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Analisis-multitemporal-de-la-fragmentacion-y-su-relacion-con-actividades-antropogenicas-en-los-manglares-del-estado-de-Oaxaca-Mexico

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FACULTAD DE ESTUDIOS SUPERIORES IZTACALA 
“Análisis multitemporal de la fragmentación y su 
relación con actividades antropogénicas en los 
manglares del estado de Oaxaca, México” 
T E S I S 
 QUE PARA OBTENER EL TÍTULO DE 
B I Ó L O G O 
PRESENTA: 
VELÁZQUEZ SALAZAR SAMUEL 
 
ASESORA: 
M. en C. MARÍA TERESA RODRÍGUEZ ZÚÑIGA 
Los Reyes Iztacala, Edo. de México, 2015 
UNIVERSIDAD NACIONAL AUTONOMA DE MEXICO 
 
UNAM – Dirección General de Bibliotecas 
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respectivo titular de los Derechos de Autor. 
 
 
 
1 
 
Resumen 
Los manglares son formaciones vegetales que tienen la propiedad de ser tolerantes a la salinidad del agua. 
Se desarrollan en las planicies costeras de los trópicos y subtrópicos húmedos cerca de la desembocadura 
de ríos y arroyos o alrededor de esteros y lagunas costeras; este ecosistema es la transición entre 
ecosistemas terrestres y marinos. Los manglares tienen múltiples funciones ecológicas y brindan una amplia 
gama de servicios ambientales, sin embargo, en los años recientes su distribución ha sido disminuida a 
causa de diversas actividades humanas. El presente trabajo tuvo como objetivo analizar la fragmentación del 
ecosistema de manglar en el estado de Oaxaca en tres fechas (1979, 2005 y 2010). Como insumos se 
utilizaron los mapas de uso de suelo y vegetación del estado de Oaxaca para las fechas 1979 y 2005 
generadas por la CONABIO y se hizo la actualización de la cartografía para el año 2010 utilizando imágenes 
satelitales SPOT-5 (resolución espacial de 10 m) y el mismo sistema de clasificación. En cuanto a la 
cobertura de manglar para el año 2010 se registró una superficie de 18 607 ha con área mínima 
cartografiable de una hectárea. Para evaluar la fragmentación se utilizó el índice desarrollado por 
Steenmans y Pingborg (2000) que analiza la fragmentación de espacios naturales conectados con respecto 
a la cobertura antrópica, utilizando celdillas de 50 x 50 m y celdas de análisis de 1 x 1 km, hubo diferencias 
significativas entre los valores de 1979 a 2005 y de 1979 a 2010 y no se encontraron entre 2005 y 2010, los 
espacios sensibles a ser fragmentados (naturales) disminuyeron en superficie mientras que los espacios no 
sensibles (antrópicos) aumentaron a través del tiempo. Las actividades antrópicas se categorizaron de 
acuerdo con un sistema generado en el presente estudio, este sistema de clasificación representa 10 
categorías que comprenden 21 subcategorías, en el año 1979 se identificaron 11 subcategorías y la más 
abundante fue Poblados rurales (1 238 ha), en 2005 se identificaron 16 y en 2010 se identificaron 18 siendo 
Poblados urbanos (con 3 104 ha y 3 145 ha respectivamente) la más abundante en ambos años, mientras 
que la subcategoría menos representada en las tres fechas fue Otras zonas industriales para el año 1979 
con 7 ha, Aeropuertos para 2005 con 12 ha y Áreas en construcción para 2010 con 3 ha. Para analizar la 
relación de las actividades humanas con la fragmentación se calculó el total de superficie por celda ocupada 
por las distintas actividades, posteriormente se hizo un análisis de regresión multivariado en donde la 
superficie de las distintas actividades representaban las variables independientes y la fragmentación la 
variable dependiente; encontrándose que la actividad que más propicia la fragmentación es la clase Agrícola 
– Pecuaria (β>0.9). Finalmente se estimaron las tasas de cambio por periodos (1979-2005 y 2005-2010) y 
por año, encontrando que las tasas positivas corresponden a las categorías Desarrollo antrópico (2.42 para 
1979-2005 y 1.01 para 2005-2010) y Agrícola – Pecuaria (1.61 para 1979-2005 y 0.9 para 2005-2010) 
mientras que las negativas a Otra vegetación (-0.97 para 1979-2005 y -1.07 para 2005-2010) y Otros 
humedales. En general se puede concluir que el paisaje de los manglares del estado de Oaxaca se 
fragmentó a través del periodo de estudio, las actividades humanas se han intensificado en la zona, 
principalmente en las localidades de Salina Cruz, Puerto Escondido, San Mateo del Mar y San Dionisio del 
Mar, siendo la clase Agrícola – Pecuaria la que más se relaciona con la fragmentación en términos 
generales. Este paulatino deterioro en la conectividad de espacios naturales podría tener repercusiones 
importantes de seguir el ritmo actual puesto que la permanencia de los servicios ambientales se podría 
mermar. 
 
 
 
 
 
 
2 
 
Agradecimientos 
A la Universidad Nacional Autónoma de México - Facultad de Estudios Superiores 
Iztacala por ser mi segunda casa y brindarme la oportunidad de desarrollar mi formación 
académica. 
A la Comisión Nacional Para el Conocimiento y Uso de la Biodiversidad por abrirme 
las puertas a completar parte de la formación académica y mi formación laboral. 
A la M. en C. María Teresa por darme la oportunidad de desarrollar el trabajo de 
investigación, haber confiado en mí y brindarme su apoyo. 
A la M. en Geog. María Isabel y al Dr. Rainer Ressl por darme una grandiosa 
oportunidad de desarrollo profesional y laboral. 
A mis sinodales Dr. José Luis Gama, Dr. Horacio Vázquez, M. en C. Francisco López y 
M. en C. Carlos Troche por sus revisiones, oportunas observaciones y aportaciones para 
mejorar la calidad del trabajo. También al Dr. Gabriel del Instituto de Biología, UNAM por 
su ayuda en el análisis estadístico de los datos. 
Al equipo de manglares de CONABIO quienes también me aportaron enseñanzas durante 
el desarrollo del trabajo. 
 
Dedicatoria 
A mis padres María Rosario y Nicolás por brindarme siempre apoyo y motivación para 
seguir adelante, ustedes son parte de lo que soy ahora tanto de mis logros profesionales 
como personales. Gracias por inculcarme enseñanzas de vida que hasta ahora sigo 
aprendiendo, sin duda el tenerlos a mi lado es una gran dicha. Los amo. 
A mis hermanos Daniel, Jonatan, Roberto y David por todos los momentos que hemos 
pasado juntos, ustedes siempre han sido y serán parte importante de mi vida, la 
experiencia de que en cada momento cuento con ustedes es invaluable. 
A Martha por el gran apoyo que me has brindado en este lapso de vida que llevamos 
juntos, por tu paciencia y tus consejos, por brindarme tu apoyo en todo momento. Te amo. 
A mis amigos Rodrigo, Ismael (Cabañas), Eduardo (Frodo), Jonathan y Roberto 
(Potter) porque compartimos muchos momentos juntos, fuimos compañeros durante la 
carrera y pese a que no nos frecuentemos muy seguido, saben que seguimos siendo 
amigos. 
A mis compañeros de carrera tanto a los de la mañana como a los de la tarde. 
Y también a todos los profesores que con sus enseñanzas fueron parte de mi formación 
académica durante la carrera. 
 
 
3 
 
Contenido 
1 Introducción ................................................................................................................... 6 
2 Marco Teórico ................................................................................................................ 8 
2.1 El ecosistema de manglar ....................................................................................... 8 
2.2 Fragmentación del paisaje .................................................................................... 12 
2.2.1 Conceptos básicos .......................................................................................... 12 
2.2.2 Causas y consecuencias de la fragmentación................................................ 14 
2.3 La percepción remota en el estudio del ecosistema manglar ................................ 16 
2.3.1 Imágenes SPOT ............................................................................................. 20 
3 Antecedentes ............................................................................................................... 21 
4 Justificación ................................................................................................................. 24 
5 Hipótesis ...................................................................................................................... 25 
6 Objetivos ...................................................................................................................... 25 
6.1 Objetivo general .................................................................................................... 25 
6.2 Objetivos particulares ............................................................................................ 25 
7 Zona de estudio ........................................................................................................... 25 
7.1 Ubicación ............................................................................................................... 25 
7.2 Clima ..................................................................................................................... 26 
7.3 Geomorfología ....................................................................................................... 26 
7.4 Hidrología .............................................................................................................. 27 
7.5 Flora y fauna ......................................................................................................... 27 
8 Metodología ................................................................................................................. 29 
8.1 Antecedentes metodológicos de la generación de la línea base y análisis 
retrospectivo del SMMM .................................................................................................. 29 
8.2 Imágenes de satélite SPOT-5 ............................................................................... 31 
8.3 Mapa de manglares y coberturas aledañas 2010 .................................................. 32 
8.4 Estimación del índice de fragmentación ................................................................ 33 
8.5 Mapa de fragmentación ......................................................................................... 35 
8.6 Identificación de las actividades humanas ............................................................ 36 
8.7 Estimación de la tasa de cambio ........................................................................... 38 
9 Resultados ................................................................................................................... 39 
9.1 Coberturas de suelo .............................................................................................. 39 
9.2 Fragmentación ...................................................................................................... 40 
9.2.1 Caracterización de los diferentes tipos de fragmentación ............................... 40 
9.2.2 Grados de fragmentación en el área de estudio para 1979, 2005 y 2010 ...... 42 
9.3 Actividades humanas ............................................................................................ 44 
4 
 
