Logo Studenta

Prevalencia-puntual-de-ulceras-por-presion-en-3-hospitales-de-segundo-nivel-en-la-Republica-Mexicana

¡Este material tiene más páginas!

Vista previa del material en texto

UNIVERSIDAD NACIONAL AUTÓNOMA 
DE MÉXICO 
 
 
FACULTAD DE MEDICINA 
DIVISIÓN DE ESTUDIOS DE POSGRADO 
SERVICIO DE DERMATOLOGÍA, HOSPITAL GENERAL 
“DR. MANUEL GEA GONZALEZ” 
 
 
 
 
PREVALENCIA PUNTUAL DE ÚLCERAS POR 
PRESIÓN EN 3 HOSPITALES DE SEGUNDO 
NIVEL EN LA REPÚBLICA MEXICANA. 
 
 
 
TESIS 
QUE PARA OBTENER EL TITULO DE 
 
 ESPECIALIDAD DE DERMATOLOGÍA. 
P R E S E N T A: 
IRIS LAVINIA GALVÁN MARTÍNEZ 
 
 
 
DIRECTOR: 
DR. JOSÉ CONTRERAS RUIZ 
 
 
 
MEXICO, D.F. 2010 
 
 
 
 
UNAM – Dirección General de Bibliotecas 
Tesis Digitales 
Restricciones de uso 
 
DERECHOS RESERVADOS © 
PROHIBIDA SU REPRODUCCIÓN TOTAL O PARCIAL 
 
Todo el material contenido en esta tesis esta protegido por la Ley Federal 
del Derecho de Autor (LFDA) de los Estados Unidos Mexicanos (México). 
El uso de imágenes, fragmentos de videos, y demás material que sea 
objeto de protección de los derechos de autor, será exclusivamente para 
fines educativos e informativos y deberá citar la fuente donde la obtuvo 
mencionando el autor o autores. Cualquier uso distinto como el lucro, 
reproducción, edición o modificación, será perseguido y sancionado por el 
respectivo titular de los Derechos de Autor. 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
Este trabajo fue realizado en el Departamento de Dermatología, en la Clínica 
Interdisciplinaria de Heridas y Estomas del Hospital General ”Dr. Manuel Gea González” 
bajo la Dirección del Dr. José Contreras Ruiz. 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
Este trabajo de Tesis con No. 06-30-2010 presentado por el alumno 
Iris Lavinia Galván Martínez se presenta en forma con visto bueno por el Tutor principal de 
la Tesis Dr. José Contreras Ruíz con fecha del 6 de Agosto 2010 para su impresión final. 
 
 
 
 
 
 
 
Dr. José Contreras Ruiz 
 
 
 
 
 
Autorizaciones 
 
Dr. Octavio Sierra Martínez 
Director de enseñanza 
Hospital General “Dr. Manuel Gea González” 
 
___________________________________ 
 
 
Dr. Luciano Domínguez Soto 
Jefe de la División de Dermatología 
Hospital General “Dr. Manuel Gea González” 
 
______________________________________ 
 
 
Dra. Elisa Vega Memije. 
Jefa del Departamento de Investigación 
Hospital General “Dr. Manuel Gea González” 
 
______________________________________ 
 
 
 
 
 
Prevalencia puntual de úlceras por presión en 3 hospitales de segundo 
nivel en la República Mexicana. 
 
Colaboradores: 
 
Nombre: Iris Lavinia Galván Martínez 
 
Firma: ______________________________________________ 
 
Nombre: José Contreras Ruiz 
 
Firma: ______________________________________________ 
 
Nombre: Roberto Antonio Narro Llorente 
 
Firma: ______________________________________________ 
 
Nombre: Favio Lezama de Luna 
Firma: ______________________________________________ 
 
Nombre: Adriana Lozano Platonoff 
 
Firma: ______________________________________________ 
 
Nombre: Ma. Rosy Fabián Victoriano 
 
Firma: ______________________________________________ 
 
Nombre: Ximena Garrido Espíndola 
 
Firma: ______________________________________________ 
 
Nombre: José Jesús Arredondo Sandoval 
Firma: _________________________________________ 
 
AGRADECIMIENTOS 
 
 
 
A ti, que eres mi amor, gracias por la paciencia, el apoyo, la motivación y el amor cuando 
más lo he necesitado, por estar siempre ahí, por hacerme creer, y porque crees en mí, te 
amo. 
 
A mis padres, Rosy y Fer, porque con su ejemplo de amor, valor y confianza, me han 
enseñado que los mejores logros de la vida no son sólo aquellos que se reflejan en un 
diploma, sino en el carácter. 
 
A Rocío, Brenda y Claudio, por el apoyo y cariño incondicional que sólo los hermanos 
pueden brindar. 
 
A José, por tus enseñanzas, tu confianza y tu tiempo, pero principalmente por tu amistad. 
Y al resto de mis maestros porque ustedes merecen mi admiración y respeto, gracias por 
su paciencia y enseñanzas. 
 
A Nicole, Juan, Vicky, Sergio, Tere y Felipe, mis compañeros en esta batalla, por hacerla 
más fácil y divertida. 
 
Y principalmente a Dios, por su fuerza, por guiar mis pasos y porque los puso a todos 
ustedes en mi vida. 
 
 1
INDICE 
 
Glosario ........................................................................................................................... 9 
Relación de figuras y tablas ............................................................................................ 10 
Resumen ........................................................................................................................ 11 
Abstract ........................................................................................................................... 12 
1. Introducción ................................................................................................................ 14 
2. Antecedentes .............................................................................................................. 14 
3. Justificación ................................................................................................................ 21 
4. Objetivos ..................................................................................................................... 23 
5. Material y Métodos ..................................................................................................... 23 
 5.1. Tipo de estudio ............................................................................................. 23 
 5.2. Ubicación temporal y espacial ...................................................................... 23 
 5.3. Criterios de selección de la muestra ............................................................. 23 
 5.3.1 Criterios de inclusión .......................................................................... 23 
 5.3.2 Criterios de exclusión ......................................................................... 24 
 5.3.3 Criterios de eliminación ...................................................................... 24 
 5.4. Variables ..................................................................................................... 24 
 5.5. Tamaño de la muestra ................................................................................. 24 
 5.7. Análisis estadístico ...................................................................................... 25 
 5.8. Descripción operativa del estudio ................................................................ 25 
6. Resultados .................................................................................................................. 26 
7. Discusión .................................................................................................................... 33 
8. Conclusiones .............................................................................................................. 36 
9. Perspectivas ............................................................................................................... 36 
10. Bibliografía ................................................................................................................ 38 
11. Anexos ...................................................................................................................... 42 
 9
GLOSARIO 
 
UP: Úlceras por presión 
NPUAP: Panel Nacional de Consejo en Úlceras por Presión. 
DTP: Daño tisular profundo 
HGMGG: Hospital General Dr. Manuel Gea González 
CICHE: Clínica Integral del Cuidado de Heridas y Estomas 
HMBS: Hospital Metropolitano Dr. Bernardo Sepúlveda 
HGRIMSS: Hospital General Regional No. 17 del Instituto Mexicano delSeguro Social 
IH: Intrahospitalario. 
 10
RELACION DE FIGURAS Y TABLAS 
 
