Logo Studenta

Comportamiento-de-la-gonadotropina-corionica-humana-subunidad-beta-en-pacientes-tratadas-con-tecnicas-de-reproduccion-asistida-de-alta-complejidad

¡Este material tiene más páginas!

Vista previa del material en texto

1 
 
 
 
 
 
 
 
UNIVERSIDAD NACIONAL AUTÓNOMA DE MÉXICO 
 
FACULTAD DE MEDICINA 
DIVISIÓN DE ESTUDIOS DE POSGRADO 
HOSPITAL ÁNGELES DEL PEDREGAL 
 
 
COMPORTAMIENTO DE LA GONADOTROPINA CORIÓNICA HUMANA SUBUNIDAD BETA EN 
PACIENTES TRATADAS CON TÉCNICAS DE REPRODUCCIÓN ASISTIDA DE ALTA COMPLEJIDAD 
 
 
TESIS 
QUE PARA OBTENER EL TÍTULO DE: 
MÉDICO ESPECIALISTA EN BIOLOGIA DE LA REPRODUCCIÓN HUMANA 
 
PRESENTA 
DR. JOSÉ LUIS OVIEDO CHOY 
DIRECTOR DE TESIS: DR. HÉCTOR SALVADOR GODOY MORALES 
HOSPITAL ÁNGELES DEL PEDREGAL 
BIOLOGÍA DE LA REPRODUCCIÓN HUMANA 
 
 
MÉXICO, D.F. JULIO 2015 
 
UNAM – Dirección General de Bibliotecas 
Tesis Digitales 
Restricciones de uso 
 
DERECHOS RESERVADOS © 
PROHIBIDA SU REPRODUCCIÓN TOTAL O PARCIAL 
 
Todo el material contenido en esta tesis esta protegido por la Ley Federal 
del Derecho de Autor (LFDA) de los Estados Unidos Mexicanos (México). 
El uso de imágenes, fragmentos de videos, y demás material que sea 
objeto de protección de los derechos de autor, será exclusivamente para 
fines educativos e informativos y deberá citar la fuente donde la obtuvo 
mencionando el autor o autores. Cualquier uso distinto como el lucro, 
reproducción, edición o modificación, será perseguido y sancionado por el 
respectivo titular de los Derechos de Autor. 
 
 
 
2 
 
Índice 
Secciones Páginas 
 
Resumen 3 
Introducción 5 
Planteamiento del problema 8 
Justificación 9 
Hipótesis 10 
Objetivos 10 
Diseño del estudio 10 
Materiales y métodos 10 
 Criterios de inclusión 11 
 Criterios de exclusión 11 
 Técnicas de reproducción asistida 11 
 Transferencia embrionaria 12 
 Prueba de B-hCG 12 
 Análisis estadístico 12 
Resultados 13 
Discusión 14 
Conclusión 16 
Anexos 17 
Bibliografía 22 
 
 
 
 
 
3 
 
Resumen 
 
Introducción 
La OMS ha declarado a la Infertilidad como un problema de salud pública, con una 
prevalencia a nivel mundial entre un 10% a 20%. La determinación de B-hCG 12 a 18 días 
luego de una transferencia embrionaria ha sido un indicador establecido de embarazo 
luego de técnicas de reproducción asistida, adquiriendo gran importancia el proporcionar 
información temprana y confiable, con respecto a la presencia de embarazo luego de la 
transferencia embrionaria y sobre el pronóstico del mismo, siendo esto de gran relevancia 
ante los niveles elevados de estrés asociado a los tratamientos por infertilidad. 
Objetivos 
Evaluar el comportamiento de los niveles de B-hCG séricos en pacientes sometidas a 
técnicas de reproducción asistida de alta complejidad. 
Materiales y métodos 
Se revisó la base de datos de todos los ciclos de Reproducción Asistida realizados en la 
Unidad de Reproducción Humana del Hospital Ángeles del Pedregal durante enero del 
2011 y abril del 2015. Se analizaron 885 ciclos registrados que correspondían a 541 ciclos 
de TE en frescos y 344 ciclos de TE por desvitrificación, tratados con técnicas de 
reproducción asistida de alta complejidad que resultaron en B-hCG > 5 mUI/ml, evaluando 
su comportamiento con controles séricos, además de la evolución clínica del embarazo. 
Resultados 
Un total 202 ciclos con B-hCG > 5 mUI/ml y se analizaron 103 ciclos que cumplían con 
criterios de inclusión. La media de edad de 37.17 ± 4.9 años, 58 pacientes con infertilidad 
primaria y 45 con infertilidad secundaria. Fueron 44 ciclos por TE en fresco y 59 ciclos por 
TE desvitrificados. La técnica de fertilización fue en 29 ciclos por FIV convencional, 55 por 
ICSI y 19 por FIV + ICSI. En 9 ciclos se transfirió un embrión, en 64 ciclos dos embriones y 
en 30 ciclos tres o más embriones de los cuales 80 fueron en estadio de clivaje y 23 en 
blastocistos. La media de B-hCG en TE de 1 embrión fue de 133.98 ± 44.0 mUI/ml y 464.96 
± 125.37 mUI/ml, en TE de 2 embriones fue de 431.14 ± 147.85 mUI/ml y 612.18 ± 116.39 
mUI/ml y en TE de 3 o más embriones fue de 291.01 ± 79.76 mUI/ml y 1409 ± 724.30 
mUI/ml para embriones en clivaje y blastocisto respectivamente. La evolución clínica de 
los embarazos positivos fue: embarazos clínicos únicos (53.39%), embarazos múltiples 
(14.56%), embarazos bioquímicos (16.5%), abortos (9.78%) y embarazos ectópicos 
(5.82%). Los valores de las medias de B-hCG sérica fueron mayores para todos los 
subgrupos de transferencias de blastocistos. 
4 
 
Conclusión 
En los ciclos de Reproducción Asistida los niveles de estrés y ansiedad son elevados tanto 
en la pareja como en el equipo médico involucrado. En este estudio se analizó el 
comportamiento de los niveles séricos de B-hCG en pacientes con infertilidad sometidas a 
diferentes Técnicas de Reproducción Asistida de Alta Complejidad. El principal hallazgo fue 
que los niveles séricos iniciales de B-hCG y de control eran mayores en el grupo de 
transferencias de blastocistos en comparación con embriones en estadíos de clivaje, 
independientemente del número de embriones transferidos, tal vez por factores 
relacionados con una mejor selección embrionaria en los cultivos extendidos. 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
5 
 