9.3.1 Superficie de las categorías antrópicas en el área de estudio ........................ 44 
9.4 Dinámica de la fragmentación entre periodos (1979-2005 y 2005-2010) .............. 51 
9.5 Tasa de cambio ..................................................................................................... 55 
10 Discusión .................................................................................................................. 56 
10.1 Cobertura de suelo ............................................................................................. 56 
10.2 Actividades humanas ......................................................................................... 58 
10.3 Fragmentación ................................................................................................... 63 
10.4 Tasa de cambio .................................................................................................. 67 
10.5 Propuestas para la conservación del manglar ................................................... 68 
11 Conclusiones y recomendaciones ............................................................................ 71 
12 Bibliografía ................................................................................................................ 72 
Anexos ............................................................................................................................... 82 
12.1 Anexo 1. Mapas ................................................................................................. 82 
12.2 Anexo 2. Algoritmo ISODATA .......................................................................... 115 
 
Índice de Figuras 
Figura 1. Sistema de percepción remota. Adaptado de Chuvieco, 2002 ............................ 17 
Figura 2. Espectro Electromagnético. Tomado de Chuvieco, 2002 .................................... 18 
Figura 3. Ejemplo para el cálculo del índice de fragmentación según Steenmans y Pinborg 
(2000) ................................................................................................................................. 34 
Figura 4. Ejemplos de celdas con las diferentes categorías de fragmentación .................. 41 
Figura 5. Transición de áreas en construcción y expansión urbana e industrial en Salina 
Cruz, Oaxaca ...................................................................................................................... 46 
Figura 6. Proceso de expansión del poblado San Dionisio del Mar, en donde se ganaron 
77 hectáreas de poblado de 1979 a 2005. ......................................................................... 47 
Figura 7. Cambio de manglar a manglar perturbado, en Bajos de Coyula, del periodo 1979 
a 2005 se perdieron 12 hectáreas de mangar, posteriormente de 2005 a 2010 25 
hectáreas de este manglar se perturbaron. ........................................................................ 48 
Figura 8. Incremento en superficie de la subcategoría Poblados y Vías de Comunicación 
en San Mateo del Mar. ....................................................................................................... 49 
Figura 9. Ampliación en un canal en la Laguna Inferior, pasó de 20 m de abertura en 1979 
a 80 metros en 2005 y 2010 ............................................................................................... 50 
file:///C:/Users/svelaz/Google%20Drive/Tesis_FINAL.docx%23_Toc422750995
5 
 
Figura 10. Se muestran cinco ejemplos de la dinámica de la fragmentación en las celdas a 
largo de las tres fechas de estudio. .................................................................................... 54 
Figura 11. La clasificación no supervisada intenta identificar los grupos espectrales 
presentes en la imagen. Tomado de Chuvieco (2002). .................................................... 115 
Figura 12. Esquema del algoritmo ISODATA. (a) selección de los centros de clase 
iniciales; (b) asignación del centro más próximo; (c) desplazamiento de los centros de 
clase; (d) segunda interación con asignación al más próximo. Tomado de Chuvieco (2002).
 ......................................................................................................................................... 117 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
6 
 
1 Introducción 
México es un país megadiverso y las causas derivan principalmente de la ubicación 
geográfica y distribución orográfica del territorio nacional,que se encuentra en la zona de 
transición entre dos grandes regiones biogeográficas, la neártica y la neotropical 
(Espinosa et al. 2008). Esto propicia la formación de variados ecosistemas a tal grado que 
México ocupa el segundo lugar en tipos de ecosistemas y estos albergan alrededor del 
10% de la diversidad biológica del mundo. Si se toma en cuenta el número de hábitats y 
ecorregiones, México es el más diverso de la región de Latinoamérica y del Caribe, 
presentándose desde selvas cálido-húmedas, bosques templados, hasta variados 
matorrales xerófilos, humedales costeros, etc. (Mittermeier y Goettsch, 1992). 
Dentro de los humedales costeros más importantes se encuentran los manglares, que son 
formaciones vegetales que tienen la propiedad de ser tolerantes a la salinidad del agua. 
Se desarrollan en las planicies costeras de los trópicos y subtrópicos húmedos cerca de 
desembocadura de ríos y arroyos o alrededor de esteros y lagunas costeras; este 
ecosistema es la transición entre ecosistemas terrestres y marinos. 
En el mundo se conocen alrededor de 70 especies de mangle agrupadas en diferentes 
familias y géneros (Polidoro et al. 2010 y Spalding et al. 2010). En México predominan 
cuatro especies de mangle: el mangle rojo (Rhizophora mangle), el mangle blanco 
(Laguncularia racemosa), el mangle negro (Avicennia germinans) y el mangle botoncillo 
(Conocarpus erectus) (López-Portillo y Ezcurra, 2002). En el país estas cuatro especies 
están en la categoría de amenazadas, de acuerdo con la NOM-059-SEMARNAT-2010 ya 
que podrían llegar a encontrarse en peligro de desaparecer a corto o mediano plazo, si 
siguen operando los factores que inciden negativamente en su viabilidad, al ocasionar el 
deterioro o modificación de su hábitat o disminuir directamente el tamaño de sus 
poblaciones. 
Entre las importancia económica y beneficios, se considera que son barreras naturales 
que retienen la erosión y forman suelos, generan gran cantidad de nutrientes por lo que 
son muy productivos, son zonas de protección y crianza de especies de importancia 
pesquera como peces, camarones, langostinos, moluscos y cangrejos; son un filtro 
biológico ya que retienen y procesan contaminantes utilizados en la agricultura, abastecen 
a los mantos acuíferos, capturan gases de efecto invernadero, además son fuente de 
7 
 
materiales para la construcción de viviendas rurales, entre otras (Bergstrom et al. 1990; 
Primavera, 2000 y Mitsch y Gosselink 2000). 
Las actividades humanas constituyen una de las principales amenazas para los manglares 
y pueden influir de manera directa o indirecta sobre el ecosistema; de manera directa 
cuando son cortados para la extracción de madera para diferentes usos (Rodríguez-
Zúñiga et al., 2011), la construcción de caminos o carreteras, urbanización de zonas 
costeras, construcción de centros turísticos, obras de infraestructura petrolera o líneas de 
distribución de energía eléctrica; de manera indirecta con el cambio en la hidrología en las 
zonas aledañas, contaminación cuenca arriba de los ríos, cambio en los flujos 
hidrológicos, entre otras (López-Portillo y Ezcurra, 2002; Spalding et al., 2010; Brondizio y 
Chowdhury, 2012). 
Entre las consecuencias de actividades humanas se encuentra el proceso de cambio de 
las coberturas del suelo y la fragmentación de los ecosistemas. La fragmentación es el 
proceso de destrucción parcial del hábitat natural que deja remanentes de menor tamaño 
esparcidos dentro y entre otros tipos de hábitats a través del nuevo paisaje creado. La 
fragmentación también produce la reducción del tamaño original del hábitat, a la vez que 
aumenta el número de fragmentos, el área de borde y el aislamiento entre ellos (Andrén, 
1996; Botkin y Keller, 1997; Melina y James, 2006). 
El proceso de fragmentación se considera como una de las mayores amenazas para la 
conservación de la biodiversidad y de las funciones ecológicas de las cubiertas naturales, 
por ello existe un gran interés en analizar la fragmentación y en los últimos años se han 
desarrollado o adaptado multitud de índices y técnicas para cuantificarla (Ochoa, 2000; 
Steenmans y Pinborg 2000; Martínez et al. 2002; Ritters et al. 2002; Gurrutxaga, 2003; 
Varga et al., 2005; Cayuela, 2006; Chapa et al. 2008; Vargas, 2008, Saura 2011, Reza, 
2014 y Samsuri et al., 2014). 
La información espacial requerida para este tipo de análisis se encuentra cada vez con un 
mayor acceso, debido al rápido desarrollo en las últimas décadas en los sistemas de 
teledetección y de observación de la tierra, de manera que las imágenes satelitales y las 
técnicas de percepción remota se usan frecuentemente para estos fines (Berlanga y Ruiz, 
2007; García et al., 2008 y Labrador-García et al., 2012). 
8 
 
2 Marco Teórico 
2.1 El ecosistema de manglar 
El ecosistema de manglar es un conjunto de habitas con características acuáticas y 
terrestres, conformado por bosques hidrófilos leñosos, distintos tipos de especies de 
fauna, micronutrientes, componentes abióticos, suelo y agua circundantes. 
 Los manglares son las especies vegetales dominantes en este ecosistema que lleva su 
nombre, conforman masas forestales densas con alturas que pueden alcanzar los 25 m 
pero que casi siempre son más bajas. Dentro de las especies asociadas a los manglares 
se pueden encontrar halófitas como Salicornia spp., Batis marítima (Tomlinson, 1986), 
Bravaisia integérrima (Miranda y Hernández, 1963) Prosopis spp. (Moreno y Álvarez, 
2003), Haematoxylum campechianum (Moreno y Álvarez, 2003 y Barba, et. al., 2013). 
Los manglares se encuentran en el ecotono entre los ambientes marino y terrestre. Los 
manglares tienen la capacidad de desarrollarse en salinidades que van desde cero UPS 
(Unidades Prácticas de Salinidad) (dulceacuícolas) hasta hipersalinas (más de 40 y hasta 
90 UPS) alcanzando su máximo desarrollo en condiciones salobres (aproximadamente 15 
ups) (Tomlinson, 1986). 
Las especies de manglar poseen adaptaciones morfológicas y fisiológicas que les 
permiten ocupar hábitats bajo condiciones especiales, tales como suelos desde limosos 
hasta arenosos, inestables y con baja concentración de oxígeno, en ambientes salinos y 
salobres. Asimismo, estas especies han desarrollado estrategias reproductivas como la 
viviparidad o criptoviviparidad (frutos que germinan en la planta madre y que forman 
propágulos e hipocotilos), algunas especies presentan un sistema de raíces verticales 
conocidos pneumatóforos que capturan oxígeno atmosférico y raíces que penetran hasta 
60 cm y que dan estabilidad al tronco. Además tienen glándulas en las hojas que les 
permiten excretar el exceso de sal y hojas gruesas. 
Los manglares, las lagunas costeras, estuarios, marismas, arrecifes de coral, pastos 
marinos son reconocidos como ecosistemas con alta productividad (Lara et al., 2008). 
Esto se debe principalmente a la disponibilidad de nutrientes provenientes del arrastre de 
los ríos y escurrimientos terrestres. Los manglares y los complejos lagunares-estuarinos, a 
diferencia de los bosques templados y selvas tropicales, son ecosistemas abiertos, porque 
9 
 
