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UNIVERSIDAD NACIONAL AUTÓNOMA DE MÉXICO FACULTAD DE ESTUDIOS SUPERIORES ACATLÁN Argentina: la guerra de las Malvinas a través del rotativo argentino “Clarín”. El periódico: ¿una versión limitada? Tesis QUE PARA OBTENER EL TÍTULO DE Licenciado en Historia PRESENTA Nora Leyda Duque Gaspar Asesora Lic. Guadalupe María del Pilar Barroso Acosta Enero de 2008 UNAM – Dirección General de Bibliotecas Tesis Digitales Restricciones de uso DERECHOS RESERVADOS © PROHIBIDA SU REPRODUCCIÓN TOTAL O PARCIAL Todo el material contenido en esta tesis esta protegido por la Ley Federal del Derecho de Autor (LFDA) de los Estados Unidos Mexicanos (México). El uso de imágenes, fragmentos de videos, y demás material que sea objeto de protección de los derechos de autor, será exclusivamente para fines educativos e informativos y deberá citar la fuente donde la obtuvo mencionando el autor o autores. Cualquier uso distinto como el lucro, reproducción, edición o modificación, será perseguido y sancionado por el respectivo titular de los Derechos de Autor. A Marta: Por su paciencia, sus recuerdos y por abrirme no sólo las puertas de su casa, también las de su corazón. A Cifas, el Atemporal: Sin él no sería. Guardamos lo mejor para el final; Repetimos una y otra vez: Adelante, ya falta poco. Cansancio, tristeza, críticas, Incertidumbre, pereza; Arrasamos con todo, con tal de, Sabernos triunfadores. Agradezco a: Mi Mamá y mi hermana, por su apoyo; Mis amigos, por su compañía; Al Ser Supremo, porque ya tengo fe, y A mi asesora, por su tiempo y dedicación. nldg ‘2008 Argentina: la guerra de las Malvinas a través del rotativo argentino Clarín. El periódico: ¿una versión limitada? ÍNDICE Pág. INTRODUCCIÓN 1 CAPÍTULO I I. ANTECEDENTES 11 1. Historia de las Malvinas 12 1.1. Origen 12 1.2. Las incursiones e inicio del conflicto 16 1.3. La Doctrina Monroe 17 1.4. Implicaciones políticas 24 1.5. Malvinas, hoy 30 1.6. Importancia 31 CAPÍTULO II II. LOS PARTICIPANTES. SUS RELACIONES DIPLOMÁTICAS 37 2.1. Reino Unido de la Gran Bretaña 40 2.2. República Argentina 43 2.3. Reflexiones 51 CAPÍTULO III III. LA GUERRA DE LAS MALVINAS EN EL CLARÍN 53 3.1. Planteamiento 53 3.2. ¿Qué es un periódico? 61 3.3. El Clarín 65 3.4. Desarrollo de la Guerra 76 3.5. Confrontación de versiones y su análisis 136 CONCLUSIONES 157 BIBLIOGRAFÍA 169 APÉNDICE 181 Neevia docConverter 5.1 INTRODUCCIÓN Durante la década de los ochenta del siglo XX, América latina se vio envuelta en una serie de acontecimientos bélicos que conmovieron la economía y la política del continente entero. Muchas dictaduras cayeron prácticamente al hilo: Perú (1980), Bolivia (1982), Argentina (1983), Uruguay (1984), Brasil (1985), Filipinas (1986), Haití (1986), Paraguay (1989) y la de Chile (1989).1 Las fuerzas más importantes que promovieron los cambios fueron las políticas civiles y los ejércitos. Una ola de regímenes militares de derecha que había iniciado, en los años sesenta, a inundar el cono sur, fue una pronta respuesta a la existencia de rebeldes armados. 2 En Argentina por ejemplo, el caudillo populista Juan Domingo Perón fue derrocado por un golpe militar; la fuerza peronista radicaba en las organizaciones obreras y en la movilización de los pobres; tras su caída, el gobierno argentino fue asumido a intervalos, por civiles, habida cuenta de que el movimiento de masas peronista se mostró indestructible y de que no se formó ninguna alternativa civil estable. Cuando Perón volvió del exilio en 1973, demostrando una vez más el predominio de sus seguidores, esa “vez con gran parte de la izquierda local a remolque, los militares tomaron de nuevo el poder con sangre, torturas y retórica patriotera hasta que fueron derrocados tras la derrota de sus fuerzas armadas en la breve, descabellada, pero decisiva guerra anglo-argentina por las Malvinas en 1982”.3 1 Almanaque anual 2003, Colombia, Editora Cinco, pp. 183, 213, 220, 244, 320, 356, 496, 498, 609. 2 Eric Hobsbawm, Historia del siglo XX, Barcelona, Crítica, 1995, pág. 553, cito: “El siglo XX había sido un siglo de guerras mundiales, calientes o frías, protagonizadas por las grandes potencias y por sus aliados, con unos escenarios cada vez más apocalípticos de destrucción en masa… Los años ochenta demostraron, mediante el conflicto anglo-argentino de 1982 y el que enfrentó a Irán con Irak de 1980 a 1988, que guerras que no tenían nada que ver con la confrontación entre las superpotencias mundiales eran posibles en cualquier momento. Los años que siguieron a 1989 presenciaron un mayor número de operaciones militares en más lugares de Europa, Asia y África de lo que nadie podía recordar, aunque no todas fueran oficialmente calificadas como guerras: en Liberia, Angola, Sudán y el Cuerno de África; en la antigua Yugoslavia, en Moldavia, en varios países del Cáucaso y de la zona transcaucásica, en el siempre explosivo Oriente Medio, en la antigua Asia central soviética y en Afganistán. Como muchas veces no estaba claro quién combatía contra quién, y por qué, en las frecuentes situaciones de ruptura y desintegración nacional, estas actividades no se acomodaban a las denominaciones clásicas de «guerra» internacional o civil. Pero los habitantes de la región que las sufrían difícilmente podían considerar que vivían en tiempos de paz…”. 3 íbidem, pág. 440. 1 INTRODUCCIÓN La Guerra de las Malvinas que involucró a Gran Bretaña versus Argentina y en la que Estados Unidos intervino como “mediador”, fue breve, apenas duró unos 70 días, pero dejó tras de sí –como todas–, un rastro de sangre y miseria. Para los argentinos se tradujo en un cambio en la forma de gobierno, con la salida de los militares del poder, amén de una fuerte crisis económica. Para el Reino Unido en cambio, fue una inyección de energía, pues Margaret Thatcher logró consolidarse en el poder reeligiéndose como primera ministro de su país y posteriormente en 1990, trató de cobrar indemnización por la guerra.4 La importancia de la guerra malvinense radica en que puso sobre la mesa, las gastadas relaciones entre Estados Unidos y Latinoamérica. Lo mismo que refrendó las posesiones neocoloniales de Europa en América.5 El fin de la guerra, como veremos en el capítulo I de este trabajo, no fue el día en que se rindieron los argentinos apostados en las Malvinas, todo lo contrario, siguió perennemente porque las islas continúan en posesión inglesa. Las Malvinas a través de FLAGS El 1º de diciembre de 1992 surgió en México la Fundación Latinoamericana "Gregorio Selser", A.C., conocida por sus siglas como FLAGS. Uno de sus objetivos es editar la obra póstuma del periodista, historiador y catedrático argentino Gregorio Selser (1922-1991), producto de su trabajo durante los años de 1960 a 1991, publicados en diversos periódicos y revistas de América latina, Estados Unidos y Europa. La Fundación está inscrita en varios programas de servicio social en universidades como la UNAM, la UAM y más recientemente la UACM. Hasta hace poco la Fundación tenía en su acervo 150 archiveros tamaño oficio y más de 50 revisteros con material hemerográfico y publicaciones de todos los países de Sudamérica, además de documentos históricos -algunos se remontan hasta los años veinte-, que fueron recopilados “con gran disciplina, ojo político y sensibilidad bolivariana” por el maestro Gregorio Selser y su esposa 4 El día 16 de febrero de 1990 todos los medios masivos de difusión, tanto estatales como privados, anunciaron que se habían restablecido las relaciones diplomáticas entre la República Argentinay el Reino Unido de Gran Bretaña. El instrumento jurídico fue firmado por Domingo Cavallo en Madrid, en un salón del Ministerio de Asuntos Exteriores de España. El texto del documento estaba integrado por dieciocho artículos y cuatro anexos que abarcaban un total de catorce cuartillas. La Nación, 16 de febrero de 1990, Buenos Aires, pp. 1, 4. 5 Gregorio Selser, “En carta a Pérez Esquivel apoya Alfonsín al Grupo de Contadora”, 24 de abril de 1985, El Día, México. 2 INTRODUCCIÓN Marta Ventura.6 Hoy el acervo está hospedado en la Universidad Autónoma de la Ciudad de México. De él han emanado más de 30 tesis, entre licenciatura, maestría y doctorado, además de otras publicaciones. Este trabajo de tesis se concibió tras varios años de colaboración en la Fundación, participando en la captura, corrección y clasificación de los artículos de don Gregorio, de su versión original en papel mecanuscrito a un formato digital, que permita a investigadores y periodistas interesados en la temática latinoamericana consultar de manera más precisa la obra selseriana. El acervo hemerográfico estaba dividido por temas, ofreciendo a sus consultores, material sobre: golpes de Estado, rebeliones, redes del poder y el narcotráfico, las modalidades del intervencionismo estadounidense, las formas distintas de la sumisión colonial, traiciones de los poderosos y los perfiles, anacrónicos y aberrantes, de decenas de dictadores que asolaron los países de América Latina, así como sus relaciones políticas con Estados Unidos. Sobre las fuentes impresas Gracias a la ayuda que don Gregorio recibió de su esposa, Marta Ventura, el acervo alcanzó dimensiones insospechadas por el mismo periodista, que se valió de tijeras para obtener de los periódicos y revistas, todo aquello que le era útil en su labor histórico-periodística. Tan sólo la sección dedicada a las Malvinas contaba al menos tres archiveros oficio (llenos hasta los bordes). Había ahí artículos de varios periódicos –muchos de los cuales únicamente tenían fecha–, folletos, gacetas y revistas. Marta menciona que nunca pensó en formar una hemeroteca con aquellos papeles; si empezó a ordenarlos, fue con la finalidad de hacer espacio en su casa para que su esposo siguiera trabajando. Recibían de cuatro a seis periódicos diarios, además de revistas, boletines y gacetas. Muchos años después de fallecido don Gregorio, con ayuda de estudiantes que hacían su servicio social, ella seguía clasificando artículos y recortes por temas e incluso por fechas. Su memoria y meticulosidad no han ido en detrimento con los años. Ahora preside la Fundación y participa como consultora en la Asociación por la Unidad de Nuestra 6 Blanche Petrich, “Archivos de los Selser reabren la memoria de AL”, 08 de noviembre de 2006, La Jornada, México. 