Logo Studenta

La-poltica-indigenista-en-el-gobierno-del-presidente-Enrique-Pena-Nieto-y-la-apuesta-por-el-desarrollo-economico-de-los-pueblos-indgenas

¡Este material tiene más páginas!

Vista previa del material en texto

1 
 
 
UNIVERSIDAD NACIONAL AUTÓNOMA 
DE MÉXICO 
 
 
FACULTAD DE ECONOMÍA 
 
LA POLÍTICA INDIGENISTA EN EL GOBIERNO DEL 
PRESIDENTE ENRIQUE PEÑA NIETO Y LA 
APUESTA POR EL DESARROLLO ECONÓMICO DE 
LOS PUEBLOS INDÍGENAS 
 
 
TESIS 
 
QUE PARA OBTENER EL GRADO DE 
LICENCIADO EN ECONOMÍA 
 
PRESENTA: 
THOMAS ENRRIQUE TORREBLANCA MARÍN 
 
 
DIRECTOR DE TESIS: 
MTRO. ABELARDO ANÍBAL GUTIÉRREZ LARA 
 
 
 
CIUDAD UNIVERSITARIA, CD.MX., 2018. 
 
 
UNAM – Dirección General de Bibliotecas 
Tesis Digitales 
Restricciones de uso 
 
DERECHOS RESERVADOS © 
PROHIBIDA SU REPRODUCCIÓN TOTAL O PARCIAL 
 
Todo el material contenido en esta tesis esta protegido por la Ley Federal 
del Derecho de Autor (LFDA) de los Estados Unidos Mexicanos (México). 
El uso de imágenes, fragmentos de videos, y demás material que sea 
objeto de protección de los derechos de autor, será exclusivamente para 
fines educativos e informativos y deberá citar la fuente donde la obtuvo 
mencionando el autor o autores. Cualquier uso distinto como el lucro, 
reproducción, edición o modificación, será perseguido y sancionado por el 
respectivo titular de los Derechos de Autor. 
 
 
 
2 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
“LA POLÍTICA INDIGENISTA EN EL GOBIERNO DEL 
PRESIDENTE ENRIQUE PEÑA NIETO Y LA APUESTA POR 
EL DESARROLLO ECONÓMICO DE LOS PUEBLOS 
INDÍGENAS” 
 
 
3 
 
 
AGRADECIMIENTOS 
 
 
A mi esposa Leticia por su incansable apoyo e inconmensurable amor. 
 
A mis padres que con esfuerzo, dedicación, amor y entrega me han dado todo. 
 
A mis hermanos que nunca dejaron de insistir y de apoyarme. 
 
Al Mtro. Aníbal Gutiérrez Lara, por la confianza, el apoyo, por creer en mí y por 
siempre impulsarme a ser mejor, pero, sobre todo, por su amistad. 
 
A mis amigos, compañeros de mil batallas, aventuras, desaciertos y logros. 
 
A la Universidad Nacional Autónoma de México y a la Facultad de Economía. 
 
 
 
4 
 
ÍNDICE 
 
Introducción 8 
 
Capítulo 1. Breve historia del indigenismo en México 21 
1.1 ¿Qué es el indigenismo? 21 
1.2 Periodos del indigenismo en México. 23 
1.2.1 Periodo preinstitucional. 24 
1.2.2 Indigenismo institucionalizado. 27 
1.2.3. Neoindigenismo. 34 
1.3 Diferencias y similitudes entre el indigenismo mexicano y el 
indigenismo latinoamericano. 
41 
1.3.1. Perú. 42 
1.3.2. Bolivia. 42 
1.3.3. Brasil. 43 
 
Capítulo 2. Marco de Planeación del Desarrollo de los Pueblos 
Indígenas de México 
45 
2.1. Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos 46 
2.2. Convenio 169 de la Organización Internacional del Trabajo 50 
2.3. Ley de la Comisión Nacional para el Desarrollo de los Pueblos 
Indígenas 
58 
2.4. Ley de Planeación 60 
2.4.1. Sistema Nacional de Planeación Democrática 61 
2.4.2. Participación Social en la Planeación 62 
2.4.3. Plan Nacional de Desarrollo (PND) 63 
2.5. Plan Nacional de Desarrollo, 2013-2018 64 
2.6. Programa Especial de los Pueblos Indígenas 2014-2018 70 
2.7. Armonización Legislativa en las Constituciones y Leyes Estatales 73 
 
Capítulo 3. Indicadores Sociodemográficos de la Población 
Indígena de México 
76 
3.1. Población Indígena Total 78 
3.2. Estructura de la Población Indígena 79 
3.3. Distribución Espacial de la Población Indígena 81 
3.4. Población Hablante de Lengua Indígena 89 
3.5. Actividad Económica 91 
3.6. Migración Interna e Internacional 92 
3.7. Pobreza 93 
3.8. Carencia por Rezago Educativo 96 
3.9. Otros Indicadores Educativos 97 
3.10. Carencia por Acceso a los Servicios de Salud 98 
3.11. Salud Reproductiva y Fecundidad 100 
3.12. Carencia por Acceso a la Seguridad Social 101 
3.13. Carencia por Calidad y Espacios en la Vivienda 102 
INDICE 
 
5 
 
3.14. Carencia por Acceso a los Servicios Básicos en la Vivienda 103 
3.15. Otros Indicadores de Vivienda 104 
3.16. Carencia por Acceso a la Alimentación 106 
3.17. Población con Ingreso Inferior a las Líneas de Bienestar 106 
 
Capítulo 4. Principales resultados de la nueva política indigenista 108 
4.1. Política de inclusión y desarrollo del Gobierno Federal. 108 
4.1.1. El enfoque y énfasis productivo de la política de inclusión y 
desarrollo del Gobierno Federal. 
115 
4.1.2. Contribución del PROIN a la Economía de la Población 
Indígena. 
120 
4.2. Obras y acciones de la CDI para el desarrollo de los Pueblos 
Indígenas, 2013-2017. 
123 
4.2.1. Desarrollo Económico. 124 
4.2.2. Derechos indígenas y acceso a la justicia. 130 
4.2.3. Desarrollo Social. 133 
4.2.3.1. Infraestructura básica. 134 
4.2.3.2. Vivienda. 135 
4.2.3.3. Salud. 135 
4.2.3.4. Educación. 136 
4.2.4. Participación de la Población Indígena y Coordinación 
Intergubernamental. 
139 
4.2.4.1. Participación en foros Internacionales. 141 
4.2.5. Preservación y Fomento de la Cultura. 145 
4.2.5.1. Sistema de Radiodifusoras Indígenas. 149 
4.2.6. Resultados y avances en los indicadores socioeconómicos de 
la Población Indígena. 
150 
4.2.6.1. Carencias Sociales. 152 
4.2.6.2. Resultados de pobreza a nivel nacional y en la población 
indígena. 
153 
4.3. Retos de la nueva política indigenista. 155 
 
Conclusiones 158 
 
Bibliografía 164 
 
 
INDICE 
 
6 
 
Índice de cuadros, figuras, gráficas y mapas. 
 
Cuadro 1.1 Cronología de la inauguración de Centros Coordinadores 
Indigenistas en México. 
31 
Cuadro 1.2 Adecuación legislativa. 37 
Cuadro 2.1. Declaración de las Naciones Unidas sobre los Derechos de 
los Pueblos Indígenas 
52 
Cuadro 2.2. Criterios para la Armonización Legislativa 73 
Cuadro 2.3. Marco Jurídico Básico para la Armonización Legislativa. 74 
Cuadro 2.4. Derechos Indígenas reconocidos en el Marco Jurídico 
Básico. 
75 
Cuadro 3.1. Lenguas indígenas de México. 76 
Cuadro 3.2. Distribución de la población total e indígena por tamaños 
de localidad, 2010. 
81 
Cuadro 3.3. Regiones y municipios indígenas por entidad federativa, 
2010. 
84 
Cuadro 3.4. Población total y población indígena por entidad federativa, 
2005-2010. 
88 
Cuadro 3.5. Distribución de la población indígena: inmigrantes y 
emigrantes recientes en entidades federativas seleccionadas. 
93 
Cuadro. 3.6. Medición de la pobreza en la población indígena de 
México, 2010 – 2014. 
94 
Cuadro 3.7. Medición de la pobreza en la población no indígena de 
México, 2010 – 2014. 
95 
Cuadro 4.1. Reestructuración de los programas sustantivos de la CDI. 113 
Cuadro 4.2. Programas sustantivos de la CDI. 114 
Cuadro 4.3. Estrategias y acciones en materia productiva del Programa 
Especial de los Pueblos Indígenas 2014 – 2018. 
118 
Cuadro 4.4. Expo de los Pueblos Indígenas. 128 
Cuadro 4.5. Avances y reducción de brechas de algunos indicadores 
de la Población Indígena, 2010-2015. 
151 
Figura 2.1. Plan Nacional de Desarrollo. 65 
Gráfica 2.1. Número de derechos indígenas reconocidos en las 
Constituciones Estatales, 2014. 
75 
Gráfica 3.1. Población Indígena total y por condición de habla, 2010-
2015 
79 
Gráfica 3.2. Estructura de la población indígena por edad y sexo 2010 
– 2015 
80 
Gráfica 3.3. Población Indígena por entidad federativa, 2015. 87 
Gráfica 3.4. Población hablante de lengua indígena por entidad 
federativa, 2015 
90 
Gráfica 3.5. Población hablante de lengua indígena por entidad 
federativa, 2015 
90 
Gráfica 3.6. Distribución de la población de 15 años y más por posición 
en el trabajo según condición de habla indígena, 2015 
91 
INDICE 
 
