este cambio? Aprendien do a tom ar nuestras propias decisiones. Sin embargo, para ser capaces de decidir correctamente, es necesario expandir nuestra conciencia, ya que esta es la parte de la mente donde se produce el proceso de la toma de decisiones. Son muchas las personas que creen ser conscientes por el simple hecho de sobrevivir y disfrutar. N ada más lejos de la realidad, para ser conscientes hay que tom ar conciencia de nuestra conciencia. No es suficiente con utilizar nuestros canales de percepción (visual, auditivo, kinestésico, olfativo y gustatorio), sino de enterarnos de cuándo y cómo los utili zam os, y cu á le s de e llo s ac tú an y de cóm o lo hacen . Recuerda: Ser conscientes es tener conciencia de que so mos conscientes. Sin em bargo, actualm ente no podem os hablar de una única y exclusiva manifestación de la inteligencia, como uso adecuado de la conciencia, sino que esta se muestra en dife rentes y variadas áreas; algo así como si el don de la inteli gencia se encontrase en el hom bre de hoy fragm entado y dividido en múltiples subinteligencias. Para mí, la inteligen cia sería algo así como un sistema complejo compuesto de LA INTELIGENCIA EMOCIONAL 1 9 m últiples subsistem as interactivos. En la m ayoría de los casos se aísla cada uno de esos subsistemas considerándolos elementos independientes del conjunto global, lo que lleva a una fragm entación y pérdida de efectividad holística. Tal vez, cuando hayamos alcanzado el nivel óptimo de evolución hum ana, entonces podríam os referirnos a la in teligencia como una unidad, la inteligencia unificada como una capaci dad aglutinadora de diferentes capacidades específicas que trabajan conjunta y simultáneamente. 'L a inteligencia, como la conciencia, llegan a ser manifes taciones de competencia inconsciente una vez que aprende m os a u tiliza rla s adecuadam en te . C uando el in d iv iduo adquiere la experiencia usando correctamente con disciplina, constancia y paciencia tales facultades, alcanza el grado de com petencia inconsciente en el aprendizaje, y entonces, y solo entonces, operará inteligentemente en cualquiera de las áreas. Y también podrá manejarlas consciente, cuando solici tem os una atención específica, un control o fiscalización deliberada, precisa y no reactiva. El desarrollo humano, el crecimiento mental y la evolu ción van de la mano de la conciencia — y de su hija la inteli gencia— . Para que el poder de la inteligencia actúe, no es suficiente con desearlo, es imprescindible ejercitarla, practi carla, ya que, a pesar de su fuerza, se debilita fácilm ente influida por el am biente (lugar, momento y gente), por los estados internos (emociones) y por los condicionam ientos (program aciones m entales). A unque generalm ente toda la gente está de acuerdo con la idea de que el hom bre debe desarrollarse a todos los niveles, y, por tanto, ha de cambiar, muchas veces nos damos cuenta de la necesidad del cambio cuando ya es demasiado tarde. Por todo ello es por lo que insisto que, si queremos pros perar, evolucionar, ser conscientes y alcanzar un alto índice de inteligencia — en el caso que nos ocupa, de la em ocio nal— , necesitam os salir de las rutinas y de la autom atiza ción, requiriendo para ello una autoobservación deliberada 2 0 INTELIGENCIA EMOCIONAL CON PNL que nos facilite la identificación de esas program aciones negativas1 que inundan nuestra vida. Una de las causas del estancamiento en el que se sume una gran p arte de la gente se encuen tra en el hecho de fomentar la «seudonaturalidad» — diría mejor animalidad— y la permisividad, actitudes ambas conducentes a la narcoti- zación^y división de la conciencia. Esto no es nuevo en la historia de la hum anidad, ha ocurrido siempre, y, si no se remedia, seguirá ocurriendo. No nos resultaría excesivamen te trabajoso encontrar referentes históricos respecto a las teo rías de la división de la conciencia; ya en los siglos xn y xm, en las obras de Hakim Sanai2 y R um i3, nos hablan explícita m ente de la fragmentación mental en el común de los morta les como anomalía evolutiva y los medios de que dispone el hombre para subsanarlo. En la actualidad, la teoría contemporánea de la inteligen cia múltiple se debe en cierto modo a Howard Gardner, quien recogió el testigo de un predecesor de principios del siglo xx 1 L as p rogram aciones negativas son aquellos v icios o tendencias socialm ente adm itidos que im piden el desarrollo y la evolución hum ana. L a pereza, negligencia, gula, lujuria, avaricia, culto a la im agen, ansia de poder, fam a, etc., son algunas de ellas. 2 H akim Sanai, v iv ió en la p rim era m itad del sig lo xii en Persia. G ran M aestro y m ístico , cuya o b ra E l ja rd ín am urallado de la verdad (Ed. SU FI) es una m uestra evidente del conocim ien to psico lóg ico que ten ía del hom bre y de la R ealidad . Su p rincipal enfoque se cen tra en advertirnos de la necesidad de m atar el ego, pues sin esto es im posible alcanzar otros planos del conocim iento y de la evolución. 3 M ew lana Jalaludín Rum i, nacido en 1207 y m uerto en 1273, conside rado el más celebre y reconocido de los poetas sufíes que hayan escrito en lengua persa. Ha sido sin duda un m aestro espiritual de gran trascendencia. Su libro E l M asnaw i (Ed. Dervish International, Argentina) es su obra más importante. Se trata de un amplio poem a filosófico místico,de 45.000 versos repartidos en seis volúm enes Fue el fundador de la Orden M awlawis, que desde Konya (Turquía) se extendieron por todo el planeta. El libro Fihi ma f ih i (Ediciones del Peregrino, Argentina), es un com pendio de charlas y con ferencias del M aestro de Konya para com prender su enseñanza. — Thurstone— , que a su vez bebía de fuentes mucho más antiguas. No voy a entrar aquí a discutir si lo que Gardner llama «múltiples inteligencias» no son sino habilidades o talentos, o si fuese más útil fomentar la unificación en vez de la sepa ración. Lo que nos interesa a nosotros es el hecho de que en la actualidad se habla, se escribe y se alimenta la teoría de las diferentes inteligencias, y que una de estas es la emocional. R etom ando las cuestiones que p lan teaba al inicio del tema: ¿Tiene entonces que ser em ocional la inteligencia? No, no confundamos; la inteligencia como facultad del hom bre ha de estar al servicio — y cuando digo servicio me estoy refiriendo al m anejo adecuado— de cualquier aspecto de la naturaleza humana, ya sean las emociones, las relacio nes, el estudio o lo cotidiano, todo. Indagando un poco dentro de todo ese múltiple paquete de «inteligencias» — que las escuelas psicológicas do. moda proponen— , escuchamos y leemos referencias sobre «inteli gencia práctica», esa inteligencia necesaria para resolver tareas cotidianas, que pueden ser imprecisas, imprevistasy que tienen varias soluciones; sobre «inteligencia académica», com o la capacidad de afrontar exitosam ente las pruebas y exámenes prescritos y que solo tienen una posible respuesta; sobre «inteligencia creativa», como la habilidad para afrontar y resolver eficazm ente situaciones nuevas o inesperadas; sobre «inteligencia social», como la pericia para gestionar con brillantez y desenvoltura cualquier situación social que se le presente, y sobre, cómo no, «inteligencia emocional», de la que entraremos en detalles. Y ahora profundicemos un poco en la última de las pre guntas que nos hacíam os páginas atrás: ¿Qué es eso de la inteligencia emocional? Pues bien, teniendo en cuenta todo lo dicho, podríamos definirla com o esa parte de la inteligencia que nos permite ser conscientes de las emociones: percibirlas, identificarlas, comprenderlas, manejarlas y expresarlas del modo más ade LA INTELIGENCIA EMOCIONAL 2 1 2 2 INTELIGENCIA EMOCIONAL CON PNL cuado, en