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Lectura 16 MÉTODOS DE ACABADO SUPERFICIAL Y RECUBRIMIENTOS 16.1 GENERALIDADES En general un recubrimiento es una capa o cubierta que se aplica a la superficie de un objeto, usualmente denominado sustrato, ya sea que lo cubra total o parcialmente. El propósito de aplicar el recubrimiento puede ser decorativo, funcional o ambos. Por ejemplo, los recubrimientos orgánicos, como son las pinturas y lacas, son revestimientos que en su mayoría tienen doble uso, ya que, a la vez de aislar, y por tanto dar una protección al sustrato del medio en el que se encuentra, también pretenden ser, en muchos casos, decorativos al mismo tiempo. Se pueden aplicar recubrimientos funcionales para cambiar las propiedades superficiales del sustrato, tales como adhesión, humectabilidad, resistencia a la corrosión o resistencia al desgaste. Una consideración importante para la mayoría de los procedimientos de recubrimiento es que éstos deben aplicarse de tal manera que se tenga control sobre el espesor depositado, lo cual se es función del procedimiento seleccionado para aplicarlo, los cuales van desde emplear un simple cepillo para pintar hasta equipo muy especializado para lograr tal fin. En el caso de los recubrimientos parciales una consideración adicional se tiene al necesitar control sobre el lugar donde se va a aplicar el recubrimiento. 16.2 RECUBRIMIENTOS ORGÁNICOS Los recubrimientos orgánicos o pinturas han acompañado la evolución de la humanidad desde hace varias centurias, haciendo un uso decorativo y de expresión popular, sin embargo, la importancia industrial y de desarrollo tecnológico fue reconocida con mayor énfasis desde la segunda guerra mundial [Ahmad, 2006]. Son el medio más comúnmente empleado para proteger a los elementos metálicos del medio ambiente en el que se desempeñen y de sus efectos indeseables como lo es específicamente la corrosión. Lo anterior se debe a que dentro de la gama MANUFACTURA I 2 de recubrimientos existentes éstos son, en general, de fácil aplicación y ésta puede realizarse aun cuando el elemento a recubrir desempeñe sus funciones en pleno campo, así como ofrecer la mejor relación beneficio-costo para mitigar los efectos de la corrosión producto de las reacciones con la atmósfera (corrosión atmosférica). Su utilización tiene gran impacto económico, ya que según un estudio efectuado en Estados Unidos de América (EUA) en 2002 [Virmani, 2002], referente a los costos, se determinó que la protección mediante recubrimientos orgánicos representa el 88% del costo total contra la corrosión. Más recientemente, en 2006, se reporta que para EUA, alrededor de 10500 millones de dólares fueron gastados en recubrimientos orgánicos de protección, sin contar aquellos empleados para un simple acabado estético. Estructura de los recubrimientos orgánicos Estos recubrimientos, conocidos coloquialmente como pinturas, son polímeros constituidos primordialmente de carbono, hidrógeno y oxígeno, que a su vez son elementos básicos de los organismos vivos y de ahí el adjetivo de “orgánicos”, que forman capas muy finas y que por lo general se emplean sobre sustratos metálicos que por lo general se buscan proteger, sin que esto excluya sustratos a base de otro tipo de materiales pero donde ya no se busca que éstos brinden una protección contra la corrosión. Ahora, un recubrimiento orgánico principalmente se compone por una dispersión de pigmentos, solventes y aditivos en una matriz de aglutinante o resina; siendo, para algunos autores, los más relevantes la resina y los pigmentos, desde el punto de vista de la protección brindada contra la corrosión, en la formación de la pintura [Forsgren, 2006]. El solvente reduce la viscosidad del recubrimiento y sus componentes para obtener un elemento homogéneo en su composición y tener una adecuada aplicación, y sólo se encuentra cuando la pintura está en su forma líquida [Schweitzer, 2010]. El añadir un solvente, reduce temporalmente la viscosidad del recubrimiento con lo que se busca obtener una mezcla homogénea de sus componentes así como poder lograr una mejor aplicación, de tal forma, que el resultado final sea una película fina, continua y de composición química homogénea que garantice la protección del sustrato. El aglutinante o resina es la base del recubrimiento y por lo general son un mezcla de varios aceites y plastificantes. Este compone el grueso de la capa física que cubre y protege al sustrato LECTURA 14, MÉTODOS DE ACABADO SUPERFICIAL Y RECUBRIMIENTOS 3 en el que se ha depositado, por lo que su composición y densidad determinará en gran medida las propiedades del recubrimiento como la permeabilidad, la resistencia química, la adherencia al sustrato o la resistencia a los rayos