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UNIVERSIDAD NACIONAL AUTÒNOMA DE MÈXICO FACULTAD DE CIENCIAS PÒLÌTICAS Y SOCIALES “Criterios Editoriales para la publicación de literatura infantil en México” Tesina Que para obtener el título de: Licenciado en Periodismo y Ciencias de la Comunicación P r e s e n t a: Arturo Ulises de la Garza Campos Asesora: Virginia E. Reyes Castro México, D. F. Julio 2006. UNAM – Dirección General de Bibliotecas Tesis Digitales Restricciones de uso DERECHOS RESERVADOS © PROHIBIDA SU REPRODUCCIÓN TOTAL O PARCIAL Todo el material contenido en esta tesis esta protegido por la Ley Federal del Derecho de Autor (LFDA) de los Estados Unidos Mexicanos (México). El uso de imágenes, fragmentos de videos, y demás material que sea objeto de protección de los derechos de autor, será exclusivamente para fines educativos e informativos y deberá citar la fuente donde la obtuvo mencionando el autor o autores. Cualquier uso distinto como el lucro, reproducción, edición o modificación, será perseguido y sancionado por el respectivo titular de los Derechos de Autor. DEDICATORIAS A la memoria de mi adorado hermano.... tenías razón, el que persevera alcanza A la memoria de mi querida abuela, por su amor y a quien le debo Lo que fui, soy y seré A mi madre, por su amor y apoyo durante todo mi proyecto de vida A mi padre, por su amor y consejos en la vida A Yolanda, por su invaluable apoyo intelectual y sentimental para la realización de este proyecto A Pilar, por compartir con entusiasmo y cariño este proyecto A Rosario, por su cariño y ayuda durante mi vida de estudiante A Elena, por su amor, interés y ayuda para la realización de este proyecto y por iniciar a mi lado esta nueva etapa de mi vida. Te amo, por siempre A tío Tito, por su apoyo incondicional durante toda mi vida A Muna Y a Oscar, por compartir con cariño los momentos importantes de la vida AGRADECIMIENTOS Al Ing. Esteban Alamilla Esparza, por las facilidades otorgadas para la realización y conclusión de este proyecto. A Leonor Roa Zenil, Grupo Noriega; José Luís Castillo Ramírez, Editorial Castillo; Gustavo Martínez, Editorial CIDCLI; Rodrigo De la Ossa Izquierdo, Grupo Editorial Norma Y Diego Mejía Eguiluz, Editorial Alfaguara Infantil, por su interés, confianza e información para que este proyecto tuviera sentido. A Alma carrasco Altamirano, por la confianza depositada en mí, para adentrarme en el mundo de la literatura y por la información base para este proyecto. íNDICE Introducción .................................................................................................. 1 Capítulo 1. Características del proceso de la comunicación y la comunicación en la lectura y escritura 1.1. La comunicación y comunicación escrita .................................................... 5 1.2. La lectura: tipos y características .............................................................. 15 1.3. La importancia de la lectura en el proceso de la comunicación ............... 21 1.4. Funciones de la literatura infantil en el proceso de comunicación en los niños................................................................................................ 24 Conclusiones Capítulo 1........................................................................ 29 Capítulo 2. La selección de obras literarias dirigidas al público infantil 2.1. Cómo se define al público infantil…..................................................…. 34 2.2. Recomendaciones y criterios generales sobre literatura infantil desde dos perspectivas: la de los Profesionales en el medio literario y la de las asociaciones internacionales de fomento a la lectura………................ 38 Conclusiones Capítulo 2…….................................................………….. 49 Capítulo 3. Los criterios de selección de editoriales mexicanas para la publicación de obras dirigidas al público infantil 3.1. Planteamiento metodológico ................................................................. 53 3.1.1. Diseño del cuestionario…................................................................. 54 3.1.2. Aplicación del cuestionario……….................................................... 56 3.1.3. Presentación de resultados….............….......................................... 66 3.2. Análisis de resultados ......................................................................... 88 El lector infantil……………………………………………..…….…. 88 Hacia la categorización del público infantil en la literatura…….. 91 Contenido y forma de un libro infantil ……………………………. 94 Criterios en la categorización del Público Infantil ………………. 97 Selección y producción de un libro infantil …………………….. 104 Normas oficiales y criterios editoriales en la producción de literatura infantil …………………………………………………… 106 Conclusiones Capítulo 3 …..............................................................…. 110 Conclusiones Generales……...........................................….............…. 114 Referencias Bibliográficas .................................................................. 127 Obras de consulta .................................................................................. 130 Cibergrafía ................................................................................................. 131 1 INTRODUCCIÓN Durante muchos siglos, el único medio de comunicación fue la relación cara a cara, la que se realizaba mediante diálogos en voz alta o en las historias contadas de padres a hijos. Todo se afirmaba o se decidía al instante, de manera directa. En la actualidad la comunicación y su representación escrita se producen en forma diferida, con el desarrollo de las actuales técnicas de comunicación. La evolución de la especie humana está muy ligada a la evolución de la tecnología y del lenguaje, y a la metamorfosis del lenguaje que se inicia con el habla y termina con las formas actuales de escritura y de lectura electrónica. La lectura es sumamente necesaria para la adquisición e intercambio de ideas y pensamiento en los seres humanos; gracias a ella, el humano registra el tiempo en que vive, nutre su presente con lo registrado de su pasado y absorbe conocimientos para crearse un criterio amplio para el mejoramiento de su vida. La literatura es un instrumento determinante en la educación y desarrollo intelectual del ser humano. Dicho desarrollo intelectual se logra por la diversidad de funciones que nos brinda la lectura en las diferentes etapas de nuestra vida (Función cognoscitiva, instrumental, de socialización, afectiva, de estimulo a la creatividad y a la imaginación). 2 La lectura es una actividad que acompaña al hombre durante toda su vida, pero en los primeros años este medio de comunicación y conocimiento es de suma importancia, porque es en la infancia cuando inicia la recopilación de datos de su entorno, entiende la sociedad en la que se encuentra y aprende las reglas para ser parte de ella. Partiendo de este principio debemos entender además que la lectura en esta etapa de la vida que comprende de los cero hasta los doce años, es primordial, pues en ella se encuentra una herramienta de aprendizaje para educarse y despertar los primeros sentimientos y actitudes de socialización con los demás. Por lo anterior, debemos comprender que en esta etapa tan significativa del hombre la literatura es constructora de criterios y transmisora de conocimientos, por ello, el infante debe tener contacto con una literatura de calidady claramente dirigida a él. Entendida la responsabilidad de una literatura de calidad, es importante saber como público consumidor en general y como comunicólogo, que se quiere dedicar al medio editorial en particular, si existen normas oficiales y criterios de calidad establecidos para la edición de literatura infantil que garanticen un buen producto, ya sea para leer o para la producción editorial en nuestro país. Con base en lo anterior y con el objetivo de entender el tema de la literatura infantil y de saber la existencia de criterios que se apliquen para su edición, en el presente trabajo se abordan los diferentes puntos que conforman en sustancia la literatura infantil para cuestionarnos y finalmente respondernos si en nuestro país hay literatura de calidad basada en criterios para su producción. 3 En el capítulo primero, se aborda el tema del proceso de la comunicación enfocándose principalmente a la importancia y a las características de la comunicación en la lectura y la escritura. En este primer capítulo encontraremos que la lectura es multifuncional y que lo que a primera vista puede parecer una sencilla mecánica de leer un código escrito, encierra más que eso, pues en ella existen diferentes características que la dividen en diferentes tipos y por ende nos lleva a diferentes prácticas de lectura. Establecida la importancia de la lectura como medio de comunicación, en el capítulo segundo se ubica el segmento de la literatura dirigida al público infantil, objetivo de este trabajo. En dicho capítulo se establece la clasificación del público infantil y los diferentes aspectos que la sustentan. Delimitado el público infantil y entendida la importancia de este nicho, se exponen los criterios aplicables desde dos perspectivas: las profesionales en el medio literario y la de las asociaciones internacionales de fomento a la lectura, con la finalidad de establecer cómo es tratada la literatura infantil en nuestro país. Finalmente en el capítulo tercero se encuentra el desarrollo del trabajo de investigación sobre la aplicación de los criterios de selección para la literatura infantil. En este punto encontraremos concretamente los criterios y cómo se aplican dichos criterios en la producción infantil de México. Son las editoriales más representativas de este género en nuestro país las que contestan al cuestionamiento origen de este trabajo. 