función del lugar, momento y personas implicadas. Otra variante de la anterior enunciación podría ser: conjunto de habilidades que posibilitan al sujeto alcanzar un equilibrio en sus estados internos, entre las que se encontrarían el auto dominio emocional, la motivación, la perseverancia, la disci plina y la comprensión hacia los otros. Por tan to , la persona em ocionalm ente in teligen te es consciente de sí misma, vive en el aquí y el ahora, de forma que no permite que un acceso emocional destruya o altere su equilibrio. Este individuo posee una habilidad empática tal que le resulta fácil tam bién leer las em ociones ajenas; al conocerse a sí mismo y ser consciente de sí mismo, conoce a los demás. Es objetivo en la valoración de sí mismo cono ciendo sus flaquezas y fortalezas. Asume plenamente la res ponsabilidad de sus actos y mantiene su palabra con integri dad. Se esfuerza día a día por adquirir un mayor grado de excelencia personal y profesional, manteniéndose en la direc ción de sus objetivos y actuando con diligencia y precisión. Esta facultad intelectiva, cuando es desarrollada, abre las puertas de la evolución consciente; por el contrario, y no te quepa duda, de que si sigues expresando tus emociones de un modo inapropiado, lo único que harás será empeorar la situa ción. Por todo ello, merece la pena tomar en consideración y comprometidamente el trabajo de llegar a ser auténticos due ños de nuestras emociones. M aneja conscientemente tus emociones, para que ellas no te manejen a ti. Son innum erables las alteraciones que se producen en nosotros cuando nos encontramos a merced de las em ocio nes. Estas provocan cambios radicales en los estados menta les, modifican los pensamientos, los recuerdos y la imagen que tenemos de las cosas. Son los diferentes yoes o mentes — fragmentación de la consciencia— que se solapan y mez clan sus reacciones alejándonos cada vez más de la realidad objetiva. Ya dije que las emociones no siguen el mismo reco LA INTELIGENCIA EMOCIONAL 2 3 rrido dentro del sistema nervioso que la información cons ciente y razonada, así que, mientras no se doma, posee una independencia y m ayor fuerza para controlar las reacciones del individuo dominándolo por completo. Casi a diario, nos llegan trágicas noticias de alguna per sona, un adolescente, un modesto empleado, un inversionis ta, que tom a un arma y deja salir toda la furia contra sus semejantes; o de un vecino que m altrata, apalea, agrede e incluso asesina a su esposa, padre o hijos. Luego, resulta que nadie podía imaginar que esa persona — un buen alumno, un sencillo trabajador en paro, un honrado padre de familia— hubiera sido capaz de tal delito. ¿Qué ocurrió en la mente de estos seres? Es muy posible que jam ás se preocuparan de manejar correctamente sus emociones, y estallaron sin posi bilidad de intervención. Y cuando estas llegan al techo de la represión, revientan sin control, como el corcho de una bote lla de champaña cuando se la agita. Las emociones contradi cen los impulsos conscientes; ahí tenemos los ejemplos, pues si no, por qué nos molesta la actitud de ciertas personas aun sabiendo que su m ala educación no va con nosotros. Las emociones operan a escala subconsciente y están impregna das de condicionamientos de todo tipo, incluidos los genéti cos, a los que solo les importa la supervivencia. Pero en la actualidad — salvo las excepciones y el Tercer M undo— , la supervivencia está garantizada y en la m ayoría de nuestras interacciones no peligra, sin embargo, lafc emociones prim a rias surgen y se exteriorizan una y otra vez ocasionando infi nidad de trastornos relaciónales y sociales. M ientras estas em ociones prim arias sigan aflorando con tanta facilidad, poco nos diferenciamos de las bestias, y aún menos de nues tros antepasados los neandertales. •En la estructura de ordenación mental, las emociones son el sistema organizador de la mente; en el momento que inter vienen, todo queda afectado. Si la inteligencia o conciencia — como queramos llamarle— no interviene y las vigila, con ducen a la mente hacia conclusiones determinadas en fun- 2 4 INTELIGENCIA EMOCIONAL CON PNL ción a la satisfacción emocional del momento. Esto ocurre porque las emociones son programas para deliberar rápida m ente — cerebro antiguo y responsable de la superviven cia— , no cuestionan sus respuestas, dado que la aptitud es lo im portante en su organización. Uno de los elem entos de mayor importancia en el desarrollo de la inteligencia humana es su memoria, y esta se encuentra ligada fuertemente a la intensidad de nuestras emociones. Diferentes estudios reali zados avalan el hecho de que recordamos mejor las palabras o hechos que inducen a emociones que los que no lo hacen. Los traumas, por ejemplo, que quedan indeleblemente graba dos en nuestra memoria tienen su respuesta aquí. Por ejem plo, el m odelo reim printing, que usam os en PNL para resolver conflictos que tienen su origen en situa ciones traumáticas, se basa en seguir la cadena emocional que los diferentes hechos vividos, con igual contenido emo cional eslabona, llegando así al prim er recuerdo origen del trauma! Freud decía que era imposible acceder a recuerdos que no tuvieran em parejada una cierta carga em ocional. Esto no quiere decir que tengamos que experim entar trau~ mas o conm ociones em ocionales para poder m em orizar, basta con la motivación — que es una emoción— , o la res ponsabilidad — que es otra— , para que la m em oria se acti ve. A m edida que la motivación es mayor, la memorización es más fácil y duradera; cuanto más responsable es de lo que em prende una persona, tanto m ayor será su capacidad de memorizar y recordar. No es necesario llegar a situaciones de gran im pacto em ocional para beneficiarnos del uso de nuestros estados internos. Este m ecanismo tiene com o fin — siendo como es muy antiguo— mantenernos en estado de alerta ante-situaciones de sim ilar naturaleza que pudieran presentarse. Así se estructuró en nuestros antepasados para prever las situaciones de riesgo y am enaza que podían poner en peligro la vida. Es fácil observar que las emociones más fuertes suelen ser de tipo negativo — miedo, ira, alarma, etc.— , y la razón LA INTELIGENCIA EMOCIONAL i 2 5 es que están destinadas a proveernos de señales que nos ase guren la conservación, como individuos y como especie. Por el contrarío, las em ociones positivas suelen ser de m enor intensidad y de m enor tiempo de duración, ya que su adver tencia es de que todo marcha bien, y eso no afecta significati vamente a la supervivencia. Podemos afirmar, entonces, que las emociones son como circuitos impresos, estrategias que organizan, en cierto modo y para muchos fines, nuestra mente, f La mayoría de las personas han comprobado alguna vez en su vida que cuando las emociones son demasiado intensas producen todo tipo de distorsiones mentales: interfieren, blo quean, confunden, dificultany subjetivizan completamente la realidad. Un empleado puede ponerse excesivamente ner vioso ante la presencia de su jefe y com eter muchos más errores que de costum bre; una persona puede sentir tanto miedo infundado, que le impida salir a la calle; un individuo celoso creerá ver situaciones provocadoras donde no las hay y responder irracionalmente ante su pareja. No creamos que todo en las emociones es contraprodu cente; los procesos mentales, como yo los planteo, aunque parten de nuestra identidad4, se organizan en torno a valores que se encuentran ligados a em ociones — cómo querem os que sean las cosas— . Estas aspiraciones o deseos son algo así como los valores vitales: tener hijos, vivir en el campo, desarrollarse com o persona, servir al prójim o, ser rico o famoso, etc. Es el sentido de la vida, una fuerte motivación que nos empuja a seguir hacia delante. La emoción o desemo ción que produce nos induce a aproximamos o alejamos de ese objetivo vital y es lo que nos mantiene firmes en la lucha o lo que nos arroja al abandono. Las emociones — con frecuencia a pesar nuestro— jue gan un papel crucial en nuestra vida. Muchas veces estalla 4 C onsiderando esta com o el conjunto de valores y creencias de una persona. 