Descarga la aplicación para disfrutar aún más
Vista previa del material en texto
UNIVERSIDAD NACIONAL AUTÓNOMA DE MÉXICO HOSPITAL GENERAL “DR. MANUEL GEA GONZÁLEZ” TESIS TITULADA Características neurológicas y complicaciones de la meningitis tuberculosa en adultos del Hospital General “Dr. Manuel Gea González” durante el periodo de 2006 a 2010. QUE PARA OBTENER EL TÍTULO DE ESPECIALISTA EN MEDICINA INTERNA PRESENTA DRA. CYNTHIA PAMELA ALATORRE FERNÁNDEZ TUTOR DRA. ELVIRA CASTRO MARTÍNEZ M é x i c o , D . F . Julio 2010 UNAM – Dirección General de Bibliotecas Tesis Digitales Restricciones de uso DERECHOS RESERVADOS © PROHIBIDA SU REPRODUCCIÓN TOTAL O PARCIAL Todo el material contenido en esta tesis esta protegido por la Ley Federal del Derecho de Autor (LFDA) de los Estados Unidos Mexicanos (México). El uso de imágenes, fragmentos de videos, y demás material que sea objeto de protección de los derechos de autor, será exclusivamente para fines educativos e informativos y deberá citar la fuente donde la obtuvo mencionando el autor o autores. Cualquier uso distinto como el lucro, reproducción, edición o modificación, será perseguido y sancionado por el respectivo titular de los Derechos de Autor. 2 Este trabajo fue realizado en el Hospital General “Dr. Manuel Gea González” en el Servicio de Neurología, División de Medicina Interna bajo la dirección de la Dra. Elvira Castro Martínez. 3 Este trabajo de Tesis con No. 14‐13‐2010, presentado por la alumna Cynthia Pamela Alatorre Fernández se presenta en forma con visto bueno por el Investigador Responsable de la Tesis Dra. Elvira Castro Martínez con fecha del 30 de Julio de 2010 para su impresión final. Investigador Responsable Dra. Elvira Castro Martínez 4 AUTORIZACIONES Dr. Octavio Sierra Martínez Director de Enseñanza e Investigación Hospital General “Dr. Manuel Gea González” _______________________________________ Dra. María Elisa Vega Memije Subdirectora de Enseñanza e Investigación Hospital General “Dr. Manuel Gea González” _______________________________________ Dr. Rogelio Zacarías Castillo Jefe de la División de Medicina Interna Hospital General “Dr. Manuel Gea González” _______________________________________ Dra. Elvira Castro Martínez Médico Neurólogo adscrito a la División de Medicina Interna Hospital General “Dr. Manuel Gea González” _______________________________________ 5 “Características neurológicas y complicaciones de la meningitis tuberculosa en adultos del Hospital General “Dr. Manuel Gea González” durante el periodo de 2006 a 2010.” COLABORADORES: Investigador responsable: Dra. Elvira Castro Martínez. ________________________________ Investigador Principal: Dra. Cynthia Pamela Alatorre Fernández. ________________________________ Investigador asociado: Dra. Jazmín Teresa Pozos López. ________________________________ Investigador asociado: Dr. Juan Andrés Méndez García. ________________________________ 6 AGRADECIMIENTOS Agradezco a Dios por la vida, por las bendiciones recibidas y por inspirarme a estudiar medicina y darme la fuerza, perseverancia, paciencia y sabiduría para poder enfrentar todos los retos a los que me he enfrentado. Gracias a mis papas, Azucena y Antonio, por darme una familia unida, por estar siempre conmigo, aún cuando las distancias nos separaron, por permitirme aprender de mis errores, por apoyarme en mis decisiones y por ser un ejemplo de trabajo y superación. Gracias a mis hermanos Ana y Joaquín, por acompañarme a lo largo de mi vida y crecer conmigo. Gracias a mi esposo, Jorge Enrique, que ha sido mi compañero de toda la vida por construir y haber hecho realidad muchos sueños juntos, por darme la confianza para enfrentar nuevos retos y por darme su amor y apoyo incondicional. Gracias a mis amigos de la vida y de la carrera por darle la chispa de alegría y diversión a los momentos difíciles y por crecer junto a mi desde que éramos medicoblastos hasta ahora que somos médicos especialistas. Gracias a mis maestros por su paciencia, su ejemplo y por esforzarse siempre por ponerme nuevos retos que sacaran lo mejor de mi. Gracias a los pacientes porque la sabiduría de los libros nunca igualará los conocimientos aprendidos al escuchar y atender a los pacientes todos los días. 7 “Dondequiera que se ama el arte de la medicina se ama también a la humanidad.” Platón 8 INDICE Glosario ............................................................................................................................... 9 Relación de figuras, tablas y gráficas ................................................................................. 10 Resumen ............................................................................................................................ 11 Abstract ............................................................................................................................. 12 1. Introducción ................................................................................................................... 13 2. Antecedentes ................................................................................................................. 16 2.1.Epidemiología ......................................................................................................... 16 2.2.Fisiopatología .......................................................................................................... 16 2.3. Cuadro Clínico ........................................................................................................ 17 2.4. Diagnóstico ............................................................................................................. 19 2.5. Complicaciones ...................................................................................................... 22 2.6. Tratamiento ........................................................................................................... 23 2.7. Pronóstico ............................................................................................................. 25 3. Justificación ................................................................................................................... 26 4. Pregunta de Investigación ............................................................................................. 28 5. Objetivos ........................................................................................................................ 28 5.1. Objetivo General ................................................................................................... 28 5.2. Objetivos Particulares ........................................................................................... 28 6. Material y Métodos ....................................................................................................... 28 6.1. Tipo de estudio ..................................................................................................... 28 6.2. Ubicación temporal y espacial .............................................................................. 28 6.3. Criterios de selección de la muestra .................................................................... 29 6.4. Variables ...............................................................................................................30 6.5. Universo de estudio .............................................................................................. 30 6.6. Métodos de laboratorio ....................................................................................... 31 6.7. Análisis estadístico ................................................................................................ 31 6.8. Descripción operativa del estudio ........................................................................ 31 7. Resultados ..................................................................................................................... 32 8. Discusión ........................................................................................................................ 42 9. Conclusiones .................................................................................................................. 45 10. Perspectivas ................................................................................................................. 46 11. Bibliografía ................................................................................................................... 47 12.1. Anexo No. 1. Hoja de recolección de datos .............................................................. 50 12.2. Anexo No. 2 Algoritmo diagnóstico de tuberculosis meníngea ............................... 51 9 GLOSARIO ADA: Adenosina Deaminasa BAAR: Bacilo Ácido Alcohol Resistente DM: Diabetes Mellitus E: Etambutol H: Isoniacida IL: Interleucina LCR: Líquido Cefalorraquídeo MbTb: Mycobacterium tuberculosis MHC: Complejo Mayor de Histocompatibilidad OMS: Organización Mundial de la Salud PCR: Reacción en cadena de polimerasa R: Rifampicina RMN: Resonancia Magnética Nuclear S: Estreptomicina SIDA: Síndrome de Inmunodeficiencia Adquirida SNC: Sistema Nervioso Central SUIVE: Sistema Único de Información para la Vigilancia Epidemiológica TAES: Tratamiento Acortado Estrictamente Supervisado Tb: Tuberculosis TC: Tomografía Computada TLR: Toll Like Receptor TNF: Factor de Necrosis Tumoral VIH: Virus de Inmunodeficiencia Humana Z: Pirazinamida 10 RELACIÓN DE TABLAS, GRÁFICAS Y FIGURAS Tabla 1. Etapas clínicas (British Medical Research Council) ……………………………… 25 Tabla 2. Variables del estudio………………………………………………………………………….. 