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UNIVERSIDAD NACIONAL AUTÓNOMA DE MÉXICO FACULTAD DE ESTUDIOS SUPERIORES ZARAGOZA CARRERA DE BIOLOGÍA Efecto de p-Cloroanfetamina (pCA) en la expresión del receptor 5-HT7 y de la enzima 17β-hidroxiesteroide deshidrogenasa y en la estructura de la gónada de la rata macho prepúber T E S I S PARA OBTENER EL T.TULO DE: B I . L O G A PRESENTA: MARIBEL FLORES FLORES DIRECTORA: DRA. MARÍA ELENA AYALA ESCOBAR Investigación realizada gracias al Programa UNAM-DGAPA- PAPIIT, IN223714. MÉXICO, CDMX. Mayo 2016 UNAM – Dirección General de Bibliotecas Tesis Digitales Restricciones de uso DERECHOS RESERVADOS © PROHIBIDA SU REPRODUCCIÓN TOTAL O PARCIAL Todo el material contenido en esta tesis esta protegido por la Ley Federal del Derecho de Autor (LFDA) de los Estados Unidos Mexicanos (México). El uso de imágenes, fragmentos de videos, y demás material que sea objeto de protección de los derechos de autor, será exclusivamente para fines educativos e informativos y deberá citar la fuente donde la obtuvo mencionando el autor o autores. Cualquier uso distinto como el lucro, reproducción, edición o modificación, será perseguido y sancionado por el respectivo titular de los Derechos de Autor. UNIVERSIDAD NACIONAL AUTÓNOMA DE MÉXICO FACULTAD DE ESTUDIOS SUPERIORES ZARAGOZA Efecto de p-Cloroanfetamina (pCA) en la expresión del receptor 5-HT7 y de la enzima 17β-hidroxiesteroide deshidrogenasa y en la estructura de la gónada de la rata macho prepúber Tesis para obtener el Título de: B I Ó L O G A PRESENTA: Maribel Flores Flores Directora de tesis: Dra. María Elena Ayala Escobar Tesis realizada en la Unidad de Investigación en Biología de la Reproducción. Laboratorio de Pubertad Investigación realizada gracias al Programa UNAM-DGAPA-PAPIIT, IN223714. Agradecimientos Principalmente agradezco a mi directora de tesis, la Dra. María Elena Ayala Escobar, por el apoyo brindado para la realización de este trabajo, también por su comprensión y paciencia desde que entre en el Laboratorio de Pubertad. Le doy gracias por sus consejos y empatía no solo en mi crecimiento académico, sino también en el ámbito personal. Así como por su entereza ante las adversidades, es un gran ejemplo a seguir. Tiene toda mi admiración y respeto. Por otra parte, agradezco al Dr. Andrés Aragón Martínez por la asesoría proporcionada en el desarrollo de las técnicas de TUNEL e inmunohistoquímica del receptor a serotonina 5-HT7 y de la enzima 17β-HSD. También se le agradece el apoyo, consejos y disposición durante la realización de esta tesis. Quiero agradecir a los miembros del Jurado: Dra. Patricia Rosas Saucedo Dra. María Elena Ayala Escobar Dra. Leticia Morales Ledesma M. en ISBH. Angélica Flores Ramirez Dra. Juana Monroy Moreno Por sus valiosas observaciones en el desarrollo de la tesis, así como sus aportaciones para mi formación académica. Muchas gracias. Al Maestro Ernesto Mendoza Vallejo por sus valiosos consejos y apoyo a lo largo de la carrera. A la candidata a doctor Jessica Romero Reyes, por sus enseñanzas en el proceso de perfusión y procesamiento del ovario. A mis compañeros de laboratorio Jessica, Adrián, Juan y Ángel por hacer amena la convivencia y el trabajo en equipo. Principalmente agradezco a la Bióloga Ana Laura Rodríguez por todos esos momentos de alegría y sus consejos durante la realización del presente trabajo. Al personal del Bioterio por las facilidades prestadas durante el desarrollo de este trabajo. A la UNAM por permitirme desarrollarme en un ambiente con profesores de calidad y conocer compañeros que me apoyaron durante mi formación académica. Dedicatorias Quiero dedicar esta tesis a las personas que me han apoyado a lo largo del camino. Principalmente a mis padres Maribel y Roberto por estar a mi lado siempre, por apoyarme en los buenos y malos momentos. Nunca dejaron de confiar en mí a pesar de las adversidades. Agradezco todos sus consejos y que me brindasen lo mejor para que cumpliera mis metas. Muchas gracias, sobre todo por su cariño y comprensión. Siempre serán mi ejemplo a seguir. Los quiero. A mis hermanos Angélica y Rodrigo, son mis compañeros de locuras, siempre me hacen reir. Gracias por compartir tantos momentos y hacer más amena esta vida. A mis amigos de la prepa, principalmente Erika, Carolina y Denise por todos esos momentos de diversión y locura que realizamos juntas y seguimos compartiendo. Y a aquellos que les guste el POP. Edson te agradezco que camines conmigo en esta vida, las vivencias buenas y malas. Gracias por el apoyo que me has brindado tanto académicamente como en el ámbito personal. Te quiero. A mi chancla la Bióloga Anette Marquéz Zúñiga, ¿que haría yo sin ti? Gracias por todo el tiempo y risas que hemos compartido juntas. A las personas que aunque no mencione me han brindado su apoyo en alguna etapa de mi vida. Gracias. “GUAU. Don´t worry, be suave”. (Perrito supergordito) ÍNDICE RESUMEN.………………………………………………………………………………….…i INTRODUCCIÓN……………………………………………………………………………..1 Serotonina…………………………………………………………………………….…1 Receptor 5-HT7………...………………………………………………………………..6 Anfetaminas…………….…………………………………………………………….…9 Aparato reproductor del macho……………………………………………………15 Esteroidogénesis……………………………………………………………………..20 Espermatogénesis……………………………………………………………………23 Regulación de las funciones del testículo……………………………………….27 Apoptosis……………………………………………………………………………....30 Serotonina, anfetaminas y funciones del testículo……………………….…….35 JUSTIFICACIÓN.……………………………………………………………………...……39 HIPÓTESIS…………………………………………………………………………………..40 OBJETIVOS.………………………………………………………………………………...40 MATERIALES Y MÉTODOS………………………………………………………………41 Procedimiento de perfusión………………………..…………………….…………41 Deshidratación, Inclusión y cortes histológicos……………………..…………42 Evaluación de Apoptosis por la Técnica de TUNEL……………………………43 Identificación y Análisis de la Enzima 17β-HSD y del Receptor 5-HT7……...44 Análisis Estadístico de los Resultados…………………………………………...45 RESULTADOS………………………………………………………………………………46 Análisis morfométrico del túbulo seminífero……………………………………46 Apoptosis en el testículo……………………………………………………………50 Estructura del testículo y ciclo del epitelio seminífero………………………..54 Identificación del receptor 5-HT7………………………………………………..…64 Identificación de la enzima 17β-hidroxiesteroide deshidrogenasa…….……77 DISCUSIÓN…………………….……………………………………………………………87 CONCLUSIONES……………..……………………………………………………...….…94 BIBLIOGRAFÍA……………….…………………………………………………………….95 i RESUMEN La serotonina en el sistema nervioso central y en órganos periféricos regula diversas funciones vía su unión a sus receptores. En el testículo, participa en la modulación de la espermatogénesis y la esteroidogénesis. Sin embargo, es poco claro mediante que receptor actúa la serotonina en la gónada. Cuando en la rata macho de 30 días se administra p-Cloroanfetamina (pCA), inhibidor de la síntesis de serotonina, disminuye la producción de testosterona, la cual se sintetiza en las células de Leydig por acción de diversas enzimas, como la 17β-hidroxiesteroide deshidrogenasa (17β- HSD). Por ello, en el presente estudio se analizaron los efectos de la administración de pCA, en la expresión del receptor 5-HT7, de la enzima 17β-HSD y en la estructura del testículo en la rata macho prepúber. Para ello, se utilizaron ratas macho de 30 días de edad, a las cuales se les administró una dosis de 10 mg/Kg de peso corporal de pCA por vía sistémica. Otro grupo de animales recibió́ una dosis de solución salina al 0.9% (Vh) y como grupode comparación se utilizaron animales sin tratamiento (TA). La autopsia de los diferentes grupos experimentales se realizó́ a los 35 o 40 días de edad. En comparación con los animales TA o Vh, en los animales tratados con pCA y autopsiados a los 35 o 45 días de edad, presentaron disminución del área del túbulo seminífero, del epitelio y del lumen de los túbulos. Así como el aumento de formas irregulares en los túbulos seminíferos y en el lumen por lo que la circularidad de estos disminuyó. El número de túbulos seminíferos con células positivas a TUNEL, en apoptosis, se incrementó́ en los animales tratados con pCA, además se observó́ el incremento en el número de células en apoptosis en los túbulos de estos animales, efecto que se acompañó de pérdida de células germinales y desorganización del epitelio seminífero. El receptor a serotonina 5-HT7 se identificó́ en las espermatogonias, espermatocitos y en espermátides elongadas, lo que dependió de la edad y de la etapa del ciclo del ii epitelio seminífero en el que se encontraran los túbulos seminíferos. En las células de Leydig y en los vasos sanguíneos, también se expresa el receptor. En los animales autopsiados a los 35 o 40 días de edad, se identificó́ la enzima 17β- HSD en las células de Leydig, sin embargo, no en todas las células se expresó la enzima, por lo que se identificaron dos poblaciones de células de Leydig. Asimismo, se observó inmunorreactividad para esta enzima en células germinales, principalmente espermatogonias y espermatocitos. La expresión de la enzima fue similar en los animales TA o tratados con Vh o pCA. Con base en los resultados obtenidos en el presente estudio se sugiere que la serotonina vía la unión al receptor 5-HT7 participa en la modulación de la esteroidogénesis. Proceso que posiblemente no se lleva a cabo por todas las células de Leydig. Aunado a esto, el inhibidor del sistema serotoninérgico induce la apoptosis en las células germinales y altera la estructura del testículo, por lo que sistema serotoninérgico del testículo es esencial en el mantenimiento de la estructura de la gónada del macho. 