2 6 INTELIGENCIA EMOCIONAL CON PNL mos en arrebatos de ira, aunque luego nos lamentamos; grita mos como energúmenos y más tarde nos disculpamos; nos tensamos y agitamos enrojecidos, cuando lo que deseamos es perm anecer tranquilos y relajados; al prim er contratiempo nos desmotivamos y abandonamos los proyectos. Las emo ciones están ahí, queram os o no, entroncadas en nuestro cerebro lím bico, y, en consecuencia, actuando sin control sobre nuestra vida según su criterio primitivo — o animal— , si no intervenimos sobre ellas. Aquí es donde ha de entrar en juego la inteligencia emocional. Nuestra evolución cerebral nos ha permitido llegar a poseer dispositivos lo suficiente mente poderosos para alcanzar el equilibrio, para incremen tar nuestras capacidades, para perm anecer ecuánim es ante los avatares de la vida y, en consecuencia, para mantener o recuperar nuestra salud total. Las emociones son como seña les que nos avisan, de nosotros depende el uso que hagamos de ellas. Si llegas a ser dueño de tus dispositivos cerebrales, podrás alzarte al punto de desees. La herramienta más poderosa de que dispones para ello es la autoobservación, ese proceso consciente que consiste en ubicamos en segunda y en tercera posición perceptiva5, tal y como si nos viéramos desde los ojos de otra persona. Las posi ciones perceptivas o perspectivas mentales son las diferentes formas de analizar, experimentar o vivir cualquier experiencia presente, recuerdo del pasado o proyecto futuro. Se trata de la opción, que cada uno de los seres humanos tiene, para poder s itu arse en los espacios m en tales m ás idóneos en cada momentoJBstas diferentes perspectivas mentales son impres cindibles para comprender correctamente las relaciones inter personales, para damos cuenta que los otros también tienen su «razón», que es tan buena como la nuestra, y que nosotros no somos tan «maravillosos como creemos», y así nos abren las 5 Para m ás inform ación sobre las técnicas, véase el capítulo x i del libro, donde se estudia am pliam ente el tem a de las posiciones perceptivas. LA INTELIGENCIA EMOCIONAL 27 I puertas de la flexibilidad y de la comprensión. Son apasionan tes estas capacidades que tenem os los seres hum anos de poder colocamos en la segunda y, especialmente, en tercera posición perceptiva frente a nuestro propio «yo», ante los «otros», y frente a la situación o contexto en el que se desa rrolla la acción. Esta facultad de autoobservación y compren sión del prójimo nos habilita el camino que conduce al pro pósito de la revisión de las respuestas emocionales, que nos serv irá de base para posteriores e im portan tes cam bios. Cuando alcanzamos a vernos objetivamente (3.a) o desde los «zapatos ajenos» (2.a), comprendemos cómo afecta nuestra actitud a los demás, y la ineficacia o inutilidad de la mayoría de flu jos em ociona les in co n sc ien tes, y este es un paso imprescindible para la transformación, puesto que si no nos dam os cuenta, difícilm ente m odificarem os lo que no nos sirve o perjudica. * En cualquier instante puedes desarrollar o practicar estas capacidades, y especialmente la de observación objetiva6 — la tercera posición— : percatándote de tu postura corporal, de tus propios pensamientos, viéndote cómo caminas, te mueves, hablas, cómo sostienes este libro, cuáles son los mecanismos que utilizas para pensar lo que estás pensando ahora mismo... y todo ello observándolo cómo si fueses un observador ajeno a ti mismo. Esta es una de las facultades que nos distingue de los animales, al permitirnos disociarnos de tal m anera que podamos ser espectadores de todo lo que hacemos. 5 V éanse los e jercicios que para desarro llar e sta habilidad vienen descritos en el capítulo citado en la nota anterior. II Dinámica cerebral Es el cerebro quien forma parte del mundo material, y no el mundo material quien forma parte del cerebro. H e n r i B e r g s o n A u n q u e n o s e a del todo necesario saber de m ecánica para manejar un coche, no cabe duda de que si tenem os algunas nociones, aun siendo e lementales, cualquier avería nos resultará subsana- ble, o al menos sabremos a qué tipo de taller llevar el vehícu lo; no es lo mismo un fallo del sistem a eléctrico, que una rotura del em brague. Con el trabajo que nos ocupa ocurre algo similar; no necesitamos conocer fisiología cerebral, ni neurología, para llegar a ser dueños de nuestras opciones emocionales, pero siempre será mejor tener algunas nociones de los mecanismos que actúan para desencadenar los estados internos, no confundiendo la función orgánica con los proce sos mentales. Quien no esté interesado en la fisiología cerebral puede muy bien prescindir de este capítulo e ir directam ente al siguiente. 3 0 INTELIGENCIA EMOCIONAL CON PNL Con toda seguridad, en más de una ocasión habrás oído o leído que el cerebro controla el cuerpo. Esta es una frase bien sabida por todos, pero ciertamente mal utilizada. M uy pocas personas conocen los mecanismos de funcionamiento de la m áquina m ás poderosa que posee el hom bre. D igo muy pocas, porque incluso la mayoría de los especialistas en temas neurobiológicos y psicológicos no llegan a manejar, holística- mente, la dimensión del sistema cerebral. Esto, y no deja de ser una opinión personal, es debido a que los árboles impiden ver el bosque. Las ciencias actuales parecen obsesionadas con el estudio de los componentes orgánicos, olvidándose con frecuencia de lo que realmente es importante: el cómo funcionan las cosas. Por supuesto que es importante conocer las piezas que forman una máquina, ya que en el caso de que haya una avería sabre mos cuál sustituir, pero ¿de qué nos sirve todo ello si desco nocemos la utilidad del artefacto? Se supone que las llamadas ciencias de la mente — léase psicología— deberían cumplir tal función, y, sin embargo, nos encontramos que dan muy pocas — por no decir ninguna— respuestas a la operativa que rigen nuestras funciones mentales. En el mejor de los casos, nos muestran exposiciones estadísticas con sus conclusiones, o experimentos de laboratorio con ratas, donde, como sabe mos, cada uno encuentra lo que busca. Además, ¿qué simili tud existe entre una rata y nosotros? Existe una curiosa anéc dota que viene muy bien para ilustrar estas previas afirmacio nes. En cierta ocasión un seudoerudito e investigador de un perdido pueblo del H im alaya viajó a Europa a realizar un estudio de los rituales religiosos que m ayoritariam ente se siguen en Occidente. Al regresar a su comunidad estas fueron sus conclusiones «científicas»: «Indudablemente, las gentes europeas son fervientes creyentes. Semanalmente, incluso en ocasiones variasveces en semana, acuden a sus templos. En todas las ciudades existen varios, algunos suntuosos y otros humildes, y algunos son de tal dimensión que pueden reunirse hasta setenta u ochenta mil fieles quienes incluso se desplazan DINÁMICA CEREBRAL 3 1 cientos de kilómetros solamente para asistir al culto. La cere monia que allí celebran es altamente misteriosa y esotérica: una vez aposentados los asistentes, encienden las luces que iluminan el atrio tapizado de verde destinado al ritual, veinti dós oficiantes y tres maestros de ceremonia salen en proce sión ataviados de trajes multicolor; a partir de ese momento danzan y danzan frenéticamente sin parar durante dos perio dos al son de una flauta