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La-Coordinacion-de-Difusion-Cultural-de-la-UNAM--el-segundo-gran-proyecto-cultural-de-Mexico

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UNIVERSIDAD NACIONAL AUTÓNOMA DE MÉXICO 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
FACULTAD DE CIENCIAS POLÍTICAS Y SOCIALES 
LA COORDINACIÓN DE DIFUSIÓN CULTURAL DE LA UNAM, 
EL SEGUNDO GRAN PROYECTO CULTURAL DE MÉXICO 
 ( REPORTE DE EXPERIENCIA LABORAL) 
 
 
T E S I N A 
 
QUE PARA OBTENER EL TÍTULO DE: 
LICENCIADA EN CIENCIAS DE LA COMUNICACIÓN 
 
PRESENTA: 
ANA RITA TEJEDA MAGOS 
 
ASESOR: 
 MTRO. JORGE MELÉNDEZ PRECIADO 
 
 
 
Ciudad Universitaria, 2012 
 
 
UNAM – Dirección General de Bibliotecas 
Tesis Digitales 
Restricciones de uso 
 
DERECHOS RESERVADOS © 
PROHIBIDA SU REPRODUCCIÓN TOTAL O PARCIAL 
 
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objeto de protección de los derechos de autor, será exclusivamente para 
fines educativos e informativos y deberá citar la fuente donde la obtuvo 
mencionando el autor o autores. Cualquier uso distinto como el lucro, 
reproducción, edición o modificación, será perseguido y sancionado por el 
respectivo titular de los Derechos de Autor. 
 
 
 
 
 
Agradecimientos 
Creo firmemente que en nuestro paso por este mundo es indispensable tener 
presentes, en una memoria que fácilmente se distrae con lo banal, a las 
personas que nos han brindado desinteresadamente lo más valioso de su 
ser: sonrisas, abrazos, frases de aliento, confianza, consejo, consuelo, 
conocimiento, paciencia, amistad, en una palabra, amor. 
Creo que los grandes triunfos se componen de cientos de pequeños logros 
que podemos alcanzar porque en nuestra vida también se suma la 
colaboración de infinidad de personas admirables, dispuestas siempre a 
auxiliarnos: familia, amigos, compañeros de trabajo, maestros. 
A Jaime López, Isaías y Jaime Julián López Tejeda, corazón que hace latir mí 
cuerpo, alma que conforma mi ser. 
A Jaime López. Para algunas personas la felicidad y el amor no existen. Para 
mí, tú representas esos conceptos. Gracias por constituir conmigo, no 
obstante el diferente albedrio, una sola persona. 
A Isaías y Julián López Tejeda, alicientes, alegrías y preocupaciones de mi 
vida. Por comprender mis necesidades profesionales y saber forjarse como 
seres de bien, libres e inteligentes. 
A Julián Tejeda, mi padre, que con su cuarto año de primaria entendió el 
valor del conocimiento y lo puso a mi alcance a través de los libros. 
A Altagracia Magos (Flavia), mi madre, por colaborar en la conformación de 
nuestro hogar. 
A mis hermanos, por las vivencias compartidas: Magdalena, Julián, Víctor, 
Lourdes, Gabriela y Francisco Tejeda. 
 
 
A mi segunda familia, por darme cabida en su fraternidad: Roberto López y 
María Mercedes Hernández; Silvia, Beatriz, Oscar, Eva Delfina, Leticia y 
Nolberto López Hernández; Miguel Rivera, Jesús Martínez, María Elena Galán, 
Leticia Flores, Gerardo Montes y Heriberto Ramírez. 
A mis sobrinos y ahijados, por nutrirme con sus sueños y triunfos. 
A mis amigos de toda la vida; complicidad y afecto sincero: Elsa Nelly 
Gutiérrez, Patricia Santos y Jorge Robles. 
A mi familia de trabajo. Alegrías y esfuerzos compartidos: Abraham Mata 
Alvarito, Alejandra Alejaldre, Cecilia Villeda, Cutberto, Armando y Barri 
Domínguez; Christian Gómez, Estela Alcántara, Francisco Javier Velázquez, 
Fernando Maldonado, Guadalupe López, Guillermina Quezada, Hilda 
Rodríguez, Humberto Granados, José Antonio Sánchez, Marisol Gutiérrez, 
Martha Herrera, Mario Ponce, Nicolás Parra, Rosa María Salas, Francisca 
Segura, Pilar Rojas, Elda Maceda, Rubén Romero, Raúl Islas. 
A la generación 1980-1983, de la Carrera de Ciencias de la Comunicación 
de la UNAM, por adoptarme. 
A las personas generosas que compartieron conmigo sus conocimientos.  
 
 
 
 
 
 
 
Índice 
Introducción ………………………………………………………………………………….. 1 
1. Orígenes y propósitos de la Coordinación de Difusión Cultural …. 8 
2. El periodismo como herramienta de difusión cultural………….…… 22 
3. Actividades culturales …………………………………………………………. 43 
 Ulf Rollof: proyecto axolot, o la adaptación a partir de la naturaleza…............... 44 
 Josef Koudelka, legendario fotógrafo checo en México………………….............. 49 
 La obra de María Izquierdo en el Centro Cultural Universitario Tlatelolco..…….. 53 
 Eduardo ll, “Una obra con un animal adentro”………... ………………….………… 59 
 La vida de Lou Andreas Salomé en el Teatro Santa Catarina……………............. 63 
 Corta temporada de Tania Pérez Salas en la Sala Miguel Covarrubias………… 68 
 La multipremiada bailarina Marta Carrasco presenta: J’arrive …………….……. 72 
 Jodorowsky y el arte que cura, en el Centro Cultural Universitario……………… 76 
 Luis Valdez, el creador de Zoot Suit narró sus experiencias en el CUT…….......... 81 
 Los 70 con la OFUNAM, en el Auditorio Nacional……………………………........... 86 
 Rodrigo Macías, director asistente de la OFUNAM…………………………............. 90 
Una mirada a la literatura de un país profundamente poético. 
Antología de narradores eslovenos contemporáneos………………………………. 95 
Terminó ciclo sobre mundo literario y psicológico, con Ignacio Padilla 
y Xavier Velasco ...……………................................................................................... 100 
 Presenta Literatura antología de Material de Lectura. Contiene obra 
 de Octavio Paz, Elena Garro, Carlos Fuentes y Virginia Woolf….…..………..…… 105 
Estrenan en CU La zona y Cobrador. In God we trust. Cintas de Rodrigo Plá 
y Paul Leduc…………….……………………………………………………………………. 109 
 
 
 4. Hacedores de cultura……………………………………………………………… 116 
 Jaime García Terrés, artífice del 2° gran proyecto cultural de México 
en el siglo XX……….………………………………………………………………… 117 
 Difusión Cultural, un ministerio de cultura: Hugo Gutiérrez Vega.……….………… 122 
 La UNAM, única universidad en el mundo con un subsistema de Difusión 
Cultural: Gonzalo Celorio….……………………………………………………. 126 
 Mayahuel de Plata para Manuel González Casanova……………………..……….. 133 
 Murió Alejandro Aura, impulsor del teatro universitario. ……………………………… 138 
 Traducir, un placer difícil de explicar: Gurrola.…………………………….….…….….. 141 
 La dirección de escena, labor de un alquimista: Luis de Tavira …..…………….….. 145 
 5. Fortalezas ……..……………………………………………………………………..……. 149 
 Celebra la Filmoteca su 45 aniversario……………………………………..…….….……. 150 
 Recibirá el CUEC el Ariel de Oro …………………………………………….……………... 157 
 CUT: 45 años de marcar el rumbo del teatro de México……………….……….…….. 164 
 El Museo Universitario del Chopo renueva, en el siglo XXI, su vocación 
por la difusión de la cultura…………………………………………………………………… 171 
 Cumple 15 años el Festival Nacional de Teatro Universitario ..………..………………. 177 
Conclusiones…………………………………………………………………... 181 
Fuentes de consulta………………………………………………………….. 187
 
1 
 
Introducción 
 
 
 
La UNAM inició la construcción del Centro Cultural Universitario a mediados de la década de 
los 70. En este complejo arquitectónico la Coordinación de Difusión Cultural tiene sus oficinas 
y realiza, en éste y en otros recintos, la tercera tarea sustantiva de la UNAM: la difusión de la 
cultura. (Foto Jaime López Hernández). 
 
 
 
 
2 
 
…”a la Universidad… la amo, pero no 
vengo a encerrarme en ella, sino a 
procurar que todos sus tesoros se 
derramen… 
José Vasconcelos1 
 
 
La primera vez que pisé el Centro Cultural Universitario (CCU) no podía creer 
que en medio de la vegetación y fauna, como pájaros, tarántulas 
multicolores, serpientes y veloces ardillas; entre la maciza y ancestral roca 
volcánica del Xitle, existiera un recinto cultural. 
Sin embargo, recordé que precisamente en la selvalos mayas crearon una 
de las culturas más avanzadas de su época, de imponente arquitectura, 
para ejemplo: Tulúm, Cobá, Chichen Itza. 
Curiosamente, en los alrededores de Cultisur, como cariñosamente 
conocemos al Centro Cultural, hace aproximadamente dos mil años, 
nuestros antepasados edificaron la ciudad de Cuicuilco, que significa en 
náhuatl: “lugar donde se hacen cantos y danzas”, pero fue destruida con la 
erupción del Xitle. 
Cuando vi el lugar que parecía sólo un bosque pensé que no existía nada 
más ahí y que me habían jugado una broma. Luego de una pequeña 
caminata pude apreciar la infraestructura de concreto. Surgía como la 
                                                            
1 Álvaro Matute. José Vasconcelos y la Universidad, México/UNAM, Colección Educadores Mexicanos, 1987,        
p. 58. 
 
