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UNIVERSIDAD NACIONAL AUTÓNOMA DE MÉXICO DIVISIÓN DE ESTUDIOS DE POSGRADO HOSPITAL REGIONAL 1o DE OCTUBRE EVALUACIÓN DE LA MEJORÍA FUNCIONAL MEDIANTE LA APLICACIÓN DEL ÍNDICE DE DISCAPACIDAD OSWESTRY EN PACIENTES CON LUMBALGIA MECANOPOSTURAL CRÓNICA EN EL HOSPITAL REGIONAL 1O DE OCTUBRE ISSSTE REG. 363.2013 TESIS QUE COMO UNO DE LOS REQUISITOS PARA OBTENER LA ESPECIALIDAD EN: MEDICINA FÍSICA Y REHABILITACIÓN PRESENTA: DRA. ANA AYSHA LARA DE LA ROSA. ASESOR DR. IVÁN JOSÉ QUINTERO GÓMEZ MÉXICO, D.F. 2014 UNAM – Dirección General de Bibliotecas Tesis Digitales Restricciones de uso DERECHOS RESERVADOS © PROHIBIDA SU REPRODUCCIÓN TOTAL O PARCIAL Todo el material contenido en esta tesis esta protegido por la Ley Federal del Derecho de Autor (LFDA) de los Estados Unidos Mexicanos (México). El uso de imágenes, fragmentos de videos, y demás material que sea objeto de protección de los derechos de autor, será exclusivamente para fines educativos e informativos y deberá citar la fuente donde la obtuvo mencionando el autor o autores. Cualquier uso distinto como el lucro, reproducción, edición o modificación, será perseguido y sancionado por el respectivo titular de los Derechos de Autor. Dr. Ricardo Juárez Ocaña Coordinador de Enseñanza e Investigación Dr. José Vicente Rosas Barrientos Jefe del Departamento de Investigación. Dr. Ángel Óscar Sánchez Ortiz Profesor Titular del Curso de Medicina de Rehabilitación. Dr. Iván José Quintero Gómez Profesor Titular Adjunto del curso de Medicina de Rehabilitación, Jefe del Servicio de Medicina Física y Rehabilitación y asesor de tesis. Agradecimientos. A mis padres por siempre estar a mi lado y apoyarme incondicionalmente en esta decisión de vida. A mi hermana por ser mi eterna confidente y compañera. A mis amigos por ser parte integral de mi vida y siempre hacerla más ligera. A mis maestros por guiarme y ayudarme a convertirme en una mejor persona y profesionista. A Dios por no dejarme claudicar aún en los momentos más difíciles. I N D I C E Página 1. Resumen…………………………………………………….. 1 2. Titulo……………………………………………………......... 1 3. Antecedentes…………………………………………………1 4. Justificación…………………………………………………..22 5. Hipótesis……………………………………………………...23 6. Planteamiento del problema………………………………..23 7. Objetivos……………………………………………………...23 8. Material y Métodos………………………………………..…23 9. Consideraciones Eticas…………………………………..…28 10. Resultados……………………………………………..28 11. Discusión……………………………………………….31 12. Conclusiones…………………………………………..31 13. Bibliografía……………………………………………..33 14. Anexos………………………………………………….36 1 Resumen La lumbalgia mecánica es muy frecuente, afecta al 70‐85% de los adultos en algún momento de su vida, alrededor del 2% de la población trabajadora, presenta todos los años una lesión del espalda compensable, es la segunda causa de absentismo laboral y la causa más frecuente de incapacidad en pacientes menores de 40 años.Los factores de riesgo laborales asociados a esta patología son trabajo físico pesado, posturas de trabajo estático, flexiones y torsiones frecuentes, levantamiento de peso, vibraciones, factores psicológicos y psicosociales.El síndrome doloroso lumbar se caracteriza por dolor en la región lumbar que compromete estructuras osteomusculares y ligamentarias. Comprende desde el borde inferior de la parrilla costal hasta la región glútea inferior, generalmente se acompaña de espasmo muscular.El Índice de Discapacidad de Oswestry (IDO) es una de las escalas más utilizadas y recomendadas a nivel mundial. Tiene valor predictivo de cronificación del dolor, duración de la baja laboral y de resultado de tratamiento, conservador y quirúrgico. Es el estándar de oro de las escalas de dolor lumbar.En la presente investigación se seleccionaron 92 pacientes, el 60% de la población fueron mujeres y el 40 % fueron hombres, el intervalo de edades fue de 25 a 70 años de edad y la herramienta de evaluación fue el IDO en aplicación con modalidad de pre test y post test posterior al tratamiento recomendado por medicina física y rehabilitación, se compararon los resultados mediante una prueba t de student con una alfa de .05.La población blanco para la lesión estudiada fue la femenina, lo cual puede asociarse al descuido y desatención a su salud.Se encontraron diferencias estadísticamente significativas, mostrando una mejoría en los elementos evaluados en el IDO. Palabras Clave: Lumbalgia, incapacidad, Oswestry, dolor, mejoría. Summary Mechanical back pain is very common, affecting 70‐85 % of adults at some point in their lives, about 2% of the working population presented annually a compensable back injury, is the second leading cause of absenteeism and most common cause of disability in patients under 40 years.The occupational risk factors associated with this disease are heavy physical work, static work postures , frequent bending and twisting, weight lifting, vibration, psychological and psychosocial factors.The lumbar pain syndrome is characterized by pain in the lumbar region which commits musculoskeletal structures and ligaments. It extends from the lower edge of the rib cage to the lower gluts, usually accompanied by muscle spasm.The Oswestry Disability Index (ODI) is one of the best and most used global scales. Has predictive value for development of chronic pain, duration of sick leave and treatment outcome, conservative and surgical. It is the gold standard in back pain scales.In the present study 92 patients were selected, 60% of the population were female and 40% were men, age range was 25 to 70 years and the assessment tool was the ODI in application mode of pre and post test to the recommended physical medicine and rehabilitation treatment, the results were compared using Student's t test with an alpha of .05. The target population for the study was the female gender, which may be associated with neglect and lack of health care. Statistically significant differences were found, showing an improvement in the elements assessed in the IDO. Key words: Back pain, disability, Oswestry, pain, improvement. Evaluación de la mejoría funcional mediante la aplicación del índice de discapacidad Oswestry en pacientes con lumbalgia mecanopostural crónica en el Hospital Regional 1o de Octubre ISSSTE. Antecedentes Anatomía funcional de la columna vertebral. La columna vertebral tiene un total de cuatro funciones principales, siendo la primera de ellas y la más evidente la capacidad de mantener el tronco erguido. Es un elemento de sostén que, con la ayuda de la sujeción muscular y ligamentosa, estabiliza el tronco en contra de la fuerza de la gravedad.(1) Debido a que la columna está formada por numerosas vértebras engranadas entre sí, puede articular los movimientos del tronco.La columna sirve de punto de anclaje a músculos y órganos internos, como, por ejemplo, el diafragma o los intestinos. 2 Protección de la médula espinal la cual está constituida por tejido nervioso frágil que hay que proteger para evitar que pueda verse dañado por un elemento externo o un movimiento forzado. Para este fin, cada una de las vértebras tiene en la parte posterior del cuerpo vertebral el denominado orificio vertebral. El conjunto y unión de todos los orificios vertebrales conforman el denominado canal medular, lugar por el que transcurre la médula, quedando ésta protegida por un armazón óseo a lo largo de toda su extensión.(6) Regiones Vertebrales Cuandose observa a una persona de perfil, pueden distinguirse, a simple vista, tres zonas diferenciadas en su espalda: Una parte alta, en la que se identifica una curvatura entrante, cóncava, llamada lordosis cervical, que está determinada por la disposición de las 7 vértebras que componen la región cervical (de C-1 a C-7). Una zona media, denominada región dorsal, compuesta por 12 vértebras (de D-1 a D-12), que dibujan una curvatura convexa llamada cifosis dorsal y una parte más baja, la región lumbar, que con 5 vértebras (de L-1 a L-5) describe la lordosis lumbar. Al igual que en la zona cervical, se trata de una curvatura cóncava. Estas tres regiones disponen de un total de 24 vértebras, todas ellas móviles. Además, en la parte baja de la columna, hay dos regiones más, conformadas por vértebras soldadas y que carecen de movilidad entre ellas. Son la región sacra, que consta de cinco vértebras (de S-1 a S-5), y la coxígea, formada por tres o cuatro vértebras según la persona (de Cx-1 a Cx-4). Las curvaturas de la columna vertebral cumplen los importantes cometidos de absorber las fuerzas de impacto que se producen al caminar, correr o saltar y de ayudar a mantener el equilibrio corporal. Todas las vértebras están formadas siguiendo un plan básico, aunque existen variaciones individuales en las diferentes regiones. Una vértebra típica está formada por un cuerpo anterior, más o menos cilíndrico, y un arco posterior compuesto de dos pedículos y dos láminas, estas últimas unidas posteriormente para formar una apófisis espinosa. Estas apófisis varían en forma, tamaño y dirección en las distintas regiones de la columna. En cada lado, el arco también da soporte a una apófisis transversa y a unas apófisis articulares superior e inferior; estas últimas forman articulaciones sinoviales con las apófisis correspondientes de las vértebras adyacentes. Las apófisis espinosas y transversas proporcionan puntos de fijación para los diferentes músculos que se insertan en ellas. 