7 
 
Gráfica 3.7. Medición de la pobreza de la población indígena y no 
indígena en México, 2014 
95 
Gráfica 3.8. Porcentaje de la población con rezago educativo, 2010-
2014. 
96 
Gráfica 3.9. Porcentaje de población de 3 a 14 años que asiste a la 
escuela por edad según condición de habla de lengua indígena, 2015. 
97 
Gráfica 3.10. Porcentaje de la población con carencia por acceso a los 
servicios de salud, 2012-2014 
99 
Gráfica 3.11. Promedio de hijos nacidos vivos de las mujeres en edad 
fértil por grupos de edad según condición de habla de lengua indígena, 
2014. 
100 
Gráfica 3.12.Porcentaje de la población con carencia por acceso a la 
Seguridad Social, 2012 – 2014 
102 
Gráfica 3.13. Porcentaje de la población con carencia por calidad y 
espacios de la vivienda, 2012 – 2014 
103 
Gráfica 3.14. Porcentaje de la población con carencia por acceso a los 
servicios básicos en la vivienda, 2012-2014 
104 
Gráfica 3.15. Porcentaje de viviendas habitadas por disponibilidad de 
agua entubada según condición de habla de lengua indígena de sus 
ocupantes, 2015. 
105 
Gráfica 3.16. Porcentaje de la población con carencia por acceso a la 
alimentación, 2012 – 2014 
106 
Gráfica 3.17. Porcentaje de la población con ingreso inferior a las líneas 
de bienestar, 2014 
107 
Gráfica 4.1. Población en situación de pobreza, 2012-2016. 153 
Gráfica 4.2. Población en situación de pobreza extrema, 2012-2016. 153 
Gráfica 4.3. Rezago educativo, 2012-2016. 153 
Gráfica 4.4. Carencia por acceso a los servicios de salud, 2012-2016. 153 
Gráfica 4.5. Carencia por calidad y espacios de la vivienda, 2012-2016. 154 
Gráfica 4.6. Carencia por acceso a la alimentación, 2012-2016. 154 
Gráfica 4.7. Carencia por acceso a los servicios básicos en la vivienda, 
2012-2016. 
154 
Gráfica 4.8. Carencia por acceso a los servicios básicos en la vivienda, 
(sin combustible) 2012-2016. 
154 
Mapa 3.1 Pueblos y lenguas indígenas de México. 77 
Mapa 3.2. Regiones indígenas por entidad federativa 85 
Mapa 3.3. Población indígena por Municipio. 86 
 
 
8 
 
INTRODUCCIÓN 
 
 
La Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, en su artículo 2°, 
establece que la Nación Mexicana es única e indivisible; tiene una composición 
pluricultural sustentada originalmente en sus pueblos indígenas, los cuales se 
definen en la Carta Magna como: “aquellos que descienden de poblaciones que 
habitaban en el territorio actual del país al iniciarse la colonización y que 
conservan sus propias instituciones sociales, económicas, culturales y políticas, 
o parte de ellas”. 
 
Uno de los principales rasgos de este sector de la población es su gran 
diversidad y pluralidad. Actualmente, de acuerdo con el Instituto Nacional de 
Lenguas Indígenas (INALI) existen en México, 9 familias lingüísticas que 
agrupan a 68 lenguas que a su vez se subdividen en 364 variantes. A partir del 
número de lenguas indígenas existentes, se reconoce que en México existen 
68 pueblos indígenas a lo largo del territorio nacional. 
 
Por su parte, la Comisión Nacional para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas 
(CDI) estima, a partir de la Encuesta Intercensal 2015 elaborada por el Instituto 
Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), que 12 millones de personas que 
viven en un hogar indígena, es decir, alrededor del 10% de la población total del 
país, forman parte de un hogar indígena, donde algún integrante del hogar, 
declaró ser hablante de lengua indígena. 
 
La mayoría de los asentamientos con población indígena ya sea por razones 
históricas, económicas, sociales, por persecuciones o bien por desplazamientos 
que han padecido, se caracterizan por una gran dispersión territorial que los ha 
excluido del desarrollo. Este importante sector de la población presenta los 
mayores niveles de pobreza y pobreza extrema, así como de rezagos y 
carencias en materia de salud, educación, alimentación y calidad de la vivienda 
INTRODUCCIÓN 
 
9 
 
por mencionar solo algunos aspectos más relevantes. Asimismo, el Estado 
mexicano y la sociedad en su conjunto tienen una deuda histórica con los 
Pueblos Indígenas, por lo que estudiar y entender la política indigenista en el 
Gobierno del presidente Enrique Peña Nieto es relevante porque el Estado 
mexicano tiene la responsabilidad de promover, respetar, proteger y garantizar 
los derechos económicos, sociales, culturales, civiles y políticos de los Pueblos 
Indígenas. 
 
La hipótesis de trabajo consiste en afirmar que: la política indigenista en el 
Gobierno del Presidente Enrique Peña Nieto se diferencia sustancialmente y 
toma distancia de lo realizado durante el Siglo XX y se caracteriza por poner en 
el centro de la acción pública el desarrollo económico de los pueblos indígenas, 
siendo estos los actores principales de su propio desarrollo a partir de la 
generación de ingresos monetarios y no monetarios en su propia comunidad, 
propiciando la actividad económica a escala local, además de dotar de los 
servicios básicos, fomentando la participación de la comunidades, respetando 
sus derechos, patrimonio y cultura pero modificando el enfoque asistencialista 
y paternalista que por muchos años caracterizo al indigenismo en México. 
 
De ahí que se pretende analizar las políticas públicas impulsadas por el actual 
Gobierno, en un marco de respeto de los derechos y la identidad cultural de los 
Pueblos Indígenas, las cuales deben propiciar la participación y la autogestión 
de sus procesos de desarrollo promoviendo la transversalidad y la integralidad 
de las propuestas y acciones de política pública. 
 
Por tal razón, en el primer capítulo de este trabajo se describe la evolución 
histórica y conceptual del indigenismo en nuestro país; asimismo se señalan las 
características que han acompañado a cada una de las etapas, desde la 
construcción de la Nueva España hasta la adopción del neoliberalismo como 
política oficial del Estado mexicano. No se pretende realizar una compilación 
del pensamiento indigenista en México, ni contrastar las opiniones de los 
INTRODUCCIÓN 
 
10 
 
expertos; por el contrario, se busca retomar aquellas acciones que han 
generado un impacto directo sobre la población indígena a través de la 
instrumentación de políticas públicas concretas a lo largo de la historia de 
nuestro país. 
 
En el capítulo segundo se analiza el marco de planeación del desarrollo de los 
pueblos y comunidades indígenas, ya que al Estado mexicano le corresponde 
la rectoría del desarrollo nacional, garantizando que éste sea integral y 
sustentable, fortaleciendo la Soberanía de la Nación y su régimen democrático 
y que, mediante la competitividad, el fomento del crecimiento económico y el 
empleo y una más justa distribución del ingreso y la riqueza, permita el pleno 
ejercicio de la libertad y la dignidad de los individuos, grupos y clases sociales. 
De esta manera, se revisa el contenido que en la materia contienen diversas 
leyes, como son la Carta Magna, la Ley de la Comisión Nacional para el 
Desarrollo de los Pueblos Indígenas, la Ley de Planeación y las constituciones 
estatales, entre otras; así como los diferentes tratados internacionales que el 
país ha signado en la materia. 
 
En el tercer capítulo se examina la evolución reciente de diversos indicadores 
sociodemográficos de la población indígena del país. Lo anterior, para tener una 
idea clara de la magnitud de los niveles de pobreza, marginación y carencias 
sociales de este sector de la población. 
 
Finalmente, en el cuarto capítulo se hace un recuento de los principales 
resultados de la nueva política indigenista del gobierno del presidente Enrique 
Peña Nieto y como a partir de un enfoque de derechos e inclusión a través de 
políticas públicas que promueven su desarrollo, bienestar y que respetan sus 
derechos e identidad, se conforma una política de nueva generación, que 
contribuye a cerrar las brechas entre los diferentes sectores de la sociedad 
nacional, particularmente de la población indígena, lo cual implica hacer efectivo 
el ejercicio de los derechos sociales, a través del acceso a servicios básicos 
INTRODUCCIÓN 
 
11 
 
como el agua potable, drenaje y saneamiento, electricidad, seguridad social, 
educación, alimentación, vivienda digna e ingresos suficientes para una vida 
digna. 
 
LA ECONOMÍA PÚBLICA COMO MARCO TEÓRICO-CONCEPTUAL DE INTERVENCIÓN DE LA 
POLÍTICA INDIGENISTA DEL ESTADO MEXICANO. 
 
De acuerdo con José Ayala (2000), la economía pública es una rama de la 
economía que estudia elcomportamiento, la organización, la estructura y las 
funciones del sector público de la economía en su sentido más amplio. Es decir, 
comprende el estudio del gasto y el ingreso públicos, ya tradicional en las 
finanzas públicas, pero analizados bajo una nueva perspectiva. La economía 
pública comprende las teorías del gasto y el ingreso, pero también incorpora la 
economía del bienestar y la elección pública. A su campo de estudio se agregan 
importantes temas de finanzas públicas como la deuda pública, la empresa 
pública y otros organismos públicos; los problemas institucionales y 
organizacionales de la administración pública; el sistema de seguridad social, 
las políticas sociales y la economía del bienestar; el marco jurídico, normativo y 
reglamentario de la regulación económica; los procesos políticos y sociales que 
intervienen en las elecciones públicas y las acciones colectivas que emprenden 
los agentes económicos frente a las distintas políticas gubernamentales, y no 
únicamente las presupuestarias tradicionales y, por último, las finanzas de los 
gobiernos locales y las finanzas gubernamentales en el contexto del federalismo 
fiscal y político. 
 
Desde esta perspectiva, el gasto público puede ser analizado desde distintos 
ángulos que permiten un entendimiento más amplio de acuerdo con Ayala 
(2000): 
 
 Las implicaciones macroeconómicas para el conjunto de la economía 
(déficit, deuda, ahorro, consumo e inversión) y su papel en la 
INTRODUCCIÓN 
 
12 
 
estabilización, el ciclo económico, el crecimiento económico, entre otros 
temas. 
 La incidencia microeconómica en la asignación de recursos en la 
economía (gasto en infraestructura, educación, salud, ciencia y 
tecnología), y su implicación para mejorar la eficiencia económica, la 
productividad y la competitividad. 
 La influencia social en la equidad y el bienestar de la sociedad 
(gasto social, políticas distributivas, seguridad social y pensiones) 
y sus resultados para la justicia, la equidad y combate a la pobreza 
y la desigualdad. 
 Su implicación política en los procesos de elección pública y acción 
colectiva (definición, aprobación y administración del presupuesto, 
negociación colectiva de los programas de gasto; proceso electoral y 
definición del presupuesto y ciclo político de los negocios), y sus 
consecuencias en los procesos de toma de decisiones. 
 La importancia de las instituciones en la definición del marco de 
restricciones legales para llevar a cabo los procesos de presupuestación, 
programación y planeación del gasto; asimismo la reforma institucional y 
sus resultados en la definición del sistema o régimen político en el cual 
se procesan las decisiones del gasto público. 
 Las implicaciones administrativas en la definición de los diversos 
procesos involucrados en la economía pública, y sus consecuencias para 
la definición de un cierto tipo de modelos de administración pública. 
(centralizada, descentralizada, federal, etcétera). 
 