Tabla 1: Clasificación de los Factores de Riesgo para desarrollar úlceras por presión. 
Tabla 2: Escala de Braden 
Tabla 3: Puntaje asignado de acuerdo a la situación de cada paciente. 
Tabla 4: Datos desglozados por cada centro incluido en el estudio y datos globales. 
Tabla 5: Prevalencia por servicio, prealencia total por cada centro. 
Tabla 6: Correlación de Pearson de la Escala de Braden, número de días 
intrahospitalarios y edad con la presencia de úlceras por presión. 
Figura 1: Nivel de afección en la piel de acuerdo a la estadificación de la NPUAP 
Figura 2: Distribución por sexo. 
Figura 3: Muestra úlcera grado I 
Figura 4: Muestra úlcera grado II 
Figura 5: Muestra úlcera grado III 
Figura 6: Muestra úlcera grado IV 
Figura 7: Muestra daño tisular profundo 
Figura 8: Muestra úlcera no estadificable, cuierta en su totalidad por escara. 
Figura 9: Comparativo de las prevalencias en cada subgrupo de población, de acuerdo al 
riesgo de padecer UP. 
Figura 10: Prevalencia de úlceras por presión por servicio de hospitalización. 
Figura 11: Distribución de la prevalencia de las úlceras por presión por servicio 
Figura 12: Frecuencia del grado de las úlceras por presión. 
Figura 13: Localización de las úlceras por presión. 
Figura 14: Puntaje en la Escala de Braden general. 
Figura 15: Gráfica comparativa del puntaje obtenido en la Escala de Braden por los 
pacientes con úlceras y los pacientes sin úlceras por presión. 
 11
RESUMEN 
INTRODUCCIÓN: Las úlceras por presión (UP) son lesiones de origen isquémico producidas 
por una presión prolongada en la piel, son fuente de numerosas complicaciones y son 
consideradas marcadores de calidad en la atención médica. A pesar de todas estas 
consideraciones, el sistema de salud mexicano no ha reconocido a las UP como un 
problema grave ya que no se cuenta con estudios a nivel nacional que indiquen su 
epidemiología. 
OBJETIVO: Determinar la prevalencia de las UP en 3 hospitales de 2º nivel en la República 
Mexicana de manera transversal y caracterizar a la población en riesgo de padecerlas. 
MATERIAL Y MÉTODOS: Se incluyeron todos los adultos, de ambos sexos, que se 
encontraban hospitalizados en 3 hospitales de concentración del Distrito Federal, 
Quintana Roo y Nuevo León. Se registraron la edad y sexo, presencia de UP, servicio en 
el que se encontraban hospitalizados, diagnóstico de ingreso, puntaje en la Escala de 
Braden, número, localización y grado de las UP y si contaban con medidas para la 
liberación de la presión. 
RESULTADOS: Fueron 294 pacientes, 127 eran hombres, la edad promedio fue de 48.6 
años. La prevalencia de las UP fue de 17%. El servicio con mayor prevalencia de UP fue 
Terapia Intensiva donde hasta un 40.5% de los pacientes tuvieron úlceras. Sólo 21% de 
los pacientes contaban con alguna medida de liberación de la presión. De los pacientes 
con úlceras sólo 54% contaban con al menos una medida de liberación de la presión. El 
grado más frecuente fue el II (32%) y la localización más común fue la región sacra (74%). 
El Braden promedio de los pacientes sin úlceras fue de 19.5 vs 10 de los pacientes con 
úlceras. 21.4% de todos los pacientes obtuvieron un puntaje en la Escala de Braden de 
moderado a alto, de éstos 60.3% tenían ulceras por presión, y sólo 46% tenían medidas 
de prevención. El promedio de días intrahospitalarios de los pacientes sin UP fue de 5.6 
días, vs 18.4 días en promedio para los pacientes que si presentaron UP. Por correlación 
 12
de Pearson se encontró una relación moderada entre la presencia de UP y el puntaje bajo 
en la Escala de Braden, así como una relación entre el número de días intrahospitalarios 
con la presencia de UP, no así para la edad mayor a 65 años. 
CONCLUSIONES: La prevalencia de UP en pacientes hospitalizados en instituciones de 
segundo nivel es de un 17%, los grados de las UP más comunes son las I y II y el sitio 
más comúnmente afectado es la región sacra, todo esto coincide con lo reportado en la 
literatura anteriormente. Más de un 20% de los pacientes hospitalizados en México tienen 
un puntaje en la Escala de Braden considerado de moderado a alto riesgo, pero poco 
menos del 50% contarán con al menos una medida de liberación de la presión, lo que 
destaca la gravedad de este problema. Hubo una correlación directa entre el puntaje bajo 
en la escala de Braden y la presencia de UP, así como con el número de días 
intrahospitalarios. Esto que confirma la necesidad de aplicar una herramienta de 
estadificación de riesgo como la escala de Braden para prevenir en nuestros pacientes la 
presencia de UP, así como establecer medidas de prevención cuando menos en los 
pacientes considerados de alto riesgo. Continúan siendo necesarios estudios de 
prevalencia más amplios en nuestro país, para instaurar medidas de prevención y evaluar 
su impacto con estudios posteriores. 
 
 12
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
Abstract 
INTRODUCTION: pressure ulcers (PU) are ischemic injuries of the skin, produced by 
prolonged pressure of an external surface on bony tissues. They are the source of multiple 
complications and are considered quality markers of medical and nursing care. Despite all 
these considerations, the Mexican health system has not acknowledged that PUs 
represent a severe public health problem because no studies have been conducted 
nationwide that indicate their epidemiology and that somehow make it possible to 
characterize the problem and establish prevention measures. 
 13
OBJECTIVE: determine the prevalence of pressure ulcers in 3 second level concentration 
hospitals in Mexico in a cross-sectional way and characterize the population at risk of 
suffering them. 
MATERIAL AND METHODS: all the adults, hospitalized for any diagnosis in any of the 
services of 3 concentration hospitals of Mexico City, Quintana Roo, and Nuevo León were 
included. The age and gender were recorded and a complete physical examination was 
performed of the skin and annexes for the search of PUs. The service where they were 
hospitalized, the diagnosis at admission, the Braden score, number, location and grade of 
the ulcers were also recorded, as well if they had any measures for pressure release. 
RESULTS: 294 patients were examined, of whom 127 were male. The average age was 
48.6 years and the average hospital stay was 7.6 days. The overall incidence of the PUs 
was of 17 %. The service with the highest PU prevalence was the Intensive Care Unit, 
where up to 40.5 % of the patients had ulcers. Only 21% of PU patients had at least one 
pressure release measure. Of the patients with ulcers, only 54 % had at least one 
pressure release measure. The most frequent grade was grade II (32 %) and they were 
most commonly found in the sacral region (74 %). The average Braden score of the 
patients without ulcers was 19.5 vs. the average Braden score of patients with ulcers of 
10. 21.4 % of all the patients obtained moderate to high risk Braden scores. Of them, 60.3 
% had pressure ulcers and only 46 % had any preventive measures. Pearson correlation 
showed a moderate relation between PU and a low Braden score. 
CONCLUSIONS: the prevalence of PUs in patients hospitalized in second level institutions is 
17 %. The most common grades of PUs are I and II and the most commonly affected site 
is the sacral region, followed by the heels. All these findings correlate with what is 
published in the literature. Only 54 % of patients with PUs had at least one pressure 
release measure. Slightly over 20 % of the patients hospitalized in Mexico have Braden 
scores considered from moderate to high risk, highlighting the seriousness of this problem. 
 14
There was a direct correlation between a lower Braden Score and PU’s. These findings 
confirm the necessity to enforce a risk stagingscore as the Braden Score in the initial 
evaluation of every patient, and establish preventive measures at least in the high-risk 
patients. It is still necessary larger prevalence studies in our country, to establish 
preventive measures and assess their impact in future studies. 
 
 14
 
 
 
 
 
 
 
 
 
1. INTRODUCCION 
2. ANTECEDENTES 
Las úlceras por presión son lesiones de origen isquémico localizadas en la piel y tejidos 
subyacentes producidas por una presión prolongada o una fricción entre una superficie 
externa sobre un plano óseo o cartilaginoso.1 El signo inicial de presión es el eritema, 
posteriormente isquemia del tejido atrapado, el cual al degradarse o destruirse produce 
necrosis de los tejidos blandos subyacentes que terminan con la formación de una 
úlcera.2 
 
En su desarrollo se conjugan dos mecanismos; la oclusión vascular por la presión externa 
y el daño endotelial a nivel de la microcirculación. En su formación participan tres tipos de 
fuerzas: presión, fricción y cizallamiento. 15 
 
Se han desarrollado múltiples sistemas para describir el grado de extensión de las 
úlceras, el más aceptado es el propuesto por el Panel Nacional de Consejo en Úlceras por 
Presión (NPUAP, por sus siglas en inglés). En este sistema las UP se clasifican en cuatro 
estadios, uno indeterminado y sospecha de daño tisular profundo (Figura 1): 16 
 15
Epidermis 
Dermis 
 
TCS 
 
Músculo y 
Fasicia 
Hueso 
 
 Estadio 1: Piel intacta con eritema que no blanquea sobre una prominencia ósea, 
indica riesgo de desarrollar úlceras, por lo que deben tomarse medidas 
preventivas. 
 Estadio 2: Pérdida parcial del grosor de la dermis, se presenta como una úlcera de 
lecho rosado o rojo sin fibrina, o bien como una ampolla de contenido sero-
hemático. Este estadio no debe utilizarse para describir quemaduras por contacto, 
dermatitis del pañal, maceración o excoriaciones. 
 Estadio 3: Pérdida de la epidermis y la dermis, incluso con exposición de tejido 
celular subcutáneo, pero no hay exposición de hueso, tendones o músculo. Si hay 
fibrina, no oculta la verdadera profundidad de la úlcera. Puede haber 
socavamiento de los bordes o formación de túneles. En sitios como las orejas, la 
naríz, el occipucio o los maléolos, las úlceras pueden parecer muy superficiales. 
 Estadio 4: Pérdida completa de la piel con exposición del hueso, tendones o 
músculo; es común la presencia de fibrina, socavamiento y fomación de túneles. Al 
igual que las úlceras del estadio 3, su profundidad puede ser subestimada en 
zonas donde la piel es muy delgada y carece de tejido celular subcutáneo. Este 
tipo de úlceras pueden conducir a osteomielitis dada su profundidad, así como 
formación de fístulas. 
 Estadio X: Pérdida completa de tejido, donde la base de la úlcera está cubierta 
completamente por fibrina (amarilla, gris o café) y/o escaras. 
 Sospecha de daño a tejido profundo (DTP): Área de coloración púrpura o café 
localizada sobre piel intacta, pálida o con ampollas de contenido hemorrágico. 
 
