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1698-2007-ESM-MAESTRIA-jimenez-sanchez-victorinaelizabeth

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PORTADA 
INSTITUTO POLITÉCNICO NACIONAL 
ESCUELA SUPERIOR DE MEDICINA 
SECCIÓN DE ESTUDIOS DE POSGRADO E INVESTIGACIÓN 
 
 
 
 
 
LA SIGNIFICACIÓN DEL CUERPO EN LA DONACIÓN 
DE ÓRGANOS HUMANOS DESDE LA PERSPECTIVA DE LA 
BIOÉTICA PRINCIPIALISTA 
 
 
 
 
T E S I S 
 QUE PARA OBTENER EL GRADO ACADÉMICO DE 
 
 
 
 
MAESTRO EN CIENCIAS EN BIOÉTICA 
 
 
 
 
P R E S E N T A 
 
 
MED. CIR Y HOM. VICTORINA ELIZABETH JIMENEZ 
SANCHEZ 
 
 
D EN C. JOAQUÍN OCAMPO MARTÍNEZ 
D EN C. GUADALUPE CLEVA VILLANUEVA LÓPEZ
 
DIRECTOR DE TESIS: 
CODIRECTORA DE TESIS: 
 
 
 
 
México, D. F., 2007 
 
http://www.esm.ipn.mx/esm1.0/html/sitio2/Index1.html
 
 2
 
 3
 
 
 
 
 
 
 
 i
 
ÍNDICE 
 
 
 
RESUMEN ........................................................................................................................................ 1 
 
ABSTRACT ....................................................................................................................................... 2 
 
INTRODUCCIÓN................................................................................................................................. 3 
 
CAPÍTULO 1 
 
ANTECEDENTES HISTÓRICO- CONTEXTUALES ..................................................................................... 5 
 
CAPÍTULO 2 
 
PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA, JUSTIFICACIÓN Y OBJETIVOS ......................................................... 10 
 
2.1 Planteamiento del problema ......................................................................................... 18 
2.2 Justificación y objetivos ................................................................................................ 19 
 
CAPÍTULO 3 
 
MARCO CONCEPTUAL Y METODOLOGÍA ............................................................................................ 22 
 
3.1 Marco conceptual.......................................................................................................... 23 
3.1.1 Aspectos médico-legales de la donación ..................................................................... 23 
3.1.2 El significado del cuerpo humano................................................................................. 30 
3.1.3 El principialismo secular ............................................................................................... 35 
3.2 Metodología .................................................................................................................. 40 
 
CAPÍTULO 4 
 
ANÁLISIS Y DISCUSIÓN .................................................................................................................... 41 
 
Categorías de análisis 
4.1 El papel del significado del cuerpo de un donante potencial en la dinámica de la 
donación de órganos y tejidos ...................................................................................... 42 
4.2 La autonomía y el acto de donar ................................................................................. 49 
4.3 Beneficencia y no maleficencia en el contexto de la donación de órganos ................. 60 
4.4 Justicia y donación de órganos .................................................................................... 65 
 
CAPÍTULO 5 
 
CONCLUSIONES Y PROPUESTAS ...................................................................................................... 68 
 
GLOSARIO...................................................................................................................................... 75 
 
BIBLIOGRAFÍA................................................................................................................................. 78 
 
APÉNDICES 
 
APÉNDICE 1 ................................................................................................................................... 86
 
APÉNDICE 2 ................................................................................................................................... 97 
 
 
 ii
 
 
RELACIÓN DE GRÁFICAS, CUADROS Y MAPAS 
 
 
 
 
GRÁFICAS 
 
No. 1. Trasplante de riñón en México...................................................................................... 7a 
No. 2. Trasplantes en México................................................................................................ 10a 
No. 3. Distribución porcentual de casos de insuficiencia renal crónica trasplantados a partir 
de donador vivo o cadavérico y no trasplantados ........................................................ 11 
No. 4. Profesionales involucrados en el proceso de la donación y trasplantes de órganos y 
tejidos registrados en el cenatra................................................................................... 13 
No. 5. Distribución de centros de trasplantes por regiones..................................................... 13 
No. 6. Distribución por Programas de Trasplante dentro de la República Mexicana ............. 15 
No. 7. Distribución de coordinadores hospitalarios por profesión........................................... 16 
 
CUADROS 
 
No. 1. Mortalidad General por causas seleccionadas susceptibles de ser intervenidas 
mediante trasplante ...................................................................................................... 10 
No. 2. Opinión sobre la donación y trasplante de órganos de las diferentes religiones ......... 58 
 
MAPAS 
 
No. 1. Ubicación de la infraestructura con capacidad de realizar trasplantes, según tipo de 
órgano y tejido, en el territorio nacional........................................................................ 14 
No. 2. Distribución de centros de trasplantes en el Distrito Federal ....................................... 14 
No. 3. Heterogénea organización, desarrollo, infraestructura y asignación presupuestal por 
institución y región geográfica ...................................................................................... 15 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 iii
 
 
 
 
 
AL INSTITUTO POLITÉCNICO NACIONAL 
A LA ESCUELA NACIONAL DE MEDICINA Y HOMEOPATÍA 
A LA ESCUELA SUPERIOR DE MEDICINA 
 
 
 
A mi madre, a Javier mi esposo y a mis hijos 
Javier, Erika y Victor 
 
 
 
mi gratitud por estar siempre conmigo en esta compleja tarea 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 iv
 
 
 
 
 
 
RESUMEN 
 
 
 
 
 
 Es incuestionable que en la actualidad existen pocos donadores de 
órganos para trasplante, con relación a los diversos factores que inciden en el 
aumento de las enfermedades crónico-degenerativas que cursan con alguna 
insuficiencia orgánica o funcional irreversible, y que requerirán como tratamiento 
idóneo, el trasplante de un órgano para restablecer la función, o como único 
camino para preservar la vida de las personas afectadas. Por tal motivo, el trabajo 
desarrollado en esta tesis, hace una reflexión sobre la influencia que el cuerpo – 
como estructura significada-, puede tener sobre la decisión que debe tomar una 
persona para donar o no un órgano de su cuerpo, en vida o después de su 
muerte, o bien, de consentir la donación de uno o varios órganos de algún familiar 
fallecido, en virtud de que dicho significado del cuerpo y la imagen que se tiene de 
el es resultado de todo un proceso socio-cultural que le condiciona su manera de 
ver, sentir y en gran medida vivir su propio cuerpo. 
 
Asimismo, se hace un análisis a través de los principios de autonomía, 
beneficencia, no maleficencia y justicia de la bioética principialista secular -
propuesta por Beauchamp y Childress-, sobre las ideas morales y éticas que 
surgen en el proceso de donación de órganos. Se aborda además un marco 
conceptual vinculado a la problemática de la donación que se toma como punto 
de partida para la reflexión bioética. Finalmente, se hacen algunas propuestas 
para enfrentar el problema. 
 
 
 
 
 
 
 1
 
 
 
 
 
 
 
ABSTRACT 
 
 
 
Is unquestionable that at in the present time exists few donors of organs for 
transplant, inrelation to the diverse factors that affect the increase of the chronic-
degenerative diseases that attend with some irreversible organic or functional 
insufficiency, and that they will require like suitable treatment, the transplant of an 
organ to restore the function, or like only way to preserve the life of the affected 
people. 
By such reason, the work developed in this thesis, makes a reflection on the 
influence that the body - like meant structure -, can have on the decision that must 
take a person to donate or not an organ of its body, in life or after its death, or, to 
allow the donation of one or several organs of a death away relative body, by 
virtue of which this meaning of the body (the body) and the image that is had of is 
been of a whole socio-cultural process that conditions its way to see him, to feel 
and to a great extent to live its own body. 
Also, one becomes an analysis through the principles of autonomy, charity, non 
slander and justice of the secular bioethical principals - propose by Beauchamp 
and Childress -, about moral and ethical the ideas that they arise in the process of 
donation of organs. A conceptual join frame to the problematic one is approached 
in addition to the donation that is taken like departure point for the bioethical 
reflection. Finally, some proposals are made to face the problem. 
 2
 
INTRODUCCIÓN 
 
 
 
 
 
Esta tesis surge -como señaló Husserl1- de la inquietud de encontrar en la 
experiencia del cuerpo humano, un mediador de la propia existencia. El interés 
sobre el tema se debe a la posibilidad que tiene el individuo de donar un órgano 
de su cuerpo o todos sus órganos después de su fallecimiento o bien, de dar su 
consentimiento para donar los órganos de un familiar fallecido, considerando que 
el ser humano está inmerso en una sociedad que le condiciona su manera de ver, 
sentir y en gran medida vivir su propio cuerpo; una sociedad a la que se 
pertenece y que marca una percepción colectivizada sobre el. 
 
La determinación de donar o no un órgano se puede analizar, por ejemplo, 
desde la perspectiva filosófica del significado del cuerpo humano, considerando la 
percepción que los sujetos tienen de su propio cuerpo y las ideas morales o éticas 
que tienen sobre el acto de donar sus órganos, derivadas de dicha percepción. 
Tales ideas a su vez, pueden ser objeto de reflexión, desde la perspectiva bioética 
del principialismo secular a través de los principios de beneficencia y no 
maleficencia, al mantener la exigencia ética de la seguridad de que la intervención 
quirúrgica no cause daño a los donantes, y de que la técnica garantice al máximo 
el buen resultado de la intervención, por lo que deberá ser necesariamente un 
acto consciente y responsable. De la misma manera, se puede abordar el 
principio de autonomía y su relación con la libertad como valor moral, para la toma 
de decisiones, por su importancia relacionada con la necesidad de obtener el 
consentimiento bajo información por parte del donante o, en su caso, de los 
tutores o representantes legales. Así también, el principio de justicia sobre ciertos 
criterios que eviten la discriminación ante la desigualdad social en la donación y 
recepción de órganos. Se abordarán además otros conceptos vinculados a la 
problemática sobre la donación de órganos con fines de trasplante que siempre 
son motivo de una profunda reflexión para toda la sociedad en su conjunto. 
 
