Descarga la aplicación para disfrutar aún más
Vista previa del material en texto
1 UNIVERSIDAD NACIONAL AUTÓNOMA DE MÉXICO FACULTAD DE CIENCIAS ANÁLISIS HISTOPATOLÓGICO EN EL OSTIÓN Crassostrea virginica EXPUESTO A HIDROCARBUROS AROMÁTICOS POLICÍCLICOS (HAP’S) T E S I S QUE PARA OBTENER EL TÍTULO DE: BIÓLOGA P R E S E N T A : TANIA FLORES LÓPEZ LENA DIRECTORA: DRA. XOCHITL GUZMÁN GARCÍA 2014 UNAM – Dirección General de Bibliotecas Tesis Digitales Restricciones de uso DERECHOS RESERVADOS © PROHIBIDA SU REPRODUCCIÓN TOTAL O PARCIAL Todo el material contenido en esta tesis esta protegido por la Ley Federal del Derecho de Autor (LFDA) de los Estados Unidos Mexicanos (México). El uso de imágenes, fragmentos de videos, y demás material que sea objeto de protección de los derechos de autor, será exclusivamente para fines educativos e informativos y deberá citar la fuente donde la obtuvo mencionando el autor o autores. Cualquier uso distinto como el lucro, reproducción, edición o modificación, será perseguido y sancionado por el respectivo titular de los Derechos de Autor. 2 Esta Tesis forma parte de los proyectos: Indicadores de integridad ecológica y salud ambiental. Dra. Xochitl Guzmán García. Lab. De Ecotoxicología. UAM 2011-2014. Diagnóstico ambiental integral de los ecosistemas lagunares de Tabasco. Dr. Alfonso Vázquez-Botello. Lab. De Contaminaciónn Marina ICMyL. UNAM. 3 Dedicatoria. A mi madre Irma López Lena, por ser mi fortaleza y porque siempre me recuerda que todo está bien y estará mejor. A mi padre Jorge A. Flores, por su apoyo sin limites y por decirme sin palabras que el limite para soñar es el cielo. A mi grandioso e inigualable hermano Ojito, que cada momento me recuerda la alegría de la vida con su sonrisa. A mis seres favoritos, por darme alegrías y amor a su estilo perruno Shawn, Cuco y mi Rita. Y a mi Tío Raúl, que aunque no sigue conmigo éste recorrido, aportó lo mejor de su vida para hacerme feliz. Los amo incondicionalmente, son lo mejor de lo mejor! 4 Agradecimientos. A la vida, que siempre ha estado a mi favor poniéndome obstáculos para enseñarme a aprender que nada es fácil y que mientras más me esfuerzo los resultados son mejores. Con cariño a todos mis amigos y compañeros de vida, por sus ánimos y escucharme siempre, que sin saberlo me han ayudado a trazar el camino que sigo y que tanto disfruto a su lado. A las Polly Pockets por las mejores horas de chal que han aportado retroalimentación. A mis nuevos mejores amigos del Laboratorio de Histopatología, por la paciencia y enseñanza constante; Biol. e HT. Irma Hernández Calderas, M. en B. Roberto Jerónimo, Biol. Verónica Ramírez, Biol. Pedro Román, Hbiol. Sonia González, Pas. de Biol. Ángel Vázquez y M. en B. Exp. Ingrid Camarena. Al Nene, por ser mi amuleto de la buena suerte en este último jalón y darle a mi vida más alegría y sabor. A la L. D. G. Ivette Rojas (mana), por ayudarme con la edición de las imágenes. A la Dra. Rocío Zarate, que me ayudó con el programa estadístico. De manera especial a la Dra. Ma. Guadalupe Ponce Vélez, M. en C. Ma. del Pilar Torres García y M. en C. Irma Wong Chang, por su tiempo y aporte de conocimientos para que este trabajo mejorara. Con mucho cariño a la Dra. Xochitl Guzmán por integrarme a su equipo de trabajo, alentarme a continuar y darme ánimos para concluir. Especialmente al Dr. Alfonso Vázquez-Botello, por ofrecerme tan maravilloso proyecto y todas las herramientas para que éste se realizará con éxito. Gracias por ser, estar y compartir. 5 Resumen ...................................................................................................................6 Introducción..............................................................................................................7 Antecedentes ............................................................................................................9 Objetivo .................................................................................................................. 13 Área de estudio ....................................................................................................... 13 Metodología............................................................................................................ 16 Trabajo de campo............................................................................................................ 16 Trabajo de laboratorio..................................................................................................... 16 Morfometría ...................................................................................................................... 16 Histología........................................................................................................................... 17 Análisis histológico e histopatológico................................................................................ 22 Resultados............................................................................................................... 23 Morfometría ................................................................................................................... 23 Histología ........................................................................................................................ 24 Manto. ............................................................................................................................... 24 Branquia. ........................................................................................................................... 25 Músculo. ............................................................................................................................ 25 Gónada. ............................................................................................................................. 27 Tracto digestivo. ................................................................................................................ 27 Glándula digestiva. ............................................................................................................ 28 Diagnóstico histopatológico ............................................................................................ 28 Discusión................................................................................................................. 34 Conclusiones ........................................................................................................... 38 Recomendaciones ................................................................................................... 39 Literatura citada...................................................................................................... 40 Anexos .................................................................................................................... 43 Índice de Lesiones. .......................................................................................................... 43 Lesiones celulares reversibles ........................................................................................... 43 Lesiones celulares irreversibles ......................................................................................... 