3 
 
ciudad el Dorado, pero ésta no era un mito, ni una ciudad de oro. Era una 
realidad tan valiosa por su contenido cultural, como aquella por su metal. 
Entendí entonces la sorpresa de Cortés al apreciar la imponente Gran 
Tenochtitlan: “La cual ciudad es tan grande y tan de tanta admiración que 
aunque mucho de lo que de ella podría decir, lo poco que diré creo que es 
casi increíble”. 
Un compañero de la Facultad me había invitado al CCU, a la inauguración 
del Teatro Juan Ruiz de Alarcón. La Coordinación de Difusión Cultural de la 
UNAM (CDC), instancia encargada de la difusión cultural universitaria, tenía 
ahí sus oficinas y se encargaría de darle vida al centro. 
Para mi fortuna, poco tiempo más tarde, mi amigo me invitaba a trabajar en 
ese lugar, en el área de Prensa. 
Mi alma mater me beneficiaba por segunda vez. Primero, me permitió 
estudiar la carrera de Ciencias de la Comunicación en su Facultad de 
Ciencias Políticas y Sociales (FCPyS); después, me ofrecía la oportunidad de 
realizarme profesionalmente y me favorecía de la cultura universitaria. 
Al trabajar en la CDC, conocí y valoré la intensa labor de funcionarios, 
artistas y trabajadores que llevan a cabo la tercera tarea sustantiva de la 
UNAM: La difusión de la cultura, que junto con la docencia y la investigación 
forman parte del quehacer de la máxima casa de estudios. 
Luego de tener la fortuna de abrevar de esta labor, mi interés es darla a 
conocer, porque si bien tiene años de realizarse, ha beneficiado a muchos 
estudiantes y se ha extendido a un público en general, existen muchas 
personas que no han sido alcanzadas por ella. 
 
4 
 
Al trabajar en la CDC entendí la enorme responsabilidad que implica dar a 
conocer su quehacer a través del periodismo y la obligación que esta 
profesión tiene de servir como un vínculo entre el público y los creadores, así 
como, de conformar una memoria histórica que reitere la importancia de 
esta institución cultural. 
Considero que es sustancial dar a conocer la cultura universitaria por ser 
fundamental en la educación integral de un estudiante y del desarrollo del 
país y porque hace de la Coordinación de Difusión Cultural el segundo gran 
proyecto cultural de México,2 sentencia que pretendo demostrar con este 
trabajo. 
Por ello, me di a la tarea de investigar, recopilar y plasmar datos sobre su 
historia. Exponer su universo, compuesto por un sin número de artistas, 
mexicanos y extranjeros, que trabajan incansablemente, con amor y pasión, 
para configurar espectáculos inteligentes y profesionales. 
Un universo en el que existen, de igual manera, instituciones fundamentales 
para la difusión cultural del país y la conformación de nuevas generaciones 
de artistas. Un cosmos lleno de personajes fascinantes, inteligentes, 
bondadosos, visionarios, que vertieron sus conocimientos, ánimo y trabajo 
para que, hoy día, la UNAM sea modelo de las vanguardias culturales. 
En la tesina, además, incluyo una serie de entrevistas, reportajes, notas 
informativas, un total de 27 trabajos que realicé entre 2005 y 2009 para 
difundir diversas actividades culturales. Algunas llegaron a publicarse en la 
Gaceta; otras, se enviaron como boletines a los medios de comunicación y 
algunas más sirvieron como información en ruedas de prensa. 
                                                            
2 Sentencia emitida por Carlos Monsiváis en el homenaje a Jaime Gracía Terrés por su X aniversario luctuoso. 
 
5 
 
Cada uno de los trabajos aborda diferentes aspectos de la CDC: gestores, 
artistas, actividades y direcciones. Se escogieron aquellos que consignan 
conmemoraciones, homenajes, nuevas propuestas; aquellos en los que 
intervienen importantes figuras del quehacer artístico y cultural; los que 
consideré una muestra representativa de la diaria faena cultural 
universitaria. Es por ello que su orden no corresponde a la fecha cronológica 
de publicación. 
Estos reportes son parte del periodismo que realicé con la intención de 
interesar al público en las actividades culturales de la UNAM. Utilicé las 
técnicas de información aprendidas en la Carrera de Ciencias de la 
Comunicación que imparte la UNAM y las presento a la consideración de las 
futuras generaciones. 
El cuerpo de este trabajo está compuesto por cinco capítulos. El primero de 
ellos, “Orígenes y propósitos de la Coordinación de Difusión Cultural” esboza 
una breve historia sobre esta instancia encargada de llevar a cabo la 
tercera tarea sustantiva de la UNAM. 
En el segundo apartado: “El periodismo como herramienta de difusión 
cultural” presento un recorrido por la historia del periodismo cultural 
mexicano. 
“Actividades culturales” reúne 15 notas que pretenden revelar la riqueza 
comprendida en la programación cultural universitaria. Este apartado 
agrupa coberturas de prensa y entrevistas realizadas con los artistas, quienes 
comentan su proceso creativo y compromiso profesional. 
Con los detalles proporcionados, el lector puede apreciar el esfuerzo e 
interés por seleccionar una programación del más alto nivel, misma que se 
 
6 
 
puede disfrutar a precios muy bajos, incluso, con entrada libre. Elegí textos 
sobre artes visuales, teatro, danza, música y cine, manifestaciones que, 
marcan la pauta de las áreas artísticas que conforman el universo cultural 
universitario. 
“Hacedores de cultura” comprende siete notas que están dedicadas a 
recordar protagonistas que consagraron parte de su vida a la cultura y se 
convirtieron en columnas indispensables para la difusión del arte universitario 
y del país. 
En algunas entrevistas, son los propios personajes quienes hablan de su labor 
como difusores culturales. Otras notas, consignan homenajes realizados a 
estos intelectuales universitarios. Algunos boletines más, muestran a estos 
hacedores de cultura en otras de sus facetas artísticas. 
Entre ellos se encuentran tres excoordinadores: Jaime García Terrés, Hugo 
Gutiérrez Vega y Gonzalo Celorio. 
Aparecen también: Manuel González Casanova, fundador de la Filmoteca y 
el CUEC; Luis de Tavira, exdirector del CUT; Alejandro Aura, exdirector de 
Teatro y Danza, y Juan José Gurrola, impulsor del teatro universitario. 
Finalmente, en “Fortalezas”, cinco notas resaltan proyectos que por su 
trascendencia llegaron a convertirse en realidades dinámicas y 
fundamentales en la generación de cultura y en su difusión. Proyectos que 
se sostienen y fortalecen con el tiempo y han llegado a constituirse en 
instituciones reconocidas y de gran tradición: Filmoteca de la UNAM, Centro 
Universitario de Teatro (CUT), Centro Universitario de Estudios 
Cinematográficos (CUEC), Museo Universitario del Chopo y Festival Nacional 
de Teatro Universitario. 
 
7 
 
Este panorama artístico, aunque fragmentado, tiene la intención de que sea 
el lector quien, por cuenta propia, descubra la cultura universitaria y sus 
beneficios y se enamore de ella. 
Cabe mencionar que la cultura universitaria es un universo inmenso, vivo, 
movido por infinidad de voluntades creativas. Se podrían escribir varioscalificativos para describirla, sin embargo, es necesario presenciar 
directamente la experiencia del teatro, la música, las artes plásticas, la 
literatura, el cine…Sólo al vivir la cultura se puede entender porque cautiva 
el alma. 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
8 
 
1. Orígenes y propósitos de la Coordinación 
de Difusión Cultural de la UNAM 
 
El papel de los intelectuales de finales siglo XIX y principios del XX, que 
habían podido abrevar del saber, en un México en constantes luchas 
políticas por el poder, fue fundamental en la búsqueda del desarrollo 
económico y social del país. 
El intelectual se convirtió en el consejero, secreto o público, del general 
analfabeto, del líder campesino o sindical, del caudillo en el poder. La tarea 
era inmensa y había que improvisarlo todo. Los poetas estudiaron economía, 
los juristas sociología, los novelistas derecho internacional, pedagogía o 
agronomía…el resto de la “inteligencia” fue utilizada para fines concretos e 
inmediatos; proyectos de leyes, planes de gobierno, misiones confidenciales, 
tareas educativas, fundación de escuelas…3 
Serían los intelectuales quienes prepararían los diferentes proyectos para dar 
forma a un México moderno, quienes pretenderían terminar con la pobreza, 
la ignorancia y la injusticia. Su labor cultural, didáctica, de extensión, los 
llevaría a crear instituciones de toda índole: culturales, educativas, 
económicas, sindicales, legislativas, con las que intentarían sacar al país de 
la ignorancia y el subdesarrollo. 
La colosal tarea no podía realizarse con una sola voluntad. En la 
construcción de las nuevas instituciones se entretejieron cientos de energías. 
En esta revolución pacífica, como en los demás ámbitos, el área educativa 
sería primordial y en su fortalecimiento colaborarían varias generaciones, 
muchos hombres. 
                                                            
3Octavio Paz, El laberinto de la soledad, Postdata, Vuelta a “El laberinto de la soledad”, México, Fondo de Cultura 
Económica, novena reimpresión, 2012, p.170. 
 
9 
 
Uno de ellos, sin duda fue Justo Sierra “… hombre extraordinario…; que 
dedicó toda su energía al magisterio y después a la educación general 
como ministro de Estado…”4 Justo Sierra presentaría durante las fiestas del 
Centenario de la Independencia del país, una iniciativa para crear la 
Universidad Nacional de México, como dependencia agregada al Ministerio 
de Instrucción Pública y Bellas Artes. 
En la construcción de esta Universidad se encontrarían también, 
generaciones claves como: Ateneo de la Juventud, Siete Sabios y 
Contemporáneos. De todos los creadores en este ímpetu cultural, “el 
fundador por excelencia”, según Krauze y a decir de Gabriela Mistral, “el 
hombre más constructor” fue José Vasconcelos. 
Vasconcelos como estudiante preparatoriano buscó de diferentes maneras 
difundir el saber, las bellas artes, la filosofía, el conocimiento enciclopédico 
que adquirió en la preparatoria concebida por Gabino Barreda en 1867. Lo 
hizo también, dirigiendo el Ateneo de la Juventud Mexicana y como director 
de la Escuela Nacional Preparatoria. 
Su visión lo llevó, a la par, a construir, desde el punto de vista de Carlos 
Monsiváis, el primer gran proyecto cultural de México: La Secretaría de 
Educación Pública, de ahí que Octavio Paz lo considere” el fundador de la 
educación moderna en México”5 
Fue pues, indispensable, en consecuencia y como primer paso de una 
restauración civilizadora, volver a crear al ministerio de Educación Pública, 
pero ya no según el plan raquítico de la era porfiriana, reducido al Distrito 
                                                            