Introducción 
La Organización Mundial de la Salud ha declarado a la infertilidad como un problema de 
salud pública, motivo por el cual su tratamiento surge como una necesidad. Países en vías 
de desarrollo paradójicamente tienen tasas más altas de fecundidad y también de 
infertilidad. Existen diferentes definiciones de Infertilidad entre las Instituciones 
académicas y aquellas dedicadas al estudio y manejo de éste problema a nivel mundial. La 
Sociedad Europea de Reproducción Humana y Embriología (ESHRE) define esterilidad 
como la incapacidad de la pareja para concebir un embarazo tras un año de exposición 
regular al coito y subfertilidad como la capacidad para conseguir un embarazo sin ayuda 
médica pero en un período superior a un año. La Federación Internacional de Ginecología 
y Obstetricia (FIGO) y la Organización Mundial de la Salud (OMS) consideran que debe 
haber transcurrido al menos 24 meses de relaciones sexuales regulares con finalidad 
reproductora sin conseguir un embarazo. La definición más utilizada es la de Sociedad 
Americana de Medicina Reproductiva (ASRM) que define la infertilidad como la 
incapacidad de una pareja para lograr un embarazo después de un año de relaciones 
sexuales sin protección anticonceptiva. (1) 
Es difícil poder establecer porcentajes exactos de infertilidad. En primer lugar porque no 
todas las parejas consultan por este problema, además está la dificultad para poder 
determinar la distribución por edades, la imposibilidad de saber la tasa de fertilidad 
específica para cada grupo étnico y la dificultad que representa la metodología utilizada 
para evaluar y diagnosticar dicha patología. 
La tasa de fecundidad del ser humano es del 20% por ciclo, consigue embarazo el 60% al 
65% de las parejas en los primeros 6 meses de búsqueda, el 75% lo logran a los 9 meses y 
la tasa de embarazo acumulada después de un año es del 90% (2). El 60% de las parejas 
con infertilidad que recibe atención logran un embarazo y con técnicas de reproducción 
asistida la tasa de embarazo a término por ciclo puede variar del 30% al 35% según la Red 
Latinoamericana de Reproducción Asistida (RedLara). 
La prevalencia de Infertilidad a nivel mundial se considera aproximadamente del 10% al 
20% (3). Esta puede variar si se trata de países desarrollados en donde se considera el 6% 
(4), mientras que en países subdesarrolladospuede llegar hasta un 32.6% (5). Esta 
prevalencia parece haber incrementado en las últimas dos décadas a nivel mundial y las 
causas varían de acuerdo a la población de estudio, por ejemplo la endometriosis y 
anovulación son más frecuentes en mujeres con nivel socioeconómico alto o de mayor 
edad, que tienden a posponer la maternidad por motivos laborales, sociales y culturales. 
La edad es el factor más importante en el impacto de la fertilidad (6-7) se estima que la 
fertilidad en la mujer disminuye 2.77% por año a partir de los 35 años. La fertilidad 
máxima de la mujer es a la edad de 24 a 26 años, con una disminución gradual a partir de 
los 30 años, tiene una caída acentuada alrededor de los 35 años y aún más pronunciada 
después de los 40 años (8). 
6 
 
La infertilidad primaria es más frecuente que la secundaria en porcentajes de 63.7% vs 
36.2% (9). Aunque la secundaria es menos frecuente, la tasa acumulada de embarazos con 
los diferentes tratamientos es más alta traduciéndose en un mejor pronóstico para la 
misma. La infertilidad femenina representa el 40% del total de las causas, la masculina el 
otro 40% y el 20% restante de origen desconocido y mixto (10). La prevalencia por 
factores dependerá del tipo de población que se esté estudiando. Los factores más 
afectados son el masculino, tubárico y ovárico. 
En el 2013, se realizaron 174,962 ciclos de reproducción asistida en los Estados Unidos 
según estadísticas de la Sociedad de Técnicas de Reproducción Asistida (SART), de los 
cuales 87,089 fueron ciclos con transferencia embrionaria en fresco con tasas de 
embarazo clínico que varían entre 8.9% y 46%, además 40,015 fueron ciclos con 
transferencia embrionaria por desvitrificación con tasas de nacidos vivos entre 21.2% y 
44.4%, dependiendo de los grupos de edad (11). La tasa de transferencia embrionaria de 1 
sólo embrión (SET) fue de 22.5% en mujeres < 35 años de edad. Según datos publicados 
por el 14º Reporte Anual del Consorcio Europeo de Monitorización de Fertilización in vitro 
avalado por la ESHRE, en el 2010 se recibieron datos de clínicas dedicadas a Técnicas de 
Reproducción Asistida de 31 países en la unión europea. El número de ciclos reportados 
fue de 550,296, demostrando un aumento del 2.4% (13,009 ciclos) con respecto al 2009, 
en ese mismo año se reportaron 147,260 ciclos en los Estados Unidos de Norteamérica 
(12) y 61,774 ciclos en Australia y Nueva Zelanda (13). En este reporte la tasa de embarazo 
por aspiración fue de 29.2% para FIV y 28.8% para ICSI, la tasa de embarazo por 
descongelación fue de 20.3%, tal vez debido a la incorporación de la Vitrificación en los 
laboratorios de embriología. La tasa de transferencia embrionaria de 1 sólo embrión fue 
de 25.7%, mientras que la tasa de embarazos múltiples fue de 20.6% (14). 
B-hCG: 
El diagnóstico temprano del embarazo se basa principalmente en la detección por 
laboratorio de la gonadotropina coriónica humana (hCG) en la orina o sangre. La historia 
clínica y el examen físico no son métodos altamente sensitivos para el diagnóstico 
temprano, sin embargo estas características pueden alertar al clínico sobre la posibilidad 
de un embarazo anormal, como el embarazo ectópico. La hCG es secretada en la 
circulación materna luego de la implantación, que ocurre entre 6 a 12 días luego de la 
ovulación, que es lo más temprano que la hCG puede ser detectada con una prueba 
ultrasensible. La implantación tardía se asocia con aumento en el riesgo de pérdida 
gestacional (15). La concentración sérica de hCG se dobla cada 29 a 53 horas durante los 
primeros 30 días luego de la implantación de un embarazo viable. En mujeres con ciclos 
menstruales normales que buscan embarazo, la media de hCG en el primer día de 
menstruación esperada fue de 239 mUI/ml en suero y 49 mUI/ml en orina (16). El rango 
de valores de hCG fue más estrecho en un estudio de 4400 mujeres que lograron 
embarazo por técnicas de FIV, a las cuales se les realizó transferencia embrionaria 2 a 3 
7 
 
días luego de la aspiración folicular y que tuvieron al menos un embrión viable de 8 
semanas de gestación, en ellas la media de hCG en día 12 luego de la transferencia 
embrionaria fue de 118 mUI/ml (17). La concentración de hCG alcanza un pico a las 8 a 10 
semanas de gestación, alcanzando promedios de 60,000 a 90,000 mUI/ml, pero el rango 
de normalidad es muy amplio entre las pacientes, es por esta razón que los niveles de hCG 
no son útiles para calcular la edad gestacional, excepto en las semanas 1 y 3 post-
concepción (18). En las siguientes 10 semanas los niveles declinan, alcanzado una 
concentración media de 12,000 mUI/ml a las 20 semanas, nuevamente con un amplio 
rango de variación entre 2,000 a 50,000 mUI/ml o más. Luego los niveles de hCG se 
mantienen constantes hasta el término del embarazo. 
Detección de hCG: 
El momento en que una prueba de embarazo resulta positiva depende de varios factores: 
 Duración del ciclo, que varía por la duración de la fase folicular y el momento de la 
ovulación. 
 La sensibilidad de la prueba de hCG 
 La combinación de anticuerpos para isoformas de hCG en la prueba 
 