44 6 Resumen La república mexicana cuenta con 10 mil kilómetros de litoral, de los cuales 12,500 km2 son lagunas costeras; consideradas de las áreas más perturbadas del planeta, ya que ahí ocurren diversas actividades humanas, entre las que se encuentra la extracción de hidrocarburos. Éstas actividades ejercen una fuerte presión sobre ambientes frágiles y de gran diversidad biológica como la Laguna de Mecoacán, Tab., que se caracterizapor ser una región típicamente industrial, de la cual se extrae parte de la mayor producción de crudo del país. Los hidrocarburos aromáticos policíclicos (HAP’s), son contaminantes orgánicos hidrofóbicos que ingresan a la zona costera y pueden encontrarse ampliamente distribuidos. Se ha observado que éste tipo de hidrocarburos perjudican la salud de algunos organismos de vida silvestre, como es el caso del ostión Crassostrea virginica; el cual presenta hábitos filtradores y ha sido propuesto como un organismo bioindicador. El objetivo del trabajo fue analizar histopatológicamente la glándula digestiva de C. virginica de la Laguna de Mecoacan con el fin de establecer el estado de salud en relación con su exposición ambiental. Se recolectaron 70 ejemplares en dos puntos de muestreo de la laguna. En el laboratorio se registraron parámetros morfométricos de cada organismo para obtener el Índice de Condición (IC). Cada ostión fue disectado en la parte media de la masa visceral y se obtuvieron cortes seriados a 5µm, que se tiñeron con Hematoxilina y Eosina y observados al microscopio para caracterizar tisularmente y observar cambios relevantes. Paralelamente se realizó un análisis de los túbulos de la glándula digestiva para determinar, de acuerdo a su estructura, las fases de nutrición observadas mismas que fueron analizadas mediante una prueba estadística. El IC obtenido se consideró alto 410 g y 266 g de la zona 1 y zona 2 (Z1= Cooperativa Puente de Ostión y Boca de los Ángeles y Z2 = Cooperativa Mecoacán influencia directa de Dos Bocas) respectivamente, por lo que se sugiere que cuentan con condiciones fisiológicas favorables para su desarrollo. 16 de los organismos fueron femeninos, nueve masculinos y en cinco no se identificó la gónada. Se reconoció la estructura tisular del músculo, branquia, manto y tracto digestivo, además de la glándula digestiva, objeto del estudio. El análisis histopatológico indicó que los ostiones no presentaron daños deletéreos que comprometan la salud del organismo. El conteo de los túbulos de la glándula digestiva presentó diferencia significativa entre la Fase 4 (Desintegración) con respecto a la Fase 1 (Preparación) y la Fase 2 (Absorción 1), lo cual es un proceso natural en la digestión. Es recomendable en trabajos posteriores, hacer estudios a nivel bioquímico para evaluar las reacciones metabólicas derivadas del estrés ambiental. Palabras clave: Crassostrea virginica, HAP´s, IC, histopatología, glándula digestiva, túbulos, fases. 7 Introducción La república mexicana cuenta con 10 mil kilómetros de litoral; de éste, 1,600,000 hectáreas pertenecen a superficies estuarinas, de los cuales 12,500 km2 son lagunas costeras; ello representa del 30% al 35% de dicho territorio (Contreras, 1985). La zona costera es una región de transición entre los componentes marino y continental del planeta (Fig. 1). Es ampliamente reconocida como uno de los más importantes elementos de la biosfera con una amplia diversidad de ambientes y recursos, pero de igual manera, la zona costera es una de las áreas más perturbadas del planeta (Marcovecchio y Freige, 2013) ya que ahí ocurren actividades humanas que ejercen una fuerte presión sobre ambientes frágiles y de gran diversidad biológica, como la pesca y la acuicultura, la extracción de hidrocarburos y minerales, la transportación marítima y el turismo, el crecimiento urbano desordenado y la producción de contaminantes; todas ellas generan una gran presión en los ecosistemas (Lara-Lara et al., 2008). 8 Fig. 1. Zona costera de México. En ambientes costeros, los organismos viven en condiciones de estrés permanente, ya que se encuentran expuestos a diversos contaminantes. Generalmente en estos ecosistemas, se destaca la contaminación química asociada al desarrollo industrial y urbano dado que allí es donde se ubican preferentemente las poblaciones humanas. Asimismo, es consenso general que las especies estuarinas son más susceptibles que las marinas a la acción tóxica de los contaminantes (Marcovecchio y Freige, 2013). El incremento de la actividad en la industria petrolera en la zona costera del Golfo de México, ha ampliado el interés por conocer y determinar los efectos de los contaminantes que son vertidos en diversos cuerpos de agua. Particularmente el Estado de Tabasco, ha tenido un fuerte desarrollo económico a partir de 1970, que lo colocó como una región típicamente industrial con el descubrimiento de grandes yacimientos en sus llanuras aluviales cercanas a su línea costera, de las cuales se extrae parte de la mayor producción de crudo del país (BVSDE, 1993). Dentro de los componentes del petróleo, un grupo de especial importancia lo conforman los hidrocarburos aromáticos policíclicos (HAP’s) (Díaz-González et al., 1994). La mayoría de los HAP’s son contaminantes de distribución amplia en el ambiente marino; cada año ingresan a este medio alrededor de 230,000 toneladas de estos compuestos y esta clase de sustancias se han estudiado de forma muy intensa debido al carácter carcinogénico y mutagénico que presentan (Baumard et al., 1998; Ponce-Vélez y Botello, 2005). Los contaminantes orgánicos hidrofóbicos como los HAP’s, que ingresan a la zona costera, se asocian con partículas y coloides en la columna de agua, floculan y sedimentan hacia la interfase agua-sedimentos (Means et al., 1980; 9 Ponce-Vélez y Botello, 2005); de esta forma es como los HAP’s se encuentran ampliamente distribuidos (Botello et al., 1993), pero también partículas asociadas a los contaminantes, están disponibles para la biota y se bioacumulan en el tejido lipídico de los organismos (Pereira et al., 1992; Ponce- Vélez y Botello, 2005). Los invertebrados bentónicos filtradores tales como los ostiones y mejillones, pueden servir como bioindicadores e integradores de los contaminantes orgánicos hidrofóbicos ya que no cuentan con una actividad enzimática para metabolizar xenobióticos como son los HAP’s o bien cuando la presentan es incipiente lo que favorece que estos organismos bioacumulen estas sustancias sin alterarlas (Wade et al., 1988; Ponce-Vélez y Botello, 2005). Antecedentes El ostión Crassostrea virginica, es el recurso pesquero más importante por su volumen en el Golfo de México y contribuye a la producción nacional con más del 93%; sin embargo, es uno de los productos con menor precio y aceptación debido a su calidad sanitaria (Carta Nacional Pesquera, 2012), habita en aguas salobres, lagunas y esteros y posee una amplia distribución (Frías- Espericueta et al., 1999) Aunque durante el siglo pasado se observó un declive de sus poblaciones naturales por una variedad de causas incluyendo: la sobreexplotación, daño de hábitat, degradación de la calidad del agua e incremento de susceptibilidad a enfermedades (Matthew et al., 2002), la explotación del ostión en Tabasco, tanto la captura como el número de pescadores, se ha mantenido estable en los últimos 10 años y se ubica en el primer lugar como resultado de la adopción de medidas de manejo apropiadas y la promoción del semicultivo (Carta Nacional Pesquera, 2012). El estuario de Mecoacán se basa en dos sistemas de producción: la explotación y manejo de bancos ostrícolas naturales y el uso 10 de sistemas de acuacultura semi-intensiva, que han sido establecidos desde los años cuarentas y son manejados por cuatro cooperativas pesqueras locales: Andrés García, Mecoacán, Boca de Los Ángeles y Puente de Ostión (Pérez-Sánchez y Muir, 2003). C. virginica es un organismo gregario, formador de bancos o arrecifes biogénicos, por lo