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1 UNIVERSIDAD NACIONAL AUTÓNOMA DE MÉXICO FACULTAD DE MEDICINA DIVISIÓN DE ESTUDIOS DE POSGRADO HOSPITAL GENERAL SALTILLO, SSC Tesis de posgrado: “PREVALENCIA DE RICKETTSIOSIS EN EL ESTADO DE COAHUILA EN EL AÑO 2013” Para obtener el grado: MÉDICO ESPECIALISTA EN MEDICINA INTERNA Presentado por: RICARDO TELLEZ MARROQUIN Director de Tesis: DR. YONATAN IVÁN RIVERA ARAGÓN Saltillo, Coahuila a junio 2015. UNAM – Dirección General de Bibliotecas Tesis Digitales Restricciones de uso DERECHOS RESERVADOS © PROHIBIDA SU REPRODUCCIÓN TOTAL O PARCIAL Todo el material contenido en esta tesis esta protegido por la Ley Federal del Derecho de Autor (LFDA) de los Estados Unidos Mexicanos (México). El uso de imágenes, fragmentos de videos, y demás material que sea objeto de protección de los derechos de autor, será exclusivamente para fines educativos e informativos y deberá citar la fuente donde la obtuvo mencionando el autor o autores. Cualquier uso distinto como el lucro, reproducción, edición o modificación, será perseguido y sancionado por el respectivo titular de los Derechos de Autor. 2 TESISTA RICARDO TELLEZ MARROQUIN Residente de IV grado de la especialidad de Medicina Interna Hospital General Saltillo Secretaría de Salud en Coahuila DIRECTOR DE TESIS Dr. Yonatan Iván Rivera Aragón Especialista en Medicina Interna Servicio de Medicina Interna en Instituto Mexicano del Seguro Social 3 AUTORIZACIÓN AUTORIDADES ___________________________________ Dr. Rómulo Trujillo Cedillo Médico Internista Director Hospital General Saltillo ___________________________________ Dr. Víctor Hugo Estrada García Médico Cirujano Oncológico Jefe de Enseñanza Hospital General Saltillo ___________________________________ Dr. Yonatan Iván Rivera Aragón Médico Internista Instituto Mexicano del Seguro Social Director de Tesis ___________________________________ Dr. Iván Enrique Castañuela Sánchez Intensivista Internista Hospital General Saltillo Tutor de Especialidad Medicina Interna 4 DEDICATORIA Gracias a Dios porque me condujo al bello camino de la medicina, por poder dedicar mi vida a la salud y cuidados de otros, principalmente servir. A mis padres por su apoyo incondicional, por sus palabras y sus silencios de apoyo, sin ustedes no pudiese haber llegado a esta etapa. A mi esposa, mi mejor amiga, mi roca, porque ella me impulsa cada día a ser mejor, por caminar este bello camino junto a mí. A mi hijo porque es mi motor a ser mejor y dar más de mí cada día, a mi causa y a mis pacientes. A mi hermana que siempre me ha dado su apoyo, compañía aun en la distancia. A mi hermano por su apoyo en los momentos difíciles de cursar, por el apoyo moral y académico. Al Dr. Castañuela por su amistad, consejos y apoyo, que sin darse cuenta ha sido un gran ejemplo para mí, para mi formación y para mi práctica médica. Al Dr. Yonatan por ser compañero, amigo y maestro, por ayudar en momentos difíciles, por apoyar, por ser amigo y ser guía, aun cuando no siempre estuviese físicamente a mi lado, gracias por el apoyo con esta tesis. A mis compañeros y hermanos de residencia porque con ellos he crecido, aprendido, reído, llorado, porque serán y son mis hermanos y que los llevo conmigo a donde quiera que voy, sus enseñanzas son muy valiosas para mí. 5 INDICE APARTADO 1. RESUMEN 7 2. ANTECEDENTES 8 3. JUSTIFICACIÓN 40 4. PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA 42 5. PREGUNTA DE INVESTIGACIÓN 42 6. HIPÓTESIS 43 7. OBJETIVOS 45 8. METODOLOGÍA 42 9. MUESTREO Y MUESTRA 47 10. VARIABLES 47 11. DESCRIPCIÓN DEL ESTUDIO 48 12. PLAN Y RECOLECCIÓN DE LA INFORMACIÓN 51 13. PLAN DE PROCESAMIENTO DE DATOS 51 14. PLAN DE ANÁLISIS 51 15. CONSIDERACIONES ÉTICAS 51 16. PLAN DE UTILIZACIÓN Y DIFUSIÓN DE RESULTADOS 52 17. RESULTADOS 53 18. DISCUSIÓN 56 19. CONCLUSIONES 59 20. BIBLIOGRAFÍA 60 21. ANEXOS 65 6 INDICE DE TABLAS GRÁFICA 1. INCIDENCIA ANUAL POR GRUPO ETARIO X 100,000 HABITANTES 65 GRÁFICA 2. INCIDENCIA TOTAL ANUAL X 100,000 HABITANTES 65 FIGURA 1. NÚMERO DE PACIENTES, CASO SOSPECHOSOS Y CASOS CONFIRMADOS. 66 GRÁFICA 3. DISTRIBUCIÓN DE SEXO. 66 GRÁFICA 4. DISTRIBUCIÓN POR EDAD. 67 GRÁFICA 5. DISTRIBUCIÓN POR MUNICIPIOS. 67 GRÁFICA 6. DISTRIBUCIÓN POR INSTITUCIONES. 68 GRÁFICA 7. DISTRIBUCIÓN DE CASOS POR MES. 68 GRÁFICA 8. DATOS CLÍNICOS DE LOS CASOS CONFIRMADOS POR INFECCIÓN POR RICKETSSIA. 69 GRÁFICA 9. MÉTODOS DE CONFIRMACIÓN DE LABORATORIO. 69 GRÁFICA 10. ESPECIES DE RICKETSSIA. 70 GRÁFICA 11. ANTECEDENTE DE CONTACTO CON GARRAPATA. 70 GRÁFICA 12. ANTECEDENTE DE CONTACTO CON PERROS. 70 GRÁFICA 13.ANTECEDENTE EPIDEMIOLÓGICO. 71 GRÁFICA 14. MORTALIDAD. 71 7 1. RESUMEN Las rickettsiosis son entidades clínicas de tipo zoonótico, causadas por bacterias intracelulares estrictas de los géneros Rickettsia y Orientia, pertenecientes a la familia Rickettsiaceae. Su ecología está determinada por factores ambientales y la presencia de vectores específicos que condicionan el establecimiento y la epidemiología en diferentes regiones del mundo. Objetivo: Presentar los hallazgos clínicos y de laboratorio en adultos con fiebre manchada de las Montañas Rocosas, así como el tratamiento que deberá ser iniciado en la etapa más temprana de la evolución del padecimiento, para poder disminuir la alta mortalidad. Además, instituir las medidas preventivas para poder disminuir el número de casos que se presentan en el estado de Coahuila. Material y métodos: La investigación es de tipo observacional, descriptivo, retrospectivo, donde se analizará toda la población del estado de Coahuila, de entre 15 y 65 años de edad, en la que se confirme infección por Rickettsia spp. Resultados: Se obtuvieron un total de 360 pacientes, 334 de casos sospechoso de infección y 26 con confirmación por laboratorio de infección por Rickettsia, de los cuales la edad promedio fue de 27.4 años, siendo más frecuente entre 15 a 24 años, con mayor prevalencia en el género femenino con 58%. Los municipios del estado de Coahuila afectados en el 2013 por infección de Rickettsia fueron: Saltillo (61.5%), Parras de la Fuente (23%) Los principales síntomas fueron cefalea (76.90%), fiebre (65.30%), y vomito (30.70%). La confirmación por laboratorio se realizó con serología en 20 de los pacientes y con Reacción de Polimerasa en Cadena (PCR) en 6 pacientes. Las especies de Rickettsia encontradas en este estudio fueron R. rickettsi (19 casos), R. prowazecki (0 casos), R. tiphy (1 caso), detectados por serología, en cuanto a los casos detectados por PCR, no se distinguieron especies, por lo que se reporta Rickettsia spp. en 6 de los pacientes. De los pacientes estudiados se detectó que el 54% tuvieron contacto con garrapatas, 15.3% tuvieron contacto con perros, ningún paciente refiere mordedura de garrapata (0%). La mortalidad fue de 15.3 por ciento. Conclusiones: Este padecimiento es más frecuente en pacientes jóvenes, a diferencia de lo encontrado en otros estudios. En nuestra población estudiada vemos un incremento en el número de casos de Rickettsiosis por año en un periodo del 2003-2013 donde de tener una prevalencia de <1% en 2003 al 2005, se mantuvo en <1% en 2011 pero tuvo un incremento casi del triple (2.63%) en el 2012 y posteriormente un incremento a 6.68% en el 2013. La sintomatología de los pacientes que estudiamos difiere del cuadro clínico clásico de Rickettsiosis que incluye, fiebre, mialgias y cefalea, en nuestro grupo de pacientes del 2013 los síntomas más frecuentes eran fiebre, cefalea y vómito. La cercana relaciónentre contacto con garrapatas así como contacto con mascotas caseras específicamente el perro, son de alta prevalencia en nuestro grupo de estudio. Además se vio que la mayoría de los casos de Rickesttsiosis ocurrieron en Febrero-Marzo cuando es más común en meses lluviosos (Sept-Oct-Nov).En cuanto a la cantidad de casos confirmados del 2013 encontramos una mortalidad menor de la reportada en la literatura del 15,3%. Palabras clave: Rickettsia, Coahuila, infecciones por Rickettsia, epidemiología, diagnóstico, zoonosis Rickettsioses are a group of zoonotic diseases caused by strict intracellular bacteria of the genus Rickettsia and Orientia which belong to the Rickettsiaceae family. Their ecology is influenced by environmental factors and the presence of specific vectors that determine the establishment and epidemiology in different regions of the world. Objectives: To present the clinical and laboratory findings in adults with Rocky Mountain spotted fever as well as its treatment, which should be initiated at the earliest stage of the evolution of disease and thus be able to reduce the high mortality. In addition, to institute preventive measures to reduce the number of cases in the state of Coahuila. Materials and methods: An observational, descriptive and prospective cross, were its analyzed all the residents of the state of Coahuila, between 15 and 65 years, in whom the infection by Rickettsia spp is confirmed. . Results: A total of 360 patients were obtained, of which 334 were suspected cases of infection and 26 we confirmed by laboratory testing for Rickettsia, of whom the mid age was 27.4 years, more frequent between the ages of 15 and 24, with female predominance with 58%. The cities with more cases were Saltillo (61.5%) and Parras de la Fuente (23%).The main symptoms were headache (76.90%), fever (65.30%) and vomit (30.70%). The confirmation testing was serology assay in 20 patients and polymerase chain reaction in 6 patients. The species of Rickettsia found in our study were R. rickettsi (19 cases), R. prowazecki (0 cases), R. tiphy (1 case), In 6 cases that were detected with PCR, the species were not distinguish and were reported as Rickettsia spp. 54% of the patients were in contact with the ticks. 