 3
1 Husserl, E. Meditations cartesiennes. Citado por Lain Entralgo, P. El cuerpo humano. Teoría 
actual. Espasa Calpe. 2ª edición. Madrid, 1989, pág. 116. 
 
 
El documento esta dirigido a todos los profesionales de la salud, aquellos 
que bajo disciplinas distintas puedan abordar la problemática de la donación de 
órganos humanos como son los abogados, economistas, sociólogos, 
antropólogos, ministros de culto, psicólogos, entre otros, y muy particularmente, a 
los profesionales que encuentren en los principios de la bioética principialista 
secular un sustento a sus acciones. 
 
Esta tesis esta estructurada en cinco capítulos, una sección bibliográfica, 
un glosario, una relación de gráficas, cuadros y mapas y dos apéndices. 
 
En su desarrollo se presentan los antecedentes histórico-contextuales 
necesarios para comprender la dinámica que sobre donación y trasplante de 
órganos se ha desarrollado en México, así como la problemática que enfrenta 
nuestro país sobre donación de órganos con fines de trasplante. Asimismo se 
plantean diversos estudios realizados a nivel internacional, que justifican la 
importancia de conocer las variables que influyen y determinan la actitud hacia la 
donación de órganos humanos. Esto constituye la piedra angular para orientar la 
reflexión bioética desde perspectivas diferentes entre ellas, el principialismo 
secular considerando además, el significado que cada quien da a su cuerpo y que 
no se ha tratado suficientemente. De ahí que el marco conceptual aborde: los 
ordenamientos legales que en nuestro país existen, en torno a trasplante de 
órganos y tejidos; las ideas y nociones que el hombre tiene de su cuerpo, 
tomando en cuenta el contexto socio-cultural e histórico que le permite 
interpretarlo de cierta manera y el principialismo secular como sistema de 
referencia moral y como marco de reflexión bioética. También, se anota el tipo de 
metodología abordada y el análisis y discusión sobre las implicaciones bioéticas 
del problema central, a partir de cuatro categorías de análisis. De igual manera, 
se plantean las conclusiones obtenidas y propuestas para un futuro trabajo que 
podrían llevarse a cabo acerca del tema. 
 4
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
CAPÍTULO 1 
 
ANTECEDENTES HISTÓRICO- CONTEXTUALES 
 
 
 
Es innegable que el siglo XX se caracterizó por los grandes avances 
científicos y tecnológicos en una multiplicidad de áreas del conocimiento y, sin 
duda alguna, en el área médica fue trascendental el de los trasplantes de órganos 
en humanos. La historia del trasplante es curiosa e interesante, existen papiros 
orientales y documentos chinos que ya describen la realización de trasplantes 50 
años a.C.2 En la religión cristiana católica se hace referencia a que los santos 
Cosme y Damián hicieron un trasplante a partir de un donante cadavérico (se 
narra la amputación de la pierna a un etíope muerto), para reemplazar la pierna 
gangrenada del diácono Justiniano, sacristán de la Basílica de Roma3. 
 
Durante la segunda guerra mundial, Peter Medawar utilizando como 
modelo experimental los trasplantes de piel en ratones, descubrió que el rechazo 
observado en los injertos tiene naturaleza inmunológica. Posteriormente Peter 
Gorer, describió los antígenos de histocompatibilidad en el riñón, ubicando sus 
genes en el cromosoma 174. En 1954, ocurre otro de los momentos históricos 
importantes para los trasplantes de órganos cuando Murray, Merril y Harrison, 
realizan el primer trasplante renal con éxito entre gemelos monocigóticos, en la 
ciudad de Boston, Massachussets, E.U.A. 
 
En la década de los años sesenta del siglo XX se inició la época científica 
de los trasplantes de órganos en humanos, que fueron juzgados como auténticas 
hazañas médico-científicas en el mundo, gracias a las técnicas de sutura vascular 
descritas por Jaboulay, Murphy y Payr y que fueron perfeccionadas por el Dr. 
Alexis Carrel5 en 1906. En México, en el año de 1963, Federico Ortiz Quezada, 
Manuel Quijano Narezo, Regino Ronces y Manuel Flores Izquierdo realizaron el 
primer trasplante renal de donador vivo en el entonces Centro Médico Nacional 
(hoy siglo XXI) del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS). En 1971, se inició 
el Programa de Trasplante en el Instituto Nacional de Nutrición “Dr. Salvador 
 
2 Secretaría de Salud. Programade acción: Trasplantes. México. 2005. pág. 21. 
3 Ibidem. 
4 Ibidem. 
 6
5 Alexis Carrel abre la posibilidad técnica y quirúrgica de realizar los trasplantes de órganos, de 
ahí que se le considere “padre del trasplante”. Lo que hace es intentar un alotrasplante renal 
en un perro, mediante la anastomosis vascular directa. En 1910, realiza trasplantes 
experimentales de riñones, tiroides, paratiroides, corazón y ovario y en 1912 recibe el Premio 
Nobel de Medicina y Fisiología. 
 
Zubirán”6 por Federico Chávez-Peón, Manuel Campuzano y José Luis Bravo y 
cuatro años después se efectuarán trasplantes en el Instituto Nacional de la 
Nutrición de la Secretaría de Salud (SSa), el Hospital Central Militar y el Instituto 
de Seguridad Social al Servicio de los Trabajadores del Estado (ISSSTE)7. Dos 
años después, Octavio Ruiz Speare y Samuel Zaltzman, condujeron el Programa 
de Trasplantes en niños en el Instituto Mexicano de Atención a la Niñez (IMAN). 
 
Ante este importante avance científico, en 1973 las autoridades se dieron a 
la tarea de regular la práctica de los trasplantes, en el Título Décimo del Código 
Sanitario de los Estados Unidos Mexicanos. En 1975, Ruiz Speare y Chávez-
Peón realizaron los primeros trasplantes renales en la medicina privada. Los 
avances continuaron y en 1979, Ricardo Sosa en el Instituto Nacional de Nutrición 
realizó el primer trasplante de médula ósea8. 
 
Hacia finales del decenio 1960 – 1970, los pacientes renales trasplantados 
con un riñón de cadáver continuaban falleciendo durante el primer año 
postoperatorio, lo que ocasionó un estancamiento en el programa de donación y 
trasplante. Este hecho sirvió como indicador a los especialistas para replantearse 
el por qué de las muertes, llegando a la conclusión de que éstas no obedecían a 
las técnicas quirúrgicas, sino a la carencia de un mejor medicamento 
inmunosupresor. Los avances de la medicina posibilitaron, por una parte, una 
nueva alternativa para incrementar las donaciones cadavéricas y, al mismo 
tiempo, expandir la diversidad de órganos (más grandes y complejos) a 
trasplantar, como son corazón, hígado, páncreas y pulmón, así como el llamado 
xenotrasplante (Gráfica No. 1). 
 
La década de los ochentas fue testigo de grandes pasos en materia de 
trasplantes en todo el mundo gracias a la introducción de la ciclosporina y México 
no fue la excepción. En 1984 se creó el Registro Nacional de Trasplantes como 
organismo responsable de vigilar el apego a la normativa, la expedición de 
licencias sanitarias para el funcionamiento de bancos de órganos, tejidos y 
 
6 Actualmente se conoce al Instituto Nacional de Nutrición como Instituto Nacional de Ciencias 
Médicas y Nutrición “Salvador Zubirán”. 
7 El Programa de Trasplante en el ISSSTE inicia en el Hospital 20 de Noviembre de 1976, a 
cargo de Javier Castellanos. 
 7
8 Secretaría de Salud. op. cit., pág. 22. 
 
células; la autorización para el internamiento o salidas de órganos, tejidos y 
células del país; contabilizar las disposiciones hechas y los trasplantes realizados, 
además, de llevar el registro de los pacientes en espera de trasplante de órganos 
cadavéricos. En ese mismo año, se establecieron en la Ley General de Salud 
(Título Décimocuarto), las disposiciones para el control sanitario de la Disposición 
de Órganos, Tejidos, Células y Cadáveres de Seres Humanos y en septiembre de 
1985 apareció el Reglamento correspondiente9. En 1987 Héctor Diliz Pérez y 
Héctor Orozco efectuaron el primer trasplante de hígado en el Instituto Nacional 
de la Nutrición “Salvador Zubirán”, en tanto que, en ese mismo año, otro equipo 
de especialistas conformado por Diliz y Valdés hizo lo propio en el caso del 
páncreas, mientras que Arturo Dib-Kuri efectuaba en el instituto ya señalado el 
primer trasplante multiorgánico de páncreas-riñón10. 
 
Un año significativo fue 1988, cuando en el Hospital de Especialidades del 
Centro Médico “La Raza” del IMSS, Rubén Argüero Sánchez hizo el primer 
trasplante de corazón y en 1989 sus colegas, Jaime Villalba Caloca y Patricio 
Santillán, realizaron en el Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias de la 
SSa., el primer trasplante exitoso de pulmón que fue también el primero en 
Latinoamérica. Sin embargo, y a pesar de haber sido pionero, México se 
caracterizó, en los últimos años, por un estancamiento en el programa de 
donación de órganos11. En ese mismo año se realizaron también trasplantes de 
médula ósea, de tejido suprarrenal a cerebro y de tejido nervioso por Ignacio 
Madrazo, en el Centro Médico “La Raza” del IMSS12. 
 
En 1999, Rafael Valdés realizó un xenotrasplante13 en el Hospital Infantil 
de México “Dr. Federico Gómez” y en 2001 llevó a cabo Alejandro Bolio el primer 
trasplante cardiaco pediátrico. A pesar de los grandes logros obtenidos en materia 
de trasplantes de órganos, en un inicio, se debieron vencer grandes obstáculos ya 
que la mayoría de los pacientes moría debido al rechazo que el organismo 
manifestaba ante la presencia de un nuevo órgano. 
 