que ha sido considerado como un ingeniero del ecosistema (Margalef, 1968; Susan-Tepetlan y Aldana-Aranda, 2008). Los bancos ostrícolas juegan un papel muy importante en los sistemas costeros, debido a que ayudan a mantenerlos estables, ya que se encargan de proveerlos de hábitaty de la fuente de alimento para varias especies, así como ofrecer protección a pequeños organismos, tanto de las condiciones ambientales extremas, como de la depredación, además de brindar un sustrato duro para la fijación de otras especies como balanos, mejillones y otros organismos filtradores (Kennedy et al., 1996). Estos bivalvos se han usado como indicadores de contaminación ambiental in situ, ya que poseen las siguientes características: son organismos sésiles, muestran una alta capacidad de bioacumulación debido a que su tipo de alimentación es por filtración, hábito que facilita la incorporación de contaminantes, tales como los HAP’s, en sus tejidos más blandos, poseen una vida medianamente larga, son manejables y fácilmente aclimatables a las condiciones experimentales (De la Rua et al., 2005). Su proceso de bioacumulación le permite ser empleado como organismo centinela, esto ocurre cuando, la tasa de incorporación del contaminante ha sido excedida por su tasa de eliminación. Es decir, depende de factores que afectan la exposición y la distribución química de los contaminantes dentro del organismo, como son: el crecimiento, el tipo de alimento y procesos de biotransformación. La conducta y persistencia de los xenobióticos en el agua, 11 dependen de sus propiedades fisicoquímicas, ya que existen diversos factores que afectan su biodisponibilidad como son pH, temperatura, salinidad y fenómenos de adsorción de otras partículas, entre otros (García-Guzmán, 2001). La respuesta a ésto, puede advertirse tanto en individuos como en poblaciones y pueden ser manifestación de modificaciones en comportamiento, fisiología o simple tolerancia o intolerancia a los contaminantes (Baqueiro-Cárdenas et al., 2007). Algunas características descriptivas del ostión, son las siguientes; es un organismo que se encuentra comprimido lateralmente, su concha calcárea está formada por dos valvas que cubren todo su cuerpo y son controladas por un músculo abductor para su apertura o cierre; se unen dorsalmente por medio de una banda de proteína elástica (conchiolina) que forma el ligamento, la parte de articulación de las valvas se denomina charnela, la porción más antigua de las conchas se llama umbo y se eleva por encima de la charnela. Presentan otros órganos internos como son: el manto, con función sensorial; las branquias que participan en la respiración y alimentación, así como un sistema digestivo el cual se encuentra compuesto por una boca en forma de herradura en su extremo anterior entre los dos pares de palpos labiales internos, el canal digestivo presenta un esófago estrecho con pliegues transversales que conduce al estómago. El estómago presenta dos ciegos que nacen del lado izquierdo, uno de éstos corre por la parte ventral a manera de ganchillo y el otro pequeño dirigido hacia el lado dorsal (Camarena-Novelo, 2012; Castillo y García-Cubas, 1984; Guzmán-García, 2001; Kennedy et al., 1996). En la región posterior del estómago, se abre el saco del estilete (triturador) que corre lateralmente a lo largo del flanco ventral del músculo abductor. El intestino emerge de la parte inferior del saco del estilete y empieza a ascender 12 engrosándose hacia el dorso del estómago, lo cruza a la altura del esófago y desciende por el lado contrario del estómago para cruzarlo por el lado izquierdo nuevamente y terminar en el recto y ano sobre el flanco dorsal del músculo abductor. El músculo abductor representa aproximadamente del 20 al 32 % de la longitud total del cuerpo y el sistema digestivo del 58 al 73 % (Castillo y García-Cubas, 1984) (Fig. 2). Fig. 2. Anatomía de ostión Crassostrea virginica. A nivel tisular se ha observado que la glándula digestiva posee forma tubular y se divide en tres ductos primarios; dos que provienen de la cámara anterior y uno de la cámara posterior y, a su vez, se dividen en varios túbulos secundarios. Los ductos primarios tienen un epitelio que se asemeja al del estómago. Los ductos secundarios tienen dos tipos de células: Tipo I es corta y amplia y tiene una cutícula espesa de densos y largos cilios. Tipo II, tiene el doble de longitud que las de Tipo I y con terminación apical. La relación que existe entre las células Tipo I y II es que ambas ayudan a digerir el alimento (Kennedy et al., 1996). 13 Al observar los túbulos al microscopio, se puede diferenciar que hay cuatro fases durante su actividad alimenticia: retención, absorción, desintegración y reconstitución. Estos cambios estructurales de las células se sincronizan de acuerdo a los ciclos de las mareas y disponibilidad de alimento, pero también se ha reportado que el ciclo de las células digestivas pueden variar estacionalmente e incluso se pueden visualizar hasta cinco ciclos o fases (Kennedy et al., 1996; Morton,1977). Objetivo Analizar histopatológicamente la glándula digestiva del ostión Crassostrea virginica proveniente de la Laguna de Mecoacán, Tabasco para establecer el estado de salud en relación con su exposición ambiental. Área de estudio La Laguna de Mecoacán (Fig. 3) se encuentra en el este del Estado de Tabasco, en el litoral del Golfo de México, entre los meridianos 93o04’N y 93o14’ y los paralelos 18o16’y 18o26’O (Díaz-González et al., 1994). Forma parte del sistema hidrológico del Usumacinta-Grijalva (Gold-Bouchot et al., 1995). 14 Fig. 3. Puntos de colecta en la Laguna de Mecoacán (Z1= Cooperativa Puente de Ostión y Boca de los Ángeles y Z2 = Cooperativa Mecoacán influencia directa de Dos Bocas). Varios autores como Armenta-Arteaga y Elizalde-González (2003), han reportado en la Laguna de Mecoacán diferentes aspectos fisicoquímicos, climáticos, biológicos y de contaminantes (Tabla 1). 15 Tabla 1. Aspectos climáticos, biológicos, fisicoquímicos y de contaminantes de la Laguna de Mecoacán. 3 Clima Calido húmedo con lluvias todo el año. El mes más seco del año es mayo con 60 mm de precipitación y el porcentaje de lluvia invernal con respecto a la anual es menor de 18% 3 Vegetación Bosque de mangle, el cual aporta principalmente la materia orgánica, además del lirio acuático arrastrado por los ríos que desembocan en la misma. 3 Área 52 km 2 1 Profundidad promedio (m) 1 3 Tipo de sedimentos lagunares Terrígenos (mayoría areno-limosos, con cantidades menores de arcilla) 3Tasa promedio de sedimentación 1.5 cm/año (aproximadamente) 5 Temperatura ( ºC) 32.5 ºC, de Marzo-Octubre y 22.5 ºC, Noviembre-Febrero 5 Salinidad 1.3- 14 º/oo 1 OD mg/l 5.6 (5 mg/L, para la protección de la vida acuática marina) 1 pH 7.8 (rango permitido en la NOM-001-ECOL-1996 para descargas de aguas residuales en aguas y bienes nacionales, que es de 5 a 10 unidades de pH) 1 Nitritos (mg/l µM) 0.04 Cadmio Cromo Níquel Plomo Vanadio 4Concentraciones de metales (µg g-1) en el sedimentos de Mecoacán. 41.47 ± 0.47 428.93 ± 2.67 458.94 ± 18.61 421.22 ± 3.32 418.78 ± 1.76 2 Criterio EBAF: >ERL<ERM (µg g-1) en el sedimento para cada metal. 21.20-9.6 281-370 220.9- 51.6 246.7-218 2ND 4Concentración promedio de HAP’s en sedimento superficial de Mecoacán. 4 ΣHAP’s = 0.13 ± 0.17 µg g-1 *(16 compuestos contaminantes prioritarios) 2 Criterio EBAF: >ERL<ERM en sedimento para HAP’s (16 compuestos contaminantes prioritarios). 