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Evaluacion-dosis-respuesta-de-wereque-ibervillea-sonorae-en-modelo-in-vivo

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 Universidad Nacional Autónoma 
de México 
 
 
Facultad de Estudios Superiores Cuautitlán Campus 1 
 
 
 
 
 
Evaluación dosis respuesta de wereque (Ibervillea sonorae) 
en modelo in vivo 
 
 
 TESIS 
 
 Para obtener el título de: 
 Químico Farmacéutico Biólogo 
 P r e s e n t a: 
 José Adrián Díaz Hernández 
 
 
 
Asesor: M en FC Ma. Eugenia R. Posada Galarza 
Veronica
Texto escrito a máquina
CIUDAD UNIVERSITARIA, CD.MX.,2016
 
UNAM – Dirección General de Bibliotecas 
Tesis Digitales 
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mencionando el autor o autores. Cualquier uso distinto como el lucro, 
reproducción, edición o modificación, será perseguido y sancionado por el 
respectivo titular de los Derechos de Autor. 
 
 
 
 
 
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AGRADECIMIENTOS 
La razón de existir y caminar por este mundo, para sentir la vida y compartir las 
capacidades increíbles que cada ser humano tiene, las fuerzas en los altibajos y ese 
ímpetu para terminar las cosas que hemos de comenzar, la salud e intelecto para poder 
crear y construir. Gracias a Dios. 
A mis Padres Angélica Hernández Jiménez y Conrado Díaz Rodríguez por su apoyo e 
impulso, por no desistir y seguir adelante viendo en mí un mejor futuro. 
A la Sra. Graciela García González y al Sr. Juan Manuel Valadez Florido por 
brindarme sus conocimientos, orientación, persistencia y paciencia que han sido una base 
fundamental para mi formación, que si no fuera por ellos mi vida sería muy distinta. 
A Adriana Aurora Arriaga Trejo y a Adriana Italivi Díaz Arriaga por ser una parte 
muy importante en mi vida, por apoyarme en las buenas y en las malas, sobre todo por su 
paciencia y amor incondicional. De la misma forma a sus padres la Sra. Teresa Trejo 
Guerrero y al Sr. Antonio Arriaga Garduño. 
A mi hermano Arturo Díaz Hernández por estar presente no solo en esta etapa tan 
importante de mi vida, sino en todo momento ofreciéndome lo mejor. 
A la maestra María Eugenia Posada Galarza por sus incansables y constantes ánimos 
de seguir adelante, además de ser un excelente guía en todo sentido. 
A mis compañeros y amigos, que todos contribuyeron cada quien a su manera agregando 
su granito de arena con recomendaciones y actitud muy positiva y principalmente a Katy 
Karina Eslava Martínez por su enorme participación y aportaciones hasta el final de este 
trabajo. 
A la UNAM Y FESC mi alma mater que me han dado tanto desde la preparatoria y 
que ahora me permiten una licenciatura. 
A todas las personas que nunca dudaron de mí, que con palabras valiosas influyeron para 
darme valor y fortaleza. 
 
 
 
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INDICE 
 
 
1.SIGLAS………………………………………………………………………………………….... 4 
2.INTRODUCCIÓN………………………………………………………………………………… 6 
3.OBJETIVO.………………………………………………………………………………………. 10 
4.GENERALIDADES…………………………………..………………….……………………… 10 
 
 
4.1 DEFINICIÓN DE DIABETES………………………………………………………………. 10 
4.2 CLASIFICACIÓN…..…………………………...…………………………………………… 11 
4.3 PATOLOGIA…………………………............................................................................ 14 
4.4 SIGNOS Y SÍNTOMAS………………………………………………………………......... 20 
4.5 DIAGNOSTICO……………………………………………………………………….…….. 24 
4.6 MANEJO TERAPEUTICO DEL PACIENTE DIABETICO….………………….………. 26 
4.7 HIPOGLUCEMIANTES ORALES…………….……………………………….…………. 34 
4.8 WEREQUE (Ibervillea sonorae) ………………………………………….…………… 54 
 
 
5.METODOLOGÍA………………………………………………………………………………. 55 
6.RESULTADOS Y OBSERVACIONES……………………………………………………… 60 
7.ANALISIS DE RESULTADOS………………………………………………………………. 61 
8.CONCLUSIONES……………………………………………………………………………… 66 
9.RECOMENDACIONES……………………………………………………………………..... 66 
10.BIBLIOGRAFIA……………………………………………………………………………..... 67 
 
 
 
4 
 
1. SIGLAS 
 
Encuesta Nacional de Salud (ENSA) 
Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (ENSANUT) 
Hemoglobina glicosilada (HbA1c) 
Organización Mundial De La Salud (OMS) 
Diabetes Mellitus (DM) 
Diabetes Mellitus Insulino- Dependiente (DMID), o Tipo I: 
Diabetes Mellitus NO Insulinodependiente (DMNID), o Tipo II: 
Receptor de insulina 1 (IRS 1) 
Fosfoinositol 3 cinasa (PI3-K) 
Glucosa (Glut-4) 
Acil Glicerol (AG) 
Acil Glicerol libre (AGL) 
Diacilglicerol (DAG) 
Receptor de Insulina (RI) 
Diabetes Mellitus tipo 2 (DM2), 
Receptor de Insulina (RI) 
Páncreas y duodeno (PDX-1) 
Musculo Esquelético (ME) 
Glucagón tipo 1 (GLP-1) 
Adenosina Mono fosfato (AMP) cíclico 
Dipeptidil Peptidasa (DPP-IV) 
 
 
5 
 
Transportador Sodio Glucosa tipo 2 (SGLPT2) 
Asociación Americana de diabetes (ADA) 
Curva de Tolerancia a la Glucosa oral (CTGO) 
La Hemoglobina Gli o Glucosilada (HbA1C), 
Ministerio de Salud (MINSAL) 
Adenosina Tri Fosfato (ATP) 
Ciglitazone (ADD-3878) 
Peroxisoma (PPARs) 
Insulina Protamina Neutra Hagedorn (NPH) 
Inhibidores de la depeptidilpeptidasa-4 (DPP-4 
 El análisis de varianza (ANOVA) 
Transaminasa Glutámico Pirúvica (GPT) 
Di Cloro Metano (DCM) 
Aloxana (Allo) 
Aloxana Wereque 1 (AW1) 
Aloxana Wereque 2 (AW2) 
Aloxana Wereque 3 (AW3) 
 
 
 
 
 
 
 
 
6 
 
2.- INTRODUCCIÓN 
La diabetes mellitus, es un desorden metabólico muy común entre la población 
adulta, en la que el sujeto puede presentar: 
- Alteración en el metabolismo de carbohidratos, grasas y proteínas. 
 - Deficiencia relativa o absoluta en la secreción de insulina. 
- Resistencia en grado variable a la insulina. 
 
 Entre otras muchas cosas dicho desorden aparece cuando el páncreas deja 
de producir la insulina necesaria para el control del metabolismo de los 
carbohidratos, o bien, la que se produce es ineficiente. 
 Desafortunadamente la diabetes mellitus no sólo consiste en la elevación de 
glucosa sino que es un síndrome complejo que debe enfocarse desde un punto de 
vista integral debido a las repercusiones agudas y crónicas que frecuentemente 
sufren los sujetos que la padecen.(Ramon,2006) 
 
DIABETES EN MÉXICO 
De acuerdo con la encuesta nacional de salud y nutrición 2012 Se encuentra 
entre las primeras causas de muerte en México 
 
• 6.4 millones de personas refirieron haber sido diagnosticadas con diabetes 
 
• La proporción de adultos con diagnóstico previo de diabetes es de 9.2% que 
en encuestas anteriores (Encuesta Nacional de Salud ENSA 2000 fue de 4.6% y en 
la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición ENSANUT 2006 fue de 7.3%) 
 
• La cifra de diagnóstico previo aumenta después de los 50 años, los estados 
con prevalencias más altas son: Distrito Federal, Nuevo León, Veracruz, 
Tamaulipas, Durango y San Luis Potosí. 
 
 
 
7 
 
•Algunos de los factores que contribuyen en la diabetes mellitus son el 
SOBREPESO Y OBESIDAD. 
 
• El sobrepeso es del 38.8%, donde los hombres tienen el mayor porcentaje 
42.5% con respecto a las mujeres, las cuales representan el 38.8%. La obesidad 
es del 32.4% donde los hombres tienen el menor porcentaje 26.8% con respecto a 
las mujeres, las cuales representan el 37.5%. 
 
• La prevalencia combinada de sobrepeso y obesidad es del 71.28%, (48.6 
millones de personas), esto significa que 7 de cada 10 Mexicanos tienen sobrepeso 
u obesidad. 
 
• Sobrepeso y obesidad: En niños entre 5 y 10 años, es del 34.4%, con 
respecto al sobrepesoes del 19.8%, con el sobrepeso en niñas es del 20.2% y en 
niños del 19.5%. La obesidad es del 14.6%, con respecto a las niñas es del 11.8% 
y en niños del 17.4% 
 
 La NOM 015- SSA2- 2010 
 
Para la prevención, tratamiento y control de la diabetes mellitus indica que las 
mediciones de hemoglobina glicosilada (HbA1c) y micro albuminuria deberán 
realizarse una vez al año. Lo cual se ha mostrado que el incremento en actividad 
física, dieta adecuada y reducción de peso, disminuyen el riesgo de desarrollar 
diabetes entre 34% y 43%, efecto que puede durar de 10 a 20 años después de 
concluida la intervención. 
 
 ORGANIZACIÓN MUNDIAL DE LA SALUD (OMS) 
• En el mundo hay más de 347 millones de personas con diabetes, se calcula 
que en 2004 fallecieron 3,4 millones de personas como consecuencia del exceso 
de azúcar en la sangre. 
 
