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UNIVERSIDAD NACIONAL AUTÓNOMA 
DE MÉXICO 
FACULTAD DE MEDICINA 
DIVISiÓN DE ESTUDIOS DE POSGRADO E INVESTIGACiÓN 
SECRETARIA DE SALUD 
INSTITUTO NACIONAL DE PEDIATRIA 
QUILOTÓRAX CONGÉNITO: EXPERIENCIA EN UN HOSPITAL DE 
TERCER NIVEL 
Y REVISiÓN DE LA LITERATURA 
TESIS 
PARA OBTENER EL TITULO DE 
ESPECIALISTA EN PEDIATRíA 
PRESENTA: 
DRA. MARíA ANTONIETA CABRERA HERNÁNDEZ 
TUTOR: 
INP DR. HÉCTOR MACíAS AVILÉS 
MÉXICO, D.F. 2015 
 
UNAM – Dirección General de Bibliotecas 
Tesis Digitales 
Restricciones de uso 
 
DERECHOS RESERVADOS © 
PROHIBIDA SU REPRODUCCIÓN TOTAL O PARCIAL 
 
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reproducción, edición o modificación, será perseguido y sancionado por el 
respectivo titular de los Derechos de Autor. 
 
 
 
QUILOTÓRAX CONGÉNITO: EXPERIENCIA EN UN HOSPITAL DE 
TERCER NIVEL 
Y REVISIÓN DE LA LITERATURA 
D LEJAN O SERRANO SIERRA 
PROFESOR TITULAR DEL CURSO DE 
ESPECIA ZACION EN PEDIATRIA 
SAURA ROSAS VAA(f, 
ORA DE ENSEÑ 
DR. MANUEL RIQUE FLORES LANDERO 
• 
JEFE DEL DEPARTAMENTO DE PRE Y POSGRADO 
DR. HECTOR MACiAS AVILES 
TUTOR DE TESIS 
/?;tuUéV (1~¿ & 
DRA. PATRICIA DEL CARMEN CRAVIOTO QUINTANA , 
ASESOR METODOLOGICO 
FIS. MAT:'f. 'f~JÁ LVÁN CASTILLO 
íNDICE 
1. ANTECEDE NTES ...... .......... .......... .. ..................... .. ......... ....... .. .. . 3 
a. EPI DEM 10LOG lA ....... ......... .. ................... .. ........................ 5 
b. DE FI N I ClÓN ... ... ........ .. ......... .. ...... .................................. .. .. 6 
e. CUADRO CLíNICO Y DIAGNÓSTICO .... ............... .. .. ........ . 7 
d. TRA T AM lENTO .................... ... ... ........................... .... ....... . 9 
2. PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA ...... ...... ... ........ .. .. ........... 13 
3. J USTI FI CACI ÓN ....... .......................... ... ... ... .. .... ..... ... ......... ... .. . 14 
4. M ETO DO LOG íA ....... ......... ..... ... ... .. ... ............. .................... ... .. 15 
a) MÉTODOS DE LA REVISIÓN .. .... ......... .... .. .. ... .. .... .. .. ..... 1S 
b) VARIAB LES DEL ESTU D 10 ..................... ........................ 16 
e) CARACTERISTICAS DE ESTUDIOS INCLUIDOS ........... . 19 
d) REVISiÓN DE EXPEDIENTES ......................... .. .... .. .... .. . 28 
S. R ESU L T ADOS ................................. ...... .. .. .. .. ... .......... ... .. ........ 33 
6. DISCUSiÓN Y CONCLUSIONES .. .. .. .. ............................ .. ....... 36 
7. BI BlIOG RAF íA ...... ................. ........ .. .. ................... .................. 38 
http://www.tcpdf.org
UNIVERSIDAD NACIONAL AUTÓNOMA DE MÉXICO 
FACULTAD DE MEDICINA 
 
 
DIRECCIÓN DE ESTUDIOS DE POSGRADO E INVESTIGACIÓN 
SECRETARÍA DE SALUD 
INSTITUTO NACIONAL DE PEDIATRÍA 
 
 
TESIS 
QUILOTÓRAX CONGÉNITO: EXPERIENCIA EN UN HOSPITAL DE TERCER NIVEL 
Y REVISIÓN DE LA LITERATURA 
 
 
 
QUE PARA OBTENER EL TÍTULO DE ESPECIALIDAD EN 
PEDIATRÍA 
 
PRESENTA: 
 
DRA. MARÍA ANTONIETA CABRERA HERNÁNDEZ 
MÉDICO RESIDENTE TERCER AÑO PEDIATRÍA 
 
 
 
TUTOR DE TESIS: 
DR. HÉCTOR MACÍAS AVILÉS 
MÉDICO ADSCRITO SERVICIO DE NEONATOLOGÍA 
INSTITUTO NACIONAL DE PEDIATRÍA 
 
 
ASESORES METODOLÓGICOS: 
DRA. PATRICIA CRAVIOTO QUINTANA 
FIS. MAT. FERNANDO GALVÁN CASTILLO 
- 2 - 
ÍNDICE 
 
1. ANTECEDENTES 
a. DEFINICIÓN 
b. EPIDEMIOLOGIA 
c. CUADRO CLÍNICO Y DIAGNÓSTICO 
d. TRATAMIENTO 
 
2. PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA 
 
3. JUSTIFICACIÓN 
 
4. OBJETIVO 
 
5. METODOLOGÍA 
 
6. ANÁLISIS ESTADÍSTICO 
 
7. RESULTADOS 
 
8. DISCUSIÓN Y CONCLUSIONES 
 
9. BIBLIOGRAFÍA 
- 3 - 
ANTECEDENTES 
 
El descubrimiento del sistema linfático se atribuye a Gaspar Aselli en 1622. Antes de ello, todas las 
funciones nutritivas y absorbentes se atribuían a las venas; de tal modo que Erasistrato y Herófi 
describieron los vasos lácteos del mesenterio en las ovejas, pero los consideraron tubos que 
formaban parte del sistema venoso general. Galeno negó su existencia, asegurando que los jugos de 
la digestión eran tomados por las venas y acarreados al hígado, donde se transformaban en sangre. 
Desde esa época hasta el siglo XVI no hubo anatomista que se interesara por los vasos linfáticos; 
por el contrario, todos aceptaron sin contradicción las ideas de Galeno. En 1563, Bartolomé 
Eustaquio, mientras estudiaba la vena ácigos, descubrió el conducto torácico; lo describió con 
exactitud pero interpretó equivocadamente su naturaleza, pues lo consideró una vena nutricia del 
pecho. Después del descubrimiento del sistema linfático, se realizaron numerosas observaciones en 
animales domésticos y se demostró su naturaleza vascular. Aselli, a pesar de haber identificado el 
sitio real de la absorción intestinal, no vio con exactitud el trayecto de los quilíferos y afirmó 
equivocadamente que terminaban en la vena porta. Otros como Harvey y Riolano combatieron este 
descubrimiento, logrando que Aselli fuera tenido por visionario y los quilíferos, como creación 
fantástica. Posteriormente, en 1628, Gassendi demostró por primera vez la existencia de estos vasos 
en el hombre y Juan Pequet, en 1649, descubrió que los quilíferos, después de atravesar los 
ganglios mesentéricos, convergen en un reservorio ubicado delante de las vértebras lumbares, la 
cisterna quilífera. (12). 
 
ANATOMÍA DEL CONDUCTO LINFÁTICO 
 
El conocimiento de la anatomía del sistema linfático torácico es importante para el diagnóstico y 
tratamiento del paciente con quilotórax. El conducto torácico se forma por la coalescencia de los 
linfáticos intestinales y lumbares a nivel de la cisterna quilífera, una dilatación anterior al cuerpo de la 
segunda vértebra lumbar, detrás de la aorta y que entra a la cavidad torácica a través del hiato 
diafragmático entre la vértebra torácica 10 y 12 detrás del esófago y del pericardio (se separa del 
pericardio mediante un receso en la cavidad pleural derecha. A nivel de T5 y T6 el duco torácico 
cruza al lado izquierdo para entrar al mediastino superior, ascendiendo detrás del arco aórtico. 
Después el ducto emerge del tórax a través de la abertura torácica superior pasando a través del 
cuello donde forma un arco que es anterior al músculo escaleno solo unos centímetros por arriba de 
la clavícula izquierda, a nivel de C7. Entonces se vuelve lateral, y entra a la circulación a nivel de la 
unión de la vena yugular interna y la subclavia izquierdas. 
- 4 - 
 
Las variaciones anatómicas son comunes. Duplicaciones, triplicaciones y otras se presentan en 
aproximadamente 35-50% de la población (13). También existe una amplia red de linfáticos 
colaterales, tanto que el conducto torácico puede unirse en cualquier punto a ellos durante su 
trayecto cervical y torácico. 
 
El conducto torácico, drena el proveniente de las extremidades inferiores, abdomen, intestinos, tórax 
izquierdo, cuello y la extremidad superior izquierda. El flujo linfático del lado derecho de la cabeza, 
cuello y tórax, extremidad derecha superior, corazón derecho y la superficie convexa del hígado 
drena a través del conducto linfático derecho y no contiene quilo. (14) 
 
La importancia clínica del conocimiento anatómico es la identificación de la localización de la posible 
lesión del conducto torácico y sus posibles etiologías. La ruptura del ducto entre el diafragma y T5 
usualmente produce quilotórax derecho; si la lesión es por arriba de T5 el quilotórax se presentará 
del lado izquierdo. (14,15) Cuando el quilotórax es bilateral, la lesión suele estar localizada donde el 
conductotorácico cruza la línea media a nivel de T5 o bien está asociado a malformaciones linfáticas 
sistémicas. (13). 
 