Por su parte, el gasto público y las políticas públicas que se derivan de éste, a 
pesar de su creciente importancia, históricamente ha sido relativamente menos 
estudiado que los ingresos públicos. El gasto público se ha analizado de 
acuerdo con un principio relativamente sencillo; el nivel de gasto presupuestado 
dependerá de las necesidades económicas y sociales, pero sobre todo de la 
disponibilidad presupuestaria existente. La ortodoxia presupuestaria funcionó, y 
INTRODUCCIÓN 
 
13 
 
hoy día sigue operando en México, bajo una máxima inalterable: gastar solo lo 
que se tiene, en otras palabras, gasto igual a ingresos. Sin embargo, hay 
economistas que reconocen que el gasto tiene implicaciones que rebasan por 
mucho el manejo de un presupuesto equilibrado, y se dieron a la tarea de 
estudiar sus implicaciones macroeconómicas. De esta forma, se ha descubierto 
que el gasto agregado tiene una influencia decisiva en el crecimiento de la 
economía. Los efectos acelerador y multiplicador han sido un descubrimiento 
trascendental que permite analizar el papel anticíclico y estabilizador del gasto. 
Un ejemplo de ello son las funciones: asignación, distribución y estabilización 
del Estado señalada por Musgrave (1989), las cuales se habrán de retomar más 
adelante. Asimismo, solo recientemente se ha reconocido que la asignación 
eficiente de recursos y la equidad social son dos funciones sustantivas del 
gobierno. Por su parte, el proceso de elección pública y acción colectiva en los 
cuales intervienen distintos agentes, incluido el gobierno, fue largamente 
ignorado, como sí el Estado fuera el único actor que decidía, unilateralmente, la 
política presupuestaria. Fue sólo con el surgimiento de la escuela de elección 
pública cuando se incorporó el proceso político en un sentido amplio, como un 
elemento importante que interviene en la elaboración del presupuesto público 
(Ayala, J. 2000). 
 
Siguiendo a Ayala (2000), la economía pública amalgama tres ramas de la 
economía: la economía del bienestar, la elección pública y las finanzas públicas. 
La economía del bienestar tradicional ha contribuido decisivamente a mejorar la 
comprensión del papel del Estado en la economía. Primero, descubrió que en 
el mercado podrían surgir fallas que provocarían pérdidas irrecuperables de 
eficiencia y bienestar, y, en consecuencia, el gobierno tenía un papel importante 
que desempeñar en la corrección de estas “fallas”. En segundo lugar, ideó la 
noción de función social del bienestar, construida a partir de las preferencias 
individuales que se agregan socialmente. Ello permitiría formular un modelo 
normativo que permitiera leer las preferencias sociales de los individuos. Estas 
se podrían expresar por algún método de votación, de modo que la utilidad 
INTRODUCCIÓN 
 
14 
 
social de un programa de gasto fuera el resultado de la suma de las utilidades 
individuales (U social = u1 + u2 + u3… un). La idea trascendental es que la 
intervención gubernamental permitiría alcanzar una más eficiente asignación de 
recursos y una mejor distribución del ingreso si se corrigen las fallas del 
mercado y la sociedad acepta una mejor distribución del ingreso que amplíe el 
bienestar social. Esta original propuesta desafió los modelos convencionales de 
equilibrio general y competencia perfecta, según los cuales el mercado era por 
definición el mecanismo más eficiente de asignación de recursos de la 
economía. 
 
Los teóricos de la economía del bienestar pensaron que el desempeño eficiente 
de la economía y la mejor distribución del ingreso se resolvían con 
intervenciones públicas crecientes, sin advertir que la excesiva intervención 
también podría acarrear problemas. Sin embargo la economía del bienestar 
avanzó sobre sus propias limitaciones e introdujo dos nociones nuevas: a) que 
las soluciones basadas en la intervención del Estado podrían no ser óptimas en 
el sentido de Pareto, pero sí superiores a las de los mercados competitivos, es 
decir, podrían surgir soluciones “segundo mejor óptimo” (second best), y b) que 
el Estado también puede fallar porque enfrenta problemas de información y del 
conocimiento de las preferencias de los agentes económicos; es decir, relativizó 
la capacidad del gobierno para resolver eficientemente la asignación de 
recursos y mejorar la distribución del ingreso (Ayala, J. 2000). 
 
Por su parte, la elección pública se preocupó por estudiar los problemas 
originados en los procesos de toma de decisiones de los agentes, incluido el 
Estado. Formuló teorías sobre el crecimiento del Estado a través de distintos 
modelos; desarrollo una teoría de las votaciones mejorando los modelos 
tradicionales de la economía del bienestar que explicaban las decisiones 
sociales, e introdujo el papel de las instituciones por medio de la denominada 
teoría de las constituciones, para relacionar el papel de las leyes en la 
economía. Además, criticóla exagerada importancia que daba la economía del 
INTRODUCCIÓN 
 
15 
 
bienestar a la intervención del gobierno para resolver cualquier problema 
económico. También desarrolló, bajo la inspiración de las teorías 
contractualistas del Estado, una visión de acuerdo con la cual entre el gobierno 
y la sociedad se establece un contrato social. El “contrato” le imprimiría al 
Estado una tendencia al crecimiento ilimitado; es decir, el gobierno crecería más 
allá de lo socialmente necesario y de lo económicamente eficiente porque 
habría irremediablemente una fuerte solidaridad entre electores, políticos y 
burócratas para que el gasto público creciera año tras año. Así la intervención 
pública de un poderoso Leviatán terminaría por impedir que los mercados 
funcionen adecuadamente. La conclusión evidente es que el Estado podría 
fallar en mejorar la eficiencia económica y social y, en consecuencia, debería 
concentrar su atención exclusivamente en fijar un marco regulatorio mínimo 
para favorecer el establecimiento de un ambiente económico de competencia. 
(Ayala, J. 1990;2000) 
 
Asimismo, Ayala, J. (2000) nos señala que el neoinstitucionalismo económico 
ha permitido incorporar la dimensión institucional de las finanzas públicas y de 
la economía pública como un elemento decisivo para entender de un modo más 
comprensivo y realista el papel del Estado en la economía. Por ejemplo, la teoría 
de las instituciones y de las organizaciones permite incorporar el papel de las 
restricciones legales en la economía pública en sus distintas áreas: la 
presupuestación, la organización del sector público, las empresas públicas, la 
seguridad social, etcétera. Distintas teorías que forman parte del 
institucionalismo empiezan a aplicarse con éxito para explicar problemas de 
asignación de recursos y de equidad. Se ha aplicado el diseño de instituciones 
para atenuar problemas de información, corregir fallas del mercado y del 
gobierno, etcétera, para atender problemas de asignación de recursos con 
mecanismos que están fuera del mercado. El diseño de nuevas instituciones ha 
permitido generar un ambiente más favorable a la coordinación económica 
cuando el mercado es ineficiente. Y por supuesto hay muchas otras 
aplicaciones institucionalistas. 
INTRODUCCIÓN 
 
16 
 
 
Las finanzas públicas, por su parte, han logrado avanzar en aspectos técnico-
instrumentales; especialmente han avanzado mucho las técnicas para 
programar el gasto y optimizar el ingreso público. Las mediciones del gasto y la 
incidencia fiscal son cada vez más adecuadas. Las definiciones del sector 
público, a través del sistema de cuentas nacionales, se han precisado 
significativamente. La econometría y las series de tiempo se han aplicado con 
éxito para analizar las relaciones entre el gasto público, los impuestos y el 
crecimiento de la economía. Un avance práctico importante ha consistido en el 
análisis costo-beneficio para tomar decisiones en materia de política de gasto 
público, en contextos caracterizados por la competencia entre proyectos, 
sometidos a alto riesgo e incertidumbre, y con información incompleta. El 
análisis de la optimización fiscal también ha avanzado. En los últimos años se 
han desarrollado modelos analítico-contables para estudiar los problemas de 
sustentabilidad de la política fiscal (Ayala, J. 2000). 
 
En síntesis, puede afirmarse que: 
 La intervención estatal involucra disyuntivas sociales, económicas y 
políticas. Las elecciones públicas no están relacionadas únicamente con 
la asignación eficiente de recursos, sino también con la valoración ética 
sobre la distribución del ingreso y la reducción de la desigualdad social. 
 
 El mercado y el Estado son mecanismos importantes de asignación de 
recursos y ninguno de ellos es eficiente por definición, por lo que es 
necesaria su operación mixta o combinada para operar cercanamente al 
óptimo. 
 
 El Estado es algo más que una organización que interviene en la 
asignación de recursos, también es una institución dotada de poder 
económico y político, para imponer el marco de obligaciones, 
regulaciones y restricciones al intercambio económico, además de ser 
INTRODUCCIÓN 
 
17 
 
garante de los derechos humanos consagrados en las constituciones, 
muchos de los cuales tienen implicaciones económicas. 
 
 El Estado al igual que cualquier otra organización enfrenta restricciones 
y limitaciones, tanto económicas como institucionales en el cumplimiento 
de sus funciones, por lo cual es importante buscar la organización óptima 
para cumplir con sus objetivos económicos y sociales mandatados en la 
ley. 
 
 Las funciones económicas del Estado giran alrededor de los siguientes 
objetivos: 
 Mejorar la asignación de recursos; 
 Mejorar la distribución del ingreso; 
 Establecer y vigilar el cumplimiento de un marco institucional que 
favorezca la estabilidad y certidumbre de los agentes para 
involucrarse en el intercambio y, 
 Fijar mecanismos que favorezcan la coordinación de las acciones 
individuales de los agentes para favorecer una racionalidad social. 
 
