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Capítulo 1 introduccion teologia clases - bryan garcia godinez

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Introducción a la teología Pbro. Lic. José Luis Espinoza Hernández 
 
1 
 
Capítulo I 
ELEMENTOS INTRODUCTORIOS FUNDAMENTALES 
 
 
I.- Elementos fundamentales 
 
Todo saber tiene su misterio y debe iniciarse en el misterio. El saber teológico está rodeado, más que ningún 
otro, por el velo misterioso, por tratarse, en último análisis, del conocimiento del misterio de los misterios: 
Dios. “Quítate las sandalias, porque el lugar en el estás es santo” (Ex 3. 5) suena en los oídos de quien piensa 
acercarse al estudio de la teología. Sólo en esta actitud de reverencia religiosa se logra penetrar en el mundo 
de la teología. En esto difiere enormemente de las demás ciencias. Un halo sagrado la envuelve, y, si la 
destruye, termina haciéndose teología secularizada y, a la vez, acta de defunción de la misma teología. 
 
Hoy el estudio de la teología navega por mares bravíos, pero fascinantes. Quizás fue más fácil estudiar 
teología en otros tiempos cuando la Iglesia anclaba en las tranquilas aguas de la cristiandad o neocristiandad 
(Aun cuando empezaron a nacer las herejías, pero se iba fortaleciendo). Pero una vez que los vientos de la 
modernidad y post-modernidad azotaron el pensamiento religioso, hiriéndolo en su raíz o esparciendo sus 
semillas por todas partes, la teología, al mismo tiempo, se vio relegada como producto superficial de la 
sociedad de la industria burguesa y sumamente deseada por el nuevo mercado religioso, más secularizado. 
Con respecto a los espacios de desdén, la teología necesita renovarse, vestirse con ropas nuevas, para 
convertirse en atractiva y codiciada. Recordemos la parábola del payaso de Kierkegaard que, con su discurso 
ardiente y dramático, en vez de hacer que las personas fueran a apagar el incendio amenazante, sólo 
conseguía que la gente se riera, porque su atuendo de payaso era por completo ajeno a la seriedad de la 
situación. La teología puede a veces parecer vestida con ornamentos religiosos antiguos y producir más risa 
que interés. Vestirse según el momento histórico y responder con la certeza actual y experiencial, sin 
traicionar su vocación de fidelidad a la tradición y revelación, sigue siendo desafiante1. 
1.1.- ¿Qué es hacer teología hoy? 
No solo se trata de estudiar conceptos o situaciones muertas, como si fueran fósiles. La teología está viva y 
debe hacerse en cada momento. Es un diálogo constante con Dios, sobre lo que dice y ha dicho a lo largo de 
la historia. Fray B. Oliver OP, en una ponencia decía: “Me surgieron, entre otros, el tema de ¿Cómo estudiar 
teología? Y me gustaría abordarlo cambiándolo un poco. Yo no diría ¿cómo estudiar teología hoy? Sino 
´Cómo hacer teología? Para mí, la diferencia es muy importante. Cuando se dice estudiar o aprender 
teología, se está considerando, en cierto modo, que la teología es algo fijo, muerto; algo que se puede tomar, 
que se puede conocer, que se puede adquirir como se adquiere un cuadro o una fortuna. Es decir, que la 
teología es un saber que, simplemente, se puede transmitir. Ahora bien, la teología no es esto. La teología es 
algo vivo; algo que se nos escapa, que se mueve, que avanza. A veces se estudia solo por obligación eso 
suscita recordar aquel proverbio francés: ‘Es difícil hacer beber a un asno que no tiene sed’”.2 
2.- La Revelación de Dios 
 
1
 Cfr. J.B Libanio y Alfonso Murad. Introducción a la teología. Perfil, enfoques, tareas. Dabar. 2000 
2
 Frei B. Oliver. OP. Conferencia pronunciada en Instituto filosófico- teológico franciscano de Petrópolis. 
17/03/1975 
Introducción a la teología Pbro. Lic. José Luis Espinoza Hernández 
 
2 
 
a).- A Dios nadie le ha visto. Jn 1,18; 1Tm 6,16. No podemos ver la esencia misma de Dios con los ojos del 
rostro o de la mente. Olvidar este principio nos puede llevar a dar lugar a formas antropomórficas de 
concebir la revelación; puede dar lugar a confundir a Dios con sus mediaciones, de suerte que se confunda a 
Dios con la traducción humana de lo divino. 
b).- El misterio se revela permaneciendo escondido. Dios es apertura y comunicación, “diálogo”. Si Dios es 
acción de conocimiento y de amor (en el interior de sí mismo y hacia lo otro-que-no-es-Dios), quiere decir 
que eso “otro” está relacionado con él y puede reconocer las huellas del Amor cuando ese Amor da 
testimonio de sí mismo. (cfr Is 45,15). 
 