para su funcionamiento requieren el aporte de agua dulce por ríos, arroyos, y mantos 
freáticos, así como parte del agua marina. Los ríos, los ecosistemas lagunares-estuarinos, 
entre ellos los manglares y las zonas marinas adyacentes están funcionalmente 
vinculados a través de las mareas y bocas. Las actividades en la zona adyacente son 
factores importantes de influencia en los procesos funcionales de los manglares (Agraz-
Hernández et al., 2001). 
Dentro de las características más importantes de los elementos del manglar es su 
adaptación a condiciones específicas de periodicidad de inundación y exposición al aire 
(intercambio gaseoso), diferente para cada especie. Esto determina la distribución y 
zonificación de los manglares e incluso influye en la sucesión. Estas condiciones resultande la zona en particular y son producto de la combinación de las mareas, aportes fluviales, 
escurrimientos terrestres, precipitación-evaporación, viento, profundidad y geomorfología 
del cuerpo de agua adyacente, relaciones de acreción y subsidencia y la extensión de su 
nivel microtopográfico óptimo (este puede variar de acuerdo a la especie, por ejemplo el R. 
mangle se encuentra en condiciones microtopográficas más oscilantes distintas a C. 
erectus más estables). 
En las costas mexicanas se encuentran cuatro especies de mangle principalmente 
formando este ecosistema: R. mangle, L. racemosa, A. germinans y C. erectus. 
Rizophora mangle se encuentra en las condiciones de mayor inmersión del suelo y de 
menor salinidad (0 a 37 UPS, con tolerancia de hasta 65 UPS), considerándose como una 
especie pionera en los límites terrestres y marinos. Esta especie posee un mecanismo de 
exclusión de sales, así como lenticelas en las raíces adventicias para captar oxígeno 
atmosférico. Se desarrolla en las desembocaduras de los ríos donde forma lagunas 
someras con aguas salobres sujetas a la actividad de las mareas (Agráz-Hernández et al., 
2006). 
Rizophora mangle es un árbol perennifolio de 1.5 a 15 m (hasta 30 m) con un diámetro 
normal (DN), denominado también como diámetro a la altura del pecho (DAP) de hasta 50 
cm, de copa redondeada con hojas opuestas simples, pedicioladas, elípticas a 
oblongadas, aglomeradas en las puntas de las ramas de 8 a 13 cm de largo por 4 a 5.5 cm 
de ancho; de tronco recto y ramas apoyadas en numerosas raíces aéreas simples o 
10 
 
dicotómicamente ramificadas, con numerosas lenticelas, la corteza externa es de color 
olivo pálido que si se raspa adquiere un color rojo. Es una planta hermafrodita que 
presenta inflorescencias simples con 2 o 3 flores, pedúnculos de 3 a 5 cm flores 
actinomórficas, frutos tipo baya de color pardo, coriácea, dura, piriforme, farinosa de 2 a 3 
cm de largo por 1.5 cm de ancho en la base, cáliz persistente, se desarrolla una semilla 
por fruto rara vez dos. Una sola semilla germina en el interior del fruto cuando todavía se 
encuentra en el árbol. En cuanto a sus raíces, son fulcreas, ramificadas, curvas y 
arqueadas, destacan modificaciones de sus raíces en prolongaciones aéreas del tallo 
como zancos (Vázquez-Yañez et al., 1999) 
Laguncularia racemosa se encuentra en las condiciones de salinidad de 0 a 42 UPS, con 
tolerancia de hasta 80 UPS, por lo general se desarrolla en sitios con menor profundidad 
que R. mangle. Esta especie posee un sistema de excreción de sales mediante glándulas, 
así como lenticelas en sus neumatóforos, que suele desarrollar cuando crece en áreas 
inundadas para captar el oxígeno atmosférico. Es una especie dioica, que posee las flores 
más chicas de las cuatro especies, estas son de color blanco, actinomórficas de 
aproximadamente 4 mm, con 5 pétalos y 10 estambres, se presentan formando espigas. 
Esta especie florece todo el año produciendo drupas con forma de avellana, de las cuales 
miden aproximadamente 2 cm de longitud y pesan menos de un gramo, son de color verde 
pardusco cuando caen del árbol paterno después de dos días se tornan color café. Los 
frutos son drupas de 2-2.5 cm de largo, ovaladas y con varios surcos longitudinales, verde 
pardo, carnosas y contienen una sola semilla de 2 cm de largo. El pericarpio (pared del 
propágalo maduro) sirve como flotador y no se desprende hasta que la plántula se 
establece (Trujeque, 1990; Pennington y Sarukhán, 1998). 
 Avicennia germinans Se encuentra en las condiciones de menor inmersión del suelo, sólo 
en las mareas más altas y de mayor salinidad (0 a 65 UPS, con límites de tolerancia de 
hasta 100 UPS). Esta especie posee un mecanismo de excreción mediante glándulas, 
exclusión y acumulación de sales, así como lenticelas en sus neumatóforos para captar 
oxígeno atmosférico. (Agráz-Hernández et al., 2006). 
Es de copa redonda, llega alcanzar hasta 20 m de altura y un diámetro de 30 a 50 cm, su 
corteza es gris negruzca, ligeramente escamosa. Por lo general se desarrolla en la zona 
intermareal inferior, detrás del mangle rojo, tolera altos niveles de salinidad, ya que posee 
11 
 
la capacidad de excretar la sal a través de sus hojas por lo que presentan conspicuos 
gránulos blancos de sal en la superficie de sus hojas, las cuales son opuestas, delgadas, 
elípticas o de forma oblonga, de color verde obscuro en la superficie y cubiertas de pelos 
cortos y densos; en la parte inferior son blanquecinas. Las hojas se presentan de 5 a 8 
cada 4 cm con un corto peciolo (Tomlinson, 1986; Pennington y Sarukhán, 1998). 
 Se presenta en forma de árbol, su corteza es de color grisáceo oscuro. Las hojas son 
opuestas, generalmente de formas elípticas angostas, anchas u ovaladas; el tamaño y 
formas de estas pueden variar dependiendo de las concentraciones de salinidad en las 
que crezca la planta, siendo el tamaño mayor en salinidades más bajas. Las 
inflorescencias en racimos o panículas son axilares y terminales con flores ligeramente 
vellosas de color blanco, con la base interna ligeramente amarillenta. El ovario unilocular 
procede de un fruto grande de color verde oscuro a claro. El pericarpio es claramente 
rugoso y se torna amarillento al madurar el fruto; este presenta un pico corto ligeramente 
lateral (Jiménez, 1994). 
Conocarpus erectus se encuentra ocasionalmente en condiciones de inmersión del suelo 
y bajo concentraciones de salinidad altas (0 a 90 UPS, con tolerancia de hasta 120 UPS). 
Esta especie presenta mecanismo de excreción de las sales mediante glándulas. Especie 
dioica que se presenta como forma de árbol de diferente altura, (2 m – 7m) , la corteza es 
robusta y se encuentra fisurada, con ramas frecuentes pero difusas e irregulares, los 
retoños no presentan articulaciones; las hojas con arreglos en forma de espiral esparcidas 
en racimos apartados, tiene un ápice agudo o en forma de punta, su inflorescencia es 
terminal, las flores femeninas son más compactas que las masculinas, las flores 
masculinas se distinguen por presentar de 5 a 10 estambres funcionales, un ovario 
angosto el cual comúnmente incluye de 1 a 2 óvulos no funcionales. Las inflorescencias 
femeninas usualmente tienen 5 estambres (1 a 2 mm de largo), el ovario está bien 
desarrollado y se muestra comprimido lateralmente. El fruto está comprimido lateralmente 
de la cabeza, las semillas son pequeñas y angulares (Tomlinson, 1986). 
En cuanto a la interacción de los manglares con otros ecosistemas acuáticos, los que se 
encuentran con influencia de mareas con comunicación continua con el mar tienen un 
acoplamiento funcional con los ecosistemas costeros adyacentes, como las praderas de 
los pastos marinos y arrecifes de coral. Esta interacción se efectúa porque la materia 
12 
 
orgánica producida en el manglar es exportada a la zona de pastos marinos y arrecifes de 
coral. Otro vínculo de importancia es la presencia de organismos que realizan alguna 
etapa de su ciclo de vida en los manglares y luego migran hacia las otras comunidades 
(Agráz-Hernández et al., 2006) 
La más clara evidencia de la conectividad funcional entre ecosistemas es la existente 
entre las lagunas costeras, los manglares y la zona marina en relación a los recursos 
pesqueros. Los juveniles de crustáceos, peces y moluscos se alimentan y crecen en los 
complejos lagunares estuarinos, incluyendo manglares, para posteriormente emigrar a la 
zona marina adyacente (Agráz-Hernández et al., 2006 y Aburto et al., 2008). 
Los manglares con comunicación estacional o restringida al mar y comunicación indirecta 
a las vías fluviales funcionan como una trampa de carbono y nutrientes al concentrar estos 
en su interior. Normalmente, este tipo de manglares y pastos marinos funcionan como 
trampas de sedimentos, materia orgánica y nutrientes, favoreciendo el crecimiento de 
arrecifes coralinos protegiéndolosde la sedimentación y eutrofización. El acoplamiento 
entre los manglares y los arrecifes coralinos se atribuye principalmente a los procesos 
hidrodinámicos (Kitheka, 1997 y Wolansky, 1994). 
2.2 Fragmentación del paisaje 
2.2.1 Conceptos básicos 
Desde la perspectiva de la ecología del paisaje, la fragmentación de la vegetación ha sido 
un tema que ha sido impulsado por la necesidad de entender la estructura, dinámica y 
problemas de orden ambiental y espacial que presentan los paisajes que han sido 
alterados, modificados y transformados por las actividades humanas en el transcurso del 
tiempo (Montoya-Reséndiz, 2008). 
Como primer plano, la ecología del paisaje surge en 1939 con el biogeógrafo alemán Carl 
Troll, cuya inquietud fue combinar la ecología con la geografía. Mientras que la primera 
proporciona la base conceptual y metodológica del ecosistema y con ello los procesos 
ecológicos, la segunda aporta el estudio de las estructuras espaciales y la expresión 
espacial del ecosistema así como la manifestación espacial de las relaciones entre el 
hombre y su medio. Por lo tanto, la ecología del paisaje toma como línea de investigación 
13 
 