de una sola nota. El ceremonial debe tener tal trascendencia y misticismo, que los feligreses caen en frecuentes trances en los que emiten profundos gritos, unas veces de dolor y otras de alegría, los cánticos rituales también se suceden sin interrupción. Muchos de los asistentes son tan devotos que portan estandartes con alabanzas y agradecimien tos, y también se atavían con los mismos colores que portan los oficiantes. Cuando finaliza la ceremonia, todo el mundo, henchido de fervor, se retira a sus casas hasta la siguiente semana». M uy rápidamente olvidamos que el mapa no es el territo rio, o mejor dicho, con qué impunidad pretenden imponemos como territorio los mapas personales. U na de las premisas básicas en el estudio de las técnicas de Programación Neuro- Lingüística en su vertiente Sistémica es la de procurar crear en los estudiosos de esta materia una completa visión de con junto, ya que somos inevitablemente un sistema dentro de sis temas cada vez mayores. Desde la organización del medio atómico molecular, hasta el gobierno humano completo como ser vivo, vam os integrando sistemas dentro de sistemas, y todos ellos están interrelacionados e interafectados. Como ya dijera Hermes Trismegisto hace ya más de 3.000 años: Como es arriba es abajo, lo de dentro es igual a lo defuera. En el estudio de la PNL, al igual que con el modelo de perfeccionamiento de la inteligencia emocional y su adecua do uso, considero importante — aunque no necesario— una aproxim ación a los m ecanism os elem entales de funciona miento cerebral en el ámbito fisiológico, de modo que poda mos los neófitos en la materia tener una mejor comprensión 3 2 INTELIGENCIA EMOCIONAL CON PNL de los procesos operativos de las técnicas que estudiaremos. Aunque bien es sabido que nosotros nos caracterizamos por ser experimentadores mucho antes que teóricos, buscamos el cómo sin importarnos en la mayoría de los casos el porqué. Hacemos bueno el dicho oriental de: Información sin expe riencia es igual que un asno cargado de libros. Poco a poco, a través de las explicaciones y comentarios que realizaré a lo largo de todo el libro, podremos perfilar cada vez m ás la d inám ica in te rac tiv a del traba jo y sus influencias en las diferentes áreas del organismo vivo y del ser humano como globalidad personal y transpersonal. Pero antes de continuar con la parte que nos atañe res pecto al desarrollo y dominio de esa inteligencia emocional, es conveniente, aunque sea de form a muy sim plificada ya que para nuestro fin poca importancia tiene, respondernos a la pregunta de: ¿CÓMO FUNCIONA NUESTRO CEREBRO? El cerebro humano es el órgano más complejo de los que posee el ser humano. Tan sumamente complicado en su fun cionamiento, que en los albores del siglo xxi que estamos solo nos hem os aproxim ado un poco a los elem entos que desarrolla en sus procesos de funcionam iento. En muchas ocasiones se le ha comparado con un ordenador, pero esto no es más que una metáfora, un símil de los muchos que usamos cuando no conocemos bien algo. La m ayoría de las defini ciones que realizam os son m eras aproxim aciones de sus desempeños o dispositivos, por ejemplo: que el cerebro está formado por neuronas y estas están conectadas entre sí esta bleciendo una especie de programas automáticos capaces de ordenar y controlar las conductas m ecánicas precisas para realizar todo tipo de acciones. Esta definición, como ya decía anteriormente, es solamente una alegoría, una imagen. Y no olvidemos, pues, que toda metáfora tiene sus propias limita DINÁMICA CEREBRAL 3 3 ciones. Sin duda, tú puedes cambiar el programa del ordena dor cuando deja de serte útil. Te es suficiente con introducir un disquete ,con un nuevo programa y elim inar el anterior. Pero ¿verdad que no puedes hacer lo mismo con sus conduc tas indeseables o con los recuerdos no gratos? A pesar de todo, y en cierta medida, sí es posible, aunque casi nunca en el plano consciente. Es una parte de nuestro propio cerebro la que se encarga de ello, es el sistema límbico. No obstante, hay ciertos estados o conflictos internos que presentan mayor dificultad en la eliminación; pongo por ejemplo una fobia o un trauma infantil. A hí comienza la complejidad, ¿qué es lo que hace que esos tipos de experiencias no puedan ser trans formadas por nuestro cerebro o, al menos, no en todos los casos? En las paginas siguientes, y dentro de los com plejos mecanismos, intentaremos — sin ánimo de ser pretenciosos e ilusos— dar ciertas claves de cómo nosotros consideramos la dinámica cerebral. Para ello, haremos una pequeña incursión inicial en lo que se conoce de los recientes descubrimientos respecto al funcionamiento de este complejo órgano. Antes de nada, quiero que quede muy claro para todos los lectores — a fin de unificar los términos de referencia— la diferencia que para nosotros existe en ciertos conceptos, que muy a menudo se confunden al tratar temas relacionados con el cerebro y sus funciones. Cerebro: Parte superior y anterior del encéfalo. Aunque en muchas ocasiones, cuando hablamos de él, nos estamos refiriendo al órgano completo. Encéfalo: Gran centro nervioso contenido en el cráneo y que comprende el cerebro, el cerebelo y la médula oblonda o bulbo. Este sería el vocablo correcto para nombrar a todo el conjunto de órganos que albergamos en el cráneo y que cum plen múltiples funciones. Mente: Facultad hum ana relacionada con la inteligencia o entendimiento, se asocia con una de las muchas funciones que tiene el cerebro, aunque esto no se puede asegurar. Es 3 4 INTELIGENCIA EMOCIONAL CON PNL importantísimo no confundir la función con el órgano, ya que podrían existir la una sin el otro, y viceversa. La Antropología nos cuenta que hace aproximadamente unos cuatro m illones de años surgió el prim er hom ínido parecido al hombre actual. Poco se distinguía en aquel enton ces de sus congéneres los animales más próximos, y como ellos se comportaban, depredando y defendiéndose como los demás. Lo que lo fue diferenciando poco a poco del resto de los animales era su capacidad para construirse herramientas y armas que le permitieran m ejorar su potencial de caza y pro tección. En la actualidad el hombre se diferencia totalmente del resto de las especies. ¿Qué es lo que obró para que solo fuese el hombre capaz de esta mutación? La respuesta a la pregunta aún hoy sigue sin contestación, o al m enos no tiene una que satisfaga a todos. Por ello nos surge otra cuestión: ¿Acaso el hombre estaba equipado en su cerebro de algo diferente que le permi tiera ser capaz de este desarrollo singular? Aquí hemos de contestar que, ciertamente, sí. E l hom bre está dotado de in teligencia, im aginación, capacidad organizativa y de lenguaje muy elaborado con el que ha ido desarrollando complejos sistemas de leyes, reli giosos, científicos y filosóficos. H a sido capaz de generar entramados de creencias que le permiten estructurarse social mente y de establecer complicados dispositivos de relaciones hum anas, e incluso con el horizonte espiritual. Todo ello DINÁMICA CEREBRAL 3 5 m erced a esa cualidad especial de la que hemos sido conferi dos y que nos dista del resto de los animales. En este apartadodel presente trabajo pretendo solamente una superficial aproximación — puesto que no soy especia lista en la materia— a las complejas disposiciones e interco nexiones neurológicas y orgánicas, y poner al descubierto cóm o operan — según el conocim iento actual— . También veremos, y aportaré nuestra hipótesis, qué pasos son los que siguen, desde nuestro cerebro hasta su manifestación explí cita y tangible de las que somos capaces de ejecutar los seres humanos. El sistema nervioso humano Dentro de la neurobiología — la ciencia que estudia el sistem a nervioso hum ano— , aunque posea una tecnología muy avanzada, la m ayoría de sus conocim ientos son muy antiguos. Tanto la arqueología como la antropología nos han evidenciado que ya desde la época faraónica, o incluso antes, se realizaban importantes intervenciones craneoencefálicas. Posteriormente, en las culturas maya e inca también se con sumaban trepanaciones de cerebro, que cumplían diferentes funciones tanto religiosas como ornamentales o terapéuticas. Es probable, y así lo dem uestran códices, je ro g lífico s y petroglifos — aparte de la traumatología— , que de las cien cias médicas, la más investigadas por nuestros antepasados haya sido la relativa al cerebro. No obstante, los descubri m ientos más significativos son muy recientes, apenas un siglo, y hoy en día se siguen produciendo importantes avan ces en esta nueva especialidad. Pero no teman mis amigos lectores, ya que para nuestros m odestos fines no entrarem os en las oscuras y com plejas profundidades de las estructuras orgánicas, sino tan solo proporcionaré unos apuntes que puedan servir de resumen o cuadro sinóptico. 