Logo Studenta

Oligopolio-y-oligopsonio-bancario--implicaciones-de-poltica-monetaria-sobre-las-tasas-de-interes-activas-y-pasivas-en-Mexico

Vista previa del material en texto

UNIVERSIDAD NACIONAL AUTÓNOMA DE 
MÉXICO 
 
FACULTAD DE ECONOMÍA 
OLIGOPOLIO Y OLIGOPSONIO BANCARIO: 
IMPLICACIONES DE POLITICA MONETARIA 
SOBRE LAS TASAS DE INTERES ACTIVAS Y 
PASIVAS EN MÉXICO 
 
T E S I S 
PARA OBTENER EL GRADO DE: 
LICENCIADO EN ECONOMÍA 
P R E S E N T A : 
LEOBARDO ENRÍQUEZ HERNÁNDEZ 
T U T O R : 
MTRO. MANUEL GARCÍA ÁLVAREZ 
 
CIUDAD UNIVERSITARIA, MÉXICO, D. F. NOVIEMBRE DE 2012 
 
 
UNAM – Dirección General de Bibliotecas 
Tesis Digitales 
Restricciones de uso 
 
DERECHOS RESERVADOS © 
PROHIBIDA SU REPRODUCCIÓN TOTAL O PARCIAL 
 
Todo el material contenido en esta tesis esta protegido por la Ley Federal 
del Derecho de Autor (LFDA) de los Estados Unidos Mexicanos (México). 
El uso de imágenes, fragmentos de videos, y demás material que sea 
objeto de protección de los derechos de autor, será exclusivamente para 
fines educativos e informativos y deberá citar la fuente donde la obtuvo 
mencionando el autor o autores. Cualquier uso distinto como el lucro, 
reproducción, edición o modificación, será perseguido y sancionado por el 
respectivo titular de los Derechos de Autor. 
 
 
 
 
 
 
 
DEDICATORIA Y AGRADECIMIENTOS 
Bi²³ mɨ²’áan²na’³ ‘e³ ca²³jmée²ra’³ ‘e³ bi²³ ‘uǿn²na’³. 
Qui² ca²³jmée²ra’³ co²juø’¹ quián²³ je² dxi³quién²na²³. 
 
A mis padres y hermano por creer en mí, por su apoyo incondicional y por enseñarme a ser 
mejor persona. A mi madre Antonia Hernández Martínez, vives en nuestros corazones, 
gracias por creer en mí, por impulsarme a seguir adelante, por todos esos consejos que 
jamás olvidaré, gracias por ser mi madre y amiga, gracias por apoyarme en mi entrada a la 
universidad a pesar de que estaría lejos de casa en un momento muy difícil de nuestras 
vidas, desearía que las cosas fueran diferentes, te amo. A mi padre, Leobardo Enríquez 
Alavez por seguirme apoyando a pesar de las limitaciones, por tu ejemplo de humildad y 
trabajo, por ser el mejor padre, gracias por enseñarme desde pequeño a tener los pies sobre 
la tierra, te amo padre. A mi hermano y amigo Oscar Hugo Enríquez Hernández, por estar 
ahí conmigo siempre, por apoyarme, por aguantar mis desplantes, por hacerme ver mis 
errores, por compartir esos momentos en que me siento triste o en los que andamos 
contentos todos, te quiero mucho. 
A todas las personas que han dejado huella en mi vida y que han contribuido a mi 
formación profesional, a mi familia, a mis amigos y a mis profesores. A la Universidad 
Nacional Autónoma de México, a la Facultad de Economía y al Programa Universitario 
México Nación Multicultural. 
A mis abuelos, tíos y primos, a todos los que me han apoyado y orientado, muchas gracias 
por estar ahí siempre, en las buenas y en las malas. A los miembros de la comunidad que 
me vio crecer, San Gabriel la Chinantla, Veracruz, no he olvidado sus enseñanzas, no 
olvidaré mis raíces, gracias por permitirme ser parte de ustedes. 
A los compañeros de universidad gracias por darme la oportunidad de conocerlos y 
aprender de ustedes y a mis amigos muchas gracias por su amistad. A mi amigo Luis À. 
Jimenez,Reyes gracias por los comentarios al trabajo. 
Al Mtro. Manuel García Álvarez, por el apoyo en la realización de este esfuerzo, por ser un 
gran profesor y una gran persona, gracias por rescatar este trabajo. Al Dr. Martín Puchet 
Anyul por apoyarme siempre y darme la oportunidad de participar en muchos de los 
proyectos académicos y de investigación que me han ayudado en mi formación profesional, 
gracias por sus consejos y su apoyo personal. A los miembros del jurado de mi examen 
profesional, Juan Luis Ordaz Diaz, Bernardo Cruz Hernández, Paulo Humberto Leal 
Villegas y Camilo Iván Flores por sus observaciones y correcciones. 
Leobardo Enríquez Hernández 
 
 
 
 
OLIGOPOLIO Y OLIGOPSONIO BANCARIO: IMPLICACIONES DE POLITICA MONETARIA SOBRE 
LAS TASAS DE INTERES ACTIVAS Y PASIVAS EN MÉXICO 
 
INDICE 
INTRODUCCIÓN 1 
 
CAPITULO I. POLITICA MONETARIA EN MEXICO 2 
 
1.1. Política Monetaria y el Esquema de Objetivos de Inflación 3 
1.1.1. Bases teóricas y entorno institucional 3 
1.1.2. Consideraciones fundamentales del esquema de objetivos de inflación 11 
1.2. Política Monetaria y el Esquema de Objetivos de Inflación en México 12 
1.2.1. Política Monetaria expansiva de promoción al crecimiento (1968-1982) 13 
1.2.2. Modelos de Metas de Inflación (1983 - 2010) 13 
 1.2.2.1. Modelo canónico del FMI de objetivos e instrumentos múltiples (1983-1987) 14 
 1.2.2.2. Objetivos múltiples y ancla nominal del tipo de cambio (1988-1994) 14 
 1.2.2.3. Uso de anclas monetarias e institucionales (1995-2010) 15 
 1.2.2.3.1. Instrumentación de objetivos operacionales (1995-2010) 19 
 1.2.2.3.2. Sobre las operaciones de mercado abierto y subasta de liquidez 22 
1.3. Canales de Transmisión y Banca Comercial 24 
1.3.1. Canales de transmisión 25 
1.3.2. El sistema bancario en los canales de transmisión 32 
1.3.3. Enfoque postkeynesiano sobre el dinero y tasas de interés 33 
 
CAPITULO II. LA BANCA EN MEXICO 40 
 
2.1. El Sistema Financiero y su Importancia 41 
2.1.1. Sistema Financiero 41 
 2.1.1.1. Mercados Financieros 42 
 2. 1.1.2. Sectores del Sistema Financiero 44 
 2.1.1.3. Intermediarios y Sistemas de Pago 44 
2.1.2. Entidades que conforman el sistema financiero mexicano 45 
 2.1.2.1. Entidades reguladoras o normativas 45 
 2.1.2.2. Entidades financieras u operativas 46 
 2.1.2.3. Instituciones de apoyo o auxiliares 47 
 2.1.2.4. Marco Regulatorio 47 
2.1.3. Importancia de la banca en el sistema financiero 47 
2.2. La Banca y su Importancia 49 
2.2.1. Funciones que desempeñan los bancos 50 
 2.2.1.1. Los servicios de liquidez y de pago 50 
 2.2.1.2. La transformación de activos 51 
 2.2.1.3. La gestión del riesgo 52 
 2.2.1.4. La supervisión y el procesamiento de información 53 
 2.2.1.5. El papel de los bancos en el proceso de asignación de los recursos 53 
2.2.2. Integrantes del sistema bancario mexicano 54 
 2.2.2.1. Banco de México 54 
 
 
 
 
 2.2.2.2. Instituciones de Banca y Crédito 55 
 2.2.2.2.1. Banca comercial 55 
 2.2.2.2.2. Banca de Desarrollo 57 
 2.2.2.3. Fideicomisos públicos 57 
 2.2.2.4. Organismos Autoregulatorios Bancarios 58 
2.2.3. Importancia de la banca comercial en los canales de transmisión de la política monetaria 58 
2.3. Competencia Bancaria en México: Oligopolio y Oligopsonio 59 
2.3.1. Conceptos teóricos de la competencia bancaria 60 
2.3.2. Etapas recientes del desenvolvimiento bancario mexicano 61 
2.3.3. Rentabilidad, concentración y eficiencia en el sistema bancario 63 
 2.3.3.1. Profundidad y desintermediación 63 
 2.3.3.2. Concentración 65 
 2.3.3.3. Innovación 72 
 2.3.3.4. Operación y Utilidad 73 
 2.3.3.5. Capitalizacióny calidad de la cartera crediticia 80 
2.3.4. Extranjerización e impugnabilidad en mercados relevantes 81 
 2.3.4.1. Fusiones y Extranjerización 83 
 2.3.4.2. Oligopolio en Mercados relevantes de créditos 88 
 2.3.4.3. Oligopsonio en mercados relevantes de captación 94 
 
CAPITULO III. TASA OBJETIVO Y TASAS DE INTERES ACTIVAS Y PASIVAS 97 
 
3.1. Relación entre variables 98 
3.1.1. Variables del modelo 98 
3.1. 2. Canal de transmisión 99 
3.1.3. Correlación 100 
3.1.4. Causalidad 100 
3.2. Pruebas de raíz unitaria de las variables 102 
3.3. Especificación de los modelos VAR 103 
3.3.1. Prueba de rezago óptimo 103 
3.3.2.Pruebas de Causalidad de Granger 105 
3.3.3. Funciones impulso- respuesta 106 
3.3.4. Análisis de la Descomposición de la Varianza 114 
 
CONCLUSIONES GENERALES 117 
RECOMENDACIONES 120 
BIBLIOGRAFÌA 121 
ANEXO ECONOMÉTRICO 124 
 
 
 
1 
INTRODUCCIÓN 
La política monetaria es un elemento fundamental de la política económica para los países 
y como tal ha ido evolucionando en las últimas décadas hasta llegar a ser considerada el 
ancla nominal de la economía. El esquema de objetivos de inflación con la tasa de interés 
como instrumento se ha constituido en el marco en que se desenvuelve la política monetaria 
actual en México y en muchos países. La política monetaria enfrenta restricciones con las 
que tiene que interactuar, por ejemplo una economía pequeña y abierta como la mexicana 
se encuentra expuesta a la volatilidad de los mercados financieros internacionales, además 
de los aspectos estructurales internos del sistema financiero, entre otros, que afectan a las 
tasas de interés del mercado. En este trabajo se analizan las implicaciones de política 
monetaria del oligopolio y oligopsonio bancario sobre algunas tasas de interés activas y 
pasivas en México en algunos mercados relevantes de créditos y captación. 
En el primer capítulo se hace una descripción de la política monetaria, sus bases teóricas, su 
evolución reciente en México y la importancia de la banca en los canales de transmisión. 
 