la interacción entre los procesos espaciales y las consecuencias de la heterogeneidad 
espacial por medio de la variabilidad de escalas (Turner et al., 2001). 
De esta manera, el paisaje es considerado como la traducción espacial del ecosistema 
(Richard, 1975) o un nivel de organización de los sistemas ecológicos, que se caracteriza 
por su heterogeneidad y por su dinámica, controlada en gran parte por las actividades 
humanas que lo hacen variar en el espacio y en el tiempo. La heterogeneidad espacio – 
temporal resultante controla numerosos movimientos y flujos de organismos, materia y 
energía (Vargas-Ulate, 2008) 
Bajo la óptica ecológica la fragmentación es un proceso o transformación que afecta a una 
cierta porción de la superficie de un hábitat que tiene como característica la continuidad. 
La transformación es originada por la segmentación o división de ésta, generándose con 
ello subunidades llamadas fragmentos (denominados así en la escuela francesa) o bien 
parches o manchas (llamados así en la escuela anglosajona), los cuales se caracterizan 
por la disminución de tamaño y el incremento de la distancia y el aislamiento entre ellos 
(Montoya-Reséndiz, 2008). 
De acuerdo con la ecología del paisaje, la fragmentación de los paisajes naturales debe 
entenderse como el proceso en que extensas áreas de vegetación reducen su superficie al 
dividirse en varias manchas más pequeñas por la acción de un agente externo o interno. 
Si bien existen factores naturales que contribuyen a la fragmentación, es la presión 
antrópica, por distintos medios de colonización, la causa fundamental de la creciente 
disgregación de los ecosistemas, al transformar las tierras de cobertura natural en 
espacios para distintos usos (Vargas-Ulate, 2008). 
14 
 
 
Diagrama 1. Génesis del estudio de la fragmentación y los enfoques investigativos. Tomado de Montoya-
Reséndiz (2008). 
Dentro de los enfoques observados en el Diagrama 1, el presente estudio se encuentra 
englobado dentro del paisajístico–geográfico que se caracteriza por abordar la 
fragmentación desde su correlación con las cubiertas de suelo y el uso asociado a las 
cubiertas y su dinámica. Desde esta perspectiva se ha tomado como hilo conductor el 
análisis multiespacial y multitemporal de variables del uso potencial, uso real y factores 
territoriales. El nivel de análisis que se persigue en esta perspectiva, es identificar las 
causas o variables que mejor expliquen la fragmentación, los elementos que han 
dinamizado su evolución, y aterrizar las consecuencias cualitativas y cuantitativas de 
manera rápida, espacial y sistemática (Montoya-Reséndiz, 2008). 
2.2.2 Causas y consecuencias de la fragmentación 
Existen dos causas distintas de la fragmentación, las que refieren a causas naturales y las 
de origen antrópico. Las causas naturales se caracterizan por ser parte del componente 
biofísico de los sistemas naturales; se pueden presentar como fenómenos aislados y 
eventuales o como la conjugación de circunstancias que provocan hechos de grandes 
dimensiones espaciales y/o recurrentes y quedan completamente fuera del control del 
hombre. Por otra parte, las causas antrópicas de la fragmentación son aquellas que se 
generan por la presencia de las actividades de subsistencia, desarrollo, evolución del 
15 
 
hombre en sociedad y por esta razón son la responsabilidad de su comportamiento e 
intereses (Montoya-Reséndiz, 2008). 
Dentro de las causas naturales que provocan fragmentación se encuentran diversos 
fenómenos de distintos orígenes como son del orden hidrometeorológico como incendios 
forestales, inundaciones, huracanes, tsunamis, sequías y las del orden morfogeológico, 
como el vulcanismo, los eventos gravitacionales y el cambio de curso de los ríos, lagunas, 
etc. (Lambin et al, 2001). 
En cuanto a las causas antrópicas de la fragmentación son numerosas y diversas, pero se 
pueden agrupar en dos categorías: 1) las que se relacionan con la apropiación de recursos 
naturales para ser aprovechados en cubrir necesidades del hombre, la adaptación y 
transformación para la distribución de recursos, bienes y servicios que demanda la 
población y 2) las que derivan de algún tipo de interés económico y/o de carácter social 
(Reyes et al., 2006 y Montoya-Reséndiz, 2008). 
En cuanto a las del primer orden se encuentran, por ejemplo, la tala y extracción de leña y 
otros recursos forestales, abastecimiento de recursos para los poblados, producción de 
energía y apoderamiento de lugares para habitar. 
Las del segundo orden abarcan lo relativo a la construcción de infraestructura para la 
comunicación de poblados, aeropuertos, puertos, etc. El objetivo de estas actividades es 
el tránsito y distribución de bienes y servicios a escala local o regional (Rosell et al., 2002). 
Estas actividades humanas que se realizan para la supervivencia, la distribución o la 
generación o acumulo de bienes económicos se encuentran constituidas y armonizadas 
entre ellas. Cada una de ellas genera impactos diferentes y a diferentes escalas en la 
fragmentación del paisaje, con diversas consecuencias en la composición, estructura y 
funcionamiento de los ecosistemas que se analizan (Montoya-Reséndiz, 2008). 
Dentro de las consecuencias de la fragmentación de los ecosistemas podemos encontrar 
los cambios en las estructuras de las comunidades, cambios en los ecosistemas en cuanto 
a superficie, procesos ecológicos frágiles (como polinización, dispersión, colonización, 
entre otros). También se pueden perder los bienes y servicios que brindan los ecosistemas 
por la reducción de sus fragmentos, se puede ver afectado el régimen hidrológico natural 
16 
 
de los sistemas naturales, el flujo de energía, se puede tener más susceptibilidad en 
cuanto a intrusión de especies exóticas, disminución de las poblaciones y comunidades, 
disminución en la riqueza de especies, entre otras (Lambin, 2001; Galicia et al. 2007 y 
Montoya-Reséndiz, 2008). 
 
2.3 La percepción remota en el estudio del ecosistema manglar 
La percepción remota (PR) comprende el análisis y la interpretación de unidades de 
radiación electromagnética, que son reflejadas o emitidas por objetos y coberturas de la 
superficie terrestre, estas unidades son observadas y/o registradas por un observador o 
instrumento que no está en contacto directo con los objetos y coberturas (Mather, 2004). 
Un sistema de percepción remota está constituido por tres elementos principales (Martínez 
y Díaz, 2005) (Figura 1): 
- Una fuente de energía, la cual puede ser generada por el mismo sensor, como en el 
caso de radar y lidar, o la energía proveniente del sol. 
- Un sensor, montado sobre alguna plataforma, es el instrumento capaz de ver o 
captar las relaciones espectralesy espaciales de objetos y materiales observables. 
Los sensores detectan sólo una parte de la escena denominada campo instantáneo 
de visión el cual está determinado por la resolución espacial del sensor y por la 
altura a la que órbita el satélite o en su caso el vehículo portador del sensor. Existen 
varios tipos de sensores que detectan diferentes formas de energía como: 
gravedad, magnetismo, ondas de radio, pero los más utilizados son los sensores 
que detectan la radiación o energía electromagnética (REM). 
- Objeto observado, se trata de la cubierta terrestre, vegetación, agua, suelos o 
construcciones hechas por el hombre. El objeto observado recibe la señal 
energética procedente de la fuente, y la refleja o emite de acuerdo con sus 
características. 
17 
 
 
Figura 1. Sistema de percepción remota. Adaptado de Chuvieco, 2002 
La energía reflejada por el objeto observado se le conoce como albedo o reflectancia y se 
puede definir en función de su longitud de oda o frecuencia, las cuales son organizadas en 
una serie de bandas en donde la radiación electromagnética manifiesta un 
comportamiento similar, lo que se le conoce como espectro electromagnético (Jensen, 
2000). 
Las siguientes bandas espectrales son las más utilizadas en el área de la PR (Chuvieco, 
2002): 
- Espectro visible: Es aquella zona del espectro electromagnético que va desde los 
400 a los 700 nm de longitud de onda. En esta zona se distinguen tres bandas 
elementales que se denominan azul (400 a 500 nm), verde (500 a 600 nm) y rojo 
(600 a 700 nm). 
- Infrarrojo cercano: Va de los 700 nm a los 1 300 nm, esta banda es de especial 
importancia por su capacidad para discriminar masas vegetales y concentraciones 
de humedad. 
Fuente de energía 
Sensor 
Superficie Terrestre 
18 
 
- Infrarrojo medio: Comprende de los 1 300 a 8 000 nm, es de especial importancia 
por la detección de los sitios de alta temperatura. 
- Infrarrojo lejano o térmico: Esta banda que se extiende de los 8 000 a los 14 000 
nm, detecta calor proveniente de la mayoría de las cubiertas terrestres. 
- Microondas: A partir de 1 mm, es de gran interés por ser un tipo de energía 
transparente a la cubierta nubosa (Figura 2). 
 