Por último, el conducto torácico tiene numerosas válvulas que llevan el quilo de manera proximal. El 
flujo depende de la cantidad de grasas ingeridas en la dieta absorbidas a nivel intestinal, y es 
impulsado mediante la compresión intermitente de la cisterna quilífera durante la respiración, 
especialmente con el incremento de la presión intraabdominal durante la inspiración. (13) 
 
- 5 - 
EPIDEMIOLOGIA 
 
Aunque infrecuente, el quilotórax es la causa más común de derrame pleural en los primeros días de 
vida; sin embargo, su incidencia es desconocida. La mortalidad de este proceso es elevada (20-50%) 
(4). La acumulación de quilo en el espacio pleural ocurre como consecuencia la ruptura, laceración 
o compresión del conducto torácico (1). 
 
Embriológicamente el conducto torácico se forma por un proceso de anastomosis y obliteraciones 
múltiples a partir de una estructura bilateral primitiva. Un fallo en la correcta anastomosis de los 
diversos segmentos provoca la pérdida de quilo al espacio pleural causando el quilotórax congénito 
primario (4), mismo que puede manifestarse comúnmente como parte de hidrops fetal de causa no 
inmune como resultado del desarrollo anormal de los vasos linfáticos y pudiendo resultar en pérdida. 
 
La causa de quilotórax neonatal en ausencia de anormalidades linfáticas no es clara. Mientras se 
considera quilotórax congénito, el mecanismo se cree traumático con ruptura del ducto torácico por 
hiperextensión de la columna o buen secundario al incremento de la presión venosa durante el 
nacimiento, especialmente durante partos complicados. (4) 
 
Por otro lado, con más frecuencia, el quilotórax en el periodo neonatal es consecuencia de una 
complicación posoperatoria (quilotórax secundario), principalmente posterior a cirugías 
cardiotorácicas o por trombosis de la vena subclavia izquierda o derecha; otras causas incluyen 
malformaciones congénitas del sistema linfático pulmonar o torácico, o ser una manifestación clínica 
de una malformación linfática generalizada con ectasia y/o proliferación anormal de los linfáticos 
(linfangiomatosis sistémica), obstrucción de la vena cava superior, o tumores malignos de mediastino 
o pleura, así como síndromes dismorfológicos como síndrome de Turner o de Noonan y trisomía 21. 
(1) 
 
- 6 - 
DEFINICIÓN 
 
Se define “Quilo” al fluido de aspecto lechoso, líquido no inflamatorio, 
alcalino y bacteriostático compuesto de grasa (colesterol y quilomicrones), 
electrolitos, proteínas, glucosa y abundantes linfocitos absorbidos por las 
células intestinales y transportados por los canales linfáticos que 
posteriormente se convierten en conducto torácico y se vierten a la 
circulación sistémica. (Imagen 1) (1) Aproximadamente 2.4 litros de quilo 
son transportados por el sistema linfático cada día, por lo que el daño o 
ruptura en el conducto torácico puede llevar a un acúmulo rápido de quilo 
en el espacio pleural (3). 
 
Lo anterior, se refiere a la definición de quilo en adultos, misma que, como se hace notar, está bien 
establecida en la bibliografía. Sin embargo, en niños no ha hay una definición clara, y con frecuencia 
se aplican los criterios diagnósticos definidos en adultos. En 1999, Bütikker et al publicaron un 
estudio en el que establecen las guías para el diagnóstico y el tratamiento del quilotórax en pacientes 
pediátricos. Se establecieron como criterios diagnósticos de quilotórax los derrames en los que el 
análisis del líquido pleural muestra un contenido de triglicéridos > 1,1 mmol/l (> 100 mg/dl), > 1.000 
células/μl, y un predominio de linfocitos (> 80%). Esta definición es simple y en la mayoría de los 
casos permite un diagnóstico definitivo. (2) Otras características clásicas del quilo incluyen la 
presencia de proteínas en valores superiores a 20 g/dl, su pH alcalino y cultivos estériles. 
 
Es importante resaltar que, en base a los estudios de Bütikker, el quilo adquiere esta apariencia sólo 
si los quilomicrones están presentes, y que las características del líquido varían con el tipo de 
alimentación. Sin ingesta enteral, el quilo suele ser de color claro o amarillo. Por otro lado, no todos 
los derrames que adquieren ese aspecto macroscópico lechoso se corresponden finalmente con 
quilotórax, por lo que, se trata de una característica prescindible como criterio diagnóstico. (2) 
 
 
Imagen 1. Quilotórax. 
Aspecto macroscópico. (2) 
- 7 - 
CUADRO CLÍNICO Y DIAGNÓSTICO 
 
La presencia del derrame pleural puede observarse antes del nacimiento mediante ecografía fetal. El 
segundo trimestre es un período crítico en el desarrollo pulmonar, de manera que el hallazgo de 
derrame pleural significativo antes de las 28 semanas de gestación conlleva un riesgo elevado de 
hipoplasia pulmonar, que tras el nacimiento puede condicionar una insuficiencia respiratoria grave, a 
menudo de mal pronóstico. Además de la hipoplasia pulmonar, el quilotórax congénito que se inicia 
prenatalmente puede condicionar la aparición de hidropesía no inmunitaria por insuficiencia cardíaca 
congestiva, secundaria a la compresión de las cavidades cardíacas y a la afectación del retorno 
venoso por compresión de la vena cava, y a la hipoproteinemia fetal secundaria a las pérdidas 
proteicas a través del quilotórax. Finalmente, la compresión intratorácica y esofágica puede dificultar 
la deglución fetal y favorecer la presencia de polihidramnios, que aumenta el riesgo de prematuridad. 
(3) 
 
Durante el periodo posnatal, la presencia de quilo en el espacio pleural debe sospecharse si se 
presenta un extenso acúmulo de líquido en la cavidad pleural en el neonato, especialmente después 
de una cirugía cardiotorácica o mediastinal, pacientes con masas mediastinales o malformaciones 
linfáticas mayores. (6,7) 
 
Clínicamente, disnea y tos son las manifestaciones más frecuentes (10). La pérdida rápida de 
líquido, se asocial a hipovolemia y dificultad respiratoria conforme el espacio pleural es llenado de 
quilo. Los pacientes pueden desarrollar desnutrición debido a la pérdida de proteínas, grasas y 
vitaminas. La pérdida de electrolitos puede condicionar hiponatremia e hipocalcemia. La pérdida 
significativa de inmunoglobulinas, linfocitos T y proteínas al espacio pleural condicionan 
inmunosupresión (7,8). Esta inmunosupresión predispone al paciente a infecciones oportunistas a 
pesar de que el quilotórax por sí mismo es bacteriostático. (9) Fármacos como digoxina y 
amiodarona pueden tener efecto subterapéutico al perderse a través del sitio de fuga de quilo. (10). 
 
La radiografía de tórax permite identificar el acumulo de líquido pleural, permitiendo estimar el 
tamaño y la localización del mismo. (7) El quilotórax puede ser unilateral, ya sea derecho (50%) o 
izquierdo (33.3%), o bien bilateral (16.66%) dependiendo de la localización del sitio de fuga. El 
drenaje del ducto por arriba de la quinta vértebra torácica resulta en el acúmulo de quilo del lado 
izquierdo, mientras que la lesión del ducto por debajo de dicho nivel resulta en acúmulo derecho de 
quilo. (11) 
- 8 - 
 
El uso de la radiografía en decúbito o el ultrasonido torácico permiten determinar si el líquido se 
encuentra libre en el espacio pleural (simple o no tabicado) o bien si está organizado. (7) 
 
El diagnóstico de quilotórax se confirma mediante el estudio del líquido pleural, mediante la 
realización de toracocentesis, un procedimiento sencillo y seguro que permite obtener el líquido 
presente en el espacio pleural, mismo que debe ser procesado para su análisis bioquímico, donde en 
base a los criterios ya mencionados, la presencia de quilomicrones es el hallazgo clave mediante la 
tinción de Sudan III (7), así vale la pena recordar que los quilomicrones son moléculas protéicas 
complejas que se sintetizan en el yeyuno yúnicamente se encuentran en la circulación de manera 
postprandial con un pico de tres horas posterior a la ingesta de alimentos. (10,11) 
 
Una vez que el diagnóstico se ha establecido mediante el estudio bioquímico del líquido, si no se 
encuentra una causa obvia (como por ejemplo una cirugía cardiaca o traumatismo) se deben 
investigar los vasos linfáticos para identificar el sitio de la fuga de quilo mediante estudios de imagen 
como la tomografía computarizada, linfangiografía o bien mediante una linfoescintografía. (8) 
 
- 9 - 
TRATAMIENTO 
 
El tratamiento del quilotórax es independiente de la causa, sin embargo, ninguna medida ha sido 
sujeta a estudios aleatorizados. La mayoría del conocimiento del tratamiento de quilotórax en niños 
se ha obtenido de series de casos. 
 