La ovulación puede ocurrir tan temprano como 8 días a partir de la última menstruación; y 
en estas pacientes la hCG ha sido detectada en orina en el día 16 del ciclo. La hCG ha sido 
detectada desde 6 a 8 días después de la probable fecha de concepción. Sin embargo la 
mayoría de las pruebas de embarazo tienden a resultar positivas al momento en que se 
espera la menstruación (19). 
 
Las pruebas de embarazo se pueden realizar en orina o suero. La elección depende de 
factores como la duración del retraso menstrual, necesidad de exactitud, conveniencia y 
costo. Las pruebas de orina tienen menos sensibilidad que las séricas, pudiendo resultar 
negativa y la prueba sérica positiva alrededor del momento del retraso menstrual; es por 
esto que las pruebas séricas son de elección cuando el retraso es menor a 1 semana, 
especialmente cuando la exclusión de embarazo es un factor importante para el cuidado 
de una paciente, por ejemplo antes de iniciar terapias con agentes teratogénicos. 
En la práctica clínica, el método más sensitivo para la detección temprana de hCG es una 
prueba sérica. Las pruebas de embarazo séricas cualitativas usualmente detectan niveles 
de hCG entre 5 a 10 mUI/ml, mientras que las pruebas de alta sensibilidad cuantitativas 
pueden medir valores de hCG tan bajos como 1 a 2 mUI/ml, mientras que las pruebas de 
embarazo en orina son menos sensibles, llegado a detectar niveles de hCG entre 20 a 50 
mUI/ml (20). 
 
El uso de técnicas de reproducción asistida ha ido en incremento sustancial desde el 
primer nacimiento por fertilización in vitro en 1978. Según el Centro para el Control de 
8 
 
Enfermedades (CDC), más del 1% de todos los nacimientos en los Estados Unidos son 
resultado de técnicas de reproducción asistida como la fertilización in vitro (21). 
Aproximadamente el 22% de los embarazos concebidos por FIV resultan en abortos 
espontáneos (22). Las pacientes que se someten a estas técnicas generalmente 
experimentan ansiedad y estrés, los cuales se intensifican al momento de realizarse la 
primera prueba de embarazo (23). El poder identificar un predictor confiable de la 
evolución y resultado del embarazo en etapas iniciales del mismo puede ayudar a 
disminuir el nivel de ansiedad en estas parejas. A pesar de que el ultrasonido transvaginal 
es una herramienta muy útil para evaluar embarazos tempranos, su utilidad se encuentra 
limitada antes de las 5 ó 6 semanas de gestación. Los valores de hCG séricos ofrecen un 
método alternativo para evaluar la progresión del embarazo, ya que puede ser detectada 
en el suero entre 7 a 9 días después del pico de LH a mitad del ciclo menstrual y duplica su 
valor cada 48 horas en la mayoría de los embarazos normales (24,25). Existe poca 
información en la literaturacon respecto a la hCG como como un predictor temprano de 
embarazo luego de fertilización in vitro. 
 
Planteamiento del problema 
La determinación sérica cuantitativa de la subunidad beta de la gonadotropina coriónica 
humana (B-hCG) 12 a 18 días luego de la transferencia embrionaria ha sido un indicador 
confiable y establecido de embarazo conseguido por técnicas de reproducción asistida. Sin 
embargo hasta el 22% de estos embarazos son no viables y resultan en abortos 
espontáneos, embarazos bioquímicos y embarazos ectópicos (26); tomando esto en 
cuenta, adquiere mucha importancia proporcionar información temprana y confiable, no 
sólo con respecto a la presencia de embarazo luego de la transferencia embrionaria, sino 
también del pronóstico de dicho embarazo. Esto adquiere relevancia ante los niveles 
elevados de estrés asociado a los tratamientos por infertilidad (27). Muchos estudios han 
investigado el valor de la hCG en la predicción de un embarazo viable luego de técnicas de 
reproducción asistida, encontrando correlación entre los niveles de hCG con la evolución y 
el resultado del embarazo (28), sin embargo estos valores de corte varían mucho entre los 
diferentes estudios. Estas diferencias pueden resultado de sesgos en los diseños de 
estudio, momento de toma de la muestra sanguínea y los métodos analíticos utilizados 
para medir los niveles de hCG. Además se ha demostrado que existen otros factores que 
pueden intervenir en la dinámica de los niveles de hCG como el día de la transferencia 
embrionaria, los medios de cultivo, la etiología de la infertilidad y la técnica de 
reproducción asistida utilizada (29). En los ciclos de Fertilización in vitro los embriones 
pueden ser transferidos dentro del útero ya sea en día 2 ó 3 (clivaje) o en día 5 ó 6 
(blastocito) luego de la fertilización, estos últimos ofreciendo ventajas en cuanto a la 
viabilidad, potencial de desarrollo y mayor sincronización con el endometrio receptor, 
representado embriones de mejor calidad y a su vez teniendo impacto sobre los niveles 
iniciales de hCG séricos, así como en las recomendaciones y consejería correspondientes 
9 
 
al día de la transferencia embrionaria. La criopreservación de embriones con la 
subsecuente descongelación y transferencia se ha convertido en un mecanismo exitoso 
para lograr embarazos, legando a cifras en el 2012 de 33,035 transferencias de embriones 
autólogos criopreservados en los Estados Unidos, sin embargo poco se sabe sobre el 
efecto que la criopreservación tiene en la habilidad del embrión de producir hCG y su 
potencial de desarrollo en comparación con transferencias en fresco. Datos recientes 
sugieren que la tasa de elevación de hCG es menor luego de la transferencia de embriones 
criopreservados (30). Tampoco existen datos en la literatura con respecto a las diferencias 
en los niveles de hCG luego de la transferencia de embriones vitrificados-desvitrificados 
en estadios de blastocito comparados con transferencia de blastocitos frescos. 
 
