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Fractura-de-pene--serie-de-casos-Hospital-General-de-Mexico

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UNIVERSIDAD NACIONAL AUTONOMA 
DE MEXICO 
 
 
FACULTAD DE MEDICINA 
DIVISION DE ESTUDIOS DE POSTGRADO 
HOSPITAL GENERAL DE MEXICO 
 
 
FRACTURA DE PENE 
SERIE DE CASOS 
HOSPITAL GENERAL DE MEXICO 
 
 
T E S I S 
 
 
PARA OBTENER EL TITULO DE 
ESPECIALISTA EN UROLOGIA 
 
 
P R E S E N T A 
 
 
DR. HUGO GIOVANNI GAYTAN PAZ 
 
 
TUTOR DE TESIS: DR. ALEJANDRO ROSAS R. 
MÉDICO DE BASE UROLOGIA 
 
 
ESTUDIO REALIZADO CON EL APOYO DE LA SECRETARIA DE 
RELACIONES EXTERIORES DEL GOBIERNO DE MEXICO 
 
 
MEXICO D.F. 2006 
 
UNAM – Dirección General de Bibliotecas 
Tesis Digitales 
Restricciones de uso 
 
DERECHOS RESERVADOS © 
PROHIBIDA SU REPRODUCCIÓN TOTAL O PARCIAL 
 
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fines educativos e informativos y deberá citar la fuente donde la obtuvo 
mencionando el autor o autores. Cualquier uso distinto como el lucro, 
reproducción, edición o modificación, será perseguido y sancionado por el 
respectivo titular de los Derechos de Autor. 
 
 
 
 
 
 
 
 
Dr. Hugo Arturo Manzanilla García 
Profesor Titular del Curso Universitario de Especialización 
Jefe del Servicio de Urología. 
Hospital General de México 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
Dr. Alejandro Rosas Ramírez 
Tutor de Tesis 
Médico de Base Servicio de Urología. 
Hospital General de México 
 
 
 
 
 
Dr. José Francisco González Martínez 
Dirección de Enseñanza 
Hospital General de México 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
DEDICATORIA 
 
 
A DIOS: Por permitirme concluir esta etapa de mi vida. 
 
A MI PATRIA GUATEMALA: Orgullo de sentirme Guatemalteco 
 
A VERONICA: Gracias mi Manga por todo el apoyo incondicional que he recibido, 
superando momentos difíciles en todo este tiempo. Este triunfo también es tuyo. 
Gracias por tu vida. 
 
A MIS PADRES: Quienes con el sudor diario lograron que todos mis sueños se 
hicieran realidad. Gracias viejitos. 
 
A MIS HERMANAS: Ivonne y Andrea, gracias por el apoyo recibido durante todo 
este tiempo. 
 
AL HOSPITAL GENERAL DE MEXICO: Fuente del saber, en donde pude poner 
en práctica los conocimientos adquiridos. 
 
A MIS MAESTROS: Quienes transmitieron su vasta experiencia y sus consejos en 
los momentos necesarios. 
 
 A MIS COMPAÑEROS RESIDENTES: De quienes me llevo un gran recuerdo, por 
compartir momentos dulces y amargos durante la residencia. Especialmente a mis 
compañeros de promoción, gracias por su amistad. 
 
A LOS PACIENTES: Quienes permitieron realizar mi entrenamiento, y poner la 
confianza en mis manos para resolver sus padecimientos. 
 
A LA SECRETARIA DE RELACIONES EXTERIORES: Por el otorgamiento de 
Beca, sin la cuál no hubiera podido realizar mis estudios. 
 
 
INDICE 
 
 1. INTRODUCCIÓN 5 
 2. OBJETIVOS 6 
 3. JUSTIFICACIÓN 7 
 4. MATERIAL Y MÉTODOS 8 
 5. METODOLOGÍA 10 
 6. REVISIÓN BIBLIOGRÁFICA 
 Definición 11 
 Aspectos Anatomo-fisiológicos 13 
 Presentación Clínica 17 
 Métodos de Diagnóstico 18 
 Tratamiento conservador 21 
 Tratamiento quirúrgico 22 
 7. PRESENTACION DE CASOS 26 
 8. PRESENTACIÓN DE RESULTADOS 33 
 9. DISCUSIÓN DE RESULTADOS 35 
10. CONCLUSIONES 40 
11. BIBLIOGRAFÍA 41 
12. ANEXO (hoja de recolección de datos) 45 
 
 
 
 
INTRODUCCION 
 
La Fractura del pene, “faux pas du coit”, es la ruptura primaria de la túnica 
albugínea de uno o de ambos cuerpos cavernosos, que ocurre cuando el pene se 
encuentra erecto. Puede ocurrir durante el coito o en la manipulación del pene por 
masturbación, cuando la túnica albugínea se encuentra tensa y mucho más 
delgada que en el estado flácido. La ruptura puede extenderse y afectar el 
cuerpo esponjoso y la uretra. El primer reporte documentado de este tipo de 
fractura es al medico árabe, Abul Kasem, en Córdoba, hace aproximadamente 
1000 años. Este padecimiento ha sido sub-registrado y es considerado como una 
emergencia urológica. Esta alteración ha sido también observada en animales y 
muchos de los autores coinciden en que las fracturas de pene en humanos son 
raras. La necesidad de conocer esta entidad nosológica en lo que respecta a su 
prevalencia, sus características clínicas, su tratamiento que en ocasiones ha sido 
controversial, y las complicaciones tanto inmediatas como tardías, ha sido el 
motivo para realizar la siguiente investigación. 
 
 
 
 
 
 
 
 
OBJETIVOS 
 
 
Determinar la prevalencia de fracturas de pene en la población que acude al 
servicio de Urología del Hospital General de México. 
 
Reportar los casos que se presentaron durante el período de estudio. 
 
Describir las características clínicas de los pacientes con fractura de pene. 
 
Describir el tipo de tratamiento quirúrgico que se realizó a los pacientes con 
fractura de pene. 
 
