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1 UNIVERSIDAD NACIONAL AUTONÓMA DE MÉXICO FACULTAD DE MEDICINA DIVISIÓN DE ESTUDIOS DE POSGRADO HOSPITAL ESPAÑOL DE MÉXICO TESIS DE POSGRADO PARA OBTENER EL TÍTULO DE MÉDICO ESPECIALISTA EN ANESTESIOLOGIA PREDICTORES DE DIFICULTAD EN ANESTESIA NEUROAXIAL PRESENTA Dra. Tania Patricia Valenzuela Álvarez Residente de tercer año de anestesiología. Hospital Español de México tania_patricia_v@hotmail.com ASESOR Dr. José Luis Reyes Cedeño Medico anestesiólogo adscrito al servicio de anestesiología. Hospital Español de México drjlreyesc@yahoo.com.mx MÉXICO DISTRITO FEDERAL. 2014 UNAM – Dirección General de Bibliotecas Tesis Digitales Restricciones de uso DERECHOS RESERVADOS © PROHIBIDA SU REPRODUCCIÓN TOTAL O PARCIAL Todo el material contenido en esta tesis esta protegido por la Ley Federal del Derecho de Autor (LFDA) de los Estados Unidos Mexicanos (México). El uso de imágenes, fragmentos de videos, y demás material que sea objeto de protección de los derechos de autor, será exclusivamente para fines educativos e informativos y deberá citar la fuente donde la obtuvo mencionando el autor o autores. Cualquier uso distinto como el lucro, reproducción, edición o modificación, será perseguido y sancionado por el respectivo titular de los Derechos de Autor. 2 DR MANUEL ALVAREZ NAVARO JEFE DE ENSEÑANZA E INVESTIGACIÓN HOSPITAL ESPAÑOL DE MÉXICO DR. FERNANDO PRADO PLASCENCIA PROFESOR TITULAR DEL CURSO DE ANESTESIOLOGÍA HOSPITAL ESPAÑOL DE MÉXICO DR. JOSÉ LUIS REYES CEDEÑO ASESOR DE TESIS ANESTESIOLOGO ADSCRITO SERVICIO DE ANESTESIOLOGÍA HOSPITAL ESPAÑOL DE MÉXICO DRA. TANIA PATRICIA VALENZUELA ÁLVAREZ AUTOR MEDICO RESIDENTE DE TERCER AÑO DE ANESTESIOLOGÍA HOSPITAL ESPAÑOL DE MÉXICO 3 AGRADECIMIENTOS Con todo mi cariño y mi amor para las personas que hicieron todo en la vida para que yo pudiera lograr mis sueños, por motivarme y darme la mano cuando sentía que el camino se terminaba, a ustedes por siempre mi corazón y mi agradecimiento, a los que me enseñaron y ayudaron a mi formación, por cada una de las lecciones y experiencias aprendidas en mi formación profesional; por ayudarme a estar preparada para los retos que pone la vida, a todos y cada uno de ellos les dedico cada una de las páginas de mi tesis. 4 ÍNDICE INTRODUCCIÓN ............................................................... ....... 4 MARCO TEÓRICO .................................................................... 6 O ANTECEDENTES .............................................................. 7 ANATOMÍA ............................... ............................ . 7 HISTOLOGÍA ........................................................ 16 EMBRIOLOGÍA ............................... ...................... 19 O TÉCNICA ANESTÉSICA .................................................. . 21 EVENTOS ADVERSOS ASO CIADOS A DIFICULTAD EN ANESTESIA NEURO AXI A L ............ ... .. ... .. ... .. ... . .. ... .. ... .. 24 FUND AM E NT OS ............ ... .. ... .. ... .. ... . .. .. ... .. ... .. ... .. ... .. . 32 PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA ...................................... . 48 JUSTIFICACIÓN Y USO DE LOS RESULTADOS ........................ 49 OBJETIVOS ............. ... .. ... .. ... .. ... ... .. ... .. ... .. ... .. ... .. ... .. . . 49 MATERIAL Y MÉTODOS ....................................................... . 50 ANALÍSIS DE LOS RESULTADOS ............................................. 53 CRONOGRAMA ..................................................................... 53 RECURSOS ............................................................................. 54 RESULTADOS ............................................................... ......... 55 DISCUSIÓN Y CONCLUSIONES .............................................. 64 BIBLIOGRAFÍA ....................................................................... 67 5 INTRODUCCIÓN Múltiples intentos al realizar la anestesia neuroaxial pueden incrementar el riesgo de complicaciones asociadas al mismo. Esta tesis tiene como objetivo determinar las variables que influyen en la dificultad de la técnica. Metodología: se juntaron un total de 232 pacientes sometidos a anestesia neuroaxial para cualquier tipo de procedimiento quirúrgico (se incluyeron procedimientos de ginecología y obstetricia, cirugía general, traumatología y ortopedia). Se incluyeron pacientes de 16 a 95 años. Antes de realizar cada bloqueo, el anestesiólogo encargado de realizarlo recogió información del paciente relacionada con el bloqueo (edad, sexo, peso, talla, IMC, ASA, palpación de estructuras anatómicas, procedimiento quirúrgico, tipo de anestesia. Posterior al bloqueo se recogieron los siguientes datos acerca de las características de la anestesia: Si el bloqueo fue traumático o no, el número de punciones, si existió punción hemático o no, si existió la necesidad de colocar en diferente posición al paciente o reacomodar la existente, el tipo de anestesia utilizada, si fue premedicado previo al procedimiento quirúrgico con opioides o ansiolíticos, posición, abordaje, sitio de punción, grado de aceptación del paciente y con estos se clasificó según la dificultad en una escala del 1 al 4. Posteriormente se evaluó y reporto en la base de datos si existió algún tipo de complicación derivada de la anestesia. Resultados: La palpación de las referencias anatómicas así como las anormalidades anatómicas en columna vertebral fueron los factores más asociados para la predicción de dificultad en anestesia neuroaxial. La experiencia del anestesiólogo no resulto asociarse ya que la mayoría de los procedimientos fueron llevados a cabo por un residente de tercer año, no existió asociación directa entre la edad, el IMC. Sin embargo los pacientes presentaron un grado mayor de aceptación fueron los que se encontraban premedicados con ansiolíticos u opioides. Se estudió una variable nunca antes 6 evaluada en los estudios previos, que fue la presencia de anestesias neuroaxiales previas, no se encontró asociación directa sin embargo deberán hacerse estudios con una muestras mayores para determinarlo. Se presentaron pocas complicaciones, ninguna fatal. 7 MARCO TEÓRICO La anestesia neuroaxial, también llamada anestesia regional, es un tipo de anestesia que tiene como objetivo la interrupción temporal de la transmisión nerviosa por acción de los anestésicos locales. Actualmente es utilizada tanto para intervenciones quirúrgicas de abdomen, miembros inferiores, control de dolor durante trabajo de parto, control de dolor postoperatorio, así como neurolísis o neuroestimulación para manejo del dolor crónico. 22 Es una de las técnicas más antiguas de la anestesia. Las primeras publicaciones sobre el empleo de la raquianestesia y la anestesia epidural datan de 1899 y 1901 respectivamente. 30 Para la ejecución de esta técnica anestésica, el anestesiólogo debe conocer no sólo los fundamentos técnicos para la realización de estas técnicas anestésicas, sino también la anatomía de la zona, las posibles variantes anatómicas que pueden existir, así como reconocer y saber tratar las posibles complicaciones que se puedan derivar de la realización de estas técnicas. Todos los anestesiólogos y anestesiólogos en formación conocemos las indicaciones del bloqueo, los efectos principales y secundarios de los fármacos administrados y las limitaciones de la técnica; pero sabemos el éxito o el 8 fracaso de la técnica dependerá de la correctaidentificación del espacio epidural y subaracnoideo. 17 Es importante conocer y prever la posibilidad de dificultad en la técnica prevista antes de realizar un bloqueo; ya que esto puede influir en las decisiones del anestesiólogo en cuánto a técnica y quien debería estar a cargo de la realización de la misma. Anticipar la dificultad técnica en el procedimiento anestésico es un factor que puede influir en el anestesiólogo para la aplicación de anestesia neuroaxial o anestesia general balanceada. ANTECEDENTES El espacio peridural es una de las cavidades corporales más exploradas; la exploración de este espacio demanda de nosotros, los anestesiólogos, un conocimiento muy extenso de su anatomía, y fisiología. 11 ANATOMÍA El estudio y conocimientos de los detalles anatómicos del tejido espinal conllevan a una mejoría en la técnica de localización del espacio epidural, colocación de catéteres; así como mejor entendimiento de la distribución de los medicamentos administrados y con esto las características del bloqueo. 9 La columna vertebral se extiende desde el cráneo hasta el cóccix, en los adultos mide de 72 a 75 cm. Entre sus funciones se encuentra la protección de la médula espinal y los nervios espinales, proporciona un eje rígido y flexible para el cuerpo y un punto de soporte para la cabeza, desempeña una función elemental en la postura y locomoción.9 Está compuesta de 33 vértebras; dispuestos en 5 diferentes regiones: 7 cervicales, 12 torácicas, 5 lumbares y 5 sacras que están fusionadas con 3 a 5 huesos coccígeos rudimentarios. 9 Aunque las vértebras son diferentes según cada región anatómica, todas comparten ciertas características. Una vértebra típica se compone de las siguientes partes: cuerpo vertebral cuya función es el soporte del peso corporal, arco vertebral su función es protección de la médula espinal y siete apófisis. Una apófisis espinosa y dos apófisis transversas cuya función es la inserción y movimientos musculares, cuatro apófisis articulares 2 superiores y 2 inferiores cuya función es de articulación y restricción del movimiento,; lo cual impide que la vértebra se desplace durante la movilidad. Las apófisis articulares facilitan todos los movimientos a excepción de la rotación. 