2 HAP’s = 4.02 – 44.8 µg g-1 1 La calidad del agua en los ecosistemas costeros de México. INE. 2 Efectos biológicos adversos frecuentes (EBAF), efecto de límite inferior ERL (Low range effect por sus siglas en inglés) y efecto de límite superior ERM (Medium range effect por sus siglas en inglés). Long, E.R., D.D. MacDonald, S.L. Smith & F.D. Calder. 1995. Incidence of adverse biological effect within ranges of chemical concentrations in marine and estuarine sediments. Environment Management. 19(1) 81-87. ND = no determinado. 3 Díaz-González,G., A. V. Botello y G. Ponce-Vélez, 1994. Contaminación por hidrocarburos aromáticos policíclicos (HAP’s) disueltos en la laguna de Mecoacán, Tabasco, México. Hidrobiológica. 4(1-2): 21:27. 4 Bozada-Robles, L. M. 2010. Proyecto: Revisión del estado ambiental de las lagunas costeras de Tabasco. SERNAPAM. Gobierno del Estado de Tabasco. 142 pp. 5 Armenta-Arteaga, G. & y M. P. Elizalde-Gonzalez. 2003. Contamination by PAHs, PCBs, PCPs and heavy metals in the Mecoacán Lake estuarine water and sediments after oil spilling. Soils & Sediments. 3 (1): 35:40. 16 Metodología Trabajo de campo Se colectaron 70 ejemplares de ostión C. virginica en dos cooperativas que extraen el producto, de zonas con características distintas en el área de la Laguna de Mecoacán (Tabla 2) en temporada de lluvias en Febrero del 2010 para su evaluación histológica e índice de estado. Debido a la condición climática no fue posible hacer la colecta in situ, por lo que se solicitó a los pescadores la donación de los ejemplares recién extraídos. Tabla 2. Estaciones de colecta de ostión Crassostrea virginica. Cooperativa Número de organismos (Z1) Cooperativa Puente de Ostión y Boca de los Ángeles (Menos contaminados). 40 Ostiones colectados. (Z2) Cooperativa Mecoacán. Influencia directa de Dos Bocas (Más contaminados). 30 Ostiones colectados. Trabajo de laboratorio Morfometría Los ostiones colectados fueron lavados con agua desionizada, cepillados con alcohol y despojados de otros organismos que podían alterar algunas mediciones. Los datos morfométricos obtenidos fueron los siguientes: longitud, ancho, alto, peso seco, peso húmedo, peso de de la masa visceral, peso de conchas y volumen intervalvas (Fig. 4) y con ellos se obtuvo el Índice de Condición (IC) (Walne 1984; Guzmán-García, 2007). Índice de condición= Media del peso seco de la masa viva (g) x 1000 Media del volumen intervalvar (ml) 17 Considerándose los resultados de 120 como peso alto, 90 peso normal y de 70 a 80 peso bajo, de acuerdo a dichos autores. Fig. 4. Aspecto del ostión C. virginica durante el registro de los datos morfométricos. Histología Los ostiones fueron fijados en formol amortiguado al 10 % por un periodo de ocho días. Posteriormente cada organismo fue disectado en tres partes de acuerdo a la disposición de su cuerpo (anterior, media y posterior), haciendo énfasis en la parte media, mismas que se introdujeron en cassettes histológicos (Fig. 5). Las muestras fueron deshidratadas, aclaradas e infiltradas mediante un procesador de tejidos Histoquinet Leica, modelo TP 1020 por un periodo de 13 h (Fig. 6 y 7). Fig. 5. Ostiones divididos en secciones y fijados en formol al 10% en cassettes de inclusión. 18 Fig. 6. Descripción del proceso de deshidratación, aclaración e infiltración en parafina para las muestras de ostión. Fig. 7. Histoquinet para deshidratado, aclarado e infiltrado del ostión. Al concluir la fase de deshidratación se procedió a la inclusión de las muestras en un medio de parafina y con un centro de inclusión (marca Leica modelo EG11400C) y acoplado a una placa fría (Leica modelo EG1140H) (Fig. 8 y 9). PROCESO DE DESHIDRATACIÓN ALCOHOL 50% 1 HORA ALCOHOL 60% 1 HORA ALCOHOL (1) 70% 1 HORA ALCOHOL (2) 70% 2 HORAS ALCOHOL 80% 1 HORA ALCOHOL 96% 2 HORAS ALCOHOL ABSOLUTO 1 HORA PROCESO DE ACLARAMIENTO ALCOHOL ABSOLUTO‐ XILOL 30 MINUTOS XILOL 40 MINUTOS PROCESO DE INFILTRACIÓN PARAFINA‐XILOL 1 HORA PARAFINA I PUNTO DE FUSIÓN 49ºC ‐ 50ºC 1 HORA PARAFINA II PUNTO DE FUSIÓN 49ºC ‐ 50ºC 1 HORA 19 Fig. 8. Pasos para obtener un bloque para cortes histológicos. Fig. 9. Inclusión en parafina y placa fría para la solidificación. Los cortes se realizaron con microtomo (marca Microm Hm 315; Fig. 10 y 11) a un nivel de 5 micras. Cada corte obtenido fue puesto en una estufa de secado (marca Felisa) con el fin de adherir adecuadamente el tejido al portaobjetos (Fig. 12). 20 Fig. 10. Cortes histológicos con microtomo. Fig. 11. Procedimiento de los cortes histológicos. 21 Fig. 12. Estufa Felisa para adhesión del tejido al portaobjetos. Cada corte obtenido se tiñó mediante la técnica de Hematoxilina-Eosina (H-E), a fin de reconocer las estructuras tisulares (Fig. 13 y 14). Fig. 13. Tren de tinción. 22 Fig. 14. Tiempos de tinción con la técnica de Hematoxilina-Eosina. Análisis histológico e histopatológico. El análisis tisular se elaboró con ayuda del microscopio óptico CARL ZEISS Primo Star, acoplado a una cámara digital marca CANON modelo Power Shot G10 y un ordenador marca TOSHIBA modelo Satellite. Se tomaron fotografías de las estructuras representativas que constituyen al ostión para hacer la descripción de la parte media de los organismos analizados y se digitalizaron con la ayuda del software CANON Utilities Remote Capture DC versión 3.1.0.5 (2008) y se editaron mediante el software CARL ZEISS AxiVs 40V versión 4.8.0.0 (2006-2009) (Fig. 15). Posteriormente, por cada zona de colecta, se seleccionaron cinco laminillas teñidas con H-E de ejemplares diferentes para reconocer si existe la presencia de células cafés, aspectos inflamatorios, 23 lesiones reversibles o necrósis del tejido (objetivos 10X y 40X). También se realizó el conteo, al tiempo que se realizaba la caracterización de las fases que presentan las células de los túbulos de la glándula digestiva. El conteo se hizo en tres campos ópticos diferentes de cada ejemplar con el objetivo de 10X, de acuerdo al criterio de Kennedy et al., (1996) quienes proponen las siguientes fases: 1) Preparación, 2) Absorción (particulas de alimento), 3) Absorción (células en desintegración), 4) Desintegración y 5) Reconstrucción, que son asociadas al estado de nutrición de los bivalvos. Las fases observadas en los túbulos de la glándula digestiva fueron analizadas mediante el programa NCSS – 2001 & PASS Trial. Fig. 15. Análisis con microscopio y conteo de campos ópticos. Resultados Morfometría Los datos morfométricos de longitud, ancho, alto, pesos húmedo y seco, de tejido y conchas, así como volumen intervalvas indicaron que los organismos obtenidos en ambas zonas de colecta presentaron un Índice de Condición alto (Z1 = 409.8 g y Z2 = 266.4 g), con respecto al propuesto por Walne (1984; Guzmán-García, 2007) de 120 g, lo cual representa que fisiológicamente su relación talla-peso es adecuada (Tabla 3). 