1. Drenaje 
El paso inicial en todos los casos de quilotórax es la aspiración del líquido pleural. La primera 
toracocentesis generalmente tiene propósitos diagnósticos, sin embargo, si la cantidad de quilo es 
lo suficientemente grande para comprometer la respiración, y ó si la colección es recurrente, el 
tubo pleural debe permanecer para permitir el drenaje continuo en el espacio pleural. En algunos 
centros, la conducta se ha normado en base al drenaje diario de quilo, considerando como falla 
aquel drenaje mayor de 10ml/kg/día después de 4 semanas. (3) 
 
2. Nutrición 
El objetivo del tratamiento del quilotórax es reducir el flujo de quilo a través del ducto torácico 
esperando la resolución espontánea. Entonces, es común utilizar una dieta libre de grasas 
adicionada con triglicéridos de cadena media, los cuales se componen de ácidos grasos saturados 
con átomos de carbono en las posición 8 y 12 que son absorbidos de manera directa a la 
circulación del sistema porta. Una medida más agresiva es el reposo intestinal absoluto mediante 
nutrición parenteral total. (16) 
 
3. Somatostatina y sus análogos 
La somatostatina es una hormona endógena con un amplio rango de acciones que incluyen el 
sistema gastrointestinal. El ocreótide es un análogo sintético y de larga acción de la 
somatostatina. (17). Somatostatina y ocreótide son los únicos fármacos utilizados con éxito en el 
tratamiento de quilotórax en niños. (17, 18,19); sin embargo, actualmente, no existe un consenso 
sobre cuándo es el momento indicado para iniciar el tratamiento con dichos agentes, cuyo 
mecanismo de acción aún no es claro. La mejor explicación es la reducción del flujo sanguíneo 
intestinal y vasoconstricción de la circulación esplácnica disminuyendo la producción de linfa, y por 
tanto, de quilo. (19,20). También, disminuyen la motilidad gastrointestinal, el volumen gástrico, las 
secreciones biliares y pancreáticas, lo cual disminuye el flujo linfático hacia el conducto torácico 
(17,18). En caninos, el ocreótide disminuye la absorción de triglicéridos, lo cual puede ser un 
mecanismo de acción relevante en humanos (21). El ocreótide tiene la ventaja sobre la 
- 10 - 
somatostatina de tener una vida media más larga, mayor potencia y la opción de su administración 
subcutánea. (20). El tiempo de inicio del tratamiento y su duración en pacientes pediátricos aún se 
desconoce. Algunos autores argumentan que el uso del ocreótide de manera temprana puede 
reducir la pérdida de líquidos y electrolitos, así como las complicaciones y puede permitir el retiro 
temprano de drenajes pleurales; sin embargo, el nivel de evidencia sobre esta recomendación en 
pobre. 
 
Existen algunas formas de administración y dosis tanto de ocreótide como de somatostatina a 
considerar. 
 
Ambos medicamentos se pueden administrar mediante infusión continua o bien en bolos 
intravenosos dos veces al día. Como ya se mencionó el ocreótide, también se puede administrar 
de manera subcutánea. 
 
En cuanto a la dosis a utilizar, en el estudio de Roehr y colaboradores en 2006 (18), se realizó una 
revisión sistemática sobre el uso de somatostatina y ocreótide en el tratamiento de quilotórax en 
niños, donde se utilizó en treinta y cinco paciente somatostatina en infusión continua a una dosis 
promedio de 204 mg/kg/día (10 – 288 mg/kg/día) y en 25 ocreótide en infusión intravenosa a dosis 
media de 68 mg/kg/día (7.2 - 240 mg/kg/día). La duración del tratamiento en promedio fue de 9.5 
días para somatostatina en comparación de 7 días para los pacientes que usaron ocreótide. 
 
La reducción del flujo linfático es evidente en el tercer y sexto día después del inicio del 
tratamiento (22). 
 
Tanto somatostatina como ocreótide se consideran fármacos seguros, con pocos efectos 
secundarios, los cuales incluyen: hiperglucemia, hipotiroidismo, calambres, náusea, diarrea, 
enterocolitis necrotizante y falla hepática. (20). 
 
Se han descrito otros tratamientos en casos únicos en adultos que incluyen óxido nítrico, 
ventilación con presión positiva al final de la espiración alta y epinefrina. Este último es una droga 
simpaticomimética que se ha usado en un número reducido de adultos para el manejo de 
quilotórax secundario posquirúrgico sin reporte de efectos secundarios, y actúa mediante la 
contracción del músculo liso lo que disminuye el flujo de quilo al conducto torácico (23). 
- 11 - 
La respuesta al tratamiento médico del quilotórax tarde semanas, la mayoría de las series 
reportadas en niños recomiendan de 2 a 4 semanas de tratamiento antes de considerar el 
tratamiento quirúrgico. 
 
Ninguno de los tratamientos de quilotórax en niños es exitoso en más del 80% de los casos 
reportados, incluyendo los casos de pacientes con quilotórax secundario posterior a cirugía 
cardiotorácica. (21-24) 
 
4. Cirugía 
 
El tratamiento quirúrgico debe considerarse cuando el tratamiento médico del quilotórax ha fallado 
en la reducción del flujo de quilo. No hay un consenso actual sobre el tiempo apropiado para 
realizar la cirugía. La mayoría de los autores recomiendan de dos a cuatro semanas de 
tratamiento médico, (14) sin embargo, la cirugía temprana se puede considerar en pacientes en 
los que se ha identificado el sitio de la lesión del conducto torácico y el flujo de quilo es alto. 
 
Se han descrito numeroso abordajes quirúrgicos para la ligadura del conducto torácico, a pesar de 
que las comparaciones son difíciles debido a las numerosas etiologías y al uso concomitante de 
pleurodesis ya sea química o quirúrgica. Si el sitio de la ruptura del conducto torácico es 
identificado, el tratamiento mediante la ligadura directa del conducto torácico está indicado como 
tratamiento definitivo. (13,14) 
 
Recientemente la toracoscopía video-asistida se ha recomendado por su baja tasa de 
complicaciones y mejores índices de costo-efecto (25). 
 
Otro abordaje es la obliteración del espacio pleural, tanto de manera química (tetraciclinas, talco, 
iodopovidona) como de manera quirúrgica. Este tratamiento ha sido empleado de manera efectiva 
en casos donde la dieta con TCM y el uso de ocreótide han fallado. (26) 
 
Los cortocircuitos pleuroperitoneales proveen otra forma de drenaje del quilo del espacio pleural y 
tienen la ventaja de evitar la pérdida del quilo. Los cortocircuitos son conexiones de un vía de 
manera subcutánea entre la pleura y el peritoneo. Se han considerado seguras y efectivas en el 
tratamiento de quilotórax persistente en niños. (27). Hasta el momento, no hay una guía publicada 
sobre el uso de esta terapéutica en niños con quilotórax refractario. 
- 12 - 
 
Otros abordajes incluyen la embolización percutánea transabdominal del conducto torácico 
dirigida por fluoroscopía con platino. (28) 
 
En los casos de quilotórax severo que llevan a hidrops fetal, el tratamiento antenatal mediante 
toracocentesis intrauterina o mediante la inserción de un cortocircuito pleuro-amniótico se debe 
considerar. (29) 
 
La pleurodesis con OK-452 puede prevenir la hipoplasia pulmonar y mejorar la función respiratoria 
al nacimiento. (30) 
 
Tambiénse ha usado radioterapia en el contexto de pacientes con malformaciones linfáticas 
complejas y quilotórax secundario. (31). 
 
- 13 - 
PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA 
 
El síndrome de dificultad respiratoria neonatal constituye una de las patologías más frecuentes 
durante el primer mes de vida caracterizado por aumento del esfuerzo respiratorio asociado a 
ausencia de murmullo vesicular en el hemitórax afectado y matidez a la percusión ipsilateral. 
 
El quilotórax congénito es una entidad nosológica rara. En México, desconocemos su incidencia, 
prevalencia y, en consecuencia, mortalidad. Afecta a pacientes pediátricos dentro del periodo 
neonatal, y, aunque ya se conoce su etiología, no constituye una sospecha diagnóstica común, 
teniendo además múltiples tratamientos. 
 
El presente trabajo pretende responder y aportar información a la comunidad médica pediátrica en 
relación a las siguientes preguntas de investigación: 
 
¿Cuáles son las características clínicas de pacientes con quilotórax congénito en el Instituto Nacional 
de Pediatría? 
¿Cuál es el tratamiento ideal? 
¿Qué opciones terapéuticas se utilizan en el Instituto Nacional de Pediatría? 
 
 
- 14 - 
JUSTIFICACIÓN 
 
En el Instituto Nacional de Pediatría se proporciona asistencia en salud de alta especialidad con gran 
calidad, por lo que es nuestra misión proporcionar modelos de atención aplicables a las necesidades 
priorizadas de la población nacional. 
 
En México, 63% de la mortalidad infantil, ocurre en el periodo neonatal y son las afecciones 
originadas en el periodo perinatal aquellas que explican la mitad de las defunciones infantiles. La 
primera causa de muertes en el periodo neonatal es la dificultad respiratoria (32), síndrome de 
etiología múltiple y donde se engloba de manera general al quilotórax congénito. 
 
