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UNIVERSIDAD NACIONAL AUTÓNOMA DE MÉXICO 
 
 POSGRADO EN CIENCIAS 
 BIOLÓGICAS 
 
 FACULTAD DE CIENCIAS 
 
EVALUACIÓN DE LAS POSIBLES ALTERACIONES 
GAMÉTICAS EN TRADESCANTIA PRODUCIDAS POR 
INSECTICIDAS PIRETROIDES LIBERADOS POR VAPORIZADORES 
ELÉCTRICOS 
 
 
TESIS 
QUE PARA OBTENER EL GRADO ACADÉMICO DE 
MAESTRO EN CIENCIAS (ECOLOGÍA Y CIENCIAS 
AMBIENTALES) 
 
 
PRESENTA 
 
BIOL. MIGUEL ANGEL RICO RODRÍGUEZ 
 
 
 
 
 
 
DIRECTOR DE TESIS: DR. RAFAEL VILLALOBOS PIETRINI 
 
 
MEXICO, D.F. MAYO 2006 
 
 
 
 
UNAM – Dirección General de Bibliotecas 
Tesis Digitales 
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DERECHOS RESERVADOS © 
PROHIBIDA SU REPRODUCCIÓN TOTAL O PARCIAL 
 
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objeto de protección de los derechos de autor, será exclusivamente para 
fines educativos e informativos y deberá citar la fuente donde la obtuvo 
mencionando el autor o autores. Cualquier uso distinto como el lucro, 
reproducción, edición o modificación, será perseguido y sancionado por el 
respectivo titular de los Derechos de Autor. 
 
 
 
 
AGRADECIMIENTOS 
 
 
A DIOS 
Gracias por permitirme lograr esta meta tan importante que permitirá ejercerla 
con mis alumnos y la sociedad. 
 
Te doy gracias señor 
 
A MI FAMILIA. 
A mi esposa Angélica y mis hijos Miguel Angel, Mariana y Carolina que son la 
razón de mí ser. 
 
 
 
 
También quiero agradecer sinceramente a aquellas personas que me 
compartieron sus conocimientos para hacer posible la conclusión de esta tesis. 
 
 
Agradezco a mi director de tesis el Dr. Rafael Villalobos Pietrini, por 
brindarme la oportunidad de realizar este proyecto, por confiar y creer en mí. 
También por la ayuda incondicional que siempre me brindo. 
 
 
A la Dra Sandra Gómez Arroyo por su constante ayuda y consejos para 
culminar esta investigación. 
 
 
También agradezco a mi asesora la Dra. Patricia Ramos Morales, por la 
revisión y recomendaciones respecto a este trabajo 
 
 
A la Dra. Irma Aurora Rosas Pérez, por la revisión de este trabajo así como al 
Dr. Daniel Piñero Dalmau, gracias por sus sugerencias. 
 
 
A la M en C Ana Rosa Flores Márquez, por su incondicional apoyo tanto en su 
asesoría técnica como académica para este proyecto. 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
El presente trabajo se realizó en el laboratorio de Mutagénesis Ambiental del 
Centro de Ciencias de la Atmósfera de la Universidad Nacional Autónoma de 
México, bajo la dirección de Dr Rafael Villalobos Pietrini con el apoyo del 
Centro de Estudios Académicos sobre Contaminación Ambiental de la 
Universidad Autónoma de Querétaro. 
 
ÍNDICE 
RESUMEN 3 
I. INTRODUCCIÓN 4 
II. ANTECEDENTES 5 
INSECTICIDAS ORGANOCLORADOS 5 
 INSECTICIDAS ORGANOFOSFORADOS 6 
CARBAMATOS 6 
PIRETRINAS 6 
 PIRETROIDES 7 
Clasificación de los piretroides 8 
Piretroides en el ambiente 
 9 
Vías de absorción de los piretroides 10 
Metabolismo degradador de los piretroides 11 
Toxicidad de los piretroides 13 
Genotoxicidad de los piretroides 14 
GENOTOXICIDAD 15 
ABERRACIONES CROMOSÓMICAS 15 
Micronúcleos 
 16 
ENSAYOS PARA EVALUAR ACTIVIDAD GENOTÓXICA 17 
SISTEMA BIOLÓGICO DE PRUEBA GENOTÓXICA 18 
Tradescantia clon 4430 18 
III. HIPÓTESIS 22 
IV. OBJETIVOS 22 
V. MATERIALES Y MÉTODOS 22 
Selección de la sustancia tóxica 22 
Mantenimiento del material biológico y su propagación 24 
VI. DISEÑO EXPERIMENTAL 26 
Proceso de tratamiento 26 
Recuperación 27 
Fijación 28 
Realización de preparaciones 28 
Preparaciones permanentes 28 
Lectura de preparaciones 28 
Análisis estadístico de los datos 29 
VII. RESULTADOS 29 
VIII. DISCUSIÓN 45 
IX. CONCLUSIONES 47 
X. REFERENCIAS 48 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 3 
RESUMEN 
 
Cada vez es mayor la demanda de plaguicidas debido a la necesidad de 
proteger el desarrollo de cultivos que son importantes para el consumo humano 
y otros que son de uso doméstico para evitar la acción de los insectos en la 
población humana como es el caso de los piretroides. Algunos son liberados a la 
atmósfera por medio de vaporizadores eléctricos y la principal razón para 
estudiarlos radica en que son muy empleados en la ciudad de Querétaro. En una 
encuesta que yo realice, demostró que el 80 % de las personas reconocieron 
que utilizan esta clase de insecticida. 
Por otra parte, también se han desarrollado diversos bioensayos que 
permiten determinar a corto plazo el daño genético que causan estos agentes 
químicos, como es el caso de la prueba de micronúcleos en las tétradas de 
Tradescantia clon 4430 (TRAD-MCN). Por lo que en este estudio se expusieron 
cortes de Tradescantia (en una cámara cerrada) durante 2, 4, 6, 8, 10 y 12 horas 
por la noche a los vapores de tres insecticidas cuyas marcas comerciales son: 
Raid 45 noches, Baygon plaquitas y Raid plaquitas. Los tres contienen como 
ingrediente activo al piretroide: esbiotrina o d-aletrina y la diferencia entre ellos 
es solamente la concentración del piretroide y que el primero, cuando fue 
empleado en los experimentos, contenía dihidrobutiltolueno como disolvente. 
Los resultados con el Raid 45 noches mostraron diferencias significativas 
con los testigos (prueba ¨U¨·de Mann Whitney, p<0.05), se encontró un 
incremento en el número de micronúcleos en las tétradas de las plantas 
expuestas por periodos de 4, 6 y 8 horas. Mientras que con los otros tiempos de 
exposición y los otros vaporizadores, las frecuencias no presentaron diferencias 
significativas (p>0.05). Cuando se probó el disolvente dihidrobutiltolueno, a la 
concentración que se encontraba en el vaporizador eléctrico con los mismos 
tiempos de exposición, también fue genotóxico, por lo que el efecto del Raid 45 
noches se le puede atribuir al disolvente y no al piretroide. 
 4 
I. INTRODUCCIÓN 
Los daños ocasionados al ambiente se deben en su mayoría a la gran 
cantidad de agentes químicos vertidos al mismo, como es el caso de los 
plaguicidas (término que se aplica a cualquier producto químico destinado a 
luchar contra pestes, plagas o vegetales que amenacen a los cultivos agrícolas, 
a la ganadería o a la salud pública) y según el tipo de plaga a la que vayan a 
contrarrestar son: insecticidas, acaricidas, nematicidas, molusquicidas, 
herbicidas, etc. La forma desmedida de aplicación ha alterado la salud humana, 
ya que la mayoría son muy persistentes en el ambiente y se cuenta con 
información amplia sobre los daños que producen varios de ellos a nivel genético 
(Ma et al.1983). 
La mayor parte de los plaguicidas que se utilizan en salud pública y en 
agricultura son insecticidas y todos son peligrosos para el hombre, ya que 
pueden producir intoxicaciones agudas, cuando penetran al organismo en 
cantidades excesivas, en un tiempo corto o intoxicaciones crónicas provocadas 
por pequeñas cantidades, aplicadas sistemáticamente durante largo tiempo 
(Centro Panamericano de Ecología y Salud 1986). 
 Muchos plaguicidas modernos son auxiliares de gran valor para el 
desarrollo de la agricultura, lo que posibilita la obtención de cosechas más 
abundantes mediante el control de plagas y enfermedades. 
Algunos de esos compuestos también contribuyen de manera importante 
en las campañas de salud pública, por ejemplo, en el combate contra el dengue. 
Asimismo, los insecticidas que son relativamente poco tóxicos para el hombre, 
pueden aplicarse en el hogar para eliminar insectos molestos o transmisores de 
enfermedades. Se tiene una gama amplia de plaguicidas, desde los que 
provocan baja toxicidad a los extremadamente tóxicos para el hombre y otros 
mamíferos, aves,peces e insectos útiles. 
Frecuentemente aparecen nuevos plaguicidas en el mundo, se 
mencionan más de 900 compuestos de acción plaguicida, se producen nuevos 
constantemente y se presentan en diversidad de formulaciones. 
 5 
Las sustancias activas con diferentes grados de toxicidad para el hombre 
y con distintos mecanismos de acción, se clasifican toxicológicamente de 
acuerdo con su dosis letal media (DL50), indicada en miligramos de la sustancia 
activa por kilogramo de peso corporal de los animales de prueba (Cuadro I). Esta 
clasificación es útil para considerar el riesgo de intoxicación aguda, pero no 
aporta indicaciones de otros problemas que pueden aparecer como 
consecuencia de la absorción continua de pequeñas dosis durante lapsos largos. 
Por lo anterior se han buscado otras alternativas tales como productos naturales 
y este es el caso de las piretrinas, que son poco tóxicas para el hombre (Forget 
1991). 
 