1 INTRODUCCIÓN Serotonina La serotonina o 5-hidroxitriptamina (5-HT), fue descubierta en la sangre y se le describió como una sustancia vasoconstrictora, lo que llevo a pensar que se localizaba en las plaquetas (Keppel, 1992). En 1930, Vally y Erspamer (poner referencia directa) mostraron la existencia de una sustancia en las células enterocromafines de la mucosa digestiva que denominaron enteramina, que estimulaba la contracción de la musculatura lisa del sistema gastrointestinal. Posteriormente en 1948, Rapport y colaboradores aislaron del suero sanguíneo una sustancia vasoconstrictora a la que llamaron serotonina, que la caracterizaron como 5-hidroxitriptamina y unos años más tarde se identificó como la misma molécula que la enteramina. A partir de estos eventos se iniciaron los estudios sobre las propiedades y funciones de la serotonina (Keppel, 1992; Iceta, 2008; Mohammad- Zadeh y col., 2008). En la actualidad a la serotonina se le identifica como una monoamina biogénica que actúa como neurotransmisor y como neuromodulador. Su estructura química (Figura 1) es similar en parte a la adrenalina, noradrenalina, dopamina e histamina, las cuales tienen como base un grupo amino básico separado de un núcleo aromático por una cadena alifática de dos carbonos. Tiene un peso molecular de 176 daltones y se distribuye en todo el organismo (Aghajanian y Sanders-Bush, 2002; Nichols y Nichols, 2008). Figura 1. Estructura química de la serotonina (Glennon y Dukat, 2012). 2 El 95% de la serotonina que se produce en el organismo proviene de las células enterocromafines del sistema gastrointestinal, y el resto se produce en las neuronas serotoninérgicas del sistema nervioso central (SNC) y en la glándula pineal. También está presente en las paredes de los vasos sanguíneos, plaquetas, pulmones, el corazón, y en las gónadas de la hembra y del macho (Jacobs y Azmitia, 1992; Aghajanian y Sanders-Bush, 2002; Jorgensen, 2007; Iceta, 2008; Mohammad-Zadeh y col., 2008; Nichols y Nichols, 2008; Sánchez-López y col., 2009). No todas las células que contienen serotonina la sintetizan, algunas como las plaquetas tienen la capacidad de acumularla y la obtienen del plasma por un mecanismo de transporte activo que se encuentra en la membrana plaquetaria (Delgado y col., 2003; De Ahumada y col., 2002; Contreras y Mancillas, 2005). En el SNC, la serotonina se sintetiza en el soma de las neuronas serotoninérgicas a partir del aminoácido esencial triptófano que se obtiene de la dieta, el cual se transporta activamente al cerebro, a través de la barrera hematoencefálica y es incorporado por las neuronas serotoninérgicas. El triptófano se une a un transportador de aminoácidos (LAT1), lo que le permite difundir por la barrera. Otros aminoácidos, como la fenilalanina, leucina y la metionina tienen afinidad por este transportador (Jorgensen, 2007; Mohammad-Zadeh y col., 2008; Pytliak y col., 2011). La síntesis de 5-HT (Figura 2) se inicia con la hidroxilación del triptófano por acción de la enzima triptófano hidroxilasa (TPH), que junto con el factor tetrahidro-biopterina y oxígeno molecular, forman el 5-hidroxitriptófano (5-HTP), este es descarboxilado por una descarboxilasa de L-aminoácidos aromáticos, que requiere piridoxal fosfato para formar serotonina que se almacena en vesículas sinápticas (González y Alvarez, 1984; Iceta, 2008; Mohammad-Zadeh y col., 2008; Azmitia, 2010; Lüllmann y col., 2010; Glennon y Dukat, 2012). 3 La triptófano hidroxilasa se considera la enzima limitante en la síntesis de serotonina por tres razones: 1) No tiene afinidad por otros aminoácidos; 2) Tiene una Km (constante de Michaelis-Menten) relativamente alta (3x10-5 M) y 3) Su distribución se limita a los tejidos que contienen serotonina (González y Alvarez, 1984; Iceta, 2008; Mohammad-Zadeh y col., 2008; Azmitia, 2010; Lüllmann y col., 2010; Glennon y Dukat, 2012). La triptófano hidroxilasa pertenece a la familia de hidroxilasas de aminoácidos aromáticos. Se han identificado dos isoformas de la TPH (Walther y col., 2003). La TPH1 se expresa en tejidos periféricos y la isoforma TPH2 se encuentra exclusivamente en el cerebro (Nichols y Nichols, 2008). La despolarización de las terminales de los axones serotoninérgicos induce la entrada de iones de Ca2+ y la fusión de las vesículas que contienen serotonina con la membrana celular. La serotonina al liberarse y difundir en al espacio sináptico, se une a sus receptores situados en la membrana postsináptica. Autorreceptores presinápticos también responden a la presencia de serotonina y regular la síntesis y liberación en la neurona presinática. La serotonina libre se une a la proteína transportadora de serotonina (SERT) y la incorpora a la célula donde es inactivada. Una vez dentro, la serotonina es nuevamente almacenada en vesículas para ser reutilizada o es metabolizada (González y Álvarez, 1984; Iceta, 2008; Nichols y Nichols, 2008; Azmitia, 2010; Lüllmann y col., 2010; Glennon y Dukat, 2012). La principal vía de metabolismo de la 5-HT se lleva a cabo por acción de la monoamino oxidasa A (MAO-A), localizada en la membrana externa de la mitocondria, la serotonina por desaminación oxidativa forma el 5- hidroxiindolacetaldehído, el que es oxidado por la enzima aldehído deshidrogenasa y se origina el ácido 5-hidroxiindolacético (5-HIAA) como producto final del metabolismo de la serotonina. En la glándula pineal la serotonina se acetila por la 5- HT N-acetiltransferasa a N-acetilserotonina, que es metilada por la acción de la 5- 4 hidroxiindol-O-metiltransferasa para formar melatonina (González y Alvarez, 1984; Iceta, 2008; Nichols y Nichols, 2008;Azmitia, 2010; Lüllmann y col., 2010; Glennon y Dukat, 2012). 5-Hidroxiindolacetaldehído Triptófano Triptófano hidroxilasa O2 H2O H4-Biopterina H2-Biopterina 5-Hidroxitriptófano L-aminoácido descarboxilasa Piridoxal fosfato 5-Hidroxitriptamina (5-HT) Serotonina Ácido 5-Hidroxiindolacético MAO Aldehído deshidrogenasa 1 2 3 45 Ca2+ 1 2 5 3 4 SERT R 5-HT AR 5-HT Figura 2. Biosíntesis y metabolismo de la serotonina. Calcio (Ca2+); Monoamino oxidasa (MAO); Transportador de serotonina (SERT); Autorreceptor (AR); Receptor (R) (Modificado de Glennon y Dukat, 2012). En el SNC, los somas de las neuronas que sintetizan 5-HT se encuentran en el tronco encefálico o cerca de la línea media y se dividen en 9 paquetes celulares designados en dirección caudal a rostral como B1 a B9 y que son divididos en dos grupos superior e inferior de acuerdo a su localización. Los 9 paquetes celulares forman los núcleos del Rafé, que a su vez se divide en dorsal (NDR) y medial (NMR) y del puente (NPR) (Hornung, 2010). 5 Los núcleos del rafe de mayor tamaño sonel NDR, el cual tiene el mayor número de neuronas serotoninérgicas, con aproximadamente un tercio de todas las neuronas serotoninérgicas del cerebro, y el NMR (Artigas, 1997; Mamounas y Molliver, 1988; Hornung, 2010). Las neuronas del NMR inervan el hipocampo, el hipotálamo y la eminencia media, mientras que el NDR tiene proyecciones al hipotálamo, caudado, putamen y eminencia media. Las terminales de las neuronas que se originan en el NDR y NMR convergen en las mismas áreas de la corteza cerebral (Mamounas y Molliver, 1988; Jorgensen, 2007). Con base en propiedades morfológicas y electrofisiológicas, se considera que la inervación serotoninérgica que se origina de los núcleos NDR y NMR constituye dos sistemas serotoninérgicos. Los axones que se originan en el NDR son finos, de calibre menor, con pequeñas varicosidades (típicamente menos de 1 µm de diámetro) con forma pleomórfica (generalmente fusiforme o granular). Mientras que los que provienen del NMR son gruesos, con menor número de varicosidades con 2- 5 µm de diámetro con forma esférica (Mamounas y Molliver, 1988; Jacobs y Azmitia, 1992). Aunado a las diferencias anatómicas, las fibras serotoninérgicas que se originan de ambos núcleos presentan una sensibilidad diferencial a los neurotóxicos selectivos del sistema serotoninérgico como el 3,4-metilendioximetanfetamina (MDMA), el cual induce la degeneración de los axones serotoninérgicos que se originan en el NDR, mientras que los que se originan en el NMR, son más resistentes a los efectos del MDMA (Hornung, 2010). Los efectos de la serotonina son mediados al unirse a sus receptores. Se han identificado siete poblaciones de receptores que se designan como 5-HT1 a 5-HT7 y existen 14 subtipos (Tabla 1). Los receptores a serotonina se encuentran acoplados a proteínas G heterotrimétricas (GPCR) con siete dominios transmembranales, 6 excepto el 5-HT3, que se encuentra acoplado a un canal iónico regulado por ligando (Lüllmann y col., 2010; Vera 2005; Jorgensen, 2007). Los receptores a serotonina se localizan principalmente en las neuronas postsinápticas, excepto los receptores 5-HT1A y 5-HT1B que se encuentran en la terminal presináptica. Los receptores 5-HT1 y 5-HT5 están acoplados a proteínas G inhibitorias, por lo que su activaciónregula negativamente la producción del adenosin monofosfato cíclico (AMPc). El receptor 5-HT2 activa la fosfolipasa C, que regula positivamente la ruta del inositol trifosfato y del diacilglicerol, lo que resulta en la liberación de Ca2+ intracelular. El receptor 5-HT4 y 5-HT7 aumentan la actividad del AMPc. El canal de cationes Na+/K+ asociado al receptor 5-HT3 resulta en la despolarización de la membrana plasmática (Lüllmann y col., 2010; Vera 2005; Jorgensen, 2007; Mohammad-Zadeh y col., 2008; Sánchez-López y col., 2009). Receptor 5-HT7 El receptor 5-HT7, esta conformado por 445 aminoácidos. Este receptor también activa las MAP cinasas (proteínas cinasa activadas por mitógenos), enzimas que participan en la transducción de señales. Se han descrito cuatro (Heidmann, 1997) isoformas del receptor (5-HT7A-D) que difieren en su extremo C-terminal, aunque todos presentan las mismas propiedades farmacológicas (Meneses, 2014; Pytliak, 2011). 