c).- Dios para comunicarse necesita un interlocutor cuya dimensión sea análogamente espiritual, inteligente 
y amante: de ahí la importancia de considerar al hombre como imago Dei capaz de recibir esa comunicación 
de Dios. 
 
d).- Revelación es por tanto: comunicación del infinito Amor a su imagen creada, humana. La estructura más 
sencilla de revelación imaginable: la palabra de Dios dirigida a los profetas. Ej: Ez 11,14; 14,9; 15,1). “Dios 
habló por medio de los profetas” (Hb 1,1). 
 
e).- Pero Dios más que comunicar palabras a los hombres, se comunica a sí mismo: su Voluntad, su Palabra, 
su Amor. «Se ha revelado el amor de Dios» (Tit 2,11)3. 
 
f).- El Dios que se revela es un Dios «personal», inteligente, libre y amante: Personal aplicado a Dios quiere 
decir que Dios se comunica, entiende y ama, con Palabra de Verdad y con Aliento de Amor. 
 
g).- El ámbito en el que se manifiesta Dios es doble: el escenario de la Creación y el drama de la Historia: el 
templo del cosmos y el acontecer en el que el hombre es el sujeto de la acción y Dios es el peso suave del 
amor providente (Cfr. DV 3). 
 
h).- La creación del ser intelectual y amante, imagen de Dios, establece la posibilidad de la revelación divina. 
Esta dimensión antropológica (capacidad o apertura humana a lo divino que quiere dársele) constituye la 
posibilidad real de la revelación de Dios al hombre. 
 
i).- La acción de Dios desborda toda mediación religiosa: es más grande que cualquier área confesional. El 
Verbo de Dios ha asumido como carne suya la mediación de Cristo, y Cristo ha asumido y amado a la Iglesia 
hasta presentársela a sí mismo sin mancha ni arruga (Ef 5,27). Sin embargo, respecto al área eclesial se da el 
fenómeno del Deus semper maior: Dios es mayor incluso que las mediaciones visibles por El mismo elegidas. 
 
 
3
 DV 2: «Dispuso Dios en su sabiduría revelarse a Sí mismo y dar a conocer el misterio de su voluntad, 
mediante el cual los hombres, por medio de Cristo, Verbo encarnado, tienen acceso al Padre en el Espíritu 
Santo y se hacen consortes de la naturaleza divina. En consecuencia, por esta revelación, Dios invisible habla 
a los hombres como amigos, movido por su gran amor y mora con ellos, para invitarlos a la comunicación 
consigo y recibirlos en su compañía. Este plan de la revelación se realiza con hechos y palabras 
intrínsecamente conexos entre sí, de forma que las obras realizadas por Dios en la historia de la salvación 
manifiestan y confirman la doctrina y los hechos significados por las palabras, y las palabras, por su parte, 
proclaman las obras y esclarecen el misterio contenido en ellas. Pero la verdad íntima acerca de Dios y 
acerca de la salvación humana se nos manifiesta por la revelación en Cristo, que es a un tiempo mediador y 
plenitud de toda la revelación». 
 
Introducción a la teología Pbro. Lic. José Luis Espinoza Hernández 
 
3 
 
j).- La revelación trinitaria: en el Cristianismo el hombre tiene un modo de recibir a Dios correlativo al modo 
divino de comunicarse. La Trinidad «económica» ha movido a la fe cristiana a creer y a expresar con lenguaje 
siempre deficiente que en Dios mismo, Amor infinito y Acción por excelencia, se pronuncia la Palabra eterna 
y se expresa el Espíritu de Amor que une al Padre con la Palabra. 
 
k).- La Revelación en sentido estricto -—como comunicación personal y absolutamente gratuita de Dios— 
coincide con Dios Padre, Hijo y Espíritu Santo.La Revelación es esta Trinidad personal dándose a los hombres 
en la Encarnación del Hijo, en la Cruz y en la donación del Espíritu por Jesús glorioso. Por eso, por ser un acto 
de donación personal y divina, la revelación es gratuita e imprevisible, no necesaria: ya que pudo no darse. 
Todo esto no impide que en la Creación tengamos ya una primera manifestación de Dios que nos dice, como 
en una parábola o analogía, cuán alto es su amor. 
 
l).- Acontecimiento y Palabra anticipan en el tiempo y en el espacio humano los dones de Dios que se revela: 
Escatología incoada. 
 