 
8 
 
• Más del 80% de las muertes por diabetes se registran en países de ingresos 
bajos y medios. Casi la mitad de esas muertes corresponden a personas de menos 
de 70 años, y al 55% en mujeres. 
• La OMS prevé que las muertes por diabetes se multipliquen por para el 2013. 
• La diabetes tipo 2 representa el 90% de los casos mundiales y se debe en 
gran medida a un peso corporal excesivo y a la inactividad física. 
• Hasta hace poco, la diabetes tipo 2 sólo se observaba en adultos, pero en la 
actualidad también se está manifestando en niños, asociado a una vida sedentaria 
y a los malos hábitos alimenticios. Más de 371 millones de personas tienen diabetes, 
para 2030 esta cifra habrá aumentado hasta alcanzar los 552 millones. 
• México ocupa el 6to. Lugar mundial en número de personas con diabetes, 4 
de cada 5 personas con diabéticas viven en países de ingresos medios. La mitad 
de las muertes atribuibles a la diabetes ocurre en personas menores de 60 años. 
La mayoría de personas con diabetes tienen entre 40 y 59 años de edad. La 
diabetes causó 4,8 millones de muertes en 2012 y ha originado al menos 471,000 
millones de dólares de gasto sanitario en 2012; el 11% de los gastos totales en 
sanidad en adultos (20-79 años) 
(Federación mexicana de diabetes, 2013) 
La gravedad de la diabetes mellitus así como sus complicaciones y el aumento 
mundial de las personas afectadas motiva la investigación y búsqueda de nuevos 
fármacos que ayuden a su control. La etnobotánica mexicana reporta unas 150 
plantas empleadas en el control empírico de la diabetes mellitus, sin embargo, muy 
pocas de ellas han sido estudiadas científicamente. 
 Los primeros testimonios que se conocen sobre el tratamiento de la diabetes 
se refieren al uso de la plantas. El papiro de Ebers (1550 a.d.C) recomendaba el 
uso de una dieta rica en fibra y ocre. Otras civilizaciones han utilizado multitud de 
plantas para el tratamiento de la diabetes. La mayor parte de estos remedios han 
desaparecido en los países occidentales desde la llegada de la insulina, pero en los 
países subdesarrollados siguen constituyendo la base fundamental del tratamiento 
de la diabetes. Sin embargo, en los últimos años, se ha observado un nuevo interés 
 
 
9 
 
como dignas de ser investigadas ya que muchas de las medicinas tradicionales de 
pueblos primitivos han demostrado tener un fundamento científico al contener 
principios activos susceptibles de ser aislados y, posteriormente modificados. 
Además, los medicamentos hoy disponibles para el tratamiento de la diabetes, en 
particular las sulfonilureas, la metformina o las glitazonas no son capaces de 
restablecer la normalidad de la homeostasis de la glucosa y aunque compensan 
parcialmente las alteraciones metabólicas de la diabetes, no corrigen las lesiones 
bioquímicas subyacentes. Incluso el tratamiento insulínico no restaura 
completamente la homeostasis de la glucosa en los pacientes con diabetes de tipo 
I y sin contar que las sobredosis de insulina pueden incrementar el riesgo de 
episodios de hipoglucemia. 
Aunque es difícil que se encuentre entre las plantas un sustituto de la insulina 
que se active por vía oral, si es posible que se encuentren moléculas que estimulen 
la biosíntesis y la secreción de la insulina endógena. Una gran diversidad de plantas 
se usan en la actualidad para el tratamiento de diversas enfermedades, no obstante 
es importante realizar un estudio acerca del efecto terapéutico a la dosis que se 
presenta dicho efecto ya que si no se conoce una dosis, este podría tener un efecto 
toxico o bien no presentar el efecto requerido. Si determinamos la dosis en la que 
obtenemos un efecto terapéutico, con esto podremos saber el margen de seguridad, 
es decir sabremos cuales son las cantidades a las que se puede dosificar con mayor 
seguridad obteniendo así dicho efecto. (Ramon, 2006) 
 
Por todo lo anterior, el propósito de este trabajo es realizar la investigación de 
una dosis con la cual se presente el efecto hipoglucemiante de wereque (Ibervillea 
sonorae) así podremos presentar una referencia sustentada en una 
experimentación para evitar un efecto toxico. 
 
 
 
 
 
10 
 
3.- OBJETIVO 
Evaluar que el wereque (Ibervillea sonorae) tenga un efecto hipoglucemiante a 
través de la aplicación de tres dosis diferentes en ratas wistar diabéticas para dar a 
conocer la dosis (mg/Kg) que presente el mejor efecto hipoglucemiante y por ello el 
uso más adecuado en la medicina tradicional. 
4.- GENERALIDADES 
4.1 DEFINICIÓN DE DIABETES 
DIABETES proviene del latín diabētes, y éste del griego διαβήτης (diabetes) 
que significa correr a través. Compuesto de δια (dia-): a través; y βήτης (bétes): 
correr; derivado de διαβαίνειν (diabaínein): atravesar. Hace referencia al paso rápido 
del agua, debido a la sed y orina frecuentes. (SMNE, 2009) 
 
Como término para referirse a la enfermedad caracterizada por la eliminación 
de grandes cantidades de orina (signo clínico referido como "poliuria"), empieza a 
usarse en el Siglo I en el sentido etimológico de «paso», aludiendo al «paso de 
orina» de la poliuria. Fue acuñado por el filósofo griego Arateus. 
La diabetes mellitus (DM) o diabetes sacarina, es un trastorno endocrino-
metabólico crónico, que afecta la función de todos los órganos y sistemas del 
cuerpo: el proceso mediante el cual se dispone del alimento como fuente energética 
para el organismo (metabolismo), los vasos sanguíneos (arterias, venas y capilares) 
y la circulación de la sangre, el corazón, los riñones, y el sistema nervioso (cerebro, 
retina, sensibilidad cutánea y profunda, etc.). Las células metabolizan la glucosa 
para convertirla en una forma de energía útil; por ello el organismo necesita recibir 
glucosa (a través de los alimentos), absorberla (durante la digestión) para que 
circule en la sangre y sea distribuida por todo el cuerpo, y que finalmente, de la 
sangre entre al interior de las células para que pueda ser utilizada. Esto último sólo 
ocurre bajo los efectos de la insulina, una hormona secretada por el páncreas. En 
la DM, el páncreas no produce o produce muy poca insulina (DM Tipo I) o las células 
del cuerpo no responden normalmente a la insulina que se produce (DM Tipo II), 
http://es.wikipedia.org/wiki/Orina
http://es.wikipedia.org/wiki/Siglo_I
http://es.wikipedia.org/w/index.php?title=Arateo&action=edit
http://es.wikipedia.org/wiki/Sistema_endocrino
http://es.wikipedia.org/wiki/Metabolismo
http://es.wikipedia.org/wiki/Glucosa
http://es.wikipedia.org/wiki/Célula
http://es.wikipedia.org/wiki/Insulina
http://es.wikipedia.org/wiki/Hormona
http://es.wikipedia.org/wiki/Páncreas
 
 
11 
 
esto evita o dificulta la entrada de glucosa en la célula, aumentando sus niveles en 
la sangre (hiperglucemia). La hiperglucemia crónica que se produce en la DM tiene 
un «efecto tóxico» que deteriora los diferentes órganos y sistemas y puede llevar al 
coma y la muerte. (Ramon, 2006) 
4.2 CLASIFICACIÓN 
Diabetes Mellitus insulino- dependiente (DMID), o Tipo I: 
 
Antes llamada diabetesinfanta- juvenil (15-20 % de los casos). Aparece en la 
infancia y adolescencia (edad máxima en aparecer 11-13 años), con tendencia a la 
cetoacidosis, lábil metabólicamente, por lo que para compensarla es imprescindible 
el tratamiento con insulina. Es habitual el comienzo de esta forma clínica de diabetes 
entre los 10-13 años, y la mayoría tiene un diagnóstico confirmado antes de los 20 
años. Frecuentemente los pacientes presentan hiperglucemia extrema, cetosis y 
sintomatología alarmante (polidipsia, poliuria, polifagia, pérdida de cabello, fatiga, 
etc.). El páncreas endócrino de estos pacientes, no produce insulina, por lo tanto no 
hay insulina plasmática. La ausencia del péptido conector y proinsulina en plasma 
indican la falta de actividad secretoria de las células beta de los islotes de 
Langerhans. A veces se produce un retorno de las funciones de las células beta, 
con secreción de insulina y una mejor tolerancia de los hidratos de carbono, pero 
es siempre un episodio esporádico y pasajero. 
En la DMID, plenamente establecida, las funciones de las células beta, 
terminan por desaparecer totalmente. En todos los casos, solo existe una marcada 
reducción de las células beta de los islotes, en tanto que la masa de las células alfa, 
células D, y células PP, de los islotes de Langerhans, no parecen modificarse en la 
DMID. Esta forma clínica de diabetes podría también originarse o relacionarse con 
infecciones virales. En las necropsias de pacientes con DMID, suele observarse la 
presencia de “insulitis”, con infiltrado inflamatorio del tejido insular. Se ha 
incriminado el desarrollo de dicho cuadro viral como el Coxsakie B y al de la 
parotiditis y existen otros virus diabetógenos como el de la encefalomiocarditis N, 
varios reo virus que inducen la aparición de una diabetes tipo I en roedores. Estos 
 
 
12 
 
virus también infectan directamente las células ß de los islotes, en cultivos celulares, 
causando lisis y muerte celular. La DMID puede ser también una enfermedad 
autoinmune, tal sentido se ha demostrado en un alto porcentaje de pacientes (sobre 
todo al inicio de la enfermedad), la presencia de anticuerpos contra células ß que 
se fijan a la superficie celular. Estos anticuerpos producen lisis de las células ß en 
cultivos en presencia de complemento, lo que es compatible con lo que puede 
ocurrir “in vivo”. Lo más importante sin embargo es el fuerte campo genético-
hereditario como causa de la (DMID), demostrable en todos los casos. Los 
componentes extra genéticos mencionados demuestran una heterogeneidad en la 
patogenia de esta forma clínica y su complejidad etiológica. (Ramon, 2006) 
 
 Diabetes Mellitus NO insulinodependiente (DMNID), o Tipo II: 
 
Esta forma clínica, es también conocida como diabetes tardía o diabetes 
estable del adulto. Raramente evoluciona hacia la cetoacidosis, y a menudo se 
acompaña de obesidad. En los islotes de Langerhans, existen células beta 
funcional, por lo que en plasma se detecta la presencia de insulina y péptido C. En 
este tipo de diabetes, en general, existe un aumento de la masa de células alfa, y 
no existen alteraciones de las células D, y PP. Las células beta, son aparentemente 
normales, sin embargo la respuesta secretora de insulina ante estímulos normales 
(administración de glucosa por ej.), es irregular y generalmente disminuida. Podrían 
existir alteraciones funcionales de los glucoreceptores de las células beta, que 
determinan el funcionamiento anómalo de las mismas. También se ha demostrado 
el desarrollo de resistencia a la insulina de diverso grado. En la (DMNID), existe 
también frecuentemente un aumento de la secreción de glucagón por las células 
alfa del islote; los mecanismos de autorregulación de la secreción de glucagón, 
también se deterioran. Por ej., la supresión de la liberación de glucagón por la 
hiperglucemia, no funciona normalmente sobre todo en la cetoacidosis. El criterio 
para establecer el diagnóstico de esta forma clínica se basa en los siguientes 
hallazgos: 1.- Glucemia de ayuno mayor de 140 mg/dl, por lo menos en dos 
 