En el segundo capítulo se describe el sistema financiero, su importancia para el desarrollo 
económico y el papel de la banca. Se muestran indicadores de concentración bancaria, de 
eficiencia, de rentabilidad y de extranjerización con el enfoque de impugnación en 
mercados relevantes para analizar rasgos de oligopolio y oligopsonio bancario. 
En el tercer capítulo se presentan pruebas econométricas para analizar la relación de la tasa 
de política monetaria y las tasas activas y pasivas de la banca. En el primer apartado se 
presentan pruebas de correlaciones y causalidad entre la tasa objetivo de política monetaria 
y cada tasa activa y pasiva. En el segundo se realizan pruebas de raíz unitaria de las tasas de 
interés empleadas para conocer la estacionariedad y orden de integración. En el tercero se 
plantean tres modelos de Vectores Autoregresivos con el fin de mostrar las pruebas de 
causalidad de Granger, las funciones impulso-respuesta y el análisis de la varianza entre la 
tasa objetivo de política monetaria y las tasas activas y pasivas bancarias. 
Las hipótesis principales del trabajo son que en México la banca comercial sigue 
representando una parte fundamental del sistema financiero, por lo cual presenta 
restricciones para la efectividad de la política monetaria de tasas de interés, pues las tasas 
activas y pasivas bancarias pueden comportarse de forma independiente y/o heterogénea a 
la variable de política monetaria debido a la estructura oligopólica y oligopsónica de la 
banca. 
 
 
 
2 
CAPITULO I. POLITICA MONETARIA EN MEXICO 
Este capítulo muestra las bases teóricas en que se sustenta la política monetaria de metas de 
inflación implementada en México desde finales de la crisis de 1994-1995 con el fin de 
generar condiciones de estabilidad macroeconómica, primero de forma implícita y de forma 
explícita a principios de la primera década del presente siglo. Se describe la evolución 
histórica de la adopción del modelo mediante la Regla de Taylor (RT) como una guía de 
toma de decisiones y se describen los canales de transmisión más importantes considerando 
de forma específica el papel de la banca comercial en la transmisión de la política 
monetaria. Este capítulo es de suma importancia para la consecución de los objetivos 
finales del trabajo a realizar, ya que se considera que para analizar y comprender los efectos 
que realmente tiene la aplicación de una política monetaria basada en un instrumento como 
la tasa de interés sobre algunos mercados relevantes de productos y servicios bancarios, es 
necesario describir el desarrollo histórico de su aplicación y los fundamentos teóricos que 
lo sustentan, así como los mecanismos de transmisión considerados. Esto último es 
fundamental ya que permite identificar el papel que juega el sistema bancario en la 
determinación de las tasas de interés y las implicaciones que tiene para una economía no 
desarrollada, con mercados financieros imperfectos y estructura bancaria oligopólica-
oligopsónica, como la mexicana. 
 
En el primer apartado de este capítulo se plantean algunas de las bases teóricas y el entorno 
institucional considerados en el marco de una política monetaria basada en los objetivos o 
metas de inflación, así como las características atribuidas a dicho esquema. 
En el segundo apartado se analizan las adaptaciones del modelo a las condiciones 
imperantes en la economía mexicana. Se estudia la evolución histórica en México de la 
aplicación del mismo, describiendo las condiciones que se fueron generando para derivar 
en la adopción plena de un modelo de inflación objetivo explícito y sólidamente 
constituido. Se hace una breve revisión de la política monetaria en México desde 1982 y la 
evolución de los mecanismos utilizados por el Banco de México hasta el 2010. Se hace una 
descripción de las operaciones de mercado abierto y se describe la adopción de los 
objetivos de tasas de interés publicadas y anunciadas explícitamente desde 2008. 
En el tercer apartado, se describe el mecanismo de transmisión que se establece, haciendo 
hincapié en la importancia de las tasas de interés como el principal instrumento de política 
monetaria y el papel del sistema bancario en la determinación de las mismas. Se analizan 
las bases teóricas, el mecanismo de transmisión y la relación de las tasas de interés en el 
sistema bancario, con la política monetaria y los determinantes de la inflación. 
Adicionalmente en este apartado se hace una descripción breve sobre los enfoques 
postkeynesianos sobre las tasas de interés e inflación. 
 
 
 
3 
1. Política monetaria y el esquema de objetivos de inflación 
No hay consenso en la forma en que la Política Monetaria (PM) afecta a la economía, sin 
embargo, se acepta en general que la autoridad monetaria puede influir sobre la actividad 
económica e inflación. 
La autoridad responsable de instrumentar la PM y proveer de moneda en un país es el 
Banco Central (BC). En México el BC o autoridad monetaria es el Banco de México 
(Banxico). La política monetaria del BC se asocia al conjunto de acciones a través de las 
cuales la autoridad monetaria determina las condiciones bajo las cuales proporciona el 
dinero que circula en la economía, para lo cual influye en el comportamiento de la tasa de 
interés nominal de corto plazo. 
Gran parte de académicos y autoridades monetarias en el mundo, consideran que la mejor 
contribución que la política monetaria puede hacer para fomentar el crecimiento económico 
sostenido es procurando la estabilidad de precios, por lo que el objetivo prioritario del BC 
debe ser la estabilidad monetaria, formalizándose en muchos casos con el establecimiento 
de metas de inflación a niveles bajos y estables. Actualmente los Bancos Centrales de la 
mayoría de los países consideran que su objetivo primordial es la estabilidad de precios, por 
lo que el combate a la inflación se ha convertido en la prioridad de la política monetaria 
(Banxico, 1997; Galindo, 2007). 
1.1. Bases teóricas y el entorno institucional 
 
Tras los procesos inflacionarios de los años setenta y ochenta surgió el debate en torno al 
control de la inflación por parte de las autoridades monetarias y académicos. Con tal debate 
surgió un Nuevo Consenso Macroeconómico (NCM) en el cual se inserta una teoría de 
política monetaria, que se conoce como el Nuevo Consenso en Política Monetaria NCPM 
(Goodfriend, 2007), queplantea que la tasa de interés nominal de corto plazo debe ser el 
instrumento de política monetaria para la estabilización de los precios. Una versión de esta 
teoría monetaria es la RT, el cual consiste en un modelo de Metas de Inflación Objetivo 
(MIO). 
 
Las MIO tienen su origen en dicho consenso y tienen una historia analítica mucho más 
reciente en comparación con otras políticas monetarias deflacionarias y restrictivas. Aun 
así, la visión del NCM tiene sus raíces históricas en el trabajo de Wicksell (1898) y por lo 
tanto puede llamarse un renacimiento Wickseliano (Rochon, 2010). 
 
 
 
 
4 
Se trata de un nuevo enfoque de política monetaria en virtud del cual la tasa de interés de 
corto plazo desempeña el papel de instrumento clave de la política monetaria para controlar 
la inflación (Perrotini, 2010). 
 
Para el planteamiento teórico, el sistema bancario opera en perfecta competencia ya que no 
hay barreras a la entrada de nuevas instituciones, ni economías de escala, las expectativas 
de precios que se forma el público depende crucialmente del financiamiento bancario al 
déficit público y los agentes económicos cuentan con información completa (Mantey, 
2002). El NCPM incluye la aceptación de los siguientes supuestos en los planteamientos 
monetarios: 
 
i) Objetivo final de combate a la inflación y estabilidad de precios 
 
El énfasis en el combate a la inflación se basa en los argumentos de que la inflación, en 
primer lugar dificulta a los agentes económicos reconocer cambios en los precios relativos 
de bienes y servicios, ya que los cambios se ocultan en las fluctuaciones del nivel general 
de precios, por lo cual los agentes pueden tomar decisiones equivocadas respecto a la 
inversión y el consumo, lo que conduce a una asignación ineficiente de los recursos. En 
segundo lugar, conduce a mayor inversión especulativa y reduce la inversión productiva, 
debido a que las tasas de interés nominal incluyen una prima de riesgo por inflación para 
compensar a los acreedores por los riesgos asociados con la tenencia de activos nominales 
en el largo plazo. En tercer lugar, hace más probable que los agentes desvíen recursos de 
los usos productivos para protegerse contra la inflación, lo que obstaculiza el desarrollo 
económico. En cuarto lugar porque la inflación sostenida provoca una devaluación del tipo 
de cambio real. Y por último, altas tasas de inflación conducen a tasas de inflación aún 
mayores, alienta la fuga de capitales e incluso puede crear inestabilidad social y política, ya 
que los grupos más débiles son lo que más sufren la inflación debido a que tienen 
posibilidades limitadas para cubrirse. 
 