24 Tabla 3. Promedios de los datos morfométricos en ostiones colectados (media). *Índice de condición= 120 (alto); 90 (normal); 70-80 (bajo). Zona Índice de condición (g) Longitud (mm) Ancho (mm) Alto (mm) Peso húmedo (g) Peso seco (g) Peso de tejido (g) Peso de conchas (g) Volumen intervalvas (ml) Z1 409.8 79.9 42.9 21.5 40.1 1.68 6.6 28.1 4.1 Z2 266.4 89.5 56.3 27.1 78.4 2.10 10.5 53.8 7.9 Histología En la parte media de los ostiones analizados, se observaron estructuras como, branquia, manto, músculo, gónada, tracto digestivo y glándula digestiva. Además, se elaboró un censo de sexos del cual 16 organismos fueron hembras, nueve machos y en cinco no se identificó la gónada (Tabla 4). Tabla 4. Presencia de diferentes estructuras del canal alimentario y órganos periféricos en el ostión C. virginica. Estructuras observadas: Sexo F/M Manto Branquia Músculo Gónada Tracto digestivo Glándula digestiva Hembra 16 53.33% 15 15 14 16 14 13 Macho 9 30% 8 10 3 9 7 6 NI 5 16.66 % 4 3 5 NI 5 5 Total 30 100% 27 28 22 25 26 24 NI: no identificado. Manto. En el manto que es el pliegue que cubre a los órganos internos, se logró observar que está compuesto de tres lóbulos: lóbulo interno o cortina palial nombrado así, porque el epiteliocon el que se encuentra conformado es análogo al de la cavidad palial. La parte externa del lóbulo sensorial o medio, 25 se encuentra cubierta de una capa simple de epitelio cuboidal, la parte interna está cubierta por capas de este mismo epitelio y con glándulas unicelulares, por último, el lóbulo más externo que está en contacto con la concha, está conformado de una manera muy parecida al medio, con epitelio de revestimiento más prominente en el extremo proximal al borde de la concha (Fig. 16). Branquia. Se identificaron estructuras completas como las plicas conformadas de filamentos principales, filamentos normales, el filamento de transición que se encuentra entre los dos anteriores y la cámara por donde pasa el agua (Fig. 17). En un acercamiento se logró observar secreciones en la parte apical de las branquias. Músculo. Se observaron fibras musculares de la región translúcida del músculo abductor con una sencilla o doble estriación oblicua, con núcleos elongados entre ellas. En el acercamiento digital también se observaron los núcleos a lo largo de la fibra (Fig. 18). 26 Fig. 16. En A, se observan los lóbulos del manto, (1) externo, (2) medio y (3) interno, acolchonamiento (4) y parte del epitelio de recubrimiento en una de sus partes más densas y gruesas (5). En B, acercamiento del lóbulo medio del manto muestra bandas musculares longitudinales y transversales (6) y el epitelio (7). (Tinción H-E, A 10X y B 40X). Fig. 17. En A, sección de la branquia donde se observan los filamentos comunes (1), filamentos principales (2), plica completa (3), cámara de agua (4) y filamento de transición (5). En B, se observa, (6) filamento de transición, (7) filamento principal y (8) senos de hemolinfa de la plica. (Tinción H-E, A 10X y B 40X) Fig. 18. En A, una sección del músculo abductor donde se observan las fibras musculares (1) y sus núcleos (2). En B, se observan más y claramente los núcleos (3). (Tinción H-E, A 10X y B 40X) 27 Gónada. En la gónada se pudieron diferenciar claramente los espermatocitos, los ovocitos y otras estructuras como folículos, núcleos, tejido conectivo y en algunos casos las etapas claras de madurez de los gametos (Fig. 19). Fig. 19. En A, se observan los espermatocitos en morado más obscuro con espacios foliculares teñidos incluso con eosina (1), folículo (2), luz del folículo (3) y tejido conectivo (4). En B, ovocitos con elementos como tejido conectivo (5) y núcleo evidente (6). (Tinción H-E, A 10X y B 40X) Tracto digestivo. En esta sección del tracto digestivo se observaron claramente los tiflosoles, conformados por grandes epitelios de recubrimiento, rodeados por tejido conectivo y cercano al músculo abductor, característico por su tinción rosa y la gónada color púrpura. Se observó abundante contenido alimenticio en algunos casos. En el acercamiento se puede ver tejido conectivo y las grietas de terminación de los tiflosoles conformados de un amplio epitelio (Fig. 20). Fig. 20. En A, tiflosol de amplio epitelio (1), tejido conectivo (2) y alimento abundante (3). En B, tejido conectivo (4) y grietas de terminación (5). (Tinción H-E, A 10X y B 40X) 28 Glándula digestiva. La glándula digestiva de los ostiones presentó radios diferentes, dependiendo de la fase de nutrición (Preparación, Absorción (1 y 2), Desintegración y Reconstrucción); esto se hizo evidente al observar los distintos grosores y formas que adopta el epitelio, dependiendo de la abundancia de alimento. Los túbulos también se observaron rodeados de tejido conectivo con diferencias entre la tinción basófila en la parte externa del túbulo (colores azul-violetas) y la acidófila en la parte interna, (colores rosas, Fig. 21) probablemente por la presencia de núcleo basal del epitelio cúbico simple en la parte periférica del túbulo, en tanto que la parte interna o acidófila, puede estar relacionada con la presencia de epitelio cúbico ciliado y secreciones eosinófilas . Fig. 21. En A, tejido conectivo abundante (1) y túbulos de la glándula digestiva en Preparación (F1), Absorción2 (F3) y Desintegración (F4). En B, el epitelio de los túbulos diferenciado por la tinción H-E (3) y la luz que presenta diferentes radios debido a las fases (4). (Tinción H-E, A 10X y B 40X) Diagnóstico histopatológico Los túbulos de la glándula digestiva de C. virginica, presentaron diferente morfología, con revestimientos epiteliales de espesor variado. Se observaron células basófilas y acidófilas, las secreciones en el lumen de los túbulos y la presencia de células cafés fue constante (Fig. 22 A y B). Los túbulos tuvieron medidas de entre 124 a 166 µm de diámetro, y con un epitelio de 62 a 70 µm 29 de grosor, con una luz máxima de 70 a 86 µm aproximadamente y epitelios de revestimiento asociados a secreciones de mucopolisacáridos (Fig. 22 C y D). Las secreciones observadas en los epitelios de revestimiento provocan una discontinuidad en el tejido, esta respuesta fue evidente en los túbulos en Fase 1 (Preparación) y probablemente esté asociada con la presencia de glucógeno. Los túbulos en Fase 4 (Desintegración) aparentan fusión entre ellos. En estos túbulos el diámetro es menor (87 µm) con respecto a otras fases, los aspectos inflamatorios se acompañan con células cafés, una reducción del epitelio de revestimiento (cerca de 22 µm), así como, la presencia de hemocitos. La disminución de los epitelios de revestimiento se presentó en túbulos de la Fase 1 (Preparación) (Fig. 22 E y F). 30 Fig. 22. En A, Fase de Absorción1 (F2), se observan las células basófilas (CB), algunas células cafés (CC) y fusión de túbulos (FT). En B, la secreción al interior de los túbulos (SC) y la fusión de algunos de ellos (FT), además de las Fases de Desintegración (F4) y de Reconstrucción (F5). En C y D, diámetros de los túbulos, células basófilas (CB) y acidófilas (CA), los depósitos eosinófilos (DE). En E, en la parte superior izquierda la gónada masculina (GM) y la fusión de túbulos (FT). En F, se observan varias células cafés (CC). (Tinción H-E, A, B y E 10X, C, D y F 40X) Los túbulos digestivos presentan una membrana basal bien definida en sus epitelios. Se observó una relación entre la ausencia de la membrana basal con las Fases 3 (Absorción 2) y 4 (Desintegración). También en algunas secciones se observaron inflamaciones intertubulares en el tejido conjuntivo (Fig. 23). 31 Fig. 23. En A, Fase 1 de Preparación (F1), se observan secreciones eosinófilas (SE) y células cafés (CC). En B, células cafés (CC), túbulo en Fase de Reconstrucción (F5), su membrana basal bien definida (MB), células cafés (CC) y en el túbulo en Fase de Desintegración (F4), secreciones eosinófilas (SE). En C, una inflamación intertubular en el tejido conjuntivo (ITI), en la parte superior túbulos con presencia de membrana basal y en la inferior túbulos con ausencia. En D, abundantes células cafés (CC), túbulo en Fase de Absorción 2 (F3) y con ausencia de membrana basal (AMB). (Tinción H-E, A, B y E 10X, C, D y F 40X) En términos generales podemos señalar que en algunos túbulos con aspecto inflamatorio, es evidente la pérdida de los epitelios de revestimiento y microvellosidades hacia el lumen, asociado con secreciones, células basófilos, acidófilas, células cafés y hemocitos, también se observaron diferentes diámetros y fusión de los túbulos (Fig. 24). En los túbulos de la Fase 1 (Absorción) fueron identificadas las microvellosidades en el lumen y el contenido alimenticio, que incluye en apariencia, una diatomea (Fig. 25) . 