 
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ocasiones diferentes y 2.- Curva de tolerancia a la glucosa que, en cualquiera de 
los tiempos determinados para el control de la glucosa en sangre (30, 60 o 90 
minutos), alcanza o excede 200 mg/dl. Últimamente se ha postulado que la 
alteración de la curva de tolerancia a la glucosa pero con glucemia de ayuno normal, 
tiene solo una relativa importancia ya que muchos de estos pacientes no desarrollan 
hiperglucemia de ayuno aún luego de largos períodos, ni tampoco los signos y 
síntomas clásicos de la diabetes. En este tipo de diabetes, se ha detectado 
frecuentemente, una alteración de la función y número de los receptores celulares 
de la insulina. Por “regulación en descenso” (Down regulation), el número de 
receptores es dinámico, se autorregula con la insulinemia existente. En general, a 
mayor cantidad de insulina circulante, hay un menor número de receptores. En la 
(DMNID), y también en la obesidad, parece haber un menor número de receptores 
asociados a hiperinsulinemia. (Ramon, 2006) 
 
Diabetes secundaria: 
 
Otras formas de diabetes secundaria se presentan como consecuencia de 
varias pancreatopatías: pancreatitis aguda y crónica, pancreatectomías subtotales, 
tumores pancreáticos. El páncreas endócrino, se altera marcadamente, como 
consecuencia de la pancreatopatía de base. La diabetes secundaria o 
endocrinopatías; como la que acompaña a la acromegalia, enfermedad de Cushing 
e hipertiroidismo, son en realidad, diabetes que aparecen en esas circunstancias 
ante el trastorno endócrino que actúa como factor desencadenante. Se interpreta 
que la diabetes, se desarrolla en pacientes predispuestos genéticamente y que la 
endocrinopatía solo provoca la eclosión metabólica. Lo mismo puede decirse de la 
diabetes iatrogénica por administración indiscriminada de fármacos como los 
glucocorticoides, hormonas tiroideas, diuréticos tiazídicos, etc., en la que la diabetes 
primaria, se desencadena por la administración del fármaco. Al igual que las 
endocrinopatías la diabetes solo eclosiona en pacientes predispuestos. (Ramon, 2006) 
Diabetes Mellitus gestacional: 
 
 
14 
 
 
Es una forma clínica que aparece en la gestación, en el segundo o tercer 
trimestre y que debido a las características tan particulares, de la enfermedad, que 
afecta a la madre y al feto, puede ser considerado una forma clínica propia. Se 
desencadena en una madre con predisposición genética para la diabetes. Ocurre 
un aumento de las complicaciones perinatales, y mortalidad fetal. Después del 
parto, un tercio de las diabéticas del embarazo desarrollan una (DMNID). (Pontifica 
Universidad de Chile, 2014) 
4.3 PATOLOGIA 
PATOLOGÍA DE LA DIABETES MELLITUS 
 
Acción normal de la Insulina 
 
La insulina, secretada por las células-β del páncreas, entra directamente al 
hígado por vía de la vena porta, en donde ejerce efectos metabólicos profundos. 
Estos efectos son la respuesta de la activación del receptor de la insulina que 
pertenece a la clase de receptores de la superficie celular que tienen una actividad 
de tirosina cinasa intrínseca. El receptor de la insulina es un heterotetrámero de 2 
sub-unidades extracelulares α unidas por puentes bisulfuro a 2 sub-unidades 
transmembrana β. Con relación a la homeostasis de glucosa hepática, los efectos 
de la activación del receptor son eventos específicos de fosforilación que llevan a 
un incremento en el almacenamiento de glucosa con una disminución concomitante 
en la secreción de glucosa por el hígado a la circulación como se muestra en la 
figura 1 y 2 (solamente se representan aquellas respuestas en el nivel de 
fosforilación de la sintasa de glicógeno y de la glicógeno fosforilasa). (The chemical 
biochemistry, 2014) 
 
 
15 
 
Figura 1 
Acciones de la Insulina, Michael W King, Acciones de la interaccióninsulina-receptor de insulina a nivel del sustrato-1 del 
receptor de la insulina (IRS1) y activación de la cascada de la cinasa que llevan a actividades modificadas del 
glicógeno fosforilasa y glicógeno sintasa. MAPKK = MAP cinasa cinasa; MAK = MAP cinasa (MAP = protein-cinasa 
asociada a micro túbulo, también denominada proteína cinasa activada por mitógeno). S6K = cinasa p70S6. La 
activación mediada por la insulina de la p70S6K también lleva a cambios en la síntesis de proteínas (ver 
posteriormente). 
 
 
 
Figura 2 
Acciones de la Insulina, Michael W King, Acciones de la interacción insulina-receptor de la insulina en la homeostasis del 
glicógeno indicando el papel de la proteína que se une al glicógeno (PTG) formando complejos con muchas enzimas 
y sustratos. La PTG es una subunidad del PP1. También esta diagramada la respuesta a la insulina del transporte de 
glucosa hacia el interior de las células por medio de la translocación del transportador GLUT4 a la membrana celular. 
GS/GP cinasa = cinasa glicógeno sintasa: glucógeno fosforilasa. PP1= proteína fosfatasa 1. Las flechas indican 
dirección del flujo o efectos positivos, las líneas T representan efectos inhibitorios 
 
 
 
16 
 
Patología de la diabetes 
 
La unión de la insulina a su receptor fosforila el sustrato del receptor de insulina 
1 (IRS 1) en los aminoácidos tirosina, activando la vía de la fosfoinositol 3 cinasa 
(PI3-K), la cual a su vez activa la translocación de los transportadores de la glucosa, 
Glut-4, desde el citoplasma hasta la membrana celular, generando poros que 
permiten la entrada de la glucosa a la célula. Con la llegada del acil glicerol (AG) 
acil glicerol libre (AGL) se activa el diacilglicerol (DAG) y posteriormente la proteína 
cinasa C; a su vez fosforila el (IRS) pero ya no en los aminoácidos tirosina sino en 
los aminoácidos serina como consecuencia de esto el (IRS) ya no queda disponible 
para la insulina, ocasionando la (RI). Mostrándose así en la figura 3 
 
Figura 3 
Fisiopatología de la diabetes mellitus tipo 2, Dr. Jorge Alejandro Castillo Barcias, La unión de la insulina a su receptor fosforila el sustrato del receptor de insulina 1 
(IRS 1) en los aminoácidos tirosina, activando la vía de la fosfoinositol 3 cinasa (PI3-K), la cual a su vez activa la translocación de los transportadores de la glucosa, 
Glut-4, desde el citoplasma hasta la membrana celular, generando poros que permiten la entrada de la glucosa a la célula. Con la l legada del acil glicerol (AG) acil 
glicerol libre (AGL) se activa el diacilglicerol (DAG) y posteriormente la proteína cinasa C; a su vez fosforila el (IRS) pero ya no en los aminoácidos tirosina sino en los 
aminoácidos serina como consecuencia de esto el (IRS) ya no queda disponible para la insulina, ocasionando la (RI). 
 
 
17 
 
La insulina en el hígado, concluyendo que la producción endógena hepática 
de glucosa es fundamental en la hiperglucemia tanto de ayunas como postprandial, 
a través de la neo glucogénesis y el aumento 20 de la glicogenólisis, ambos 
modulados por la producción inapropiada de glucagón. 
Daño de la célula beta Este proceso se asocia con una predisposición 
genética, de tal manera que no todos los individuos desarrollarán diabetes mellitus 
tipo 2 (DM2), a pesar de presentar el receptor de insulina (RI) 
El proceso del daño de la célula β tiene relación con la producción de estrés 
oxidativo, derivado de la oxidación de la glucosa (glicogenólisis) y de la oxidación 
de los acil glicerol libre (AGL) (beta oxidación). 
Como se observa en la figura 4 
El estrés oxidativo disminuye factores de transcripción (expresados en 
páncreas y duodeno, de donde deriva su nombre, PDX-1) que ayudan a la 
reparación y regeneración de la célula β. 
 
Figura 4 
Fisiopatología de la diabetes mellitus tipo 2, Dr. Jorge Alejandro Castillo Barcias, El estrés oxidativo disminuye factores de transcripción (expresados en páncreas y 
duodeno, de donde deriva su nombre, PDX-1) que ayudan a la reparación y regeneración de la célula β. 
 
 
 
18 
 
Es muy probable que el daño inicial sea más un efecto de lipotoxicidad, propia 
de la liberación de los (AGL) desde adipocitos resistentes a la insulina, pero que en 
la medida que avanza la enfermedad se perpetúa por la glucotoxicidad 
 
Otros factores importantes en la fisiopatología de la diabetes mellitus tipo 2 
(DM2) Además del páncreas, el hígado y el musculo esquelético (ME), hay otros 
órganos involucrados en la fisiopatología de la (DM2) a los cuales sólo 
recientemente se les está dando la importancia debida. Dentro de estos nuevos 
jugadores encontramos el intestino, el íleon y colon, por medio de las células L, 
producen el péptido similar al glucagón tipo 1 (GLP-1) una de las “incretinas” de 
importancia en el origen de la (DM2), de la cual sabemos que incrementa la 
producción pancreática de insulina luego de la ingestión de comidas, por un 
mecanismo que involucra receptores en la célula β a través de la vía del adenosina 
mono fosfato (AMP) cíclico y que es glucosa dependiente; es decir, sólo actúa en 
condiciones de hiperglucemia. Recientemente se ha establecido que el daño de la 
célula β condiciona el deterioro del efecto “incretina” pero que puede ser 
compensado por efecto de medicamentos que aumentan las concentraciones de 
(GLP-1) como los inhibidores de la enzima dipeptidil peptidasa (DPP-IV) y por los 
análogos de incretina (exenatida y liraglutida). 
El riñón también juega un papel fundamental, no sólo porque es un órgano 
luconeogénico, sino porque regula la pérdida de glucosa en estado de 
hiperglucemia. A través de un transportador llamado sodio glucosa tipo 2 (SGLPT2), 
absorbe casi la totalidad de la glucosa filtrada; la inhibición de esta proteína augura 
un nuevo mecanismo para la regulación de la hiperglucemia, con la ventaja de que 
no aumenta de peso. (Asociación Colombiana de Endocrinología. Bogotá, 2014) 
 
 
 
 
 
 
 
19 
 
ESTADIOS DE LA DIABETES. 
 