3 6 INTELIGENCIA EMOCIONAL CON PNL 1 El sistema nervioso está formado por los nervios, cordo nes cilindricos que unen los centros nerviosos de los órga nos donde finalizan y de los que reciben y transm iten la información. Los nervios están compuestos de una especie de h ilo e léc trico : las neuronas co nectadas en tre sí por ensamblajes, llamados sinopsis. En su conjunto, vendría a ser algo así com o el sistem a de com unicación com puesto por todas las neuronas de los sistemas nerviosos periféricos y central, y que usan como medio de trasmisión elementos electroquímicos. Esquema de un grupo de neuronas El Sistema Nervioso Central (SNC) está compuesto por el cerebro y la médula espinal. E l Sistema Nervioso Periférico (SNP) lo form a toda la compleja red de neuronas sensoriales y motoras que, partien do del sistema nervioso central, llegan a todo el cuerpo. Las neuronas — que podríamos denominar como unida des básicas moleculares del sistema— están formadas, como DINÁMICA CEREBRAL 3 7 otras células, por el núcleo, nucléolo, citoplasma y las pro longaciones, llamadas dendritas y un axón. Las dendritas son ramificaciones múltiples y cortas, m ientras que el axón es largo y recubierto en ocasiones de una especie de funda pro tectora de mielina. Los impulsos que transitan por las neuro nas se desplazan a m ayor velocidad que la de la luz, y son de naturaleza similar a la eléctrica. Las neuronas sensoriales son las que transmiten la infor mación recogida por los órganos de percepción hasta el siste m a nervioso central. Las motoras son las que transmiten la información desde el sistema nervioso central hasta las glán dulas y los músculos del sistema motor. A las conexiones entre neuronas, o entre estas y otros órganos, se les llam a sinapsis. Estos enlaces son los encar gados de conducir el flujo eléctrico transportado por una dendrita o un axón para que se produzca la señal o su inhibi ción, que es transformada, o, m ejor dicho, recibida en ese extremo por ciertas sustancias bioquímicas existentes en ese lugar, que se llam an neurotransmisores. En ese punto, los im pulsos eléctricos enviados por la neurona em isora son recibidos, organizados y sustituidos por la química — neuro transmisores— ; a este proceso de transformación de energía eléctrica en quím ica se lo denomina transducción. El tiempo que un impulso nervioso necesita para recorrer un axón es de aproximadamente 1 milisegundo, y el que necesita para rea lizar las neuro transm isiones de 50 m ilisegundos. La transducción es el momento en el que la información mental es transferida al cuerpo. G enéricam ente, a los neurotransm isores se les conoce tam bién como m oléculas m ensajeras o m ensajeras prim a rias, algunas de estas son muy conocidas e intervienen en la m ayoría de nuestros estados internos o emociones más fre cuentes (la adrenalina, cortisol, dopamina, endorfina, etc.). En el gráfico que viene a continuación puedes ver un esquema de sinapsis y los puntos en los que se lleva a cabo la transducción de impulso eléctrico a química orgánica. 3 8 INTELIGENCIA EMOCIONAL CON PNL El sistema nervioso periférico lo com ponen otros dos subsistem as, que son el sistem a nervioso esquelético y el autónomo. El primero controla los movimientos voluntarios de los músculos esqueléticos, es decir, de los responsables del movimiento consciente. El segundo controla las glándu las y musculatura interna, y aunque actúa inconscientemente, podemos provocar conscientemente también sus movimien tos. Este últim o sistem a está dividido a su vez en sistema nervioso simpático y parasimpático ; el simpático actúa como excitante para la acción, y el parasimpático como relajante de la misma. DINÁMICA CEREBRAL 3 9 Sistem a nervioso esquelético o somático Nervios espinales A ferentes de órganos sensoriales E ferentes a los músculos Nervios craneales A ferentes de órganos sensoriales Eferentes a los músculos Sim pático' Torácico Lumbar S is t e m a n e rv io s o p e rifé r ic o (k Sistem a nervioso autónom o Rama simpática Nervios espinales (tórax y lumbares) Ganglios simpáticos Rama paraslm pática Nervios craneales Nervios espinales (región sacra) Ganglios parasimpóticos Parasimpático Craneal Sacro El sistema nervioso central El encéfalo está formado por tres áreas: prosencéfalo, m esencéfalo y rom bencéfalo . E l p rosencéfa lo rodea los ventrículos laterales y el tercer ventrículo, y lo com ponen el telencéfalo y diencéfalo. El telencéfalo alberga la corteza cerebral, el sistem a límbico y los ganglios básales. La cor teza cerebral se organiza en lóbulo frontal, parietal, tem po ral y occipital. La hendidura central separa el lóbulo frontal en dos paites, este está especializado en el control de los movimientos y su planificación, m ientras que los restantes lóbulos tienen que ver con la percepción sensorial y el aprendizaje. El sistem a límbico, como veremos más adelan te, y que incluye la corteza lím bica , el h ipotálam o y la am ígdala (o alm endra), es el responsable de los procesos emocionales, y tam bién está relacionado con el aprendizaje y la memoria. Los ganglios básales participan en la gestión 4 0 INTELIGENCIA EMOCIONAL CON PNL del movimiento. El diencéfalo lo forman el tálamo — inter cam bia inform ación con el córtex— y el hipotálam o, que controla el sistem a endocrino y m odula cierto tipo de com portam ientos. El m esoencéfalo lo forman el tectum y el teg- mentum, relacionados con las funciones auditivas y visua les y el sueño, respectivam ente. El rom bocéfalo lo forman el cerebelo, la protuberancia y el bulbo raquídeo. La m édu la espinal es algo así com o la .gran vía inform ativa por la que fluye las com unicaciones en tre el sistem a nervioso periférico y el cerebro. Inseparablemente conectado con todo el sistema nervio so se encuentra el sistema endocrino y las correspondientes glándulas endocrinas generadoras de horm onas, y que se podría considerar como la segunda autopista de información orgánica, siendo garante de ciertos e importantes tipos de DINÁMICA CEREBRAL 4 1 comunicación. Una de las glándulas de m ayor importancia es la pituitaria, situada en la base del cerebro y bajo el con trol del hipotálamo, influye en ciertomodo al resto de las glándulas del sistema. Como ya hemos visto, el bulbo raquídeo es la termina ción de la m édula espinal que entra en el cerebro, conduce la información nerviosa de todo el cuerpo hasta el cerebro a través del tálamo que vigila algunas de las funciones vitales del hom bre, com o el ritm o card iaco , la resp iración , los ciclos de sueño, el hambre y la sed. El hipotálamo , junto al anterior, es el gran subsidiario de la transducción