2.1.- La Historia concreta de la Revelación de Dios en Cristo 
 
a).- La teología cristiana es ciencia de la Revelación de Dios en Cristo: 
«Habría que entender por “revelación” el acontecimiento salvífico de la auto comunicación de Dios, que 
empieza con la creación, se establece de nuevo en la historia de Israel, alcanza su consumación en la 
persona, vida, ministerio, muerte, resurrección [de Jesucristo] y envío del Espíritu de Jesucristo (el Verbo de 
Dios encarnado), y por obra del mismo Espíritu Santo conduce a la comunión liberadora con Dios»4. 
 
b) Nos lo dice también DV 4: «Después que Dios habló muchas veces y de muchas maneras por los Profetas, 
"últimamente, en estos días, nos habló por su Hijo". Pues envió a su Hijo, es decir, al Verbo eterno, que 
ilumina a todos los hombres, para que viviera entre ellos y les manifestara los secretos de Dios; Jesucristo, 
pues, el Verbo hecho carne, "hombre enviado, a los hombres", "habla palabras de Dios" y lleva a cabo la obra 
de la salvación que el Padre le confió. Por tanto, Jesucristo -ver al cual es ver al Padre-, con su total presencia 
y manifestación personal, con palabras y obras, señales y milagros, y, sobre todo, con su muerte y 
resurrección gloriosa de entre los muertos; finalmente, con el envío del Espíritu de verdad, completa la 
revelación y confirma con el testimonio divino que vive en Dios con nosotros para librarnos de las tinieblas del 
pecado y de la muerte y resucitarnos a la vida eterna. La economía cristiana, por tanto, como alianza nueva y 
definitiva, nunca cesará, y no hay que esperar ya ninguna revelación pública antes de la gloriosa 
manifestación de nuestro Señor Jesucristo (cf. 1 Tim., 6,14; Tit., 2,13)». 
 
c).- Por tanto Jesucristo es el ápice más alto en el panorama procesual revelatorio. Jesucristo es la el centro y 
la cumbre de la revelación. El paradigma de la revelación está en su muerte y resurrección. 
 
d).- El acceso que podemos tener a esa revelación se da sólo si nos sumergimos en él como creyentes y si 
recibimos de Jesucristo el mismo Espíritu de Verdad y Amor. 
 
e).- La resurrección o el futuro de Dios anticipado en lo humano: Pero este futuro se anticipa ya en nuestro 
mundo y en nuestro tiempo presente: la Cruz de Cristo ha sido el punto límite y el punto abierto a través del 
cual ese núcleo del Reino de Dios que es Cristo glorioso se ha introducido en este mundo para anticipar la 
nueva creación, el reino de Dios en el Espíritu Santo que nos ha sido dado como gracia y como anticipación 
de la gloria que esperamos. Literalmente, el futuro de Dios se ha anticipado (escatología anticipada, por 
 
4 P. EICHER, Diccionario de conceptos teológicos, II (Barcelona 1990) 
Introducción a la teología Pbro. Lic. José Luis Espinoza Hernández 
 
4 
 
Cristo Jesús). Esta es la revelación cristiana: la anticipación del futuro de Dios en el hombre y en el tiempo de 
la Iglesia. 
 
f).- Desde el punto de vista antropológico, la resurrección representa la participación más alta posible en la 
vida de Dios que puede recibir el hombre. 
 
g).- Toda la vida de Jesús tiene unidad a la luz de la Resurrección. 
 
h).- El motivo para creer en la Resurrección de Jesús es la fe apostólica. Es escuchando a los testigos como 
llegamos a creer, pues la fe viene de escuchar la palabra de los Apóstoles. Es una elección positiva de la 
persona. La fe, como fruto de nuestra decisión personal, nos abre los ojos para descubrir las razones 
interiores al hecho de creer. Estando en la comunidad, formando un solo cuerpo… 
 
i).- ¿Cómo conocieron y vivieron los Apóstoles el hecho de la Resurrección: 
- El signo que da lugar a la tradición del sepulcro vacío (Jn 20,8). 
- Los signos de las apariciones en Judea (Lc 24,36-53; Jn 20,19-29), en Galilea (Mt 28,16-20). 
- El signo memorial de la fracción del pan (Hch 2,42). 
- La dinámica de la promesa al cumplimiento. 
- La luz del Espíritu Santo, recibida en Pentecostés. 
 
j).- El contenido del kerigma en Hch 2,32: Jesús vive, ha sido elevado a la derecha del Padre y nos da su 
Espíritu Santo. 
 
3.- Teología y teologías5 
 
La Teología no puede olvidar que su punto de partida está en la iniciativa de Dios. W. Beinert lo ha dicho con 
una frase incisiva: El hombre dice su teología porque, previamente, Dios ha tomado la Palabra y ha hablado. 
De manera que la teología tiene dos realidades previas: la revelación de Dios que toma la iniciativa y la fe por 
la que el hombre se adhiere a Dios que se revela. 
 