En lo últimos años, el término “prediabetes”, antes utilizado y posteriormente 
desestimado, ha sido reintroducido en los tratados de diabeto logia para denominar 
los periodos preclínicos de la diabetes. 
Prediabetes; Es la fase que va desde la concepción hasta que se encuentra 
alguna alteración del metabolismo hidrocarbonado. Son probables pre diabéticos 
los hijos de padre, madre diabéticos. Gemelo univitelino cuyo hermanos diabético y 
mujeres con productos macrosómicos. 
Diabetes subclínica o latente. Es aquella fase de la vida de un diabético en la 
que se pone de manifiesto el trastorno con la ayuda de la prueba de intolerancia a 
la glucosa con calificación de dos puntos o más. 
Diabetes sintomática o manifiesta. Representa el cuadro clínico en el que 
ordinariamente existen hiperglucemia y glucosuria postprandial. A menudo se 
observan los síntomas clásicos poliuria, polidipsia, polifagia (menos frecuente) y 
adelgazamiento. En la fase inestable puede presentarse la cetoacidosis y el coma 
híper osmolar que pueden requerir de tratamiento hospitalario. 
Las alteraciones patológicas en los islotes pancreáticos en la diabetes varían 
entre diferentes pacientes y no son específicas para esta enfermedad. En la 
diabetes tipo I, de modo frecuente hay infiltración linfocítica de los islotes en la fase 
temprana, seguida por disminución en el número total y tamaño de los islotes, a 
causa o pérdida progresiva de células beta. 
Las alteraciones en la diabetes tipo II a menudo son mínimas en las etapas 
tempranas. En la enfermedad avanzada puede haber fibrosis y depósito amiloide 
en los islotes; en la diabetes, el amterila amiloide parece estar constituido en parte 
por insulina precipitada. A veces se observan alteraciones similares en los islotes 
en pacientes diabéticos de edad avanzada, y no se consideran diagnósticos de 
diabetes. (Chandrosoma, 1999) 
 
 
 
 
20 
 
4.4 SIGNOS YSÍNTOMAS 
 
Los síntomas clínicos de la diabetes mellitus (DM) son consecuencia de las 
repercusiones que origina la falta de insulina a nivel de las células de los distintos 
tejidos son: hígado, músculo y tejido adiposo. El déficit de insulina y/o la pérdida de 
su eficacia de acción a nivel de estos tejidos, originará una serie de alteraciones 
metabólicas en cadena, cuyas principales consecuencias serán; un incremento en 
la producción hepática de glucosa y una disminución en el consumo periférico de la 
misma en los tejidos muscular y adiposo. De esta manera, ni la glucosa procedente 
de los alimentos, ni la producida por el hígado puede ser metabolizada por las 
células y en consecuencia, se establece una situación de hiperglucemia que 
originará las complicaciones y los síntomas cardinales de la enfermedad: poliuria, 
polidipsia, polifagia, astenia y pérdida de peso. 
 
FIGURA 5 
Concepto y sintomatología de la diabetes mellitus, ROCHE, Los síntomas clínicos de la diabetes mellitus (DM) son consecuencia 
de las repercusiones que origina la falta de insulina a nivel de las células de los distintos tejidos son: hígado, músculo y tejido 
adiposo. El déficit de insulina y/o la pérdida de su eficacia de acción a nivel de estos tejidos, originará una serie de alteraciones 
metabólicas en cadena, cuyas principales consecuencias serán; un incremento en la producción hepática de glucosa y una 
disminución en el consumo periférico de la misma en los tejidos muscular y adiposo. De esta manera, ni la glucosa procedente 
de los alimentos, ni la producida por el hígado puede ser metabolizada por las células y en consecuencia, se establece una 
situación de hiperglucemia que originará las complicaciones y los síntomas cardinales de la enfermedad: poliuria, polidipsia, 
polifagia, astenia y pérdida de peso. 
 
 
21 
 
POLIURIA 
 
El aumento exagerado de la diuresis es quizá, la manifestación clínica más 
frecuente y precoz. Cuando la hiperglucemia supera el umbral renal para la glucosa 
(≈ 180 mg/dl), aparece la glucosuria que puede ocasionar pérdidas elevadas de 
glucosa y electrolitos a través de la orina. Se produce una importante diuresis 
osmótica (3-4 l/día), con eliminación excesiva de orina de elevada densidad durante 
el día y la noche. La elevada diuresis nocturna recibe el nombre de nicturia. 
 
POLIDIPSIA 
 
El incremento de sed es un mecanismo para contrarrestar la poliuria y evitar 
la deshidratación. Puede ser que la intensidad de la poliuria y la polidipsia varíe en 
relación con el nivel de glucemia, como consecuencia de variaciones en el umbral 
renal para la glucosa, que suele incrementarse con la edad. Este hecho, contribuye 
a que estos síntomas puedan pasar desapercibidos en las fases iniciales de la 
diabetes del adulto, especialmente en personas de edad avanzada. 
 
POLIFAGIA 
 
El exceso de apetito de los diabéticos es el reflejo del "hambre" de glucosa 
que tienen las células y traduce la insuficiente penetración de esta glucosa en los 
distintos tejidos. Además, la glucosuria implica una pérdida de "energía calórica" en 
forma de glucosa a través de la orina, que es necesario compensar. 
 
ASTENIA 
 
El cansancio es consecuencia de la alteración del metabolismo de la glucosa 
a nivel de las células musculares. Además de este déficit de "energía glucosa" en 
el tejido muscular, el deficiente aprovechamiento de las proteínas y de las grasas, 
 
 
22 
 
así como su elevada utilización energética en reemplazo de la glucosa que no puede 
ingresar al músculo, acompañado todo ello de la disminución del glucógeno en 
hígado y músculo, contribuyen al agotamiento progresivo de la persona diabética. 
 
PERDIDA DE PESO 
 
El adelgazamiento es también consecuencia de la pérdida de energía mediada 
por la glucosuria. Pero además, otras manifestaciones de la falta del efecto 
anabólico de la insulina en los tejidos como la disminución de la lipogénesis y el 
aumento de la lipolisis en el tejido adiposo, así como la proteólisis aumentada y la 
disminución de la síntesis de proteínas, colaboran significativamente en la pérdida 
de peso del diabético. 
 
OTROS SÍNTOMAS RELACIONADOS CON LA HIPERGLUCEMIA 
PRURITO 
 
La sensación de picazón o quemazón se debe a un aumento de la glucosa en 
el interior de las células dérmicas. Es más frecuente en genitales externos, 
especialmente en el sexo femenino, y suelen manifestarse como vulvovaginitis a las 
que no es raro que se asocien infecciones por cándidas. En el sexo masculino 
pueden manifestarse como inflamación del glande y prepucio llamado 
balanopostitis. 
 
INFECCIONES 
 
La hiperglucemia crónica es un medio favorable para el crecimiento 
bacteriano, favorecido por una disminución de la capacidad fagocitaria de los 
leucocitos y la glicosilación de las inmunoglobulinas. Las forunculosis, ántrax, 
orzuelos, flemones, abscesos, intertrigos inguinales y submamarios, se presentan 
con mayor frecuencia en personas diabéticas. El retraso en la cicatrización de las 
 
 
23 
 
heridas puede ser importante en las lesiones más distales de las extremidades 
inferiores, especialmente en presencia de vasculopatía periférica avanzada. Sin 
embargo la mala cicatrización de estas heridas, y de manera más concreta la de las 
heridas operatorias, se ha magnificado y puede estar relacionada con 
sobreinfecciones añadidas. 
 
HIPERSOMNIA POSTPRANDIAL 
 
Está relacionada con el aumento de glucemia y triglicéridos postprandiales en 
diabéticos mal controlados, agravada a veces por alteraciones circulatorias 
cerebrales, especialmente en diabéticos ancianos.(ACCU-CHEK,http://www.accu-
chek.com.uy/diabetes_mellitus.html 2014) 
 
Los síntomas más habituales y directamente relacionados con la hiperglucemia son: 
Poliuria (orinar más de lo habitual), Polidipsia (sed), Polifagia (aumento de apetito), 
Cansancio, Pérdida de peso. 
 
Otros síntomas frecuentes son: picor en la piel (sobre todo en los genitales), 
lenta cicatrización de las heridas, visión borrosa, adormecimiento de pies, etc. Las 
personas con diabetes pueden presentar algunos o ninguno de estos síntomas. 
Cuando la glucosa que va en la sangre llega al riñón, este la filtra y la devuelve de 
nuevo a la sangre, cuando la cantidad de glucosa en sangre es superior a 180 mg/dl, 
el riñón no puede retener tanta cantidad y empieza a eliminarla por la orina 
arrastrando consigo agua y por lo mismo el paciente empezará a orinar mucho, éste 
suele ser el primer síntoma de diabetes no controlada. La pérdida de agua a través 
de la orina estimula al cerebro para enviar un mensaje de sed (polidipsia). Cuando 
no hay insulina para hacer entrar glucosa a las células estas no pueden obtener 
combustible y no se alimentan, este hecho estimula al cerebro para que envíe un 
mensaje de hambre. 
 