ultravioleta por mencionar algunos [Schweitzer, 2006]. Las resinas se pueden clasificar de acuerdo a la forma del secado, ya sea éste de tipo físico, químico o curado, por coalescencia o por una combinación. Un secado de tipo físico sucede cuando se evapora el solvente del recubrimiento en su estado líquido y deja paso a polimerización; este tipo de recubrimientos, eligiendo el solvente adecuado, pueden volver a disolverse. Un ejemplo de éstos son los hules clorados. Los de secado químico o curado son aquellos que al mezclar dos componentes (resina y endurecedor) ocasionan una reacción química que lleva a la formación del polímero. Dentro de este tipo de recubrimientos se pueden mencionar a los epóxicos. Finalmente los formados mediante coalescencia, comienzan con una dispersión de pequeñas partículas en agua; cuando ésta se evapora, las partículas se mezclan y forman una película insoluble [Bos, 2008]. Los pigmentos son añadidos a los recubrimientos ya sea para dar color o como relleno, pero con mayor frecuencia se agregan para proteger contra la corrosión. Dependiendo del tipo de protección brindada, se pueden identificar pigmentos inertes; estos se utilizan cuando la forma de proteger es aislando del ambiente el elemento pintado. Cuando se pretende inhibir el posible proceso anticorrosivo, se añaden pigmentos químicamente activos [Forsgren, 2006]. Los aditivos son añadidos por lo general en pequeñas cantidades buscando modificar sus características generales de diferentes maneras; por ejemplo actuando como agentes antihongos o como agentes de retardo del fuego [Schweitzer, 2010]. La relación entre todos los componentes mencionados es muy importante para la calidad final del recubrimiento. Existen varios tipos de recubrimientos, siendo comúnmente clasificados por el tipo de resina utilizada para su fabricación como son, por mencionar a las principales, los epóxicos que son de los más usados en la industria de pinturas por sus buenas propiedades mecánicas, gran adherencia al sustrato y su excelente resistencia al agua, los químicos y a los ácidos; los acrílicos, los cuales ofrecen una destacada estabilidad frente a la acción de los rayos UV además de poseer buenas propiedades mecánicas, especialmente presentan una buena dureza; los MANUFACTURA I 4 alquidálicos, que también son de los más utilizados en la industria de fabricación de pinturas desde que fueron introducidos comercialmente a finales de los años veinte del siglo XX a pesar de que aun después de su curado siguen reaccionando con el oxígeno del medio ambiente lo que da como resultado que se vuelva frágil al paso del tiempo; los poliuretanos, poseen una excelente resistencia al agua, presentan además buenas propiedades mecánicas, sobre todo a la abrasión, tienen una buena resistencia a los ácidos y solventes así como a las soluciones alcalinas; los poliésteres, empleados desde la década de los años sesenta del siglo pasado y que como características principales se encuentra el proveer de una buena resistencia química, en especial en presencia de ácidos y solventes, aún a elevadas temperaturasy finalmente los hules clorados que presentan, por ejemplo, gran adherencia a sustratos de acero, así como una buena resistencia a los químicos [Forsgren, 2006]. Cada uno de éstos obtiene sus características a través del particular componente funcional que los constituye o por los enlaces empleados por éste para formar la película, todo desde el punto de vista químico. FIGURA 16.1 El uso de pinturas o recubrimientos orgánicos se ha popularizado como uno de los métodos de acabado más empleado debido a su versatilidad en métodos de aplicación así como para efectuarla estando el elemento en pleno funcionamiento, además de la protección que puede otorgar y acabado estético su empleo es económico. Métodos de aplicación de los recubrimientos orgánicos Un factor de suma importancia para la eficiencia al depositar una película de estos, así como en la posterior función que desempeñe un recubrimiento orgánico, es lo concerniente a la limpieza y LECTURA 14, MÉTODOS DE ACABADO SUPERFICIAL Y RECUBRIMIENTOS 5 preparación de la superficie donde va a ser depositado así como su aplicación. A través de éstos se pretende que la superficie, como pudiera ser por ejemplo una de tipo metálica, quede libre de residuos grasos, de sales, óxidos, restos de desbaste así como obtener una adecuada rugosidad de la superficie para asegurar el anclaje de la película. En el caso de la aplicación es de vital importancia el generar una película homogénea en su espesor y calidad. Dependiendo del material del sustrato y de las características del elemento o pieza que se pretenda recubrir (tamaño, forma y funcionamiento) será el tratamiento previo de limpieza