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UNIVERSIDAD NACIONAL AUTÓNOMA DE MÉXICO FACULTAD DE FILOSOFÍA Y LETRAS COLEGIO DE HISTORIA MÚSICA ENCARNADA EN UN PUEBLO EN LUCHA. LA MISA CAMPESINA NICARAGÜENSE Y LA REVOLUCIÓN SANDINISTA EN NICARAGUA ENTRE 1974 Y 2015 TESIS QUE PARA OBTENER EL TÍTULO DE LICENCIADO EN HISTORIA PRESENTA JOSÉ IGNACIO MALDONADO BAEZA DIRECTOR DE TESIS: DR. GUILLERMO JOSÉ FERNÁNDEZ AMPIÉ CIUDAD UNIVERSITARIA, CD. MX., NOVIEMBRE DE 2018 UNAM – Dirección General de Bibliotecas Tesis Digitales Restricciones de uso DERECHOS RESERVADOS © PROHIBIDA SU REPRODUCCIÓN TOTAL O PARCIAL Todo el material contenido en esta tesis esta protegido por la Ley Federal del Derecho de Autor (LFDA) de los Estados Unidos Mexicanos (México). El uso de imágenes, fragmentos de videos, y demás material que sea objeto de protección de los derechos de autor, será exclusivamente para fines educativos e informativos y deberá citar la fuente donde la obtuvo mencionando el autor o autores. Cualquier uso distinto como el lucro, reproducción, edición o modificación, será perseguido y sancionado por el respectivo titular de los Derechos de Autor. A todas las personas que no pierden la esperanza y hacen de este mundo un lugar mejor. A todxs lxs cómplices que hicieron de esta tesis una realidad. ¡GRACIAS! Gracias a mi familia, a mis padres y hermanos que siempre han estado conmigo y me han apoyado. Agradezco su paciencia, sus lecturas y comentarios a este trabajo. Pero sobre todo agradezco sus enseñanzas de vida. Este trabajo me regaló gran cantidad de amigos e incluso una nueva familia. Esta tesis no sería lo que es sin los Morraz López, mi familia nica, quienes me recibieron en su hogar en la colonia 14 de septiembre, en Managua y que son ejemplo de compromiso y fraternidad. Yelba, Leonel, Margarita, Israel, Leonela y Abigail: ¡gracias! ¡Muchas gracias Dr. Guillermo Fernández Ampié! Sin duda, tu guía y compromiso con esta investigación son un pilar fundamental. Gracias por el tiempo entusiasmo que dedicaste a acompañarme en esta aventura que hoy se concreta con esta tesis. Gracias a mis lectores y sinodales por enriquecer esta investigación. Sin lugar a dudas, sus comentarios y observaciones me llevaron a reflexionar y a hacer de esta tesis un trabajo más completo. Dr. Alberto Betancourt, Dr. Enrique Camacho, Dra. Leonor García y Dra. Mónica Toussaint, ¡gracias! Un ser humano excepcional es Arnaldo Zenteno, quien es ejemplo de compromiso y congruencia. Que fortuna poder tenerte como amigo y maestro de vida. Gracias por todo tu apoyo desde un principio. Esta tesis no sería lo que es sin tu entusiasmo y complicidad. Esta tesis no podría existir sin el aporte de los protagonistas a quienes tuve el privilegio de entrevistar. Carlos Carrión, Miguel D’Escoto (q.e.p.d.), Javier Martín, Kora Martínez, Orlando Medina, Carlos Mejía Godoy, Luciano Sequeira y Margarita Zavala: ¡muchas gracias por su tiempo y por compartir conmigo sus experiencias! Sin duda, después de hablar con ustedes, los admiro aún más y cada uno de ustedes es un ejemplo para mí. Gracias Mario Cisneros por tu apoyo y orientación cuando esto era apenas una idea, un proyecto que has visto crecer. Las Comunidades Eclesiales de Base en Nicaragua me mostraron que otro modelo de Iglesia es posible. Son ejemplo de compromiso, congruencia y compasión. Su hambre y sed de justicia las transforman en acciones concretas que me llenan de esperanza. Además, me regalaron algo muy valioso: nuevas amistades. ¡Gracias! Gracias a mis maestros ya que muchos de ustedes, más allá de la información que pudieran transmitirme, me invitaron a ver el mundo de una forma distinta. Gracias por cuestionarme y por hacerme cuestionar. Gracias por su ejemplo y pasión. Gracias por enseñarme a pensar y analizar. Gracias por compartir su conocimiento. La UNAM ha sido un lugar que me ha regalado maravillosas amistades. Mi paso por el plantel 9 de la Escuela Nacional Preparatoria, por la Facultad de Filosofía y Letras, el MUAC y por CulturaUNAM permitió que aprendiera y creciera, pero, sobre todo, que conociera maestros, compañeros de aula y compañeros de trabajo maravillosos de los que he aprendido y con los que he pasado grandes momentos. ¡Un goya por ellxs! Además del ámbito académico, mi paso por la Universidad Iberoamericana fue mi acercamiento con la Compañía de Jesús, algo digno de mencionarse. Gracias a Gerardo, Martín, Hernán, Jorge, Ma y demás amigos jesuitas que han sido clave para abrir mi vida a la espiritualidad ignaciana y mostrarme que es posible ser contemplativo en acción. Esta tesis, más allá del ámbito académico, ha sido una lección de vida y de crecimiento que no sería posible sin esa esencia ignaciana de la que está impregnada. Finalmente, gracias a mis amigos. No necesito mencionarlos, ustedes saben quiénes son. Gracias por estar, algunos desde hace años, y por compartir la vida conmigo. “Lo que importa son las incontables y pequeñas hazañas de la gente común, ellos sientan la base de los sucesos importantes que pasan a la historia. Ellos son los que han hecho cosas en el pasado. Ellos son quien tendrán que hacerlas en el futuro.” Howard Zinn “Sigo creyendo que las canciones pueden ser buena compañía para quienes cambian el mundo.” Silvio Rodríguez “Y esta misa no es neutral. La Eucaristía, el sacramento de la unión, no puede ser neutral en la lucha de clases. Esta misa, igual que la tradicional, es una misa contra los opresores, los que impiden que se reparta en comunión fraterna los frutos de la naturaleza y del trabajo.” Ernesto Cardenal sobre la Misa Campesina Nicaragüense “La comunión no es un rito, intrascendente y banal. Es compromiso y vivencia, toma de conciencia de la cristiandad. Es comulgar con la lucha de la colectividad. Es decir: ‘yo soy cristiano y conmigo, hermano, vos podés contar’” Carlos Mejía Godoy y el Taller de Sonido Popular, “Canto de Comunión”, Misa Campesina Nicaragüense ÍNDICE Introducción Capítulo I. El régimen somocista, la Iglesia católica, los grupos antisomocistas y el Frente Sandinista de Liberación Nacional 1.1 La familia Somoza en el poder en Nicaragua (1934-1979) 1.2 Las relaciones Estado-Iglesia durante el somocismo 1.3 Los grupos antisomocistas anteriores al Frente Sandinista de Liberación Nacional 1.4 El Frente Sandinista de Liberación Nacional 1.5 El gobierno del FSLN y la contrarrevolución auspiciada por los Estados Unidos 1.5.1 Relación de la Iglesia católica nicaragüense y el FSLN 1.5.2 Participación de ministros religiosos en el gobierno del FSLN 1.5.3 Tensiones de la relación de la Iglesia católica con el gobierno del FSLN 1.5.4 Relación de las Comunidades Eclesiales de Base con el gobierno del FSLN Capítulo II. Renovación en la Iglesia católica: el Concilio Vaticano II, las Conferencias Generales del Episcopado Latinoamericano y la Teología de la Liberación 2.1 El Concilio Vaticano II 2.1.1 Rerum Novarum (1891) y Mater et magistra (1961). Vaticinadoras de cambios en la Iglesia católica. 2.1.2 Renovación en la Iglesia: el Concilio Vaticano II 2.2 Conferencias Generales del Episcopado Latinoamericano (Rio de Janeiro, Medellín, Puebla, Santo Domingo y Aparecida) 2.2.1 Río de Janeiro (1955) 2.2.2 Medellín (1968) 2.2.3 Puebla (1979) 2.3 Teología de la Liberación y cristianismo revolucionario Capítulo III. No basta rezar. Las Comunidades Eclesiales de Base, la Iglesia comprometida y la postura jerárquica 3.1 Las Comunidades Eclesiales de Base 3.1.1 Antecedentes y surgimiento de las CEB en Brasil (1956) 1 25 25 35 39 43 59 60 65 68 69 72 74 74 76 84 84 84 90 91 106 106 110 3.1.2Comunidades Eclesiales de Base en Nicaragua 3.2 Prácticas revolucionarias cristianas y cristianos comprometidos 3.2.1 La comunidad del Barrio El Riguero 3.2.2 Movimiento Cristiano Revolucionario 3.2.3 Gaspar García Laviana 3.2.4 Monimbó 3.2.5 Hna. Margarita Zavala y religiosas de la Asunción 3.2.6 Participación del protestantismo 3.3 El caso de la Comunidad de Solentiname 3.4 “Entre cristianismo y revolución, no hay contradicción” 3.5 Postura de la jerarquía ante la “Iglesia popular” 3.5.1 Carta de Juan Pablo II al Episcopado nicaragüense 3.5.2 Visita de Juan Pablo II a Nicaragua 3.5.3 La Instrucción Libertatis nuntius. Sobre algunos aspectos de la “Teología de la liberación” (1984) y la Instrucción Libertatis conscientia. Sobre libertad cristiana y liberación (1986) 3.6 Consideraciones finales. Contexto y miedo ¿justificado? de Juan Pablo II Capítulo IV. Antecedentes para el análisis de la Misa Campesina Nicaragüense 4.1 Música y religión 4.1.1 Música y cristianismo. La música sacra. 