9 Ibidem. 
10 Ibidem. 
11 Ibidem. 
12 Ibidem, pág. 24. 
 8
13 Se define Xenotrasplante al trasplante en el cual el donador y el receptor son de diferente 
especie. Ibidem, pág. 34. 
 
 
Finalmente, con la intención de activar la donación de órganos con fines de 
trasplante, el 19 de enero de l999 por Acuerdo Presidencial se creó el Consejo 
Nacional de Trasplantes (CONATRA), como una comisión intersecretarial de la 
administración pública federal, con el propósito de desarrollar un Sistema 
Nacional de Trasplantes y de promover, apoyar y coordinar las acciones en 
materia de trasplantes que realizan las instituciones de salud de los sectores 
Público, Social y Privado. El 26 de mayo del 2001 se publicó en el Diario Oficial 
de la Federación la reforma a la Ley General de Salud en su Título XIV referente a 
la “Donación, Trasplante y Pérdida de vida” en donde se establece la creación del 
Centro Nacional de Trasplantes (CENATRA). 
 
Atendiendo al insuficiente número de donadores potenciales, con respecto 
al incremento de enfermos con insuficiencia orgánica que requerirán de un 
trasplante para preservar la vida, y a los actuales avances científicos y 
tecnológicos, el Plan Nacional de Desarrollo (PND) y el Programa Nacional de 
Salud (PNS) 2001-2006 proponen un cambio en la atención de los enfermos con 
insuficiencia orgánica o tisular terminal, a través del diagnóstico temprano que 
ofrezca una oportunidad de trasplante de órgano. Proponen también la necesidad 
de un mayor grado de seguridad en la técnica de trasplante para la función y la 
vida tanto del receptor como del donante vivo, además de impulsar la 
investigación sobre la materia y desarrollar acciones con el fin de lograr una 
cultura de la donación, al establecer la premisa de que “una buena salud fortalece 
el desarrollo de una Nación”14. 
 
El Programa Nacional de Trasplantes de la Secretaría de Salud sustentado 
en el Plan Nacional de Desarrollo y Programa Nacional de Salud dispone de la 
siguiente información estadística que, si bien no permite a la fecha estimar con 
precisión la demanda potencial de diversos tipos de trasplantes, orienta sobre la 
creciente demanda de los padecimientos susceptibles de ser resueltos mediante 
un trasplante (Cuadro No. 1). 
 
 
 
 9
14 Presidencia de la República. Plan Nacional de Desarrollo 2001-2006.. México. Págs. 13-5. 
 
Cuadro No. 1 
 
Mortalidad General por causas seleccionadas susceptibles de ser 
intervenidas mediante Trasplante. Estados Unidos Mexicanos 2003 
 
Orden Clave CIE 10a. Rev. Descripción Defunciones Tasa 1 % 
 
 A00-Y98 Total 470 692 451.66 100.0 
 
1 E10-E14 Diabetes mellitus 59 119 56.73 12.6 
2 I20-I25 Enfermedades isquémicasdel corazón 50 757 48.70 10.8 
4 K70, K72.1, K73, K74, 
K76 
Cirrosis y otras enfermedades crónicas del 
hígado 26 821 25.74 5.7 
5 J40-J44, J67 Enfermedad pulmonar obstructiva crónica 18 117 17.38 3.8 
8 J10-J18, J20-J22 Infecciones respiratorias agudas bajas 13 738 10.07 2.2 
10 N00-N19 Nefritis y nefrosis 10 490 9.59 2.1 
 1 Tasa por 100 000 
habitantes 
 Los totales no incluyen defunciones de residentes en el extranjero 
Fuente: Elaborado a partir de la base de datos de defunciones INEGI 
 
 /Secretaría de Salud./.Dirección General de Información en Salud. 
 
Este cuadro evidencia dos de las enfermedades crónico-degenerativas más 
frecuentes en la población mexicana, la diabetes mellitus y las nefritis y nefrosis. 
Estas enfermedades se encuentran entre las primeras diez causantes de muerte 
por insuficiencia renal crónica terminal y susceptibles de ser intervenidas 
mediante un trasplante. 
 
La gráfica No. 2 señala que en la práctica, el trasplante más frecuente en 
México es el de riñón, debido a que es el órgano que se puede obtener a partir de 
un donador vivo relacionado o cadavérico. El resto de los órganos sólo puede 
obtenerse de un donante fallecido que, como se observa en la gráfica, no cumple 
la mínima demanda. Respecto a la demanda potencial de riñones para trasplante 
se estima que la incidencia de la insuficiencia renal, asciende al año a 100 casos 
nuevos por cada millón de habitantes. De manera conservadora si se calcula que 
el 50% llegase a ser candidato a un trasplante, esto significa que para satisfacer 
esta demanda potencial en la población actual de la República Mexicana, sería 
15necesario realizar 7 mil trasplantes renales al año. En cuanto a la edad, casi el 
58% se encuentra entre los 21 y 40 años. Respecto a los demás órganos se 
requerirían 500 de hígado y 500 de corazón15. 
 
 10
15 Secretaría de Salud. op. cit., pág.43. 
 
 
Asimismo el Registro Nacional de Trasplantes informó que en el 2001 sólo 
el 30% de los casos de pacientes con insuficiencia renal, candidatos a 
trasplante, lo llegan a obtener (Gráfica No. 3). Esto significa que el 70% restante 
de los casos de insuficiencia renal crónica solo podrían, en mucho de los casos, 
tener acceso a otro tipo de tratamiento como la diálisis peritoneal o a hemodiálisis. 
Esto genera el problema del costo-beneficio ya que el costo al cabo de 5 años de 
tratamiento de hemodiálisis vs trasplante es mucho mayor (3 a 1). Los costos 
anuales aproximados en dólares estadounidenses de los tratamientos que 
se ofrecen en nuestro país son: diálisis peritoneal continua ambulatoria 5,643.07, 
diálisis peritoneal intermitente y hemodiálisis a 9,631.60 y el trasplante 3,021.63, 
 
Gráfica No. 3 
Distribución porcentual de casos de insuficiencia 
renal crónica trasplantados a partir de donador vivo 
o cadavérico y no trasplantados. México 2000
10%
20%
70%
Donador cadavérico
Donador vivo relacionado
No trasplantados
 
Fuente: Registro Nacional de Trasplantes. Septiembre 2001. 
 
siendo esta última alternativa la que ofrece mayor índice de sobrevida16. Según la 
Organización Mundial de la Salud (OMS) para el año 2010, 40 % de los 
presupuestos para el sector salud de todos los países serán utilizados para 
trasplantes, y “para esta fecha, uno de cada cien mexicanos requerirá de algún 
 
 11
16 Rodríguez, MM. “Bioética y Donación de órganos cadavéricos”. Tesis de Maestría en 
Bioética. Monterrey, N.L., México. 2005. 
 
 
trasplante”17. De ahí que es de vital importancia hacer énfasis en una cultura de la 
donación a partir de donadores cadavéricos. Según CENATRA, un cadáver podría 
salvar 8 vidas. Se ha mencionado que, “La duración promedio de un riñón 
trasplantado es de aproximadamente 14 años, si se trata de un donador vivo y 
con una relación familiar (hermanos, padres o sobrinos); al cumplirse este plazo el 
paciente que recibió el riñón corre el riesgo de desarrollar silenciosamente un 
daño progresivo del riñón trasplantado y con ello, perder la función del mismo. 
Sin embargo, puede ser sometido a otra cirugía en la cual se injerte un nuevo 
órgano. Existen pacientes que cuentan con tres trasplantes de riñón”18. 
 
Por otra parte, durante la celebración de la Semana Nacional de 
Trasplantes y Donación de Órganos 2002 el Presidente de la República Fox 
Quezada, mencionó que cada año se requieren siete mil riñones, diez mil 
córneas, 500 hígados y 500 corazones para ser trasplantados, e indicó que en los 
últimos cinco años se han realizado en México tres mil quinientos trasplantes de 
órganos y téjidos19. 
 
México actualmente cuenta con 176 centros de trasplante de órganos y 
tejidos, tanto del sector público como privado, autorizados por el CENATRA y en 
donde están involucrados en el proceso de donación y trasplantes de órganos y 
tejidos 1 400 profesionales de diferentes disciplinas (Gráfica No. 4). 
 
 
 
 
 
 
 
 
17 Según afirmación del Dr. Armando Soberanes, Presidente de FUNFONAR. Cfr. Diario “El 
Financiero”. Enero 20, 2000, pág. 45. 
18 Según mención del Dr. José Luis Melchor Ortíz, Coordinador en turno de la Unidad de 
Trasplante Renal, Centro Médico Nacional (CMN) siglo XXI del IMSS. 
 12
19 Fox, V. II informe de gobierno. Semana Nacional de trasplantes y Donación de órganos. 
Disponible en: http://www.salud.gob.mx/apps/htdocs/gaceta/gaceta_011102/pag5.htm Acceso: 
01/08/2006. 
http://www.salud.gob.mx/apps/htdocs/gaceta/gaceta_011102/pag5.htm
 
Gráfica No. 4 
Profesionales involucrados en el proceso de la donación y trasplantes de 
órganos y tejidos registrados en el CENATRA
160 100
31
140
79
540
76
95
45
134
C. trasplantes Otras disciplinas
Secretarios técnicos Resp. De Programa de Tras.
Coordinaciones hospitalarios Médicos de diversas disciplinas
Procuradores de O y T Laboratoristas
Transportistas Trabajo social
 
 
 
Fuente: Registro Nacional de Trasplantes. Septiembre 2001. SSA 
 
En cuanto a la distribución de las unidades hospitalarias por estado la 
mayoría se encuentran localizadas en los estados del centro de la República 
Mexicana, con un total de 106 unidades, que corresponden al 60.7%, destacando 
el Distrito Federal con 57 unidades de trasplante. El norte de la República cuenta 
con 57 que equivale al 33.5% y el sur de la República únicamente con 10 
hospitales de trasplante, ubicados en los estados de Tabasco, Veracruz y 
Yucatán (Gráfica No. 5). 
Gráfica No. 5 
Distribución de centros de trasplantes por regiones
5.8%
60.7%
33.5%
Centro
Norte
Sur
 
Fuente: Registro Nacional de Trasplantes. Septiembre 2001. 
 13
 
En el mapa No. 1 se muestra la distribución por estado de las unidades 
hospitalarias autorizadas, para la realización de trasplantes de órganos dentro del 
territorio Nacional. 
Mapa No. 1 
Ubicación de la infraestructura con capacidad de realizar trasplantes, según 
tipo de órgano y tejido, en el territorio nacional 
 
 
Los centros hospitalarios de procuración de órganos y trasplantes, en el 
Distrito Federal se ubican principalmente en las delegaciones: Cuauhtémoc, 
Miguel Hidalgo, Tlalpan y Benito Juárez (Mapa No. 2). 
 