3 El tamaño creciente de los cuerpos vertebrales de arriba abajo se relaciona con el peso y fuerzas progresivas que soportan los segmentos sucesivos, y las vértebras sacras están soldadas para formar una base sólida en forma de cuña -el pilar de apoyo de un puente cuyos arcos se curvan hacia abajo, en dirección a las articulaciones de la cadera. Los discos intervertebrales actúan como amortiguadores elásticos para absorber los múltiples efectos mecánicos que padece la columna vertebral.(7) Entre vértebras adyacentes, sólo son posibles movimientos limitados, pero la suma de estos movimientos confiere un considerable margen de movimiento a la columna vertebral como un todo. Es posible efectuar flexión, extensión, flexión lateral, rotación y circunducción, siendo estas acciones más libres en las regiones cervical y lumbar que en la torácica. Estas diferencias se deben a que los discos son más gruesos en las áreas cervical y lumbar, falta el efecto de fijación de la caja torácica, las apófisis espinosas cervicales y lumbares son más cortas y están más separadas y las apófisis articulares están formadas y dispuestas de manera diferente.(5) Vértebras lumbares y discos intervertebrales Las cinco vértebras lumbares son las vértebras individuales mayores y se distinguen por la ausencia de agujeros transversos y carillas costales. Los cuerpos vertebrales son más anchos de lado a lado que de delante a atrás, con superficies superiores e inferiores que tienen forma de riñón y son casi paralelas, excepto en el caso del V cuerpo vertebral que tiene una ligera forma de cuña. Los agujeros vertebrales triangulares son mayores en las vértebras torácicas y más pequeños que en las cervicales. Los pedículos son cortos y fuertes y se originan a partir de las caras superior y posterolateral de los cuerpos; las escotaduras vertebrales superiores son, por tanto, menos profundas que las inferiores. Las láminas son unas placas cortas y anchas que se unen en la línea media para formar las casi horizontales y cuadrangulares apófisis espinosas. Los intervalos entre láminas y apófisis espinosas adyacentes son relativamente amplios. Las apófisis articulares se proyectan verticalmente hacia arriba y hacia abajo desde las áreas de unión entre los pedículos y las laminas. Las carillas superiores son ligeramente cóncavas y miran posteromedialmente para abrazar las carillas inferiores de las vértebras de encima, que son curvadas y están dispuestas de forma recíproca. Esta disposición permite una cierta flexión y extensión, pero muy escasa rotación. Las apófisis transversas de L1 a L3 son largas y delgadas, mientras que las de L4 y, especialmente, L5, son más piramidales.(9) Cerca de las raíces de cada apófisis transversa hay unas pequeñas apófisis accesorias; otras pequeñas y redondeadas apófisis mamilares protruyen desde los márgenes posteriores de las apófisis articulares superiores. Las primeras pueden representar las apófisis transversas verdaderas (o sus extremos), dado que 4 muchas de las llamadas apófisis transversas son realmente elementos costales. En la primera vértebra lumbar estos elementos, ocasionalmente se desarrollan hasta formar costillas lumbares. La V vértebra lumbar (L5) es atípica. Es la mayor, su cuerpo es más profundo anteriormente, sus carillas articulares inferiores miran casi hacia delante y están más separadas, y las raíces de sus apófisis transversas chatas se continúan con las partes posterolaterales del cuerpo y con todas las superficies laterales de los pedículos. El sacro, una fusión de cinco vértebras, está ensanchado por la amalgama de elementos costales y apófisis transversas que constituyen fuertes partes laterales. Es ancho por arriba y afilado por abajo, relativamente liso en su superficie pélvica y muy irregular en el dorso para la fijación de ligamentos. (13) Las fuertes partes laterales, una a cada lado, muestran unas superficies articulares grandes y algo irregulares para que se articulen con los dos ilion. Las elevaciones y depresiones complementarias de estas superficies confieren las características de anti rotación y fijación de las articulaciones sacro iliacas que, junto con los extraordinariamente fuertes ligamentos dorsales y las contribuciones de los ligamentos sacrotuberoso y sacroespinoso, configuran una articulación sacroilíaca considerablemente estable. Desde un punto de vista arquitectónico, la situación del sacro entre los coxales no es la de clave de arco, realmente si no fuera por los fuertes ligamentos dorsales el sacro podría caer hacia dentro de la pelvis. La sínfisis púbica une los dos huesos púbicos. Las superficies articulares óseas muestran surcos y depresiones y los costados encajan firmemente, estando cubiertos por una capa fina de cartílago hialino. Existe un disco interpúbico de fibrocartílago que es más grueso en las mujeres.(14) Un ligamento púbico superior conecta ambos pubis a lo largo de sus superficies superiores, extendiéndose hasta los tubérculos púbicos. El ligamento púbico arqueado une los huesos por debajo. Por delante, las fibras tendinosas que se separan de los rectos del abdomen y de los músculos oblicuos externos del abdomen refuerzan la cápsula.(17) Discos intervertebrales. Interpuestos entre los cuerpos vertebrales adyacentes desde el axis hasta el sacro se encuentran los discos intervertebrales, estructuras fibrocartilaginosas considerablemente fuertes que actúan como poderosas uniones y amortiguadores elásticos. Los discos consisten en unas capas concéntricas externas de tejido fibroso, el anillo fibroso (las fibras en capas adyacentes están dispuestas de forma oblicua, pero en direcciones opuestas para ayudar a soportar la torsión), y una zona pulposa elástica central el núcleo pulposo. El aporte sanguíneo y nervioso 5 los discos es muy poco evidente. Si las fibras anulares ceden como resultado deun traumatismo o de una enfermedad, el turgente núcleo pulposo interior puede prolapsarse y comprimir las estructuras nerviosas y vasculares próximas. En estado de salud y en la madurez, los discos intervertebrales aportan casi el 25% de la longitud de la columna vertebral; son más delgados en la región torácica superior, más gruesos en la región lumbar. En sección vertical, los discos lumbares tienen una moderada forma de cuña, con el borde más grueso anteriormente. La convexidad hacia delante de la columna lumbar se debe más a la forma de los discos que a las disparidades entre las anchuras anterior y posterior de los cuerpos de las vértebras lumbares. La forma de cuña más definida de los discos lumbosacros ayuda a minimizar los efectos de la marcada angulación lumbosacra.(20) A medida que la edad avanza, el núcleo pulposo sufre cambios: su contenido en agua disminuye, su matriz mucoide es gradualmente remplazada por fibrocartílago y finalmente se asemeja al anillo fibroso. Aunque la resultante pérdida de anchura en cada disco es pequeña, puede llegar a alcanzar una disminución total de 2 o 3 cm en la longitud de la columna vertebral.(21) Ligamentos lumbosacros Dado a que las articulaciones lumbosacra y sacroiliacas transmiten todo el peso del cuerpo a los huesos de la cadera y por tanto a las extremidades inferiores, sus ligamentos son de capital importancia. El ligamento longitudinal anterior es una banda a modo de un tirante que aumenta de anchura de arriba abajo y que se extiende desde el tubérculo anterior del atlas al sacro. Está firmemente fijado a los márgenes anteriores de los cuerpos vertebrales y a los discos intervertebrales. Las fibras superficiales cruzan sobre varias vértebras, y las cortas y más profundas interconectan vértebras y discos adyacentes. El ligamento longitudinal posterior es más ancho por arriba que por abajo y está situado dentro del conducto vertebral por detrás de los cuerpos vertebrales. Su extremo superior se continúa con la membrana tectoria, y se extiende desde el axis hasta el sacro. Los bordes del ligamento tienen forma de sierra, especialmente en las regiones torácica baja y lumbar debido a que se ensancha hacia fuera entre sus fijaciones a los bordes de los cuerpos vertebrales para mezclarse con las fibras anulares de los discos. El ligamento está separado de las superficies posteriores de los cuerpos vertebrales por las venas basivertebrales que unen los plexos venosos vertebrales internos anteriores.