3 INTRODUCCIÓN América (AUNA)7. En esos archiveros se encontraban los recortes del periódico , publicación argentina que llegaba a la residencia de don Gregorio todos los días y del cual extrajo segmentos completos y notas, de antes, durante y después de la guerra de las Malvinas. Ahí se encontraba toda la documentación que Selser seleccionó cuidadosamente y con la que, según su esposa, pensaba realizar un libro. A lo largo de tres años que se llevó la “reclasificación” del material, surgieron muchas preguntas sobre las Malvinas. Pero la más importante y que dictó la pauta de este trabajo fue: ¿mintieron los diarios deliberadamente al pueblo argentino sobre las condiciones de la guerra de las Malvinas? Para responder esta y otras interrogantes más se consultaron varias fuentes para conocer el desarrollo de la guerra, y poder así, hacer la comparación de versiones, es decir, entre lo ocurrido aquellos 70 días de guerra y lo que la prensa argentina le contó al pueblo. Se optó por el Clarín porque no es (o se tendría que decir era) un periódico pro-gobiernista. Cuando se hizo la elección del periódico, se pidió la opinión al respecto de un conocedor del tema, don Sergio Bagú,8 catedrático de la UNAM y que fuera en vida de don Gregorio, amigo y compañero de exilio. Sobre las fuentes “on line” Desde que en 1991 se liberó el código fuente del primer navegador para Internet, se volvió de fácil acceso para las personas no relacionadas con la telemática y se abrieron espacios para el comercio; el término “global” que se había acuñado desde los años sesenta, no fue tan real como lo ha sido en el siglo XXI.9 El temor a perder material invaluable, proyectos de investigación, imágenes y en general el producto de largos años de trabajo, de los investigadores sociales fue vencido por los ánimos de intercambiar con otros científicos, en diversos 7 Es una nueva organización continental independiente, de carácter no gubernamental, con proyección esencialmente latinoamericana y caribeña y que aspira a trabajar seriamente en la defensa de los mejores intereses y, concretamente, en favor de la unidad de los pueblos de América Latina. www.aunamexico.org 8 1911-2002, colaborador durante tres décadas del Centro de Estudios Latinoamericanos de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UNAM. Ver: Problemas del Desarrollo. Revista Latinoamericana de Economía, Vol. 36, Núm. 143, octubre-diciembre / 2005, pp. 265-268. 9 David Zurdo Sáiz; Fernando Acevedo Quero, Alejandro Sicilia Burgoa, Internet, España, Parainfo, 2001, pág. 17. 4 INTRODUCCIÓN países, experiencias y conocimiento. Es así como revistas publicadas en México por el INAH, la UNAM y la UACM, para citar ejemplos cercanos, brindan a la comunidad científica revistas, artículos científicos, manuales, entre otros, para su difusión.10 Las instituciones se han valido de los más variados medios y formas para proteger sus publicaciones de los hackers.11 Están desde los más sencillos que sólo te requiere de un registro en línea, hasta los que la consulta está restringida solamente para usuarios internos (intranet). Otros mantienen la información al alcance sin restricción, sólo piden al lector que cite el lugar de donde fue tomada la información, para lo cual recurren a las leyendas “Derechos Reservados” o “Copy Rights” o los símbolos © o ®. Para enriquecer este trabajo y empleando los criterios que para descartar las fuentes escritas se usan –quién lo escribió, para qué, por qué–, se revisaron cientos de páginas, portales y sitios de Internet. Si bien es cierto que ya cualquiera puede publicar en Internet, en los espacios públicos llamados blogs,12 también lo hacen personas que han encontrado un espacio en la www para la difusión científica y un lugar propicio para el encuentro de investigadores.13 Sobre el método Quizá ningún otro texto es tan difícil de abordar como la prensa, porque algunos la consideran fuente de opinión e indirecta, y por tanto no fuente de información proveniente de los hechos que se buscan. Sin embargo para el investigador de la 10 El INAH cuenta ahora con varias revistas, boletines y gacetas en formato electrónico, que también se publican en edición impresa, por ejemplo: Dimensión Antropológica, M. Museos, Voz-inah, El Correo del Restaurador, Revista Ehécatl, entre otras. Tan sólo la primera de ellas cuenta con 32 volúmenes en español y 4 en inglés, que dicho sea de paso, estos cuatro no pasaron por la imprenta, www.dimensionantropologica.inah.gob.mx; www.m.inah.gob.mx y www.inah.gob.mx. 11 El término viene de hack (en inglés recortar), utilizada en determinados sectores de las tecnologías para denominar a las pequeñas modificaciones que se le pueden hacer a un programa o máquina para mejorar o alterar su funcionamiento. Los hackers surgieron con los programadores del Massachusetts Institute of Technology (MIT), que en los 60, por usar hacks, se llamarona sí mismos hackers, para decir que podían hacer programas mejores y aun más eficaces, o que hacían cosas que nadie había podido hacer. 12 Un blog es un sitio web que recopila textos o artículos de uno o varios autores, donde se conserva la libertad de publicar lo que se quiera. El término blog proviene de las palabras web y log (en inglés diario). 13 Un ejemplo de primera mano: a mediados de 2006 se desarrolló un proyecto que permite al Consejo de Arqueología del INAH estar en contacto con los arqueólogos en México y el extranjero. http://www.arqueologia.inah.gob.mx/consejo/index.php; desde ahí dan seguimiento a los anteproyectos e investigaciones que se llevan a cabo en México en materia arqueológica. 5 http://es.wikipedia.org/wiki/World_Wide_Web http://es.wikipedia.org/wiki/Texto http://es.wikipedia.org/wiki/Art%C3%ADculo http://www.arqueologia.inah.gob.mx/consejo/index.php INTRODUCCIÓN historia moderna y contemporánea es impensable prescindir de la prensa. 14 Si consideráramos a los periódicos como informadores de los acontecimientos que se suceden a diario, tratando de abarcar en la medida de lo posible lo más sobresaliente, entonces estaríamos frente a una fuente “que nos dice lo que pasó y cómo pasó, pero sobre todo, proporciona su versión de las cosas, recoge lo que se pensó y se dijo acerca de algo”.15 Para los científicos sociales es una fuente del acontecer cotidiano, “es medio y fin”.16 Bajo esta premisa, para la realización de esta tesis, se descartó de la lectura de Clarín, todo aquel elemento comercial, tales como desplegados, anuncios y publicidad. Las cartas de los lectores, la editorial y las columnas fueron tomadas con reserva, teniendo en cuenta que tienen como fin emitir una opinión explícita. También se omitieron los segmentos dedicados a la economía y a los deportes. Como resultado obtuvimos del Clarín, todas las notas y artículos de política, relacionados con la guerra y sus protagonistas. Luego entonces, para definir la ruta de investigación nos preguntamos: ¿cuál es la importancia de las Malvinas? ¿Qué pasaba con las relaciones diplomáticas entre los protagonistas de la guerra? ¿Cuál fue el papel desempeñado por Estados Unidos en la guerra? ¿Cuándo aparecieron los periódicos en América Latina?, y ¿cuál fue su finalidad primaria? ¿Son forjadores de la opinión pública? ¿Abarcan los periódicos todo el ámbito social? ¿Están intervenidos o influenciados por los gobiernos? ¿Abarcan los periódicos todo el ámbito social? Preguntas que se fueron respondiendo a medida que se avanzó en la investigación y lectura del rotativo citado. El resultado está plasmado en estas páginas. Lo que se presenta a lo largo de este trabajo es en primera instancia, una semblanza histórica y geográfica de las islas Malvinas, así como su importancia en el origen del litigio. Luego, información histórica sobre las relaciones diplomáticas de los países participantes, con la finalidad de presentar la importancia de la guerra para Argentina e Inglaterra. En un tercer apartado, el análisis de la información que Clarín presentó durante un año a sus lectores, 14 Álvaro Matute, "Prensa, sociedad y política (1911-1916), en Aurora Cano Andaluz (coordinadora), Las publicaciones periódicas y la historia de México, México, UNAM, 1994, pág. 63. 15 ídem. 16 Álvaro Matute, “De la prensa a la historia”, en Miguel Ángel Castro (coordinador), Tipos y caracteres: la prensa mexicana (1822-1855), UNAM, México, 2001, pág. 12. 