La presente investigación pretende que, a pesar de que el quilotórax congénito no constituye una 
entidad nosológica de alta sospecha clínica que representa una afección potencialmente mortal, 
esparcir el conocimiento de la patología que, a su vez, permitirá realizar un diagnóstico temprano, 
aplicar el tratamiento adecuado y oportuno que, al impedir serias complicaciones metabólicas, 
inmunológicas y nutricionales en el paciente, proporcionando al médico pediatra, la capacidad de 
brindar a sus pacientes atención de calidad con los mejores resultados posibles y disminuyendo la 
mortalidad infantil, problema prioritario nacional y que constituye uno de los objetivos del nuevo 
milenio aplicable a todos los niveles de atención en la salud nacional. 
 
 
 
 
OBJETIVO 
 
Determinar la frecuencia, características clínicas y estrategias de tratamiento utilizadas en pacientes 
con quilotórax congénito, así como la evolución de los mismos en pacientes del Instituto Nacional de 
Pediatría, comparando sus resultados con los reportados en la literatura internacional. 
- 15 - 
METODOLOGÍA 
 
MÉTODOS DE LA REVISIÓN 
 
La primera fase del estudio, consistió en la revisión bibliográfica internacional, teniendo como fuentes 
de información los principales buscadores de literatura médico: PubMed, EBSCO, ELSEIVER, 
ScienceDirect, MedicLatina, COCHRAINE, siendo introducidos los términos quilotórax, quilotórax 
congénito, ocreótide. Una vez obtenidos los artículos, la información se organizó en un cuadro 
cualitativo el orden de mayor a menor evidencia, describiendo las características de cada ensayo 
clínico, evaluando su calidad metodológica, comparando resultados y finalmente se presenta una 
discusión sobre la evidencia encontrada. 
 
En la segunda parte del estudio, se realizó la búsqueda de los casos clínicos reportados con 
diagnóstico de Quilotórax congénito en el Instituto Nacional de Pediatría de 2000 a 2013; se realizó 
la revisión de expedientes y se organizó la información en un cuadro cualitativo exponiendo las 
variables de interés para la revisión, para posteriormente ofrecer la discusión de la información 
encontrada. 
 
NIVELES DE EVIDENCIA (32) 
 
- 16 - 
VARIABLES DEL ESTUDIO 
 
Las variables que se incluirán en el presente estudio se enumeran a continuación: 
 
Nombre de la 
Variable 
Definición 
Conceptual 
Tipo de 
Variable 
Medición de la 
Variable 
Edad 
 
Es el tiempo de vida 
desde el nacimiento 
hasta la fecha 
actual. La 
importancia de ésta 
variable es que a 
menor edad de 
aparición de la EI 
en el paciente la 
enfermedad es mas 
deformante y 
limitante 
Intervalo Días 
Sexo Estará acorde a los 
genitales externos 
del paciente. Ésta 
variable es 
importante para 
determinar la 
frecuencia en el 
genero 
Nominal 1= Femenino 
2= Masculino 
Diagnóstico Del griego diag que 
significa a través 
de, gnosis sinónimo 
de conocimiento y 
el sufijo tico que es 
relativo a. 
Es el procedimiento 
por el cual se 
Nominal 1=Diagnóstico 
Oportuno 
 
2= Diagnóstico 
Tardío 
- 17 - 
identifica una 
enfermedad, 
recabando datos 
clínicos, de imagen 
y laboratorio para 
interpretarlos y 
llegar a una 
conclusión 
Tipo de 
Tratamiento 
El tratamiento se 
define como el 
conjunto de medios 
que se utilizan para 
aliviar o curar una 
enfermedad o 
deformidad 
Nominal 1.- Oportuno 
2.-Tardío 
3.- Conservador 
4.-Quirúrgico 
Resultado Se refiere al efecto, 
consecuencia o 
conclusión de una 
acción, un proceso, 
un cálculo, cosa o 
manera en que 
termina algo. 
Nominal 1.-Muy Bueno 
2.-Bueno 
3.-Regular 
4.-Malo 
Tiempo 
transcurrido 
entre la 
resolución del 
quilotórax y el 
inicio de 
alimentación 
enteral 
Cantidad de tiempo 
en el que los 
pacientes recibieron 
alimentación 
Continua Días 
- 18 - 
Tipo de 
alimentación 
Ingestión 
de alimento por 
parte de 
los organismos para 
proveerse de sus 
necesidades 
alimenticias, 
fundamentalmente 
para conseguir 
energía y 
desarrollarse 
Nominal 1= Parenteral 
2= Enteral 
Estancia 
intrahospitalaria 
Indicador que 
refleja la 
permanencia 
promedio de los 
pacientes en el 
hospital 
Continua Días 
Tiempo de 
sobrevida 
Tiempo transcurrido 
desde el 
diagnostico hasta el 
egreso hospitalario 
Continua Días 
Complicación Agravamiento de 
una enfermedad o 
de un 
procedimiento 
médico con una 
patología 
intercurrente, que 
aparece 
espontáneamente 
con una relación 
causal más o 
menos directa con 
el diagnóstico o el 
tratamiento 
aplicado. 
Nominal 1= Sepsis 
2= Infección 
asociada a catéter 
3= Hemorragia 
pulmonar 
4= Neumonía 
intrahospitalaria 
 
 
- 19 - 
CARACTERÍSTICAS DE LOS ESTUDIOS INCLUIDOS 
 
TITULO DISEÑO 
OBJETIVO 
METODOLOGÍA 
ANÁLISIS ESTADÍSTICO RESULTADOS CONCLUSIONES 
AUTOR NIVEL DE 
EVIDENCIA 
CARACTERÍSTICAS DEL 
ESTUDIO 
REVISTA 
The impact of 
chylothorax on neonates 
with repaired 
congenital diaphragmatic 
hernia 
Estudio 
Prospectivo, 
observacional 
tipo cohorte 
Evaluar los 
factores de 
riesgo, 
morbilidad y 
mortalidad así 
como sobrevida 
asociada a 
quilotórax en 
neonatos 
posterior a la 
reparación de 
hernia 
diafragmática 
congénita. 
De Enero de 2007 a Enero de 
2010, se evaluaron neonatos 
nacidos vivos con reparación de 
hernia diafragmática congénita 
unilateral en una base de datos 
prospectiva en varias Instituciones 
para el desarrollo de quilotórax. Se 
diagnosticó quilotórax mediante 
análisis de líquido pleural. Las 
variables del estudio incluyeron 
características de los pacientes, 
tipo de defecto de la hernia 
diafragmática y la severidad de la 
enfermedad, tratamiento del 
quilotórax y la sobrevida. Además, 
se evaluó la relación temporal 
entre el tiempo de la reparación 
de la hernia y el uso de 
oxigenación por membrana 
extracorpórea como factor de 
riesgo para el desarrollo de 
quilotórax. 
 
Las variables clínicas se reportaron 
como porcentajes y representan ± 
desviación estándar. Las variables 
categóricas fueron analizadas con χ2, 
y las variables continuas con la 
prueba tde student. La significancia 
estadística fue considerada como p< 
0.05. Las variables independientes 
se analizaron incluyendo las 
características demográficas de los 
pacientes, comorbilidades 
asociadas, tipo y características de 
la hernia diafragmática congénita, 
evolución hospitalaria, indicadores 
de morbilidad y mortalidad. Se usó 
análisis univariado para determinar 
los factores de riesgo asociados con 
el desarrollo de quilotórax. 
Regresión logísticas multivariable y 
lineal se ajustaron para las variables 
de severidad. Las variables 
inicialmente incluidas en el análisis 
de regresión se identificaron con 
una p<0.20. Este análisis generó 
odds ratios ajustados (aOR) e 
intervalos de confianza del 95%. 
 
De los 1383 pacientes 
evaluados, se diagnosticó 
quilotórax en 4.6% de la 
cohorte. La reparación 
con parche y el uso de 
oxigenación con 
membrana extracorpórea 
(ECMO) fueron factores 
significativos para el 
desarrollo de quilotórax. 
Las probabilidades de 
desarrollar quilotórax se 
incrementaron 
significativamente en 
pacientes con hernia 
diafragmática congénita 
con ECM (aOR 2.6; 95% 
CI: 1.3–4.9) o después del 
uso de la misma (aOR 3.1; 
95% CI: 1.7–5.8). La 
mayoría de los quilotórax 
(83.1%) fueron 
exitosamente tratados sin 
la necesidad de cirugía. 
Los pacientes que 
desarrollaron quilotórax 
tuvieron mayor 
morbilidad, incluyendo 
mayor uso de oxígeno a 
los 30 días y mayor 
estancia intrahospitalaria. 
La sobrevida no se vio 
afectada 
significativamente por el 
desarrollo de quilotórax. 
 