En palabras de Musgrave, R. (1989), el sector público1 es necesario porque el 
mercado por sí sólo no puede realizar todas las funciones económicas. La 
política pública es necesaria para guiar, corregir y complementar al mercado. 
Es importante reconocer este hecho, ya que esto implica que el tamaño 
adecuado del sector público es, en un grado importante, una cuestión técnica 
más que ideológica. La participación del sector público en la economía se 
explica y se justifica, entre otras razones, nos dice Musgrave, por las siguientes: 
 
1. La afirmación de que el mercado conduce a una utilización eficiente de 
recursos (produce lo que los consumidores desean y lo hace de la forma 
 
1 Entendido solamente en este caso como aquellas partes de la política económica del gobierno 
que encuentran su expresión en medidas presupuestarias de gasto e ingresos. 
INTRODUCCIÓN 
 
18 
 
más barata) se basa en la condición de mercados competitivos de 
factores y productos. Por tanto no debe de haber obstáculos a la libre 
entrada, y consumidores y productores deben de tener un conocimiento 
total del mercado. La regulación gubernamental u otras medidas pueden 
ser necesarias para asegurar estas condiciones. 
2. Pueden ser también necesarias cuando la competencia no es eficiente 
debido a la existencia de costos decrecientes. 
3. Con mayor generalidad, los acuerdos e intercambios contractuales 
necesarios para el funcionamiento del mercado no pueden existir sin la 
protección y refuerzo de una estructura legal prevista por el gobierno. 
4. Incluso si existe la estructura legal y se suprimen los obstáculos a la 
competencia, las características de producción o consumo de algunos 
bienes son tales que no pueden ser provistos por el mercado (bienes 
públicos o sociales). Surgen problemas de “externalidades” que 
conducen al “fallo de mercado” y requieren la corrección pública, sea por 
la vía de la provisión presupuestaria, del subsidio o de la penalización 
impositiva. 
5. Los valores sociales pueden requerir ajustes en la distribución de la renta 
y de la riqueza resultante del sistema de mercado y de la transmisión de 
los derechos de propiedad por herencia. 
6. El sistema de mercado, especialmente en una economía de alto 
desarrollo financiero, no tolera necesariamente un alto nivel de empleo, 
una estabilidad en el nivel de precios ni una tasa de crecimiento 
económico socialmente deseados. Por lo que es necesaria la 
intervención pública con el fin de asegurar el cumplimiento de estos 
objetivos. 
 
Es así que la interacción entre la economía del bienestar, la elección pública, el 
neoinstitucionalismo económico y la nueva teoría de las finanzas públicas han 
sido piezas claves para la conformación y consolidación de la economíapública 
como rama de análisis y fundamentación de la intervención del Estado moderno 
INTRODUCCIÓN 
 
19 
 
en la economía actual, a partir de políticas públicas socialmente responsables 
y económicamente viables. 
 
Musgrave (1989), señala y asigna tres funciones centrales al sector público: 
 
1) Función de asignación. La cual consiste en la provisión pública de 
ciertos bienes y servicios, denominados “bienes sociales o bienes 
públicos”, los cuales no pueden ser provistos por el mercado, dada su 
naturaleza y características. Esta provisión de bienes y servicios sociales 
se realiza mediante la financiación, subvención o pago con recursos del 
presupuesto, sin importar si su producción, construcción o elaboración 
se realiza por parte de un ente público o privado. Un ejemplo concreto de 
ello puede ser la construcción de caminos, puentes o carreteras rurales, 
sistemas de agua potable, drenaje y alcantarillado o electrificaciones de 
localidad rurales financiadas con presupuesto público y realizadas por 
empresas privadas. 
 
2) Función de distribución. Caracterizada por el ajuste en la 
(re)distribución de la renta y la riqueza para asegurar su adecuación a lo 
que la sociedad puede considerar un estado “justo” o “equitativo” de 
distribución. La pauta para ello está dada por el reconocimiento de que 
la distribución de la riqueza a través de mecanismos de mercado supone 
un grado sustancial de desigualdad, especialmente en la distribución de 
la renta del capital. Por lo que las políticas impositivas y de transferencia 
de recursos suelen ser mecanismos efectivos de corrección de la 
desigualdad. Un ejemplo de ello pueden ser las becas a estudiantes, 
transferencias económicas o en especie a segmentos de la población 
más desfavorecidos o el financiamiento o subvención de proyectos 
productivos que posibiliten la generación de ingresos monetarios y no 
monetarias, además de una política fiscal progresiva. 
 
INTRODUCCIÓN 
 
20 
 
3) Función de estabilización. La cual está enmarcada en la política 
macroeconómica, es decir, sobre objetivos como un alto nivel de empleo, 
un grado razonable de estabilidad de precios, solidez de las cuentas con 
el exterior y una aceptable tasa de crecimiento económico. La 
consecución de estos objetivos no se produce de manera automática, 
sino que exige la conducción de la política económica a través de sus 
dos principales instrumentos: a) política monetaria y b) política fiscal. Sin 
ella, la economía tiende a estar sujeta a fluctuaciones importantes y 
puede sufrir periodos sostenidos de desempleo e/o inflación. 
 
En el caso particular de la política indigenista, ésta participa directa o 
indirectamente en las dos primeras funciones: asignación y distribución, dada 
su esfera de actuación y el mandato constitucional existente, como veremos a 
continuación. 
 
 
 
21 
 
CAPÍTULO 1. BREVE HISTORIA DEL INDIGENISMO EN MÉXICO 
 
El objetivo de este capítulo es describir la evolución histórica y conceptual del 
indigenismo en nuestro país, así como señalar las características que han 
acompañado a cada una de sus etapas, desde la construcción de la Nueva 
España hasta la adopción del neoliberalismo como política oficial del Estado 
mexicano. Es importante señalar que el capítulo no pretende realizar una 
compilación del pensamiento indigenista en México, ni contrastar las opiniones 
de los expertos; por el contrario, intenta retomar aquellas acciones que han 
generado un impacto directo sobre la población indígena a través de la 
instrumentación de políticas concretas. El primer apartado de la investigación 
está integrado por tres elementos centrales: el concepto de indigenismo, sus 
periodos, y las diferencias entre el indigenismo mexicano y el latinoamericano. 
 
1.1 ¿QUÉ ES EL INDIGENISMO? 
 
El indigenismo es un término complejo y multidisciplinario que abarca distintos 
campos de las ciencias sociales, tales como el político, económico y cultural; no 
obstante, estas disciplinas concuerdan en que el concepto se ha preocupado, y 
por ello centrado, en la evolución de la población indígena en las sociedades 
latinoamericanas, particularmente en México y Perú, en donde su presencia es 
mayor en comparación con otros países de la región como Bolivia y Brasil 
(Tarica, E. 2016; Korsbaek, I. y Sámano-Rentería, M. 2007). 
 
De acuerdo con Tarica, E. (2016), el indigenismo ha estado integrado por cuatro 
características básicas, mismas que se han mantenido sin importar la 
temporalidad o el lugar en cuestión: 
 
i) Se preocupa por la población nativa y su situación en América Latina, 
es decir, cómo es y cómo debería ser, 
CAPITULO 1. BREVE HISTORIA DEL INDIGENISMO EN MÉXICO 
 
22 
 
ii) Es un discurso sobre la identidad nacional, en donde los indígenas 
son el centro del debate, 
iii) Los voceros del indigenismo son, generalmente, personas no 
indígenas, es decir, son criollos o mestizos y, 
iv) Es una forma de activismo y de defensa hacia los indígenas. 
 
Como en cualquier disciplina desprendida de las ciencias sociales, los 
estudiosos del tema han protagonizado un debate teórico importante, en el que 
se ha retomado la necesidad de ampliar el concepto y de reconocer algunos 
elementos centrales que deberían delinear la integración de una política 
indígena completa. Warman, A. (1978), por ejemplo, identificó una contradicción 
importante, ya que, aunque los indígenas han sido el elemento central de la 
discusión, estos no han tenido una participación destacada en la misma; en este 
mismo sentido, Lara, I. (2014) menciona que las comunidades indígenas han 
soportado un proceso de aculturación obligada, reconociendo que la exclusión 
y discriminación han sido factores permanentes en su incorporación al 
desarrollo económico, a través de la transformación del indígena en 
consumidor. 
 
Bajo este esquema, resulta fundamental entender al indigenismo como el 
estudio científico de los problemas de la población indígena y la aplicación de 
soluciones prácticas que atiendan sus necesidades. Esta definición es muy 
importante, toda vez que sugiere su consideración e incorporación en las 
políticas originadas desde el Estado para contribuir con elementos 
gubernamentales para garantizar el reconocimiento de sus derechos básicos y 
la atención de carencias económicas. 
 
El indigenismo, como lo señala Warman, A. (1978), ha sido uno de los temas 
en que se ha centrado la discusión ideológica a lo largo de la historia de México. 
Antes de la conquista española no había indios, había distintas naciones, 
diversas clases, varias áreas culturales con diferentes niveles de organización 
CAPITULO 1. BREVE HISTORIA DEL INDIGENISMO EN MÉXICO 
 
23 
 
de la producción, de la sociedad y del poder político y varios estados autónomos 
dentro de las actuales fronteras de México. La categoría de indio surgió para 
distinguir a los descendientes de los pobladores anteriores a su llegada, se 
aplicó en todo el ámbito del sistema colonial español, con excepción de las 
colonias europeas. 
 
En México, el indigenismo como política de Estado buscaba integrar a la 
población indígena a lo que se denominaba “la sociedad nacional” para mejorar 
su calidad de vida y, en general, promover el desarrollo económico y social del 
país; ello implicaba, además, construir una cultura nacional homogénea pero 
enriquecida por los aportes indígenas. Este enfoque fue cuestionado en las 
últimas décadas del siglo XX, lo que condujo a replantear las políticas 
indigenistas con el propósito de preservar y fortalecer la diversidad cultural, 
tendencia que prevalece en la actualidad. 
 
Uno de los componentes fundamentales del indigenismo en México ha sido, sin 
duda, la aportación intelectual de diversos personajes que ha permitido delinear 
y orientar la política indígena en nuestro país. Las aportaciones de diversos 
pensadores, en distintos momentos de lahistoria, han generado rasgos 
particulares en la manera de concebir y ejecutar la política indígena en México. 
En el siguiente apartado se abordará, con mayor precisión, los rasgos distintivos 
de cada una de las etapas del indigenismo nacional, retomando las ideas de los 
principales impulsores. 
 