Describir las complicaciones presentadas en los pacientes que presentaron 
fractura de pene. 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
JUSTIFICACION 
 
 
La fractura de pene es una entidad nosológica rara dentro de los padecimientos 
urológicos, sin embargo produce una frecuencia interesante de conocer. 
En el Hospital General de México no se conoce la prevalencia de esta patología 
en los últimos años. El análisis de las manifestaciones clínicas, el tratamiento 
quirúrgico realizado a los pacientes y su evolución nos permitirá conocer el manejo 
que se les ha dado a los pacientes con fractura de pene y corregir errores en el 
tratamiento de futuros pacientes con esta patología, teniendo como objetivo 
brindar la mejor opción terapéutica a los pacientes. 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
MATERIAL Y METODOS 
 
 
DISEÑO DE ESTUDIO: 
 
Se realizó un estudio de serie de casos haciendo la revisión de expedientes de los 
pacientes ingresados en el servicio de Urología del Hospital General de México 
con el diagnóstico de fractura de pene. 
 
POBLACION 
 
Pacientes que ingresaron al servicio de Urología del Hospital General de México y 
se les dio de alta con el diagnostico de Fractura de Pene en el período de enero 
de 1996 a diciembre de 2005. 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
CRITERIOS DE INCLUSION: 
 
Expedientes clínicos de pacientes a los cuales se les realizó un procedimiento 
quirúrgico para el tratamiento de fractura de pene, durante el período comprendido 
de enero de 1996 a diciembre de 2005. 
 
Expediente clínico completo. 
 
CRITERIOS DE EXCLUSION: 
 
Expedientes clínicos de pacientes a los cuales se les fue dados de baja en el 
servicio de archivo clínico de expedientes por ausencia a controles en consulta 
externa después de 5 años de su ultima cita. 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
METODOLOGIA 
 
Se procedió a revisar los expedientes clínicos de los pacientes que ingresaron al 
servicio de Urología durante el período comprendido de enero de 1996 a 
diciembre de 2005 con el diagnóstico de Fractura de Pene confirmado por los 
hallazgos clínicos y los estudios de imagen. 
Se procedió al llenado de la boleta de recolección de datos, en cada una de las 
variables siguientes: edad, causa de fractura, tiempo transcurrido desde el evento 
de la fractura hasta su consulta al servicio de urgencias, tiempo transcurrido desde 
su consulta al servicio de urgencias y la realización del tratamiento quirúrgico, el 
antecedente de cirugía previa en órganos genitales, el tipo de tratamiento, el tipo 
de incisión, la localización de la lesión, el compromiso de uno, o ambos cuerpos 
cavernosos o de la uretra, la longitud de la lesión, la dirección de la lesión, el tipo 
de reparación realizada, el tipo de material de sutura utilizado, la utilización de 
drenaje de penrose, el tiempo dehospitalización, y las complicaciones 
posquirúrgicas inmediatas y tardías. 
 
 
 
 
 
REVISION BIBLIOGRAFICA 
 
DEFINICION 
 
La fractura del pene es una condición relativamente poco frecuente (1,2) y una rara 
emergencia urológica (5). No se conoce su incidencia real. La incidencia de la 
fractura de pene varía considerablemente entre diversas áreas geográficas. Las 
series más grandes se divulgan de el Oriente Medio y de África del norte (11,12) 
donde la incidencia de esta lesión se parece ser más alta que en los Estados 
Unidos y en Europa. Se ha reportado como 1 de cada 175,000 admisiones 
hospitalarias (3) y en una revisión de 183 publicaciones, 1331 casos fueron 
reportados entre enero de 1935 y julio del 2001, mayormente en la región 
mediterránea. (4) 
 
La fractura del pene se define como la ruptura de la túnica albugínea de uno o de 
ambos cuerpos cavernosos, y en algunas ocasiones el cuerpo esponjoso y la 
uretra pueden estar involucrados, aunque el daño uretral no es frecuente (4,6,14). 
 
El daño típicamente ocurre cuando el pene se encuentra en estado de erección 
que es cuando la túnica albugínea se encuentra tensa y mucho más delgada que 
en el estado flácido (9) disminuyendo de 2 mm. a 0.25 mm. de espesor, 
acompañada de un descenso paralelo de la elasticidad y un incremento de la 
presión intracavernosa, siendo más susceptible a una rasgadura traumática 
(13,15,17) El mecanismo de fractura más frecuentemente reportado en un 58 % es 
 
 
 
 
debido a una abrupta flexión del pene erecto durante el coito en especial por 
posiciones forzadas como la del “jinete” donde la mujer se encuentra sobre el 
hombre en posición semi-sentada o hincada. El mecanismo se produce cuando el 
pene se sale accidentalmente de la vagina y la mujer ejerce su peso corporal 
hacia abajo sobre el pene, produciendo el traumatismo, y en otras condiciones 
donde se produce la penetración forzada con trauma sobre el pubis o el periné de 
la pareja sexual (13,17,19). 
 
También se ha observado durante eventos de masturbación agresiva en donde 
ocurre una manipulación o flexión excesiva del pene para lograr su detumescencia 
(9). Otras causas se describen como la manipulación inconsciente del pene 
durante el sueño, al darse vuelta sobre la cama o a caídas desde la cama (13,19). 
 
 
 
 
 
ASPECTOS ANATOMOFISIOLOGICOS 
El pene está conformado por 3 cuerpos eréctiles, dos cuerpos cavernosos y un 
cuerpo esponjoso que termina en el glande y rodea la uretra. (13) 
Los cuerpos cavernosos son estructuras formadas por tejido esponjoso reticular 
con espacios revestidos de endotelio y rodeados por tejido muscular liso. Estos 
cuerpos están rodeados por una doble capa de tejido conectivo fibroso denso que 
recibe el nombre de túnica albugínea o fascia de Buck con una capa profunda de 
fibras en dirección circular y una capa superficial orientada en dirección 
longitudinal, con un espesor entre 1 a 1.7 mm. y que en la unión del cuerpo 
cavernoso con el esponjoso se hace mucho más delgado facilitándose una 
perforación en el horario de 5 a 7 según las manecillas del reloj (13). 
 