Por esto, se establece que la estabilidad de precios debe ser la meta principal de largo plazo 
de la política monetaria. Dicha estabilidad de precios considerada como el resultado del 
establecimiento de una inflación objetivo que genere una inflación baja y sin costos reales 
en el largo plazo en el producto y el empleo. 
 
ii) La desregulación financiera 
 
La teoría en que se basa la desregulación financiera hace tres afirmaciones fundamentales 
(Mantey, 2002). En primer lugar, que en los países en desarrollo el crecimiento económico 
 
 
 
5 
se encuentra limitado por la insuficiencia de ahorro y una canalización ineficiente del 
mismo. En segundo lugar, que el ahorro se ve desalentado por las bajas tasas reales de 
interés, lo cual es resultado de la excesiva regulación monetaria y del gasto público 
inflacionario. Y en tercer lugar, que la existencia de bajas tasas de interés da lugar a que el 
financiamiento se canalice a proyectos de bajo rendimiento, que generalmente realizan las 
grandes empresas ya establecidas, en tanto que otros proyectos más rentables que desean 
realizar las empresas pequeñas o nuevas no encuentran financiamiento adecuado. Esto da 
lugar a un estado de represión financiera por lo que para remediar la situación se propone 
desregular la concesión de créditos por los bancos comerciales, es decir, eliminar controles 
cuantitativos a la expansión del crédito bancario, eliminar el financiamiento bancario al 
gobierno y dejar que las tasas de interés se determinen libremente por el mercado. 
 
La desregulación y la apertura de los sistemas financieros, se considera como un medio 
para acelerar el desarrollo. En primer lugar porque se supone que el sistema financiero es la 
vía más eficiente para canalizar el excedente económico a la inversión, porque reduce el 
costo de los recursos y los asigna a los usos más rentables. En segundo lugar porque se 
considera que el desarrollo financiero eleva la propensión a ahorrar. Y por último, porque 
la intervención del gobierno en los mercados financieros es costosa e innecesaria, pues no 
tiene ventajas sobre los mercados privados de capital, los cuales son eficientes. 
 
Se espera que estas medidas conduzcan a una elevación de las tasas de interés real sobre los 
depósitos bancarios, como una consecuencia de la competencia entre los bancos 
comerciales por atraer recursos, a la canalización del crédito a proyectos de inversión más 
rentables y a una mejoría del acervo de capital y un mayor crecimiento del ingreso. 
 
El planteamiento de la no intervención del gobierno en los mercados financieros modificó 
la instrumentación de la política monetaria, sustituyendo los mecanismos de control directo 
de liquidez (encajes, depósitos obligatorios en el banco central, ventanilla de redescuento, 
topes a las tasas de interés, canalización selectiva del crédito, entre otros) por operaciones 
de mercado abierto (Mantey, 2002). 
 
iii) Tipo de cambio flexible 
 
El régimen de tipo de cambio flexible es condición necesaria para el planteamiento teórico 
del modelo de inflación objetivo. Los tipos de cambio entre las monedas quedaron sujetas a 
las fuerzas del mercado ante la ausencia de un ancla en el sistema monetario mundial, y 
porque el tipo de cambio como ancla nominal de la política monetaria mostró ser 
ineficiente en muchos países, incluido México. 
 
 
 
 
6 
La expansión desregulada del crédito internacional, la expansión de liquidez mundial y los 
rápidos movimientos internacionales de capital especulativo, producto de la desregulación 
financiera e innovaciones tecnológicas que redujeron costos de transacción, han creado 
nuevos riesgos al sistema de pagos, y la preocupación por mantener la confianza en la 
moneda por parte de la autoridad monetaria se ha traducido en costosas operaciones de 
regulación monetaria (Mantey, 2002). 
 
El modelo de inflación objetivo no contempla al tipo de cambio como una fuente 
inflacionaria, por lo que supone flexibilidad del mismo. Sin embargo, algunos autores han 
argumentado y mostrado empíricamente la utilización del tipo de cambio, en algunos países 
como México, como un objetivo intermedio de la política monetaria, inclusive se 
argumenta que su influencia es más significativa que la propia tasa de interés. Esta 
influencia significativa es atribuida a problemas de pronóstico de la inflación, credibilidad 
imperfecta, dolarización de los pasivos, al rápido traspaso del tipo de cambio a los precios 
(pass-through) y en general, a problemas de inflación estructural de la economía. 
 
iv) La inflación como un fenómeno determinado por la demanda 
 
Para los partidarios del régimen de metas de inflación, la inflación es un fenómeno 
monetario estrictamente determinado por la demanda y controlada por la política monetaria, 
i.e., la política monetaria es la principal vía para influir en la demanda agregada. El énfasis 
se pone estrictamente en la demanda, en específico en la brecha de producto. Se considera 
que los choques de oferta son transitorios y no ejercen influencia sobre la senda 
inflacionaria de largo plazo. 
 
v) La existencia de una tasa natural de interés 
 
Existe una tasa de interés natural o de equilibrio que da lugara una tasa nula de aceleración 
de la inflación y que corresponde al equilibrio macroeconómico con utilización plena de 
los factores productivos. El supuesto es que el banco central controla o se aproxima a la 
tasa natural de interés, mediante el control de la tasa nominal de corto plazo y sobre las 
tasas de interés real del mercado. Mientras la tasa real de interés no sea igual a la tasa 
natural, habrá presiones inflacionarias, por lo que la política monetaria actúa con el 
mecanismo de la tasa de interés asegurando una convergencia hacia la inflación objetivo sin 
afectar la actividad económica real. 
 
 
 
 
7 
vi) Dinero endógeno y neutral 
 
El nuevo paradigma monetario, también puede definirse como una aceptación de la 
hipótesis de endogeneidad del dinero
1
, toda vez que implica el abandono de aquella otra 
que afirma que el BC puede controlar exógenamente la oferta monetaria del sistema, 
proposición sostenida por la mayoría de autores de la escuela neoclásica (Perrotini, 2010). 
 
El dinero desempeña un papel causal en la determinación de los precios y de las tasas de 
inflación a través del sistema bancario. Si los BC establecen las tasas de interés por debajo 
de la tasa natural, las empresas encuentran redituable pedir prestado al sistema bancario 
para llevar a cabo los planes de inversión y la producción crece, la brecha de producto se 
hace más estrecha, se crea dinero y puede haber inflación si la cantidad de unidades 
monetarias crece más rápido que la producción. El mecanismo de transmisión opera a 
través del sistema bancario, el cual crea dinero de manera endógena para hacer frente a las 
necesidades de producción y circulación (Rochon, 2010). 
 
El dinero es neutral por lo que alzas en las tasas de interés no afectan a la oferta, el impacto 
de la política monetaria en objetivos distintos a la estabilidad de precios no es relevante, por 
lo que un mayor gasto público solo afecta a los precios a través de la demanda y no al 
ingreso y empleo, que están determinados por las condiciones de la oferta agregada. 
 
vii) Disciplina fiscal 
 
Se considera que la política fiscal es inflacionaria, las autoridades monetarias deben estar 
libres de dominio fiscal, por lo que es mejor que los bancos centrales sean independientes, 
se insiste en la disciplina fiscal y el presupuesto balanceado y se obliga a la política fiscal a 
alinearse a la monetaria. Una política fiscal irresponsable conducirá a la inflación a través 
de un incremento artificial de la demanda o por la monetización de la deuda pública, el 
endeudamiento del sector público con el BC debe permanecer bajo. Existe el efecto 
crowding out al suponer escasez de capital. La idea es que un mayor gasto público 
solamente afecta a los precios a través de la demanda y no al ingreso y empleo, que están 
determinados por las condiciones de la oferta agregada y no por la demanda. 
 
 
1 La cantidad de dinero que hay en una economía moderna no depende de la voluntad de un banco emisor, sino de las necesidades de 
circulación medidas por la demanda de créditos por parte de las empresas y especuladores, los bancos atienden esa demanda tanto 
como pueden a una tasa de interés más alta que las de los depósitos y cuando se agotan esas posibilidades recurren al BC solicitando 
reservas de dinero legal. La cantidad solicitada será menor que los créditos solicitados en la proporción que indica el multiplicador 
bancario y cuando el dinero se deposite en los bancaos coincidirá con el inverso del coeficiente de reservas. La variable independiente 
no es el dinero legal emitido por el BC sino el crédito concedido por la banca. 
 
 
 
8 
viii) La tasa de interés como instrumento de política 
 
La nueva estructura financiera con una alta movilidad de capital hizo evidente la 
incapacidad del banco central de controlar la oferta monetaria a través de los agregados 
monetarios, con lo que éstos agregados dejan de ser el instrumento intermedio de la política 
monetaria. Surgió un nuevo consenso monetario que acepta la endogeneidad del dinero y el 
carácter de la tasa de interés monetario (no determinado por el ahorro y la inversión) y 
exógeno (está fijado por el banco central). Con esto la tasa de interés nominal de corto 
plazo se convierte en el instrumento explícito y principal de la política monetaria. 
 
Dado que desde el colapso de Bretton Woods (inicio de los años setenta), el sistema 
monetario internacional se basa en monedas fiduciarias cuyo valor no está ligado a ninguna 
forma de dinero mercancía (por ejemplo el oro), sino que está en función de las políticas de 
los bancos centrales, la estabilidad monetaria y de los precios depende de la regulación 
monetaria; en ausencia de un vínculo entre el dinero fiduciario y una mercancía real, la 
estabilidad de precios depende crucialmente de la existencia de un ancla nominal efectiva. 
Toda vez que el marco monetario del MIO se sustenta en la hipótesis de la endogeneidad 
del dinero, la tasa de interés es el ancla exclusiva de la economía, no el control de la base 
monetaria (Perrotini, 2007). 
 