30 Tabla 3. Manifestaciones neurológicas al ingreso……………………………………………. 33 Tabla 4. Etapa clínica, complicaciones y muerte……………………………………………… 34 Tabla 5. Características citoquímicas del LCR…………………………………………………… 35 Tabla 6. Características clínicas y de laboratorio que diferencian tuberculosis meníngea de meningitis bacteriana…………………………………………………………………. 35 Tabla 7. Alteraciones en estudios de imagen del SNC (TC o RMN de cráneo)…… 36 Tabla 8. Complicaciones de la tuberculosis meníngea detectadas por estudio de neuroimagen y mortalidad………………………………………………………………………………. 41 Gráfica 1. Pacientes con Tb en otro sitio fuera del SNC……………………………………. 41 Figura 1. Imagen clínica de afección del III nervio craneano…………………………….. 33 Figura 2. Radiografía de tórax………………………………………………………………………….. 34 Figura 3. RMN de cráneo con hidrocefalia……………………………………………………….. 37 Figura 4. TC de cráneo con edema cerebral…………………………………………………….. 38 Figura 5A y 5B. RMN de cráneo con absceso tuberculoso……………………………….. 39 Figura 6A y 6B. RMN con reforzamiento meníngeo…………………………………………. 39 Figura 7. TC de cráneo con isquemia……………………………………………………………….. 40 11 RESUMEN Introducción. La tuberculosis (Tb) es un problema de salud pública en México y el mundo relacionándose a la Tb meníngea con una alta morbimortalidad. Del 2001 al 2004, el Hospital General de México registró 10 casos de Tb meníngea y en un periodo de 7 años, el Instituto Nacional de Neurología y Neurocirugía registró 20 casos. En 2009, la Secretaría de Salud reportó 143 casos en México. En la literatura, no hay series de casos que describan las características de la Tb meníngea en adultos mexicanos. Objetivo: Describir las características neurológicas, bioquímicas y complicaciones de adultos con Tb meníngea del Hospital General Dr. Manuel Gea González. Materiales y métodos: Corresponde a un estudio descriptivo, observacional, retrospectivo. Se analizaron datos del expediente de todos los pacientes adultos con diagnóstico de Tb meníngea de enero 2006 a marzo 2010. El tamaño de muestra fue de 16 pacientes, 13 hombres y 3 mujeres. El rango de edad fue de 22 a 78 años con una media de 40.2±16.7 años. Para la caracterización de la población se utilizó estadística descriptiva. Medidas de tendencia central y dispersión: rango, media, mediana, moda, desviación estándar, proporciones y porcentajes. Resultados: El 75% de los pacientes se presentó en estadio II (intermedio) y 25% en estadio III (avanzado). La evolución de los síntomas previo al ingreso tuvo una media de 56.4 días. 56% de los casos tenían VIH. El hallazgo clínico más frecuente fue alteración del estado mental (87.5%). El 75% de los pacientes presentó cefalea, fiebre y/o signos meníngeos; 68% focalizaba y 56% tenía afección de nervios craneanos siendo el III el más afectado (55%). 75% de los casos presentó hiponatremia y 50% tenía radiografía (Rx) de tórax con cambios por Tb. 11 pacientes tuvieron neuroimagen anormal, especialmente, reforzamiento meníngeo y lesiones focales (57%). La complicación más común fue vasculitis con infarto. 7 pacientes (43.75%) murieron. Conclusiones: En nuestro hospital, en un periodo de 4 años 3 meses se ha atendido una cantidad considerable de casos de Tb meníngea donde más de la mitad de los pacientes son inmunocomprometidos, particularmente por VIH. La edad de presentación, mayor frecuencia en hombres, número de casos con Rx. de tórax sugestiva de Tb y el estadio avanzado en el que llegan es similar a lo reportado en la literatura internacional y aunque la hidrocefalia es señalada como la complicación más frecuente, en nuestro estudio la vasculitis e infarto fueron más comunes. El conocimiento de las características de la Tb meníngea en población adulta de nuestro medio, brinda un panorama donde es evidente que los pacientes se presentan en los hospitales en estadios avanzados de la enfermedad lo que se relaciona directamente con una 12 mayor frecuencia de complicaciones y mortalidad. Es importante brindar orientación sobre éste problema de salud pública para hacer diagnósticos e intervenciones más tempranas. ABSTRACT Introduction. Tuberculosis (Tb) is a public health problem in Mexico and the world. Particularly, TB meningitis has a high morbidity and mortality. From 2001 to 2004, the Hospital General de México recorded 10 cases of Tb meningitis and in a period of seven years, the Instituto Nacional de Neurología y Neurocirugía reported 20 cases. In 2009, the Ministry of Health reported 143 cases in Mexico. In the literature, there are no case series describing the characteristics of Tb meningitis in Mexican adults. Objective: To describe the neurological, biochemistry and complications in adults with Tb meningitis at the Hospital General Dr. Manuel Gea González. Materials and methods: We retrospectively analyzed the clinical data of all adult patients diagnosed with Tb meningitis from January 2006 to March 2010. The sample size was 16 patients, 13 men and 3 women. The age range was 22‐78 years with a mean of 40.2 ± 16.7 years. Descriptive statistics were used to typify the demographic characteristics. Measures of central tendency and dispersion: range, mean, median, mode, standard deviation, proportions and percentageswere used. Results: 75% of patients were stage II (intermediate) and 25% were stage III (advanced). The evolution of symptoms before admission had an average of 56.4 days. 56% of patients had HIV. The most common clinical finding was altered mental status (87.5%). 75% of patients presented with headache, fever and / or meningeal signs, 68% and 56% had cranial nerve involvement being the oculomotor nerve the most affected (55%). 75% of the patients had hyponatremia and 50% had chest radiography (Rx) changes of Tb. 11 patients had abnormal neuroimaging, especially meningeal enhancement and focal lesions (57%). The most common complication was vasculitis with infarction. 7 patients (43.75%) died. Conclusions: In our hospital, during a period of 4 years 3 months we have attended a considerable number of meningeal Tb cases where more than half of patients are immunocompromised, particularly HIV. The age of presentation, male predominance, number of cases with abnormal chest Rx. suggestive of Tb and the advanced stage at arrival is similar to that reported in international literature and although hydrocephalus is identified as the most common complication in other studies, vasculitis and infarction was more common in ours. Knowledge of the characteristics of TB meningitis in adults in our country, provides a scenario where it is clear that patients in general hospitals are in advanced stages of the disease that is 13 directly related to a higher frequency of complications and mortality. It is important to provide guidance on this public health problem for earlier diagnosis and intervention. 1. INTRODUCCIÓN A pesar de los avances médicos y tecnológicos, las enfermedades infecciosas siguen siendo una causa importante de morbilidad y mortalidad en nuestro país y en el mundo. Con el descubrimiento de los antibióticos, sobretodo después de la Segunda Guerra Mundial, se creyó que las enfermedades infecciosas serían controladas y posiblemente eliminadas por completo, sin embargo, a través de los años hemos observado que a pesar de que se han ampliado y perfeccionado antibióticos contra bacterias, virus, hongos y parásitos ya conocidos, continuamente se identifican nuevos gérmenes patógenos y mecanismos de resistencia avanzados. Enfermedades que hace tiempo se creyeron erradicadas del mundo desarrollado como la tuberculosis (Tb) y el cólera han reaparecido con nueva agresividad1. Los primeros datos de la Tb datan del Neolítico con evidencia de Tb espinal, pero comenzó a ser un problema de salud pública durante la Revolución Industrial entre el siglo XVIII y XIX ya que la concentración de la población favoreció la propagación de la infección. La era moderna de la enfermedad inició en 1946 cuando la estreptomicina fue el primer tratamiento eficaz que posteriormente se reforzó con el tratamiento combinado con isoniazida y rifampicina y posteriormente pirazinamida. Esto permitió un mejor control de la enfermedad y disminución de los casos a nivel mundial. Sin embargo, desde 1985, el número de casos aumentó favorecido principalmente por la infección por Virus de Inmunodeficiencia Humana (VIH) 25. Actualmente, la Tb es un problema de salud pública a nivel mundial. Es la segunda causa de muerte por infección precedida solo por la infección por VIH. En 2007 se reportó una prevalencia estimada de 13.7 millones de casos (206 por 100,000 habitantes) se informa que un tercio de la población se encuentra infectada por Mycobacterium Tuberculosis (Mb Tb). A pesar de que el tratamiento disponible es efectivo en la mayoría de los casos, en 2007 se reportaron 1.77 millones de muertes. El número de casos nuevos también va en aumento con un total de 9.2 millones de casos en 2007. Todo esto es secundario a la falta de atención prestada a la enfermedad en los años 80. Actualmente nos encontramos con muchos casos de tuberculosis asociados a infección por VIH pero también hay importante preocupación por la emergencia de Tb multidrogorresistente o con resistencia extendida a fármacos 2,14. 