Figura 2. Espectro Electromagnético. Tomado de Chuvieco, 2002 
 
Es importante mencionar que la reflectancia de los objetos que se encuentran en la 
superficie terrestre varía de acuerdo a las características propias de cada elemento u 
objeto. La vegetación, por ejemplo, presenta valores altos de reflectancia en el infrarrojo 
cercano y medio, mientras que los cuerpos de agua muestran valores cercanos a cero en 
la misma frecuencia. A esta característica propia de cada elemento se le denomina 
respuesta espectral, la definición detallada de un objeto en diferentes longitudes de onda o 
frecuencias permite definir su forma espectral, la cual es propia de cada objeto y permite 
diferenciarlo de un grupo de elementos parecidos (Chuvieco, 2002). 
Uno de los aportes más destacados de la Percepción Remota al estudio vegetal es su 
capacidad para seguir procesos que involucran cambios ya sea debidos a ciclos 
estacionales en las cubiertas vegetales, a catástrofes naturales o a las alteraciones del 
tipo humano (Bragachini et. al., 2006) En estudios de este tipo no solo se puede evalúan 
19 
 
los cambios que sufren las coberturas vegetales ya sean de ganancia o pérdida de área, 
como consecuencia de un fenómeno natural o de origen antrópico, sino que también con 
base en esta información se pueden hacer análisis a diferentes escalas de la composición 
espacial de las distintas coberturas a través del tiempo. 
Este tipo de herramientas auxilian en el conocimiento, identificación, clasificación, 
planeación y gestión de los ecosistemas y tipos de vegetación, entre ellos el manglar. 
El papel que juegan los sensores remotos para el estudio de los manglares 
particularmente es muy importante, ya que dada su extensión y accesibilidad a este tipo 
de ecosistema el trabajo de campo resulta poco rentable, consumiendo tasas 
considerables de tiempo y recursos (Rodríguez-Zúñiga et al., 2011). 
Dentro de los trabajos que destacan el estudio de los manglares con el uso de PR, 
enfatizan los que utilizan imágenes de satélite Landsat y SPOT. Dentro de las principales 
diferencias de estas imágenes son los niveles de resolución espectral y espacial, ambas 
son importantes en la identificación de manglares, ya que con mayor resolución espectral 
se puede discriminar diferentes tipos de vegetación, inclusive asociaciones (Green et al 
1998), mientras que con una mayor resolución espacial es posible evaluar con mayor 
precisión las características físicas de las coberturas. 
Dentro de los trabajos en otros países que podemos encontrar aplicando PR en 
manglares, se pueden mencionar los hechos por Islam et al. (1997) utilizan PR para 
detectar cambios en la cobertura de los manglares de Bangladesh. Wang et al. (2003) 
efectuaron un estudio de detección de cambios en la cobertura de manglar en Tanzania, 
en el periodo de 1990 a 2000 usando tres imágenes de satélite Landsat de 1990, 1998 y 
2000. . Por otra parte Giri et al. (2007) en donde se analizan datos satelitales 
multiespectrales con el objetivo de modelar la deforestación y la degradación de estos 
ecosistemas. Bhattarai y Giri (2011) realizaron una evaluación de la cobertura del manglar 
utilizando imágenes Landsat, en la región del Pacífico. Srivastava et al. (2012) quienes 
utilizando imágenes Landsat TM identificaron áreas bien manejadas del manglar de Tami 
Nadu, India 
 En nuestro país, desde la década de 1990 se han desarrollado estudios mediante el uso 
de estas tecnologías en el estudio de sus manglares. Dentro de los trabajos que destacan 
20 
 
son los hechos por Ramírez et al. (1998) donde evaluaron el nivel de deforestación y 
extensión del manglar de Boca del Río Santiago, México, a través del análisis 
retrospectivo de las coberturas terrestres utilizando imágenes Landsat TM. Rodríguez-
Zúñiga (2000) realizó una evaluación de la deforestación de los manglares de Celestún y 
Ría Lagartos mediante el uso de fotografías aéreas. El estudio de Berlanga-Robles y Ruíz-
Luna (2002) en donde se analizaron las tendencias de cambio de la cobertura de manglar 
de sistemas lagunares de Nayarit y Sinaloa. Rodríguez-Zúñiga (2002) y Vázquez-Lule et 
al. (2012) analizaron los cambios temporales en la cobertura de manglar en el Sistema 
Lagunar de Alvarado, Veracruz, mediante el empleo de imágenes Landsat y SPOT, 
respectivamente, entre otros. 
2.3.1 Imágenes SPOT 
El Satellite Pour l’Observation de la Terra conocido por sus siglas en francés como SPOT, 
fue diseñado en Francia por el Centre National d’Estudes Spatiales (CNES) y desarrollado 
con la participación de Suecia y Bélgica, quienes financiaron los costos del programa a 
través de sus agencias nacionales del espacio, la Services fédéraux des affaires 
scientifiques techniques et culturelles (SSTC) y la Swedish National Space Board (SNSB). 
Dicho proyecto ha dado como resultado un total de 7 satélites de uso civil. El primer 
satélite de la serie (SPOT-1) fue lanzado el 22 de febrero de 1986. En la actualidad se 
tienen operativos SPOT-4 (lanzamiento el 24 de marzo de 1998), el SPOT-5 (lanzamiento 
el 4 de mayo de 2002), SPOT-6 (lanzamiento el 9 de septiembre de 2012) y SPOT-7 
(lanzamiento 30 de junio de 2014). 
Desde sus inicios el programa SPOT representó, en su momento, un salto tecnológico 
para la observación de la Tierra al generar imágenes de una resolución espacial inédita 
hasta SPOT-5 (de 10m/pixel), este satlélite puede tomar imágenes multiespectrales 
dentro de un corredor de hasta 900 km de anchura y lleva a bordo los siguientes sensores: 
HRG (High Resolution Geometric): Sensor óptico de alta resolución que dispone de 4 
bandas multiespectrales y una pancromática. El satélite posee dos de estas unidades,las 
cuales pueden efectuar observaciones oblicuas. Los dos instrumentos de HRG pueden 
funcionar independiente o simultáneamente en modo pancromático o multiespectral 
(Labrador et al. 2012) (Ver Cuadro 1) 
21 
 
Banda Región espectral Ancho de banda (nm) Resolución (m) 
 Pancromático 480- 710 2.5 (modo super) o 5 
1 Verde 500-590 
 
10 
2 Rojo 610-680 
3 Infrarrojo cercano 780-890 
4 Infrarrojo medio 1 580-1 750 
Cuadro 1. Bandas espectrales del sensor HRG. Tomado de Labrador et al. 2012 
HRS (High Resolution Stereoscopic): Sensor dedicado a la obtención de pares 
estereoscópicos. 
Las imágenes SPOT-5, a diferencia de las Landsat permiten generar cartografía más 
detallada en cuanto a resolución espacial. Como anteriormente se mencionó, poseen un 
tamaño de pixel de 10m en versiones multiespectrales y las Landsat de 30m, por lo que su 
uso ayuda a tener una ventana de cambios mayor y más sensible espacialmente. En 
cuanto al tema espectral, las imágenes SPOT cuentan con 4 de las 8 bandas que tiene 
Landsat, pero se resumen en verde, rojo y dos infrarrojos (cercano y medio) que de 
acuerdo con Chuvieco (2002) las últimas tres bandas son las que nos permiten diferenciar 
y clasificar mejor la vegetación. 
3 Antecedentes 
Han sido diversos los trabajos que se han desarrollado sobre fragmentación, por citar 
algunos: Ochoa (2000) sobre el proceso de fragmentación de los bosques en Los Altos de 
Chiapas y su efecto sobre la diversidad florística, con base en imágenes satelitales 
Landsat de 1974, 1984 y 1990, calculó la tasa de deforestación y los cambios de usos de 
suelo; Mass y Correa (2000) analizaron la fragmentación del paisaje en el Área Protegida 
“Los Petenes” en el estado de Campeche, mediante interpretación de fotografías aéreas 
de 1991; Cayuela (2006) sobre la deforestación y fragmentación de bosques tropicales en 
Los Altos de Chiapas, con base en imágenes satelitales Landsat de 1975, 1990 y 2000; 
Chapa et al. (2008) realizaron un estudio multitemporal de la fragmentación de los 
bosques en la Sierra Fría de Aguascalientes, mediante fotografías aéreas de los años 
1956, 1970 y 1993. 
22 
 
 En cuanto a la metodología aplicada en estos trabajos, destaca el uso de índices de 
fragmentación propuestos por la ecología del paisaje como son: tamaño del parche mayor, 
tamaño del parche menor, tamaño promedio, longitud del borde, área núcleo total, entre 
otros. Sus resultados coinciden con la disminución de la cubierta natural y al aumento de 
las actividades antropogénicas, así como una tasa de deforestación mayor en la década 
de 1970 a 2000 y el aumento de fragmentación a través del tiempo con parches de menor 
tamaño, mayor aislamiento y mayor área de borde. 
Otros autores han aplicado solamente un índice que refleja la fragmentación tal es el caso 
de Chapa et al. (2008) quienes aplicaron el índice de fragmentación de Monmonier (1974), 
Troche (2002) utilizó el índice de la Agencia Europea de Medio Ambiente (2000) y Vargas 
(2008) quien al no encontrar resultados representativos con los anteriores índices propone 
uno en donde toma en cuenta la superficie total, el número de parches, la superficie de los 
parches y la distancia entre ellas, también establece una clasificación de los valores. 
Entre algunos trabajos multitemporales en los manglares de México destacan: Ramírez et 
al. (2005) sobre el cambio de coberturas, usos de suelo, actividades antropogénicas 
puntuales sobre la cobertura de manglar de los municipios de Tecuala y Santiago Ixcuintla, 
Nayarit (1973-2005) utilizando imágenes Landsat; Berlanga y Ruiz (2007) sobre las 
tendencias de cambio de manglares del sistema lagunar Teacapán-Agua Brava, Nayarit 
(1973-2000) con imágenes satelitales Landsat; Villavicencio et al. (2008) aunque no es un 
estudio multitemporal pero es sobre la cobertura y estado de fragmentación del manglar 
en el estado de Nayarit con base en imágenes satelitales Landsat y SPOT; Carbajal 
(2010) sobre la estructura, composición, modificación antrópica y análisis de cambios 
(1986-2007) en los manglares del Parque Nacional Lagunas de Chacahua en el estado de 
Oaxaca; Hirales et al. (2010) sobre la estimación de la perdida de cobertura de manglar, 
tasa de deforestación anual y los agentes de deforestación en la zona Mahahual-Xcalak, 
Quintana Roo (1995-2007); Carbajal (2010) sobre la estructura, composición, modificación 
antrópica y análisis de cambios (1986-2007) en los manglares del Parque Nacional 
Lagunas de Chacahua en el estado de Oaxaca. Algunos estudios multitemporales 
realizados en otros países son Posada y Salvatierra (2001) sobre el cambio del 
ecosistema manglar en la costa del departamento del Atlántico en Colombia (1970-1996) 
mediante fotografías aéreas e imágenes satelitales Landsat; Martínez et al. (2002) sobre la 
23 
 