El ancla nominal considerado (la tasa de interés nominal de corto plazo) debe ser creíble, 
transparente y flexible para absorber choques temporales y mitigar la volatilidad de los 
ciclos económicos, con el fin de preservar la estabilidad de los precios. 
 
ix) Autonomía del Banco Central, credibilidad y transparencia 
 
La autonomía del BC respecto al gobierno es necesaria para fortalecer su credibilidad y 
reputación, aunado a la asignación del objetivo prioritario de mantener la estabilidad de los 
precios internos, dejando de lado objetivos como crecimiento del empleo, regulación de la 
demanda interna o la canalización de recursos a actividades prioritarias. La idea central de 
la autonomía es que un banco central autónomo puede alcanzar la estabilidad de precios 
mediante una meta de inflación utilizando la tasa de interés como instrumento de política 
monetaria ya que elimina el sesgo inflacionario. Esto último porque concita mayor 
credibilidad y transparencia para los mercados financieros, inversionistas y consumidores 
en la aplicación de la política monetaria, con lo que se resuelve el problema de la 
inconsistencia temporal. 
 
Sin embargo, la independencia se ha contemplado de manera asimétrica, prescribiendo el 
financiamiento obligado del déficit público, pero sin establecer límites a la dependencia 
 
 
 
9 
fiscal del banco emisor como resultado de sus operaciones de regulación monetaria 
mediante las operaciones de mercado abierto que realiza con valores gubernamentales, es 
decir, se establecen límites máximos al crédito del banco central al gobierno, pero no se 
determinan montos mínimos cuando el crédito neto es negativo (Mantey, 2002). 
 
x) Regla monetaria y función de reacción 
 
El enfoque o modelo de inflación objetivo provee un marco preciso de política monetaria, 
implementada mediante la RT. Este marco o régimen de meta de inflación, implica que el 
BC anuncia objetivos oficiales de tasa de inflación. La RT es una función de reacción que 
postula una relación negativa entre la tasa de interés monetaria en términos reales con la 
brecha del producto y la brecha de inflación. 
 
La estructura del modelo consiste en tres ecuaciones que representan la dinámica de la 
demanda agregada (curva IS), la inflación (correspondiente a hipótesis NAIRU de la 
existencia de una tasa natural de desempleo compatible con una tasa de inflación baja y 
estable) y la tasa de interés nominal (RT o función de reacción del BC). 
 
(1) Curva IS yt=y0 – λr+ε1 
(2) Curva de Phillips πt=πt -1+β(yt – y*) + ε2 
(3) Regla de Taylor rt=πt + r*t + απ(πt – π*t) + αy(yt – y*t) + ε3; α>0 
 
r=rt–πt = Tasa de interés real 
rt=Tasa de interés nominal 
r*t=Tasa natural de interés 
y0 =Demanda agregadaautónoma (no depende del ingreso) 
yt=Demanda agregada o nivel de ingreso en t 
y*t=Ingreso potencial o de equilibrio 
πt=Inflación observada en t 
πt -1=Inflación rezagada un periodo 
π*t=Inflación objetivo 
ε =Perturbaciones o choques aleatorios 
 
En una economía abierta resulta importante añadir otra ecuación que muestre un vínculo 
directo entre la tasa de interés real y el tipo de cambio. Si bien la versión canónica del 
nuevo paradigma monetario (la RT) no contempla al tipo de cambio como una fuente de 
inflación, algunos modelos de inflación objetivo si lo consideran (Perrotini, 2007). 
 
 
 
 
10 
La razón es que en algunas economías, como la mexicana, el traspaso del tipo de cambio a 
los precios (pass-through) es importante, por lo que el tipo de cambio se convierte en un 
objetivo intermedio de la política monetaria. 
 
(4) Tipo de Cambio et=Ψrt + ε4 ; Ψ>0 
 
et=Tipo de cambio 
Ψ=Coeficiente que mide la relación entre el tipo de cambio y la tasa de interés real 
ε=Término de error aleatorio 
 
Si Ψ=1 el tipo de cambio obedece a la condición de paridad de tasas de interés descubierta 
(PTID). Condición que debe cumplirse en el modelo, por lo que al considerarse las 
expectativas del tipo de cambio, la relación entre la PTID y ésta es: 
 
(4.1) Tipo de cambio et = E(et+1) + it – i* + e4 
 
E(et+1)= Expectativas del tipo de cambio 
it=Tasa de interés interna 
i*=Tasa de interés externa 
 
La Curva de Phillips (CP) expresa la influencia de las expectativas de los agentes 
económicos en la inflación, toda vez que aquella representa una relación de oferta agregada 
que tiene la forma de esa curva aumentada por expectativas: las expectativas del público 
con respecto a las fluctuaciones futuras de la brecha de producto alteran y desplazan la 
posición de la CP. La oferta agregada depende de las expectativas de inflación, si las 
expectativas son racionales se dice que los precios son óptimos y el dinero es super neutral, 
mientras que con expectativas adaptativas la política monetaria óptima admite efectos 
reales en el corto plazo (Perrotini, 2007). 
 
La RT, adoptada por el Nuevo Consenso Clásico (NCC), reemplaza la curva LM de la 
Síntesis Neoclásica propuesta por Hicks, supone que la tasa de interés nominal (rt) está 
determinada por la inflación observada (πt), la tasa de interés natural (r*t), la brecha 
inflacionaria (la inflación objetivo π*t, así como la inflación observada πt) y la diferencia 
entre el ingreso observado yt y el potencial y*t (Levy, 2010). 
 
(3) rt = πt + r*t + απ (πt – π*t) + αy (yt –y*t); α>0 
Si 
(3.1) πt – π*t = 0 
(3.2) yt –y*t = 0, 
 
 
 
11 
Entonces 
(3.3) rt – πt = r*t 
 
Al existir igualdad entre la inflación observada y la inflación objetivo, así como entre el 
producto observado y el potencial, la tasa de interés nominal, deducida la variación de los 
precios, es igual a la tasa de interés natural que garantiza pleno empleo de los factores 
productivos. 
 
La tasa de interés monetaria es determinada por el BC con base a una tasa de interés natural 
que iguala la inversión con el ahorro y se ajusta según la brecha de inflación y de producto. 
El equilibrio entre ahorro e inversión no se da a pleno empleo, sino cuando se logra utilizar 
plenamente la capacidad instalada sin inducir un proceso inflacionario (Levy, 2010). En 
este planteamiento se encuentra la noción de dinero endógeno, ya que aumentos en la tasa 
de interés tiene como objetivo reducir la demanda (la inflación está determinada por 
factores de demanda como los salarios o el gasto público), sin embargo el dinero es neutral 
ya que no afectan a la oferta, por lo que la política fiscal activa es inadmisible. 
 
En general el sistema considerado en el modelo, en que se basa la RT, funciona de la 
siguiente manera: si aumenta la brecha de producto incrementa la inflación y por 
consecuencia aumenta la brecha de inflación; el banco central, respondiendo a la función de 
reacción, debe aumentar la tasa de interés nominal de corto plazo sobre la base monetaria, 
el arbitraje o competencia se encarga de alinear las tasas de interés reales de otros mercados 
a ésta restando las expectativas de inflación a la tasa de interés nominal; conforme aumenta 
la tasa de interés real, la del producto y la inflación disminuyen, cerrando las brechas de 
producto e inflación respectivamente; al colmarse las dos brechas se asegura la 
convergencia entre la tasa de interés real con la tasa natural; así con tasas de mercado de 
interés real dadas, el banco central determina el nivel general de precios en base a la 
manipulación de las expectativas del público y la economía alcanza la estabilidad de 
precios. 
 
1.2. Consideraciones fundamentales del esquema de objetivos de inflación 
 
La idea de este esquema es que la autoridad monetaria no regula discrecionalmente la base 
monetaria como supone la teoría exógena del dinero que postula que la oferta monetaria es 
controlada fácil y directamente por la autoridad monetaria (el BC en este caso formula 
objetivos de crecimiento de la oferta monetaria). El esquema implica la endogeneidad de la 
oferta monetaria y que la variable exógena es la tasa de interés. La función de la autoridad 
monetaria por lo tanto es regular la tasa de interés nominal de corto plazo y de esta forma 
tener una influencia indirecta sobre el nivel de actividad económica y precios. 
 
 
 
12 
 
El éxito del MIO depende de la habilidad del BC para informar de sus metas y mantener la 
credibilidad de su respuesta frente a fluctuaciones del producto y del desempleo (Perrotini, 
2007). Este esquema no tiene un objetivo intermedio explícito y los BC confían en el 
público para poder alcanzar su objetivo, por lo que las expectativas de inflación del público 
son fundamentales al igual que la credibilidad y transparencia del BC frente al público 
sobre la efectividad y resultados de su política monetaria. 
 
Con el MIO se espera que la política monetaria sea creíble, flexible y transparente para la 
consecución de los objetivos ante choques temporales y frente al ciclo económico. Esto 
requiere que el MIO considere los siguientes elementos fundamentales: 
 
a) El reconocimiento y compromiso institucional de la estabilidad de precios como el 
objetivo fundamental de la política monetaria de largo plazo. 
b) Anuncio público de objetivos o metas numéricas de inflación de mediano plazo. 
c) Una autoridad monetaria autónoma. 
d) Un marco de transparencia, sustentada en una estrategia de comunicación con el 
público respecto de los objetivos, planes y decisiones de la autoridad monetaria, así 
como rendición de cuentas en cuanto al logro de los objetivos. 
e) Análisis de todas las fuentes de presiones inflacionarias para evaluar su trayectoria 
futura, como principal referencia para las decisiones de la política y la utilización de 
muchas variables, no solo los agregados monetarios, para la toma de decisiones. 
f) Uso de mediciones alternativas de la inflación, como la inflación subyacente2, para 
separar aquellos fenómenos que inciden de manera transitoria sobre la inflación e 
identificar la tendencia de mediano plazo. 
 