 
 
 16
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
Figura 1: Nivel de afección en la piel de acuerdo a la estadificación de la NPUAP 
 
Los factores de riesgo para la desarrollar UP y que disminuyen la resistencia de los tejidos 
a las fuerzas de presión, fricción y cizallamiento pueden agruparse como se muestra en 
la Tabla 1. 17 
Fisiopatológicos Fármacos Situacionales 
Alteraciones de la piel: 
Edema, xerosis, heridas, 
cicatrices y UP previas 
Inmunosupresores: 
Radioterapia, corticoides, 
citostáticos y antibiticoterapia 
prolongada 
Intolerancia a la actividad 
Trastornos de la 
oxigenación: Enfermedades 
cardiacas, respiratorias y 
vasculares 
Sedantes Inmovilidad 
Problemas nutricionales: 
Desnutrición, obesidad, 
deshidratación 
Vasopresores: Adrenalina, 
noradrenalina, dopamina y 
dobutamina 
Contención mecánica 
ESTADIO I ESTADIO II ESTADIO III 
ESTADIO IV NO 
ESTADIFICABLE
SOSPECHA DE 
DAÑO A TEJIDO 
PROFUNDO 
 17
Compromiso inmunológico: 
Neoplasias, infecciones, 
sepsis 
 Arrugas en la ropa interior y 
en la ropa de cama 
Trastornos neurológicos: 
Déficit sensorial y motor 
 Cuerpos extraños en la 
cama 
Alteración del estado de 
consciencia: Confusión y 
coma 
 Falta de criterios unificados 
del equipo asistencial 
Incontinencia: Urinaria y/o 
fecal 
 Déficit de conocimientos 
 Otros: Dispositivos (yesos, 
tracciones, ventilación 
mecánica, sondaje vesical o 
nasogástrico) 
 Enfermedad terminal 
Tabla 1: Clasificación de los factores de riesgo para el desarrollo de UP. 
 
Cuando un paciente pertenece a la población con riesgo de desarrollar UP es 
recomendable que al ingresar a cualquier unidad hospitalaria sea evaluado con una 
escala de valoración validada, ya que el uso de una de estas escalas es superior al juicio 
clínico en la predicción de riesgo de UP.17,18 Para este efecto la escala que ha 
demostrado mayor capacidad predictiva incluyendo la valoración de pacientes en 
cuidados intensivos, es la de Braden (Tabla 2 y 3).18 
Percepción 
Sensorial 
Exposición a 
la Humedad 
Actividad Mobilidad Nutrición Riesgo de 
Lesiones 
Cutáneas 
Limitada 
completamente 
Húmeda 
constantemente 
Encamado Inmóvil 
complemtamente 
Muy pobre Problema 
Muy limitada Húmeda 
frecuentemente 
En una Silla Muy Limitada Probablemente 
inadecuada 
Problema 
potencial 
Limitada 
ligeramente 
Húmeda 
ocasionalmente 
Demabula 
ocasionalmente 
Limitada Adecuada Aparentemente no 
es problema 
Sin 
limitaciones 
Húmeda 
raramente 
Demabula 
Frecuentemente
Ligeramente sin 
limitaciones 
Excelente 
Riesgo Alto: <12 puntos 
Riesgo Moderado: 13-14 puntos 
Riesgo Bajo: Menores de 75 años 15-16, Mayores de 75 años 15-18. 
Sin riesgo: 19 a 23 
Tabla 2: Escala de Braden 
 
Percepción 
Sensorial 
1: Limitada completamente: 
no reacciona a estímulos 
dolorosos o déficit sensorial 
en la mayor parte del cuerpo 
2: Muy limitada: 
Reacciona sólo con 
estímulos dolorosos, se 
expresa con quejidos, 
presenta déficit sensorial 
que limita la capacidad de 
percibir dolor en más de 
la mitad del cuerpo 
3: Limitada ligeramente: 
Reacciona ante órdenes 
verbales, pero no siempre 
puede comunicar sus 
molestias o la necesidad de 
que lo cambien de posición, o 
presenta déficit sensorial en 
alguna de las extremidades 
4: Sin limitaciones: 
Responde a órdenes 
verbales. No presenta 
déficit sensorial. 
Exposición 
a la 
Humedad 
1: Húmeda constantemente: 
Expuesta constantemente por 
sudor, orina, etc. Se detecta 
2: Húmeda con frecuencia: 
Húmeda a menudo, pero no 
siempre. La ropa de cama 
3: Húmeda ocasionalmente: la 
piel está húmeda 
ocasionalmente, lo cual hace 
4: Húmeda raramente: 
La ropa está seca 
generalmente, la ropa 
 18
humendad cada vez que se 
mueve o se gira al paciente 
debe cambiarse al menos 
una vez por turno 
necesario un cambio 
suplementario de ropa de cama 
aproximadamente una vez al día 
de cama se cambia 
según os intervalos 
fijados para cambios de 
rutina. 
Actividad 1: Encamado: Paciente 
constantemente encamado 
2: En una Silla: Paciente 
que no puede andar o con 
deambulación muy limitada. 
No puede sostener su 
propio peso y/o necesita 
ayuda para sentarse en una 
silla de ruedas 
3: Deambula ocasionalmente, 
con o sin ayuda durante el día 
pero distancias muy cortas. 
Pasa la mayor parte de las 
horas diurnas en la cama o en 
una silla 
4:Deambula 
frecuentemente: 
Deambula fuera de la 
habitación al menos 
dos veces al día y 
dentro de la habitación 
al menos dos horas. 
Movilidad 1: Inmóvil completamente: Sin 
ayuda no puede hacer ningún 
cambio de posición del cuerpo 
o de alguna extremidad 
2: Muy limitada: 
Ocasionalmente hace 
ligeros cambios en la 
posición del cuerpo o de las 
extremidades, pero no es 
capaz de hacer cambios 
frecuentes o significativos 
por sí mismo. 
3: Limitada ligeramente:Hace 
con frecuencia ligeros cambios 
en la posición del cuerpo o de 
las extremidades por sí mismo. 
4: Sin limitaciones: 
Hace con frecuencia 
importantes cambios de 
posición sin ayuda. 
Nutrición 1: Muy pobre: Nunca ingiere 
una comida completa, 
raramente toma más de 1/3 
de cualquier alimento que se 
le ofrece. Come 2 raciones o 
menos con aporte proteico 
(carne o lácteos), bebe pocos 
líquidos, no toma suplementos 
dietéticos. Está en ayuno o 
con dieta líquida o sueros más 
de 5 días. 
2: Probablemente 
inadecuada: raramente 
hace una comida competa y 
generalmente ingiere solo la 
mitad de los alimentos. La 
ingesta proteica incluye solo 
tres raciones de carne o de 
lácteos al día. 
Ocasionalmente toma 
suplementos dietéticos. 
Recibe menos de la 
cantidad óptima dedieta 
líquida o por sonda 
nasogástrica. 
 
3: Adecuada: Toma más de la 
mayoría de las comidas, come 
un total de 4 raciones de 
proteínas, ocasionalmente 
puede rehusar una comida, pero 
toma un suplemento dietético si 
se le ofrece. O bien recibe 
nutrición por SNG o por vía 
parenteral, lo cual cubre la 
mayoría de sus necesidades 
nutricionales. 
4: Excelente: Ingiere la 
mayor parte de cada 
comida. Habitualmente 
come un total de cuatro 
raciones o más de 
proteinas. 
Ocasionalmente come 
entre horas. No 
requiere sumplementos 
dietéticos. 
Riesgo de 
Lesiones 
Cutáneas 
1: Problema: Requiere una 
asistencia de moderada a 
máxima para ser movido. Es 
imposible levantarlo 
completamente sin que se 
produzca un deslizamiento 
entre las sábanas. Se desliza 
frecuentemente en la cama o 
en una silla y necesita 
recolocarse a menudo con el 
máximo de ayuda. La 
espasticidad, las contracturas 
o la agitación producen un 
roce constante. 
2: Problema potencial: Se 
mueve muy débilmente o 
requiere asistencia mínima. 
Durante los movimientos la 
piel probablemente roza 
contra las sábanas, la silla, 
los sistemas de sujeción u 
otros objetos. . La mayor 
parte del tiempo mantiene 
una buena posición en la 
silla o en la cama, aunque 
en ocasione puede resbalar. 
3: Probablemente no hay 
problema: Se mueve en la cama 
o en la silla con independencia y 
tiene fuerza muscular suficiente 
para levantarse completamente 
cuando se mueve. En todo 
momento mantiene una buena 
posición en la cama o en la silla. 
 
 
Tabla 3: Puntaje asignado de acuerdo a la situación del paciente. 
 