9 Mientras la localización de las vértebras sea más inferior en él esqueleto axial, estas soportarán un peso cada vez mayor, hasta que dicho peso se dividirá entre la cintura pélvica y las articulaciones sacroilíacas. Esto justifica las diferencias estructurales de la estructura anatómica de las vértebras según su región anatómica. El aumento de tamaño en el orificio vertebral en la región cervical y lumbar se debe a que la médula espinal se ensancha en esas zonas 10 para dar origen al plexo braquial y lumbar los cuales proporcionaran inervación a los miembros torácicos y pélvicos respectivamente. Las vértebras lumbares se encuentran en la parte inferior del dorso, entre tórax y sacro; Y se distinguen por las características de sus cuerpos vertebrales, láminas y orificios vertebrales. Las láminas de los cuerpos vertebrales lumbares con robustas, los cuerpos tienen forma arriñonada y la forma del orificio vertebral va desde ovalado en L1 hasta triangular en L5. Las apófisis espinosas tienen formas de hacha, son gruesas, anchas, y apuntan en dirección posterior.21,9 Figura 1. Anatomía de la columna vertebral 11 El abordaje para realización de un bloqueo suele ser a niveles lumbares debido a que las apófisis espinosas no tienen un posición tan angulada en relación al cuerpo vertebral como sucede a nivel torácico y el tamaño del espacio peridural es mayor. La médula espinal nace en el encéfalo y termina a nivel de L1-L2, mientras que la duramadre acaba en S1-S2. Las meninges rodean a la médula espinal y a las raíces nerviosas contenidas dentro del conducto raquídeo. 9 El espacio peridural supone el espacio circunscrito entre las estructuras osteoligamentosas que componen el conducto vertebral. Sin embargo existe controversia acerca del término “espacio peridural” entre los anatomistas, ya que el único momento en el cual se convierte en un espacio es al inyectar anestésicos locales o soluciones de contraste; es cuando al separar la duramadre del canal vertebral, se crea este espacio previamente virtual. 11 Este espacio creado sufre una deformación de su anatomía original por la presencia de anestésicos o soluciones contrastadas; esta situación debe ser considerada en la técnica anestésica. 22 Los límites del espacio peridural son: por arriba el agujero occipital, donde el periostio del canal vertebral y la duramadre medular se fusionan para formar la duramadre intracraneal; por abajo el hiato sacrococcígeo o escotadura sacra y la membrana sacrococcígea; lateralmente: el periostio de los pedículos y los agujeros de conjunción; por delante: el ligamento longitudinal posterior, que recubre los cuerpos vertebrales y los discos intervertebrales; por detrás: el periostio de la cara anterior de las láminas, las apófisis espinosas y los espacios interlaminares; ocupados por el ligamentos amarillo; por fuera por el periostio continuo del conducto vertebral y el ligamento amarillo, y por dentro por el saco dural. Se extiende desde el foramen magnum hasta el extremo inferior del conducto del sacro. 24,25 12 Las paredes laterales del espacio peridural están fenestradas por una serie de orificios que dan paso a los nervios raquídeos: los agujeros de conjunción o forámenes intervertebrales, por estos el espacio peridural establece una continuidad con el espacio paravertebral, de esta manera es posible inducir un bloqueo peridural inyectando un anestésico local en la proximidad de un agujero de conjunción, en el abordaje paravertebral. Al nivel de los pedículos vertebrales el espacio peridural está vacío debido a que el saco dural está en contacto directo con el canal vertebral. 21 Entre los múltiples compartimentos que presenta la duramadre, esta estará siempre en contacto con el periostio o el ligamento amarillo en toda su longitud. 22 Existe gran necesidad de describir el espacio peridural debido a su relevancia en los procedimientos anestésicos; por lo que se han realizado múltiples estudios experimentales, con la finalidad de estudiarlo. Basados en la introducción de múltiples sustancias en el espacio como son: resinas, contraste, o aire seguido de epiduroscopia, Sin embargo estos estudios no revelarán la anatomía original. Los estudios de imagenología para hacer descripciones anatómicas se ven modificados debido a la compresión del saco dural y al desplazamiento de la grasa peridural, por la ocupación de las sustancias inyectadas; y la anatomía original se verá deformada adoptando una forma de masa secundaria. 22 El ligamento longitudinal posterior está formado por una banda muy delgada que se separa anteriormente de la cortical posterior del hueso de los cuerpos vertebrales. Se fija a la superficie cóncava posterior de cada cuerpo vertebral, lo cual permite que las estructuras vasculares entren y salgan del cuerpo vertebral. 13 El ligamento longitudinal posterior recubre los cuerpos vertebrales y los discos intervertebrales, separa el espacio peridural anterior del plexo vertebral anterior en el cual se originan las venas vertebrobasilares, que penetran en los cuerpos vertebrales.25 El ligamento longitudinal posterior, está en contacto directo con la duramadre; disecciones anatómicas demuestran la firme adherencia especialmente en la región lumbar; caudalmente a L4-L5 la duramadre está separada del ligamento longitudinal posterior por abundante grasa epidural;este cambio anatómico contribuye a la dificultad en bloqueo en L5 y S1 creando una barrera para el anestésico local para penetrar; o un área más grande en la cual el anestésico local se puede dispersar y no alcance las raíces. El ligamento amarillo, formado esencialmente por fibras elásticas, tiene una forma rectangular. Se inserta sobre el borde superior e inferior de las dos láminas adyacentes. Es bastante delgado en la región cervical, y más grueso en la región lumbar. Tiene una porción derecha y una izquierda, que se unen dejando en defectos de fusión en forma de espacios cerrados en el espesor del ligamento. En el espacio peridural posterior se encuentra la plica dorsalis medianalis que corresponde a una estructura fibrosa longitudinal pero discontinua en la línea medio-sagital a lo largo del espacio peridural posterior en especial en la región lumbar. Se trata de una condensación de tejido conjuntivo posterior; que fija y limita el espacio epidural así como las bandas transversales que dividen el espacio posterior en los sectores, ventral, dorsal, y lateral. En el espacio epidural lateral se observan los pedículos y la salida de las raíces nerviosas. El espacio peridural anterior posee una amplitud mayor, con un conteniendo mayor de tejido graso. 22 14 Esta compartimentalización podría explicar la dificultad encontrada en ocasiones al progresar un catéter a través de una aguja de Tuohy, o el ocasional enrrollamiento del mismo durante su introducción. La plica mediana dorsalis y sus membranas asociadas pueden interferir en la colocación de estos catéteres, al igual que al realizar bloqueos nerviosos, ya que provocarían una distribución no homogénea de los anestésicos locales, con la resultante anestesia unilateral o en parches. La anchura del espacio peridural, es decir la distancia que separa el ligamento amarillo de la duramadre, varía con el diámetro de la médula, la cual presenta dos engrosamientos, uno cervical, máximo a nivel de C6, y otro lumbar, máximo a nivel de T12. En la región cervical baja, la anchura del espacio peridural, muy delgada, es de 1,5 a 2 mm. Por debajo de C7, el espacio peridural se ensancha, sobre todo desde el punto de flexión del cuello, para alcanzar entre 3 y 4 mm a nivel de T1. En la región torácica media, la anchura del espacio es de 3 a 5 mm, siendo máxima a nivel de L2 donde alcanza, en la línea media, entre 5 y 6 mm en el adulto. Se requiere de 1.5 a 2 ml de anestésico local para bloquear una metámera mientras que en el espacio subaracnoideo se necesitan 0.3 ml para un bloqueo similar. 11 El espacio peridural posee zonas con un espacio real ocupado por grasa, venas y un espacio virtual donde el saco dural está apoyado sobre los cuerpos vertebrales, los pedículos vertebrales, las láminas, y el ligamento amarillo, este espacio virtual se convierte en espacio real al inyectar soluciones o aire. 15 Los paquetes de grasa epidural tienen una distribución variable, característica de cada región vertebral: a nivel cervical está ausentes, a nivel torácico, forman por una banda posterior con aspecto dentado, es la zona torácica alta-media (T1-T7) es continua y en la zona torácica baja (T7-T12) se hace discontinua, a nivel lumbar la grasa del espacio peridural anterior y posterior se observan de forma independiente. La grasa peridural posterior adquiere su mayor volumen próximo a los discos L3-L4; de L4-L5 tienen una topografía metamérica y discontinua que está localizada principalmente en la pared posterior del espacio peridural, la grasa también rodeará las raíces nerviosas. En la región craneal la duramadre se adhiere al periostio del agujero magno y en la región caudal se prolonga por debajo del fondo de saco dural hasta el hiato sacro. El saco dural se extiende desde el agujero magno y se prolonga hasta la segunda vértebra lumbar; más caudal se prolonga como un cordón fibroso (filum terminale) que termina por insertarse en la cara dorsal del cóccix, como ligamento coccígeo. El saco dural está anclado al conducto vertebral en toda su extensión por formaciones fibrosas que cruzan el espacio peridural. El 10% interno del saco dural corresponde a la lámina aracnoidea; una lámina celular con escasa resistencia mecánica. Esta lámina es semipermeable a las sustancias y es la estructura que controla el paso de sustancias a través del saco dural. El saco dural está anclado al conducto vertebral en toda su extensión por formaciones fibrosas que cruzan el espacio peridural (ligamentos meningeo- vertebrales anteriores, laterales y posteriores). La longitud de estos ligamentos puede variar entre 0,5 mm y 29 mm. En el conducto sacro, estos ligamentos se condensan en un tabique medial perforado o ligamento sacro anterior. Los ligamentos meningo-vertebrales laterales y posteriores son más delgados y no alteran la libre circulación de los líquidos inyectados dentro del espacio peridural. 