2. Evolución de la política monetaria y del esquema de objetivos de inflación en 
México 
México ha experimentado diversas políticas monetarias y regímenes cambiarios. Hasta la 
crisis de la deuda externa de 1982 la política monetaria era expansiva y se encontraba 
subordinada a la promoción del crecimiento económico. Entre 1982 y 1994 las autoridades 
monetarias intentaron distintos abordajes para promover el crecimiento económico con 
estabilidad de precios, utilizando como instrumento principal la estabilidad del tipo de 
cambio, el tipo de cambio se convirtió en la principal preocupación de las autoridades 
 
2 Es la inflación tomando en cuenta una canasta de bienesy servicios no sujetos a decisiones administrativas, estacionalidad y 
volatilidad, para facilitar la lectura de la tendencia general de la inflación. Se calcula para ofrecer una mejor aproximación de las 
presiones inflacionarias generales de mediano plazo y solo constituye una herramienta de análisis y comunicación. 
 
 
 
13 
monetarias. Desde 1995 la política monetaria se dirige al objetivo único de mantener la 
estabilidad de precios y transita gradualmente hacia un sistema de metas de inflación. 
2.1. Política monetaria expansiva de promoción al crecimiento (1968-1982) 
Después de casi medio siglo de expansión monetaria, entre mediados de 1950 y fines de 
1960; México priorizó la estabilidad de precios. Sin embargo, desde 1968, en parte 
apoyándose en los ingresos petroleros, el gobierno deja de lado el objetivo de controlar la 
inflación para aplicar políticas de tipo keynesianas, utilizando el gasto público para 
impulsar el crecimiento económico y sosteniendo una política cambiaria –flotación 
controlada- de apoyo a la política comercial de sustitución de importaciones (Garriaga, 
2010). Estas políticas se mantuvieron hasta 1982, año en que la magnitud de la crisis llevó a 
replantear las políticas económicas, y en particular la monetaria. 
2.2. Modelos de metas de inflación (1983 - 2010) 
Desde 1982 al presente, la estabilización monetaria y de precios ha sido el objetivo 
prioritario de la política económica en México. En la búsqueda de la estabilidad 
macroeconómica, el gobierno mexicano ha ensayado tres enfoques de política económica 
que pueden definirse como una trilogía de distintos modelos de metas de inflación (Fortuno 
y Perrotini, 2007). 
Estos tres enfoques tienen como objetivo operacional a la tasa de interés de corto plazo con 
la finalidad de estabilizar los precios y la diferencia fundamental es el uso que se le da al 
objetivo intermedio (agregados que en el proceso de transmisión ocupan una posición 
intermedia entre el objetivo operativo -que puede ser controlado- y los objetivos 
macroeconómicos). 
Ante un escenario de crisis a principios de los ochenta las ideas monetaristas comenzaron a 
ganar lugar frente a los planteamientos keynesianos, quienes suponían un trade off entre 
inflación y empleo a lo largo de la CP, por lo que fueron cuestionados ante la estanflación 
(altas tasa de inflación y altas tasas de desempleo) desde la década de los setenta. Se 
cuestionaron los efectos reales y de largo plazo de las expansiones monetarias. Los 
monetaristas cuestionaron las políticas expansionistas argumentando la neutralidad del 
dinero a largo plazo, por lo que incrementos en la oferta monetaria no incrementan el 
producto y generan una inflación que repercute sobre el crecimiento y la distribución del 
ingreso, i.e., altas tasa de inflación operan como un impuesto regresivo sobre los individuos 
y desincentivan el ahorro y la inversión de capital. Ya desde que México se incorporó al 
FMI en 1976, debió adoptar programas de ajuste para obtener financiamiento y el control 
de la inflación estaba en el centro de los programas de estabilización. 
 
 
 
14 
2.2.1 El modelo canónico del FMI de objetivos e instrumentos múltiples (1983-1987) 
De 1983 a 1987 se aplicó un modelo canónico monetarista de metas de inflación del Fondo 
Monetario Internacional (FMI). Existe en este enfoque un objetivo intermedio explícito que 
es el crecimiento de los agregados monetarios. El modelo postulaba que la inflación estaba 
determinada por la tasa de crecimiento de la oferta monetaria, por lo que el banco central 
debía tener como meta una tasa de crecimiento constante de la cantidad de dinero. Los 
instrumentos de política para lograr el objetivo fueron la reducción del déficit fiscal y el 
tipo de cambio. Se postulaba que el tipo de cambio era efectivo para obtener la meta de 
equilibrio de la balanza de pagos y que el saneamiento de las finanzas públicas era 
necesario para alcanzar la meta de inflación deseada. La estabilidad macroeconómica por lo 
tanto, se alcanzaría con la devaluación del tipo de cambio y el ajuste del desequilibrio 
fiscal. La política cambiaria asumió un rol central, la estabilidad del tipo de cambio se 
convirtió en la preocupación central de las autoridades monetarias y se establecieron dos 
tipos de cambio, uno libre y otro controlado. Este último rigió para la importación de 
materias primas, adquisición de bienes de capital y para el pago del servicio de la deuda, y 
vinculó la política cambiaria a la comercial, subsidiando las exportaciones mexicanas para 
compensar los efectos de la liberación comercial y desincentivando las importaciones no 
productivas. En este periodo se utilizaron múltiples instrumentos, para controlar la 
inflación, destacándose el uso de instrumentos fiscales y cambiarios, así como la 
concertación de acuerdos con trabajadores y empresarios para limitar incrementos salariales 
(Garriaga, 2010). En 1985 se modificó la Ley Orgánica del Banco de México, facultándolo 
a fijar límites al endeudamiento público y a emitir sus propios títulos de deuda de 
regulación monetaria. 
2.2.2 Modelo de objetivos múltiples y ancla nominal del tipo de cambio (1988-1994) 
A fines de 1987 se introdujo un nuevo modelo basado en el ancla nominal del tipo de 
cambio. El objetivo intermedio fue explícitamente el tipo de cambio y se basaba en la 
premisa de que la ley del precio único establecía un límite máximo a la inflación. Esto 
implicaba la apreciación del tipo de cambio real, ya que la paridad nominal estaba fija o en 
un intervalo de flotación, por lo que suponía que el BC tenía una cantidad suficiente de 
reservas internacionales para contener ataques especulativos contra la moneda y mantener 
la paridad. Así mismo se requería de una política fiscal restrictiva (Fortuno y Perrotini 
,2007). En este periodo se acentuaron las reformas iniciadas en 1982, se insistió en el 
saneamiento de las finanzas públicas para revertir presiones inflacionarias generadas por el 
déficit fiscal, se continuó con la concertación de pactos para controlar presiones 
inflacionarias de origen salarial y el tipo de cambio se convirtió en el ancla nominal de la 
economía. El tipo de cambio dual se mantuvo hasta 19991, pero a finales de este año se 
introdujeron deslizamientos preestablecidos del tipo de cambio dentro de bandas de 
 
 
 
15 
flotación que estableció un límite inferior fijo y un límite superior variable. Este 
mecanismo contribuyó a la sobrevaluación del peso, lo que abarató las importaciones y 
encareció las exportaciones. La apertura comercial y financiera, y la sobrevaluación del 
peso contribuyeron al incremento del déficit comercial y ante un clima político adverso se 
desataron ataques especulativos contra el peso. El intento por liberar el tipo de cambio 
aplicando una devaluación controlada generó desconfianza en la economía mexicana y fuga 
masiva de capitales. 
2.2.3. Uso de anclas monetarias e institucionales (1995-2010) 
Después de la crisis de balanza de pagos de 1994-1995 el tipo de cambio dejó de funcionar 
como el instrumento de política, se adoptó un régimen de libre flotación cambiaria y la 
política monetaria, en vez del tipo de cambio, asumió el papel de ancla nominal de la 
economía (Martínez, Sánchez y Werner, 2001). En este enfoque no existe un objetivo 
intermedio explícito pero sí objetivos de metas de inflación explícitos. Además terminó 
con la práctica del Banxico de determinar las tasas de interés a las cuales intervenía 
diariamente en sus operaciones de mercado abierto (Galindo, 2007). El componente central 
de la política monetaria ha sido el mantenimiento de la confianza de los agentes 
económicos en las autoridades monetarias, y los instrumentos han tenido como objetivo 
sólo las presiones de demanda agregada. 
El uso de un ancla nominal obliga a las autoridades monetarias a conducir su política de 
formaque la variable utilizada como ancla se mantenga dentro de un rango establecido. 
Esto contribuye a crear las condiciones para la estabilidad de precios ya que ayuda a 
mantener estables las expectativas inflacionarias, evita cambios bruscos en el nivel de 
precios y atenúa el problema de la inconsistencia dinámica (Galindo, 2007). 
En 1995 el peso se devaluó y la inflación repuntó, por lo que se vio dañada la credibilidad 
del Banxico. Se empezó a exigir transparencia en la conducción de la política monetaria, 
información confiable y clara, y se criticó la falta de determinación de tomar una postura de 
política monetaria restrictiva antes, durante e inmediatamente después de la crisis. Debido a 
estas críticas, y a la necesidad de establecer un ancla visible y estricta, en 1995 se adoptó un 
límite al crédito interno neto del Banxico en el año. Debido a la crisis de credibilidad y a las 
condiciones en que se encontraba la economía se juzgó conveniente la adopción de un 
objetivo monetario visible, por lo que se utilizaron objetivos cuantitativos del crédito 
interno neto y los agregados monetarios (como billetes y monedas en circulación, medio 
circulante u otros) a pesar de su abandono por parte de la mayoría de los países, dada su 
inestabilidad en relación al PIB nominal en el corto plazo (lo cual hace desaconsejable la 
utilización de la base monetaria como objetivo intermedio). Además, debido a la 
incertidumbre respecto a la evolución de la economía mexicana, se consideró riesgoso 
 