4 Matute, op. cit., p. 46. 
5 Paz, op. cit., p. 63. 
 
10 
 
Federal y los Territorios, sino de manera ancha y generosa, con acción sobre 
todo el territorio de la patria.6 
Ya al frente de la Universidad, Vasconcelos visualizaba la institución como 
capaz de aglutinar y transmitir el saber con el único fin de ayudar a la 
formación de mejores mexicanos. No solo participó en la estructura de la 
institución educativa, le dio, además, un lema y un escudo. 
Vasconcelos, desde su discurso de toma de posesión como rector de la 
máxima casa de estudios, en 1920, destaca el papel primordial de la cultura: 
“Las revoluciones contemporáneas quieren a los sabios y quieren a los 
artistas, pero a condición de que el saber y el arte sirvan para mejorar la 
condición de los hombres”. 7 
Con esta visión en mente, entonces, la Universidad se estructura sobre tres 
funciones sustantivas: docencia, investigación y difusión de la cultura. 
Compromisos asentados en sus leyes orgánicas de1929, 1933 y 1945. Esta 
última rige actualmente a la institución y suscribe en el capítulo uno: 
La Universidad Nacional Autónoma de México es una corporación pública -
organismo descentralizado del Estado- dotado de plena capacidad jurídica 
y que tiene por fines impartir educación superior para formar profesionistas, 
investigadores, profesores universitarios y técnicos útiles a la sociedad; 
organizar y realizar investigaciones, principalmente acerca de las 
condiciones y problemas nacionales, y extender con la mayor amplitud 
posible, los beneficios de la cultura8 
 
                                                            
6 Matute, op. cit., p. 213. 
7Matute, op. cit., p. 60. 
8Dirección General de Administración Escolar “Compilación de la Legislatura Universitaria Ley Orgánica”, UNAM, 
[en línea], dirección URL: https://www.dgae.unam.mx/normativ/legislacion/leorunam.html (consulta; 
16 de marzo de 2012) 
 
11 
 
El inicio 
Desde su fundación, la máxima casa de estudios se interesa por generar y 
difundir cultura. Poco a poco va sumando proyectos que darán como 
resultado una política cultural amplia y sólida. 
Uno de los primeros grupos interesados en extender la cultura es el Ateneo 
de la Juventud, surge hacia 1907 y entre sus muchas actividades funda la 
Sociedad de Conferencias y organiza “una primera serie de un teatro 
público, para presentar temas académicos relacionados con la vida y obra 
de escritores y artistas desconocidos o ignorados en los planes de estudio 
vigentes”9 
Tiempo después, en 1916, Castro Leal, Vásquez del Mercado y Vicente 
Lombardo Toledano habían constituido la Sociedad de Conferencias y 
Conciertos con el único fin de propagar la cultura entre los estudiantes de la 
UNAM. 
El éxito de las conferencias se multiplicó con el logro, para entonces sin 
precedente, de presentar las 10 sonatas para violín y piano de Beethoven, 
interpretadas por el maestro Julián Carrillo, al violín y Alba Herrera y Ogazón, 
al piano10 
Durante la década de los 20, el muralismo mexicano se desarrollaba en las 
paredes de la Escuela Nacional Preparatoria: Diego Rivera pintó La 
Creación; Fernando Leal, La fiesta del Señor de Chalma; David Alfaro 
Siqueiros, Los elementos, Los mitos, El entierro del obrero sacrificado y El 
llamado a la libertad; Ramón Alva de la Canal, El desembarco de los 
                                                            
9Enrique Krauze. Caudillos Culturales en la Revolución Mexicana, México, Tusquets, 1999, p.60. 
10 Krauze. op. cit., p.87. 
 
12 
 
españoles y La cruz plantada en tierras nuevas y Fermín Revueltas, Alegoría 
de la Virgen de Guadalupe. 
Para 1929, al crearse la Facultad de Música de la UNAM, en el edificio de 
Mascarones de la colonia Santa María la Ribera, un grupo de alumnos 
dirigidos por el maestro José Rocabruna organiza una pequeña orquesta 
que inició sus presentaciones en el Anfiteatro Simón Bolívar. 
Esta agrupación fue el antecedente de la Orquesta Sinfónica Popular que se 
creó en 1936 bajo el auspicio de Salvador Azuela, jefe del Departamento de 
Acción Social, que había surgido en 1935. Hoy, conformado por músicos 
profesionales el conjunto universitario se conoce como Orquesta Filarmónica 
de la UNAM (OFUNAM)y tiene su sede en la Sala Nezahualcóyotl. 
En 1937, bajo el rectorado de Luis Chico Goeme, se funda Radio UNAM, 
pionera de la radio cultural en América Latina. 
Desafortunadamente, el Departamento de Acción Social desapareció, por 
ocho años, para dar lugar a la creación, el 7 de abril, de 1946, a la Dirección 
General de Difusión Cultural. Ésta reuniría la Escuela de Verano, Radio 
Universidad, el Servicio de Educación Popular, la Imprenta Universitaria y la 
Revista de la Universidad. Es nombrado al frente de la dependencia el 
doctor Alfonso Pruneda. Horacio Labastida dirige Difusión Cultural, de 1952 a 
1953. 
Difusión Cultural en su nueva era 
A principios de la década de los 50 la Universidad se encontraba dispersa en 
varios edificios del centro de la ciudad de México. Entre vecindades y 
comercios se situaba el barrio universitario. 
 
13 
 
Por ejemplo, la Rectoría, dependencias administrativas, la Escuela Nacional 
Preparatoria y la de Jurisprudencia ocupaban las calles de Justo Sierra y San 
Ildefonso. La Escuela Nacional de Medicina se encontraba en la Plaza de 
Santo Domingo y la de Artes Plásticas y la de Arquitectura en la calle de 
Academia. 
La Hemeroteca Nacional ocupaba la calle El Carmen; el Instituto de 
Investigaciones Sociales se ubicaba en Licenciado Verdad y el Instituto de 
Investigaciones Estéticas, en República de Argentina. La imprenta 
Universitaria laboraba en Bolívar, mientras que la Escuela Nacional de 
Economía, en República de Cuba y la de Odontología en Guatemala. 
El panorama universitario cambiaría a partir de 1954. Los universitarios ya no 
recorrerían estos legendarios senderos en busca de conocimiento. Se hacía 
realidad el sueño que en 1928 tuvieron dos estudiantes de arquitectura: 
Mauricio de María y Campos y Marcial Gutiérrez Camarena, quienes 
presentaron, como tesis profesional, un proyecto de construcción de una 
Ciudad Universitaria. 
Luego de 26 años de sumar voluntades, apoyos y financiamiento y de 
contar con un terreno adecuado, la Ciudad Universitaria era una realidad 
construida al sur de la ciudad. La institución universitaria daba un paso 
adelante para mejorar su tarea y convertirse en uno de los centros 
educativos más importantes. 
Al cambiar de residencia la máxima casa de estudios, el subsistema de 
Difusión Cultural igualmente ampliaría sus horizontes. Sus oficinas se ubicarían 
 
14 
 
en el décimo piso de la Torre de Rectoría, Jaime García Terrés sería su 
director. 11 
La gestión de García Terrés (1953-1965) se caracterizó por una efervescencia 
cultural, sentaría las bases de la nueva política cultura universitaria. Se rodeó 
por los mejores intelectuales de México, de la llamada generación del 
Medio Siglo. Bajo su dirección se inauguró Casa del Lago a cargo de Juan 
José Arreola. Se dio un nuevo impulso a la Revista de la Universidad, cuyo 
jefe de redacción era Juan García Ponce. José de la Colina coordinaba los 
cineclubes y Humberto Batis tenía a su cargo la Dirección General de 
Publicaciones y de la Imprenta Universitaria. 
García Terrés y su equipo lograron gestar proyectos culturales que por su 
trascendencia se convirtieron en pilares de la cultura mexicana, como el 
teatro universitario que fue conformado, a lo largo de los años, gracias a 
diferentes proyectos, entre ellos: Teatro Estudiantil Universitario, creado por 
Carlos Solórzano y Poesía en Voz Alta. 
Para 1955 se desarrolla Teatro en Coapa en la Preparatoria 5. Sus puestas en 
escena se presentan en la Sala Molière, el teatro La Capilla y el Foro 
Isabelino, recinto que en 1968 se convierte en el Eco, (Sullivan 43). En este 
lugar, por iniciativa de Héctor Azar, en 1962, se crea el Centro Universitario 
de Teatro (CUT)12. 
Hacer teatro en aquel momento era tener vocación de cruzado, entre otras 
cosas porque no se contaba con los mínimos elementos para intentarlo. No 
había obras impresas, no existían foros para el teatro universitario, y por 
                                                            
11 En el apartado “Hacedores de cultura” se publica una nota sobre el homenaje que la UNAM y otras 
instituciones culturales realizaron a García Terrés con motivo de su X aniversario luctuoso. 
12 En el capítulo “Fortalezas” aparece una entrevista con Antonio Crestani, titular del CUT, al cumplirse 45 años 
de la escuela universitaria. 
 
15 
 
supuesto a nadie se le ocurría tener una partida de dinero para tal fin. Había 
que partir de cero, de modo que Teatro en Coapa nació prácticamente de 
la nada, como la antigua ciudad de Tenochtitlan que fue fundada sobre un 
nopal mágico13 
Por lo que respecta a las artes visuales, en ese entonces, se difundían en la 
Galería Aristos, ubicada en el conjunto del mismo nombre, en Insurgentes 
421, así como en el Museo Universitario de Ciencias y Artes (MUCA) creado 
en 1960. 
Entre otras iniciativas, en el ámbito literario, surgió la famosa serie de discos 
Voz Viva de México (1959), testimonio de lo mejor de la literatura, en voz de 
sus creadores.  Entre los primeros autores editados se encuentran: Alfonso 
Reyes, Jaime Torres Bodet, Carlos Pellicer, Martín Luis Guzmán, Artemio del 
Valle Arizpe, José Gorostiza y Agustín Yáñez, entre otros. A la fecha se han 
grabado cerca de 280 títulos. 
Luego del buen recibimiento de los cineclubes, en 1960, se funda la 
Filmoteca de la UNAM14 para iniciar la tarea de conservación y restauración 
de las imágenes fílmicas. Además, surge el Centro Universitario de Estudios 
Cinematográficos (1963), la primera escuela de cine en el país15. 
Después del esplendor logrado por García Terrés, Difusión Cultural continúa 
extendiendo su influencia, no obstante que los directores siguientes 
ocuparon el cargo por un corto lapso: Gastón García Cantú (1966-1968), 
                                                            
13 Fernando de Ita “Los muros hablan”, Revista Los universitarios, volumen num, 4, mayo 1986, pp. 16‐17. 
14 En el capítulo “Fortalezas” se publica una entrevista con Iván Trujillo, director de la Filmoteca, quien comenta 
sobre la historia de esta institución universitaria. 
15 El CUEC recibió el Ariel de Oro por su contribución al cine mexicano. En el capítulo “Fortalezas”, Armando 
Casas, su titular, habla sobre la trayectoria del centro.  
 