6 INTRODUCCIÓN comparándolo con la versión final sobre lo ocurrido aquel invierno de 1982. Por último, se anexaron varios apéndices con información adicional sobre los periódicos que se publican en Argentina, imágenes de la guerra y las fichas resumidas obtenidas de la lectura de . Sobre don Gregorio Selser (1922-1991)17 Por último, como ya se dijo en un apartado anterior, FLAGS surgió a partir de la necesidad de preservar el trabajo de Selser. Esta tesis es una muestra de los recursos con los que cuenta ese archivo, así como todo lo que la obra selseriana puede aportarnos hoy al entendimiento de la política, la economía y la historia contemporánea de latinoamerica. Su obra “expresa su deseo y necesidad de que otros seres humanos sientan la misma indignación que él frente a la injusticia, mantuvo una denuncia constante y consecuente de las políticas intervensionistas de las potencias mundiales, principalmente las de Estados Unidos”. Como periodista comprometido con la verdad, sustentaba su trabajo en la reconstrucción histórica minuciosa y precisa, rigurosamente documentada, que hoy es testimonio contra la mentira y abuso del poder. Vinculó los acontecimientos de actualidad periodística con sus antecedentes históricos. De esta manera, en su trabajo la historia aparece como un instrumento para la comprensión del presente. Su obra debiera ser difundida para tener una visión más clara de la historia latinoamericana contemporánea. Su formación periodística entra en la corriente del pensamiento latinoamericanista, antiimperialista y socialista. La mayor parte de su obra la llevó a cabo en México; se destacó por su capacidad de manejo de grandes cantidades de información, análisis rigurosos y concienzudos, acompañados de una notable memoria. Gregorio Selser nació en Buenos Aires, Argentina, el 2 de julio de 1922; residió en exilio en México desde 1976, hasta su fallecimiento, el 27 de agosto de 1991. Fue periodista y corresponsal de periódicos y agencias noticiosas, así como colaborador asiduo de importantes publicaciones de América Latina y Europa. En 17 Ana Laura Ramos Saslavsky, “El archivo Gregorio y Marta Selser. Una invitación a investigar la historia de América Latina del siglo XX”, en Andamios. Revista de Investigación Social, Núm. 5, México, Universidad Nacional Autónoma de la Ciudad de México, 2006, pp. 283-303. Ramos Saslavsky se encarga del proyecto de digitalización de la hemeroteca de Selser en la UACM (2007). 7 http://www.uacm.edu.mx/andamios/num5/documentos.pdf http://www.uacm.edu.mx/andamios/num5/documentos.pdf INTRODUCCIÓN Argentina colaboró con las agencias de noticias Inter Press Service (IPS), y Prensa Latina (PL), esta actividad la continuó en su exilio. Fundó las editoriales Triángulo y Palestra, en está última fue director de las colecciones “Historia viva” (1958- 1966) y “Vertientes de la libertad”, donde editó el libro Nuestra América y el imperialismo (1961) de Alfredo Palacios. Además, en la Editorial Universitaria de Buenos Aires (Eudeba) dirigió las colecciones “Biblioteca de América” y “Libros del tiempo nuevo” (1962-1966). También se desempeñó como profesor interino de periodismo en la Universidad Nacional de La Plata (1971-1974), a pesar de no tener título universitario. Paralelamente a estas actividades, desde 1956, tuvo trabajo fijo de tiempo completo en el periódico La Prensa, en la apolítica sección de “comunicaciones y transportes”, donde trabajó durante 19 años. En Argentina publicó aproximadamente 1,400 artículos y 24 libros. Durante los 15 años que vivió en México trabajó como investigador en el Instituto Latinoamericano de Estudios Trasnacionales (ILET), colaboró en los periódicos El Día, La Jornada y El Financiero, entre otros, y en la revista Proceso. Fue profesor invitado del Centro de Estudios Latinoamericanos (CELA) de la UNAM durante nueve años. Ya radicado en México, escribió más de 3,300 artículos más y otros 23 libros, cinco de ellos fueron publicaciones póstumas. Su trabajo fue el de un periodista de investigación: consultaba archivos, fuentes principalmente hemerográficas, y buscaba referencias históricas. Para él la historia era un instrumento de gran riqueza para la comprensión del presente. La necesidad del estudio y el conocimiento de la historia latinoamericanafue su guía, no sólo en sus escritos, sino también en su desempeño como profesor universitario. “Selser divulgó los datos que habían sido soslayados por la historia oficial. Con su obra, una generación aprendió a conocer a la América Latina irredenta, la que no figura en los textos escolares…” Selser formó en Argentina una biblioteca de aproximadamente 12,000 ejemplares, misma que tuvo que abandonar en su vivienda en Buenos Aires, cuando salió exiliado. Para salvarla de la amenaza de destrucción por parte de los militares, la donó al gobierno de México y a la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (FLACSO). Así fue como el gobierno mexicano de López Portillo y FLACSO participaron en el traslado del acervo entre 1979 y 1981. Pero no sólo trasladaron la biblioteca, también los papeles guardados por Selser (los que 8 INTRODUCCIÓN originaron su archivo hemerográfico), junto con los originales mecanografiados de sus artículos. Selser mantuvo un análisis permanente y minucioso de los medios de comunicación, particularmente de las agencias de noticias y la prensa; criticó severamente a los medios antidemocráticos, manipuladores, serviles y autocensurados. Obtenía de los diarios, lo mismo artículos, reportajes, notas informativas que imágenes. Por ejemplo, de su archivo sobre Malvinas se extrajo ésta: Fue tomada del rotativo mexicano El Nacional, la fecha aparece inserta en el mismo recorte, como solía hacerlo don Gregorio. Es interesante esta foto porque muestra una de las maneras en que se ridiculiza o minimiza la guerra de las Malvinas; se subastaron artículos personales de los participantes de la misma. En este caso un sombrero de copa y unos guantes. La época que vivió Selser en México fue la de los regímenes de terror en el Cono Sur y su repliegue en los ochenta; los temas que abordó en sus libros y artículos fueron entre otros: la Guerra de las Malvinas, la crisis de la deuda latinoamericana y la aplicación de los planes radicales de concentración de riqueza llamados "planes de ajuste estructural" y "neoliberalismo", las muertes de Torrijos y Roldós y el primer "Documento de Santa Fe”, el "caracazo", la Revolución Sandinista y la guerra en Centroamérica de finales de los setenta y toda la década de los ochenta (más de 300 mil muertos), la guerra "secreta" de 9 INTRODUCCIÓN Reagan contra Nicaragua y el "Irangate", la invasión de Granada, los “cocadólares” y García Meza en Bolivia, el Tratado Torrijos-Carter y la invasión a Panamá, la victoria de Arístide en Haití y su consiguiente desestabilización, la derrota electoral sandinista, la CIA, la presidencia de Bush (padre), la Guerra del Golfo Pérsico, el desmantelamiento del bloque soviético, el acercamiento ansioso de la disidencia clasemediera intelectual latinoamericana al poder. Sólo resta decir que a don Gregorio le sobreviven su esposa Marta y tres hijas Claudia, Irene y Gabriela, quienes también se dedican al periodismo; una de ellas radica en México; las otras dos, una en Nicaragua y otra en Argentina. 10 Capitulo I ANTECEDENTES En este capítulo empezaremos por dar una descripción física y geográfica de las islas Malvinas, objeto y escenario de la guerra. Luego un recuento de su historia y lo que pueden representar para los intereses de quien posea la soberanía sobre ellas. Veremos, que las Malvinas son mucho más que unas simples islas, por eso la armada británica desplegó parte de su flota naval para poder recuperarlas, demostrando con ello supremacía naval y militar. Se hablará de sus características, los posibles porqués de la guerra y su contexto histórico, cerraremos con la importancia que este territorio tiene en el entorno mundial.18 El mapa muestra el hemisferio sur del continente americano. Se puede apreciar cuán largo y grande es Argentina, todas sus fronteras y litorales. En el extremo sur se encuentran las islas Malvinas, formando un archipiélago, y más abajo el Océano Glacial Ártico, por lo que convierte a las islas presa de crudos inviernos, con fuertes ráfagas de viento y zona de difícil acceso. 18 Los mapas de este capítulo, excepto el último, fueron obtenidos de la Enciclopedia Encarta 2006. 11 Neevia docConverter 5.1 ANTECEDENTES 1. Historia de las Malvinas 1.1. Origen Las islas Malvinas, Georgias del Sur y Sándwich del Sur, pertenecen a los archipiélagos ubicados en la prolongación sur-oriental del continente americano y la cordillera de los Andes, se forman en un arco que comienza a unos 500 kilómetros del litoral argentino Malvinas, estando en medio las Georgias del Sur y terminar a 2,000 kilómetros del mismo, con las Sándwich. Miden 12,173 kilómetros cuadrados.19 Las Malvinas son las más importantes de la región, tanto por su tamaño, como por las cuencas petroleras que se encuentran bajo ellas, además de su ubicación estratégica en el sur del continente, cercana a una de las rutas marítimas más importantes del mundo, la que comunica el océano Atlántico con el Pacífico. Estas islas son aptas para la crianza de ganado ovino, además son ricas en recursos pesqueros como el krill (crustáceo con alta concentración de proteínas).20 Las Malvinas pertenecen al continente americano, de manera natural a Argentina, ya que se encuentran en su plataforma continental. Es un archipiélago compuesto por dos islas principales y otras menores, haciendo un total de 200 islas. Las de mayor importancia son La Soledad y La Gran Malvina, junto al resto de las islas, guardan una gran semejanza con las tierras patagónicas. No tienen ríos importantes, salvo por los ríos de piedra21 que probablemente llevaron agua en la época preglacial.22 Las islas son esencialmente llanas, con pequeñas ondulaciones y elevaciones de poca importancia: el monte Adam, ubicado en la Gran Malvina, apenas mide 700 metros; el monte Osborne, dentro de la isla La Soledad, mide aún menos, 685 metros. El clima es extremadamente frío, suelos duros y rocosos azotados por vientos huracanados. El mar en su derredor es frío, aunque el Ártico se encuentra a 1,600 kilómetros de distancia.23 19 Alejandro Dabat y Luis Lorenzano, Conflicto malvinense y crisis nacional, México, Libros de teoría y política, 1982, pág. 75; Gregorio Selser, “Malvinas: política, economía y estrategia en el contexto del litigio del Atlántico Sur”, El Día, México, 25 de abril de 1982. 