Justificación 
En la actualidad el número de parejas que acuden por problemas de infertilidad a nivel 
mundial ha ido en aumento, ya sea por razones culturales, profesionales o por el 
diagnóstico de nuevas patologías que puedan condicionar esta situación; sin embargo 
muchas de estas parejas tienen como como única opción de tratamiento el uso de 
técnicas de reproducción asistida ya sean de baja o de alta complejidad. Todo esto 
conlleva una gran carga emocional acompañada de niveles altos de ansiedad y estrés por 
parte de la pareja como tal, así como de los especialistas en Biología de la Reproducción, 
ya que en cada ciclo realizado se espera un desenlace exitoso, en este caso un embarazo. 
Para poder realizar el diagnóstico temprano de embarazo contamos con marcadores 
clínicos, imagenológicos y bioquímicos. Dentro de los bioquímicos el más confiable y 
ampliamente utilizado es la medición sérica de los niveles de la subunidad Beta de la 
gonadotropina coriónica humana (B-hCG), pudiéndose detectar niveles tan bajos como 5 
mUI/ml. Al realizar técnicas de reproducción asistida que van desde la inseminación 
intrauterina (IIU) hasta la fertilización in vitro (FIV) con variantes como la inyección 
intracitoplasmática de espermatozoides (ICSI) y la criopreservación de embriones, los 
Biólogos de la Reproducción podemos determinar aspectos tan importantes dentro de 
estos procesos como lo son el momento exacto de la ovulación, la fertilización y la 
implantación de los embriones, lo cual nos permite determinar el momento indicado para 
solicitar los niveles de B-hCG y así poder confirmar la presencia o no de un embarazo. El 
problema radica en que no contamos con valores de corte establecidos para los niveles de 
B-hCG en la primera prueba sérica que nos permitan determinar si existe un embarazo, ni 
tampoco si el embarazo es viable, principalmente por problemas en los diseños de 
estudios y aspectos tan importantes como el estadío del embrión, número de embriones 
transferidos, día de la transferencia embrionaria y el día de medición de B-hCG sérica. En 
México no se han realizado estudios que analicen el comportamiento de los niveles de B-
hCG en las pacientes sometidas a técnicas de reproducción asistida, es por eso que este 
estudio ayudará en la toma de decisiones clínicas con respecto a la evolución de estos 
10 
 
embarazos y además nos permitirá orientar mejor a las pacientes basándonos en 
evidencias científicas sobre el pronóstico de los embarazos. 
 
Hipótesis 
Nula: Los niveles de B-hCG séricos no permiten pronosticar la presencia o la evolución de 
embarazos en pacientes sometidas a técnicas de reproducción asistida de alta 
complejidad. 
Alterna: Los niveles de B-hCG séricos permiten pronosticar la presencia y la evolución de 
embarazos en pacientes sometidas a técnicas de reproducción asistida de alta 
complejidad. 
 
Objetivo General 
Evaluar el comportamiento de los niveles de B-hCG séricos en pacientes sometidas a 
técnicas de reproducción asistida de alta complejidad. 
Objetivos específicos 
1. Determinar los niveles de B-hCG séricos luego de transferencias embrionarias en 
estadío de clivaje y blastocistos en pacientes sometidas a técnicas de reproducción 
asistida de alta complejidad. 
2. Determinar los niveles de B-hCG séricos en embarazos viables y no viables de 
pacientes sometidas a técnicas de reproducción asistida de alta complejidad. 
3. Determinar los niveles de B-hCG séricos luego de transferencias de uno o más 
embriones en pacientes sometidas a técnicas de reproducción asistida de alta 
complejidad. 
 
Diseño del estudio 
Observacional, Retrospectivo, longitudinal, descriptivo. 
 
Materiales y Métodos 
Se revisó la base de datos electrónica y los expedientes clínicos físicos de todos los ciclos 
de Reproducción asistida que se realizaron en la Unidad de Reproducción Humana del 
Hospital Ángeles del Pedregal durante el período comprendido entre enero del 2011 y 
abril del 2015. Se analizaron 885 ciclos registrados que correspondían a 541 ciclos de 
transferencias en frescos y 344 ciclos de transferencias embrionarias por desvitrificación, 
11 
 
que consistían en técnicas de reproducción asistida de alta complejidad como 
estimulación ovárica controlada, preparación endometrial, donación de gametos 
(ovocitos y espermatozoides), criopreservación de gametos o embriones y transferencia 
de embriones en fresco o desvitrificados. 
 
Criterios de inclusión 
 Ciclos de reproducción asistida de alta complejidad. 
 Transferencia de embriones en estadíos de clivaje y blastocistos 
 Niveles séricos de B-hCG 12 días post-transferencia > 5 mUI/ml, con controles a los 
16 y 20 días post-transferencia. 
Criterios de exclusión 
 Medición de B-hCG cualitativa únicamente. 
 Niveles séricos de B-hCG 12 días post-transferencia < 5 mUI/ml. 
 Registros incompletos del estadío y número deembriones transferidos 
 Registros incompletos de los niveles de B-hCG 12 días post-transferencia o de los 
controles a los 16 y 20 días post-transferencia. 
 
Técnicas de Reproducción Asistida: 
Las pacientes fueron sometidas a protocolos de estimulación ovárica controlada con 
gonadotropinas recombinantes y/o menotropinas. La respuesta a la estimulación se 
monitorizó con mediciones de estradiol sérico y ultrasonido transvaginal para medir el 
crecimiento folicular hasta alcanzar diámetros > 14mm y se administraron antagonistas de 
GnRH para evitar la luteinización prematura. Se administró gonadotropina coriónica 
humana (hCG) urinaria o recombinante para la maduración final ovocitaria cuando se 
encontraron 2 o más folículos con diámetros > 18mm y 34-36 horas después se realizó la 
aspiración ovocitaria guiada por ultrasonido transvaginal. La fertilización se realizó por 
técnicas de FIV convencional añadiendo espermatozoides al cultivo de ovocitos (40,000 
células en 40 microlitros) 3-4 horas después de la captura. Se realizó ICSI de acuerdo a 
criterios establecidos como el número disminuido o calidad pobre de los ovocitos y por 
factor masculino de acuerdo a los parámetros seminales establecidos por la Organización 
Mundial de la Salud (OMS) en el 2010. Los cigotos fueron colocados en medios de cultivo 
G1 Plus del Laboratorio Vitrolife. Se realizó la evaluación morfológica de los embriones de 
acuerdo a la Clasificación de Lucinda Veeck para embriones en estadio clivaje y fueron 
cambiados a medios de cultivo G2 Plus del Laboratorio Vitrolife según la Clasificación de 
Garner para blastocitos. En los casos de preparación endometrial para ciclos sincronizados 
en fresco con donadoras de ovocitos o ciclos de desvitrificación de embriones se indicó 
12 
 