32 Fig. 24. En A, aspecto inflamatorio de los túbulos, con perdida de microvellosidades hacia el lumen y células cafés (CC) dentro del tejido conjuntivo. En B, se observan los túbulos de la glándula digestiva en Fase 4 o Desintegración, células cafés (CC) y dellado izquierdo fusión de túbulos (FT). Alrededor del túbulo se aprecian células ó hemocitos (CH) en un canal de hemolinfa. En C, la ausencia de cilios sobre el revestimiento del epitelio, secreción en la luz del túbulo (SC) y aparición de células cafés (CC). En D, células basófilas (CB) y acidófilas (CA) asociadas con la degradación y algunas células cafés (CC). La apariencia corresponde a la Fase 1 o de Preparación por la característica de células hinchadas. (Tinción H-E, A, B, C y D 40X) Fig. 25. En A, túbulo en Fase de Absorción 1 (F2) con presencia de alimento (A), membrana basal bien definida (MB) y microvellosidades en el lumen (MV). En B, diatomea en el lumen (D). (Tinción H-E, A, B, C y D 40X) 33 En los túbulos de la glándula digestiva en C. virginica, se observaron las siguientes fases: 1: Preparación (hinchamiento de células) 2: Absorción 1 (presencia de partículas de alimento) 3: Absorción 2 (presencia de algunas células en desintegración) 4: Desintegración 5: Reconstrucción El análisis estadístico (Kruskal-Wallis) indicó diferencia significativa, entre la prevalencia de las fases de los túbulos, de la siguiente manera; la Fase 4 respecto a la Fase 1 (Z1=4.3856 y Z2=3.7007) y la Fase 2 (Z1=3.6054 y Z2=2.9892) como se muestra en la tabla 5. Tabla 5. Resultado estadístico mediante la prueba de Kruskal- Wallis de las fases observadas en la glándula digestiva con respecto a las zonas de colecta. Conteo Z1 Fase 1 Fase 2 Fase 3 Fase 4 Fase 5 Fase 1 0 0.7801 1.6446 4.3856 2.7831 Fase 2 0.7801 0 0.8645 3.6054 2.003 Fase 3 1.6446 0.8645 0 2.741 1.1386 Fase 4 4.3856 3.6054 2.741 0 1.6024 Fase 5 2.7831 2.003 1.1386 1.6024 0 Conteo Z2 Fase 1 0 0.7115 2.5555 3.7007 1.4525 Fase 2 0.7115 0 1.844 2.9892 0.741 Fase 3 2.5555 1.844 0 1.1452 1.1031 Fase 4 3.7007 2.9892 1.1452 0 2.2482 Fase 5 1.4525 0.741 1.1031 2.2482 0 Medias diferentes si el valor de Z es mayor a Bon Ferroni> 2.8 La Desintegración (Fase 4) en los túbulos de los ostiones fue la etapa con mayor incidencia (Fig. 26). 34 Fig. 26. Gráfica del conteo de las fases de los túbulos de la glándula digestiva. Discusión El incremento de la producción del ostión en los ultimos años, se ha debido a la adopción de nuevas tecnologías para cumplir con las normas de inocuidad (Carta Nacional Pesquera, 2012). En cuanto a los datos fisicoquímicos de la Laguna de Mecoacán, éstos se encontraron dentro de condiciones favorables reportadas para el desarrrollo del ostión C. virginica (Bozada-Robles, 2010). Para el grupo de HAP’s, actualmente se utilizan los criterios de calidad sedimentaria calculados por Long y colaboradores en 1995 a partir de diferentes investigaciones sobre la toxicidad intrínseca de los sedimentos hacia diversas especies bentónicas, donde se estableció un intervalo entre 4.02 y 44.8 µg g-1 donde por debajo del límite inferior conocido como ERL (Low range effect por sus siglas en inglés) los efectos adversos a la biota son esporádicos o no existen mientras que por arriba del límite superior conocido como ERM 35 (Medium range effect por sus siglas en inglés) el daño al bentos es frecuente. Dentro de los contaminantes presentes en la Laguna de Mecoacán, existe la presencia de hidrocarburos carcinogénicos y mutagénicos, si bien estos, no rebasan los criterios establecidos por Long et al. (1995), su efecto puede ser a niveles bioquímicos y no morfológicos. Con respecto a los metales, las concentraciones de níquel y cadmio exceden los valores establecidos como límites máximos publicados en la compilación de la FAO de 1983, sobre la legislación en otros países para sustancias tóxicas en peces y productos de la pesca, incluidos en el reporte del INE y SEMARNAT (2000) y Long et al. (1995). Respecto al cadmio, este metal tiene poco o ningún empleo en la industria petrolera, por lo que su presencia se relaciona con vulcanismo, intemperismo de rocas y suelos, así como también en las actividades agrícolas como componente de herbicidas y fungicidas. Sin embargo es uno de los que presenta alta toxicidad tanto para los organismos marinos y los humanos, en los cuales puede incluso originar la muerte. Por otra parte el níquel, forma parte del petróleo crudo y su presencia en sistemas costeros se relaciona con actividades de producción y exploración de petróleo (Bozada-Robles, 2010). Situación que puede deberse a la cercanía del Almacen de Concentración “Dos Bocas” localizada en la misma laguna. En cuanto a la evaluación del estado fisiológico de los ostiones, fue necesario tomar en cuenta un factor importante como lo es el Índice de Condición (IC), usado constantemente como indicador del estatus nutrimental en bivalvos, además de ser aplicado como un biomarcador de exposición a contaminantes, (Farris y Van Hassel, 2007). Para los organismos de ambas zonas de muestreo el IC fue alto, ya que se encuentra sobre el estándar establecido por Walne 36 (1984) (Guzmán-García, 2007). Lo cual sugiere que contaban con condiciones fisiológicas favorables para alcanzar su máximo desarrollo. El resultado de las estructuras observadas histológicamente arrojó un censo de sexos, el cual determinó que la mayoría de la muestra estuvo conformada por organismos hembras. En el análisis tisular las estructuras revisadas al microscopio no resaltaron evidencia de que existiera alguna lesión de tipo irreversible; en la branquia se observaron algunas secreciones que pueden ser por la interacción con el ambiente; en el caso de los epitelios del intestino puede suceder algo análogo ya que al haber presencia de alimento y estar en contacto con estas partículas podrían aparecer reacciones mecánicas que inducen las secreciones en los epitelios. En términos generales no se ven lesiones como las inducidas por exposición con el cadmio, que reporta Guzmán-García (2007). Tampoco se registró la presencia de parásitos como Nematopsis ostrea reportado por Camarena (2012) en los ostiones de Tampachoco, Ver., ni los posibles helmintos en tejido conjuntivo reportados por Dávila-Gutiérrez (2012). El diagnóstico histopatológico de la glándula digestiva, no evidenció algún tipo de lesión severa porque el epitelio no presenta daños, es decir se encuentra íntegro, aunque en el tejido conjuntivo intertubular se observó la presencia de inflamaciones focales, celulas cafés y agrupamientos de hemocitos, que de acuerdo a Sanders (1990) son la respuestas adaptativas que previenen o protegen al organismo del daño celular a través de la desintoxicación o la excresión y se presentan antes de que los estresores puedan causar daño. Las lesiones de la glándula digestiva, pueden deberse a un contacto prolongado con los contaminantes a través de la vía oral y la incapacidad de eliminación del agente estresante. Los túbulos de la glándula digestiva forman parte de una de las principales vías de incorporación de tóxicos, por lo que, se 37 considera que la activación de células cafés (CC) encontradas, pero no en todos los campos revisados, podría ser un mecanismo primario de defensa en estos órganos (Guzmán-García, 2007) y aunque Zaroogian y Yelvich (1994) reportan que su incremento está relacionado con la respuesta inflamatoria por el proceso de