16 Una prolongación del saco dural dentro del espacio peridural lateral son los manguitos durales, formados por una prolongación de la duramadre y un tejido de transición derivado de la prolongación de la lámina aracnoidea y de la piamadre. En la parte posterior de los manguitos durales la duramadre es más delgada (80µc), sin embargo este menor espesor no modificará la permeabilidad en esta zona. El plexo vertebral comunica con las venas abdominales y torácicas por los agujeros de conjunción, hecho que explica que las presiones en dichas cavidades se transmitan directamente a las venas peridurales. En caso de compresión de la vena cava inferior, las venas peridurales se distienden con aumento de su flujo, en especial a nivel de la vena ácigos, que en el mediastino derecho desemboca en la vena cava superior. Estas disposiciones anatómicas subrayan tres puntos importantes para la seguridad de la anestesia peridural: 1.- La aguja de punción debe atravesar el ligamento amarillo en la línea medía para evitar la punción de las venas peridurales, fundamentalmente situadas en la región lateral del espacio. 2.- La punción, la introducción de un catéter o la inyección del anestésico local no deben realizarse cuando existe un aumento de la presión toraco-abdominal que va acompañada de dilatación de las venas peridurales. 3.-En caso de compresión de la vena cava inferior, es necesario reducir las dosis, disminuir la velocidad de inyección y evitar una punción venosa accidental. 17 HISTOLOGIA Las 3 membranas encefálicas tanto leptomeninges (piamadre y aracnoides) como paquimeninge (duramadre) están formadas de tejido conectivo. 28 La duramadre se compone de tejido conecto fibroso, la superficie interna está recubierta por una membrana de tejido mesenquimático. La duramadre es una estructura fibrosa y permeable que aporta resistencia mecánica. Está constituida por aproximadamente 80 láminas durales concéntricas con un espesor de 5µc cada una. Cada lámina dural está formada a su vez por subunidades de finas láminas aproximadamente de 8 a 12. Las fibras de colágeno de la duramadre poseen diferentes orientaciones en las diferentes subunidades que forman cada lámina dural, estas pueden adoptar una dirección longitudinal, oblicua o transversa. Cuando se realiza una punción lumbar, la punta de la aguja encontrará una malla fibrilar. 25 Figura 2. Saco dural. El corte sagital permite observar el espesor completo del saco dural. Las líneas longitudinales se corresponden con el corte de las 80 láminas durales concéntricas. Microscopia electrónica de barrido aumento: 300x. 33 18 En el espacio subdural; entre la duramadre y la aracnoides no existe un espacio real, hay tejido formado por células neuroteliales. Son célulasalargadas fusiformes con extensiones ramificadas. Cuando existen fuerzas de tracción en este compartimento las células neuroteliales se rompen, fragmentan formándose un espacio. 28 La aracnoides está formada por una delgada capa de tejido conectivo recubierta en su cara interna y externa por células aplanadas. El aspecto de la tela de araña de la aracnoides se debe a la presencia de trabéculas que la vinculan con la piamadre, a través de estas trabéculas fluye el LCR. La aracnoides es una fina membrana que forma parte del espesor del saco dural en su porción más interna. Esta tiene un efecto de barrera al ser una membrana semipermeable, con un espesor de 35 a 40µc y está formada por células con uniones estrechas, entre las cuales no hay colágeno, solo sustancia amorfa. Figura 3. Lámina aracnoidea. Detalle de las células aracnoideas. Los espacios intercelulares son mínimos.Las uniones specializadas demembrana permiten una sólida unión intercelular. Microscopia electrónica de transmisión. Aumento 4.400. 24 19 Piamadre compuesta por una delgada capa de tejido conectivo que recubre la superficie del encéfalo y de la médula espinal recubierta por una capa de células planas que se continúan con el epitelio aracnoideo, y en contacto con el tejido nervioso se encuentra una capa de células piales unidas mediante desmosomas y nexos. Por debajo de esta se encuentra el espacio subpial que contiene haces de colágeno y pequeñas ramificaciones de arterias, separa la piamadre de la membrana basal a la glía limitante externa. 28 En el espacio subaracnoideo se encuentran las vellosidades aracnoideas que son evaginaciones digitiformes del espacio subaracnoideo. La punta de la vellosidad carece de duramadre y el epitelio aracnoideo está en contacto directo con el endotelio del seno. El SNC carece de vasos linfátcos. Los principales plexos venosos del espacio peridural son los plexos longitudinal anterior y posterior, estas venas son lo suficientemente laterales para que una punción lumbar con abordaje medial no las lesione; estos se unen por delante, por detrás y lateralmente a través de plexos transversos. Las venas del plexo transverso posterior son las más vulnerables, se encuentran situadas próximas a las láminas vertebrales y a cierta distancia de los ligamentos amarillos. Los plexos venosos vertebrales internos que drenan la médula espinal y el conducto vertebral se localizan principalmente en la zona anterolateral del espacio peridural. Las venas peridurales carentes de válvulas por efecto de la presión venosa se distienden y disminuyen el volumen efectivo del espacio peridural, y por ello las soluciones peridurales tienden a distribuirse con una extensión craneal. 20 EMBRIOLOGÍA El sistema nervioso humano se forma del ectodermo, el cual comienza a proliferar por inducción de la notocorda formando un largo tubo en las primeras semanas luego de la fecundación; de la 3ª a la 5ª semana. 27 El Tubo Neural, en su parte más anterior comienza a tener una gran proliferación celular que permite distinguir rápidamente tres vesículas primitivas, que se ubicarán en la cabeza del embrión, de las cuales derivarán el Prosencéfalo, Mesencéfalo y Romboencéfalo. El desarrollo es tan rápido que al estar contenidas dentro de un compartimiento de más lento crecimiento, comienzan a doblarse, razón por la cual aparecen curvaturas que corresponden a: Curvatura Cefálica, Curvatura Cervical y Curvatura Pontina. De las tres vesículas se derivan rápidamente 5 vesículas secundarias: del prosencefálo se forma el Telencéfalo y el diencéfalo. El Mesencéfalo continúa igual y del romboencéfalo derivan metencéfalo y mielencéfalo. Del Telencéfalo se originarán los hemisferios cerebrales y del diencéfalo las paredes del tercer ventrículo y a la base del cerebro. 27 El mesénquima perineural se condensa a su alrededor y forma una membrana altamente vascularizada, de los cuales se originarán vasos del neuroeje y constituyen una meninge primitiva; esta posteriormente se separa en 2 capas una externa ectomeninge y otra interna próxima al tubo neural que constituye la endomeninge. La capa externa de la meninge primitiva se va engrosando progresivamente por adición de células y va englobando los vasos previamente formados, fundiéndose con el endostio para constituir la duramadre encefálica. A nivel medular la duramadre queda separada del endostio por un espacio donde circulan los vasos. 21 En la 13ª semana de desarrollo embrionario 3 diferentes etapas se han formado y se diferenciaran progresivamente en dentro del tejido conectivo de la meninge primitiva. Estas son: el espacio peridural primario (35-55mm longitud cefalocaudal), espacio peridural secundario embrionario (60-70 mm longitud cefalocaudal) y fetal (80-90 mm longitud cefalocaudal). En la 13ª semana de gestación el espacio peridural está lleno de tejido conectivo, y la duramadre se encuentra unida al ligamento longitudinal posterior.11 Se ha encontrado que la morfogénesis del espacio peridural primario está determinado por la influencia de la medula espinal y la duramadre mientras que el espacio peridural secundario está determinado por la influencia del canal vertebral. En este periodo el de vida embrionaria el ligamento longitudinal posterior se adjunta al cuerpo vertebral por la línea media y por el margen posterior del disco intervertebral. El plexo venoso anterior está formado y localizado anterolateral y anteromedial a las 15 semanas el ligamento longitudinal posterior se desarrolló mejor en capa superficial y profunda. A las 21 semanas la unión entre la duramadre y el ligamento longitudinal posterior tienen las características de un ligamento al nivel del cuerpo vertebral. A las 32 semanas la duramadre está adherida a la capa superficial de del ligamento longitudinal posterior. El mesénquima de la capa interna de la meninge primitiva o endomeninge sufre un proceso de absorción parcial y aparece un espacio tabicado por trabéculas mesenquimatosas persistentes que separan a esta endomeninge en dos capas una externa delgada y una interna de naturaleza vascular íntimamente unida a la superficie externa del SNC. La capa interna vascular será la piamadre mientras que la externa será la aracnoides que se separa de la piamadre por las trabéculas mencionadas que se llenan de LCR, el cual ingresa cuando se perforan los orificios de comunicación del SNC con el sistema ventricular. 