 
24 
 
Debido a que la glucosa que debería alimentar a las células es eliminada por la 
orina, no les puede proporcionar energía, produce cansancio y fatiga además de 
pérdida de peso. (CONSALUD, 2013) 
 
4.5 DIAGNOSTICO 
¿Cómo se diagnóstica la Diabetes? 
 
Nivel de glucosa: 
Antes de 1997 la Asociación Americana de diabetes (ADA) y la (OMS) definían 
que pacientes con glucosa en ayuno arriba de 140 mg/ dl (7.8 mmol / litro) o glucosa 
plasmática mayor de 200 mg/dl (11.1 mmol/litro) después de 2 horas de realizado 
una Curva de Tolerancia a la Glucosa oral (CTGO) con 75gr de glucosa anhidra, 
esta definición estaba basada en las recomendaciones de la “National Diabetes 
Data Group”. 
Después de 1997 los criterios fueron modificados a los siguientes: 
Glucosa en ayuno de más de 126 mg/dl (7.0 mmol/litro) (A este nivel, las 
manifestaciones micro vasculares, son detectables). 
En pacientes sintomáticos, glucosa pos-prandio de más de 200 mg/dl 
establecen el diagnóstico y no requiere confirmación. 
Debemos recordar los términos ”intolerancia a la glucosa” definida como el 
valorentre 140 a 199 mg/dl de glucosa en sangre después de la (CTGO) y el término 
“intolerancia a la glucosa en ayuno” donde originalmente se identificaba como el 
valor de glucosa entre 110 y 125 mg/dl en ayunas, sin embargo la (ADA) y la OMS 
disminuyeron el valor de esta cifra quedando oficialmente como intolerancia a la 
glucosa en ayunas aquel valor de glucosa en sangre entre 100 y 125 mg/dl (5.6 a 
6.9 mmol/L) esto se hizo para incrementar la sensibilidad del diagnóstico de 
diabetes mellitus (DM). 
Las personas clasificadas en el rubro de “intolerancia” tienen del 5 al 10% de 
riesgo anual de desarrollar (DM), sin embargo pacientes que tienen ambas 
alteraciones, intolerancia a la glucosa e intolerancia a la glucosa en ayunos tienen 
 
 
25 
 
del 10 al 15% por año más que las personas con una sola alteración, es decir del 
20 al 35% de riesgo. 
La Hemoglobina Gli o Glucosilada (HbA1C), ha sido usada en el manejo de la 
diabetes ya establecida como biomarcador de control glucémico a largo plazo. Esta 
medida correlaciona bien pero no perfectamente los niveles de glucosa de 2 a 3 
meses previos. El problema había sido que el valor y medida de esta proteína no 
había sido estandarizado internacionalmente habiendo valores diferentes en 
poblaciones iguales. 
En 2009 el Comité de Expertos Internacionales recomiendan el uso de la 
hemoglobina glucosilada como método diagnóstico de DM si el valor está por 
encima de 6.5%. 
La ADA y la OMS adoptaron como método ayudante, la medición de la HbA1C. 
Sin embargo hay condiciones en las que el valor de la HbA1C tiene sus 
limitaciones por ejemplo en pacientes con hemoglobinopatías en las cuales el valor 
medido puede ser MENOR al valor real (talasemias) o en aquellas enfermedades 
en las que hay aumento de la producción de eritrocitos (anemia hemolítica o 
esferocitosis) o en estadios IV y V de la enfermedad renal crónica. 
Por el contrario, valores elevados falsos de HbA1C han sido reportados en 
pacientes con deficiencia de hierro o en otros estados de deficiencia en la 
producción de glóbulos rojos. (MEDICASOS, 2014) 
 
El diagnóstico debe hacerse sobre la base de Glicemia en muestra de sangre 
obtenida de la vena .Los valores considerados en la práctica clínica son de 
laboratorio en plasma .Los métodos de sangre capilar no son aceptados para 
diagnóstico, solo se aceptan para control y seguimiento. 
El diagnóstico se precisa con dos muestras, dos glicemias tomadas en 
diferente día .La presencia de síntomas evidentes “NO” constituye diagnóstico. Si 
ellos existen deben ser corroborados por las glicemias en los siguientes valores: 
GLICEMIAS en AYUNAS >126 mg /dl 
GLICEMIAS al AZAR (en cualquier momento del día) > 200 mg/dl 
 
 
26 
 
GLICEMIA en PRUEBA DE TOLERANCIA A LA GLUCOSA a las 2 horas, 
Con carga de 75 gr. de glucosa. 200 mg/dl Los valores intermedios de la prueba no 
hacen diagnóstico. 
 
El Diagnóstico de Intolerancia a la Glucosa se hace con la Prueba de Carga de 
Glucosa con 75 g .en ayunas, disolviendo la glucosa en 250 ml de agua. Y se toman 
muestras de sangre venosa a la hora 0 – 1 y 2. El diagnóstico se establece si la 
glicemia de las 2 horas está entre 140-200 mg, dl el diagnóstico de Intolerancia a la 
glucosa de ayunas se establece si la glicemia está entre 100 y 125, 9 mg /dl valores 
de glicemia en ayunas < 100 mg/dl son normales en la diabetes gestacional se 
aceptan los valores de Intolerancia a la Glucosa (criterio OMS), o sea glicemia a las 
2 horas >o igual a 140mg/dl. Además el Ministerio de Salud (MINSAL) en sus 
normas establece el criterio de diagnóstico de esta condición con glicemias en 
ayunas > 105 mg / dl. Los valores de Hemoglobina glicosilada se aceptan para 
control y seguimiento pero no para diagnóstico. (Facultad de Medicina Universidad de Chile, 2013) 
 
4.6 MANEJO TERAPEUTICO DEL PACIENTE DIABÉTICO 
 
Tiene un papel fundamental para que la terapia de la diabetes sea afectiva, 
además de constituir la mejor medida para lograr un buen control y prevenir y/o 
retardar la aparición de las complicaciones. La educación incluye tanto al enfermo 
como a su núcleo familiar y debe adecuarse a las características culturales y 
socioeconómicas de quienes la reciben. (Goodman, 2010) 
 
EJERCICIO. 
El ejercicio físico es un recurso auxiliar importante en la atención del diabético, 
con el que se obtiene un mayor beneficio cuando el programa se diseña con base 
en la condición física y motivación e intereses de cada paciente. Es un pilar 
fundamental en la terapia, porque aumenta la tolerancia a los hidratos de carbono y 
 
 
27 
 
la sensibilidad a la insulina, disminuye los factores de riesgo cardiovascular 
reducción de los triglicéridos y aumento de colesterol-HDL, eleva el estado de ánimo 
de los pacientes y mantiene el peso. También disminuye los requerimientos de 
insulina, favoreciendo un mejor control metabólico. (ACCU-CHEK, 2014) 
 
Beneficios que aporta el ejercicio 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
Además del mantenimiento de la masa corporal magra y el aumento en el gasto de 
energía. 
 
 
 
 
 
 De la concentración de glucemia durante y después del ejercicio. 
 De la concentración basal y posprandial de insulina. 
 De la concentración de hemoglobina glucosilada. 
Disminución De los triglicéridos totales. 
 Del colesterol total y de las lipoproteínas de baja densidad (LDL). 
 Del tejido adiposo. 
 De peso al combinarlo con un plan de alimentación adecuado. 
 
 De la sensibilidad a la insulina al incrementar el número de receptores insulínicos 
 y la afinidad con la hormona. 
Mejora En la concentración de los lípidos plasmáticos Aumento de las lipoproteínas de 
 alta densidad (HDL). 
 En el acondicionamiento cardiovascular. 
 En la sensación de bienestar y la calidad de vida. 
 
 
28 
 
DIETA. 
 
Al proporcionar los nutrientes y calorías apropiados a cada paciente es factible 
llevarlo y mantenerlo en el peso ideal, además de obtener un mejor control 
metabólico, minimizar las fluctuaciones de la glucemia tanto en ayuno como durante 
el periodo postprandial, mediante un balance adecuado de carbohidratos, proteínas 
y grasas. Esto influye favorablemente sobre las manifestaciones clínicas de la 
enfermedad y la limitación de la progresión de los cambios degenerativos que se 
manifiestan como complicaciones, y consecuentemente en el incremento de los 
años de vida saludable. 
 
 Para lograr el equilibrio entre los grupos de alimentos, la tendencia actual es 
administrar al diabético un porcentaje de hidratos de carbono similar al de una 
persona sana y reducir el aporte graso, en especial las grasas saturadas y el 
colesterol, debido a que los pacientes sometidos a este tipo de dietas presentan una 
menor incidencia de complicaciones y por lo tanto la morbilidad y mortalidad 
condicionadas por la enfermedad disminuyen. (Smith, 1993) 
 
Objetivos: Dar una alimentación equilibrada, contribuir a la normalización 
metabólica, contribuir a la normo glucemia evitar oscilaciones, disminuir el riesgo de 
complicaciones por aterosclerosis y normalización de peso. (A. Madrid, 2003) 
 
Hoy en día la alimentación del diabético no ha de ser muy distinta de la del no 
diabético, exceptuándose los alimentos indicados, el seguimiento de un horario, 
repartición y control de las cantidades sobre todo de los glúcidos. 
Glúcidos......................................55%( 15% de carbohidratos simples) 
Grasas..........................................30% 
(Saturadas: 1/3, monoinsat: 1/3, poliinsat: 1/3) 
Proteínas.......................................15%(4)Se recomienda una dieta rica en fibra. 
 
 
29 
 
Los componentes de las plantas, como celulosas, gomas y pectinas, no son 
digeribles por el hombre y se denominan “fibras” de la dieta. Las fibras insolubles, 
por ejemplo, celulosa o hemicelulosa, como las que se encuentran en el salvado, 
tienden a aumentar el tiempo de tránsito intestinal y pueden tener efectos benéficos 
en la función del colón. 
 En contraste, las fibras solubles (gomas y pectinas) como las de los granos 
de vaina, harina de avena y cáscara de manzana, tienden a retardar índices de 
absorción de nutrimentos de tal modo que la absorción de glucosa es más lenta y 
disminuye la hiperglucemia. La Asociación Americana de diabetes (ADA) 
recomienda alimento como avena, cereales o habas, cuyo contenido en fibra 
soluble es relativamente alto, como componentes esenciales en la dieta de los 
diabéticos. (Krupp.1979) 
 
Restricción de colesterol y ácidos grasos saturados. 
 
 El aporte de grasas en la dieta normal corresponde hasta 40% de las calorías 
totales; en los diabéticos se debe reducir a 30% e integrarse fundamentalmente por 
grasas insaturadas para reducir la ingesta de colesterol a cifras menores de 300 mg 
por día y disminuir el riesgo de aterogénesis. (IMSS, 1997) 
 
Edulcorantes artificiales. 
 
El edulcorante sacarina no nutritivo continúa utilizándose en ciertos alimentos 
y bebidas, a pesar de las advertencias recientes sobre su potencial carcinógeno a 
largo plazo en la vejiga; sin embargo, en pacientes con diabetes u obesidad, los 
médicos determinan individualmente su beneficio comparativo contra riesgo. 
 Se pueden permitir edulcorantes como la sacarina en cantidades < 500 mg/día 
o apártame < 50 mg/día. El sorbitol, manitol y fructosa contienen las mismas calorías 
que la glucosa, por lo que se debe tener cuidado con ellas. 
 
 
30 
 
Proteínas. 
 