14 En 1991, la asamblea general de la Organización Mundial de la Salud (OMS) enfatizó la importancia del control de la Tb estableciendo un plan cuyas metas principales son: 1) que su incidencia empiece a disminuir en 2015 (meta 6.c de los Objetivos de Desarrollo del Milenio); 2) que las tasas de prevalencia y mortalidad se hayan reducido a la mitad en 2015, en comparación con las existentes en 1990; 3) que se detecten y traten en programas de Tratamiento Acortado Estrictamente Supervisado (TAES) al menos el 70% de los casos bacilíferos incidentes, y 4) que el tratamiento tenga éxito en el 85%, como mínimo, de los casos bacilíferos incidentes 2,14. El Plan Mundial, lanzado por la OMS en enero de 2006, detalla la escala en la que deben aplicarse los seis componentes de la estrategia Alto a la Tb para alcanzar esas metas. Los 6 componentes son i) expandir y mejorar el TAES; ii) hacer frente a la Tb acompañada del VIH, la Tb multirresistente y otros problemas; iii) contribuir al fortalecimiento de los sistemas de salud; iv) involucrar a todo el personal de salud; v) dar mayor capacidad de acción a los pacientes y a las comunidades, y vi) favorecer y promover las investigaciones. Los datos más recientes indican: 1) que la tasa de incidencia viene disminuyendo desde 2004; 2) que las tasas de prevalencia y mortalidad se habrán reducido en 2015 a la mitad de las que había en 1990 por lo menos en tres de las seis regiones de la OMS, aunque no se alcanzarán estas metas a nivel mundial; 3) que la tasa de detección de casos alcanzó el 63% en 2007; y 4) que la tasa de éxitos terapéuticos alcanzó el 85% en 20062,4. En México, las enfermedades transmisibles muestran una tendencia decreciente y la prevalencia de Tb ha disminuido en los últimos años, y 25% de los casos están asociados a Diabetes Mellitus (DM), desnutrición, alcoholismo e infección por VIH2,6. La Tb es causada por el complejo Mb Tb (Mycobacterium Tb, Mycobacterium bovis y Mycobacterium africanum) El Mb Tb es un Bacilo Ácido Alcohol Resistente (BAAR) aeróbico estricto, no móvil, no formador de esporas cuyo crecimiento está condicionado a la presencia de oxígeno y al valor del pH circundante. Es muy resistente al frío, la congelación y la desecación y por el contrario, muy sensible al calor, la luz solar y la luz ultravioleta. Su multiplicación es muy lenta (se divide cada 15 a 20 horas) y ante circunstancias adversas puede entrar en estado latente, pudiendo retrasar su multiplicación desde algunos días hasta varios años. Crece en semanas en el medio de Löwenstein Jensen, formando colonias de color blanco cremoso, esféricas, secas, rugosas, opacas, polimorfas y de dimensiones variables. El reservorio natural del Mb Tb es el hombre, tanto el sano infectado como el enfermo 9. 15 La infección por Mb Tb se transmite de persona a persona principalmente por vía aerógena, a través de la inhalación de bacilos contenidos en pequeñas partículas de 1 a 5 milimicras capaces de alcanzar el alveolo pulmonar. Cuando personas con Tb pulmonar o laríngea hablan, cantan, ríen, estornudan y sobre todo cuando tosen, expulsan secreciones respiratorias cuyo contenido acuoso se evapora, dejando un pequeño residuo de material sólido, el núcleo goticular, en cuyo interior existen muy pocos microorganismos infectantes. Estos núcleos pueden mantenerse y transportarse por el aire durante un largoperíodo de tiempo. Un único bacilo en un diminuto núcleo goticular es más peligroso que un gran número de bacilos en una partícula aerógena de mayor tamaño, porque estas partículas no permanecen aerosolizadas y, si se inhalan, se depositan en las paredes de la tráquea y de la vía aérea superior. Allí son atrapadas en la capa de moco y eliminadas hacia la orofaringe, desde donde bien son deglutidas, o bien expectoradas. Además de la vía aerógena existen otros infrecuentes mecanismos de transmisión como son la vía digestiva (fundamentalmente en la enfermedad por Mycobacterium bovis y Mycobacterium avium‐intracellulare), la vía urogenital, la vía cutáneomucosa y la rara vía transplacentaria5,12. Cuando una persona se infecta por Mb Tb se desencadena una respuesta inmune celular donde los macrófagos primero, y los linfocitos T después, detienen la multiplicación de los bacilos. En un porcentaje de infectados (5 %) esta inmunidad será insuficiente para impedir el desarrollo de la enfermedad y se producirá la denominada Tb Primaria. Aún cuando se consiga controlar la infección inicial, no todos los bacilos son destruidos, sino que algunos de ellos son capaces de persistir intracelularmente en estado de latencia y, por ello, en otro 5% de los infectados, tras el paso de meses o años, se producirá la enfermedad por reactivación. El riesgo de reactivación es mayor en los 2 años siguientes a la infección, periodo en el que aparecerán la mitad de los casos de enfermedad. No todas las personas infectadas tienen el mismo riesgo de desarrollar Tb. La silicosis, DM, y enfermedades asociadas a inmunodepresión como el VIH se asocian a mayor riesgo de Tb9,12. Aunque la localización pulmonar es la forma más frecuente de presentación, cualquier órgano o tejido puede verse afectado. La Tb extrapulmonar ocurre con mayor frecuencia en inmunodeprimidos y su incidencia se ha incrementado en los últimos años debido fundamentalmente a la infección por VIH. La Tb meníngea representa del 1% al 3% de las formas de Tb activa. Generalmente resulta por diseminación de una infección localizada a nivel pulmonar, pero puede migrar a partir de cualquier foco infeccioso previo. El momento y frecuencia de la diseminación de la enfermedad depende de la edad y del estado 16 inmunológico. En países con alta prevalencia de Tb, esta afecta predominantemente a niños menores de 3 años. En países con baja prevalencia la mayoría de los casos corresponden a adultos, muchos de ellos inmigrantes de países con alta prevalencia. Existe el antecedente de contacto con tuberculosis en 50 a 90% de los niños7.8. 2. ANTECEDENTES La Tb meníngea es la forma extrapulmonar mas grave de la enfermedad y una entidad devastante para el sistema nervioso central (SNC). 2.1 Epidemiología El Sistema Único de Información para la Vigilancia Epidemiológica (SUIVE) de la Secretaría de Salud de México, en su reporte del 2006 informó que hubo un total de 198 casos de Tb meníngea en el país lo cual representa una tasa de 0.18 de un total de 16,404 casos de Tb en general. De éstos, 64% de los casos se presentaron en hombres y 36% en mujeres. El grupo etario con mayor incidencia tanto para hombres como para mujeres fue entre los 25 y 44 años. El estado más afectado fue Veracruz con una tasa de 0.24‐0.78 seguido de Sonora, Chihuahua y Coahuila con una tasa de 0.12 a 0.23. El Sistema Epidemiológico y Estadístico de las Defunciones reportó en 2005, 70 muertes por Tb meníngea con una tasa de 0.07 por 100,000 habitantes.6 Cifras más recientes reportaron una disminución gradual en el número de casos con 159 casos a nivel nacional en 2008 y 143 casos en 200940. El Instituto Nacional de Neurología y Neurocirugía reportó que de enero de 1999 a diciembre de 2006 hubo 20 casos de Tb meníngea atendidos en ese hospital con una mortalidad de 10%. El Hospital General de México reportó que en su clínica de VIH se atendieron de enero de 2001 a julio de 2004, 10 casos de Tb meníngea en pacientes VIH lo cual representa un 13% del total de 77 casos de Tb asociada a VIH tratados en esa institución durante ese periodo. 