15.3% were in contact with dogs and none of the patients referred tick bite. Mortality was 15.3%. Conclusions: This condition is more common in young patients, in contrast to that found in other studies. In our study population, we see an increase in the number of cases of Rickettsios per year in a period of the 2003-2013 where have a prevalence of < 1% in 2003 to 2005, in addition to not having data available from 2006-2007 - 2009 and 2010, held in < 1% in 2011 but had increased almost three times (2.63%) in 2012 and later increased to 6.68% in 2013. The symptoms of the patients we study differs from the classic clinical picture of Rickettsiosis including, fever, myalgia, and headache, in our group of patients from 2013 the most frequent symptoms were fever, headache and vomiting. The close relationship between contact with ticks as well as contact with household pets specifically the dog, are of high prevalence in our study group. Also saw that the majority of cases of Rickesttsiosis occurred in February-March, when the infection it is most common in rainy months (Sept-Oct-Nov) according to the literature review. In terms of the number of cases confirmed 2013 we found the mortality of 15.3% is less than those reported in the literature. We must take into account the severity of this disease as well as the importance diagnosed to have in our midst, hardly preventive habits are created to try and prevent major risk factors such as exposure to dogs or the tick directly, but it is something in which we should emphasize Key words: Rickettsia, Coahuila, Rickettsia infections, epidemiology, diagnosis, zoonoses. 8 2. ANTECEDENTES Debido a que la Rickettsiosis tiene una baja incidencia en el estado de Coahuila, con el emergente brote del 2013, existe poca literatura sobre los casos de dicha patología en el estado, de los cuales no existe literatura de la epidemiologia en adultos. Hoy en día con los reportes epidemiológicos más completos y fidedignos, así como mayor disponibilidad de las nuevas tecnologías informáticas, podemos llevar a cabo un análisis, comparando información a lo largo de varios años de una manera fácil y sencilla, así como estudiar a fondo años particulares de los cuales existen base de datos completas y recientes. Las rickettsiosis son entidades clínicas de tipo zoonótico, causadas por bacterias intracelulares estrictas de los géneros Rickettsia y Orientia, pertenecientes a la familia Rickettsiaceae. Su ecología está determinada por factores ambientales y la presencia de vectores específicos que condicionan el establecimiento y la epidemiología en diferentes regiones del mundo. En las Américas, durante el siglo XX, únicamente eran reconocidas tres de estas enfermedades: la fiebre manchada de las Montañas Rocosas, el tifus epidémico y el tifus endémico, Sin embargo, a partir del año 2000 se han descrito más de 10 especies diferentes previamente desconocidas en este continente, tanto en artrópodos como en casos clínicos, hecho que permite clasificarlas como entidades clínicas emergentes y reemergentes. Dadas las manifestaciones clínicas de las enfermedades causadas por rickettsias, siendo la gran mayoría inespecíficas y, por lo mismo, compartidas con otras enfermedades infecciosas, especialmente virales y bacterianas, han sido 9 enmarcadas entre los diagnósticos diferenciales del síndrome febril agudo, tanto en áreas urbanas como tropicales. En la actualidad, se cuenta con métodos diagnósticos directos e indirectos, que son útiles en la identificación del agente infeccioso, en este caso, causante de rickettsiosis.1 2.1 INTRODUCCION Las fiebres maculosas constituyen un grupo amplio de infecciones zoonóticas transmitidas por garrapatas, ácaros o pulgas y causadas por distintas rickettsias íntimamente relacionadas. Entre ellas se encuentran la fiebre maculosa de las Montañas Rocosas, la fiebre botonosa, la fiebre africana por picadura de garrapata, el tifus del norte asiático transmitido por garrapatas, la linfangitis asociada a rickettsiosis, el tifus de Queensland transmitido por garrapatas, la fiebre maculosa de la isla de Flinders, la fiebre maculosa de Japón, la linfadenopatía transmitida por garrapatas, la fiebre maculosa del Lejano Oriente, la fiebre maculosa transmitida por pulgas y la rickettsiosis pustulosa.2 Las rickettsias son microorganismos patogénicos emergentes o reemergentes en muchos lugares del planeta. Las distintas enfermedades presentan un amplio espectro de virulencia. La más grave de ellas es la fiebre maculosa de las Montañas Rocosas, que tiene una mortalidad histórica en Montana del 66%. Incluso los pacientes jóvenes y previamente sanos pueden morir como consecuencia de esta afección. En los últimos años se ha reconocido la amplia distribución mundial y la gravedad potencial de otras fiebres maculosas, sobre 10 todo en Europa, África, Australia, Asia y Japón. El diagnóstico precoz sigue siendo complejo.3 2.2 HISTORIA La familia Rickettsiaceae fue nombrada en honor a H.T. Ricketts. El Dr. Ricketts descubrió y describió el ciclo del agente causante de la fiebre maculosa de las Montañas Rocosas (FMMR) a principios del siglo XIX. Murió en 1910 de fiebre Tifoidea mientras investigaba la enfermedad en México. La fiebre maculosa de las Montañas Rocosas (FMMR) se describió por primera vez en Idaho a finales del siglo XIX.3 El reporte más antiguo de epidemia por Rickettsia en Europa data del año 429 a.C., cuando ocurre la plaga del tifus en Atenas. Mientras que en América, las referenciasmás antiguas de estas zoonosis provienen de las leyendas de los indios Shoshones.4 En América, pudo existir antes de la conquista, pues se han encontrado en Perú piojos en momias.5 Si fue introducida en el siglo XV por los españoles en el “Nuevo Mundo” o existía ya en América es un tema de debate. Hubo que esperar hasta 1909 para que Charles Nicolle diera a conocer que el piojo era el vector de esta terrible infección, y que con simples medidas higiénicas, como cambiarse de ropa y lavarla con cierta frecuencia, se rompía la cadena de transmisión.6 En 1899 se reconoció por primera vez la Fiebre Manchada de las Montañas Rocosas (o RMSF por Rocky Mountain Spotted Fever), por Maxey, en Norte América, pero los pioneros en investigar la etiología de la RMSF fueron los 11 patólogos Wilson y Chowning en 1902, quienes estudiaron la enfermedad a partir de necropsias de individuos infectados y la describieron como una falla en los capilares sanguíneos asociada a infección con parásitos intra-eritrocitarios (Pyroplasma hominis).7,8 El primero en establecer la naturaleza infecciosa de la enfermedad y el papel de la garrapata como vector fue Ricketts en el oeste de Montana, en 1906. Wolbach identificó claramente en 1919 a la rickettsia causante del problema en el interior de las células endoteliales.3 En 1906, estudios realizados por Howard Ricketts en curíes o cobayos, demostraron que la FMMR era transmitida a través de sangre infectada, que el vector de esta enfermedad eran las garrapatas de la especie Dermacentor andersoni y que este vector transmitía la bacteria a través de su progenie (transmisión transovarial). Luego de esto, en los Estados Unidos, América Central y Sur América, los médicos comenzaron a identificar casos de FMMR transmitida por garrapatas. La descripción clínica de la enfermedad se realizó en 1925 a partir de un niño de Indiana (Estados Unidos), que sufrió la enfermedad y luego se confirmó con hallazgos de laboratorio.7 Hone, en el año 1922, fue el primero en describir infecciones en seres humanos «sumamente similares a la fiebre por tifus». El tifus murino se ha considerado un problema zoonótico a nivel mundial desde que, en 1926, Maxcy diferenció con éxito las distintas fiebres por tifus e identificó al tifus murino como una entidad propia desde un punto de vista clínico y epidemiológico. En 1931, Dyer aisló una nueva rickettsia del grupo del tifus en ratas y pulgas. Esta enfermedad a menudo 12 está infradiagnosticada, y erróneamente se considera clínicamente leve, cuando en realidad puede provocar epidemias y tiene una alta prevalencia en determinadas regiones geográficas. El cuadro clínico puede ser grave, aunque la mortalidad suele ser escasa. Actualmente está bien establecida su relación con las pulgas de ratas y gatos. Tiene una prevalencia variable en los seres humanos y la ecología de esta zoonosis es cambiante, lo que complica tanto el diagnóstico clínico como el basado en el laboratorio.3 En 1931, Badger et al, describieron casos de FMMR en diferentes partes de Estados Unidos y confirmaron que la enfermedad estaba generalizada en Norte América. En Suramérica específicamente en Brasil, desde 1930 se ha documentado la enfermedad y se le denominó “Tifus exantémico de Sao Paulo”, “Tifus exantémico de Minas Gerais” y finalmente “Fiebre manchada del Brasil” (BSF por Brazilian Spoted Fever), su etiología era la Rickettsia rickettsii .8 En 1925, Hoffman realiza la primera monografía sobre la fiebre manchada en Sinaloa. En 1939 reportan tres muertes en Gómez Palacio, Durango, por un cuadro parecido al tifo, pero en el que no se encontraron piojos. En 1943 se aísla por primera vez en sangre el germen en el Fuerte Sinaloa, México. En 1945, Bustamante, Ortiz y Varela, identifican como vector a la garrapata (Rhipicephalus sanguineus) en Sinaloa. En 1945, el Dr. Alfonso Elizondo y sus colaboradores describen la enfermedad y a la garrapata en la Comarca Lagunera, con una letalidad de hasta 70%. En 