El aporte de las proteínas ha de ser alrededor de 0.75-0.80g por kilo de peso 
y día, y aproximadamente del 12-15% del total calórico de los principios inmediatos. 
Es deseable introducir un porcentaje de proteínas de origen vegetal ya que las 
proteínas de origen animal van ligadas a grasas saturadas y colesterol. 
En los pacientes que ya tienen nefropatía la restricción es mayor (0.6 g/kg/día) 
para reducir la proteinuria y retrasar la progresión hacia insuficiencia renal. 
Carbohidratos. 
 
En la actualidad el aporte oscila alrededor del 55%. Del total de glúcidos tan 
solo el 15% será de tipo simple o de absorción rápida (en principio los 
monosacáridos y los disacáridos), el resto serán complejos (almidones) o de 
absorción lenta. (A. Madrid, .2003) 
 
Un individuo sano consume diariamente en una dieta normal entre 120 a 300g 
de hidratos de carbono, que representan 50% de las calorías totales y se 
constituyen por carbohidratos simples y complejos. Para calcular el aporte en 
hidratos de carbono es necesario hacer las siguientes consideraciones: 
 - El requerimiento mínimo diario es de 50 g para evitar la cetosis condicionada 
por el catabolismo proteico y graso. 
 - Son preferibles los carbohidratos complejos, que tienen la característica de 
absorberse lentamente debido la liberación gradual al torrente circulatorio de la 
glucosa que contienen, por lo que ejercen una acción moduladora sobre la 
concentración evitando las bruscas oscilaciones que condicionan hiperglucemia. 
 - El aumento en el consumo de carbohidratos simples o complejos incrementa 
el nivel de triglicéridos. 
 
 
 
 
 
31 
 
Sal 
 
 La cantidad de sal debe reducirse a 3 g/día debido a que en el diabético la 
hiperinsulinemia condicionada por la enfermedad incrementa la reabsorción renal 
de Na+ y de forma alterna estimula el sistema simpático, lo que favorece la 
asociación de hipertensión arterial y diabetes. En el paciente hipertenso se 
recomienda un consumo no mayor de 2.4 g/día. 
 
Vitaminas. 
 
 Los aportes de ácido ascórbico y vitaminas A y E son elementos 
complementarios de la dieta del diabético que tienen efecto benéfico al actuar como 
secuestradores de radicales libres, implicados en el desarrollo de aterosclerosis. El 
suministro de piridoxina reduce la proporción de hemoglobina glucosilada. (IMSS, 1997) 
 
Alcohol. 
El alcohol puede causar muchos problemas. Tiene la capacidad de disminuir 
la glucemia a través del bloqueo de la producción de glucógeno (glucosa en 
depósito), y de esa forma, se puede tener una reacción hipoglucemia. (Vargas, 1993) 
 
Se sugiere revisar y reajustar la dieta por lo menos cada seis meses o antes 
si el caso lo amerita. Para conocer el aporte que se proporciona en la dieta se 
recomienda utilizar el sistema de intercambio de alimentos diseñado por la American 
Dietetic Association (ADA) que divide en seis listas básicas los grupos alimenticios 
que contienen aproximadamente la misma cantidad de hidratos de carbono, lo que 
facilita el diseño de la dieta de acuerdo con las características del paciente. (IMSS, 
1997) 
 
 
 
 
32 
 
Horario de administración de insulina. 
 
Se aconseja que el número de tomas al día sea de 6 (imprescindiblemente en 
los pacientes tratados con insulina): desayuno, media mañana, almuerzo, merienda, 
cena y recena. 
El reajuste de horario y la cantidad de alimentos en las distintas colaciones 
contribuyen a un mejor control de la diabetes mellitus. 
No son aconsejables los ayunos prolongados, por el riesgo de provocar 
hipoglucemias: (sobre todo cuando se es tratado con insulinas o hipoglucemiantes 
orales). (A. Madrid, .2003) 
¿CUAL ES EL CUIDADO PARA EL TRATAMIENTO DE LA DIABETES? 
 
Los hábitos adecuados son: No fumar, reducción en el consumo de alcohol, el 
hacer ejercicio, una alimentación equilibrada para conseguir y mantener un peso 
ideal. 
 
¿CUALES SON LOS MEDICAMENTOS PARA LA DIABETES? 
 
Antidiabéticos orales. Son aquellos medicamentos que ayudan a controlar los 
niveles de glucosa en sangre. Los utilizan los pacientes diabéticos tipo 2, algunos 
junto con insulina. En general, deben tomarse con el estómago vacío, media hora 
antes de las comidas, algunos pueden producir efectos adversos como diarrea, 
dolor abdominal, hipoglucemia. (En esos casos, debe consultar a su médico). 
 
La insulina inyectable; Esta sustituye a la que no produce el organismo en los 
pacientes diabéticos. Hay varios tipos de insulina, según la rapidez de acción; 
Rápida, intermedia y prolongada, deben inyectarse debajo de la piel (subcutánea) 
en la dosis y pauta indicada por el médico. Se inyectan antes de las comidas (30 
min, variando todos los días los lugares de inyección). Deben guardarse en el 
frigorífico (excepto la aguja) y, antes de inyectarse, dejarlas unos minutos fuera de 
 
 
33 
 
él. Su efecto adverso más importante es la hipoglucemia el cual es un descenso del 
azúcar sanguíneo (glucosa) por debajo de 60 mg/dl. 
 
¿QUÉ SÍNTOMAS PRESENTA UN DIABETICO? 
 
Al principio: Sudoración, palpitaciones, nerviosismo, sensación de hambre, 
debilidad y modificaciones en el comportamiento. Si no se corrigen, pueden 
aparecer: visión borrosa, dificultad para hablar, confusión y pérdida de 
conocimiento. 
 
¿POR QUÉ SE PRODUCE LA DIABETES? 
 
Por una dosis excesiva de insulina o de otros medicamentos antidiabéticos. 
Por una insuficiente ingesta de hidratos de carbono, o retraso en el horario de ella. 
Por un excesivo ejercicio físico. Por una combinación de varios de esos factores. 
 
¿CÓMO PREVENIR LA DIABETES? 
 
Utilice los medicamentos tal como le indico su médico. Lleve un horario de 
alimentación regular, sin excesos ni carencias. Antes de los ejercicios inusuales, 
aumente la ingesta de hidratos de carbono y realice más controles de glucemia, 
lleve siempre azúcar consigo, tenga en casa una ampolleta de glucagón. 
 
Si su médico le prescribió un medicamento, utilícelo. No tome medicamentos 
sin consultar con su médico. La eficacia del tratamientodepende de los 
medicamentos, de su correcta utilización por usted y de las características de cada 
paciente. Los objetivos a alcanzar deben ser establecidos entre usted y su médico. 
 
Los controles periódicos de glucemia, indican si su tratamiento está siendo eficaz. 
Todos los medicamentos pueden provocar efectos adversos, sobre todo si son mal 
 
 
34 
 
utilizados, generalmente aparecen en pocas ocasiones y tienen poca importancia. 
Debe conocer los posibles efectos adversos de su tratamiento para detectarlos. Si 
en algún momento nota algún problema de salud relacionado con los 
medicamentos, no modifique ni suprima su tratamiento, consulte a su médico o 
farmacéutico. (Consejo General de Colegios Oficiales de Farmaceuticos, 2014) 
 
4.7 HIPOGLUCEMIANTES ORALES 
 
En la actualidad sólo se emplean dos tipos de hipoglucemiantes orales: sulfonilureas 
y biguanidas. (IMSS, 1997) 
Para pacientes obesos: no están indicadas la insulina o las sulfonilureas, ya 
que con el uso del tratamiento a base de estas puede interrumpirse el programa de 
disminución de peso a consecuencia de las reacciones hipoglucémicas y el aumento 
de peso es una complicación frecuente. En caso de requerirse la farmacoterapia, la 
mono terapéutica con inhibidores de la -glucosidasa o metformina puede ser útil 
en el paciente con diabetes leve, toda vez que la administración de estos no se 
acompañe de aumento de peso o hipoglucemia inducida por estos pacientes no 
obesos: En caso de que la dieto terapia sea insuficiente para corregir la 
hiperglucemia, una experiencia de sulfonilureas a menudo tiene éxito, si el paciente 
no es capaz de conservar la concentración de glucosa en ayuno por debajo de 
40mg/dl deberá intentarse la terapéutica con metformina. (Lawrence, 2010) 
 
Sulfonilureas 
 
Las sulfonilureas se han estado utilizando desde 1955 como agentes 
hipoglucemiantes, actúan fundamentalmente al estimular la secreción de insulina. 
Entre los posibles efectos extra pancreáticos de las sulfonilureas, algunos estudios 
señalan que mejoran la sensibilidad a la insulina y el número de receptores de ésta, 
y que la terapia crónica con ellas, reduce la producción de glucosa hepática y la 
 
 
35 
 
consecutiva hiperglucemia de ayuno o basal, en pacientes con diabetes mellitus 
insulinodependiente (DMNID) con cambios mínimos en la concentración de insulina 
plasmática. Se ha planteado que la glicazida incrementa la actividad de la 
glucógeno-sintetasa estimulada por la insulina en el músculo estriado, aunque no 
existió correlación entre el grado de mejoría del control glucémico y la respuesta de 
la enzima. 
Existen más argumentos en contra que a favor de significativos efectos extra 
pancreáticos de las sulfonilureas: 
Las sulfonilureas no disminuyen la hiperglucemia en enfermos con (DMID) y 
en animales pancreatectomizados. 
Muchas de las conclusiones acerca de los efectos hepáticos de las 
sulfonilureas se realizaron sobre la base de concentraciones de insulina periférica 
inalteradas. Debido a la extrema sensibilidad del hígado a los pequeños cambios de 
la insulina, es posible que los cambios mínimos en los niveles de insulina de la 
circulación portal se hayan pasado por alto. 
También han existido dificultades en confirmar informes iniciales sobre unión 
de los receptores a la insulina por efectos de las sulfonilureas en pacientes con 
diabetes mellitus tipo 2 (DM 2). 
Probablemente el más importante argumento estaría en que la hiperglucemia 
crónica puede causar resistencia insulínica hepática y periférica, la cual puede ser 
atenuada al mejorar el control glucémico, independientemente del modo de 
tratamiento. (Bayer de México, 2002) 
 
Son eficaces en pacientes con (DM 2) en los que el empleo de 
hipoglucemiantes orales no está contraindicado, es decir, en pacientes que tienen 
secreción endógena de insulina, no son alérgicos a las sulfas, no tienen daño 
hepático o renal severo, no estar embaraza, no están amamantando ni tienen 
descontrol que amerite hospitalización. 
El beneficio que aportan las sulfonilureas es estimular las células beta del 
páncreas. Las nuevas sulfonilureas del tipo de la glimepirida tienen acción en 
 
 
36 
 
receptores específicos de sulfonilureas y condicionan una respuesta más fisiológica 
en la producción de insulina. La persistencia de niveles de glucemia adecuados a 
pesar de un incremento en los niveles de insulina sugiere algunas acciones extra 
pancreáticas de esta familia de fármacos. (IMSS, 1997) 
 
Propiedades químicas de las sulfonilureas. 
 