La acción de Dios es el acontecimiento de la fe objetiva (fides quae) que despertará la fe subjetiva (fides qua) 
de las personas creyentes. 
 
El acontecimiento narrado y así se transmite, también es contemplado y conceptualizado por quien busca 
entender en claroscuro su inteligibilidad escondida. Pues bien: la narración es ya teología, como es así mismo 
teología el intento humilde, arriesgado, siempre inacabado de conceptualizar el misterio. 
 
3.1.- Aproximación al concepto de teología: Definición Y Objeto de la Teología 
 
El término de la Teología es de origen griego, y etimológicamente significa: tratado, ciencia de Dios. El 
término comienza a utilizarse por los cristianos a partir de Eusebio de Cesarea. A partir de entonces será 
entendido como la exposición metódica y estructurada de la Revelación aceptada por la fe. Sería comprender 
y ahondar en las verdades reveladas a la luz de la razón iluminada por la fe. 
 
 
5 J. M. ROVIRA BELLOSO, Introducción a la Teología, Madrid: BAC, 1996 
 
Introducción a la teología Pbro. Lic. José Luis Espinoza Hernández 
 
5 
 
O mejor, la podríamos definir como: la ciencia en la que la razón del creyente, guiada por la fe teologal, se 
esfuerza en comprender mejor los misterios revelados en sí mismos y en sus consecuencias. 
 
a).- El objeto de la Teología 
 
Distinguimos: 
 
1) Objeto material: Es la realidad de la que propiamente se ocupa la Teología. El objeto es Dios y todas las 
realidades por El creadas y gobernadas por su designio salvador. El objeto material primario o principal 
es Dios y el objeto secundario es todas las cosas creadas en cuanto ordenadas a Dios. Podemos decir que 
el objeto de la teología es todo en referencia a la revelación. Dios se revela al hombre en el mundo y en 
el tiempo. 
2) Objeto formal: Uno es el objeto formal "quod": lo que es propio de Dios. "Deus sub ratione Deitatis" y el 
otro es el objeto formal "quo": luz intelectual bajo la que el objeto es considerado. En este caso, la razón 
iluminada o guiada por la fe. Dios se autocomunica no solo revela sino que se comunica a sí mismo. 
 
b).- Fe Y Teología 
 
Decimos que a las verdades de la Revelación podemos acercarnos a través de la fe, en cuanto los contenidos 
de la Revelación son creibles (ut credibilia), y por medio de la Teología en cuanto esas verdades reveladas 
son inteligibles (ut intelligibilia), es decir, como susceptible de una comprensión cada vez mayor. 
 
La fe es asentir a una verdad en cuanto digna de ser creída. Lo propio de la Teología es analizarla. El motivo 
formal de la fe es la autoridad de Dios que revela; la de la Teología, es la percepción por la razón de la 
inteligibilidad de lo creido. La fe es siempre presupuesto absoluto de la Teología, nosólo porque es su 
materia prima, dado que la Teología se hace partir de la fe, sino porque la buena Teología se debe hacer 
desde dentro de la fe, y es así algo más que una simple reflexión racional sobre los datos de la revelación. 
 
Por eso afirma S. Agustín:"intelligere ut credas, credere ut intelligas" (has de entender para creer y has de 
creer para entender). 
 
S. Anselmo de Canterbury entiende la Teología como "fides quarens intellectum"; la fe que busca entender, 
no por curiosidad sino por amor y veneración al misterio. El creyente no discute la fe, pero manteniéndola 
firme para buscar razones por las que la fe es así. 
 
Por tanto la Teología es desarrollo de la dimensión intelectual del acto de fe. Es una fe reflexiva, fe que 
piensa, comprende, pregunta y busca. Trata de elevar, dentro de lo posible el credere al nivel de intelligere. 
El Teólogo se apoya en la solidez del conocimiento de Dios por la fe, pero apoyándose también en la razón 
humana y en sus adquisiciones ciertas. Entonces, con todo esto, el Teólogo intenta ordenar e interpretar los 
datos de la creencia católica de modo que se vean sus encadenamientos tal como Dios los ha dispuesto. 
 
a).- ¿Por qué hay teología en el cristianismo?: El punto de partida es que el cristianismo se desarrolla en la 
historia como acontecimiento y como doctrina (cfr. Jn 3,16). La doctrina supone un acontecimiento que 
puede ser compartido. La doctrina depende del acontecimiento. 
 
Por la necesidad de dar cuenta narrativamente del acontecimiento de la fe y la necesidad de expresar 
conceptualmente lo que significa este acontecimiento, en sí y para nosotros. 
 