2.2 Fisiopatología Los primeros estudios sobre la fisiopatología de la Tb meníngea se reportaron en 1933 por Rich y Mc Cordock quienes observaron que la Tb meníngea no siempre se presenta en el contexto de una Tb miliar. Los científicos demostraron que la inyección intravenosa de Mb Tb en conejillos de Indias no causaba infección inmediata en ninguno de ellos. También realizaron autopsias de personas fallecidas por Tb meníngea encontrando pequeños focos de infección (o granulomas) en comunicación con el espacio subaracnoideo. Se concluyó que la infección por Mb Tb llega al SNC por vía hematógena desde el foco primario, que generalmente es pulmonar, a nivel de SNC se desarrollan los focos de infección mencionados, conocidos como 17 focos de Rich. Estas lesiones infecciosas se pueden localizar en las meninges o en la superficie subpial y subependimaria del cerebro o médula espinal y pueden permanecer silentes por meses o años. Posteriormente estos focos pueden crecer formando tuberculomas o abscesos tuberculosos10, 11. La meningitis se desarrolla cuando estas lesiones se rompen liberando las Mb Tb al espacio subaracnoideo o al sistema ventricular.11 Hasta la fecha no se ha logrado determinar qué factores hacen que la micobacteria salga del sitio de infección primaria hacia el torrente circulatorio causando “bacteremia”. Se ha propuesto la participación del gen de la adhesina hemaglutinina de unión a heparina (Heparin binding hemagglutinin adhesin) ya que la mutación de este afecta la diseminación de micobacterias en ratones. También se sabe que la micobacteria llega a tejidos profundos por translocación por las células epiteliales y viajando por monocitos y macrófagos. Davis y Ramakrishnan12 realizaron un estudio con Mycobacterium marinum en embriones de pez zebra inoculando el ventrículo del rombencéfalo del pez con micobacterias virulentas y atenuadas y observaron la interacción dinámica del microorganismo con macrófagos y el desarrollo de granulomas gracias a la atracción de macrófagos no infectados por macrófagos infectados y demostraron la capacidad del macrófago de dejar el granuloma y migrar por el torrente sanguíneo a sitios distantes. Estos hallazgos demostraron un papel dinámico entre las micobacterias, los macrófagos y los granulomas contrario a lo propuesto por Rich y McCordock3, 12. Actualmente el mecanismo por el que el Mb Tb controla el sistema inmune se atribuye a los lipoarabinomannanos y su precursor los lipomannanos que son glucolípidos de la membrana de Mb Tb que inhibe la maduración del fagosoma, apoptosis, señalización de interferon‐ gamma en los macrófagos y secreción de interleucina (IL) 12 por las células dendríticas. LA cepa Beijing de Mb Tb estimula a los macrófagos para secretar Factor de Necrosis Tumoral (TNF) α e IL 10 y disminuye el Toll Like Receptor (TLR) 2, TLR 4 y el Complejo Mayor de Histocompatibilidad (MHC) II. También se han propuesto polimorfismos genéticos del receptor P2X7 (canal de calcio dependiente de ATP), TLR 2, interferon γ que aumentan la susceptibilidad a la enfermedad 43. Los factores de riesgo para contraer Tb meníngea son pobreza, hacinamiento, desnutrición, alcoholismo, drogadicción, DM, tratamiento inmunosupresor, TCE y VIH. En cuanto al Mb Tb se ha encontrado que algunas cepasson mas virulentas y por lo tanto se asocian mas a las formas diseminadas, como la cepa Beijing (prevalente en Asia y los países de la antigua Unión 18 Soviética) que se ha asociado con el desarrollo de Tb meníngea con un curso más corto de la enfermedad y menos leucocitos en LCR. En contraste, la cepa Euro‐Americana (prevalente en Europa y América) causa más frecuentemente la forma pulmonar43. 2.3 Cuadro clínico La neurotuberculosis puede tener un nivel de afección intracraneal (tuberculosis miliar con meningitis, encefalopatía, meningitis y vasculopatía tuberculosa, abscesos tuberculosos y tuberculomas) y espinal (enfermedad de Pott, aracnoiditis tuberculosa, tuberculoma medular y meningitis espinal) 9. Meningitis tuberculosa Los pacientes con Tb meníngea tienen historia de Tb en 10 % de los casos y se presentan con un cuadro de 2 a 8 semanas de evolución con síntomas inespecíficos como fiebre, cefalea, anorexia, pérdida de peso, fatiga y mialgias. Durante la evolución la cefalea se vuelve más intensa y continua. Se reporta rigidez de nuca en 25% de los pacientes. Puede haber náusea, vómito y alteración del estado de alerta. Hay fiebre de bajo grado en 80% de los pacientes. Hay parálisis de nervios craneales en 20 a 30% de los pacientes, siendo el sexto nervio el más afectado en 30 a 40%, El tercero en 5 a 15% y el séptimo en 10 a 20%. Otros pacientes pueden presentar hemiplejia al momento de presentación o en etapas avanzadas. Otros pacientes pueden presentar movimientos anormales que pueden ser movimientos coreiformes, hemibalísticos, atetosis o temblor generalizado, sacudidas mioclónicas y ataxia. Las convulsiones focales o generalizadas pueden ocurrir de forma aguda durante la enfermedad o meses después. Si la enfermedad progresa puede haber mayor letargia, confusión, estupor y coma 9. Las guías de la Sociedad Británica de Infectología analizaron varias series de casos de Tb meníngea y describieron que los síntomas al momento de presentación son cefalea en 50‐80% de los casos, fiebre en 60 a 95% de los casos, vómito en 30 a 60% de los casos, Fotofobia en 5 a 10% de los casos, anorexia y pérdida de peso en 60 a 80% de los casos. En la exploración física se encontró rigidez de nuca en 40 a 80% de los casos, confusión en 10 a 30%, coma en 30 a 60%, parálisis de nervios craneales en 30 a 50% con afectación del VI nervio en 30 a 40% de los casos, III nervio en 5 a 15%, y VII en 10 a 20% de los casos. Además, se encontró hemiparesia en 10 a 20%, paraparesia en 5 a 10%, convulsiones en 50% de los casos en niños y solo en 5% de los adultos15. 19 Tuberculoma cerebral sin meningitis Los hallazgos clínicos dependen de la localización anatómica, pero frecuentemente son asintomáticos. Los síntomas constitucionales incluyen cefalea, fiebre y pérdida de peso. Las convulsiones focales o generalizadas son la manifestación inicial mas frecuente tanto en adultos como en niños. Los signos neurológicos focales son menos comunes y pueden incluir alteraciones cerebelares y papiledema. Manifestaciones poco frecuentes son hipopituitarismo, corea, y síndromes de tallo cerebral. El Líquido Cefalorraquídeo (LCR) revela hiperproteinorraquia con pleocitosis de 10 a 100 células en 50% de los casos. Los tuberculomas no se pueden distinguir de otras lesiones ocupantes de espacio por los hallazgos clínicos únicamente. Tuberculosis Espinal La Tb puede afectar a cualquier nivel de la médula espinal incluyendo las raíces nerviosas, por lo tanto se puede presentar como síndrome de neurona motora inferior y superior o como un cuadro clínico mixto. Cerca de 10% de los casos de Tb meníngea tienen alguna forma de afectación espinal. Los tuberculomas espinales extradurales causan mas de 60% de los casos de paraparesias no óseas, aunque los tuberculomas pueden ocurrir en cualquier parte de la médula. La radiculomielitis tuberculosa es rara y se caracteriza por paraparesia subaguda, dolor radicular, y disfunción vesical. La siringomelia es una complicación rara de la tuberculosis espinal. Enfermedad de Pott La Tb de los cuerpos vertebrales con compresión nerviosa representa la forma mas frecuente de involucro espinal. Los pacientes se presentan con dolor, giba dorsal y datos de compresión medular extrínseca. 2.4 Diagnóstico Los Estándares Internacionales de Manejo de la Tb recomiendan en la Norma 3 que “en todos los pacientes (adultos, adolescentes y niños) en los que se sospeche Tb extrapulmonar, se obtendrán muestras apropiadas de las partes anatómicas presuntamente afectadas para realizar un examen microscópico y, cuando se disponga de instalaciones y recursos, cultivo y examen histopatológico14.” Asimismo recomienda en el Norma 12 que “en las zonas con gran prevalencia de infección por VIH en la población general y donde es probable que coexistan la Tb y la infección por VIH, la 20 orientación y las pruebas de detección del VIH están indicadas en todos los pacientes Tb como parte de su atención habitual. En las zonas con menores tasas de prevalencia del VIH, la orientación y las pruebas de detección del VIH están indicadas para los pacientes tuberculosos con síntomas o signos de afecciones relacionadas con la infección por el VIH y en los pacientes tuberculosos que tengan antecedentes de alto riesgo de exposición al VIH14.” El diagnóstico frecuentemente se retrasa días o semanas debido a que predominan síntomas inespecíficos como cefalea, fiebre, vómito y anorexia. En niños se puede presentar retraso en el desarrollo, pérdida de peso, irritabilidad, hiporexia, alteraciones del sueño, vómito y dolor abdominal. El análisis de (LCR) es esencial y cursa con las siguientes características: 1. Leucocitosis (10‐1000 x 103 células) con predominio linfocítico aunque en la infección temprana puede haber predominio polimorfonuclear; 2. Proteinorraquia (0.5‐ 3.0 g/L) y relación glucosa en LCR: glucosa plasmática <50%. En pacientes inmunosuprimidos el LCR puede ser acelular o tener predominio de neutrófilos13, 15. También se puede realizar tinción Ziehl Neelsen en la cual se observan los BAAR en menos de 10% de los casos de la enfermedad y se debe cultivar el LCR para Mb Tb con la desventaja de que tarda hasta 8 semanas en desarrollarse y un resultado negativo no excluye el diagnóstico13, 15, 16. En 2006, Youssef y colaboradores16 realizaron un estudio retrospectivo en el que analizaron los datos clínicos y de laboratorio mas útiles para diferenciar la Tb meníngea de la meningitis bacteriana. Se encontró que los factores de riesgo independientes para Tb meníngea son: 1) duración de los síntomas mayor de 5 días, 2) cefalea, 3) LCR transparente, 4) LCR con menos de 1000 leucocitos x103/ml, 5) más de 30% de linfocitos en LCR, 6) más de 100 mg/dL de proteínas en LCR. La presencia de 3 o más variables tiene un 93% de sensibilidad y 77% de especificidad para el diagnóstico. Test de Tuberculina Los resultados de esta prueba varían de acuerdo a la edad, antecedente de vacunación con BCG, estado nutricional, positividad para VIH y técnica de administración. En pacientes con Tb meníngea se han reportado pruebas positivas en 30 a 65% de los casos de niños y en 10 a 50 % de los casos de adultos15. Adenosina Deaminasa (ADA) La actividad de la ADA esta elevada en LCR de los pacientes con Tb