Cuadro I Clasificación de los plaguicidas de acuerdo con su dosis letal media (DL50). 
CLASE DL50 mg/kg 
Extremadamente tóxicos < 5 
Muy tóxicos 5 a 50 
Medianamente tóxicos 50 a 500 
Poco tóxicos 500 a 5000 
Prácticamente no tóxicos > 5000 
 
II. ANTECEDENTES 
Según sus estructuras químicas, los insecticidas se dividen en cuatro 
grupos principales que son: organoclorados, organofosforados, carbamatos y 
piretroides. 
 
INSECTICIDAS ORGANOCLORADOS 
Tienen elevada actividad tóxica sobre los insectos, baja toxicidad en 
mamíferos pero se acumulan fácilmente en tejido adiposo, baja solubilidad en 
agua y notable resistencia a la descomposición por microorganismos. Los 
insecticidas organoclorados más conocidos son aldrín, dieldrín, endrín, 
 5 
Las sustancias activas con diferentes grados de toxicidad para el hombre 
y con distintos mecanismos de acción, se clasifican toxicológicamente de 
acuerdo con su dosis letal media (DL50), indicada en miligramos de la sustancia 
activa por kilogramo de peso corporal de los animales de prueba (Cuadro I). Esta 
clasificación es útil para considerar el riesgo de intoxicación aguda, pero no 
aporta indicaciones de otros problemas que pueden aparecer como 
consecuencia de la absorción continua de pequeñas dosis durante lapsos largos. 
Por lo anterior se han buscado otras alternativas tales como productos naturales 
y este es el caso de las piretrinas, que son poco tóxicas para el hombre (Forget 
1991). 
 
Cuadro I Clasificación de los plaguicidas de acuerdo con su dosis letal media (DL50). 
CLASE DL50 mg/kg 
Extremadamente tóxicos < 5 
Muy tóxicos 5 a 50 
Medianamente tóxicos 50 a 500 
Poco tóxicos 500 a 5000 
Prácticamente no tóxicos > 5000 
 
II. ANTECEDENTES 
Según sus estructuras químicas, los insecticidas se dividen en cuatro 
grupos principales que son: organoclorados, organofosforados, carbamatos y 
piretroides. 
 
INSECTICIDAS ORGANOCLORADOS 
Tienen elevada actividad tóxica sobre los insectos, baja toxicidad en 
mamíferos pero se acumulan fácilmente en tejido adiposo, baja solubilidad en 
agua y notable resistencia a la descomposición por microorganismos. Los 
insecticidas organoclorados más conocidos son aldrín, dieldrín, endrín, 
 6 
diclorodifeniltricloroetano (DDT), lindano, clordano y heptacloro (Arias et al. 
1990, Forget 1991). 
 
INSECTICIDAS ORGANOFOSFORADOS 
Son normalmente ésteres derivados de los ácidos fosfórico y fosfónico, 
que a veces poseen grupos amidas o tioles. La mayor parte son ligeramente 
solubles en agua con alto coeficiente de partición aceite/agua y baja presión de 
vapor. Actualmente, más de cuarenta de ellos están registrados para usarse 
como insecticidas y todos implican el riesgo de provocar toxicidad aguda y 
subaguda. Los organofosforados son utilizados en la agricultura, en el hogar, en 
los jardines y en la práctica veterinaria. Aparentemente todos comparten el 
mecanismo común de inhibición de la colinesterasa y pueden causar síntomas 
similares (EPA 1999). 
 
CARBAMATOS 
Los insecticidas carbámicos, son muy empleados en el hogar, en jardines 
y en agricultura, comparten con los organofosforados la capacidad de inhibir las 
actividad colinesterásica y por lo tanto tienen una sintomatología similar durante 
las exposiciones agudas y crónicas. Los ésteres del carbamato de N-metilo 
causan carbamilación reversible en la acetilcolinesterasa, lo que permite la 
acumulación de acetilcolina, sustancia neuromediadora de las uniones 
neuroefectoras parasimpáticas (efectos muscarínicos) y de las uniones 
mioneurales del músculo esquelético. Los aldoxicarbamatos son considerados 
muy tóxicos (EPA 1999) 
 
 
PIRETRINAS 
Son derivados vegetales muy utilizados por su eficacia y rapidez de 
acción como insecticidas en aplicaciones domésticas, este piretro natural 
proviene de las cabezas florales del crisantemo (Chrysantenum 
cinerarieaefolium). Fue introducido a Europa en forma de extracto en el siglo 
 7 
XVIII, provocando curiosidad científica y técnica, lo que ha conducido a 
profundizar en el conocimiento de las piretrinas. Se les considera insecticidas 
naturales porque provienen de ésteres del ácido crisantémico y del ácido 
pirétrico, obtenidos por la extracción de las flores del piretro. Las flores secas 
contienen de 1 a 2 % en peso de piretrinas. 
Las piretrinas naturales contienen: piretrina I y II, jasmolina I y II, cinerina I 
y II. Los crisantematos (piretrina I, cinerina I y jasmolina I) son generalmente más 
potentes; mientras que los piretratos (piretrina II, cinerina II y jasmolina II) 
causan aturdimiento rápido (Dorman y Beasley 1991, Forget 1991). Las 
piretrinas son líquidos viscosos, solubles en varios disolventes orgánicos e 
insolubles en agua, son muy sensibles a la luz y sufren rápida fotodegradación, 
son inestables al calor y no son volátiles (Casida et al.1983, Dorman y Beasley 
1991). Debido a su inestabilidad y alto costo, su uso fue limitado, principalmente 
para fines agrícolas y fueron desplazados en la década de los 40 y 50 por los 
insecticidas organofosforados y carbamatos. Sin embargo, a partir de 1945 se 
empezaron a sintetizar los piretroides con base en las características principales 
de los constituyentes de las piretrinas. Se buscó una estructura química con 
mayor estabilidad (menos sensible a la oxidación) y un aumento en su capacidad 
insecticida, conservando su baja toxicidad sobre mamíferos (Casida et al. 1983). 
Por tal razón, a las piretrinas se les ha considerado de uso doméstico, lo que ha 
conducido en los últimos años, al desarrollo de nuevos insecticidas con las 
características de las piretrinas como son los piretroides con toxicidad baja y 
menos sensibles a la fotodescomposición y por lo tanto más estables, lo que 
facilitó extender su empleo (Barberá 1989). 
 
PIRETROIDES 
El primer piretroide sintetizado fue la aletrina (Schechter et al. 1949) 
mediante el acortamiento y la simplificación de la cadena lateral pentadienil de 
los ésteres naturales (Elliott 1980); con esto se logró mayor efectividad en 
comparación con las mezclas de ésteres naturales contra insectos. Cuando las 
piretrinas fueron retiradas del mercado los piretroides se utilizaron como 
 8 
sustitutos, y en la actualidad son empleados en espirales antimosquitos debido a 
su alta volatilidad y estabilidad térmica (Elliott 1980, Matsumara 1985). La 
tetrametrina (neopinamin) fue el siguiente piretroide sintético producido 
comercialmente en 1964 y descubierto por Sumitomo como 3, 4, 5, 6-tetrahidro, 
que resultó más activo y accesible que muchos ésteres. La tetrametrina es un 
agente esencialmente de aturdimiento y su actividad es limitada (Elliot 1980). En 
1966, se sintetizaron otros dos piretroides, resmetrina y biorresmetrina, 
desarrollados en Japón y utilizados en aerosoles (Barberá 1989) 
Las tetrametrinas, resmetrinas y fenotrinas, tienen como base la fórmula 
general de las piretrinas (constituidas por radicales orgánicos y elalcohol 
fenoxibencílico); la causa de la rápida fotodescomposición se le adjudicó al 
grupo alcohol, lo que significó una pauta para futuras investigaciones. 
Un avance se logró al substituir al alcohol fenoxibencilico por el 
isobutileno, pero como también lo oxidaba la radiación ultravioleta, se sustituyó 
el grupo metilo (CH3) del isobutileno por radicales halógeno, originándose grupos 
diahalovinilos, este es el caso de los insecticidas cipermetrina y deltametrina. 
Estos insecticidas fueron los primeros piretroides suficientemente estables 
destinados al uso agrícola (Elliot et al.1978). 
Las modificaciones del grupo primitivo de piretrinas para la producción de 
los piretroides han sido muy profundas, lo que ha provocado la pérdida de su 
identidad, por lo que cabe considerar hasta que punto estos productos pueden 
ser denominados piretroides (Barberá 1989). En algunas de sus propiedades 
fisicoquímicas los piretroides son similares a los compuestos organoclorados, 
como lo son el coeficiente de partición, la volatilidad y la solubilidad, entre otras, 
que pueden influir en su comportamiento en el ambiente y en el tipo de acción 
sobre los mamíferos (Elliot 1980) 
 
 
Clasificación de los piretroides 
Son ésteres (derivados de la reacción de un ácido y de un alcohol) del 
ácido 2,2-dimetilciclo-propancarboxílico ó son análogos del ácido 2-aril-3-
 9 
metilbutírico que carece del anillo ciclopropano y pueden ser formados por 
moléculas ácidas y moléculas alcohólicas (Elliot 1980). 
La clasificación de los piretroides en grupos I y II se basa en los signos clínicos y 
en las respuestas electrofisiológicas que provocan, así como en su estructura 
química. Los piretroides del grupo I causan el síndrome T (temblores) y son los 
que no contienen el grupo cianuro (CN) en su estructura (permetrina, resmetrina, 
aletrina, transflutrina, d-fenotrina y tetrametrina, entre otros) y los del grupo II 
originan el síndrome CS (convulsión-salivación), que incluyen el grupo CN 
(deltametrina, cihalotrina, fenvalerato cipermetrina y fenpropatrina, entre otros) 
(Hutson y Roberts 1985). 
 
 
C H 3
C H3
C H3
C C-C H 2-C H= C H2
C
C H3
C H2
C
C H2 C
O
C H -C H -C H -C O O -C H
 
Figura 1. Estructura química de la esbiotrina o d-aletrina que pertenece al grupo I 
(Kaloyanova y El-Batawi 1991). 
 