Introducción a la teología Pbro. Lic. José Luis Espinoza Hernández 
 
6 
 
b).- Creer y saber: 
Anselmo de Canterbury y Ricardo de San Víctor, teólogos del siglo XII, siguiendo a San Agustín, creyeron que 
la inteligencia que acompaña la fe podía descubrir las razones necesarias que vertebran el misterio creído, y 
que se inscriben y se ocultan en él. El Vaticano I llama ratio fide illustrata y, viceversa, intelligentia fidei a esa 
claridad, otorgada por Dios en la fe, que ayuda a entender el misterio ya sea por analogía con las cosas que 
conocemos, ya sea por el nexo que los misterios tienen entre sí, ya sea por la relación que tienen con nuestro 
fin último. 
 
W. Pannenberg: el papel principal de la teología es explicar racionalmente los contenidos de la fe en Dios a 
los creyentes de la comunidad y a los increyentes del mundo. Sin embargo afirma que debe ser la razón sola, 
sin tener la fe como premisa…? 
 
c).- Un concepto estricto de teología: 
San Agustín: es el hablar humano acerca de Dios. 
Ciencia de la revelación de Dios. 
 
d).- El término “teología” en los Padres de la Iglesia: 
Orígenes: la teología como conocimiento cristiano de Dios 
Hay que destacar la distinción que hace Eusebio de Cesarea: Teología y economía. 
Teología sería el conocimiento de Dios Uno y Trino en sí mismo, mientras que la economía o divina 
dispensación sería el conocimiento de Dios que se ha manifestado en su imagen: Jescucristo. 
 
e).- De la economía se llega a la teología6. Sobre todo cuando se formula el dogma clásico de la Santísima 
Trinidad. 
 
f).- «El fundamento y centro de la teología es la revelación de Dios en Jesucristo. Su objetivo particular es la 
inteligencia crítica del contenido de la fe para que la vida creyente pueda ser plenamente significativa»7. 
 
El término ha tenido una evolución. No es de origen cristiano, pero poco a poco se incorporó en el uso 
cristiano. Para Clemente de Alejandría, theologhía será el “conocimiento de las cosas divinas”; para Orígenes 
indica la verdadera doctrina sobre Dios y sobre Jesucristo como salvador. Y Eusebio de Cesarea fue el 
primero que dio el título de theologos al evangelista Juan, por haber escrito en su evangelio una doctrina 
eminentemente sobre Dios. Por eso, desde Eusebio, theología indicará la verdadera doctrina, la cristiana, 
que se opondrá a la falsa doctrina enseñada por los paganos8. 
 
3.2- Una fe, varias teologías 
 
a).- Según la perspectiva desde la que se conciba la revelación de Dios, tendremos un modelo u otro de 
teología. Por ejemplo: 
 Revelación concebida de un modo mántico, como inspiración a través de sueños o de trances 
provocados por el poder de Dios: repercute en las narraciones veterotestamentarias en las que 
domina el poder amante de Dios desplegado en una situación conflictiva vivida por el justo. 
 
6
 J. WOLINSKI, «De la Economía a la “Teología”», en B. SESBOÜÉ – J. WOLINSKI, El Dios de la Salvación, Historia de 
los Dogmas, Paris: Desclée, 1994, pp.143-185. 
7
 R. FISICHELLA et al., «Teología», en R. LATOURELLE – R. FISICHELLA, Diccionario de Teología Fundamental, 
Madrid: San Pablo, 1992, p. 1411. 
8
 Cfr. Idem. 
Introducción a la teología Pbro. Lic. José Luis Espinoza Hernández 
 
7 
 
 Revelación concebida como encuentro con Dios, por ejemplo con los Patriarcas: da lugar a la 
corriente personalista que traspasa toda la tradición judía, hasta el cristianismo con las apariciones 
del Resucitado. 
 Revelación como entrega de un memorial por parte de Dios: da lugar a una perspectiva de teología 
simbólica que desembocará en la oración y en los sacramentos cristianos. 
 Revelación como manifestación de la voluntad de amor de Dios que sostiene el obrar del hombre: 
alumbrará la perspectiva teológica presidida por la llamada imperativa de Dios que constituye al 
hombre y a la mujer como sujetos éticos. 
 Revelación como presencia del Espíritu de Dios en los profetas, hasta que éstos llegas a identificarse 
con la Palabra de Dios que ilumina una situación humana: tendremos el tipo más común de 
revelación, entendida como comunicación de la Palabra y del Espíritu de Dios a los profetas. 
 