(24,32) Los ligamentos amarillos, compuestos principalmente de tejido elástico amarillo, unen las láminas adyacentes. Se extienden desde la cara anteroinferior de la lámina de encima a la superficie posterosuperior de la lámina de debajo, y lateralmente desde la línea media a las cápsulas articulares. En la línea media 6 existen entre ellos unas pequeñas aberturas para el paso de venas desde los plexos venosos vertebrales internos a los externos. Los ligamentos aumentan en grosor desde la región cervical a la lumbar. Los ligamentos supraespinosos interconectan los extremos de las apófisis espinosas desde la VII vértebra cervical hasta el sacro. Se continúan con el ligamento de la nuca por arriba y con los ligamentos interespinosos por delante, aumentando de grosor de arriba abajo. Los ligamentos interespinosos son unas estructuras delgadas membranosas que se extienden entre las raíces y los extremos de las espinas; están menos desarrolladas en la región lumbar. Los ligamentos sacroilíacos ventrales constan de numerosas bandas delgadas que cierran ventralmente la articulación sacroilíaca. Se conectan especialmente con los márgenes ventrales de las superficies auriculares del sacro y de los iliacos. Los ligamentos sacroilíacos interóseos están formados por haces de fibras cortos y gruesos que interconectan las tuberosidades sacras e ilíacas. Están situados profundamente en la hendidura dorsal entre las áreas rugosas de los huesos inmediatamente por encima y por detrás de las superficies auriculares. Siguiéndoles dorsalmente se hallan los ligamentos sacroilíacos dorsales cortos que llenan la profunda depresión entre el sacro y las tuberosidades de los ilíacos. Son más bien cortos y en la parte superior del espacio pasan horizontalmente entre los tubérculos transversos I y II del sacro y las tuberosidades ilíacas. El ligamento sacroilíaco dorsal largo es oblicuo. Sus fibras descienden desde la espina ilíaca posterosuperior a los tubérculos transversos del sacro III y IV. Sus fibras exteriores se entrelazan con el ligamento sacrotuberoso.(8,30,22) El ligamento sacrotuberoso es largo, plano y triangular. Fibras que salen de las espinas ilíacas posterosuperior y posteroinferior y desde la parte dorsal y lateral del sacro y lateral del cóccix convergen por debajo sobre la tuberosidad isquiática. Parte del origen del músculo glúteo mayor se encuentra en la superficie posterior del ligamento. El ligamento sacroespinoso está fijo por su extremo a la espina ciática; su ancha base se origina desde el costado de la parte baja del sacro y del cóccix. Este ligamento convierte la escotadura ciática mayor en el agujero ciático mayor y, con el ligamento sacrotuberoso por fuera, convierte la escotadura ciática menor en el agujero ciático menor. Estos ligamentos resisten fuertemente la tendencia del sacro a rotar bajo todo el peso del cuerpo - el sacro superior hacia abajo y el inferior hacia atrás. La articulación lumbosacra une la V vértebra lumbar con el I segmento del sacro en una unión de vértebras típica, pero con una fuerte inclinación. Todos los ligamentos que habitualmente unen las vértebras lo hacen también en éstas. 7 Además, un fuerte ligamento iliolumbar pasa hacia el lado desde la apófisis transversa de la V vértebra lumbar a la parte posterior de la cresta ilíaca. Este ligamento resiste la tendencia de la vértebra a descender el plano oblicuo de la base del sacro.(16,4) Biomecánica. La biomecánica es la ciencia que estudia las fuerzas internas y externas y su incidencia sobre el cuerpo humano. La anatomía nos muestra, en reposo y en un momento dado, las formas de una estructura pero la biomecánica nos permite comprender las fuerzas sobre estas estructuras y los efectos que ocasionan. La columna humana es una estructura mecánica experimentada durante la evolución y adaptada a la bipedestación que combina la rigidez de las vértebras y la elasticidad de los discos. Esta singular combinación le permite soportar importantes presiones y al mismo tiempo tener una amplia movilidad controlada en determinados planos. Mecánicamente se entenderá mejor la columna si la observamos cómo tres pilares, uno grande anterior y dos pequeños posteriores. El pilar anterior está formado por la superposición de los cuerpos de las vértebras y los discos intervertebrales. Los pilares posteriores son las estructuras verticales del arco vertebral, articulación superior e inferior unidas por los istmos. El pilar anterior está unido a los dos posteriores a través de los pedículos que resultan ser estructuras de altísima resistencia. Sus dimensiones medias en la columna lumbar son de 6 mm en L1 a 16 mm en L5 de anchura y de 11 a 13 mm de altura.(1,2) Los dos pilares posteriores están unidos entre sí por las láminas. Entre ellos queda delimitado el agujero vertebral, que en el segmento lumbar, es amplio y en forma de triángulo equilátero. El conjunto de agujeros vertebrales superpuestos constituye el conducto raquídeo. El cuerpo vertebral resiste muy bien las fuerzas de compresión a lo largo de su eje vertical gracias a la disposición de sus trabéculas. Las verticales unen los dos platillos vertebrales y las horizontales salen de ellos para atravesar el pedículo y dirigirse a las apófisis articulares y al arco posterior. Entre estos tres grupos queda una zona más débil formada por un triángulo de base anterior.Es decir, la porción anterior del cuerpo vertebral es menos resistente que la posterior y en las lesiones por hiperflexión se hunde en este punto. Las corticales del cuerpo son muy finas y son responsables sólo del 10% de la resistencia de la vértebra. La resistencia media a la fractura por compresión de los cuerpos vertebrales oscila entre los 600 y los 800 kg. El cuerpo vertebral se fractura antes que el disco. Esta resistencia disminuye con los años. Con una disminución de la masa ósea del 25% se disminuye su resistencia en un 50%, debido principalmente a la pérdida de uniones transversales entre las trabéculas longitudinales. 8 El sistema se cierra mecánicamente con la presencia de la médula ósea que actúa como un cojín hidráulico y ayuda a mantenerlo en tensión.(5) El disco intervertebral es una estructura viscoelástica que hace de sistema amortiguador colocado entre dos vértebras. La viscoelasticidad es la capacidad que posee una estructura de recuperarse lentamente ante las deformaciones. El disco está formado por una estructura laminar periférica que precinta una substancia hidrófila, el núcleo, y se encuentra cerrada por las placas cartilaginosas superior e inferior adheridas a los cuerpos vertebrales. El núcleo es una masa de proteoglicanos capaz de retener gran cantidad de líquido y representa el 30-50% de la superficie del disco en sección transversal. Los discos están preparados para absorber presiones por lo que poseen un 60- 90% de agua. Entre el 20 y el 30% de la altura en la columna sana es debido a la separación que los discos ejercen sobre los cuerpos vertebrales. Es más alto al nacer y tiene tendencia a disminuir con la edad. Entre el descanso y la bipedestación se producen cambios de altura del 1% de la talla (2% en los niños y 0,5% en personas de 70-80 años) debidos a la hidratación y deshidratación del disco, más marcada en los discos sanos. La disminución de la talla se produce en las primeras cuatro horas de estar en pie. Sucede lo contrario en las primeras horas del descanso.(6,40) Los movimientos, y especialmente el ejercicio, favorecen la nutrición del disco, las vibraciones y el tabaquismo lo disminuyen. El ánulus resiste mal las fuerzas de cizallamiento y muy bien las fuerzas de compresión y tracción. Esta capacidad se pierde al disminuir la macroproteína del núcleo y sus enlaces, en lo que clínicamente se denomina de generación del núcleo. El anillo también se degenera perdiendo cohesión entre sus capas laminándose como las capas de una cebolla. El pilar anterior es el de resistencia y amortiguación. A la edad de 50 años el 97% de los discos lumbares están degenerados y los segmentos más afectados son el L3-L4, L4-L5 y L5-S1. La tendencia que presenta el núcleo a herniarse por su zona posterolateral se debe a varios factores: menor resistencia del ánulus en la zona posterior y lateral, mayor protección por parte del ligamento longitudinal posterior en su zona posterior-media y desplazamiento del núcleo hacia atrás en los movimientos de flexión de la columna.(19) Está demostrado que las presiones verticales estrictas no lesionan el disco ni pequeñas inclinaciones de 6° a 8° en cualquier plano le provocan fallos. A partir de los 15° de flexión el disco ya es lesionable. La aplicación de una fuerza vertical brusca hace que se comporte de forma rígida por efecto hidrostático y sobrepasa la resistencia de los cuerpos vertebrales, rompiéndolos. El contenido del núcleo emigra hacia el interior de la vértebra dando lugar a las hernias de Schmorl. 9 El mecanismo que más lesión puede producir es el de torsión, especialmente en los discos más bajos, que al mismo tiempo son más ovalados. Estos esfuerzos son absorbidos en un 35% por el disco intervertebral sano y en un 65% por las articulaciones, músculos y ligamentos, un disco sano tiene un 25% más de resistencia que un disco degenerado pudiéndose lesionar a partir de los 16° de rotación. Los discos menos ovalados (los más altos) tienen mayor resistencia.