Al acercarse al periné los cuerpos cavernosos se separan para formar sus raíces 
que se engrosan y se fijan a la rama del pubis descendiendo hasta la tuberosidad 
isquiática. El cuerpo esponjoso ventral rodea la uretra y en su porción distal forma 
el glande y proximalmente termina rodeado por el músculo bulboesponjoso a nivel 
del espacio perineal superficial (4,13). 
Estas tres estructuras elongadas de tejido eréctil son capaces de un aumento 
considerable de tamaño al ingurgitarse de sangre durante la erección pasando de 
una forma cilíndrica fláccida a una forma prismática triangular de gran 
tumescencia y rigidez. 
 
Tiene allí una gran importancia como factor mecánico de la erección la propiedad 
de firmeza y a la vez elasticidad que tenga la fascia de buck pues de su integridad 
dependerá que la erección se obtenga mecánicamente con igual fuerza de tensión 
en todos sus segmentos y sin deformidad y mucho menos sin perdida del flujo 
sanguíneo que llega aceleradamente al pene (10,13,20). 
 
 
Durante la erección existe un mecanismo neurofisiológico activo que es capaz de 
dirigir el flujo arterial pudendo interno hasta los cuerpos eréctiles interviniendo 
diferentes niveles neurológicos desde la corteza cerebral donde estímulos 
auditivos, visuales u olfatorios procesados en la región preóptica del hipotálamo, 
fascículo medio, sustancia negra mesencefálica que envían la orden a través de 
los cordones medulares laterales sacros hasta el pene a través del nervio pudendo 
motor y el nervio pélvico parasimpático sacro S2 S4 motor. (4,13) 
 
La respuesta eréctil es periféricamente mediada por el nervio cavernoso el cual 
contiene fibras simpáticas toracolumbares y parasimpáticas sacras siendo bien 
conocido que el simpático toracolumbar es implicado en la detumescencia y el 
parasimpático en la tumescencia (13). 
 
Desde el punto de vista hormonal no ha sido totalmente aclarado el papel de los 
andrógenos en la fisiología de la erección puesto que los niños a pesar de las 
concentraciones bajas de la hormona presentan erecciones (10). 
 
Todos los estudios llevan a considerar que el neurotransmisor final sea un 
polipéptido secretado en los cuerpos eréctiles uretra y vasos sanguíneos del pene 
llamado VIP y probablemente asociado a la presencia de otro vaso dilatador muy 
importante llamado oxido nitroso en el que están fundamentados los más actuales 
tratamientos farmacológicos para evitar su degradación mediante bloqueo 
enzimático y ofrecer grandes esperanzas en el manejo médico del paciente con 
disfunción eréctil (10,20). 
 
La respuesta final al estímulo sexual se traducirá en un aumento de 5 veces la 
velocidad sistólica de flujo arterial pudendo desde 10 ml. por minuto a 30 – 50 ml. 
por minuto y una rigidez peneana uniforme de hasta 100 mm. de Hg. y que gracias 
a la firmeza y elasticidad de la fascia de Buck darán la capacidad suficiente para 
penetrar y mantener la erección hasta obtener el orgasmo (13). 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
PRESENTACION CLINICA 
 
La historia y presentación clínica de estos pacientes son clásicas para hacer su 
diagnóstico. Los pacientes característicamente se encuentran en actividad sexual 
intensa e incluso en estado de embriaguez, cuando se presenta el traumatismo 
peneano, acompañado de la audición de un sonido agudo (chasquido) 
característico de la fractura, seguido por una rápida detumescencia peneana, dolor 
inmediato, deformidad lateral del pene hacia el lado contrario de la fractura, y 
aparición de equimosis severa debido al hematoma que se produce (13, 16). 
 
Debido a que una buena parte de la fascia de buck permanece intacta el 
hematoma se limitara exclusivamente al pene, pero cuando existe una lesión 
concomitante a nivel de esta el hematoma puede extenderse hacia la región 
escrotal, perineal o hipogástrica quedando limitado por la fascia de Colles (14). El 
dolor es un síntoma de intensidad variable en cada uno de los pacientes. 
La presencia o historia de uretrorragia, sangre en el meato uretral, hematuria 
microscópica y las dificultades para la micción, son signos altamente sugestivos 
de lesión uretral asociada (6,9). 
 
 
 
 
METODOS DE DIAGNOSTICO: 
 
El uso de técnicas de imagen para la evaluación de una fractura de pene es 
controversial. Así mismo, muchos autores aseguran que el diagnóstico de fractura 
de pene puede realizarse únicamente con la historia del paciente y los hallazgos 
clínicos. En los casos dudosos se puede utilizar alguna prueba de imagen como 
cavernosografía, ecografía o resonancia magnética. La uretrocistografía 
retrógrada es una prueba especialmente útil, que debe realizarse en aquellos 
casos con sospecha de lesión uretral (23,24).La cavernosografía es una técnica invasiva, que no es posible realizar de forma 
urgente en muchos de los hospitales, y que presenta una serie de complicaciones 
potenciales, como fibrosis cavernosa, cavernositis e infección (23,28). 
 
La ecografía es una prueba no invasiva, que permite visualizar el hematoma, y en 
ocasiones la fractura cavernosa, observando en este último caso un área 
hipoecoica que altera la continuidad de la túnica albugínea (24). Sin embargo, dada 
la escasa incidencia de la fractura de pene, la adecuada interpretación de esta 
prueba sólo está al alcance de ecografistas adiestrados, y tiene el inconveniente 
de que no permite detectar pequeñas lesiones. Por ambos motivos, existe la 
posibilidad de pruebas falsamente negativas (15,17,20). 
 
La Resonancia Magnética ofrece una excelente visualización de la porción 
pendular del pene, y en particular de la túnica albugínea, constituyendo la técnica 
más fiable para el diagnóstico por la imagen de la fractura de pene (21,22). Sin 
embargo se trata de una prueba de elevado costo, de la que no disponen todos los 
servicios de urgencias. 
 