b).- También se puede descubrir en el NT distintas cristologías, dependiendo de la faceta de la vida de Jesús 
en la que se fundamenta. Ejemplo: 
 Cristología de la predicación: corpus paulinum 
 Cristología especulativa histórico-escatológica: 4º Evangelio, ¿Lucas? 
 Cristología mesiánica, centrada en el Jesús histórico: Mateo, Marcos, Lucas 
 Cristología centrada en Cristo como Señor y Eschaton inscrito ya en la eternidad de Dios: Apocalipsis. 
 
c).- También puede hacerse la siguiente clasificación9: 
* Cristología del «maranatha» o de la parusía: Jesús portador de la salvación futura como Señor del futuro 
(Credo de la tradición Q, tradición de Marcos) 
* Cristología del «theois aner»: Jesús taumaturgo divino (tradición galilea, con proyección cristiana posterior 
en los evangelios de Marcos y de Juan) 
* Cristologías sapiensiales: Jesús sabiduría preexistente, encarnada, humillada, exaltada (Filipenses, 
Colosenses) 
* Cristologías pascuales: Jesús muerto y resucitado… 
 
d).- La gran ventaja que ofrece la diversidad de teologías del NT consiste en que la diferente letra que las 
diversifica queda compensada por el único Espíritu que las hace inteligibles y que las reúne en un único 
acorde: Jesucristo. 
 
A lo largo de la historia, de acuerdo a la finalidad, los objetivos y los métodos, de acuerdo al espacio y al 
tiempo, han surgido distintos tipos de teología: 
 
3.3.- Diversas teologías en la historia 
 
a).- Teología patrística (s. II-VIII): las obras de los padres de la Iglesia normalmente nacen en ocasión de de un 
hecho circunstancial: la aparición de una herejía o la necesidad de aclarar una cuestión relativa a la fe. 
 
b).- Teología monástica (s. IX-XII): escuelas bíblicas, dialécticos, que usan la razón humana y filosófica e las 
afirmaciones de la fe. 
 
 
9
 E. SCHILLEBEECKX, Jesús. La Historia de un viviente, Madrid: Cristiandad, 1981, p. 373. Citado por ROVIRA 
BELLOSO J. M., Introducción a la Teología, Madrid: BAC, 1996, 
 
Introducción a la teologíaPbro. Lic. José Luis Espinoza Hernández 
 
8 
 
c).- Teología escolástica (s. XIII-XV): la teología se convierte en ciencia, usando la filosofía aristotélica. Tiempo 
de las grandes Summae y de las Quaestiones disputatae, con método dialéctico. Despertar de las 
universidades. 
 
d).- Teología controversística (s. XVI): con la intención de combatir la herejía luterana. 
 
e).- Teología postridentina. La «segunda» escolástica: es la teología académica, comentando la Summa 
Theologiae de Santo Tomás. Comienza a hablarse de teología histórica. 
 
f).- Teologías del siglo XIX 
o Escuela de Tübingen: valorizan la tradición mediante el retorno a los santos Padres, que contempla la 
Iglesia como comunidad de fe centrada en Cristo vivo y que supera el sabor a racionalismo. 
o La Escuela Romana: fuerte inclinación al intelectualismo, valoró tanto la función de la razón en el 
interior de la fe. 
o J. H. Newman: valora la intuición que surge de la investigación metódica de los signos que llevan al 
sentido (“gramática del sentimiento”); con él adquiere vigencia y relieve el método inductivo 
aplicado a la teología. 
 
g).- Teología neoescolástica: elevó el tomismo al rango de teología perenne. 
 
h).- Teologías del siglo XX 
* La crisis modernista: deseo de libertad total, sentimiento subjetivo, autenticidad; crítica demoledora, 
contraria al convencionalismo de la sociedad burguesa. 
* «Nouvelle Théologie»: hacia finales de la S. Guerra mundial; intento de situar los hitos del pensamiento 
teológico en su propio marco histórico que explica y de alguna manera relativiza ese pensamiento, porque lo 
pone en relación con la cultura de su tiempo, y – lo que es más importante para el tema de Dios – 
entendiendo la revelación mucho más como historia y automanifestación que como sistema de ideas 
transmitidas por Dios al hombre. 
* Teología de la «muerte de Dios»: intento de una amalgama de cristianismo y ateísmo. 
 
3.4.- Teologías diversas por su finalidad 
 
1.- Teología fundamental: no sólo entendida en la línea de pura apologética sino como obra de “la recta 
razón que demuestra los fundamentos de la fe” (DS 3019). La teología fundamental surge como “respuesta a 
los nuevos planteamientos de la modernidad que marcan decisivamente la teología y la Iglesia hoy” 
(Salvador Pié-Ninot). Se sitúa por tanto en la frontera entre fe y razón, entre revelación y el sujeto que la 
recibe, y tiene por cometido garantizar la credibilidad y, por tanto, la razonabilidad de la fe. 
Por tanto, “dar razón de la esperanza” (1Pe 3,15). 
 