general de la comunicación entre la mente y el cuerpo a través del sis tema hipotalámico-hipofisárico que actúa vía SNA, sistema endocrino e inmunológico. De algún modo, se puede decir que es de quien depende la m ayor parte de los programas innatos. El cerebelo, dentro de la com pleja estructura cerebral, coordina los movimientos de nuestros músculos, facilita la 4 2 INTELIGENCIA EMOCIONAL CON PNL ejecución de los movimientos complejos con una total sin cronización. Podemos considerarlo como el registro de los ap rend izajes conductuales, ya que, una vez adquirida la com petencia consciente, es quien ejecuta las conductas de com petencia inconscien te . N uestro cerebro se encuentra divido en dos hem isferios conectados entre sí por una red de fibras nerviosas denominado cuerpo calloso. Ambos hem is ferios — llamados derecho e izquierdo— son prácticamente sim étricos y poseen funciones claramente diferenciadas. Nuestras hipótesis del funcionamiento cerebral Ateniéndonos al estudio que nos ocupa, sabemos que el hom bre utiliza su cerebro y su com pleja red neural como feedback al ambiente, es decir, para responder en el medio en el que se desenvuelve. U na de las funciones, tal vez la princi pal, es la de buscar y establecer el equilibrio orgánico. En el ser hum ano ese equilibrio equivale a salud, y a ciertos esta dos em ocionales tales com o la tranquilidad, serenidad, paz, sosiego, etc. La naturaleza nos ha dotado de los adecuados sistemas orgánicos que permiten actuar para reestablecer el equilibrio. Hay grupos de neuronas especializados en detectar las varia ciones del entorno y transm itir estos cambios — que les lle gan a través de los órganos sensoriales— a los sistemas res ponsables de responder a las mismas. También hay neuronas que velan por el equilibrio psicoquímico del interior (home- ostasis) y que nosotros lo traducimos en deseo de paliar las necesidades orgánicas básicas: ham bre, sed, necesidad de evacuar, etc. Una vez que cualquiera de estas dos informa ciones suministradas llega a su destino, el cerebro transmite las órdenes correspondientes a las cadenas musculares o a los órganos correspondientes para responder al aviso y restable cer el equilibrio. Como ya dijimos, el cerebro humano es el DINÁMICA CEREBRAL 4 3 órgano más evolucionado de la creación — si no se demues tra lo contrario— , el único de entre los seres vivos capaz de unir trozos de información procedente de sus percepciones sensoriales, y gracias a la capacidad asociativa de su corteza cerebral, desarrollar estrategias operativas y de pensamiento para elaborar conceptos y abstracciones, pudiendo valorar, construir objetos y manejar mecanismos complejos más allá del adiestramiento conductual — propio de los animales— o de las respuestas innatas — comunes también a las plantas. Podríamos afirmar, como hecho curioso en la naturaleza humana, que somos algo así como la recapitulación o el com pendio de la evolución de las especies. Ello se debe a que poseemos una estructura cerebral triple, o lo que sería igual, tenemos tres cerebros muy diferentes en su funcionamiento, teniendo que trabajar unidos y comunicarse entre ellos. Estos tres cerebros, según investigaciones difundidas y aceptadas a partir de la mitad del siglo pasado, serían: un cerebro prim iti vo, el más antiguo, tal y como el órgano original sobre el que evolucionó el resto. Podría equipararse al que poseen los rep tiles, los peces y otras especies inferiores. El segundo cerebro, el antiguo, siguiente en la escala darviniana, heredado de los primeros mamíferos, y que posiblemente entrara en acción a finales del M esozoico — hará entre 141 y 38 m illones de años— . El tercer cerebro, o reciente, similar al de muchos mamíferos actuales, pero algo más evolucionado, gracias a su corteza cerebral y al lóbulo frontal con sus características. Aunque esta distinción no sea del todo científica, a nosotros nos resulta útil y simplificadora para identificar y aglutinar los diferentes desempeños cerebrales y sus áreas com prom e tidas. ° Lo que llamamos cerebro primitivo o reptilíneo — por su similitud con el de los reptiles— lo compondrían el bulbo raquídeo, la protuberancia y el mesoencéfalo. Parece ser que este grupo orgánico archiva las tácticas de supervivencia tanto individual como de especie, planes estos que no se alte ran ni modifican. Esta parte registra las estrategias y progra 4 4 INTELIGENCIA EMOCIONAL CON PNL mas de vida tanto innatas como aprendidas. Los recuerdos aquí archivados son únicamente los del momento que vive. Este cerebro responde de form a refleja en situaciones de estrés y de peligro inminente. Una parte muy importante del 93 % del lenguaje no verbal procede de este tipo de respues tas automáticas. Al m anejar programas muy primitivos, no sabe cómo realizar los cambios, ni cómo hacer frente a las situaciones nuevas. El cerebro reptilíneo es la sede de cinco conductas huma n as7 básicas: • Ejecutar actos reflejos. • Construir y llevar a efecto las estrategias de evitación, huida y ataque. • Imitación de modelos. • Comportamientos compulsivos. • Realización de rutinas. Cerebro límbico o antiguo , y todo el sistema límbico en su conjunto, permiten en el hombre una mejor adaptación a las fluctuaciones del entorno, a atender mejor las necesidades del momento. Permite, con la ayuda del lóbulo frontal, que es su pro longación, que nos adaptem os m ejor socialm ente. Podría ser — según aseveran algunos teóricos— el lugar donde archivamos las estrategias de nivel superior, como son las creencias y valores que están directamente conectados con el desarrollo emocional. Es una especie de filtro selecciona- dor de la información que llega al córtex. Una de sus preben das más conocidas es la emocional, ya que es donde — parece ser— orgánicam ente se desencadenan. Fundam entalm ente opera dicotómicamente, dividiendo los hechos o experiencias en agrado — atracción— y desagrado — rechazo— . Todos los 7 Según los investigadores P. D. M acLean y R. Guyot. DINÁMICA CEREBRAL 4 5 aspectos de la actividad humana relacionados con las emocio nes tienen su sede en el sistema límbico: pasiones, motiva ción, bases de la personalidad, atención, etc. Sus mecanismos de comprensión son totalmente analógicos y, por tanto, los argumentos verbales carecen de validez para él. Ambos cerebros descritos, el límbico y el primitivo, están conectados, y com binan y m ezclan inform ación interior y exterior. Para el uno y el otro, lo que se imagina tiene tanto valor como un hecho real, lo que explica que una emoción fuerte bloquee la razón y la comprensión. El cerebro m ás evolucionado es el córtex, o cerebro m am ífero reciente, que tam bién com partim os con algunas especies animales, aunque lo que nos diferencia de estos es el m ayor perfeccionamiento del lóbulo frontal. Lo que esen cialmente aporta este último cerebro es la capacidad de razo nam iento, análisis, creatividad, intuición, lenguaje verbal, conciencia y, por tanto, capacidad de elección. Este cerebro no responde a los estados emocionales, por lo que se le con sidera como frío y calculador. 