y preparación de la superficie, ya que por ejemplo no se realizará la misma preparación para pintar un elemento metálico en el hogar, como por ejemplo una reja, a la efectuada para pintar un puente de estructura metálica. Por tal razón es que existen diferentes normas mediante las cuales se establecen los estándares con los que la preparación superficial incluyendo limpieza del sustrato se lleva a cabo (lo cual es evidentemente para una aplicación especializada como se mencionó para el pintado de un puente); por ejemplo la norma ISO 8504:1992 que describe la preparación de acero antes de la aplicación de pinturas y productos afines, de otras organizaciones como la National Association of Corrosion Engineers (NACE) o la Steel Structures Painting Council (SSPC) existen varios documentos que tratan este tópico. En lo concerniente a la limpieza, los métodos típicos utilizados incluyen a la limpieza mediante abrasivos en la cual los óxidos son removidos, posterior a una remoción de cualquier residuo aceitoso, por medio de un granallado de la superficie del sustrato empleando arena, o algún otro tipo de material como pueden ser partículas metálicas o poliméricas, de manera que impacten sobre las superficies a limpiar. La limpieza mediante chorro de agua a alta presión es similar a este método. Otro método es la limpieza mediante detergentes, la cual es usada para remover los residuos grasos y que es aplicada en metales mediante inmersión o atomización, el cual posteriormente se enjuaga en agua corriente. Por desgracia no es posible eliminar óxidos con este método. Además de los anteriores se tiene la limpieza alcalina, la cual tiene una función parecida a cuando se emplean detergentes sólo que se emplean soluciones de fosfatos, boratos o hidróxidos alcalinos; la limpieza con emulsiones tiene como función eliminar grasas pesadas mediante la utilización de emulsiones acuosas de solventes orgánicos tales como alcoholes minerales y queroseno. Otras técnicas empleadas son la limpieza con solventes así como la limpieza con vapores [Schweitzer, 2006]. Para la aplicación, existen diferentes métodos cada uno con sus diferentes ventajas y desventajas o enfocados para usarse con un recubrimiento en específico. Los factores más comunes por los que se ve favorecido un cierto método de aplicación son el ambiente de exposición, el propósito, MANUFACTURA I 6 condiciones, geometría y dimensiones del producto así como tiempo de aplicación y el costo de éste [Schweitzer, 2006]. Existen diferentes métodos, que van desde los simples y comúnmente utilizados, como la inmersión o la aplicación con brocha o rodillo ó la pulverización mediante pistola de aire, hasta los más estilizados como la pulverización electrostática (donde las piezas a pintar se cargan eléctricamente y las gotas atomizadas de pintura se cargan en forma electrostática mejorando le eficiencia en el pintado), en caliente o a alta presión sin aire. Funcionamiento como protección a la corrosión de sustratos metálicos Una de las funciones buscadas al ocupar este tipo de recubrimientos sobre superficies metálicas es la de proteger en contra de los fenómenos corrosivos. En general, existen básicamente tres métodos por el que se guían las técnicas para el control de la corrosión; y que consisten en: a. Formar una barrera contra el medio ambiente, b. Dar lugar a una protección catódica, c. Proveer de inhibidores de la corrosión. Los recubrimientos orgánicos o pinturas funcionan principalmente como barrera contra el medio ambiente, con lo que se evita el contacto entre el metal y la humedad en conjunto con contaminantes atmosféricos y por tanto la generación de la celda electrolítica. Igualmente, al ser estos recubrimientos de tipo polimérico, tienen por ende, una alta resistividad eléctrica, por otra parte al ser usados se tiene una capa que dificulta enormemente el paso de iones y por tanto reduce la cinética de la corrosión. La gran cualidad de éstos, es que a la capacidad de actuar como una barrera se le pueden añadir funciones de protección catódica y de inhibidores de corrosión, mediante la adición de pigmentos, para añadir resistencia al recubrimiento. A los recubrimientos que ofrecen protección catódica, se le añade al polímero un elemento extra, zinc específicamente, que actúe como ánodo de sacrificio y que realizará las veces de un galvanizado, pero depositado en frío. A los recubrimientos con inhibidores de corrosión les son adicionados elementos, como el óxido de zinc o sales de cromo [Ahmad, 2006] por mencionar algunos, que provocan un retardo en las reacciones de transferencia de carga que dan lugar a la formación de celda de corrosión. Existen algunos otros que más que retardar las reacciones, forman una pequeña capa de óxido estable sobre la superficie del sustrato metálico. LECTURA 14, MÉTODOS DE ACABADO SUPERFICIAL Y RECUBRIMIENTOS 7 FIGURA 16.2 Uno delos métodos de aplicación de pinturas más novedoso es mediante el uso de pinturas en polvo, las cuales tienen como ventajas: la ausencia de componentes orgánicos volátiles, el bajo nivel de pérdidas debido a que puede ser reciclada y reutilizada, así como el elevado nivel de protección y durabilidad que proporcionan. 