Piretroides en el ambiente 
Después del uso doméstico de la cipermetrina, se han encontrado 
residuos de este piretroide en el polvo y en las alfombras de casas habitación en 
concentraciones hasta de 4 mg/kg (RAPAM 1996). Mientras que en otras 
investigaciones, se incrementa rápidamente la concentración en el aire, después 
de aplicar domésticamente estos insecticidas. Además, cuando permanecen a 
concentraciones relativamente constantes entre 3 y 8 mg/m3 durante meses, 
pueden causar efectos adversos para la salud (RAPAM 1996) 
Coats (1990) y Hayes et al. (1990) mencionan que este tipo de 
insecticidas son hidrolizados rápidamente en el tracto intestinal y en otros tejidos 
de animales de sangre caliente. Los piretroides muestran ventajas comerciales, 
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 10
ya que no son caros, su empleo requiere de dosis muy bajas, presentan peligros 
mínimos en su manejo y tienen bajo impacto sobre el ambiente (Carter 1989). 
Hace diez años, aproximadamente estos insecticidas fueron lanzados al 
mercado en México y a nivel mundial abarcan ya 1/4 del total de los insecticidas 
utilizados (Covarrubias y Sosa 1994) y la razón de su uso es debida a su rápida 
forma de acción y baja toxicidad para los mamíferos, su efectividad en espacios 
cerrados y por ello han sido formulados de distintas maneras como aerosoles, 
líquidos y vapores (Elliot et al. 1978) 
Al parecer los mamíferos metabolizan lentamente a los piretroides, 
aunque en comparación con el metabolismo y la excreción de los insectos y de 
los peces, éste es más rápido. 
Bainova y Kalayanova (1985) encontraron que la eliminación de la 
cipermetrina y sus metabolitos en tejido adiposo de ratón es lenta. En realidad 
aunque los piretroides son estables en el medio, se aplican en forma desmedida 
y sin control, tanto en casas habitación como en la industria y en la agricultura. 
 
Vías de absorción de los piretroides 
Son absorbidos por las vías oral, dérmica y respiratoria. La absorción a 
través de la piel es la más frecuente en las intoxicaciones que ocurren entre los 
aplicadores de plaguicidas. Estas sustancias son absorbidas sin quemar la piel, 
sin irritación local, sin dolor y sin indicación de su penetración. Este es un 
problema nuevo para los aplicadores o para la gente expuesta que no aceptan 
que una sustancia en contacto con la piel pueda ser absorbida y causar 
intoxicaciones graves o letales sin provocar algún síntoma local (Hutson y 
Roberts 1985). 
La absorción oral es la ruta común de intoxicaciones en los niños que 
ingieren restos de insecticidas que se encuentran en el ambiente así como los 
residuos acumulados en casas habitación (El-Sharkawy et al. 1994). 
La absorción respiratoria puede ocurrir durante las aplicaciones, cuando 
se utilizan equipos para producir gotitas muy pequeñas (de menos de 20 
micrómetros). Esta es también la vía de absorción de personas que trabajan con 
 11
insecticidas en ambientes confinados y no utilizan las mascarillas adecuadas (El-
Sharkawy et al. 1994). 
 
Metabolismo degradador de los piretroides 
El factor más importante durante la degradación de piretroides, como la 
cipermetrina, es el rompimiento del enlace éster, que es catalizado por las 
carboxiesterasas, abundantes en el tejido muscular de los mamíferos. 
Esta reacción se realiza mediante un mecanismo oxidante sobre este 
enlace, en donde los isómeros cis, están menos disponibles que los isómeros 
trans. Además, el grupo cianuro (CN) de algunos piretroides, no permite que las 
esterasas actúen libremente por lo que al no realizarse su hidrólisis, la toxicidad 
se mantiene. 
Debido a estas diferencias configuracionales entre los isómeros cis y 
trans, los primeros por ser difícilmente degradados por las enzimas 
mencionadas, presentan mayor toxicidad con respecto a los segundos. Esto se 
debe a que la longitud del enlace éster, es más corta en los cis que en los trans, 
por lo tanto en los primeros existe mayor impedimento estérico (amontonamiento 
de átomos) lo que dificulta su degradación (WHO 1989). 
Por otro lado, debido a que los insectos manifiestan baja capacidad para 
hidrolizar ambos isómeros, la toxicidad en ellos es más alta (Hutson y Roberts 
1985). La degradación de los piretroides a partir de la esterasa, da lugar a 
algunos metabolitos como tiocianatos conjugados con aminoácidos, alcoholes, 
fenoles, ácidos carboxílicos, sulfatos glucósidos, etc. 
Las esterasas microsómicas del hígado de ratón hidrolizan los isómeros 
trans de algunos piretroides (tetrametrina, resmetrina, fenotrina y permetrina), 
más rápidamente que a sus correspondientes isómeros cis (tetrametrina, 
resmetrina, fenotrina y permetrina) (El-Sharkawy et al. 1994) 
La mayoría de los estudios in vitro han utilizado enzimas microsómicas de 
hígado de ratón y rata como fuente de esterasas para la degradación de 
piretroides, siendo estas más activas que otras fracciones de homogeneizados 
hepáticos. Diversos estudios con piretroides han manifestado su inocuidad 
 12
principalmente en el ser humano, debido a su fácil degradación que, como se ha 
mencionado, es promovida por algunas esterasas microsómicas; sin embargo, 
esta vía de desintoxicación puede ser interrumpida cuando las esterasas son 
inhibidas por la acción de otros insecticidas como son los organofosforados y 
algunos carbamatos (Casida et al. 1983), comúnmente encontrados en el 
ambiente y en los alimentos (Hileman 1993), permaneciendo así latente su 
toxicidad. 
El proceso degradante de los piretroides en mamíferos se desarrolla 
mediante reacciones hidrolíticasy oxidantes, dependiendo del tipo de 
compuesto. Los isómeros trans de los ésteres crisantémicos de alcoholes 
primarios como fenotrina, furametrina, propartrina, resmetrina, tetrametrina y 
posiblemente permetrina, son metabolizados principalmente mediante hidrólisis 
del enlace éster, con la subsecuente oxidación y/o conjugación de los 
componentes alcohólicos y ácidos de la molécula. Generalmente, estas rápidas 
degradaciones metabólicas, así como la posible absorción incompleta en el 
tracto gastrointestinal, contribuyen a la baja toxicidad aguda de algunos 
piretroides (Miyamoto 1976). Sin embargo, Lessenger (1992), informó de cinco 
casos de envenenamiento con cipermetrina en trabajadores que inhalaron 
accidentalmente dicho piretroide, suministrado mediante los flujos de aire 
acondicionado. Las personas expuestas al piretroide mencionado manifestaron 
síntomas de deficiencia respiratoria, dolores de cabeza, náuseas e irritabilidad 
general (Barberá 1989). 
La cipermetrina inicia su metabolismo en el humano con el rompimiento 
del enlace éster, es transformada en algunos conjugados en forma de 
glucorónidos o pueden ser hidroxilados varios de los grupos metilo y 
nuevamente conjugado u oxidado. La molécula alcohólica es transformada a un 
aldehído (compuesto volátil e inflamable que resulta de la deshidrogenación u 
oxidación de ciertos alcoholes), que es rápidamente oxidado en ácidos 
aromáticos que son conjugados u oxidados posteriormente para formar anillos 
aromáticos (Demoute 1989). El grupo ciano es convertido principalmente a 
tiocianato y es excretado por la vía renal como principal ruta. 
 13
Toxicidad de los piretroides 
Los efectos tóxicos generados por los piretroides, se basan en la 
modificación de la permeabilidad iónica de las membranas nerviosas 
produciendo envenenamiento en insectos y animales superiores (Eells et al. 
1992). En algunos experimentos realizados en fibras nerviosas tratadas con 
piretroides se ha manifestado una despolarización en las mismas, resultando en 
el aumento de la activación de los canales de sodio (Brown et al. 1988), que 
provoca alteraciones neuronales. Todos los piretroides tienen esencialmente el 
mismo mecanismo básico de acción en los canales de sodio, pero difieren en la 
magnitud del efecto. Sin embargo, parece que los piretroides del tipo II, además 
de los signos mencionados, inhiben canales complejos regulados por los 
receptores GABA, así como los canales de calcio activadores de voltaje 
(Valentine 1990). Estos receptores GABA permiten el flujo de iones cloro, de ahí 
que su inhibición provocaría también el desequilibrio en el flujo de iones sodio 
generando hiperexcitación del sistema nervioso. Se halló que los insecticidas 
piretroides permetrin, fenvalerato y cipermetrina son letales a concentraciones 
bajas sobre organismos acuáticos como salmón, langosta y camarón, 
encontrándose además que a concentración de 2 mg/L de cipermetrina fue letal 
para salmón y langosta, mientras que 0.01 mg/L lo fue para camarón (McLeese 
et al. 1980) En experimentos tanto de exposición larga como de corta con 
piretroides en ratas Wistar, se han observado daños en hígado, especialmente 
cuando es usado con un compuesto coadyuvante y propelente de freón, 
causando además reacciones alérgicas. Además se ha notado que personas 
con problemas respiratorios, presentan mas sensibilidad a los piretroides. 
También pacientes con esclerosis múltiple que están bajo medicamentos, 
muestran mayor daño de tipo neurológico. Estos insecticidas pueden provocar 
dolor de cabeza, depresión, náuseas y desvanecimiento (Landrigan 1999). 
 14
Algunos piretroides como la deltametrina son activos en concentraciones 
muy bajas (10 a 12 ppm) y su acción repercute principalmente sobre el sistema 
nervioso (Satelle y Yamamoto 1988). 
Se ha observado que piretroides como la cipermetrina, deltametrina, 
permetrina y fenvalerato a bajas concentraciones (0.01 mg/L), redujeron la tasa 
de reproducción de una población de plancton de agua dulce (Day 1989). 
 