 
 
La uretrocistoscopía flexible a pesar de ser un procedimiento invasivo ha permitido 
demostrar lesión uretral asociada y lograr una cateterización uretral bajo visión 
directa (5). 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
TRATAMIENTO 
 
 
CONSERVADOR: 
Hasta hace unos 20 años se consideraba la terapia conservadora mediante 
vendaje compresivo, hielo local, antibióticos, cateterismo uretral y fármacos 
sedantes como el diazepam, nitrato de amilo o el dietilestilbestrol para el control 
de las erecciones. Igualmente se utilizaron las enzimas proteolíticas como la 
estreptoquinasa, para intentar evitar el desarrollo de cicatrices hipertróficas (15,16), 
sin embargo las complicaciones tardías al organizarse el hematoma y la mala 
cicatrización de la túnica han provocado fibrosis severa, curvatura peneana, dolor 
al momento de la erección, y pérdida de la tumescencia por alteraciones 
hemodinámicas, con algún grado de disfunción eréctil (9,19,23). 
 
 
 
 
QUIRURGICO: 
En la actualidad se aboga por un tratamiento quirúrgico temprano, que consiste en 
la evacuación del hematoma peneano y la reparación de la lesión en la albugínea, 
así como de las posibles lesiones asociadas (15,16,23,24). El abordaje quirúrgico 
más ampliamente utilizado es la incisión circunferencial subcoronal utilizada 
también para la circuncisión (19), con la respectiva denudación del pene hasta su 
base, cuidando el paquete neurovascular dorsal hasta localizar la perforación en la 
túnica albugínea que generalmente ocurre en un solo cuerpo eréctil y de manera 
próximal (5,23,27,28) 
 
Con esta incisión se logra una adecuada evacuación del hematoma así como la 
reparación de la lesión, permitiendo además la exploración de ambos cuerpos 
cavernosos y de la uretra (5). 
 
Otra alternativa quirúrgica es la de realizar una incisión corporal longitudinal, sobre 
el área donde se encuentre el hematoma. Esta incisión esta reservada 
exclusivamente para aquellas lesiones que se presentan con hematomas de 
pequeño tamaño, ya que tiene la desventaja de dificultar el drenaje del hematoma 
así como una inadecuada exposición de los cuerpos cavernosos y de la uretra 
(15,16). 
 
 
Y por último el abordaje que describe la realización de una incisión inguino-
escrotal, la cual presenta la ventaja de realizarse sobre un tejido no edematoso, 
con una mejor visualización del área lesionada (25, 26). 
 
La sutura de la túnica albugínea generalmente se realiza mediante sutura 
discontinua, sin embargo también se puede realizar una sutura continua en 
surgete, la cual permite una mayor hermeticidad de la lesión (28). 
Los materiales utilizados para la reparación de la lesión en la albugínea pueden 
ser absorbibles como acido poliglicólico (dexón o vicryl 3-0 o 4-0) o no absorbibles 
(prolene 3-0 o 4-0) y para el afrontamiento de la incisión a nivel de la piel con 
puntos simples de material absorbible (catgut 3-0 o 4-0). La desventaja de utilizar 
material no absorbible es la mayor incidencia de dolor posquirúrgico al momento 
de la erección (16,17,24). 
 
 
 La utilización de un vendaje compresivo por 24 a 48 horas evitará la formación de 
colecciones post quirúrgicas, por lo tanto el uso de los drenajes es controversial, 
ya que pueden ser vías de entrada para infección (16, 17). 
La colocación de sonda foley es igualmente controversial, su colocación facilita la 
ferulización tanto del pene como la uretra, y esta indicada en todos los casos 
donde se presenta lesión uretral asociada y reparada por medio de uretroplastía, 
sin embargo su colocación en ausencia de lesión uretral confirmada es 
potencialmente riesgosa, ya que puede transformar una lesión uretral simple en 
una lesión uretral compleja (12,17). 
Se recomienda siempre la circuncisión de la piel distal edematizada y equimótica 
para prevenir su necrosis (24). 
 
En general no se recomienda el empleo de antibióticos de forma rutinaria, 
únicamente debe de utilizarse en los pacientes que han presentado lesión uretral 
asociada, en aquellos que presentan grandes hematomas o que acuden a recibir 
atención médica en forma tardía (5,8,20). 
 
La presencia de erecciones en el postoperatorio no afecta adversamente la 
evolución de la cirugía, por lo que no es indispensable administrar medicamentos 
para inhibirla. En caso de que éstas fueran dolorosas, es suficiente la aplicación 
de sedantes y/o analgésicos comunes (4,11) y se mantiene sin actividad sexual por 
espacio mínimo de 6 semanas (24). 
 La ventaja uniformemente reconocida del tratamiento quirúrgico precoz es la 
menor incidencia de secuelas urológicas y sexuales. La mayoría de los autores 
coinciden en observar una completa recuperación sexual, con erecciones rígidas e 
indoloras, y poca o ninguna curvatura peneana (14,16,20,27). 
 Los trastornos de la función sexual observados en pacientes sometidos a 
reparación quirúrgica de fractura de pene, afectan casi exclusivamente a aquellos 
pacientes que demoraron la solicitud de atención médica especializada (14,16,24). 
PRESENTACION DE CASOS 
 
 
CASO 1 
Paciente masculino 25 años, en unión libre, vendedor, sin antecedentes de 
importancia. Acude al servicio de urgencias con historia de 12 horas previas, al 
estar en actividad sexual con su pareja, realizan movimiento brusco, sintiendo 
dolor en el pene de de forma súbita habiendo escuchado chasquido, con posterior 
detumescencia completa del pene y presentando hematoma a nivel del pene. Al 
examen físico presenta pene con edema, con prepucio retráctil, con evidente 
hematoma a nivel de la base del pene, con dolor a la palpación y curvatura 
anormal hacia la izquierda. 4 horas después de su ingreso es llevado a quirófano 
realizando lo siguiente: incisión subcoronal, se encuentra lesión transversal en 
tercio proximal de cuerpo cavernoso izquierdo de 0.8 cm. de longitud. Se realiza 
evacuación del hematoma, se realiza reparación de la lesión con sutura 
discontinua con vicryl 3-0, se coloca drenaje de penrose y sonda foley. Evolución 
satisfactoria. Tiempo de estancia: 4 días. Seguimiento: sin evidencia de disfunción 
eréctil, erección dolorosa ni curvaturas. 
 