1940, cuando se descubre el cloranfenicol y las tetraciclinas, se observa una disminución del alto porcentaje de letalidad de esta enfermedad, pero bajo la condición de iniciar el tratamiento de forma temprana.8 13 La Fiebre Manchada de las Montañas Rocosas (FMMR) es la más frecuente y severa de las ricketsiosis reportada en México.7 Es causada por la Rickettsia rickettsii, que en nuestro país se disemina al humano por la garrapata del perro, Rhipicephalus sanguineus7 La FMMR inicialmente fue descrita en 1896 en el Valle de Idaho y era llamada sarampión negro, debido a su exantema característico. En 1900 ya se tenía referencia de esta enfermedad en otras áreas: en el norte en Washington y Montana, y en el Sur en California, Arizona y Nuevo México.2 2.3 MICROORGANISMOS El microorganismo etiológico recibió el nombre de Rickettsia rickettsii. El origen geográfico, las observaciones clínicas y epidemiológicas y las técnicas de sero- tipificación fueron las bases históricas para la designación de las especies de las cepas de rickettsias subsiguientes.9 Los análisis filogenéticos han revelado con mayor precisión las relaciones evolutivas entre un número rápidamente creciente de cepas clínicas y ambientales. Es probable que la virulencia fuera un mecanismo relativamente tardío de la supervivencia evolutiva para las Rickettsias, las cuales surgieron como simbiontes de insectos, arácnidos, sanguijuelas y amebas. La filogenómica contemporánea basada en las secuencias genómicas completas ha definido grupos de fiebres maculosas, ancestrales, tifoideas y de transición. Rickettsia 14 australis, R. felis y R. akari son miembros del grupo de transición. Los criterios para la designación de las especies de Rickettsia basados en las especies denominadas históricamente son una estrategia considerada inadecuada por algunos taxonomistas de renombre; ahora están determinados por la divergencia del ARN ribosómico 16S, la citrato-sintasa, las proteínas A y B de la membrana exterior y el Sca 4 de las especies previamente designadas e íntimamente relacionadas. Estos criterios han dado lugar a propuestas para la designación de las especies de cepas de rickettsias que guardan una relación mucho más estrecha que otras especies de bacterias. Por ejemplo, uno de los criterios propuestos, con una divergencia del 0,2% del gen del ARN ribosómico 16S, crearía muchas más especies que la divergencia habitual del 1-3% de otras categorías bacterianas. Una estrategia atractiva, la de la filogenia concatenada, basada en la tipificación de la secuencia de varios locus empleando 8 locus de genes de Rickettsia, ha puesto de relieve que la designación de especies de R. sibirica, R. africae y R. parkeri debería someterse a un debate más detallado. Las cepas de rickettsias del grupo de las fiebres maculosas (GFM) que se han asociado con fuerza o débilmente a las infecciones en seres humanos (R. rickettsii, R. conorii, R. africae, R. sibirica, incluyendo a la cepa mongolitimonae, R. honei, R. japonica, R. slovaca, R. parkeri, R. massiliae, R. monacensis, R. aeschlimannii, R. heilongjiangensis, R. amblyommii y R. helvetica) merecen definitivamente su identificación con fines clínicos y epidemiológicos. Sigue siendo motivo de controversia si tanto estas cepas como un número creciente de candidatas merecen una designación independiente como especies.3 15 La fiebre manchada por Rickettsia rickettsii (FMRR) es la más letal de las infecciones del grupo de fiebres manchadas.10 El primer caso de infección por Rickettsia felis fue reportado en 2002. Aunque ya se ha reportado y detectado Rickettsia felis en garrapatas y en mamíferos de otros paises.11 2.4 PRINCIPALES GARRAPATAS VECTORES DE RICKETTSIA EN LATINOAMERICA Las garrapatas (Acari: Ixodida) son ectoparásitos hematófagos de vertebrados terrestres,incluyendo animales domésticos y al hombre. La importancia sanitaria de las garrapatas radica en su capacidad para actuar como vectores de microorganismos patógenos como protozoos, rickettsias, espiroquetas y virus, y por su potencial para provocar toxicosis, parálisis, irritación y alergia a sus hospedadores. Son consideradas, junto con los mosquitos, como los artrópodos vectores más importantes de agentes patógenos. Particularmente, en la región neotropical hay descritas 200 especies de garrapatas, de las cuales 116 pertenecen a la familia Ixodidae y 84 a la familia Argasidae. En Latinoamérica y el Caribe, las especies de garrapatas implicadas como vectores comprobados o potenciales de rickettsias están incluidas dentro de los géneros Amblyomma, Rhipicephalus, Haemaphysalis y Dermacentor, todos pertenecientes a la familia Ixodidae.12 En el caso particular de las rickettsiosis humanas en Latinoamérica, las principales especies de garrapatas involucradas como vectores en la epidemiología de estas 16 enfermedades son Amblyomma cajennense, Amblyomma triste, Amblyomma ovale, Amblyomma aureolatum y Rhipicephalus sanguineus.13 Uno de los principales vectores de R. rickettsii en Latinoamérica es A. cajennense, cuya distribución abarca distintos ambientes ecológicos desde el sur de E.U.A. al norte de Argentina. Otros vectores de R. rickettsii son A. aureolatum, registrada en Argentina, Brasil, Guyana Francesa, Paraguay, Surinam y Uruguay, y R. sanguineus, un taxón cosmopolita también con capacidad para transmitir R. massiliae. Otras dos especies de la familia Ixodidae, A. triste y A. ovale, han sido determinadas como vectores de R. parkeri en Sudamérica. La primera está presente en Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Ecuador, Paraguay, Perú, Uruguay, Venezuela, México y E.U.A, mientras que A. ovale se distribuye en Argentina, Belice, Bolivia, Brasil, Colombia, Costa Rica, Ecuador, Guyana Francesa, Guatemala, Guyana, México, Nicaragua, Panamá, Paraguay, Perú, Surinam, Trinidad y Tobago y Venezuela.6 2.5 EPIDEMIOLOGÍA Es típica del ámbito rural y de los meses estivales, relacionándose con altas temperaturas y bajo nivel de precipitaciones.14 El índice de mortalidad por Ricketsias en pacientes sin tratamiento es de hasta el 20%.15 Las rickettsias infectan y se multiplican en todos los órganos de sus huéspedes invertebrados. Infectan los ovarios y los oocitos, que pueden ser infectivos en las subsecuentes etapas de vida. Por medio de las glándulas salivares de las garrapatas, transmiten 17 la enfermedad a sus huéspedes vertebrados durante la alimentación. Las bacterias ganan acceso a las células del huésped por endocitosis; a través de movilidad mediada por actina, invaden las células endoteliales adyacentes para evitar el sistema inmune humoral. Rickettsia rickettsii activa kalikreína y sistemas de kinina, con lo que causa coagulación local. El interferón gama y el factor de necrosis tisular alfa activan linfocitos T y células naturales asesinas, como mediadores de la respuesta a las rickettsias. El incremento de la permeabilidad vascular se manifiesta como rash hemorrágico, perturbación respiratoria, hipopocalemia, falla renal y defectos neurológicos diversos. La naturaleza de la vasculitis y el grado de trombosis y necrosis varían de acuerdo con la especie de rickettsia.5 En México durante las décadas de 1930 a 1950, casos de FMMR fueron observadas en Coahuila, Durango, San Luis Potosí, Sinaloa, y Sonora; donde el vector que se identifico fue Rhipicephalus sanguineus.16 De 1974 a 2002 se registraron en nuestro país 37 casos en los que se asoció la enfermedad a ardillas voladoras; en México, podemos encontrarlas en áreas montañosas desde Tamaulipas hasta Chiapas.5 En las últimas dos décadas se han descrito nuevos brotes de infecciones producidas por agentes rickettsiales: Fiebre manchada oriental o japonesa (Rickettsia japonica), de la que desde 1984 se han reportado 30 a 40 casos al año. 18 Fiebre de Aztrakhan (R. conorii, subespecie Caspia), detectada en 1970 en el área del mar Caspio. En 2001 se aisló de soldados y perros en Kosovo Ambas fiebres se acompañan de un rash maculopapular en 94% de los casos, de una mancha negra (tâche noire) en 23%, y de conjuntivitis en 32%. Rickettsia africae (fiebre por garrapata africana) Rickettsia honei (fiebre manchada de las islas Flinders) Rickettsia sibirica, subespecie Mongolotimonae. Fiebre manchada de Siberia y Mongolia. Se encontró tifo de Siberia (1934), de 1979 a 1997 (23 891 casos) en China y Europa como subespecie de R. mongolotimonae Fiebre del Mediterráneo (R. conorii, R. conorii, subespecie Israelensis), descrita en 1910, endémica de Portugal y Francia Rickettsia slovaca En México, los reportes de casos de fiebres manchadas se habían restringido a Rickettsia rickettsii y prowasekii; pero en el estado de Nuevo León, durante 2006 se obtuvieron 25.5% de anticuerpos contra rickettsias del grupo tifo, 16% de los cuales pertenecieron a la especie Rickettsia parkerii a partir de 345 sueros de pacientes con un síndrome semejante al dengue. La caracterización del ADN identificó Rickettsia prowasekii como agente causal Se ha encontrado Rickettsia felis, otra especie transmitida.5 19 Definiciones operacionales En México, se han definido varias categorías de caso, en base a lo observado durante los brotes previos. Caso sospechoso: Toda persona que presente fiebre acompañada de cualquiera de los siguientes signos o síntomas: hiperemia faríngea, rash cutáneo, vómito, dolor abdominal, diarrea; en las personas que puedan referirla se añadirá la presencia de cefalea y que además proceda de áreas donde se identifiquen los vectores o haya sido confirmada la ocurrencia de la enfermedad. Caso probable: Todo caso sospechoso que adicionalmente presente dos o más de los siguientes: • Alteraciones neurológicas (indiferencia al medio, irritabilidad, estupor, coma, convulsiones, signos meníngeos; en menores de 18 meses: presencia de fontanela abombada, signo de “sol naciente”); alteraciones del citoquímico del LCR compatibles con infección bacteriana. • Choque. • Púrpura y/o sangrado a cualquier nivel. • Alteraciones hepáticas (ictericia, aumento de las bilirrubinas por encima del estándar del laboratorio clínico, y/o hipoalbuminemia, y/o elevación de transaminasas). • Alteraciones hematológicas: plaquetopenia (500, aumento de los tiempos de coagulación (por arriba del estándar del laboratorio clínico), anemia. • Hiponatremia (Na sérico menor a 135 meq/l). • Elevación de DHL mayor a 350 UI. • Acidosis (metabólica y/o respiratoria). 