 
 
16 
utilizar como instrumento de política monetaria la fijación de una tasa de interés de corto 
plazo. Para 1995 Banxico determinó un objetivo para la inflación anual de diciembre 1994 
a diciembre de 1995 de 42% (no se alcanzó, la inflación fue de 52%), además, impulsó el 
desarrollo de los mercados de futuros y opciones del peso mexicano, con una nueva política 
de información (Martínez, Sánchez y Werner, 2001). 
El control de la base monetaria fue abandonado hacia finales de los noventa, ya que no 
lograron estabilizar las expectativas de inflación. En primer lugar debido a inestabilidad en 
la relación entre la base monetaria y la inflación en el corto plazo que limitó el uso de esas 
variables como indicador de presiones inflacionarias, es decir, los agregados monetarios no 
mantienen una relación estable con el producto y los precios, por lo que no contienen 
información relevante para predecir la trayectoria de éstas variables (Martínez, Sánchez y 
Werner, 2001). En segundo lugar, por el hecho de que el BC no puede controlar la base 
monetaria en el corto plazo, debido a que el principal determinante de la base monetaria, 
los billetes y monedas en circulación, es inelástica a la tasa de interés en el corto plazo y 
por la creciente inestabilidad de la demanda de dinero (Cartens y Werner, 1999; Galindo, 
2007). 
El Banxico, a partir de 1994 es una institución autónoma cuyo objetivo prioritario es 
procurar la estabilidad del poder adquisitivo de la moneda nacional. En 1993 se realizaron 
reformas a la Constitución y otras leyes para otorgarle autonomía con el mandato de 
procurar la estabilidad del poder adquisitivo de la moneda nacional. Con la autonomía se 
buscaba contar con una institución dentro del Estado comprometida con la estabilidad de 
precios y que actuara como contrapeso a la administración pública respecto a situaciones 
inflacionarias y como contrapeso de los particulares cuando emprendan acciones que 
impliquen incrementos de precios (Díaz de León y Greenham, 2001). 
Con el fin de aplicar un esquema operativo bajo el cual, tanto el tipo de cambio como las 
tasas de interés fueran determinados libremente, Banxico estableció el encaje promedio 
cero y la utilización del objetivo de saldos acumulados como instrumento de política 
monetaria (Martínez, Sánchez & Werner, 2001). Tanto el tipo de cambio como las tasas de 
interés serían fijados por el mercado, con intervenciones preventivas del Banxico. 
De 1996 a 1997, se mantuvo el esquema de política monetaria, basado en límites al 
crecimiento del crédito interno neto, acumulación de activos internacionales y el 
pronóstico del incremento de la base monetaria. La política discrecional de aplicación del 
corto se orientó a restaurar condiciones de estabilidad en los mercados financieros ante 
perturbaciones externas o internas no anticipadas que afectan la trayectoria de la inflación y 
las expectativas de los agentes. En 1997 se hizo pública la trayectoria diaria de la demanda 
de base monetaria durante el año con el fin de transparentar y fortalecer la credibilidad del 
 
 
 
17 
Banxico y se inició el proceso de remonetización, una vez que la inflación tomó una clara 
tendencia descendente (la proporción de billetes y monedas a PIB crece con la 
remonetización que inicia toda vez que el descenso de la tasa de inflación se ha 
consolidado). Las dificultades de controlar la inflación mediante la base monetaria llevaron 
a un enfoque de metas de inflación en el mediano plazo. En 1996 y 1997, las metas de 
inflación fijadas por el Banco de México fueron de 20.5 y 15 por ciento, respectivamente. 
Sin embargo los objetivos no se alcanzaron, porque la inflación en 1996 fue de 27.7% y en 
1997 de 15.7% (Martínez, Sánchez y Werner, 2001). 
Desde los primeros meses de 1995 se intentó frenar la inflación limitando la expansión de 
la base monetaria, lo cual no logró controlar las expectativas, por lo que después se decidió 
manejar los saldos de las cuentas corrientes de los bancos comerciales en el Banxico con el 
régimen de saldos acumulados formalizado en 1998. A partir de 1998 el esquema de 
política monetaria comenzó una transición gradual hacia un esquema de objetivos 
explícitos de inflación, se ha ido restando énfasis al comportamiento de la base monetaria 
en el análisis de la presiones inflacionarias y aumentándose la importancia de las metas de 
inflación de corto y mediano plazos (Banxico, 1998; Martínez, Sánchez & Werner, 2001). 
En ese mismo año, en el programa monetario para 1999, se estableció un objetivo de 
inflación de 13% para diciembre de 1999 y se propuso como meta para el siguiente 
quinquenio una aproximación gradual a la inflación externa (Banxico, 1998). Fue la 
primera ocasión en que el corto se aumentaba explícitamente con un criterio preventivo, 
para generar condiciones apropiadas para el objetivo de inflación del año siguiente, es 
decir, para 1999 (Martínez, Sánchez y Werner, 2001). 
Entre 1996 y 2001, si bien se dejó flotar el tipo de cambio, la comisión de cambios compró 
y vendió dólares mediante opciones y subastas respectivamente. En 2001, se suspenden los 
mecanismos de compra y subasta de dólares a instituciones de crédito, el mecanismo 
empleado desde entonces por la Comisión de Cambios es la subasta diaria de dólares. El 
primer mecanismo (las opciones) tenía como fin acelerar la acumulación de reservas 
internacionales, a fines de mes Banxico subastaba derechos de venta de dólares que podían 
ejercerse dentro de un mes, en tanto el tipo de cambio no superara el promedio de los veinte 
días hábiles anteriores. El segundo mecanismo (subastas) fue aplicado entre fines de 1997 y 
mediados de 2001 a fin de limitar la volatilidad del valor del peso, en días en que el precio 
de dólar se ubicara en 2% o más por encima del tipo de cambio del día anterior, el Banxico 
subastaba 200 millones de dólares (Garriaga, 2010). Estas medidas estuvieron acompañadas 
de medidas de esterilización en el mercado de dinero (compra venta de títulos públicos). 
El proceso de transición al régimen de Inflation Targeting (IT) se aceleró en 1999 cuando 
el Banco de México, anunció un objetivo de inflación a mediano plazo basado en el índice 
nacional de precios al consumidor (INPC). El Banxico aplica formalmente un régimen IT 
 
 
 
18 
desde 1999 con el principal objetivo de controlar la inflación, paralo cual realiza un 
pronóstico de la tasa de inflación anual y se compromete a utilizar todos los instrumentos a 
su disposición para alcanzar esta meta (Banco de México, 2000; Galindo, 2007). En este 
año se estableció para el año 2000 como meta una inflación menor al 10%. 
A partir del 2000 Banxico empezó a publicar reportes trimestrales sobre la evolución de la 
inflación. En este año se establecieron metas de 6.5% para 2001, 4.5% para 2002 y 3% para 
2003 (Martínez, Sánchez y Werner, 2001). 
El sistema de metas de inflación se adoptó oficialmente con el Programa Monetario de 
2001, en el cual el Banxico anuncia un objetivo de 3% para el 2002 con bandas de 
fluctuación de 1% y un calendario para cumplir los objetivos. Cuando en 2001 el Banxico 
hizo explícita la regla monetaria de Taylor, como estrategia para alcanzar la estabilidad de 
precios con una meta de inflación de 3±1% la economía mexicana ya venía operando con 
este esquema en lo esencial desde hacía casi un lustro. La transición significó más bien el 
predominio explícito de la regla sobre la discreción como criterio básico de la elaboración 
de la política monetaria (Fortuno y Perrotini ,2007). 
La introducción formal de las metas de inflación no representó un cambio radical de 
política monetaria, la principal transformación se dio en el objetivo (target) de las acciones 
de política, las cuales se dirigen no tanto a controlar la inflación per se, sino a controlar las 
expectativas de inflación, por lo que se han adoptado acciones de tipo comunicacional y 
preventivo que permitan incrementar la transparencia y credibilidad del BC. El Banxico, no 
solo anuncia las metas para el índice inflacionario, sino también explica las medidas para 
alcanzarlas, y eventualmente, las razones por las cuales no se alcanzan las metas 
propuestas. 
El esquema de la política monetaria ha evolucionado y ha tenido como resultado una 
convergencia gradual hacia un esquema de objetivos de inflación, esquema que fue 
utilizado por primera vez en 1990 en Nueva Zelanda. Varios países han adoptado el 
esquema como resultado de los problemas que enfrentaron las estrategias sustentadas en 
agregados monetarios o en objetivos de tipo de cambio. En dicho esquema, Banxico 
manifiesta su postura de política monetaria a través de señales, por medio del cual modifica 
su participación en el mercado de dinero. 
Para esto, Banxico dispone además de un conjunto de factores que contribuyen a consolidar 
la política de metas de inflación tales como de independencia institucional, un solo objetivo 
(controlar la inflación), un régimen cambiario de libre flotación y un entorno de aplicación 
transparente de sus políticas monetarias apoyado por un régimen fiscal austero. El esquema 
de IT normalmente implica que el ancla nominal de la política monetaria es la propia tasa 
 
 
 