2.- Teología «positiva»: los ejes señalados por san Agustín: buscamos en las Escrituras cuál es nuestra fe 
(teología positiva) y luego buscamos la verdad que impide dudar incluso a los raciocinadores (teología 
reflexiva o especulativa). La teología positiva se pregunta, entonces, cuál es la fe de la Iglesia, qué es lo que 
creemos. El adjetivo positivo va relacionado a un tema de estudio objetivo, de un texto, bíblico, patrístico, de 
un teólogo o del magisterio. 
 
3.- Teología sistemática: se pregunta cuál es el significado de lo que creemos. Es un nivel de pensamiento 
más sintético que analítico. Es un nivel más alto, racional y sintético. Se trata, pues, de entender el 
significado y la conexión de los artículos de la fe entre sí. En su sentido más específico se esfuerza por 
Introducción a la teología Pbro. Lic. José Luis Espinoza Hernández 
 
9 
 
penetrar el sentido global e inteligible de aquellos dogmas que la Iglesia cree, organizándolos alrededor de 
una síntesis racional. 
 
a).- Teología narrativa: primer estadio o esbozo de la teología sistemática, porque a ella conduce. Quiere 
expresar de modo más sencillo el núcleo central de la revelación de Dios en Cristo. Es el lenguaje del 
acontecimiento, capaz de expresar los hechos y las palabras de la revelación. La narración trata de atestiguar 
el acontecer revelador, evitando así que quede reducido a un sistema de verdades abstractas. El lenguaje es 
intelectual y testimonial, es transmisión de una noticia, es eficaz. 
 
b).- Teología de la Palabra: llamada también teología kerigmática; nace en el contexto de la teología 
dialéctica (K. Barth), la cual muestra la imposibilidad de hablar de Dios a no ser partiendo de la misma 
palabra que Dios dirige a los humanos. Se llama teología dialéctica porque aquí se juega la infinita 
trascendencia de Dios en contraste con su cercanía a la humanidad que escucha su Logos. 
La teología de la Palabra está totalmente basada y pendiente del anuncio de la fe (kerigma), cuyos efectos 
provocadores de la respuesta de la fe los continúa esta teología. Su material de estudio es la Palabra de Dios 
centrada en la proclamación central de la fe: Cristo – Palabra de Dios – se ha encarnado, ha muerto y ha 
resucitado. «Como teólogos debemos hablar de Dios; pero somos hombres y, como tales, no podemos 
hablar de Él. Hemos de saber ambas cosas: nuestro deber y nuestro no poder, y así dar gloria a Dios. Esa es 
nuestra tribulación»10. 
 
4.-La teología como ciencia11 
 
«En el ámbito de la fe, la teología deduce, articula y organiza lógicamente las distintas verdades; y así 
podemos afirmar que es ciencia en sentido aristotélico aunque su estatuto como reflexión de la fe no entra 
sin más en la visión de ciencia que hoy se tiene. Pero el rigor científico de la teología se cifra en su función 
hermenéutica. Debe discernir la experiencia cristiana fundamental y la experiencia humana de cada 
época»12. 
 
4.1.- Hacia un concepto válido de ciencia 
 
W. Beinert: «Ciencia es el conocimiento general y sistemático de la realidad, bajo un determinado objetivo 
formal»13. 
- Es necesaria la existencia de un objeto formal, o perspectiva desde la cual se contempla la realidad. Por su 
misma naturaleza, en efecto, cada ciencia parcializa la realidad, al escoger y determinar un solo ámbito de la 
misma. 
- Cada ciencia se lo juega todo en la elección del método adecuado para alcanzar su objetivo real. De ahí 
viene el observable rigor científico con el que procede cada disciplina. 
 
4.2. ¿Ciencia en los comienzos de la teología patrística? 
 
10
 K. BARTH, Das Wort Gottes und die Theologie (Munich 1924), p. 158. Citado por J.M. ROVIRA BELLOSO, 
Introducción a la Teología, Madrid: BAC, 1996, p. 76. 
11
 J. M. ROVIRA BELLOSO, Introducción a la Teología, Madrid: BAC, 1996, pp. 79-121; Cfr. M. SECKLER, «Teologías 
y ciencias», en R. LATOURELLE – R. FISICHELLA, Diccionario de Teología Fundamental, Madrid: San Pablo, 1992, p. 
1411. 
12
 J. ESPEJA PARDO, Para comprender mejor la fe, una introducción a la teología, Salamanca: Editorial San 
Esteban, 1997, p. 137. 
13
 W. BEINERT, Introducción a la teología, Barcelona: Herder, 1981, p. 48. Citado por J. M. ROVIRA BELLOSO, 
Introducción a la Teología, Madrid: BAC, 1996, pp. 80. 
Introducción a la teología Pbro. Lic. José Luis Espinoza Hernández 
 