20 Caso Confirmado: Todo caso probable en quien se confirme la presencia de Rickettsia spp. mediante pruebas de laboratorio debidamente avaladas y autorizadas por la autoridad competente. Caso descartado: Todo caso probable en quien no se identifica la presencia de Rickettsia spp. mediante las pruebas de laboratorio 2.6 LABORATORIO Durante las 2 últimas décadas, se han caracterizado por muchos métodos de análisis genéticos nuevos para identificar y aislar Rickettsia.17 El diagnóstico de la FMMR está basado en el cuadro clínico y la identificación por inmunofluorescencia indirecta de anticuerpos contra el agente que es hasta ahora el Estándar de oro y con el que se puede determinar la seroprevalencia en los casos agudos, o bien aquellos que estuvieron en contacto con la bacteria a través de la escala de medición basada en diluciones crecientes que parten de 1/64, 1/128, 1/256.18 Diagnóstico microbiológico Recolección, conservación y transporte de las muestras humanas y garrapatas La selección de las muestras dependerá en cierta medida de los signos y síntomas con los que se presente el paciente, del tiempo de evolución de la enfermedad, así como de la infraestructuray capacidades de diagnóstico 21 disponibles en el laboratorio de microbiología donde se vayan a procesar. Los especímenes más adecuados para el diagnóstico de rickettsiosis son: sangre con anticoagulante (heparina, EDTA y citrato); suero; biopsia cutánea de las pápulas, vesículas o escara de inoculación; hisopado de la escara; y la propia garrapata. La selección de la muestra dependerá del tipo de diagnóstico solicitado por el médico clínico (serología, técnicas moleculares o cultivo). En lo posible, siempre se debe recoger la mayor cantidad de la muestra o muestras a estudiar y guardar parte de las mismas para posteriores evaluaciones o empleo futuro de otras técnicas. En función de la muestra objeto de estudio, ésta se recogerá de forma estéril y, de ser posible, antes del inicio del tratamiento antibacteriano. Las muestras remitidas al laboratorio deben cumplir una serie de condiciones que determinarán, en cierto grado, la eficiencia y la calidad de los resultados obtenidos. Además, para optimizar la rentabilidad microbiológica resulta de vital importancia transportar la muestra en unas determinadas condiciones de tem- peratura en el menor tiempo posible. Por ejemplo, en el caso de que se vaya a realizar cultivo, el procesamiento de la muestra no se debe demorar. En el caso de que no se pueda procesar de forma inmediata o en las próximas horas, y/o se vaya a enviar a un centro de referencia, se debe congelar a -80°C lo antes posible. Las muestras se deben recoger y enviar en contenedores estériles con cierre hermético, mediante mensajería urgente en hielo seco para evitar la descongelación. Se debe tener siempre presente la legislación vigente en cada país sobre transporte de materiales biológicos y peligrosos. 22 Aunque hay pocos estudios sobre la disminución de la viabilidad de las rickettsias a temperatura ambiente o por la acción de la congelación-descongelación de la muestra, es conocida la dificultad de aislar estos agentes a partir de muestras en las que se demora el cultivo celular. Factores como la temperatura elevada (> 37ºC), el sobre crecimiento de otras bacterias y la refrigeración prolongada, pueden comprometer el aislamiento de las rickettsias. Menos requerimientos se precisan para el diagnóstico molecular, puesto que los ácidos nucléicos permanecen estables aun cuando la bacteria no es viable. Por tanto, en estos casos las muestras se enviarán refrigeradas. En el caso de que el procesamiento se vaya a demorar más de 24 h, las muestras se deben congelar a -20°C. El recipiente de recogida se identificará con los datos del paciente (nombre y localización), y debe estar protegido para que no se rompa en el transporte. Los utensilios y envases con los que se recogerán y transportarán las muestras dependen del tipo de la misma. Básicamente pueden ser: tubos estériles con tapón para sangre, frascos estériles para fragmentos de tejidos y garrapatas, o hisopos de algodón estériles para la toma de muestras de superficies corporales (secreciones de pápulas y máculas, o las tomadas directamente sobre la escara de inoculación). Al llegar al laboratorio se debe tener en cuenta que todas las muestras clínicas deben manejarse como si tuvieran microorganismos potencialmente peligrosos. Antes de procesarse deben someterse a una inspección ocular para asegurarse que han sido bien seleccionadas, recolectadas y transportadas. En función del 23 examen solicitado la muestra se procesará en un laboratorio con un nivel de bioseguridad 2 ó 3. Diagnóstico serológico de las rickettsiosis mediante inmunofluorescencia indirecta (IFI). La IFI es la técnica más utilizada para el diagnóstico de las rickettsiosis. Se basa en la detección de anticuerpos (Ac) en el suero del paciente, puestos de manifiesto mediante una antiglobulina humana marcada con fluoresceína y que, en caso de una reacción positiva, permite la visualización de las rickettsias mediante el microscopio de fluorescencia. La muestra a estudiar es el suero, el cual se puede mantener a temperatura ambiente por corto tiempo o refrigerado durante varios días. En el caso de que no se vaya a procesar en las siguientes 48 horas, se debe congelar (mínimo a -20°C). Debido a que la producción de Ac en un paciente afecto de rickettsiosis puede tardar varias semanas, se debe obtener suero en el momento agudo de la enfermedad y en la fase de convalecencia (al menos tras dos semanas). La IFI es usada para detectar las inmunoglobulinas IgM e IgG, tanto en fase aguda como en la convalecencia. En general, están establecidos como punto de corte títulos de IgG ≥ 1: 64 e IgM ≥ 1: 32. Dado que la prevalencia de Ac en la población sana puede ser elevada, un simple título de Ac no debe considerarse, por sí solo, diagnóstico de infección activa. La confirmación del diagnóstico de rickettsiosis requiere una seroconversión (es decir pasar de la no detección de Ac a ser detectados) o un sero-refuerzo (aumento mínimo de 24 cuatro veces del título entre el primer suero y el de convalecencia). En el contexto de un síndrome clínico compatible con rickettsiosis una determinación de Ac de tipo IgM puede ser muy sugestiva de rickettsiosis, aunque también se debe considerar que la detección de Ac de tipo IgM puede ser un falso positivo por la presencia de factores reumatoides tipo IgM y otras múltiples reacciones cruzadas. Existen en el mercado varios kits comerciales que utilizan antígenos de diferentes especies. Los más utilizados emplean R. rickettsii, R. conorii y R. typhi. En algunos laboratorios y en centros de referencia se pueden conseguir portaobjetos con otras especies de Rickettsia. Es importante tener en cuenta que la IFI no permite identificar la especie de Rickettsia que está provocando la reacción. Existen reacciones cruzadas entre las diferentes especies de Rickettsia e incluso con otros géneros bacterianos. Para una correcta interpretación de los resultados serológicos se debe tener en cuenta la historia clínica del paciente, así como los datos de reactividad basal de la población (sobre todo en zonas endémicas). Para aumentar la especificidad de la técnica se ha recomendado la absorción de los Ac del suero provocados por infecciones previas con otras especies de Rickettsia (absorción cruzada), y posteriormente realizar la IFI, o utilizar diferentes antígenos y, en función de los títulos que se obtengan en la IFI, otorgar la responsabilidad de la infección a la especie que más reactividad provoque. El problema es que existe un gran número de “nuevas” especies y que habría que disponer de una gran cantidad de antígenos. En todo caso, los costos serían muy elevados y la técnica nunca será tan específica como el cultivo o los métodos 25 moleculares. Existen otras técnicas serológicas basadas en la detección de Ac (ej: ELISA, Western-blot) que no se encuentran bien estandarizadas y que de mo- mento no se han incorporado a la rutina de los laboratorios de microbiología clínica. Cultivo de Rickettsia El cultivo es la técnica diagnóstica más específica y, como tal, se considera la prueba de referencia o estándar de oro. Además, resulta fundamental para la obtención de antígenos y para estudiar la sensibilidad a los antimicrobianos. También es necesaria para establecer una nueva especie de Rickettsia. Sin embargo, el aislamiento de rickettsias mediante cultivo celular convencional a partir de una muestra procedente de un paciente con rickettsiosis, es un proceso muy laborioso y solamente realizado en laboratorios especializados. Las muestras deben manejarse como potencialmente peligrosas y se requiere un nivel 3 de bioseguridad. La muestra más adecuada para el cultivo de rickettsias es la