4.1.2 Música sacra en América. Un breve repaso. Uso de la música como forma de evangelización 4.1.3 Breve historia del género musical sacro de la Misa 4.1.4 Un antecedente importante: La Misa popular nicaragüense 4.1.5 La música en las CEB nicaragüenses 4.2 Canción protesta y Nueva Canción Latinoamericana 4.3 Música y Teología de la liberación 112 121 125 128 129 132 133 141 141 148 155 158 160 166 174 179 179 181 184 187 196 201 203 207 4.4 La música en el pueblo nicaragüense 4.5 La música en Solentiname 4.6 Uso de la música en conflictos bélicos 4.6.1 Música y Revolución en Nicaragua. “Sin canción, no hay revolución” 4.6.2 Guitarra Armada Capítulo V. La Misa Campesina Nicaragüense: encargo, composición, análisis e impacto 5.1 Semblanza de Carlos Mejía Godoy 5.2 Génesis y encargo de la Misa a Mejía Godoy 5.3 Proceso de creación de la Misa 5.4 Autoría de la Misa 5.5 Análisis del contenido de la letra de la Misa 5.5.1 Canto de entrada 5.5.2 Kyrie 5.5.3 Gloria 5.5.4 Credo 5.5.5 Ofertorio 5.5.6 Canto de Meditación 5.5.7 Santo 5.5.8 Miskitu Lawana 5.5.9 Comunión 5.5.10 Canto de despedida 5.6 Estreno de la Misa 5.7 Censura de la Misa 5.8 Difusión y distribución de la Misa 5.8.1 La versión “pop” de la Misa 5.9 La Misa Campesina Nicaragüense como medio de identidad en la guerra 210 214 215 218 224 229 229 235 237 239 243 251 255 257 260 264 266 268 270 271 274 276 277 281 284 285 5.10 La Misa en el gobierno sandinista Epílogo. Vigencia de la Misa Conclusiones Bibliografía 290 292 305 313 1 INTRODUCCIÓN ¿Por qué elegí la Misa Campesina Nicaragüense como tema de estudio? Dicha decisión fue tomada cuando cursé el Seminario de Investigación I con la Dra. Leonor García Millé quien, con preguntas aparentemente sencillas, logró que me diera cuenta de que estudiar la Misa Campesina Nicaragüense era un tema que reunía muchos de mis intereses y pasiones y que lo desarrollaría con gusto y ánimo. Preguntas clave como ¿qué leo por gusto?, ¿qué temas me apasionan?, ¿qué trabajos disfruté realizar durante la carrera?, ¿qué disfruto hacer en mi tiempo libre? o ¿cómo me veo en 10 años?, dieron como resultado la elección de este tema de investigación. Los problemas sociales de desigualdad, injusticia, violencia y opresión siempre me han causado conflicto. Desde mi adolescencia me han preocupado y siempre me he preguntado qué puedo hacer yo al respecto. Durante la carrera me convencí de que el historiador no puede ni debe ser ajeno a estos temas. Debe tomar postura y, en la medida de lo posible, aportar a la reflexión sobre los mismos. El proceso liberador nicaragüense y la Misa Campesina Nicaragüense dan pie a dicha reflexión y, además, son ejemplo de lucha y resistencia de los que tenemos mucho que aprender. Como parte de mi formación, me fui un año de intercambio a la Universidad Iberoamericana. Ahí, además de los conocimientos adquiridos sobre arte moderno y contemporáneo, descubrí, gracias al contacto con varios jesuitas, la espiritualidad ignaciana y la Teología de la Liberación. Ahí me di cuenta de que existía otra manera de vivir la espiritualidad y la religión. Una forma “contemplativa en acción”, en la que las invitaciones a buscar la justicia y la paz lleven a actuar en la búsqueda de un cambio y donde el amor sea el principio y fundamento de nuestra vida. Al descubrir el importante papel que tuvo el cristianismo comprometido en diversos procesos liberadores, incluido el nicaragüense, encontré un tema ideal de investigación que, dicho sea de paso, era parte de los temas que leía en ese momento por placer. 2 La música siempre me ha apasionado. Lamentablemente no existen materias que aborden la historia de la música, pero, durante la carrera, siempre que tuve oportunidad, realicé trabajos que relacionaran la temática de la materia con esa pasión. Esta tesis no es la excepción. Así, el estudio de la Misa Campesina Nicaragüense conjunta mi pasión por la música, mi manera de entender y vivir la espiritualidad, y la considero un pequeño aporte en mi inquietud por la búsqueda de la paz, la justicia y la dignidad humana pues es ejemplo de lucha y resistencia. La Misa Campesina Nicaragüense es una composición colectiva que encabezó Carlos Mejía Godoy1 y que fue realizada y estrenada en 1974. La obra respeta en lo esencial la estructura del género musical sacro de la Misa y se divide en nueve partes: Canto de entrada, Kyrie, Gloria, Credo, Ofertorio, Canto de Meditación, Santo, Comunión y Canto de despedida. Además de esto se incluye un canto indígena nicaragüense: Miskitu Lawana. Thomas M. Scruggs la califica como “Misa con compromiso social” debido a que el contenido de la letra no es una mera traducción o adaptación de los textos eclesiales sino una reinterpretación de los mismos, releída desde el contexto nicaragüense y aludiendo a temas revolucionarios y de la Teología de la Liberación2 y el cristianismo comprometido.3 Esto ocasionó censura tanto de la jerarquía católica, como del régimen somocista. La Misa tiene un marcado contenido social e invita a una toma de conciencia y a luchar contra la opresión, cosa que responde al contexto de la dictadura somocista (1934-1979). La letra de la Misa inicia diciendo “vos sos el Dios de los pobres, el Dios humano y sencillo, el Dios que suda en la calle, el Dios de rostro 1 Carlos Mejía Godoy (Somoto, Nicaragua, 1943), cantautor de música tradicional nicaragüense. Entre sus canciones más famosas están El Cristo de Palacagüina, Alforja Campesina, Quincho Barrilete, Nicaragua, Nicaragüita y su disco Guitarra Armada. En el apartado 5.1 de esta tesis se hace una semblanza de él. 2 La Teología de la Liberación tiene diversos planteamientos, entre ellos: una identificación de los textos bíblicos con la realidad latinoamericana, una humanización de la religión y sus personajes, una identificación de Dios con los “oprimidos” y más pobres, un énfasis en crear un sentido comunitario, una importancia de la vida en comunidad y un rechazo a la opresión y violación de los Derechos Humanos. El apartado 2.3 lo dedico a reflexionar sobre el tema y los planteamientos mencionados. 3 Thomas M. Scruggs, “Las Misas Nicaragüenses: popular, campesina y del pueblo”, en: Istmo. Revista virtual de estudios literarios y culturales centroamericanos, no. 17, julio-diciembre de 2008. 3 curtido” (Canto de entrada). Le pide a Dios que se solidarice “no con la clase opresora que exprime y devora a la comunidad, sino conel oprimido, con el pueblo mío sediento de paz” (Kyrie). Pide gloria “al que sigue la luz del Evangelio, al que denuncia sin miedo la injusticia, gloria al que sufre la cárcel y el destierro y da su vida combatiendo al opresor” (Gloria). Cree en un “Cristo obrero” que resucita “en cada brazo que se alza para defender al pueblo del dominio explotador” (Credo). Asimismo, le ofrece a Dios “con Nicaragua entera, los bejucos de mis brazos y el vivo entusiasmo de mi corazón” (Ofertorio). Al tiempo que alaba a Dios porque fue “rebelde, luchando noche y día contra la injusticia de la humanidad” (Canto de meditación). Ve la comunión como “compromiso y vivencia” pues comulgar “es decir yo soy cristiano y conmigo hermano vos podés contar” (Comunión). Y finaliza alegremente diciendo que “no hay cosa más bonita que mirar a un pueblo reunido que lucha cuando quiere mejorar porque está decidido” (Canto de despedida). El proceso de creación de la Misa es muy revelador. A decir de Fernando Cardenal4 la idea original fue del jesuita Martin Mateo, español que entonces estaba en Nicaragua. Él se lo propuso a Fernando Cardenal y Fernando se lo planteó a Carlos Mejía Godoy. Como Fernando vio que Carlos no encontraba tiempo para dedicarlo a crear la Misa Campesina, lo "secuestró" y se fue con él a Solentiname. En la isla, los hermanos Cardenal platicaban sobre el sentido de cada parte de la Misa en el contexto de Nicaragua y de la Teología de la Liberación. Políticamente eran los tiempos de la dictadura somocista- y luego esto lo conversaban con Carlos, y Carlos dialogando con ellos y con los campesinos de Solentiname fue elaborando toda la parte musical de la Misa Campesina Nicaragüense -que recoge ritmos, estilo etc. de la música nicaragüense de diversas regiones.5 Las canciones de la Misa no sólo eran interpretadas en Eucaristías católicas, sino que la juventud, incluso la no católica, las conocía y cantaba junto con otras canciones protesta6 o revolucionarias insertas en la llamada Nueva Canción Latinoamericana. 4 Entrevista realizada por Arnaldo Zenteno con motivo de la presente investigación, 2015. 5 Ibídem. 6 Retomo el término “canción protesta” de Roberto Torres Blanco por razones que enunciaré con 4 Son contados los textos específicos sobre la Misa Campesina Nicaragüense, por ello la pertinencia de esta investigación. En 1982 en la Revista Christus, se publicó un artículo del sacerdote jesuita Arnaldo Zenteno, titulado “Tú eres el Dios de los pobres. La Misa Campesina Nicaragüense” 7, en el que se hace un análisis de la Misa señalando algunos antecedentes del contexto nicaragüense, la TL y de la vida de Carlos Mejía Godoy. Sus fuentes son diversas entrevistas y se trata de un artículo fundamental pues es un texto muy cercano a la fecha del estreno de la obra. En 1988, en el libro Misas Centroamericanas8, José María Vigil hace un comentario teológico sobre la Misa Campesina Nicaragüense, el cual revela algunas características del pensamiento religioso de la época, así como de la TL. Ángel Torrellas hace la transcripción musical. En los años 90 se nota una ausencia de textos sobre el tema, pero en 1999, Greg Landau, para obtener el grado de Doctor en Filosofía de la Comunicación por la Universidad de California, presentó la tesis Guitarra Armada. The Role of Music in the Nicaraguan Revolution9 (Guitarra Armada. El papel de la música en la Revolución Nicaragüense), en el que hace un detallado análisis de la canción nicaragüense y su impacto en la lucha sandinista. Es una fuente clave en el estado de la cuestión y es fundamental para mí investigación pues retomo muchos conceptos y planteamientos de dicho autor. Si bien en la mencionada tesis toca muchos de los temas que abordo en esta investigación, considero que puedo aportar pues mi trabajo es sobre una obra musical particular y abordo el contexto histórico y religioso con mayor detalle. detalle en el apartado 4.2 de esta tesis. Roberto Torres Blanco, “<Canción protesta>: definición de un nuevo concepto historiográfico”, en: Cuadernos de Historia Contemporánea, Madrid, Universidad Complutense de Madrid, 2005, vol. 27, p. 223-246. 