degradación y los cambios de las áreas de manglar en la costa norte del municipio 
Quemado de Güines, provincia Villa Clara, Cuba (1979-1997) con uso de fotografías 
aéreas y cartografía temática; Raksa et al. (2006) sobre evaluación de las áreas de 
manglar y los cambios en la provincia de Trag, Tailandia (1990-2007) mediante imágenes 
satelitales Landsat, SPOT y ALOS (Advanced Land Observation Satellite). 
El antecedente más reciente que se tiene a nivel nacional es el estudio desarrollado por la 
Comisión Nacional para el Conocimiento y Uso de la Biodiversidad (CONABIO): Los 
manglares de México: estado actual y establecimiento de un programa de monitoreo a 
largo plazo, el cual ha derivado en el actual Sistema de Monitoreo de los Manglares de 
México (SMMM). 
Este sistema tuvo como un primer objetivo conocer la extensión y la distribución que 
tenían los manglares en 2005 mediante el uso de imágenes satelitales SPOT-5 que son de 
alta resolución, con lo cual se estableció la línea cartográfica de base. Posteriormente, se 
evaluó el cambio de uso de suelo en un periodo de 30 años, para lo cual se generó la 
cartografía para la década 1970-1980 con base en fotografías aéreas proporcionadas 
principalmente por el INEGI; dentro de este mismo sistema también se han evaluado 
distintos índices como el Índice de Vegetación de Diferencia Normalizada (NDVI), el Índice 
de Vegetación Mejorado (EVI), el Índice de Área Foliar (LAI) y biomasa, para detectar 
cambios en la condición de la vegetación a través del tiempo, buscando su relación con la 
respuesta en las imágenes satelitales; además se identificaron algunos patrones 
espaciales de fragmentación y conectividad de los manglares de cada uno de los 17 
estados en los que se distribuye el manglar. Para el caso particular del estado de Oaxaca 
encontraron que el número de fragmentos aumentó y su área promedio disminuyó 
considerablemente, la mayoría de los parches presentó un tamaño de entre 1 a 10 
hectáreas en las dos fechas, los fragmentos se encuentran fuertemente sesgados en un 
tamaño menor a 84 ha en 1979 y en 2005 con tamaño menor a 23 ha. 
 
 
http://www.biodiversidad.gob.mx/ecosistemas/manglares2013/smmm.html
24 
 
4 Justificación 
Los estudios sobre el cambio del uso del suelo proporcionan la base para conocer las 
tendencias de los procesos de deforestación, pérdida de ecosistemas naturales y 
desintegración de su homogeneidad espacial en una región determinada, aunque existen 
eventos naturales que propician variaciones en la cubierta natural del suelo, las 
actividades humanas se han convertido en la principal causa de la trasformación de 
ecosistemas (Vitousek et al., 1997). En las últimas décadas este proceso se ha agudizado 
debido al incremento de la población y sus demandas de recursos, generando una mayor 
presión sobre los ecosistemas; debido a lo anterior es importante realizar monitoreos que 
permitan generar estimaciones de la evolución del cambio para implementar medidas que 
aminoren esta pérdida. 
Entre los estudios que han presentado resultados favorables para un monitoreohan sido 
los multitemporales enfocados a usos de suelo, en donde se estiman diversas variables 
para evaluar el estado del ecosistema en distintas épocas y su evolución o tendencia que 
presenta, dentro de estas variables destacan los índices de fragmentación. En la 
estimación de la fragmentación a partir de los usos de suelo resulta ser menos difícil 
diseñar indicadores ambientales que sirvan para evaluar los efectos que las actividades 
antropogénicas tienen sobre los ecosistemas, por lo que los índices de ecología del 
paisaje y los índices de fragmentación sintetizan información ambiental y presentan 
resultados confiables para un monitoreo (Triviño et al., 2007). 
Al ser Oaxaca el estado que alberga la mayor biodiversidad del país y, al igual que en 
México en general, se encuentran prácticamente todos los ecosistemas y tipos de 
vegetación que caracterizan a todo el planeta, matorrales espinosos en zonas áridas, 
bosques tropicales en zonas húmedas, arrecifes de coral y manglares en las costas del 
pacífico, entre otros (Ávila, 2009) es importante darle seguimiento a los cambios que se 
presentan por la acción del hombre. Además de esto, se encuentran dos sitios de manglar 
de relevancia biológica y de rehabilitación ecológica (CONABIO, 2008): Chacahua – 
Pastoría y Mar Muerto) de los 81 identificados a nivel nacional esto como resultado de la 
importancia de albergue de diversidad biológica y la integridad ecológica y funcional del 
área; además de que son escasos los estudios de fragmentación en los manglares 
(CONANP, 2012; CONABIO, 2013) particularmente en el estado de Oaxaca. 
25 
 
Debido a la gran dinámica en cuanto al uso de suelo resultado de la alta actividad 
antropogénica en los manglares y su área de influencia, a la creciente pérdida de 
biodiversidad, a la relevancia de sus servicios económicos y ecológicos que brindan, se 
realiza una investigación que integrara estas relaciones y precisara tanto los cambios en 
el estado de fragmentación como en las tasas de transformación, que proporcionara 
información al Sistema de Monitoreo de los Manglares de México. 
5 Hipótesis 
El cambio de uso de suelo aumenta a través del tiempo debido a las actividades 
antrópicas y esto ejerce una presión en las zonas de bosque de manglar formando 
fragmentos de menor tamaño, modificando su conectividad con espacios naturales así 
como el índice de fragmentación para el ecosistema a través del tiempo. 
6 Objetivos 
6.1 Objetivo general 
Analizar la fragmentación del ecosistema de manglar del estado de Oaxaca en tres fechas 
(1979, 2005 y 2010). 
6.2 Objetivos particulares 
- Actualizar el mapa de coberturas naturales (incluyendo la extensión y distribución 
del manglar) y uso de suelo en el estado de Oaxaca para el año 2010. 
- Identificar los diferentes tipos de actividades humanas que se desarrollan en torno 
al manglar para las tres fechas. 
- Evaluar multitemporalmente el estado de la fragmentación del área de estudio. 
- Evaluar la tasa de cambio de manglar de 1979 a 2005 y de 2005 a 2010. 
7 Zona de estudio 
7.1 Ubicación 
El estado de Oaxaca se encuentra ubicado al sureste de la República Mexicana entre las 
coordenadas 18° 39’ y 15° 39’ de latitud norte y 93° 52’ y 98° 32’ de longitud oeste, colinda 
al norte con los estados de Puebla y Veracruz, al sur con el Océano Pacífico, al este con 
26 
 
el estado de Chiapas y al Oeste con el estado de Guerrero. Por su extensión ocupa el 
quinto lugar del país ya que su superficie total es de 93,364 km2 (4.8% del territorio 
nacional), presenta una extensión de litoral de 597.51 km. Posee 570 municipios 
agrupados en 30 Distritos y 8 Regiones: Región Costa, Región Sierra Sur, Región Istmo, 
Región Sierra del Norte, Región Cuenca del Papaloapan, Región Cañada, Región Mixteca 
y Región Valles Centrales. 
Se utilizó la delimitación de la zona de estudio realizada por la CONABIO (Rodriguez-
Zúñiga et al., 2012) para el estado de Oaxaca en el Sistema de Monitoreo de los 
Manglares de México, la cual está basada en: 
 Cinco km de buffer con relación a la distribución de los manglares en el año 2005 
(CONABIO 2009). 
 Sitios de manglar de relevancia biológica y de rehabilitación ecológica (CONABIO 
2009). 
 Área Natural Protegida (CONANP 2008a) 
 Sitios Ramsar (CONANP 2008b) 
 Modelo Digital de Terreno (MDT) (CONABIO 2005) 
 Cobertura de manglar INEGI (serie I) 
 
 El área de estudio de esta investigación comprende una superficie de 452,343 ha, estas 
se encuentran dentro de la Región Costa y la Región Istmo (Ver Anexo 2. Mapas – Área 
de Estudio). 
7.2 Clima 
El clima costero en general es del tipo Aw que corresponde a cálido subhúmedo con 
lluvias en verano de acuerdo al sistema Köpen, modificado para México por García (1973). 
La precipitación es de 1087 mm, siendo la mínima en abril (2.4 mm) y la máxima en junio 
(276.7 mm) de acuerdo al periodo de lluvias corresponde al de junio con 70% siendo el 
mínimo anual promedio de 66.7%. 
7.3 Geomorfología 
Las costas de Oaxaca se ubican dentro de la Planicie Costera del Pacífico y se le puede 
dividir en dos áreas: la occidental, de relieve más suave, en donde se distinguen llanuras y 
27 
 