4 Consciente como comunicólogo de la importancia de una buena lectura y resultado de mi experiencia laboral (coordinador de “La Feria Del libro en el VII Congreso Latinoamericano para el desarrollo de La lectura y la escritura 2002”), que se transformó en inquietud por saber qué hay detrás de un “stand” de libros, de un par de pastas, hojas , tinta, color y pensamientos, desarrollo el presente trabajo con el objetivo de saber y en su caso, registrar, si en nuestro país la publicación de literatura infantil se rige por criterios específicos, y si éstos dependen de una institución, plan gubernamental o del perfil e intereses particulares de cada editorial. 5 Capítulo 1 Características del proceso de la comunicación y la comunicación en la lectura y escritura 1.1.- La comunicación y comunicación escrita Por el hecho de vivir en comunidad, el hombre se comunica y relaciona con los seres y objetos que le rodean. Los procedimientos de comunicación son múltiples y nuestros sentidos captan aquellas informaciones suministradas. En la vida cotidiana, el hombre pasa gran parte del tiempo emitiendo y recibiendo mensajes que son actos de relación comunicativa: una mirada, un gesto, el color de una fruta, las señales del semáforo, una película o el contacto con los medios de comunicación social (prensa, radio, televisión, etc.). Desde el llanto de un niño hasta una obra de música clásica, las posibilidades de comunicación varían en cantidad y grado. Son diferentes niveles que cumplen distintos objetivos, aunque todo ello es comunicación. Por ello en esta tesis interesa qué es la comunicación en función de lo escrito y dentro del proceso comunicativo emisor—receptor. La comunicación, en su sentido más amplio, es la transferencia de información o el contacto entre dos unidades que se relacionan. Visto así, la información es una parte 6 de la comunicación que añade a todo proceso relacionante un sentido informativo: el mensaje. Mensaje es una sustancia que ha recibido cierta forma, una forma traducida en vibraciones acústicas (mensaje hablado), impulsos eléctricos (mensaje telefónico) y formas visuales gráficas (mensaje escrito, pintura, fotografía o ilustración). Este mensaje comparte un emisor y un receptor, una codificación y una decodificación, un canal y un medio en el que se apoya para su transmisión. "Aunque no hay un acuerdo total entre los científicos sociales sobre una sola definición de la comunicación, las principales definiciones implican tanto interacción como efecto. El análisis demuestra que cuando menos cuatro factores intervienen en la comunicación efectiva: 1) el comunicador, 2) el comunicante. 3) el contenido y 4) el efecto. Generalmente se considera que la comunicación tiene lugar por medio de símbolos verbales, pero el análisis sociosicológico requiere que se preste atención a toda la gama de símbolos que pueden ser usados por el hombre, incluyendo los ademanes, el tono, la expresión facial, los tamborázos, el sonido producido por el telégrafo, las señales hechas con banderas y con humo, etcétera"1 Sin lugar a dudas las comunicaciones ocupan un lugar central y preponderante en el desarrollo de los sujetos. Desde la comunicación oral hasta la virtual el hombre ha modificado su conducta y su manera de percibir la realidad. 1 Peredo, R. (1986). Introducción al estudio de la comunicación. México: Ediciones de Comunicación S. A. de C.V. Pág. 37 7 A lo largo de la historia, esta experiencia cambió cualitativamente con la aparición de la escritura y se extendió gracias a la invención de la imprenta. La representación gráfica de la palabra hablada permitió almacenar la memoria histórica, abstraer sus conceptos y jerarquizar el funcionamiento intelectual. La escritura contribuyó igualmente a la elaboración del pensamiento abstracto y a la difusión y comunicación de la intuición creadora. Permitió definir categorías no sólo tangibles sino también aquellas relacionadas con los sentimientos o el carácter. En suma facilitó el aprendizaje. Desde la aparición de las tribus nómadas a la organización de las naciones Estado, pasando por la implantación de la familia nuclear, todas las organizaciones grupales han buscado referentes comúnes que justifiquen sus lazos, y han procurado dotarse de unas reglas de funcionamiento, aceptadas o impuestas, suficientes cuando menos para asegurarse la supervivencia. Los medios de comunicación de masas tan desarrollados en el presente siglo, han desempeñado una tarea crucial en la identificación de esos sentimientos de grupo y en la configuración política de la sociedad. Su papel como generadores de una conciencia colectiva en aquellas sociedades en donde se arraigan es indudable. Desde la invención de la imprenta, los hombres ya habían descubierto las virtudes de poder transmitir un mismo mensaje a una amplia población, y de hacer sobrevivir su contenido al paso del tiempo. 8 Gracias a la aparición del libro, las ideas pudieron organizarse fácilmente en ideologías, y las experiencias pudieron transmitirse de forma segura y rápida de generación en generación. Respecto a dicha transmisión Montaner y Moyano nos señalan lo siguiente:"Este libro que tienes ahora entre tus manos es también un vehículo de comunicación. Al principio no fue másque una hoja en blanco, un reto. Después fuimos trasladando nuestras ideas al papel, utilizando el código de signos que la lengua nos ofrece. Ahora estamos escribiendo lo que tú leerás en el futuro o, a la inversa, ahora estás leyendo el texto que nosotros escribimos tiempo atrás. Lees los signos y, al interpretarlos, vuelven a transformarse en ideas. Podemos afirmar que a través de este escrito hemos establecido contacto, nos hemos puesto en relación saltando por encima del tiempo y la distancia, nos hemos comunicado."2 Para entender la importancia, ventajas y aportación del registro escrito a la comunicación humana debemos conocer las características y diferencias de las dos partes que la conforman, que son la comunicación hablada y la comunicación escrita. La característica más evidente a primera vista de estos dos tipos de comunicación es que en la lengua hablada existe coexistencia espacial y temporal de quienes participan, como por ejemplo, en una reunión familiar los interlocutores comparten el mismo espacio físico e intercambian puntos de vista instantáneamente, en cambio en la lengua escrita existe una separación temporal y espacial de quienes participan. 2 Montaner, P. y Moyano, R. (1998). ¿Cómo nos comunicamos? Del gesto a la telemática. México: Addison Wesley Longman de México, S.A. de C.V. Pág. 15 9 Lo anterior se comprueba cuando tenemos en nuestras manos un libro cuyo autor ha muerto. Con la lengua hablada las personas que se encuentran en una conversación comparten un mismo espacio, se alimentan mutuamente para crear ese espacio, es decir, aportan elementos para crear su marco relacional de inquietudes que satisfagan sus necesidades, mientras que en la lengua escrita (entendamos lengua escrita desde este momento como textos no como “chats” electrónicos), el marco relacional se construye con base en el texto; en este caso el lector es receptivo y es el contenido lo que propone este marco y sitúa al lector donde lo quiere situar, como por ejemplo: el lector no puede desfasarse en un escrito que le habla de la situación económica durante la Segunda Guerra Mundial y trasladarse a la posguerra, porque los elementos del marco relacional son explícitos a la época referida. Otra característica es la evanescencia de la lengua hablada, pues no queda registrada en una conversación; la palabra se dice, se escucha y desaparece, quedando en nosotros muchas veces un registro inexacto de lo dicho; por el contrario, en la lengua escrita existe permanencia, la idea que se piensa se plasma quedando representada sin que el tiempo la modifique. La lengua hablada cuenta con recursos como los gestos y la mímica, que le dan soporte a la palabra y complementan el mensaje que queremos transmitir, por ejemplo, el decir un “no” sin expresión es muy diferente a decir un “no” con los ojos cerrados, lo cual puede denotar fastidio; es decir, la mímica matiza la palabra y enriquece la comunicación instantánea, mientras que la palabra escrita carece de 10 esta particularidad, obligándola a un descripción más detallada que explique con exactitud las situaciones que se quieren describir. Otra diferencia de la lengua hablada es que se tiene la posibilidad de preguntar en caso de no comprender la idea que se nos quiere transmitir, o bien, podemos hacer uso de la pregunta para que el marco relacional se amplíe y se tengan más recursos para comunicarse; en cambio, en la lengua escrita no existe quien te responda una pregunta y se carece de la posibilidad de un intercambio espontáneo entre el libro y quien lo lee. De igual forma en la lengua hablada existe presencia de reiteraciones que, por mala costumbre o por el uso de muletillas, repetimos en incontables ocasiones; en cambio, la lengua escrita es tajante, describe una vez la circunstancia y da por