1.2 PERIODOS DEL INDIGENISMO EN MÉXICO. 
 
De acuerdo con Korsbaek, I. y Sámano-Rentería, M. (2007), se pueden 
distinguir tres grandes periodos del indigenismo en México, cada uno con 
características temporales e ideológicas propias que permiten identificar la 
evolución del pensamiento indigenista en el país. El primero de ellos es el 
“periodo preinstitucional”, el segundo es el “indigenismo institucionalizado” y el 
CAPITULO 1. BREVE HISTORIA DEL INDIGENISMO EN MÉXICO 
 
24 
 
tercero es conocido como “neoindigenismo”, los rasgos de cada uno de ellos 
son los siguientes: 
 
1.2.1 PERIODO PREINSTITUCIONAL. 
 
El periodo inició con el descubrimiento, conquista del Nuevo Mundo y la 
construcción de la Nueva España, y concluyó en 1910 con el inicio de la 
Revolución Mexicana. La característica más importante del indigenismo en este 
contexto colonial fue la política de segregación, cuyo fin primario fue la 
separación de los indígenas de la sociedad europea. Los mecanismos 
operacionales que entraron en juego para lograr esa segregación fueron la 
discriminación racial, la dependencia económica, el control político y la distancia 
social, lo que creó una barrera étnica que dividió a la sociedad en castas. El 
periodo estuvo acompañado de una conquista geográfica, militar, política y 
espiritual; la razón de ello es que, durante el siglo XIX, la política manifestaba 
un deseo de eliminar a los indígenas con el fin de “blanquear” al país (Korsbaek, 
I. y Sámano-Rentería, M. 2007). 
 
Otra característica del régimen colonial fue la connotación que se le asignaba a 
la categoría de indio, ya que, desde su origen en el siglo XVI, se le concibió 
como una relación de inferioridad y dominio. A comienzos de 1820, los esclavos 
y las castas sabían que podían alcanzar su libertad y la igualdad; los indios, la 
extinción de sus tradicionales tributos y servidumbre; y los criollos insurgentes 
conservaban las esperanzas de lograr su independencia. Lo anterior es 
relevante, ya que en 1822 se abolió la clasificación de habitantes por sus 
orígenes, legalmente ya no se hablaría de españoles, indios y castas en nuestro 
país (Ibíd.). 
 
Aunque dicha abolición estuvo acompañada de diversas acciones a lo largo del 
siglo XIX, tales como las Constituciones de 1824, 1836 y 1857, las Leyes de 
Reforma y más adelante las de Lerdo, la situación de los pueblos indígenas no 
CAPITULO 1. BREVE HISTORIA DEL INDIGENISMO EN MÉXICO 
 
25 
 
mejoró de manera significativa, ya que, aún y cuando ya no tenían que pagar 
tributos en especie ni en trabajo, fueron obligados a aceptar las condiciones 
laborales establecidas por las nacientes grandes haciendas y por los nuevos 
caciques mexicanos, dueños de los mercados citadinos que controlaban las 
regiones indígenas (Ibíd). 
 
Los pueblos indios también experimentaron otro tipo de problemas relacionados 
con la tenencia de las tierras, ya que, aunque desde la llegada de los españoles 
se les había permitido conservar sus usos y costumbres, con la condición de 
que no violentaran las leyes de la Corona, legitimaban sus tierras de manera 
interna, según sus costumbres, pero no con instrumentos legales. Al no tener 
títulos de propiedad, eran vulnerables ante los litigios con algún hacendado, 
toda vez que ellos contaban con títulos y contratos notarizados (Lara, I. 2014). 
Otros elementos que mostraron cambios fueron los procesos locales de 
desarrollo y gestión del territorio y ecosistemas, los cuales fueron interrumpidos 
abruptamente durante la conquista española a partir del siglo XV, esto generó 
los mayores impactos y efectos que modificaron drásticamente los paisajes y 
territorios ocupados por las culturas originarias (Esquer, R. 2012). 
 
El periodo preinstitucional también estuvo acompañado de una serie de 
pensamientos filosóficos en relación con los habitantes de América. Algunos de 
ellos consideraban que los indígenas deberían ser esclavizados, por paganos y 
salvajes, mientras que otros consideraban que ellos tenían grandes virtudes, 
por lo que no solo les reconocían sus derechos naturales y políticos, sino que 
opinaban que debían ser vasallos del rey. 
 
Fray Bartolomé de las Casas (1474-1566), un sacerdote dominico, fue el 
principal crítico del colonialismo español, por lo que fue conocido como el 
defensor de los indígenas. En su obra más famosa “Brevísima relación de la 
destrucción de las Indias”, publicada en 1552, refutó, una a una, las 
justificaciones legales de la violencia empleada por la corona española durante 
CAPITULO 1. BREVE HISTORIA DEL INDIGENISMO EN MÉXICO 
 
26 
 
la conquista, demostrando que esa violencia carecía de fundamentos legales. 
Esta publicación fue muy importante en su tiempo, ya que influenció a los 
pensadores indígenas del siglo XX y contribuyó con el movimiento de 
independencia (Tarica, E. 2016). 
 
Durante todo el siglo XIX, México pretendió constituir una sociedad y un Estado 
moderno, es decir, que sus integrantes gozaran de una serie de derechos 
innatos y no se admitieran elementos que impusieran diferencias entre los 
individuos, así como el reconocimiento a los derechos humanos y los 
mecanismos necesarios para protegerlos (Lara, I. 2014). Al imponer el 
pensamiento de una sociedad aparentemente moderna, los indígenas se vieron 
afectados porque el Estado no solo no permitió su integración, sino que se les 
excluyó de todo proyecto de política pública nacional. 
 
Una idea que permaneció presente en los indigenismos después de la 
independencia es la de la incorporación del indio a la sociedad nacional, de una 
u otra forma, lo que se ha buscado es acabar con la heterogeneidad étnica a 
favor de una paulatina homogenización de la sociedad en aras del progreso. 
 
El periodo preinstitucional concluyó en 1910 con el inicio de la Revolución 
Mexicana, durante este movimiento armado, estallaron los conflictos creados 
por las políticas liberales del siglo XIX, por el despojo de las tierras de las 
comunidades indígenas y no indígenas, por la imposición a un concepto de 
ciudadanía que excluía a la mayor parte de la población. A partir de este 
momento, grupos de campesinos e indígenas de diversas regiones se 
levantaron en armas luchando por la restitución de las tierras de sus 
comunidades. 
 
El régimen revolucionario continuó con aspectos esenciales de las políticas de 
gobiernos liberales respecto a los indígenas, con la idea de la modernidad 
CAPITULO 1. BREVE HISTORIA DEL INDIGENISMO EN MÉXICO 
 
27 
 
occidental, la pluralidad cultural y étnica siguió siendo un problema nacional y 
un obstáculo para el progreso y la homogenización de la población mexicana. 
 
1.2.2 INDIGENISMO INSTITUCIONALIZADO. 
 
Esta etapa comenzó en el periodo posrevolucionario, adquirió fuerza con el 
congreso de Pátzcuaro en 1940 y se materializó con la creación del Instituto 
Indigenista Interamericano, a nivel continental, y del Instituto Nacional 
Indigenista en México en el año de 1948. La importancia de la Revolución 
Mexicana para el movimiento indígena radicó en su reconocimiento como la 
cuna y fuente de inspiración del indigenismo, aun cuando esta no fuera 
reconocida como la revolución de los indígenas, sino más bien de mestizos, 
rancheros y hacendados mexicanos (Korsbaek, I. y Sámano-Rentería, M. 
2007). 
 
La política indigenista posrevolucionaria puede ser catalogada como una 
política de “asimilación” y luego de “integración”, con fuertes tintes de “política 
colonialista”; no obstante, durante los primeros años, una vez concluido el 
conflicto armado, se centró en una política de alfabetización y aculturacióna 
través de la educación nacional. En los años veinte, dicha política se centró en 
la educación y las misiones culturales, promovidas a través de la Secretaría de 
Educación Pública, dirigida por José Vasconcelos y después con Moisés Sáenz, 
sobre la idea de una escuela transformadora, capacitadora e integradora del 
indígena. Vasconcelos estaba convencido de que la educación era la vía idónea 
para la transformación, para “humanizar” la revolución y despojarla de su fase 
violenta. 
 
Durante las décadas de 1920 y 1930 prevaleció la convicción de unificar o 
nivelar a la sociedad mexicana, a través de la educación popular; a la escuela 
rural se le asignó la encomienda de “instruir” y “educar” cívicamente al indígena, 
es decir, enseñarle el español, la lectoescritura, pero también darle a conocer 
CAPITULO 1. BREVE HISTORIA DEL INDIGENISMO EN MÉXICO 
 
28 
 
sus derechos y deberes como ciudadano. En ese momento, el discurso oficial 
del indigenismo buscaba ideas para solucionar los aspectos negativos del 
problema indígena: numerosos dialectos existentes, analfabetismo, 
alcoholismo, superstición y fanatismo religioso, miseria e insalubridad (Lara, I. 
2014). 
 
La aculturación inducida tiene por objeto la integración de las masas indígenas 
a lo que se ha dado en llamar la nación mexicana. Los indígenas integrados, 
que dejarán de ser indígenas para convertirse en campesinos, pasarán a formar 
parte del proletariado rural o del campesinado comerciante en forma más visible 
para los estudiosos de la sociedad. Esta pretensión de transformar al indígena 
en consumidor es la manifestación subjetiva de la necesidad de un mercado 
interno para la industria y el comercio burgueses. 
 
La diversidad y las diferencias culturales entre las poblaciones rurales eran 
consideradas por los gobiernos y educadores como serios inconvenientes para 
el desarrollo de modelos económicos modernos para alcanzar el tan deseado 
progreso. La creación de una sociedad culturalmente uniforme era una meta del 
viejo anhelo liberal cuya única base posible para llevarse a cabo era el mestizaje 
cultural (Mijangos, E. & López, A. 2011). 
 