7 Tabla 1. Receptores a serotonina, vía de señalización, localización y función (Jorgensen, 2007; Mohammad- Zadeh y col., 2008). Receptores Tipo de receptor Segundo mensajero Localización Función 5-HT1A Proteína Gi Inhibe la adenilato ciclasa NDR Sistema límbico Estado de ánimo, ansiedad, regulación de la temperatura, alimentación, motricidad 5-HT1B Proteína Gi Inhibe la adenilato ciclasa Sustancia nigra Ganglio basal Corteza frontal Modulación de neurotransmisores, inhibición presináptica, vasoconstricción pulmonar 5-HT2A Proteína Gq Estimula la fosfolipasa C Corteza Hipocampo Núcleo caudado Sueño, función motora, comportamiento, excitación neuronal, agregación plaquetaria 5-HT2B Proteína Gq Estimula la fosfolipasa C Estómago Contracción del estómago 5-HT2C Proteína Gq Estimula la fosfolipasa C Hipotálamo Ganglio basal Sistema límbico Erección peniana Regulación de fluido cerebro- espinal 5-HT3 Canal iónico Canal iónico unido a ligando Escasamente distribuido Protuberancia Tronco cerebral Nervios sensoriales y entéricos Sistema cardiovascular Reflejo del vómito Motilidad gastrointestinal 5-HT4 Proteína Gs Estimula la adenilato ciclasa Ampliamente distribuido en corteza e hipotálamo Memoria, liberación de neurotransmisores, motilidad gastrointestinal 5-HT5A Proteína Gi/o Inhibe la adenilato ciclasa Corteza Hipotálamo Hipocampo Sueño, función motora, comportamiento sexual 5-HT5B NDR Hipocampo CA1 Bulbo olfatorio Desconocida 5-HT6 Proteína Gs Estimula la adenilato ciclasa Estriado Hipocampo Corteza Control colinérgico ¿Alimentación? 5-HT7 Proteína Gs Estimula la adenilato ciclasa Sistema límbico Núcleo supraquiasmático NDR Estado de ánimo, ansiedad, regulación de la temperatura, patrones de sueño 8 En el cerebro del humano, la rata y el cobayo, el receptor 5-HT7 se le encuentra en el tálamo anterior y el hipocampo. En menor proporción se identifica en el septum; núcleo supraquiasmático, en las regiones CA1 y CA2 del hipocampo, el cingulado anterior; algunos núcleos de la amígdala y del tronco cerebral, en los ganglios basales y células de Purkinje en el cerebelo (Hagan y col., 2000; Mengod y col., 2010). Además se ha identificado en los vasos sanguíneos periféricos, donde produce la relajación del músculo liso, y en el músculo liso circular del colon humano, aunque no se han descrito efectos sobre la relajación del músculo en este último tejido; también se expresa en los músculos lisos extravasculares (en el tracto gastrointestinal) (Nichols y Nichols, 2008; Pytliak, 2011). En el humano, el receptor se ha identificado en el corazón, en intestino delgado, colón y en el ovario (Ullmer, 1995; Graveleau y col., 2000; Irving y col., 2007; Cuesta y col., 2014). La serotonina al unirse a su receptor 5-HT7, participa en la modulación del sueño, termorregulación, en el estado de ánimo general del individuo, ansiedad, memoria, cognición, epilepsia, dolor y migraña. En la periferia, la serotonina produce tanto contracción y relajación de las arterias coronarias (Graveleau y col., 2000; Aghajanian y Sanders-Bush, 2002; Nichols y Nichols, 2008; Glennon y Dukat, 2012). Cuando la amina se une a sus diferentes subtipos de receptores, interviene en el control de la producción de hormonas por la hipófisis (Artigas, 1997; Lüllmann y col., 2010; Sánchez-López y col., 2009; Zhang y col., 2013), mientrasque en tejidos periféricos funciona como neurohormona regulando la vasoconstricción. En el testículo, participa en la regulación de sus funciones, la espermatogénesis y esteroidogénesis (Aragón y col., 2005; Jiménez-Trejo y col., 2012; Tinajero y col., 1993). La serotonina participa en la modulación de las funciones antes mencionadas, vía su unión a diferentes receptores y la actividad de este sistema de neurotrasmisión es 9 modificada por diferentes sustancias como las anfetaminas y sus derivados, las cuales son de prescripción médica para atender trastornos de la conducta en niños y adolescentes. También se consumen como drogas recreacionales (De Souza y Battaglia, 1989, Barenys y col. 2009; European Monitoring Centre for Drugs and Drug Addiction, EMCDDA, 2011; Hollander, 2015). Anfetaminas Las anfetaminas se sintetizaron por primera vez por el químico rumano Lazar Edeleano en 1887. En 1927, Gordon Alles la resintetizó al introducir un grupo metilo en la cadena lateral de la β-feniletilamina dando lugar a la Dl-β fenilisopropilamina o metilfeniletilamina (Figura 3), que incrementa la presión arterial, descongestiona el sistema respiratorio y la fiebre alta. También fue la primera descripción que se realizaba de los efectos estimulantes de la sustancia (Alles, 1932, 1933; Sulzer y col. 2005; Asser y Taba, 2015). NH2 NH2 CH3 Feniletilamina β-fenilisopropilamina Figura 3. Estructura molecular de la feniletilamina y la β-fenilisopropilamina, donde se observa las similitudes entre ambas (Modificado de William, 2009). En 1932, la compañía farmacéutica Laboratorios Smith, Kline y French (SKF) comercializó la fórmula de Alles bajo la marca Benzedrina, en la presentación de un inhalante de venta libre para los enfermos de asma. Después se introdujo en forma de tabletas y en 1936 se convirtió rápidamente en una de las drogas más populares y conocidas de todos los tiempos. Como resultado del descubrimiento, otros isómeros de las anfetaminas fueron aislados rápidamente. El más importante fue la forma 10 dextrógira o dextroisómero, que era más potente que la variante levógira. Varios años después de la venta de la Benzedrina, en 1937 la dextroanfetamina (o d-β fenil isopropilamina) se comercializó por primera vez por SKF como Dexedrina (William, 2009; Levinthal, 2013; Hollander, 2015). Existen variantes de la forma básica (Figura 4), una de estas es la metanfetamina que se foram por la adición de un grupo metilo al nitrógeno en la cadena lateral. Farmacológicamente el dextroisómero es más potente. Una alteración en el anillo de benceno forma otra variante, el 3,4-metilenodioximetanfetamina (MDMA) o éxtasis (William, 2009). Durante la segunda guerra mundial se le dio una aplicación adicional a las anfetaminas, mantener a los soldados despiertos, alertas y con la vitalidad para soportar largas horas de batalla. Un ejemplo de ello, son los pilotos kamikazes, quienes se encontraban bajo los efectos de las anfetaminas durante sus misiones suicidas (EMCDDA, 2011; Levinthal, 2013; Hollander, 2015). Hasta 1946, la industria farmacéutica promovió más de 30 usos para las anfetaminas, incluyendo el tratamiento de la esquizofrenia, adicción a los opiáceos, parálisis cerebral infantil, el mareo, la enfermedad por radiación y el hipo persistente. Sin embargo, entre los años 50´s cuando se registraron los efectos secundarios negativos y la adicción, se impusieron restricciones a la prescripción y venta de tales sustancias. Durante la década de 1960, las anfetaminas se compraban con recetas falsificadas. Posteriormente en 1971 las anfetaminas fueron clasificadas como drogas en la Lista II durante la Convención de las Naciones Unidas de Sustancias Psicotrópicas (Sulzer y col., 2005: EMCDDA, 2011; Levinthal, 2013; Asser y Taba, 2015). 11 β-fenilisopropilamina Metanfetamina Metilfenidato MDMA Tiramina Mescalina Efedrina Pseudoefedrina Catinona Norpseudoefedrina β-fenetilamina β -feniletanolamina TMA Fenfluramina Deprenil Prenilamina pCA Tranilciclopromina Amiflamina PMA 4-Hidroxi anfetamina 4-metiltioanfetamina Feniprazina Figura 4. Estructura química de las anfetaminas y sus derivados (Modificado de Sulzer y col., 2005). Hoy en día, las anfetaminas siguen siendo fármacos ampliamente utilizados, son uno de los tratamientos primarios para el trastorno por déficit de atención con hiperactividad (ADHD, por sus siglas en inglés), enfermedad que afecta hasta un 5% de la población adulta, con una incidencia mayor en los niños. Además, las anfetaminas se prescriben comúnmente fuera de las indicaciones para el control del peso o la narcolepsia. Es importante destacar que, aparte de sus usos médicos, las anfetaminas son también ampliamente utilizadas de forma recreativa. De acuerdo con la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC), las 12 anfetaminas son la segunda droga ilícita más consumida en el mundo (Sulzer y col., 2005; Hollander, 2015). Las anfetaminas actúan en el SNC y modifican la actividad de algunos sistemas de neurotransmisión, como el noradrenérgico, dopaminérgico y serotoninérgico (Hollander, 2015). Cualquiera que sea la vía de administración, las anfetaminas se distribuyen en todo el organismo, ya que atraviesan la barrera hematoencefálica y en el cerebro, a corto plazo facilitan la liberación de neurotransmisores al invertir el flujo del transportador encargado de la recaptura de neurotransmisores como la SERT, el transportador de noradrenalina (NET) y dopamina (DAT). Además, facilitan la salida del neurotransmisor de las vesículas sinápticas al citoplasma al actuar sobre el transportador vesicular de monoaminas tipo 2 (VMAT2). Posteriormente estas sustancias inhiben la recaptura del neurotransmisor y tienen actividad inhibidora de la monoamino oxidasa. Además, la exposición a las anfetaminas? induce la producción de especies reactivas de oxígeno y nitrógeno amplificando aún más sus propiedades tóxicas (Utrilla, 2000; Farré y col., 2006; Fernández-Espejo, 2006; United Nations, 2006; Robledo, 