hecho que fue captada, si acaso hará reiteraciones pero éstas tienen otro sentido, que es el proporcionar más elementos para contextualizar. Por ejemplo, en un escrito sobre la Edad Media, se da una referencia geográfica en la página 2 donde se describen ciertos sucesos; más adelante, en la página 10, podemos encontrar una reiteración de la situación geográfica como ésta: “… recordemos que nos referimos a un territorio delimitado por dos ríos que proporcionan a la agricultura un auge….”; es así, como la reiteración toma un sentido útil y no un sentido abstracto como en el caso de las reiteraciones en la lengua hablada. Otra particularidad en la lengua hablada es que con ella se tiene la posibilidad de describir y profundizar con detalles necesarios o innecesarios, mientras que en la lengua escrita la descripción suele ser más concreta denotando precisión y concisión. Un ejemplo claro de esta situación lo podemos observar al pedirle a una persona que nos platique qué hizo el fin de semana, entonces, ésta utilizará un sin 11 fin de palabras y situaciones para acompañar lo que realmente hizo, y al pedirle que nos escriba lo mismo, automáticamente se limitará, y la descripción y abundancia de detalles desaparecerán para darle paso a la precisión y concisión. Por último, encontramos en la lengua hablada frases incompletas, las cuales se dan mucho porque esta comunicación se genera en nuestro mismo contexto y por tanto, tenemos la seguridad de que se nos entenderá porque nuestro interlocutor comparte el mismo lenguaje, expresiones locales, frases hechas, etc., mientras que en la lengua escrita no se puede permitir esta circunstancia, porque no se sabe quién lo leerá, y si tendrá el lector los mismos usos y costumbres que el autor. 12 Las diferencias se resumen de la siguiente forma: Lengua hablada Lengua escrita Coexistencia espacial y temporal de quienes participan Separación temporal y espacial de quienes participan Marco relacional compartido El marco relacional debe construirse en el texto Evanescencia Permanencia Utilización de gestos y mímica como componente natural y posible Ausencia de gestos y mímica Posibilidad de controlar la comprensión a través de preguntas Imposibilidad -por lo menos inmediata- de controlar la comprensión Presencia de reiteraciones Reiteraciones escasas o inexistentes Abundancia de detalles Precisión y concisión Frases incompletas Frases completas I I I I I I 13 Las diferencias entre el código oral y el código escrito, son también importantes desde otro punto de vista; en el discurso oral existe la tendencia a tolerar los errores siempre y cuando no afecten el significado. Cuando hablamos con personas extranjeras, por lo general existe la predisposición a colaborar (a través de la corrección receptiva y el completar la información que falta) de modo tal que la comunicación tenga éxito. En la comunicación escrita los errores son menos frecuentes y las desviaciones a la norma se sancionan más. Se tolera menos que un texto no sea idiomático o que contenga errores gramaticales. Lo que resulta evidente es el error y pasarlo por alto significa, por lo general, hacer caso omiso de la norma. ″Hemos hablado del orígen y de la historia de la escritura y el alfabeto, pero ¿qué se puede decir de su significado? Las implicaciones generales de la introducción de un medio de registrar el habla son revolucionarias, en su potencialidad si no en su actualidad. En primer lugar, permite la transmisión cultural (no genética) de generación en generación. Lo mismo se puede decir del habla, pero la escritura permite que esta transferencia se lleva a cabo indirectamente (de hecho, independiemntemente de intermediarios humanos directos), y sin la continua transformación de la frase original, característica de la situación puramenteoral."3 Esto significa, para quienes aprenden, que el nivel de dominio al que se aspira (y que se espera) en la expresión escrita (tanto en plano gramatical como 3 Williams, R. (1992). Historia de la comunicación. Del lenguaje a la escritura. Barcelona: Bosch Casa Editorial, S.A. Pág. 237 14 comunicativo-funcional) es mucho más alto que en la comunicación oral, ya que este tipo de producto tiene, una vez finalizado, existencia propia. Cuando escribimos producimos generalmente textos. En su origen, la palabra texto significa tejido. La palabra texto se puede definir así: "Estructura lingüística, con una forma específica y un sentido general, cuya interpretación es independiente del contexto."4 También pueden describirse los textos como relaciones típicas entre las características contextuales (situación), comunicativo-funcionales y estructurales (gramática y tema). Los textos son un producto de la historia y pertenecen al acervo cotidiano. Ejercen una influencia normativa, pero al mismo tiempo facilitan la comunicación en la medida en que transmiten pautas fijas para la producción y recepción. Las reglas y procesos en la producción de los textos dan a la escritura en el momento de conceptualizarse como lectura, una intención y funcionalidad matizada de características muy particulares que a continuación se exponen. 4 Lomas, C. (1999). Cómo enseñar a hacer cosas con las palabras. Barcelona: Ediciones Paidós Ibérica, S. A. Pág. 426 15 1.2.- La lectura: tipos y características Leer no es pronunciar todas las letras y palabras de un texto. El verdadero valor de leer es comprender, y es a partir de este momento, en que la lectura toma sentido y se convierte en un instrumento de desarrollo emocional y educacional para el ser humano. La lectura es uno de los aprendizajes más importantes en nuestras vidas porque leer nos permite experimentar, conocer e imaginar mundos pasados, presentes, futuros, cercanos, alejados, parecidos o distintos al nuestro, comunicar y compartir experiencias propias o ajenas. Por lo anterior podemos considerar a la lectura multifuncional, lo que nos lleva por obvias razones a que se conceptualice desde ángulos distintos y una de las razones tiene que ver con la forma en cómo entendemos la lectura. "Nada hay más útil que la literatura, porque ella nos enseña a interpretar la ideología y nos convierte en seres libres al demostrarnos que todo puede ser creado y destruido, que las palabras se ponen unas detrás de la otra como los días en el calendario, que vivimos, en fin, en un simulacro, en una realidad edificada, como los humildes poemas o los grandes relatos, y que podemos transformarla a nuestro gusto, abriendo o cerrando una página, escogiendo el final que más nos convenga, sin humillarnos a verdades aceptadas con anterioridad. 16 Porque nada existe con anterioridad, sólo el vacío, y todo empieza cuando el estilete, la pluma, el bolígrafo, las letras de la máquina o el ordenador se inclinan sobre la superficie de la piel o del papel para inagurar así la realidad."5 Los objetivos de la lectura determinan en gran medida la actitud que un lector tiene ante ella y la forma cómo trabaja para lograr esos objetivos, es decir, la comprensión del texto. No todos los textos se leen de la misma manera, la forma depende de los objetivos que tengamos al hacer su lectura. "Una condición importante para la comprensión de un texto es el establecimiento del propósito de la lectura, no de los fines de la lectura en general, sino de la realización de un acto particular de lectura. Hemos dicho que a través de la lectura recreamos, disfrutamos, indagamos, entre otros fines; sin embrago la lectura de un texto particular puede implicar uno o varios de estos fines. "6 Así por ejemplo, se puede leer para: • Obtener una información precisa • Seguir instrucciones • Obtener una información de carácter general • Adquirir conocimientos sobre matematicas, física, normas sociales, etc. • Revisar un escrito propio 5 Op. Cit. Pág. 87 6 Carrasco, A. (2000). La comprensión de la lectura en alumnos de 5to. Y 6to. grados de primaria en México: Prácticas culturales y entornos determinantes en la formación de lectores estratégicos. México: Universidad Autónoma de Aguascalientes. Pág. 39 17 • Comunicar un texto a un auditorio • Practicar la lectura en voz alta • Por placer. Para leer no es suficiente saber las letras y sus sonidos. Si sólo miramos las letras y pronunciamos los sonidos de las palabras de un texto sin entender lo que significan, entonces no estamos leyendo, porque leer es un proceso de construcción del significado. Por esta razón es que podemos percibir que no existe un único y correcto significado del texto, que el proceso de construcción del significado dependerá de la relación que se de entre lector y texto, y que esta construcción se matiza por el estado de ánimo, conocimiento del tema, y utilidad (entretenimiento, consulta, conocimiento regimen de vida, etc.) que el lector le de. El aprendizaje de la lectura es un conocimiento que es para toda la vida, siendo un proceso de construcción de significados constante, "Antes de saber leer de manera autónoma un lector requiere que otro lea para él, pero al aprender a leer de manera independiente, el lector gana velocidad de lectura y avanza en la construcción de interpretaciónes propias. Precisamente es gracias a la lectura en silencio que un lector desarrolla estrategias para la comprensión de un escrito, porque la finalidad de leer en silencio es comprender, recordar, disfrutar un texto.Podemos decir que la lectura en silencio tiene en primer lugar un propósito personal establecido por el lector; en