aplicación transdérmica de estradiol en gel 1 vez al día y aumentado la dosis hasta 4 veces 
al día dependiendo del desarrollo endometrial. 
Transferencia embrionaria 
La transferencia embrionaria se realizó según el criterio del médico tratante y el equipo de 
biólogos, tomando en cuenta factores como la edad materna y la calidad embrionaria. Fue 
realizada en ciclos frescos o por desvitrificación embrionaria iniciando con administración 
vía vaginal de progesterona micronizada cada 12 horas, durante 3 y 5 días previos a la 
transferencia de embriones en día 2, 3 o 5 de desarrollo embrionario post-fertilización 
utilizando cánula de Wallace bajo guía ultrasonográfica, continuando el soporte de fase 
lútea con progesterona micronizada vía vaginal e intramuscular diario hasta la toma de la 
B-hCG. 
Prueba de B-hcg: 
La medición de los niveles séricos de B-hCG se realizó mediante inmunoanálisis 
quimioluminiscente de micropartículas (CMIA) para la determinación cuantitativa de 
gonadotropina coriónica humana fracción Beta (Abbott ARCHITECT Total B-hCG System). 
El ensayo tiene un coeficiente de variación total < 10% (31). La sensibilidad analítica o 
límite de detección es de ≤ 1.2 mUI/ml. La especificidad analítica media del ensayo es < 
10% de reactividad cruzada con FSH, LH y TSH. La interferencia potencia < 10% con la 
hemoglobina, bilirrubina, triglicéridos y otras proteínas. El ensayo además tiene una 
pendiente de 1.0 ± 0.15 y un coeficiente de correlación (r) > 0.95 en el intervalo 
comprendido entre 0 mUI/ml y 15,000 mUI/ml. La primera medición de los niveles séricos 
de B-hCG se realizó en el día 12 post-transferencia embrionaria, si se obtuvo un resultado 
positivo > 5.0 mUI/ml, se realizó una segunda medición a los 16 y 20 días post-
transferencia embrionaria. Al contar con la tercera medición de los niveles séricos de B-
hCG, a todas las pacientes se les realizó un ultrasonido transvaginal a las 5 o 6 semanas de 
gestación para determinar la localización y el número de sacos gestacionales. 
 
Análisis estadístico 
Se realizó el análisis estadístico utilizando los valores de B-hCG en mUI/ml obtenidos en 
día 12, 16 y 20 post-transferencia embrionaria, calculando los valores para la media y la 
desviación error de la media. Se utilizó el programa IBM SPSS Statistics versión 20. 
 
 
 
 
13 
 
Resultados 
Se analizaron 885 ciclos de Técnicas de Reproducción Asistida de Alta Complejidad 
realizados en la Unidad de Reproducción Humana del Hospital Ángeles del Pedregal 
durante el período comprendido entre enero del 2011 y abril del 2015. Se realizaron 541 
ciclos de transferencia embrionaria (TE) en fresco y 344 ciclos de transferencia 
embrionaria por desvitrificación (FET). En total se obtuvo la determinación sérica de B-
hCG > 5 mUI/ml en 202 ciclos (22.82%), de los cuales se excluyeron 99 ciclos por no 
presentar las determinaciones séricas cuantitativas de B-hCG o por información ausente 
con respecto a la evolución clínica del embarazo. Se realizó el presente estudio en base a 
103 ciclos de TRA con B-hCG > 5 mUI/ml en el día 12 post-transferencia embrionaria, con 
mediciones posteriores a los 16 y 20 días post-transferencia embrionaria que cumplían 
con los criterios de inclusión. 
De estos 103 ciclos incluidos con B-hCG > 5 mUI/ml, 44 fueron por transferencia 
embrionaria en fresco, mientras que 59 ciclos fueron por transferencia de embriones 
desvitrificados (Tabla 1). La media de edad de las pacientes fue de 37.17 ± 4.94 años. En 
cuanto al tipo de infertilidad, los diagnósticos correspondían a 58 pacientes con 
infertilidad primaria y 45 con infertilidad secundaria. La técnica de fertilización utilizada en 
los ciclos se distribuyó en 29 ciclos por FIV convencional, 55 ciclos por ICSI y 19 ciclos por 
FIV + ICSI. Se realizaron 66 ciclos con ovocitos propios, 24 ciclos con ovocitos donados y 13 
ciclos con embriones donados. Al evaluar el número y estadio de desarrollo de los 
embriones transferidos encontramos que en 9 ciclos se transfirió un (1) embrión, en 64 
ciclos se transfirieron dos (2) embriones y en 30 ciclos se transfirieron tres (3) o más 
embriones; de estas transferencias embrionarias 80 fueron en estadio de clivaje y 23 
fueron de blastocistos. 
Al evaluar el comportamiento de los valores de B-hCG, encontramos que cuando se 
transfirió 1 embrión la media de la primera B-hCG sérica fue de 133.98 ± 44.0 mUI/ml y 
464.96 ± 125.37 mUI/ml para embriones en clivaje y blastocisto respectivamente, cuando 
se transfirieron 2 embriones la media de la primera B-hCG sérica fue de 431.14 ± 147.85 
mUI/ml y 612.18 ± 116.39 mUI/ml para embriones en clivaje y blastocistos 
respectivamente; cuando se transfirieron 3 o más embriones la media de la primera B-hCG 
sérica fue de 291.01 ± 79.76 mUI/ml y 1409 ± 724.30 mUI/ml para embriones en clivaje y 
blastocistos respectivamente (Tabla 2). 
La evolución clínica de todos los embarazos positivos se distribuyó de la siguiente manera: 
embarazos clínicos únicos (53.39%), embarazos múltiples (14.56%), embarazos 
bioquímicos (16.5%), abortos (9.78%) y embarazos ectópicos (5.82%); cuando se analizó 
por separado para los ciclos de transferencia de embriones en estadio de clivaje y para 
blastocistos, encontramos en los ciclos de transferencia de embriones en estadio de 
clivaje 43 embarazos clínicos únicos, 11 embarazos clínicos múltiples, 11 embarazos 
bioquímicos, 9 abortos y 6 embarazos ectópicos, mientras que en los ciclos de 
14 
 
transferencia de blastocistos encontramos 12 embarazos clínicos únicos, 4 embarazos 
clínicos múltiples, 6 embarazos bioquímicos, 1 aborto del segundo trimestre y no hubo 
embarazos ectópicos en este grupo. Los valores de las medias de B-hCG sérica fueron 
mayores para todos los subgrupos de las transferencias de blastocistos (Tabla 3). En este 
análisis específico no se tomó en cuenta el número de embriones transferidos, solamente 
el desenlace clínico en relación con el estadio de los embriones transferidos. 
 