sangre tratada con citrato o heparina (plasma y/o buffy coat o capa leucocitaria), pero también se pueden utilizar muestras de tejido(biopsias), otros líquidos estériles (LCR, etc.) o la propia garrapata. La muestra se debe recoger en tubos estériles (ej: Vacutainer) y mantenerla refrigerada el mismo día de la extracción y sin congelar. Si la muestra no se va a procesar de forma inmediata, se debe congelar a -80°C hasta su procesamiento. No todas las especies de Rickettsia crecen con la misma 26 facilidad. Así, mientras que R. rickettsii y R. parkeri son fáciles de aislar, otras especies son cultivadas con mucha dificultad y en raras ocasiones. La rentabilidad del cultivo se ve enormemente disminuida si las muestras se han obtenido una vez comenzado el tratamiento antimicrobiano. A lo largo de la historia, para llevar a cabo el crecimiento de las rickettsias en el laboratorio, se han empleado animales de laboratorio o huevos embrionarios, aunque en la actualidad se trabaja con líneas celulares. A este respecto, las líneas celulares más utilizadas son las VERO-E6 (ATCC CCL- 81), fibroblastos L929 y también diferentes líneas celulares derivadas de artrópodos. El crecimiento de las rickettsias en estas líneas celulares es un proceso lento y además, el efecto citopático no es siempre visible, y en el caso de que se produzca, no es específico de especie. Se recomienda un equipamiento especial (laboratorio de bioseguridad 3) y personal muy entrenado. En la actualidad, el cultivo se debe complementar con técnicas moleculares para determinar específicamente la especie de Rickettsia aislada. En los últimos años se está utilizando una adaptación del cultivo celular tradicional (centrifugación en shell-vial o cultivo celular rápido en tubo cerrado) que consiste en inocular la muestra sobre una monocapa de células susceptibles previamente crecidas sobre un portaobjetos circular y, posteriormente, realizar una centrifugación para facilitar que las rickettsias penetren en las células. Mediante esta técnica se consigue aumentar la sensibilidad del cultivo (ya que se inocula la misma cantidad de muestra pero en una superficie más pequeña) y acortar el tiempo de incubación. Después de 5-7 días de incubación se puede detectar la presencia de la bacteria mediante tinción de Giménez, IFI con anticuerpos 27 específicos o mediante técnicas moleculares como la PCR y secuenciación. Esta técnica es más segura para el manipulador ya que se trabaja en un tubo cerrado y con menos volumen. En la actualidad se considera el método de elección si se pretende aislar una Rickettsia spp. Detección molecular (PCR y secuenciación) Los métodos moleculares basados en la PCR se han convertido en herramientas rápidas, sensibles y específicas para la detección e identificación de rickettsias en distintos tipos de muestras (sangre, biopsias cutáneas, LCR, exudados, raspado de escaras y garrapatas). Los genes más comúnmente analizados son el gen gltA, que codifica la enzima citrato sintetasa (presente en todas la rickettsias) y los que codifican dos proteínas de la membrana externa: OmpA (presente en todas las especies del GFM) y OmpB (presente en todas las especies excepto R. bellii). Existen otras posibles dianas diagnósticas más o menos específicas de Rickettsia spp., como el gen htrA, que codifica la proteína de superficie de 17kDa, el gen sca4, o el menos específico pero siempre presente gen ARNr 16S. Una vez que se obtiene un resultado positivo se debe proceder a la secuenciación.6 Para llegar a la especie implicada resulta necesaria la utilización de más de una diana, sobre todo cuando se utilizan fragmentos cortos o dianas poco específicas. Inicialmente para el diagnóstico molecular se recomienda realizar un tamizaje con las dianas más sensibles (gltA y ompB). Por otro lado, las secuencias más específicas se obtienen mediante la utilización de ompA.19 28 La secuencia de ácidos nucléicos se edita mediante el empleo de un software específico y se compara utilizando secuencias de referencia o bien directamente en GenBank mediante el programa BLAST, National Center for Biotechnology Information En el caso de que la muestra clínica de la que dispongamos sea una garrapata, antes de su procesamiento para la búsqueda de patógenos, es recomendable congelar medio ejemplar por la posibilidad de necesitarla para posteriores estudios. La posibilidad de una contaminación por la utilización de controles positivos se debe tener presente, por lo que es recomendable emplear una especie de Rickettsia que no circule en Latinoamérica, por ejemplo, una rickettsia que esté sólo presente en Europa. En los últimos años también se ha utilizado la RPC a tiempo real o RPC cuantitativa para la detección de rickettsias en muestras clínicas. Esta variante de la RPC permite amplificar y cuantificar de manera absoluta el producto de la reacción.6 Este método presenta una especificidad de 100% para distinguir una especie de Rickettsia de otra. Tinción de Giménez para la identificación de Rickettsia spp. Se analizaron las garrapatas individualmente siguiendo el protocolo estandarizado de identificación de bacterias del género Rickettsia diseñado por Giménez en 1964. Previo a la realización de la técnica, se prepararon los reactivos a utilizar: Solución Stock (100 ml de fushina básica al 10% en etanol al 95%; 250 ml de fenol acuoso al 4% y 650 ml de agua destilada), solución tampón de trabajo (35 ml de 29 NaH2PO4 al 0.2M; 155 ml de Na2HPO4 al 0.2M y 190 ml de agua destilada, ajustando el pH a 7.45), solución de trabajo (4 ml de solución Peniche-Lara),stock y 10 ml de solución tampón de trabajo que posteriormente se filtraran al menos dos veces en papel filtro siendo esta solución estable por un tiempo máximo de 24 horas) y solución de verde malaquita al 0.8% (0.8 g de oxalato verde de malaquita en 100 ml de agua destilada. Se diseccionaron dos patas de cada garrapata para la obtención de linfa, la cual fue colocada en un portaobjetos dejando que esta seque durante al menos 10 minutos para después agregar 2 gotas de solución de trabajo y dejando reposar durante 2 minutos para posteriormente lavar el porta objetos por inmersión en un contenedor con agua destilada. Al término de este lavado se agregaron 3 a 5 gotas de solución de verde malaquita permitiendo dejando reposar por un máximo de no más de 9 segundos. Inmediatamente después se lavo cuidadosamente el portaobjetos por inmersión en un contenedor con agua destilada y dejando que el portaobjetos se seque a temperatura ambiente. Una vez que se encuentren completamente secos los portaobjetos estos se encontraron listos para ser visualizados en un microscopio a un objetivo de 100x utilizando aceite de inmersión. La Rickettsia se identificó por el color rojo adquirido por esta técnica.20 2.7 MANIFESTACIONES CLÍNICAS El período de incubación de la FMMR es de 2 a 14 días, con una mediana de 7 días. Esta variación puede estar relacionada en parte con el tamaño del inóculo. 30 La enfermedad comienza por lo general con fiebre, mialgias y cefalea, posiblemente debido al efecto de las citosinas pro-inflamatorias. La temperatura supera los 39º C en el 63% de los casos durante los tres primeros días, y en el 90% más adelante. Las distintas incidencias en cuanto a cefalea y mialgias recogidas en las distintas series posiblemente estén relacionadas con el distinto porcentaje de pacientes pediátricos, que pueden tener dificultades para articular el concepto de dolor. En las etapas iniciales de la enfermedad, antes de la aparición de la erupción, es frecuente la aparición de otros síntomas y signos, como los referidos al tracto gastrointestinal en forma de náuseas, vómitos, dolor abdominal espontáneo o a la palpación, y diarrea, que pueden hacer pensar en una gastroenteritis o un abdomen agudo quirúrgico. La erupción cutánea representa el principal signo diagnóstico y aparece en una fracción pequeña de pacientesel primer día de la enfermedad, y sólo en un 49% de los pacientes aparece dentro de los tres primeros días, manifestándose normalmente entre los 3 y los 5 días del comienzo de la fiebre en el 88-90% del global de pacientes. La fiebre de las Montañas Rocosas «no maculosa» ocurre principalmente en pacientes ancianos o de raza negra. La ausencia o el inicio tardío de la erupción puede provocar un retraso en el diagnóstico. La erupción comienza típicamente alrededor de las muñecas y los tobillos, aunque también puede hacerlo en el tronco o de una forma generalizada. Es muy característica la afectación de las palmas y las plantas, a pesar de que sólo ocurre en el 36-82% de los pacientes con erupción; esta alteración puede presentarse de forma tardía en la evolución. Como consecuencia de la lesión en la microcirculación provocada por las rickettsias, en un 4% de los casos se desarrolla necrosis cutánea o gangrena. La gangrena afecta a los dedos 31 y los miembros, y en ocasiones puede obligar a practicar una amputación. A pesar de que se realice una exploración minuciosa, no suele encontrarse una escara en la zona de la picadura de la garrapata en esta enfermedad. La cefalea suele ser intensa, y la aparición de defectos neurológicos focales, sordera transitoria, meningismo y fotofobia, debe sugerir la presencia de meningitis o meningoencefalitis. Un tercio de los pacientes presenta un líquido cefalorraquídeo (LCR) con aumento de leucocitos, con predominio de linfocitos o de polimorfonucleares; en un tercio de los pacientes está aumentada la concentración de proteínas en el LCR. Sin embargo, la concentración de glucosa en el LCR solamente es baja en el 8% de los pacientes. El