22 TÉCNICA ANESTÉSICA Los beneficios de la anestesia neuroaxial están claramente descritos. Uno de sus principales beneficios se encuentra en la prevención de liberación de catecolaminas, cortisol; los cuales normalmente se elevan durante el procedimiento quirúrgico; los niveles de glucemia se mantienen, con una reducción de los cambios trans y postoperatorios de la aldosterona que normalmente se eleva; así como la renina-angiotensina II plasmáticas, supresión de los aumentos de prolactina, inhibición de la respuesta de la hormona de crecimiento y la ACTH, sin afectar los niveles de hormonas tiroideas, inhibición de la lipolisis intraoperatoria. En resumen la anestesia neuroaxial produce una modificación favorable de la respuesta de metabólica al trauma generada durante la cirugía. BLOQUEO PERIDURAL Al inyectar los anestésicos locales en el espacio peridural sin atravesar la duramadre; así los anestésicos actuarán a diferentes niveles: a) En nervios espinales dorsales y ventrales, por medio de su difusión a estas estructuras, la cual se facilita por las características anatómicas y fisiológicas de las membranas que los envuelven. b) Sedifunden a través de las diferentes meninges y las vellosidades aracnoideas al LCR. c) Penetran a la médula espinal en mayor o menor grado, de acuerdo a sus características físico –químicas, sin embargo la concentración de los 23 anestésicos locales en el cordón espinal es siempre menor al q se encuentra en los nervios espinales. d) En menor grado se difunden a los ganglios dorsales y al espacio paravertebral los opioides aplicados en el espacio actúan en el asta dorsal de la médula espinal produciendo analgesia sin bloqueo simpático, y motor. Modulando la liberación de sustancia P; estimulando los mecanismos descendentes de vías de analgesia espinal. La anestesia se desarrolla de forma segmentaria creándose una banda anestésica al bloquear unos segmentos por encima y por debajo del lugar de punción, pudiéndose conseguir un bloqueo selectivo de una determinada área si se realiza la punción en el centro de los dermatomas implicados. Tiene una instauración con menor rapidez que el bloqueo subaracnoideo y los cambios hemodinámicos debidos al bloqueo simpático también se instauran con menor rapidez. Los patrones de distribución en el cordón espinal de los anestésicos locales y opioides dependen fundamentalmente del contenido de mielina de los nervios espinales, del grado de eliminación del fármaco por medio de la perfusión local y el contenido del LCR. La duración dependerá de la absorción y metabolismo sistémico por los vasos sanguíneos de la piamadre localizados en la porción superficial del cordón espinal y también por los vasos sanguíneos de la médula espinal. BLOQUEO SUBARACNOIDEO, ESPINAL O INTRADURAL Para su realización se perfora la duramadre y la aracnoides, y se introduce el AL en el espacio subaracnoideo, mezclándose con el líquido cefalorraquídeo; la anestesia se obtiene de manera inmediata, produciéndose un bloqueo gradual, 24 inicialmente Simpático, después sensitivo y finalmente motor. No permite bloqueo segmentario. BLOQUEO MIXTO (PERIDURAL + SUBARACNOIDEA) Consiste en la combinación de ambas técnicas en un mismo paciente. El objetivo es administrar una dosis de AL en el espacio subaracnoideo para el período intraoperatorio y colocar un catéter peridural para la analgesia postoperatoria. 25 FUNDAMENTOS En toda la bibliografía revisada para realizar esta tesis se insiste en la importancia de reconocer e identificar, antes de iniciar cualquier tipo de anestesia regional neuroaxial aquellos pacientes en los que la técnica pueda resultar dificultosa; para tomar las medidas necesarias para disminuir los riesgos de complicaciones. Se afirma que el número mínimo de bloqueos que precisa un residente para garantizar una buena tasa de éxitos es de 20 bloqueos para obtener una tasa del 60% de éxito y entre 60 y 90 para una tasa superior al 80%. 18 Y a pesar que exista una correcta canulación del espacio peridural o subaracnoideo, la inyección de fármacos en el espacio epidural, ya sea para anestesia o analgesia tiene una posibilidad de falla entre el 6 al 50%, siendo la analgesia epidural postoperatoria la que tiene el porcentaje más elevado de error. 29 Diferentes estudios muestran que punciones dificultosas con múltiples intentos durante la realización de los bloqueos centrales se asocian a mayor incidencia de aparición de complicaciones como son: lesiones traumáticas de estructuras nerviosas, cefalea post punción dural, hematoma espinal, sin mencionar la insatisfacción con la realización de la técnica e insatisfacción por parte del paciente. Estas complicaciones pueden generar secuelas graves bajo algunas circunstancias. Además los intentos repetidos también se asocian con discomfort para el paciente insatisfacción son la realización de la técnica y prolongación del tiempo destinado a la realización del bloqueo. 1,8. 26 Las complicaciones que se pueden generar con la realización de anestesia neuroaxial son inherentes a la realización de cualquier procedimiento médico; por lo que es de vital importancia conocerlas para poder prevenirlas. FACTORES PREDICTIVOS DE DIFICULTAD EN ANESTESIA NEUROAXIAL 1. Posición de la paciente: la posición idónea del paciente para anestesia neuroaxial es la de decúbito lateral izquierdo y lo más importante de la posición es que los hombros queden paralelos uno con el otro y totalmente perpendiculares al plano de la mesa de operaciones, ya que si no, se modifica el plano anatómico. La cabeza debe flexionarse buscando que la barbilla toque ligeramente el esternón y sin exagerar con hiperflexión innecesaria, las extremidades inferiores que tendrán que doblarse a nivel de las rodillas y luego subir los muslos acercándolos sin forzamiento hacia el abdomen. Es importante que el paciente pueda comunicarse con el anestesiólogo, esto permite al especialista conocer si hay dolor, parestesias o alguna molestia, obligándole a detenerse en caso de presentar alguna complicación.20 La posición de sedestación requiere invariablemente de un asistente colocado frente al paciente para evitar que caiga de la mesa de operaciones, esta posición está reservada únicamente para pacientes con obesidad o hiperlordosis, en los cuales las apófisis espinosas son difíciles de palpar o impalpables. 20 En cualquiera de las dos posiciones es muy importante localizar la línea media, para hacer la punción en esta vía, una buena exploración de la 27 columna vertebral sirve para palpar las apófisis espinosas, si hay o no xifosis, lordosis, escoliosis u alguna otra alteración anatómica relevante. Al realizar una correcta evaluación anatómica es posible identificar las apófisis espinosas de la vértebra L4 o el espacio intervertebral L4-L5 que se localiza a través de una línea que se traza de una cresta iliaca hacia la otra (Línea de Tuffier) y que pasa perpendicularmente cruzando la línea media de la columna vertebral, para así conocer si habrá o no dificultades en la aplicación de la anestesia regional e incluso para decidir en ese momento si la anestesia general es mejor opción. Figura 4. Posición Vallejo: modificación de la postura de sedestación se gira la mesa aproximadamente 20 o 30 grados en su sentido longitudinal. Se debe ayudar al paciente a que su espalda siga estando vertical y no se vuelque hacia adelante para que la tendencia del paciente a estabilizarse le haga forzar a aumentar el arco dorsal y lumbar. 28 2. Dificultad para introducir la aguja de Tuohy o la guía para la aguja espinal: En ocasiones ocurre un inesperado contacto con el hueso, inclusive desde que se trata de introducir la aguja para la infiltración del anestésico local (AL), lo primero que debe hacerse es corregir la posición de la paciente. Lo más seguro es que se esté chocando con la lámina, con el lado posterior de la vértebra o también con un disco intervertebral. En todos estos casos las pruebas de pérdida de la resistencia son negativas y en raquianestesia no se obtiene LCR. No deben de hacerse más de tres intentos para localizar los espacios peridural y subaracnoideo, después se puede ir a otro espacio intervertebral y realizar un intento más, si falla, se debe buscar ayuda, si el segundo sujeto es incapaz de canular el espacio peridural o subaracnoideo, entonces se debe pensar en un cambio de técnica anestésica (anestesia general). .20 3. Problemas músculo-esqueléticos: Existen patologías tales como las distrofias musculares, osteoatrosis, artritis reumatoide, enfermedades de la colágena entre otras las cuales generan complicaciones en la técnica anestésica; tanto neuroaxial como en la anestesia general, una valoración preoperatoria completay exhaustiva evitará incidentes desagradables, y asegurará una elección anestésica correcta. 