 
CASO 2 
Paciente masculino 28 años, casado, comerciante, sin antecedentes de 
importancia. Acude al servicio de urgencias con historia de 20 horas previas al 
mantener relaciones sexuales, escucha chasquido a nivel del pene, con presencia 
de dolor y formación de hematoma en el cuerpo del pene. Al examen físico 
presenta pene con hematoma a nivel del cuerpo del pene y prepucio, sin afección 
del glande, con aumento importante en su volumen, sin presencia de dolor. Se 
realiza cavernosografía no evidenciando lesióna nivel de los cuerpos cavernosos 
por lo que se decide tratamiento conservador. Evolución satisfactoria. Tres meses 
posteriores al trauma se palpa placa indurada a nivel de la cara anterior del tercio 
medio del lado derecho del pene. Tiempo de hospitalización: 4 días. 
Seguimiento: sin evidencia de disfunción eréctil, refiere leve curvatura hacia la 
izquierda y erección dolorosa. 
 
 
CASO 3 
Paciente masculino 42 años, casado, albañil, sin antecedentes de importancia. 
Acude al servicio de urgencias con historia de 3 horas previas sufre caída 
accidental desde un primer piso , cayendo sobre una piedra y lastimando sus 
genitales, presenta dolor intenso, aumento de volumen del pene y cambios de 
coloración. Al examen físico presenta pene con aumento de tamaño importante 
con deformidad a nivel del cuerpo del pene, con coloración violácea y edema 
importante. Se realiza cavernosografía evidenciando fuga a nivel del cuerpo 
cavernoso derecho a nivel del 1/3 medio. 2 horas después de su ingreso es 
llevado a quirófano realizando lo siguiente: incisión subcoronal, se encuentra 
lesión transversal en tercio medio de cuerpo cavernoso derecho de 2 cm. de 
longitud. Se realiza evacuación del hematoma, se realiza reparación de la lesión 
con sutura discontinua con vicryl 4-0, se coloca drenaje de penrose y sonda foley. 
Evolución satisfactoria. Tiempo de estancia: 4 días. Seguimiento: refiere 
disfunción eréctil ocasional, no hay dolor a la erección ni curvaturas del pene. 
 
 
CASO 4 
Paciente masculino 31 años, soltero, plomero, antecedente de fractura de tibia 2 
años previos manejado quirúrgicamente, toxicomanías positivas refiriendo uso de 
marihuana y cocaína. Acude al servicio de urgencias con historia de hace 2 días 
haber sufrido traumatismo directo en los genitales presentando dolor y aumento 
importante del tamaño del pene, acude con facultativo quien indica únicamente 
medidas locales. Refiere que al notar aumento paulatino del tamaño del pene 
acude a esta institución. Al examen físico presenta pene con aumento importante 
de tamaño con evidente hematoma y edema a nivel del glande y del prepucio. 6 
horas después de su ingreso es llevado a quirófano realizando lo siguiente: 
incisión subcoronal, se encuentra lesión transversal en tercio medio de cuerpo 
cavernoso izquierdo de 1 cm. de longitud. Se realiza evacuación del hematoma, 
se realiza reparación de la lesión con sutura discontinua con vicryl 3-0, se coloca 
drenaje de penrose y sonda foley. Evolución inadecuada, paciente presenta 
infección y dehiscencia a nivel de la cara dorsal del prepucio, con posterior área 
de necrosis de aprox. 2 cm. de diámetro, se realizan curaciones y posteriormente 
se realiza injerto de espesor parcial de piel. Al presentar mejoría se decide su alta. 
Tiempo de estancia: 10 días. Seguimiento: paciente presento cuadro de 
disfunción eréctil, y curvatura peneana. 
 
CASO 5 
Paciente masculino 20 años, soltero, estudiante, sin antecedentes de importancia. 
Acude al servicio de urgencias con historia de 5 horas previo a su ingreso, sufrió 
caída de su propia altura, con pene tumescente, sufriendo traumatismo directo en 
el pene, presentando dolor intenso, aumento del tamaño del pene y cambios de 
coloración violácea. Al examen físico presenta pene flácido, doloroso, con 
importante aumento de volumen, con cambios de coloración, y evidente 
hematoma. 7 horas después de su ingreso es llevado a quirófano realizando lo 
siguiente: incisión subcoronal, se encuentra lesión transversal en tercio proximal 
de cuerpo cavernoso derecho de 1.5 cm. de longitud. Se realiza evacuación del 
hematoma, se realiza reparación de la lesión con sutura discontinua con vicryl 3-0, 
se coloca drenaje de penrose y sonda foley. Evolución satisfactoria. Tiempo de 
estancia: 3 días. Seguimiento: sin evidencia de disfunción eréctil, ni curvatura ni 
erección dolorosa. 
 
 
CASO 6 
Paciente masculino 27 años, soltero, comerciante, con antecedente de 3 cirugías 
previas en el pene, plastias por hipospadia. Acude al servicio de urgencias con 
historia de 3 horas previas a su ingreso, al estar en actividad sexual con su pareja, 
presenta súbitamente dolor en el pene, con sensación de rotura, con aumento 
importante del tamaño del pene y con evidente inflamación y cambio de 
coloración. Al examen físico presenta pene con edema, con cambios de 
coloración violácea, con hipospadia de meato a nivel peneano y evidente 
hematoma a nivel de la base del pene, con dolor a la palpación y curvatura 
anormal hacia la región ventral. 5 horas después de su ingreso es llevado a 
quirófano realizando lo siguiente: incisión subcoronal, se encuentra lesión 
transversal en tercio proximal en ambos cuerpos cavernosos de 1 cm. cada uno 
por arriba de la incisión de la plastia previa, sin involucro de la uretra. Se realiza 
evacuación del hematoma, se realiza reparación de la lesión con sutura 
discontinua con prolene 4-0, se coloca drenaje de penrose y sonda foley. 
Evolución satisfactoria. Tiempo de estancia: 5 días. Seguimiento: no hay 
disfunción, si hay dolor a la erección, y curvatura peneana. 
 