Genotoxicidad de los piretroides 
Estudios recientes (Gandhi et al. 1995) demostraron que dosis de 162 
mg/kg de peso corporal de deltametrina en ratones, fue suficiente para inducir 
daño genético (micronúcleos) en células de la médula ósea de ratón.. Bhunya y 
Pati (1990) reportaron que el insecticida deltametrina a dosis entre 10 a 20 
mg/kg de peso corporal, incrementó significativamente anormalidades en los 
espermatozoides e indujo aberraciones cromosómicas y micronúcleos en células 
de médula ósea de ratón. Similarmente cuando se trataron raíces de Allium cepa 
con deltametrina se observó el incremento de micronúcleos al aumentar la 
concentración (Gandhi 1995). También se han inducido intercambios de 
cromátidas hermanas sobre linfocitos humanos in vitro, tratados con deltametrina 
a diferentes concentraciones (Dolara et al. 1992). 
En otro estudio con macrófagos de los alvéolos pulmonares de ratas, que 
fueron expuestas intermitentemente a vapores estáticos liberados de piretroides, 
en una cámara de inhalación cerrada en tratamientos cortos de 1 día (15 min/h, 
8 h/día) y largos de 7 días (15 min/h, 8 h/día, 7 días/semana), se evaluó el 
potencial genotóxico de los vapores, encontrándose un incremento significativo 
de micronúcleos, lo que demostró la capacidad genotóxica de este piretroide 
(Das y Sahu 1996). 
Herrera et al. (1992) encontraron efectos clastogénicos en células de 
ovario de criceto chino. Estos mismos piretroides también fueron probados a 
concentraciones por debajo de las recomendadas en la etiqueta del producto 
comercial sobre un sistema vegetal de prueba induciendo la formación de 
 15
micronúcleos en células meristemáticas de las raíces de Allium cepa 
(Covarrubias y Sosa 1994). La cipermetrina indujo micronúcleos en la médula 
ósea de ratón (Amer y Aboul-Ela 1985). 
Debe considerarse que los daños causados por la toxicidad de un 
compuesto al inducir daño genético sobre un sistema de prueba vegetal, puede 
ser indicio de severos daños en las células de mamíferos (Fiskesjo 1981). 
Actualmente existe gran cantidad de insecticidas en el mercado que contienen 
un piretroide como ingrediente activo y que los medios masivos de comunicación 
han catalogado como insecticidas que no dañan ni al hombre ni a las plantas. 
 
 
GENOTOXICIDAD 
Desde hace varios años existe preocupación de que las sustancias 
tóxicas sean factores que contribuyen al incremento de varias clases de 
enfermedades como el cáncer y los ataques al corazón, entre otras. La 
genotoxicidad puede entenderse como el resultado de la interacción de agentes 
químicos o físicos con el sistema hereditario de la célula (Clayson y Grant 1992). 
Los cambios en la estructura y en la función de las células germinales pueden 
resultar en infertilidad, abortos espontáneos, defectos en el nacimiento y 
cambios heredables en la estructura genética (Craigmill 1982). 
 
ABERRACIONES CROMOSÓMICAS 
Las alteraciones cromosómicas pueden ser numéricas o estructurales, en 
este último se involucran la morfología de los cromosomas y se producen 
cuando se insertan o eliminan porciones de cromosomas y estas pueden ser; 
deleciones, duplicaciones, inversiones y translocaciones. Estas alteraciones 
pueden ser detectadas con la ayuda de un microscopio examinando 
rompimientos cromatídicos y cromosómicos, fragmentos acéntricos, 
cromosomas dicéntricos y cromosomas en forma de anillo (cuando las células 
están en metafase), puentes y fragmentos (cuando están en anafase) y 
 16
micronúcleos (cuando están en interfase) (Covarrubias y Sosa 1994) . 
 
Micronúcleos 
Se forman a partir de fragmentos cromosómicos acéntricos o de 
cromosomas completos cuyo centrómero se inactivó. Esto origina que el huso 
acromático durante la anafase, no los jale hacia los polos quedando excluidos 
del conjunto de cromosomas que formaran al núcleo (figura2). 
 
 Figura 2. Micronúcleos en una tétrada de Tradescantia clon 4430. 
 
Micronúcleos
}Tétrada
 
 17
ENSAYOS PARA EVALUAR ACTIVIDAD GENOTÓXICA 
 
Los ensayos genéticos a corto y largo plazos se han estado utilizando 
para la detección de mutágenos y carcinógenos ambientales (Brockman y De 
Marini 1988). La existencia de una infinidad de sustancias producidas por las 
industrias y difundidas en el ambiente, hace necesario la identificación de 
aquellas que son capaces de inducir mutaciones, con el objeto de prevenir sus 
efectos sobre la población humana. Los experimentos con sistemas biológicos 
no humanos resultan valiosos para evaluar los efectos genéticos de los agentes 
químicos y en ellos se busca su reproducibilidad, facilidad de realización, relativa 
economía y corta duración. Diversos bioensayos han sido desarrollados con 
virus, bacterias, hongos, insectos, cultivo de células de mamíferos, plantas etc., 
para medir efectos mutagénicos, producidos por compuestos químicos (Ennever 
et al. 1988). Cuando se diseña un estudio utilizando algunos de los bioensayos 
antes mencionados, es importante tomar en cuenta su costo. Para esto se 
cuenta con algunas plantas, entre ellas Tradescantia, que necesita poco equipo, 
material y personal por lo que resulta un bioensayo económico y eficaz (De 
Serres 1978). 
En 1978, el National Institute of Environmental Health Sciences, revisó el 
uso de una variedad amplia de sistemas vegetales para detectar la inducción de 
daño genético por agentes mutagénicos ambientales (De Serres 1978). Los 
sistemas vegetales permiten reconocer una gama amplia de daño genético como 
son mutaciones génicas y aberraciones cromosómicas, que además tienen gran 
variedad de aplicaciones en el ambiente, incluyendo la detección de mutágenos 
en plantas manufacturadoras que vierten contaminantes en arroyos, ríos o aire, 
tanto en regiones urbanas como en rurales. Una de las principales ventajas de 
los sistemas vegetales, es que no están restringidas solamente al uso de 
laboratorio sino que se pueden utilizar en el campo o en la industria en donde se 
efectúa la contaminación. 
Entre los sistemas vegetales más utilizados está Tradescantia en cuyas 
 18
células madres de polen se inducen alteraciones cromosómicas que se observan 
como micronúcleos en el estado de tétrada (Trad-MCN). Es un bioensayo a corto 
plazo que permite determinar la genotoxocidad causada por contaminantes 
ambientales (Ma et al. 1978). 
Algunos aspectos favorables de esta técnica son el poder almacenar a las 
inflorescencias por tiempos prolongados una vez que han sido fijadas, la 
facilidad en la realización de las preparaciones para el análisis de los 
micronúcleos, el bajo costo, el tiempo relativamente corto (24 a 48 horas) para la 
obtención de resultados (Ma 1981a, b) y que la planta posee su propio sistema 
microsómico por lo que no necesita de activación enzimática. 
También tiene desventajas, como la detección relativa de daño, puesto que las 
translocaciones, las inversiones y otros tipos de rearreglos cromosómicos no son 
revelados como MCN en las tétradas por lo tanto es recomendable que se 
realicen estudios a la par con otros sistemas biológicos para confirmar los 
resultados. 
 
SISTEMA BIOLÓGICO DE PRUEBA GENOTÓXICA 
Tradescantia clon 4430 
Es una planta de la familia de las comelinaceas, con hojas estrechas que 
terminan en punta (figura 3), que se puede propagar fácilmente por reproducción 
asexual y mantener en condiciones de invernadero, florece por periodos 
prolongados, tiene elevada sincronización de las células madres de polen en las 
yemas de la inflorescencia en diferentes estados meióticos (figura 4) (Shairer et 
al. 1979) lo que facilita el conocimiento del ciclo microsporogénico. Las 
inflorescencias contienen yemas con diversas etapas de la meiosis, en la de 
tétrada se observan los micronúcleos inducidos en la meiosis temprana (profase 
I). Esta planta se reproduce asexualmente mediante macoyos y aunque forma 
brotes y flores no se lleva a cabo la fecundación. Tiene la capacidad de sostener 
su estado sexual y producir botones y flores sin que se lleve a cabo la 
fecundación, solo crece en condiciones de invernadero con la ayuda de la luz 
 19
suplementaria (Ma 1981b) ó en cámaras de crecimiento con condiciones de 
humedad y temperatura controladas (Schairer 1983, Schairer et al. 1983). 
Tradescantia tiene número cromosómico bajo (2n=12), es una planta muy 
sensible a contaminantes ambientales lo que permite someterla a diferentes 
maneras de tratamiento. Si las muestras son líquidas o solubles, el tratamiento 
es por vía del tallo, con agentes físicos o vapores se pueden utilizar cámaras 
especiales para exponer a las plantas, también es posible monitorear in situ 
cuando se desea muestrear agentes contaminantes presentes en la atmósfera 
(Ma 1980, Ma et al. 1984, 1996). Tradescantia es una de las plantas más 
eficientes para la detección de mutágenos como agentes gaseosos del ambiente 
(Ma et. al. 1978), teniendo validez en experimentos de laboratorio y para 
monitorear in situ el ambiente, detectando efectos producidos por radiaciones a 
dosis muy bajas y mutágenos químicos a la cual podrían estar expuestas las 
poblaciones (Ichikawa 1992). 
 Figura3. Plantas de Tradescantia clon 4430 
 
 20
 
Figura 4. Esquema de la inflorescencia de Tradescantia mostrando la relación 
entre los diversos estados de desarrollo de la célula madre del polen con el 
tamaño de las yemas florales (modificado de Schairer et al. 1979). 
 