20 ídem. 21 Les llaman ríos de piedras porque son ríos petrificados; grandes vados con enormes piedras que parecen haber quedado ahí, inmóviles, después de haberse secado toda el agua que llevaban. 22 Mario J. Calvi, Malvinas el mito destruido, Ediciones Devoto, Argentina, 1982, pp. 26 y 27. 23 íbidem, pág. 28 12 Neevia docConverter 5.1 ANTECEDENTES Las islas carecen de árboles, salvo los de Stanley. La fauna endémica fue desapareciendo por la cacería sin medida de los habitantes de las islas, que si bien son pocos, su intrusión definitivamente modificó el hábitat. Así fue como el zorro de las islas se extinguió, debido a la persecución de los pobladores, para salvaguardar al ganado ovino y vacuno que ellos llevaron. Sin embargo, aún sobrevive el “pato vapor”, cuya característica particular es su gran pecho ancho.24 Su nombre probablemente derive de Molovines, nombre dado por los pescadores del puerto de Saint Malo, en la costa Bretona francesa, quienes fueron asiduos visitantes de las islas durante el siglo XVIII.25 Las islas han sido llamadas de diferentes formas a lo largo de su historia: San Antón o De los Patos; Sansón; Islas de Sebald Weert, Sebaldes o Sebaldinas (llamadas así en honor a su supuesto descubridor, un marino holandés llamado Sebald Weert, de quien no se tienen más registros, por el año de 1600); Nouvelles y FalklandIslands.26 Respecto a su descubrimiento hay varias versiones, por un lado los ingleses consideran que su descubridor fue un navegante británico, pero no hay documentos que respalden esta versión. Por otro lado, los argentinos tienen la idea generalizada de que fueron descubiertas por Esteban Gómez en 1520, coterráneo o quizá pariente de Magallanes, que bien pudo haber desertado y usurpado al capitán de una de las naves y llegó hasta las islas, pero tampoco hay documentación ni registros.27 Finalmente los primeros en asentarse en las islas, y documentarlo, fueron los franceses, en 1763, cuando un barco capitaneado por Louis Antoine de Bougainville recaló en ellas. Se fundó el fuerte de St. Louis en la Soledad en 1764, así las islas quedaron bajo la jurisdicción de la corona francesa. España protestó, porque las consideraba suyas por estar encuadradas en la zona otorgada en virtud del Tratado de Tordesillas,28 incluso el Tratado de Utrecht, 24 íbidem, pág. 30. 25 A. Kosarik, La crisis de las Malvinas (Falkland): orígenes y consecuencias, “Ciencias Sociales Contemporáneas”, Academia de Ciencias de la URSS, Moscú, 1983, pág. 26. 26 Mario J. Calvi, Malvinas el mito destruido… op. cit., pp. 44-47. 27 A. Kosarik, La crisis de las Malvinas (Falkland)…, op. cit., pág 25. 28 Para evitar conflictos entre España y Portugal, quienes se habían lanzado a los descubrimientos ultramarinos durante el siglo XV, el Papa Alejandro VI propuso la línea que pasaría a cien leguas (ampliada después a trescientas) de las islas Azores. El tratado de Tordesillas fue firmado el 7 de Junio de 1494. Sin embargo, la demarcación pactada era sobre las tierras de Asia, pues aún se ignoraba que las tierras descubiertas por Colón formasen un nuevo continente. José Andrés Gallego, Luis Suárez Fernández, Historia general de España y América, Madrid, Rialp Ediciones, S.A., 1981, pág. 112. 13 Neevia docConverter 5.1 ANTECEDENTES concertado entre España y Gran Bretaña en 1713, estipulaba precisamente tal posesión. Francia se vio obligada a renunciar a las islas en favor de España, quien le dio 680 mil libras y fue el mismo Bougainville quien hizo la entrega de las islas (1766).29 Anteriormente en el año de 1765, los ingleses fundaron clandestinamente ahí una colonia con el nombre de Puerto Egmont; pero ni los españoles ni los franceses querían tener ingleses en sus territorios, así que fueron desalojados por una expedición que envió el gobernador de Buenos Aires, don Francisco de Bucarelli, por orden de la corona española.30 A partir de ese momento se llamó Puerto Trinidad.31 Vendrían años de paz en Europa, pese a ello, la situación de España no era buena y el desalojo de los ingleses fue el pretexto para un conflicto mayor. Luego de presionar a Francia, para que cumpliera el “Pacto de ayuda”, Carlos III se vio en la necesidad de entrar en negociaciones y aceptó realizar un acto de desagravio, el cual consistió en devolver el fuerte a Inglaterra, pero España conservaría la soberanía (1771).32 Continuaron los conflictos y el episodio terminó con la quema de los restos del fuerte en 1780 por Juan Pascual Callejas, quien además se llevó la placa que habían dejado los ingleses (como muestra de su estancia ahí) y la depositó en Buenos Aires; ésta desapareció durante las invasiones inglesas al Río de la Plata. Continuó la administración de las islas que estuvo a cargo de los españoles. 33 El primer gobernador de las islas, nombrado en el Río de la Plata, fue Ruiz Puente (1767-1773), le sucedieron 19 gobernadores más, hasta 1810 en que se dio la Revolución de Mayo (revolución que puso fin a la dominación Española al Río de la Plata). En 1825 Gran Bretaña reconoció la independencia de Argentina con la firma del “Tratado de Amistad-Comercio y Navegación”, en el cual se aceptó también que todo lo perteneciente a España, ahora correspondía a la joven República.34 29 íbidem, pág. 26 y 27. 30 íbidem, pág. 28. 31 Mario J. Calvi, Malvinas el mito destruido… op. cit., pp. 52-53. 32 ídem. 33 íbidem, pp. 50. 34 íbidem, pp. 56. 14 Neevia docConverter 5.1 ANTECEDENTES De Buenos Aires partió en 1820, la fragata “Heroína”, el capitán al mando llevaba la orden de administrar las Malvinas; reunió los barcos fondeados en las islas: americanos e ingleses, estando presentes sus capitanes y tripulación, tomó posesión de las islas a nombre de las Provincias Unidas de América del Sur. Tres años después, el gobierno bonaerense otorgó el permiso de poblar las islas a los argentinos, que así desearan hacerlo. Las primeras concesiones de tierra fueron otorgadas en la isla Soledad.35 Entre 1824 y 1829 las islas fueron administradas por Pacheco y Luis Vernet. El 10 de junio de 1829, se creó por decreto la Comandancia Política y Militar de las islas Malvinas. El primer comandante fue Vernet, oriundo de Hamburgo, naturalizado argentino. Sus funciones principales eran el de controlar y contener la depredación de recursos naturales, realizada por centenares de navíos de diversas nacionalidades.36 En este mapa se puede observar la distribución y nombres de las islas que forman el archipiélago de las Malvinas o Falkland Islands, como le llaman los ingleses. 35 A. Kosarik, La crisis de las Malvinas (Falkland)… op. cit., pág. 28. 36 ídem. 15 Neevia docConverter 5.1 ANTECEDENTES 1.2. Las incursiones e inicio del conflicto En 1831, cerca de la isla Soledad fueron detectados barcos balleneros estadounidenses; Vernet mandó apresarlos y se embarcó con ellos rumbo a Buenos Aires para informar sobre el incidente. El capitán de la nave estadounidense se dirigió al cónsul de su país y exigió se rectificaran los procesos a los que fue sometido por Vernet. Luego ese capitán regresó a las islas a bordo de la corbeta “Lexington”, arrestó a un capitán argentino que había recalado su nave en las islas, arrasó las edificaciones y proclamó que las islas no tenían dueño, momento que supieron aprovechar los ingleses para establecerse en ellas.37 El 3 de enero de 1833, una corbeta inglesa entró en Puerto Soledad, obligando al comandante civil y militar J.M. Pineda a remover la bandera argentina y abandonar las islas. Así fue como se produjo la conquista pirata cuya “legitimidad” suele argüir Gran Bretaña para reclamar como suyas las islas. Al principio sólo se realizaron investigaciones hidrográficas en las aguas costeras, y únicamente por personal oficial naval.38 A partir de la posesión británica, cada año el gobierno argentino ponía de manifiesto una protesta contra la agresión británica, pero resultó inútil; con todo fue puesta una base naval en las islas, luego de eso, empezaron a llegar inmigrantes ingleses y escoceses, que se fueron estableciendo paulatinamente en las islas. Su economía era básicamente de autoconsumo y mantuvieron contacto con Londres.39 Posterior a esto, Argentina envió un comunicado a las repúblicas americanas sobre el atropello cometido por Inglaterra en su contra. Ninguna hizo eco a esta denuncia, a excepción de Bolivia, quien apoyó la causa argentina. Fue hasta el 8 de enero de 1834 que esta denuncia tuvo respuesta por parte del gobierno inglés, representado por Lord Palmerston, quien lo único que hizo fue desconocer los reclamos argentinos. El 29 de diciembre de ese mismo año el embajador en Londres, Manuel Moreno, volvió a presentar el reclamo, haciendo un relato estricto de las razones históricas, geográficas y jurídicas de Argentina.40 37 íbidem, pág. 29. 38 ídem. 39 ídem. 40 Calvi, Mario J., Malvinas el mito destruido... op. cit. pp. 63. 