electroencefalograma (EEG) puede mostrar una disfunción cortical difusa. La afectación neurológica normalmente implica un mal pronóstico. Estas secuelas son menos frecuentes con la instauración precoz de un tratamiento antibiótico. En el examen del fondo de ojo puede observarse dilatación de las venas retinianas, oclusión arterial, hemorragias en llama o papiledema sin que se hayan detectado aumento de la presión en el LCR. Estos cambios pueden reflejar una vasculitis retiniana con aumento de la permeabilidad y fenómenos trombóticos focales. La aparición de una insuficiencia renal es una complicación importante de la FMMR grave, que puede ser de etiología prerrenal asociada a hipovolemia, en cuyo caso responderá a la hidratación intravenosa, o secundaria a una necrosis tubular aguda y requerir hemodiálisis. La afectación pulmonar suele acompañarse de tos y cambios radiológicos como infiltrados alveolares, neumonitis intersticial o derrames pleurales. El edema pulmonar con alteración de la función pulmonar o la presencia de síndrome de dificultad respiratoria del adulto puede obligar a la instauración de 32 oxigenoterapia y asistencia ventilatoria. Los estudios ecocardiográficos ponen de manifiesto una disfunción cardíaca mínima y la presencia de valores normales de la presión de enclavamiento pulmonar demuestra la naturaleza no cardiogénica del edema pulmonar. En la FMMR clásica, la muerte se produce entre 7 y 15 días después del inicio de los síntomas si no se administra el tratamiento adecuados en el momento oportuno, mientras que en la forma fulminante puede ocurrir en los 5 primeros días. Son varios los motivos que hacen del diagnóstico de la forma fulminante una tarea muy difícil: la evolución es rápida; el exantema aparece poco antes de que se produzca el fallecimiento, si es que surge en algún momento; no hay tiempo para que se desarrollen anticuerpos frente a R. rickettsii, y las lesiones anatomopatológicas pueden ser diferentes, con más trombos y sin el característico componente linfohistiocítico. Este tipo de FMMR es más frecuente entre pacientes de raza negra con déficit de glucosa-6- fosfato deshidrogenasa (G6PDH), al parecer como consecuencia de un factor secundario aún no identificado que potencia la hemólisis, presente en la enfermedad habitualmente en grado moderado. Una vez que la hemólisis ha destruido los hematíes viejos con un contenido bajo en G6PDH, la hemólisis se evaluará mejor mediante los niveles de haptoglobina plasmática que a través de la medición de la actividad de G6PDH en los eritrocitos restantes. De hecho, la hemólisis puede ser el factor patogénico más importante, más que el déficit en la actividad enzimática de la G6PDH. Otros factores de riesgo para la mortalidad asociada a la FMMR clásica son la edad avanzada y, posiblemente el alcoholismo. Los resultados de las pruebas complementarias de laboratorio pueden apoyar el diagnóstico clínico de FMMR clásica, pero son relativamente inespecíficos. El recuento de leucocitos suele ser 33 normal, pero, por lo general, puede observarse un aumento de células mieloides inmaduras. La anemia aparece en un 5-30% de los casos y la trombocitopenia suele estar presente en los casos más graves, aunque también puede observarse en algunos casos leves. La presencia de coagulopatía, con aumento de los tiempos de coagulación y descenso de las concentraciones de fibrinógeno y otros factores de la coagulación, es rara y los sistemas hemostáticos suelen funcionar de manera eficaz para prevenir hemorragias graves secundarias a las lesiones vasculares, de modo que la coagulopatía no suele contribuir en gran medida a la situación patológica. Son raros los casos en los que se documenta un cuadro de coagulación intravascular diseminada. Aproximadamente la mitad de los casos de FMMR cursan con hiponatremia. La lesión tisular difusa, como una rabdomionecrosis multifocal, se acompaña de un aumento en las concentraciones séricas de LDH, CPK y otras enzimas. El pronóstico de la FMMR está íntimamente relacionado con la demora en el inicio de un tratamiento adecuado. Los intervalos de tiempo transcurridos entre el inicio de la enfermedad y la aparición de la erupción, el diagnóstico clínico y la instauración de la antibioterapia apropiada son significativamente mayores en los casos con desenlace fatal que en los supervivientes. Los casos mortales presentan más a menudo hepatomegalia, ictericia, estupor e insuficiencia renal, y tienen un menor porcentaje de exposición conocida a garrapatas. Los supervivientes tienen una inmunidad sólida frente a R. rickettsii; las secuelas a largo plazo son, sobre todo, neurológicas o el resultado de la amputación de extremidades gangrenadas.3 34 2.8 DIAGNÓSTICO El diagnóstico de la FMMR antes de la aparición de la erupción es clínico y epidemiológico. El diagnóstico diferencial en la primera consulta abarca fiebre tifoidea, sarampión, rubéola, infecciones del tracto respiratorio, gastroenteritis, abdomen agudo quirúrgico, infección por enterovirus, meningococemia, infección gonocócica diseminada, sífilis secundaria, leptospirosis, vasculitis por inmunocomplejos, púrpura trombocitopénica idiopática, púrpura trombocitopénica trombótica, mononucleosis infecciosa, reacciones medicamentosas, ehrlichiosis y otras enfermedades por rickettsias. Su diagnóstico mediante pruebas de laboratorio puede basarse en el aislamiento de R. rickettsii en sangre. Sólo unos pocos centros realizan este aislamiento en cobayas, huevos de gallina fecundados o cultivos celulares, debido al riesgo biológico que comporta; sin embargo, se ha utilizado con éxito un método de centrifugación y cultivo celular (shell vial) para el aislamiento de rickettsias. La demostración mediante inmunohistoquímica de R. rickettsii en muestras cutáneas resulta un método diagnóstico oportuno durante la fase aguda de la erupción que se encuentra disponible en algunos hospitales y laboratorios de salud pública. La serología es el método habitual para confirmar el diagnóstico, pero es retrospectivo, ya que los anticuerpos comienzan a ser evidentes durante la fase de convalecencia.Este método no sirve para diferenciar entre las distintas especies de rickettsias del grupo de las fiebres maculosas, a menos que se realice una prueba de absorción cruzada y de inmunotransferencia para determinados antígenos seleccionados. La prueba de Weil-Felix, que se basa en la aglutinación 35 con Proteus OX-19 y OX-2, no resulta fiable, pues tiene una sensibilidad y una especificidad bajas. Algunos anticuerpos frente a determinados antígenos de las rickettsias pueden detectarse mediante inmunofluorescencia indirecta e inmunoanálisis enzimático. La primera de estas pruebas es la más sensible y específica, y la titulación diagnóstica se sitúa en 1:64. Existen reactivos comercializados para ambos métodos serológicos. La amplificación por reacción en cadena de la polimerasa (PCR) del ADN de R. rickettsii en muestras sanguíneas no es un método diagnóstico sensible, excepto en fases avanzadas de la enfermedad, sobre todo en los casos mortales; sin embargo, la PCR en tiempo real mejora la sensibilidad y es un método que se ha aplicado con éxito en otras rickettsiosis del grupo de las fiebres maculosas, como las biopsias cutáneas de la fiebre maculosa mediterránea (FMM). Los cebadores utilizan genes amplificados de la proteína 17 kDa, citrato sintasa, OmpA y OmpB, y permiten la identificación de cualquier especie de rickettsia. Por tanto, el diagnóstico clínico precoz sigue siendo crucial en esta enfermedad potencialmente mortal.3 2.9 MEDIDAS PREVENTIVAS La prevención se efectúa principalmente, mediante la promoción de la educación para la salud y de la participación social, y está dirigida a formar consenso y corresponsabilidad en los individuos, la familia y los grupos sociales de la comunidad, con el propósito de que faciliten y participen en las actividades que se realicen contra esta enfermedad. 36 Las acciones deberán dirigirse principalmente al control de la garrapata y a la protección de las personas expuestas a su picadura. Deberá evitarse la entrada a la casa de la garrapata, a través de los animales. También se recomienda usar ropa adecuada (pantalón, camisa larga y botas) para ir al campo.8 Se recomienda usar ropas de color claro que cubran las extremidades para así poder observar las garrapatas. Aplicar repelente en áreas descubiertas del cuerpo, todas las personas que ingresen en zonas donde es frecuente la presencia de garrapatas deben revisar diariamente todo su cuerpo con el propósito de retirar las que se hayan adherido a la piel, las garrapatas que se encuentren adheridas a la piel, se deben retirar ejerciendo tracción suave y constante con pinzas colocadas lo más cerca posible de la piel.21 Actualmente no existe una vacuna disponible para esta enfermedad, pero, tras la identificación de las proteínas de superficie inmunodominantes, algunos antígenos son firmes candidatos para su desarrollo, como los antígenos proteicos mayores de superficie (OmpA y OmpB) de R. rickettsii y R. conorii. La inmunización de cobayas con OmpA proporcionó protección inmunológica contra un inóculo virulento, y se han identificado fragmentos protectores de OmpB. La presencia de anticuerpos frente a OmpA y OmpB se asocia a protección.22 En un futuro podría existir una vacuna que protegiera frente a todas las especies de rickettsias del grupo de las fiebres maculosas, o incluso frente a rickettsias del grupo del tifus y del GFM, pero por el momento no hay ninguna vacuna disponible para ninguna de las rickettsias del GFM.3 Actualmente, el mejor método de