Discusión 
Nuestro estudio muestra que la media de los niveles de B-hCG sérico es mayor para 
transferencias de embriones enestadío de blastocisto en comparación con embriones en 
estadío de clivaje. Estudios previos han comparado el comportamiento de los valores de la 
B-hCG de acuerdo al día de transferencia o estadío de desarrollo embrionario, incluyendo 
ciclos con transferencias de un embrión y transferencias de múltiples embriones. Heiner 
et al. (32) reportó una probabilidad de embarazo evolutivo de 82% con B-hCG > 100 
mUI/ml para transferencias embrionarias en día 3 y de 97% con B-hCG > 300 mUI/ml para 
transferencias embrionarias en día 5, tomadas entre el día 14 a 16 post captura folicular. 
En nuestro estudio el 62% de los ciclos correspondía a transferencia de 2 embriones, 
encontrando una media en el valor de B-hCG sérica tomada el día 12 post-transferencia de 
431.14 ± 147.85 mUI/ml y 612.18 ± 116.39 mUI/ml para embriones en clivaje (día 2 y 3) y 
blastocistos (día 5 y 6) respectivamente, así mismo encontramos una media en el valor de 
B-hCG sérica de 133.98 ± 44.0 mUI/ml y 464.96 ± 125.37 mUI/ml para transferencias de 1 
sólo embrión en estadío de clivaje y blastocisto respectivamente. La información 
publicada reporta que las tasas de implantación y de embarazo son mayores para 
transferencias embrionarias en día 5 al compararlas con día 3 (33). En nuestro estudio 
encontramos que cuando se transfirieron blastocistos el 69.5% de los ciclos con B-hCG 
positivas progresaron como embarazos clínicos evolutivos y culminaron con recién nacido 
vivo, muy similar al 67.5% correspondiente a transferencias embrionarias en estadio de 
clivaje. 
Las transferencias de más de un embrión pueden confundir y dificultar la evaluación de los 
valores iniciales de B-hCG y la contribución del embrión como tal en los estadíos 
tempranos de desarrollo. Es posible que en embarazos clínicos más de un embrión se 
implante, pero que sólo uno sobreviva. Urbancseck et al. (34) reportó que se puede 
predecir la pérdida gestacional temprana y los embarazos múltiples con alta sensibilidad y 
especificidad utilizando valores de corte de B-hCG sérica derivados de dos medidas 
independientemente del día de toma de la muestra, siendo un valor de B-hCG > 135 
mUI/ml predictor de embarazos múltiples con sensibilidad de 80% y especificidad de 88%. 
Poikkeus et al. (35) ha reportado tasas de hasta en un 10% del fenómeno de “gemelo 
evanescente” que es cuando las transferencias de dos embriones resultan en un solo 
nacido vivo, afectando los valores iniciales de B-hCG en suero materno. En nuestro estudio 
15 
 
encontramos que en el 91% de los ciclos con B-hCG positiva se transfirió más de un 
embrión y sólo 9% fueron transferencias de un solo embrión. Los embarazos no viables 
representaron el 32.1% de las B-hCG positivas, mientras que en los embarazos múltiples 
que representaron el 14.56% de las B-hCG positivas, la media del valor de B-hCG inicial fue 
de 630.58 ± 236.47 mUI/ml y 1714.86 ± 551.09 mUI/ml para transferencias de embriones 
en clivaje y blastocistos respectivamente. 
Las diferencias en los niveles séricos de B-hCG en este estudio pueden ser atribuidas a 
características de las pacientes y parámetros pronósticos conocidos como la edad 
materna, reserva ovárica, esquemas de inducción, eclosión asistida, cultivo extendido, 
calidad embrionaria y la sincronía embrión-endometrio, todas estas posibles razones no 
fueron analizadas en nuestro estudio, pero está ampliamente demostrado en la literatura 
que están relacionados con el impacto que tiene el estadío de desarrollo embrionario en 
los niveles de B-hCG materno. Sin embargo los análisis de regresión logística ajustados 
para estas variables confusoras han demostrado que los valores de B-hCG son más 
elevados en transferencias de blastocistos. Kathiresan et al. (36) reportó que los niveles de 
B-hCG eran significativamente mayores para transferencias embrionarias de día 5 
comparados con día 3 (D3: 103.6 ± 4.4 mUI/ml vs D5: 198.0 ± 10.6 mUI/ml) y que las 
transferencias de blastocistos eran un predictor significativo para niveles más altos de B-
hCG. 
Existen otros factores que fueron analizados como la naturaleza de la transferencia 
embrionaria, es decir si fueron ciclos en fresco o por desvitrificación, además de la técnica 
de fertilización. Existe la posibilidad de que la congelación y posterior descongelación de 
los embriones pueda dañar el trofoblasto, afectando negativamente la implantación, el 
desarrollo embrionario y la producción de B-hCG. Pocos estudios han analizado los niveles 
de B-hCG luego de transferencias embrionarias en fresco en comparación con 
transferencias por desvitrificación. Milan et al (37) concluyó que los niveles de B-hCG 
luego de transferencias de blastocistos en fresco y por desvitrificación eran igualmente 
predictivas para el resultado del embarazo. Además se ha demostrado que la vitrificación 
de embriones resulta en significativamente menor daño al embrión en desarrollo 
comparado con técnicas de congelación lenta, lo que se traduce en mayores tasas de 
embarazo. 
En nuestro estudio encontramos varias limitaciones, una de ellas fue que muchos registros 
estaban incompletos, específicamente con respecto a los valores de las B-hCG séricas 
iniciales y las de control. Al ser analizada la información de un solo Centro de 
Reproducción encontramos una muestra muy pequeña, lo que pudo repercutir en los 
valores de las medias de B-hCG, además de obtener una muestra poco representativa y 
homogénea de la población. En la mayoría de los ciclos la B-hCG inicial fue tomada a los 12 
días post-transferencia embrionaria, por lo que mediciones séricas iniciales en diferentes 
días fueron excluidas para no alterar los resultados, sin embargo consideramos que esta 
16 
 
práctica debe ser modificada, ya que al transferir los embriones en día 3 sabemos que la 
implantación ocurrirá a partir de las siguientes 48 horas y al no discriminar entre 
transferencias en estadío de clivaje y blastocistos podemos obtener valores sesgados. 
 