19 
de inflación lo que se acompaña de la independencia del instituto central y del uso de la 
tasa de interés como el instrumento fundamental (Galindo, 2007) 
Banxico utilizó de 1995 a 2008 como instrumento de política monetaria para afectar las 
tasas de interés, la determinación de un objetivo para el saldo de las cuentas corrientes de la 
banca comercial con dicho instituto central. 
Del 13 de septiembre de 1995 al 9 de abril de 2003 el objetivo de saldos acumulados fue 
sobre los saldos acumulados al final del mes y del 10 de abril de 2003 al 20 de enero de 
2008 el objetivo fue sobre el saldo al final del día. Otra transición comenzó en el año 2003, 
cuando el régimen de saldos comienza a ser reemplazado de hecho por la fijación de la tasa 
de interés interbancario a un día, “tasa de fondeo interbancario” (Garriaga, 2010). Al año 
siguiente de la sustitución del régimen de saldos acumulados por el régimen de saldos 
diarios, en 2004 el Banxico complementó el corto con el anuncio preciso de las tasas de 
interés deseadas, lo que de facto produjo el ajuste de la tasa de fondeo (Banxico, 2007). A 
partir del lunes 21 de enero de 2008 la Junta de Gobierno del Banxico adoptó como 
objetivo operacional la tasa de interés interbancaria a un día en sustitución del corto. 
El anuncio de la tasa de fondeo sustituyó formalmente el régimen de saldos como objetivo 
operacional de política monetaria, y para alcanzar la tasa de fondeo deseada el Banxico 
comercia títulos de deuda de corto y largo plazo y emplea depósitos de regulación 
monetaria para regular la liquidez a largo plazo. Pese al empleo creciente de este régimen 
monetario persisten dudas sobre sus principales impactos y alcances e incluso sobre sus 
efectos colaterales (Galindo, 2007). 
2.2.3.1 Instrumentación de objetivos operacionales 
El BC no puede controlar directamente la inflación, ni las variables que la determinan, 
pero cuentan con los instrumentos para afectar directamente a un grupo de variables 
nominales (objetivos operacionales, que comprenden a las tasas de interés de corto plazo y 
a los saldos de las cuentas corrientes de la banca en el BC) que tienen impacto sobre los 
determinantes de la inflación. Las decisiones de política monetaria buscan modificar por 
medio de ciertos mecanismos de transmisión y el efecto señal
3
, tanto las expectativas de los 
agentes económicos, como las tasa de interés, el precio de las acciones de las empresas, el 
comportamiento del crédito bancario y el tipo de cambio, estos factores a su vez inciden en 
la demanda agregada y finalmente se afecta el comportamiento futuro de la inflación. 
 
3 El efecto señal consiste en que el Banxico manda señales en el mercado para afectar las decisiones de los agentes e indicar el rumbo 
que quiere que tome la economía, dando a conocer sus intenciones de modificar la tasa de interés mediante la modificación de las 
condiciones de liquidez de la banca comercial. 
 
 
 
20 
Contar con bajas tasas de inflación depende de varios factores, entre ellos la efectividad de 
las decisiones de política monetaria. El primer eslabón del buen funcionamiento del 
mecanismo de transmisión la constituye la efectividad para influir en los mercados 
financieros. El BC realiza acciones de política monetaria utilizando un instrumento 
(variable sobre la cual tiene control directo). 
Para alcanzar el control sobre la inflación se debe definir un objetivo operacional que guíe 
la instrumentación de su política monetaria. Desde 1995 Banxico adoptó una política 
acomodaticia respecto a la demanda de dinero, apoyado de un tipo da cambio de flotación 
libre y una tasa de interés determinada por el mercado para las operaciones del banco 
central con la banca comercial. 
El objetivo operacional de saldos acumulados (mensual) fue utilizado del 13 de septiembre 
de 1995 al 9 de abril de 2003. La instrumentación de la política monetaria bajo este 
régimen se hacía esencialmente utilizando los saldos acumulados en un periodo de varios 
días como objetivo, éstos eran los saldos promedio de las cuentas corrientes de las 
instituciones de crédito dentro del Banxico en un periodo de 28 días. Cuando existía un 
corto (saldo acumulado objetivo negativo) el banco central inyectaba toda la liquidez que el 
sistema necesita durante el periodo de medición pero una parte de ésta la proveía a tasas de 
interés penalizadas. 
El anuncio del objetivo de saldos acumulados tenía como finalidad enviar una señal sobre 
la postura monetaria del Banxico. Un objetivo de saldos acumulados negativo o corto 
implicaba una restricción monetaria que se traducía en una señal de incremento de las tasas 
de interés para el mercado de dinero. Un objetivo de saldos acumulados de cero implicaba 
una postura neutral. Un objetivo de saldos acumulados positivo o largo indicaba una 
postura laxa o de relajamiento monetario y una señal de disminución de las tasas de interés. 
Todos los cambios en la oferta y demanda de base monetaria se reflejanen variaciones de 
los saldos de dichas cuentas corrientes. Cuando la demanda de billetes y monedas es mayor 
que la oferta de dinero primario se produce una reducción en los saldos de las cuentas 
corrientes de la banca comercial en el BC. Esto induce incrementos en las tasas de interés 
ya que la banca tratará de cubrir sus faltantes y evitar el costo financiero de los sobregiros. 
Cuando la oferta de dinero primario excede a la demanda, el saldo de las cuentas corrientes 
de la banca se incrementa presionando las tasas de interés a la baja ya que al no 
remunerarse los saldos positivos la banca comercial tratará de deshacerse de dichos saldos 
excedentes (los saldos positivos estaban sujetos a límites diarios). 
Se permitía a las instituciones de crédito al cierre de las operaciones del día registrar 
sobregiros, que no excedieran ciertos límites al cierre del día, en sus cuentas corrientes 
siempre y cuando al término de un periodo de 28 días mantuvieran un saldo acumulado 
 
 
 
21 
mayor o igual a cero. Al final de cada periodo Banxico sumaba para cada banco los saldos 
positivos diarios y le restaba el total de los sobregiros diarios incurridos. Esto da como 
resultado un saldo acumulado de las cuentas corrientes. Si el resultado correspondía a un 
sobregiro neto para una institución bancaria comercial, Banxico le cobraba sobre el monto 
dos veces la tasa de interés de los Certificados de la Tesorería de la Federación (CETES) a 
28 días prevaleciente en el mercado (Díaz de León y Greenham, 2001). Si un banco 
registraba un saldo positivo acumulado en el periodo, éste incurría en un costo indirecto o 
costo de oportunidad de tener los recursos ociosos ya que Banxico no pagaba rendimiento 
alguno sobre los saldos positivos. 
A partir de 1998 la política monetaria experimentó un cambio gradual hacia objetivos 
específicos de inflación de corto y mediano plazo mediante políticas discrecionales de 
cortos ante presiones inflacionarias incongruentes con objetivos previamente planteados. 
Después de haber logrado estabilidad en los mercados financieros y obtener tasas de 
inflación bajas la transmisión de la política monetaria solamente a través del corto no es 
apropiada ya que bajo estas condiciones es necesario ser más específico sobre el nivel 
deseado de tasas de interés. Bajo esta premisa en 2003 Banxico realizó modificaciones en 
la instrumentación de su política monetaria, el objetivo sobre las cuentas corrientes de la 
banca dejó de fijarse sobre los saldos acumulados y comenzó a determinarse sobre el saldo 
final diario, y además decidió establecer fechas predeterminadas para dar a conocer su 
postura de política monetaria. El objetivo operacional de saldos diarios de las cuentas 
corrientes de las instituciones de crédito dentro del Banco de México fue utilizado del 10 de 
abril de 2003 al 20 de enero de 2008. Una política monetaria neutral equivale a otorgar o 
retirar la liquidez necesaria para que el promedio de las cuentas corrientes de los bancos en 
Banxico finalicen todos los días en cero. Con una política monetaria restrictiva, el BC 
continúa inyectando toda la liquidez que el sistema necesita, pero una parte de ésta a tasas 
penalizadas. 
En Abril de 2004 Banxico se vio obligado, ante la necesidad de restringir la política 
monetaria, a complementar su nivel de corto con señalamientos más precisos sobre el nivel 
deseado las condiciones monetarias o tasas de interés. 
A partir del 21 de enero de 2008 adoptó como objetivo operacional la tasa de interés 
interbancaria a un día (tasa de fondeo bancario) en sustitución del saldo sobre las cuentas 
corrientes que la banca mantiene en el propio Banco (corto). Utilizando el objetivo de 
inflación de largo plazo definido en 2001, Banxico consideró necesario ser más específico 
sobre el nivel deseado de la tasa de interés y llevó a cabo una serie de medidas encaminadas 
a adoptar un objetivo operacional de tasas de interés. 
 
 
 
22 
Con este objetivo operacional, Banxico inyecta o retira diariamente la liquidez faltante o 
sobrante a través de operaciones de mercado abierto (subastas de liquidez). 
Las tasas a las que se remuneran los excedentes en las cuentas corrientes son cero y las que 
se cobran por los sobregiros son de dos veces la tasa objetivo para el fondeo bancario a 
plazo de un día. Al utilizar su tasa objetivo para cobrar sobregiros y como base para sus 
Operaciones de Mercado Abierto (OMA´S), Banxico provee los incentivos para que las 
operaciones de fondeo entre los bancos se lleven a cabo a tasas cercanas a dicha tasa 
objetivo. 
2.2.3.2. Sobre las operaciones de mercado abierto 
Para alcanzar su objetivo operacional (nivel de la tasa de interés interbancaria a plazo de un 
día) Banxico cuanta con instrumentos para administrar la liquidez del sistema financiero. 
Los instrumentos de que dispone un BC para llevar a cabo su política monetaria son 
diversos, van desde controles directos al crédito y a las tasas de interés, hasta mecanismos 
indirectos como los encajes legales y las OMA´S. Estas últimas, son las condiciones bajos 
las cuales se llevan a cabo las operaciones del Banco Central en el mercado de dinero, y se 
refieren a la compra venta de títulos o subastas de créditos o depósitos que realice el banco 
central con la intención de modificar la liquidez en el mercado de dinero. 
Instrumentos de largo plazo: 
• Compra-venta de títulos de deuda 
• Depósitos de regulación monetaria 
• Ventanilla de liquidez de largo plazo 
 
Instrumentos de corto plazo: 
 
• Operaciones de mercado abierto 
• Facilidades de crédito y depósito 
• Ventanillas de liquidez de corto plazo 
 
Las operaciones de mercado abierto son el principal instrumento que el Banxico utiliza para 
administrar la liquidez de corto plazo. Las operaciones para inyectar recursos se hacen a 
través de subastas de crédito o compra de valores en directo o en reporto, y las operaciones 
para retirar liquidez mediante subastas de depósitos o venta de valores en directo o en 
reporto. 
 