prevención consiste en evitar el contacto con garrapatas mediante el uso de repelentes y prendas protectoras; aunque en la 37 época estival, asociada a la temporada de garrapatas, estas medidas resultan poco prácticas debido al calor. Las inspecciones frecuentes de la piel, el cuero cabelludo, el pubis y las axilas pueden ayudar a descubrir las garrapatas antes de que transmitan la rickettsiosis. Para retirar una garrapata adherida a la superficie se deben utilizar pinzas, además de asegurar que no queden retenidas partes de la boca del parásito en la piel; después, debe limpiarse bien la herida producida por la picadura.3 El uso de algunos insecticidas aún es válido, así como los baños garrapaticidas para todo tipo de ganado y perros, principalmente. Los garrapaticidas recomendados son diacrion, clorpiritos, propoxur, flumetrina o permetrina.8 2.10 TRATAMIENTO La doxiciclina es el tratamiento de elección. Desde la introducción del cloranfenicol y las tetraciclinas, incluida la doxiciclina, ha disminuido drásticamente la mortalidad de la enfermedad, aunque todavía se sitúa en un significativo 3%. R. rickettsii es sensible in vitro y en huevos, no sólo al cloranfenicol y a las tetraciclinas, sino también a la rifampicina, a algunas quinolonas, como el ciprofloxacino, y al macrólido claritromicina; sin embargo, las experiencias clínicas con estos fármacos no han sido suficientes como para aconsejar su utilización en la FMMR. Algunos perros infectados por R. rickettsii se han tratado de manera satisfactoria con enrofloxacino. Este microorganismo es resistente a b-lactámicos, aminoglucósidos y trimetoprima-sulfametoxazol. La eritromicina tiene una 38 concentración mínima inhibitoria (CMI) de 3-8 mg/ml y no resulta eficaz. La FMMR responde bien al tratamiento con tetraciclina oral (25-50 mg/kg/día) o cloranfenicol (50-75 mg/kg/día) dividido en cuatro tomas. No obstante, las tetraciclinas, como la doxiciclina, son más eficaces que el cloranfenicol y se asocian con una tasa de mortalidad menor. El fármaco de elección es la doxiciclina a una dosis de 100 mg cada 12 horas, excepto en pacientes embarazadas o cuando existen antecedentes de hipersensibilidad al compuesto; se administra durante 7 días y se continúa dos días después de que el paciente quede afebril. El tratamiento con 200 mg de doxiciclina durante un solo día ha demostrado ser seguro en adultos y niños con FMM, pero no se ha probado en la FMMR, por lo que en este caso no se recomienda. El tratamiento debe administrase por vía intravenosa en pacientes graves o que presenten náuseas y vómitos. Durante el embarazo se recomienda el tratamiento con cloranfenicol debido a los efectos secundarios que tienen las tetraciclinas sobre los huesos y dientes del feto, aunque este fármaco no se considera eficaz en casos de ehrlichiosis, una infección que puede confundirse con la FMMR. Un factor determinante para que el pronóstico sea favorable es evitar el retraso en el inicio de la terapia. Los pacientes graves precisan un tratamiento sintomático intensivo, con fluidoterapia para mantener una perfusión tisular adecuada. En algunos pacientes puede ser necesario el uso de un catéter de Swan-Ganz para el control hemodinámico debido al riesgo de extravasación de líquidos con edema alveolar secundario al aumento de la permeabilidad vascular. A veces se utilizan glucocorticoides en pacientes muy graves, pero no se ha documentado su eficacia, por lo que no se recomiendan. Sin embargo, en 39 experimentos con perros infectados tratados simultáneamente con doxiciclina y prednisolona, no se encontraron efectos secundarios de esta asociación.3 El tratamiento actual de la fiebre botonosa se basa en pautas cortas de doxiciclina, con las que son prácticamente nulos los posibles efectos adversos en los niños menores de 8 años, ya que estos efectos se relacionan, sobre todo, con la dosis total administrada durante la infancia. Estudios realizados con pautas cortas de doxiciclina oral en un solo día (200 mg/12 h en adultos) han mostrado igual efectividad que las pautas clásicas de clorhidrato de tetraciclina (500 mg/6 h durante 15 días). En caso de intolerancia digestiva puede administrarse por vía intravenosa. La josamicina (1 g/8 h en adultos, durante 5 días) y la claritromicina (500 mg/12h en adultos, durante 5 días) también han demostrado ser una buena alternativa en alérgicos a las tetraciclinas y en embarazadas.23 El ciprofloxacino (500 mg/12 h, 5 días) y el ofloxacino (200 mg/12 h durante 7-10 días) han demostrado también ser eficaces en los adultos y bien tolerados, aunque no superiores a la doxiciclina. Su posible toxicidad en el embarazo y en los niños limita su uso. Las medidas de profilaxis consisten fundamentalmente en desparasitar los animales (en particular los perros) mediante el uso de repelentes, evitar el contacto con garrapatas y animales parasitados por éstas y desinfectar los lugares frecuentados por animales infestados. No hay evidencia de la utilidad de la quimioprofilaxis tras la picadura de una garrapata.23 40 3. JUSTIFICACIÓN Las rickettsiosis son entidades clínicas de tipo zoonótico, causadas por bacterias intracelulares estrictas de los géneros Rickettsia y Orientia, pertenecientes a la familia Rickettsiaceae. Su ecología está determinada por factores ambientales y la presencia de vectores específicos que condicionan el establecimiento y la epidemiología en diferentes regiones del mundo. En las Américas, durante el siglo XX, únicamente eran reconocidas tres de estas enfermedades: la fiebre manchada de las Montañas Rocosas, el tifus epidémico y el tifus endémico, Sin embargo, a partir del año 2000 se han descrito más de 10 especies diferentes previamente desconocidas en este continente, tanto en artrópodos como en casos clínicos, hecho que permite clasificarlas como entidades clínicas emergentes y reemergentes. Dadas las manifestaciones clínicas de las enfermedades causadas por rickettsias, siendo la gran mayoría inespecíficas y, por lo mismo, compartidas con otras enfermedades infecciosas, especialmente virales y bacterianas, han sido enmarcadas entre los diagnósticos diferenciales del síndrome febril agudo, tanto en áreas urbanas como tropicales. En la actualidad, se cuenta con métodos diagnósticos directos e indirectos, que son útiles en la identificación del agente infeccioso, en este caso, causante de rickettsiosis.1 La prevalencia de Rickettsiosis en el estado de Coahuila es de vital importancia ya que es una enfermedad común y fácilmente sub-diagnosticada. Poca literatura se encuentra disponible de esta patología en México, aún más limitada o escasa en lo que es el estado de Coahuila, siendo ausente números de casos en adultos. 41 Este estudio se realiza para exponer de manera integral, la evolución de este padecimiento, con el objetivo de informar al personal de salud, sobre la evolución de esta zoonosis. 42 4. PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA La infección por Rickettsia en los últimos años se ha incrementado considerablemente en el norte de México, por lo cual es considerada una enfermedad reemergente, con alta tasa de letalidad en población en la que no se administra tratamiento. Investigaremos la prevalencia de dicha infección en la población adulta, en un periodo de 1 de enero del 2013 al 31 de diciembre del 2013 en el estado del Coahuila. 5. PREGUNTA DE INVESTIGACIÓN ¿Cuál es la prevalencia de Rickettsiosis en la población adulta del estado de Coahuila en un periodo del 1ero de enero 2013 al 31 de diciembre del 2013?. 43 6. HIPÓTESIS La incidencia de casos probables de fiebre manchada presentó un aumento respecto a la reportada en años previos y respecto a la reportada en la literatura consistente con la definición de emergencia epidemiológica. 6.1 HIPÓTESIS NULA La incidencia de fiebre manchada no presentó un aumento consistente con la definición de emergencia epidemiológica 44 7. OBJETIVOS 7.1 OBJETIVO GENERAL Comparar la incidencia de los casos confirmados de infección por Rickettsia spp. en el 2013 con las incidencias reportadas localmente por epidemiología y artículos científicos. 7.2 OBJETIVOS ESPECÍFICOS 1. Calcular la incidencia de los casos confirmados de infección por fiebre manchada entre el 2013 y los 5 años previos en que existan datos de reporte epidemiológico. 2. Analizar la relación de signos y síntomas de los casos confirmados de infección por Rickettsia en el 2013. 3. Determinar tasa de letalidad de los casos confirmados de rickettsiosis en el 2013. 45 8 METODOLOGÍA 8.1 TIPO DE INVESTIGACIÓN La investigación es de tipo observacional, descriptivo, retrospectivo, donde se analizará toda la población del estado de Coahuila, de entre 15 y 65 años de edad, en la que se confirme infección por Rickettsia spp. 8.2 POBLACIÓN DE ESTUDIO La población en estudio será toda persona que habite en el estado de Coahuila, de 15 a 65 años de edad, en la que se confirme infección por Rickettsia spp. 8.3 UNIDAD DE ESTUDIO El estudio se realizó en unidades hospitalarias públicas y privadas en el estado de Coahuila como: - Instituto Mexicano del Seguro Social IMSS 1 IMSS 2 IMSS 6 IMSS 89 46 - Hospitales de Secretaria de Salud Hospitales General Saltillo Hospital Universitario Saltillo Hospital General de Muzquiz Centro de Salud Hospitalario Parras de la Fuente - Hospital la Concepción - Hospital Christus Muguerza Saltillo 8.4 UNIDAD DE ANÁLISIS La población en estudio es todo habitante del estado de Coahuila, de mayores de 14 años de edad en la que se confirme infección por Rickettsia spp. 8.5 PERIODO DE ESTUDIO La investigación abarca un periodo de tiempo de 12 meses, del 1 de enero del 2003 al 31 de diciembre del 2013. 