7 Arnaldo Zenteno, “Tú eres el dios de los pobres. La Misa Campesina Nicaragüense”, en: Revista Christus, México, no. 559-560, noviembre de 1982. 8 José María Vigil y Antonio Torrellas, Misas Centroamericanas, Managua, Centro Ecuménico Antonio Valdivieso/Comunidades Eclesiales de Base de El Salvador, 1988. 9 Greg Landau, Guitarra Armada. The Role of Music in the Nicaraguan Revolution, Tesis Doctoral, San Diego, Universidad de California, 1999. 5 En 2002 Monserrat Galí Boadella publicó un artículo sobre la relación de la música con la Teología de la Liberación10. La autora hace mención de la Misa Campesina Nicaragüense y realiza un breve análisis de sus cantos, pero se trata de un estudio muy general. En 2008 se publicó un artículo que aborda directamente el tema. Se trata del escrito de Thomas Scruggs, titulado “Las Misas nicaragüenses: popular, campesina y del pueblo” 11. De este texto retomo su división en dos tipos de Misas (en tanto género musical): “Misas traducidas” y “Misas con compromiso social”. Sin embargo, como se verá en el desarrollo de la investigación, difiero con algunos puntos. Finalmente, en 2015 Mery A. Pérez presentó la tesis de maestría titulada Empowered by Song: The Relationship Between Misa Campesina and Peasant Involvement in Nicaragua’s Revolution (Empoderados por la canción: la relación entre la Misa Campesina y el involucramiento de los campesinos en la Revolución Nicaragüense) 12. A pesar de tener un objetivo similar al de esta tesis, se distancia de mi trabajo al enfocarse en lo que ella define como “protesta” y no en el proceso de lucha. Además de que sus respuestas están más bien enfocadas en aspectos como “emociones” o “recepción”, que en temas de memoria o acciones como los que pretendo estudiar pues, mientras los objetivos de la autora tienen como centro la psicología y la musicología, mi investigación propone un acercamiento al tema analizando un producto cultural desde un enfoque histórico. Existen algunos otros textos que, si bien no tratan sobre la Misa Campesina Nicaragüense, abordan temas similares a esta investigación. Uno de ellos es el libro Misa Tepozteca, desarrollo de la música litúrgica en Tepoztlán13, México que publicó en 1966 Jean Marc Leclerc. Es un texto que retoma las anotaciones y el proceso de 10 Monserrat Galí Boadella, “Música para la teología de la liberación”, en: Anuario de Historia de la Iglesia, núm. 11, 2002, p. 177. 11 Thomas M. Scruggs, op. cit., Ibídem. 12 Mery A. Pérez, Empowered by Song: The Relationship Between Misa Campesina and Peasant Involvement in Nicaragua’s Revolution, Ontario, Universidad de Guelph, Tesis de Maestría en Artes, 2015. 13 Jean-Marc Leclerc, Misa Tepozteca. Desarrollo de la música litúrgica en Tepoztlán, Cuernavaca, Centro Intercultural de Documentación, 1966. 6 composición de la Misa Tepozteca. Refleja el trabajo antropológico que realizó el autor para composición de dicha misa. Es hasta la primera década del siglo XXI que encuentro textos con temáticas relacionadas con la música y la lucha sandinista o la Teología de la Liberación. En 2008 Mario Rubén Álvarez publicó el tomo IX de su colección Las voces de la Memoria. Historias de canciones populares paraguayas14 en el que dedica un apartado a estudiar y analizar la Misa por un continente con letra de Rubén Bareiro y música de Francisco Marín. Si bien se estudia una misa similar a la Misa Campesina Nicaragüense, dicho análisis es parte de una obra mayor, comenzada en 2003, con otros objetivos. En 2016 Belén Amadorpublicó un artículo titulado “La canción protesta, una importante forma de propaganda utilizada por los sandinistas durante la revolución en Nicaragua (1977-1979)” 15. Es un artículo cuya metodología es el análisis del discurso como propaganda. Si bien retoma canciones de Carlos Mejía Godoy, incluido el disco Guitarra Armada, no menciona a la Misa Campesina Nicaragüense. Es interesante el ejercicio que realizó José María Vigil en 1987 de preguntar a diversos teólogos sobre lo que significaba Nicaragua y su proceso libertador, muy ligado al cristianismo, para ellos. Dichos testimonios están recopilados en un libro llamado Nicaragua y los Teólogos16 y deja ver el interés y admiración que suscitó la revolución sandinista en el mundo religioso. Es un libro testimonial que funciona más como fuente histórica para esta tesis. Verónica Rueda Estrada tiene un texto titulado “El rebelde nicaragüense. La santidad del sandinismo”17 en el que analiza la apropiación de muchos símbolos 14 Mario Rubén Álvarez, “Misa por un continente. En tono de libertad”, en: Las Voces de la Memoria, Tomo IX, Asunción, Paraguay, Editora Litocolor S.R.L, 2008, consultado el 27 de agosto de 2018, http://www.portalguarani.com/1568_francisco_marin/14275_misa_por_un_continente__letra_de_ru ben_bareiro_saguier__musica_francisco_marin.html 15 Belén Amador Rodríguez, “La canción protesta, una importante forma de propaganda utilizada por los sandinistas durante la revolución en Nicaragua (1977-1979)”, en: Repique. Revista de ciencias sociales, no. 0, Esmeraldas, Universidad Técnica de Esmeraldas Luis Vargas Torres, noviembre 2016, p. 62. 16 José María Vigil (coord..), Nicaragua y los teólogos, México, Siglo XXI, 1987. 17 Verónica Rueda Estrada, “El rebelde nicaragüense. La santidad del sandinismo”, en: Enrique Camacho Navarro (coord.), El rebelde contemporáneo en el Circuncaribe. Imágenes y percepciones, http://www.portalguarani.com/1568_francisco_marin/14275_misa_por_un_continente__letra_de_ruben_bareiro_saguier__musica_francisco_marin.html http://www.portalguarani.com/1568_francisco_marin/14275_misa_por_un_continente__letra_de_ruben_bareiro_saguier__musica_francisco_marin.html 7 cristianos por parte del FSLN. Igualmente, habla de la posterior creación de un “santoral revolucionario” y hace una crítica a que dichos valores y dicha ética se corrompieron en la derrota electoral. Es un texto que aporta al análisis de la apropiación y uso político de muchos símbolos, sobre todo los religiosos por lo que Finalmente, Ignacio Dueñas18 y Juan José Monroy19 han estudiado el papel la Iglesia católica nicaragüense en el sandinismo, Pau Ramírez Soriano tiene una tesis sobre el tema y Arnaldo Zenteno tiene un libro sobre las CEB en Nicaragua20. En estos trabajos se aborda la participación de cristianos en el proceso de concientización y lucha armada, pero no se considera la música como un factor a incluir en el análisis. Por ello, el objetivo general de esta tesis es establecer cuáles fueron los elementos y el contexto que lograron que la Misa Campesina Nicaragüense se encarnara21 en la cultura nicaragüense y fuera uno de los elementos culturales determinantes en el pueblo nicaragüense y en sectores como el FSLN durante la revolución en Nicaragua entre 1974 y 1979. Inicialmente me propuse que la temporalidad de esta tesis fuera de 1974 a 2016 pues es el año en que hice las entrevistas y coincide con las últimas elecciones presidenciales en Nicaragua. Sin embargo, por un error mío registré el proyecto con la temporalidad 1974-2015. Estoy consciente de dicha falla, pero, debido a que hacer el cambio implicaría iniciar el trámite de nuevo y no es un dato crucial, decidí mantenerlo. Además, tras los comentarios de la Dra. Toussaint y el Dr. Camacho México, Centro Coordinador y Difusor de Estudios Latinoamericanos, UNAM/Édere, 2006, p. 197- 230. 18 Ignacio Dueñas García de Polavieja, La Iglesia en Nicaragua entre el Sandinismo y el Neoliberalismo a través de la oralidad: desafíos y resistencias, Málaga, Entelequia, 2013 e Ignacio Dueñas García de Polavieja, Iglesia y revolución en Nicaragua a través de los testimonios orales: la experiencia de Solentiname, Málaga, Entelequia, 2013. 19 Juan José Monroy García, La Iglesia católica en Nicaragua. Entre el poder y el compromiso con los pobres, Toluca, Universidad Autónoma del Estado de México, 2011 y Monroy García, Juan José, “La iglesia católica y su participación política en Nicaragua (1960-1979)” en: Contribuciones desde Coatepec, núm. 12, enero-junio, 2007, Toluca, Universidad Autónoma del Estado de México. 20 Arnaldo Zenteno Vargas, Un amor apasionado y una inquebrantable esperanza. Breve historia del caminar de las Comunidades Eclesiales de Base (CEB) de Nicaragua, Managua, Comunidades Eclesiales de Base, 2002. 