16 Neevia docConverter 5.1 ANTECEDENTES Entonces Gran Bretaña envió ese año la fragata “Challenger”, llevandoa bordo al teniente Henry Smith, quien traía la instrucción de establecerse y gobernar las islas a nombre de la Corona Británica. Entre otras cosas que se transportaban en la embarcación llevaban un grupo de ovejas, el primero que se introdujo en estas islas, que luego constituirían una de las principales riquezas de estas tierras.41 Desde entonces no hubo más en el escenario malvinense, hasta que un incidente bélico puso a las Malvinas en la mira política nuevamente. El 8 de diciembre de 1914, en medio de la Primera Guerra Mundial, una escuadra alemana recibió instrucciones de abrirse paso vía Atlántico Sur, y así lo hizo, de paso podría atacar la base naval inglesa de Puerto Stanley. Lo que el vicealmirante alemán M. von Spee no sabía era que, en aquel momento, había anclada una considerable flota de naves británicas, que resistieron sin problema el ataque alemán, e incluso lograron derrotar a von Spee.42 Durante la Segunda Guerra Mundial Puerto Stanley sirvió de base naval para Inglaterra y Estados Unidos, y al término de ésta los reclamos argentinos se hicieron llegar a la ONU en 1965, el 18 de noviembre, entonces la Asamblea General de ese organismo emitió la Resolución No. 2065, en la que se declaraba la necesidad de solucionar tal situación por la vía diplomática. Al año siguiente iniciaron las negociaciones bilaterales, las cuales no dieron frutos.43 1.3. La Doctrina Monroe El intervencionismo estadounidense, como solía llamarle don Gregorio Selser a la participación o irrupción de los Estados Unidos en problemas latinoamericanos, tiene muchos métodos y nombres: Doctrina Monroe; Big Stick Policy (Política del Garrote); Gunboat Diplomacy (Diplomacia de las Cañoneras); Dollar Diplomacy (Diplomacia del dólar), y Good Neighbor Policy (Política del buen vecino), todas ellas generadas para una sola finalidad, llevar a cabo la misión de los Estados Unidos, “gobernar el destino del mundo”. 44 41 ibídem, pp. 65. 42 A. Kosarik, La crisis de las Malvinas (Falkland)… op. cit., pág. 30. 43 Alejandro Dabat y Luis Lorenzano, Conflicto malvinense y… op. cit., pág. 76 y 77. 44 Gregorio Selser, “La agresión a Nicaragua: Algunos de sus mecanismos, descriptos por el asesor legislativo Gino Lofredo”, 05 de junio de 1983, El Día, México; “Honduras, Nicaragua y los militares asesores argentinos: Hablan los cancilleres de Honduras y Nicaragua”, 17 de abril de 1983, El Día, México; “Estados Unidos: La inserción de la CIA en el “LASA Forum”: una provocación”, 17 de 17 Neevia docConverter 5.1 ANTECEDENTES Al respecto Selser nos dice: “La felicidad de los Estados Unidos es la institución más onerosa que pesa sobre el mundo. ¿Existe en Hispanoamérica alguna nación que en el curso de su existencia no se haya visto afectada en mayor o menor cuantía en su economía, su política, su cultura, su historia, su libertad misma en fin, cuando no todas, a una, al contacto de, o bajo la influencia o el poderío de los Estados Unidos de Norteamérica? “Tratar de responder a esta pregunta con bastante aproximación exigiría un conocimiento cabal, no sólo de la verdadera historia de los pueblos de nuestra América... Desde los albores de la independencia de los Estados Unidos, buena parte del acontecer histórico de nuestros pueblos ha estado vinculado de algún modo con la formación, el desarrollo y la elevación de la Unión norteamericana al plano de primera potencia en el orden mundial... “Hay mucho de aparente maravilla en ese nacer y crecer casi sin sobresaltos ni alarmas. A fines de siglo XIX, el príncipe teutón, Otto von Bismarck, Canciller de Hierro, el mismo que llegó a designar a la llamada ‘Doctrina Monroe’ una impertinencia, observó que ‘los Estados Unidos tienen la suerte de los niños, los locos y los borrachos’, aludiendo a la circunstancia de que todos sus pasos en la arena internacional finalizaban con total fortuna para ellos, sin quebrantos mayores ni consecuencias dolorosas… permitiéndose el lujo de disputar a viejos y poderosos imperios sus preeminencias y conquistas. “Ningún historiador estadounidense deja de reconocer que buena parte de amplios jirones territoriales fueron arrancados a los pobladores nativos por el dolo, el engaño, la fuerza de las armas o el veneno del ron... Las técnicas de apropiación, penetración, conquista y sujeción de territorios variaron con los tiempos y las circunstancias. No hubo un módulo único ni permanente, ni pautas rígidas a las cuales debían ajustarse los peregrinos y pastores aposentados en el Nuevo Mundo… los colonos, tanto los fijos como los trashumantes, se veían a sí mismas como honradas personas, temerosas de Dios y de sus ocultos designios, deseosas septiembre de 1983, El Día, México; “Honduras: Se denuncian intentos bélicos propiciados por Estados Unidos”, 31 de marzo de 1983, El Día, México; entre otros muchos más en los que denunció públicamente que Estados Unidos intervenía en los asuntos de América latina y Centroamérica, con invitación o sin ella. Para más información sobre el archivo hemerográfico del maestro Gregorio Selser véase: Blanche Petrich, “Archivos de los Selser... op. cit. La frase entre comillas es de Carlos Bosch García, a quien citaremos más adelante. 18 Neevia docConverter 5.1 ANTECEDENTES tan sólo de progresar algún tanto más con relación a la Europa natal, de ellos mismos o de sus padres… “Cada ampliación de frontera afianzaba la seguridad y acrecentaba la prosperidad y alejaba, cuando no eliminaba, a la adyacencia del enemigo, así fuese éste el francés papista o el barbarous native, definitivamente irrecuperable. Después, cuando prendió la chispa independentista, [los ingleses fueron el enemigo, en tanto que] España y los españoles eran visualizados como amigos, como iba a probarlo, por lo demás, el feliz resultado de 1776. “Para cuando este primer paso se hubo consolidado, la idea del derecho a la seguridad se transfirió al argumento del derecho natural, que en la mejor tradición del puritanismo anglosajón implicaba mezclar a Dios con las peripecias terrenales, en favor de quien lo invocaba asistido de argumentos más contundentes que los de la simple fe. Samuel Adams podía así permitirse, ya en 1778, avizorar la posesión del Canadá, la Nueva Escocia y las Floridas, concibiendo tales apropiaciones como ‘un designio de la Naturaleza’… Adams u otros como él, asumían con naturalidad esa intermediación autoasumida, que se completaba con otra convicción del mismo jaez: si Natura no colaboraba, debía apelarse al contundente argumento de la fuerza. Prevaleció con todo el derecho a la seguridad, establecido por la divinidad, tal como se transparenta en una carta que James Lowell45 dirigió a Horatio Gates46 en 1779, en la que indicaba que los estadounidenses sólo pedían lo que ‘la Deidad les había destinado’. “El problema consistía en determinar cuán avara o magnánima accedía a ser la Deidad. De ahí la impagable ventaja de que los voceros de sus designios eran al propio tiempo sus intermediarios terrenos y sus beneficiarios. No se trataba, pues, de un crecimiento subrepticio y ni siquiera disimulado. Los Padres Fundadores resultaban para el caso demasiado diáfanos, tanto en sus escritos como en sus 45 Lowell, James Russell (1819-1891). Escritor estadounidense. Influido por su primera esposa, Maria W. Lowell, intervino activamente en las campañas para la abolición de la esclavitud. Publicó sátiras, crítica y poesía, y en esta última, y sobre todo en el libro Poems (1844), se asienta su fama literaria. The Cathedral (1869) fue uno de sus últimos poemas importantes. Enciclopedia Salvat Editores, S.A. 1999. 46 Gates, Horatio(1728-1806). General estadounidense, nacido en Inglaterra. Durante la guerra de la Independencia, derrotó a los ingleses en Saratoga (1777) y disputó el mando a Washington, pero, vencido en Camden (1780), fue relevado del mando. íbidem. 19 Neevia docConverter 5.1 ANTECEDENTES discursos y declaraciones, como para que cupieran dudas sobre sus ulteriores proyectos”.47 El medio para llevar a cabo uno de esos “proyectos”, fue la Doctrina Monroe, estipulada en 1823 por el presidente de Estados Unidos, James Monroe (1817- 1825), en consecuencia de la actuación de la Santa Alianza europea y por las actividades del imperio ruso en la costa americana del Pacífico. Los zares, dueños de Alaska, ya se asomaban por San Francisco. En ese año, 1823, cien mil franceses intentaban restaurar el absolutismo de Fernando VII en España y corría el rumor de que un enorme ejército europeo vendría a América a terminar con los independentistas. 48 La Doctrina Monroe procedía en realidad del fracaso diplomático y político de los Estados Unidos, cuando no lograron que Francia se comprometiera a no agredir al continente americano. Pareciera que la Doctrina obedecía a un sentimiento de inferioridad ante Europa49 y fue enmarcada en el movimiento de expansión y la transcontinentalidad que delineó la política exterior de los Estados Unidos, después de su independencia, durante el siglo XIX. La primera frontera que estableció fue con América latina, gracias al tratado Adams-Onís. “La sed insaciable de tierras y la idea del Destino Manifiesto, en un principio, tenían como fin inconciente evitar la presencia de las potencias europeas en el continente norte, y de allí que la técnica de colonización se amoldara a las necesidades circunstanciales, aun cuando siempre comenzara con la misma fórmula: provocar una situación de hecho, que al discutirse podría dar lugar a soluciones diferentes”.50 Las mecánicas de expansión, como decía Selser, no tenían reglas, unas veces consistía en una ocupación pacífica de territorios que eran invadidos por colonos, presentándose así, a la larga una colonización, la cual de hecho se institucionalizó; esa fue, por ejemplo, la dinámica que llevaron a cabo en Florida. En otras ocasiones se adquirían tierras y para ello se firmaban tratados internacionales de compra y venta (como con Luisiana); también ocurrieron 47 Gregorio Selser, “Estados Unidos - Hispanoamérica bicentenarias relaciones desiguales”, en Cuadernillo de Aniversario, junio de 1980, El Día, México. 