47 9 CRITERIOS DE SELECCIÓN 9.1 CRITERIOS DE INCLUSIÓN - Todo habitante del estado de Coahuila mayor de 14 años de edad. - Que cuente con confirmación de infección por Rickettsia por PCR o serología. - Periodo de tiempo del 1 de enero 2013 a 31 de diciembre del 2013. 9.2 CRITERIOS DE EXCLUSIÓN - Población fuera del estado de Coahuila. - No contar con laboratorio confirmatorio de infección por Rickettsia. 10 . VARIABLES 10.1 VARIABLE DEPENDIENTE - Microorganismo. 10.2 VARIABLES INDEPENDIENTES - Edad, sexo, municipio, institución, fecha de presentación, fiebre, cefalea, vómito, diarrea, dolor abdominal, faringitis, exantema, indiferencia al medio, choque, irritabilidad, convulsiones, sangrado, petequias, hipotensión, edema palpebral, laboratorio confirmatorio, antecedente de contacto con garrapata, contacto con perros, antecedente de mordedura de garrapata, antecedente epidemiológico, defunción. 48 11 . DEFINICION OPERACIONAL DE LAS VARIABLES Variable Definición Conceptual Definición Operacional Tipo de variable Sexo Condición orgánica, masculina o femenina, de los animales y las plantas. Condición orgánica, masculina o femenina, de los animales y las plantas. Cualitativa, nominal. Edad Tiempo que ha vivido una persona. Tiempo que ha vivido una persona. Cualitativa, nominal. Municipio Conjunto de habitantes de un mismo término jurisdiccional, regido por un ayuntamiento. Conjunto de habitantes de un mismo término jurisdiccional, regido por un ayuntamiento. Cualitativa, nominal. Institución Organismo que desempeña una función de interés público, especialmente benéfico o docente. Organismo que desempeña una función de interés público, especialmente benéfico o docente. Cualitativa, nominal. Mes Cada una de las doce partes en que se divide el año. Cada una de las doce partes en que se divide el año. Cualitativa, nominal. Fiebre Fenómeno patológico que se manifiesta por elevación de la temperatura normal del cuerpo y mayor frecuencia del pulso y la respiración. Fenómeno patológico que se manifiesta por elevación de la temperatura normal del cuerpo y mayor frecuenciadel pulso y la respiración. Cualitativa, dicotómica. Cefalea Dolor de cabeza. Dolor de cabeza. Cualitativa, dicotómica. Vómito Arrojar violentamente por la boca lo contenido en el estómago. Arrojar violentamente por la boca lo contenido en el estómago. Cualitativa, dicotómica. Diarrea Síntoma o fenómeno morboso que consiste en evacuaciones de vientre líquidas y frecuentes. Síntoma o fenómeno morboso que consiste en evacuaciones de vientre líquidas y frecuentes. Cualitativa, dicotómica. Dolor abdominal Sensación molesta y aflictiva del abdomen por causa interior o exterior. Sensación molesta y aflictiva del abdomen por causa interior o exterior. Cualitativa, dicotómica. 49 Odinofagia Dolor de garganta producido al tragar alimentos o líquidos. Dolor de garganta producido al tragar alimentos o líquidos. Cualitativa, dicotómica. Exantema Erupción de la piel, de color rojo más o menos subido, que desaparece momentáneamente con la presión del dedo, va acompañada o precedida de calentura, y termina por descamación Erupción de la piel, de color rojo más o menos subido, que desaparece momentáneamente con la presión del dedo, va acompañada o precedida de calentura, y termina por descamación Cualitativa, dicotómica. Indiferencia al medio Estado de ánimo en el que no hay inclinación o rechazo sobre el medio. Estado de ánimo en el que no hay inclinación o rechazo sobre el medio. Cualitativa, dicotómica. Convulsiones Contracción intensa e involuntaria de los músculos del cuerpo, de origen patológico. Contracción intensa e involuntaria de los músculos del cuerpo, de origen patológico. Cualitativa, dicotómica. Irritabilidad Que se irrita fácilmente. Que se irrita fácilmente Cualitativa, dicotómica. Choque Estado de profunda depresión nerviosa y circulatoria, sin pérdida de la conciencia, que se produce después de intensas conmociones, principalmente traumatismos graves y operaciones quirúrgicas. Estado de profunda depresión nerviosa y circulatoria, sin pérdida de la conciencia, que se produce después de intensas conmociones, principalmente traumatismos graves y operaciones quirúrgicas. Cualitativa, dicotómica. Sangrado Acción y efecto de sangrar. Acción y efecto de sangrar. Cualitativa, dicotómica. Petequias Mancha pequeña en la piel, debida a efusión interna de sangre. Mancha pequeña en la piel, debida a efusión interna de sangre. Cualitativa, dicotómica. Hipotensión Tensión excesivamente baja de la sangre. Tensión excesivamente baja de la sangre. Cualitativa, dicotómica. Edema palpebral Inflamación de párpados. Inflamación de párpados. Cualitativa, dicotómica. Microorganismo Nombre genérico que designa los seres organizados solo visibles al microscopio. Nombre genérico que designa los seres organizados solo visibles al microscopio. Cualitativa, nominal. Antecedente de contacto con garrapata Factor en el cual el sujeto se encuentra en ambiente común con una garrapata y es consciente del hecho. Factor en el cual el sujeto se encuentra en ambiente común con una garrapata y es consciente del hecho. Cualitativa, dicotómica. Contacto con perros Factor en el cual el sujeto se encuentra en ambiente común con un perro y es consciente del hecho. Factor en el cual el sujeto se encuentra en ambiente común con un perro y es consciente del hecho. Cualitativa, dicotómica. 50 Antecedente de mordedura por garrapata Factor en el cual el sujeto se encuentra es consciente contacto y mordedura de la garrapata. Factor en el cual el sujeto se encuentra es consciente contacto y mordedura de la garrapata. Cualitativa, dicotómica. Antecedente epidemiológico Cosa, hecho o circunstancia que es anterior a otra semejante o de su misma clase, a la que condiciona, influye o sirve de ejemplo. Cosa, hecho o circunstancia que es anterior a otra semejante o de su misma clase, a la que condiciona, influye o sirve de ejemplo. Cualitativa, dicotómica. Defunción Muerte de una persona. Muerte de una persona. Cualitativa, dicotómica. 51 12 . PLAN DE RECOLECCIÓN DE LA INFORMACIÓN Se recolectaron datos de vigilancia epidemiológica de la Secretaría de Salud para los años del 2003 al 2013, sin existir datos en el sistema para los años 2006, 2007, 2009, 2010. 13 . PLAN DE PROCESAMIENTO Se procesaron y analizaron los datos en el programa Microsoft Excel, se capturaron conforme resultados de vigilancia epidemiológica mensual. 14. PLAN DE ANÁLISIS Se analizó el material adquirido de vigilancia epidemiológico de la Secretaria de Salud del estado de Coahuila en el mes de junio del 2015. 15. CONSIDERACIONES ÉTICAS En este estudio sólo se analizó una base de datos epidemiológica, recolectada a partir de expedientes clínicos, por lo que no fue necesario realizar ningún consentimiento informado. 52 Ya que esta investigación no es de intervención, no se presentó dilema ético durante el diagnóstico o tratamiento de los pacientes. 16. PLAN DE UTILIZACIÓN DE RESULTADOS Utilizar los resultados para retroalimentar a las instituciones involucradas sobre las diferencias observadas entre el conocimiento tradicional sobre la presencia y presentación de la enfermedad con el objeto de impulsarlas a implementar medidas educativas y de tratamiento más apropiadas 53 17. RESULTADOS Se revisaron los datos de la vigilancia epidemiológica de cada mes del año 2013, de los cuales se obtuvieron un total de 360 pacientes, 334 con definición operacional de casos sospechoso de infección por Rickettsia y 26 con confirmación por laboratorio de infección por Rickettsia, en el estado de Coahuila. De los 26 casos confirmados de infección por Rickettsia en el estado de Coahuila, 15 pacientes fueron del sexo femenino y 11 pacientes del sexo masculino. Teniendo un predominio de un 58% de sexo femenino y un 42% del sexo masculino. (Gráfica 3). En cuanto a la distribución por edades, de los 26 casos confirmados, el paciente más joven fue de 15 años, el mayor de 53 años de edad y la media de edad fue de 27.4 años. (Gráfica 4) Los municipios del estado de Coahuila afectados en el 2013 por infección de Rickettsia fueron: Saltillo (61.5%), Parras de la Fuente (23%), Ramos Arizpe (3.8%), Ciudad Acuña (3.8%), Múzquiz (3.8%) y San Pedro de las Colonias (3.8%). Las instituciones en donde se detectó la infección por Rickettsia fueron las siguientes: Hospital General Saltillo (23%), Centro de Salud con Hospitalización de Parras (23%), Hospital General de Ciudad Acuña (3.8%), Hospital Universitario 54 Saltillo (15.3%), Hospital General de Muzquiz (3.8%), IMSS 1 (3.8%), IMSS ACUÑA (3.8%) Hospital General de San Pedro de las Colonias (3.8%), IMSS 89 (7.6%), IMSS 2(11.5%). (Gráfica 6) El mes en el que se presentó el mayor número de casos de infección por Rickettsia fue febrero con 12 casos (46.1%), continuando el mes de marzo, cuando por lo general son los meses lluviosos, donde encontramos mayor índice de casos, según la literatura. (Gráfica 7). La sintomatología presentada por los casos confirmados de infección por Rickettsia se presentó por número de frecuencia de la siguiente manera, con un predominio de cefalea (76%), fiebre (65%) así como vomito (30%), cuando el cuadro clínico clásico es de fiebre, mialgias y cefalea. (Gráfica 8) La confirmación por laboratorio se realizó con serología en 20 de los pacientes y con Reacción de Polimerasa en Cadena (PCR) en 6 pacientes. (Gráfica 9). Las especies de Rickettsia encontradas en este estudio fueron R. rickettsi (19 casos), R. prowazecki (0 casos), R.
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