Las UP constituyen un problema de salud grave ya que manifiestan una incidencia y 
prevalencia importantes. Se estima que 2.5 millones de úlceras por presión son tratadas 
cada año en Estados Unidos en hospitales de segundo y tercer nivel.5 Su prevalencia se 
ha reportado entre el 3 y 15% en pacientes hospitalizados y hasta un 35% en pacientes 
de asilos.4 En España el estudio nacional de prevalencia de UP realizado en el 2005 por 
el Grupo Nacional para el Estudio y Asesoramiento en Úlceras por Presión y Heridas 
Crónicas muestra una prevalencia entre el 8 y el 11% en hospitales.17 
 
 19
En México los únicos datos disponibles en Hospitales de segundo nivel de la Secretaría 
de Salud, han reportado una prevalencia de 17% en los adultos hospitalizados12, y una 
incidencia del 4.5% fue reportada en el Instituto mexicano del Seguro Social (IMSS)13. Sin 
embargo la variación también es amplia ya que en población seleccionada (pacientes en 
unidades de cuidados intensivos con ventilación mecánica) la prevalencia puede ser tan 
alta como un 80%.14 
 
Los índices epidemiológicos de las UP varían de manera relevante según la población 
estudiada. Por lo tanto, la interpretación de los estudios de incidencia y prevalencia de las 
UP debe tomarse con cautela, ya que la metodología, población y seguimiento varía entre 
cada estudio. Los métodos utilizados para el estudio y la incidencia de las UP incluye 
exploración directa del paciente, uso de bases de datos y encuestas.7 Los índices 
estimados más confiables derivan de aquellos en los que el investigador directamente 
explora al paciente; sin embargo, estos estudios tienden a tener muestras pequeñas e 
involucran un solo centro, por lo que aun se requieren estudios espidemiológicos sobre 
las úlceras por presión con un mejor diseño estadístico.8 
 
El carácter iatrogénico de la generación de úlceras por presión plantea que su aparición 
es evitable (el 95% de las úlceras son prevenibles), por lo que se han considerado 
indicadores de calidad en la atención médica,3,4,15 ya que imponen una imagen 
institucional negativa, de hecho, la prevalencia e incidencia de las UP son los indicadores 
más representativos de la calidad de los cuidados de enfermería.3,4,15,17 
 
Un objetivo de los programas de salud nacional en muchos países es la reducción de la 
prevalencia de las UP, ya que por ejemplo para Estados Unidos representa un costo 
 20
económico de entre $500 y $40,000 dólares para curar cada úlcera, dependiendo del 
grado y las medidas de las mismas.3,6 
 
Las UP son fuente de numerosas complicaciones que derivan en periodos de 
hospitalización prolongados o múltiples internamientos. Se estima que una nueva úlcera 
por presión incrementa 5 veces el tiempo de estancia hospitalaria. Por otro lado, 51% de 
los pacientes con UP se infectan con Staphylococcus aureus resistente a meticilina; 
asimismo, las UP se han correlacionado con un incremento en la mortalidad de un 200%, 
independientemente de cómo se originó la úlcera,23 además de que imponen una carga 
importante tanto para el paciente como para los familiares y cualquier sistema de salud, 
ya que prolongan el tiempo de estancia hospitalaria y aumentan los costos de atención. 
3,4,15 
A pesar de todas estas consideraciones, el sistema de salud mexicano no ha reconocido 
a las UP como un problema grave de salud pública y no contamos con estudios a nivel 
nacional que indiquen su incidencia.15 Por lo anterior es de suma importancia conocer los 
marcadores epidemiológicos de las UP en nuestro país, caracterizar el problema, 
establecer metas de prevención y programas de atención que disminuyan la variabilidad 
de la práctica clínica y que a su vez permitan racionalizar el consumo de recursos 
sanitarios y obtener un impacto relevante en la resolución de este problema tan 
importante. 
 
Por lo anterior, se tiene que comenzar con el conocimiento de la epidemiología y los 
factores fiosiopatológicos que contribuyen al desarrollo de úlceras por presión, esto nos 
permitirá identificar pacientes en riesgo de padecerlas y llevar a cabo posteriormente 
programas de prevención de las mismas.5 
 
 21
Para nuestro servicio de Dermatología, las UP representan uno de los principales motivos 
de interconsulta de otros servicios, lo que destaca quizá su alta prevalencia, y un área de 
oportunidad por mejorar en cuanto a la atención en general en nuestro hospital. 
 21
 
 
 
 
3. JUSTIFICACION 
Las úlceras por presión son un problema de salud pública en todo el mundo. 
Aproximadamente cada año hay 1 millón de úlceras por presión en Estados Unidos, sin 
emargo no hay información definitiva de la epidemiología de las mismas en ningún país. 
Los estudios existentes han enfrentado grandes problemas metodológicos dada la 
variabilidad de presentación de esta patología.10 
 
La incidencia en Estados Unidos se ha calculado de entre 2.7 a 29% de los pacientes 
hospitalizados, sn embargo la prevalencia varía de 3.5% a 40%. Este rango tan amplio 
está dado en parte por la población especialmente suceptible como los ancianos y los 
pacientes hospitalizados en la Unidad de Cuidados Intensivos, donde se ha reportado una 
prevalencia hasta en un 41%.11 
 
Las úlceras por presión son más que una complicación, representan un marcador de 
calidad en la atención médica de cualquier hospital. Son además blanco de múltiples 
complicaciones que pueden ir desde colonización crítica, hasta infección a tejidos 
profundos, osteomielitis, sepsis y muerte.Las UP se han correlacionado con un 
incremento en la mortalidad un 200% independientemente de cómo se originó la úlcera.23 
Asimismo la población en riesgo ha ido incrementando paulatinamente. Se ha confirmado 
un incremento de la población geriátrica, gracias a la disminución de las enfermedades 
infecciosas, mortalidad materno-fetal y mejor nutrición;21 este grupo etáreo es 
considerado el de más alto riesgo para desarrollar UP. Se conoce que 70% de las UP 
 22
ocurren en individuos mayores de 70 años y para el 2030 un 20% de la población mundial 
tendrá más de 65 años.17 
 
A pesar de lo anterior expuesto, el sistema de salud mexicano no ha reconocido a las 
ulceras por presion como un problema de salud pública grave. Por un lado no contamos 
con estudios a nivel nacional que indiquen su incidencia o prevalencia a ningún nivel de 
atención en salud y por otro lado las UP imponen una imagen institucional negativa al 
poder atribuirse al déficit en la calidad asistencial. De hecho, la prevalencia y la incidencia 
de las UP son los indicadores más representativos de la calidad de los cuidados de 
enfermería.17 
 
Es por esto, que es de suma importancia conocer los marcadores epidemiológicos de las 
UP en nuestro país para caracterizar el problema, establecer metas de prevención, 
programas de disminucion en la variabilidad de la práctica clínica y racionalizar el 
consumo de recursos sanitarios, para así tener un impacto relevante en la resolución de 
este problema. 
 
En el Hospital General Manuel Gea González las úlceras por presión se presentan en un 
17% de los adultos hospitalizados, tomando en cuenta sólo aquellas que se encontraron 
en región sacra y talones.12 Además, para el servicio de Dermatología y la Clínica Integral 
para el Cuidado de Heridas y Estomas representa uno de los principales motivos de 
interconsulta de los pacientes hospitalizados. De ahí la relevancia de conocer más a 
fondo estos datos, para diseñar medidas de prevención y tratamiento que puedan aplicar 
directamente en nuestra población. 
 23
4. OBJETIVOS 
Determinar la prevalencia de las úlceras por presión en 3 hospitales de concentración de 
segundo nivel en la República Mexicana de manera transversal, así como caracterizar a la 
población en riesgo. 
 
 23
 
 
 
 
 
5. MATERIAL Y METODOS 
5.1. Tipo de Estudio: 
Estudio descriptivo, abierto y transversal. 
 
5.2. Ubicación Temporal y Espacial. 
Hospital General “Dr. Manuel Gea González” (HGMGG), Hospital Metropolitano Dr. 
Bernardo Sepúlveda de Monterrey Nuevo León (HMBS) y Hospital General Regional No. 
17 del Instituto Mexicano del Seguro Social en Quintana Roo (HGRIMSS). De Noviembre 
2009 a Mayo 2010. 
 
5.3. Criterios de Selección de la Muestra 
5.3.1. Criterios de inclusión: 
a) Pacientes mayores de 18 años 
b) Ambos sexos 
c) Hospitalizados por cualquier diagnóstico en cualquiera de los servicios del Hospital 
General Dr. Manuel Gea González, Hospital General Regional Numero 17 del 
IMSS en Cancún Quintana Roo o en el Hospital Metropolitano Bernardo 
Sepúlveda de Monterrey Nuevo León incluyendo terapia intensiva y urgencias. 
 
 
 
 24
5.3.2. Criterios de exclusión: 
a) Pacientes que por cualquier causa (realización de estudios o en servicios de 
interconsulta) no estén presentes en hospitalización al momento de la evaluación 
 
5.3.3. Criterios de eliminación 
a) Pacientes que no acepten ingresar al estudio y que no firmen el consentimiento 
informado. 
 
5.4. Variables 
Variables independientes: 
a) Edad 
b) Sexo 
c) Presencia o ausencia de úlceras 
d) Días de Hospitalización 
e) Servicio en el que se encuentran hospitalizados 
f) Diagnóstico de ingreso 
g) Calificación de la escala de Braden 
 
Variables dependientes: 
a) Número de ulceras 
b) Localización de las úlceras 
c) Grado de las úlceras 
d) Medidas establecidas para la liberación de la presión 
 
5.5. Tamaño de la Muestra 
Todos los pacientes adultos que se encuentran hospitalizados en el Hospital Manuel Gea 
González, Hospital General Regional Numero 17 del IMSS en Cancún Quintana Roo y en 
 25
el Hospital Metropolitano Dr. Bernardo Sepúlveda de Monterrey, Nuevo León el día de la 
evaluación de los pacientes. 
 