48 Estados Unidos de América. Documentos de su historia política I, México, Instituto de Investigaciones “Dr. José María Luis Mora”, 1998, pp. 392- 394. 49 Carlos Bosch García, La base de la política exterior estadounidense, México, UNAM, 1986, pág. 13. 50 íbidem, pág. 11. 20 Neevia docConverter 5.1 ANTECEDENTES adquisiciones provenientes de resoluciones de independencia, que declaraban colonos inyectados en tierras extranjeras; se recurría entonces a la anexión (tal fue el caso de Texas); por último la expansión territorial se hizo depender de tratados de paz internacionales (por ejemplo Nuevo México, California y poco más tarde, Filipinas y Puerto Rico).51 La política del presidente Monroe separaba al nuevo mundo del viejo, condenando cualquier nueva incursión colonial y dando la noticia de que la menor amenaza a estas nuevas repúblicas, sería vista como realizada en contra de los Estados Unidos. El concepto de la Doctrina Monroe se perfiló en la ideología hegemónica de los Estados Unidos durante el siglo XIX, para justificar su política exterior hacia las naciones latinoamericanas, a través de cualquier clase de intervención. Desde un punto de vista histórico la doctrina se apoyaba en el llamado "destino manifiesto" de los Estados Unidos; el cual consistía en la creencia de que este país ha sido elegido por Dios y recibió de él la guía “para gobernar el destino del mundo”.52 La composición de la doctrina correspondía al momento histórico en el que había sido creada, por lo cual tuvo que ser adaptada y reinterpretada, cada vez que se le invocó durante el siglo XX. Hasta cierto punto, la doctrina intentaba reservar el territorio de América latina como campo de acción de los Estados Unidos; paradójicamente los países latinoamericanos la interpretaron como un instrumento de protección, creyendo que los Estados Unidos se comprometían a defenderlos; cuando en realidad, los defendidos por la doctrina eran los propios estadounidenses.53 Sólo así se puede explicar, la razón por la cual –como veremos más adelante– el gobierno argentino presidido por Leopoldo Galtieri, esperaba a que el gobierno de Reagan interviniera en el conflicto entre Argentina y Gran Bretaña a favor de aquélla,54 cosa que no sucedió. El resultado fue una guerra de consecuencias catastróficas para Argentina. Sin embargo, Argentina no fue la única cuya confianza fue defraudada por los Estados Unidos, la historia de 51 íbidem, pág. 11 y 12. 52 íbidem, pág. 14. 53 íbidem, pág. 15. 54 Gregorio Selser, “Argentina-Malvinas: ‘Yo era el niño mimado de los norteamericanos’ dijo Galtieri, II”, 14 de abril de 1983, El Día, México. 21 Neevia docConverter 5.1 ANTECEDENTES América latina está plagada de ejemplos, tanto en el siglo XIX como en el XX. Mencionaremos sólo algunos. El primero. Estados Unidos había guardado un discreto silencio, pese a que desde diciembre de 1823 había entrado en vigencia la Doctrina Monroe, que como ya se dijo, prohibía a las potencias de Europa apropiarse de territorios americanos que con anterioridad hubiesen pertenecido a España. Aparentemente, la diferencia, residía en que desde la época colonial España había concedido ciertos derechos de asiento y explotación del palo de tinte y la caoba a compañías inglesas, que transformaron imperceptiblemente tales permisos en posesión constante. De modo que cuando Guatemala y sus hermanas repúblicas del istmo centroamericano alcanzaron la plenitud de su independencia política, Inglaterra se permitió, de facto, el disfrute de lo que denominaba “British Honduras”, un enclave que por artilugios de su diplomacia, mezclados con la oportuna presencia de sus barcos de guerra en la región, en algún momento corrió el riesgo de transformarse en una posesión que comprendía las Islas de la Bahía, la hoy República de Honduras hasta el golfo de Fonseca, sobre el Pacífico y además, toda la Costa Atlántica de Nicaragua hasta el río San Juan del Norte.55 El segundo. Franklin D. Roosevelt y su política del "Buen vecino", corolario de la Doctrina Monroe, fue otro de los medios de los que se valió Estados Unidos para “cautivar” al cono sur. Asumiendo un nuevo espíritu de cooperación y de no intervención, motivado para romper las barreras comerciales con América latina y el Caribe. Esta política estadounidense logró el apoyo que se esperaba, por parte de América latina, durante el periodo anterior a la Segunda Guerra Mundial, en defensa del hemisferio. Pero no fue recíproco.56 El tercero. Con el ascenso del comunismo y la Guerra Fría, Estados Unidos modificó su política hacia Latinoamérica y el Caribe. Para defender el hemisferio de la amenaza comunista, se fundó la Organización de Estados Americanos en 1948, designada para enfatizar la acción colectiva y para cimentar una profunda solidaridad hemisférica durante el creciente periodo de la Guerra Fría; también 55 Gregorio Selser, “Belice: El derecho a la autodeterminación”, en Cuadernos del Tercer Mundo, Año II No. 15, agosto 1977, México. Nota: en esta publicación don Gregorio usó el seudónimo de Carlos Mario Dávila. 56 Gregorio Selser, “Mini-Marshall: Con la fábula de la ayuda, ataque a la Doctrina Calvo”, 06 de julio de 1981, El Día, México;“Kissinger: la cuarta cancelación”, circa 23 de abril de 1975, Inter Press Service Argentina. 22 Neevia docConverter 5.1 ANTECEDENTES alentaba la gobernabilidad democrática y la cooperación económica a través de relaciones cercanas entre Estados Unidos y Latinoamérica;57 sin embargo, esta política de mutua ayuda entre vecinos, tampoco libró a Argentina de la guerra. Uno ejemplo más, la maniobra de los Estados Unidos para obtener el control sobre el Istmo de Panamá; seguido de la negociación de un tratado con Nueva Granada para eliminar a los británicos de esa zona; para luego de la construcción del Canal de Panamá, obtener el control de la zona y sus anexos, es otro ejemplo de cómo opera el imperio yanqui.58 Último ejemplo; la invasión estadounidense a la República Dominicana (1965), dirigida por el mandatario Lyndon B. Jonson, se valió de una resolución que permitía al presidente de Estados Unidos intervenir en un conflicto armado entre países (aunque esa resolución no implicaba a Centroamérica), facultándolo para determinar cuándo una zona estuviera pacificada y por tanto, dicha región fuera razonablemente segura, todo ello avalado por las Naciones Unidas u otros organismos internacionales. En caso contrario, el presidente de Estados Unidos podría ponerle fin al conflicto armado, mediante una resolución conjunta de su Congreso.59 Para concluir este apartado, diremos que “las bicentenarias relaciones desiguales entre Estados Unidos e Hispanoamérica continúan hoy, con alguna excepción confirmadora de la regla, que las repúblicas de nuestra América son en mayor o menor grado, quiéranlo o resistiéndose a ello, aria de una sola potencia que se erigió como tal a su costo y beneficio, al tiempo que el resto subsiste a como dé lugar, con pena y tribulación. Institución onerosa es esta que parásita de carencias y sinsabores de tantos pueblos, de cuya supuesta felicidad se dice contribuyente y fomentadora. Porque si hubo un manifest destiny en su historia, no surgió a mediados del siglo XIX como un concepto abstracto de un ideólogo del expansionismo, sino que estuvo enraizado en los orígenes mismos de la nacionalidad que emergió de las oleadas de emigrantes europeos. Tenerlo siempre presente es o debiera ser un rasgo de sabiduría defensiva de nuestra América”.60 57 José G. Vargas-Hernández, “Algunos mitos, estereotipos, realidades y retos de Latinoamérica”, en www.icd.org.uy 58 Gregorio Selser, “Decir adiós no es irse. Seguirá vigente la tutela de la Guardia”, 26 de octubre de 1983, El Día, México. 59 Gregorio Selser, “Permitiría a Reagan asesinar a líderes extranjeros la ley de poderes de guerra”, 24 de abril de 1986, El Día, México. 60 Gregorio Selser, “Estados Unidos - Hispanoamérica bicentenarias relaciones desiguales”, op. cit. 23 Neevia docConverter 5.1 http://www.icd.org.uy/ ANTECEDENTES 1.4. Implicaciones políticas Como ya se dijo, en 1965 Argentina obtuvo en su favor una resolución parcial de la ONU, confirmada en 1966 por la Asamblea General de ese organismo internacional (Resolución 2065), que no otorgó derechos a la república Argentina, simplemente cuestionaba los británicos y concedió independencia a los isleños, pero no para autogobernarse. La ONU conminó a ambos países a negociar la soberanía compartida, tomando en cuenta las necesidades de los pobladores y su cercanía con Argentina. En estos acercamientos se excluyó a los kelpers (como suelen llamar a los habitantes de las Malvinas) por ser considerados solamente “habitantes de un territorio”. 