Mapa No. 2 
Distribución de centros de trasplantes en el Distrito Federal 
 
 14
 
Con relación a los programas autorizados por el CENATRA en nuestro 
territorio nacional predominan los programas de trasplante renal con 117 
programas establecidos, que representa el 45.8% del total de programas (Gráfica 
No. 6). 
 
Gráfica No. 6 
Distribución por Programas de Trasplante 
dentro de la República Mexicana
111
88
14
18 6 8 Riñon
Córnea
Corazón
Hígado
Pulmón
Hueso
Fuente: Registro Nacional de Trasplantes. Septiembre 2001. SSA
 
 
Sin embargo, la frecuenciade trasplantes es diversa, concentrándose la 
mayor actividad en Jalisco, Nuevo León, Coahuila, Aguascalientes y el Distrito 
Federal y existen Estados que no realizan actividad alguna como lo son: Tlaxcala, 
Oaxaca, Chiapas, Campeche, Quintana Roo entre otros (Mapa No. 3). 
 
Mapa No. 3 
 
 15
 
 
Asimismo, México cuenta con sólo 148 Coordinadores Hospitalarios en 
trasplante, reconocidos ante el Registro Nacional de Trasplantes, cuya finalidad 
es buscar e identificar posibles donantes (Gráfica No. 7). 
 
 Gráfica No. 7 
Distribución de coordinadores hospitalarios 
por profesión
45
385
60 T. social
Médicos
Psicólogos
Enfermeras
Fuente: Registro Nacional de Trasplantes. Septiembre 2001. SSA
 
 
 
 16
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
CAPÍTULO 2 
 
PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA, JUSTIFICACIÓN Y 
OBJETIVOS 
 
 
2.1 PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA 
 
Es incuestionable el hecho de que han aumentado notablemente las 
enfermedades que cursan con alguna insuficiencia orgánica o funcional 
irreversible y de que existen pocos donantes. La Fundación Mexicana de 
Donación Altruista de Órganos y Tejidos con Fines de Trasplante, A. C. 
(FUNDONAR) menciona que este incremento, principalmente de padecimientos 
renales, hepáticos y pulmonares, se debe a “la falta de medicina preventiva y a 
que la medicina curativa ha disminuido”20. Asimismo, la transición epidemiológica 
y demográfica permite prever, en un futuro próximo, un aumento de 
enfermedades crónico-degenerativas en las que las alteraciones anatómicas o 
funcionales, condicionantes de insuficiencia orgánica, requerirán el trasplante de 
un órgano como tratamiento idóneo para el restablecimiento funcional y la 
preservación de la vida de los pacientes21. 
 
Por otro lado, existen muchos factores de carácter psicológico y social que 
pueden explicar el por qué de la negativa de muchas personas a donar sus 
órganos y tejidos. Una de ellas es el significado que cada quien da a su cuerpo o 
la idea y noción acerca de él. Por otra parte, la donación de órganos es un acto 
con implicaciones morales y bioéticas en virtud de que debe ser un acto 
autónomo que busca la beneficencia de otros, no obstante al riesgo en diferente 
modo que conlleva para la salud del donante vivo. 
 
En este sentido se requiere de múltiples reflexiones que desde algunas 
perspectivas bioéticas, como el principialismo secular, proporcionen elementos 
que brinden un panorama ético-filosófico, al respecto, considerando otros factores 
como puede ser el significado que cada quien da a su cuerpo. Por lo tanto, hay 
que abordar qué clase de implicaciones bioéticas tiene el respeto a la autonomía 
de los donantes potenciales; si el beneficio a otros debe ser ilimitado y obligatorio; 
en qué sentido es importante el significado del cuerpo, considerando uno de los 
 
20 Según declaración del Dr. Armando Soberanes, Presidente de FUNDONAR. Cfr. Diario “El 
Financiero”. Enero 20, 2000, pág. 45. 
 18
21 Secretaría de Salud. op. cit., pág. 41. 
 
enfoques que se ha desarrollado al respecto, para el ejercicio de la autonomía y el 
acto de beneficiar, entre otras cuestiones. 
 
2.2 JUSTIFICACIÓN Y OBJETIVOS 
 
La problemática que en la actualidad enfrenta México sobre donación de 
órganos con fines de trasplante, parte de que hay un incremento cada vez mayor 
de enfermos con insuficiencia orgánica y existen pocos donantes, a pesar de que 
el Plan Nacional de Desarrollo (PND) y el Programa Nacional de Salud (PNS) 
2001-2006 que sustentan al Programa Nacional de Trasplantes de la Secretaría 
de Salud, han propuesto un cambio en la atención de los enfermos con 
insuficiencia orgánica a través de un diagnóstico temprano y tratamientos más 
eficaces, además de dar un mayor impulso a la investigación sobre esta materia y 
desarrollar acciones encaminadas al logro de una cultura de la donación. 
 
En general, estudios diversos realizados a nivel internacional, 
particularmente en España, sustentan la importancia de conocer las variables que 
influyen y determinan la actitud hacia la donación de órganos22. Los resultados 
de estudios de este tipo son fundamentales para orientar la reflexión bioética en 
diversas direcciones, como la que se pretende hacer en esta tesis tratando de 
abrir nuevos caminos hacia la comprensión de la dinámica peculiar propia de la 
donación de órganos y tejidos. 
 
Al respecto Frutos y Daga23 sostienen que hay una mayor actitud positiva 
hacia la donación de órganos, cuando se cuenta con información adecuada y 
suficiente24, así como, una preparación de la familia del potencial donante, 
incluso desde el momento de ingreso del paciente al hospital. Sumado a esto, es 
 
22 España se toma como modelo por haberse consolidado en los últimos años, en el primer lugar 
mundial en la tasa relativa de donantes y trasplantes de órganos de cadáveres. Cfr. Rando, 
B., Donaciòn de órganos y variables de personalidad y psicosociales asociadas. Anal de Psic. 
1995,11(2), p.121. 
23 Miguel A. de Frutos Sanz es Coordinador Sectorial de Trasplantes de Málaga, mientras que 
Domingo Daga es Coordinador de Trasplantes del Hospital Virgen de la Victoria de Málaga. 
 19
24 Rafael Matesanz al respecto menciona que el impresionante desarrollo alcanzado en los 
últimos años en España en cuanto a la donación de órganos se debe a “una información 
constante y transparente sobre los trasplantes” Cfr. Matesanz, R., El trasplante y los medios 
de comunicación. Disponible en: http://www.donación.organos.ua.es/on/rafa_1.html Acceso: 
7/03/2006. 
http://www.donaci%C3%B3n.organos.ua.es/on/rafa_1.html
 
importante también la satisfacción de los servicios prestados por el hospital y el 
trato humano que reciban del personal de salud25. En tanto las investigaciones 
realizadas por Durand-Zalenski et al (1996), Frutos et al (1994), Painter, Laglands 
y Walter (1995) revelan que el desconocimiento del deseo del fallecido a donar 
actúa como una barrera importante para la donación26. Sin embargo, a pesar del 
conocimiento de la utilidad que tiene el carnet del donante, estudios realizados 
por Blanca, Frutos y Rosel (1993), Evers, Farewell y Halloran (1988); Horton y 
Horton (1990); Rosel et al (1996), evidencian que la cifra de personas con tal 
conocimiento es muy inferior a la de quienes tienen intención de donar sus 
propios órganos27. 
 
Por otro lado, Puri Gómez y Carlos Santiago mencionan que en España el 
tipo medio de donante ha cambiado. En 1991 era un joven de 20 años muerto en 
accidente de tráfico y hoy se trata de un hombre de 45 años que sufre hemorragia 
cerebral. Por lo que refieren, “a pesar de que el perfil del donante ha cambiado, 
siguen siendo las muertes sorpresivas uno de los factores más condicionantes 
para la donación”28. 
 
Por su parte, Rando, Blanca y Frutos han encontrado que una actitud 
desfavorable hacia la donación se asocia con baja autoestima, mayor ansiedad, 
estado anímico deprimido, relaciones familiares inadecuadas, lugar de control 
externo, menor grado de altruismo, menor estabilidad emocional y menor grado 
de apoyo social29. 
 