cambio, la lectura en voz alta no tiene como propósito leer sino recitar para ser escuchados por otros que generalmente evalúan aspectos de forma al leer."7 El aprendizaje de la lectura se conforma por diferentes tipos, que son los siguientes: 7 Op. Cit. Pág 43 18 Lectura guiada Como su nombre lo indica esta modalidad tiene como finalidad que el guía intervenga en la lectura hecha por él o por otro lector para centrar la atención en determinados aspectos de la misma, por ejemplo: se puede hacer una pausa para comentar ciertas partes o informaciones del texto con el objetivo de ayudar a que se comprenda mejor; o para dar oportunidad a los oyentes de expresar las dudas que tienen tanto sobre la forma en cómo se leen ciertas partes como del contenido de la lectura. Además, permite modelar y mostrar a los lectores aspectos particulares del proceso de lectura: por ejemplo, haciendo preguntas sobre el contenido del texto o sugiriendo preguntas abiertas. La lectura guiada ofrece la oportunidad de leer una amplia variedad de textos y de resolver problemas mientras se lee. Lectura (independiente) individual Da al lector la oportunidad de aplicar estrategias de lectura de manera independiente: tener propósitos de lectura, predecir, hacer hipótesis, buscar apoyo para sus hipótesis, detectar fallas en la comprensión, etc. Incluso en este tipo de actividad se puede contar con apoyo de distinto tipo como leer textos que obliguen a realizar determinadas inferencias, con errores para solucionar o variando los tipos de textos que se presentan. 19 A veces las personas que se inician en la lectura necesitan leer en voz alta, entre otras razones para escucharse y asegurarse de “decir todas las palabras”. Este es un paso importante para iniciarse en la lectura puesto que permite al lectorpracticarla y adquirir seguridad en sí mismo. Lectura en voz alta Uno de los propósitos principales de la lectura en voz alta es ser escuchado por otros, por esta razón es que esta forma de leer puede ser aprovechada para mostrar un buen modelo de lectura, es decir, con una entonación y pronunciación (dicción) adecuada de manera que los que escuchan la lectura se interesen en ésta, la comprendan y la disfruten. Lectura compartida A diferencia de la lectura guiada, ésta lectura tiene como finalidad la puesta en común de opiniones, dudas, comentarios, acuerdos y desacuerdos acerca del contenido que se está leyendo más que de centrar la atención en ciertos aspectos enfocados a mejorar la propia lectura. Como su nombre lo indica lo importante es compartir lo que se está leyendo, es decir, conocer las distintas interpretaciones por parte de quienes escuchan la lectura y de quienes la hace. 20 Por esta razón es importante tomar en cuenta que la forma en que les leemos a otros puede tener un profundo impacto en la respuesta de nuestros oyentes. Por ejemplo, si leemos con fluidez, cambiando el tono de voz, haciendo pausas para reflejar a los diferentes personajes y los cambios en la trama, es más probable que interesemos en un relato a quienes nos están escuchando. Uno de los propósitos de esta forma de leer es ofrecer la oportunidad de practicar con apoyo, los conocimientos que se han aprendido. Pensada para trabajar con un grupo completo, o con pequeños grupos, la lectura compartida proporciona muchos modelos y demostraciones y la posibilidad de hablar sobre el texto y su lectura. Sin embargo es necesario que poco a poco se desprenda de su voz, es decir, lea en silencio para poder concentrarse, no tanto en las palabras sino en lo que éstas significan para crear un proceso óptimo de expresión y entendimiento que establezca una comunicación clara tan necesaria e importante en nuestra sociedad actual. "La lectura oral ha sido criticada por razones como las siguirentes: es mas lenta que la lectura silenciosa y su uso excesivo puede fijar en los niños el hábito de leer lentamente; tiene una funcionalidad limitada, pues en la mayoria de las situaciones sociales se requiere leer en silencio; los estudios tiende a demostrar que la lectura silenciosa ayuda mejor a la comprensión."8 8 Allende, F. y Condemarin, M. (1993). La lectura: teoría, evaluación y desarrollo. Chile: Editorial Andres Bello. Pág. 150 21 Como podemos ver cada tipo de lectura nos da las herramientas necesarias para lograr nuestra construcción del significado del texto, y de esta forma aplicar en nuestras relaciones humanas los conocimientos adquiridos de ella. Dicho aprovechamiento nos forma un criterio y nos proporciona los elementos necesarios para un mejor desarrollo en nuestra sociedad, por lo cual, la lectura es un recurso sumamente importante en la comunicación humana. 1.3.- La importancia de la lectura en el proceso de la comunicación La lectura con sus distintas características, tipos y prácticas da forma y sustancia a la comunicación humana fomentando el desarrollo personal de los individuos y la comunicación con sus semejantes, pues tras la práctica de la lectura hay algo más básico, La literatura (al lado de la influencia de los padres y de los profesores) forma parte de la construcción de una articulación intelectual, Hacia el interior, organizan nuestros mundos conceptuales y sensibles, en el modo en que integramos en conjuntos coherentes las piezas del rompecabezas que nos rodea. Hacia el exterior, en la forma en que aprendemos a jerarquizar, sopesar y modular lo que hemos retenido, para transmitírselo a otros. 22 Cabe reflexionar que el beneficio personal que cada lector saca de la lectura es muy variado, pues todas las actividades humanas son irrepetibles y personales. En cualquier caso, podemos reflexionar que con la lectura llegan a la persona un cúmulo de bienes que modifica su comunicación con el entorno. La lectura es especialmente importante en la comunicación porque ayuda al desarrollo y perfeccionamiento del lenguaje, mejorando la expresión oral y escrita, aumentando el vocabulario y mejorando la ortografía, por ende, hace el lenguaje más fluido, Lo que nos lleva a una mejora de las relaciones humanas exponiendo el propio pensamiento, enriqueciendo los contactos personales posibilitando la capacidad de pensar. En ella encontramos una herramienta extraordinaria de trabajo intelectual ya que pone en acción las funciones mentales agilizando la inteligencia, proporcionando información y conocimientos. Cuando se lee se aprende. La lectura amplía los horizontes de la comunicación del individuo permitiéndole ponerse en contacto con lugares, gente y costumbres lejanas a él en el tiempo o en el espacio, satisfaciendo y estimulando su curiosidad intelectual y científica, despierta aficiones e intereses individuales en el ser humano que situado en una sociedad en constante intercambio y comunicación lo lleva al nivel de crear grupos con los mismos intereses, promoviendo el intercambio de actividades y pensamiento. 23 La lectura desarrolla la capacidad de juicio, de análisis y de espíritu crítico, pues nos entera de la diversidad de ideologías fomentando una participación activa y una actitud dinámica. Como podemos leer, la práctica de la lectura no es sólo un entrenamiento para la comprensión y para la decodificación, sino una de las bases más firmes para la comunicación con nuestros semejantes. Es evidente por lo anteriormente expuesto que la lectura en general y la literatura en particular son parte importante del ser humano y su proceso de comunicación y que se obtienen múltiples beneficios de ella, pero es importante señalar que para adquirir estos beneficios se debe de inculcar la lectura a temprana edad, es decir, proporcionar al niño una literatura cualitativa y no cuantitativa, que en esta etapa tan importante, marcará su gusto por la lectura y le dará las herramientas necesarias para un mejor desenvolvimiento social. Y es en este punto donde la lectura se vincula y asocia al proceso de comunicación del infante, porque la lectura sirve para recibir información útil, datos que integran al niño a la vida en comunidad y a la lectura de su país (la prensa , las revistas, etc), leer le sirve para asimilar y cambiar creencias y comportamientos dentro de los grupos sociales (con libros de religión, de política , de educación cívica, etc ). La lectura lo ayuda a comprender mejor el lenguaje y las costumbres de su pueblo, y para identificarse con su tradición oral y escrita. Lo anterior es la forma en que la lectura influye en el proceso de comunicación del niño a un nivel social, pero no se limita tan solo a este nivel, si no que también influye en un nivel individual cumpliendo diferentes funciones en la vida y desarrollo del infante. 24 Respecto a las funciones de la lectura Vigotsky hace un señalamiento importante de conocer, por su claridad y concisión: "Aprendiendo de la experiencia compartida el niño se socializa en una comunidad humana determinada y aprende a comportarse como las personas que lo rodean, adquiere las experiencias que ese entorno social le facilita y, de modo general llega a ser capaz de compartir ese entorno social su lenguaje, sus hábitos y sus recuerdos. Ahí radica la importancia de utilizar la lengua escrita para participar en el mundo social, aportando sus conocimientos, usando herramientas culturales, materiales y mentales y colaborando, de una manera u otra, para lograr un fin comunicativo donde la lengua escrita tiene un papel central"9 1.4.