61 Las negociaciones se iniciaron con reuniones anuales, y no llegaron a nada. Entonces el gobierno británico formó una comisión de expertos que debía proponer medidas de solución política hacia las islas (1976). Un año después esa Comisión presentó un informe conocido como “Lord Shackleton”, en el que se reconocía la imposibilidad de desarrollo económico de las islas sin ayuda de Argentina.62 El gobierno de Heath, en Gran Bretaña, fue más flexible, pues permitió que Argentina y las islas estuvieran en comunicación. En cambio, el gobierno de Thatcher, propuso reconocer de hecho la soberanía argentina, bajo los siguientes convenios:63 o Solución Hong-Kong. Retener las islas por un determinado tiempo. o Condominio. Rentar las islas. o Congelamiento de la discusión sobre el estatus de las islas.64 Por supuesto, Argentina no aceptó tales condiciones y las negociaciones cayeron en la vía muerta; hasta que en 1981 en la asamblea de los Comunes recomendaron la independencia de las islas.65 61 Alejandro Dabat y Luis Lorenzano, Conflicto malvinense y… op. cit., pág. 76. 62 ídem. 63 íbidem, pág. 77. 64 Mario J. Calvi, Malvinas el mito destruido... op. cit. pp. 24. 65 Alejandro Dabat y Luis Lorenzano, Conflicto malvinense y… op. cit., pág. 77. 24 Neevia docConverter 5.1 ANTECEDENTES Por otra parte, en la reunión final de los ministros de relaciones exteriores de los Países No Alineados, que se llevó a cabo en Managua, Nicaragua, el punto número 54, que resultó aprobado, reitera el apoyo del movimiento al derecho argentino sobre las islas Malvinas e instaba a los gobiernos de Buenos Aires y de Londres a reiniciar las negociaciones procurando se diera una solución pacifica. En el mismo punto se añadió que "la presencia militar naval masiva y la actividad del Reino Unido en las islas constituye una causa de grave preocupación para los países de la región, al afectar adversamente la estabilidad en la zona".66 Los reclamos argentinos, como ya se mencionó antes, formaron parte de la agenda diplomática que se presentaba año con año en la ONU. Sin embargo no fue ahí la primera vez que Argentina levantó la voz: el 23 de septiembre de 1939, durante una reunión de ministros de relaciones exteriores americanos –con sede en Panamá–, relacionada con la iniciación de la Segunda Guerra Mundial, y a propósito de la invasión de Polonia por parte de la Alemania nazi (1º de septiembre). Al firmarse el acta final de Panamá, suscrita el 3 de octubre de ese mismo año, Argentina hizo constar sus derechos sobre las islas Malvinas y las tierras australes. Al siguiente año (1940), tuvo lugar la segunda reunión de ministros de relaciones exteriores americanos. El delegado de la República Argentina al firmar este pacto, hizo constar que no se refería a las islas Malvinas ni las incluía, ya que éstas últimas no constituían una colonia o posesión de ninguna nación europea, puesto que formaban parte del territorio de la Argentina y estaban incluidas en su dominio y soberanía como se hizo constar en la reunión de Panamá. Varios años después (1946), la comisión Nacional del Antártico, que había sido reorganizada y ampliada, protestó públicamente por la nueva emisión de sellos postales británicos, en los que las Malvinas y sus adyacentes son representadas como pertenencia de la Corona Británica, al mismo tiempo el gobierno argentino presentó por primera vez una formal reserva respecto de sus derechos reivindicatorios de las islas Malvinas. Posteriormente, al término de la Conferencia Interamericana para el Mantenimiento de la Paz y la Seguridad en el Continente, Petrópolis, Río de 66 Gregorio Selser, “Islas Malvinas: la reunión ministerial de los No Alineados reitera su apoyo al derecho argentino”, 16 de enero de 1983, El Día, México. 25 Neevia docConverter 5.1 ANTECEDENTES Janeiro, el 15 de agosto de 1947, se suscribió el tratado Interamericano de Asistencia Reciproca (TIAR). La delegación argentina declaró que dentro de las aguas adyacentes al continente Sudamericano, en la extensión de costas correspondientes a la República Argentina, en la zona llamada de seguridad, no se reconoce la existencia de colonias o posesionesde países europeos y agregó que especialmente reservaba y mantenía intactos los legítimos títulos y derechos de la República Argentina a las islas Malvinas, Islas Georgias del Sur, Islas Sándwich del Sur y tierras incluidas dentro del sector antártico argentino, sobre el cual la República ejercía la correspondiente soberanía. Al año siguiente (1948), entre los meses de abril y mayo, se celebró en Bogotá, Colombia la IX Conferencia Internacional Americana. La unión Panamericana creada a instancia de Estados Unidos en 1890 se transformó en Organización de Estados Americanos (OEA). Argentina formuló otra vez sus reservas y reivindicaciones sobres las islas Malvinas y otras porciones a esas islas; sus argumentos se fundaron en legítimos títulos geológicos e históricos. Seis años después, en 1954, la República Argentina reafirmó en la ONU sus derechos sobre las islas Malvinas y la Antártica, al mismo tiempo que las normas administrativas sobre el territorio austral de Tierras del Fuego, añadiendo la mención de islas Malvinas y Atlántico Sur, lo que motivó a una protesta de Gran Bretaña. Argentina rechazó formalmente la presentación británica y afirmó que ni directa ni indirectamente consideraría legal la ocupación de las islas por Albión. Pasaron tres años más y en 1957, durante la sesión de la Comisión de Asuntos Fiduciarios de la ONU el delegado argentino dejó expresa constancia –14 de octubre– de que las islas Malvinas, Sandwich del Sur, Georgias del Sur y tierras incluidas en el sector Antártico no eran colonias o posesiones de Gran Bretaña. En su respuesta el representante británico afirmó que su gobierno estaba dispuesto a someter el pleito a la Corte Internacional de la Haya, lo cual no fue aceptado por el delegado argentino, por estimar que el derecho nacional a esas islas se fundaba en legítimos títulos geológicos e históricos. Un año después, en 1958, a raíz del desembarco de una misión científica soviética en las islas Sándwich del Sur, la cancillería argentina reafirmó en un comunicado –10 de enero– los derechos nacionales a esas porciones, por tratarse de territorios que por su vecindad, proximidad y comunidad geológica formaban 26 Neevia docConverter 5.1 ANTECEDENTES parte indiscutible de la nación. Por otra parte y ante versiones de que Inglaterra se proponía dar autonomía a las islas Malvinas, el Palacio San Martín anunció su intención de llevar el litigio ante la OEA y la ONU para probar que aquella resolución se propondría disimular una soberanía artificiosa y precaria. Transcurrieron dos años más y en 1960, las Naciones Unidas emitieron la Resolución 1514, aprobada el 14 de diciembre por la Asamblea General, sin ningún voto en contra, aunque las delegaciones de África del Sur, Australia, Bélgica, República Dominicana, España, Francia, Portugal, y Gran Bretaña, optaron por la abstención; en ella se proclamó la necesidad de poner fin, rápida e incondicionalmente, a las formas coloniales de dominación territorial. El 23 de junio de 1961 entró en vigor el Tratado Antártico o de la Antártida suscrito el 11 de diciembre de 1959 en Washington, firmado por doce países: Argentina, Australia, Bélgica, Chile, Estados Unidos, Francia, Japón, Noruega, Nueva Zelanda, Gran Bretaña, República Sudafricana y la Unión Soviética; al que posteriormente se adhirieron otros cuatro: Checoslovaquia, Dinamarca, Holanda y Polonia, comprometiéndose a mantener durante un período de 30 años en vigor todos los derechos y reclamaciones referentes al continente blanco, pero no se permitiría presentar nuevas o ampliar las antiguas. En virtud de la vigencia del tratado Antártico, Gran Bretaña separó el 26 de febrero de 1962, la Antártida de las dependencias de las islas Malvinas, Georgias del Sur y de las islas Sándwich. Poco después (1964), en su mensaje anual al Congreso –1 de septiembre– el presidente de Argentina Arturo U. Illia, declararía que de ningún modo la Argentina reconocería la independencia que Gran Bretaña proyectaba dar a las islas Malvinas.67 Por fin, en 1966, comenzaron las negociaciones anglo-argentinas, que se prolongaron durante largo tiempo sin resultado alguno, debido a la posición obstruccionista de Gran Bretaña y la pertinacia de Argentina. En la primera etapa de las negociaciones –desde enero de 1966 hasta enero de 1976– la diplomacia inglesa trató por todos los medios de eludir la cuestión de la soberanía sobre el archipiélago. Procuraba que se discutieran complementariamente dos problemas: los vínculos entre la parte continental de Argentina, las Malvinas y la cooperación económica. 