21 Utilizo el término “encarnado” que propone Arnaldo Zenteno para describir a la Misa haciendo alusión a que es una composición que refleja la realidad del pueblo nicaragüense a través de la cultura, el lenguaje, los ritmos, la religiosidad, etc. 8 estaría de acuerdo en que la tesis se enfoca primordialmente a estudiar el periodo comprendido entre 1974 y 1979. Sin embargo, en este trabajo no hago un análisis solamente de esos años, sino que traigo la reflexión a los años y sucesos recientes. Con esta investigación busco dar un peso importante a los testimonios de los protagonistas del proceso revolucionario. En muchos casos doy prioridad a utilizar las entrevistas realizadas por mí que a fuentes bibliográficas pues es una oportunidad de dar ampliar el abanico de voces y fuentes sobre la lucha sandinista. Otro objetivo importante es ofrecer, a los interesados en la Misa Campesina Nicaragüense, un texto explicativo y a la vez de carácter histórico en el cual puedan obtener información valiosa que no se puede encontrar ahora más que en fuentes aisladas. Asimismo, se da un análisis de la letra de la Misa desde la Historia, lo que aporta nuevos elementos para su estudio. Dicho trabajo permite establecer algunos elementos presentes en la Misa que van más allá del contexto de la Nicaragua de los años 70’s del siglo XX, pues reflejan anhelos compartidos por otros contextos y sujetos históricos y actuales (con los testimonios). Con este trabajo también busco demostrar que el estudio de la lucha sandinista, a partir de una obra musical aporta elementos indispensables para entender dicho proceso revolucionario en los que no se profundizaría o se pasarían de largo desde un trabajo de historia política, social o militar. Parto de la hipótesis de que no se trata de “la Misa de la Iglesia” ni de “la Misa del Frente”, sino que es una obra que al haberse encarnado en la cultura nicaragüense ahora forma parte de un imaginario popular. Por ello el pueblo nicaragüense la adopta de diversas maneras: como música religiosa, como una invitación a la liberación, como música que apoya su movimiento o incluso como “su” música, es decir “su Misa”. Dicha encarnación se logró gracias a que se trata de una combinación de diversos factores como: el uso del lenguaje, uso de ritmos musicales locales, textos ligados a la religiosidad y al contexto social, entre otros. Además, resulta clave que en la Misa se hable de la vida cotidiana y que la “gente común” sea la protagonista de esta. 9 El estudio de la Misa Campesina Nicaragüense en su contexto político- económico-social permite tener una mejor comprensión de su importancia en la lucha sandinista y en los cristianos comprometidos en el proceso liberador. Sin embargo, la Misa no ha dejado de tener vigencia por lo que en esta tesis reflexiono sobre dicha permanencia. La Misa Campesina Nicaragüense es un aporte de Nicaragua a la religión y a la cultura religiosa mundial a travésde una obra musical que, si bien responde a un contexto específico, deja ver el anhelo por un mundo distinto donde preceptos como la justicia, la dignidad y la comunidad sean los predominantes. A pesar de que la Misa utiliza muchos elementos locales de Nicaragua, puede considerarse una obra que es capaz de lograr identificación en diversos contextos22 ya que nos invita a cambiar de modelo y que promueve una serie de preceptos socialmente aceptados como positivos como la justicia, la paz, la dignidad y la comunidad. Por ello, me parece que estamos ante un punto muy importante pues la aceptación, apropiación y vigencia de la Misa, dan pie a afirmar que Carlos Mejía Godoy tuvo una habilidad muy valiosa y extraordinaria de poner letra y música al sentir de una gran parte de la población nicaragüense. Me parece que pocas obras artísticas logran esto y eso hace a la Misa Campesina Nicaragüense un caso para destacar y justifica una investigación al respecto como lo es esta tesis. Debido al tema de esta investigación, la historia oral juega un papel preponderante en la misma. Actualmente siguen vivos algunos de los protagonistas de este proceso histórico, por lo que utilizar la historia oral permitió que sus testimonios en torno a la Misa y sus experiencias en la lucha sandinista no se perdieran y se pudiera generar conocimiento de sucesos históricos contemporáneos. Además, las entrevistas fueron realizadas en 2016 lo que implica una postura actual de los participantes y que aporta a un debate actual sobre el papel de la Misa. Como se verá, esta perspectiva aporta al tema pues. Con esta investigación quiero recalcar que la fuente de trabajo del historiador no son sólo los 22 Como se verá en el capítulo V, la Misa fue traducida a varios idiomas y su letra fue modificada en su versión pop realizada en España para lograr una mejor comunicación del mensaje principal de la misma. 10 libros y los documentos guardados en los archivos, sino que existen otras herramientas que nos pueden aportar información sobre el pasado como lo son los testimonios orales. La oportunidad de poder entrevistar a los protagonistas de un suceso histórico como la lucha sandinista, enriquece las fuentes y me permitió contar con más elementos para fundamentar este trabajo. Asimismo, me dio acceso a algo que valoro mucho: el trato directo con personas. Compartir tiempo con el otro, me permitió poder ver el lenguaje corporal, los ojos llenarse de lágrimas, el manifestar una esperanza y, sobre todo, el ganar la amistad de muchas personas. Eso permite tener una mayor sensibilidad y empatía con las personas, cosa que resulta muy importante pues nos recuerda que el oficio de historiar no se trata de recopilar datos, fechas y cifras, sino historias de personas con ideales, sueños y experiencias dignas de ser recordadas. En lo personal, dicha experiencia me dio algo que va más allá de lo académico y que contribuye a mi desarrollo y mi relación con el otro. Hacer historia partiendo de un elemento cultural, una obra musical, para ser preciso, permite dar un nuevo enfoque y descubrir elementos que otro tipo de trabajo histórico podría pasar de largo. Parto de la idea de que en el caso nicaragüense esto es muy evidente. En ese sentido, retomo la afirmación que hace Susan McClary al respecto: Los críticos culturales han descubierto lo absurdo que resulta escribir historias sobre los años 60 del siglo pasado sin poner suficiente atención al papel crucial que tuvo la música. Sospecho que esto también aplica en casi todos los momentos de la historia occidental… Debido al largo alcance que tiene la música para organizar las percepciones de nuestros propios cuerpos y emociones, ella puede decirnos cosas sobre la historia que no serían accesibles a través de ningún otro medio. 23 23 Susan McClary, Feminine Ending, en: Greg Landau, op. cit., p. 15. Traducción propia. [Cultural critics have already discovered how absurd it is to write histories of the 1960's without playing close attention to the crucial role played by music. I suspect that this is true of most of the other moments in Western history as well…To the large extent that music can organize our perceptions of our own bodies and emotions, it can tell us things about history that are not accessible through any other medium.] 11 Con esta investigación me atrevo a afirmar, en la línea de McClary, que la insurrección popular generalizada en Nicaragua no puede explicarse sin el factor musical. Silvia Herrera Ortega establece que: […] la música es entre las artes, una de las más vulnerables al acontecer político debido a los estrechos vínculos que la unen a la vida individual y colectiva de una sociedad. Acompaña acontecimientos religiosos, festivos, ceremoniales, y otras expresiones de política social que las culturas preservan a lo largo de su historia. 24 Y, en el caso particular de Nicaragua, coincido con la tesis de Greg Landau, quien establece que: […] las canciones revolucionarias de la época proveen a los antropólogos e historiadores un recurso testimonial único, una fuente documental para entender las estrategias políticas y las bases ideológicas del movimiento sandinista. Debido a su naturaleza, la música permite entrever el pensamiento y planeación de una revolución, temas a veces tan matizados, que eluden otros textos escritos. En tiempos de una activa confrontación política, las canciones revolucionarias utilizaron slogans y consignas para hacer declaraciones simples y directas, mientras que en los momentos de actividad clandestina utilizaban formas altamente codificadas y matizadas para difundir los mensajes políticos. Y, finalmente, las canciones revolucionarias se convirtieron en un vehículo para narrar los detalles y lecciones que reflejaban los códigos morales y sistemas de valores de una emergente cultura popular.25 Para la realización de esta investigación realicé dos viajes a la ciudad de Managua, uno en julio de 2016 y otro en diciembre de 2017 con el objetivo de consultar archivos, hacer entrevistas, visitar lugares representativos y tener un acercamiento de primera mano a la cultura nicaragüense. Si bien el motivo principal era recabar testimonios, en los viajes tuve experiencias significativas que marcaron 24 Silvia Herrera Ortega, “Un acercamiento al estudio y análisis de la relación música-política”, en: Folios. Publicación de discusión y análisis, año IV, núm. 23, verano de 2011, p. 46. 25 Greg Landau, op. cit., p. 8-9. Traducción propia. [Moreover, this thesis proposes, revolutionary songs of the era provide anthropologists and historians with a unique source of testimony, a documentation source for understanding the political strategies and ideological foundations of the Sandinista movement. Because of its nature music offers penetrating glimpses into the thinking and planning of a revolution, subjects often so nuanced that they elude other written texts. At times of active political confrontation the revolutionary songs used slogans and rally phrases to make simple and direct statements, while in other moments of clandestine activity they use heavily coded and nuanced forms of spreading political messages. And, finally, the revolutionary songs became a vehicle to narrate the details and lessons that reflect the moral codes and values systems of an emergent popular culture.] 