 
25 Frutos Sanz, M. Y Daga, D., Relaciones con familias de donantes: actitudes del intensivista. 
Disponible en: http://www.uninet.edu/cimc2001/conferencias/trasplantes/relaciones/index.html 
Acceso: 20/03/2006 
26 Rando, B., Blanca, MJ. y Frutos, MA., Modelo de regresión logística para la intención de 
hacerse el carnet de donante de órganos y tejidos. Disponible en: 
http://www.psicothema.com/pdf/605.pdf Acceso: 22/03/2006. 
27 Ibidem. 
28 Gómez, P. y Santiago, C., son los responsables de la formación de todos los coordinadores de 
trasplante de la Organización Nacional de Trasplantes (ONT) de España. Cfr. Diario “La 
verdad”. Disponible en:http://www.donación.organos.ua.es/ctxhgua/prensa/dosier22.htm 
Acceso: 28/04/2006. 
 20
29 Rando, B., Blanca MJ. y Frutos, MA. pertenecen al Departamento de Psicología Básica, 
Psicobiología y Metodología de las CC. Del Comportamiento y el último a la Coordinación 
Providencial de Trasplante de Málaga. 
http://www.uninet.edu/cimc2001/conferencias/trasplantes/relaciones/index.html
http://www.psicothema.com/pdf/605.pdf
http://www.donaci%C3%B3n.organos.ua.es/ctx%1Fhgua/prensa/dosier22.htm
 
En general las variables de estos estudios están relacionadas con la edad 
de los sujetos, nivel cultural y económico, creencias religiosas, grado de 
información objetiva, grado de información que el sujeto cree tener, actitudes 
sobre la manipulación y mutilación del cadáver (autopsia, extracción de órganos, 
etc) y sobre los ritos funerarios, desconfianza en los médicos, temor al diagnóstico 
prematuro de muerte, miedo a las irregularidades en el proceso de extracción-
donación-trasplante, grado en que se preocupa por la muerte y actitud de los 
miembros de la familia hacia el tema entre otros. Sin embargo, el significado del 
cuerpo humano y sus implicaciones bioéticas en el trasplante de órganos no se ha 
abordado suficientemente. Por ello, el trabajo aquí propuesto pretende ser una 
introducción a la reflexión sobre el tema, tomando como base las tesis del 
principialismo secular que sin ser un sistema ético en sentido estricto ha 
constituido desde su instrumentación, una estrategia discursiva de utilidad para el 
análisis de muchos problemas con implicaciones bioéticas. 
 
El objetivo general de este trabajo es pues, hacer una reflexión bioética 
desde el marco del principialismo secular sobre el significado que los posibles 
donantes potenciales dan a su propio cuerpo y que guarda relación directa con las 
consideraciones morales o éticas que determinan su decisión para donar o no 
donar sus órganos. Se pretende, por otro lado, proponer que el tema de la 
donación de órganos para trasplante se incluya en el Sistema Educativo Nacional 
desde la educación primaria con el propósito de crear en la población mexicana 
una cultura en este sentido. 
 21
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
CAPÍTULO 3 
 
MARCO CONCEPTUAL Y METODOLOGÍA 
 
 
3.1 MARCO CONCEPTUAL 
 
Para los fines de este trabajo el marco conceptual aborda tres aspectos 
importantes: el médico-legal, el del significado del cuerpo y el de carácter bioético 
a través del principialismo secular. 
 
3.1.1 ASPECTOS MÉDICO-LEGALES DE LA DONACIÓN 
 
De acuerdo al Programa de Acción de Trasplantes de Órganos, un 
trasplante es la transferencia de un órgano sano, de su sitio original a otro 
diferente, dentro de un mismo individuo o bien de un individuo a otro, con el 
propósito de restaurar las funciones perdidas en el receptor del órgano. Con 
relación al tipo de trasplante existen dos grandes grupos, en el primero de ellos se 
precisan intervenciones quirúrgicas complejas, en las que se realizan empalmes 
vasculares y de conductos excretorios entre distintas estructuras. En el segundo 
procedimiento se inyectan las células suspendidas y se dejan que éstas se 
implanten en sus lugares de destino, por ejemplo, el trasplante de médula ósea, 
en donde las células se inyectan en el torrente sanguíneo. 
 
Además de esta clasificación existe otro tipo, en función del tipo de donante 
y de receptor30: 
 
• Autotrasplante: cuando el donador y el receptor son la misma 
persona, por lo que, no hay problema de rechazo. Este es el caso de 
los trasplantes de arterias de la pierna al corazón, los injertos de piel, 
etc. 
 
• Isotrasplante (Isoinjerto): Cuando el donador y el receptor son 
genéticamente idénticos, como en el caso de gemelos univitelinos. 
 
 
 
 23
30 Secretaría de Salud. op. cit., pág. 34. 
 
• Homotrasplante o alotrasplante (homoinjerto o aloinjerto)31: Tanto el 
donador como el receptor son de la misma especie, pero 
genéticamente son diferentes; por ejemplo dos humanos no 
emparentados. En este caso la procedencia del órgano puede ser a 
partir de un donante vivo o donante fallecido. 
 
• Heterotrasplante o xenotrasplante (heteroinjerto): Trasplante en el 
cual el donador y el receptor son de diferente especie, o bien, el 
empleo de órganos artificiales. Actualmente se trasplantan algunos 
tejidos de procedencia animal, como las válvulas cardíacas de los 
cerdos; pero los órganos completos de otra especie (cerdo, simio, 
etc) no son todavía una solución terapéutica32. 
 
En el autotrasplante e isotrasplante los problemas que suelen presentarse 
son exclusivamente de tipo quirúrgico, en cambio, en los otros tipos, el problema 
principal es inmunológico. Lo anterior, hace que el proceso de donación involucre 
aspectos de orden médico, social, psicológico, bioético y legal, entre otros en el 
que participa de manera directa, un equipo multidisciplinario de atención a la 
salud. 
 
En términos legales se define como disponente al sujeto que decide sobre 
su cuerpo o cualquiera de sus componentes, en vida o para después de su 
muerte33. Existen dos tipos de disponentes: originarios y secundarios. Los 
primeros son personas que gozan del derecho de donar sus órganos en vida o 
para después de su muerte. Pueden considerarse como donantes potenciales, es 
decir, personas que tienen la facultad de decidir sobre el destino de su propio 
 
31 Cuando se trata de trasplante de tejidos, se denomina homoinjerto o aloinjerto. Caballer, 
MA. La actitud e intención de la donación de órganos en la población española: análisis 
mediante regresión logística multinivel. Tesis doctoral. Departamento de Psicología 
Evolutiva, Educativa, Social y Metodológica. Universidad Jaume-I. Castelló de la Plana, 
2001. pág. 14. 
32 El primer intentó de xenotrasplante en humanos lo realizó Princeteau en Francia en 1905. 
Ibidem, pág. 28. 
 24
33 Decreto por el que se reforma la Ley General de Salud. 26 de mayo del 2000. Título 
décimocuarto correspondiente a Donación, trasplantes y pérdida de vida. Capítulo I. 
Disposiciones comunes, Art. 314, fracc. VI. pág. 115. 
 
cuerpo34. Según el Artículo 320 de la Ley General de Salud, Título décimocuarto, 
Cap. II correspondiente a donación, “toda persona es disponente de su cuerpo y 
podrá donarlo, total o parcialmente para los fines y con los requisitos previstos en 
el presente Título”. El disponente originario podrá en cualquier tiempo revocar el 
consentimiento que haya otorgado para fines de disposición de sus órganos, 
tejidos, productos o de su propio cadáver, sin que exista responsabilidad de su 
parte; pero si no revoca su consentimiento en vida, no tendrá ninguna validez la 
revocación que, en su caso, hagan los disponentes secundarios. 
 
Los disponentes secundarios son los que pueden otorgar su 
consentimiento o anuencia para la disposición de órganos de un cuerpo ajeno al 
suyo, de acuerdo al siguiente orden de preferencia: cónyuge, concubinario, 
concubina, ascendientes, descendientes y parientes colaterales hasta el segundo 
grado del disponente originario. En su ausencia, dicho consentimiento es 
otorgado por: la autoridad sanitaria competente o el Ministerio Público, en 
relación a los órganos, tejidos y cadáveres de seres humanos que se encuentren 
bajo su responsabilidad con motivo del ejercicio de sus funciones; la autoridad 
judicial; los representantes legales de menores e incapaces, únicamente en 
relación a la disposición de cadáveres; las instituciones educativas con respecto a 
los órganos, tejidos y cadáveres que les sean proporcionados para investigación o 
docencia, una vez que venza el plazo de reclamación sin que ésta se 
haya efectuado; y los demás a quienes las disposiciones generales aplicables 
les confieren talcarácter, con las condiciones y requisitos que se señalen en las 
mismas35. La preferencia entre los disponentes secundarios se definirá conforme 
a las reglas de parentesco que establece el Código Civil para el Distrito Federal 
en Materia Común y para toda la República en Materia Federal. 
 
Donador o donante es la persona que tácita o expresamente consiente la 
disposición de su cuerpo o componentes, en vida o después de su muerte, para 
 
34 Reglamento de la Ley General de Salud en materia de control sanitario de la disposición de 
órganos, tejidos y cadáveres de seres humanos. Cap. II. De los disponentes. Agenda de Salud 
2005, Ediciones Fiscales Isef. Sexta edición. México. 2005, pág.4. 
 25
35 Ibidem, pág. 4-5. 
 
su utilización en trasplantes36. Cuando la persona misma lo declara, con respecto 
de su propio cuerpo, recibe el nombre de donación expresa y ésta la hace a 
través de un documento privado, por escrito y con su firma, o a través de un 
documento público, ante una autoridad oficial, emitido especialmente para esos 
efectos. Podrá ser amplia cuando se refiera a la disposición total del cuerpo o 
limitada cuando sólo se otorgue respecto de determinados componentes37. Este 
tipo de donación podrá señalar si se hace a favor de determinadas personas o 
instituciones y también podrá expresar las circunstancias de modo, lugar 
y tiempo y cualquier otra que condicione la donación. Con esto se respeta 
cabalmente el derecho de libertad de disposición. Del mismo modo, “la donación 
expresa, cuando corresponda a mayores de edad con capacidad jurídica, 
no podrá ser revocada por terceros”, por ser éste un derecho personal 
e intransferible. Sin embargo, el donante podrá revocar su consentimiento en 
cualquier momento, sin responsabilidad de su parte. La donación expresa es 
elemento esencial para la donación de órganos en vida. 
 