67 ídem. 27 Neevia docConverter 5.1 ANTECEDENTES Al final, en 1971, se firmó en Buenos Aires una declaración conjunta, en la que ambas partes se comprometían a tomar medidas para establecer comunicación marítima y aérea entre Argentina continental y las islas. Se estipulaba establecer canales de comunicación postal, telegráfica y telefónica entre las islas y Argentina. Así fue que al siguiente año (1972), las autoridades inglesas autorizaron al gobierno argentino construir un aeródromo en las Malvinas, y en 1974, se tomaron medidas para suministrar combustible líquido al archipiélago por medio de la compañía estatal: Yacimientos Petrolíferos Fiscales (YPF). En vista de que no se avanzaba en la solución del problema de la soberanía, Argentina se dirigió nuevamente a la ONU. En diciembre de 1973, la Asamblea General aprobó la resolución número 3160, en la cual se señalaba con preocupación que en las negociaciones anglo-argentinas no había progresos y se recomendaba acelerarlas. Fue así que por disposición del gobierno británico fue confeccionado el “informe de Griffiths”, en 1975, sobre los recursos naturales de las Malvinas y la plataforma submarina adyacente. En noviembre de ese mismo año, el gobierno argentino publicó una declaración especial, rechazando los derechos de los Estados extranjeros a explorar y explotar los recursos de la región, que es la continuación de la plataforma continental del país. En enero de 1976, un grupo integrado por expertos en recursos energéticos, pesca y ganadería, llegó a las Malvinas. En julio del mismo año, lord Shackleton entregó al gobierno de Gran Bretaña un enorme informe sobre los resultados de las indagaciones, sugiriendo la participación y cooperación de ambos gobiernos. Al año, fue publicado simultáneamente en Londres y en Buenos Aires un comunicado conjunto (1977). Las partes declaraban que el objeto de las negociaciones sería la soberanía sobre las islas Malvinas, Georgias del Sur y Sándwich del Sur, como también lo concerniente a la cooperación económica en esos territorios. Pasaron varios años más, N. Ridley, representante del gobierno británico visitó las islas Malvinas en 1980. Oficialmente se había anunciado que la finalidad de su visita era conocer la opinión de los isleños. Al hacer uso de la palabra en Puerto Stanley, mencionó tres posibles soluciones: la primera: administración anglo-argentina conjunta de las islas (él mismo la declaró como 28 Neevia docConverter 5.1 ANTECEDENTES no aceptable). La segunda: congelar las negociaciones por tiempo indeterminado (a ésta la consideró poco conveniente). La tercera y última: reconocer la soberanía simbólica argentina sobre el archipiélago, a condición de su entrega en arriendo por largo plazo a Inglaterra. En 1981, comenzó en Nueva York una nueva ronda de negociaciones argentino-inglesas. Los ingleses propusieron congelarlas, y que luego de transcurrido un plazo indeterminado, se reanudara la discusión del problema. ¿Argumentos? Tal solución, dijeron, permitiría infundir a los isleños confianza hacia Argentina y elaborar proyectos concretos para el desarrollo económico de las islas. Al año siguiente, en febrero de 1982, después de dos días deconversaciones no se llegó a ningún acuerdo, por ambas partes. Argentina insistía en obtener el reconocimiento de la soberanía sobre las Malvinas y que ésta le fuera reconocida también por la ONU. A cambio, se comprometía a respetar los intereses de los isleños.68 El resultado: Gran Bretaña rompió sus relaciones diplomáticas con Argentina, indefinidamente. Fue entonces que ésta se decide a tomar acciones determinantes y emprendió una campaña para la toma y posesión de las islas el 2 de abril de 1982; tropas argentinas invadieron, en una operación relámpago las islas Malvinas, Georgias y Sándwich.69 Los primeros hombres argentinos pusieron pie en tierra en la madrugada de ese día, consiguiendo su objetivo después de librar una breve batalla, en la que del grupo argentino, resultó herido de muerte el capitán de corbeta Pedro Gianchino, además de varios soldados heridos. Por su parte los británicos no reportaron ni una sola baja. La operación del desembarco terminó nueve horas más tarde. El gobernador británico de las islas, solicitó dialogar con las fuerzas argentinas y, después de rendirse, se dio lectura a una proclama del general Osvaldo García, por la radio, en la que aseguraba a los residentes el respeto a sus derechos plenos y a sus bienes. Inmediatamente el gobierno argentino nombró a un nuevo gobernador, el general Mario Benjamín Menéndez, quien se dirigió a las islas para tomar posesión de su cargo en Puerto Rivero (llamado así en honor de un gaucho argentino que trató infructuosamente de desalojar a los ingleses de las 68 Kosarik A., La crisis de las Malvinas... op. cit. pp. 7-12. 69 íbidem, pág. 15. 29 Neevia docConverter 5.1 ANTECEDENTES islas 148 años antes), nombre con el que se designó a la capital de las islas: Puerto Stanley.70 1.5. Malvinas, hoy Hacia 1990 los dos países en conflicto, reanudaron relaciones diplomáticas y llegaron al acuerdo de destruir 30 mil minas terrestres instaladas en el territorio de las islas. Para 1993, el gobierno argentino aceptó ampliar la zona de pesca a 200 millas. Ese mismo año, se corroboró que hay un yacimiento de petróleo en ellas, pero ante la imposibilidad de negociación, no hubo proyectos de extracción.71 Luego de la propuesta de dividir la soberanía entre Gran Bretaña y Argentina, por parte del gobierno argentino, en 1996, a la que los habitantes de las islas (kelpers) rechazaron, éstos propusieron a Gran Bretaña reiniciar las conversaciones con Argentina, sobre la posible sociedad en la extracción de petróleo y la pesca. Al mismo tiempo, se eliminaron las restricciones a los viajes de ciudadanos argentinos a las islas, además se firmó un acuerdo contra la pesca ilegal.72 A 25 años de la guerra, la soberanía de las Malvinas no ha dejado de ser importante dentro de la agenda diplomática del gobierno argentino. La disputa continúa y ni Gran Bretaña, ni Argentina ceden en cuanto a sus peticiones. En tanto que la primera alega sus derechos por descubrimiento y población, la segunda argumenta su soberanía por ubicación continental e historia, amén del abandono al que se dice tienen los ingleses a los kelpers. “La guerra de Malvinas fue una suerte de bautismo para la Argentina en su ingreso violento e imprevisto a la historia de esta época de la que vivía al margen, ocupada sólo en su recurrente crisis económica de país subdesarrollado, su crónica inestabilidad política y su guerra interna que la tornaban compleja pero gobernable… “Si aquel desembarco en las Malvinas implicó un inútil gesto de prepotencia regado después con muertos, no fue menos sangrienta la pretensión 70 ídem. 71 Almanaque anual 2003, Colombia, Editora Cinco, pág. 514. 72 ídem. 30 Neevia docConverter 5.1 ANTECEDENTES del país de buscar las simpatías de Occidente injertándose en conflictos extraregionales”.73 1.6. Importancia ¿Qué motivos obligaron u obligan aún a Gran Bretaña a aferrarse con tanto empeño a los restos de su imperio colonial? A estas alturas, ya no se pueden tomar en serio las declaraciones del gobierno inglés de que le preocupan los habitantes de las islas. Un ejemplo claro de ello es la isla Diego García, cuya población fue expulsada por la fuerza, para luego entregar la isla vacía a los Estados Unidos, para que construyera en ella una base militar estratégica.74 Las causas de tal porfía están entrelazadas en intereses económicos, políticos, militares y estratégicos, no sólo de Gran Bretaña, sino también de sus hermanos imperialistas. Existen por lo menos tres causas o motivos por los que Gran Bretaña pelea la soberanía de las islas: 1. El control de la ruta interoceánica y el papel estratégico militar del Atlántico Sur: Pasaje Drake. Cabe mencionar la posible pérdida del control sobre el canal de Panamá, por parte de Estados Unidos y la creciente insuficiencia ante el gran crecimiento del calado de los enormes buques petroleros. Por otra parte, el auge naval que en la década de los setenta cobró la URSS. Así mismo, la política que desarrolló Argentina para llegar a un acuerdo con Sudáfrica y Estados Unidos para realizar el tratado del Atlántico Sur (OTAS) similar a la OTAN. Sin dejar de lado, que al subir Reagan y Thatcher al poder (uno por Estados Unidos y la otra por Gran Bretaña) propusieron una “línea dura” estratégico-militar, gozando del control directo de puntos estratégicos esenciales para una política mundial segura.75 2. Lucha por el territorio Antártico. Debido a la cercanía de las islas al Antártico, continente poco explorado y por ende poco explotado. Cuando fueron descubiertos el krill,76 minerales y petróleo en la zona, Gran Bretaña, Argentina, Chile, Noruega, Australia, Nueva Zelanda y Francia demostraron repentinamente 73 Jimmy Burns Marañón, La tierra que perdió sus héroes. Las Malvinas y la transición democrática en Argentina, FCE, 1992, pág. 7. 74 Kosarik A., La crisis de las Malvinas... op. cit. pág. 13. 75 Las referencias fueron tomadas de Alejandro Dabat y Luis Lorenzano, Conflicto malvinense y crisis nacional... op. cit., capítulo II. Además de artículos publicados en el periódico El Día por Gregorio Selser durante el año de 1982. 76 Es un crustáceo rico en proteínas y muy abundante en estas islas. 31 Neevia docConverter 5.1 ANTECEDENTES más interés por las islas. Sus argumentos: descubrimiento, contigüidad geográfica y bases científicas. Más recientemente, Brasil y la India han reclamado para sí el territorio antártico, ante lo cual Estados Unidos, la hoy extinta URSS, Japón, Sudáfrica y Bélgica desconocieron tales reclamaciones, aunque hayan establecido sus propias bases territoriales. El área más conflictiva es la peleada por Chile-Argentina y Gran Bretaña: las tierras de Graham y Palmer que son ricas en minerales. El mar de Wedell es rico en petróleo y es disputado por Gran Bretaña y Argentina. Las islas Georgias y Sándwich del Sur son importantes por la concentración de krill. 3. Petróleo. Hay tres cuencas petroleras registradas: Magallanes (sobre el continente en Tierra de Fuego y los canales e islas circundantes, incluyendo la zona del Beagle –área limítrofe en conflicto con Chile–); Malvinas Norte y Malvinas Sur (parte en la plataforma continental y parte fuera, pero en zona poco profunda –banco Burdwood–). Fue el experto en geopolítica Spikman,77 que se ocupaba de la defensa del Atlántico Sur, quien descubrió, por los estudios que ahí realizaba, estos grandes yacimientos de petróleo. Lejos de ser una reivindicación histórica, el desembarco en las islas fue la realización de un ejercicio militar bien ensayado que aprovechó el sentimiento nacionalista del pueblo argentino con fines políticos; luego entonces la guerra emprendida por Gran Bretaña en contra
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