 
El bioensayo Trad-MCN fue utilizado para determinar la genotoxicidad de 
un insecticida común, el malatión, mediante diferentes formas de exposición 
(absorción vía tallo y vía yema floral) que ocasionó un alto índice de 
micronúcleos como resultado del daño genético (Ma et al. 1983). 
En 1980 este sistema fué positivo en estudios sobre contaminantes 
ambientales en Qingdao en la República Popular de China (Ma et al. 1982). Se 
obtuvieron resultados genotóxicos con la hidrazida málica (herbicida) en los 
 
1
3-4
6-8
10-12
13-15
16-18
 21
cromosomas de linfocitos humanos y en células madres de polen de 
Tradescantia (Iftikharuddin et al. 1980). Este bioensayo fue utilizado también 
para monitorear in situ los contaminantes del aire de diferentes localidades como 
complejos industriales, estacionamientos públicos, garages y paradas de 
autobuses en donde se obtuvieron frecuencias elevadas de micronúcleos en 
tétradas (Ma et al. 1980, 1981). La sensibilidad de Tradescantia se muestra 
cuando bajas concentraciones de cualquier contaminante, pueden inducir altas 
frecuencias de fragmentos cromosómicos acéntricos. Los efectos clastogénicos 
ocasionados por el humo emitido de máquinas diesel, fue determinado por el 
bioensayo Trad-MCN (Ma et al. 1981). 
Mediante la colecta de diferentes muestras de agua de un lago en 
Springfield, EUA durante 1980 y 1981, se determinó que el agua contenía 
residuos con actividad genotóxica ya que indujo micronúcleos en las tétradas de 
Tradescantia (Ma et al. 1985). 
Siegfried et al. (1992), determinan la genotoxicidad del ácido tánico que 
comúnmente se utiliza como aditivo para alimentos y aún más para todo tipo de 
bebidas como vino, cerveza, te y café por medio Trad-MCN. Por otra parte el 
arsénico, dieldrín, tetracetato y una mezcla de ellos fueron evaluados por la 
prueba de Trad-MCN demostrándose su actividad genotóxica (Gill et al. 1992). 
Con el sistema Trad-MCN se logró evaluar la genotoxicidad de muestras 
de agua del lago Hongzhe en China, notándose que existen uno o varios 
agentes con actividad mutagénica sobre Tradescantia clon 4430 (Yang 1999). 
También se tienen datos de la clastogenicidad provocada por partículas 
colectadas en muestras de aire de lugares con tráfico vehicular, dando 
resultados positivos (Monarca et al. 1999). Asimismo 140 agentesquímicos y 
físicos fueron evaluados, para determinar su posible mutagenicidad relacionados 
con la salud humana, se probaron sustancias de uso común en forma liquida y 
gaseosa, así como diferentes tipos de radiación y muchas de ellas fueron 
positivas con este sistema (Ma et al. 1984). 
 22
III. HIPÓTESIS 
Los insecticidas piretroides contenidos en las diferentes marcas comerciales de 
vaporizadores eléctricos ocasionan daño genético en las células madres de 
polen de Tradescantia clon 4430. 
 
IV. OBJETIVOS 
OBJETIVO GENERAL 
• Evaluar la inducción de micronúcleos en las células gaméticas de 
Tradescantia clon 4430 por insecticidas piretroides y la relación de la 
respuesta con el tiempo de exposición. 
 
 
OBJETIVO ESPECIFICO 
 
• Evaluar el efecto genotóxico de la esbiotrina ó d-aletrina contenida en tres 
diferentes vaporizadores elèctricos (Raid 45 noches, Baygon plaquitas y 
Raid plaquitas) en las células madres del polen de Tradescantia clon 4430 
y comparar su efecto. 
 
V. MATERIALES Y MÉTODOS 
Selección de la sustancia tóxica: piretroides. 
Con el objeto de seleccionar los piretroides que se emplearon para 
verificar sus efectos genotóxicos se realizó, en la ciudad de Querétaro, una 
encuesta acerca del consumo doméstico en diferentes sitios de la ciudad, 
encontrándose que el 80 % utilizaban insecticidas liberados por un vaporizador 
 23
eléctrico, cuyo ingrediente activo fue un piretroide y el 20 % restante utilizaban 
otro tipo de insecticida. La razón que dieron de su uso estaba basada en la 
propaganda de los medios televisivos que mencionan que, como se indicó antes, 
estos de productos pueden ser empleados con confianza por no ser tóxicos para 
el hombre. 
Al realizar la búsqueda de este tipo de insecticidas en el supermercado se 
notó que sus presentaciones en aerosol, líquida y en espirales contienen como 
ingrediente activo a un piretroide lo que da idea de que estos insecticidas día 
con día acaparan el mercado, aumentando así el riesgo de estar expuestos a 
ellos. Con base en esto se consideró de importancia llevar a cabo estudios con 
estos insecticidas y se seleccionaron tres de los más empleados en la ciudad de 
Querétaro en presentación de vaporizador eléctrico que son: Raid eléctrico 45 
noches, Raid Plaquitas y Baygon Plaquitas (figura 5). 
 
 
 Figura 5 Presentación comercial de los tres vaporizadores eléctricos. 
 
 
Raid eléctrico 45 
noches 
Raid plaquitas 
Baygon plaquitas 
ElECTRICO 
11''''-UlfII DlIIC 
 24
El insecticida Raid eléctrico 45 noches (Johnson), está compuesto de una 
mezcla líquida de ingrediente activo la esbiotrina (2,2-dimetil-3-(2-metil-1-
propenil) ciclopropanocarboxilato de 2-metil-4-oxo-3-(2-propenil)-2-ciclopenten-1-
ilo) con algunos compuestos inertes. Según la etiqueta, contiene esbiotrina, 200 
g/kg, dihidrobutiltolueno (HBT) 200 g/kg, además de otros compuestos inertes no 
especificados. En el caso del Raid Plaquitas (Johnson), cada laminita contiene 
100 mg de lo siguiente: esbiotrina 200 g/kg, y de ingrediente inerte 800 g/kg. El 
Baygon Plaquitas (Bayer) contiene según su etiqueta: d-aletrina 40 mg, 77 mg 
de coadyuvante, colorante y perfume, así como 883 mg de celulosa inerte. Es 
importante mencionar que después de una exhaustiva búsqueda se llegó a la 
conclusión de que la esbiotrina y la d-aletrina es el mismo compuesto por lo que 
los tres vaporizadores eléctricos contienen el mismo ingrediente activo. Esto fue 
difícil de lograr porque los fabricantes retienen la información. 
 
Mantenimiento del material biológico y su propagación 
Las plantas de Tradescantia clon 4430 se mantuvieron en un invernadero 
del Centro de Estudios Académicos sobre Contaminación Ambiental de la 
Universidad Autónoma de Querétaro. Esta planta es un híbrido entre T. 
hirsutiflora y T. subacaulis, que requiriere condiciones óptimas para su 
crecimiento y su mantenimiento por lo que debe estar en un invernadero (figura 
6) ó en una cámara de crecimiento para proporcionar material durante todo el 
año. Esta planta necesita una intensidad de luz fluorescente de alrededor de 
1,800 pies-candela y de luz incandescente de 180 pies-candela en la punta de la 
planta, la temperatura adecuada debe ser entre 19 y 25 0C y de noche alrededor 
de 16 0C. La humedad relativa debe ser entre 60 y 80 % (Programa Internacional 
de Seguridad Química 1988). 
Ya que el clon es estéril porque presenta autoincompatibilidad, la 
propagación en macetas se lleva a cabo mediante la separación del tallos del 
macoyo de la planta madre. Durante este proceso de reproducción vegetativa, 
algunas de las plantas viejas deben de ser removidas o bien cortadas en la 
 25
punta para permitir que los retoños jóvenes crezcan. La tierra común que se 
utilizó para cada maceta se preparó de la siguiente forma (dos partes de tierra, 
una de hojarasca de encino y una de arena de río). Después de un mes de 
llevarse a cabo la propagación, a cada maceta se le agrega la siguiente mezcla 
de fertilizantes: nitrógeno (0.4602 g/maceta), fósforo (0.967 g/maceta), potasio 
(0.157 g/maceta) y micronutrientes (0.028 g /maceta) (Rodríguez et al.1996) 
La fertilización se repite mensualmente, se procede al riego con agua de la llave 
a saturación para que la mezcla de nutrientes se disuelva en la tierra. 
 
Figura 6. Plantas de Tradescantia en condiciones de fotoperiodo, humedad y 
temperatura controladas en un invernadero en la Universidad Autónoma de 
Querétaro. 
 26
VI. DISEÑO EXPERIMENTAL: 
Proceso de tratamiento 
Se seleccionaron 20 plantas con inflorescencias jóvenes para cada grupo 
y se hicieron cortes a nivel del tallo de aproximadamente 10 cm de largo, 
después se colocaron en solución nutritiva de Hoagland. 
Los cortes de Tradescantia fueron introducidos a una cámara de vidrio 
cerrada conteniendo el insecticida. Los tiempos de exposición con cada uno de 
los tres vaporizadores eléctricos fueron de 2, 4, 6, 8, 10 y 12 horas, los testigos 
negativos y el positivo (hidrazida málica 1mM) se mantuvieron por el mismo 
período dentro de una cámara (figura 7) sin insecticida. 
 
 
Figura 7. Cámara para la exposición de los cortes de Tradescantia a los 
diferentes vaporizadores eléctricos. 
 
 
 
 
 
 
 
 27
Recuperación 
 
Después de la exposición de las plantas se les dio un tiempo de 
recuperación en función a la duración del tratamiento, haciendo un total de 30 ó 
36 horas, por ejemplo 12 h de tratamiento y 24 h de recuperación. 
Posteriormente los cortes sumergidos en solución nutritiva de Hoagland fueron 
llevados al invernadero con aireación constante y temperatura óptima (Figura 8) 
hasta cumplir el tiempo de recuperación necesario para que las células dañadas 
en profase 1, continúen su división y alcancen la etapa de tétrada, fase en la 
cual se realiza la observación (Ma et al. 1978). 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
Figura 8. Recuperación de los cortes de Tradescantia después de 
ser sometidos a la acción del piretroide. 
 
 
 28
Fijación 
Las inflorescencias fueron cortadas de sus tallos y colocadas en una 
solución de etanol-ácido acético (3:1) por un período de 24 horas. Una vez 
concluido éste tiempo, se disectaron para realizar las preparaciones o se 
conservaron en etanol al 70 %. 
 