Se dividen tradicionalmente en dos grupos o generaciones de fármacos. Todos 
los miembros de esta clase de fármacos son arilsulfonilureas sustituidas. Difieren 
por sustituciones en la posición para el anillo benceno, y en un residuo de nitrógeno 
de la mitad de urea. El primer grupo de sulfonilureas incluye tolbutamida, 
acetohexamida, tolazamida y clorpropamida. Ha surgido una segunda generación 
de sulfonilureas hipoglucemiantes que son mucho más potentes que los fármacos 
más tempranos (glibenclamida, Glipicida y Glicacida). (A. Madrid, .2003) 
 
Mecanismo de acción de las sulfonilureas. 
 
Disminuyen la glucosa sanguínea principalmente por estimulo de la liberación 
de insulina desde las células de los islotes pancreáticos. Provocan la des 
granulación de las células ß de los islotes e incrementan así la secreción de insulina. 
(IMSS, 1997) 
 
Las sulfonilureas actúan con gran afinidad sobre los receptores asociados a 
los canales de K- sensibles a ATP; como consecuencia de esta acción, el canal se 
cierra y la despolarización inducida facilita la secreción de insulina. 
 
A la larga, la tolerancia a la glucosa mejora, pero los niveles plasmáticos de 
insulina, no permanecen altos sino que pueden ir descendiendo; de ahí que se 
piense que la acción mantenida de los hipoglucemiantes orales se deba no solo a 
 
 
37 
 
la acción secretadora de insulina en el páncreas sino también a una mejora o 
potenciaciación de la hormona en los tejidos. (Florez, 2013) 
 
FARMACODINAMIA 
 
 En general se absorben rápido. La concentración máxima se alcanza en corto 
tiempo y se difunden con rapidez a los tejidos. Su principal efector es la célula beta. 
Se unen a las proteínas plasmáticas en más de 90%, lo que les confiere acción 
prolongada; Debido a esta propiedad, en el tratamiento crónico se recomienda una 
o dos dosis diarias. Su degradación se lleva a cabo principalmente en el hígado y 
sus catabolitos son eliminados por el riñón o la bilis. 
 
Algunos de los catabolitos pueden tener acción hipoglucemiante como la 
clorpropamida y la glibenclamida; esta condición explica que en ocasiones tengan 
una acción aún más prolongada, sobre todo en pacientes con insuficiencia renal. 
(IMSS, 1997) 
 
La vida media y lo extenso del metabolismo de las sulfonilureas de primera 
generación varían considerablemente (4-7 horas.). Los medicamentos de segunda 
generación son unas 100 veces más potentes que los de primera generación. Si 
bien sus vidas medias son breves (1.5-5hrs), sus efectos hipoglucemiantes quedan 
de manifiesto durante 12-24 horas., y a menudo es posible administrarlos una vez 
al día. 
 
INDICACIONES 
 
 Las sulfonilureas sólo se encuentran indicadas en pacientes que no hayan 
logrado su control óptimo con la dieta y el ejercicio. Para obtener un mayor beneficio 
se deben utilizar ante las siguientes condiciones: 
 
 
38 
 
 - Edad mayor de 40 años. 
- Peso normal o sobrepeso. 
 - Evolución de la enfermedad menor de 10 años. 
 - Control de la enfermedad con menos de 40 unidades diarias de insulina. 
 - Cifras de glucemia menores a 300 mg/dL. 
 - Cumplimiento de la dieta y del ejercicio físico programados 
 - Contraindicaciones 
 Las más importantes son: 
 - DM 1, ya sea auto inmunitaria o por otras enfermedades pancreáticas. 
 - Embarazo o lactancia. 
 - Infeccionesgraves. 
 - Descontrol metabólico agudo. 
 - Cetoacidosis o estado híper osmolar. 
 - Traumatismo grave. 
 - Estrés grave. 
 - Alergia a las sulfas. 
 - Pacientes que tengan riesgo de presentar hipoglucemia como ancianos, 
anoréxicos, con baja ingesta de calorías, insuficiencia hepática o renal en fase 
terminal. 
- Efectos adversos de las sulfonilureas 
 Se manifiestan en los siguientes sitios: 
Sangre: agranulocitosis, anemia aplástica y hemolítica. 
 Piel: prurito, edema nodoso, eritema multiforme, dermatitis exfoliativa, 
síndrome de Stevens-Johnson, foto sensibilidad. 
 Aparato digestivo: náusea, vómito, pirosis, ictericia, hepatitis granulomatosa, 
colestasis. 
 Estrategias en el tratamiento, en pacientes en quienes se inicia tratamiento 
con sulfonilureas se puede escoger cualquiera administrada media hora antes del 
desayuno en una sola toma. La dosis debe adecuarse cada semana hasta alcanzar 
 
 
39 
 
el control óptimo o la dosis máxima permitida. Cuando se logra el control deberá 
continuarse con la misma dosis y realizar adecuaciones sólo cuando sea necesario. 
 Es importante que el médico insista que aun con el tratamiento con 
hipoglucemiantes es necesario cumplir con la dieta, el ejercicio físico y las citas 
médicas asignadas para el control de la enfermedad, con la finalidad de obtener la 
respuesta esperada e identificar las fallas por la presencia de infecciones o 
complicaciones. 
 Se ha estimado que de 10 a 30% de los pacientes tratados con sulfonilureas 
presenta falla primaria, es decir, no obtiene un control adecuado en la fase inicial 
por selección equivocada del medicamento. De 5 a 10% de los diabéticos presenta 
falla secundaria, es decir, respuesta inadecuada a las sulfonilureas por falta de 
cumplimiento a la dieta y ejercicio físico, presencia de enfermedades intercurrentes 
tales como infarto agudo de miocardio, infecciones no diagnosticadas, 
hipertiroidismo, administración de otros medicamentos o falla verdadera de las 
sulfonilureas. 
 Cuando la falla de las sulfonilureas no se corrige con las medidas anteriores 
se puede intentar la combinación de éstas con biguanidas, ya que sus efectos son 
sumatorios, iniciando con la dosis media de ambos hipoglucemiantes. 
 
INTERACCIÓN DE MEDICAMENTOS CON SULFONILUREAS 
 
 Los medicamentos interactuantes más comunes según su tipo de acción son 
los siguientes: 
 Acción antagónica. Alteran la acción o secreción de insulina: diuréticos, 
difenilhidantoína, betabloqueadores, esteroides, estrógenos, indometacina, 
isoniacida, ácido nicotínico. 
Acortan la vida media de las sulfonilureas: alcohol y rifampicina. 
 Acción sinérgica. Desplazan las sulfonilureas de las proteínas: sulfonamidas, 
salicilatos, pirazolonas, clofibrato. 
 
 
40 
 
Prolongan la vida media al impedir el catabolismo: dicumarol, cloranfenicol, 
pirazolona, inhibidores de la monoaminooxidasa. 
Disminuyen la eliminación renal: Salicilatos, pirazolonas, sulfonamidas y alopurinol. 
(A. Madrid, .2003) 
BIGUANIDAS 
 
Estos medicamentos fueron introducidos en el mercado como agentes 
hipoglucémicos en 1957. De éstos se mantiene en uso el metformin, que a 
diferencia de las sulfonilureas, no causa hipoglucemia por debajo de los niveles de 
normo glucemia, ni tampoco aumento de peso. (Bayer de México, 2002) 
-Mecanismo de acción. 
A nivel celular las biguanidas se fijan a la membrana mitocondrial, donde podrían 
alterar los sistemas de transporte; pero también se ha observado que pueden 
aumentar la afinidad de la fijación de los receptores a la insulina. (Florez, 2013) 
No sólo mejoran las cifras de glicemia, sino que también reducen el peso 
corporal de manera significativa, a la vez que tienen un conveniente efecto sobre 
los lípidos (reducción del colesterol total, LDL y triglicéridos). (Endocrinología, 2000) 
 
Más que verdaderos hipoglucemiantes son medicamentos cuyo modo de 
acción es disminuir la producción hepática de glucosa, aumentar la captación de 
glucosa por los tejidos, favorecer el transporte intracelular de glucosa, mejorar la 
sensibilidad a la insulina y disminuir el apetito. 
 
- Farmacodinamia 
 La absorción de las biguanidas es rápida, alcanza su máxima concentración 
entre 1 y 2.5 horas y de 50 a 60% es biodisponible y no se une a las proteínas del 
plasma. Se eliminan por riñón e intestino, su vida media es de 2 a 4.5 horas y 90% 
es depurado por el riñón a las 12 horas. 
- Indicaciones 
 
 
41 
 
 Por sensibilizar a la acción de la insulina endógena se han utilizado en otros 
estados de resistencia a la insulina. Se encuentran indicadas en pacientes con (DM 
2), sobrepeso e hipertrigliceridemia sin respuesta adecuada a la dieta y ejercicio, en 
pacientes con falla primaria o secundaria a las sulfonilureas. En los ancianos 
deberán emplearse con precaución, debido a que incrementa la probabilidad de 
acidosis láctica, sobre todo en pacientes mal seleccionados. 
 
- Contraindicaciones 
 Estas son las más frecuentes: 
Insuficiencia renal, Insuficiencia hepática, Insuficiencia cardiaca, Insuficiencia 
respiratoria, Enfermedades respiratorias crónicas, Embarazo, Pacientes con 
alcoholismo, Antecedentes de acidosis láctica. (IMSS, 1997) 
 
- Estrategias en el tratamiento 
 
 Las biguanidas se utilizan en primera instancia en pacientes obesos y en 
asociación con las sulfonilureas cuando éstas fallan. Habitualmente se comienza 
con dosis de 500 o 425 mg, 1 vez al día, y se incrementa a intervalos semanales, 
hasta que se alcanza el control glucémico. 
 