Por otra parte se llama donación tácita a aquella en donde el disponente en 
vida “no haya manifestado su negativa a que su cuerpo o componente sean 
utilizados con fines de trasplante”, o simplemente no lo haya expresado en ningún 
documento38. Por tal motivo, la Ley lo reconoce como donador potencial, “siempre 
y cuando se obtenga también el consentimiento de algunas de las siguientes 
personas: el o la cónyuge, el concubinario, la concubina, los descendientes, los 
ascendientes, los hermanos, el adoptado o el adoptante…” 
 
Queda claro que en este caso, se puede solicitar la autorización de los 
familiares, a diferencia de lo señalado en un párrafo anterior en donde el donante 
originario dejó un documento expresando su voluntad la cual es irrevocable. La 
donación tácita sólo será aplicada una vez que se confirme la pérdida de la vida 
del disponente y sólo operará en los casos en que la finalidad única sea el 
trasplante con fines terapéuticos39. 
 
 
36 Decreto por el que se reforma la Ley General de Salud. op.cit., pág. 115. 
37 Ibidem, pág. 117. 
38 Ibidem. 
 26
39 Ibidem. 
 
La donación tácita o expresa, sin embargo, no tendrá validez cuando sea 
otorgada por “menores de edad, incapaces o por personas que por cualquier 
circunstancia se encuentren impedidas para expresarlo libremente…” En el caso 
de mujeres embarazadas la donación expresa, “solo será admisible si el receptor 
estuviese en peligro de muerte y siempre que no implique riesgo para la salud de 
la mujer o del producto de la concepción”40. Evidentemente, una persona deja de 
ser disponente y se convierte en donante cuando consiente de manera tácita o 
expresa, que se utilicen sus órganos con fines terapéuticos. Existen tres criterios 
de exclusión para ser donador: que la persona curse con alguna neoplasia 
maligna (excepto algunas del sistema nervioso central), que esté infectado por el 
virus de la inmunodeficiencia humana o que presente sepsis bacteriana o viral no 
controlada con tratamiento adecuado41. 
 
Hay tres tipos de donadores: vivos, cadavéricos y otros donantes. Los 
primeros son personas en uso de sus facultades que deciden donar uno de sus 
órganos –o un segmento de ellos- de forma expresa, y que al ser extraído dicho 
órgano su función pueda ser compensada por su organismo de manera 
adecuada y suficientemente segura sin poner en peligro su vida. Los órganos que 
se pueden donar son: el riñón, o un segmento del hígado, el páncreas y el pulmón 
e intestinos, siempre y cuando exista compatibilidad aceptable con el receptor42. 
El consentimiento de un donador vivo debe ser bajo una reflexión libre, informada 
y legalmente adecuada y en donde se asegure que la donación no le causará 
algún daño en su bienestar biopsicosocial. 
 
En México el 85 % de los trasplantes se llevan a cabo a partir de donador 
vivo relacionado43. Martínez (1994) al respecto dice que en este tipo de donación 
surgen tres características que no se encuentran en los otros tipos: a) se conoce 
de antemano el destino del órgano, b) el potencial donante dispone de tiempo 
para tomar su decisión y c) si la situación del receptor es crítica no se puede 
esperar un órgano procedente de un donante cadavérico44. 
 
 
40 Ibidem, pág. 118. 
41 Secretaría de Salud. op. cit., pág. 27. 
42 Ibidem. 
43 Ibidem, pág. 28. 
 27
44 Caballer, MA. op. cit., pág. 5. 
 
Los donadores cadavéricos son personas que en vida no dejaron 
constancia expresa de su negativa a que una vez fallecidos se realice la 
extracción de uno o varios de sus órganos, con fines de trasplante, previo 
consentimiento de sus familiares más cercanos45. Para poder ser donador 
cadavérico se debe cumplir con los siguientes criterios: certificación de pérdida de 
la vida; ausencia de antecedentes significativos de enfermedad que afecte al 
órgano a donar; ausencia de antecedentes de malignidad extra craneal; carecer 
de algún proceso séptico descontrolado; estabilidad hemodinámica relativa; 
compatibilidad de grupo sanguíneo y causa conocida de muerte46. 
 
El donador cadavérico puede ser: donador con muerte cerebral, donador a 
corazón parado y donante fallecido en parada cardiorrespiratoria. 
 
Con respecto al donador con muerte cerebral se define a la muerte cerebral 
como el cese irreversible de todas las funciones del tronco y hemisferios 
cerebrales que conlleva a una pérdida absoluta del automatismo respiratorio 
(aunque puede recuperarse artificialmente), pérdida permanente e irreversible de 
conciencia y de respuesta a estímulos sensoriales y evidencia de daño 
irreversible del tallo cerebral, manifestado por arreflexia pupilar, ausencia de 
movimientos oculares en pruebas vestibulares y ausencia de respuesta a 
estímulos nociceptivos47. Se deberá descartar que dichos signos se deban a 
intoxicación aguda por narcóticos, sedantes, barbitúricos o sustancias 
neurotrópicas. La confirmación de muerte cerebral puede diferirse durante unas 
horas o días y se confirma por las siguientes pruebas: angiografía cerebral 
bilateral que demuestre la ausencia de circulación cerebral o 
electroencefalograma (EEG) que evidencia la ausencia total de actividad 
eléctrica cerebral, realizada en dos ocasiones diferentes con espacio de cinco 
horas48. Pruebas como potenciales evocados multimodales, sonografía Doppler 
transcraneal o el gamagrama cerebral, en México son estudios no contemplados 
 
45 Secretaría de Salud. op. cit., pág. 28. 
46 Ibidem. 
47 Decreto por el que se reforma la Ley General de Salud. 26 de mayo del 2000. Título 
décimocuarto correspondiente a Donación, trasplantes y pérdida de vida. Capítulo IV. Pérdida 
de la vida, pág. 122. 
48 Ibidem. 
 28
 
 
por la Ley49. Las patologías que conmayor frecuencia conducen a la muerte 
cerebral son: traumatismo craneoencefálico (40-60%), accidentes 
cerebrovasculares (30-45%), encefalopatía anóxico-isquémica (8-10%) y tumor 
cerebral primario (2-4%). Este tipo de donador es quien potencialmente puede 
otorgar el mayor número de órganos vasculares para ser trasplantados, previa 
valoración médica. Sin embargo, sólo representan alrededor del 1%50. 
 
Los donadores a corazón parado son aquellas personas diagnosticadas 
muertas por el cese irreversible del latido cardíaco, pero que una vez sobrevenida 
la parada cardiaca, el tiempo transcurrido desde la hora de la muerte al 
enfriamiento del órgano (isquemia caliente), permite la extracción de órganos 
aptos para trasplante. Este tipo de donante puede ser valorado para donación de 
riñón, y actualmente pulmón, páncreas e hígado51. 
 
El donante fallecido en parada cardiorrespiratoria es quien a pesar de 
haber sido diagnosticado con muerte cerebral, mantiene de manera artificial el 
funcionamiento de su organismo (respiración artificial)52. Este tipo es considerado 
para la extracción de trasplante de tejidos únicamente, como córneas, piel, 
duramadre, válvulas cardiacas, venas, cartílagos, fascias, ligamentos y hueso. Es 
el tipo de donación que se practica más, tanto a nivel intra como 
extrahospitalario53. 
 
El proceso de donación con fines de trasplante, será un evento 
estrictamente gratuito, sin ánimo de lucro y confidencial, por lo tanto, se prohíbe 
totalmente su comercialización54. 
 
En lo referente a otros donantes, desde principios del siglo XX se viene 
investigando la posibilidad de sustituir órganos humanos en estadios funcionales 
terminales por órganos artificiales o por órganos procedentes de animales 
(xenotrasplante) ante la gran necesidad y la poca oferta de órganos humanos. En 
 
49 Secretaría de Salud. op. cit., pág. 29. 
50 Ibidem, pág. 29-30. 
51 Caballer, MA. op. cit., pág. 8. 
52 Ibidem, op. cit., pág. 9-10. 
53 Secretaría de Salud. op. cit., pág. 30. 
 29
54 Decreto por el que se reforma la Ley General de Salud. op. cit.,pág 118. 
 
este sentido cabe señalar que la aplicación de ambas técnicas a la clínica médica 
son solo temporales hasta la obtención de un órgano humano. En el caso de 
órganos artificiales las investigaciones se han centrado, particularmente, en el 
diseño y construcción de un corazón artificial. 
 
Por lo que se refiere a los xenotrasplantes hay un amplio consenso en 
considerar al cerdo como fuente idónea de xenoinjertos55 (Dunning, White y 
Wallwork, 1994; Gafo, 1996; Platt, 1997; Martorell, 1998; Ferrer, 2000a); además 
de que ha surgido un gran interés en este debido a que esta técnica podría ser 
una alternativa ideal para resolver el grave problema de la falta de órganos. Sin 
embargo, esta presenta diversos problemas: incompatibilidades fisiológicas, 
riesgo potencial de transmisión de zoonosis (infecciones procedentes de los 
animales donantes) y el rechazo, este último uno de los grandes obstáculos a 
vencer. Debido a ello, en la actualidad, una de las líneas de investigación es la 
manipulación genética. De tal forma que, hoy en día, el grupo del Dr. White en 
Cambridge ya cuenta con el desarrollo de animales transgénicos. Asimismo, la 
empresa dependiente del Instituto Reslin de Edimburgo ha conseguido cerdos 
clónicos y realiza investigaciones para la clonación de animales transgénicos lo 
cual augura una nueva era médica en el mundo del trasplante56. 
 
3.1.2 EL SIGNIFICADO DEL CUERPO HUMANO 
 
 Las sociedades humanas, a través de la historia, han dado muestra de la 
profunda unidad del hombre con su propio cuerpo, al grado tal, que nadie ha 
puesto en duda que el hombre tenga un cuerpo y que, al menos en el plano 
concreto, tiene que vivir su existencia mediante él. Sin embargo, el problema 
comienza cuando se trata de determinar la naturaleza de nuestra corporeidad. 
 