16.3 RECUBRIMIENTOS METÁLICOS Este tipo de recubrimientos se caracteriza por depositar capas muy finas de un metal o aleación sobre un sustrato, comúnmente metálico; con esto se busca proporcionar un aspecto estético o simplemente se emplea cuando la parte a recubrir requiere un aspecto brillante o lustroso así como adicionar protección contra la luz solar o la corrosión. En general, la protección contra la corrosión proporcionada por los recubrimientos metálicos depende en gran medida de la elección de la aleación del recubrimiento así como de su espesor, y no está muy influenciada por el método de aplicación Hay cuatro métodos comúnmente utilizados de aplicación de recubrimiento de metal a las superficies metálicas. Estos son la inmersión, el atomizado, el chapeado (el cual puede electrolítico, también conocido como electroplateado o galvanoplastia, y no electrolítico - electroless-) y la deposición por vapor (que puede ser física o química).Los dos últimos procesos no se utilizan para estructuras metálicas, sino que se utilizan para accesorios, elementos de unión y otros artículos pequeños. En el caso de la inmersión, ésta se realiza en caliente, es decir el sustrato metálico se sumerge en un baño de una cierta aleación, evidentemente en estado líquido y que posee una temperatura de fusión menor al material del elemento donde se va a depositar, y que van por ejemplo de los 450°C hasta los 700°C en el caso de usar zinc y aluminio respectivamente. Transcurrido el tiempo de inmersión, el cual puede ir desde una fracción de un minuto para objetos pequeños como sujetadores hasta varios minutos para estructuras a gran escala, la pieza se extraerá quedando recubierta con una capa de aleación seleccionada para tal fin. MANUFACTURA I 8 Para esto se requiere, antes de sumergir en el baño con el recubrimiento, de una limpieza de óxido, incrustaciones, aceite, pintura y otros contaminantes de la superficie. Usualmente las aleaciones empleadas para generar dicho recubrimiento son por lo general a base de zinc, aluminio, estaño y plomo, aunque este último por cuestiones de toxicidad se emplea cada vez en menor medida. Materiales como el acero o el hierro son los que con mayor frecuencia se recubren con las aleaciones mencionadas, teniendo estos metales de sustrato una mayor temperatura de fusión en comparación. En el exterior de la capa depositada se tiene una aleación en solución sólida que es básicamente el metal empleado para el recubrimiento. Conforme se acerca más cercano al sustrato se tienen, por lo general, compuestos intermetálicos que son producto de las aleaciones usadas tanto para sustrato como en el recubrimiento. Dependiendo del material utilizado para el recubrimiento el proceso puede recibir diferentes nombres. Por ejemplo se le conoce galvanizado, aluminizado o estañado cuando se emplea zinc, aluminio o estaño respectivamente. El espesor del recubrimiento suele depender tanto del proceso como del tipo de recubrimiento y es por esto que uno de los inconvenientes asociados a la inmersión es obtener una homogeneidad en el espesor de la capa generada. FIGURA 16.3 Etapas durante el proceso de galvanizado por inmersión en caliente. LECTURA 14, MÉTODOS DE ACABADO SUPERFICIAL Y RECUBRIMIENTOS 9 FIGURA 16.4 Galvanizado por inmersión en caliente (izquierda) y las capas formadas en este proceso. Para el atomizado o pulverización térmica, se trata de un proceso en el que el recubrimiento es generado al rociar materiales fundidos (o calentados) sobre una superficie. El "material de alimentación" o precursor del recubrimiento, el cual se tiene en forma de polvo o alambre, se inyecta hacia un elemento que genera el calentamiento de éste por medio de medios eléctricos (plasma o arco) o químicos (llama de combustión) y se deposita en la superficie deseada disparándolo a alta velocidad. El resultado es un recubrimiento producto de la acumulación de las numerosas partículas pulverizadas. La superficie puede no calentarse significativamente, permitiendo el recubrimiento de sustancias inflamables. Los materiales de recubrimiento disponibles para la pulverización térmica incluyen metales, aleaciones, cerámicos, plásticos y compuestos. La pulverización térmica puede proporcionar revestimientos gruesos (aproximadamente el intervalo de espesor