(31) A 20° de flexión, sentado o de pie, la presión en el disco L3-L4 es superior al doble del peso del cuerpo y levantando un peso de 20 kg es tres veces el peso del cuerpo. Este trabajo es clásico y demuestra el efecto de los pequeños movimientos sobre las presiones que resiste el disco intervertebral. La presión sobre el disco disminuye un 20% si se utiliza la prensa abdominal (cámara hidroaérea). Esta presión se modifica con las posturas. En discos sanos en decúbito es de 154 kPa (kiloPascales), en bipedestación es 3,5 veces más y sentado 4,5 veces la presión que en decúbito. La posición de sentado es intrínsecamente peligrosa si no se guardan unas reglas de higiene postural (inclinación posterior de la columna y apoyo dorsal y lumbar). La zona más afectada es la L5-S1 cuando existe degeneración discal moderada. El anillo fibroso se desgarra a una presión de 250 kg y el disco se rompe completamente con 320 kg de promedio. En muchas ocasiones las presiones que soporta la columna al levantar un peso es de 700 kg. Es evidente que deben existir otros mecanismos para darle soporte.(34,5) El pilar posterior formado por la superposición de articulaciones e istmos es el punto de movimiento. Los istmos transmiten las presiones verticales y son puntos débiles que acostumbran a fracturarse por fatiga (espondilolisis). Las articulaciones son de tipo sinovial con una cápsula articular perforada en sus extremos. Las articulaciones lumbares altas están colocadas en sentido antero-posterior y esta inclinación, con respecto al plano transversal, va cambiando hasta ser frontales en los niveles más bajos. En cada nivel de la columna, ambas articulaciones deben presentar la misma inclinación. La observación clínica indica que existe un mayor riesgo de hernia de disco a medida que las articulaciones se hacen más frontales. Este defecto de orientación provoca que en dicho nivel y en el superior se produzca una mayor rotación en cada movimiento de flexión. Se ha demostrado que a dicho nivel se produce una mayor laminación del ánulus y, al sufrir la articulación más sagital una mayor presión, los procesos artrósicos son mayores (rotartrosis de Farfán). La dehiscencia del ánulus favorece la aparición de hernias discales con una incidencia del 50% cuando existe anisotropía. Las articulaciones interapofisarias son un excelente sistema de protección del disco intervertebral ya que reduce su posible movilidad a una cuarta parte. (27) 10 Las articulaciones interapofisarias absorben parte de las presiones que recibe la columna, dependiendo del nivel y de la inclinación que tenga en cada momento. Esta asociación oscila entre el 9% en posición neutra y el 15% en extensión o hiperlordosis. En articulaciones artrósicas puede aumentar hasta un 47%. El agujero de conjunción lumbar se abre un 24% en la flexión y se cierra un 20% en la extensión. En condiciones normales esto significa modificaciones del 50% de su área. Toda disminución de la altura de los discos también cierra los agujeros de conjunción.(6,37) La existencia de las curvas vertebrales aumenta su resistencia siendo proporcional al cuadrado del número de éstas más uno. La existencia de tres curvas móviles representa un aumento de la resistencia de diez veces respecto a una columna recta. Los sistemas estabilizadores pasivos de la columna son los ligamentos y el disco, y los activos los músculos. Entre los ligamentos de la columna uno de los más interesantes, en términos biomecánicos, es el ligamento amarillo. Su gran cantidad de fibras elásticas le da su color característico y le permite actuar como un resorte almacenando energía durante la flexión y posteriormente ayudando a los músculos durante la extensión. Su capacidad elástica le impide protruir dentro del canal en extensión cuando está en máxima relajación. El ligamento supraespinoso es el que estámás alejado del centro de movimiento vertebral, su brazo de palanca es el más largo y el que puede proporcionar una mayor resistencia a la tracción. En personas de más de 80 años se encuentra lesionado en casi un 90%(8,39) El ligamento supraespinoso sirve de unión entre las porciones derecha e izquierda de la fascia dorsolumbar. La columna con sus ligamentos intactos y sin músculos es una estructura muy inestable y se desequilibra al superar los 20 N (unos 2 kg) de presión. La musculatura no solamente es un elemento que da movilidad sino una gran estabilidad a la columna. La calidad de la musculatura abdominal marca la resistencia de la columna. La aponeurosis abdominal y la fascia dorsolumbar están unidas y esta última se tensa por la contracción del dorsal ancho que se inserta en la parte proximal del húmero. Al realizar la aproximación de los brazos se tensan las estructuras lumbares formando una conexión entre las extremidades superiores y la parte baja de la columna. Una disminución de un 10% de la función muscular representa un aumento de un 60% de la tensión que soporta los ligamentos posteriores. La debilidad de la musculatura abdominal representa un desequilibrio posterior que aumenta la lordosis. Esto sucede con la obesidad y durante el embarazo. Es imprescindible 11 mantener bien equilibrados los dos grupos musculares realizando regularmente ejercicios isométricos. En la flexión del cuerpo hacia delante solamente los primeros 40°-60° son debidos al movimiento de la columna mientras la pelvis permanece bloqueada por los músculos glúteos. El resto de la flexión se realiza a nivel de la articulación de la cadera.(15) El movimiento activo de la columna se produce como en cualquier articulación por la interacción coordinada de los nervios y los músculos. Los músculos agonistas (motores primarios) inician y llevan a cabo el movimiento y los músculos antagonistas controlan y modifican el movimiento, mientras la co-contracción de ambos grupos estabiliza la columna. El rango de movimiento difiere en los distintos niveles de la columna y depende de la orientación de las facetas de las articulaciones intervertebrales. El movimiento entre dos vértebras es pequeño y no se produce independientemente; todos los movimientos de la columna implican la acción combinada de varios segmentos móviles. Las estructuras esqueléticas que influyen el movimiento del tronco que influyen en el movimiento del tronco son la caja torácica, que limita el movimiento torácico y la pelvis, lo que aumenta los movimientos del tronco mediante su báscula.(17) Movimiento Funcional De La Columna. Debido a su complejidad el movimiento de un único segmento móvil es difícil de medir clínicamente. Se pueden proporcionar valores aproximados para el rango normal de movimiento funcional de la columna. Las variaciones entre los individuos son grandes y muestran una distribución Gaussiana en los tres planos. El rango de movimiento depende de la edad, disminuyendo aproximadamente el 30% de la juventud a la edad avanzada, aunque con el envejecimiento la pérdida de rango de movimiento se aprecia en flexión e inclinación lateral mientras que el movimiento de rotación axial se mantiene con la evidencia de un movimiento acoplado aumentado. También se aprecian diferencias entre géneros, los hombres tienen mayor movilidad en flexión y extensión, mientras que las mujeres son más móviles en inclinación lateral.(27) La pérdida de rango de movimiento en a columna lumbar y/o torácica se compensa principalmente por el movimiento de la columna cervical y las caderas. Músculos. Los músculos espinales pueden dividirse en flexores y extensores. Los principales flexores son los músculos abdominales (rectos del abdomen, oblicuo interno y externo, transverso del abdomen) y el músculo psoas. En general los músculos anteriores de la columna vertebral actúan como flexores. 12 Los principales extensores son los músculos paravertebrales, los músculos multífidos, los músculos intertransversos unidos a los elementos posteriores. En general los músculos posteriores a la columna vertebral actúan como extensores. Se disponen entre cada dos vértebras y el segmento móvil además de sobre distintas vértebras y segmentos móviles. Cuando los músculos extensores se contraen simétricamente, se produce la extensión. Cuando se contraen los flexores y extensores del lado derecho e izquierdo asimétricamente se produce la inclinación lateral o la torsión de la columna. (29) Flexión y Extensión. Durante el rango de movimiento de flexión-extensión en descarga, los primeros 50°-60° de flexión de la columna se producen en la columna lumbar, principalmente en los segmentos móviles inferiores. La báscula anterior de la pelvis permite más flexión. Durante la elevación y la bajada de una carga, este ritmo se produce simultáneamente, aunque se aprecia una mayor separación de estos movimientos durante la elevación que durante la bajada. La columna torácica contribuye poco a la flexión anterior de toda la columna espinal debido a la orientación oblicua de las facetas, la orientación prácticamente vertical de las apófisis espinosas, y la limitación del movimiento impuesto por la caja torácica.