12 pauta en la realización de la tesis. Me refiero a la participación en celebraciones con las CEB, en el Saludo Cristiano a la Revolución o en la conmemoración del 37 aniversario del triunfo del 19 de julio. Asimismo, el convivir con la familia Morraz, que me hospedó por tres semanas, logó enriquecer este trabajo. Visité por un parde días el archipiélago de Solentiname. Si bien o logré hacer entrevistas a miembros de la comunidad, el poder conocer el lugar resultó importante para entender su importancia. Dichas visitas se realizaron teniendo ya avances en la investigación y desarrollo de la tesis. Las entrevistas se realizaron en persona, en la ciudad de Managua, en el mes de julio de 2016. Para recabar los testimonios orales utilicé la metodología propuesta por Mario Camarena Ocampo, Teresa Morales Lersch y Gerardo Necoechea Gracia debido a que conocí su trabajo en la edición 2015 del Seminario Permanente de Museología en América Latina, cuyo eje temático fue “Museos y comunidades” y en el que, entre otros expertos, los autores antes mencionados expusieron los trabajos realizados durante más de treinta años de trabajo en el campo de los museos comunitarios y considero una técnica consolidada que resultó de utilidad para los fines de esta investigación. En el manual Reconstruyendo nuestro pasado. Técnicas de historia oral se menciona que “[el manual] sirve para recoger y analizar relatos orales, que pueden plasmarse en museos o en una gran variedad de otros medios. […] El estudio y análisis de la historia no es patrimonio exclusivo de especialistas. Es importante que todos nos veamos, y que las comunidades se vean a sí mismas, tanto como sujetos que hemos construido nuestra historia como sujetos que la podemos estudiar y reconstruir.”26 Partí de la propuesta de desarrollar preguntas analíticas, preguntas descriptivas y preguntas secundarias. Si bien hubo una serie de preguntas generales, cada cuestionario fue único pues dependiendo la formación, ocupación, participación, edad y condición de cada entrevistado, se realizaron preguntas que 26 Mario Camarena Ocampo, Teresa Morales Lersch y Gerardo Necoechea Gracia, Reconstruyendo nuestro pasado. Técnicas de historia oral, México, Consejo Nacional para la Cultura y las Artes, 1994, p. 5. 13 fueran pertinentes y que pudieran aportar a la investigación. Así, por ejemplo, a Carlos Mejía Godoy, compositor de la Misa, le hice más preguntas relativas a la creación de la Misa y a Orlando Medina, exguerrillero, sobre la vida en los días de insurrección. Las preguntas analíticas buscan que el entrevistado dé una interpretación y explicación de los hechos27 y ello permite conocer una opinión de fondo que es de gran ayuda para plantear los temas relativos a la memoria de un suceso histórico como la lucha sandinista y del papel del cristianismo en la misma. Permite recopilar testimonios de hechos y sucesos concretos que enriquecen la investigación. Las preguntas descriptivas brindan la posibilidad de comparar y encontrar puntos en común para sacar conclusiones sobre lo más importante para la comunidad respecto a su pasado. Camarena y Morales dicen que permiten obtener un “retrato de la realidad”28 aunque yo matizaría que más bien se trata de que el entrevistado recree, a manera de una película, lo que recuerda de un suceso. Al ser así, uno obtiene más detalles de la narración. No me atrevo a afirmar que retratan la realidad, más bien dan una versión personal de un suceso desde su contexto pasado y actual. En el caso de esta investigación, el enfoque estuvo dirigido a que el entrevistado narrara lo que recordaba sobre el uso de la Misa Campesina Nicaragüense durante los años de lucha, así como del compromiso que como cristianos tenían o no en una situación histórica como la insurrección contra el régimen somocista. Evidentemente dependió de la historia del entrevistado, el tipo de preguntas descriptivas que le hice. Debido a que dediqué un tiempo considerable a la realización de las entrevistas y a que me encontré con una actitud colaborativa por parte de la mayoría de los entrevistados, hice uso de preguntas secundarias que se iban generando a raíz de las preguntas principales. Esto me permitió profundizar en los temas y obtener información más a detalle. 27 Ibíd., p. 33. 28 Ibídem. 14 Para la formulación de los cuestionarios, realicé una investigación previa y elaboré las preguntas partiendo de los objetivos planteados en el proyecto de investigación de esta tesis. Busqué que las preguntas no tuvieran respuestas implícitas, no fueran tendenciosas, dieran pie a una contribución relevante para la investigación y aportaran elementos que no se obtienen en el archivo o la investigación bibliográfica. Ello implica abordar temas que, si bien no fueron exclusivamente sobre el tema de la Misa Campesina Nicaragüense, sí respondieran a los objetivos del trabajo y a los temas contextuales que se estaban abordando y que hoy conforman los cinco capítulos de esta tesis. Con ello, como he mencionado, busco revalorar a la historia oral como un elemento que puede ampliar el abanico de fuentes en una investigación y que aporta elementos propios. Dichos cuestionarios fueron revisados por Arnaldo Zenteno y Guillermo Fernández Ampié, asesor de tesis. La selección de los entrevistados se hizo tomando en cuenta “que nuestra lista de posibles entrevistados represente las diversas vivencias que existen en la comunidad.” 29 Por ello, busqué a personas que tuvieron o tienen participación con el cristianismo comprometido y con la lucha sandinista. Busqué que dichas personas mostraran diversidad de posturas y opiniones. Así, la lista de entrevistados incluye músicos, religiosos, miembros de las Comunidades Eclesiales de Base (CEB), excombatientes y jóvenes. He de agradecer la orientación y ayuda a Arnaldo Zenteno quien, como coordinador de las CEB nicaragüenses desde hace más de 30 años, pudo hacer sugerencias y, sobre todo, ayudarme a contactar a los que serían mis entrevistados. Nunca serán suficientes las fuentes por lo que, de haber tenido mayor disponibilidad de tiempo, hubiera ampliado el número de entrevistados. Sin embargo, creo que tanto el número como el perfil de los entrevistados, son una muestra significativa que da solidez a la investigación. A continuación, enlisto a los entrevistados y enuncio lo motivos por los cuales los seleccioné30: 29 Ibíd., p. 50. 30 Estos breves perfiles de los entrevistados los realicé basándome en la información recabada hasta julio de 2016 que fue cuando los entrevisté. Debido a la situación de conflicto político-social que 15 • Carlos Carrión: músico y militante sandinista. Participó en la composición y difusión de la Misa Popular Nicaragüense (1968). Ha compuesto cientos de canciones de diversos géneros como bolero, canción protesta y música religiosa. A pesar de ser militante del FSLN, ya no tiene participación en los asuntos del partido. • Miguel D’Escoto: sacerdote de la orden religiosa Maryknoll. Fue miembro del “Grupo de los doce” y tuvo un papel importante en la oposición a la contrarrevolución. Fue Ministro de Relaciones Exteriores durante los primeros gobiernos de Daniel Ortega. En 2008 fue nombrado presidente de la Asamblea General de las Naciones Unidas. Fue cercano a Daniel Ortega. Murió en junio de 2017. • Kora Martínez: miembro activa de las CEB nicaragüenses. En su infancia tuvo participación con el FSLN sirviendo de correo al tiempo que su familia recibía y atendía guerrilleros en su casa en los años de la insurrección. Busca la reivindicación y empoderamiento de las mujeres desde su trabajo con las CEB. • Javier Martín: antropólogo, investigador y profesor de la Universidad Nacional Autónoma de Nicaragua. Desde joven es miembro de la CEB “La Amistad” del barrio San Judas en Managua donde se ha convencido de que “entre cristianismo y revolución, no hay contradicción”. Era un niño cuando ocurrió la insurrección, pero se ha identificado con los valores del FSLN.• Orlando Medina: excombatiente sandinista. Durante la insurrección formó parte del Batallón Benjamín Zeledón que tenía a la cabeza al “Comandante Martín”, el sacerdote Gaspar García Laviana. Vive en León donde trabaja en el campo. • Carlos Mejía Godoy: cantautor y uno de los principales representantes de la canción testimonial en Nicaragua. Ha compuesto cientos de canciones que persiste en Nicaragua desde abril de 2018, desconozco si haya cambiado alguna de sus posiciones o posturas. 16 retoman el lenguaje, tradiciones y cotidianeidad del pueblo nicaragüense. Fue quien encabezó la composición de la Misa Campesina Nicaragüense. Fue cercano a Daniel Ortega durante el primer gobierno del FSLN, pero dejó de militar en el partido en 1995 por simpatizar con el Movimiento Renovador Sandinista que cuestionó muchas acciones contradictorias del FSLN. Dejó de militar en MRS al poco tiempo. • Yelba Reyes: miembro activa de las CEB nicaragüenses. Vivió la dictadura somocista durante su infancia en Managua y la insurrección durante su juventud. Simpatizante del gobierno de Daniel Ortega y del FSLN. • Luciano Sequeira: músico, compositor y miembro activo de las CEB nicaragüenses. Fue de los miembros fundadores de la CEB San Pablo Apóstol, primera comunidad en Nicaragua. Fue coautor de la Misa Popular Nicaragüense. Actualmente sigue tocando la guitarra en diversas actividades de las CEB. • Margarita Zavala: religiosa nicaragüense de la Orden de la Asunción. En Ecuador trabajó con Monseñor Leónidas Proaño ligado a la Teología de la Liberación. Durante la insurrección apoyó al FSLN desde los Colegios que estaban a cargo de su orden religiosa y apoyó clandestinamente a decenas de combatientes desde la parroquia del Barrio San Judas en Managua. Actualmente coordina con Arnaldo Zenteno las CEB nicaragüenses. Identificada con los valores del sandinismo y simpatizante crítica del FSLN. • Arnaldo Zenteno: sacerdote jesuita mexicano. Radica en Nicaragua desde 1984. Es, junto con Margarita Zavala, coordinador de las CEB nicaragüenses desde donde manifestaron