2008; Asser y Taba, 2015; Hollander, 2015). Las anfetaminas aumentan las concentraciones extracelulares de serotonina, evitan que ésta pueda entrar en la terminal, invierten el mecanismo de recaptura de la amina, la liberan de sus depósitos intracelulares y activan los receptores 5-HT1 (Utrilla, 2000). Uno de los derivados de las anfetaminas de mayor consumo, es la MDMA. En la actualidad es una de las drogas ilícitas más consumida entre los adultos jóvenes y no han aparecido otros derivados de las anfetaminas con la popularidad de la MDMA (Nichols y Oberlender, 1989; Asser y Taba, 2015; Hollander, 2015). Los efectos producidos por la administración de MDMA se deben a que atraviesa la barrera hematoencefálica y como consecuencia modifica la actividad de algunos 13 sistemas de neurotrasmisión, como el serotoninérgico (Schmidt, 1989; Lorenzo y Lizasoain, 2003; Farré y col., 2006; Barenys y col. 2010). Un derivado de las anfetaminas que comparte propiedades en su estructura, mecanismo de acción y efectos neurotóxicos con el MDMA es la p-Cloroanfetamina (pCA), neurotóxico del sistema serotoninérgico que actúa sobre diferentes marcadores de este sistema (Sprague y col., 1996). Ambos fármacos a largo plazo inhiben selectivamente al sistema serotoninérgico (Figura 5). Steranka y Sanders-Bush (1978) demostraron que el efecto neurotóxico de la p-Cloroanfetamina implica la liberación inicial de la serotonina de las terminales nerviosas presinápticas, lo que resulta en la disminución prolongada en el contenido de serotonina. A largo plazo inhibe la actividad de la enzima triptófano hidroxilasa, limitante en la síntesis de serotonina, lo que se acompaña de la disminución en la concentración de 5-HT; bloqueala recaptura de 5-HT e inhibe a la monoamina oxidasa y la concentración del metabolito el 5-HIAA; asimismo induce la degeneración de las terminales serotoninérgicas que inervan diferentes regiones del cerebro, mientras que los cuerpos celulares de las neuronas en los núcleos del rafe no son dañados (Sekerke et al., 1973; Fuller y col. 1975; Mamounas y Molliver, 1988; Huang, 1992; Kehne y col., 1992; Rudnick y Wall, 1992; Wichems y col. 1995; Murray y col., 1996; Sprague y col., 1996; García-Osta, 2000). Sanders-Bush y colaboradores (1972, 1973) observaron que la administración de una dosis de 10 mg/Kg de pCA por vía intraperitoneal, disminuye la actividad de la triptófano hidroxilasa y la concentración de serotonina en el cerebro, efectos que se observan a partir de los dos días posteriores al tratamiento y sus efectos se mantienen hasta por ocho días. Evento que se acompaña de una disminución de la concentración del 5-HIIA. La pCA utiliza el transportador de 5-HT para entrar en las neuronas serotoninérgicas (Ashby y col., 2013), e induce la formación de metabolitos como la 5,6- 14 dihidroxitriptamina, los que son neurotóxicos para las neuronas serotoninérgicas y entre sus efectos se encuentra la formación de radicales libres que dañan las neuronas (García-Osta y col., 2000). Actualmente se han analizado los efectos de las anfetaminas o sus derivados como el MDMA y la pCA en los sistemas de neurotransmisión, como el serotoninérgico, sin embargo, no se ha abordado el análisis de los efectos de estas sustancias a nivel reproductivo, particularmente en la fisiología del testículo. Ca2+ 1 2 5 3 4 SERT R 5-HT AR 5-HT TPH AAD pCA Neurona presináptica Neurona postsináptica Figura 5. Esquema del mecanismo de acción de la p-Cloroanfetamina sobre el sistema serotoninérgico. Símbolo: efecto estimulante (+); inhibición o bloqueo (-). Autorreceptor (AR); Receptor (R); Serotonina (5-HT); Triptófano hidroxilasa (TPH); Aminoácido descarboxilasa (AAD); Monoamino oxidasa A (MAO-A); Transportador de serotonina (SERT); p-cloroanfetamina (pCA) (Steranka y Sanders-Bush, 1978; Ashby y col., 2013). Ca2+ 1 2 5 3 4 SERT R 5-HT AR 5-HT TPH AAD pCA Neurona presináptica Neurona postsináptica 5-HT 15 Aparato Reproductor del Macho El aparato reproductor del macho se compone de dos testículos, dos conductos deferentes y dos vesículas seminales, próstata, glándulas de Cowper o bulbouretrales, la uretra y el pene (Gutiérrez, 2004). Los testículos son órganos pares de forma ovoide que se localizan dentro del escroto fuera de la cavidad abdominal, cumplen dos funciones, la síntesis de hormonas esteroides y la producción de espermatozoides. Estas funciones son reguladas por las gonadotropinas (hormona estimulante del folículo FSH y la hormona luteinizante LH), la testosterona y diversos factores sintetizados localmente como factores de crecimiento y la serotonina (Fernández, 2012). El testículo es irrigado por la arteria testicular que se origina a partir de la aorta abdominal. La arteria testicular viaja junto a la vena testicular y conjuntamente forman el plexo pampiniforme, cuya función es disminuir la temperatura de la sangre arterial que fluye hacía el testículo. Tal arteria también irriga al epidídimo, mediante ramas epididimarias así como a la parte inicial del conducto deferente mediante las ramas del conducto deferente (König y Liebich, 2005). El testículo es inervado por los nervios espermáticos superior e inferior. El nervio superior deriva principalmente del ganglio mesentérico caudal con la contribución del plexo celíaco y aórtico, y directamente de los nervios esplácnicos lumbares. El nervio espermático superior, forma un plexo alrededor de la arteria testicular, pero en seres humanos y algunas otras especies es un nervio independiente. Las fibras del nervio espermático superior entran en el testículo con los vasos sanguíneos. El nervio espermático inferior deriva del plexo pélvico y contienen fibras tanto simpáticas como parasimpáticas. Se extiende a lo largo del conducto deferente a la cola del epidídimo, desde donde los nervios alcanzan el testículo vía la conexión de ligamentos entre la cola del epidídimo y la extremidad caudal del testículo (König y Liebich, 2005; Setchel y Breed, 2006). 16 Los testículos (Figura 6) están recubiertos por una cápsula fibrosa, denominada túnica albugínea, es una capa exterior de peritoneo visceral formada por células mesoteliales, y dentro de ésta hay una capa de fibroblastos y fibras de colágeno. En el humano, de la túnica parten septos o tabiques hacia el interior del órgano que dividen al testículo en lobulillos, donde se localizan los túbulos seminíferos (Caravaca y col., 2003). En los roedores no se observa tal tabicación interna (Setchel y Breed, 2006). En el tejido testicular se encuentran fibroblastos, macrófagos, células cebadas y células mesenquimales perivasculares (Caravaca y col., 2003; Setchel y Breed, 2006; Fernández, 2012). Túnica vaginal Conducto deferente Cabeza del epidídimo Conductos eferentes Mediastino del testículo Cuerpo del epidídimo Cola del epidídimo Túbulo seminífero recto Túbulo seminífero contorneado Septos Cavidad vaginal Hoja visceral Cápsula (Túnica albugínea) Hoja parietal Red de Testis Lóbulos Figura 6. Esquema de la estructura del testículo, en el que se observa la comunicación de los túbulos seminíferos con la red de testis (Modificado de Koeppen y Stanton, 2008). Los túbulos seminíferos están rodeados por una capa de células de tejido conjuntivo laxo denominado tejido intersticial, el cual tiene vasos sanguíneos y linfáticos, macrófagos, células de Leydig y fibras nerviosas. Las células de Leydig son 17 secretoras de testosterona, se localizan aisladas o formando pequeños grupos en el tejido intersticial, son ovoides, e irregulares, con núcleo denso esférico y citoplasma finamente granular (Caravaca y col., 2003; König y Liebich, 2005; Fernández, 2012). Los túbulos seminíferos se unen a los conductos eferentes que convergen a la red testicular (rete testis) que se encuentra en el mediastino del testículo. De la red testicular surgen entre 8 y 12 conductos excretores que perforan la túnica albugínea e ingresan en el epidídimo, que tiene tres porciones: La cabeza, donde los conductos eferentes se unen al epidídimo; el cuerpo o porción central; la cola o porción inferior que desemboca en el conducto deferente, de mayor diámetro que los anteriores y más recto (Setchel y Breed, 2006; Tresguerres, 2005). Los túbulos seminíferos están delimitados por tejido peritubular que comprende la membrana basal (una en ratas o varias capas en seres humanos) constituida por células mioepiteliales o miofibroblastos, intercalados con capas de fibras de colágeno y de glicosaminoglicanos así como proteoglicanos. En roedores, hay una capa externa de células endoteliales linfáticas. La membrana basal consiste generalmente en un material finamente filamentoso más interno y una red externa de fibras reticulares. Las contracciones de las células mioides peritubulares son responsables de mover el fluido luminal y los espermatozoides de los túbulos seminíferos a la red de testis y los conductos eferentes hacia el epidídimo (Setchel y Breed, 2006). El epitelio seminífero (Figura 7), región interna del túbulo seminífero, lo componen dos poblaciones de células: las germinales y las de Sertoli, también conocidas como células de sostén (Sinnatamby, 2003). La región externa del epitelio consta de espermatogonias o células precursoras inmaduras. Son células esféricas situadas junto a la membrana basal que rodea a los túbulos seminíferos que se dividen para producir los espermatocitos primarios, los cuales se localizan en una segunda capa y son células germinales en maduracióncon citoplasma más voluminoso. Estos se dividen y forman espermatocitos 18 secundarios, los cuales son más pequeños que los espermatocitos primarios, se dividen casi de inmediato y formar espermátides redondas localizadas en las porciones apicales de la célula de Sertoli, que se transforman a espermatozoides. La secuencia de conduce a la transformación de la espermátide en espermatozoide, que se conoce como espermatogénesis (Sinnatamby, 2003; Fernández, 2012). Testículo Túbulo seminífero Células de Leydig Células de Sertoli Espermatozoides Espermatogonia Espermatocito primario Espermatocito secundario Tejido intersticial Epitelio seminífero Figura 7. Esquema de un corte transversal de un túbulo seminífero y sus componentes (Modificado de Raven y col., 2005; Koeppen y Stanton, 2008). Entre las células germinales en desarrollo se encuentran la células de Sertoli que ayudan al mantenimiento de las condiciones internas de los túbulos seminíferos, proporcionando un soporte, nutrimentos y el medio ambiente hormonal para su multiplicación y diferenciación, además fagocitan los cuerpos residuales que se generan después de la transformación de la espermátide redonda a espermatozoide (Estrada y Urie, 2002). 