(34) La Flexión. Se inicia por los músculos abdominales y la porción vertebral del músculo Psoas. El peso del tronco produce más flexión que se controla por la actividad gradualmente creciente de los músculos paravertebrales a medida que se incrementa el momento de flexión anterior que actúa sobre la columna. Los músculos posteriores de la cadera están activos para controlar la báscula anterior de la pelvis a medida que se flexiona. Se acepta que en flexión completa los músculos paravertebrales se inactivan una vez están completamente estirados. En esta posición el momento de flexión anterior se contrarresta pasivamente por estos músculos y por los ligamentos posteriores que inicialmente están relajados pero se tensan en este punto donde la columna se ha elongado completamente. Este silencios de los músculos paravertebrales se conoce como Fenómeno de relajación en flexión, sin embargo se ha demostrado por electromiografía, que al relajarse los músculos paravertebrales superficiales, el cuadrado lumbar y los músculos paravertebrales lumbares laterales profundos se activaban. En la flexión forzada, los músculos extensores superficiales se reactivaban. Desde la flexión completa al posicionamiento erecto del tronco, la pelvis bascula hacia atrás y la columna entonces se extiende.(8,19) 13 La secuencia de activación muscular se invierte. El glúteo mayor se activa inicialmente junto con los isquiotibiales e inicia la extensión mediante la rotación posterior de la pelvis. Los músculos paravertebrales se activan e incrementan su actividad hasta que se completa el movimiento. El esfuerzo concéntrico desarrollado por los músculos implicados en elevar el tronco es mayor que el esfuerzo excéntrico desarrollado por los músculos implicados en descender el tronco. La carga compresiva de la columna causada por el esfuerzo muscular producido por el descenso del tronco con una carga o resistencia puede alcanzar los límites de tolerancia espinal exponiendo la columna a un mayor riesgo de lesión. Cuando se hiperextiende el tronco desde una posición erecta, los músculos extensores se activan durante la fase inicial. Este impulso inicial de actividad decrece durante la extensión posterior y los músculos abdominales se activan para controlar y modificar el movimiento. En la extensión extrema o forzada, la actividad extensora se requiere de nuevo.(4,33) Inclinación Lateral Y Rotación. Durante la inclinación lateral del tronco, el movimiento puede predominar en la columna torácica o lumbar. En la columna torácica la orientación de las facetas permite la inclinación lateral, pero la caja torácica la limita (en diferentesgrados, en diferentes personas); en la columna lumbar, los espacios en forma de cuña entre las superficies articulares intervertebrales muestran variaciones durante este movimiento. Los sistemas espino-transversos y transverso-espinosos de los músculos paravertebrales y los músculos abdominales se activan durante la inclinación lateral. Las contracciones homolaterales de estos músculos inician el movimiento y las contracciones contralaterales lo modifican. Se produce la rotación axial significativa en los niveles torácico y lumbosacro pero se limita en otros niveles de la columna lumbar, siendo limitada por la orientación vertical de las facetas.(7) En la región torácica, la rotación se asocia constantemente con la inclinación lateral. Durante este movimiento acoplado que es más marcado en la región torácica superior, los cuerpos vertebrales generalmente rotan hacia la concavidad de la curva lateral de la columna. El acoplamiento de la rotación y la flexión lateral también tiene lugar en la columna lumbar, con los cuerpos vertebrales que rotan hacia la convexidad de la curva. Durante la rotación axial, los músculos de la espalda y abdominales se activan a ambos lados de la columna, ya que los músculos homolaterales y contralaterales cooperan para producir este movimiento. Se ha registrado una alta coactivación para la rotación axial.(12) 14 LUMBALGIA Y LUMBOCIÁTICA Definición La lumbalgia es una afección caracterizada por un conjunto de signos y síntomas localizado en la zona lumbar, siendo el dolor la manifestación de mayor relevancia. La lumbociática, es un dolor ocasionado por un proceso irritativo situado en el trayecto de las raíces que integran el nervio ciático (L4,L5 y S1), manifestado frecuentemente por parestesias y otros signos y síntomas a nivel del miembro inferior. (28) Factores de riesgo y epidemiología El síndrome doloroso lumbar es la primera causa de consulta en el servicio de Rehabilitación. Se le considera un problema de salud en las sociedades industrializadas; la prevalencia a lo largo de la vida varía del 12% al 35%. En Estados Unidos se calcula que alrededor del 2% de la población trabajadora, presenta todos los años una lesión del espalda compensable, y que el número anual de lesiones supera los 400,000 casos; la mayoría de estas lesiones se diagnóstica, como desgarros y distensiones, con una incidencia media de 0,75 por 100 trabajadores. Es la causa más frecuente de incapacidad transitoria en personas de más de 45 años. Aproximadamente 80% de la población padece, al menos, un episodio de dolor lumbar en el transcurso de su vida. Dos de cada tres pacientes se recuperan en un período de tiempo inferior a un mes y aproximadamente un 5% sufre molestias persistentes por más de 6 meses. Los factores de riesgo laborales asociados a mayor riesgo de lumbago son: trabajo físico pesado, posturas de trabajo estático, flexiones y torsiones frecuentes, levantamiento de peso, impulsiones y tracciones, trabajo repetitivo, vibraciones, factores psicológicos y psicosociales. (7) Factores individuales: edad ( 35 a los 55 años); sexo, dependiente de la edad, las mujeres presentan índices de prevalencia mayores según va aumentado la edad; la postura, fuerza muscular, antropometría, forma física, movilidad vertebral es de importancia baja y se relaciona con actividad laboral. (8) Dolor lumbar mecánico agudo El síndrome doloroso lumbar se caracteriza por dolor en la región lumbar, que si bien desde el punto de vista anatómico corresponde estrictamente a la localización de las vértebras lumbares, compromete estructuras osteomusculares y ligamentarias. Clínicamente comprende desde el borde inferior de la parrilla costal hasta la región glútea inferior, acompañado por lo general de espasmo muscular. Su etiología es múltiple. Se considera fase aguda al cuadro menor de seis semanas de evolución y fase crónica cuando va más allá de ese periodo.(11,15) 15 La mayoría de los pacientes que sufren dolor lumbar presenta uno o más de los síntomas siguientes: 1. Dolor lumbar. 2. Dolor en la extremidad 4- Deformidad vertebral.(14) Factores de riesgo antiguamente asociados a Dolor Lumbar. Casi todos nosotros (entre el 70 y el 85%) padeceremos dolor lumbar en algún momento de nuestra vida. La mayoría de las personas padecen dolor lumbar; los factores genéticos, el sexo y la constitución física establecen pocas diferencias.(16) Dejar de fumar, evitar o corregir la obesidad y lograr una buena forma física son buenos consejos generales para la salud.(18) Es posible que estas pautas ayuden a disminuir la probabilidad de sufrir nuevos episodios de dolor lumbar. Waddell sostiene que probablemente sea la «clase social" el factor personal que más influye en el riesgo de sufrir problemas lumbares. Ello se debe en parte al trabajo manual pesado y en parte a la desventaja social. Según los argumentos de Waddell, la clase social refleja la profesión (trabajo manual frente a trabajo administrativo) y la desventaja social (mala asistencia médica). (17) El dolor lumbar parece tener una prevalencia ligeramente superior en los pacientes que llevan a cabo una actividad laboral manual. No está claro que aspectos concretes del trabajo, la desventaja social (mala asistencia médica), el estilo de vida, las actitudes o la conducta influyen en esta conclusión sobre la clase social. El dolor lumbar tiene mayores repercusiones en los profesionales que llevan a cabo actividades manuales pesadas. Estos trabajadores son más propensos a sufrir una baja laboral, y esta suele ser más prolongada, que aquellos que desempeñan una función administrativa. El motivo puede ser el efecto de su lumbalgia (el paciente no puede coger los pesos que debe cargar en su trabajo), o bien el consejo médico recibido (no trabajar para evitar la posibilidad de que el dolor lumbar se intensifique al reanudar una tarea pesada).(21) Dolor lumbar agudo Los episodios de dolor lumbar son comunes en la población y por definición comprenden un dolor de menos de 3 meses de duración. En muy pocos casos se trata de una patología peligrosa y generalmente el dolor no es específico y el diagnóstico preciso no es posible de realizar o no es necesario. Si el dolor se 16 irradia hacia la pierna o distal a la rodilla, existe una gran probabilidad de que los síntomas sean ocasionados por una hernia de disco.(18) Los síntomas que caracterizan el dolor lumbar son el dolor agudo y el aumento del tono muscular o rigidez. Este dolor comprende el segmento lumbar con o sin dolor en los glúteos y las piernas; en general es difícil de localizar. El dolor agudo se puede presentar como un dolor lumbar simple (95% de los casos), causado por compresión de una raíz nerviosa (< 5% de los casos) o secundario a una patología lumbar (< 2% de los casos). Otras clasificación propuesta para el dolor, se basa en la duración de los síntomas, a saber: dolor agudo (≤ 6 semanas), dolor subagudo (6-12 semanas) y dolor crónico (≥ 12 semanas).