Realización de preparaciones 
Por su tamaño entre 2 y 3.5 mm se toma la yema que contiene células en 
etapa de tétrada, se disecta, se separan las anteras sobre un portaobjetos y se 
exprimen para liberar las células meióticas en una gota de acetocarmin al 0.5 %, 
se corrobora la presencia de tétradas en un microscopio óptico, de corresponder 
a la etapa correcta se quitan los desechos y se coloca el cubreobjetos. La 
preparación se calienta de 2 a 3 veces con una lámpara de alcohol, luego se 
presiona suavemente con la palma de la mano, amortiguando con una toalla de 
papel, esto con la finalidad de extender lastétradas para su mejor observación. 
 
Preparaciones permanentes 
Las preparaciones se hicieron permanentes siguiendo la técnica de 
Conger y Fairchild (1953). Se pusieron sobre hielo seco unos minutos y se les 
separó el cubreobjetos con un bisturí, para deshidratar a las células se les 
cambió rápidamente dos veces el butanol absoluto (Baker), posteriormente se 
montaron en bálsamo de Canadá y se dejaron secar a temperatura ambiente o 
en una estufa. 
Lectura de preparaciones 
Se leyeron 7 preparaciones de cada grupo experimental en un 
microscopio óptico bajo una amplificación de 40X. 
Se registró el número de células en etapa de tétrada que contenían 0, 1, 
2, 3 ó más micronúcleos cuantificando un total de 500 células por preparación. 
Las lecturas se hicieron con clave para evitar prejuicios durante la observación y 
los resultados fueron anotados en hojas para registro de micronúcleos. La 
 29
cantidad de micronúcleos se dividió entre el número total de tétradas 
observadas, multiplicado por cien para obtener el porcentaje, posteriormente se 
obtuvo el promedio y el error estándar de cada grupo. 
 
Análisis estadístico de los datos 
Para comparar las diferencias entre los grupos testigos y tratados se obtuvo la 
mediana del número de micronúcleos observados, analizándose con el 
estadístico ¨U¨ de Mann Whitney. El nivel de significancia establecido fue p<0.05 
(Winer 1971). Se utilizó la prueba de Kruskal-Wallis para verificar las diferencias 
entre cada experimento y para observar una posible correlación de la frecuencia 
de micronúcleos con el tiempo de exposición se aplicó la correlación de 
Spearman. 
 
 
VII. RESULTADOS 
Los resultados obtenidos aparecen en los cuadros II a VI, en los que se 
presenta la respuesta de las células meióticas de Tradescantia clon 4430 
cuando sus inflorescencias fueron sometidas a los vapores de los insecticidas 
cuyos nombres comerciales son: Raid eléctrico 45 noches, Raid Plaquitas y 
Baygon Plaquitas en una cámara cerrada por períodos de 2, 4, 6, 8, 10 y 12 
horas durante la noche, para simular el uso doméstico. En el cuadro II se 
incluyen los promedios ± los errores estándar de los porcentajes de 
micronúcleos observadas en las células madres de polen de Tradescantia para 
cada grupo experimental con diferentes tiempos de exposición con el insecticida 
Raid 45 noches. 
En las exposiciones con duración de dos horas para cada experimento no hubo 
aumento significativo de micronúcleos (p>0.05, ¨U¨de Mann Whitney), mientras 
que para los siguientes tiempos de exposición 4, 6 y 8 horas, la frecuencia de 
MN fue mayor, encontrándose diferencias significativas para cada tiempo de 
exposición con respecto a sus testigos (p<0.05). 
 
 29
cantidad de micronúcleos se dividió entre el número total de tétradas 
observadas, multiplicado por cien para obtener el porcentaje, posteriormente se 
obtuvo el promedio y el error estándar de cada grupo. 
 
Análisis estadístico de los datos 
Para comparar las diferencias entre los grupos testigos y tratados se obtuvo la 
mediana del número de micronúcleos observados, analizándose con el 
estadístico ¨U¨ de Mann Whitney. El nivel de significancia establecido fue p<0.05 
(Winer 1971). Se utilizó la prueba de Kruskal-Wallis para verificar las diferencias 
entre cada experimento y para observar una posible correlación de la frecuencia 
de micronúcleos con el tiempo de exposición se aplicó la correlación de 
Spearman. 
 
 
VII. RESULTADOS 
Los resultados obtenidos aparecen en los cuadros II a VI, en los que se 
presenta la respuesta de las células meióticas de Tradescantia clon 4430 
cuando sus inflorescencias fueron sometidas a los vapores de los insecticidas 
cuyos nombres comerciales son: Raid eléctrico 45 noches, Raid Plaquitas y 
Baygon Plaquitas en una cámara cerrada por períodos de 2, 4, 6, 8, 10 y 12 
horas durante la noche, para simular el uso doméstico. En el cuadro II se 
incluyen los promedios ± los errores estándar de los porcentajes de 
micronúcleos observadas en las células madres de polen de Tradescantia para 
cada grupo experimental con diferentes tiempos de exposición con el insecticida 
Raid 45 noches. 
En las exposiciones con duración de dos horas para cada experimento no hubo 
aumento significativo de micronúcleos (p>0.05, ¨U¨de Mann Whitney), mientras 
que para los siguientes tiempos de exposición 4, 6 y 8 horas, la frecuencia de 
MN fue mayor, encontrándose diferencias significativas para cada tiempo de 
exposición con respecto a sus testigos (p<0.05). 
 
 30
Cuadro II. Porcentaje de micronúcleos en tétradas de Tradescantia expuestos a 
vapores del insecticida Raid 45 noches. 
 
 
Con los tiempos de exposición de 10 y 12 horas no se presentó 
genotoxicidad, pero se provocó marchitamiento y color amarillo de las hojas y los 
tallos mostraron flacidez. 
Se aplicó el análisis de regresión el cual nos demuestra que no existe 
correlación de los valores obtenidos con 2, 4, 6, 8, 10 y 12 horas de exposición y 
las frecuencias de micronúcleos (p=0.876, r=0.0395) (Figura 9). 
Horas de 
exposición 
Tétradas 
analizadas Experimento I Experimento II Experimento III 
 Testigo Tratado Testigo Tratado Testigo Tratado 
 x ± E.E. x ± E.E. x ± E.E. x ± E.E. x ± E.E. x ± E.E. 
2 3500 2.0 ± 0.54 1.2 ± 0.41 2.0 ± 0.26 1.9 ± 0.12 2.3 ± 0.50 3.0 ± 0.29 
 
4 3500 1.9 ± 0.30 3.9 ± 0.40* 1.7 ± 0.49 3.9 ± 1.00* 1.8 ± 0.55 3.5 ± 0.59* 
 
6 3500 1.9 ± 0.30 3.5 ± 0.29* 1.7 ± 0.56 3.9 ± 0.41* 2.5 ± 1.02 5.6 ± 1.12* 
 
8 3500 2.3 ± 0.50 6.1 ± 0.72* 2.7 ± 0.45 5.3 ± 1.02* 2.5 ± 0.39 7.4 ± 1.94* 
 
10 3500 3.2 ± 0.28 3.3 ± 0.51 3.3 ± 0.34 3.4 ± 0.35 2.9 ± 0.46 2.8 ± 0.47 
 
12 3500 1.4 ± 0.22 1.9 ± 0.81 2.1 ± 0.37 1.2 ± 0.14 3.9 ± 0.34 3.7 ± 0.39 
 
 Significativo* p<0.05 
 31
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
Para conocer la distribución de los datos de las frecuencias de micronúcleos, 
aunque sea de forma preliminar o exploratoria, en los grupos de los testigos y los 
tratados se hicieron diagramas de caja y bigotes con el método de Tukey, este 
análisis, además, muestra los valores extremos y los datos posiblemente 
erróneos comúnmente llamados “0utliers” (Winer 1971). Estos diagramas ubican 
a la mediana, más que al promedio, en la posición central de cada caja, 
dividiendo en dos partes la distribución de los datos. El rango o amplitud de la 
caja permite notar los valores mínimo y máximos normales; el rango intercuartil 
ayuda a describir la ubicación en la muestra total del 50 % de la distribución de 
los datos, no importando su forma en cada una de las cajas. En la figura 10 se 
muestran datos correspondientes al cuadro II, que presentan una tendencia 
hacia la derecha para el grupo de los testigos. para el caso de los tratados, la 
distribución es asimétrica hacia la izquierda y presenta valores de Y 
anormalmente atípicos (“outliers”). 
Figura 9. Análisis de regresión para el grupo tratado con el insecticida Raid 
eléctrico 45 noches. 
 
Horas de exposición
F
re
cu
e
n
ci
a
 d
e
 m
ic
ro
n
ú
cl
eo
s/
1
0
0
0 2 4 6 8 10 12
0
2
4
6
8
p=0.876 
r=0.0395 
e 
o 
o 
o 
o o o o o 8 
o o 
o o 
o o 
 32
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
En el cuadro III aparecen los resultados promedio ± error estándar de los 
micronúcleos cuando los cortes de Tradescantia se sometieron a vapores del 
insecticida Baygon plaquitas y los valores no difieren estadísticamente de los 
testigos (p>0.05, ¨U¨ de Mann Whitney). 
F
re
cu
en
ci
a 
de
 m
ic
ro
nú
cl
eo
s/
10
0
0
2
4
6
8
Testigos Tratados
Figura 10. Diagrama de caja que compara los porcentajes de micronúcleos en las 
tétradas de Tradescantia expuestos al insecticida esbiotrina y los testigos. 
Io 
o 
I 
 33
Cuadro III. Porcentaje de micronúcleos en tétradas de Tradescantia expuestos a 
vapores del insecticida Baygon plaquitas. 
 
 
El análisis de regresión (figura 11) determinó que no existe correlación de 
la frecuencia de micronúcleos con el tiempo de exposición al insecticida Baygon 
plaquitas (p=0.2520, r=0.2848). 
 