 
CASO 7 
Paciente masculino 37 años, casado, mecánico, con único antecedente de 
amigdalectomía a la edad de 6 años. Acude al servicio de urgencias con historia 
de 9 horas previas a su ingreso, al estar realizando auto manipulación sexual, 
presenta dolor súbito en el pene, con deformación del mismo hacia la cara dorsal 
del pene y aumento paulatino en el tamaño del pene, con posterior detumescencia 
del pene. Al examen físico presenta pene con edema, con evidente hematoma a 
nivel de la base del pene, con dolor a la palpación y curvatura anormal hacia la 
región dorsal. 6 horas después de su ingreso es llevado a quirófano realizando lo 
siguiente: incisión subcoronal, se encuentra lesión transversal en tercio proximal 
de cuerpo cavernoso derecho de 1.5 cm. de longitud. Se realiza evacuación del 
hematoma, se realiza reparación de la lesión con sutura discontinua con prolene 
3-0, se coloca drenaje de penrose y sonda foley. Evolución satisfactoria. Tiempo 
de estancia: 3 días. Seguimiento: refiere únicamente dolor a la erección, no hay 
curvatura ni disfunción eréctil. 
 
 
CASO 8 
Paciente masculino 40 años, soltero, desempleado, con antecedente de Corea de 
Huntington sin tratamiento. Acude al servicio de urgencias referido de otra unidad 
asistencial con historia de 24 horas previo a su ingreso accidentalmente se 
provocó traumatismo a nivel del pene con objeto contundente, presentando 
aumento importante del tamaño del pene, deformidad del mismo y dolor intenso. 
Al examen físico presenta pene con edema, con prepucio no retráctil, con evidente 
hematoma a nivel del cuerpo del pene, con dolor a la palpación y curvatura 
anormal hacia la región ventral. 20 horas después de su ingreso, paciente es 
llevado a quirófano realizando lo siguiente: incisión subcoronal, se encuentra 
lesión transversal en tercio distal de ambos cuerpos cavernosos y uretra de aprox. 
3 cm. de longitud. Se realiza evacuación del hematoma, se realiza reparación de 
la lesión con sutura discontinua con vicryl 3-0, no se coloca drenaje de penrose y 
si se coloca sonda foley. Se procedió a realizar cistostomía por punción colocando 
sonda foley suprapúbica. Evolución inadecuada, paciente presenta infección a 
nivel del prepucio con salida de material purulento, dehiscencia de la herida 
quirúrgica y exposición de los cuerpos y de la STU, se realizan curaciones hasta 
su mejoría. Tiempo de estancia: 10 días. Seguimiento: refiere disfunción eréctil y 
curvatura peneana, no hay dolor. 
 
CASO 9 
Paciente masculino 30 años, casado, ayudante de albañil, sin antecedentes de 
importancia. Acude al servicio de urgencias con historia de 4 horas previas a su 
ingreso, al encontrarse parado en una silla a una altura deaprox. 1 metro, pierde 
el equilibrio y cae a horcajadas golpeándose el pene, el cual lo tenia en estado de 
erección, con posterior detumescencia del mismo presentando hematoma y dolor 
intenso a nivel del pene, con desviación hacia la izquierda. Al examen físico 
presenta pene con edema, con prepucio retráctil, con evidente hematoma a nivel 
del cuerpo del pene, con dolor a la palpación y curvatura anormal hacia la 
izquierda. 10 horas después de su ingreso es llevado a quirófano realizando lo 
siguiente: incisión subcoronal, se encuentra lesión transversal en tercio medio de 
cuerpo cavernoso derecho de 1 cm. de longitud. Se realiza evacuación del 
hematoma, se realiza reparación de la lesión con sutura discontinua con vicryl 3-0, 
se coloca drenaje de penrose y sonda foley. Evolución satisfactoria. Tiempo de 
estancia: 4 días. Seguimiento: sin evidencia de disfunción eréctil, sin curvatura 
peneana, ni dolor a la erección. 
 
 
 
 
 
 
 
 
PRESENTACION DE RESULTADOS 
GRAFICAS 
 
CUADRO NO. 1 
PRESENTACION Y CARACTERÍSTICAS DE LOS PACIENTES 
 
 
 
Caso Edad Causa de Fx. Tiempo en que acudió Tiempo entre urgencias Qx. previas 
 a urgencias y la cirugía en pene 
 
 
1 25 Coito 12 horas 4 horas no 
2 28 Coito 20 horas no se realiza Tx. Qx. no 
3 42 Trauma 3 horas 2 horas no 
4 31 Trauma 2 días 6 horas no 
5 20 Trauma 5 horas 7 horas no 
6 27 Coito 3 horas 5 horas si 
7 37 Masturbación 9 horas 6 horas no 
8 40 Trauma 24 horas 20 horas no 
9 30 Trauma 4 horas 10 horas no 
 
 
 
CUADRO NO. 2 
HALLAZGOS QUIRURGICOS 
 
 
 
Caso Incisión Localización Extensión Longitud Dirección 
 
 
1 Subcoronal tercio proximal izquierdo 0.8 cm. transversal 
2 no aplica no aplica no aplica no aplica no aplica 
3 Subcoronal tercio medio derecho 2 cm. transversal 
4 Subcoronal tercio medio izquierdo 1 cm. transversal 
5 Subcoronal tercio proximal derecho 1.5 transversal 
6 Subcoronal tercio proximal ambos 1 cm. transversal 
7 Subcoronal tercio proximal derecho 1.5 cm. transversal 
8 Subcoronal tercio distal ambos 3 cm. transversal 
9 Subcoronal tercio medio derecho 1 cm. transversal 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
CUADRO NO. 3 
TRATAMIENTO REALIZADO 
 