lomeríos que finalizan en Puerto Ángel, y por el lado oriental, consiste en un relieve 
premontañoso y de elevaciones medias y bajas que descienden hasta el mar con una 
línea de costa mixta, de promontorios rocosos en los que se intercalan playas arenosas. 
En cuanto a las pendientes, predomina el valor de 0° y 3°, con un 55.4% (García et al. 
2004). 
7.4 Hidrología 
La región costera del estado de Oaxaca se encuentra formada por tres regiones 
hidrológicas: la región 20 que abarca las cuencas del Río Santa Catarina y el Río Verde al 
occidente de la costa; la 21 que se localiza entre las lagunas de Chacahua, al occidente, el 
Istmo de Tehuantepec, al oriente y al norte de San José del Pacífico; finalmente, la 22 que 
corresponde al Istmo de Tehuantepec abarcando las Lagunas Superior e Inferior 
(Rodante, 1997). 
En toda la región se intercalan pequeñas cuencas y subcuencas integradas entre sí, pero 
no se encuentran unidas a corrientes mayores. Su vertiente es hacia el Océano Pacífico y 
sus principales ríos son el Verde y el Tehuantepec. 
7.5 Flora y fauna 
De acuerdo con Salas-Morales et al. (2007) tipos de vegetación característicos de las 
costas oaxaqueñas son: 
Manglar (R. mangle, C. erectus, L racemosa y A. germinans). También asociados se 
pueden encontrar los árboles Recchia mexicana, Caesalpinia velutina, Jatropha mexicana, 
Achatocarpus gracilis y Diospyros aequoris. También se observan elementos arbustivos 
como Crossopetalum uragoga, Casearia corymbosa, Chiococca alba, así como hierbas y 
bejucos, sobre todo en ambientes ubicados más tierra adentro: Combretum fruticosum, 
Ipomoea microsepala, Jouve apilosa, Trixis silvatica y Tournefortia densiflora. 
Selva baja caducifolia donde los árboles dominantes se encuentran Leucaena lanceolata, 
Lonchocarpus lanceolatus, Lysiloma microphyllum, Piptadenia obliqua, Bursera excelsa, 
Jacaratia mexicana, Cordia elaeagnoides y Crateva tapia, y acompañando a éstas se 
puede mencionar a Havardia campylacanthus, Piscidia carthagenensis, Senna atomaria, 
Bursera arborea, B. heteresthes y B. laurihuertae. 
28 
 
Selva baja caducifolia espinosa las especies más características de esta vegetación 
pertenecen a la familia Leguminosae, entre las que destacan Acacia cochliacantha y 
Prosopis juliflora, además de miembros de otras familias como Ziziphus amole, 
Cnidoscolus tubu losus, Jat ropha sympetala y Bumelia celastrina. Por otra parte, en el 
estrato arbustivo se encuentran Capparis indica, Pereskiopsis kellerm anii, Melochia 
tomentosa, Diospyros aequoris, Pisonia aculeata, Crossopetalum uragoga, Guettarda 
elliptica y Jacquinia donnellsmithii. Las hierbas y bejucos más conspicuos son Rivina 
humilis, Justicia caudata, Okenia hypogaea,Boerhavia erecta, Cissus sicyoides, Antigonon 
flavescens y Cardiospermum halicacabum. 
En la selva mediana subcaducifolia as especies dominantes alcanzan hasta 15 m de 
altura, como Homalium trichostemon y Lonchocarpus guatemalensis. Otras especies que 
las acompañan son Hippomane mancinella, Bravaisia integerrima y Andira inermis. 
La vegetación de dunas costeras e localiza en suelos evidentemente arenosos y se 
pueden distinguir básicamente dos cinturones angostos que se encuentran en una franja a 
la orilla del mar. El primero, más cercano a la línea de costa, está compuesto 
principalmente por Ipomoea pescaprae y manchones amacollados de Jouvea pilosa. El 
segundo cinturón está compuesto por hierbas anuales y algunos arbustos pequeños, entre 
los que destacan Crossopetalum uragoga, Salpianthus arenarius, Chiococca spp., 
Guettarda elliptica, Tournefortia volubilis y T. densiflora. Junto con estas especies se 
pueden encontrar algunos individuos achaparrados de especies arbóreas, como Gliricidia 
sepium, Vitex mollis, Bursera excelsa, Prosopis juliflora, que dan un aspecto peculiar a 
esta vegetación. 
Entre la fauna característica se encuentran: Dermochelys coriaceae (tortuga laud), 
Eretmochelys imbricata (tortuga carey), Lepidochelys olivaceae (tortuga golfina), 
Crocodylus acutus (cocodrilo de río), Chelonia agassizi (tortuga prieta), Eretmochelys 
imbricata bissa (tortuga carey del Pacífico), Procyon lotor (mapache), Tamandua mexicana 
(oso hormiguero), Felis pardalis (tigrillo), Felis yagouaroundi (leoncillo), Crocodylus fuscus 
(caimán), Iguana iguana (iguana verde) y Ctenosaura pectinata (iguana negra) (Tovilla et 
al., 2008). 
29 
 
8 Metodología 
8.1 Antecedentes metodológicos de la generación de la línea base y análisis 
retrospectivo del SMMM 
Para las fechas de 2005 y 1979 se utilizaron los mapas generados por CONABIO, para 
2010 se siguió la misma metodología, por lo que a continuación se presenta una 
descripción de la generación de la línea base y el análisis retrospectivo. 
El mapa de distribución de los manglares de Oaxaca (línea base 2005) se generó por la 
CONABIO mediante el análisis de 14 imágenes multiespectrales SPOT-5 mayormente del 
año 2005. Estas imágenes fueron georreferenciadas y corregidas radiométricamente, 
posteriormente se realizó una máscara de las zonas que tenían una mayor probabilidad de 
presentar cobertura de manglar (Rodríguez-Zúñiga et al., 2012). 
La máscara se hizo con el modelo Digital de Terreno (MDT) del INEGI, para eliminar las 
áreas con altitud mayor a 50 m, considerando que los manglares se distribuyen en zonas 
costeras planas, posteriormente a estas imágenes se les aplicó clasificaciones no 
supervisadas usando el algoritmo interativo “isodata” (Leyca Geosystem GIS & Mapping 
2003) (12.2Anexo 2. Algoritmo ISODATA). Estas clasificaciones generadas se revisaron 
visualmente con detalle para identificar confusiones espectrales con otros tipos de 
coberturas, con el fin de mejorar la delimitación de la clase (Rodríguez-Zúñiga et al. 2013). 
Una vez generado el mapa de manglares de 2005, se clasificaron las coberturas aledañas 
en un área de cinco kilómetros de buffer tomando en cuenta información auxiliar. Se utilizó 
un sistema de clasificación que integra 9 clases (Cuadro 2) y su identificación fue similar a 
la utilizada en el mapa de manglares (Rodríguez-Zúñiga et al., 2012). 
 
 
 
 
 
30 
 
Cuadro 2. Sistema de clasificación utilizado en el procesamiento digital de las imágenes satelitales 
(Rodríguez-Zúñiga et al., 2012). 
ID Clase Descripción 
1 Desarrollo 
antrópico1 
Incluye poblados, estanques acuícolas, granjas camaroneras, salineras y obras de 
infraestructura hidráulica. 
2 
Agricola-Pecuaria 
 
Incluye las tierras utilizadas para agricultura de temporal, riego y los pastizales 
dedicados a la actividad pecuaria. Esta categoría corresponde a coberturas 
antrópicas destinadas a la producción de alimento, así como los monocultivos 
perennes arbolados propios de cada region, diferentes agroecosistemas. 
3 
Otra vegetación 
 
Incluye la vegetación arbustiva y arbórea de selvas bajas perennifolias y 
subperennifolias inundables y selva mediana subperennifolia inundables, diferentes 
tipos de vegetación secundaria arbórea y arbustiva y la vegetación secundaria 
herbácea. 
4 Sin vegetación 
Incluye las áreas sin vegetación aparente y con erosión, las dunas costeras de arena 
y playas. 
5 
Manglar 
 
Incluye humedales conformados por la asociación vegetal de una o la combinación 
de dos o más especies de mangle: mangle blanco (Laguncularia racemosa), mangle 
rojo (Rhizophora mangle), mangle negro (Avicennia germinans) y mangle botoncillo 
(Conocarpus erectus). En esta clase se consideran las áreas de manglar con 
diferentes alturas de dosel. 
6 
Manglar 
perturbado 
 
Incluye humedales conformados por parches de árboles de manglar muerto o en 
regeneración de diversas alturas. Esta categoría se refiere a la cubierta forestal 
perturbada por huracanes, tormentas, ciclones y por la construcción de 
infraestructura hidraúlica, carreteras y caminos. 
7 Otros humedales 
Incluye la vegetación hidrofita de Popal-Tular-Carrizal*, ademas de pastizales 
inundables, vegetación hidrófita o halófila con individuos de mangle dispersos o en 
forma de pequeños islotes y los terrenos salinos costeros con poca cubierta vegetal. 
8 Cuerpos de agua Océanos, bahías, esteros, lagunas, ríos, presas, cenotes, aguadas. 
9 Otros Incluye la cobertura de nubes y la sombra derivada de las mismas 
Nota: 1Esta clase se digitaliza en pantalla con interpretación visual y con ayuda de otras fuentes (INEGI). 
 Popal. Vegetación herbácea enraizada que se desarrolla en lugares pantanosos de las planicies costeras con agua permanente. Las 
principales especies que lo conforman son: Calathea sp. Thaliageniculata, Heliconia spp., Leersia sp., Paspalum spp., Panicum spp. y 
Cyperus spp., entre otros. 
Tular. Asociación vegetal de plantas herbáceas enraizadas sobre terrenos pantanosos, en orillas de lagos y lagunas, etc. Se 
caracteriza porque sus componentes tienen hojas alargadas y angostas o carecen de ellas. Se les conoce como tules y pertenecen 
principalmente a los géneros Typha spp., Scirpus spp,. y Cyperus spp. 
Carrizal. Esta comunidad vegetal se desarrolla sobre áreas pantanosas y está compuesta de plantas enraizadas que incluyen los 
llamados "carrizales" de Phragmites communis y Arundo donax y los “saibadales” de Cladium jamaicense, principalmente. 
El mapa de distribución de los manglares y otras coberturas de Oaxaca para el año 1979 
(misma delimitación de la zona de estudio) se realizó a través del método interdependiente 
en retrospectiva (FAO, 1996) que tiene la ventaja de minimizar el efecto de utilizar 
diferentes fuentes de información básica, usando como mapas temáticos base los 
generados en 2005. 
31 
 