Los factores de riesgo que 
llevan al desarrollo de 
quilotórax, parecen estar 
relacionados con la 
severidad de la 
enfermedad con pacientes 
sometidos a reparación 
con ECMO. A pesar de que 
el quilotórax no contribuye 
a la mortalidad, si afecta la 
morbilidad respiratoria y 
hospitalaria. Por fortuna, 
la mayoría de los 
quilotórax en esta 
población de pacientes 
resolvió únicamente con 
manejo médico. De 
cualquier forma, el 
tratamiento del quilotórax 
asociado a hernia 
diafragmática congénita, 
aún debe ser determinado. 
Shauna M. Levy, Pamela 
A. Lally. 
Journal of Pediatric 
Surgery (2013) 48, 724–
729 
2b 
Revisión de base de 
datos de 55 Instituciones 
de Hernia diafragmática 
congénita (Grupo 
Internacional para el 
estudio de la Hernia 
Diafragmática 
Congénita) realizando 
una cohorte de 
pacientes en tres años 
- 20 - 
 
TITULO DISEÑO 
OBJETIVO 
METODOLOGÍA 
ANÁLISIS 
ESTADÍSTICO 
RESULTADOS CONCLUSIONES AUTOR NIVEL DE 
EVIDENCIA 
CARACTERÍSTICAS DEL ESTUDIO 
REVISTA 
Common Etiologies of 
Neonatal Pleural Effusion 
Estudio 
descriptivo 
observacional 
Retrospectivo 
.Determinar las 
características e 
incidencia de los 
diferentes tipos 
de derrame 
pleural en 
neonatos 
hospitalizados en 
la Unidad de 
Cuidados 
Intensivos de un 
Hospital en 
Taiwan. 
 
Búsqueda retrospectiva en la base de datos 
del hospital de pacientes egresados de la 
unidad de cuidados intensivos del Hospital 
de la Universidad Médica de Chung Shan, 
Taichung, Taiwan, incluyendo a todos los 
pacientes con diagnóstico de derrame 
pleural, quilotórax, hidrotórax, hemotórax 
y empiema de Enero de 1999 a Diciembre 
de 2009. Se diagnosticó derrame pleural 
mediante radiografía de tórax; en la 
mayoría de los pacientes se realizó estudio 
ecográfico para calcular el volumen del 
derramen y dar seguimiento. Se realizó 
toracocentesis para realizar análisis del 
líquido de derrame pleural. Se utilizaron los 
criterios de Buttiker para diagnóstico de 
quilotórax: leucocitos mayores de 1000/ml 
con predominio de linfocitos mayor de 80% 
y triglicéridos mayor de 110 mg/dL. 
Recolección de datos 
y análisis descriptivo 
mediante software 
SPSS versión 16.0. Los 
datos se expresaron 
como mediana y 
número (porcentaje). 
 
Se obtuvieron datos 
de 21 pacientes, 
dividiéndolos en 
derrame pleural 
primario (38%) y 
secundario (62%). 
De los derrames 
pleurales primarios, 
el quilotórax fue el 
más frecuente 
(42.8%). 71% de los 
pacientes requirió 
colocación de tubo 
pleural posterior a 
toracocentesis. Solo 
un paciente requirió 
tratamiento 
quirúrgico. La 
duración del 
derrame fue 
variable (2-4 días). 
La mortalidad fue de 
14.3%, aunque sin 
relación directa con 
el derrame pleural. 
El derrame pleural en la 
etapa neonatal es 
resultado de la 
presencia de quilotórax, 
hidrops fetal, 
extravasación de 
nutrición parenteral de 
un catéter venoso 
central o n catéter 
umbilical, derrame 
paraneumónico, 
insuficiencia cardiaca 
congestiva y otras 
causas menos comunes. 
De manera general se 
tiene un buen 
pronóstico a excepción 
del hidrops fetal, el cual 
se acompaña de un alto 
índice de mortalidad. 
 
Yueh-Ting Shih, Et Al. 
Pediatrics and 
Neonatology (2011) 52, 
251e255 
4 
Se recolectaron de manera 
retrospectiva a todos los neonatos 
que se admitieron en la unidad de 
cuidados intensivos del Hospital de la 
Universidad Médica de Chung Shan, 
Taichung, Taiwan, y que fueron 
egresados con diagnóstico de 
derrame pleural, quilotórax, 
hidrotórax, hemotórax y empiema de 
Enero de 1999 a Diciembre de 2009. 
Se analizaron las características, la 
etiología, tratamiento y resultados. 
 
 
- 21 - 
 
TITULO DISEÑO 
OBJETIVO 
METODOLOGÍA 
ANÁLISIS ESTADÍSTICO RESULTADOS CONCLUSIONES 
AUTOR NIVEL DE 
EVIDENCIA 
CARACTERÍSTICAS DEL 
ESTUDIO 
REVISTA 
Congenital 
chylothorax: 
lymphopenia and 
high risk of neonatal 
infections Estudio 
Observacional, 
retrospectivo 
Describir la 
evolución de 
siete pacientes 
con quilotórax 
congénito con 
enfoque en la 
linfopenia y a las 
complicaciones 
infecciosas. 
Se realizó la revisión 
retrospectiva de los expedientes 
de siete pacientes (4M y 3F) con 
diagnóstico al egreso de 
quilotórax congénito; se realizó 
la búsqueda para determinar la 
forma de presentación, la 
duración, el volumen del quilo, 
la cuenta de linfocitos y su 
diferencia, así como la 
incidencia de infecciones 
tempranas neonatal y 
nosocomiales. 
Se consideró quilotórax al 
líquido pleural con triglicéridos 
mayores de 110mg/dl y 
predominio de linfocitos >70%. 
 
Los datos de 
proporcionaron en 
medianas y porcentajes. 
El análisis de correlación 
se realizó la correlación 
de 
Spearman después de 
excluir una distribución 
normal. 
Un valor de p <0.05 de 
consideró 
estadísticamente 
significativo. 
El análisis estadístico se 
realizó con el SPSS 
software (Versión 10; 
SPSS Inc.). 
La duración de la pérdida de 
quilo se relacionó 
significativamente con una 
mayor duración de linfopenia. 
La duración del drenaje pleural 
fue mayor en los pacientes 
analizados con una media de 
22 días y con mayor cantidad 
de líquido perdido, 
principalmente en la primera 
semana, de aproximadamente 
100ml/kg, con la caída de la 
cuenta linfocitaria al quinto día. 
Sin embargo no se encontró 
relación entre la duración de la 
pérdida de quilo y la cuenta 
mínima linfocitaria. Cuatro de 
los 7 paciente estudiados (57%) 
desarrollaron infecciones 
nosocomiales, representando 
15 a 25% de todas las 
infecciones en la unidad de 
cuidados intensivos neonatales. 
Por lo tanto, la incidencia de 
infecciones es tres veces mayor 
en los pacientes con quilotórax 
congénito, aunque solo 2 de los 
pacientes presentaban 
linfopenia al momento de la 
infección. 
 
El quilotórax congénito 
tratado con drenaje 
pleural continuo se asocial 
a linfopenia y a mayor 
riesgo de infecciones. 
Con el tratamiento 
especializado 
apropiado, el 
pronóstico del 
quilotórax congénito 
es bueno, parece que 
no hay disfunción 
inmune posterior a la 
resolución del 
quilotórax. 
 
A Wasmuth-
Pietzuch, M 
Hansmann, P 
Bartmann and A 
Heep 
Acta Paediatr 93: 
220-224. 2004. 
2b 
 
- 22 - 
 
TITULO DISEÑO 
OBJETIVO 
METODOLOGÍA 
ANÁLISIS 
ESTADÍSTICO 
RESULTADOS CONCLUSIONES 
AUTOR NIVEL DE 
EVIDENCIA 
CARACTERÍSTICAS DEL 
ESTUDIO 
REVISTA 
Quilotórax neonatal: 
etiología, evolución 
y respuesta al 
tratamientoEstudio 
Prospectivo, 
cohorte 
Investigar la 
etiología, curso 
clínico y 
respuesta al 
tratamiento 
del quilotórax 
neonatal. 
Estudio prospectivo en la 
unidad de cuidados intensivos 
neonatales de un hospital 
terciario durante un período 
de 2 años. Se incluyen 22 
recién nacidos vivos seguidos 
durante 6 meses. 
 
Análisis 
descriptivo 
donde se exploró 
la relación de la 
duración del 
quilotórax con 
la etiología e 
incidencia de 
colostasis 
mediante test no 
paramétricos 
(Mann-Whitney y 
Kruskal-Wallis). 
La asociación 
entre la eficacia 
de las 
intervenciones y 
la etiología 
subyacente se 
investigó 
mediante el test 
exacto de Fisher. 
La correlación 
entre las cifras de 
albúmina,linfocitos 
e IgG se estudió 
mediante la Rho 
de Spearman. 
Todos los análisis 
se realizaron con 
el SPSS (versión 
12 para 
Windows). 
Las causas más 
frecuentes: 
 cirugía cardíaca y hernia 
diafragmática con 
incidencia de quilotórax 
del 11,2 % [IC 95 %] y del 
26,6 % (IC 95%: 4,3-40 
%), respectivamente. 
17 pacientes 
respondieron al 
tratamiento médico. 
El octreótide fue eficaz 
en 5 de los 10 pacientes 
en 
que fracasó la NPT. 
No hay asociación 
significativa entre la 
etiología y la respuesta al 
tratamiento. 
 Fallecieron 5 pacientes 
durante los 6 meses de 
seguimiento pero en 
ningún caso la muerte 
fue directamente 
atribuible al quilotórax. 
Debe considerarse una 
cirugía precoz en la 
minoría de pacientes 
que no responden al 
tratamiento médico. La 
etiología es el principal 
determinante de la 
mortalidad. 
Son necesarios estudios 
aleatorizados 
controlados que 
establezcan la eficacia y 
momento de aplicación 
de las diferentes 
opciones terapéuticas. 
C. Copons Fernández, I. 
Benítez Segura, F. 
Castillo Salinas y S. 
Salcedo Abizanda 
An Pediatr (Barc). 
2008;68(3):224-31 
4 
Se aplicó un protocolo 
terapéutico predefinido 
consistente en la 
administración secuencial de 
nutrición parenteral total 
(NPT), octreótide y cirugía. Se 
investigó la influencia de la 
etiología sobre la evolución y 
respuesta al tratamiento. 
 