su oposición a la contrarrevolución y han desarrollado proyectos de impacto social con grupos vulnerables como prostitutas, niños y niñas de la calle, personas de escasos recursos, entre otros. Se define como un “sandinista crítico”. Es importante aclarar al lector que la realización de cada uno de estos perfiles es importante pues nos permite conocer desde donde habla cada uno de ellos y 17 poder matizar y analizar mejor su respuesta. Asimismo, quiero aclarar que las entrevistas fueron realizadas en 2016 y es desde ese contexto del que hablan. Siguiendo la propuesta de Camarena, Morales y Necochea31, se tomaron en cuenta algunos puntos al momento de iniciar el trabajo de campo. Entre otras cosas, se dejó claro al entrevistado el motivo de la entrevista, la institución de procedencia, el tema de la investigación y se le recalcó por qué era importante su participación para el proyecto. Una vez concluidas las entrevistas, se procedió a la transcripción de las mismas. Debido a que el objetivo principal de este trabajo no es hacer un estudio sobre el lenguaje o el habla nicaragüense, decidí omitir las muletillas y repeticiones, pero siempre respetando el sentido de la respuesta obtenida. También se retomaron testimonios orales recogidos anteriormente por Mónica Baltodano32, Ignacio Dueñas33, Mery A. Pérez34 y Arnaldo Zenteno35. Si bien las fuentes orales son muy relevantes para esta investigación y considero que son uno de los mayores aportes, también hice uso de fuentes bibliográficas y documentales. La selección bibliográfica contempló lecturas tanto generales como especializadas para comprender el contexto histórico, tanto de los años del régimen somocista, como de la fundación y acción del FSLN. Asimismo, revisé diversos libros generales sobre Teología de la Liberación, cristianismo comprometido y Comunidades Eclesiales de Base, de los cuales hay un considerable número de estudios e investigaciones, muchos de los mismos forman parte de mi biblioteca personal, lo que facilitó su consulta. Igualmente hay varios estudios sobre la historia de la Iglesia católica en Nicaragua que fueron importantes para la investigación. Respecto a las fuentes documentales, consideré pertinente el análisis de documentos de la Iglesia católica y del FSLN pues la lectura de las fuentes primarias enriquece el análisis del tema de esta tesis. Realicé un análisis de los documentos 31 Ibíd., p. 51-52. 32 Mónica Baltodano, Memorias de la lucha sandinista, 4 tomos, Managua, Mónica Baltodano/Instituto de Historia de Nicaragua y Centroamérica/Fundación Rosa Luxemburgo, 2010- 2012. 33 Ignacio Dueñas García de Polavieja, La Iglesia en Nicaragua… e Ignacio Dueñas García de Polavieja, Iglesia y revolución en Nicaragua… 34 Mery A. Pérez, op. cit. 35 Zenteno, Arnaldo, “Tú eres el Dios de los pobres…”. 18 del Concilio Vaticano II que más relación tenían con los cambios que favorecen un mejor análisis del impacto e importancia de la Misa Campesina Nicaragüense. Lo mismo aplica con los documentos de las Conferencias del Episcopado Latinoamericano, principalmente la de Medellín. También analicé los documentos y comunicados que el FSLN publicó desde su fundación y durante el Gobierno de Reconstrucción Nacional que tocaban el tema religioso pues es crucial para un mejor análisis de la Misa y son fuente fundamental para una investigación de carácter histórico. Para responder al objetivo general de este trabajo divido la tesis en cinco capítulos y un epílogo. Dicha división responde al análisis de tres temas fundamentales: historia de la lucha sandinista (capítulo I), historia de la religión católica (capítulos II y III) e historia de la música (capítulo IV) para así poder hacer un adecuado análisis de la Misa Campesina Nicaragüense (capítulo V y epílogo). Aunque estos dos últimos apartados son específicos sobre la Misa, los capítulos previos están enfocados a aportar elementos que tienen relación directa con el objetivo de esta tesis. Dedico el capítulo I a hacer un repaso por los antecedentes históricos que permiten comprender el contexto en que surgió y se difundió la Misa. Para ello, hago un breve repaso por la dictadura de los Somoza, incluida relación de la jerarquía de la Iglesia católica con los gobiernos de dicha familia; también retomo algunos movimientos antisomocistas anteriores al FSLN; finalmente, hago un breve repaso histórico por el surgimiento y acciones del FSLN incluyendo sus primeros años en el poder. El capítulo II lo dedico a hablar de la renovación en la Iglesia Católica haciendo énfasis en el Concilio Vaticano II y las Conferencias Generales del Episcopado Latinoamericano que fueron parteaguas debido a que la jerarquía católica se dio cuenta de la necesidad de una actualización y de la realización cambios de raíz en la institución que respondieran a la realidad y a los problemas de ese momento. También en ese capítulo, dedico varias páginas a hacer una reflexión en torno a la Teología de la Liberación destacando el papel fundamental que jugó en el proceso 19 revolucionario nicaragüense y de la cual hay un importante número de referencias en la letra de la Misa Campesina Nicaragüense. Ligado a dicho tema, en el capítulo III hago un repaso por diversas manifestaciones de cristianismo comprometido y grupos de cristianos revolucionarios en Nicaragua. Hago un análisis de estos valiéndome principalmente de los testimonios que recogí específicamente para esta tesis. En dichos movimientos la Misa Campesina Nicaragüense jugó un papel fundamental. Finalizo dicho capítulo con un análisis de la postura de la jerarquía católica y de Juan Pablo II frentea dicha forma de vivir la fe. El capítulo IV lo dedico a recopilar una serie de antecedentes que permiten abordar de manera más detallada la composición de la Misa Campesina Nicaragüense estudiando el ámbito musical del que surgió. Para ello hago un repaso por diversos temas de la relación histórica entre la música y la religión católica, la música y la guerra, así como un breve recuento histórico de la música en Nicaragua. También es importante analizar el contexto musical en que se compone la Misa que es la canción protesta y la Nueva Canción Latinoamericana. Finalmente, en el capítulo V hago un repaso del proceso de encargo, composición, estreno, difusión y censura de la Misa Campesina Nicaragüense. Uno de los principales aportes de esta tesis es el análisis que hago de cada uno de los cantos de la Misa. Igualmente reflexiono, basado principalmente en las entrevistas realizadas para esta investigación, de qué manera se llevó a cabo un proceso de identificación de diversos nicaragüenses con los cantos de la Misa Campesina Nicaragüense. A manera de epílogo, hago una reflexión sobre la vigencia de la Misa. El lector encontrará que algunos capítulos tienen una mayor extensión que otros. Esto se debe a que tomé la decisión de incluir la mayor cantidad de testimonios posibles pues son un aporte original que haré con este trabajo además de que ayudan a la argumentación y a la mejor comprensión de los temas tratados. Para finalizar esta introducción, definiré algunos conceptos que serán clave en la investigación. Ernst Bloch habla de la necesidad de un saber “no meramente 20 contemplativo” necesario para la decisión y es algo a lo que aspiro con esta investigación: El saber, que necesita del valor, y sobre todo de la decisión, no puede revestir, sin embargo, la forma más corriente del saber anterior: la forma contemplativa. El saber solo contemplativo se refiere, en efecto, necesariamente a lo concluso y, por tanto, pasado, y es impotente para el presente y ciego para el futuro. Este saber se considera tanto más como saber cuánto más lejos se hallen sus objetos en el pasado y en lo concluso, es decir, cuanto menos contribuye a que de la historia -como un acontecer en la tendencia- se aprenda algo para el presente y el futuro. El saber necesario para la decisión reviste en su mismo sentido otra forma: una forma no solo contemplativa, sino más bien una forma que va con el proceso, que se juramenta activa y partidistamente a favor del bien que se va abriendo camino, es decir, de lo humanamente digno en el proceso. 36 Igualmente, busco esbozar a lo largo de este trabajo, el concepto de la esperanza retomándolo de Bloch ya que considero que dicho concepto está presente en la Misa Campesina Nicaragüense, en algunos aspectos de la insurrección sandinista, en el actuar de muchos grupos de cristianos comprometidos y es un elemento que aparecerá de una u otra forma a lo largo de la tesis: Se trata de aprender la esperanza. Su labor no ceja, está enamorada en el triunfo, no en el fracaso. La esperanza, situada sobre el miedo, no es pasiva como este, ni, menos aún, está encerrada en un anonadamiento. El afecto de la esperanza sale de sí, da amplitud a los hombres en lugar de angostarlos, nunca puede saber bastante de lo que les da intención hacia el interior y de lo que puede aliarse con ellos hacia el exterior. El trabajo de este afecto exige hombres que se entreguen activamente al proceso del devenir al que ellos mismos pertenecen. No soporta una vida de perro, que solo se siente pasivamente arrojada en el ente, en un ente incomprendido, o incluso lastimosamente reconocido.37 Estoy completamente de acuerdo con Bloch al hablar de la esperanza y de los sueños diurnos como elementos básicos en la resistencia y en la búsqueda de justicia, paz o dignidad. Por ello, quiero dejar clara mi postura respecto a que el contexto en el que me desenvuelvo requiere de nosotros “soñar despiertos” y 36 Ernst Bloch, El Principio Esperanza, 3 tomos, trad. Felipe González Vecen, Madrid, Aguilar, 1977, p. 148. 