Para generar el mapa de 1979 se utilizaron 73 fotografías aéreas históricas principalmente 
del INEGI (3 del año 1973, 59 del año 1979 y 11 de 1980), 3 imágenes Landsat TM (una 
de 1984, otra del año 1985 y la otra de 1986). El método interdependiente en retrospectiva 
utilizado en la interpretación de las fotografías aéreas e imágenes de satélite consistió en 
sobreponer y reclasificar una copia de los mapas de uso de suelo y vegetación estatales 
de 2005 en formato raster. Posteriormente se llevó a cabo una revisión detallada de todas 
las coberturas con el fin de identificar mejor las áreas que necesitaban ser reclasificadas, 
de acuerdo con lo que se observaba en las fotografías aéreas. A partir de la revisión de la 
información base histórica e identificación de cambios, se procedió a recodificar las áreas 
correspondientes (Rodríguez-Zúñiga et al., 2013). 
8.2 Imágenes de satélite SPOT-5 
Para la realización del mapa de manglares del estado de Oaxaca y su zona de influencia, 
para fecha reciente, se utilizaron 15 imágenessatelitales multiespectrales SPOT-5 (10 
metros de resolución espacial), de las cuales 9 corresponden al año 2010 y el resto al año 
2009 (Cuadro 2). Estas imágenes fueron proporcionadas por la CONABIO, que las obtuvo 
de la Estación de Recepción México de la Constelación SPOT (ERMEXS) operada hasta 
hace poco por la SEMAR, SAGARPA-ASERCA-SIAP e INEGI. 
Estas imágenes se corrigieron radiométricamente para eliminar cualquier modificación 
resultante del paso de la radiación por la atmósfera y se rectificaron geográficamente 
tomando como base ortofotos del INEGI (Rodríguez-Zúñiga et al. 2012). 
Para la rectificación geográfica de las imágenes, se trabajó con el programa ERDAS 
manejando como mínimo 20 puntos de control, un error medio cuadrático máximo de 0.5 y 
con el sistema de proyección Universal Transversa de Mercator (UTM), utilizando el 
elipsoide y Datum WGS84 (Rodríguez-Zúñiga et al. 2012). 
 
 
 
 
32 
 
Clave de la imagen SPOT Fecha de toma de 
imagen 
E55913170912042J1A00002 04/12/2009 
E55923181001202J1A05001 20/01/2010 
E55943181002102J1A05004 10/02/2010 
E55953191004192J1A01002 19/04/2010 
E55963190912152J1A02001 15/12/2009 
E55973181001252J1A08004 25/01/2010 
E55983171003081J1A06001 08/03/2010 
E55963190912152J1A02001 15/12/2009 
E55983181001052J1A04001 05/01/2010 
E56003171004032J1A01030 03/04/2010 
E56003180911092J1A00006 09/11/2009 
E56013181001262J1A04002 26/01/2010 
E55933181012032J1A07002 03/12/2010 
E55993170902222J1A09001 22/02/2009 
E55983170903092J1A07003 09/03/2009 
Cuadro 3. Clave y fecha de las imágenes SPOT-5 utilizadas para generar la cobertura de suelo reciente. 
 
8.3 Mapa de manglares y coberturas aledañas 2010 
Para la actualización del mapa de manglares y coberturas aledañas se utilizaron las 
imágenes satelitales SPOT-5, en estas imágenes se utilizó el compuesto de falso color 3 4 
2 (RGB) en el programa ERDAS 2010 y sobre ellas se sobrepuso la capa en formato 
raster de la distribución de manglares para el año 2005. Se hicieron revisiones visuales de 
las zonas que se sometieron a cambios ya sea ganancias o pérdidas y se modificaron los 
polígonos que hubieran cambiado mediante las herramientas Region Grow AOI (hace una 
selección de una muestra específica de pixeles semejantes de acuerdo a diferentes 
niveles espectrales de acuerdo a distancias euclidianas) y Create Polygon AOI (se genera 
la digitalización de un polígono a mano alzada controlado por el usuario) (Rodríguez-
Zúñiga et al. 2012). 
Las coberturas de las imágenes se retomaron de acuerdo con la clasificación del Sistema 
de Monitoreo de Manglares de México (SMMM) de la CONABIO (Cuadro 2). 
33 
 
Una vez hecha la interpretación y actualizada la zona de manglares y áreas aledañas en 
formato raster, se transformó a vector (formato shapefile) con una escala 1:50,000 y para 
representar cartográficamente un continuo del estado fue necesario reproyectar a Cónica 
Conforme de Lambert (CCL) debido a que el estado de Oaxaca presenta dos zonas UTM. 
La validación del mapa se realizó mediante la revisión de puntos aleatoriamente 
estratificados mediante fotografías aéreas de alta resolución. 
8.4 Estimación del índice de fragmentación 
La fragmentación se evaluó para tres fechas (1979, 2005 y 2010) mediante la fórmula de 
Steenmans y Pingborg ya que ésta expresa la conectividad de áreas potencialmente 
interesantes para su conservación, sobre todo las que se encuentran más presionadas por 
las actividades humanas (urbanización, industria, agrícola, etc.) o por la presencia de 
grandes ejes terrestres (vías de comunicación) y toma en cuenta los espacios naturales 
(como manglar y otros tipos de vegetación) como sensibles a ser fragmentados y los no 
sensibles como las actividades humanas (Steenmans y Pinborg, 2000; Triviño, et al. 
2007). 
Los insumos que se requieren para estimar este índice de fragmentación son los 
siguientes: 
- Capa de uso de suelo y vegetación distinguibles entre sensibles y no sensibles: 
Obtenida a partir de los mapas generados para el área de estudio. 
- Gradilla de celdillas sensibles y no sensibles: Se generó a lo largo de toda el área 
de estudio con una medida de lado de 50 m (Triviño, et al. 2007). 
- Gradilla de celdas: Se generó a lo largo de toda el área de estudio con una medida 
de 1 km por lado (Triviño, et al. 2007). 
La estimación del índice se basa principalmente en el número de celdillas sensibles 
conectadas y el número de complejos que conforman (Figura 3). 
 
 
 
34 
 
Índice de Fragmentación: La ecuación proviene de Steenmans y Pinborg (2000) 
𝐼𝐹 = 
𝑓
(
𝑝𝑠𝑐
𝑝 ) × (
𝑝𝑠
𝑝 )
 
Donde: 
f = frecuencia 
psc = número de celdas sensibles/número de complejos 
ps = número total de celdas sensibles 
p = número de pixeles a 250 m *16 
 
Unidades: 
Ninguna 
 
 
Figura 3. Ejemplo para el cálculo del índice de fragmentación según Steenmans y Pinborg (2000) 
De acuerdo con los valores propuestos por Steenmans y Pinborg (2000) para generar el 
índice, se hizo una adaptación para el sistema de clasificación utilizado: 
Cuadro 4. Valores de las coberturas para la estimación del índice de fragmentación. 
Tipo de cobertura Valor 
1 Desarrollo antrópico P 
2 Agricola-Pecuaria P 
3 Otra vegetación S 
4 Sin vegetación S 
5 Manglar S 
6 Manglar perturbado S 
7 Otros humedales S 
8 Cuerpos de agua N 
Ejemplo en una celda de 2 x 2 km: 
No. De celdillas sensibles conectadas: 11 
Total de celdillas sensibles: 18 
Número de complejos: 8 (7 no 
conectados + 1 conectado) 
Frecuencia: 11 
mean count = 18/8 = 2.25 
 
Índice = 11 ((2.25/16)x(18/16)) = 69.53 
celdillas sensibles conectadas 
 
celdillas sensibles no conectadas 
35 
 
En donde P = Áreas y/o coberturas que generan presión de fragmentación sobre las cubiertas naturales, N = 
neutral, S = Todas aquellas áreas naturales o seminaturales que son sensibles a la presión de 
fragmentación. 
De acuerdo con Triviño, et al. (2007) el tamaño de la celdilla más apropiado para una 
rasterización se puede obtener con ayuda del teorema de muestreo, más conocido como 
Teorema de Whittaker-Nyquist-Kotelnikov-Shannon, que de manera sintética se puede 
decir que el lado de la celdilla debe ser al menos la mitad de la longitud más pequeña del 
objeto que sea necesario representar. Si trasladamos esto a los mapas de cobertura y uso 
de suelo tenemos que el área mínima cartografiable es de 1 ha (100 x 100 m en una 
ventana de un raster) y de acuerdo con el teorema la mejor manera de representar esta 
cartografía es a través de celdillas de 50 x 50 m. 
De acuerdo con el mismo autor, en cuanto al tamaño de la celda de cálculo, esta 
dependerá de la extensión y forma del espacio geográfico objeto de estudio y de la escala 
de trabajo con la que se considere, destacando que por la naturaleza del índice no puede 
ser estimado en celdas menores de 1 x 1 km sin que previamente se realicen las 
modificaciones (Triviño, et al. 2007). Para el caso del área de estudio de los manglares, 
debido a su naturaleza, las franjas del área de estudio tienen estrechos de hasta 1.8 km y 
para tener una mejor representatividad en estas zonas se optó por trabajar con celdas de 
1 x 1km que además son el límite del tamaño para calcular el índice. 
8.5 Mapa de fragmentación 
Con el objetivo de expresar de forma visual a manera de mapas el estado de la 
fragmentación del paisaje en Oaxaca para las tres fechas de estudio, se normalizaron los 
datos de acuerdo con lo propuesto por Triviño, et al. (2007) con la siguiente fórmula: 
𝐼𝐹𝑛 = ((𝐼𝐹 − 𝑚)/(𝑀 − 𝑚) 
En donde IF es el índice de fragmentación de Steenmans y Pinborg (2000), M el valor 
máximo y m el valor mínimo que adopta el índice dependiendo del tamaño de celda y de 
celdilla empleados (en este caso 400 y 60 000 respectivamente). 
Los resultados del índice de fragmentación normalizado (IFn) se interpretan teniendo en 
cuenta una escala ordinal y de intervalos

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