16 
 
Alberto Dallal (1968-1969), Leopoldo Zea (1970-1973), Diego Valadés (1974-
1976), Hugo Gutiérrez Vega16(1977-1979) y Gerardo Estrada (1980). 
Fusión 
Al comienzo de la década de los 80, entre 1981 y 1984, la Coordinación de 
Extensión Universitaria, dependencia creada en 1977, absorbe la Dirección 
General de Difusión Cultural, siendo su titular Alfonso de María y Campos. En 
este tiempo, Difusión Cultural tendría dos directores: Fernando Curiel (1981-
1982) y Fernando Galindo (1982-1983). En el último año, 1984, De María y 
Campos ocupa la dirección de las dos instancias. El escritor René Avilés 
Fabila será el último director de la instancia universitaria, (1985-1986) antes 
de que se convierta en coordinación. 
Cabe destacar que previamente a la construcción del Centro Cultural 
Universitario las actividades de este ámbito se llevaban a cabo en recitos 
que desde comienzo del siglo XX ya pertenecían a la Universidad: el Antiguo 
Colegio de San Ildefonso, la Casa del Lago, Galería Universitaria Aristos, 
Museo Universitario del Chopo. 
Con la llegada de la Universidad al sur de la ciudad creció la posibilidad de 
ocupar nuevas instalaciones, como fueron: el Teatro Carlos Lazo, de la 
Facultad de Arquitectura; el Museo Universitario de Ciencias y Artes (MUCA) 
y el Auditorio Justo Sierra, de la Facultad de Filosofía y Letras, también 
conocido como “Che” Guevara. 
 
                                                            
16 Hugo Gutiérrez Vega diserta sobre la CDC, en una entrevista que aparece en el apartado “Hacedores de 
cultura”. 
 
17 
 
 
Centro Cultural Universitario 
La importanciaadquirida por la tercera tarea sustantiva de la UNAM 
provoca que el rector Guillermo Soberón (1973-1981) tome una importante 
decisión para apoyar el quehacer de Difusión Cultural. Promueve la 
construcción de una de las obras arquitectónicas y culturales más 
importantes en la historia moderna de la Universidad: El Centro Cultural 
Universitario (CCU), complejo cultural donde las manifestaciones artísticas 
podrán generarse y difundirse de manera profesional. Difusión Cultural 
contará desde esta fecha con más recintos para llevar a cabo su labor. 
El CCU, que se construyó en Insurgentes 3000, muy cerca de Ciudad 
Universitaria, albergaría las nuevas oficinas administrativas de Difusión 
Cultural y, por supuesto, modernos edificios culturales. Se edificó también la 
Biblioteca y Hemeroteca Nacionales y el Paseo Escultórico. 
El primer edificio de este conglomerado fue la Sala Nezahualcóyotl, un 
recinto para conciertos con capacidad para 2 mil 300 personas. Fue 
inaugurada el 30 de diciembre de 1976. Su construcción, en once meses, 
tuvo un presupuesto de 34 millones de pesos. 
En la segunda etapa del Centro se levantó un edificio para la difusión de las 
artes escénicas. Lo constituían dos teatros contiguos: el Juan Ruíz de Alarcón, 
con 430 butacas y el Foro Sor Juana Inés de la Cruz, para teatro 
experimental, con un cupo de aproximadamente 200 personas (este edificio 
se inauguró el 26 de febrero de 1979). 
Antes de estas construcciones y a la falta de recintos destinados a hospedar 
y difundir el fenómeno escénico universitario, se rentaban teatros como El 
 
18 
 
caballito, Foro Isabelino, Arco Caracol y Santa Catarina, este último sería 
adquirido por la CDC en 1992. 
Ya en el rectorado de Octavio Rivero Serrano (1981-1984) se edificaron el 
Centro Universitario de Teatro (CUT), una escuela para la docencia de las 
artes escénicas, que se inauguró en 1981. 
En el complejo cultural en expansión, un año más tarde, en 1982, se 
construía un edificio para actividades dancísticas: La Sala Miguel 
Covarrubias, que albergaría 725 personas. En su interior, como recinto de 
conciertos de cámara, funcionaría la Sala Carlos Chávez, con localidades 
para 163 asistentes. En este año nacieron también los cines: José Revueltas y 
Julio Bracho. En el 2011 se remodelaron para dar cabida a una tercera sala: 
Carlos Monsivaís. 
Con este significativo apoyo en infraestructura, el 3 de marzo de 1986, el 
rector Jorge Carpizo (1985-1989) crea el acuerdo que organiza una nueva 
estructura administrativa cultural, resultado de la fusión de los subsistemas: 
Coordinación de Extensión Universitaria y Dirección General de Difusión 
Cultural. Se configura así la actual Coordinación de Difusión Cultural. 
Coordinación de Difusión Cultural 
La Coordinación de Difusión Cultural inicia sus actividades bajo la dirección 
- por segunda ocasión- de Fernando Curiel (1986-1989). Continúa la tarea el 
escritor Gonzalo Celorio17 (1989-1998) quien estuvo al frente de la 
Coordinación un total de nueve años. En su administración, entre otras 
muchas propuestas, reglamenta un Consejo de Difusión Cultural, basado en 
                                                            
17 Este personaje explica sobre su gestión al frente de la CDC en una entrevista que aparece en el capítulo 
“Fortalezas” 
 
19 
 
la legislación universitaria, con la idea de dar rigor académico a las 
actividades culturales. Desde entonces las decisiones serían de carácter 
colegiado. 
Otro momento importante en la historia de la CDC se presenta bajo la 
dirección del artista plástico José de Santiago (1998-2000). En su gestión 
estalló la huelga estudiantil de 1999. No obstante que la Universidad estaba 
tomada por los activistas, la dependencia mantuvo su oferta cultural en 
sedes alternas. 
Superado el conflicto, el escritor Ignacio Solares dirige Difusión Cultural (2000-
2004). En el siguiente periodo, la dependencia queda a cargo nuevamente, 
de Gerardo Estrada (2004-2008), quien con el apoyo del rector Juan Ramón 
de la Fuente reforzarían la infraestructura arquitectónica de la Coordinación. 
Gestionarían la construcción y adquisición de nuevos recintos culturales. 
Así, en el 2004 se realiza la compra y remodelación del emblemático Museo 
Experimental El Eco, inmueble que se encuentra en el número 43 de la calle 
de Sullivan y construido en 1953 por el arquitecto y escultor Mathías Goeritz. 
El edificio fue sede del teatro universitario en la década de los 60. 
Dos años más tarde inicia la construcción, en el CCU, del Museo Universitario 
de Arte Contemporáneo (MUAC), proyecto realizado por el arquitecto 
Teodoro González de León. Así mismo, se lleva a cabo la intervención 
arquitectónica del Museo Universitario del Chopo18, realizada por el 
arquitecto Enrique Norten. 
                                                            
18 En el apartado “Fortalezas” Alma Rosa Jiménez, directora del Chopo, comenta la intervención arquitectónica 
que vivió el museo. 
 
20 
 
En el 2006, la antigua sede de la Secretaría de Relaciones Exteriores formará 
parte de la CDC, convirtiéndose en el Centro Cultural Universitario Tlatelolco. 
También se adquiere una casona ubicada en la colonia Roma, que se 
convierte en la galería MUCA Roma. 
De igual manera se edifica un teatro más para el CUT, además de salones y 
camerinos. También se construyen oficinas administrativas para las 
direcciones de Teatro y Danza, así como un nuevo espacio para danza: el 
Salón de ensayos. 
El escritor Saltiel Alatriste dirige La Coordinación de Difusión Cultural entre 
2008 y 2011 y la historiadora María Teresa Uriarte inicia en 2012. 
La CDC actualmente la integran las siguientes instancias: Dirección General 
de Actividades Musicales, Dirección General de Actividades 
Cinematográficas, Dirección de Teatro, Dirección de Danza, Dirección de 
Literatura, Dirección General de Artes Visuales, Dirección General de Radio 
UNAM, Dirección General de TV UNAM y Dirección general de Publicaciones 
y Fomento Editorial. 
También son parte de Difusión Cultural, el Centro Universitario de Estudios 
Cinematográficos (CUEC), el Centro Universitario de Teatro (CUT), la Casa del 
Lago, el Museo Universitario del Chopo. 
Estas dependencias y la infraestructura arquitectónica de primer nivel que 
constituyen la CDC hacen posible que hoy día la UNAM ofrezca lo mejor de 
la cultura y fortalezca la presencia cultural universitaria en el país. Se 
continúa así el evangelio de Vasconcelos, quien consideraba que la 
educación y la cultura hacen libre al hombre. 
 