- Funciones de la literatura infantil en el procesode comunicación en los niños "Nunca es demasiado temprano para compartir un libro con los niños. Si aguardamos a que sepa leer para hacerlo, es como si esperáramos a que él supiera hablar para hablarle. Penelope Leach."10 El ser humano siempre es un receptor de su entorno, nunca deja de aprender y se encuentra en constante evolución, pero sin lugar a dudas en la infancia es más receptivo y construye los pilares de su futuro comportamiento y modos de comunicación con sus semejantes, por ello en esta etapa, la lectura (en cualquiera 9 De la Garza, Y. (2006). El espacio de la lectura en las prácticas escolares. México: UPN. Pág. 24 10 Barros, C. y Carnero, G. (2001) Guía de libros recomendados para niños y jóvenes 2001-2002. México: Asociación Mexicana para el fomento del libro infantil y juvenil A.C. Pág. 9. 25 de las distintas prácticas expuestas anteriormente) es una herramienta que permite al infante prometerle un mejor papel en su futuro desenvolvimiento social. Para concebir este proceso debemos de tener claras las cuatro funciones (cognoscitiva, instrumental, de socialización y afectiva) que la lectura cumple en esta etapa y así entender en qué radica su importancia. Función cognoscitiva La lectura satisface la curiosidad y necesidad de información del niño pues en ella encuentra la información extra que percibe a través de sus sentidos como la vista, el oído y el olfato, desarrollando su lenguaje y agilizando sus operaciones mentales. Por medio de esta función el infante amplía su conocimiento acerca de la sociedad en la que está inmerso y conoce el mundo del que forma parte, extrayendo de éste (por medio de la lectura) las herramientas necesarias (conocimiento social, científico, emocional, educacional, etc) para introducirse en su sociedad. "Gracias a sus lecturas, el niño hace del texto escrito una fuente de datos. Sin embargo, la escuela moderna plantea que la educación no es solamente adquirir información. El niño a lo largo de su educación, debe desarrollar procesos y habilidades, haciendo uso de sus conocimientos."11 11 Venegas, M. (1994). Promoción de la lectura en la biblioteca y en el aula. Buenos Aires: Aique Grupo Editor S.A. Pág. 18 26 En este sentido es una herramienta para solucionar problemas, es una herramienta de aprendizaje que le sirve para encontrar información general o datos específicos y así crear instrucciones para que sean realizadas o comprender una instrucción que se le indique. “El lector no se limita a reproducir el código del emisor: aplica sobre lo leído sus propios códigos interpretativos, lo cual le permite extraer significados de acuerdo a su a su manejo previo del lenguaje y de su dominio sobre los contenidos.”12 Función de socialización Por medio de la lectura recibe información que le permite estar integrado a la vida de su comunidad comprendiendo su lenguaje y costumbres e identificándose con su tradición oral y escrita. "Se ha comprobado que los niños con un comportamiento lector admirable son aquellos que tienen una relación muy estrecha con otras personas, y mucho más si éstas son asiduos lectores, sean sus padres, sus maestros o sus amigos; es decir cuando la lectura tiene su anclaje en el acontecer social. Y ello es lógico, porque la lectura es un acto social, solidario, fraterno, que se hace viva cuando se comparte, cuando es diálogo y comunicación de ideas; cuando se hace comunitaria y cotidiana."13 12 Allende, F. y Condemarin, M. (1993). La lectura: teoría, evaluación y desarrollo, Chile: Editorial Andres Bello.Pág. 5. 13 Sampeiro, G. (1993). Senderos hacia la lectura I. México: Instituto Nacional de Bellas Artes. Pág. 45 27 Función afectiva El infante encuentra alivio a sus temores, en ese mundo imaginario, pues se identifica con los personajes despertando su sensibilidad y mejorando la expresión de sus sentimientos, enriqueciendo su mundo interior. "La obra impresa no consiste únicamente en un objeto utilitario, simple transmisor de mensajes, sino en una creación del espíritu humano, capaz de suscitar sentimientos gratificantes y emociones estéticas. En este sentido, el libro, como arte, merece ser proyectado para alcanzar la perennidad."14 Función de estímulo a la creatividad y a la imaginación La lectura brinda al niño la posibilidad de fantasear, descansar, soñar e imaginar enriqueciendo sus posibilidades creativas, lo cual activa su capacidad de asociar ideas nuevas, integrándolas a su experiencia personal. "Los niños, por ejemplo, tienden a compartir fantasías de omnipotencia personal junto con la conciencia de su propia vulnerabilidad. En consecuencia, como veremos, su literatura favorita a menudo refleja su necesidad de seguridad y orden, pero en otra parte los mismos libros u otros diferentes también pueden responder a la frustración de los niños por su propia impotencia ofreciéndoles fantasías 14 Lachea, J. (1986). El libro en el ecosistema de la comunicación cultural. Madrid España: Ediciones Pirámide, S.A. Pág. 33 28 compensatorias en las cuales personajes poderosos o pícaros desafían a la autoridad y rompen la mayoría de las reglas convencionales."15 Después de revisar las funciones de la lectura fundamentalmente en la infancia, podemos entender lo importante de su práctica para la formación del criterio del infante, aplicándolo en su proceso de comunicación con su entorno al hablar con la gente perteneciente a su núcleo social, pues es en la lectura donde encuentra los puntos coincidentes con un código moral, de conocimiento, ético y de conducta. Las distintas funciones se asimilan en diferentes etapas, es decir, llevan una secuencia de registro en nuestra evolución natural dictada por nuestra edad. No podemos saltarnos de un aprendizaje a otro, no podemos adelantarnos; es por ello, que las editoriales rigen sus publicaciones y en general el estudio de la literatura infantil se divide, se basa y categoriza por las edades del infante. 15 Tucker, N. (1998). El niño y el libro. México: Fondo de Cultura Económica. Pág. 43 29 Conclusiones Capítulo 1 La comunicación en el hombre es constante e involuntaria, no puede vivir ajeno a ella, participa de forma activa o pasiva en su proceso, pues sus sentidos (ver, oír, sentir y oler) lo convierten en un receptor constante de información, situándolo en dos circunstancias polarizadas: puede ser un espectador, lo que lo lleva a ser el receptor o bien generar un mensaje lo cual lo convierte en un transmisor. Los mensajes giran en torno a él constantemente y dependiendo del momento circunstancial (tiempo y espacio) el proceso de comunicación puede llegar a fines diferentes o alcanzar diversos objetivos. Los mensajes pueden ser de diferentes tipos, visuales, de contacto físico directo o auditivos. A cada uno le pertenece su propio código o regla y su sustancia se forma según sus necesidades para darse sentido en espera de una respuesta. Estas distintas formas de comunicación han dado al hombre pauta para su entendimiento y desarrollo social. 30 Las más importantes y determinantes (por orden de aparición histórica) en dicho proceso han sido la comunicación hablada y la comunicación escrita (la palabra hablada y la palabra escrita). En un principio el hombre mantenía sus tradiciones y aprendizaje a través de la palabra hablada, y expresaba su sentir y necesidades de igual forma por este medio, posteriormente, fue con las primeras representacionesgráficas en las pinturas y con la creación de alfabetos o códigos gráficos que el hombre fortaleció y enriqueció su proceso comunicativo y la narración de su historia. Punto medular en dicho enriquecimiento fue la aparición de la imprenta y la creación del libro (no seamos estrictos con la aplicación del termino “libro” en este párrafo, entendamos por ello hojas, tinta y papel con un orden) pues las ideas se organizaron y plasmaron para ser transmitidas de generación en generación de una forma inalterable, a diferencia de la comunicación hablada que por el paso del tiempo es transformada por la visión particular del emisor y su contexto. En estos dos procesos de comunicación encontramos características muy particulares, la comunicación oral permite ciertas irregularidades e inexactitudes que por su inmediatez nos lleva a no ser precisos y sobrentender lo que nos refieren porque nos apoyamos en la mímica, un recurso más de comunicación. Mientras que la lengua escrita solo cuenta con el recurso de la representación gráfica de lo signos lingüísticos obligándola a ser más detallada y descriptiva para poder transmitir su mensaje. 