5.6. Análisis Estadístico 
Se realizará un concentrado de los datos de los tres hospitales, y se realizará análisis 
estadístico descriptivo con medidas de tendencia central y dispersión: rango, media, 
mediana, y proporciones o porcentajes. Se realizó correlación de Pearson para establecer 
una relación entre las variables. 
 
5.7. Descripción Operativa del Estudio 
Previo al estudio, el Dr. José Contreras, considerado experto internacional en úlceras por 
presión, aplicó una evaluación a todos los investigadores que exploraron a los pacientes. 
A estos se les proyectaron 30 imágenes que mostraban úlceras por presión en diferentes 
estadios para evaluar variabilidad interobservador, con el fin de eliminar este sesgo. 
 
Posteriormente en el mes de mayo del 2010, los observadores: Dra. Iris Galván Martínez, 
ETE Rosy Fabián Victoriano, ETE Ximena Garrido Espíndola, Dr. Favio Lezama de Luna, 
Dr. Roberto Narro, Dr. Jesús Arredondo Sandoval y Dra. Adriana Lozano, explicaron el 
objetivo del estudio a los pacientes y solicitaron la firma del consentimiento informado 
(Anexo 1), posteriormente se realizó exploración física completa de la piel y anexos, 
haciendo énfasis en los sitios que cubren prominenecias óseas, en todos los pacientes 
mayores de 18 años que se encuentraban hospitalizados en el Hospital General Manuel 
Gea Gonález, Hospital General Regional Numero 17 del IMSS en Cancún Quintana Roo y 
en el Hospital Metropolitano Bernardo Sepúlveda de Monterrey, Nuevo León. Se registró 
sexo, edad, presencia o no de úlceras por presión, grado, sitio y número de las mismas, 
servicio en el que se encuentraban hospitalizados, número de días intrahospitalarios, 
 26
diagnóstico de ingreso y puntuación en la escala de Braden. Se registró también si 
contaban o no con las medidas de prevención de úlceras las cuales incluyen: medidas de 
superficie (superficie dinámica, que es lo recomendado para pacientes de riesgo medio y 
alto) y medidas de posición (cambios cada 2-3 horas en una forma rotatoria e 
individualizada)20. Todos estos datos se recabaron en un formato diseñado para tal fin 
(Anexo 2), asimismo se llevó un registro iconográfico de la exploración física por lo que se 
tomaron fotografías de todas las úlceras. 
 
 26
 
 
 
 
 
6. RESULTADOS 
Una semana antes de la valoración de los pacientes se realizó la evaluación 
interobservador encontrando un valor de kappa de 0.8104 con una P<0.0001, lo que 
traduce una fuerza de concordancia muy buena entre los observadores. 
Posteriormente, se revisaron 294 pacientes, de los cuales 127 eran hombres (Fígura 2). 
168 camas estaban vacías (100 camas libres, y 68 pacientes fuera de cama por estudios, 
traslados, etc), sólo un paciente no firmó consentimiento informado por lo que fue 
eliminado. La edad promedio fue de 48.6 años, el promedio de días intrahospitalarios fue 
de 7.6 días. De todos los pacientes con UP se tomó registro iconográfico. (Fig 3-8). La 
edad promedio de los pacientes con UP fue de 57 años. 
 
 
Figura 2: Distribución por sexo. 
 
43.20%
56.80%
Hombres
Mujeres
 27
 
Figura 3: Úlcera grado I 
 
Figura 4: Úlcera grado II 
 
Figura 5: Úlcera grado III 
 
Figura 6: Úlcera grado IV 
 28
 
Figura 7: Daño tisular profundo 
 
Figura 8: Úlcera no estadificable, cubierta en su totalidad por escara 
 
La prevalencia global de las UP fue de 17% (50 pacientes), la prevalencia en el HMBS fue 
de 20%, en el HGMGG fue de 14.8% y en el HGRIMSS fue de 15.4%. Sólo 21% de los 
pacientes contaban con alguna medida de liberación de la presión. Al separar la 
prevalencia en cada grupo de acuerdo al riesgo de tener UP, encontramos que para lapoblación de bajo riesgo la prevalencia fue de 5%, entre los pacientes considerados de 
alto y moderado riesgo de acuerdo a la escala de Braden encontramos una prevalencia 
poco mayor del 60%, asimismo entre la población mayor de 70 años la prevalencia fue de 
25% (Ver figura 9). De los pacientes con úlceras sólo 54% contaban con al menos una 
medida de liberación de la presión y sólo 6.8% tenían ambas medidas. (Ver detalles de 
cada centro en la Tabla 4). 
 29
 
Figura 9: Comparativo de las prevalencias en cada subgrupo de población, de acuerdo al riesgo de padecer UP. 
Variables 
 HGMGG HGRIMSS HMBS 
Datos 
globales 
Total de pacientes 94 97 103 294
Camas vacías 39 69 60 168
Hombres 42 43 42 127 (43.2%)
Mujeres 52 54 61 167 (56.8%)
Edad promedio 47.5 48.2 50.3 48.6
Edad promedio en pacientes con UP 53.5 55.1 62.6 57
Días IH 7.3 7.2 8.3 7.6
Pacientes con UP 14 (14.89%) 15 (15.46%) 21 (20.19%) 50 (17%)
Pacientes con UP que contaban con 
medidas de liberación de la presión 
8 (57.14%) 
7 (57.1%) 12 (46.6%) 27 (54%)
Al menos una medida de liberación de 
presión 29 (30.85) 10 (10.3%) 24 (23%) 63 (21.45%)
Medidas de Posición 27 8 20 55
Medidas de Superficie 5 8 15 28
Ambas medidas 3 6 11 20 (6.8%)
Puntaje promedio en la escala de 
Braden 19.4 18.3 17.3 18.3
 <12 13 (13.8%) 17 (17.5%) 20 (19%) 50 (17%)
 13-14 2 (2.10%) 3 (3%) 8 (7.76%) 13 (4.4%)
 15-18 12 (12.7%) 20 (20.6%) 24 (23.3%) 56 (19%)
 >19 67 (71.2%) 57 (58.7%) 51 (49.5%) 175 (59.5%)
Grados 
 I 5 (35.7%) 5 (33.3%) 6 (28.5%) 15 (30%)
 II 5 (35.7%) 6 (40%) 5 (23.8%) 16 (32%)
 III 2 (14.2%) 1 (6.6%) 7 (33.3%) 10 (20%)
 IV 1 (7.1%) 2 (13.3%) 1 (4.7%) 4 (8%)
 X 0 1 (6.6%) 1 (4.7%) 2 (4%)
 DTP 0 1 (6.6%) 1 (4.7%) 2 (4%)
Localización 
 Sacro 8 (57.1%) 11 (73%) 18 (85.7%) 37 (74%)
 Talones 4 (28.5%) 3 (20%) 3 (14.2%) 10 (20%)
 Trocanter 1 (7.14%) 1 (6.6%) 0 2 (4%)
 Maleolo 1 (7.14%) 0 0 1 (2%)
 Otra 0 0 0 0
> 1 úlcera 6 (52.3%) 6 (40%) 11 (52.3%) 23 (46%)
Localización de la segunda úlcera 
0
20
40
60
80
En pacientes 
con Braden 
<15
En pacientes 
>70 años
En pacientes 
con Braden 
>16
60.3
25
5.1
 30
 Talon 1 3 5 9
 Trocanter 1 0 2 3
 Maleolo 1 2 0 3
 Pierna 1 0 1 2
 Oreja 0 0 1 1
 Espalda 0 0 1 1
 Cuello 1 0 0 1
 Codos 1 1 1 3
Pacientes > 70 años 16 13 22 51 (17.34%)
 Ulceras 3 (18.7%) 3 (23%) 7 (31.8%) 13 (25%)
 Medidas 1 (6.2%) 2 (15%) 7 (6.2%) 10 (19.1%)
Braden de alto-moderado riesgo 15 (15.9%) 20 (20.6%) 28 (27.15) 63 (21.4%)
 Ulceras 9 (60%) 12 (60%) 17 (60.7%) 38 (60.3%)
 Medidas 9 (60%) 8 (40%) 12 (42.8%) 29 (46%)
Pacientes sin y bajo riesgo en la escala 
de Braden 79 (84%) 77 (79.4%) 75 (72.85) 231 (78.5%)
 Ulceras 5 (6.3%) 4 (5.3%) 3 (3.8%) 2 (5.1%)
Puntaje en la Escala de Braden en 
pacientes con úlceras 12.4 9.5 11 10.9
Puntaje en la Escala de Braden en 
pacientes sin úlceras 20.6 19.9 18 19.5
Pacientes por Servicio de 
Hospitalización 
 UTIA 2 0 1 3
 Urgencias 2 0 4 6
 GYO 0 0 0 0
 TYO 2 2 2 6
 MI 6 11 11 28
 Cirugia 2 2 3 7
Dias IH en pacientes con Ulceras 17.3 21 16.9 18.4
Dias IH en pacientes sin ulceras 5.6 4.6 6 5.4
Tabla 4: Datos desglozados por cada centro incluido en el estudio y datos globales. IH: Intrahospitalarios. 
 