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Después del NT: 
 Las formulaciones doctrinales están escritas con un gran rigor. Son escritos 
teológicos, puesto que reflexionan sobre la verdad contenida en la propia fe 
cristiana. Su norma: la verdad de la fe. 
 La teología como ciencia empezará cuando una reflexión filosófica se constituya 
como método de reflexión habitual sobre la revelación cristiana. 
 Allí donde se adopte un itinerario filosófico, allí tendremos seguramente un inicio de 
scientia fidei. 
 En Occidente, es san Agustín el primero que expresará la importancia que tiene la 
teología cristiana como un saber o un conocer. Es el primero en que de una manera 
refleja y consciente llamará ciencia al conocimiento de Dios y del hombre. 
 El estilo de la época patrística será: una teología histórico narrativa. 
 Pero también se debe señalar el uso de la filosofía desde el siglo II-III. 
 
4.3.- En la ciencia aristotélica: 
 
La ciencia consiste en acercarse cognitivamente al ser, de talmodo que se llegue a entender a través de los 
conceptos y de las definiciones. La ciencia es conocimiento esencial de una substancia. Conocer la universal 
en lo particular. 
 
4.4.- La teología como ciencia deductiva e inductiva: 
 
* El esquema de la ciencia aristotélica, aplicado a la teología, abre el campo a la perspectiva deductiva. Así lo 
comprendieron los autores escolásticos. Para ellos, la teología, a partir de los principios conocidos por la 
Revelación, debe deducir conclusiones ciertas. Para esto, la premisa mayor debe ser siempre revelada; en 
cambio, la premisa menor puede ser una verdad cierta, conocida por la verdad natural. 
*La teología se acerca al modelo de la ciencia argumentativa que tiene como objetivo establecer 
conclusiones ciertas: con la certeza de la razón que deduce, pero con el respaldo de la Revelación que ofrece 
a la teología los primeros principios como un reflejo de la sabiduría divina. 
*El pensamiento de san Agustín es típicamente inductivo: el entendimiento humano penetrando en 
profundidad a través de los hechos o acontecimientos que propone la Sagrada Escritura y que, por ello, 
pertenecen a la fe, puede llegar a encontrar las rationes aeternae inscritas en estos hechos. 
* Dos condiciones para el itinerario inductivo: 1º) Que el entendimiento creyente proceda a partir de la 
observación atenta de los hechos que pertenecen a la fe. 2ª) los acontecimientos observados se han de 
comparar con los principios más generales conocidos por la Revelación: son las grandes verdades reveladas. 
 
4.5.- La edad de oro de la teología como ciencia: La Universidad Siglos XII-XIII 
 
- Sobre todo la universidad de París: con su dialéctica aristotélica. 
- La universidad de Oxford: tradicionalismo agustiniano; dedicación a la ciencia empírica. 
- Universidad de Salamanca: la teología como reina de las ciencias. 
 
4.6.- La teología como ciencia según Santo Tomás14: 
 
La teología: 
- Está fundada en la Revelación divina 
 
14
 Cfr. TOMÁS DE AQUINO, Summa Theol., I, q.1 a.1-10. 
Introducción a la teología Pbro. Lic. José Luis Espinoza Hernández 
 
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- Es ciencia, pero sus principios no son evidentes al teólogo sino a Dios y a los bienaventurados. Por eso se 
trata de una ciencia subordinada a la de Dios y los bienaventurados. 
- Tiene unidad: debido a l unidad de su objeto formal (lo divinamente revelado) 
- Es ciencia práctica: la moral 
- Es superior a las demás ciencias: por su objeto material y formal (Dios) 
- Es sabiduría: a la cual pertenece ordenar y juzgar desde la causa primera que es Dios 
- Su “sujeto” es Dios: Dios es el argumento central, único… 
- Es argumentativa: según el modelo aristotélico de ciencia deductiva. 
- Emplea metáforas: lo natural del entendimiento es llegar a lo inteligible por medio de lo sensible. 
- Conoce los diversos sentidos de la Escritura: histórico o literal, alegórico, tropológico o moral y el 
anagógico. 
 
Por tanto, «la teología cristiana está ligada a la autorreflexión y articulación de la fe cristiana, representando 
en este aspecto una realización vital funcional de la misma religión»15. 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
15
 M. SECKLER, «Teología y ciencias», en LATOURELLE R.- FISICHELLA R., Diccionario de Teología Fundamental, 
Madrid: San Pablo, 1992, p. 1425. 
Introducción a la teología Pbro. Lic. José Luis Espinoza Hernández 
 
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