19 Las células de Sertoli son alargadas e irregulares, con su base en la membrana basal y su extremo apical hacia la luz del túbulo seminífero. Su núcleo es basal y esférico, con uno o dos núcleos, muestran uniones intercelulares específicas que determinan la formación de la barrera de permeabilidad hematotesticular. Esta barrera tiene importancia funcional ya que divide al túbulo seminífero en un estrato basal de menor concentración de andrógenos, en donde se localizan las espermatogonias, y un estrato adluminal de mayor concentración de andrógenos donde ocurren las etapas avanzadas de la espermatogénesis (Estrada y Urie, 2002). La barrera impide el paso de moléculas grandes desde el tejido intersticial y parte del túbulo cerca de la lámina basal hacia el compartimiento adluminal y la luz del túbulo. Sin embargo, los esteroides atraviesan esta barrera con facilidad. Además, los gametos en proceso de germinación deben cruzar la barrera mientras se desplazan hacia la luz. Al parecer esto sucede sin alteración de la barrera por medio de la desintegración progresiva de las uniones estrechas sobre las células germinativas, con la formación posterior de nuevas uniones estrechas, por lo que esta barrera permite que se mantengan condiciones hormonales y de circulación producidas por las células de Sertoli (Estrada y Urie, 2002). Estas células secretan la proteína unidora de andrógenos (ABP) que ayuda a mantener concentraciones altas de testosterona en el entorno de las células germinales (Sinnatamby, 2003). Los túbulos seminíferos están rodeados de tejido intersticial, que consiste de tejido conjuntivo laxo, vasos sanguíneos y linfáticos, células de Leydig y fibras nerviosas. Las células de Leydig se localizan aisladas o formando pequeños grupos, tienen forma poligonal con un núcleo grande esférico y ovalado, son irregulares, tienen abundante retículo endoplasmático liso en forma de túbulos interconectados y mucho menos retículo endoplasmático rugoso y su citoplasma es granular. Estas células poseen los complejos enzimáticos para la biosíntesis de testosterona (König y Liebich, 2005; Tresguerres, 2005). 20 Esteroidogénesis Las hormonas esteroides se sintetizan en las glándulas suprarrenales, las gónadas y la placenta (Gómez-Chang y col., 2012). Los testículos secretan los andrógenos, principalmente como la testosterona, androstenediona y la 5-α-dihidrotestosterona (DHT). La esteroidogénesis en el testículo se produce en la célula de Leydig las cuales producen la mayor parte de la testosterona (Fail y col., 2005; Gal y col., 2007). Las hormonas esteroides se sintetizan a partir del colesterol, que la célula de Leydig la obtiene de diferentes fuentes: (a) de la biosíntesis de novo de colesterol dentro de la célula a partir de acetil CoA; (b) a partir del suero sanguíneo en forma de lipoproteínas de baja densidad (LDL), las cuales entran a la célula mediante un mecanismo de endocitosis mediada por receptor; o (c) a partir de la hidrólisis de ésteres de colesterol almacenados dentro de los lípidos en las células de Leydig. Se ha demostrado que la translocación del colesterol de la membrana mitocondrial externa a la membrana mitocondrial interna es el paso limitante de la velocidad en la producción de esteroides (Hanukoglu, 1992; Fail y col., 2005; Stocco y McPhaul, 2005; Gal y col., 2007; Rone y col., 2009). La primera reacción enzimática es la conversión de colesterol en pregnenolona por el citocromo P450 (P450scc), una enzima que escinde en la cadena lateral al colesterol. La actividad de P450scc se considera como un paso limitante en la producción de hormonas esteroides gonadales. A partir de este punto dos rutas metabólicas conducen a la síntesis de testosterona en el testículo (Figura 8), una a partir de la 17-OH-pregnenolona, conocida como ruta Δ5, la cual es la principal ruta de producción de testosterona por las células de Leydig en el ser humano, y la ruta a partir de la 17-OH-progesterona conocida como la ruta Δ4, que es encontrada mayormente en roedores incluyendo la rata. En la ruta Δ5, la pregnenolona por acción de la 17α-hidroxilasa (CYP17) se convierte en 17α-OH-pregnenolona a partir de la cual por acción de la CYP17 se forma la dihidroepiandrosterona (DHEA), que es reducida por la interacción con la 17β-hidroxiesteroide deshidrogenasa (17β-HSD) 21 para formar androstenediol, finalmente la 3β-hidroxiesteroide deshidrogenasa (3β- HSD) transforma al androstenediol en testosterona (Tsai y col., 1997; Fail y col., 2005; Gal y col., 2007; Robles, 2012). En la ruta Δ4, la pregnenolona se convierte en progesterona por acción de la 3β- HSD, que transforma el grupo hidroxilo en posición 3 en uno cetónico y a la Δ5,4- isomerasa que traslada el doble enlace de la posición 5-6 a la posición 4-5. La hidroxilación de la progesterona en el carbono 17, por la CYP 17 da lugar a la 17α- hidroxiprogesterona (17α-OH-progesterona) y por acción de la C17-20-desmolasa (CYP17), la transforma en androstenediona, la cual es reducida por la 17β-HSD para formar testosterona (Tsai y col., 1997; Fail y col., 2005; Gal y col., 2007; Robles, 2012). Independientemente de la ruta de la esteroidogénesis, la 17β-HSD se considera que es la enzima importante en la síntesis de los andrógenos, como la testosterona y los estrógenos (Labrie y col., 2000). Colesterol Paso limitante Ruta Δ5 Progesterona Ruta Δ4 Pregnenolona 17-hidroxipregnenolona 17-hidroxiprogesterona DHEA Androstenediona Androstenediol Testosterona C YP 17 (1 7α hi dr ox ila sa ) C YP 17 (1 7α hi dr ox ila sa ) 17 β- H SD 3β-HSD Figura 8. Conversión enzimática del colesterol y sus intermediarios para la producción de testosterona (Modificado de Xu y col., 2007). 22 La enzima 17β-HSD, es una enzima reductasa también conocida como 17- cetoesteroide reductasa (17-KSR) que pertenece a una superfamilia de proteínas reductasa deshidrogenasa (SDR). Hasta el momento, 14 subtipos de la 17β-HSD se han caracterizado en los mamíferos, Hasta el momento se han caracterizado en los mamíferos 14 subtipos de la 17β-HSD, los cuales muestran poca homología en sus aminoácidos, pero que son todos miembros de la familia SDR, con la excepción de 17β-HSD tipo 5 (17β-HSD5) que es una aldoceto reductasa. Estas enzimas difieren en cuanto a la expresión específica en los tejidos, su actividad catalítica y la especificidad del sustrato y cofactores con los que interactúan. En el testículo, esta enzima cataliza la conversión reversible de androstenediona en testosterona. En el testículo de rata, la 17β-HSDse encuentra principalmente en las células de Leydig, sin embargo también se han observado niveles significativos de actividad presentes en los túbulos seminíferos (Stocco y McPhaul, 2005). La producción de andrógenos por la célula de Leydig es regulada por la hormona luteinizante (LH) producida en la hipófisis y transportada por la circulación hasta el testículo. La LH se une a sus receptores de membrana en la célula de Leydig, activa a las proteínas Gs e induce la activación de la adenilato ciclasa, cuya función es catalizar la formación del AMPc a partir del trifosfato de adenosina (ATP). El AMPc actúa como segundo mensajero, debido a que estimula al sistema de cinasas. Que favorecen la fosforilación de proteínas y como consecuencia incrementan la actividad de las enzimas de la esteroidogénesis (Stocco y McPhaul, 2005; Rone y col., 2009; Gómez-Chang y col., 2012). Espermatogénesis La espermatogénesis es un proceso en el que las espermatogonias (célula diploide, 2n) se transforman en espermatozoides (células haploides, 1n) como resultado de la mitosis, la meiosis y espermiogénesis (Xiao, 2014). 