meníngea. Pero esta sustancia no es específica de esta enfermedad y se eleva en linfomas, malaria, brucelosis, y 21 meningitis bacteriana. Por lo tanto se han hecho estudios para determinarla cifra diagnóstica y se concluyó que un valor de corte de 11.39 U/L/minuto tiene una sensibilidad de 82% y especificidad de 83%, que al correlacionarse con las características citoquímicas del LCR aumentan a 90 y 95.5%, respectivamente. En pacientes VIH positivos el ADA tiene una sensibilidad de 57% con falsos positivos en infección por CMV, Criptococosis, y Linfoma de SNC17,18. Reacción en cadena de polimerasa (PCR) Se han desarrollado varias pruebas de PCR para la detección de Mb Tb. Estas pruebas han sido validadas para muestras de expectoración, sin embargo, para LCR se ha reportado una sensibilidad que va del 25 a 90.5% y una especificidad de 88.2 a 100% 19. Test de liberación de interferón gama (IGRAs) Se ha propuesto el uso de test comerciales QuantiFERON‐TB gold y T‐SPOT.TB que detectan el interferón gama de linfocitos en respuesta a antígenos específicos de M tuberculosis para el diagnóstico de Tb latente. Aunque no hay estudios que validen su utilidad en Tb meníngea activa ya que se sabe que los linfocitos en LCR mueren rápidamente cuando se estimulan con antígenos específicos de M tuberculosis ex vivo. Y un estudio reporto que 50% de los pacientes con Tb meníngea confirmada por cultivo tienen la prueba negativa al momento de presentación de la enfermedad. Actualmente los IGRAs no están aceptados como prueba diagnóstica para Tb activa15. Estudios de imagen 50% de los pacientes con Tb meníngea tienen una radiografía de tórax sugestiva de Tb pulmonar activa. 10% tienen Tb miliar lo cual sugiere involucro del SNC. La tomografía computada (TC) de tórax puede demostrar las alteraciones no identificadas en la radiografía convencional15. Los hallazgos más frecuentes en la TC de cráneo son hidrocefalia y reforzamiento meníngeo basal. Ambas alteraciones son más frecuentes en niños (80%) que en adultos (40%) y pueden estar ausentes en ancianos. Los infartos como consecuencia de vasculitis o tuberculomas se encuentran en aproximadamente 20% de los casos. Más del 70% desarrolla tuberculomas durante el tratamiento aunque la mayoría son asintomáticos. Los infartos generalmente involucran los ganglios basales y los territorios de las arterias mediales estriadas y tálamoperforantes11. 22 Investigadores en Sudáfrica demostraron que la combinación de hidrocefalia, reforzamiento basal e infarto es 100% específica y 41% sensible para el diagnóstico de Tb meníngea en niños, aunque otros autores proponen que la hiperdensidad de cisternas basales precontraste es el mejor predictor11. La imagen por Resonancia Magnética Nuclear (RMN) permite una mejor definición de las lesiones tempranas e infratentoriales. La criptococosis, encefalitis por citomegalovirus, toxoplasmosis, sarcoidosis, metástasis meníngeas y linfoma pueden producir imágenes similares a las de Tb meníngea. Aunque la TC y la RMN tienen la misma sensibilidad para el diagnóstico de hidrocefalia, la segunda es superior para demostrar infartos, reforzamiento de ganglios basales y probablemente tuberculomas 15. 2.5 Complicaciones Las complicaciones de la infección son secundarias a la reacción inflamatoria que afecta principalmente la cisura de Silvio, cisternas basales, tallo cerebral y el cerebelo. El déficit neurológico se debe a hidrocefalia secundaria a obstrucción del drenaje de LCR, tuberculomas formados por la coalescencia de granulomas, vasculitis obliterante que cause secundariamente infartos cerebrales. La severidad de las manifestaciones clínicas depende de la severidad de la respuesta inflamatoria. La Tb meníngea también puede causar complicaciones metabólicas. La más común es hiponatremia la cual se presenta en 50% de los casos probablemente secundaria al efecto del péptido natriurético atrial causando un síndrome hiponatrémico natriurético10,20. La hidrocefalia es la complicación más frecuente de la Tb. Se presenta por obstrucción del flujo de LCR a nivel de las cisternas basales y del cuarto ventrículo o del drenaje de LCR a nivel del acueducto. Se ha encontrado hidrocefalia hasta en 70% de los casos, principalmente de tipo comunicante debido a obstrucción del drenaje del LCR en la cisterna interpeduncular y ambiens causando un efecto de cuello de botella a nivel del tentorio. La imagen típica en TC o RMN de cráneo es una dilatación panventricular con disminución del espacio subaracnoideo en la convexidad y obliteración de las cisternas basales con reforzamiento de las mismas con el contraste. El tratamiento es a base de diuréticos o en caso de hidrocefalia no comunicante o con datos de hipertensión intracraneana se puede realizar derivación ventrículoperitoneal. 23 La hidrocefalia es un factor de mal pronóstico y su presencia y severidad correlacionan con la etapa de la meningitis tuberculosa. Y aunque no hay un consenso sobre el tratamiento ideal avalado por estudios controlados en general se refiere en la literatura que el tratamiento de la hidrocefalia se relaciona como mejoría clínica 11. El tejido cerebral con infiltrado inflamatorio tiene diversos grados de edema e infiltración perivascular y reacción microglial. Los exudados son más densos en la proximidad del círculo de Willis y donde produce un síndrome vasculitis like. Los vasos mas afectados son la carótida interna, la arteria cerebral media proximal y los vasos perforantes de los ganglios basales. Los infartos cerebrales son la complicación más importante ya que causa de daño cerebral irreversible. 20% de los pacientes desarrolla déficit neurológico, 13‐35% tiene evidencia tomográfica y hasta 57% tiene cambios sugestivos de infarto en la RMN. En las autopsias se han encontrado infartos en 22 a 56% de los casos, en la mayoría, los infartos de localizan en la distribución de la arteria estriada medial y arterias tálamoperforantes. Es rara la transformación hemorrágica. Los déficits focales más frecuentes son mono o hemiplejia, alteración del estado de alerta y movimientos involuntarios21. Los datos al ingreso que hacen sospechar compromiso vascular son: convulsiones, parálisis de nervio craneal, papiledema y descerebración. El momento de la isquemia puede ser de manera aguda o subaguda. Los datos de ingreso que se relacionan con infarto subsecuente son cuenta alta de neutrófilos en el LCR inicial y reforzamiento meníngeo22. 2.6 Tratamiento Mb Tb se caracteriza por tener un tiempo de generación prolongado y posee la capacidad de entrar en períodos de latencia con actividad metabólica limitada, lo que dificulta la acción de los antimicrobianos. Debido a este comportamiento biológico, Mb Tb da origen a poblaciones bacterianas heterogéneas y mutantes naturales. Se debe utilizar, por tanto, una terapia combinada para evitar la selección de estos mutantes resistentes. Si tratáramos al Mb Tb con un solo fármaco destruiríamos rápidamente la mayoría de los bacilos, pero quedarían los bacilos resistentes naturales que harían recidivar la enfermedad. La combinación de 3 fármacos hace matemáticamente imposible que se generen resistentes naturales a los 3 fármacos a la vez23. Además, el tratamiento debe ser lo suficientemente prolongado que permita eliminar todas las poblaciones bacilares: extracelulares, intracelulares y bacilos con actividad metabólica alta o baja. La incorporación al régimen actual de rifampicina y pirazinamida ha permitido reducir el tiempo total de tratamiento a sólo 6 meses24. 24 Los fármacos antituberculosos se clasificanen 2 grupos (primera y segunda línea) en función de su eficacia, potencia, toxicidad y tolerancia. Actualmente los fármacos de primera línea son isoniacida (H), rifampicina (R), pirazinamida (Z), etambutol (E) y estreptomicina (S). Existen otras rifamicinas con actividad tuberculostática como son la rifapentina y la rifabutina. Rifapentina es una nueva rifamicina que permite una dosificación semanal pero que no está disponible todavía en todos los países. La indicación de la rifabutina sería el tratamiento de pacientes con infección por el VIH que precisen continuar con inhibidores de proteasas o pacientes en tratamiento con ciclosporina o tacrolimus en los que se desaconseja la rifampicina 23. Para el tratamiento de la Tb meníngea no existe un consenso general. Se debe dar el tratamiento en dos fases, intensiva y de sostén, y la duración varía de acuerdo a las guías establecidas en cada lugar. La fase intensiva dura dos meses y la fase de sostén puede ir de 4 a 10 meses. Las guías británicas recomiendan una duración total de 12 meses. Isoniazida y rifampicina son la base del tratamiento. Isoniazida penetra libremente al SNC y tiene potente actividad bactericida. Rifampicina penetra con menor eficacia y se ha reportado alta mortalidad por cepas resistentes a rifampicina en casos de Tb meníngea. No hay evidencia de que la pirazinamida mejore los resultados en la Tb meníngea pero se sabe que alcanza altas concentraciones en SNC. Se debe iniciar el tratamiento con estos tres fármacos. Estreptomicina y etambutol no penetran al SNC en ausencia de inflamación por lo que hay controversia sobre su uso. Las fluoroquinolonas