37 Ibíd., p. 2. 21 encaminar esos sueños a la acción, teniendo siempre presente esa esperanza por un futuro prometedor que es una de las formas más valiosas de resistencia al sistema capitalista: Los sueños diurnos proceden todos de la falta de algo, quieren remediarla, son todos siempre sueños de una vida mejor. […] ¡cuántos otros sueños diurnos que no han apartado la vista de lo real, sino que la han hundido en su progreso y en su horizonte, no han servido para mantener en el hombre el valor y la esperanza! ¡Cuántos no han robustecido la voluntad de no renunciar en el curso de la anticipación, de la superación de lo dado y de las figuraciones de ello! 38 Dicha postura nos permite entender mejor las aspiraciones de un pueblo como el nicaragüense de la década de los setenta cansado de vivir bajo la dictadura somocista. Otro de los elementos clave en Bloch y en los asuntos tratados en esta tesis, es la utopía. Pero, vale la pena citar al propio Bloch para dejar clara la acepción de dicho concepto: El elemento anticipador actúa así en el campo de la esperanza; ésta, por tanto, no es tomada solo como afecto, como contraposición al miedo (porque también el miedo puede anticipar), sino esencialmente como acto orientado de naturaleza cognitiva (y aquí lo opuesto no es el temor, sino el recuerdo). La representación y las ideas de esta llamada intención de futuro son utópicas, pero no lo son tampoco en una significación restringida de la palabra, solo determinada en relación con lo negativo (figuraciones afectivamente irreflexivas, divertimiento de especie abstracta), sino precisamente en el nuevo sentido indicado del sueño hacia adelante, de la anticipación en absoluto. Con lo cual la categoría de lo utópico, además del sentido corriente, justificadamente peyorativo, posee otro sentido, que no es, de ninguna manera, necesariamente abstracto o divorciado de la realidad, sino, al contrario, dirigido centralmente a la realidad: el sentido de un adelantamiento del curso natural de los acontecimientos. 39 Por otro lado, retomo las definiciones de música y política de Herrera Ortega pues su investigación está estrechamente ligada a esta tesis. Respecto al término música: Entendemos la música, entonces, como un hecho sociocultural total, y como un componente simbólico de la cultura humana. Desde esta perspectiva, el investigador 38 Ibíd., p. 56-57. 39 Ibíd., p. 9. 22 ordena su trabajo musical a partir de tres enfoques: como objeto aislado, como algo producido y como algo percibido. De esto se desprende que “la música está en todas partes, pero nunca ocupa el mismo lugar”; es decir, está presente y unida estrechamente con todo el acontecer humano: es un lenguaje que comunica y da sentido a la vida subjetiva y colectiva de las personas. 40 Su definición de política va enfocada a su relación con la música por ello considero pertinente retomarla: Entendemos la política como el sistema de redes con las que el ser humano se relaciona socialmente, y donde además “desarrolla las competencias que lo convierten en persona”. Para Aristóteles, “la naturaleza arrastra… instintivamente a todos los hombres a la asociación política”. A su vez, la justicia es una necesidad social, por cuanto “el derecho es la regla de vida” para esta asociación. Lo social del ser humano, lo convierte en un animal político, expresión aristotélica recogida e interpretada por Jürgen Habermas como “un animal que existe en la esfera pública”. Al observar que “detrás de la palabra sociedad se disimula la política”, Thomas Mann está diciendo de otro modo lo dicho por Molino respecto de la música. Ésta, lo mismo que la política, se encuentra entodas las esferas sociales. Lo social se tiñe con lo político y, si la música es un hecho social, no escapa a esta contaminación. Y así como la política está en todo acontecer humano, de la misma manera lo está la música. 41 Y concluye que “En toda música hay una razón social (política) que le da vida, que la hace funcional, que la identifica con una época, con una historia, con una cultura, con un lugar.” 42 Un punto clave para este trabajo que también retomo de Herrera es que: Las obras musicales con contenido político -incluyendo muchas obras instrumentales- funcionan como crónicas de época, relatos sonoros de la historia de los pueblos. De este modo los compositores son verdaderos cronistas de época. Lo que convierte a este tipo de música comprometida en portadora de conocimiento y experiencia vivida, por cuanto, a través de su relato reconocemos parte de la historia sociopolítica de los pueblos; ellas son aglutinantes histórico-ideológicos colectivos. Para 40 Silvia Herrera Ortega, op. cit., p. 47. 41 Ibíd., p. 47-48. 42 Ibíd., p. 48. 23 el historiador es un testimonio de época que le ayuda a completar el paisaje cultural, ideológico-político de una época determinada, vivida por un grupo determinado. 43 Si bien retomo a Bloch debido a que muchos de los conceptos que utiliza me dan elementos para enriquecer el análisis de la Misa Campesina Nicaragüense y la insurrección sandinista, quiero dejar claro que estoy consciente de que Bloch no escribió El principio esperanza pensando en el pueblo nicaragüense, sin embargo, al tocar temas relativos a las personas, se pueden empalmar de manera casi natural. Aun así, fui cuidadoso al no tratar de forzar conceptos que no tienen razón de ser. Por ello no retomaré esa parte de la obra de Bloch. Otra diferencia que me parece importante es que la concepción que tiene Bloch de la Iglesia y la religión está apegada a la versión jerarquizada europea. Por ello considera que la esperanza que promueve es una esperanza pasiva, en la que hay que esperar “la otra vida” para prosperar. Sin embargo, como se verá en esta tesis, un sector de la Iglesia latinoamericana, así como corrientes de pensamiento como la Teología de la Liberación, abogaron por una esperanza activa, un “optimismo militante”, que Bloch define de la siguiente manera: Para toda decisión capital el optimismo automático no es menos ponzoña que el pesimismo absolutizado, porque si el último sirve abiertamente a la reacción descarada, a la que se llama por su verdadero nombre, y ello lo hace con el propósito de descorazonar, el primero ayuda a la reacción solapada, con el propósito de que se cierren los ojos con tolerancia y pasividad. Lo que se halla coordinado al saber de la decisión, a la decisión del saber alcanzado, no es por eso el optimismo falso-con el propósito del verdadero-, sino, una vez más, el correlato en la posibilidad real, entendido utópica-concretamente: entendido como un correlato en el que de ninguna manera todos los días son noche, pero en el que tampoco -en el sentido del optimismo no- utópico- todas las noches son ya día. La actitud ante este algo no-decidido, pero decidirle por el trabajo y la acción mediata, se llama optimismo militante. 44 Como podrá verse a lo largo de esta tesis, los conceptos de Bloch funcionan para esta investigación, tomando en cuenta esas salvedades. Finalmente quiero 43 Ibíd., p. 49-50. 44 Ernst Bloch, op. cit., p. 149. 24 dejar claro que estas categorías son un apoyo al análisis y a la investigación, pero en ningún momento trato de acoplar la investigación a las mismas. Es decir, lo primordial de este trabajo es el análisis histórico y las categorías teóricas solo ayudan a enriquecer dicho análisis, no al revés. 25 CAPÍTULO I. EL RÉGIMEN SOMOCISTA, LA IGLESIA CATÓLICA, LOS GRUPOS ANTISOMOCISTAS Y EL FRENTE SANDINISTA DE LIBERACIÓN NACIONAL En el presente capítulo hago un repaso por los antecedentes históricos que permiten comprender el contexto en que surgió y se difundió la Misa Campesina Nicaragüense. Para ello, hago un breve repaso por la dictadura de los Somoza, incluida relación de la jerarquía de la Iglesia católica con los gobiernos de dicha familia. Demuestro que se trató de un régimen autoritario y que muchos miembros de la Iglesia católica fueron cómplices de éste. Esta manera de proceder generó descontento, por ello retomo algunos movimientos antisomocistas anteriores al Frente Sandinista de Liberación Nacional. Finalmente, hago un breve repaso histórico por el surgimiento y acciones del FSLN incluyendo sus primeros años en el poder y su relación con diversos sectores y miembros de la Iglesia católica. 1.1 La familia Somoza en el poder en Nicaragua (1934-1979) “Yo sé que [Somoza] es un hijo de puta, pero es nuestro hijo de puta.” Theodore Roosevelt Entre 1937 y 1979 la familia Somoza gobernó Nicaragua bajo un régimen dictatorial subordinado a los intereses de Estados Unidos y marcado por la exclusión social y por graves violaciones a los derechos humanos de la población. Vale la pena hacer un breve repaso de la historia nicaragüense desde principios del siglo XX para notar cómo, debido a factores como su posición geográfica estratégica, los Estados Unidos intentaron, en reiteradas ocasiones, tener un control sobre Nicaragua.1 1 Cronología realizada a partir de: Jesús Miguel Blandón, Entre Sandino y Fonseca. La lucha de los pueblos de Nicaragua, Centroamérica y el Caribe contra las dictaduras y las intervenciones USA, 1934-1961, Madrid, Editorial Fragua, 2010 y Emma Yanes Rizo, Araceli. Nicaragua 1976-79: la libertad de vivir, México, Ítaca, 2008. 