 
 
 
 
Horas de 
exposición 
Tétradas 
analizadas Experimento I Experimento II Experimento III 
 Testigo Tratado Testigo Tratado Testigo Tratado 
 x ± E.E. x ± E.E. x ± E.E. x ± E.E. x ± E.E. x ± E.E. 
2 3500 2.6 ± 0.63 3.0 ± 0.81 3.0 ± 0.26 4.0 ± 1.0 2.7 ± 0.76 3.1 ± 0.61 
 
4 3500 4.2 ± 1.02 5.0 ± 1.10 3.4 ± 0.98 5.9 ± 0.97* 4.3 ± 0.36 4.6 ± 0.50 
 
6 3500 2.3 ± 0.30 4.3 ± 0.68 3.8 ± 0.14 3.6 ± 0.19 4.1 ± 0.55 5.3 ± 0.49 
 
8 3500 3.0 ± 0.10 3.5 ± 0.59 4.5 ± 1.25 4.8 ± 0.98 3.3 ± 0.28 3.4 ± 0.27 
 
10 3500 3.6 ± 0.16 3.4 ± 0.06 3.3 ± 0.24 3.3 ± 0.07 3.6 ± 0.12 4.4 ± 0.39 
 
12 3500 1.8 ± 0.33 2.9 ± 0.20 3.2 ± 0.37 3.3 ± 0.51 3.1 ± 0.29 3.9 ± 0.41 
 
Significativo* p<0.05 
 34
 
 
El análisis exploratorio de los datos (figura 12) demuestra que la tendencia de 
los testigos es ligeramente asimétrica hacia la derecha con un valor atípico 
mientras que el grupo de los tratados se comporta de manera asimétrica con 
tendencia hacia la derecha sin algún valor atípico (Winer 1971) 
Horas de exposición
F
re
cu
en
ci
a 
de
 m
ic
ro
nú
cl
eo
s/
10
0
0 2 4 6 8 10 12
2.9
3.4
3.9
4.4
4.9
5.4
5.9
6.4
 Figura 11. Análisis de regresión para el grupo de tratados con el insecticida d-
aletrina. 
 
 
p=0.2520 
r=0.2848 
<> 
<> 
<> 
<> 
<> 
<> 
<> 
<> 
 35
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
En el cuadro IV no se observó diferencia significativa de la frecuencia de 
micronúcleos con respecto a los testigos para cada experimento, a los distintos 
tiempos de exposición (p>0.05, ¨U¨ de Mann Whitney), ni tampoco correlación 
entre la frecuencia de MCN de los grupos tratados y los tiempos de exposición al 
aplicar un análisis de regresión simple (p=0.4956, r= 0.1717) (figura 13). El 
análisis exploratorio de los datos (figura 14) muestra que la distribución de los 
mismos, tanto para el grupo de los tratados como los testigos de los tres 
experimentos tienen una tendencia hacia la izquierda presentando una asimetría 
sin ningún valor atípico sobre el eje Y. 
F
re
cu
en
ci
a 
de
 m
ic
ro
nú
cl
eo
s/
10
0
1.5
2.5
3.5
4.5
5.5
6.5
7.5
Testigos Tratados
 
Figura 12. Diagrama de caja de los porcentajes de micronúcleos en tétradas de 
Tradescantia inducidos para los testigos y tratados en los tres experimentos 
expuestos al insecticida d-aletrina. 
+ 
I 
o 
 36
Cuadro IV. Porcentaje de micronúcleos en tétradas de Tradescantia expuestos a 
vapores del insecticida Raid Plaquitas. 
 
 
Horas de 
exposición 
Tétradas 
analizadas Experimento I Experimento II Experimento III 
 Testigo Tratado Testigo Tratado Testigo Tratado 
 x ± E.E. x ± E.E. x ± E.E. x ± E.E. x ± E.E. x ± E.E. 
2 3500 3.5 ± 0.57 4.5 ± 1.32 2.3 ± 0.45 2.5 ± 0.39 4.3 ± 1.20 4.8 ± 1.50 
 
4 3500 3.8 ± 0.57 3.8 ± 0.65 3.1 ± 0.24 2.8 ± 0.32 3.9 ± 0.40 3.1 ± 0.28 
 
6 3500 3.6 ± 0.47 4.7 ± 0.71 4.3 ± 1.20 4.2 ± 1.10 2.0 ± 0.54 2.5 ± 0.39 
 
8 3500 3.5 ± 0.59 4.1 ± 0.52 2.7 ± 0.32 3.2 ± 0.20 3.4 ± 0.28 3.4 ± 0.30 
 
10 3500 2.9 ± 0.74 3.1 ± 0.37 3.9 ± 0.34 3.8 ± 0.12 3.6 ± 0.12 4.4 ± 0.39 
 
12 3500 3.0 ± 0..76 4.5 ± 1.39 3.0 ± 1.65 4.1 ± 1.17 4.0 ± 0.14 3.9 ± 0.41 
 
 
 
 37
 
Horas de exposición
F
re
cu
en
ci
a 
de
 m
ic
ro
nú
cl
eo
s/
10
0
0 2 4 6 8 10 12
2.5
2.9
3.3
3.7
4.1
4.5
4.9
5.3
 Figura 13 Análisis de regresión para el grupo de tratados con el insecticida Raid-plaquitas. 
 
p=0.4956 
r=0.1717 
<> 
<> 
<> 
<> 
<> o <> 
<> 
<> 
 38
 
 
 
 
En el cuadro V aparecen los resultados de micronúcleos cuando los 
cortes de Tradescantia se sometieron a vapores de hidrazida málica 1mM 
(herbicida) como testigo positivo, presentándose diferencia significativa con p 
<0.05 (¨U¨ de Mann Whitney) en las exposiciones de 2, 4, 6, 8 y 10 horas. 
Mientras que para las 12 horas de exposición se presentó daño fisiológico 
(marchitamiento de las plantas con color amarillento) lo que impidió el análisis de 
los micronúcleos en este grupo. 
 
 
 
 
F
re
cu
en
ci
a 
de
 m
ic
ro
nú
cl
eo
s/
10
0
2
2.5
3
3.5
4
4.5
5
Testigos Tratados
 
Figura 14 Diagrama de caja que compara los porcentajes de micronúcleos en 
tétradas de Tradescantia en los grupos testigo y tratados en los tres experimentos 
expuestos al insecticida Raid-plaquitas. 
f-t-
f-
f- T 
f- 1 
1 + 
f-
+ 
-
l 
F-
_1 
E:... -
 39
 
 
 
 
 
 
 
Se encontró que existe correlación entre el porcentaje de micronúcleos de 
los tratados con hidrazida málica de los tres experimentos y el tiempo de 
exposición (p= 0.003, r = 0.8064) (figura 15), mientras que el gráfico de cajas y 
bigotes (figura 16) muestra la distribución de los datos de los dos grupos, 
testigos y tratados durante los tres experimentos, los testigos casi presentan una 
simetría mientras que el grupo tratado tiende a presentarse hacia la izquierda sin 
ningún valor atípico para los dos grupos. 
 
 
 
 
 
 
Horas de 
exposición 
Tétradas 
analizadas Experimento I Experimento II Experimento III 
 Testigo Tratado Testigo Tratado Testigo Tratado 
 x ± E.E. x ± E.E. x ± E.E. X ± E.E. x ± E.E. x ± E.E. 
2 3500 3.7±0.57 6.5±1.32* 3.6±0.45 6.8±0.39* 3.3±1.20 6.3±1.50* 
 
4 3500 3.2±0.57 5.8±0.65* 2.5±0.24 8.7±0.32** 3.0±0.40 7.5±0.28** 
 
6 3500 3.1±0.47 6.0±0.71* 3.5±1.20 9.3±1.10** 3.7±0.54 9.0±0.39** 
 
8 3500 3.3±0.59 11.6±0.52** 4.3±0.32 10±0.20** 4.4±0.28 10.1±0.30** 
 
10 3500 3.6±0.74 9.9±0.37** 3.6±0.34 9.9±0.12** 3.9±0.12 10.4±0.39** 
 
Significativo*p<0.05 
Muy significativo**p<0.01 
Cuadro V. Porcentaje de micronúcleos en tétradas de Tradescantia expuestos a vapores de 
hidrazida málica como testigo positivo. 
 
 
 40
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
Horas de exposición
F
re
cu
en
ci
a 
de
 m
ic
ro
nú
cl
eo
s/
10
0
0 2 4 6 8 10
5.8
7.3
8.8
10.3
11.8
 
Figura 15. Análisis de regresión para el grupo de tratados con la hidrazida málica 
 
p=0.003 
r=0.8064 
<> 
<> 
<> 
<> 
 41
 
 
 
 
 
Como solo para el insecticida Raid 45 noches se encontraron diferencias 
significativas en los porcentajes de micronúcleos (p <0.05, ¨U¨ de Mann Whitney) 
(cuadro II), que fue el único de los piretroides que contiene un disolvente, el 
dihidrobutiltolueno (HBT), entonces se realizó un experimento nuevo aplicando la 
misma concentración que indica su formulario en la etiqueta 200 g/kg. Estos 
resultados se presentan en el cuadro VI y muestra que para los tres tiempos de 
exposición y sus réplicas hubo diferencias significativas con sus respectivos 
testigos. 
 
 
 
 
 
F
re
cu
en
ci
a 
de
 m
ic
ro
nú
cl
eo
s/
10
0
0
2
4
6
8
10
12
Testigos Tratados
Figura 16 Diagrama de caja que compara los porcentajes de micronúcleos en 
tétradas de Tradescantia en los grupos testigo y tratados en los tres experimentos 
expuestos a hidrazida málica. 
I 
+ 
I 
 42
Cuadro VI Porcentaje de micronúcleos en tétradas de Tradescantia expuestos a 
vapores del dihidrobutiltolueno. 
 