 
 
Caso Reparación Material Colocación Colocación Estancia 
 Drenaje 
Sonda 
Transuretral (días) 
 
 
1 Discontinua vicryl 3-0 si si 4 
2 no aplica no aplica no aplica no aplica 4 
3 Discontinua vicryl 4-0 si si 4 
4 Discontinua vicryl 3-0 si si 10 
5 Discontinua vicryl 3-0 si si 3 
6 Discontinua prolene 4-0 si si 5 
7 Discontinua prolene 3-0 si si 3 
8 Discontinua vicryl 3-0 no si 10 
9 Discontinua vicryl 3-0 si si 4 
 
 
 
 
CUADRO NO. 4 
COMPLICACIONES 
 
 
 INMEDIATAS TARDIAS 
Caso 
 
 Infección Dehiscencia Disf. Eréctil Curvaturas Dolor 
 
 
1 No no no no no 
2 No no no si si 
3 No no si no no 
4 Si si si si no 
5 No no no no no 
6 No no no si si 
7 No no no no si 
8 Si si si si no 
9 No no no no no 
 
DISCUSION DE RESULTADOS 
 
Durante la presente investigación se pudieron obtener 11 pacientes con el 
diagnóstico de fractura de pene, sin embargo únicamente se presentan los 9 
casos que cumplieron con los criterios de inclusión. 
 
Con los datos obtenidos se determinó que la fractura de pene se presentó en 
pacientes cuyas edades estuvieron comprendidas entre los 20 y los 42 años, 
rango donde hay mayor actividad sexual, aunque es de mencionar que 
únicamente 3 refirieron haberse encontrado en actividad sexual cuando sufrieron 
la fractura y 1 caso refirió haber estado masturbándose cuando ocurrió el evento. 
Los 5 casos restantes refirieron haber sufrido cualquier tipo de traumatismo que 
ocasionó la fractura. 
 
Así mismo 8 de los 9 pacientes acudieron al área de urgencias en las primeras 24 
horas luego de la fractura, solo 1 caso se presentó a las 48 horas de haber 
ocurrido el evento y se debió a que fue atendido previamente por facultativo en lo 
particular. Lo que evidentemente nos comprueba que los pacientes al haber 
presentado los hallazgos clínicos propios de la fractura del pene, consideraron que 
se trataba de una urgencia por lo que acudieron a solicitar atención médica. 
 
Luego de haberse realizado el diagnóstico de fractura de pene, de los 9 casos 
presentados solo 1 fue manejado conservadoramente, en este caso al paciente se 
le realizó una cavernosografía no identificando la lesión de los cuerpos cavernosos 
por lo que se determinó darle tratamiento conservador. Los 8 restantes casos 
fueron tratados quirúrgicamente y de estos, 7 pacientes fueron llevados a 
quirófano en las primeras 12 horas luego de haberse presentado en el área de 
urgencias y solo uno fue intervenido 20 horas luego de su valoración inicial, debido 
a aspectos administrativos. Cabe mencionar que en la literatura revisada los 
pacientes quienes fueron intervenidos en las primeras 12 horas luego de la 
fractura, presentaron una mejor evolución y las complicaciones a largo plazo 
fueron observadas en un menor porcentaje. 
 
Con respecto a la presencia o ausencia de cirugías previas en el pene, de los 9 
pacientes solo 1 tenía el antecedente de haberse sometido a 3 cirugías previas 
debido al diagnóstico de hipospadias, tales cirugías consistieron en plastias de 
uretra, al revisar el expediente se logró determinar mediante el dictado quirúrgico 
que la lesión de fractura de pene se presentó en el área de plastia previa, 
afectando ambos cuerpos cavernosos sin involucro de la uretra. 
 
Con respecto a los hallazgos quirúrgicos encontrados, en los 8 pacientes 
intervenidos se realizó la incisión circunferencial subcoronal, la cual comparada 
con la literatura revisada es la incisión más adecuada para el abordaje de este 
padecimiento. De los 8 pacientes 4 presentaron fracturas en el tercio proximal de 
los cuerpos cavernosos, 3 en el tercio medio y solo en 1 caso se presentó la 
lesión en el tercio distal del cuerpo cavernoso. Las lesiones fueron más 
frecuentes en el cuerpo cavernoso derecho 4 pacientes, 2 presentaron la lesión en 
el cuerpo cavernoso izquierdo y 2 pacientes presentaron la lesión en ambos 
cuerpos cavernosos. En los pacientes que presentaron la lesión en ambos 
cuerpos cavernosos solo en 1 hubo involucro de la uretra. 
 
En todos los casos las lesiones presentaron una dirección transversal lo cual se 
compara con la literatura, coincidiendo que esta dirección es la más frecuente. La 
longitud de las lesiones tuvo un rango entre los 0.8 y 3 cm. 
 
La reparación de las lesiones fue realizada con sutura discontinua, en ninguno de 
los casos se utilizó sutura continua, cabe mencionar que en la literatura revisada 
se menciona que la sutura continua puede proporcionar una mayor hermeticidad al 
cuerpo cavernoso, sugiriendo la realización de la misma, sin embargo muchas de 
las series reportadas hacen mención de la reparación con sutura discontinua, en 
las cuales se han obtenido resultados igualmente favorables. 
El material utilizado para la reparación de las lesiones en 6 de los 8 casos se 
utilizó material absorbible ( vicryl = acido poliglicólico) en sus presentaciones de 3-
0 y 4-0, y solamente en 2 casos se utilizó material no absorbible (prolene = 
polipropileno). Algunos autores aconsejan que la reparación de los cuerpos 
cavernosos deba de realizarse con material absorbible que con material no 
absorbible ya que los pacientes pueden presentar mayor incidencia de dolor a la 
erección. 
En todos los casos se colocó a los pacientes sonda transuretral la cual fue retirada 
en los días subsecuentes, y solo en 1 de los 8 casos no se dejó drenaje de 
penrose. En los restantes 7 casos se utilizó drenajede penrose, la literatura es 
controversial con respecto a la utilización o no del drenaje de penrose, unos 
autores refieren que en todos los casos debe de dejarse un drenaje de penrose 
debido a la lisis o desintegración del hematoma en los tejidos blandos que se 
forma luego de la ruptura del cuerpo cavernoso. Otros autores refieren que no 
debe de utilizarse drenaje del penrose por la mayor incidencia de infección de 
tejidos blandos que pueda ocurrir, siendo necesaria únicamente la utilización del 
vendaje compresivo. 
 