 
 
 
23 
El BC normalmente busca equilibrar los excedentes o faltantes de liquidez para que no 
impacten sobre las tasas de interés del mercado de dinero y sobre la inflación. Para esto 
Banxico, diariamente determina cuánto dinero hay que inyectar al sistema para que los 
saldos de las cuentas corrientes de los bancos finalicen el día nivelados. 
En los últimos años, gran parte de los bancos centrales ha optado por los instrumentos 
indirectos de política monetaria ya que permiten operar con mayor eficacia y flexibilidad, 
especialmente bajo condiciones en que las transacciones en los mercados financieros son 
cada vez más complejas. 
Conducen la política monetaria afectando las condiciones bajo las cuales satisfacen las 
necesidades de liquidez en el mercado de dinero. Estas condiciones dependen tanto de los 
términos en los que el banco central realiza sus OMA´S (tasas de interés, plazo, tipos de 
instrumentos, etc.), como de las características del manejo de las cuentas corrientes que 
mantiene la banca comercial con el BC (capacidad de sobregiro, tasas de interés de 
penalización o de remuneración, etc.). 
La banca comercial mantiene cuentas corrientes con el Banco Central, las cuales son 
utilizadas para hacer frente a sus necesidades de liquidez respecto al mercado de dinero. 
Esto se debe a que la banca comercial funge como intermediario entre el banco central y el 
público, a fin de que la demanda de circulante se satisfaga. 
Si el público incrementa su demanda por billetes y monedas, el banco central realiza 
operaciones de mercado abierto para que la banca comercial cuente con la liquidez 
necesaria en sus cuentas corrientes y pueda retirar el circulante del banco central y 
colocarlo entre el público. 
Las OMA´S que realizan los bancos centrales buscan satisfacer la demanda de base 
monetaria, la cual correspondea la suma de billetes y monedas en circulación más los 
depósitos que mantiene la banca comercial en el Banco Central. Debido al control directo 
sobre las operaciones de mercado abierto, muchos bancos centrales utilizan como 
instrumento los términos bajo los cuales se satisfacen las necesidades de liquidez en el 
mercado de dinero. 
Para poder evaluar la eficiencia de la política monetaria es necesario conocer el impacto de 
las decisiones de la autoridad monetaria sobre los mercados financieros, primer eslabón del 
mecanismo de transmisión de la política monetaria. 
 
 
 
 
24 
3. Canales de transmisión y banca comercial 
El BC no tiene un control directo sobre los precios, ya que éstos se determinan como 
resultado de la interacción entre la oferta y demanda de diversos bienes y servicios, pero se 
puede influir a través de la política monetaria en el proceso de determinación de precios 
mediante otras variables como son el tipo de cambio, la tasa de interés, los agregados 
monetarios y el crédito, y así cumplir con la meta de inflación, por lo cual para la autoridad 
monetaria es importante conocer los efectos que sus acciones tienen sobre la economía en 
general y, particularmente, sobre el proceso de determinación de precios. El mecanismo de 
transmisión de la política monetaria es el proceso mediante el cual la política monetaria 
afecta a la economía, i.e., es el proceso que los BC realizan para influir en la variación de 
los precios y modificar la demanda agregada. 
 
Es importante el análisis y entendimiento de los canales de transmisión, para un correcto 
diseño de la política monetaria y afectar toda la estructura de tasas de interés de forma más 
efectiva mediante el manejo de la tasa de interés de corto plazo y así tener como resultado 
una política monetaria más eficiente. 
 
Para conseguir los objetivos, el BC generalmente establece metas monetarias, las cuales 
pueden ser divididas en metas operativas y metas intermedias. Estas metas son de muy 
corto plazo, que de ser cumplidos contribuirán directamente a alcanzar los objetivos de 
política monetaria. La variable que sirve como meta operativa debe cumplir algunas 
condiciones como las de ser medibles rápidamente y con precisión, que estén bajo el 
control del banco central y que tengan un efecto previsible sobre el objetivo final, como la 
tasa de interés de corto plazo o la base monetaria. Las metas intermedias, generalmente se 
miden con variables que no son controladas directamente por la autoridad monetaria pero 
que si tienen un efecto sobre el objetivo final, como un agregado monetario amplio (M3)
4
, 
los saldos de los créditos o la tasa de interés de largo plazo. Cabe señalar que las metas 
intermedias han pasado a ser una variable indicadora más que contribuye a las decisiones 
de política, ya que la relación de la variable que mide la meta intermedia y el objetivo final 
se ha debilitado o se ha vuelto inestable. 
 
Para alcanzar las metas se utilizan instrumentos de política que afectan directamente a la 
meta operativa e indirectamente a la meta intermedia. Estos instrumentos pueden ser 
directos, como los topes a las tasas de interés, cupos máximos de créditos por banco o 
 
4 Este agregado monetario incluye a M2, así como la captación bancaria de residentes del exterior y a los valores públicos en poder de 
residentes del exterior. El agregado monetario M2 incluye a M1, a la captación de residentes en la banca y en las sociedades de ahorro 
y préstamo, a los valores públicos y privados en poder de residentes y a los fondos para la vivienda y otros. M1 está compuesto por los 
billetes y monedas en poder del público, las cuentas de cheques en poder de residentes del país y los depósitos en cuenta corriente. Los 
billetes y monedas en poder del público se obtienen al excluir la caja de los bancos del total de billetes y monedas en circulación. 
 
 
 
25 
préstamos directos, los cuales permiten que el BC como entidad reguladora afecte a las 
tasas de interés y al volumen del crédito. Los instrumentos también pueden ser indirectos, 
como las OMA´S, tasa de interés de repos, préstamos y encaje legal, con los cuales el BC 
puede influenciar sobre las condiciones de oferta y demanda del mercado de dinero y 
reserva bancaria. Los mecanismos por los cuales las metas operativas afectan los objetivos 
de política son llamados canales de transmisión, entendidos como los procesos y caminos 
mediante los cuales las decisiones de política afectan los objetivos finales. 
 
En este trabajo se hará hincapié en el desempeño que tienen los bancos comerciales 
privados en México como transmisores de la política monetaria, específicamente en el 
canal de tasas de interés y el crédito dentro del ámbito de la banca comercial, es decir, la 
afectación de la estructura de las tasas bancarias activas y pasivas ante movimientos en la 
tasa de política. En general el BC al actuar sobre el mercado de dinero afecta la tasa de 
interés de corto plazo, y los cambios en las expectativas y nivel de dichas tasas afecta a las 
tasas de interés de largo plazo y de otros mercados. Esto incide con ciertos rezagos sobre 
las decisiones de los agentes económicos respecto al consumo, ahorro, financiamiento e 
inversión. 
 
3.1. Canales de transmisión 
En la primera etapa del mecanismo de transmisión los bancos centrales conducen su 
política monetaria afectando las condiciones bajo las cuales satisfacen las necesidades de 
liquidez en la economía (a los participantes en el mercado de dinero) mediante 
modificaciones en algunos rubros del balance del banco central o con algunas medidas que 
influyan de manera más directa sobre las tasas de interés. En la segunda etapa del 
mecanismo, la tasa de interés de corto plazo puede influir sobre las tasas reales de largo 
plazo, sobre la demanda y oferta agregada y posteriormente sobre los precios. En la 
literatura se destacan principalmente los siguientes canales de transmisión: 
 
3.1.1 El canal tradicional (tasa de interés) 
 
Este canal es el más convencional, puede representar el efecto de todos los demás canales 
de forma conjunta y está implícito en los modelos tradicionales de determinación de la 
demanda agregada. El mecanismo de transmisión de la tasa de interés, basado en el modelo 
IS-LM, destaca que el aumento en la cantidad de dinero o una política monetaria expansiva 
produce un exceso de oferta en el mercado de dinero (a la misma tasa de interés la cantidad 
ofrecida será mayor a la demandada). Debido a esto los agentes económicos preferirán 
mantener su dinero en forma de depósitos bancarios. El incremento en la demanda de 
depósitos bancarios reduce la tasa de interés, lo que provoca un aumento en la inversión, en 
 
 
 
26 
la demanda agregada, en el producto y finalmente en el nivel de precios. Una política 
monetaria contractiva lleva a un incremento de la tasa de interés nominal de muy corto 
plazo influenciada por el BC a través de reducir el nivel de la cuenta corriente que tiene con 
los bancos comerciales, esto impacta a las tasas reales de plazos mayores haciendo que se 
contraigan el consumo de bienes duraderos y la inversión, y repercute finalmente en el 
nivel de actividad económica. Una vez ajustados los precios y salarios, las tasas de interés y 
producto reales retornarán a su nivel inicial. 
 
El eje central de este mecanismo descansa en el supuesto de que las tasas de interés 
nominales de corto plazo impactan sobre las reales de mayores plazos. Para esto se suponen 
rigideces de precios y que las tasas de largo plazo son un promedio ponderado de las tasas 
de corto plazo esperadas. Las tasas de interés de mediano y largo plazo dependen, de la 
expectativa que se tenga para las tasas de interés de corto plazo en el futuro, de las 
expectativas de inflación, entre otros factores. Cuando

Otros materiales