21 
 
La Coordinación de Difusión Cultural, durante 2011, ofreció 8,746 
actividades, entre ellas, 552 conciertos, 910 funciones de teatro, 371 de 
danza y 2,940 exhibiciones de cine y video. También realizó 101 exposiciones, 
282 actividades literarias y 689 talleres, así como 124 actividades 
multidisciplinarias. Esta oferta logró convocar a 1,646,452 personas. 
Muy pocas universidades, quizá no exista otra en el mundo, tienen a su 
cargo, además de sus tareas de docencia e investigación, la difusión de la 
cultura. La Coordinación de Difusión Cultural de la UNAM realiza esta tarea. 
Consolidada a los largo de los años y generadora de un vasto programa 
cultural se instaura como el segundo gran proyecto cultural de México en el 
siglo XX. 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
22 
 
 
2. El Periodismo Como Herramienta de Difusión Cultural 
 
 
 
 
 
Foto: Jaime Julián López 
 
23 
 
 
El hombre, desde su nacimiento, es un comunicador, siente la necesidad de 
expresarse con sus semejantes y preservar y transmitir su acontecer en el 
mundo. Conforme evoluciona, encuentra muy diversas maneras de hacerlo: 
dibujo, lenguaje corporal, verbal y escritura; más tarde, los medios de 
comunicación masivos: prensa, radio, televisión y cine. Actualmente la 
internet. 
En su día a día, desarrolla accionesque le facilitan la vida, le satisfacen las 
necesidades elementales: casa, vestido y sustento. A la par, crea 
actividades que lo llenan emocionalmente y le hacen la vida más llevadera, 
las artes: danza, pintura, literatura, música. 
La creación cultural conforta al ser humano, emocional e intelectualmente y 
siente la necesidad de compartir estas sensaciones, de comunicarlas. De ahí 
que arte y comunicación vayan de la mano, sean universos indispensables 
de su existencia. 
Cuando el hombre inventa la imprenta, las maneras de comunicarse se 
multiplican. Surgen libros y folletos; revistas y periódicos. Se dimensionan sus 
posibilidades comunicacionales y la oportunidad de extender la difusión de 
su actividad intelectual, artística, educativa y los beneficios que conlleva. 
Surgen, de la misma manera, profesiones que le ayudan a documentar y 
difundir su quehacer. Una de ellas es el periodismo, que tiene como trabajo, 
según Ryszard Kapuściński, investigar y describir el mundo contemporáneo, 
que está en un cambio continuo, profundo, dinámico y revolucionario. 
Esta profesión conlleva especializaciones y una de ellas es el periodismo 
cultural, cuya tarea es difundir, informar y explicar los componentes que 
 
24 
 
involucran el acontecer cultural: las nuevas expresiones, la evolución de las 
ya existentes, sus políticas y dificultades. 
El periodismo cultural, como servicio, tiene la tarea, también, de buscar 
nuevos públicos porque “… inquieta y forma a las personas habituales que lo 
leen” dice Fernando Benítez” 
Un periodismo cultural que debe ejercerse, dice el poeta Javier Sicilia 
“porque impulsa el desarrollo de una nación gracias a la difusión de su 
cultura. Sirve para elevar la conciencia del ciudadano; hacerlo acceder a 
terrenos del arte que si no existiera sería imposible, y lograr un crecimiento en 
la profundidad y hondura del conocimiento” 
La poeta Dolores Castro señala que “el hombre no es solo animal racional, 
sino también, sensible y que por ello es necesario alimentar esa sensibilidad 
y permitir su desarrollo a través de la cultura y las artes, de ahí que el 
periodismo cultural pueda volverlo más humano” 
El periodismo, en sus inicios, lo ejercían personas de muchas profesiones: 
escritores, poetas, historiadores, juristas, viajeros. 
Los oficiantes de la comunicación fueron llamados inicialmente gacetilleros, 
publicistas, redactores o escritores antes de que periodistas, denominación 
que se empleaba ya a fines de la colonia, pero que se generalizó hasta que 
el siglo XX estaba por llegar19 
En México, el periodismo como profesión empezó a impartirse en la UNAM, 
en 1951, cuando se crea la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales. 
 
 
                                                            
19  Humberto Musachio, Historia del periodismo cultural en México, México, CNCA, 2007, p. 140. 
 
25 
 
Cultura y prensa, entes inseparables 
En las páginas y suplementos culturales de los diarios se ha congregado lo 
mejor de las artes y la cultura del país. En sus páginas polemizaron y 
abordaron los más variados temas filósofos como José Vasconcelos y 
Antonio Caso; intelectuales agrupados en diferentes círculos: Ateneo, Siete 
Sabios, Contemporáneos y Casa del Lago, entre otras, además de Premios 
Nobel. 
En estas publicaciones culturales se desarrolló la novela por entregas y se 
generó la literatura de autores mexicanos que hoy es reconocida 
universalmente. También estuvo presente la plástica mexicana: José 
Guadalupe posada, Arnold Belkin, Vicente Rojo, Esas páginas son un registro 
de la cultura de México. 
La historia de la relación entre cultura y prensa es antigua y extensa, se 
remonta al surgimiento de la imprenta. Cuando las manifestaciones artísticas 
y culturales se consignaban esporádicamente y tan solo en una hoja, luego 
en folletos y más tarde, ya en el siglo XVIII, en gacetas. 
Con el crecimiento demográfico y el incremento en la escolaridad, las 
manifestaciones artísticas y el periodismo se desarrollaron rápidamente. La 
cultura entonces llegó a publicarse frecuentemente en los diarios, en revistas 
especializadas de literatura, cine, danza, pintura, música, hasta llegar a los 
suplementos. 
La prensa nace en el mundo letrado para el mundo letrado. Es el ágora de 
una república de lectores, que fue creciendo a partir de la imprenta y se 
volvió cada vez más importante. Nació, naturalmente, elitista, porque pocos 
 
26 
 
leían. Sus redactores y lectores eran gente de libros. Por lo mismo era más 
literaria y reflexiva que noticiosa…”20 
Como muestra de la fructífera relación entre prensa y difusión cultural, se 
nombran algunas publicaciones sobresalientes del basto acervo histórico. 
Las primeras publicaciones de corte cultural aparecerían en el siglo XVI y 
serían descripciones sobre los arcos triunfales, que se construían para recibir 
a arzobispos y virreyes o sobre los túmulos funerarios, también monumentos 
efímeros construidos al fallecimiento de algún miembro de la familia 
reinante. 
Posteriormente aparecen en el siglo XVII las Gacetas, publicación constante 
y de información general, que además consignan actividades universitarias 
y reseñas de libros, para más tarde difundir el acontecer teatral y musical de 
la capital novohispana: Gazeta, de Juan Francisco Sahagún de Arébalo y 
Ladrón de Guevara y Diario Literario de México, de José Antonio Alzate. La 
Gaceta de México, de Manuel Antonio Valdés, se convierte en Gaceta del 
Gobierno de México (1784-1810). 
Revistas especializadas 
La cultura también encuentra difusión en otras publicaciones, como las 
revistas literarias, entre las que se encuentran: El año nuevo (1837-1840), 
dirigida por Rodríguez Galván. Escribían en sus páginas los poetas Guillermo 
Prieto e Ignacio Ramírez. Otras ediciones de este tipo fueron: El 
renacimiento, de Manuel Altamirano; La linterna Mágica, de José T. Cuellar y 
El Artista. 
                                                            
20 Gabriel Zaid, “Periodismo cultural” [en línea ], URL:  http://www.letraslibres.com/revista/convivio/periodismo‐
cultural‐0 (consulta 24 de abril de 2012) 
 
27 
 
Más conocidas son la Revista Azul y la Revista Moderna. “En ellas se 
escenificaría la revolución literaria que significó el modernismo y se definirían 
los talentos artísticamente más poderosos del porfiriato. Ambas serían, 
ciertamente, las puertas de entrada del siglo XX”21 
Los intelectuales Vásquez del Mercado, Castro Leal y Manuel Toussaint 
también crearían una publicación cultural 
Los Castros publican, junto con los poetas normalistas miembros de la 
Sociedad Hispánica, la revista Nosotros. Estos le daban el ornamento poético, 
mientras que los “Castros”…se proponían recoger la obra de los ateneístas 
dispersos, los que acompañaban a las tropas villistas, como Vasconcelos y 
Martín Luis Guzmán, y los exiliados como Alfonso Reyes22 
La revista Savia Moderna (1906) fue creada por la generación del Ateneo de 
la Juventud y sólo llegó a editar cinco números. Sus miembros también 
escribieron en El Mundo Ilustrado, De Arte y Letras, Arte, Argos Magazine, 
Letras de México, El Hijo Pródigo y Pegaso. 
San-ev-ank editada en 1918 publicaba las inquietudes de los Siete sabios y 
era dirigida, entre otros estudiantes de leyes, por Luis Enrique Erro. En su 
sección de poesía apareció un verso, supuesto autorretrato de Antonio 
Castro Leal: 
Me dicen que soy sabio: somos 7 en la escuela. Los siete nos reunimos para 
filosofar qué amable nuestra plática. ¡Cómo anima y consuela! A pesar del 
esfuerzo para tanto pensar23 
                                                            
21 Musacchio,  op.  cit., p. 54. 
22 Krauze, op. cit., p. 66. 
23Krauze, op, cit., p. 90. 
 
28 
 
El grupo de los Contemporáneos dio origen a la revista Ulises, que se 
convirtió en Contemporáneos (1927-1943). Traducían obras inglesas y 
francesas.Pero, junto a esta ojeada a la literatura del mundo, lo sustancial de 
Contemporáneos eran los "Nocturnos" y los ensayos de Villaurrutia y los de 
Cuesta, de Ramos y de Torres Bodet; los poemas de Novo, Pellicer y Owen, y 
las notas de Ortiz de Montellano, quien da a conocer el Romancero gitano 
de García Lorca…24 
¡30-30!, fue la primera publicación escrita por artistas plásticos mexicanos y 
solo aparecieron tres números. En ella plasmaron sus ideas Fernando Leal, 
Fermín Revueltas, Ramón Alva de la Canal. Otros ejemplares similares fueron: 
Forma, patrocinada por la SEP y la Universidad Nacional de México y En 
Nuestro México, donde colaboraron Diego Rivera y Manuel Álvarez Bravo. 
Aparecieron, a la par, revista especializadas de música, como La Gaceta 
Musical, Instructor Filarmónico, Revistas Musical de México, Nuestra Música y 
Pauta. 
En los años cuarenta surgen: El Hijo Pródigo, Letras de México, Tierra Nueva 
(UNAM), Tiras de Colores, El Bachiller, Suma Bibliográfica (SEP) y Rueca, de la 
Facultad de Filosofía y Letras. Entre las revistas especializadas en el séptimo 
arte de los años 70, se pueden citar: Nuevo Cine, Premiere, Cinemanía, 24 
por segundo, Primer Plano. 
En la época contemporánea, Plural (1971), del periódico Excélsior, logra 
congregar la élite intelectual de México. Julieta Campos, colaboradora de 
la revista señaló: "la batuta de Octavio Paz nos sentaba a hacer variadísimos 
                                                            
24 Palabras  leídas por José Luis Martínez en el ciclo Los Contemporáneos hoy, en  la Alianza Francesa, en enero 
del 2000. 
 