El pensador más importante e influyente del periodo revolucionario y 
posrevolucionario fue Manuel Gamio, el “padre” de la antropología mexicana 
moderna. En 1917, durante la presidencia de Venustiano Carranza, y bajo la 
tutela de la Secretaría de Agricultura, creó el Departamento de Antropología y 
Fomento, y en 1934, siendo presidente Lázaro Cárdenas, fundó el 
Departamento de Asuntos Indígenas, precursor del Instituto Nacional 
Indigenista (Tarica, E. 2016). 
 
Manuel Gamio fue uno de los partidarios de la creación de las escuelas 
especiales para niños indígenas; se declaraba en favor del bilingüismo absoluto 
CAPITULO 1. BREVE HISTORIA DEL INDIGENISMO EN MÉXICO 
 
29 
 
a escala nacional y proponía realizar traducciones castellanas para generar el 
entendimiento entre las diferentes etnias y el resto del país; en su opinión, el 
educador debía recibir la enseñanza de los etnólogos y antropólogos para 
adquirir competencia sobre los indios, teniendo en cuenta las condiciones del 
medio en que vivían, sus necesidades y sus aspiraciones (Mijangos, E. & López, 
A. 2011). 
 
En la década de los treinta se propuso fugazmente una alternativa distinta que 
implicaba un cambio importante en el modelo de país, dicha posición retomaba 
los análisis marxistas y la teoría de las nacionalidades formulada por Stalin, que 
planteaban que el desarrollo evolutivo de los pueblos podía acelerarse mediante 
el fortalecimiento de sus tendencias a constituir nacionalidades propias 
(Warman, A. 1978). 
 
Desde la época de Gamio, el indigenismo se concibió como una tarea de Estado 
en función de las necesidades e intereses nacionales. Los indios, por su bajo 
nivel evolutivo, eran materia inerte, objeto de manipulación infinita conforme a 
dictados superiores; nunca se pensó que pudieran tener un programa propio y 
diferente al del Estado. 
 
En 1940, bajo la presidencia de Lázaro Cárdenas, se celebró el Congreso 
Indigenista Interamericano en Pátzcuaro, Michoacán; en él, se formuló un 
programa de indigenismo que cubriría al Continente Americano. El Congreso 
significó un punto de inflexión relevante, ya que sentó las bases de una nueva 
política indigenista a nivel continental, se creó el Instituto Indigenista 
Interamericano (1942) y se promovió la formación de diversos institutos 
indigenistas en toda América Latina. 
 
En 1948 se fundó el Instituto Nacional Indigenista (INI) en México, mismo que 
por Ley sustituyó al Departamento Autónomo de Asuntos Indígenas (DAAI) que 
CAPITULO 1. BREVE HISTORIA DEL INDIGENISMO EN MÉXICO 
 
30 
 
se había creado 13 años antes. El INI tenía personalidad jurídica autónoma y 
patrimonio propio, sus tareas eran (Korsbaek, I. y Sámano-Rentería, M. 2007): 
 
i. Investigar los problemas relativos a los núcleos indígenas del país; 
ii. Estudiar las medidas de mejoramiento que requieren esos núcleos 
indígenas del país; 
iii. Promover ante el ejecutivo federal la aprobación y aplicación de esas 
medidas; 
iv. Intervenir en la realización de las medidas aprobadas, coordinando y 
dirigiendo, en su caso, la acción de los órganos gubernamentales 
competentes; 
v. Fungir como cuerpo consultivo, de las instituciones oficiales y privadas, 
de las materias que, conforme a la ley, son de su competencia; 
vi. Difundir, cuando lo estime conveniente y por los medios adecuados, los 
resultados de sus investigaciones, estudios y proposiciones; y 
vii. Emprender aquellas obras de mejoramiento de las comunidades 
indígenas que les encomiende el Ejecutivo, en coordinación con la 
Dirección General de Asuntos Indígenas. 
 
A lo largo de su historia, el INI fue pasando de una instancia a otra: de la 
Presidencia de la República a la Secretaría de Educación Pública, de ésta a la 
Secretaría de Desarrollo Social y luego, nuevamente, a la Secretaría de 
Educación Pública. Estos movimientos son importantes, ya que, en cada una 
de estas mudanzas institucionales, correspondía a su vez a una visión distinta 
de las funciones del INI, las cuales variaban entre enfoques netamente 
sectoriales. 
 
La nueva política indigenista fue formulada alrededor del concepto de 
aculturación, con la característica fundamental de que la ejecución del programa 
se fincaría en la comunidad indígena y que el corazón operativo del indigenismo 
serían los Centros Coordinadores Indigenistas (CCI), siendo el primero el de 
CAPITULO 1. BREVE HISTORIA DEL INDIGENISMO EN MÉXICO 
 
31 
 
San Cristóbal de las Casas, Chiapas, inaugurado en 1951. El cuadro siguiente 
muestra la cronología de los Centros Coordinadores y su aparición: 
 
Cuadro 1.1 Cronología de la inauguración de Centros Coordinadores 
Indigenistas en México. 
Año Presidente Número de CCI Lugar 
1951 
Miguel Alemán Valdés. 
1 Chiapas. 
1952 1 Chiapas. 
1954 Adolfo Ruíz Cortines. 3 Oaxaca. 
1959 
Adolfo López Mateos. 
1 Yucatán. 
1 Oaxaca. 
1960 1 Nayarit. 
1963 1 Guerrero. 
1964 1 Michoacán. 
1968 Gustavo Díaz Ordaz. 1 Puebla. 
1970-1976 Luis Echeverría Álvarez. 54 23 entidades. 
Fuente: elaboración propia con base en Korsbaek, I. y Sámano-Rentería, M. 2007 y Sexto 
Informe de Gobierno del presidente Luis Echeverría Álvarez. 
 
Como puede observarse en el cuadro anterior, el gobierno de Luis Echeverría 
decidió dar un impulso sin precedentes a las comunidades indígenas: 
Echeverría ordenó crear 10 centros coordinadores cada año de su sexenio. En 
conjunto, el gasto público en las regiones indígenas aumentó más de 600% en 
seis años. El sucesor de Echeverría, José López Portillo, sostuvo el nivel de 
gasto y añadió vastos programas de salud, producción y nutrición (programas 
IMSS-Coplamar e INI-Conasupo), todo ello en un ambiente de exaltada 
revaloración de las culturas indígenas. Este esfuerzo provocó un crecimiento dela población indígena, de sus niveles de vida, educación, organización política 
y aculturación en general. 
 
El establecimiento del primer CCI marcó el auge del indigenismo 
institucionalizado en el país. Este auge se ve materializado en la obra de 
Gonzalo Aguirre Beltrán: “Formas de gobierno indígena” publicado en 1953, 
dicho libro contiene el núcleo de las ideas que van a guiar la acción indigenista 
CAPITULO 1. BREVE HISTORIA DEL INDIGENISMO EN MÉXICO 
 
32 
 
en México. Su obra resulta de gran relevancia, ya que en ella realiza una 
declaración muy puntual: “el fin del indigenismo mexicano no es el indígena, es 
el mexicano”, ya que se trata de mexicanizar al indio y el indio deberá dejar de 
ser lo que es para integrarse a la nación mexicana, como un ciudadano más, 
producto del indigenismo. 
 
En síntesis, el periodo se caracterizó por los siguientes hechos (Mijangos, E. & 
López, A. 2011): 
 
i. La necesidad de la inserción (absorción) de la cultura indígena en la vida 
civilizada-moderna, debido a su nivel de desarrollo “primitivo” o 
“atrasado”; 
ii. La premisa de que la población india era un problema que los mestizos 
o blancos de cultura occidental debían afrontar y resolver; 
iii. La pertinencia de erradicar usos y prácticas dañinas tales como: la 
superstición y el fanatismo religioso o aquellas manifestaciones que 
resultaban “anacrónicas, inapropiadas y poco prácticas”, 
iv. El beneficio de inculcar patrones homogéneos a los grupos étnicos que 
vivían en etapas culturales diferentes, y 
v. La necesidad de castellanizar y escolarizar a los indígenas, a la población 
marginal cuyas condiciones de vida y sistemas productivos ancestrales 
significaban un lastre para el país. 
 
De acuerdo con Korsbaek, I. y Sámano-Rentería, M. (2007), la crisis del 
indigenismo institucionalizado comenzó entre 1960 y 1970, con la muerte de 
Manuel Gamio y Alfonso Caso, respectivamente. Esto representó la extinción 
de dos destacadas personalidades relacionadas, de manera directa, con la 
definición del rumbo del indigenismo en México. 
 
Años más tarde, con la toma de posesión de Miguel de la Madrid, empezó la 
agonía del indigenismo mexicano, toda vez que, con los retos adversos surgidos 
CAPITULO 1. BREVE HISTORIA DEL INDIGENISMO EN MÉXICO 
 
33 
 
después de la nacionalización de la banca, y, en consecuencia, un ambiente de 
enfrentamiento entre el gobierno y la iniciativa privada, siguió una devaluación 
importante del peso mexicano, dando inicio a la etapa del neoliberalismo y 
globalización en México, misma que sustituyó a un proyecto nacional que ya no 
fue realizable. La agonía del indigenismo en México, a partir de 1982, se puede 
distinguir en tres momentos: 
 
i. Discurso indigenista. Es un planteamiento retórico, sin acciones 
concretas. 
ii. Proyecto indigenista. Surgimiento del Plan Puebla Panamá. 
iii. Desarrollo institucional. Desaparición del INI después de 55 años de 
existencia. 
 
El 21 de mayo de 2003 se publicó en el Diario Oficial de la Federación (DOF) el 
“Decreto por el que se expide la Ley de creación de la Comisión Nacional para 
el Desarrollo de los Pueblos Indígenas y se abroga la Ley de Creación del 
Instituto Nacional Indigenista, se reforma la fracción IV y se deroga la fracción 
VII del artículo 32 de la Ley Orgánica de la Administración Pública Federal; y se 
reforma el primer párrafo del artículo 5º de la Ley Federal de las entidades 
Paraestatales”. 
 
Con la desaparición del INI, en 2003, se cerró el periodo de indigenismo 
institucionalizado en México, el cual habría iniciado en 1940 con los 
planteamientos programáticos de un indigenismo americano en el Congreso de 
Pátzcuaro, Michoacán; la posterior fundación del INI en 1948; y, en el ámbito 
operativo, se vio reflejado con la inauguración del primer centro coordinador 
indigenista en San Cristóbal de las Casas, Chiapas en 1951. 
 