Existen varias posturas sobre el tema como la interpretación platónica, en 
donde, en los primeros diálogos de Platón, el cuerpo no aparece como vehículo o 
 
55 Caballer, MA., op. Cit., pág. 12. 
 30
56 Ibidem, pág. 12. 
 
instrumento del alma57, sino como obstáculo o prisión de la misma58 , 59; la 
interpretación aristotélico-tomista, que concibe al hombre como un ser 
estrictamente unitario60; el dualismo racionalista de Descartes, pone en evidencia 
la separación entre el alma y el cuerpo, como entre dos sustancias diferentes, etc. 
No se trata, entonces, de revisar las diversas respuestas filosóficas y las 
inquietudes emanadas de ellas para explicarlo, pero sí es necesario tomar en 
cuenta la manera de cómo éstas conducen a una concepción del cuerpo, ya que 
el valor de el y el valor del mundo material y de la naturaleza, depende mucho de 
cómo se conciba la unidad del hombre con su cuerpo. 
 
Para dar respuesta a lo anterior, la antropología filosófica moderna y 
contemporánea ha planteado diversas conceptualizaciones sobre el cuerpo 
(Leibniz, Spinoza, Schopenhauer, Bergson, Husserl, etc.). En este marco 
conceptual se adoptan algunos aspectos del concepto que sobre el cuerpo 
plantea Husserl, enriquecido con elementos de autores contemporáneos. 
 
Husserl considera al cuerpo como una experiencia aislada o individualizada 
tras sucesivos actos de reducción fenomenológica61. Entre los cuerpos de una 
naturaleza reducida, a lo que me pertenece – dice Husserl-, “yo encuentro mi 
propio cuerpo que se distingue de los otros por una única particularidad: es el 
único cuerpo que no es solamente un cuerpo, sino mi cuerpo y es el único cuerpo 
en el interior del estrato abstracto, recortado por mí en el mundo al que, de 
acuerdo con la experiencia, yo coordino de diferentes maneras, en campos de 
 
57 Esta es la concepción más antigua y difundida del cuerpo. Cfr.Abbagnano, N., Diccionario 
Filosófico. 3º Edición. Fondo de Cultura Económica. México, 1998, pág. 268. 
58 El dualismo platónico no subraya principalmente la división ontológica del cuerpo y del alma, 
sino el significado del cuerpo y del mundo material para que el hombre se realice moral y 
religiosamente. Cfr. Gevaert, J., El problema del Hombre. Introducción a la Antropología 
filosófica. 13ª Edición. Ediciones Sígueme. Salamanca. 2003, pág. 71. 
59 En las obras posteriores de Platón, sobre todo en el Timeo y en las Leyes, la imagen del 
barquero y de la barca subraya justamente la concertación positiva que se da entre el alma y 
el cuerpo, e invita a valorar más positivamente la existencia corporal. Ibidem. 
60 Para Aristóteles el alma da forma a la materia y origina así la existencia de un cuerpo, por lo 
tanto, materia y alma no existen como seres independientes. No son seres, sino aspectos de 
un mismo compuesto vivo. Ibidem, pág. 77. 
 31
61 La reducción fenomenológica implica despojarse mentalmente, de toda relación con el mundo, 
con fines de introspección. 
 
sensación; es el único cuerpo del cual dispongo de modo inmediato, de la misma 
manera que dispongo de sus órganos”62. 
 
 El cuerpo es pues una experiencia, viva, total, en relación con posibilidades 
humanas bien definidas. Como señala Rico Bovio, es la convergencia de tres 
diversas formas de experiencia: la primera que emana del cuerpo vivido “despega 
desde la inconsciencia y los automatismos hasta llegar a la formación de los 
hábitos motrices y a la acumulación de la información en la memoria; la segunda, 
la experiencia del cuerpo percibido es… la experiencia del otro en tanto 
semejante y diferente. La tercera la experiencia del cuerpo interpretado que… 
comienza desde el reconocimiento del otro como humano, hasta su alienación”63. 
En este sentido, podemos afirmar que nuestro cuerpo existe, que es reconocido y 
contactado por los demás, y por otro lado,que somos conscientes de que 
existimos corporalmente en tanto que somos identificados por ellos. 
 
 Pero la identificación corporal64 y social no surge de manera espontánea, 
sino que se va gestando, desde el nacimiento y aún antes, por la compleja 
interacción de determinantes físicos, biológicos, psicológicos propios del sujeto, 
con los aspectos simbólicos producto de los procesos culturales, históricos y 
sociales ante la interacción e intercambio de este con el medio. Es decir, tanto los 
estilos y formas de relación que un grupo social presenta y reproduce, por 
ejemplo, los estilos de crianza, tipo de familia, formas de autoridad, etc., como el 
sentido global que le asignan a dichas relaciones van “configurando” el tipo de 
cuerpo que se le asigna de manera significada a cada sujeto perteneciente a 
dicha sociedad. Sin embargo, la imagen corporal no es un proceso estático, sino 
que esta en constante movimiento aunque en la experiencia del sujeto se 
mantenga sorprendentemente constante65. Este aspecto dinámico del cuerpo, 
esta determinado por el desarrollo y la socialización del mismo, pero siempre 
 
62 Husserl, E., Meditaciones cartesianas. Ediciones Paulinas. Madrid. 1979, pág. 44. 
63 Rico, BA., Las fronteras del cuerpo. Crítica de la Corporeidad. Joaquín Mortiz. México. 1990, 
pág. 37. 
64 El vocablo imagen hace referencia en primer lugar a una experiencia cuyo registro 
fundamentalmente es lo visual del cuerpo. Sin embargo, el término imagen corporal involucra: 
la sensación, la percepción, su afectividad y su proceso congnitivo, es decir su corporeidad. 
Cfr. Aguado, V.J., el cuerpo humano e imagen corporal. Universidad Nacional Autónoma de 
México (UNAM). México, 2004, pág. 46. 
 32
65 Ibidem, pág. 46. 
 
parte del “yo soy”, esto es, de su propio reconocimiento o identidad. Desde esa 
perspectiva dice Aguado, la imagen corporal “es la configuración específica de un 
sujeto que da las evidencias sobre sí mismo”66. 
 
Sobre el concepto de identidad corporal Aguado y Portal (1992) la definen 
como “[…] un proceso de identificaciones históricamente apropiadas que le 
confieren sentido a un grupo social y le dan estructura significativa para asumirse 
como unidad”. Mientras que la identidad es definida por Green en términos de 
[…] constancia, unidad, reconocimiento de lo mismo […] ser, ser uno, reconocer 
el uno67. Aguado agrega que en este proceso surgen tres aspectos relevantes: la 
reproducción, que garantiza la permanencia; la diferenciación implícita en la 
identificación, que hace referencia al proceso de distinción y la semejanza 
absoluta o igualdad y la imagen corporal, que sería el conjunto de evidencias 
referidas al cuerpo humano (como una estructura cultural) y que posibilita estos 
tres procesos de identidad. 
 
El proceso de identidad entonces es, en principio, un proceso de 
diferenciación/identificación; lo que se realiza tempranamente entre el Yo y el 
entorno a través del proceso reflexivo. Es evidente que cuando el hombre surgió, 
se carecía de un contexto cultural previo de significación que pudiera dar 
estructura a la acción humana y en tal situación, las acciones eran animales y la 
conducta humana paso así, probablemente, por un periodo evolutivo en donde se 
fueron edificando evidencias a partir de la construcción de referentes simbólicos 
del espacio y del tiempo en primer término, ordenadas desde el propio cuerpo. 
 
Paul Schilder (1989), por su parte, menciona que la imagen corporal es 
tridimensional y se construye no solo con ayuda de las sensaciones y las 
percepciones sino que “los procesos emocionales son la fuerza de energía de 
esos procesos constructivos, a los cuales guían”68. Esto es, cuando el hombre da 
cuenta de su entorno e interactúa con su medio a través del proceso de 
 
66 Según refiere Aguado, en su libro “Cuerpo humano e imagen corporal” el término sí mismo lo 
utiliza en su dimensión social y no sólo individual, como el auto y hetero reconocimiento de un 
grupo social de los referentes identitarios que le son propios. Ibidem, pág. 43. 
67 Ibidem, pág. 44. 
 33
68 Ibidem. 
 
sensación-percepción-emoción, permite recrear nuevas evidencias que van 
configurando el sentido de mundo en el que se mueve y que al socializarlo –para 
no apartarlo de la identidad del grupo-, mediante rituales y prácticas, la 
configuración del cuerpo se esta continuamente confirmando a lo largo de la vida 
en sujetos pertenecientes a dicho grupo. 
 
Así, el cuerpo humano, como realidad inmediata, es un cuerpo significado y 
una estructura simbólica en movimiento que está presente aun antes del 
nacimiento69. Estudios realizados por Harlow Harry F. (1958) han podido 
constatar que genéticamente existe un auto-reconocimiento de la figura de la 
especie, aun en primates que nunca han visto a otro individuo de su especie. El 
cuerpo humano, entonces, es un proceso en constante ajuste que sintetiza el 
desarrollo del sujeto dentro de una cultura particular, por lo tanto, se requiere del 
estudio de esa cultura y del estudio histórico en que se da para conocer su 
significado. 
 
En resumen, el esquema o imagen corporal es el resultado de la compleja 
integración de varios procesos: biológicos, psicológicos, sociales, culturales e 
históricos que van delineando un cuerpo significado aun antes del nacimiento. 
Esto permite aseverar que no se trata de un cuerpo ajeno al mío en donde se 
experimenta la corporización de mi vida anímica, sino mi propio cuerpo, por lo 
que, me doy cuenta de mi postura, de la dirección de mi cuerpo, de mi tono 
muscular o puedo precisar en mi piel los puntos en que ésta es tocada y percibir 
aspectos temporales de los diferentes estímulos recibidos, entre otros. Pero mi 
cuerpo no está aislado, sino que está en constante interacción e intercambio con 
el medio, de esta manera no sólo se puede asentir el “espacio corporal” que da la 
evidencia sobre mí mismo, sino su relación con el “espacio circundante” que me 
relaciona con las cosas del mundo y, particularmente con otros hombres que me 
 
69 En este caso concreto, la madre cuando se sabe embarazada, empieza a percibir un cuerpo 
dentro de ella que esta modificándose en función de su desarrollo, lo cual le da la idea de 
movimiento y, a su vez, de que este nuevo cuerpo esta ocupando un espacio, y en su relación 
con los demás, el grupo social al que pertenece también, al igual que ella le asigna al producto 
una identidad y un significado. 
 34
 
 
asignan un valor en la medida en que se insertan en mi propio proceso de 
realización y humanización70. 
 