incorporación, acumulación, desintoxicación y degradación de material extraño de la hemolinfa, otros autores han señalado que las CC pueden estar presentes de manera natural, sin embargo su número puede aumentar o disminuir dependiendo del tejido en que se encuentre y del estresor al que esté expuesto el organismo por lo que son un buen indicador fisiológico de daño ambiental (Camarena-Novelo, 2012). Los hemocitos, también observados en las muestras, constituyen el principal modo de defensa contra agentes extraños en moluscos bivalvos marinos. Se han descrito variaciones en el número y tipo de hemocitoscomo respuesta a la presencia de materiales extraños y sabemos que los cambios en las condiciones ambientales afectan el número, tipo y capacidad defensiva de éstos (Figueras, 2007). Los hemocitos al igual que las CC, debido a la frecuencia con que se localizaron, se considera están presentes debido a reacciones mecánicas del ostión y variaciones naturales de los parámetros fisicoquímicos y no a un daño histopatológico. Marigómez et al. (1990) señala que existen las células basófilas y acidófilas, presentes en la base de los túbulos de la glándula digestiva. Las basófilas son células de característica piramidal, con abundante retículo endoplásmico rugoso y relacionadas con la síntesis de proteínas y la digestión extracelular por producción y secreción de enzimas hidrolíticas. A su vez las células acidófilas están involucradas en la absorción y digestión intracelular, se caracterizan por presentar un sistema endo-lisosomal bien desarrollado para la desintoxicación de xenobióticos. La presencia de secreciones eosinófilas, 38 pueden constituir un mecanismo primario de defensa que puede activarse por la exposición a algún tipo de agente externo (Dávila-Gutiérrez, 2012). Aunque se observaron ligeras reacciones inflamatorias, este tipo de cambios generalmente están asociados a otros patrones. Es por ésto que a menudo resulta difícil atribuir los procesos inflamatorios a un sólo suceso (Bernet et al., 1999). En el conteo de los túbulos de la glándula digestiva se encontró diferencia significativa en la Fase 4 que es la de Desintegración, respecto a la 1 (Preparación) y 2 (Absorción 1). En la fase 4, el epitelio que reviste los túbulos conformados por células basófilas inicia su desintegración y hay una pérdida celular considerable, pero posterior a esto comienza una especie de regeneración para los túbulos y así seguir con el ciclo de alimentación- digestión, que además algunos autores sugieren también está relacionado con las mareas por el aporte de alimento. De acuerdo a lo observado y los datos estádisticos es recomendable continuar con el monitoreo de las fases de los túbulos, si bien, los resultados sugieren establecer diferencias entre las fases 1-2 vs 4, ya que el incremento en la prevalencia de la fase 4 puede ser el indicador de su estado fisiológico. No es posible descartar que la fase 4 este influenciada por las concentraciones de metales reportadas en la laguna, sin embargo se requieren estudios complementarios, como establecer la función y prevalencia de las celulas basófilas y acidófilas. Estas respuestas biológicas se pueden asociar con biomarcadores de exposición para establecer su relación con el estrés ambiental. Conclusiones El Índice de Condición confirmó que el desarrollo del ostión en la Laguna de Mecoacán es óptimo. 39 El censo de sexos indicó que la mayoría de los organismos está compuesto por hembras. Las fotomicrografías tomadas de los órganos que componen al ostión no muestran evidencia de daños que indiquen riesgo deletéreo. Los túbulos de la glándula digestiva de los ostiones, presentan naturalmente una morfología irregular, debido a las fases que desarrollan a lo largo de ciclo alimentario. El estado de salud de los ostiones analizados es bueno, ya que no hubo evidencia de lesiones histopatológicas que indiquen riesgo en la sobrevivencia. En las zonas de colecta la fase que prevaleció en los ostiones fue la de Desintegración (Fase 4). Recomendaciones En la Laguna de Mecoacán además del cadmio y níquel, existe la presencia de hidrocarburos reportados como cancerígenos, pero no rebasan los criterios permitidos, de tal manera que su efecto puede ser a nivel bioquímico, ya que no se encontró evidencia de daño morfológico, por lo que se recomienda hacer estudios de este tipo y con biomarcadores enzimáticos específicos asociados a la presencia de estos contaminantes. 40 Literatura citada Armenta-Arteaga, G. & M. P. Elizalde-González. 2003. Contamination by PAHs, PCBs, PCPs and heavy metals in the Mecoacán Lake estuarine water and sediments after oil spilling. Soils & Sediments. 3 (1): 35:40. Baqueiro-Cárdenas, E. R., L. Borabe, C. G. Goldaracena-Islas y J. Rodríguez- Navarro. 2007. Los moluscos y la contaminación. Una revisión. Revista Mexicana de Biodiversidad. 78: 1S-7S. Bernet, D., H. Schmitd, W. Meier, P. Burkhardt-Holm & T. Wahli. 1999. Histopathology in fish: proposal for a protocol to assess aquatic pollution. Journal of Fish Diseases. 22: 25-34. Botello, A. V., G. Ponce-Vélez y G. Díaz-González. 1993. Hidrocarburos aromáticos policíclicos (PAH’s) en áreas costeras del Golfo de México. Hidrobiológica. 3(1-2): 1:14. Bozada-Robles, L. M. 2010. Proyecto: Revisión del estado ambiental de las lagunas costeras de Tabasco. SERNAPAM. Gobierno del Estado de Tabasco. 142 pp. BVSDE. 1993. Contaminación acuática generada por la producción de hidrocarburos en Tabasco, México. Disponible en línea en: http://www.bvsde.paho.org/bvsaidis/puertorico/xliii.pdf (consultado el 21 de Noviembre del 2011). Camarena-Novelo, I. 2012. Biomarcadores para la evaluación de las respuestas fisiológicas del ostión (Crassostrea virginica, Gmelin 1791) de Tampamachoco, Veracruz, México. Tesis de Maestría. División de Ciencias Biológicas y de la Salud. Unidad Iztapalapa. Universidad Autónoma Metropolitana, México, D.F. 91pp. Castillo, Z. y A. García-Cubas. 1984. Taxonomía y anatomía comparada de las ostras en las costas de México. Anales del Instituto de Ciencias del Mar Y Limnología. 13 (2): 249:314. Contreras, F. 1985. Las lagunas costeras mexicanas. Centro de Ecodesarrrollo, Secretaría de Pesca. D.F. 253 pp. Dávila-Gutiérrez, M. 2012. Evaluación del estado de salud del ostión Crassostrea virginica proveniente de la Laguna de Alvarado, Veracruz. Tesis de Licenciatura. Universidad Autónoma de Baja California. 62pp. De la Rua, A., J. M. Arellano, M. L. González de Canales y J. Blasco. 2005. Alteraciones histopatológicas inducidas por cobre en el ostión Crassostrea angulata. Ciencias Marinas. 31 (3): 455:466. 41 Díaz-González, G., A. V. Botello y G. Ponce-Vélez, 1994. Contaminación por hidrocarburos aromáticos policíclicos (HAP’s) disueltos en la laguna de Mecoacán, Tabasco, México. Hidrobiológica. 4(1-2): 21:27. Farris, J.L. & J.H. Van Hassel. 2007. Freshwater bivalve ecotoxicology. Setac CRS Press. 375 pp. Figueras, A. 2007. Biología y cultivo del mejillón (Myitilus galloprovincialis) en Galicia. Consejo superior de investigaciones científicas. Madrid, España. 279 pp. Frías-Espericueta, G. M., A. M. Ortiz-Arellano, I. J. Osuna-López & J. A. Ronson-Paulin. 1999. Heavy metals in the rock oyster Crassostrea iridescens (Filibranchia: Ostreidae) from Mazatlán, Sinaloa, Mexico. Revista Biología Tropical. 47(4): 843-849. George-Zamora, A., M. L. Sevilla-Hernández y D. Aldana-Aranda. 2003. Ciclo gonádico del ostión americano Crassostrea virginica (Lamellibranchia: Ostreidae) en Mecoacán, Tabasco, México. Revista Biología Tropical. 51 (4): 109-117. Gold-Bouchot, G., R. Simá-Alvarez, O. Zapata-Pérez & J. Güemez-Ricalde. 