- 23 - 
 
TITULO DISEÑO 
OBJETIVO 
METODOLOGÍA 
ANÁLISIS 
ESTADÍSTICO 
RESULTADOS CONCLUSIONES 
AUTOR NIVEL DE 
EVIDENCIA 
CARACTERÍSTICAS DEL 
ESTUDIO 
REVISTA 
Quilotórax: 
experiencia en una 
unidad de cuidados 
intensivos 
pediátricos 
Estudio 
descriptivo 
retrospectivo Describir la 
experiencia en el 
manejo de los 
pacientes con 
quilotórax 
ingresados en 
una unidad de 
cuidados 
intensivos 
pediátricos. 
 Buscar factores 
pronósticos de 
respuesta a los 
diversos 
tratamientos. 
Se planteó un estudio 
retrospectivo, descriptivo y 
analítico, basado en la revisión de 
los pacientes con diagnóstico de 
quilotórax en edad pediátrica 
(hasta los 14 años cumplidos) en 
un hospital terciario. Se realizo´ 
una búsqueda de casos en el 
registro hospitalario de 
diagnósticos y en el de la unidad 
de cuidados intensivos 
pediátricos. Se excluyeron los 
casos atendidos en el servicio de 
neonatología por las 
características intrínsecas de 
dichos pacientes y las posibles 
diferencias en el manejo. 
Los resultados se 
procesaron con los 
programas Microsoft 
Excel 2003 y SPSS 11.5 
para Windows. Se hizo 
estadística descriptiva 
de todas las variables. 
Posteriormente, se 
aplicaron diversas 
pruebas para analizar 
la posible correlación 
entre débito inicial y 
duración o débito 
total (test de 
Pearson), entre 
características del 
paciente (edad, sexo, 
tipo de cardiopatía y 
tipo de cirugía) y 
débito total y 
duración, así como 
para valorar la 
asociación entre uso 
de SST y débito total y 
duración (pruebas de 
Mann-Whitney y de 
Kruskal-Wallis). 
Se recogieron datos de 24 
pacientes, de entre 15días y 
12años de edad. La mitad de los 
pacientes eran varones y la otra 
mitad, mujeres. 
En 19 (79,2%) casos, el 
antecedente próximo era una 
cirugía cardíaca por cardiopatía 
congénita. En 18 (75%) casos, el 
derrame estaba situado en el lado 
izquierdo, en 3 en el derecho y en 
otros 3 era bilateral. 
Se encontraron complicaciones 
destacables: sepsis en 3 de los 24 
pacientes (12,5%), 
hipoalbuminemia en 3 (12,5%) 
casos y trastornos hemodinámicos 
en 2 (12,5%). 
El tratamiento con dieta exenta de 
grasas o rica en TCM conllevó la 
resolución del quilotórax en 9 de 
los 21 pacientes en los que se 
aplicó (43%). En 9 de los 12 casos 
en los que se produjo respuesta 
inicial al tratamiento dietético 
(75%), ésta se observó en los 
primeros 5 días. 
En 3 de 5 pacientes se produjo la 
curación con el uso de nutrición 
parenteral total. 
No se encontraron 
características de los 
pacientes que permitan 
predecir la evolución de su 
quilotórax. No fue posible 
correlacionar la aparición 
de lesión residual, en los 
casos de cirugía cardíaca, 
ni el inicio de alimentación 
enteral con una evolución 
distinta. La mortalidad en 
relación con el quilotórax 
fue nula. 
No se encontró ningún 
factor pronóstico de 
respuesta a los diversos 
tratamientos. 
J. Lumbreras 
Fernández y J. 
Sánchez. 
An 
Pediatr(Barc).2009;
70(3):223–229 
4 
Se incluyeron los casos de 
quilotórax pediátrico de cualquier 
etiología atendidos en el periodo 
2000–2007. En la unidad 
(excluidos casos neonatales 
congénitos). Se registraron 
variables demográficas, etiología, 
evolución del débito, 
complicaciones, tipo de 
tratamiento con resultado y 
efectos secundarios y evolución 
clínica. Se analizó 
estadísticamente la posible 
relación entre diversas variables 
(edad, etiología, débito) y la 
evolución y la respuesta a 
tratamientos 
- 24 - 
 
TITULO DISEÑO 
OBJETIVO 
METODOLOGÍA 
ANÁLISIS 
ESTADÍSTICO 
RESULTADOS CONCLUSIONES 
AUTOR NIVEL DE 
EVIDENCIA 
CARACTERÍSTICAS DEL 
ESTUDIO 
REVISTA 
OCTREOTIDE FOR THE 
TREATMENT OF 
CHYLOTHORAX IN 
NEONATES 
 
Revisión 
sistemática 
. 
Determinar la 
eficacia y 
seguridad de 
ocreótide en el 
tratamiento del 
quilotórax en 
neonatos. 
 
 
Se realizó la búsqueda en la 
base de datos de la librería 
Cochrane de Registro de 
Estudios Controlados, 
MEDLINE y EMBASE hasta 
marzo de 2010. Se buscaron 
referencias en las listas de 
estudios identificados y 
resúmenes de las reuniones 
anuales de la Sociedad 
Académica Pediátrica de 2002 
a 2009 sin restricción en el 
lenguaje. 
 
La información 
primaria (cantidad 
de fluido drenado, 
uso de soporte 
respiratorio y 
mortalidad) y la 
información 
secundaria 
(efectos 
secundarios) se 
obtuvieron y 
analizaron usando 
riesgo relativo y 
riesgo diferencial 
con intervalos de 
confianza de 95%. 
No se identificó ningún 
estudio controlado 
aleatorizado. Se 
encontraron 20 reportes 
de caso de neonatos con 
quilotórax en quienes se 
utilizó ocreótide 
subcutáneo ó 
intravenoso. Catorce 
reportes de caso 
describen éxito en su uso 
con resolución del 
quilotórax, cuatro 
reportaron falla o no 
resolución. El tempo en el 
inicio, dosis, duración y 
frecuencia de las dosis 
varía marcadamente. La 
intolerancia 
gastrointestinal, la clínica 
sugestiva de enterocolitis 
necrozante y el 
hipotiroidismo transitorio 
se reportaron como 
efectos adversos. 
 
No se puede hacer 
ninguna 
recomendación 
práctica basada en la 
evidencia identificada 
en esta revisión. Un 
registro prospectivo 
de los pacientes con 
quilotórax y 
posteriormente un 
estudio controlado 
aleatorizado son 
necesarios para 
determinar la 
seguridad y eficacia 
del ocreótide en el 
tratamiento del 
quilotórax en 
neonatos. 
 
Das Animitra, 
Shah Prakeshkumar S 
Cochrane Database of 
Systematic Reviews. 
In: The Cochrane 
Library, Issue 5, Art. No. 
CD006388. 
1a 
Se incluyeron estudios 
controlados aleatorizados y 
quasi-aleatorizados de uso 
de ocreótide en el 
tratamiento de quilotórax 
congénito y adquirido en 
neonatos de término y 
pretérmino, con cualquier 
dosis, duración y vía de 
administración. 
 
- 25 - 
 
TITULO DISEÑO 
OBJETIVO 
METODOLOGÍA 
ANÁLISIS ESTADÍSTICO RESULTADOS CONCLUSIONES 
AUTOR NIVELDE 
EVIDENCIA 
CARACTERÍSTICAS DEL 
ESTUDIO 
REVISTA 
Massive chylothorax in 
small babies 
Estudio 
retrospectivo, 
descriptivo. 
Realizar una 
revisión de la 
experiencia de 
los autores 
hasta hoy sobre 
la importancia y 
el tiempo ideal 
del tratamiento 
quirúrgico para 
los casos de 
neonatos 
pequeños y 
prematuros con 
quilotórax 
masivo. 
 
Se realizó un análisis 
retrospectivo de todos 
los pacientes en las 
instituciones en 
población de neonatos 
diagnosticados con 
quilotórax de Junio de 
2000 a Abril de 2008 
Para los autores, la 
muestra fue demasiado 
pequeña para realizar 
un análisis estadístico 
adecuado. 
 De un total de 23 
pacientes, 17 fueron 
tratados de manera 
conservadora, con 6 con 
quilotórax masivo que 
fueron tratados 
quirúrgicamente. El 
tratamiento quirúrgico 
varió, incluyendo la 
ligadura del conducto 
torácico, pleurodesis 
mecánica, aplicación de 
pegamento de fibrina. La 
sobrevida en el grupo de 
pacientes sometidos a 
tratamiento quirúrgico fue 
de 83% contra un 59% de 
los pacientes tratados de 
manera conservadora. La 
duración media del 
drenaje con tubo pleural 
fue de 5 días en el grupo 
de pacientes tratados 
quirúrgicamente contra 
14 días de los pacientes 
tratados 
conservadoramente. 
 