4 6 INTELIGENCIA EMOCIONAL CON PNL Cuando el ser humano llega a unificar los tres cerebros y los utiliza de forma secuencial y simultánea, le permite reali zar dos acciones esenciales: • Intervenir sobre el entorno en respuesta a los estímu los del m edio exterior tales como las variaciones de temperatura, luminosidad,volumen del sonido, varia ciones mecánicas, químicas, electrostáticas, etc., inten tando paliar del m ejor modo posible las deficiencias detectadas. • Procurar un estado de bienestar al organism o que le corresponde, obteniéndolo por el equilibrio del medio interno, llamado homeóstasis. Busca identificar aque llo que le ocasiona incomodidad o displacer, tratando de suplir y hacer frente a la alteración con el fin de recuperar el estado de armonía y bienestar. Además de este conjunto de acciones, la coordinación tricerebral permite: Adquirir una imagen interior y exterior, para: • Crear objetos y conceptos. • Memorización de experiencias y estrategias de apren dizaje, de decisión, organización, etc. • Creación de estructuras imaginarias. • C onstrucción del «sí mismo», autoim agen o afirm a ción del yo. • Equilibrio y objetividad ante los deseos de satisfacción o recompensa, y de venganza o de castigo. El mecanismo básico y primitivo de deseo de satisfacción provoca la repetición de todas aquellas acciones gratificantes para el individuo, y se consolida formando un circuito de cone xiones neuronales. Por otra parte, el deseo de venganza, recha zo o castigo funciona de forma inversa al anterior. Estas expe- DINÁMICA CEREBRAL 4 7 riendas son memorizadas como comprometedoras del equili brio interno, y en consecuencia son evitadas. Si la acción, el combate o la huida, incluido lo imaginado, es imposible, entra en funcionamiento el sistema inhibitorio de la acción. Conducta Esquema de la organización cerebral Para que exista una acreditada inteligencia emocional, o, lo que sería lo mismo, para utilizar perspicaz y humanamente las emociones, y poder diferenciarnos así de los animales, el cerebro reptilíneo, el límbico y el córtex deben trabajar en sintonía. Esto acontece en el momento que hacemos cons cientes y reflexivas las sacudidas emocionales, requiriendo para que esto ocurra un conocimiento de las estructuras inter nas que subyacen en la identificación de una emoción especí fica. Una vez determinada la emoción, y haciendo explícitas sus estrategias — o programas neurolingüísticos— , seremos capaces de transformar una expresión inútil o contraprodu cente en algo útil y eficaz. Solo las personas superficiales necesitan años para verse libres de una emoción. Un hom bre dueño de sí mismo puede poner término a un dolor con la misma facilidad que puede inventar un placer. O s c a r W il d e 4 8 INTELIGENCIA EMOCIONAL CON PNL Estas palabras previas de Oscar Wilde nos dan un toque de atención para que reflexionemos a cerca de nuestra res ponsabilidad en el manejo de los estados emocionales. M ucha gente, aquellas personas superficiales, estúpidas o trastornadas psíquicam ente, afirm a que no puede controlar sus em ociones, que los demás son los responsables de sus alterados estados de ánimo, que son así porque así los hizo la Naturaleza, y que nunca podrán cambiar. Este tipo de indivi duos son los condenados al fracaso, a la m arginación o el abandono. ¿Qué ocurre cuando nos encontramos ante alguien descontrolado em ocionalm ente, histérico, desequilibrado? ¿Cómo nos sentimos ante la presencia de aquellos que gritan desaforadam ente o se enfurecen por no conseguir lo que aspiran en el momento que lo pretenden? Todas esas reaccio nes de animalidad denotan el arcaico estado de sus portado res. Aunque en m enor m edida a la generalidad hum ana le sucede algo parecido. No llegan a tales extrem os, pero se encuentran subyugados por los vaivenes y caprichos de sus em ociones — no tan desorbitadas com o las anteriorm ente descritas— , pero que se les avientan al dominio consciente. Cómo nos explicamos si no, los cambios de hum or provoca dos por ciertas situaciones: esos enfados reprimidos, envidas, ataques sutiles de celos, depresiones, ansiedades, frustracio nes, desengaños, aburrimientos, etc. Tal vez a ti no te sobre venga de form a dramatizada, pero no olvidemos nunca que las em ociones son el com bustible de nuestras acciones, lo que ocurre es que en ocasiones el carburante se quema inútil m ente, en otras la propia ignisción es la que controla a la máquina, y en muchas otras intoxica al conductor. Lo que vamos a aprender en este libro es a ser dueños de nuestras opciones em ocionales, a conducir nuestra propia vida, a desarrollar una auténtica y genuina inteligencia emo cional, a evitar que se desencadenen estados internos de negatividad e ineficacia, y conseguir con ello ser más felices, vivir una existencia plena y rica de experiencias genuinas y variadas. DINÁMICA CEREBRAL 4 9 Los últimos descubrimientos de la biología y la neuro- biología han sido tan fascinantes que poco a poco nos esta mos acercando al conocimiento de nuestras enormes capaci dades. El ser hum ano dispone de los recursos personales internos para llevar a cabo cualquier perm uta que desee hacer en su vida, en su mente y, por supuesto, con sus em o ciones. Aunque aún es posible que tan solo estemos utilizan do el 10 % de nuestro potencial, y, como decía Albert Eins- tein, ese 10 % en el caso de los genios. El doctor Robert E. O rnste in8 afirm a que los cambios evolutivos sufridos en el hombre desde el Neardenthal hasta la fecha de hoy han sido mínimos, estos son los que nos dife rencian de los animales, y en el estado presente de la hum a nidad — salvo raras excepciones— , nuestra distancia de los simios es bastante escasa, por lo que es muy posible que para proseguir nuestro proceso evolutivo tengamos que dar más de un paso en la dirección de ser dueños de nuestros estados y procesos internos. Sabemos que una de las leyes de la Naturaleza que está presente en todos nosotros, es la de autoconservación, que funciona en el organismo humano cuando no interceptamos su flujo natural. También sabemos que el organismo repone diariamente los entre 250.000 y 750.000 millones de células que mueren en nuestro cuerpo. Por ejemplo: los glóbulos blancos se renuevan cada diez días aproxim adam ente; la constitución celular del páncreas se reem plaza cada veinti cuatro horas; las proteínas del cerebro, en su 95 %, lo hacen alrededor de cada 28 días. C onocem os que la capacidad reparadora del organismo es sorprendente. Hay mecanismos enzimáticos que son capaces de reparar cadenas enteras de ADN, reproduciendo las partes dañadas. Pero de todas las capacidades regenerativas del ser humano, la más significati 8 Véanse las publicaciones de este autor: P sicología de la Conciencia, Editorial Edaf, y La evolución de la conciencia, EM ECE. 5 0 INTELIGENCIA EMOCIONAL CON PNL va es la reproducción. En este caso, en lugar de sustituir par tes se realiza una especie de «superreparación», algo así como reemplazar el organismo en su totalidad. El organismo sabe que no vivirá siempre, y se autoperpetúa reproduciéndo se y transfiriendo sus instrucciones, sus códigos genéticos y el modelo para realizar programas diferentes y más perfec tos. Es otra ley natural que domina el universo vivo, las plan tas y los animales, al igual que nosotros buscamos perma nentem ente su procreación y de ese modo m antener en la vida aquello que cada individuo ha logrado. Sin embargo, somos muy diferentes del resto de la creación. La especie humana posee una fuente casi inagotable de capacidades que puede — y debe— d esa rro lla r p ara a lcanzar su m áxim a expresión com o ser privilegiado del universo. Tenemos la obligación, como seres superiores — que deberíamos ser— , de tomar las riendas y alcanzar las altas cotas que nuestras cualidades nos permiten. Una de estas facultades, posible mente la más sorprendente de las que posee el hombre — y la mujer— , es la especialización alcanzada por nuestro cerebro. Nuestro cerebro, dotado de inteligencia, nos da un poder más allá de lo que los demás seres creados poseen. De ti depende, y solo de ti, el uso que de ella hagas, la parábola de los talen tos sigue vigente. III La generaciónde estados y emociones Mientras usted utilice pensamientos que lo atraen o repelen con el solo propósito del estí mulo, solo estará vivo a medias. También coo pera en mantenerse entrenado