26 En 1893 José Santos Zelaya se levantó en armas y derrocó a los conservadores del poder en Nicaragua, pero en 1909 se efectuó una revuelta contra su gobierno por parte del Partido Conservador, auspiciado por el gobierno de Estados Unidos. Ante ello, Zelaya se vio obligado a renunciar a su alto cargo. Un año después, en 1910, bajo el gobierno de José Madriz, liberal que sustituyó a Zelaya y combatió a los conservadores insurrectos, el país fue intervenido militarmente por los Estados Unidos. Con la firma de los Pactos Dawson en ese año, Nicaragua se convirtió en una suerte de “protectorado” al servicio de los Estados Unidos y con ello, los años siguientes se caracterizaron por una constante represión a movimientos de oposición2 y la realización de elecciones controladas funcionarios civiles y militares estadounidenses. 1925 es un año importante pues el presidente Bartolomé Martínez logró revocar poco a poco las ataduras con el país norteamericano. Durante 1926 y 1927 se desarrolló la guerra constitucionalista 3 en la que varios mineros, con Augusto C. Sandino 4 a la cabeza, se levantaron en armas. En 1927, por presiones de Estados Unidos, se firmó el pacto de Tipitapa, donde se aceptó participación de liberales en el gobierno conservador, pero sobre todo se aceptó la permanencia de los marines estadounidenses en territorio nicaragüense5. Se desarrolló una lucha de oposición al pacto con Sandino a la 2 Uno de los casos más trascendentes fue la represión al movimiento de Benjamín Zeledón. 3 La Guerra Constitucionalista de Nicaragua fue un conflicto político y militar que se desencadenó en Nicaragua tras el golpe de estado conocido como "El Lomazo" llevado a cabo por Emiliano Chamorro Vargas, caudillo político y militar del partido conservador el 17 de enero de 1926 contra el gobierno del presidente Carlos Solórzano, constitucionalmente elegido en las elecciones de 1924; se daría por terminado el 4 de mayo de 1927 con el llamado “Pacto del EspinoNegro” firmado en Tipitapa por José María Moncada, General en Jefe del Ejército Liberal Constitucionalista y Henry L. Stimson, representante del gobierno estadounidense del Presidente Calvin Coolidge que apoyaba al presidente de Pacto Adolfo Díaz Recinos. Para profundizar en el tema revisar: Mónica Toussaint y Guillermo Fernández Ampié, “Estudio Introductorio”, en: Modesto Armijo Lozano. Diario dedicado a su esposa, Carmenza Mejía Arauz, México, Instituto de Investigaciones Dr. José María Luis Mora, 2015. 4 Augusto C. Sandino (Niquinohomo, 1895-Managua, 1934), revolucionario nicaragüense, líder de la resistencia contra el ejército de ocupación estadounidense en Nicaragua en la primera mitad del siglo XX. Su lucha guerrillera logró que las tropas de los Estados Unidos salieran del país. Es Héroe Nacional de Nicaragua y se le llama “General de Hombres Libres”. Sus ideales y figura fueron retomados años más tarde, por diversos movimientos, incluido el Frente Sandinista de Liberación Nacional. Para profundizar en el tema revisar: Enrique Camacho, Los usos de Sandino, México, Centro Coordinador y Difusor de Estudios Latinoamericanos-UNAM, 1991. 5 Con el pretexto de salvaguardar la seguridad de Nicaragua y mantener la estabilidad política y 27 cabeza. Para 1933 ganó las elecciones el liberal Juan Bautista Sacasa y Estados Unidos nombró a Anastasio Somoza García, director de la recién creada Guardia Nacional.6 Augusto C. Sandino estableció un convenio de paz con Sacasa y entregó las armas, pero no pasaría ni un año para que muriera, traicionado por Somoza, asesinado. En ese mismo 1934 llegó, por medio de un golpe de estado, Anastasio Somoza García al poder respaldado por Emiliano Chamorro y Carlos Cuadra Pasos, con el abierto apoyo del presidente Roosevelt. En 1937 Anastasio Somoza García tomó posesión de la presidencia. Se dice que el presidente Theodore Roosevelt de Estados Unidos mencionó lo siguiente refiriéndose a él: “Yo sé que es un hijo de puta, pero es nuestro hijo de puta.”7 Esto resulta significativo pues muestra cómo desde el principio del régimen somocista hay indicios de una muy estrecha relación con los Estados Unidos. Se puede hablar de varias etapas del régimen debido a que el poder se fue pasando entre diversos miembros de la misma familia. Para los fines de este trabajo esbozaré brevemente la primera etapa y me concentraré en el segundo gobierno de Anastasio Somoza Debayle (1974-1979) que es el preámbulo a la última etapa de la lucha sandinista y coincide con los años de creación, estreno y difusión de la Misa Campesina Nicaragüense. Emma Yanes describe el periodo de 1936 a 1944 de la siguiente manera: Primera fase del enriquecimiento de la familia Somoza que, bajo el amparo de la dictadura militar, recurre al peculado, negocios fraudulentos, utilización del aparato estatal y de las rentas nacionales como fuente de beneficio personal, otorgamiento de concesiones a las compañías estadounidenses para explotar las riquezas naturales del país, contrabando de mercancías, patrocinio e institucionalización de la prostitución, juegos de azar y producción de alcohol clandestino.8 social, el gobierno de Estados Unidos, desde 1910 con los Pactos Dawson, mandó miembros de su cuerpo militar (Marines) para establecerse en Nicaragua. Su función era mantener el control de Estados Unidos en Nicaragua a nivel militar. 6 La Guardia Nacional fue el cuerpo de seguridad nacional que sustituyó a los marines. Véase más adelante en este capítulo. 7 Emma Yanes Rizo, op. cit., p. 198. 8 Ibídem. 28 Aunado a estas prácticas de abuso de poder y enriquecimiento, desde los primeros años del gobierno de Somoza García, hubo una constante de represión contra los grupos que se manifestaban contra la muerte de Sandino o en pos de sus ideales. Esta represión se ejerció por varias décadas y cesó solamente con el derrocamiento de los Somoza en 1979. En 1947 Leonardo Argüello llegó a la presidencia a través de un fraude electoral orquestado por Somoza. Argüello destituyó al hijo menor de Somoza García de la dirección de la Guardia Nacional, por lo que este último dio un golpe de estado. Tras un acuerdo, Víctor Román Reyes asumió el poder y su gobierno fue reconocido por Estados Unidos. Los miembros de la familia Somoza buscaron siempre los medios para mantenerse en el poder. En 1950 Somoza y Emiliano Chamorro, “caudillo” del partido Conservador, firmaron el “Pacto de los Generales”, que permitió un nuevo periodo presidencial al primero, y para 1951, con apoyo de Estados Unidos, Anastasio Somoza García se reeligió en la presidencia del país. Durante dicho periodo presidencial, en 1955, Somoza García hizo una reforma a la Constitución para poder reelegirse en 1957. Sin embargo, en 1956 el poeta y periodista Rigoberto López Pérez atentó contra él en León, lo que provocó su muerte días después en Panamá consecuencia del ataque. Tras el deceso de su padre, Luis Somoza Debayle, hijo menor de Somoza García y presidente del Congreso, asumió la presidencia y decretó un estado de sitio. En 1957 se realizaron elecciones, calificadas por muchos como fraudulentas, en las que Luis Somoza Debayle fue elegido presidente para el periodo 1957-1963. En este periodo, el descontento social empezó a manifestarse con más claridad. Al respecto José Miguel Blandón apunta que: El año de 1959 marca una de las etapas más críticas que tuvo que pasar la dictadura somocista en su empeño de mantenerse en el poder a sangre y fuego, contra la voluntad de las grandes mayorías nicaragüenses. Invasiones por el sur y por el norte, agitación estudiantil, represión indiscriminada contra obreros y campesinos, 29 huelgas de trabajadores, huelgas de comerciantes y una protesta generalizada, son las características del año más violento de la era somocista, antes de 1978.9 Al acabar el periodo de gobierno 1957-1963, Luis Somoza impuso en la presidencia a René Schick. En 1966 el Partido Liberal Nacionalista postuló a Luis Somoza Debayle como candidato a la presidencia, ganó las elecciones y asumió el cargo el 1 de mayo. Sin embargo, al año siguiente murió de un ataque al corazón y fue sustituido en el poder por su hermano Anastasio Somoza Debayle. Tras estas elecciones, los resultados fueron cuestionados y el descontento se hizo notar en las calles. Ignacio Dueñas comenta el caso del candidato del partido conservador Fernando Agüero: Este terror sistemático fue una estrategia violenta para disciplinar y pauperizar a la mano de obra disponible en el país, y tuvo su culmen en los acontecimientos de 1967, cuando el candidato conservador, Agüero, encabezó una nutrida manifestación en contra de la reelección de Anastasio Somoza Debayle, Tachito, perdiendo la vida unas 500 personas a causa de la actuación de la Guardia. En la fraudulenta campaña electoral previa, se detuvo a militantes conservadores que al grito de “¡por Agüero muero!”, iban pegando papeletas en contra de la oligarquía somocista y de la Guardia Nacional10 En enero de 1971 se suscribió un convenio entre liberales y conservadores para disolver el Congreso y convocar a elecciones para una Asamblea Constituyente en 1972 y establecer una junta de gobierno de tres miembros (Fernando Agüero y dos personas designadas por Somoza) para gobernar hasta 1974, con Anastasio Somoza Debayle al frente de la Guardia Nacional. En 1972 un terremoto sacudió al país y dejó ver gran parte de la corrupción y malas actuaciones del sistema de gobierno somocista. Tras la destrucción de gran parte de Managua, como resultado del sismo, “licitaciones para la construcción de 9 José Miguel Blandón, op. cit., p. 427. Vale la pena mencionar que en este periodo (1957-1963) el Frente Sandinista de Liberación Nacional
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