20 4. Los defectos en la columna vertebral: Los defectos tales como la escoliosis lumbar, la hiperlordosis y otros, son problemas que deberán estudiarse durante la valoración pre anestésica; el conocimiento de los mismos nos permitirá tomar decisiones asertivas en cuanto a la elección del procedimiento anestésico, para así evitar eventos adversos. 20 La patología congénita o adquirida de la columna lumbar son factores determinantes en la falla y efectos secundarios de la anestesia y la analgesia neuroaxial. Las anomalías congénitas de la columna vertebral 29 no son una contraindicación absoluta para canular el espacio peridural, pero se ha recomendado especial atención para la identificación del mismo, al igual que una dosificación apropiada de los volúmenes inyectados. El estudio clínico y radiológico preoperatorios son fundamentales antes de proceder con el bloqueo peridural; con frecuencia las alteraciones neurológicas periféricas no correlacionan con las alteraciones óseas. Es elemental solicitar radiografías simples de la columna vertebral, y en ocasiones es prudente realizar tomografía axial computada o resonancia nuclear magnética. La asimetría en anestesia epidural es más probable cuando existen anormalidades anatómicas. 5. Otras patologías: a. Edad avanzada: En pacientes de edad avanzada, los cambios degenerativos producen fibrosis de los tejidos, lo cual ocasiona que estos se vuelvan progresivamente impermeables a los anestésicos locales; esto aunado a condiciones como estenosis de canal y reducción del diámetro de los agujeros de conjunción ocasiona dificultad en la técnica en este grupo etáreo.12 b. Embarazo : Aunque el embarazo no es una patológia los múltiples cambios anatómicos y fisiológicos que presentan ofrecen dificultades técnicas al bloqueo neuroaxial debido a cambios anatomofisiológicos propios de la gravidez, como son: el ligamento interespinoso se reblandece y causa falsa pérdida de la resistencia, el espacio epidural es más reducido por la ingurgitación del plexo venoso, así como por la presión que ejerce el útero gestante, hay dificultades para posicionarlas durante el bloqueo, tienen mayor sensibilidad miocárdica a los anestésicos locales. 29 30 c. Grasa Peridural: La distribución normal de la grasa peridural y sus características puede alterarse con diferentes patologías. La lipomatosis epidural está caracterizada por una excesiva deposición de la grasa peridural. Este depósito excesivo de grasa puede situarse alrededor del saco dural y causar compresión de la médula o de las raíces nerviosas con potenciales síntomas neurológicos. En algunos pacientes, el origen de los depósitos excesivos de la grasa peridural puede ser ocasionados por la administración de esteroides exógenos, debido a síndromes paraneoplásicos con producción ectópica de glucocorticoides (Cushing paraneoplásico) o idiopático. La diferente distribución de grasa peridural dentro del EE posterior, lateral y anterior podría influir en la ubicación final de la punta de un catéter epidural y en la distribución de las soluciones inyectadas. Al ser un reservorio lipofílico, por tanto, un factor farmacocinético podrá afectar la latencia y duración del efecto de los fármacos administrados en ese espacio. d. Obesidad: El manejo anestésico del paciente obeso, requiere de personal altamente calificado para poder brindar un beneficio con los mínimos efectos adversos. Dentro de los aspectos relevantes del paciente obeso son relevantes los que influyen seriamente en el procedimiento anestésico; como son la valoración de la cabeza y flexión del cuello, extensión y rotación lateral, valoración de la apertura bucal. Inspección de registros anestésicos previos y cuestionar al paciente acerca de dificultades previas, especialmente cualquier episodio de obstrucción de la vía aérea superior, cualquier cambio sistémico que pueda sugerir síndrome de apnea obstructiva del sueño, como un roncopatía, con o sin episodios de apnea e hipersomnolencia diurna. Todos estos pacientes deben ser considerados como vías áreas difíciles. 10 31 Debemos considerar todas las complicaciones que pueden existir en este tipo de pacientes; las pulmonares son muy comunes, pero ni el IMC ni las pruebas de función pulmonar son predictores adecuados de complicaciones postoperatorias. Los pacientes obesos pueden ser más sensibles a los efectos de los hipnóticos, analgésicos tipo opioides y medicamentos anestésicos lo cual no es benéfico para el periodo de ventilación postoperatoria y para el tiempo seguro de eliminación de los fármacos. Por todas las razones previamente mencionadas el uso de anestesia regional en el paciente obeso reduce los riesgos de intubación difícil y de aspiración, lo que provee mayor seguridad y analgesia postoperatoria más efectiva, por lo que es importante siempre considerar el riesgo beneficio de someter a un paciente a anestesia neuroaxial, o de someterlo a anestesia general. 10 Otro riesgo que se encuentra en el paciente obeso es la enfermedad tromboembólica. La anestesia neuroaxial proporciona un beneficio en este rubro sobre la anestesia general. El riesgo de trombosis venosa profunda en el paciente obeso sometido a cirugía abdominal es aproximadamente del doble que en los pacientes sin sobrepeso u obesidad, con un incremento similar del riesgo de embolia pulmonar. La anestesia regional en el paciente obeso puede ser difícil técnicamente debido a las dificultades para identificar las estructuras óseas. La anestesia epidural y espinal se puede facilitar colocando al paciente en sedestación y utilizando agujas largas. Se ha utilizado ultrasonido para identificar el espacio epidural y para guiar la aguja Touhy a su posición. El incremento de la presión intraabdominal reduce el volumen del espacio epidural, lo cual, 32 puede hacer impredecible la diseminación del anestésico local y dar variabilidad en la altura del bloqueo. 10 Se sugiere como parte de la evaluación previa a la anestesia la exploración exhaustiva de la columna vertebral así como marcar con plumón los puntos de referencia óseos.20,10. e. Condiciones sentimentales inherentes al paciente: Las condiciones psicológicas de la paciente como la ansiedad, el temor etc., a recibir una analgesia neuroaxial deberán investigarse y resolverse antes de aplicarla, porque aunque técnicamente sea perfecta, fracasará invariablemente si no se ha logrado una correcta ansiolisis, así como la confianza al médico y al método anestésico. El uso premedicación preanestésica para evitar ansiedad debe ser valorado en cada paciente. 20 33 EVENTOS ADVERSOS ASOCIADOS A DIFICULTAD EN ANESTESIA NEUROAXIAL Las complicaciones también llamadas efectos adversos son hechos inesperados no relacionados con la historia natural de la enfermedad, como consecuencia del proceso de atención médica. De acuerdo con The Nacional Center for Patient Safety, los eventos adversos son: << Incidentes desfavorables, percances terapéuticos, lesiones iatrogénicas u otros sucesos negativos que ocurren directamente asociados a la prestación de la atención médica >>. 20 El tema de los eventos adversos en medicina pareciera no ser muy bien visto y en ocasiones hasta se trata de evitarlo. En anestesiología, este pensamiento sigue el mismo curso, el especialista siempre busca evitar un evento adverso secundario a los métodos y técnicas que a diario emplea en su quehacer profesional, debido a que está muy consciente de los problemas inherentes, en caso de ocurrir alguno de ellos en una profesióncada día más defensiva. Por otro lado, los mismos pacientes no desean oír sobre las complicaciones del procedimiento anestésico al cual serán sometidos en determinado procedimiento quirúrgico, evitan el tema, porque lo que desean escuchar es que todo irá bien y que la operación será un éxito. El anestesiólogo tiene la obligación a pesar de esto de informarles con el consentimiento informado. 20 La mejor prevención consiste en seleccionar el método y la técnica anestésica idóneos para cada paciente en forma individual, porque estructural y funcionalmente cada grupo etáreo y según sus patologías mostrarán cambios anatómicos y fisiológicos. A pesar de experiencia médica acumulada, los mejores entrenamientos, la seguridad del equipo y de los nuevos anestésicos locales empleados; la incidencia de las complicaciones secundarias a anestesia neuroaxial no ha 34 disminuido, a esto lo preceden varias explicaciones como son el incremento en popularidad de anestesia neuroaxial debido al incremento de incidencia de otras patologías como son la obesidad, diabetes, padecimientos cardiovasculares que obligan al paciente a la anticoagulación. 16 Existen complicaciones neurológicas inherentes al procedimiento médico, que dividiremos para efecto de la tesis en asociados al procedimiento anestésico y los no anestésicos. Se citan en primera instancia las complicaciones neurológicas; ya que estas son las complicaciones principalmente asociadas a dificultad en anestesia neuroaxial; asociado a múltiples punciones o a intentos traumáticos. La lesión traumática con aguja presenta relevancia en cuanto a la posibilidad de lesiones neurológicas. Múltiples intentos traumáticos; se asocian a mayor incidencia de hematoma epidural, así como cefalea postpunción, y son un factor contribuyente para dolor lumbar postoperatorio, y es la causa número uno de insatisfacción en el paciente así como negativa a la realización de este tipo de anestesia durante otro procedimiento quirúrgico. 