representan un cuarto agente alternativo pero no hay estudios suficientes que respalden su eficacia. Los medicamentos se usan en dosis convencionales aunque algunos autores proponen el uso de dosis mayores con la desventaja de mayor toxicidad por lo que no se acostumbra dar dosis mayores ya que a diferencia del tratamiento de Tb pulmonar la interrupción del tratamiento es un factor de riesgo independiente para mortalidad en Tb meníngea10, 24, 25. Se recomienda el tratamiento conjunto con corticoesteroides desde hace más de 50 años. En un análisis sistemático realizado por Cochrane que incluyo a 1440 participantes se concluyó que los corticoesteroides disminuyen la mortalidad y las secuelas en los niños y adultos VIH negativos pero no se demostró disminución significativa en mortalidad ni secuelas en pacientes VIH positivos. En general, se recomienda iniciar tratamiento corticoesteroide en todos los pacientes con Tb meníngea. El régimen recomendado en mayores de 14 años es con dexametasona 0.4 mg/kg/24 hrs con un curso de reducción de 6 a 8 semanas. En menores de 25 14 años se recomienda prednisolona 4 mg/kg/24 hrs por 4 semanas con un curso de reducción de 4 semanas15, 25. Los pacientes con Tb y VIH deben ser evaluados para determinar si requieren terapia antirretroviral durante el curso de tratamiento contra la Tb. Y en aquellos pacientes con indicación de tratamiento se debe garantizar el acceso al mismo. Dada la complejidad del tratamiento conjunto de la terapia antirretroviral y antifímica se debe consultar a un médico experto en el área antes de iniciar el tratamiento conjunto independientemente de cuál enfermedad se haya manifestado primero. Sin embargo, el inicio del tratamiento para Tb no debe retrasarse y debe darse de manera conjunta profilaxis con cotrimoxazol. Las guías británicas recomiendan el inicio de terapia antirretroviral de acuerdo a los niveles de linfocitos CD426,27. 2.6 Pronóstico La mortalidad de la Tb meníngea es alta principalmente por el retraso en el diagnóstico. La tasa de mortalidad se relaciona con la severidad de la enfermedad al momento de la presentación medida mediante la escala propuesta por el British Medical Research Council en 194828. Tabla 1. Etapas clínicas (British Medical Research Council) Estadio I Temprano Consciente, buenas condiciones generales, con síntomas inespecíficos, ausencia de afectación neurológica. Diagnóstico se establece por hallazgos en el LCR. Estadio II Intermedio Cierto grado de afectación de la conciencia, aparición de signos de irritación meníngea y parálisis de nervios craneales. Estadio III Avanzado Paciente en malas condiciones generales, en estupor o coma, con datos de focalización (parálisis o paresia) La mayoría de los pacientes tienen cierta alteración del estado de conciencia, y la mitad de los pacientes se presentan en Estadio III. La mortalidad en la etapa I es de 19%, y en la etapa III es de 69% 29. De aquellos que sobreviven 31 a 57% se recuperan totalmente, pero un tercio de los pacientes quedan con secuelas como hemiparesia, alteraciones de la visión y convulsiones. En un estudio realizado en Turquía entre 1985 y 1996 por Hosoglu y colaboradores37 se recabaron 101 casos de Tb meníngea en adultos en los que se encontraron 5 elementos predictores de mal pronóstico: etapa III al momento de presentación, bajos niveles de glucosa, baja relación entre glucosa de LCR / sérica, proteínas elevadas y TC de cráneo anormal. De los pacientes estudiados por ellos, 43% de los pacientes murieron, 30.7% se recuperaron 26 completamente y 28.8% tuvieron secuelas neurológicas. 5 pacientes requirieron neurocirugía por hidrocefalia y 3 pacientes tuvieron Tb meníngea recurrente por mal apego al tratamiento. 3. JUSTIFICACIÓN. Durante los años 80 se restó importancia al diagnóstico de Tb por considerarse una infección en vías de extinción o limitada a países subdesarrollados, sin embargo, desde 1986 se registró un aumento alarmante de la incidencia y prevalencia de la Tb en general y de la Tb meníngea, que es la forma extrapulmonar más grave, en específico. Los factores relacionados con el aumento de los casos son el deterioro de los programas públicos de salud, la epidemia del VIH, aumento en la migración desde países endémicos de Tb, aumento del contagio entre personas institucionalizadas y aumento de pacientes inmunosuprimidos por otras causas. Con las medidas adoptadas por la OMS han disminuído los casos de Tb en general pero la proporción de casos de Tb extrapulmonar ha aumentado ya que en 1962 correspondía al 7.6% de los casos, en 1993 al 15.7% de los casos y en 2006, al 21% de los casos 2,4. En la actualidad, existen más personas infectadas por Mb Tb que en ninguna otra época de la historia del hombre. Cada segundo una persona en el mundo es infectada por el bacilo de la Tb y se estima que una tercera parte de la población mundial está infectada. Por lo tanto, es importante conocer las características actuales de la enfermedad y su comportamiento ante la transición demográfica y epidemiológica, conocer y saber usar los avances diagnósticos y terapéuticos con los que contamos para un control adecuado de la infección43. Aunque la tecnología ha permitido nuevos métodos diagnósticos avanzados, estos son poco accesibles para muchos centros por lo que la evaluación clínica juega un papel fundamental en la toma de decisiones. Aplicar las reglas diagnósticas propuestas por Youssef y colaboradores (2006) 16 ayuda al diagnóstico temprano de Tb meníngea y nos orienta a conocer que pacientes requieren o no estudios más avanzados y sobre la decisión de iniciar tratamiento empírico en lo que se completan las pruebas diagnósticas, ya que el retraso en el tratamiento se asocia con mayor mortalidad y mayor incidencia de complicaciones. En nuestro paíslas estadísticas del 2009 reportan que hubo 143 casos a nivel nacional, sin embargo, tenemos poca información sobre el comportamiento de la enfermedad en estos pacientes. Previo a los 80`s la enfermedad se encontraba principalmente en niños por lo que 27 las series de casos de la literatura mexicana se han basado en población pediátrica (Moreno y cols., 1987 30 y Karam y cols., 199131) y no en adultos. En la literatura mexicana, hay reportes de caso aislados de Tb meníngea en adultos como el reportado por Alatorre y cols., 2009 32, sin embargo, no existen series de casos donde se analicen las características clínicas, estadio clínico al momento de diagnóstico y complicaciones en población adulta independientemente de la coinfección por VIH. El conocimiento de estas condiciones referentes a la Tb meníngea en población adulta de nuestro medio permitiría brindar orientación sobre éste problema de salud pública para hacer diagnósticos e intervenciones más tempranas y disminuir la mortalidad. 28 4. PREGUNTA DE INVESTIGACION ¿Cuales son las características neurológicas y complicaciones que presentan los pacientes adultos con diagnóstico de tuberculosis meníngea? 5. OBJETIVO. 5.1 Objetivo principal Describir las características neurológicas y complicaciones de la meningitis tuberculosa en pacientes adultos del Hospital General “Dr. Manuel Gea González”. 5.2 Objetivos secundarios 1. Caracterizar los datos de la exploración clínica neurológica, bioquímicos y de neuroimagen de pacientes con meningitis tuberculosa. 2. Conocer la frecuencia de enfermedades condicionantes de inmunosupresión asociadas a meningitis tuberculosa. 3. Cuantificar la mortalidad en pacientes con tuberculosis meníngea de acuerdo al estadio clínico. 6. MATERIAL Y MÉTODO. 6.1. Tipo de estudio Estudio descriptivo, abierto, observacional, retrospectivo, transversal 6.2. Ubicación Temporal y Espacial Este estudio se realizó en el servicio de Neurología, perteneciente a la División de Medicina Interna del Hospital General “Dr. Manuel Gea González” el cual es un organismo descentralizado, cuya función primordial es la atención de la salud a la población no asegurada de escasos recursos en las especialidades básicas de la medicina y en aquellos padecimientos que por su frecuencia se requieren. El hospital está certificado por el Consejo de Salubridad General y presta servicios de salud en aspectos preventivos, curativos y de rehabilitación. Para esto cuenta con 63 consultorios, que constan de 55 especialidades y tiene 155 camas censables y 110 no censables, 13 quirófanos, unidades de urgencias, de terapia intensiva, tococirugía, planificación familiar, endoscopia diagnóstica y terapéutica y los auxiliares de diagnóstico y tratamiento, patología clínica, radiología e imagen, medicina nuclear, anatomía patológica, citología, medicina transfusional y genética con área clínica y de laboratorio, 29 rehabilitación con áreas de foniatría y terapia física. El estudio se realizó durante el periodo comprendido entre enero de 2006 a marzo de 20010. 