 
3.1.3 EL PRINCIPIALISMO SECULAR 
 
En el campo de la Bioética hay varios sistemas de referencia ética 
propuestos para un análisis de los problemas éticos que facilite la toma de 
decisiones en ese campo. Uno de los más conocidos es el formulado por Tom 
Beauchamp y James Childress en su libro Principios de Ética Biomédica71 y que 
se conoce como “Principialismo secular” debido a que establece cuatro Principios 
para el abordaje de problemas, desde una perspectiva racional y ajena a 
concepciones religiosas. Beauchamp y Childress partieron del enunciado de 
cuatro principios fundamentales inspirándose en buena parte en el informe 
Belmont de 1978 y en las tesis de Daniel Ross72, 73. 
 
• Principio de Autonomía o respeto a la autonomía. La palabra autonomía 
deriva del griego autos: propio y nomos: regla, autoridad o Ley. Es la 
 
70 Se dice que cuando una cosa material se incorpora a la existencia personal y se revela en 
comunicación con los demás en el mundo adquiere un significado, y por tanto, un valor. No 
son algo natural como las plantas o el agua, sino que el hombre mismo debe diseñar sus 
propiasvías concretas de humanización, fijar los valores y determinar la jerarquía que hay 
entre ellos. Cfr. Jiménez, VE. Aspectos fundamentales de la Bioética en la investigación. Rev. 
Educ Sal, Soc. Med. Grales y Priv. México. 2004; 8(80): 33. 
71 El libro Principios de ética biomédica de Beauchamp y Childress, aparece por primera vez en 
1979. En las diversas ediciones que ha tenido el libro (1983, 1989, 1994), éstos autores, han 
ido ajustando o corrigiendo su postura inicial. Cfr. Vázquez, R. Teorías y Principios normativos 
en Bioética. Disponible en: 
http://www.cervantesvirtual.com/servlet/SirveObras/12383873132368273109213/Doxa23_17.p
df Acceso: 29/05/2006. 
72 Estos principios se conocen también como la “Teoría de los cuatro principios”. Dicha teoría ha 
tenido diversas revisiones, a favor y en contra. Una a favor fue la publicada en 1994 por 
Raanan Gillon, titulada Principles of Health Care Ethics. En ese mismo año apareció otra 
revisión por el Park Ridge Center de Chicago llamada A Matter of Principles? Ferment in U.S. 
Bioethics. Cfr. Gracia, D. Fundamentación y enseñanza de la bioética. 2ª Ed. El búho. Bogotá. 
2000, pág. 89-90. 
 35
73 El informe Belmont recoge los trabajos realizados por una comisión del Congreso 
norteamericano para elaborar una guía acerca de los criterios éticos que debían guiar la 
investigación con seres humanos. En él se hallan claramente formulados tres de los cuatro 
principios que hoy se consideran canónicos en bioética: respeto por las personas, 
beneficencia y equidad y que en el presente Beuauchamp y Childress denominan: Autonomía, 
Beneficencia y Justicia y agregan un cuarto, el de No Maleficencia, este último principio 
tomado de Ross, autor del libro The Right and the Good, publicado en 1930. De Ross también 
tomaron otro elemento importante, la distinción entre “deberes prima facie” y “deberes reales y 
efectivos”. Cfr. Ferre, J. Principios de Bioética. Disponible en: http://www.aceb.org/apuntes.htm 
Acceso: 29/05/2006. 
http://www.cervantesvirtual.com/servlet/SirveObras/12383873132368273109213/Doxa23_17.pdf
http://www.cervantesvirtual.com/servlet/SirveObras/12383873132368273109213/Doxa23_17.pdf
http://www.aceb.org/apuntes.htm
 
regulación personal de uno mismo, libre, sin interferencias externas que 
pretendan controlar, y sin limitaciones personales que impidan hacer una 
elección74. Para llevar a cabo una acción autónoma hay dos condiciones 
esenciales que deben cumplirse: ser libre (actuar independientemente de las 
influencias que pretenden controlar) y ser agente, esto es, tener la capacidad 
de actuar: intencionadamente, con conocimiento y en ausencia de influencias 
externas que pretendan controlar y determinar el acto. La primera de estas 
tres condiciones no permite gradación, –las acciones son intencionadas o no- 
las dos últimas condiciones, pueden estar presentes en mayor o menor grado. 
Beauchamp y Chidress comentan que no es necesario que el conocimiento y 
la independencia sean totales, sino que basta cierto grado de ambas, pero su 
límite entre lo suficiente y lo insuficiente de éstas, está en función de los 
objetivos específicos, como por ejemplo, la toma de decisiones importantes. 
Pero, ser autónomo no es lo mismo que ser respetado como agente 
autónomo. Esto último implica, no solamente asumir el derecho que tienen las 
personas a tener sus propias opiniones, a elegir y a realizar acciones basadas 
tanto en sus valores como en sus creencias personales, sino que se deben 
asegurar las condiciones necesarias para que su elección sea autónoma, 
quitar sus miedos y eliminar todas aquellas circunstancias que puedan 
dificultar o impedir la autonomía de un acto. Por lo tanto, en el área médica, 
este principio obliga a los profesionales de la salud a no solamente respetar a 
los pacientes como agentes autónomos sino a proporcionarles la información 
suficiente para que tomen sus propias decisiones75 de una manera 
responsable y consciente. 
 
 
74 La esencia de la idea de autonomía ha sido tratada por Isaiah Berlín, cuando dice”soy libre 
solamente si planeo mi vida de acuerdo con mi propia voluntad; los planes implican reglas, y 
una regla no me oprime ni me esclaviza si me la impongo a mí mismo conscientemente o la 
acepto libremente…”. Cfr. Berlín I., Cuatro ensayos sobre la Libertad, Alianza. Madrid, 1998, 
pág. 246-7. 
 36
75 El Plan Nacional de Desarrollo 2001-2006 de México y el Programa Nacional de Salud 
destaca la importancia de hacer explícitos los derechos de los pacientes, para fomentar una 
cultura de servicio que satisfaga las expectativas y dignidad de éstos. El Documento “Carta de 
los Derechos Generales de los Pacientes”, esta sustentado en los cuatro principios de la 
Bioética, y en él se puntualiza el que el paciente reciba información suficiente, clara, oportuna 
y veraz para que pueda decidir libremente sobre su atención y otorgar o no su consentimiento 
validamente informado. Lo anterior, incluye cuando el paciente decide participar en 
investigación o donar órganos. Cfr. Rev. Med. IMSS, 2002; 40(6); pág. 523-29. 
 
• Principio de No-Maleficencia76. Este principio parte de que no hay que causar 
daño a otro intencionalmente. En la Bioética de la atención a la salud, el 
principio está íntimamente relacionado con la máxima “primum non nocere”, lo 
primero es no hacer daño, y por consiguiente, el profesional de la salud debe 
realizar correctamente su trabajo. La impericia, el desconocimiento, el 
descuido en el trabajo carecen de fundamento ético e incumplen este principio. 
El principio de la moral médica hipocrática de la Antigüedad “primum non 
nocere”, expresa así la prudencia en el ejercicio profesional de modo tal que 
no se someta al individuo a riesgos innecesarios e injustificados. 
• Principio de Beneficencia. Frecuentemente se confunde a la beneficencia con 
la benevolencia. El término beneficencia77 se refiere a la acción de beneficiar 
a otros, entendiendo por beneficiar: el procurar un bien concreto o abstracto78 
a alguien para su propio proyecto de vida; advertirle de un daño o perjuicio o 
también, no interfiriendo en sus propósitos personales. La benevolencia, se 
refiere a la actitud de estar dispuesto a actuar en beneficio de otros. El 
“principio de beneficencia, se refiere a la obligación moral de actuar en 
beneficio de otros”79, 80. Por otra parte, para la ética biomédica, es obligación 
 
76 El principio de no maleficencia, es considerado el principio fundamental de la tradición 
hipocrática a pesar de que no aparece en el Corpus Hipocraticum. Pese a ello, el Juramento 
Hipocrático manifiesta la obligación de los profesionales tanto a la no maleficencia como a la 
beneficencia: “haré uso del régimen de vida para ayuda del enfermo, según mi capacidad y 
recto entender. Del daño y de la injusticia me preservaré”. Cfr. Beauchamp, T. y Childress J., 
Principios de ética biomédica. Cuarta Edición. Maison. Barcelona, 2002, pág. 179. 
77 En inglés común, beneficencia connota actos de misericordia, bondad y caridad. El altruismo, 
el amor y la humanidad, son a veces considerados también formas de beneficencia”. Cfr. 
Beauchamp, T. y Childress J., op. cit., pág. 245. 
78 Bien (lat. bonum; ingl. good; franc. bien; alem. Gut; ital. Bene). Es en general, todo lo que 
posee valor, precio, dignidad, mérito, bajo cualquier título que lo posea. B., en efecto, es la 
palabra tradicional para indicar lo que en el lenguaje moderno se denomina valor. Un B. es un 
libro, un caballo, un alimento, cualquier cosa que se pueda vender o comprar; un bien es 
también la belleza o la dignidad, la virtud humana o una acción virtuosa en particular, un 
comportamiento aprobable. De acuerdo con esta extrema variedad de significados, el adjetivo, 
bueno tiene igual variedad de aplicaciones (…). Esta definición se hizo válida por primera vez

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