16 COMPLICACIONES NEURO LÓGICAS DERIVADAS DE LA TECNICA ANESTESICA Mencionaremos los efectos adversos más frecuentes en anestesia neuroaxial: Daño neurológico: Es el daño permanente de médula y/o raíces nerviosas, secundarios a la anestesia regional. Su incidencia es bastante baja; entre 0 a 0,08 %. Las parestesias persistentes también se consideran como daño neurológico y su incidencia varía entre 0 a 35 0,16%. El resto de complicaciones que se llegan a presentar son complicaciones coincidentales. Es decir que son complicaciones que ocurren durante el mismo período en que transcurre la AR, pero su origen es distinto; como el daño neurológico derivado de inadecuada posición del paciente, compresión por torniquete, trauma quirúrgico, síndrome compartamental, hipotensión mantenida, inmovilización. La etiología del daño neurológico puede ser directo o indirecto. Directo por agujas o catéter, neurotoxicidad por anestésicos locales, e indirecto por, isquemia medular por hematoma o vasoconstricción o por infección. Hematoma epidural: Se ha reconocido como una complicación rara; pero de relevancia ya que puede causar déficit neurológico permanente. Su incidencia aproximada es de 1:150,000 para el bloqueo epidural y de 1:220,000 para una bloqueo subaracnoideo. El trauma vascular ocasionado por la aguja epidural tiene una frecuencia de 2,8 %, mientras que con el catéter epidural es de 11,5%. La punción vascular por catéteres y agujas es frecuente en el bloqueo neuroaxial presentando una incidencia de 2.8%-11.5 %. En estos casos el sangrado es mínimo y normalmente se resuelve sin secuelas. Los pacientes con patologías de coagulación, trombocitopenia o en terapia anticoagulante, son los pacientes que se encuentran en mayor riesgo de desarrollar un hematoma espinal relacionado a anestesia regional. La mayoría de los hematomas epidurales y espinales son de aparición brusca, en muy raras ocasiones se presentan en forma progresiva. El cuadro clínico se caracteriza por dolor en la región lumbar, tórax o cuello, con un incremento en la intensidad del bloqueo motor o sensorial, aparición de nuevas paresias. Cuando se sospecha el hematoma, el tratamiento de elección es la laminectomía descompresiva 36 inmediata. La recuperación no es posible si la cirugía se pospone por más de 8-12 horas. Síntomas neurológicos transitorios (SNT): Este cuadro se trata de un tipo de déficit neurológico, el cual se resuelve espontáneamente, sin déficit neurológico posterior. Dentro de los factores etiológicos involucrados, están la toxicidad específica del anestésico local, siendo el más frecuentemente involucrados la tetracaína, aunque se ha descrito posterior al uso de todos los anestésicos locales. Otros factores mencionados son el trauma con aguja, la posición del paciente durante la cirugía, el uso de agujas punta de lápiz pequeños que favorecerían una distribución no homogénea del AL, predisponiendo la lesión transitoria. La incidencia actual de SNT varía y va desde 0 a un 37 %. Lo cual soporta la teoría de que son varios los factores involucrados en su génesis. El cuadro clínico se caracteriza por dolor o disestesia en región lumbar, bilateral, que se irradia a glúteos y/o muslos y generalmente se presenta durante las primeras 12-24 h posterior a la anestesia, pudiendo durar desde 6 horas hasta 4 días. Esta entidad evoluciona sin compromiso neurológico y el estudio electrofisiológico es normal. Probablemente la posición de litotomía genera distensión de estructuras nerviosas, distendiendo también la vasa nervorum produciendo disminución de la perfusión de estructuras nerviosas, lo que haría más susceptible a la médula y raíces nerviosas al efecto neurotóxico de los anestésicos locales. La obesidad también contribuiría a favorecer neurotoxicidad, al producirse menor efecto dilutorio de los anestésicos locales, ya que estos pacientes tienen menor cantidad de LCR. Las complicaciones neurológicas que realmente son causadas por el bloqueo neuroaxial se deben a: trauma directo a los nervios causado por 37 la aguja o el catéter, esto se manifiesta en el paciente con un dolor lacerante localizado en el área que inerva el nervio que ha sido traumatizado. Cuando esto sucede se deberá de inmediato detener el avance de su aguja o catéter, y retirarlos de inmediato del espacio e intentar otra nueva punción en otro nivel. El insistir en avanzar la aguja y/o el catéter lo único que produce es mayor trauma en el nervio y la posibilidad de que el enfermo tenga secuelas neurológicas severas y permanentes. Dolor lumbar: El dolor lumbar posterior a la anestesia neuroaxial, no siempre traduce una complicación neurológica, es causa frecuente de molestias. Generalmente, se trata de un dolor de duración limitada. La literatura describe incidencias variables, ya que existen otros factores involucrados independientes de la técnica anestésica utilizada. La incidencia de dolor lumbar relacionado con el sitio de punción, varía de 10 a 25 % y es más frecuente después de una anestesia peridural, que de una anestesia subaracnoidea; lo que se explicaría por el mayor trauma de tejidos, que produce el calibre de la aguja. Este dolor también se debe a la pérdida temporal de la curvatura lumbar, secundaria a la relajación muscular, generándose estiramiento de ligamentos y músculos lumbares. Dentro de las complicaciones que pueden presentar dolor lumbar postanestésico son: el daño del disco intervertebral posterior a una punción difícil o la presencia de un hematoma o absceso peridural. En las pacientes embarazadas este síntoma es más frecuente, debido a los cambios anatómicos que sufre la columna vertebraly a factores hormonales relacionados con el embarazo. Estos desaparecen en forma paulatina después del parto y esto es lo que aparentemente genera el dolor lumbar en este tipo de enfermas. 38 La lumbalgia es muy común en obstetricia con o sin anestesia neuroaxial, la frecuencia en ambos casos oscila entre 25 – 45%. Enfermedades previas de la columna hacen más probable esta complicación, cuyo mecanismo de producción es el trauma a los tejidos blandos y al periostio por múltiples intentos de localización de los espacios subaracnoideo o peridural. 20 OTRAS COMPLICACIONES DEL BLOQUEO PERIDURAL O SUBARACONIDEO o Cefalea post punción dural (CPPD): Se produce como consecuencia de la punción accidental de la duramadre. La pérdida del LCR disminuye la presión en el sistema ventricular que posee una función amortiguadora en el cerebro y ocasiona que cuando el paciente se encuentra en sedestación se ocasiona tracción en las estructuras sensitivas de los vasos intracraneales, duramadre, nervios craneales y el tentorio, produciéndose la clásica cefalea postural característica de la CPPD. 13 Los tipos de aguja y el calibre de las mismas están directamente relacionados con la incidencia de CPPDF, existen agujas como la Quincke cuya punta y bisel son cortantes, hacen la perforación más fácil sin embargo agujas como la Whitacre que solo separan las fibras sin cortarlas, al retirar la guja estas se juntan nuevamente impidiendo la fuga de LCR. 20 o Neumoencéfalo y embolia aérea: La técnica de pérdida de resistencia utiliza aire, para identificar el espacio peridural. El neumoencéfalo es secundario a la inyección de aire intratecal o subdural. Produce cefalea inmediatamente posterior a la punción 39 o al cambio de posición. La de embolia aérea se produce por la inyección de aire en venas peridurales, que puede producir, incluso colapso cardiovascular o daño neurológico por embolia paradojal, en pacientes con foramen oval permeable. Otro tipo de lesión producida por la inyección de aire ocasionará un déficit neurológico secundario a compresión de raíces nerviosas puede comprimir el saco dural a distintos niveles. El aire peridural también puede viajar a través de los forámenes intervertebrales y difundir, por planos faciales profundos del cuello y tórax posterior produciendo enfisema subcutáneo. o Meningitis séptica y absceso peridural: Dentro de las complicaciones infecciosas que se pueden producir posterior a una anestesia regional, son especialmente graves la meningitis y el absceso peridural. Las vías de infección son la vía endógena, es decir por bacteremia en pacientes con infección sistémica y la vía exógena a través de material contaminado o colonización de catéteres desde la piel. Otro mecanismo de infección descrito es la contaminación por Streptococo viridans, desde la mucosa bucal del operador que no usó cubrebocas. Los factores de riesgo asociados son la inmunosupresión, tratamiento con esteroides, diabetes, infección, sepsis, tiempo prolongado de cateterización y por supuesto falla en la técnica estéril. La mayoría de los abscesos peridurales publicados se han asociado a uso de catéteres peridurales para el manejo del dolor, más que a abscesos asociados a la anestesia peridural en sí. El cuadro clínico se caracteriza por dolor lumbar localizado o de tipo radicular, compromiso esfinteriano, sensitivo y motor, asociándose fiebre y leucocitosis. El cuadro clínico se inicia de manera insidiosa y va 40 aparecido el compromiso neurológico, que requiriere descompresión quirúrgica y tratamiento antibiótico. El germen más frecuentemente involucrado es el Staphylococcus aureus y el diagnóstico se confirma por TAC RNM. Cuando existe duda diagnóstica frente a un eventual absceso peridural no se debería realizar punción lumbar, ya que se pueden arrastrar gérmenes desde el absceso hacia las meninges. La mortalidad es de 30 % y la morbilidad asociada es alta. 41 “La anestesia neuroaxial es un acto de fe ”Quinn H. Hogan. Quinn H. Hogan y Mark Leighton describen la anestesia neuroaxial como un acto de fe; ya que al insertar la aguja sin guía imagenológica en un espacio inferido en el cual no existen puntos objetivos visibles; entramos en un terreno en el cual no sabemos que podremos encontrar . El catéter peridural que es colocado no puede ser visualizado, lo único que se controla es la distancia que avanza el mismo. La administración de anestésicos solo puede ser medida por la cantidad de solución administrada. Aparte de lo previamente mencionado el espacio peridural es un espacio altamente heterogéneo, por lo que el efecto anestésico puede ser variable. Las posibilidades van desde excesivo o inadecuado bloqueo sensitivo, menor duración de bloqueo sensitivo, cambios hemodinámicos excesivos, variabilidad en bloqueo motor. Toda esta gama de variabilidad puede ser explicada por la inyección del anestésico local fuera del espacio peridural. 