Conclusión 
La determinación sérica del nivel de B-hCG luego de una transferencia embrionaria es un 
indicador temprano de embarazo, por tal motivo es importante brindar información 
confiable y certera no sólo de la presencia de embarazo, sino además del pronóstico del 
mismo. Esto adquiere gran importancia en los ciclos de Reproducción asistida de alta 
complejidad donde los niveles de estrés y ansiedad están elevados tanto en la pareja 
como en el equipo médico involucrado. En este estudio se analizó el comportamiento de 
los niveles séricos de B-hCG en pacientes con infertilidad sometidas a diferentes Técnicas 
de Reproducción Asistida de Alta Complejidad. El principal hallazgo fue que los niveles 
séricos de B-hCG iniciales y de control eran mayores en el grupo de transferencias de 
blastocistos en comparación con embriones en estadíos de clivaje, independientemente 
del número de embriones transferido, tal vez por factores relacionados con una mejor 
selección embrionaria en los cultivos extendidos, sin embargo se requiere mayor número 
de pacientes para homogenizar los grupos de análisis y así poder obtener datos más 
representativos de la población. 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
17 
 
Anexos 
 
 
CARACTERÍSTICAS n 
B-hCG positivas 103 
Edad materna 37.17 ± 4.94 
Tipo de infertilidad 
primaria 58 
secundaria 45 
Tipo de ciclo de reproducción asistida 
ciclos en fresco 44 
ciclos por desvitrificación 59 
Técnica de fertilización 
FIV 29 
ICSI 55 
 FIV + ICSI 19 
Origen de gametos 
ovocitos propios 66 
ovocitos donados 24 
embriones donados 13 
Número de embriones transferidos 
1 9 
2 64 
3 o más 30 
Estadío de embriones transferidos 
clivaje 80 
blastocisto 23 
 
 
 
 
 
TABLA I. CARACTERÍSTICAS DEMOGRÁFICAS DE LAS 
PACIENTES EN LOS CICLOS DE REPRODUCCIÓN ASISTIDA. 
18 
 
 
 n 1a B-hcg 2a B-hcg 3a B-hcg 
Total de B-hCG 
positivas 
103 
TE de 1 embrión9 
clivaje 4 133.98 ± 44.0 mUI/ml 937.67 ± 323.42 mUI/ml 3762.39 ± 1301.07 mUI/ml 
blastocisto 5 464.96 ± 125.37 mUI/ml 2486.2 ± 723.39 mUI/ml 11707.84 ± 3330.78 mUI/ml 
TE de 2 
embriones 
64 
clivaje 50 431.14 ± 147.85 mUI/ml 1478.36 ± 272.57 mUI/ml 6029.02 ± 910.25 mUI/ml 
blastocisto 14 612.18 ± 116.39 mUI/ml 3286.35 ± 780.61 mUI/ml 11280.28 ± 2990.39 mUI/ml 
TE de 3 o más 
embriones 
30 
clivaje 26 291.01 ± 79.76 mUI/ml 1524.66 ± 333.23 mUI/ml 6981.00 ± 1412.72 mUI/ml 
blastocisto 4 1409 ± 724.30 mUI/ml 9190.25 ± 4989.19 mUI/ml 28702.86 ± 16880.71 mUI/ml 
 
 
 
 n 1a B-hcg 2a B-hcg 3a B-hcg 
Total de betas positivas 103 448.45 ± 82.73 mUI/ml 2063.21 ± 297.57 mUI/ml 8051.28 ± 1015.92 mUI/ml 
 
CLIVAJE 80 370.74 ± 96.03 mUI/ml 1466.37 ± 201.53 mUI/ml 6225.08 ± 732.24 mUI/ml 
embarazo clínico único 43 474.99 ± 164.10 mUI/ml 1739.28 ± 262.86 mUI/ml 6724.04 ± 678.19 mUI/ml 
embarazo clínico multiple 11 630.58 ± 236.47 mUI/ml 3114.30 ± 731.97 mUI/ml 15749.72 ± 2721.88 mUI/ml 
bioquímicos 11 41.57 ± 14.64 mUI/ml 83.78 ± 35.14 mUI/ml 221.76 ± 177.57 mUI/ml 
abortos 9 166.88 ± 36.46 mUI/ml 699.56 ±216.34 mUI/ml 2643.66 ± 1036.29 mUI/ml 
ectópicos 6 56.47 ± 19.95 mUI/ml 174.24 ± 33.79 mUI/ml 1565.58 ± 617.39 mUI/ml 
 
BLASTOS 23 718.75 ± 150.51 mUI/ml 4139.17 ± 1038.75 mUI/ml 14403 ± 3517.23 mUI/ml 
embarazo clínico único 12 655.74 ± 116.81 mUI/ml 4156.44 ± 710.13 mUI/ml 14968.44 ± 2775.67 mUI/ml 
embarazo clínico multiple 4 1714.86 ± 551.09 mUI/ml 10383.5 ± 4383.57 mUI/ml 34524.46 ± 14079.89 mUI/ml 
bioquímicos 6 219.17 ± 122.36 mUI/m 136.28 ± 42.66 mUI/ml 30.61 ± 19.55 mUI/ml 
abortos **1 l 2972 mUI/ml 13371 mUI/ml 
ectópicos 0 0 0 0 
**aborto de 2do trimestre 
Tabla II. Valores de B-hCG según estadío y número de embriones transferidos. 
Tabla III. Valores de B-hCG según evolución clínica y estadío de desarrollo. 
19 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
80
ciclos
23
ciclos
Gráfica I. Número de ciclos de TRA según 
estadio de los embriones transferidos. 
clivaje blasocisto
9
9%
64
62%
30
29%
Gráfica II. Número de ciclos de TRA según
cantidad de embriones transferidos. 
1 embrión
2 embriones
3 o más embriones
20 
 
*Valores de B-hCG en mUI/ml 
*Valores de B-hCG en mUI/ml 
133.98
937.67
3762.39
464.96
2486.2
11707.84
0
2000
4000
6000
8000
10000
12000
1a B-hCG 2a B-hCG 3a B-hCG
m
U
I/
m
l
Gráfica III. Valores de B-hCG en ciclos de TRA
con 1 embrión transferido.
clivaje blastocisto
431.14
1478.36
6029.02
612.18
3286.35
11280.28
0
2000
4000
6000
8000
10000
12000
1a B-hCG 2a B-hCG 3a B-hCG
m
U
I/
m
l
Gráfica IV. Valores de B-hCG en ciclos de TRA 
con 2 embriones transferidos.
clivaje blastocisto
21 
 
 
*Valores de B-hCG en mUI/ml 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
291.01
1524.66
6981
1409
9190.25
28702.86
0
5000
10000
15000
20000
25000
30000
1a B-hCG 2a B-hCG 3a B-hCG
m
U
I/
m
l
Gráfica V. Valores de B-hCG en ciclos de TRA 
con 3 o más embriones transferidos.
clivaje blastocisto
22 
 