23 Inicia con la división mitótica de células diploides, las espermatogonias, situadas en la base de los túbulos seminíferos, que se transforman en espermatocitos primarios. Estos migran a través de las estrechas uniones formadas por las células de Sertoli hacia el lado luminal de la barrera testicular. En el momento en el que los espermatocitos alcanzan la membrana de la barrera testicular, la síntesis de ADN ha finalizado e inicia la primera división meiótica, que consiste en una duplicación de los cromosomas seguida de dos divisiones consecutivas. Como resultado de ambas divisiones se obtienen cuatro células haploides, que contienen números iguales de cromosomas X e Y, las espermátidas redondas. Estas ingresan en la fase de diferenciación a espermatozoides conocida como espermiogénesis (OIT, 2001; Geisinger, 2003). Durante la espermiogénesis, las espermátidas tienen una elongación nuclear (espermátidas elongadas) y se forma el flagelo, a partir del aparato de Golgi se forma el acrosoma, mientras que las mitocondrias se organizan en la porción anterior del flagelo. La espermiogénesis culmina con la eliminación del citoplasma como cuerpo residual y la liberación de los espermatozoides hacia el lumen del túbulo seminífero por un proceso que se denomina espermiación. Los espermatozoides migran a lo largo del túbulo hasta la rete testis y a la cabeza del epidídimo (OIT, 2001; Geisinger, 2003). En el epidídimo, los espermatozoides adquieren progresivamente movilidad y capacidad de fecundación. A medida que maduran las células, éste absorbe los componentes del líquido que se encuentra en él, incluidas las secreciones de las células de Sertoli. En el epidídimo desaparece la gota citoplasmática y el núcleo se condensa (OIT, 2001). Durante las divisiones de las espermatogonias, la citocinesis no es completa. Las células forman un sincitio, se conectan por puentes citoplásmicos lo que permite que maduren de forma sincrónica. Estos grupos celulares aparecen rodeados por 24 prolongaciones de las células de Sertoli, lo que constituye un microambiente para el desarrollo de las células germinales. A medida que la espermatogénesis progresa, las células se van desplazando hacia el interior del túbulo seminífero (Geisinger, 2003). A la serie de cambios que producen las asociaciones celulares, en cada sección determinada de los túbulos se le denomina como ciclo del epitelio seminífero (Figura 9). En la rata la clasificación del ciclo del epitelio seminífero es formado por 14 etapas (designado del I-XIV) en la cual la espermiogénesis, cuenta con 19 pasos de diferenciación (1 a 19) (Fernández, 2012). El ciclo inicia con espermatogonias de tipo A, las cuales están indiferenciadas. Las espermatogonias de tipo A1, empiezan el proceso de diferenciación y continúan para dar origen a espermatogonias de tipo A2, A3 y A4. Las espermatogonias de tipo A, se caracterizan por tener un núcleo elongado y prominente, presentan ausencia de cromatina (A1) y se localizan junto a la membrana basal. Las espermatogonias más diferenciadas como el tipo A4, van acumulando más cromatina en la membrana nuclear y el núcleo va tomando la forma ovoide. Posteriormente continúa la diferenciación, para formar las espermatogonias intermedias (In) y después dar origen a las espermatogonias de tipo B. En promedio, la mitad de la población de las células hijas de tipo A en división mitótica, se diferencia hasta transformarse en células de tipo B y con ello pierden su potencialidad para producir más células A. La otra mitad de la población de células hijas no pierde sus características de progenitoras, conservando esta población (Mruk y col., 2008; Fernández, 2012). La proliferación de espermatogonias de tipo B, dan origen a los espermatocitos primarios. Los cuales experimentan la meiosis (Fernández, 2012). Los espermatocitos primarios entran a la profase I de la primera división meiótica, se caracteriza porque los cromosomas homólogos se aparean e intercambian segmentos y continúan con la meiosis. En la profase I, los espermatocitos pasandel 25 Fi gu ra 9 . D ia gr am a de l c ic lo d e la e sp er m at og én es is d e la ra ta . L as 1 4 et ap as d el c ic lo d e la e sp er m at og én es is d e la ra ta s e in di ca n de l I –X IV , se m ue st ra n en c ol um na s ve rt ic al es . A ( 1- 4) , es pe rm at og on ia s tip o A 1- 4; I n, es pe rm at og on ia i nt er m ed ia ; B , es pe rm at og on ia t ip o B ; Pl , es pe rm at oc ito e n pr el ep to te no ; L, e sp er m at oc ito e n le pt ot en o; Z , es pe rm at oc ito e n ci go te no ; P, e sp er m at oc ito e n pa qu ite no ; D i, en d ip lo te no ; II, e sp er m at oc ito se cu nd ar io . Lo s pa so s de l a es pe rm io gé ne si s (1 –1 9) s e in di ca n al l ad o de c ad a es pe rm át id a (O ´D on ne ll y co l., 20 06 ). Et ap as d el c ic lo 26 etapa de preleptoteno, a la etapa de leptoteno, continúan con el de cigoteno, paquiteno, diploteno y diacinesis. Posteriormente continúa el proceso de diferenciación, de la profase I continúa la metafase I, la anafase I y la telofase I. De la telofase I, se originan células hijas llamadas espermatocitos secundarios, estas células presentan una vida media muy corta. Después se diferencian a espermátidas mediante la segunda división meiótica (Mruk y col., 2008; Fernández, 2012). La espermiogénesis, es decir, la transformación de las espermátidas en espermatozoides se clasifica en números arábigos del número 1 al 19. Los espermatozoides formados en la última etapa (etapa 19), se localizan en los estadios VII y VIII del ciclo (Mruk y col., 2008; Fernández, 2012). Regulación de las funciones del testículo La regulación endocrina de las funciones del testículo (Figura 10) está bajo el control de las gonadotropinas LH y FSH, glicoproteínas que se sintetizan y liberan por células basófilas denominadas gonadotropos en la adenohipófisis, de donde se vierten al torrente sanguíneo para así alcanzar su órgano blanco, las gónadas. A su vez la secreción de gonadotropinas está regulada por la hormona liberadora de gonadotropinas (GnRH) (Prieto-Gómez y col., 2002; Weinbauer y col., 2010; Ubuka y col., 2014). La GnRH es un decapéptido que se sintetiza y almacena en las neuronas entre el hipotálamo medio-basal en los núcleos arcuato, periventricular, paraventricular y el área preóptica. La secreción de esta neurohormona es modulada por neurotransmisores como la dopamina (DA), noradrenalina (NA) y la serotonina(5HT). La GnRH es liberada de las terminales nerviosas en la eminencia media y viaja por el sistema portal hipotalámico hipofisiario en donde llega a la adenohipófisis y estimula los gonadotropos donde promueve la síntesis y liberación de LH y FSH (Weinbauer y col., 2010; McArdle y Roberson, 2015). 27 Las gonadotropinas tienen sitios de acción diferentes en el testículo y sus efectos se interrelacionan para mantener la estructura del testículo y regular sus funciones. El receptor a FSH se localiza únicamente en las células de Sertoli. A una edad temprana estimula las células de Sertoli para su proliferación e incrementa la longitud de los túbulos seminíferos, mientras que en edades posteriores mantiene la supervivencia y proliferación de las células germinales. La unión específica de la FSH a su receptor estimula a las proteínas G, aumenta la producción de AMPc estimula la secreción de inhibina B que ejerce un efecto de retroalimentación negativa sobre la secreción de FSH por la hipófisis. La FSH favorece el desarrollo de las células germinales hasta la etapa de espermátide, pero si no existe testosterona, no se completan las fases finales de la transformación de la espermátide a espermatozoide (Prieto-Gómez y col., 2002; Tresguerres, 2005; O´Donnell y col., 2006; Smith y Walker, 2015). GnRH FSH LH Testosterona (-) (-) Esteroidogénesis Espermatogénesis Inhibina (-) Figura 10. Eje Hipotálamo-Hipófisis-Testículo. Hormona liberadora de gonadotropinas (GnRH); Hormona folículo estimulante (FSH); Hormona luteinizante (LH). Símbolo (-) inhibición (Modificado de Raven y col., 2005; Xu y col., 2007). 28 Por otra parte, la LH es responsable del desarrollo y el funcionamiento de las células intersticiales de Leydig. La unión de la LH a su receptor inicia una cascada de reacciones que conducen a la estimulación de la esteroidogénesis y a un aumento de la producción de testosterona, la cual actúa localmente para regular la producción de espermatozoides y mediante un mecanismo de retroalimentación modula la producción de GnRH por el hipotálamo y de LH por la hipófisis (Prieto-Gómez y col., 2002; Tresguerres, 2005; O´Donnell y col., 2006; Smith y Walker, 2015). La importancia de la GnRH en el mantenimiento de la estructura y las funciones del testículo se apoya en el estudio de Ward y colaboradores (1989), quienes observaron que cuando a ratas macho de 28 días de edad se les administra crónicamente un antagonista de la GnRH, disminuye la concentración de gonadotropinas séricas y testosterona, el peso de los testículos, epidídimo, las vesículas seminales y la próstata, se induce la degeneración de las células germinales en los túbulos seminíferos, atrofia de las células de Leydig y la disminución en el número de espermatozoides. Bartlett y colaboradores (1986) mostraron la relación entre la testosterona intratesticular y la espermatogénesis mediante la destrucción de las células de Leydig con una sola dosis intraperitoneal de dimetanosulfonato etano, ellos observaron que al disminuir la concentración de testosterona, la concentración de FSH y LH aumentó. Además observaron la alteración progresiva de los túbulos seminíferos por la degeneración de células germinales principalmente de espermatocitos primarios y espermátidas. La espermatogénesis se restableció cuando los testículos fueron repoblados por las células de Leydig, aunque aún podía observarse daño en algunos túbulos seminíferos. Cuando en la rata adulta se realiza la hipofisectomía, disminuye el número de espermatogonias, espermatocitos y espermátides elongadas. Posterior a la hipofisectomía, la administración de testosterona o de FSH más testosterona o, restablece la presencia de espermátides elongadas y la espermatogénesis (Bartlett y col., 1989). La hipofisectomía más las administración de dimetanosulfonato etano, la 29 espermatogénesis solo progresa hasta la formación de espermátide redonda, mientras que, cuando se les da el remplazo hormonal de FSH más testosterona la espermatogénesis progresa hasta la formación de espermatozoides (Kerr y col., 1992). Estas