31 Como lo planteamos anteriormente, el texto es algo que jamás cambiará por el devenir del tiempo pero las circunstancias externas a la producción del texto le dan ciertas peculiaridades y por ende diferentes funciones. Como resultado de estas distintas funciones se desprende que existan diferentes características, tipos y prácticas de lectura para dichos textos, porque dependiendo del estilo de cada uno o de la intencionalidad que le de el lector, será lo que aprecie. La lectura es un vehículo de aprendizaje, de diversión, de intercambio de experiencias; la lectura es multifuncional. Al ser la lectura multifuncional o por el hecho de que el lector le de la utilidad que le convenga no significa que la lectura sea comprendida por sí sola al poner enfrente de él un texto y saber las letras o los sonidos (ejemplo claro de esto es un texto en un idioma desconocido que por la similitud fonética de las palabras o por la similitud del código escrito (letras) al nuestro, podemos pronunciar pero sin tener la más remota idea de lo que estamos leyendo). La intención o el porque de la lectura es la construcción de un significado, es llegar a una relación del texto con el lector, de preguntas y respuestas, yo te pregunto texto, tu me contestas texto. “El proceso de la lectura tiene características esenciales que no pueden variar. Se debe de comenzar con un texto que tenga alguna forma gráfica; el texto debe de ser procesado como lenguaje, y el proceso debe terminar con la construcción de significado. Sin significado no hay lectura y los lectores no pueden lograr significado sin desarrollar el proceso.”16 16Murrieta E. (2005) La importancia del hábito de la lectura en los niños http://www.itson.mx./dh/la_importancia delhabito_de_la_.htm 32 El proceso es influenciado por distintas vivencias del lector y aunque los textos estén escritos con una intención única, cada lector hará su muy particular construcción del significado constantemente y durante su vida. A lo largo del proceso de aprendizaje el lector se enfrenta y hace uso de distintas prácticas de lectura que lo llevan a los fines que le convengan en su momento, por ejemplo si lo que busca es el comentar la información de una lectura o entender los mensajes entre líneas o la lectura requiere de conocimientos no manejados por el lector echará mano de la lectura guiada. Sí el lector busca hacer sus propias hipótesis, plantearse problemas y llegar a soluciones propias, aplicará la lectura independiente, que le brindará con su frecuente uso ampliar su criterio y mejorar su manejo del lenguaje, expresión y construcción de significados. Finalmente tenemos la lectura compartida, práctica que lleva al lector a un intercambio de opiniones sobre el texto, a alimentarse de otras interpretaciones y ampliar su comprensión sobre el tema tratado, más que pulir el estilo propio de la de la ejecución o forma de lectura. Por lo anteriormente descrito debemos entender la importancia de dichas práctica y su ingerencia en el proceso de la comunicación del ser humano pues contribuye a su desarrollo pues la lectura no solo proporciona información (instrucción) sino que forma (educa) creando hábitos de reflexión, análisis, esfuerzo, concentración… y recrea, hace gozar, entretiene y distrae. 33 La importancia de la lectura en el proceso de la comunicación la podemos sopesar en el aporte que da al hombre a su desarrollo personal y consecuentemente su desarrollo social. Los beneficios de la lectura en la comunicación del hombre se dan desde muy temprana edad, pues la lectura cumple diversas funciones: cognoscitiva, instrumental, de socialización, afectiva y de estímulo a la creatividad y a la imaginación. 34 Capítulo 2 La selección de obras literarias dirigidas al público infantil 2.1. - Cómo se define al público infantil Quedando establecidas las distintas funciones de la lectura en el desarrollo del infante, el siguiente paso es plantearnos una pregunta que por demás obvia es inevitable hacerla, porque en la respuesta daremos cuenta de la existencia de una serie de variantes y características que marcan las etapas lectoras del niño: ¿A quién se considera público infantil? Como simple pregunta podemos contestar con una simple respuesta, se considera público infantil a los niños desde su nacimiento hasta los doce años o sexto año de primaria, cuando entran a la secundaria ya son considerados público juvenil. Ahora que partimos de lo general a continuación entraremos a lo particular especificando las diferentes etapas del niño lector. 35 En primera instancia me basé en la clasificación de las etapas del niño lector de Nicholas Tucker que expone en su libro El niño y el libro, 1998 por considerar, en lo personal, ser la más concreta y clara que servirá como introducción para el análisis posterior de los resultados que nos arroje el trabajo de campo. La primera etapa es de los cero a los tres años y en ella el niño se encuentra pasivo, el adulto es quien le lee y el contexto en el que esté mirando los libros es lo importante, pues crea un vínculo entre el calor de los brazos de sus padres y el libro. Es la fase de los libros ilustrados. El niño diferencia muy poco el mundo interior del exterior. Identifica sólo objetos individuales y entiende escenas particulares de su propio entorno en un esfuerzo por orientarse él mismo. Para Nicholas Tucker los libros que corresponden a esta etapa son aquellos con los que puede jugar: con orificios, ventanas, formas divertidas, piezas que se levantan, libros con ilustraciones e historias sencillas acerca de situaciones cotidianas que les permiten predecir lo que pasara. De los tres a los siete años es la siguiente fase, la de los cuentos fantásticos. El niño se interesa sobre todo por la fantasía, es decir, por los cuentos de hadas en un principio y después por la fantasía que le traen otros mundos. Aparece el interés por el ritmo y la rima. El niño en esta fase si se dieran las condiciones para ello, desarrollaría un pensamiento intuitivo, prelógico y comienza a dominar la lectura. Este hecho es de suma importancia para su desarrollo intelectual. En su relación con el libro predomina el animismo, lo leído cobra vida y es asimilado como una experiencia más de la vida. Se debe buscar la adecuación de la imagen al texto y el 36 progresivo desarrollo de éste. “Debido a su carácter analógico, la imagen aparece como una sustitución directa de lo real, más accesible que lo escrito. Por ello se ha utilizadodurante mucho tiempo con fines didácticos, para transmitir saberes y oficios.”17 Posteriormente, la respuesta animista que caracteriza su acercamiento a la literatura es sustituida por la fantasía, que se convierte en la característica fundamental del lector de estos años, debido al desarrollo de su imaginación. Durante este ciclo se produce un gran desarrollo psicológico y se consiguen grandes avances en el proceso lector. Los libros que gustan en esta etapa son textos breves, divertidos, fáciles de entender e historias interesantes que incluyan diálogos, así como cuentos más sofisticados o novelas cortas divididas en capítulos y libros que usen las palabras de una manera creativa y hagan divertida su lectura. Por último está la etapa de los siete a los once años, donde el niño a medida que crece se va alejando de la madre y de la familia para integrarse en otros grupos humanos, la clase y los amigos. Se encuentra en la edad de las historias realistas. El niño comienza a orientarse por sí mismo en la realidad circundante. La búsqueda de respuestas a muchas interrogantes, comienzan a desarrollarle el gusto por la lectura de aventuras. Sus intereses individuales, egocéntricos, van siendo sustituidos por una mayor preocupación por el mundo externo. Se acentúa el deseo de saber, que debe ser fomentado en la escuela y en su casa, y toman gran importancia los 17 Paparmegiani, C. (1987). Libros Y Bibliotecas Para Niños. España: Ediciones Pirámide S. A. Pág. 49 37 juegos. Gracias a ellos empieza a comprender la necesidad de las normas y de los demás compañeros para poder disfrutar. Los libros adecuados a esta edad suelen referirse a los aspectos relacionados con su experiencia vital, abordando temas realistas y trascendentes que despierten en los niños interés y sentido crítico acerca de lo que sucede en el mundo. El niño busca la acción y quiere que se la presenten de manera sencilla y directa. Las ilustraciones son todavía un soporte importante para la comprensión del texto y tienen que motivar la lectura animando al niño a seguir adelante. Cabe señalar que para este punto, con la definición de público infantil que se describe en este apartado, el comunicólogo que se interese en desarrollarse en el medio editorial y en particular en la literatura infantil, ya cuenta con un marco teórico aplicable. La definición a la que hago referencia se puede considerar teórica y en general las editoriales la toman en cuenta y la aplican para establecer sus criterios, pero para que el comunicólogo realmente pueda desarrollarse en el medio literario infantil es sumamente importante que conozca los criterios de nuestro país, por ello, en el siguiente punto concentraremos los criterios más representativos que rigen la edición de libros infantiles en nuestro país. 38 2.2.- Recomendaciones y criterios generales sobre literatura infantil desde dos perspectivas: la de los Profesionales en el medio literario y la de las asociaciones internacionales de fomento a la lectura “El hecho de que ahora, como adulto, escriba libros para niños, tiene que ver con el interés de crear los libros que de niño me hubiera gustado leer. (Antonio Granados).”18 Quedando establecido anteriormente lo que se considera público infantil a, continuación presentaré los criterios y recomendaciones en torno a dicho público desde dos perspectivas: la de los Profesionales en el medio literario y la de la Asociación Mexicana para el Fomento del Libro Infantil y Juvenil, A.C., IBBY México (Internacional Board on Books Young People), con la finalidad de ser una introducción a la realidad con la que se aplican dichos criterios y lo que se busca satisfacer con la literatura infantil. 