 
 
 
CAPITULO 1. BREVE HISTORIA DEL INDIGENISMO EN MÉXICO 
 
34 
 
1.2.3. NEOINDIGENISMO. 
 
Con el fin del indigenismo institucional nació un nuevo enfoque, identificado en 
la literatura especializada bajo el nombre de “neoindigenismo”; el concepto hace 
referencia a la nueva relación existente entre los indígenas y el Estado, basada 
en las carencias que dejó la trayectoria de más de 50 años de indigenismo 
institucional, es decir, pobreza en el ámbito económico, y marginación en el 
ámbito político; dos hechos que constituyeron el marco que sustentaría la nueva 
estrategia para los indígenas. 
 
Con base en lo anterior, se trazaron los objetivos que habrían de caracterizar a 
esta nueva etapa: 
 
i. En el ámbito económico, se buscaría erradicar la pobreza y superar el 
asistencialismo que había caracterizado al Estado mexicano, a través del 
desarrollo propio de los indígenas. 
ii. En el ámbito político, se buscaría erradicar la marginación y el 
paternalismo de Estado, permitiendo ser a los pueblos indígenas, es 
decir, que conservaran su propia identidad y formas de gobierno, así 
como su autonomía. 
 
Aun cuando se reconoció la necesidad de replantear la política indigenista en 
México, hubo un periodo de 20 años, posteriores al fin del indigenismo 
institucionalizado, que fueron fatales para el tema indígena, ya que, de 1982 a 
2003, los gobiernos en turno dejaron a la mayoría del pueblo mexicano en la 
misma situación de mantenerse al margen del desarrollo y con pocas 
esperanzas de mejorar su situación bajo el neoliberalismo (Korsbaek, I. y 
Sámano-Rentería, M. 2007). 
 
En la primera transición pacífica hacia un gobierno de oposición en México, 
Vicente Fox asumió la Presidencia de la República en el año 2000, no obstante, 
CAPITULO 1. BREVE HISTORIA DEL INDIGENISMO EN MÉXICO 
 
35 
 
no se percibió algún cambio significativo, toda vez que, de parte del “gobierno 
del cambio”, se manifestó una mentalidad de asistencialismo, a través de 
programas como Oportunidades. 
 
El asunto no era que el gobierno hubiera cambiado de orientación, sino que la 
misma lógica del neoliberalismo excluyó la posibilidad de llevar a cabo un 
indigenismo como fue percibido y planeado en décadas anteriores, es decir, 
bajo las condiciones de un proyecto nacional. En este sentido, se siguieron 
instrumentando los modelos de combate a la pobreza dictados por el Banco 
Mundial y el Fondo Monetario Internacional y se continuó ejecutando una 
política de dar, más que de capacitar y apoyar proyectos productivos 
alternativos para promover el desarrollo (Ibíd.). 
 
Durante la administración del presidente Vicente Fox Quezada, iniciada en 2000 
y concluida en el año 2006, se buscó terminar con la situación de injusticia y 
desigualdad en la que se encontraban los pueblos indígenas de México, así 
como lograr su inclusión con equidad en el proceso de desarrollo nacional. El 
cumplimiento de dicho objetivo implicó que, durante los tres primeros años de 
su administración, se centrara en: 
 
i. La promoción de reformas constitucionales y legales que permitieran 
avanzar en el reconocimiento de derechos a los pueblos y las 
comunidades indígenas. 
ii. La promoción y consolidación de una reforma institucional que permitiera 
construir un nuevo modelo de atención para el desarrollo integral y 
sustentable de los pueblos y las comunidades indígenas del país. 
iii. El uso óptimo de los recursos presupuestales. 
 
En lo referente al primer punto, reconocimiento de los derechos, se encuentra 
el envío, por parte del Ejecutivo, como iniciativa presidencial, de la propuesta 
de reforma constitucional en materia indígena que elaboró la Comisión de 
CAPITULO 1. BREVE HISTORIA DEL INDIGENISMO EN MÉXICO 
 
36 
 
Concordia y Pacificación, así como el establecimiento de un marco legal en 
materia de derechos lingüísticos. 
 
Derivado de ello, el 14 de agosto de 2001 se publicó, en el Diario Oficial de la 
Federación, la reforma a los artículos 1º, 2º, 4º, 18 y115 de la Constitución 
Política de los Estados Unidos Mexicanos (CPEUM), la reforma a los artículos 
citados dio lugar a cambios importantes en la relación del Estado, los pueblos y 
las comunidades indígenas y la sociedad nacional, en virtud de que: 
 
 Reiteró el reconocimiento a la pluriculturalidad de la Nación. 
 Reconoció el derecho de los pueblos y las comunidades indígenas a la 
libre determinación y, en consecuencia, a la autonomía para decidir sus 
formas internas de convivencia y organización. 
 Estableció que el derecho de los pueblos indígenas a la libre 
determinación se ejercerá en un marco constitucional de autonomía que 
asegure la unidad nacional y que el reconocimiento de los pueblos y las 
comunidades indígenas se hará en las constituciones y leyes de las 
entidades federativas. 
 Estableció el derecho de los indígenas, en lo individual y en lo colectivo, 
a tener acceso pleno a la jurisdicción del Estado. 
 Previó que la Federación, los estados y los municipios deberán 
establecer las instituciones y determinar las políticas necesarias a efecto 
de garantizar la vigencia de los derechos de los indígenas y el desarrollo 
integral de sus pueblos y comunidades. 
 Determinó las obligaciones que, para abatir las carencias de las 
comunidades, tienen las autoridades federales, estatales y municipales. 
 
Posteriormente, el Congreso de la Unión inició el proceso de adecuación 
legislativa que ha dado lugar a la modificación de 11 ordenamientos ya existente 
y a la emisión de nuevas leyes: 
 
CAPITULO 1. BREVE HISTORIA DEL INDIGENISMO EN MÉXICO 
 
37 
 
Cuadro 1.2 Adecuación legislativa. 
Ordenamientos modificados Nuevos ordenamientos 
 Código Penal Federal. 
 Código Federal de Procedimientos 
Penales. 
 Ley Orgánica de la Procuraduría 
General de la República. 
 Código Federal de Procedimientos 
Civiles. 
 Ley General de Educación. 
 Ley Orgánica de la Administración 
Pública Federal. 
 Ley Federal de Entidades 
Paraestatales. 
 Ley para el Tratamiento de Menores 
Infractores. 
 Ley General de Salud. 
 Ley de Armas de Fuego y 
Explosivos. 
 Ley General de Desarrollo Forestal 
Sustentable. 
 Ley de la Comisión Nacional para el 
Desarrollo de los Pueblos Indígenas. 
 Ley General de Derechos 
Lingüisticos de los Pueblos 
Indígenas. 
 Ley Federal para Prevenir y Eliminar 
la Discriminación. 
Fuente: Elaboración propia con información de la Comisión Nacional para el Desarrollo de los 
Pueblos Indígenas. 
 
En lo referente a la reforma institucional y construcción de un nuevo modelo, las 
acciones más destacadas fueron aquellas dirigidas a consolidar un nuevo 
modelo institucional y programático para la atención a la población indígena: 
 
 La creación de la Oficina de Representación para el Desarrollo de los 
Pueblos Indígenas de la Oficina Ejecutiva de la Presidencia de la 
República. 
 El nombramiento de indígenas destacados como titulares de la Dirección 
General del Instituto Nacional Indigenista y de la Dirección General de 
Culturas Populares. 
CAPITULO 1. BREVE HISTORIA DEL INDIGENISMO EN MÉXICO 
 
38 
 
 La creación de la Coordinación General de Educación Intercultural 
Bilingüe en la Secretaría de Educación Pública. 
 La creación de la Coordinación de Salud de la Secretaría de Salud. 
 La instalación del Consejo para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas, 
que fue creado como órgano asesor del Presidente de la República. 
 La elaboración del Programa Multicultural de Educación, Lengua y 
Cultura. 
 La elaboración del Programa Intersectorial de Atención a Mujeres 
Indígenas. 
 La elaboración del Programa Nacional para el Desarrollo de los Pueblos 
Indígenas 2001-2006. 
 La realización de una Consulta Nacional cuyo propósito fue obtener 
propuestas de los pueblos, comunidades y organizaciones indígenas. 
 El envío de los resultados de esta consulta a las comisiones de asuntos 
indígenas de las cámaras de Diputados y Senadores. 
 La participación del Ejecutivo Federal en la Conferencia Parlamentaria. 
 La creación, por el Congreso de la Unión, del Instituto Nacional de 
Lenguas Indígenas (INALI). 
 
En lo referente al uso óptimo de los recursos presupuestales, éste estuvo guiado 
por el principio de transversalidad, a través de él, se sentaron las bases para 
que las dependencias y entidades del Gobierno Federal realicen lo que les 
corresponde: construcción y desarrollo de infraestructura básica; promoción del 
desarrollo social; impulso a opciones productivas de empleo e ingreso; 
consolidación del patrimonio; mejoramiento de condiciones ambientales, y 
resolución de añejos conflictos agrarios. 
 
El análisis del presupuesto consolidado revela un aumento significativo de los 
recursos asignados para el desarrollo indígena en 2001, 2002 y 2003. En 
términos reales, tomando como base el año 2000, el incremento más 
significativo ocurrió en 2002 como resultado de la asignación de recursos al 
CAPITULO 1. BREVE HISTORIA DEL INDIGENISMO EN MÉXICO 
 
39 
 
Programa para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas, mejor conocido como 
Fondo Indígena. 
 
Durante estos años, el presupuesto para los pueblos indígenas estuvo integrado 
por cuatro rubros: Desarrollo de capacidades, protección social, generación de 
oportunidades y desarrollo del patrimonio. La mayor proporción de los recursos 
se destinó al Desarrollo de Capacidades, es decir, programas de alimentación, 
educación y salud, mismos que incluyeron al Programa Oportunidades, en 
conjunto, representaron entre el 46 y el 48 por ciento. La Generación de 
oportunidades redujo su participación del 36 al 24 por ciento, en tanto que el 
Desarrollo del patrimonio se incrementó de 18 a 25 por ciento y Protección 
social aumentó de 0.6 a 26 por ciento. 
 