(19,20) Factores pronóstico de la reincorporación laboral de los pacientes con dolor lumbar (cronicidad). Cats-Barril y Frymoyer (1991) hicieron un seguimiento de 250 pacientes para determinar cual de numerosos factores predecía mejor quien iba a seguir sin trabajar (sin reincorporarse al trabajo) después de 6 meses. (22) Según ellos, los mejores factores pronóstico fueron, en orden decreciente de precisión, los siguientes: 1. Características del empleo: antecedentes laborales, ocupación, satisfacción con el trabajo, satisfacción con las actitudes y las retribuciones. 2. Opinión del paciente sobre el derecho a recibir una indemnización por dolor lumbar, sobre la parte culpable y sobre las implicaciones legales (factores sociales). 3. Antecedentes de ingreso hospitalario por dolor lumbar. 4. Nivel cultural.(25) Clasificación A. Lumbalgiano especifica, simple o mecánica: aguda, < 6 semanas; sub-aguda, de 6 a 12 semanas; crónica > 3 meses. B. Síndrome ciático/ radicular. C. Lumbalgia específica, grave secundaria a tumores, infección o fractura (signos de alarma. Cuadro clínico a) Lumbalgia no específica, simple o mecánica: • Se presenta entre los 20 y 55 años. • Afecta la región lumbosacra, glúteos o muslos. • Dolor de naturaleza mecánica, cambia con la actividad física y con el tiempo. 17 • Pronóstico bueno. • El 90% se recupera del ataque agudo en 6 semanas. (1,2) b) Síndrome ciático/radicular: • Dolor unilateral de pierna de mayor magnitud que la columna lumbar. • Dolor que generalmente se irradia al pie o dedos. • Disestesias y parestesias siguiendo un patrón dermatomal. • Signos de irritación nerviosa: pruebas de neurotensión que reproducen el dolor (elevación de la pierna en extensión). • Alteraciones motoras, sensoriales o reflejos limitados a una raíz nerviosa.(3) • Pronóstico moderado. c) Lumbalgia específica grave. • Se presenta antes de los 20 años o después de los 55 años. • Trauma violento; ejemplo, caída de altura. • Dolor no mecánico, constante y progresivo. • Dolor torácico. • Antecedentes de cáncer, uso de esteroides sistémico, VIH, • Pérdida de peso. • Restricción severa de la flexión lumbar. • Signos y síntomas neurológicos extensos. • Deformidad estructural. (5) Laboratorio Lumbalgia específica o grave. Sólo algunos estudios están indicados en función de los resultados de la historia clínica y la exploración. • Biometría hemática, anemia debida a enfermedad sistémica como neoplasias, mieloma múltiple; leucocitósis secundaria proceso infeccioso. • Examen general de orina. • Velocidad de sedimentación eritrocitaria, elevada en los procesos infecciosos, neoplasias y trastornos inflamatorios. • Parámetros químicos óseos, calcio, fósforo, fosfatasa alcalina, pueden sugerir afectación ósea primaria o secundaria a una enfermedad ósea metabólica, así como procesos neoplásicos. • Determinación del antígeno linfocitario humano B27, útil para establecer el diagnóstico de espondilitis anquilosante. (26) Gabinete • Los estudios de imagen no se recomiendan durante el primer mes de limitación de actividades debido a síntomas doloroso lumbar, excepto cuando se sospecha lumbalgia específica, grave o sintomatología lumbar que no mejora después de las 4 semanas (síntomas y signos de alarma). 18 • Esperar cuatro semanas antes de considerar pruebas especiales, 90% de los pacientes se recuperan espontáneamente y se evitan procedimientos innecesarios. Esto también reduce el potencial de confusión de etiquetar falsamente los cambios radiológicos relacionados con la edad (comúnmente observados en pacientes mayores de 30 años con sintomatología dolorosa lumbar) como la causa de síntomas agudos. En ausencia de signos de alarma, o limitación persistente de la actividad debido sintomatología dolorosa lumbar solicitar radiografías simples de columna lumbosacra. (24) Selección de estudios especiales • Esperar 4 semanas antes de considerar pruebas especiales, permite que el 90% de los pacientes se recuperen espontáneamente y por lo tanto se evitan procedimientos innecesarios. Esto también reduce el potencial de confusión o falsos positivos, debido a los cambios relacionados con la edad en los estudios de imagen (es frecuente en sujetos de más de 50 años con síntomas lumbares) como la causa de síntomas agudos. En ausencia de signos de alarma o persistencia en la limitación de las actividades debido a sintomatología de las extremidades, solicitar radiografías simples de la región lumbosacra. • Estudios especiales se indican cuando se presentan signos y síntomas de alarma, evidencia fisiológica de compromiso neurológico. • La evidencia fisiológica puede ser en la forma de daño nervioso definitivo, en el examen clínico, estudios de electrodiagnóstico (cuando se evalúa la lumbociatalgía) y prueba de laboratorio y rastreo óseo (cuando se evalúan síntomas lumbar no específico). • Están justificados los estudios de imagen (tomografía computada o resonancia magnética) cuando existe evidencia clínica de compromiso de la raíz nerviosa. Cuando el examen neurológico sea dudosa y hay evidencia fisiológica de compromiso de la raíz nerviosa, antes de considerar el estudio de imagen. Solicitar Eelectromiografía (EMG) incluyendo Reflejo H, prueba útil que identifica disfunción neurológica subclínica en paciente con sintomatología referida a la extremidad pélvica, mayor de 3 a 4 semanas. Los potenciales evocados, pueden ayudar a la evaluación en los casos de sospecha de estenosis espinal o mielopatía. (3) Criterios diagnósticos El médico debe determinar si el dolor es de origen músculo esquelético, neurológico o visceral, el diagnóstico se basa en una cuidadosa historia clínica y en el examen físico, las técnicas de imagen, incluyendo radiografía simple, gamamagrafía, tomografía axial computarizada, mielografia, resonancia magnética nuclear, y los estudios electrofisiológicos pueden servir para identifica el origen del dolor. (1) 19 Posibles complicaciones (factores de riesgo para la cronicidad) • Historia previa de lumbalgia. • Perdida del trabajo (debido a la lumbalgia). • Dolor irradiado a las extremidades. • Pruebas de neurotensión positivas. • Signos de compromiso nervioso. • Reducción en la fuerza y resistencia de los músculos del tronco. • Salud física deteriorada. • Tabaquismo. • Síntomas psicológicos: angustia y depresión. • Conducta desproporcionada a la enfermedad. • Insatisfacción en el trabajo. • Problemas personales –alcoholismo, financiero y matrimonial. • Ganancia secundaria por procesos médico-legal. (4) Tratamiento: Medicamentos • Primera elección: analgésicos a intervalos regular, paracetamol. • Segunda elección AINES, ibuprofeno, o diclofenaco. • Tercera elección relajantes musculares, diazepan o tizanidina. (13) Quirúrgico: La cirugía se considera dentro de los 3 primeros meses de la sintomatología lumbar aguda, cuando existe patología grave espinal o alteración de la raíz nerviosa debido a hernia discal, caracterizado por protrusión del núcleo pulposo central, que pueda atrapar al nervio y que cause irritación de la raíz nerviosa. (17) Criterios para la descompresión de la raíz nerviosa • Ciática severa y discapacitante. • Síntomas de ciática persistente sin mejoría dentro de las cuatro semanas o progresión extrema. • Evidencia fuerte de disfunción de una raíz específica secundario a herniación intervertebral confirmado por estudios de imagen. • Los pacientes con dolor lumbar agudo, sin hallazgos de condiciones graves o significativa compresión de la raíz nervioso raramente se benefician con la cirugía. • Los métodos de descompresión incluyen: laminotomia, laminectomia, microdisectomia. (13) 20 Rehabilitación Etapa aguda • Educación, información de su padecimiento e higiene postural de columna • Evitar posiciones que incrementen el dolor • Reposo en cama no recomendable al menos que el paciente manifieste dolor intenso que limite • sus actividades, se le indica de 1 a 2 días de reposo. • Métodos físicos: auto-aplicación de calor superficial o frío. • Al disminuir el dolor dentro de las dos primeras semanas iniciar ejercicios de condicionamiento físico, como caminata, bicicleta fija, natación y trote ligero, durante 20 a 30 minutos. (1,5) Etapa subaguda • Continuar con ejercicios de condicionamiento (aeróbicos) incrementado la intensidad en forma progresiva • Ejercicios de estiramiento y fortalecimiento de tronco y extremidades a tolerancia • Ejercicios subacuáticos en el Tanque terapéutico. (1) Etapa crónica • Continuar con ejercicios de condicionamiento aeróbico • Ejercicios de fortalecimiento deltronco • Ejercicios específicos de columna (Williams o Mackenzie) Psicológico • Psicoterapia de apoyo en pacientes con dolor lumbar y componentes psíco- social. (7) Escala Oswestry El Cuestionario de incapacidad por dolor lumbar de Oswestry (Oswestry Low Back Pain Disability Questionnaire) o Índice de Discapacidad de Oswestry (Oswestry Disability Index – ODI) es, junto con la escala de Roland-Morris, la más utilizada y recomendada a nivel mundial. Tiene valor predictivo de cronificación del dolor, duración de la baja laboral y de resultado de tratamiento, conservador y quirúrgico. Es el gold standard de las escalas de dolor lumbar.