 La Cirugía tiene un rol 
definitiva en el cuidado de 
pacientes adecuadamente 
seleccionados. Aún no se 
ha resulto un punto crítico, 
la identificación temprana 
de pacientes con alta 
morbilidad y en los que la 
terapia médica superaría el 
tratamiento quirúrgico 
temprano. Múltiples 
limitantes aparecen antes 
de tomar cualquier 
decisión, con muestras de 
pacientes tratados 
quirúrgicamente 
pequeñas, sin análisis 
estadístico adecuado de la 
mortalidad asociada, 
además de amplia 
heterogeneidad de la 
población pediátrica. 
 
 
Katherine Cleveland, 
Diane Zook, Kayla 
Harvey, Ronald K. Woods 
Journal of Pediatric 
Surgery (2009) 44, 546–
550 
4 
Se incluyeron todos los 
casos diagnosticados como 
quilotórax congénito 
masivo (50mlkg por día), se 
estudió el tipo de 
tratamiento incluido siendo 
este quirúrgico ó 
conservador, y 
posteriormente la 
sobrevida de los pacientes 
sometidos a cada uno. 
 
- 26 - 
 
TITULO DISEÑO 
OBJETIVO 
METODOLOGÍA 
ANÁLISIS 
ESTADÍSTICO 
RESULTADOS CONCLUSIONES 
AUTOR NIVEL DE 
EVIDENCIA 
CARACTERÍSTICAS 
DEL ESTUDIO 
REVISTA 
Congenital fetal 
and neonatal visceral 
chylous 
effusions: neonatal chylo
thorax and chylous 
ascites revisited. A 
multicenter 
retrospective study. 
 
Estudio 
retrospectivo, 
observacional 
tipo cohorte 
Investigar la 
evolución clínica 
de los pacientes 
diagnósticados 
con quilotórax en 
unidades de 
cuidado intensivo 
neonatal 
Se realizó un 
estudio 
retrospectivo en 8 
unidades de 
cuidado intensivo 
neonatal alrededor 
del mundo 
 
 
 Seis pacientes se trataron in 
útero con drenaje pleuro-
amniótico. Cinco de esto 
pacientes siguen vivos a la 
fecha. Al nacimiento, se 
realizó drenaje pleural en 29 
de los 33 pacientes y el 
drenaje abdominal ocurrió 
en 3 de 33 pacientes. La 
nutrición parenteral toral se 
proporcionó a 32 pacientes 
sin efectos adversos. En 
ocho pacientes se utilizó 
ocreótide a diferentes dosis. 
Todos los pacientes 
mostraron disminución del 
quilo. Dos pacientes fueron 
tratados con pleurodesis. 22 
pacientes se encontraban 
vivos a los 6 meses de 
seguimiento. 
 
Los derrames quilosos son 
raros en pediatría, y 
actualmente no hay una ruta 
diagnóstico-terapéutica 
específica. Es necesario 
realizar un ensayo clínico 
prospectivo internacional 
para determinar las mejores 
opciones de diagnóstico y de 
tratamiento para los 
pacientes con derrames 
quilosos. 
 
Bellini C, Ergaz Z, 
Radicioni M, Et Al. 
Lymphology. 2012 
Sep;45(3):91-102. 
 
4 
Se incluyeron 33 
neonatos con 
derrame pleural, 
pericárdico ó 
abdominal al 
nacimiento con 
características de 
quilo. 
 
- 27 - 
 
TITULO DISEÑO 
OBJETIVO 
METODOLOGÍA 
ANÁLISIS 
ESTADÍSTICO 
RESULTADOS CONCLUSIONES 
AUTOR NIVEL DE 
EVIDENCIA 
CARACTERÍSTICAS DEL 
ESTUDIO 
REVISTA 
Utility of a Clinical Practice 
Guideline in Treatment of 
Chylothorax in the 
Postoperative Congenital 
Heart Patient 
 Estudio 
retrospectivo 
descriptivo 
de cohorte 
Quilotórax 
después de una 
cirugía cardiaca 
es una 
complicación 
frecuente, pero 
no existe una 
guía de 
tratamiento 
actual. La 
variabilidad en el 
tratamiento y en 
el momento para 
realizar el 
tratamiento 
quirúrgico es 
demasiado 
amplia. 
 
Después de establecer una 
guía de práctica clínica para el 
manejo de quilotórax 
postquirúrgico en un único 
centro, en la unidad de 
cuidados intensivos 
cardiotorácicos en junio de 
2010, se a analizaron dos 
cortes de pacientes: aquellos 
con quilotórax de enero de 
2008 a mayo de 2012 (n=118) 
y de junio de 2010 a agosto de 
2011 (n=45). 
 
Se presenta la 
información 
como n (%) 
para las 
variables 
categóricas y 
mediana para 
variables 
continuas. Se 
consideró 
significativo 
aquel valor de 
p<0.05. 
No se encontraron 
diferencias demográficas en 
ambas cohortes. No se 
encontraron diferencias 
entre el uso de ocreótide y el 
tratamiento quirúrgico de 
quilotórax. Se encontraron 
diferencias significativas en 
el tiempo de diagnóstico (9 
en cohorte temprana versus 
6 días en corte tarída p = 
0.004), estancia en UCI 
(18 vs 9 días, p = 0.01), 
duración de la estancia 
hospitalaria (30 vs 
23 días, p = 0.005), y 
furación de la ventilación 
mecánica (11 vs 5 días, p = 
0.02). 
 
El establecimiento de 
una guía de 
tratamiento para el 
quilotórax posterior a 
una cirugía cardiaca 
se asocia a un 
diagnóstico 
temprano, menor 
estancia 
intrahospitalaria, 
ventilación mecánica 
usada en estos 
pacientes. 
Jay Yeh, Erin R. Brown, 
Kimberly A. Kellogg, 
Janet E. Donohue, 
Sunkyung Yu, Michael G. 
Gaies, Carlen G. Fifer, 
Jennifer C. Hirsch, Ranjit 
Aiyagari 
The Annals of Thoracic 
Surgery 
Volume 96, Issue 3 , 
Pages 930-936, 
September 2013 
4 
La información recolectada 
incluyó características 
demográficas, procedimiento 
quirúrgico cardiaco, tratamiento 
de quilotórax, infecciones, 
mortalidad hospitalaria, 
duración de la hospitalización y 
la duración de la ventilación 
mecánica. 
 
 
- 28 - 
REVISIÓN DE EXPEDIENTES CLÍNICOS DEL ARCHIVO CLÍNICO EN EL INSTITUO NACIONAL 
DE PEDIATRÍA 
 
Se realizó la revisión de de 14 expedientes que se encuentran en el sistema electrónico con 
diagnóstico de Quilotórax, tres han sido depurados del archivo del hospital por falta de seguimiento 
por parte de los pacientes y tres más por mayoría de edad de los pacientes. De los seis restantes, 
tres no cumplían con los criterios de inclusión al corresponder a quilotórax adquiridos de manera 
posoperatoria, uno posterior a realización de procedimiento de Fontan, otro secundario a 
esofagoplastía por atresia esofágica tipo III y uno más secundario a esofagoplastía por atresia 
esofágica tipo I, todos con tratamiento conservador de quilotórax, remitido sin complicaciones. 
Únicamente cinco pacientes pudieron incluirse en la revisión, sus características, evolución y 
tratamiento se exponen en las siguientes tablas: 
- 29 - 
CASOS REGISTRADOS EN ARCHIVO ELECTRÓNICO DEL INSTITUTO NACIONAL DE PEDIATRÍA CON DIAGNÓSTICO DE 
QUILOTÓRAX CONGÉNITO 2000-2014: 
 
 
1. PACIENTES 
 
PACIENTE GÉNERO 
DIAGNÓSTICO 
PRENATAL 
POLIHIDRAMNIOS 
VÍA DE 
NACIMIENTO 
REANIMACIÓN 
NEONATAL 
 
TORACOCENTESIS 
EN SALA DE 
PARTOS 
SMN MASCULINO NO SI VAGINAL 
MANIOBRAS 
AVANZADAS 
NO 
BRI FEMENINO NO NO VAGINAL 
MANIOBRAS 
BÁSICAS 
NO 
PLD MASCULINO SÍ NO ABDOMINAL 
MANIOBRAS 
BÁSICAS 
NO 
ABN FEMENINO SÍ SÍ ABDOMINAL 
MANIOBRAS 
BÁSICAS 
NO 
AON MASCULINO NO NO ABDOMINAL 
MANIOBRAS 
BÁSICAS 
NO 
 
 
 
 
 
 
- 30 - 
2. CARACTERÍSTICAS DEL QUILOTÓRAX 
 
 
PACIENTE LOCALIZACIÓN CARACTERÍSTICAS DE LP 
EDAD A LA QUE SE 
REALIZÓ 
TORACOCENTESIS (DÍAS) 
CANTIDAD 
DRENADA 
(ml)SMN BASAL DERECHO NO SE ESPECIFICA 5 
NO SE 
ESPECIFICA 
BRI BASAL DERECHO NO SE ESPECIFICA 240 12 
PLD BASAL DERECHO 
líquido turbio 
pH 8.5 
densidad 1025 leucos 10900 
PMN 10%, eritrocitos 8 a 12 x 
campo 
proteínas 888 
LDH 228, triglicéridos 1121 
45 20 
ABN BASAL DERECHO SIN RESULTADO 33 22 
AON BASAL DERECHO NO SE ESPECIFICA 12 
NO SE 
ESPECIFICA 
- 31 - 
TRATAMIENTO UTILIZADO 
 