El Programa para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas 2009-2012, elaborado 
durante la Administración del presidente Felipe Calderón Hinojosa, expresa los 
objetivos, las estrategias y las líneas de acción que definieron la actuación de 
las dependencias y entidades federales que de manera transversal 
contribuyeron al desarrollo de los pueblos indígenas. El modelo de desarrollo se 
basó en cinco ejes de acción: 
 
i. Derechos indígenas. Promover, en términos de las disposiciones 
aplicables, la armonización del marco jurídico en materia de derechos 
indígenas y generar condiciones para el respeto y ejercicio pleno de 
estos derechos. 
 
ii. Superación de los rezagos y desarrollo con identidad. Superar los 
rezagos sociales que afectan a la población indígena a través de la 
ampliación de la cobertura y la adecuación cultural de los programas 
y acciones electorales; promover, en términos de las disposiciones 
aplicables, el desarrollo con identidad de las regiones indígenas, 
mediante la articulación de las políticas públicas de los tres órdenes 
CAPITULO 1. BREVE HISTORIA DEL INDIGENISMO EN MÉXICO 
 
40 
 
de gobierno, en un modelo de desarrollo territorial, participativo y con 
enfoque de género; y promover la mejora en la calidad de vida de los 
hombres y mujeres indígenas, que viven y trabajan en las diferentes 
ciudades del país o que se emplean como jornaleros agrícolas. 
 
iii. Reconocimiento y valoración de la diversidad cultural y 
lingüística. Avanzar en el reconocimiento y valoración de la 
diversidad cultural y lingüística del país y contribuir al fortalecimiento, 
rescate y difusión de las expresiones y manifestaciones culturales de 
los pueblos y comunidades indígenas. 
 
iv. Participación y consulta para una democracia efectiva. 
Incrementar la participación de los pueblos indígenas en la 
planeación de su desarrollo y para el reconocimiento y ejercicio de 
sus derechos. 
 
v. Gestión institucional para un país cultural y lingüísticamente 
diverso. Mejorar, en términos de las disposiciones aplicables, la 
gestión de la Comisión Nacional para el Desarrollo de los Pueblos 
Indígenas (CDI)y promover que las dependencias y entidades 
federales atiendan con prioridad, eficiencia, eficacia y pertinencia 
cultural a la población indígena, en el ámbito de sus competencias. 
 
Los objetivos y logros de la administración del presidente Enrique Peña Nieto, 
serán abordados en un capítulo posterior, destacando qué, si bien la actual 
administración puede catalogarse como parte del neoindigenismo, sí existe un 
viraje importante en el enfoque y las prioridades de atención, principalmente el 
apoyo a proyectos productivos que generen desarrollo económico. 
 
 
CAPITULO 1. BREVE HISTORIA DEL INDIGENISMO EN MÉXICO 
 
41 
 
1.3 DIFERENCIAS Y SIMILITUDES ENTRE EL INDIGENISMO MEXICANO Y EL INDIGENISMO 
LATINOAMERICANO. 
 
En la actualidad, las políticas públicas para los pueblos indígenas de los 
diferentes países latinoamericanos resultan inseparables de la presión que los 
ciudadanos realizan políticamente de forma directa (Esquer, R. 2012). 
 
Uno de los rasgos que ha caracterizado al indigenismo mexicano es su 
indiscutible pertenencia a un proyecto nacional. De acuerdo con Tarica, E. 
(2016), existen tres características que distinguen al indigenismo mexicano de 
su contraparte latinoamericana: 
 
i. El indigenismo es un pilar fundamental de la política pública y es 
considerado un instrumento para lograr transformaciones masivas en la 
sociedad mexicana. 
ii. La antropología asumió el liderazgo en este compromiso con los pueblos 
indígenas, defendiéndola como parte de la identidad nacional. 
iii. Durante la primera mitad del siglo XX, el indigenismo mexicano fue 
guiado por la ideología del mestizaje,2 la cual orientó toda acción 
indigenista. 
 
En este apartado serán retomados los casos de tres países: Perú, Bolivia y 
Brasil, ya que, aunque la presencia del indigenismo en Latinoamérica se 
extiende a distintos países, los mencionados anteriormente son los de mayor 
importancia en la región. 
 
 
 
2 Se refiere al proceso biológico que involucra la “mezcla” de personas indígenas con 
características europeas, a través de la conquista española en América, por tanto, un mestizo 
es una persona con ancestros indígenas y europeos. 
CAPITULO 1. BREVE HISTORIA DEL INDIGENISMO EN MÉXICO 
 
42 
 
 
1.3.1. PERÚ. 
 
El principal motor del indigenismo peruano de la década de los veinte fue la 
integración, modernización y la postura anti-oligárquica. Al igual que México, 
tuvo un periodo revolucionario: los indigenistas anticiparon que la “renovación 
nacional” seguida de la reivindicación de los indios y así se consideraría a “los 
indios” dentro de los objetivos peruanos de modernización. Su indigenismo se 
caracterizó por ser movilizador, modernizador y combativo. 
 
A diferencia de México, el indigenismo peruano no fue asumido por el Estado, 
sino que fue guiado por diversas castas de intelectuales y activistas, en lugar 
de científicos sociales. Otra diferencia significativa con México es que las 
aspiraciones nacionales de los indigenistas no giraron alrededor de la figura del 
mestizo, el cual era considerado por la mayoría de los pensadores peruanos 
como algo no auténtico, impuro y degradante. 
 
1.3.2. BOLIVIA. 
 
El “problema de los indígenas” ocupó un lugar central en el debate suscitado 
entre las élites mestizas y criollas en relación con el futuro de Bolivia en la 
primera mitad del siglo XX, desde el fin de la guerra civil en 1989 hasta la 
Revolución Boliviana en 1952. Años después, bajo las reglas del partido Liberal 
y el Republicano, el indigenismo boliviano fue marcado por la crítica racista de 
las élites. 
 
Derivado de lo anterior, las iniciativas indígenas fueron presentadas a través de 
movilizaciones en contra de un sistema hacendario injusto, en el que los 
terratenientes criollos invadían de manera cotidiana las tierras comunales 
indígenas, al tiempo de forzarlos a trabajar dichas tierras. El indigenismo, 
durante las tres primeras décadas del siglo, buscó, de manera constante, 
CAPITULO 1. BREVE HISTORIA DEL INDIGENISMO EN MÉXICO 
 
43 
 
eliminar el activismo indígena, a diferencia de lo que ocurrió en México o Perú, 
el indigenismo no se convirtió en la base de un movimiento político específico, 
representado a través de algún partido. 
 
Un rasgo importante que se ha convertido en el distintivo del país fue la elección 
histórica del año 2006, en la que, por primera vez, un indígena asumió la 
presidencia. Sin embargo, el gobierno de Evo Morales no se caracterizó por ser 
un gobierno indígena o en promover a Bolivia como un país pluricultural; por el 
contrario, rechazó elementos clave del pensamiento indigenista durante su 
gestión. 
 
1.3.3. BRASIL. 
 
En Brasil, los indígenas se han erigido como un fuerte símbolo de nacionalismo, 
a cuando existe una marcada ambivalencia en la composición multiétnica del 
país y a pesar de que los indígenas constituyen un porcentaje muy pequeño de 
la población total del país. Una característica fundamental de este país es que 
las agencias públicas encargadas de atender el tema indígena en Brasil han 
sido, históricamente, débiles y corruptas. 
 
El indigenismo, como política de Estado, inició en la década de los veinte, 
puntualmente con la formación del “Servicio de Protección a los Indígenas” 
(SPI). El SPI se fortaleció en la década de los cuarenta bajo la influencia del 
indigenismo mexicano y en el contexto del Congreso de Pátzcuaro, a partir de 
ese momento, el término “indigenismo” comenzó a circular en Brasil. 
 
La “brasilización”, es decir, la nacionalización de los indígenas y su eventual 
transformación en ciudadanos productivos sin necesidad de protección, ha sido 
el objetivo primordial de la política indigenista en el país, esto se basa en la 
creencia de que los indígenas se encuentran en una “condición infantil”, esto 
significa que no tienen la capacidad de vivir en una sociedad moderna y que, de 
CAPITULO 1. BREVE HISTORIA DEL INDIGENISMO EN MÉXICO 
 
44 
 
manera eventual, esa población deberá desaparecer. La protección paternalista 
es un elemento esencial del indigenismo brasileño. 
 
Con este breve contraste entre el indigenismo mexicano y el latinoamericano 
concluye el primer capítulo de la investigación. En el siguiente apartado será 
abordado, con mayor detalle, el marco vigente de planeación del desarrollo de 
los pueblos y comunidades indígenas del país, mismo que constituye el marco 
jurídico que otorga el reconocimiento, respaldo y atención a la población 
indígena mexicana. 
 
 
 
45 
 
CAPÍTULO 2. MARCO DE PLANEACIÓN DEL DESARROLLO 
DE LOS PUEBLOS INDÍGENAS DE MÉXICO 
 
 
La Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos (CPEUM), norma 
suprema del Estado mexicano, establece cuales son los derechos sociales y 
económicos de los mexicanos, así como la forma en que el Estado mexicano tendrá 
la rectoría del desarrollo nacional, siendo ésta el eje que articula las políticas 
públicas que lleva a cabo el Gobierno de la República. 
 
De acuerdo con el artículo 25 Constitucional: “Corresponde al Estado la rectoría del 
desarrollo nacional para garantizar que éste sea integral y sustentable, que 
fortalezca la Soberanía de la Nación y su régimen democrático y que, mediante la 
competitividad, el fomento del crecimiento económico y el empleo y una más justa 
distribución del ingreso y la riqueza, permita el pleno ejercicio de la libertad y la 
dignidad de los individuos, grupos y clases sociales3, cuya seguridad protege esta 
Constitución.” 
 
De esta manera el Estado mexicano es responsable de planear, conducir, coordinar 
y orientar la actividad económica nacional, así como regular y fomentar las 
actividades que demande el interés general. 
 
Asimismo, al desarrollo económico nacional deberán de concurrir, con 
responsabilidad social, el sector público, el sector social (incluidos los pueblos

Continuar navegando