 
29 
 
lenguajes de tonos heterogéneos conjugando, como era propio de su 
ingenio, rigor de imaginación con libertad soberana de reflexión". Ilustraban 
la publicación, viñetas de José Luis Cuevas. 
En años más recientes, surge Vuelta (1976-1998) igualmente creada por 
Octavio Paz. Otros tirajes que aún circulan, son Nexos (1978), bajo la 
dirección de Enrique Flores Cano y Letras Libres (1999), creada por Enrique 
Krauze. 
Revistas universitarias 
Una de las revistas universitarias culturales de más tradición es Universidad de 
México, que más tarde se llamará Revista de la Universidad. Su vida inicia en 
1930 y un año más tarde Lombardo Toledano publicaba en ella un ensayo a 
favor de la cultura nacional: 
El Estado no cumple con su tarea educativa con abrir escuelas; su obra 
civilizadora debe abarcar todos los aspectos de la vida social. Levantemos el 
arancel para todo aquello que contribuya a imbecilizarnos y fomentemos la 
venida de lo que puede contribuir a la educación de las masas.25 
Por estar abierta a todas las opiniones, Universidad de México se volvió un 
referente obligado para lectores y escritores. Entre sus directores destacan: 
Julio Jiménez Rueda, Jaime García Terrés, Luis Villoro, Gastón García Cantú, 
Leopoldo Zea, Hugo Gutiérrez Vega y Federico Reyes Heroles. 
La Revista de la Universidad (dirigida por García Terrés de 1953 a 1965) es, 
según el criterio vigente, tan festiva y cosmopolita que admite el compromiso 
político (causa escándalo el número dedicado a la Revolución Cubana), y le 
                                                            
25 Krauze, op. cit., p. 344. 
 
30 
 
da espacio a las obras y propuestas posteriores a Don Alfonso Reyes y los 
Contemporáneos, muy especialmente a Octavio Paz y Carlos Fuentes.26 
Una publicación fundamental para estudiantes y trabajadores universitarios, 
porque desde su creación, en 1954, ha jugado un papel fundamental en la 
difusión del quehacer de la máxima casa de estudios es Gaceta UNAM. En 
ella se difunde, además, el quehacer artístico cultural. 
Gaceta UNAM nace cuando la UNAM estrena nuevo campus en el sur de la 
ciudad. El rector Nabor Carrillo y sus colaboradores, Jaime García Terrés y 
Horacio Labastida proponen crear una publicación para mantener 
informada a la comunidad y difundir las múltiples actividades que 
empezaban a generarse. 
Henrique González Casanova sería el fundador y director de la revista, que 
en esas fechas, se distribuía una vez por semana, con un tiraje de 5000 
ejemplares. El poeta Rubén Bonifáz Nuño era su jefe de redacción y Héctor 
García, uno de sus fotógrafos. 
Esta publicación, actualmente se distribuye gratuitamente dos veces por 
semana, los lunes, con un tiraje de 70 mil y los jueves, con 45 mil revistas. En 
sus páginas los universitarios encuentran una sección cultural, con notas 
periodísticas que les informan de manera profesional, puntual y amena, 
sobre la programación artística que especialistas de la cultura han 
organizado para ellos. 
Punto de Partida (1966) inició bajo la dirección de Margo Glantz y representa 
un espacio a los jóvenes talentos universitarios, significa un camino hacia su 
                                                            
26 Carlos Monsiváis, “Cuatro versiones de Autonomía Universitaria” Letras libres”, México Nª 71, 
nov. 2004 [en línea] dirección URL: http://www.letraslibres.com/revista/convivio/cuatro-
versiones-de-autonomia-universitaria 
 
31 
 
profesionalización. Actualmente goza de gran prestigio y cuenta con 
secciones de cuento, poesía, fotografía, novela corta, entre otras. El Centro 
Universitario de Estudios Cinematográficos (CUEC) edita Estudios 
Cinematográficos (1994), revista trimestral y monotemática. Hoy un referente 
esencial para los estudiosos del cine. 
La Universidad publicó, entre 1973 y 2004, Los Universitarios, un boletín que 
dirigió Margarita García Flores y que daba cuenta de las actividades de 
Difusión Cultural. “Por su amenidad, buena prosa y atractivo diseño, 
despertó el interés de los estudiantes y de la comunidad intelectual”, escribió 
Musacchio en Historia del periodismo cultural en México 
Diarios y suplementos 
Entre los primeros cotidianos que trataron la crítica literaria se encuentra El 
Diario de México (1805). Andrés Quintana Roo fue uno de sus notables 
colaboradores. El Iris (1826), de los italianos Claudio Linati y Florencio Galli y 
del cubano José María Heredia, según Musacchio, fue el primer periódico 
de carácter cultural. Estaba ilustrado con litografías y contaba con 
caricatura política. 
El primer suplemento cultural de la ciudad de México nació en 1832: El 
Registro Trimestre o Colección de Memorias de Historia, Literatura, Ciencias y 
Artes por una Sociedad de Literatura. Pertenecía al Registro Oficial, 
publicación del gobierno de Anastasio Bustamante. 
Un diario que permanece hasta nuestros días y que hasta el 2008 contó con 
un suplemento cultural es El Universal. Nació en 1916 y un año más tarde 
creó El Universal ilustrado, uno de los suplementos culturales sobresalientes 
de ese siglo, dirigido por Carlos Noriega Hope. 
 
32 
 
En este agregado, publicaron los Estridentistas, movimiento que logró “rizar el 
agua estancada de la literatura mexicana”, opinión de Xavier Villaurrutia. 
Además, José Vasconcelos publicó un adelanto del Ulises criollo y Martín Luis 
Guzmán, las entregas de su famosa obra La sombra del caudillo. 
El Universal publicó, al final de los cursos de1917, los trabajos de Alfonso Caso, 
Vicente Lombardo Toledano y Téofilo Olea y Leyva sobre El desinterés en el 
arte, El esteticismo y su crítica y El progreso en el arte…27 
En épocas más recientes, en 1971, el diario editó El Universal en la cultura, 
dirigido por Humberto Mussacchio. En 1986, Paco Ignacio Taibo I y Jorge 
Fernández Font fundan El Universal y la Cultura, que más tarde se convierte 
en El Universal Cultural. En 2004, Héctor Maulón crea el suplemento 
Confabulario, nombre homónimo del libro de Juan José Arreola. Este anexo 
desaparece luego de cuatro años y 210 números publicados. 
Uno de los periódicos que difundió en todo momento el quehacer cultural 
fue el órgano del Partido Nacional Revolucionario, El Nacional, que nació en 
1929. Entre sus suplementos culturales se encuentra El NacionalDominical, 
que dirigió Arqueles Vela y Luis Cardoza y Aragón. 
En 1947 Fernando Benítez queda al frente del diario y nombra al malagueño 
Juan Rejano director del suplemento Revista Mexicana de Cultura, quien es 
sustituido por Manuel Blanco y Alberto Dallal. 
Excélsior (1917), de Rafael Alducin, desde sus primeros años se ocupó del 
acontecer cultural. Durante la lucha por la autonomía universitaria, el 
periódico reservaba páginas a estudiantes como Antonio Castro Leal, 
Manuel Gómez Morín y Alberto Vázquez del Mercado. 
                                                            
27 Krauze, op. cit., p. 88. 
 
33 
 
Esta publicación, ya en 1949, contaba con la página cultural Diorama de la 
Cultura. Dos décadas después, en 1969, bajo la dirección de Julio Scherer se 
convierte en un suplemento que vive hasta 1982. Tres años más tarde, con 
René Avilés Fabila como director y Jorge Meléndez como jefe de redacción, 
nace El Búho, que recobra el esplendor que tuviera Diorama en sus primeros 
años. Esta publicación atrae nuevamente a los mejores intelectuales ya que 
abre un espacio al género autobiográfico, que utilizan, entre otros autores: 
José Luis Cuevas, Edmundo Domínguez Aragonés y Marco Aurelio Carballo. 
En El Heraldo (1919-1923), Antonio Caso, uno de los intelectuales más 
destacados del Ateneo “no tocaba la situación política, económica o social 
del país, sino la educativa”.28 El nuevo Heraldo (1965) tiene como 
suplemento al Heraldo Cultural. 
El Día, desde su nacimiento, 1969, mantuvo una página cultural bajo la 
dirección de Arturo Cantú. Según Musacchio, era la más seguida por los 
intelectuales. El diario contó con otros suplementos antes de llegar al actual 
Gallo Ilustrado: El libro y la vida, Fin de semana, La música en México. Entre 
los artistas que colaboraron con ilustraciones en este agregado fueron: 
Arnold Belkin, Alberto Gironella, Mariana Yampolsky. 
El Ángel, suplemento de Reforma (1993), lo dirige un consejo editorial 
constituido por Christopher Domínguez y Sergio González Rodríguez. Este 
diario también publica, mensualmente, desde 1997, el suplemento 
bibliográfico Hoja por Hoja. 
                                                            
28 Krauze, op. cit., p. 111. 
 
34 
 
El Financiero, surgido en 1995 y crea Comala, coordinado por Humberto 
Musacchio. En 1996 nace La Crónica de Hoy, con el suplemento Crónica 
Dominical. En el 2000 se funda Milenio y en el 2004, su suplemento Laberinto. 
Padre fundador 
“No habría un verdadero periodismo sin una auténtica cultura en sus 
páginas”. Fernando Benítez estaba seguro de esta sentencia y así lo hace 
saber a los directores “cerriles de los diarios, a los empresarios montaraces”, 
afirmó el escritor Rafael Pérez Gay en el suplemento dominical de Crónica, 
del 27 de febrero del 2000, publicación dedicada a Benítez con motivo de 
su muerte, acaecida el 21 del mismo mes. 
Y es que a Fernando Benítez, escritor, historiador y periodista; autor de libros 
como La ruta de Hernán Cortés, Los primeros mexicanos: La vida criolla en el 
siglo XVI; biografías de Cárdenas y Juárez y de las novelas El rey viejo y El 
agua envenenada, se le considera el fundador de los suplementos 
modernos pues estuvo al frente de cuatro de ellos, todos destacados: 
México en la Cultura, La Cultura en México, Sábado y La Jornada Semanal. 
Estas publicaciones constituyeron a lo largo de 50 años (1949-1999) un 
espacio para la difusión de nuevas generaciones, confirmaron vocaciones y 
alentaron el surgimiento de lectores, narradores, poetas, ensayistas y 
traductores. 
En el notable cuerpo de las páginas de estos suplementos, Benítez impuso un 
modo de promover un gusto, una condición de hacer cultura, presentó a 
innumerables escritores, los dio a conocer…No es una hazaña menor si 
pensamos en una sociedad alejada de la letra impresa, acostumbrada en 
ese entones a la rutina de una prensa sometida al poder.29 
                                                            