6.3. Criterios de selección. o Inclusión: Expediente de pacientes mayores de 18 años de cualquier género con diagnóstico de Tuberculosis Meníngea atendidos durante el periodo del 1 de enero de 2006 al 26 de marzo de 2010. El diagnóstico de tuberculosis meníngea se basó en la presencia de cuadro clínico neurológico sugestivo, no explicado por otro proceso patológico, mas uno de los siguientes: 1. Cultivo de LCR positivo para Mycobacterium tuberculosis 2. Identificación de Bacilos Acido Alcohol Resistentes en el frotis de LCR o de otro fluído corporal 3. Lesiones sugestivas de Tb en radiografía o TC de Tórax 4. Lesiones sugestivas de Tb meningea en TC o RMN de cráneo 5. Tuberculosis documentada en otros órganos 6. Prueba de Adenosina Deaminasa o PCR positiva para Mycobacterium tuberculosis en LCR o de otro fluído corporal 7. Historia de contacto con una persona con tuberculosis activa 8. Respuesta clínica a tratamiento antituberculoso específico o Eliminación: Expediente con datos de interés para el estudio incompletos. 30 6.4. Variables Tabla 2. Variables de estudio Variables Independientes Variables Dependientes Variable Escala Variable Escala Edad Intervalar (Años) Estadio clínico Categórica (Estadio I, Estadio II, Estadio III) Género Nominal (Hombre, Mujer) Complicaciones neurológicas Categórica (Hidrocefalia, vasculitis,isquemia, hiponatremia) Otras formas de tuberculosis Nominal (Pulmonar, Extrapulmonar) Muerte ‐Nominal (Presente, Ausente) Situación condicionante de inmunosupresión Categórica (VIH, desnutrición, cáncer, Diabetes Mellitus, terapia inmunosupresora) Tiempo de evolución de la Tb meníngea Intervalar (Días) Cefalea Nominal (Presente / Ausente) Aspecto del LCR Categórica (Transparente / Otro) Leucocitos en LCR Categórica (>1000 103/mL / < 1000 103/mL) Linfocitos en LCR Categórica (> 30% o < 30%) Proteínas en LCR Categórica (>100 mg/dL o < 100 mg/dL) 6.5. Universo de estudio Población: Expedientes de todos los pacientes con diagnóstico de Tuberculosis meningea del Hospital General “Dr. Manuel Gea González” ingresados del 1 de enero de 2006 al 26 de marzo de 2010. Tamaño de la muestra: Expedientes de pacientes con diagnóstico clínico y bioquímico de Tuberculosis meníngea (16). 31 6.6. Métodos de Laboratorio Los resultados de los estudios que integran el expediente correspondían a biometría hemática, química sanguínea, pruebas de función hepática, citoquímico y cultivo de LCR los cuales son procesados en el laboratorio del Hospital General Dr Manuel Gea González. Las pruebas confirmatorias de ADA y PCR se envían al Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias y el Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición Salvador Zubirán. Los estudios de imagen como TC y RMN de cráneo se realizaron en Instituto Nacional de Psiquiatría Juan Ramón de la Fuente y el Instituto Nacional de Cancerología y el USG Doppler Transcraneal se realizó en el Instituto de Neurología y Neurocirugía. 6.7. Análisis Estadístico Se utilizó Estadística Descriptiva (medidas de tendencia central y dispersión: rango, media, mediana, moda, desviación estándar, proporciones y porcentajes). 6.8. Descripción Operativa del Estudio Se revisó la base de datos de neuroinfecciones del servicio de Neurología para identificar los casos registrados con diagnóstico de Tuberculosis meníngea. Se solicitaron los expedientes de los casos al archivo clínico. Se revisaron los expedientes para obtener la información previamente estipulada para analizar en el estudio. Se realizó la captura de datos en el formato prediseñado para esta función. Al contar con la información se realizó el análisis de los datos y el informe final de los resultados. 32 7. RESULTADOS Se estudió un total de 16 casos de Tuberculosis meníngea atendidos en el Hospital General “Dr. Manuel Gea González” de 2006 a 2010. Del total de los pacientes 3 (18.75%) eran mujeres y 13 (81.25%) eran hombres con una edad media de 40.2±16.7 años. La duración de los síntomas antes del ingreso oscilaban entre 5 y 90 días con una media de 56.4 días. De los pacientes estudiados 9 (56.25%) tenían VIH, de los cuales 5(31.25%) fueron diagnosticados al momento del ingreso y 4 (25%) pacientestenían diagnóstico conocido de VIH. 3 (18‐75%) de los pacientes con diagnóstico ya conocido de infección por VIH tenían tratamiento antirretroviral, a un paciente (6.25%) con VIH de reciente diagnóstico se le inició antirretroviral. Se realizó cuenta de CD4 en 7 de los pacientes con VIH de los cuales todos tenían cifras menores a 200 con una media de 71.57. Solo uno de los pacientes tenía carga viral indetectable y el resto tenían cifras entre 100,719 a 1,524,451 copias/ml. Además de la infección por VIH se consideraron otros factores condicionantes de inmunosupresión como diabetes mellitus, insuficiencia renal crónica, insuficiencia hepática, alcoholismo y drogadicción. 2 pacientes (12.5%) tenían diabetes mellitus, 1 paciente (6.25%) tenía insuficiencia renal crónica, 7 pacientes (43.75%) eran alcohólicos y un paciente (6.25%) era usuario de drogas. 5 pacientes (31.25%) tenían más de un factor condicionante de inmunosupresión y sólo un paciente (6.25%) no tenía algún factor conocido. 3 pacientes tenían antecedente de convivencia con alguna persona con diagnóstico de Tb pulmonar, de éstos, ninguno tenía VIH y 2 eran alcohólicos. Respecto a los signos y síntomas al momento del ingreso, la manifestación más frecuente fue la alteración de las funciones mentales (87.5%), 9 pacientes (56.25%) presentaron afección de algún nervio craneano (Figura 1). El resto de las manifestaciones clínicas se presentan en la Tabla 3. 33 Figura 1. Masculino de 65 años de edad que ingresó por cefalea, fiebre y diplopia. En la exploración neurológica destacaba la presencia de signos meníngeos y afección de III nervio craneano derecho. En la fotografía se observa ptosis palpebral derecha leve, exotropia de ojo derecho y anisocoria con pupila derecha de 4mm e izquierda de 3mm. Tabla 3. Manifestaciones neurológicas al ingreso. SINTOMAS Y SIGNOS No. de pacientes (%) Alteración de las funciones mentales 14 87.5 Alteración del estado de alerta 12 75 Cefalea 12 75 Irritación meníngea 12 75 Fiebre 12 75 Focalización 11 68.75 Crisis convulsivas 6 37.5 Afección de Nervios Craneanos 9 56.25 II 1 11.11 III 5 55.55 IV 2 22.22 VI 4 44.44 Mas de un nervio afectado 3 33.33 La clasificación de los pacientes al ingreso, basada en los Criterios de Severidad de la Tuberculosis Meníngea propuestos por el British Medical Research Council de 1948 28 reveló los siguientes datos: ningún paciente estaba en etapa I, 75% de los pacientes estaba en Etapa II (intermedio) y 25% en etapa III (avanzado). De los pacientes en etapa II, 7(58.3%) tuvieron complicaciones neurológicas y 4 (33%) murieron. De los pacientes en etapa III, 3(75%) se complicaron y 3 (75%) se murieron (Tabla 4). 34 Tabla 4. Etapa clínica, complicaciones y muerte. ETAPA DESCRIPCIÓN FRECUENCIA COMPLICACION MUERTE I Síntomas inespecíficos, sin compromiso neurológico, el diagnóstico se establece por hallazgos en LCR 0 ‐ ‐ II Alerta pero inatento, somnoliento, confuso, con datos de focalización 12 (75%) 7 (58.3%) 4(33.3%) III Estupor, coma, compromiso de múltiples nervios craneales, hemiparesia o parálisis 4 (25%) 3 (75%) 3 (75%) En la biometría hemática se encontró una cuenta leucocitaria de 7.25 ± 2.5 103/µL, hemoglobina de 12.3 ± 2.8 g/dL, y la alteración electrolítica más frecuente fue hiponatremia la cual estuvo presente en 75% de los pacientes con un valor de 128.4 ± 6.2 mEq/L. 8 de los pacientes (50%) tenían una radiografía de tórax anormal con un patrón sugestivo de Tb Pulmonar (infiltrado reticulonodular o patrón miliar) (Figura 2). Figura 2. Radiografía posteroanterior de tórax que muestra linfadenopatías hiliares y paratraqueales y nódulos difusos múltiples con patrón en vidrio despulido. 35 Todos los pacientes contaban con estudio citoquímico del LCR. Los resultados se muestran en la Tabla 5. Tabla 5. Características citoquímicas del Líquido Cefalorraquídeo LIQUIDO CEFALORRAQUIDEO FRECUENCIA % / MEDIA/ MEDIANA Aspecto ‐Turbio 9 56.25% ‐Claro 4 25% ‐Xantocrómico 3 18.75% Leucocitos x 75 x 103/mL ‐Polimorfonucleares z 60.3 ± 30.7 % ‐Linfocitos z 30.7 ± 25.4 % Proteínas x 236.5 mg/dL Glucosa z 18.3 ± 11 mg/dL x = mediana, z = media Considerando los criterios propuestos por Youssef y cols., 2006 16 para diferenciar meningitis bacteriana de meningitis tuberculosa, se analizaron éstos datos en nuestra población (Tabla 6). Tabla 6. Características clínicas y de laboratorio que diferencian tuberculosis meningea de meningitis bacteriana Característica FRECUENCIA PORCENTAJE Evolución > 5 días 15 (93.8%) Cefalea 12 (75%) LCR transparente 4 (25%) LCR con < 1000 leucocitos/ mm3 16 (100%) LCR con > 30% de linfocitos 10 (62.5%) LCR con > 100 mg/dL de proteínas 14 (87.5%) En nuestra población no fue frecuente encontrar un LCR transparente en los pacientes con meningitis tuberculosa. Se midió Adenosina Deaminasa en LCR de 12 pacientes de los cuales 10 tuvieron un valor por arriba del corte de 11.39 U/L/min con un valor promedio de 22.7 U/L/min y 2 pacientes tuvieron cifras limítrofes de 9 y 10 U/L/min., respectivamente, de los cuales un paciente estaba tomando isoniacida profiláctica y el otro paciente tenía tuberculosis documentada en pulmón y ganglios. La prueba de Reacción de Cadena de Polimerasa para Mycobacterium tuberculosis fue positiva en 4 pacientes y se encontró evidencia por cultivo o histopatología en 3 pacientes de los cuales en uno se realizó necropsia encontrando tuberculosis miliar con afección a pulmón, ganglios, 36 hígado, diafragma, próstata, testículos, glándulas suprarrenales, riñones, colon, mesenterio y sistema nervioso central. En 14 de los pacientes se realizó algún estudio de imagen del sistema nervioso central (Tabla 7). En 9 pacientes (56.3%) se realizó TC de cráneo y en 5 pacientes (31.3%) se realizó TC y RMN de cráneo encontrando hidrocefalia en 6 pacientes (Figura 3), edema cerebral en 3 pacientes (Figura 4), reforzamiento meníngeo en 8 pacientes y lesión focal en 8 pacientes (Figura 5A y 5B). Tabla 7. Alteraciones en estudio de imagen del SNC (TC o RMN de cráneo) ALTERACIÓN FRECUENCIA PORCENTAJE Reforzamiento Meníngeo 8 (57.1%) Lesión focal 8 (57.1%) Hidrocefalia 6 (42.8%) Edema Cerebral 3 (21.4%) Hallazgos múltiples 5 (35.7%) 37 Figura 3. RMN de cráneo. Corte axial en secuencia Flair que muestra dilatación de los ventrículos laterales con edema subependimario en los recesos frontales. El espacio subaracnoideo se encuentra reducido en sus dimensiones en forma secundaria. Hay gliosis en la corteza cerebral bitemporal. 