25 Existe bibliografía que apoya el uso de técnicas como ultrasonografía, tomografía computada, resonancia magnética. Para estimar la distancia del espacio subaracnoideo o peridural, pero estos estudios pueden llegar a ser poco prácticos para uso hospitalario. 4 Los estudios de imagenología pueden no ser útiles debido a que la duramadre es excesivamente delgada y puede no ser visible en TAC y en la mayoría de los casos la aracnoides solo puede ser identificada por inferencia basados en la distribución del contraste. Por esta razón la imagenología puede llegar a ser un gold estándar problemático. Por lo que la identificación y localización del espacio seguirá siendo por inferencia. 25 42 Debemos recordar que la anestesia neuroaxial es un procedimiento que se lleva a cabo a ciegas y aunque los factores anatómicos se consideran los marcadores más importantes para predicción son los anatómicos, existen otros factores que pueden predisponer la dificultad del bloqueo. Por esta razón se han estudiado diferentes métodos para el estudio del espacio epidural que van desde epiduroscopia en cadáveres, disecciones anatómicas, así como estudios de imagen para facilitar la correcta aplicación de esta técnica anestésica; resonancia magnética, epidurografía en tomografía axial computada, criomicrotomias, inyección vascular de látex, mieloscopia y uso de fibroscopios flexibles. 11,15 Y existen diferentes métodos que se apoyan en estudios imagenológicos como son los bloqueos guiados por ultrasonido, los cuales se han utilizado para disminuir el número de intentos y así los riesgos.2 Otro método de imagen que puede ser utilizado para la medición de la profundidad del espacio peridural es la resonancia magnética. Ya que existen estudios que afirman que las referencias anatómicas claras y la distancia de la piel al espacio peridural son predictores importantes de dificultad. Así mismo cuando existen referencias anatómicas poco claras estas predisponen a lesiones neurológicas como lesión del cono medular; ya que aunque en la mayoría de los pacientes la médula espinal termina en L1-L2, existen series de pacientes en los cuales puede ir hasta L3 (1-3%) y hasta L2 en (50%) esta variabilidad es más marcada en el sexo femenino. Eliminando una técnica deficiente, los motivos de falla de los bloqueos peridurales son escasos; difusión inadecuada de los fármacos inyectados por anomalías anatómicas congénitas o adquiridas, colocación inadvertida del catéter epidural fuera de la cavidad epidural, taquifilaxis o resistencia a las drogas utilizadas. La patología congénita o adquirida de la columna lumbar son factores determinantes en la falla y efectossecundarios de la anestesia y la analgesia neuroaxial. 43 Aunque la anatomía es el principal indicador para la correcta aplicación de un bloqueo; existen otros marcadores; como son la obesidad, la presencia de edema, variantes anatómicas, que dificultan la aplicación por lo que la predicción de un bloqueo potencialmente difícil puede ayudar a reducir el número de intentos disminuyendo los riesgos al paciente. 2 Ya que múltiples intentos y traumáticos se ha asociado a una mayor incidencia de hematoma epidural. 8 La ventana percutánea entre los espacios interlaminares está definida por los confines de los procesos espinosos y las láminas. Los cuales determinan la entrada de la aguja en el nivel seleccionado. 4 El hecho de que las apófisis espinosas no sean ni visibles ni palpables es lo que se correlaciona de forma más significativa con una dificultad de punción. 6 Existe controversia en la literatura acerca de los factores que han evidenciado influir significativamente en la dificultad de la realización de la técnica. Es así que existe discrepancia entre el grado de experiencia del médico que realiza la punción; algunos estudios afirman que sí resultó ser un factor importante a la hora de lograr un bloqueo éxitos, cuando la punción era realizada por un anestesiólogo adscrito. 6 Mientras otros autores descartan estos hallazgos. 1,4 Otros autores solo mencionan que la experiencia influye en si es traumático o no la técnica. 10 Existen autores que afirman que el factor más relacionado con la dificultad de la punción es la presencia de apófisis espinosas visibles y palpables a la inspección y palpación. 3,5 Hogan et al afirma que las variaciones anatómicas ocasionadas por la edad, nivel vertebral de punción, así como enfermedades pueden dificultar la canulación del espacio peridural así como el paso de catéteres en el mismo. 30 44 Se han generado intentos de escalas predictivas; sin embargo no han sido validados de manera concisa. 1 La realización de un sistema objetivo que permita identificar a los pacientes con esta problemática debe estar basada en mediciones objetivas; al tener variables cuantitativas y objetivas como son: edad, IMC, deformidades anatómicas evidenciadas (xifosis, lordosis, escoliosis); nos permitirá desarrollar un sistema de evaluación capaz de predecir la posible dificultad con el fin de minimizar o evitar complicaciones. Sin embargo existen varios aspectos que aún deben ser definidos. Y que se habla poco en la literatura de ellos. ¿qué se entiende por dificultad en la técnica? ¿cuándo hablamos de anestesia neuroaxial imposible? ¿cuándo es necesario cambiar de tipo de anestesia? ¿cuánto es el tiempo que debería estar destinado a la aplicación de la técnica? ¿debemos renunciar a colocar un catéter epidural porque hayamos sobrepasado el número de punciones recomendado? ¿cuál es el número límite de punciones? ¿cuántas punciones se podría realizar por cada espacio intervertebral? ¿cuántas si se emplea un abordaje medio? ¿cuántas si el abordaje es paramedial? Si el paciente está sedado, si se ha infiltrado el sitio de punción y, por lo tanto, está asegurada la ausencia de sufrimiento por parte del paciente, ¿se debe renunciar a una técnica que puede reducir el sufrimiento en el postoperatorio o incluso acortar el tiempo de recuperación del paciente porque se está tardando más que la media en la finalización de su preparación? ¿no hay un agravio comparativo hacia la especialidad cuando otro especialista tarda en sondar al paciente el tiempo que estime oportuno 45 hasta que lo consigue o cuando se tarda en extraer un material de osteosíntesis más de lo acostumbrado? Sprung et al realiza un estudio prospectivo, cuyo objetivo es definir si alguna de las características previamente mencionadas son factores predictivos de dificultad. Definen como bloqueo fallido aquel en el cual se tiene que volver a realizar la técnica, se necesita medicamento suplementario anestésico, o se requiera anestesia general. 8 Concluyeron que la identificación de las referencias anatómicas en la espalda del paciente y una anatomía anómala (anormalidades espinales) son mejores predictores de dificultad de bloqueo neuroaxial que el estado físico del paciente. No encontraron asociación significativa entre edad, sexo y experiencia del anestesiólogo.8 Entre sus conclusiones se encuentra que la deformidades espinales no afectan el éxito del bloqueo sin embargo impactarán en el número de intentos. El hábito físico (delgado-obeso) fue el único factor independiente para el número de punciones requeridas para lograr el bloqueo exitoso. Los pacientes con buenos puntos de referencia obtuvieron más éxitos. Los pacientes obesos tuvieron la menor proporción de buenos puntos referencia solo 34% comparado con el grupo de delgados y atléticos. Sin embargo los puntos de referencia no afectaron el resultado; no existe diferencia significativa según el autor. 