para ser condi cionado por otros. Id r ie s S h a h E n e s t a s e c c i ó n procuraré poner en claro cóm o consideram os en PN L que se generan nuestros estados internos o emociones. Pero para tener una visión y entendim iento lo más objetivo posible, vamos en prim er lugar a conocer qué nos dice la psicología tradicional acerca de su consideración tocante a la genera ción de una respuesta emocional. Para los teóricos oficialis tas, una emoción está constituida por tres tipos de com po nentes: conductuales, reactivos y hormonales. Respecto a las conductas, estas consisten en respuestas musculares acordes con el hecho que las provoca. Por ejemplo, un gato que se siente amenazado adopta inmediatamente una postura defen siva, se eriza, saca las garras y bufa. Si el agresor no se retira, el felino saltará y atacará o saldrá corriendo. Las respuestas reactivas facilitan las conductas y una inmediata activación 5 2 INTELIGENCIA EMOCIONAL CON PNL de energías para poder actuar con rapidez y brío. En el orga nismo del gato, en tal circunstancia, se produce un aumento de la actividad simpática y una disminución de la parasimpá- tica, lo que hace que aumente el ritmo cardiaco, se contrai gan los vasos sanguíneos de ciertos órganos para aumentar el suministro de sangre a los músculos que requieren más ener gía. Por su parte, la segregación hormonal acrecienta la reac ción autónoma debido a la adrenalina vertida por la glándula suprarrenal que facilita la conversión y asimilación de la glu cosa que requieren los músculos para la actividad defensiva. Las investigaciones de laboratorio llevadas a cabo han con cluido que la estimulación de ciertas áreas del cerebro puede provocar reacciones en los animales en dirección de huida o a taque, conductas que se re lac ionan con las em ociones m iedo o rabia. Com o vim os líneas atrás, em ociones tales como las citadas tienen tres componentes: conductual, reacti vo y horm onal, y cada uno de ellos dirigido por sistemas neurales diferentes, por lo que para que actúen al unísono se requiere un centro coordinador, y este es la amígdala. La amígdala (también llamada «almendra»), situada cerca de la región del ventrículo lateral del lóbulo temporal, desempeña un papel especial en las reacciones fisiológicas relativas a la supervivencia: comida, sexo, defensa, etc. Diferentes indaga dores han detectado la activación de la am ígdala frente a estím ulos em ocionales de cierta intensidad. Tam bién, la amígdala está ligada a los efectos de las feromonas sobre la fisiología y reproducción. Son muchas y variadas las influen cias investigadas por el complejo amigdaloide en el control y aferencia-eferencias de otras funciones orgánicas, pero lo que más nos interesa aquí es su implicación en las respuestas emocionales. El núcleo central de la «almendra» influye en reg iones del h ipotálam o, m esoencéfalo , p ro tuberancia y bulbo responsables de la expresión de los diversos compo nentes de las respuestas emocionales. Es también la región más importante del encéfalo para la expresión de las respues tas em ocionales provocadas por estímulos hostiles, ya que LA GENERACIÓN DE ESTADOS Y EMOCIONES 5 3 cuando se presentan estos hay un aumento tanto de la activi dad neural como de la producción de ciertas proteínas liga das a tales respuestas. Una lesión del núcleo central de la am ígdala reduce o suprime un amplio rango de conductas emocionales y de respuestas fisiológicas, tales como signos de miedo, menor estrés, etc. En cambio, cuando la amígdala es estimulada se m uestran signos fisiológicos y conductuales de miedo pudiendo llegar a producir enfermedades de tipo gástrico com o consecuencia del estrés. Las neuronas del núcleo central de la amígdala envían axones a regiones cere brales responsables de la expresión de varios componentes de las respuestas em ocionales. Este resulta especialm ente importante para el aprendizaje emocional relativo al ataque- huida. El aprendizaje emocional es muy importante en lo que respecta a la supervivencia; ciertos impactos externos produ cen automáticamente reacciones de miedo; por ejemplo, rui dos intensos inesperados, la aproximación de un animal de gran tamaño, las alturas o sonidos concretos. Pero, lo que es más im portante, podem os aprender que una determ inada situación es peligrosa o amenazadora. Cuando la competen cia inconsciente se asienta — aprendizaje— , nos asustaremos cuando nos encontremos con una situación similar mostran do todos los signos fisiológicos que lo acompañan. Se produ ce, pues, una respuesta emocional condicionada cuando un estímulo neutro se asocia a otro que provoca otra reacción emocional adversa o no. (En PNL llamamos a eso anclaje.) Por ejemplo, imaginemos que vamos a visitar a un fam i liar y estamos subiendo en el ascensor a su casa, y, al poco de emprender el ascenso, comienza a hacer un extraño ruido para a continuación, dando trompicones, terminar por pararse entre dos plantas. Allí quedamos encerrados y sin luz durante una hora, generando en nosotros la consiguiente sensación de agobio, falta de aire e incluso claustrofobia. Toda nuestra fisiología se pone en guardia activando el sistema nervioso autónomo y la consecuente segregación de hormonas relacio 5 4 INTELIGENCIA EMOCIONAL CON PNL nadas con la ansiedad y el estrés. A los pocos días volvemos a casa de este familiar y, aunque previamente nos aseguró que el ascensor estaba arreglado, el solo hecho de subirnos en él nos pone nerviosos, pero hacemos caso omiso y subi mos en el aparato. Al arrancar, vuelve a hacer el mismo chi rrido que hizo el día que nos quedamos encerrados. ¿Cuál sería nuestra respuesta? Con toda probabilidad, provocaría una reacción similar a la experim entada anteriormente, aun que ahora no se detuviera, volveríamos a experim entar dila tación pupilar, aumento del ritm o cardiaco, y en nuestras glándulas endocrinas reaparecería la segregación hormonal relacionada con el estrés. En otras palabras, el ruido activa ría el anclaje y daría lugar a una respuesta emocional condi cionada. Sin embargo, cuando un individuo aprende a ejecutar una respuesta específica — distinta de la anterior— para evitar el estímulo disparador hostil, la mayoría de las emociones vincu ladas acabarán desapareciendo. Es decir, si el organism o aprende una replica para afrontar eficazm ente la situación provocadora, las respuestas em ocionales rio se desencade nan. Aunque la mayoría de las investigaciones de laboratorio en este campo han sido realizadas con animales, una gran cantidad de datos indican que la amígdala está involucrada en respuestas emocionales en humanos. Diferentes estudios sobre extirpaciones y manipulaciones de la amígdala ponen de m anifiesto la inhibición o activación de cierto tipo de emociones. Existen indagaciones muy interesantes que tiene mucho que ver con las teorías vertidas por la PNL respecto a la generación de emociones que fueron realizadas por Angrilli (1996) y Cahilí (1995). El primero observó que la reacción de susto de un hombre con una lesión localizada en la amíg dala derecha no se veía incrementada por la presencia de una emoción desagradable. Comprobó también que la respuesta de alarma provocada por ruidos repentinos es más intensa en las personas cuando están mirando fotos desagradables que LA GENERACIÓN DE ESTADOS Y EMOCIONES 5 5 cuando miran fotos de contenido n eu tro 9. L a lesión de la amígdala interviene en los efectos de las emociones sobre la memoria. Normalmente, cuando una persona vive aconteci mientos que producen un impacto emocional intenso, es más probable que recuerde esos acontecim ientos que aquellos otros con baja señal emocional. Por su parte, la indagación de Cahilí
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