El servicio con mayor prevalencia de UP fue Terapia Intensiva donde hasta un 40.5% de 
los pacientes tuvieron úlceras (Figura 3 y Tabla 5). Sin embargo 55% de todos los 
pacientes con UP se encontraban hospitalizados en Medicina Interna (Figura 4). 
Servicio HGMGG HGRIMSS HMBS Global 
 
 P/S P/T P/S P/T P/S P/T P/S P/T 
UTIA 50% 14.20% 0 0 33.30% 4.70% 41.50% 9% 
Urgencias 14.28% 14.20% 0 0 44.40% 19% 20% 11% 
GYO 0 0 0 0 0 0 0% 0% 
TYO 28.50% 14.20% 20% 13% 15.30% 9.50% 21.20% 12% 
MI 37.50% 42.80% 42% 73% 35.40% 52.30% 38.30% 55% 
Cirugía 7.60% 14.20% 6.80% 13% 11% 14.20% 8.40% 13% 
 
Tabla 5: Prevalencia por servicio y prevalencia total por cada centro. PS: Prevalencia por servicio, P/T: Prevalencia total. 
 31
 
Figura 10: Prevalencia de UP por servicio de hospitalización 
 
Figura 11: Distribución de la Prevalencia de las UP por Servicio de Hospitalización. 
 
El grado más frecuente fue el II (32%) y la localización más común fue la región sacra 
(74%) seguida por los talones (Ver Figuras 5 y 6). 46% de los pacientes con UP tenían 
más de una UP. 17.34% de todos los pacientes fueron mayores a 70 años, de los cuales 
25% tuvieron UP y sólo 19% tenían medidas de liberación de la presión. 
 
 
Figura 12: Frecuencia del grado de las UP 
0.00%
20.00%
40.00%
60.00%
UTIA Urgencias GYO TYO Med 
Interna
Cirugia
41.50%
20%
0%
21.20%
38.30%
8.40%
9%
11%
0%
12%
55%
13%
UTIA
Urgencias
GYO
TYO
Med Interna
Cirugia
0
5
10
15
20
I II III IV X DTP
15 16
10
4
2 2
 32
 
Figura 13: Localización de las UP 
 
El Braden promedio general fue de 18.3 puntos (Figura 7). El puntaje de los pacientes sin 
úlceras fue de 19.5 vs el Braden promedio de los pacientes con úlceras que fue de 10.9 
(Figura 8). 
 
Figura 14: Puntaje de la Escala de Braden general. 
 
Figura 15: Gráfica comparativa del puntaje obtenido en la Escala de Braden por los pacientes con úlceras v los pacientes 
sin úlceras. 
0
20
40
Sacro
Talones
Trocanter
Maleolo
Otra
37
10
2
1
0
17%
4.40%
19%59.50%
<12
13‐14
15‐18
0
5
10
15
20
Braden + ulceras Braden sin ulceras
10.9
19.5
 33
 
21.4% de todos los pacientes obtuvieron un puntaje en la Escala de Braden de moderado 
a alto riesgo, de éstos 60.3% tenían ulceras por presión, y sólo 46% tenían medidas de 
prevención. El promedio de días intrahospitalarios de los pacientes sin UP fue de 5.6 días, 
vs. 18.4 días en promedio para los pacientes que si presentaron UP. 
Se utilizó la correlación de Pearson para encontrar una relación entre la presencia de UP , 
el puntaje en la Escala de Braden, la edad de los pacientes y el número de días 
intrahospitalarios encontrando que existe una correlación estadísticamente significativa 
entre la presencia de úlceras y el puntaje bajo en la Escala de Braden así como con el 
número de días de hospitalización, no así para la edad de los pacientes, tomando como 
corte 65 años (Ver tabla 6). 
 HGMGG HGRIMSS HMBS 
Correlación de Pearson entre la 
presencia de UP y puntaje en la Escala 
de Braden. 
R:-0.641 (p<0.0001) R:-0.588 (p<0.0001) R:-0.622 (p<0.0001) 
Correlación de Pearson entre la 
presencia de UP y el número de días de 
hospitalización. 
R: 0.539 (p<0.0001) R: 0.448 (p<0.0001) R: 0.338 (p<0.0001) 
Correlación de Pearson de UP con la 
edad >65 años 
R: 0.134 (p=0.198) R: 0.162 (p=0.113) R: 0.295 (p= 0.067) 
Tabla 6: Correlación de Pearson entre la Escala de Braden, Número de días intrahospitalarios y edad de los pacientes con 
la presencia de UP. 
 33
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
7. DISCUSION 
Hasta ahora la principal limitante en los estudios epidemiológicos relacionados a las UP 
es la variabilidad entre los mismos. Reportar indicadores epidemiológicos de las UP es 
complicado ya que los resultados pueden ser muy variados de acuerdo a la población que 
se estudie. Por ejemplo en este estudio se diseñó una metodología uniforme para 
determinar la prevalencia de UP en 3 diferentes centros del país encontrando que la 
prevalencia global fue de un 17%. Sin embargo al seleccionar la población y dividirla de 
 34
acuerdo al riesgo de padecer UP encontramos una variación importante: 5% para los 
pacientes con puntaje de Braden mayor a 16 (bajo riesgo), 25% para los pacientes 
mayores de 70 años de edad y 60% en los pacientes con Braden menor a 15 (alto riesgo). 
Esta problemática ya había sido planteada por Romanelli anteriormente 8, por lo que en el 
diseño de este estudio pretendimos determinar la prevalencia por grupo de riesgo, para 
obtener datos más reales sobre los marcadores epidemiológicos en nuestra comunidad. 
En Estados Unidos se ha reportado una prevalencia tan variable como de 3.5% hasta un 
40%, dependiendo de la poblaciónque se estudie11. En Europa Vanderwee y Clark 
desarrollaron un instrumento de recolección de datos que incluyó 5 categorías (datos 
generales, datos de los pacientes, evaluación del riesgo y evaluación de la piel) para 
conocer la prevalencia de las UP. Participaron 25 hospitales de 5 paises y se exploró a 
5947 pacientes, encontrando una prevalencia de 18.1%. Las úlceras sacras y en talones 
fueron las más comunes, y sólo 9.7% de los pacientes con UP contaban con medidas 
para liberar la presión 24. Por otro lado el estudio piloto desarrollado por Narro y 
colaboradores en un hospital en México de segundo nivel encontraron una prevalencia de 
las UP del 17%, la localización más común fue el sacro y el servicio con la mayor 
prevalencia fue Urgencias Adultos12. En el estudio actual la prevalencia y presentación 
clínica es muy similar a la encontrada en Europa y en el estudio anteriormente realizado 
en nuestro Hospital; la localización sacra es la más común, las úlceras de grados I y II son 
las más frecuentes y la mayoria de los pacientes no cuentan con todas las medidas 
adecuadas para liberar la presión (sólo 6.8% cuentan con medidas). Estos datos nos 
muestran la magnitud del problema y revela que en México un porcentaje substancial de 
los pacientes padecen UP. A pesar de esto, pocos pacientes contaron con medidas de 
liberación de la presión y aunado a esto 8% de los pacientes explorados presentaron 
úlceras grado IV, es decir, 4 veces más que lo reportado en Europa (2%) 24. Esto nos 
indica que la prevención y mejor tratamiento de las UP continua siendo una necesidad en 
 35
la atención intrahospitalaria de nuestro país. Otro de los objetivos de nuestro censo fue 
caracterizar a la población en riesgo de padecer UP. A pesar de que la mayoría de los 
pacientes se consideraron de bajo riesgo, un 20% entra en la categoría de moderado-alto 
riesgo de los cuales sólo el 46% contaban con al menos una medida de prevención de 
úlceras. Este hallazgo es similar a lo reportado en Europa, sin embargo continua siendo 
decepcionante, ya que esclarece la falta de recursos y conocimientos sobre las medidas 
de prevención efectivas. Asimismo éste trabajo es el primer estudio mexicano en 
relacionar el puntaje en la Escala de Braden con la presencia de UP, encontrando una 
relación estadísticamente significativa, lo que nos lleva a concluir que es una necesidad 
primordial el aplicar alguna herramienta de valoración de riesgo en la exploracion física 
inicial que permita establecer medidas de prevención cuando menos en aquellos 
pacientes considerados de alto riesgo, dadas las limitantes económicas del sistema de 
salud público en México. Del mismo modo, una estancia intrahospitalaria prolongada 
también se relacionó significativamente con la presencia de UP, lo que podría llevarnos a 
implementar medidas preventivas también en aquellos pacientes que permanezcan por 
largos periodos en hospitalización. 
Al comparar los datos entre las 3 instituciones, se observó que el HGMGG tuvo una 
prevalencia menor y que un porcentaje mayor de pacientes contaban con al menos una 
medida de liberación de la presión, esto quizá se deba a que en este centro se cuenta con 
una clínica especialiada en la capacitación de personal y manejo de las UP. 
En cuanto a las limitantes del estudio, encontramos que la participación de los centros fue 
de manera voluntaria, no se hizo de forma aleatoria, lo que podría no ser una muestra 
representativa de todos los centros de segundo nivel en México, por lo que se debe tomar 
con cautela al intentar generalizar los datos obtenidos. Por otro lado, en aquellos 
pacientes en los que se registró que sí contaban con medidas de reposicionamiento, no 
se verificó si efectivamente eran llevadas a cabo, ya que el reporte fue a través del 
 36
expediente o de manera verbal por parte del personal de enfermería, lo que pudiera en 
cierta forma sobreestimar los datos reales. 
 