PACIENTE 
USO DE ANÁLOGOS DE 
SOMATOSTATINA 
PLEURODESIS 
QUÍMICA 
LIGADURA DE 
CONDUCTO 
TORÁCICO 
SMN NO SI NO 
BRI NO NO NO 
PLD NO SÍ NO 
ABN NO SÍ NO 
AON SI SI NO 
 
- 32 - 
 
3. EVOLUCIÓN 
 
PACIENTE 
VMI* 
(DÍAS) 
NPT** 
(DÍAS) 
ALIMENTACIÓN 
ENTERAL 
(DÍA DE INICIO) 
 MALFORMACI
ONES 
ASOCIADAS 
VIVE ACTUALMENTE COMPLICACIONES 
DEIH*** 
(DÍAS) 
RECIDIVA 
SMN 28 25 18 
 
TRISOMÍA 21 SE DESCONOCE 
 
HEMORRAGIA 
PULMONAR + SEPSIS 
NEONATAL + IAC + 
PCR  
59 NO 
BRI 7 18 15 
 
NINGUNA SÍ 
NEUMONÍA 
INTRAHOSPITALARIA 
25 NO 
PLD 9 20 18 
 
CIA+ SÍ 
 
IAC + SEPSIS 
SECUNDARIA 
28 NO 
ABN 10 19 15 
 
NINGUNA SÍ 
 
SEPSIS SIN FOCO + 
NEUMONÍA 
INTRAHOSPITALARIA 
30 NO 
AON 8 21 13 
 
TRISOMÍA 21 SI 
NEUMONÍA 
INTRAHOSPITALARIA 
27 NO 
 
*Ventilación Mecánica Invasiva + Comunicación Interauricular 
** Nutrición Parenteral Total  Infección Asociada a Catéter 
*** Días de Estancia Intra Hospitalaria  Paro Cardio Respiratorio 
- 33 - 
RESULTADOS 
 
Después de realizar la revisión de los seis expedientes, se obtuvo y analizó la siguiente información: 
 
De los pacientes, la razón en cuanto al género fue de 1.5 masculinos: 1 femeninos; únicamente en 
20% se realizó el diagnóstico de manera prenatal, sin especificarse el mes de diagnóstico, aunque el 
método fue en el 100% el ultrasonido, de los cuales 40% reportó polihidramnios, siendo en todos los 
casos justificación de interrupción quirúrgica del embarazo; todos los pacientes fueron obtenidos a 
término de la gestación y 60% de los pacientes se obtuvo vía abdominal. Únicamente uno de los 
pacientes (20%) requirió maniobras avanzadas de reanimación, no se especifica la presencia de 
dificultad respiratoria. En ninguno de los casos se realizó toracocentesis en sala de partos. 
 
En cuanto a las características del quilotórax, la localización más frecuente fue basal derecho en 
100% de los casos, sugiriendo la lesión por debajo de la quinta vértebra torácica; el único líquido 
pleural reportado de manera oficial en los expedientes cumple con los criterios mencionados 
previamente de quilotórax. 
 
El promedio de días de vida en los que se realizó el procedimiento diagnóstico-terapéutico 
(toracocentesis) fue de 67 días; la edad por paciente se expone en la siguiente tabla: 
 
 
- 34 - 
En promedio, la cantidad de líquido drenado fue de 18 ml; sin embargo, no fue posible determinar la 
cantidad de líquido drenado en el 40% de los casos. 
 
El Tratamiento implementado con mayor frecuencia fue la Pleurodesis química en un 75% con 
iodopobidona y talco, usados de manera simultánea. No se reportó el uso de análogos de 
somatostatina y ningún caso requirió la ligadura del conducto torácico. En 25% de los pacientes 
recibieron tratamiento conservador. 
 
No se reportan complicaciones en ninguno de los casos relacionadas con los diferentes 
procedimientos. 
 
Por otro lado, los pacientes requirieron en promedio de 12.4 días de ventilación mecánica invasiva y 
20.6 días de nutrición parenteral total. Fue posible el inicio de alimentación enteral a los15.8 días en 
promedio, solo uno de los casos (20%) requirió suspender nutrición parenteral por inestabilidad 
hemodinámica. 
 
El promedio de días de estancia intrahospitalaria fue de 33.8 días, con 0% de recidivas. 
 
De los seis casos, 40% de los casos se asociaron a Trisomía 21 y 20% con presencia de cardiopatía 
congénita acianógena tipo comunicación auricular. 
 
Hasta hoy, 80% de los pacientes continúa en seguimiento en nuestro Instituto. Únicamente uno de 
los pacientes referidos ha perdido contacto con el Hospital y, hasta la fecha, se desconoce estado de 
salud actual. 
 
Por último, en la revisión de expedientes, se reportan cuatro complicaciones principales que se 
exponen en la siguiente gráfica: 
- 35 - 
 
 
Ninguno de los pacientes presenta hasta el momento, dependencia de suplementación de oxígeno 
tanto por causas cardiacas como pulmonares. 
 
- 36 - 
 
 
DISCUSIÓN Y CONCLUSIONES 
 
La presencia de “Quilo” en el espacio pleural representa una afección de etiología no bien 
determinada pero de consecuencias mortales; en niños no hay una definición clara, y con frecuencia 
se aplican los criterios diagnósticos definidos en adultos. 
 
En el estudio realizado, la muestra se constituye de únicamente de cinco pacientes lo que representa 
la mayor limitante; no fue posible comparar las características bioquímicas de los líquidos pleurales 
de los pacientes considerados, siendo el diagnóstico principalmente clínico. La medición no rutinaria 
de triglicéridos aunado a la pobre disponibilidad para la medición de quilomicrones sugiere que existe 
subdiagnóstico de quilotórax congénito. 
 
Tampoco se determinó la etiología del derrame ante la ausencia de factores quirúrgicos o 
traumáticos relacionados con el mismo. 
 
En cuanto al cuadro clínico, todos los pacientes presentaron dificultad respiratoria en la primera 
semana posterior al nacimiento en diferentes grados; solo uno requirió maniobras avanzadas de 
reanimación; de los dos pacientes en los que se realizó el diagnóstico prenatal mediante 
ultrasonografía, sin embargo, en ninguno de los casos se realizaron medidas preventivas al 
nacimiento ya que ambas madres realizaron la interrupción del embarazo en centros diferentes a 
aquellos donde se estableció el diagnóstico. Lo anterior evidencia el mal apego al control prenatal. 
 
Dos de los pacientes tenían antecedente de polihidramnios aunque esta condición no se relacionó 
con prematuridad contrario a lo que se describe a nivel internacional. 
 
Así también, no se refieren hallazgos sugestivos de derrame pleural en ninguno de los casos 
posterior al nacimiento, sin embargo, cabe mencionar, que los pacientes fueron referidos a nuestro 
Instituto por persistencia de la dificultad respiratoria a pesar del manejo médico; lo anterior sugiere la 
necesidad de mayor sensibilidad diagnóstica en centros de primer y segundo nivel de atención. 
 
Las modalidades de tratamiento utilizadas en el Instituto Nacional de Pediatría son semejantes a las 
descritas en otros estudios internacionales, sin embargo, en ningún caso se reportó el uso de 
- 37 - 
análogos de somatostatina, recurso con el cual cuenta el Instituto y que debe considerarse como una 
opción terapéutica factible a pesar de los resultados satisfactorios con procedimientos invasivos 
 
A nivel internacional, se refieren múltiples complicaciones de la patología per se, en nuestro estudio, 
la más frecuente, fue sepsis con y sin foco sin aislamiento en ninguno de los casos de gérmenes 
específicos, pero relacionado en dos casos con infección asociada a catéter y neumonía 
intrahospitalaria, por lo que es necesario continuar e incrementar las medidas de seguridad del 
paciente para disminuir la cantidad de infecciones relacionadas a cuidados de la salud; solo un caso 
presentó paro cardiorespiratorio asistido de 6 minutos, asociado a choque séptico, sin relación con el 
tratamiento del quilotórax de manera directa. 
 
El quilotórax congénito constituye una enfermedad cuya poca frecuencia es subestimada, a pesar de 
ser un centro de referencia nacional, en el Instituto Nacional de Pediatría, el quilotórax congénito 
constituye una entidad rara. 
 
En conclusión, el quilotórax congénito debe considerarse como una opción diagnóstica en el neonato 
con dificultad respiratoria al nacimiento o dentro de los primeros días de vida con el fin de realizarel 
diagnóstico oportuno, y, en consecuencia, proporcionar el tratamiento adecuado que permita 
disminuir las complicaciones propias del quilotórax, la morbilidad y mortalidad relacionada al mismo. 
 
Se requiere mayor investigación sobre quilotórax congénito para establecer un protocolo diagnóstico 
y terapéutico que constituya un estándar internacional y garantice atención médica de calidad a los 
pacientes pediátricos con quilotórax congénito. 
 
 
 
- 38 - 
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