evidencias apoyan la idea de que las gonadotropinas conjuntamente con la testosterona, son esenciales en el mantenimiento de la estructura y la espermatogénesis. En ratones con hipogonadismo o en aquellos que presentan tal alteración y no se expresan los receptores a los andrógenos en las células de Sertoli, el desarrollo de las células germinales llega a la etapa de paquiteno, disminuye el número de células germinales y de Sertoli. Cuando a estos animales se les administra FSH aumenta el número de células germinales y de Leydig, sin embargo en los animales que no expresan el receptor a andrógenos no se recuperan las poblaciones de las células antes mencionadas. Con base en estos resultados los autores proponen que la FH y la testosterona son esenciales para la progresión de la espermatogénesis y el mantenimiento de las células de Leydig (O’Shaughnessy y col., 2010). Las gonadotropinas y la testosterona en conjunto regulan la supervivencia de las células germinales mediante la inhibición de señales de muerte hacia las células germinales. Por lo que, el exceso o la disminución en la concentración de estas hormonas induce la muerte celular por apoptosis en el testículo (Shaha y col., 2010). Apoptosis La muerte celular programada o apoptosis es un proceso fisiológico por el que las células que ya no cumplen su función, mueren. Esencial para mantener constante el número de células en el tejido, se asocia a procesos proliferativos y ocurre a lo largo de la vida (Naval y col., 2004). Se caracteriza por cambios morfológicos y bioquímicos en la célula que consiste en la formación de burbujas en la membrana plasmática, la contracción del volumen 30 celular, la condensación de la cromatina, vacuolización citoplásmica y la formación de cuerpos apoptóticos, los cuales son finalmente recogidos por células fagocíticas. Las características bioquímicas de la apoptosis incluyen la exposición de fosfatidilserina en la cara externa de la membrana plasmática promoviendo la fagocitosis por las células vecinas y macrófagos, la activación de cascadas de caspasas y la escisión y fragmentación del ácido desoxirribonucleico (ADN) aproximadamente cada 185 pb y sus múltiplos en tamaño, esta última característica se utiliza como base para diversas técnicas de marcaje para la detección de células apoptóticas (Brinckworth, 1995; Pentikäinen, 2002; Shaha y col., 2010). De los mecanismos de muerte celular programada genéticamente, tres se han descrito en el testículo como la apoptosis dependiente de caspasas, la anoikis, y la apoptosis independiente de caspasas; siendo la más común la apoptosis dependiente de caspasas que se distingue de otras formas de muerte celular por la activación de caspasas como resultado de la estimulación de receptores de muerte y/o reguladores, que pertencen a la familia Bcl-2 (Ruwanpura y col., 2010). Los reguladores de la apoptosis se dividen en tres categorías: inductores, efectores y ejecutores. Los inductores son agentes o condiciones que inician el proceso, pueden ser la falta de factores de sobrevivencia, la exposición a agonistas de los receptores de muerte celular o la exposición a agentes genotóxicos. Los efectores son las cascadas intracelulares que trasmiten la señal de muerte, y los ejecutores son los eventos intracelulares al final de la vía que causan la apoptosis. Durante la fase efectora, la señal apoptótica puede ser inhibida y la célula sobrevivir, o que la señal llegue a un punto sin retorno y la célula muere (Cuello, 2006). Las caspasas se sintetizan como proenzimas inactivas (procaspasas), se localizan en el espacio de la membrana mitocondrial o en el retículo endoplasmático para luego ser liberadas en el citosol parasu activación. Las caspasas activas se translocan al núcleo llevan a cabo la escisión de otras proteínas y la degradación del 31 ADN. La activación de las caspasas en las células blanco en el testículo es mediante dos vías principales, ya sea por señales intracelulares que resultan en el daño al ADN (vía intrínseca) o por una señal específica a través de receptores de muerte en la superficie celular (vía extrínseca) (Ruwanpura y col., 2010). En la vía intrínseca (Figura 11) se activan proteínas de la superfamilia Bcl-2, dos de estas proteínas, Bax y/o Bak provocan la pérdida del potencial mitocondrial, que induce la salida de varias proteínas (citocromo C, Smac/Diablo, AIF) de las mitocondrias y la activación de las caspasas lo que conduce a la apoptosis (Naval y col., 2004). El citocromo C se une a la proteína adaptadora Apaf-1 formando un complejo denominado apoptosoma, el cual recluta a la procaspasa 9. Su unión al apoptosoma activa la caspasa 9 y el inicio de una serie de reacciones proteolíticas que conduce a la activación de las caspasas ejecutoras 3, 6, y 7, las que escinden a las proteínas intracelulares, poli (ADP-ribosa) polimerasa, actina y la gelsolina, lo que resulta en la apoptosis (Naval y col., 2004; Ruwanpura y col., 2010). Los miembros de la familia Bcl-2 se pueden dividir en tres grupos de acuerdo con su estructura y función: a) proteínas antiapoptóticas con el dominio BH4 como Bcl-2 y sus homólogos, Bcl-xL, y Mcl-1, que inhiben la apoptosis inducida por muchos estímulos citotóxicos, b) proteínas proapoptóticas multidominio como Mtd, Bax, Bak, las dos últimas están presentes en la mayoría de tejidos y durante la apoptosis forman un canal por el que sale de la mitocondria el citocromo C, la inactivación simultánea de los genes de Bax y Bak, bloquea la apoptosis. c) Proteínas BH3, de las cuales se han identificado unas 10 proteínas de esta subfamilia (Bim, Bad, Bid, Bik, Hrk, PUMA, Noxa, etc.) y se caracterizan por poseer sólo el dominio BH3 que es necesario y suficiente para inducir apoptosis. Estas proteínas no pueden ejercer su acción apoptótica en ausencia de Bax y Bak (Naval y col., 2004). Generalmente se considera que la proporción entre las proteínas proapoptóticas y antiapoptóticas de la familia Bcl-2 es el determinante del destino de la célula, por 32 ejemplo, un exceso de Bcl2L2 resulta en la supervivencia celular, mientras que un exceso de Bax resulta en la muerte celular a través de esta vía (Ruwanpura y col., 2010). La vía extrínseca (Figura 11) se inicia cuando una proteína extracelular (mensajero de muerte) se une a su receptor (receptor de muerte) que poseen en su región intracelular el dominio mortal (DD), que transmite la señal de muerte. Los receptores de muerte pertenecen a la superfamilia del receptor del Factor de necrosis tumoral (TNF). La ruta inicia con la unión del ligando de Fas (FasL) a su receptor y su posterior unión a la proteína adaptadora FADD a través de su dominio mortal. FADD a su vez, por intermedio de su dominio DED, se une a la caspasa 8. La unión de varias moléculas de caspasa 8 a este complejo de proteínas asociado a Fas ocasiona su autoactivación proteolítica. Posteriormente, la caspasa 8 activa a la 3, que se encarga de ejecutar la muerte de la célula por apoptosis. Esta ruta es similar a la activada por la unión del TNF a su receptor (Jordán, 2003; Naval y col. 2004; Ruwanpura y col., 2010). En los roedores y el hombre, Fas se localiza en las células germinales, espermatocitos y espermátidas, además FasL se ha observado en células de Sertoli (Ruwanpura y col., 2010). Durante la espermatogénesis normal, la apoptosis regula la homeostasis entre las células de Sertoli y el número de células germinales. La apoptosis también es inducida por estímulos específicos, tales como la privación o disminución de FSH, LH y testosterona; así como la exposición a la radiación ionizante, el consumo de fármacos quimioterapéutico y el estrés (Brinckworth, 1995; Ruwanpura y col., 2010; Méndez y col. 2014). 33 SobrevivenciaApoptosis Daño ADN Núcleo Caspasa 8 activa Receptores de muerte Ausencia de factores de sobrevivencia Radiación Agentes citotóxicos Calor UV Hiperoxia/ Hipoxia Estrés FADD DED Figura 11. Esquema ilustrativo de las diferentes rutas de muerte celular. La vía extrínseca es iniciada por la unión de ligandos como FasL o TNFα a sus respectivos receptores (FAS, TNFR). La vía intrínseca se desencadena por fenómenos de stress celular como los generados por agentes genotóxicos y depende de la actividad mitocondrial. Factores de sobrevivencia como NF-κB modulan la muerte celular. (Pentikäinen, 2002). Las gonadotropinas y testosterona son necesarias para el desarrollo de las células germinales y son consideradas factores que mantienen la sobrevivencia de estas células. FSH y testosterona, actúan como factores de supervivencia regulando negativamente los genes y las proteínas apoptóticas, además favorecen la proliferación de las células germinales (Ruwanpura, 2010; Méndez y col. 2014). Brinkworth y colaboradores (1995), observaron que cuando a ratas macho adultas se les administra durante 14 días un antagonista de la GnRH se induce la muerte de los 34 espermatocitos entre las etapas IX-II del ciclo del epitelio seminífero. En la rata y ratón que se les administra el antagonista de la GnRH, disminuye FSH y testosterona, no se modifica en las células germinales Bcl2, mientras que los genes pro-apoptóticos Fas y Bax aumentaron significativamente, lo cual culminó con la liberación del citocromo C de la mitocondria y el aumento en la actividad de la caspasa 8 y 3, que conducen a la muerte celular (Pareek y col., 2007). Cuando a ratas macho de 14 a 18 días se les administra un antagonista de la FSH, en células germinales se induce la muerte por apoptosis, evento que se acompaña de la expresión de la caspasa 9 en las espermatogonias, mientras que en los espermatocitos