18 Consejo Nacional para la Cultura y las Artes, (1990). Memoria De La Novena Feria Internacional Del Libro Infantil Y Juvenil. México. Pág. 92 39 Opiniones de profesionales en el medio literario Los puntos de vista, criterios y recomendaciones sobre la literatura infantil expresados por importantes figuras del medio editorial y literario (escritores, periodistas, ilustradores) que a continuación se presentan fueron extraídos de una importante publicación cuyo tema central es el que nos ocupa19. Para Alberto Blanco (poeta, traductor literario, ilustrador y diseñador de libros) una persona no se vuelve inteligente o tonta de la noche a la mañana. Una persona es brillante o no en sus primeros días, meses o años, como lo llegará a ser a lo largo de toda su vida, por ello, considera una verdadera falta de respeto considerar el trabajo literario o de ilustración para el público infantil como una actividad de segunda categoría o como un sustituto para artistas fracasados. En su caso, el grueso de su obra no está dirigido a los niños, pero considera de vital importancia la calidad de las obras que lleguen a sus manos, a sus ojos, a su imaginación; en gran parte de eso depende el futuro desarrollo de esos gustos y de ciertas habilidades. El escritor Emilio Carballido (narrador y dramaturgo) considera que el libro infantil puede ser más exigente y aunque tiene otro tipo de reglas necesita un esfuerzo literario igual que una obra para adultos y, a veces, hasta más estricto, porque tiene que ser un poco más limpio, más desnudo, menos complejo y al mismo tiempo más 19 Op. Cit. Pág 92 40 rápido, más rico, que hable más a la imaginación y que haga uso de mayores libertades imaginativas. Cada libro infantil es concebido de diferente forma, dependiendo de quien lo escriba, por ello, Antonio Granados (autor e investigador de libros patrocinado por el CONAFE) argumenta que hay algunos escritores que piensan que porque un libro funcionó para sus hijos funcionará para todos los niños y que dicha situación, motiva con frecuencia, a la falta de calidad de la literatura infantil, la cual ha sido considerada siempre, y no sólo por los críticos, una literatura del menor esfuerzo. Siendo honesto reconoce que esto lo fomentan los mismos escritores o ciertos escritores para niños, pues algunos de los que escriben supuestamente para los pequeños, lo hacen luego de descubrir cierta nostalgia por ese territorio perdido que es la infancia. Entonces hacen una literatura casera y limitada, efectivamente del menor esfuerzo. Para Vicente Leñero (escritor de literatura infantil) siempre que se habla de los cuentos para niños se piensa mucho en lo educativo, pero en lo educativo que tiene que ver en cuestiones éticas o morales, ideológicas, etcétera, para que el niño piense como piensan los padres y, en general, los adultos; y casi nunca se piensa en lo educativo que tienen los cuentos para niños, en la escritura misma, en el ritmo de la frase, en lo estrictamente literario. 41 También considera que un cuento para niños tiene que estar bien escrito para evitar acostumbrarse a formas mal hechas de lo literario, poniendo atención en el tipo de frase que lleva al niño a entender bien una historia por medio de un uso adecuado de las palabras. Considerando a la poesía y al teatro géneros muy difíciles, María Luisa Mendoza (periodista. novelista y cuentista) cataloga de igual manera, o más difícil, la creación de literatura para niños, pues exige al escritor una creación con palabras transparentes que el niño entienda; por lo tanto no es fácil hallar las palabras necesarias, la claridad y la transparencia fundamentales del género. La visión de Silvia Molina (narradora, ensayista e investigadora) en este género es muy concreta y ve a la literatura infantil sin muchas concesiones, “pues te enfrentas a un lector especial que,por otra parte, no deseas que te abandone. Le vas a contar algo que de veras le interesará.”20 Para ella no es cuestión de utilizar diminutivos y ya. Los grandes textos para niños están escritos por buenos escritores. El vocabulario debe estar bien escogido y la sintaxis perfectamente cuidada: oraciones simples y párrafos cortos. Preocupada por el sentir de los niños, Margarita Pierini (codirectora de la revista infantil El Tlacuache) establece que si bien es cierto que los niños no se fijan tanto en si una frase está bien o mal escrita, sí se dan cuenta de algunos elementos en particular, como los casos en los cuales el mundo presentado por el texto es 20 Op. Cit. Pág. 78 42 totalmente inverosímil. Por lo anterior asegura que el pensar en la literatura para niños como una literatura de “segunda”, provoca un grave daño en la infancia. En la experiencia de Luis Arturo Ramos (autor de cuentos para niños y adultos) resulta tan exigente un libro infantil como la literatura para público adulto, dedicando tanto esfuerzo a los cuentos para niños como para los cuentos para adulto. Considera además que la literatura infantil implica otra sensibilidad, otra vocación, asumirse de otra manera como escritor, pero exigente como en cualquier otro género o disciplina. La opinión de Becky Rubinstein (Premio Nacional de Cuentos para Niños Juan de la Cabada. 1988) deja sentir que es doloroso pensar en la literatura para niños como una subliteratura y considerar a sus escritores improvisados, porque para escribir literatura dedicada a niños se debe tener una formación. Señala que es fundamental Leer mucho –sobre todo a los clásicos-, respetar las reglas literarias y dar una estructura y coherencia a lo escrito. El autor debe preguntarse constantemente para quién está escribiendo, sentir respeto por los niños y saber que son muy inteligentes y que se percatan de inmediato cuando un cuento no está bien estructurado. Rubinstein también considera el humor como parte fundamental en la literatura infantil, pues con este elemento se atrae al 43 niño con un momento grato para que recuerde al cuento como algo sensacional, radicando ahí la maestría del cuento para niños. Finalmente Liliana Santirso (editora y escritora en la revista Comunidad Conacyt) considera que con un gran manejo del lenguaje y con una pirotecnia de pensamiento es posible, a veces, crear aparentemente una buena literatura para adultos; pero es muy difícil convencer con artimañas al niño. El niño siempre encuentra lo que hay detrás de las palabras. Dentro de las opiniones de las personas involucradas con el medio literario, nos podemos dar cuenta de una constante (que después de la investigación que realicé comparto absolutamente): mucha gente ajena a este medio, e incluso que pertenece a él, considera que la literatura infantil es fácil de hacer, lo cual es lo más alejado de la realidad. Esto lo afirmo porque me parece, al igual que Alberto Blanco, María Luisa Mendoza, Silvia Molina, Margarita Pierini, Arturo Ramos, Becky Rubinstein y Liliana Santirso, una falta de respeto considerar la creación de literatura infantil como una actividad de segunda categoría, pues es en esta literatura en la que se requiere de mayor conocimiento en el manejo del lenguaje y la ilustración para poder resumir en un texto corto la idea y el encantamiento del pensamiento, porque de este primer contacto literario dependerán los gustos por la literatura del infante cuando crezca. Por ende, un escritor sabe producir una literatura que sea una base sólida para que en un futuro se sigan leyendo sus libros, es decir, el escritor cuidará el consumo posterior de su producción. 44 Entre estos criterios encontramos la opinión de Emilio Carballido, que es una descripción acertada de un libro infantil (la cual nos muestra un criterio a seguir) : el libro infantil debe ser más exigente, más complejo y simple, pues con él se transmite toda la belleza de un paisaje en pocas palabras (recordemos que a menor edad mas ilustración y menos textos); al crearlo, tenemos la necesidad de apelar más a la imaginación con la palabra escrita. Apartada de este criterio común tenemos la opinión de Antonio Granados, quien nos menciona que muchos escritores realmente sí escriben una literatura de “segunda”, idea con la que no estoy de acuerdo porque mi investigación me arroja como resultado un excelente nivel en la publicación de literatura infantil; no dudo que estos casos existan, pero son los menos, y las editoriales encuestadas no pertenecen a este caso. Otro criterio más nos lo da Vicente Leñero, y es referente a que el cuento para el niño debe ser un medio educativo y no tanto en lo que le pueda enseñar a relacionarse con su medio, sino en la escritura misma, que le enseñe la construcción de las ideas en la escritura. Considero muy acertada esta visión porque escuchando y leyendo una buena escritura aprenderemos a escribir bien; pero no olvidemos que la literatura no se puede limitar a tan sólo esto, pues en ella encontramos muchas otras funciones. Como podemos constatar hay una variedad de opiniones entre el contenido y producción de la literatura infantil, cada persona tiene su particular visión y sentir por dicha literatura; si bien como se señala, también hay constantes y puntos de vista compartidos, por ello, a continuación presentaré los criterios aplicados por IBBY México para conocer su aplicación de forma generalizada. 