8 I Chien et al siguiendo los resultados de Sprung, decidieron analizar si el grado de palpación de las estructuras anatómicas de referencia para la punción sería útil para predecir la dificultad en la realización de un bloqueo peridural. Realizaron un estudio doble ciego, a 848 pacientes, en el cual se registraron datos demográficos, estado físico definido por el IMC (normal, delgado, obeso 46 y embarazada), anatomía de la columna (normal o anómala) y el grado de palpación de las estructuras de referencia (grado 1 = apófisis espinosas (AE) visibles, grado 2 = AE no visibles pero fácilmente palpables, grado 3 = AE no se ven ni se palpan pero se consigue palpar el espacio intervertebral con el pulgar, grado 4 = ninguna de las circunstancias previas). Ellos concluyen concluyen que el grado de palpación de AE y EI tiene valor significativo como predictor de dificultad y que el estado físico, incluyendo obesidad y embarazo, no es considerado un predictor menor ya que su valor es estadísticamente significativo. No se analizó la relación con la experiencia del anestesiólogo, aceptando como válidos los resultados de Sprung. De Oliveira GR et al como nueva variable analizaron la colocación del paciente, definida como buena o mala, en función de su habilidad para flexionar piernas y columna y colocarse correctamente. Se plantearon valorar nuevamente la experiencia del anestesiólogo. Estudiaron 1481 pacientes y propusieron como factores predictivos independientes de dificultad la palpación de las referencias anatómicas, la experiencia del anestesiólogo y la colocación del paciente. Tessler MJ et al publicaron un estudio en el que buscaban determinar si la anestesia espinal resultaba más difícil de realizar en el paciente anciano, es decir, si la edad podía influir en la dificultad de la punción. Para ello se valoraron las siguientes variables: tiempo para realizar la técnica, número de agujas utilizadas y de intentos, en todos los bloqueos espinales realizados durante 18 meses consecutivos. En total, se analizaron 999 pacientes y fueron divididos en 3 grupos: pacientes < 50 años (grupo 1) 368/999, pacientes entre 50-70 años (grupo 2) 336/999, pacientes > 70 años (grupo3) 295/999. Aunque el tiempo destinado a realizar la técnica no fue estadísticamente significativo, se observó una frecuencia mayor en el número de agujas utilizadas y más de un intento en la población de > de 70 años, concluyendo que la edad del paciente es un predictor independiente menor de aumento de dificultades técnicas en la anestesia espinal. 47 Atallah M.M. et al se propusieron analizar nuevamente si la experiencia del anestesiólogo influía ya que no quedaba del todo clara con los estudiosprevios. Diseñaron una escala predictiva valorando los siguientes parámetros: edad, IMC, presencia de alteraciones anatómicas, características radiológicas de la columna lumbar y la palpación de las apófisis espinosas, en 300 pacientes propuestos para cirugía urológica (en todos se pedía de manera rutinaria la radiografía lumbar). Estas variables se valoraron preoperatoriamente por un investigador independiente del que realizó la técnica y en función de la puntuación se obtuvieron 9 grados (0 a 9). La dificultad de punción se valoró de acuerdo a tres variables: número de pinchazos, número de niveles en los que se intentó y el éxito o fracaso de la anestesia espinal. Concluyeron que la palpación de las AE y las características radiológicas de la columna vertebral lumbar son dos predictores independientes de dificultad durante la anestesia espinal. No encontraron diferencias entre adjuntos y residentes. En grados superiores al grado 4, la escala predecía dificultad de punción y al usarla se correspondía con la realidad en dos tercios de los casos. 1 Atalah M.M et al, afirman que los marcadores óseos son un factor independiente de predicción de dificultad en anestesia neuroaxial. Mientras que la experiencia del anestesiólogo esta aún poco clara. Afirman que la presencia de osteofitos, calcificación de ligamentos o espacios intervertebrales reducidos se consideraron como predictores de dificultad. . Los marcadores anatómicos son el único factor independiente así como las características radiológicas. 1 Existen estudios en poblaciones especiales como la población obstétrica en las que las características anatómicas y fisiológicas pueden predisponer circunstancias para presentar dificultad en el bloqueo. En este particular grupo se encontró que la anormalidad en la columna vertebral, el IMC>30 Kg/m2 y la mala calidad de los puntos de referencia anatómicos son considerados factores predictivos de dificultad en la técnica epidural. Afirmando que la anormalidad espinal fue la variable predictiva más importante: aumentó 4 veces el riesgo de múltiples punciones. Esto contrasta con otros estudios cuya 48 población no es limitada solamente a pacientes obstétricas; donde la anatomía espinal anormal y el IMC>25 Kg/m2 tienen menor importancia. 7 Faitot V et al definieron como punción epidural difícil aquella en la que fue necesario más de un intento para identificar o canular el espacio epidural (se consideró nuevo intento la punción de la piel, no así redireccionar la aguja). Afirman en su estudio que los factores predictivos de punción epidural difícil según estudios previos fueron: IMC>30 Kg/m2, referencia anatómica grado 3-4 (definida como grado 3: apófisis espinosas no visibles ni palpables, pero espacio interespinoso palpable, grado 4: ninguna de las anteriores), perímetro abdominal >105 cm y la anormalidad espinal. El estudio que realizan es el primer estudio que evalúa los factores que predicen la dificultad para la canulación del espacio epidural en gestantes, realizadas por residentes sin experiencia previa en anestesia obstétrica. 7 Los resultados del estudio de Faitot V et al son comparables con los de otros estudios realizados en pacientes no obstétricas en los cuales la anormalidad en la columna vertebral, el IMC>30 Kg/m2, la mala calidad de los puntos de referencia anatómicos son considerados factores predictivos de dificultad en la técnica epidural. En este estudio en pacientes embarazadas; la anormalidad espinal fue la variable predictiva más importante: aumentando 4 veces el riesgo de múltiples punciones, esto contrasta con otros estudios con población mixta, donde la anatomía espinal anormal y el IMC>25 Kg/m2 tuvieron menor importancia. Este estudio es relevante ya que las punciones son realizadas por médicos residentes, los cuales adquieren las primeras habilidades técnicas y la experiencia táctil en el manejo de las técnicas neuroaxiales. 7 Otro factor relevante podría ser la posición inadecuada de las pacientes se ha relacionado con canulaciones difíciles 5, 8. Se asocia a mala posición: >65 años, IMC>30 Kg/ m2, anormalidades de la columna vertebral y un bajo cociente 49 intelectual 8. Sin embargo el perímetro abdominal>105 cm no parece favorecer una mala posición y por tanto una canulación epidural difícil. 7 El espacio intervertebral se cambia en un promedio de 2 a 3 punciones para un bloqueo exitoso cuando se presenta dificultad para el bloqueo y se requieren en su mayoría 2 intentos en este nuevo espacio. Sin embargo cuando existe falla en un nivel no se relaciona a la dificultad en otro. 8 El calibre de la aguja para punción subaracnoidea no influye para la dificultad del bloqueo según estos autores. De Blas García M. et al concluyen en su estudio que la complicación más frecuentemente hallada durante la punción, independientemente de la experiencia de quien realiza el bloqueo, fue la parestesia. La incidencia de esta complicación en la literatura es del 31 al 56% en pacientes no obstétricas. En las pacientes obstétricas, según Calvo et al7, la aparición de parestesias alcanzó el 43,5%. 18 De Blas García et al Al comparan residentes de 2º frente a 4º, y concluyen que existen diferencias significativas en cuanto a la presencia de complicaciones durante la punción asociada a la dificultad en la aplicación del bloqueo, con un menor número de parestesias y punciones hemáticas en los residentes de 4º año. 18 PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA No existen suficiente bibliografía que contenga parámetros que valoren de manera estricta factores predictores de dificultad en anestesia neuroaxial, como los hay de predicción de vía aérea difícil; por lo que el siguiente trabajo 50 pretende evaluar estos factores para poder establecer de manera estandarizada guías de detección ante una situación de tales características, y considerar una técnica anestésica alternativa o bien que se realice el procedimiento por una persona de amplia experiencia. Consideramos desarrollar un modelo predictivo de dificultad en la realización de los bloqueos regionales centrales. Este modelo nos permitirá identificar aquellos pacientes que tengan mucha probabilidad de presentar un bloqueo dificultoso para así tratar de optimizar todos los recursos disponibles para facilitar la punción o bien planificar otra estrategia anestésica y no someter al paciente a unos riesgos innecesarios. JUSTIFICACIÓN Y USO DE LOS RESULTADOS La posibilidad de detectar a los pacientes que puedan presentar dificultades a la hora de realizarles un bloqueo regional neuroaxial conllevará una menor aparición de complicaciones relacionadas con la técnica de punción. Una dificultad técnica prevista antes de realizar un bloqueo neuroaxial, puede influir en las decisiones del anestesiólogo, en cuanto a qué técnica es la mejor para el paciente evitando si procede el bloqueo neuroaxial y en el caso de estar indicado, poder decidir que sea el anestesiólogo con más experiencia el que lo realice. OBJETIVOS Como objetivo principal nos propusimos evaluar qué características del paciente o variables relacionadas con la colocación del paciente en el momento de 51 realizar la técnica de punción podrían influir en la predicción de dificultad en la realización del bloqueo. De esta manera trataremos de identificar los parámetros que se relaciona con mayor probabilidad de encontrarnos con dificultad a la hora de realizar un bloqueo neuroaxial y así desarrollar un modelo predictivo de dificultad en la realización de los bloqueos regionales centrales. Algo similar a la escala Mallampati, escala existente para evaluar el manejo de la vía aérea y predecir la dificultad en la intubación orotraqueal. Nuestro deseo
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