- Efectos adversos. 
Anorexia, náuseas, molestias abdominales, diarreas y mala absorción de vitamina 
B12, aunque la anemia perniciosa es rara. El más peligroso efecto colateral sería la 
acidosis láctica, que es infrecuente cuando la indicación del medicamento es 
adecuada. (Bayer de México, 2002) 
 
 
 
 
 
 
 
42 
 
GLITAZONAS (Tiazolidinedionas) 
 
Durante los últimos 10 años, varios agentes se han identificado por su 
mecanismo de incrementar la acción insulínica, in vivo e in vitro, sin estimular la 
secreción de ésta. El agente característico de este tipo es el ciglitazone (ADD-3878) 
que fue inicialmente descubierto por investigadores de la Takeda Chemical 
Industries, en Osaka, Japón, a partir de un estudio con posibles agentes 
hipolipemiantes. 
 
El mecanismo molecular básico para la acción de las tiazolidinedionas sobre 
la resistencia insulínica, ha sido difícil de estudiar en modelos animales, debido a 
que el metabolismo de la glucosa y los lípidos, es regulado por complejos sistemas 
de retroalimentación, pues los cambios inducidos por drogas y hormonas son 
rápidamente contra regulados. El efecto de esta familia de drogas parece reflejar un 
acontecimiento transcripcional temprano en la diferenciación del adipocito y entre 
los candidatos para dicho efecto se han identificado los llamados receptores de la 
proliferación activada del peroxisoma (PPARs), miembros de los factores de 
transcripción de la súper familia de receptores nucleares de hormonas tiroideas y 
esteroideas. La unión de las tiazolidinedionas con los PPARs puede inducir la 
interacción de complejos con secuencia específica de ADN a genes que responden 
a ellas y que en modelos hipotéticos, pueden regular la lipasa de lipoproteínas, que 
a su vez están reguladas por factores de transcripción regulados por la insulina. Los 
PPARs pueden inducir expresión de genes que codifican proteínas, los cuales 
responden a la acción de la insulina, tales como los transportadores de glucosa. 
(Goodman, 2010) 
 
Son anti hiperglucemiantes en diversos modelos de animales resistentes a la 
insulina y diabéticos. Al igual que la biguanidas no causan hipoglucemia en 
personas diabéticas o normales. (A. Madrid, .2003) 
 
 
 
43 
 
Las tiazolidinadionas actúan en una serie de lugares para disminuir la glucosa 
en sangre. Por una parte, reducen la producción excesiva deglucosa a nivel del 
hígado pero, además, permiten que la insulina trabaje mejor a nivel del músculo y 
en el tejido adiposo. Hasta el momento se conocen tres fármacos pertenecientes a 
este grupo: 
- Troglitazona 
- Rosiglitazona 
- Pioglitazona 
 
INHIBIDORES DE LA -GLUCOSIDASA. 
 
Actúan interfiriendo con la absorción de azúcar en el intestino después de las 
comidas. Esto lo consiguen inhibiendo las llamadas alfa-glucosidasas intestinales, 
que son las enzimas necesarias para degradar los hidratos de carbono complejos 
en monosacáridos (glucosa, fructosa). El resultado es una demora en la digestión y 
absorción de los hidratos de carbono con reducción de los picos glucémicos que 
ocurren después de la ingesta de alimentos. 
 
No producen hipoglucemia. Sin embargo, dado que a menudo pueden asociarse a 
otros medicamentos que sí la provocan, como la insulina, es necesario saber que 
la conducta a seguir ante una hipoglucemia en estos casos es distinta de la habitual. 
En caso de hipoglucemia no debe intentar solucionar ésta con azúcar común 
(sacarosa), con leche (lactosa) o con un pedazo de pan (almidón), ya que la eficacia 
de estos alimentos en vencer la caída de la glucosa en sangre puede ser mucho 
menor de la prevista, precisamente por el efecto inhibidor de estos fármacos sobre 
las glucosidasas, que convierten el azúcar, la lactosa y el almidón en glucosa. Por 
lo tanto, es necesario sustituirlos por glucosa o fructosa (lleve siempre tabletas de 
glucosa o fruta), que no necesitan la acción de las glucosidasas para absorberse. 
(CONSALUD,2013) 
 
 
 
44 
 
Dentro de los inhibidores de las alfa-glucosidasas intestinales (maltasas, 
sacarasas, dextrinasas, glucoamilasas) presentes en las vellosidades intestinales, 
que son las enzimas que actúan en el desdoblamiento de la sacarosa, maltosa y 
otros oligosacáridos en monosacáridos (glucosa, fructosa, galactosa). El resultado 
es una demora en la digestión de los hidratos de carbono con reducción de los picos 
glucémicos postprandiales. También actúan disminuyendo la secreción de 
polipéptidos intestinales. 
Su utilidad clínica es la corrección de hiperglucemias postprandiales. Se puede 
utilizar sola o en combinación con insulina o sulfonilureas. 
No producen hipoglucemia, pero cuando se da asociada a insulina o 
sulfonilureas hay que tener en cuenta que si se produce una hipoglucemia ésta no 
puede tratarse con disacáridos (lactosa de la leche, o sacarosa del azúcar) sino que 
debe utilizarse glucosa pura (Biberón glucosado Farmiberia (R), Glucosport (R) 
Mecanismo de acción: Actúan inhibiendo las alfa-glucosidasas intestinales 
(maltasas, sacarasas, dextrinasas, glucoamilasas) presentes en las vellosidades 
intestinales, que son las enzimas que actúan en el desdoblamiento de la sacarosa, 
maltosa y otros oligosacáridos en monosacáridos (glucosa, fructosa, galactosa). El 
resultado es una demora en la digestión de los hidratos de carbono con reducción 
de los picos glucémicos postprandiales. También actúan disminuyendo la secreción 
de polipéptidos intestinales. 
- Eficacia: Se ha descrito un efecto sobre la hiperglucemia menor que con las 
sulfonilureas y la metformina: reducción de 25-30 mg/dl en la glucemia basal, 40-50 
mg/dl en la glucemia postprandial, y de 0,5 – 0.8% en la HbA 1c. Su utilidad clínica 
es la corrección de hiperglucemias postprandiales. Se puede utilizar sola o en 
combinación con insulina o sulfonilureas o metformina (esta última asociación se 
recomienda menos por aumento de efectos secundarios gastrointestinales). 
- Indicaciones: En la DM tipo 2 no adecuadamente controlada con dieta para 
corregir hiperglucemias moderadas, fundamentalmente postprandiales cuando las 
preprandiales se mantienen en niveles aceptables. También puede asociarse en 
 
 
45 
 
terapia combinada a sulfonilureas o insulina. Su efecto es menor en los pacientes 
que toman pocos hidratos de carbono en la dieta. (Vargas, 1993) 
 
 INSULINA 
 
El tratamiento con insulina en pacientes con Diabetes Mellitus Insulino 
Dependientes (DMNID) depende sobre todo del grado de severidad del desorden 
metabólico. Pacientes con glucemias de ayuno menores de 7.8 mmol/l (140 mg/dL) 
en la práctica diaria no requieren insulina; por el contrario, si al diagnosticar los 
síntomas de diabetes, los niveles de glucemia están por encima de 15 mmol/l, es 
recomendable iniciar el tratamiento con insulina. (Bayer de mexico, 2002) 
 En los pacientes con Diabetes Mellitus (DM) tipo2 que presentan falla primaria 
o secundaria a los hipoglucemiantes orales es posible añadir una pequeña dosis de 
insulina intermedia y cuando este procedimiento no resulte adecuado, se 
suspenderán los hipoglucemiantes orales para continuar el control exclusivamente 
con insulina. Algunos diabéticos obesos presentan resistencia a la insulina, por lo 
que en ocasiones requieren dosis mayores. El esquema de su aplicación y sus 
modificaciones posteriores pueden ser similares a las que se siguen en los 
pacientes con DM tipo1. 
 
Las preparaciones de insulina pueden clasificarse, según su duración, en: de 
acción corta, intermedia y prolongada, y según la especie de origen: humana, 
porcina, bovina, o una mezcla de bovina y porcina. Las propiedades fisicoquímicas 
de las insulinas humana, porcina y bovina difieren debido a sus secuencias de 
aminoácidos distintas. La insulina humana, producida por medio del uso de 
tecnología de DNA recombinante, es más soluble que la insulina porcina en 
soluciones acuosas debido a la presencia de treonina (en lugar de alanina) con su 
grupo hidroxil adicional. (IMSS, 1997) 
 
 
 
46 
 
Mecanismo de acción. 
 
La insulina se fija a receptores específicos de membrana situados en las 
células insulino-sensibles, muy preferentemente a la subunidad α, como 
consecuencia de esta fijación la subunidad β, que es la que tiene propiedades 
proteincinasa se autofosforila. La acción celular de la insulina se manifiesta en forma 
de un conjunto de acciones celulares que involucran muy diversas funciones. 
Destacan entre ellas: (a) la activación del transporte de iones, hexosas y 
aminoácidos a través de la membrana celular, y (b) la activación e inhibición de 
numerosas enzimas cuyo resultado final se resume en la estimulación de procesos 
anabólicos y estimulación de procesos catabólicos. 
 
CLASIFICACIÓN: 
 
- Insulinas de acción corta. 
Son simplemente soluciones de insulina-zinc cristalina regular (insulina para 
inyección) disueltas en un amortiguador a un pH neutro, poseen el inicio de acción 
más rápido pero acción más breve. Por lo general deben inyectarse 30-45 minutos 
antes de las comidas. Los usos de insulina por vía intravenosa son útiles en 
pacientes con cetoacidosis o cuando los requerimientos de esta sustancia pueden 
cambiar con rapidez, como durante el perioperatorio, parto, trabajo de parto y en 
situaciones de cuidado intensivo. 
Cuando las condiciones metabólicas son estables, esta insulina se administra 
por vía subcutánea en combinación con una preparación de acción intermedia o 
prolongada. La insulina de acción corta es la única forma de la hormona que puede 
usarse en bombas de administración subcutánea. 
- Insulina de acción semilenta. 
Posee duración de acción más prolongada. Solo está disponible como insulina 
bovina, o porcina, o ambas, y rara vez es utilizada. 
- Insulinas de acción intermedia. 
 
 
47 
 
 Están formuladas de modo que se disuelven de modo más gradual cuando se 
proporcionan por vía subcutánea así, la duración de acción es más prolongada. Las 
dos preparaciones que se utilizan con mayor frecuencia son la insulina protamina 
neutra hagedorn (NPH), suspensión de insulina isofano e insulina lenta (insulina 
zinc en suspensión). 
En pacientes con diabetes no insulinodependiente, la insulina de acción 
intermedia antes de acostarse puede ayudar a normalizar la glucemia

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