29 Rafael Pérez Gay “Fernando Benítez”, Crónica Dominical, Año 4, núm. 165, 27 de febrero de 2000, p. 2. 
 
35 
 
En Novedades, Benítez constituyó México en la Cultura, (1949-1961). Entre sus 
páginas se consignaron los cuentos El guardagujas, de Juan José Arreola y El 
muerto, de Jorge Luis Borges, así como adelantos de las novelas: La región 
más transparente, de Carlos Fuentes y Los días terrenales, de José Revueltas. 
Sergio Pitol tenía la edad de 18 años cuando descubrió a Borges. Leyó su 
cuento La Casa de Asterión en ésta publicación que estuvo en circulación 
durante 12 años. 
Escribieron en este suplemento: Alfonso Reyes, Pablo Neruda, Diego Rivera, 
Jean Paul Sartre, Octavio Paz, Rosario Castellanos. La dirección artística 
estuvo a cargo de Miguel Prieto y posteriormente de Vicente Rojo. Entre sus 
jóvenes escritores se encontraban José Emilio Pacheco y Carlos Monsiváis. La 
crítica de arte la ejercían Raquel Tibol y Juan García Ponce. Elena 
Poniatowska realizaba entrevistas a artistas plásticos. Se escribía, también, 
sobre cine y teatro. 
Cabe mencionar que Novedades creó, hasta el 31 de diciembre, de 2002, 
año en el que el periódico cierra sus puertas, otros suplementos como: La 
Onda, que abordaba temas relacionados con los jóvenes de los setentas, así 
como El Semanario Cultural de Novedades. 
Al salir de Novedades, Benítez fundó, igualmente, el suplemento La Cultura 
en México, en la Revista Siempre, de José Pagés Llergo (1962-1970). Tuvo 
como diseñadores a Vicente Rojo, Bernardo Recamier y Rogelio Naranjo y 
como directores a Carlos Fuentes, Henrique González Casanova, Carlos 
Monsiváis, Margarita Michelena. 
Lo sobresaliente de la producción mexicana y universal de más de cuarenta 
años se haya en esta publicación, lo mismo que los grandes fenómenos 
 
36 
 
sociales de su tiempo… y otros hechos del México contemporáneo, tanto 
como los grandes acontecimientos internacionales30 
Otro suplemento elaborado y dirigido por Benítez fue Sábado, del diario 
Unomásuno (1977-1986). Finalmente, en La Jornada, diario constituido en 
1984, Benítez administró el suplemento La Jornada Semanal (1987-1989) A la 
muerte del padre fundador, el 21 de febrero del 2000, dirigieron el 
suplemento: Roger Bartra y Juan Villoro. Hasta la fecha, su director es Hugo 
Gutiérrez Vega. 
En la actualidad, no obstante la tradición del vínculo periódicos-cultura, los 
intereses comerciales de las empresas periodísticas, desafortunadamente, 
seden más espacio a la publicidad e información que genera ganancia: 
espectáculos, deportes, nota roja. Hoy en día los diarios reducen sus páginas 
culturales y algunos las insertan en otras secciones. 
Por ejemplo, El Universal, del 22 de abril, del 2012, publica una sección de 
espectáculos de 22 páginas. Dentro de este apartado, al final, se inserta la 
sección cultural, sólo tres páginas. 
Se olvida la importancia de los suplementos culturales en la difusión y 
generación de arte y cultura. Hoy en día, de los suplementos que existían 
hasta 2008, sólo sobreviven tres: El Ángel, de Reforma; Jornada Semanal, de 
La Jornada y Laberinto, de Milenio Diario. Han dejado de existir: Sábado, de 
Unomásuno; Arena, de Excélsior; La Crónica Dominical, de La Crónica de 
Hoy; El Semanario Cultural, de Novedades, El Gallo Ilustrado, de El Día y 
Confabulario, de El Universal. 
                                                            
30 Musacchio. op. cit., p. 145. 
 
37 
 
Paradójicamente, afirma Gabriel Zaid, “la cultura, que ahora está como 
arrimada en la casa del periodismo, construyó la casa” 
Oficio periodístico 
Los Departamentos de prensa, dentro del universo periodístico cultural, son 
entidades, aunque pequeñas, dinámicas. Los nombres de sus integrantes no 
aparecen en primeras planas, sin embargo, su trabajo cumple su función de 
informar oportunamente sobre el acontecer cultural que se genera en el 
país.Una de ellas, la constituye el Departamento de prensa de la Coordinación 
de Difusión Cultural de la UNAM, encargada de recabar la información de 
las actividades más sobresalientes de la institución, para darla a conocer 
puntualmente a los universitarios, a través de Gaceta UNAM, y al público en 
general, con su difusión en los medios de comunicación masiva. 
Sin proponérselo conscientemente, sus integrantes llevan a cabo el consejo 
del famoso Ryszard Kapuściński, quien esgrime que escribir es imposible, sin 
un espíritu de colectividad, de cooperación, de buena voluntad, de 
comprensión recíproca. Aunque el escritor polaco refiere estas disposiciones 
para realizar un reportaje, este departamento las lleva a cabo para crear el 
ambiente que le permita realizar con éxito su trabajo. 
Éste, consiste en elaborar carteleras, boletines, notas informativas, 
entrevistas, y reportajes (más de 600 boletines al año) que se distribuyen, 
semanalmente, en los diferentes medios de comunicación, un promedio de 
100, entre diarios, revistas, agencias, televisoras y radiodifusoras. 
 
38 
 
Para la buena disposición, sin duda, influye definitivamente la materia prima 
del trabajo: escribir sobre la cultura universitaria y poder darla a conocer, 
contagiar la emoción que producen los espectáculos. 
Y cómo no entusiasmarse al saber que, invitados por la UNAM, filósofos como 
Savater, escritores como Saramago, cineastas de culto como Jodorowsky y 
poetas de la talla de Jaime Sabines, podrán dialogar con los estudiantes. 
Cómo dejar de ilusionarse si la Orquesta Filarmónica de la UNAM interpretará 
La novena sinfonía de Beethoven, el Mesías de Haendel, Dansón N° 2 de 
Arturo Márquez o programas contemporáneos dedicados a la música de los 
70 o a las composiciones de la saga Star-Wars y a las composiciones de The 
Queen. 
No hay manera de hacer a un lado la fascinación ante las fotografías de 
Josef Koudelka, uno de los artistas más famosos de la lente, que expone, por 
primera vez en México, en un recinto universitario, sus legendarias imágenes 
de la invasión Rusa a Praga, en 1968. 
Imposible abstenerse al gozo producido por Eduardo II, puesta en escena 
alucinante, de magna escenografía, que recrea los conflictos políticos y 
existenciales de este rey de la Inglaterra del siglo XIV, con una vigorosa 
actuación que patentiza la debilidad del monarca con un violento juego de 
Rugby y con una haka en el escenario realizada por cerca de veinte 
actores. 
Ante un vasto panorama cultural, siempre de calidad y diferente, el trabajo 
periodístico del pequeño departamento de prensa representa siempre un 
gozo y un reto. 
 
39 
 
La también pequeña oficina está situada un piso arriba de los cines del 
Centro Cultural Universitario. Tiene, como privilegio, un gran ventanal en 
escuadra que ofrece una visión favorecida de la explanada y de las 
personas que la circulan. 
Ahí, el bullicio y las carcajadas inician muy temprano, cuando se realiza la 
síntesis informativa. Y es que, al revisar rápidamente los diarios en busca de 
notas sobre la Coordinación de Difusión Cultural, es imposible no reír por una 
buena caricatura política. La publicidad de artículos de lujo, las notas de las 
secciones de Sociales, Deportes, Ciudad, Estados y Mundo, suscitan también 
distintas reacciones. 
El espacio, de tan diminuto, imposibilita la privacidad y como en familia, 
mientras se trabaja vertiginosamente, alguien comenta la aventura vivida en 
el trayecto del trabajo a la casa o viceversa. Otros rememoran su fin de 
semana o manifiestan su entusiasmo por trabajar una nota en especial. 
Cuando no existe un motivo para salir: cubrir un evento, realizar una 
entrevista o atender a los medios en una conferencia de prensa, los 
reporteros pasan el día en la oficina. Mientras tratan de escribir un boletín 
merecedor del Pulitzer, el teléfono y su demandante rin, rin, atemoriza, una y 
otra vez a las musas. Hay que atender las llamadas con solicitud de 
información o de cobertura de prensa; de aclaración de dudas y con avisos 
de detección de errores en la cartelera. 
Ante el bullicio imperante, invocar las sabias palabras de Kaliman “serenidad 
y paciencia” para concentrarse y poder realizar una urgente entrevista 
telefónica, pues alguno de los creadores universitarios acaban de ganar un 
premio y hay que consignarlo rápidamente. 
 
40 
 
En el trayecto del día desfilan, por la oficinita, compañeros de otras áreas, 
reporteros de la fuente cultural en busca de información o una máquina 
para poder escribir sus notas y estudiantes de comunicación solicitando 
apoyo para un trabajo escolar. Para aderezar el caos, un coctel musical de 
fondo. Democráticamente se complacen todos los gustos con los más 
variados géneros, compositores y épocas. 
Conforme pasa el tiempo, el centro de trabajo enmudece lentamente. El 
bullicio sede terreno pues sus habitantes empiezan a retirarse. Ya en 
penumbras, sólo se escucha débilmente el tecleo de la computadora de la 
Jefa de Prensa quien, para corregir, pelear a gusto con las notas de sus 
reporteros, suele retirarse cerca de la media noche. En esos momentos goza 
de pleno silencio. 
Oficio generoso 
En la década de los 80, la prehistoria para muchos, no existía internet, el 
teléfono celular, ni siquiera el fax. Se hablaba de ellos como avances 
tecnológicos imposibles de alcanzar, como parte de la ciencia ficción. Una 
máquina de escribir eléctrica y de esfera, significaba la más alta tecnología. 
Recién había dejado la facultad y con pavor iniciaba el largo camino de 
aprendizaje que significa la actividad profesional. Mi buena fortuna o los 
astros, como diría Monsiváis, estaban a mi favor y nuevamente mi alma 
mater se apiadaría de mí, volvería a llevarme por la senda del 
conocimiento, continuaría con mi formación, esta vez, laboral. 
El destino me dirigió al mundo cultural, para mí desconocido, inusitado. Me 
enfrentaba a nuevos conceptos: teatro, artes visuales, danza. ¿Cómo 
enfrentarlos? ¿Cómo transmitirlos? 
 