La estancia hospitalaria duró entre 3 y 5 días en 7 pacientes y en los restantes 2 
la estancia hospitalaria se prolongó hasta 10 días por las complicaciones 
presentadas que se discutirán más adelante. Los estudios reportados coinciden 
en que la estancia hospitalaria de estos pacientes sin presentar complicaciones es 
de 48 y 72 horas luego de la realización de la intervención quirúrgica. 
 
De los 9 casos presentados, en solo 2 se presentaron complicaciones 
posquirúrgicas inmediatas, que consistieron en infección a nivel de tejidos blandos 
del pene así como dehiscencia de la herida quirúrgica, todas estas complicaciones 
pueden deberse a que ambos pacientes acudieron al área de urgencias luego de 
24 horas de haber ocurrido la fractura del pene, aumentando la probabilidad de 
procesos infecciosos sobre agregados. 
 
De las complicaciones tardías luego de la reparación de la fractura de pene, 
únicamente 3 pacientes presentaron algún grado de Disfunción eréctil, los demás 
pacientes refieren no tener problemas de disfunción. Probablemente las edades 
de cada uno de los pacientes asociado al evento de la fractura del pene 
aumentaron la probabilidad de que ocurriera disfunción eréctil en algún grado. 
Igualmente solo 4 pacientes de los 9 que presentaron fractura de pene 
presentaron algún grado de curvatura peneana que se presentó después de la 
reparación, estos 4 casos tienen las siguientes características, 2 de ellos 
presentaron cuadros de infección y dehiscencia de la herida quirúrgica en el post 
operatorio inmediato, 1 de ellos fue manejado conservadoramente y el otro tenía el 
antecedente de 3 cirugías previas por plastia de uretra, lugar en donde se 
presentó la fractura al momento de su evaluación. 
Igualmente 3 de los 9 pacientes presentaron dolor al tener erecciones luego de de 
la reparación quirúrgica. Llama la atención que estos 3 pacientes 2 se realizó la 
plastia del cuerpo cavernoso con material no absorbible, y no presentaron 
complicaciones en su post operatorio inmediato, lo cual coincide con la literatura 
consultada, que el uso de material no absorbible puede tener como 
complicaciones a largo plazo, dolor en la erección. 
Y el último caso, fue el manejado conservadoramente, en el cual se reportó la 
evidencia de una placa indurada a nivel del cuerpo cavernoso, lo cual 
consideramos que es la causa del dolor. 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
CONCLUSIONES 
La fractura de pene continua siendo una patología rara, sin embargo es una 
verdadera emergencia quirúrgica la cual requiere una atención médica inmediata 
para evitar posibles complicaciones. 
El mejor acceso quirúrgico se realiza mediante una incisión circunferencial 
subcoronal, para drenar el hematoma así como la reparación de la túnica 
albugínea, la cual puede realizarse con sutura continua o discontinua, utilizando 
siempre material absorbible, ya que la sutura no absorbible esta asociada a 
presencia de dolor a la erección. 
Aunque el uso de drenaje es controversial el tratamiento realizado en los 
pacientes atendidos en nuestro hospital, no presentó complicación alguna por el 
uso del mismo, por lo cual se recomienda su utilización. 
Las complicaciones observadas mayormente se presentaron en pacientes quienes 
recibieron un tratamiento quirúrgico tardío. 
Solo 1 tercio de los pacientes presentaron complicaciones tardías como disfunción 
eréctil, dolor postquirúrgico y curvaturas peneanas. 
El tratamiento sugerido en la literatura revisada concuerda en brindar una 
exploración quirúrgica precoz, y realizar la reparación de la lesión a nivel de la 
túnica albugínea. 
 
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 1 
HOJA DE RECOLECCION DE DATOS 
 FRACTURAS DE PENE 
 
Nombre: ____________________________________ Edad: ______________ 
 
No. Expediente: __________________________________________________ 
 
 
Causa de fractura: 
 
Coito: _________ Masturbación: _________Trauma contuso: ____________ 
 
Tiempo transcurrido desde el evento hasta su valoración en urgencias: 
__________ horas. 
 
Tiempo transcurrido desde su valoración en urgencias hasta su resolución 
quirúrgica: __________ horas 
 
Cirugías previas en órganos genitales: Si _______ No _______ 
 
Tratamiento quirúrgico: 
 
Tipo de incisión: Subcoronal: ____________ Longitudinal ____________ 
 
Localización de la lesión: 
 
Tercio proximal ________ Tercio Medio __________ Tercio distal __________ 
 
Cuerpo cavernoso: derecho _______ izquierdo _________ ambos _________ 
 
ambos y uretra ________ 
 
Longitud de la lesión: _____ cm. 
 
Dirección de la lesión: Transversal ___________ Longitudinal __________ 
 
Tipo de reparación: Sutura continua _________ Sutura discontinua _________ 
 
Tipo de material utilizado: Prolene _________ Vicryl _________ 
 
Colocación de Drenaje: Si ________ No _________ 
 
Tiempo de estancia: _______ días. 
 
Complicaciones inmediatas:________________________________________ 
 
Complicaciones tardías: disfunción eréctil:______ curvaturas_______ dolor______ 
	Portada
	Índice
	Introducción
	Objetivos
	Justificación
	Material y Métodos
	Metodología
	Revisión Bibliográfica
	Presentación de Casos
	Presentación de Resultados
	Discusión de Resultados
	Conclusiones
	Bibliografía
	Anexo

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