38 Figura 4. TC de cráneo. Se identifica edema de la corteza cerebral que afecta a ambos lóbulos temporales, ínsulas y ganglios de la base de predominio izquierdo. 39 Figura 5A y 5B. RMN de cráneo de paciente con Tb meníngea que presentó síndrome piramidal derecho. En la secuencia Flair en corte sagital (A) y coronal (B) se observa una gran lesión frontal izquierda redondeada así como lesiones satélite que tras la administración del medio de contraste, presentan reforzamiento anular. El estudio histopatológico del material obtenido del drenaje quirúrgico del absceso confirmó etiología tuberculosa. El sitio de reforzamiento no es exclusivo de la región basal ya que también se encontraron zonas de reforzamientofocal en corteza frontal y parietal (Figuras 6A y 6B). Figura 6A y 6B. 6A. Corte axial de RMN de cráneo en secuencia T1 que muestra obliteración del espacio subaracnoideo, de las cisuras laterales y de las cisternas perimesencefálicas. Con el contraste se observa reforzamiento aracnoideo generalizado de predominio en cisternas de la base (A). En la figura de la derecha (B) se identifica edema de la corteza cerebral que afecta ambos lóbulos temporales, ínsulas y ganglios basales izquierdos. Con medio de contraste hay intenso reforzamiento aracnoideo generalizado de predominio en las cisuras laterales, el aspecto es nodular múltiple y de conglomeración. 40 En los estudios de neuroimagen, 8 pacientes tuvieron lesiones focales de las cuales 7 correspondieron a isquemia (figura 7) en el territorio de la arteria cerebral media (todas del lado izquierdo), en el sistema vertebrobasilar, en el territorio de la arteria cerebral posterior izquierda y la arteria cerebelosa superior derecha. Uno de los pacientes tuvo una lesión hemorrágica talámica izquierda. Figura 7. Corte axial de TC de cráneo en fase simple que muestra imagen hipodensa a nivel de la cabeza del núcleo caudado izquierdo sugestiva de isquemia. De los pacientes estudiados, 8 tenían evidencia de tuberculosis en otro sitio además del SNC (Gráfica 1). 41 Gráfica 1. Pacientes con tuberculosis en otro sitio fuera del SNC 10 pacientes presentaron complicaciones neurológicas de los cuales 5 (31.25%) tuvieron hidrocefalia aguda, 2 (18.75%) tuvieron hidrocefalia crónica y 8 tuvieron vasculitis con infarto demostrada por doppler transcraneal (Tabla 8). La hidrocefalia se observó en 3 pacientes con VIH (42.8%) y en 4 pacientes sin VIH (57.2%). La vasculitis con infarto fue más frecuente en los pacientes sin VIH (6 casos, 75%). Seis de los pacientes con Tb meníngea y Tb fuera del SNC tuvieron complicaciones. Tabla 8. Complicaciones de la tuberculosis meníngea detectadas por estudio de neuroimagen y mortalidad. COMPLICACIONES FRECUENCIA MUERTE Hidrocefalia 7 3 (42.8%) ‐Aguda 5 (31.25%) ‐Crónica 2 (18.75%) Vasculitis con infarto 8 (50%) 4 (50%) De los pacientes estudiados 9 (56.25%) mejoraron y 7(43.75%) murieron. 42 8. DISCUSIÓN La mayoría de los pacientes eran de la cuarta década de la vida y del sexo masculino lo cual corresponde a lo reportado en la literatura por Jacob 7 y a las estadísticas Mexicanas del 20076 El tiempo de evolución promedio fue mayor a 5 días lo cual orienta mas hacia Tb meníngea que a meningitis bacteriana ya que ésta generalmente tiene una evolución de 24 a 48 hrs; la literatura reporta una evolución de 12 a 29 días7; nuestros pacientes tuvieron una evolución promedio de 52 días, lo cual se relaciona con ingreso hospitalario de los pacientes en etapa clínica avanzada y por lo tanto más complicaciones y muerte. Como hemos señalado, nuestro hospital tiene la misión de atender a la población no asegurada del país, por lo que en ocasiones, los pacientes que ingresan, no han tenido cuidados adecuados de medicina preventiva y probablemente esto se asocia a que ninguno de nuestros pacientes estuviera en etapa clínica I al ingreso, y las etapas mas frecuentes de presentación fueran la II (75%) y III (25%). En cuanto al cuadro clínico de nuestros pacientes, la frecuencia de síntomas y signos como cefalea y fiebre es igual a lo reportado por la Sociedad Británica de Infectología 15, aunque en nuestros pacientes fue mas frecuente la alteración del estado de alerta y de las funciones mentales superiores. La afección de nervios craneales se presentó en 56.25% de los pacientes y en nuestros pacientes el III nervio craneal fue el mas afectado comparado con la afección mas frecuente del VI nervio craneal en otras series 15. En 2006, Youssef y colaboradores16 hicieron un estudio para conocer los elementos diagnósticos predictivos de Tb meníngea y diferenciarla de la meningitis bacteriana. De estas características, las más frecuentes en nuestra población fueron: 1) cuadro clínico > 5 días (93.8%), 2) cefalea 75%, 3) LCR con < 1000 leucocitos/ mm3(100%) y 4) LCR con > 100 mg/dL de proteínas (87.5%). El predominio linfocítico en LCR estuvo presente en 62.5% de los casos y el LCR transparente solo en 25%, por lo que los principales factores a considerar en nuestra población son los primeros cuatro. De los estudios de laboratorio la alteración electrolítica frecuente fue la hiponatremia la cual estuvo presente en 12% de los pacientes. Esto ha sido documentado por otros autores como Thwaites 10 que reporta una incidencia mayor del 50%. Dentro de los mecanismos de 43 hiponatremia se ha propuesto el síndrome de secreción inapropiada de hormona antidiurética y el síndrome de cerebro perdedor de sal aunque no se ha definido hasta la fecha la causa exacta. 50% de los pacientes tenían una radiografía de tórax anormal con un patrón sugestivo de tuberculosis lo cual corresponde con lo reportado con otras series. 36, 41 Sahly reportó en 2007 que hasta 33% de los pacientes con Tb meníngea tienen VIH 29, sin embargo Porket y colaboradores 47, en una serie de pacientes en Georgia reportaron en 1997 una incidencia similar de pacientes con y sin VIH con un 47% de los casos seropositivos. Al igual que lo reportado por Sutlas en una serie de 61 casos (2003) 36, en nuestro estudio la infección por VIH no se relacionó con una mayor etapa clínica ni con peor desenlace. Hubo una frecuencia similar de pacientes con y sin VIH, sin embargo, los pacientes sin VIH tenían otros factores predisponentes como diabetes mellitus, insuficiencia renal crónica, alcoholismo y convivencia con familiares cercanos con Tb que en algunas series se reporta como un antecedente muy importante presente hasta en 75% de los casos. 37 Todos los pacientes con VIH tenían linfocitos CD 4 menores de 200 cel/mm3 lo cual ha sido reportado por otros autores como Jacob. 7Las manifestaciones clínicas y resultados de laboratorio fueron similares entre los pacientes con VIH y sin VIH lo cual corresponde con lo reportado en diversos estudios. 15, 26, 27 Sin embargo, hubo algunos datos mas frecuentes en los pacientes con VIH como el que todos hayan tenido alteración del estado mental y cifras mas bajas de hemoglobina aunque estas diferencias no fueron significativas entre grupos. En la literatura se reporta que 41 a 68% de los pacientes pueden tener Tb fuera del SNC. En nuestro estudio 50% de los pacientes presentaron Tb extrameníngea, sin embargo, ésta fue mas frecuente en pacientes sin VIH (75%) lo cual es diferente a los reportado en estudios como el de Sudáfrica donde encontraron una mayor frecuencia de Tb extrameníngea en pacientes con VIH (76.9%) 44. En dicho estudio se reportó que el antecedente de Tb extrameníngea orientaría a la búsqueda de Tb meníngea en los pacientes con cuadro de neuroinfección y antecedente de Tb en algún sitio, sin embargo nosotros consideramos que en todos los pacientes, incluso los inmunocompetentes el antecedente de Tb en cualquier sitio apoya la sospecha diagnóstica de Tb meníngea en un paciente con cuadro clínico compatible. El pronóstico de los pacientes se relaciona directamente con la etapa clínica al ingreso siendo el peor en los pacientes con etapa III. En el estudio de Turquía se reportó que 53.5% de los 44 pacientes llegaron en etapa III 37, lo cual contrasta con lo reportado en una serie Australiana de 13.8% de los pacientes
Compartir