41 
 
La generosidad, entonces, acudió en mi auxilio. Jorge Meléndez y Andrés 
Ruíz, periodistas de Excélsior y El Universal, respectivamente, llegaron al 
Departamento de prensa de la Coordinación de Difusión Cultural. Con 
extrema paciencia corregían las notas, muchas veces, hasta transformarlas 
completamente. 
Mi ignorancia e inseguridad siempre encontraron en ellos, sabiduría y 
consejo; nunca prepotencia ni arrogancia. Jorge Meléndez, apenas me 
conocía y generoso accedió a prestarme, no sin advertirme que debía 
regresarlo, un valiosísimo libro: Entrevista con la Historia, de Oriana Fallaci. Me 
proporcionaba así, una lección sobre el género de la entrevista y al mismo 
tiempo, de generosidad. 
Andrés Ruiz fue bondadoso en exceso, extendió la invitación a colaborar, 
nada más y nada menos que en la sección cultural de El Universal, quizá 
pensó que no aceptaríamos la oferta. Sin embargo, en su momento, cumplió 
su palabra. Creyó en nosotros y nos dotó de confianza. 
El compromiso y rigor con el trabajo lo aprendí de Estela Alcántara. Gracias 
a sus gestiones, las notas escritas en el departamento serían publicadas en 
Gaceta UNAM. Desde entonces nos veríamos en la necesidad de revisar, 
revisar y revisar, todas las veces posibles: datos, frases, nombres, fechas. 
Aprendí que publicar implica un compromiso con la institución, creadores y 
lectores. 
 
 
 
 
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Integrantes del Departamento de Prensa de la CDC 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
Un equipo solidario y profesional. En la primera fotografía, de derecha a Izquierda, aparece 
Mario, encargado de la síntesis electrónica. A su lado, Salatiel, quien revisa diarios y revistas. 
Christian y Humberto son los reporteros. En la fotografía central Estela, (jefa de prensa) y yo, al 
término de una obra de teatro. En la última instantánea se ve nuevamente Estela, junto con 
Ceci,comisionada de la cartelera. Finalmente, Rosa María y Lupita se encargan del área 
secretarial. 
 
43 
 
3. Actividades Culturales 
 
Luego de dar a conocer la historia y misión de la Coordinación de Difusión 
Cultural, creí necesario adentrar al lector al microcosmos de su diario 
quehacer, el de sus actividades culturales. Pensé conveniente mostrar a 
través de 15 notas, entre reseñas, entrevistas y boletines, cómo institución y 
artistas concebían la oferta cultural. Las notas constituyen una pequeña, 
muestra, sin embargo representativa, de las muchas actividades que año 
con año genera la institución universitaria. 
“Actividades culturales” invita al lector a conocer propuestas artísticas que 
por sus características únicas son difíciles de apreciar fuera de la Universidad. 
Actividades que por estar patrocinadas por la máxima casa de estudio 
difunden emociones, conocimiento, conciencia y estética y que además se 
encuentran muy lejos de perseguir un fin lucrativo. 
Esto es posible porque la Coordinación de Difusión Cultural de la UNAM 
cuenta con la infraestructura adecuada: espacios profesionales y personal 
capacitado. La única preocupación del artista -nacional o extranjero- es 
entonces concretar su proyecto con entera libertad. El resultado es una 
gama extensa de propuestas de calidad, de entrada libre o a muy bajo 
costo, vanguardistas, lúdicas, propositivas. 
Son los creadores quienes, en estas notas de Artes Plásticas, Teatro, Danza, 
Música, Literatura y Cine, hablan de su proceso creativo. Al ser publicadas 
para difundir los eventos, algunas informan también el costo, horario y lugar 
del espectáculo. 
 
 
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Ulf Rollof: proyecto axolotl, o la adaptación a partir de la naturaleza 
 
 
 
 
Ulf Rollof: proyecto axolotl fue una de las primeras exposiciones presentadas en El Museo 
Universitario Arte Contemporáneo (MUAC), una de las construcción más reciente en el CCU y 
que se inauguró en el 2008. La nota, publicada el 18 de abril del 2009, consigna la 
inauguración de dicha muestra. (Foto de Juan Antonio López). 
 
 
 
 
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 “Hubo un tiempo en que yo pensaba mucho en los axolotl. Iba a verlos al 
acuario del Jardín des Plantes y me quedaba horas mirándolos, observando 
su inmovilidad, sus oscuros movimientos. Ahora soy axolotl”, dice Cortazar al 
inicio del cuento que escribió luego de ser conquistado por este enigmático 
anfibio que da motivo a una nueva exposición en el Museo Universitario Arte 
Contemporáneo: Ulf Rollof: proyecto axolotl. 
La muestra surgió a medida de los años 80 cuando el artista sueco, su 
creador, residía en un pueblo cercano al lago de Pátzcuaro, Michoacán, en 
cuyas aguas habitan los ajolotes. Rollof quedó sorprendido por la 
capacidad que tienen estos anfibios de adaptarse al medio, de poder 
cambiar las branquias, que como penachos sobresalen en su cabeza, por 
pulmones que les permiten vivir fuera del agua. 
El mito azteca 
Él quiso entonces convertirse en un axolotl y comunicarse con este ser que 
forma parte de la mitología azteca (atl-agua xolotl-monstruo; monstruo 
acuático), que representa al dios Xólotl, hermano de Quetzalcóatl y 
monstruoso a causa del nacimiento gemelar. 
“Me intrigó este animal de 25 centímetros de largo, que vive de seis a 25 
años y que conocí cuando me lo ofrecieron como comida. Quise saber de 
su metamorfosis”. Entonces Ulf Rollof inició el sacrificio, abrió el vientre de una 
de esas criaturas que más tarde cubrió con látex para conservarlo. Nació así 
su proceso artístico que consistía en comunicarse con estos seres 
prehispánicos. El ajolote volvía a nacer mediante un procedimiento creativo. 
Como un gesto de reciprocidad creó, para los ajolotes, un traje de luz que 
explicaba la anatomía humana: “cosí un pedazo de tela siguiendo la forma 
 
46 
 
de las pieles de animales cuando se ponen a secar. Me envolví con él 
sosteniéndolo con un cinturón de seguridad. Lo cubrir con látex mezclado 
con sulfuro para resaltar el hermoso e intenso color amarillo limón”. 
Encima de la tela vulcanizó pedazos del hule rojo con la forma de órganos 
humanos sobre los que montó luces intermitentes: cuatro para la columna 
vertebral, tres para los pulmones y, paralelas a éstas, una luz roja y otra 
amarilla para el corazón. Siete luces blancas representaban el intestino. 
Finalmente, tres grandes luces naranjas girando alrededor de una luz 
también naranja parpadeante para posicionar el alma en el estómago. 
Para comunicarse con estos anfibios, Ulf Rollof colocó también tres faros 
gigantes, cuya misión era atraer a los peces: una superficie cuadrada de 
látex que flotaría sostenida por cuatro cámaras de llanta de camión. Luces 
rojas y naranjas indicarían la posición de los faros y, en el centro, un cono 
lleno de agua salada penetraría las profundidades del lago. “Una luz intensa 
iluminaba el cono para asistir al proceso reproductivo de los ajolotes”. 
El artista trabaja con látex porque es un material económico que soporta los 
cambios de la naturaleza, el viento y el agua. De alguna manera, como los 
ajolotes, éste se adapta también. Aunque no pudo colocar estas boyas en 
el lago de Pátzcuaro, el proyecto quedó registrado y se exhibe en el Museo 
Universitario Arte Contemporáneo (MUAC), incluyendo bocetos, fotografías y 
documentación sobre el proceso artístico. 
Similar a una evolución elíptica, esta propuesta gestiona concurrencias de 
definiciones antagónicas. Se trata de una confrontación de lo mecánico y lo 
orgánico; lo natural y lo tecnológico. Incluso, podría identificarse como un 
objeto de seudo observación biológica que simula la instrumentación 
científica del siglo XIX, o como un acercamiento crítico a las relaciones 
 
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paradójicas entre la mitología milenaria y el pragmatismo moderno, como 
sucede con buena parte de la obra de Rollof. 
Para Guillermo Santamarina, curador del proyecto, el fundamento de esta 
instalación es en sí mismo el develar un sincretismo: el ajolote mexicano que, 
por fortuna, todavía no ha llegado a la extinción total. El ajolote, que es un 
símbolo tierno del vínculo animal-humano, tal y como las culturas 
precolombinas llegaron a identificarlo con la tenaz metamorfosis de una 
deidad en un trance de salvación. Asimismo manifiesta el presagio donde 
las creaturas humanas y su hábitat tendrán que evolucionar veloz e 
inteligentemente para postergar su desaparición. 
Un dios que huye de la muerte 
Ulf Rollof: proyecto axolotl fue inaugurada con la presencia de Anna 
Lindstedt, embajadora se Suecia en México; Graciela de la Torre, directora 
general de Artes Visuales, y Sealtiel Alatriste, coordinador de Difusión Cultural 
de la UNAM. 
La embajadora dijo que el artista, al observar la capacidad de adaptación 
del ajolote, quedó fascinado porque de alguna manera él vivía un 
momento semejante. 
“Rollof -apuntó- enfrentaba un proceso de acomodo en México y tenía que 
acostumbrarse y adaptarse a su nuevo país. La mayoría carecemos de la 
capacidad que tienen los ajolotes. Ahora nos toca a nosotros encontrar 
formas para vivir en armonía con nuestro medio ambiente, tenemos que 
aprender a respetar la naturaleza y cuidar de ella para sobrevivir”. 
En su obra, el artista investiga el equilibrio tan frágil entre ser humano, medio 
ambiente, tecnología y cultura. Despierta pensamientos sobre asuntos que 
 
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debemos considerar en torno a nuestra vida en la Tierra a futuro y sobre 
nuestra fragilidad, finalizó Lindstedt. 
A su vez, Graciela de la Torre comentó que la pieza forma parte de la 
colección del MUCA y que se exhibe con el apoyo del Instituto de Biología 
de la UNAM y su departamento de Zoología. Explicó que Ulf Rollof: proyecto 
axolotl funcionará como puente entre el ciclo de exposiciones inaugural, en 
particular con la muestra Recursos incontrolables…y la nueva propuesta 
curatorial que se presentará el primer semestre de este

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