se identificó a la caspasa 8 y 9, asociadas con las vía extrínseca e intrínseca de la apoptosis (Ruwanpura y col., 2008). Lo que permite pensar que la ausencia de esta gonadotropina activa las dos vías de señalización que conducen a la apoptosis. La disminución en la concentración de las gonadotropinas en las células de Sertoli también induce la muerte por apoptosis. (Chausiaux y col., 2008), esenciales en el mantenimiento de la espermatogénesis (Estrada y Urie, 2002). Además de las gonadotropinas y la testosterona, existen otros factores de crecimiento y mensajeros químicos que participan en el mantenimiento de las funciones del testículo, ya sea actuando en el eje hipotálamo-hipófisis o directamente en la gónada especialmente en la proliferación celular y la muerte celular programada (apoptosis) (Tresguerres, 2005). Serotonina, Anfetaminas y Funciones del Testículo La serotonina además de actuar en el SNC, también actúa directamente en el testículo, tal afirmación se apoya en las evidencias que muestran que la amina se le encuentra en el tejido y cápsula testicular (Campos y col., 1990; Tinajero y col., 1993; Aguilar y col., 1995; Frungieri y col., 1999). La fuente de serotonina de este órgano son los mastocitos, las plaquetas, las fibras nerviosas que inervan la gónada y la que 35 se sintetiza directamente en las células de Leydig (Campos y col., 1990; Frungieri y col., 1999; Piner y col., 2002). Aunado a esto, se ha mostrado que cuando a ratas macho de 30 días de edad se les administra por vía sistémica, el precursor de la síntesis de serotonina, el 5-hidroxitriptofano, la concentración de serotonina y de su metabolito se incrementa en el tejido y cápsula testicular a los 60 minutos pos- tratamiento y esto se acompaña del incremento en la concentración de testosterona en el suero (García, 2014). A laserotonina se le asocia con la modulación de las funciones del testículo del animal prepúber. En relación a esto, se ha observado que cuando en la rata macho de 16, 26, 30 ó 60 días de edad se le administra el precursor de la síntesis de serotonina, el 5-hidroxitriptofano, la concentración de serotonina en el cerebro y de FSH en suero se incrementan (Justo y col., 1989). Estos efectos han sido interpretados por los autores como el resultado de la acción de la serotonina en la modulación de la secreción de la GnRH. La posibilidad de que la serotonina del testículo participa en la regulación de la esteroidogénesis, se apoya en los estudios de Tinajero y colaboradores (1993), quienes mostraron que cuando las células de Leydig de testículos de ratas que son mantenidas en cultivo y estimuladas con la gonadotropina coriónica humana (hCG) secretan serotonina y esta amina actúa como un regulador autocrino al unirse a sus receptores 5-HT2 localizados sobre la membrana de estas células. Al activarse los receptores 5-HT2 se estimula la producción del factor liberador de la corticotropina (CRF) por la célula de Leydig y se inhibe la síntesis de testosterona. También es posible que la serotonina liberada por las células de Leydig funcione como un mediador de los cambios vasculares en el testículo. (Piner y col., 2002). Estas evidencias muestran que la serotonina participa en la regulación de la esteroidogénesis. 36 Existen sustancias que actualmente son utilizadas en el tratamiento de desórdenes psiquiátricos o que se consumen como drogas recreacionales, entre estas sustancias se encuentran las anfetaminas y sus derivados las cuales modifican la actividad del sistema serotoninérgico (Ayala, 2009). Cuando en el ratón macho se administra metanfetamina se inhibe la síntesis de testosterona estimulada por la inyección de hCG (Tsai y col., 1996, 1997). Mientras que, cuando se mantienen in vitro células de la línea MA-10 que provienen de las células de Leydig de ratón y se les estimula con hCG, la administración de anfetmina incrementa la producción de progesterona (Chen y col., 2003). Conjuntamente estos resultados llevan a proponer que los derivados de las anfetaminas modifican la esteroidogénesis en el testículo. Dickerson y colaboradores (2008), mostraron que en la rata adulta la administración del MDMA disminuye el ácido desoxirribonucleico mensajero (RNAm) que codifica para la GnRH en el área preóptica hipotalámica anterior y la concentración de testosterona en el suero, sin cambios en LH. Con base en estos resultados los autores proponen que los derivados de las anfetaminas modifican la función del eje hipotálamo-hipófisis en el macho. Sin embargo no consideran los efectos que este derivado de las anfetaminas puede ejercer directamente en la gonada del macho. Tsai y colaboradores (1996, 1997), mostraron en ratas que la administración de anfetamina en ratas disminuye la secreción de testosterona al actuar directamente en el testículo. Cuando se mantienen células de Leydig en cultivo, la anfetamina disminuye la actividad de la 3β-HSD, P45c17 y 17-HSD, esto permitió a los autores plantear que las anfetaminas actúan en el testículo modificando algunas de las enzimas que son claves en la esteroidogénesis en la gónada del macho, como la 17β-HSD. Además, de los efectos en la esteroidogénesis, se ha mostrado que los derivados de las anfetaminas, como el MDMA inducen daño en la espermatogénesis y en la 37 estructura del testículo, debido a que cuando a ratas macho adultas se les administra de forma crónica el MDMA se induce daño ADN en el esperma, degeneración tubular y edema en el tejido intersticial en los testículos (Barenys y col., 2009). Aragón y colaboradores (2005), mostraron que a ratas macho de 30 días de edad se les administra pCA por vía sistémica cada 8 días y son autopsiados a los 45 o 65 días de edad, disminuye la concentración de serotonina en el hipotálamo, el número, movilidad y viabilidad de los espermatozoides e induce daño en la estructura del epitelio seminífero. Además, no modifica la secreción de LH, estos eventos se acompañan de la disminución en la concentración de testosterona a partir de las 48 horas postratamiento (Pérez, 2006). Con base en estos resultados, se propone que la serotonina es esencial en el mantenimiento de la estructura y funciones del testículo. En el cerebro y la médula espinal, la serotonina actúa como un factor de sobrevivencia e inductor de apoptosis, este efecto dual que ejerce la serotonina es vía su unión a los receptores 5-HT1A y 5-HT2A. Cuando la serotonina se une al receptor 5-HT1A se activan las vías de señalización que promueven la diferenciación celular y el cese de la proliferación. Mientras que su unión al receptor 5-HT2A, activa la proliferación celular, la sinaptogénesis y la apoptosis (Azmitia, 2001). Estas evidencias son clínicamente relevantes debido a que diversas sustancias que se consumen por prescripción médica o como drogas recreacionales modifican la actividad del sistema serotoninérgico y como consecuencia modifican el funcionamiento de los tejidos y órganos donde actúa la serotonina. 38 JUSTIFICACIÓN A la serotonina se le asocia con la modulación de las funciones del testículo y se ha mostrado que las células de Leydig sintetizan serotonina, la cual actúa como regulador autócrino en la producción de testosterona vía la unión a sus receptores de membrana, entre los que se encuentra el 5-HT7. Previamente se ha descrito, la posibilidad de que la pCA y las drogas recreacionales, como los derivados de las anfetaminas modulan la producción de testerona e inducen daño en las células germinales. Aunado a esto se ha mostrado que la enzima 17β-hidroxiesteroide deshidrogenasa participa en la conversión de androstenediona a testosterona. Por ello, en el presente estudio se analizaron los efectos de la p-Cloroanfetamina en la estructura del testículo, en la inducción de la muerte por apoptosis en las células germinales, así como identificación de la enzima 17β-HSD y el receptor a serotonina 5-HT7. 39 HIPÓTESIS La serotonina ejerce un efecto estimulante en la secreción de testosterona esencial en el mantenimiento de la estructura del testículo. Por lo que, la inhibición del sistema serotoninérgico del testículo inducido por la administración de la pCA, provocará disminución en la expresión de la enzima 17β-HSD vía el receptor 5-HT7, lo que se acompañará del incremento en la apoptosis en las células germinales y alteraciones en la estructura del testículo. OBJETIVO GENERAL Analizar el efecto de la administración de p-Cloroanfetamina en la expresión de la enzima 17β-hidroxiesteroide deshidrogenasa, del receptor 5-HT7 y en la estructura y apoptosis en el testículo en la rata macho prepúber. OBJETIVOS PARTICULARES Estudiar los efectos de la administración sistémica de p-cloroanfetamina en la estructura del testículo y en la inducción de la muerte por apoptosis en las células germinales. Analizar los efectos de la administración sistémica de p-cloroanfetamina en la expresión de la enzima 17β-hidroxiesteroide deshidrogenasa en el testículo. Analizar los efectos de la administración sistémica de p-cloroanfetamina en la expresión del receptor 5-HT7 en el testículo. 40 MATERIALES Y MÉTODOS Se utilizaron ratas macho de 30 días de edad de la cepa CII-ZV, las cuales se mantuvieron en condiciones controladas de iluminación (14 h luz-10 h oscuridad), con libre acceso al agua y alimento y a la madre desde el nacimiento hasta el destete (21 días de edad). Los animales se dividieron al azar en los siguientes grupos experimentales. A un grupo de 7 animales de 30 días de edad se les administró pCA (Sigma Chemical, St Louis, USA) en una dosis de 10 mg/Kg de peso
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