 36
Expediente o de manera verbal por parte del personal de enfermería, lo que pudiera en 
cierta forma sobreestimar los datos reales. 
 
8. CONCLUSIONES 
Reportar indicadores epidemiológicos de las UP es complicado ya que los resultados 
pueden ser muy variados de acuerdo a la población que se estudie. Este es el primer 
estudio multicéntrico de prevalencia puntual por grupo de riesgo de UP realizado en 
México. La prevalencia de UP en pacientes hospitalizados en instituciones de segundo 
nivel en la República Mexicana es de un 17%. Sin embargo al seleccionar la población y 
dividirla de acuerdo al riesgo de padecer UP encontramos un 5% entre los pacientes con 
puntaje de Braden mayor a 16 (bajo riesgo), 25% entre los pacientes mayores de 70 años 
de edad y 60% entre los pacientes con Braden menor a 15 (alto riesgo). Los grados de las 
UP más comunes son I y II y el sitio más frecuentemente afectado es la región sacra, 
seguida de los talones. La prevalencia considerablemente alta y la mínima aplicación de 
medidas de prevención confirman que el problema de las UP en nuestro país requiere 
definitivamente más atención. El puntaje en la Escala de Braden en la mayoría de los 
pacientes fue de bajo o sin riesgo, sin embargo poco más de un 20% tiene un puntaje en 
la Escala de Braden considerado de moderado a alto riesgo, lo que justificaría el uso de 
esta Escala en la valoración de rutina inicial de todos los pacientes que se hospitalizan en 
cualquier centro de atención médica. Así mismo aquellos pacientes con estancia 
intrahospitalaria prolongada requerirán vigilancia estrecha y medidas de liberación de la 
presión ya que se encuentran en mayor riesgo de desarrollar UP. 
 36
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
9. PERSPECTIVAS 
Se planea posteriormente incluir datos de otros centros en el resto de la República 
Mexicana con las mismas variables, para tener una muestra aún más representativa y un 
 37
panorama más amplio de la prevalencia de las UP en México. Asimismo, en base a los 
resultados obtenidos en este estudio, se planea implementar programas de capacitación y 
prevención, cuyo impacto posteriormente podría ser evaluado con un estudio similar a 
este, y complemetarlo con el cálculo de otros marcadores epidemiológicos. Estos 
resultados permitirán a la Clínica Integral del Cuidado de Heridas y Estomas una medición 
más objetiva del impacto de nuestra intervención en el tratamiento, prevención y 
educación de este grave problema. 
 
 
 
 38
10. BIBLIOGRAFIA 
 
1. Kanj LF, Wilking SV, Phillips TJ. Pressure ulcers. J Am Acad Dermatol 
1998; 38(4):517-36. 
2. Cortés-Meza, R. Aplicación de las medidas de prevención para úlceras de 
presión. Rev Enferm IMSS; Vol 10 (2); 2002, p. 90-91. 
3. The National Pressure Ulcer Advisory Panel. Pressure ulcers prevalence, 
cost and risk assessment: consensus development conference statement. 
Decubitus 1989; 2:24. 
4. The National Pressure Ulcer Advisory Panel. Pressure ulcers in America: 
prevalence, incidence, and implications for the future: an executive 
summary of the national pressure ulcer advisory panel monograph. Adv 
Skin Wound Care 2001; 14:208. 
5. Reddy, M, Gill, SS, Rochon, PA. Preventing pressure ulcers: a systematic 
review. JAMA 2006; 296:974. 
6. Lyder CH. Pressure ulcer prevention and management. JAMA 2003; 289(2): 
223-6. 
7. Bergstrom, N, Braden, B, Kemp, M, et al. Multi-site study of incidence of 
pressure ulcers and the relationship between risk level, demographic 
characteristics, diagnoses, and prescription of preventive interventions. J 
Am Geriatr Soc 1996; 44:22. 
8. Dassen T, Tannen A y Lahmann N. Pressure Ulcer, the scale of the 
problem, Capítulo 1 páginas 1-6. En Romanelli, M. Science and Practice of 
Pressure Ulcer Management. EPUAP. Springer. London 2006. 
 39
9. Baumgarten, M, Margolis, DJ, Orwig, D, et al. Pressure ulcers in elderly 
patients with hip fracture across thecontinuum of care. J Am Geriatr Soc 
2009; 57:863. 
10. National Pressure Ulcer Advisory Panel. Pressure ulcers: incidence, 
economics, risk assessment. Consensus Development Conference 
Statement. West Dundee, Ill:. SN Publications;1989. 
11. Shannon ML, Skorga P. Pressure ulcer prevalence in two general hospitals. 
Decubitus. Nov 1989;2(4):38-43. 
12. Narro, R. Contreras-Ruiz, J. A descriptive study on the prevalence of 
pressure ulcers in a Mexican hospital. Estudio piloto presentado en el 
Primer Congreso de la Asociación Mexicana del Cuidado Integral y 
Cicatrización de Heridas A.C. Boca del Río, Veracruz. Septiembre 2007. 
13. Cantún-Uicab F, Uc-Chi N. Perfil de riesgo para el desarrollo de úlceras por 
presión en pacientes hospitalizados. Rev Enferm IMSS 2005; 13(3): 147-
152 
14. Bautista L, Esparza M, Ortega J. Las Úlceras por Presión en Pacientes 
Sometidos a Ventilación Mecánica en la Unidad de Cuidados Intensivos e 
Intermedios del INER. Rev. Inst. Nal. Enf. Resp. Mex 2004; 17(2):91- 99 
15. Guía de Práctica Clínica para la prevención y tratamiento de las úlceras por 
presión a nivel intrahospitalario. Instituto Mexicano del Seguro Social. 
Octubre, 2009. Disponible en: 
http://www.cenetec.salud.gob.mx/interior/gpc.html 
 40
16. National Pressure Ulcer Advisory Panel. Updated staging system. 2009. 
(Fecha de acceso Diciembre, 2009). URL disponible en línea en: 
www.npuap.org 
17. Govern de les Illes Balears. Consejería de Salud. Prevención y tratamiento 
de las úlceras por presión, 2007. (Fecha de acceso 15 de Mayo 2010). URL 
disponible en línea en : 
www.caib.es/govern/sac/fitxa.do?lang=es&codi=148737&coduo=273 
18. P Pancorbo, F García. Valoración del riesgo de desarrollar úlceras por 
presión: uso clínico en España y metaanálisis de la efectividad de las 
escalas. Gerokomos: Revista de la Sociedad Española de Enfermería 
Geriátrica y Gerontológica, ISSN 1134-928X, Vol. 19, Nº. 2, 2008 , pags. 
84-98 
19. Smith DM, et al. Pressure ulcers in the nursing home. Ann Intern Med. 1995 
Sep 15;123(6):433-42. 
20. Grupo Nacional para el Estudio y Asesoramiento en Úlceras por Presión y 
Heridas Crónicas (GNEUPP). Directrices generales sobre prevención de las 
úlceras por presión. Logronyo; 2005. (Fecha de acceso Diciembre 2009). 
URL disponible en línea en: 
http://www.gneaupp.org/documentos/gneaupp/prevención.pdf 
21. Garcia AD, Thomas DR. Assessment and Management of Chronic Pressure 
Ulcers in the Elderly. Med Clin N Am 90 (2006) 925–944. 
22. Gunningberg L, Lindholm C. Reduced incidente of pressure ulcers in 
patients with hip fracture: a 2-year follow-up of quality indicators. 
 41
International Journal For Quality in Health Care. 2001; Volume 13, Number 
5: pp: 399-407. 
23. Brem H, Lyder C. Protocol for the successful treatment of pressure ulcers. 
The American Journal of Surgery 188 (Suppl to July 2004) 9S–17S. 
24. Vanderwee K, Clark M. Pressure ulcer prevalence in Europe: a pilot study. 
Journal of Evaluation in Clinical Practice. ISSN 1356-1294. 
 