(22) La ODI empezó a fraguarse en 1976 aunque no fue publicada hasta 1980 por John O`Brien. El equipo de O’Brien, formado por un COT, un TO y un fisioterapeuta llevó a cabo las entrevistas a los pacientes con dolor lumbar crónico para identificar la repercusión funcional que el dolor lumbar tenía sobre las AVD. 21 La versión original de 1980 es la llamada 1.0 y es la que Flórez y cols adaptaron al castellano en 1995 (18). La adaptación de la escala de incapacidad por dolor lumbar de Oswestry está incluida en la categoría de mayor calidad metodológica (recomendación nivel A) y es la única versión validada en España, con un coeficiente de correlación de 0,92. La ODI versión 2.0 es la más recomendada y se refiere a la respuesta que mejor describa su problema “ahora”, en el momento de rellenar el formulario, mientras que la versión 1.0 no precisa “cuando” siente el dolor. Existen 4 versiones en inglés y ha sido traducida a 9 idiomas. En la versión revisada se sustituye el aspecto sexual (ítem nº 8) por actividades recreativas, adaptada para algunas culturas y adolescentes con espondilitis o metástasis. Es un cuestionario autoaplicado, es decir, el paciente puede rellenar la escala por sí mismo en apenas 5 minutos y el tiempo de corrección, por personal entrenado, no requiere más de 1 minuto.(14,15) Consta de 10 ítems con 6 posibilidades de respuestas cada una (0–1–2–3–4–5), de menor a mayor limitación. La primera opción vale 0 puntos y la última opción 5 puntos, pero las opciones de respuesta no están numeradas. Si se marca más de una opción se tiene en cuenta la puntuación más alta. Al terminar la prueba, se suman los puntos, se divide ese número entre 50 y se multiplica por 100 para obtener el porcentaje de discapacidad. En caso de haber respondido una pregunta menos (9 ítems) se divide entre 45, que sería la máxima puntuación posible, en vez de entre 50 El porcentaje indica el grado de incapacidad: Otros autores agrupan a los pacientes en dos categorías: uno con puntuaciones menores o iguales al 40 % y un segundo grupo con puntuaciones mayores del 40%.(38) ANEXO ESCALA 22 Justificación La lumbalgia mecánica es muy frecuente, afectando al 70-85% de los adultos estadounidenses en algún momento de su vida, alrededor del 2% de la población trabajadora, presenta todos los años una lesión de espalda, es la segunda causa de absentismo laboral, precedida solo por las enfermedades de las vías respiratorias superiores. También es la causa más frecuente de incapacidad en pacientes menores de 40 años.(1,2) Aproximadamente 80% de la población padece un episodio de dolor lumbar en el transcurso de su vida. Dos de cada tres pacientes se recuperan en un período de tiempo inferior a un mes y aproximadamente un 5% sufre molestias persistentes por más de 6 meses. (5) El síndrome doloroso lumbar es la primera causa de consulta en el servicio de Rehabilitación, es la causa más frecuente de incapacidad transitoria en personas de más de 45 años.(3) La incidencia de la incapacidad por problemas lumbares en los países occidentales ha aumentado de forma espectacular desde 1970. Este hecho no es indicativo de un incremento en la prevalencia de la lumbalgia, sino más bien de un aumento de las bajas laborales, de las declaraciones de enfermedad, "de las compensaciones y de las indemnizaciones por incapacidad de larga duración.(6,4) Los factores de riesgo laborales asociados a mayor riesgo de lumbago son: trabajo físico pesado, posturas de trabajo estático, flexiones y torsiones frecuentes, levantamiento de peso, impulsiones y tracciones, trabajo repetitivo, vibraciones, factores psicológicos y psicosociales. (7) Entre los países industrializados, la tasa más elevada de cirugía vertebral corresponde a Estados Unidos, y esta es hasta cinco veces mayor que la de Gran Bretaña. Los estudios que analizan los resultados de los tratamientos quirúrgico y conservador del dolor lumbar no han demostrado que la cirugía sea claramente superior. (13) En el 90% de los pacientes, el dolor desaparece en un plazo de 6 semanas (resolución espontánea). En otro 5% remite 12 semanas después de su aparición. Menos del 1% de las lumbalgias se deben a un problema raquídeo grave (tumores, infecciones). Menos del 1% tiene su origen en una enfermedad inflamatoria (que precisa pruebas diagnosticas específicas y tratamiento por un reumatólogo). En menos del 5% de los casos existe un dolor radicular verdadero.(8) 23 Hipótesis Posterior a la aplicación de un programa de terapia física y rehabilitatorio convencional mejorará en un 50% la funcionalidad de los pacientes con lumbalgia mecánica del Hospital Regional “1o de Octubre” ISSSTE. Planteamiento del problema ¿Cuál es la mejoría en funcionalidad del tratamiento convencional para lumbalgia mecanopostural utilizado en el Hospital Regional 1o de Octubre ISSSTE en relación a lo reportado por la literatura? Objetivos Objetivo Principal Determinar la mejoría en funcionalidad por la aplicación del índice de discapacidad de Oswestry, en pacientes con lumbalgia mecanopostural del servicio Medicina Física del Hospital Regional 1o de Octubre ISSSTE. Objetivos Específicos 1. Reportar la funcionalidad alcanzada por los pacientes con Lumbalgia mecanopostural crónica al tratamiento fisiátrico convencional en el servicio de Medicina Física del Hospital Regional 1o de Octubre ISSSTE. 2. Identificar la mejoría percibida por los pacientes con Lumbalgia mecanopostural crónica al tratamiento fisiátrico convencional en el servicio de Medicina Física del Hospital Regional 1o de Octubre ISSSTE. 3. Establecer la mejoría del dolor alcanzada por los pacientes con Lumbalgia mecanopostural crónica al tratamiento fisiátrico convencional en el servicio de Medicina Física del Hospital Regional 1o de Octubre ISSSTE. Material y Métodos Prueba t de student La prueba t-Student se utiliza para contrastar hipótesis sobre medias en poblaciones con distribución normal. También proporciona resultados aproximados para los contrastes de medias en muestras suficientemente grandes cuando estas poblaciones no se distribuyen normalmente (aunque en este último caso es preferible realizar una prueba no paramétrica). 24 Se puede usar para muestras independientes o para muestras pareadas, únicamente cambiando la forma en que se realiza el juego de hipótesis: INDEPENDIENTES (curva de distribución normal unilateral) Ho: M1 = M2 Ha: M1 diferente a M2 Ho: M1 > M2 Ha: M1< o igual a M2 Ho: M1 < M2 Ha: M1 > o igual a M2 PAREADAS (curva de distribución normal bilateral) Ho: Md = 0 Ha: Md diferente a 0 Ho: Md > o igual a 0 Ha: Md < 0 Ho: Md < o igual a 0 Ha: M1 > 0 25 Criterios de inclusión. Encuestas aplicadas a pacientes que reúnan los siguientes criterios: Ambos géneros. Entre 25 y 70 años de edad. Lumbalgia mecanopostural crónica Que hubiesen recibido tratamiento por terapeutas físicos de base y con antigüedad laboral de seis meses o más. Que la técnica aplicada sea la realización de ejercicios de Williams y McKenzie. Que respondan a los cuestionarios al ingreso y al final del tratamiento.Criterios de exclusión. Encuestas incompletas Característica del paciente que lo excluya del estudio: ‐ Instrumentación en columna. ‐ Patología psiquiátrica. ‐ Fibromialgia. Pacientes con sintomatología de radiculopatía lumbar. Criterios de eliminación. Que no correspondan los cuestionarios de pos-test Pacientes que no concluyan el tratamiento Rehabilitatorio. Pacientes que cuenten con los criterios de inclusión pero no deseen participar en el estudio. Definición de variables y unidades de medida. VARIABLE DEFINICION OPERACIONAL TIPO DE VARIABLE ESCALA DE MEDICION DEPENDIENTES Género Diferencia física entre hombre y mujer Nominal Dicotómica Femenino Masculino Edad Tiempo transcurrido a partir del nacimiento de un individuo Cuantitativa continua Años 26 Lumbalgia mecanopostural aguda y/o crónica Dolor en la región lumbar, asociado a causas mecánicas, que compromete estructuras osteomusculares y ligamentarias, acompañado de espasmo muscular. Cualitativa nominal Frecuencia y porcentaje Escolaridad Número de años que, en promedio, aprobaron las personas de 15 años y más, en el Sistema Educativo Nacional Cuantitativa continua Grado de estudios (años) INDEPENDIENTES Intensidad del dolor Ímpetu con el que es percibido un síntoma desagradable, una molestia de intensidad variable localizada en una parte del cuerpo Cualitativa nominal Métodos indirectos, como las escalas del dolor en las que se pide a la persona que tiene el dolor que lo califique del uno al diez AVD Realizadas Son las ocupaciones que componen la actividad cotidiana, actividad conformada por las actividades de autocuidado, trabajo y juego/ocio Cuantitativa nominal Porcentaje Mejoría en dolor lumbar Disminución del ímpetu con el que es percibido un síntoma desagradable, en la región lumbar, el cual está asociado a una causa mecánica. Cualitativa nominal Métodos indirectos, como las escalas del dolor en las que se pide a la persona que tiene el dolor que lo califique del uno al diez Mejoría en funcionalidad Conjunto de características que hacen que algo