El análisis de regresión determinó que no existe una correlación , dado que el 
valor de p es mayor que 0.05 (p=0.2253) y el coeficiente de correlación fue 
(r=0.449). Lo que significa que no existe relación entre los tratados de los tres 
experimentos con las horas de exposición (figura17). 
Horas de 
exposición 
Tétradas 
analizadas Experimento I Experimento II Experimento III 
 Testigo Tratado Testigo Tratado Testigo Tratado 
 x ± E.E. x ± E.E. x ± E.E. x ± E.E. x ± E.E. x ± E.E. 
4 3500 
 
 2.5 ± 0.08 4.4 ± 0.09 * 2.9 ± 0.11 4.9 ± 0.21* 2.7 ± 0.06 4.9 ± 0.21* 
 
6 3500 2.5 ± 0.06 4.7 ± 0.10* 2.6 ± 0.08 4.7 ± 0.11* 3.1 ± 0.14 4.9 ± 0.19* 
 
8 3500 2.7 ± 0.08 4.9 ± 0.15* 2.9 ± 0.08 4.7 ± 0.21* 3.0 ± 0.15 5.7 ± 0.14* 
 
 Significativo* p<0.05 
 43
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
Mientras que en el gráfico de cajas y bigotes del análisis exploratorio de Tukey 
En la figura 18 se observa la distribución de los datos (porcentaje de 
micronúcleos), tanto para el grupo testigo como los tratados con el 
dihidrobutiltolueno (HBT). La prueba no paramétrica ¨U¨ de Mann Whitney nos 
permite demostrar que si existe diferencia significativa entre estos dos grupos a 
una p<0.01. 
Horas de exposición
F
re
cu
e
n
ci
a
 d
e
 m
ic
ro
n
ú
cl
eo
s/
1
0
0
2 4 6 8 10
4.4
4.7
5
5.3
5.6
5.9
Figura 17. Análisis de regresión para el grupo de tratados con dihidrobutiltolueno. 
 
p=0.2253 
r=0.449 
o 
 44
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
F
re
cu
en
ci
a 
de
 m
ic
ro
nú
cl
eo
s/
10
0
2.5
3.5
4.5
5.5
6.5
Testigos Tratados
Figura 18. Diagrama de caja de los porcentajes de micronúcleos en tétradas 
de Tradescantia inducidos en los tres experimentos expuestos y no expuestos 
al dihidrobutiltolueno (HBT). 
" 
± 
I 
 45
VIII. DISCUSION 
Las frecuencias de micronúcleos inducidas por las exposiciones a 4, 6 y 8 
horas a Raid eléctrico 45 noches (cuadro II), corroboran lo observado por Das et 
al. (1994), quienes encuentran una incidencia alta de aberraciones 
cromosómicas y de micronúcleos en los macrófagos de los alvéolos pulmonares 
en ratas que estuvieron expuestas intermitentemente a vapores estáticos del 
insecticida piretroide esbiotrina (el mismo que contiene el Raid eléctrico 45 
noches) en una cámara de inhalación cerrada por 1 día (15 min/h, 8 /h/día). 
En nuestros experimentos en los tiempos de exposición de 10 y 12 horas 
(cuadro II), no se encontró diferencia significativa con respecto al testigo 
negativo. 
Aunque los piretroides se han reportado en Salmonella como no 
mutagénicos, en células V79 de criceto (Bartsch et al. 1980) y en células de 
mamíferos in vivo fueron clastogénicos (Ammer y Aboul Ela 1985, Bhunya y Pati 
1988, 1990, Pati y Bhunya 1989). Liu y Wong (1987), Liu y Sun (1988) y Liu et al. 
1989) observaron cambios morfológicos y bioquímicos en células del tracto 
respiratorio en ratas que fueron expuestas a vapores liberados a partir del 
piretroide (cipermetrina). Esto implica que estos insecticidas podrían ser 
riesgosos en cuanto a toxicidad y a permanencia en el ambiente y posiblemente 
repercutir sobre la salud humana. 
En los cuadros III y IV, se muestran los porcentajes de micronúcleos 
producidos con los otros dos vaporizadores eléctricos, Baygon plaquitas y Raid 
plaquitas, cuyos valores no difieren estadísticamente con los testigos. Cabe 
mencionar que los insecticidas comerciales se presentan en una plaquita de 
cartón impregnada del insecticida piretroide esbiotrina, en el primer caso a la 
concentración de 40 mg y en el segundo de la mitad (20 mg), mientras que en el 
Raid eléctrico 45 noches la esbiotrina se encuentra exactamente en la misma 
concentración que el Raid Plaquitas pero es una mezcla líquida con el disolvente 
dihidrobutiltolueno (HBT). Es posible que en ocasiones los efectos toxicológicos 
o genotóxicos que se adjudican a los insecticidas pueden ser provocados por 
sus agentes inertes o emulsificantes como lo indica la Agencia de Protección 
 46
Ambiental de los EUA (EPA 1999). Entre los más comunes son los destilados de 
petróleo que pueden ser mezclas de hidrocarburos aromáticos o como el tolueno 
o xileno (fuertemente odoríferos) que estabilizan la solución del insecticida o lo 
hacen más emulsificante 
Van-Kreijl y Sloof (1985) y Mavournin et al. (1990), reportan la eficiencia 
del tolueno en inducir aberraciones cromosómicas y al liberar compuestos 
orgánicos cuando exponen la kerosina a una fuente de calor, inducen 
mutaciones en Salmonella typhimurium (Mumford et al. 1992). Löfroth (1988), 
menciona que las partículas colectadas durante la combustión del insecticida 
piretroide, resmetrina de tipo espiral que poseen además compuestos inertes, 
deben también de influir en los resultados encontrados con la prueba de Ames 
(Salmonella typhimurium), ya que se inducen mutaciones revertantes con este 
bioensayo. 
También se ha encontrado que el tolueno produce aberraciones de tipo 
subcromatídico en Vicia faba (haba) en tiempos de exposición de 1 a 2 horas 
(Gómez-Arroyo et al. 1986). Como el dihidrobutiltolueno es un ingrediente 
catalogado inerte en la mezcla líquida del insecticida Raid 45 noches 
(esbiotrina), podría ser el causante del daño genotóxico observado en 
Tradescantia y esto concuerda con lo mencionado por Das y Sahu (1996), que 
seria importante probar los diferentes componentes de este tipo de insecticidas 
para determinar en que proporción esta contribuyendo cada componente en 
provocar daño al ADN. Para corroborar esto, se realizó otro experimento solo 
con los tiempos de exposición que resultaron significativos con el insecticida 
Raid 45 noches (4, 6 y 8 h), en el que se utilizó el dihidrobutiltolueno (HBT) en la 
proporción marcada en la etiqueta. Los resultados demostraron diferencias 
significativas (p<0.05) con respecto al testigo para los tres tiempos de exposición 
aplicados por lo que se puede considerar que el ingrediente ¨inerte¨, el 
dihidrobutiltolueno (HBT) en la mezcla del Raid 45 noches es el responsable de 
la producción de los micronúcleos en la células gaméticas de Tradescantia. 
En el cuadro V están los resultados de la exposición al plaguicida 
hidrazida málica empleado como testigo positivo. La frecuencia de micronúcleos 
 47
se incrementa conforme aumenta el tiempo de exposición existiendo una 
relación tiempo de exposición respuesta p=0.0003 con 2, 4, 6, 8 y 10 horas 
mientras que, en 12 horas no se pudieron realizar las lecturas correspondientes; 
ya que se observó marchitamiento con color amarillento que hace suponer que 
hubo retardo en la meiosis, lo que explica lo ocurrido con el cuadro II, en las 
exposiciones de 10 y 12 horas en que se observan algunas manchas 
amarillentas, en este caso no se pudieron realizar las lecturas y no se 
encontraron diferencias significativas entre los experimentos (p>0.05, ¨U¨ de 
Mann Whitney). 
Los piretroides son insecticidas sintéticos que se han ido introduciendo en 
los mercados sustituyendo tal vez a los que comparados con éstos ocasionan 
mayor daño a la salud. En algunos trabajos ya mencionados se cita a estos 
insecticidas como seguros para la salud humana por su baja toxicidad, mientras 
que en otras investigaciones se cuestiona hasta que punto se les puede 
considerar de esta manera, ya que continuamente su estructura está siendo 
modificada para incrementar su persistencia en el ambiente. 
Una gama de insecticidas piretroides como resmetrina, esbiotrina, 
cipermetrina, transflutrina y bifentrina, entre otros, se han encontrado en una 
variedad de marcas de insecticidas y son utilizados para el control intramuros de 
insectos voladores en lugares como casas habitación, hospitales, restaurantes, 
escuelas, oficinas, supermercados, guarderías, asilos, cines y hoteles. 
 
 
IX. CONCLUSIONES 
 
Los efectos toxicológicos que se adjudican a los insecticidas en diversas 
ocasiones es posible que sean debidos a otros agentes como los inertes o los 
emulsificantes, que son sustancias que se añaden a los plaguicidas para 
incrementar el poder letal de los ingredientes activos. En este trabajose dedujo 
que el producto conocido como Raid eléctrico 45 noches que tiene como 
ingrediente activo al piretroide esbiotrina o d-aletrina, en una mezcla 
 48
IX. CONCLUSIONES 
 
Los efectos toxicológicos que se adjudican a los insecticidas en diversas 
ocasiones es posible que sean debidos a otros agentes como los inertes o los 
emulsificantes, que son sustancias que se añaden a los plaguicidas para 
incrementar el poder letal de los ingredientes activos. En este trabajo se dedujo 
que el producto conocido como Raid eléctrico 45 noches que tiene como 
ingrediente activo al piretroide esbiotrina o d-aletrina, en una mezcla 
considerada inerte que actúa como inductora de genotoxicidad, que no produce 
el ingrediente activo. La US-EPA menciona que existen en la actualidad una 
enorme cantidad de sustancias inertes que son utilizadas como disolventes de 
diversos productos químicos y lo más preocupante es que no se conoce aun su 
toxicología (EPA 1999). 
La utilización de algunos sistemas biológicos para monitorear el ambiente 
in situ o in vitro son herramientas muy versátiles en la mutagénesis y en la 
citogenética actual, la finalidad de estos sistemas es establecer el nexo que 
existe entre los factores ambientales a los que está expuesto el organismo y el 
desarrollo de alteraciones biológicas como resultado a dicha exposición. 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 49
X. REFERENCIAS 
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Dorman D. y Beasley (1991). Neurotoxicology of pyrethrin and the pyrethroid 
	Portada
	Índice
	Resumen
	I. Introducción
	II. Antecedentes
	III. Hipótesis IV. Objetivos V. Materiales y Métodos 
	VI. Diseño Experimental
	VII. Resultados
	VIII. Discusión
	IX. Conclusiones
	X. Referencias

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