45 Cabe mencionar, que dichos criterios no son una regla, son sugerencias que pueden, o no, ser utilizados. Lo anterior quedará explicado en el siguiente capítulo. IBBY México IBBY México es una organización no lucrativa que trabaja para favorecer el encuentro de los niños con los buenos libros. Desde su fundación en 1979, el trabajo de la asociación se ha diversificado y enriquecido de manera importante gracias al trabajo de un número creciente de personas e instituciones interesadas en los libros para niños. “La selección de los libros por IBBY México se funda en su historia personal, en las huellas vivas de un sentimiento, de una idea, de un sueño, de un encuentro. Por eso su selección no pretende ser la única ni para todos. Es sólo una sugerencia, una opción entre otras, un ánimo de compartir una experiencia humana significativa y gozosa. Su única garantía de validez es su vivencia como lectores apasionados .toman en cuenta y disfrutan la poesía de las palabras, la suavidad con la que se deslizan la vista y la emoción a lo largo del texto; el ritmo de la obra, su estructura, el suspenso con que mantiene en vilo, el sentido del humor, la alegría, la inteligencia, los valores y el significado de una vida humana que se expresa en la escritura.”21 IBBY México hace su selección literaria con las características anteriores sabiendo que con la lectura los niños no sólo se divierten y desarrollan su vocabulario, conocimientos 21 Asociación Mexicana para el fomento del libro Infantil y Juvenil A.C./Consejo Nacional para La Cultura y las Artes, Dirección General de Publicaciones. (2002). Guía De Libros Recomendados Para Niños Y Jóvenes 2000, México,. Pág. 6. 46 e imaginación, si no que también se aproximan y aprenden el uso de las estructuras de la lengua, aprenden a comunicarse con su ser interior, con esas partes desconocidas o rechazadas en uno mismo, y que desde allí, al hablar con su interior, inician la comunicación profunda con el otro y con los otros. Esta selección es muy acertada porque sus textos contienen una gran riqueza literaria posibilitando a cada lector, en sus diferentes etapas y niveles de desarrollo físico, mental, ético y de lectura, realizar diversas interpretaciones,aprender y entender el bien y el mal, lo bello y lo feo, y comprender la compleja naturaleza del ser humano, lo que lo dotará de herramientas fundamentales para su desarrollo en la sociedad proporcionándole una mayor capacidad de adaptación, de tolerancia y de diálogo, además de fomentar las cualidades recreativas, de estímulo y desarrollo de la sensibilidad y de la capacidad intelectual, social, creativa y artística. Independientemente del contenido de la obra, IBBY México también propone la calidad en las ilustraciones, que tengan gracia, belleza y precisión para comunicar en un lenguaje, paralelo al texto, un buen mensaje total conformado por el mensaje gráfico, cognoscitivo y visual. Saben que cualquier selección es incompleta e implica un riesgo, por eso quieren que sus sugerencias sean un punto de partida, nunca una limitante. A fin de cuentas consideran que es el niño quien decide en cada momento qué le interesa y qué no y así aprende a confiar en sus propios gustos y en sus disgustos. 47 “Los criterios para elegir un libro, como los criterios para escoger un amigo, son siempre -y por fortuna- subjetivos.”22 Con el fin de establecer un criterio flexible y práctico, ordenan los libros por grados de madurez lectora y no por edades, resultando cuatro etapas lectoras: los más pequeños, los que empiezan a leer, los que leen bien, y los grandes lectores. Para IBBY un niño es único, avanza a su propio ritmo y presenta diferentes habilidades. Las lecturas también difieren según el momento, la compañía y la situación. En IBBY separan los textos literarios de los informativos, las obras clásicas y las lecturas recomendadas a los padres, publicando además directorios de editoriales, distribuidoras y librerías. Bajo todas estas características que considera importantes como contenido de una obra infantil y desde su forma de clasificar, IBBY México pone a consideración la siguiente categorización de los niños por sus “grados de madurez lectora”: • “Los más pequeños”, que son los que gustan de libros con orificios, con formas divertidas, con objetos que estimulen sus sentidos, con texturas y que además contengan personas, objetos y animales cercanos a su entorno para familiarizarlos con lo que viven. 22 Op. Cit. Pág. 5 48 • “Empiezan a leer”, quienes leen textos breves, divertidos, fáciles de entender y que ya incluyen diálogos. • ”Leen bien”, los niños que realmente deciden por ellos sus lecturas, es decir, los lectores que deciden lo que para ellos es un buen libro sin importar alguna opinión externa. Para ellos se recomiendan que sean libros sobre temas realistas y que les dejen huella, que despierten en ellos interés y sentido crítico acerca de lo que sucede en el mundo. • “Grandes lectores” son niños que empiezan a experimentar el cambio a la adolescencia, lo que los llevará a interactuar en el mundo de los adultos; por tanto, ya están preparados para textos mas complejos y por ello se recomiendan libros que los preocupen, que les sean amenos, ligeros, sin perder de vista que sean los libros que ellos decidan leer. Como podemos notar, la particularidad de la propuesta de IBBY es que al final de cuentas el niño decida qué leer y qué no leer, dando también orientación con su clasificación a padres y maestros, sobre todo de los más pequeños, para guiarles en su selección. “Un niño es único, avanza a su propio ritmo y presenta diferentes abilidades. Las lecturas también difieren según el momento, la compañía, la situación.”23 23 Op. Cit. Pág 7 49 Conclusiones Capítulo 2 La edad que comprende el público infantil es de los cero hasta los doce años; su ingreso a la secundaria lo convierte en público juvenil. Dentro de este largo camino se tienen diferentes etapas, en las cuales el niño lector experimenta diferentes procesos de aprendizaje. Dichas etapas se sintetizan de la siguiente forma: La etapa de los cero a los tres años, donde los libros se caracterizan por ser totalmente ilustrados y se puede jugar con ellos. En esta etapa los niños son lectores asistidos pues es un adulto quien lee al niño o bien, los guía en la lectura. De los tres a los siete años, el niño entra en contacto con libros que tienen más texto y sus temas son de historias fantásticas, empieza a dominar la lectura y sus libros tienen más texto y menos imagen que en la etapa anterior. Por último tenemos la etapa de los siete a los once años; la literatura de esta edad es aquella que hace referencia a su realidad, el niño busca aprender e identificarse con historias que le puedan pasar a él, quiere experimentar una realidad a través 50 de los textos, quiere encontrar en ellos cómo aprender a vivir o saber lo qué le puede suceder algún día. Este sentimiento hacia la literatura obedece a que el niño ya experimenta totalmente una interacción en diferentes grupos sociales en los que tiene que opinar y su vida la expone a otros. En esta etapa la ilustración se reduce todavía más que en la etapa anterior, pero no desaparece en su totalidad; es hasta la siguiente etapa (adolescencia) cuando los libros omiten la ilustración como apoyo a la narrativa. Cada una de las etapas requiere de cuidados especiales en su producción y concepción como obra, pero de forma general la literatura infantil es vista con una misma óptica aunque con muy diversas opiniones de la gente relacionada con el medio literario. De entrada, la gente del medio literario considera que el público en general y algunos compañeros del medio en particular tienen la idea de que los escritores y la producción de esta literatura es muy sencilla, que no requiere de una elaboración cuidadosa y que su estructura es sumamente simple e incluso reclaman que se tiene cierto desdén a los que escriben literatura infantil. Pero la realidad es contraria en la experiencia de los autores de literatura infantil; para ellos se requiere de mayor precisión y si se reconoce que es corta la estructura del texto pero que eso representa un mayor reto, pues poder escribir en frases 51 cortas una idea, es más complejo y requiere de cierta sensibilidad, porque al niño es muy difícil de engañar. En esta literatura se debe cuidar la sintaxis para poder desarrollar oraciones simples, párrafos cortos e ideas grandes. Otra cosa en común en la que coinciden es en la inteligencia del niño, porque él sabe lo que esta leyendo y tiene gusto por ello, por tanto, debe haber una estructura lógica aunque el mundo que se le narre sea imaginario o fantástico. Todo lo anterior es la opinión individualizada de un sector literario, pero existe también la visión institucional sobre el tema. IBBY México tiene reglas claras sobre este ramo y aunque su clasificación podríamos decir que es un tanto relajada no es irresponsable y su papel no lo toman a la ligera. Para ellos la obra literaria digna de un niño es aquella que haga un buen uso de las palabras, que sea agradable al lector, que las palabras se conjunten para crear un buen texto dándole un buen ritmo que confluya en una estructura equilibrada en el suspenso, el sentido del humor y valores, que sea de ayuda para el aprendizaje del niño en sus diferentes etapas (“los más pequeños” “empiezan a leer, “Leen bien” y ”Grandes lectores”). Otra característica que busca IBBY México es la calidad de sus ilustraciones, que tengan analogía con el texto, estén cargadas de belleza y precisión para comunicar la idea del texto y transmitir un buen mensaje total. 52 En este capítulo nos dimos cuenta de que en el pequeño gran mundo de la literatura infantil existe una infinidad de opiniones y ópticas sobre el tema,
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