Bibliografía 
 
1. Practice Committee of the American Society for Reproductive Medicine. Definitions of 
infertility and recurrent pregnancy loss. Fertil Steril. 2009;90:S60. 
2. Brugo-Olmedo S.Chillik C. Definition and causes of infertility. Reprod Biomed Online. 
2001;2:41-53. 
3. Bentley GR. Infertility in the modern world. 1st ed Cambridge: Cambridge University Press, 
2000;pp:1-13. 
4. Rostad B, Schei B. Fertility in norwegian women: results from a population based health 
survey. Scand J Public Health 2006; 34:5-10. 
5. Marchbanks PA, Peterson HB. Research on infertility: definition makes a difference. The 
cancer and steroid hormone study group. Am J Epidemiol 1989; 130:259-267. 
6. ESHRE Capri Workshop Group. Human Reproduction 2001; 16:1518-1526. 
7. Broekmans FJ, Knauff EA. Female reproductive ageing. Trends Endocrinol Metab 2007; 
18:58-65. 
8. Ruman J, Klein J. Understanding the effects of age on female fertility. Minerva Ginecol 
2003; 55:117-127. 
9. Vite V, Ortiz N. Análisis epidemiológico de la infertilidad en la población mexicana. Ginecol 
Obstet Mex. 2005; 73:360-364. 
10. De Sutter P. Rational diagnosis and treatment in infertility. Best Pract Res Clin Obstet 
Gynaecol. 2006; 20:647-664. 
11. SART 2013. 
12. CDC, Centres for disease control and prevention. Reproductive health. Assisted 
reproductive technology. National summary and fertility clinic reports 2010. 
13. AIHW, Macaldowie A, Wang YA. Australian Institute of Health and Welfare, Assisted 
reproduction technology in Australia and New Zealand (AIHW) 2012. National perinatal 
statistic unit and fertility society of Australia. Assisted reproduction technology series, 
2012. 
14. ESHRE. The European IVF-Monitoring programme (EIM), for the European society of 
human reproduction and embryology (ESHRE). Assisted reproductive technology in 
Europe, 2010. Results generated from European Registers by ESHRE. Hum Reprod 2014. 
23 
 
15. Wilcox AJ, Baird DD. Time of implantation of the conceptus and loss of pregnanacy. N Engl 
J Med. 1999;340(23):1796. 
16. Cole LA, Khanlian SA. Hyperglycosilated hCG in gestational implantation and in 
choriocarcinoma and testicular germ cell malignancy tumorigenesis. J Reprod Med. 
2006;51(11):119. 
17. Haavaldsen C, Fedorcsak P. Maternal age and serum concentration of hCG in early 
pregnancy. Acta Obstet Gynecol Scand. 2014;93:1290-4. 
18. Johnson SR, Godbert S. Accuracy of a home-based device for giving an early estimate of 
pregnancy duration compared with reference methods. Fertil Steril. 2013;100:1635-1641. 
19. Lenton EA, Neal LM. Plasma concentrations of human chorionic gonadotropin from the 
time of implantation until the second week of pregnancy. Fertil Steril. 1982;37:773-8. 
20. O´Connor RE, Bibro CM. The comparative sensitivity and specificity of serum and urine 
HCG determinations. Am J Emerg Med. 1993;11:434. 
21. Wright VC, Change J, Jeng G. Centers for disease control and prevention (CDC). Assisted 
reproductive technology surveillance – United states, 2005. MMWR Surveill Summ 
2008;57:1-23. 
22. Wang JX, Norman RJ. Incidence of spontaneous abortion among pregnancies produced by 
assisted reproductive technology, Hum Reprod 2004;19:272-7. 
23. Yong P, Martin C, Thong J. A comparison of psychological functioning in woman at 
different stages of in vitro fertilization treatment using the mean affect adjective checklist. 
J Assist Reprod Genet. 2000;17:553-6. 
24. Cunningham FG, Leveno KJ, Bloom SL. Williams obstetrics. 22nd ed. New York: McGraw Hill. 
2005:70-3. 
25. Kadar N. Romero R. observations on the log human chorionic gonadotropin time 
relationship in early pregnancy and practical implications. Am J Obstet Gynecol 
1987;157:73-8. 
26. Lawler CC, Budrys NM, Rodgers AK. Serum beta human chorionic gonadotropin levels can 
inform outcome counseling after IVF. Fertil Steril. 2011;96:505-7. 
27. Ogawa M, Takamatsu K, Horiguchi F. Evaluation of factors associated with anxiety and 
depression of female infertility patients. Biopsychosoc Med. 2011;5:15. 
24 
 
28. Sugantha SE, Webster S, Sundar E. Predictive value of plasma human chorionic 
gonadotrophin following assisted reproductive conception treatment. Hum Reprod. 
2000;15:469-74. 
29. Poikkeus P, Hiilesmaa V. Serum HCG 12 days after embryo transfer in predicting pregnancy 
outcome. Hum Reprod 2002;17:1901-5. 
30. Morse CB, Barnhart KT, Sammel MD. Early rise in hCG as a marker of placentation. Oral 
presentation. American Society for Reproductive Medicine. 2011. Orlando, Fl. 
31. National Committee for Clinical Laboratory Standards, Evaluation of Precision Performance 
of Clinical Chemistry Devices. Second edition; Tentative Guidelines. NCCLS document EP5-
T2. Villanova, PA:NCCLS, march 1992. 
32. Heiner JS, Schmidt LL. Can a single early quantitative B-hCG measurement in an IVF-GIFT 
program predict pregnancy outcome?Fertil Steril. 1992;58:373-7. 
33. Gardner DK, Schoolcraft WB, Wagley L. A prospective randomized trial of blastocyst 
culture and transfer in human IVF. Hum Reprod 1998;13:3434-40. 
34. Urbancsek J, Hauzman E, Fedorcsak P. Serum human chorionic Gonadotrophin 
measurements may predict pregnancy outcome and multiple gestation after in vitro 
fertilization. Fertil Steril 2002;78:540-2. 
35. Poikkeus P, Gissler M, Unkila-Kallio L, Hyden-Granskog C. Obstetric and neonatal outcome 
after single embryo transfer. Hum Reprod 2007;22:1073-9. 
36. Kathiresan AS, Cruz-Almeida Y, Barrionuevo MJ. Prognostic value of beta-human chorionic 
Gonadotrophin is dependent on day of embryo transfer during IVF. Fertil Steril 
2011;96:1632-6. 
	Portada
	Índice
	Resumen
	Introducción
	Planteamiento del Problema
	Justificación
	Hipótesis Objetivo General Diseño de Estudio Materiales y Métodos
	Resultados
	Discusión
	Conclusión
	Anexos
	Bibliografía

Continuar navegando