1995. Histopathological effects of petroleum hydrocarbons and heavy metals on the american oyster (Crassostrea virginica), from Tabasco, Mexico. Marine Pollution Bulletin. 31 (4-12): 439:445. Guzmán-García, X. 1995. Evaluación de la calidad sanitaria de ostión Crassostrea virginica de la Laguna de Tamiahua, Veracruz. Tesis de Licenciatura. Facultad de Ciencias, Universidad Nacional Autónoma de México, México, D.F. 55 pp. Guzmán-García, X. 2001. Toxicocinética de cadmio y daño histopatológico en ostión Crassotrea virginica en condiciones de ayuno y alimentación. Tesis de Maestría. División de Ciencias Biológicas y de la Salud. Unidad Iztapalapa. Universidad Autónoma Metropolitana, México, D.F. 65 pp. Guzmán-García, X. 2007. Empleo de biomarcadores para evaluarel proceso de daño en ostión Crassostrea virginica y su respuesta ambiental. Tesis de Doctorado. División de Ciencias Biológicas y de la Salud. Unidad Iztapalapa. Universidad Autónoma Metropolitana, México, D.F. 100 pp. Instituto Nacional de Ecología y Secretaria de Medio Ambiente y Recursos Naturales (INE y SEMARNAT). 2000. La calidad del agua en los ecosistemas pesqueros de México. Disponible en línea en: www.sct.gob.mx/fileadmin/CGPMM/biblioteca/ecologia/308.pdf (consultado el 18 de Mayo de 2011). Kennedy, V.S., R.I.E. Newell & A.F. Eble. 1996. The eastern oyster Crassostrea virginica. Sea Grant. Maryland, USA. 520 pp. Lara-Lara, J.R., et al. 2008. Los ecosistemas costeros, insulares y epicontinentales, en Capital natural de México. Vol. I : Conocimiento actual de la biodiversidad. CONABIO. México. 109-134 pp. 42 Long, E.R., D.D. MacDonald, S.L. Smith & F.D. Calder. 1995. Incidence of adverse biological effect within ranges of chemical concentrations in marine and estuarine sediments. Environment Management. 19(1) 81-87. Marcovecchio, J. y R. H., Freije. 2013. Procesos químicos es estuarios. Editorial de la Universidad Tecnológica Nacional. Argentina. 394 pp. Marigómez, I.A., M.P. Cajaraville & E. Angulo. 1990. Histophatology of the digestive gland-gonad complex of the marine prosobranch Littorina littorea exposed to cadmium. Desease of Aquatic Organism. 9: 229-238. Matthew, J. J., A. H. Ringwood, E. R. Lacy, A. J. Lewitus, J. W. Kempton, P. S. Gross, G. W. Warr & R. W. Chapman. 2002. Potential indicators of stress response identified by expressed sequence tag analysis of hemocytes and embryos from the American Oyster, Crassostrea virginica. Marine Biotechnology. 4: 81-93. Pérez-Sánchez, E. & J.F. Muir. 2003. Fishermen perception on resources Management and aquaculture development in the Mecoacan estuary, Tabasco, Mexico. Ocean & Coastal Management. 46 : 681–700. Ponce-Vélez, G., y A. V. Botello. 2005. Niveles de hidrocarburos en el Golfo de México. 269-298 pp. En: A. V. Botello, J. Rendón-von Osten, G. Gold-Bouchot y C. Agraz-Hernández (Eds.). Golfo de México Contaminación e Impacto Ambiental: Diagnóstico y Tendencias. 2da Edición. Universidad Autónoma de Campeche. UNAM. Instituto Nacional de Ecología. 696 pp. Rogers P. y A. García-Cubas . 1981. Evolución gonádica a nivel histológico del ostión Crassostrea virginica (Gmelin, 191) del sistema fluvio lagunar Atasta Pom, Laguna de Términos, Campeche, México. Anales del Instituto Ciencias Del Mar y Limnología. Universidad Nacional Autónoma de México. 8(1): 21-42. Sanders, B., 1990. Stress proteins: potencial as multitiered biomarkers.165-192 pp. In: J. F. McCarthy & L. R. Shugart (Eds). Biomarkers on Environmental Contamination. Lewis Publishers, Boca Raton, FL. 457 pp. Secretaría de Agricultura, Ganadería y Pesca (SAGARPA). 2012. Carta Nacional Pesquera. Disponible en línea en: http://www.inapesca.gob.mx/portal/documentos/publicaciones/CARTA%20NACI ONAL%20PESQUERA/24082012%20SAGARPA.pdf (consultado el 20 de Septiembre de 2013). Susan-Tepetlan P. V. y D. Aldana-Aranda. 2008. Macrofauna Bentónica Asociada a Bancos Ostrícolas en las Lagunas Costeras Carmen, Machona y Mecoacán, Tabasco, México. Revista Biología Tropical. 56 (suplemento 1):127- 137. Zaroogian, G. & P. Yevich. 1994. The Nature and Function of the Brown Cell in Crassostrea virginica. Marine Environmental Research. 37:355-373. 43 Anexos Índice de Lesiones. Lesiones celulares reversibles Tumefacción hidrópica. Ocurre cuando las células lesionadas de manera reversible aumentan de tamaño. El mayor volumen obedece al mayor contenido de agua, estado caracterizado por un citoplasma pálido y grande y un núcleo en situación normal. Cambios ultraestructurales. Cuando ocurre un cambio en la ultraestructura de los organelos de las células que han sufrido una lesión reversible. Retículo endoplásmico. Al hincharse la célula, las cisternas del retículo endoplásmico se dilatan, tal vez por desplazamientos de iones y agua. En forma independiente, los polisomas fijados a las membranas, pueden experimentar desagregación y desprenderse de la superficie del retículo endoplásmico. Mitocondrias. En ocasiones se notan unas evaginaciones de membrana plasmática con contenido de citoplasma celular, las que pueden separarse y ser eliminadas mientras la célula aún es viable. Nucleolo. En el núcleo la lesión reversible se reconoce principalmente por cambios en el nucleolo, caracterizado por la separación de los componentes fibrilar y granular o por la disminución de este último, de modo que quedan unos centros fibrilares desnudos. Atrofia. Disminución del tamaño y la función de una célula. Se le puede contemplar como una respuesta adaptativa al estrés, en la cual la célula se achica y suspende sus funciones diferenciadas, de modo que reduce a un mínimo sus necesidades energéticas. Al restablecerse las condiciones normales, las células atróficas son plenamente capaces de reanudar sus funciones diferenciadas. La atrofia se produce en diversas situaciones como disminución de la demanda funcional, aporte inadecuado de oxígeno por isquemia, interrupción de las señales tróficas y lesión celular persistente. Hipertrofia. Aumento en el tamaño de una célula, acompañado de mayor capacidad funcional. A diferencia de la tumefacción hidrópica, la célula hipertrofiada no contiene exceso de agua ni de electrolitos. La hipertrofia es una respuesta a señales tróficas o a un aumento de las demandas funcionales y suele ser un proceso normal. Hiperplasia. Incremento en la función de un órgano que aumenta la cantidad de células, inducido por señales hormonales o por aumento de la demanda fisiológica. Una lesión celular persistente puede conducir a la hiperplasia. Degeneración. Es el estado en el cual las sustancias fisiológicas presentes en los tejidos se incrementan o aparecen en otros lugares. Inflamación. Reacción de protección que poseen los animales vivos cuando estímulos físicos, químicos o de parásitos afectan fuertemente el tejido local. 44 Tumor (neoplasma). Se forman cuando las células o los tejidos pasan por proliferación autónoma. De acuerdo al tejido original y al comportamiento biológico anticipado de las células tumorales, los tumores se dividen en dos categorías: benignos y malignos. Lesiones celulares irreversibles Necrosis. Es el estado en el que las células y los tejidos disminuyen su actividad y eventualmente mueren. Disturbios en el Sistema Circulatorio Hemorragia. Fuga de sangre a través de los vasos sanguíneos. Hiperemia. Condición de estancamiento del flujo sanguíneo arterial. Congestión. Condición de estancamiento del flujo sanguíneo venoso. Hidropesía. Estancamiento de los fluidos tisulares debido a una fuga de los capilares desde el tejido, cavidad del cuerpo u órbita ocular. Portada Índice Texto
Compartir