 
 42
11. ANEXOS
 
s.-.t. ... ... So, .... .......... c....,.. ""'. M ....... c.. (lo ...... . 
CARTA DE CONSEH11M ' ENTO ' .. FOlUolADO 
Do • ..-do 000 loa _ ... lo Docia<aaOn ....... ...". , ron la lo, c.n.,aI <lo So"". 
r;""" ~. Do loa .... _ ~""" .... lo ,, "",,_ on s.... f' .. ," ... "", CN'1TU.O , 
" .poo ....... Con .... M I ... ",,,, " .' Eo Iod. ;._, _ on lo ouo aI_ kumaoo ... 
• _ o. 00""'<>. _,." ","". '_ 01 _00 ' oI ... poIo • '" , _ , ,, """""""'" , . ,,'o 
... ..u-, . ........ ,. Do_ . O'" . . .. " ,.. •• gr±-, _ oon.~"'" romo no .... m '""", o 
""'''''' <lo ""'""'" al . rt""-",,, " , 00 . .. ,,,,,,0,,._ 000 "" _"", • • • _ ..-.0100 ..... 
oooalMlouIo 2 ' 
, SO ......... ___ o,. aI_ ............. . . ,"'., .. ' oLo ".'M lo 
""' . ........ <lo lo. ~ "'" .,....;n 00 "" .--. .. ""-.......... on ~ 
_ .... s.",._ ..... , . lo RopO"""," "'o>io&oa. po" poo ... .. " .. '1o o',, , ......... _~ ... ". d;", ... ".,on '" """'-"' •. 
, . So ... '" .. ;>;cado ouo "" • .u;zao-'" • • , ,,,., •• __ ...... ""' "" ",,,,",,",,,," po" 
........ , pLon .-. ... _ 100. "" "'"' .., b , ...... ........,. o. """, •• "'" 
""o.,., 
lO. So mo '" .. _ ouo ... . """. c "", 00 " ".Lic. _ " no_ .. " .. .. "" no 
«< " ............ <lo _, "" 0 . .... """'''''' " .. loa ,",, '_ <lo • • 10 .0''''''' 
.,.....,.". d olo . '", al mojo< "'''_lo ... .. _"""""' on .. ...." 01 ... 
""'" -, .. , .. 1 """'" ..... omonto, """" . . ... .,....._1 
rv. So me ....... """"""' ._ "'-' " ' ''''''' "" ~ lodo lo ,.,...,.,...., 
ron al • ....,." "" .-w",-
V. So "'" ",loro " ", _ . bo"""'- al ....... on """,,lo yo lo 00000 , .~ . ... _ 
0l-00I0 .. _ ncoón '" ".'10 .... _.ro o .. , ...... ~ .. , 
\11. """"~o ,. PC "ocaaOn" loa '"""" ....... "' 00''''., " ~ .. , uo on ,_ 
.,."...."'" .. manlond" al aoccoIo ""","ax>noI '"'" 00 ......... " .. """""" o ...... , ... .. -.. 
too _ . ""~ondo "","""",""" lo oolorioo , """ ""' O'" 
.......... "''''" ...... IR """ ... ". '"<?""'" 000 ... poclo " "" .. ..,;...- 00 al "",)'do . 
...,.., ... ~_., al .. ,,,,,", , "'...." 
E. ",,"o "'''''''''''''' " .. ,,"' ....... .. .. ...-......, . ... oAowa' "", .,....;n on 2 _e ........ 
........ " ... . , lo _"""" ,,->o",,. 
-. ,f"",,"" ..-. o """"" .. 01 ....... ' ________________ _ 
-. , 1"", ""In __ Ro.""" ..... o """'DO" _____________ _ 
E . .. ~ ....... _ "'" " ,,,O.odo. " .. " d"" oo .. ," .,."... ... . 0 pOOM ..... ~oIo ... in,,""_ o .. '" __ .. ","-,lo ...... , 01 ot", en ,.,.... ... , __ o 
Po" ",-, lo. o """"'_ """",=wg 000 01 0.. Oct.v" S ,"", " ... ~I'.oz , .... _ ..... 
lo. Com.,,,,,oo <lo ~t:ca , ... "' _ _ .. ((J' 5S)<()(J().3J50 
 43
Anexo 2 
 
 44
Percepción 
Sensorial 
1: Limitada completamente: 
no reacciona a estímulos 
dolorosos o déficit sensorial 
en la mayor parte del cuerpo 
2: Muy limitada: 
Reacciona sólo con 
estímulos dolorosos, se 
expresa con quejidos, 
presenta déficit sensorial 
que limita la capacidad de 
percibir dolor en más de 
la mitad del cuerpo 
3: Limitada ligeramente: 
Reacciona ante órdenes 
verbales, pero no siempre 
puede comunicar sus 
molestias o la necesidad de 
que lo cambien de posición, o 
presenta déficit sensorial en 
alguna de las extremidades 
4: Sin limitaciones: 
Responde a órdenes 
verbales. No presenta 
déficit sensorial. 
Exposición 
a la 
Humedad 
1: Húmeda constantemente: 
Expuesta constantemente por 
sudor, orina, etc. Se detecta 
humendad cada vez que se 
mueve o se gira al paciente 
2: Húmeda con frecuencia: 
Húmeda a menudo, pero no 
siempre. La ropa de cama 
debe cambiarse al menos 
una vez por turno 
3: Húmeda ocasionalmente: la 
piel está húmeda 
ocasionalmente, lo cual hace 
necesario un cambio 
suplementario de ropa de cama 
aproximadamente una vez al día 
4: Húmeda raramente: 
La ropa está seca 
generalmente, la ropa 
de cama se cambia 
según os intervalos 
fijados para cambios de 
rutina. 
Actividad 
1: Encamado: Paciente 
constantemente encamado 
2: En una Silla: Paciente 
que no puede andar o con 
deambulación muy limitada. 
No puede sostener su 
propio peso y/o necesita 
ayuda para sentarse en una 
silla de ruedas 
3: Deambula ocasionalmente, 
con o sin ayuda durante el día 
pero distancias muy cortas. 
Pasa la mayor parte de las 
horas diurnas en la cama o en 
una silla 
4:Deambula 
frecuentemente: 
Deambula fuera de la 
habitación al menos 
dos veces al día y 
dentro de la habitación 
al menos dos horas. 
Movilidad 
1: Inmóvil completamente: Sin 
ayuda no puede hacer ningún 
cambio de posición del cuerpo 
o de alguna extremidad 
2: Muy limitada: 
Ocasionalmente hace 
ligeros cambios en la 
posición del cuerpo o de las 
extremidades, pero no es 
capaz de hacer cambios 
frecuentes o significativos 
por sí mismo. 
3: Limitada ligeramente: Hace 
con frecuencia ligeros cambios 
en la posición del cuerpo o de 
las extremidades por sí mismo. 
4: Sin limitaciones: 
Hace con frecuencia 
importantescambios de 
posición sin ayuda. 
Nutrición 
1: Muy pobre: Nunca ingiere 
una comida completa, 
raramente toma más de 1/3 
de cualquier alimento que se 
le ofrece. Come 2 raciones o 
menos con aporte proteico 
(carne o lácteos), bebe pocos 
líquidos, no toma suplementos 
dietéticos. Está en ayuno o 
con dieta líquida o sueros más 
de 5 días. 
2: Probablemente 
inadecuada: raramente 
hace una comida competa y 
generalmente ingiere solo la 
mitad de los alimentos. La 
ingesta proteica incluye solo 
tres raciones de carne o de 
lácteos al día. 
Ocasionalmente toma 
suplementos dietéticos. 
Recibe menos de la 
cantidad óptima dedieta 
líquida o por sonda 
nasogástrica. 
3: Adecuada: Toma más de la 
mayoría de las comidas, come 
un total de 4 raciones de 
proteínas, ocasionalmente 
puede rehusar una comida, pero 
toma un suplemento dietético si 
se le ofrece. O bien recibe 
nutrición por SNG o por vía 
parenteral, lo cual cubre la 
mayoría de sus necesidades 
nutricionales. 
4: Excelente: Ingiere la 
mayor parte de cada 
comida. Habitualmente 
come un total de cuatro 
raciones o más de 
proteinas. 
Ocasionalmente come 
entre horas. No 
requiere sumplementos 
dietéticos. 
Riesgo de 
Lesiones 
Cutáneas 
1: Problema: Requiere una 
asistencia de moderada a 
máxima para ser movido. Es 
imposible levantarlo 
completamente sin que se 
produzca un deslizamiento 
entre las sábanas. Se desliza 
frecuentemente en la cama o 
en una silla y necesita 
recolocarse a menudo con el 
máximo de ayuda. La 
espasticidad, las contracturas 
o la agitación producen un 
roce constante. 
2: Problema potencial: Se 
mueve muy débilmente o 
requiere asistencia mínima. 
Durante los movimientos la 
piel probablemente roza 
contra las sábanas, la silla, 
los sistemas de sujeción u 
otros objetos. . La mayor 
parte del tiempo mantiene 
una buena posición en la 
silla o en la cama, aunque 
en ocasione puede resbalar. 
3: Probablemente no hay 
problema: Se mueve en la cama 
o en la silla con independencia y 
tiene fuerza muscular suficiente 
para levantarse completamente 
cuando se mueve. En todo 
momento mantiene una buena 
posición en la cama o en la silla. 
 
 
	Portada
	Índice
	Glosario
	Relación de Figuras y Tablas
	Resumen
	1. Introducción 2. Antecedentes
	3. Justificación
	4. Objetivos
	5. Material y Métodos
	6. Resultados
	7. Discusión
	8. Conclusiones
	9. Perspectivas
	10. Bibliografía
	11. Anexos

Continuar navegando