sea práctico y utilitario Cualitativa nominal Porcentaje, calificación numérica Cuidado Personal Capacidad de atender de manera independiente las necesidades de higiene, vestido y cuidados especiales individualmente. Cualitativa nominal Porcentaje, calificación numérica Carga de objetos Capacidad de un sujeto de sostener y levantar peso que no corresponda a su estructura corporal Cualitativa nominal Porcentaje, calificación numérica 27 Marcha Modo de locomoción bípeda con actividad alternada de los miembros inferiores. Cualitativa nominal Porcentaje, calificación numérica Sedestación Postura corporal en la cual el peso del individuo se encuentra balanceado por el apoyo entre la pelvis (Isquión) y la planta de los pies en contacto con una superficie. Cualitativa nominal Porcentaje, calificación numérica Bipedestación Postura corporal en la que el individuo se encuentra apoyado sobre las plantas de los pies con la espalda recta y guardando alineación paralela con la superficie terrestre. Cualitativa nominal Porcentaje, calificación numérica Capacidad para Dormir Habilidad para conciliar el sueño y mantenerse dormido durante el periodo natural que asegure el descanso del individuo Cualitativa nominal Porcentaje, calificación numérica Vida Social Multitud de interacciones sociales, reguladas por normas entre dos o más personas, teniendo cada una cierta posición y realizando un papel social Cualitativa nominal Porcentaje, calificación numérica Capacidad para viajar Habilidad para trasladarse a sitios remotos. Cualitativa nominal Porcentaje, calificación numérica Desempeño de las actividades laborales o tareas en el hogar Habilidad para llevar a cabo aquellas actividades que permitan la realización de un empleo y la manutención de un hogar. Cualitativa nominal Porcentaje, calificación numérica 28 Consideraciones Éticas Se aplica un cuestionario a cada paciente, en ningún momento se realizará intervención por parte del investigador. A cada paciente se le otorga carta de invitación al estudio y se realiza una lista de cotejo antes de aplicar el cuestionario final. Resultados En la presente investigación originalmente se seleccionaron 102 pacientes para la población, sin embargo se descartaron 10 por no cumplir con los criterios de inclusión dejando un total de 92 individuos, el 60% de la población fueron mujeres y el 40 % fueron hombres, el inérvalo de edades fue de 25 a 70 años de edad y la herramienta de evaluación fue el índice de discapacidad Oswestry en aplicación con modalidad de pre test y post test posterior al tratamiento recomendado por medicina física y rehabilitación, se compararon los resultados mediante una prueba t de student con una alfa de .05. Ho: Después de realizar los ejercicios recomendados por medicina física y rehabilitación, no existe algún cambio estadísticamente representativo en la evaluación del índice de discapacidad Oswestry. Ha: Después de realizar los ejercicios recomendados por medicina física y rehabilitación, existe un cambio estadísticamente representativo en la evaluación del índice de discapacidad Oswestry. 0 10 20 30 40 50 60 70 80 0 edad femenino masculino 29 Prueba t para dos muestras suponiendo varianzas iguales Variable 1 Variable 2 Media 51.4835165 37.4835165 Varianza 228.608059 228.608059 Observaciones 91 91 Varianza agrupada 228.608059 Diferencia hipotética de las medias 0 Grados de libertad 180 Estadístico t 6.24579846 P(T<=t) una cola 1.4781E‐09 Valor crítico de t (una cola) 1.65336301 P(T<=t) dos colas 2.9561E‐09 Valor crítico de t (dos colas) 1.97323078 0 10 20 30 40 50 60 70 80 90 1 3 5 7 9 11 13 15 17 19 21 23 25 27 29 31 33 35 masculino prueba 1 prueba 2 30 En el estudio original se administró el cuestionario a 22 pacientes dos veces consecutivas con un intervalo de 24 horas para estudiar la fiabilidad de los resultados del cuestionario. La reproductibilidad fue de r = 0,99. Los autores reconocen que en tan solo 24 horas el resultado puede incluir un efecto memoria, pero al aumentar el intervalo test – retest influiría en los resultados la evolución natural de los síntomas.(18) Una pregunta obligada para la interpretación de los resultados es ¿cuándo es relevante un cambio en la puntuación? ¿A partir de qué porcentaje es una mejora significativa? Los estudios de sensibilidad a los cambios de la escala de incapacidad por dolor lumbar de Oswestry estiman entre 4 y16% la mínima diferencia clínicamente relevante (15% para la FDA americana). En una publicación de 2005 los autores cifran el mínimo cambio detectable, con una fiabilidad del 90%, para estar seguro que un paciente con dolor lumbar crónico ha experimentado una mejoría sea, al menos, de 10 puntos. (20%) para que sea clínicamente significativo (4). Muchos nos sentimos más cómodos con el análisis de movimiento porque es un parámetro más objetivo, sin embargo, en el sistema de evaluación McKenzie los test físicos se correlacionan con el ODI, pero no con el rango de movimiento (5). Los “centralizadores” muestran una mejora del Oswestry (36). La escala Oswestry se ha comparado con Roland-Morris en varios estudios con un total de n = 500 y una correlación de = 0,77. ODI tiende a puntuaciones más altas por lo que se considera que tiene un efecto techo más alto que R-M. El efecto techo sucede cuando el paciente sigue empeorando a pesar de haber obtenido la máxima puntuación y, por tanto, la escala no detecta los cambios. 0 10 20 30 40 50 60 70 80 90 1 3 5 7 9 1113151719212325272931333537394143454749515355 femeninoprueba 1 prueba 2 31 Sin embargo, ODI es menos sensible en pacientes menos incapacitados debido a su efecto suelo. El efecto suelo sucede cuando el paciente sigue mejorando a pesar de haber obtenido la mínima puntuación y, por tanto, la escala no detecta los cambios. Por tanto, Oswestry constituye la mejor opción para pacientes con mayor afectación (incapacidad moderada-intensa) y Roland-Morris se recomienda en pacientes con menor limitación funcional.(14,15,18) Discusión Uno de los principales obstáculos al realizar el presente trabajo consistió en la obtención de la muestras pues los pacientes del servicio de servicio de Medicina Física y rehabilitación del Hospital regional “1o de Octubre” son itinerantes, además de la falta de apego al tratamiento clínico, causo retraso en la formación del grupo de estudio. El hospital cuenta con un programa de ejercicios basados en la aplicación de las técnicas terapéuticas de Williams y Mckenzie, de esta manera se pretende fortalecer grupos musculares abdominales y paravertebrales, aportando estabilidad en columna lumbar, pero no podíamos estar seguros que esto mejoraría la funcionalidad de los pacientes lo cual les permitiría optimizar sus actividades cotidianas y su desarrollo laboral. Para conocer este elemento lo ideal fue el índice de discapacidad de Oswestry ya que evalúa la mejoría en funcionalidad de actividades diarias como bipedestación, dolor, vida sexual, entre otras, además de ser catalogada como gold estándar en lumbalgia crónica mecano postural. Debido a la complejidad de la prueba fue necesaria la aplicación directa de un médico del servicio el cual explicaba los ítems adaptándose al nivel socio cultural de los pacientes. A partir de este estudio de investigación podrían ser reevaluados elementos como el aprendizaje de los ejercicios y el mantenimiento de la funcionalidad de la población estudiada en periodos de tiempo establecidos, con la finalidad de enriquecer este estudio. Conclusiones Se encontró que la población más vulnerable a padecer lumbalgia crónica mecano postural fue del sexo femenino, esto puede estar condicionado a que la mayor parte de la población de estudio pertenece a este género. La población masculina tuvo menor incidencia aún cuando la actividad laboral de la muestra era eminentemente de carga y esto se puede relacionar con el descuido y desatención a su salud. 32 Se encontraron diferencias estadísticamente significativas en el resultado del índice de discapacidad Oswestry, mostrando una mejoría importante en cuanto a la funcionalidad de los pacientes, reportándose menores limitaciones. Tras el proceso de exploración evaluativa fue posible encontrar efectividad en el uso de la rutina de ejercicio practicada en el servicio de Medicina Física y rehabilitación del Hospital Regional “1o de Octubre” ISSSTE para el tratamiento de la lumbalgia crónica mecano postural. 33 Bibliografía 1. Cucurullo S, Physical Medicine and Rehabilitation Board Review, Demos, E.U.A. 2004. 2. Gutenbrunner C, Ward A, Chamberlain M, White book on Physical and Rehabilitation Medicine in Europe The UEMS PRM Section and Board, and the Académie Européene de Médecine de Réadaptation. 2007. 3. Cooper G, Essential Physical Medicine and Rehabilitation, Humana Press Inc, E.U.A. 2006. 4. Buckup K, Clinical Test for the musculoskeletal system, Georg Thieme Verlag, Alemania 2004. 5. Knudson D, Fundamentals of Biomechanics, Springer, E.U.A. 2007 6. Low Back Pain. Bulletin of the World Health Organization 2003, 81 (9). 7. Miralles R, Biomecánica de la columna, Rev Soc Esp Dolor 2007:8:2-8. 8. 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