es de 20 micrómetros a varios milímetros, dependiendo del proceso y de la materia prima), sobre una gran área con una alta tasa de deposición en comparación con otros procesos de recubrimiento tales como electroplateado y deposición física o química por vapor. FIGURA 16.5 Formación de un recubrimiento metálico mediante pulverización térmica. MANUFACTURA I 10 En el chapeado, empleando o no una fuente de energía eléctrica, un revestimiento metálico se deposita sobre una superficie conductora y el cual se utiliza para decorar objetos, para inhibir la corrosión, para mejorar la soldabilidad, para endurecer, para mejorar la resistencia al desgaste, para reducir la fricción, para mejorar la adhesión de la pintura, para alterar la conductividad entre otras propiedades. Las capas depositadas pueden ser de espesores de unas cuantas micras hasta milímetros, siendo el cobre, níquel, oro, plata, cromo, zinc y estaño los metales más comunes que se depositan. Este puede ser electrolítico y no electrolítico. En el caso del electrolítico, conocido también como electrodeposición, se genera la deposición del recubrimiento mediante electricidad; ésta se da debido al traslado de iones metálicos dentro de un medio acuoso, desde un ánodo, material del que se conformará el recubrimiento, a un cátodo, que será la pieza o sustrato a recubrir, donde se depositarán éstos. Tradicionalmente para lograr esto se tiene que: 1. Se disuelven en agua, en un ácido o una base sales metálicas que pueden ser de plata, cobre, zinc o níquel así como el material con el que se generará el recubrimiento o ánodo, y donde la sal empleada debe ser afín al material del ánodo, 2. Se aplica energía eléctrica, siendo el factor preponderante la intensidad de corriente empleada; ésta depende de la superficie a recubrir y del material que la constituya, el electrolito empleado, la aleación empleada para generar el recubrimiento, por mencionar algunos factores. Finalmente 3. Se introduce la pieza a galvanizar) o cátodo. Los principios físicos en los que se explica el proceso son las leyes de Faraday, las cuales establecen de manera simplificada que la masa del recubrimiento es directamente proporcional a la cantidad de energía eléctrica que se le haya transferido y que a su vez depende de la reacción electroquímica que tiene lugar en el material. Lo anterior se traduce en la siguiente ecuación, a través de la cual se puede encontrar el volumen de metal depositado: 3mmV aCIt Donde V es el volumen de metal depositado sobre el sustrato en milímetros cúbicos [mm3], a indica la eficiencia de la corriente aplicada en la reacción generada, C es la constante de deposición o chapeado, la cual depende de la cantidad de sustancia depositada por en un electrodo por el paso de carga o un Coulomb o equivalente electroquímico, y de la densidad [mm3/A-s] I es la intensidad de corriente aplicada en amperes [A] y t es el tiempo durante el que se aplica la corriente en horas [h]. https://es.wikipedia.org/wiki/%C3%81nodo https://es.wikipedia.org/wiki/C%C3%A1todo LECTURA 14, MÉTODOS DE ACABADO SUPERFICIAL Y RECUBRIMIENTOS 11 El espesor de la capa depositada puede calcularse mediante la siguiente expresión. ; 1000 m m e m S cm En el cual e es el espesor de la capa depositada en micrómetros, m es la masa del metal depositado en gramos [g], es la densidad en gramos por centímetro cúbico [g/cm3] y S es el área de la superficie recubierta en centímetros cuadrados [cm2]. O simplemente a partir del volumen depositado, se tiene que: V e S Una de las ventajas del proceso es que permite tener un muy buen control sobre el espesor del recubrimiento, así como también garantiza la homogeneidad de éste sobre toda la superficie donde fue depositado. En contraparte, una de las desventajas del proceso es que las sales empleadas no se disuelven totalmente, por lo que las empresas dedicadas a este proceso deben de neutralizar dicha solución para evitar que al ser desechadas contaminen el entorno y a las personas que trabajan alrededor de este proceso, ya que se trata de sustancias tóxicas. Por ejemplo, el empleo de cromo hexavalente para emplearla en este proceso (cromar una pieza) en la actualidad está en desuso debido al riesgo en la salud asociado a su manipulación, ya que este es cancerígeno; por esta razón se ha cambiado a emplearse cromo trivalente. MANUFACTURA I 12 FIGURA 16.6 El procesode electrodepositado, en este caso de plata (electroplateado), en su forma más simple. En el caso del chapeado no electrolítico (sin corriente) o deposición química, es un método de recubrimiento que implica varias reacciones simultáneas en una solución acuosa, que se producen sin el uso de energía eléctrica externa. La reacción se logra cuando el hidrógeno es liberado por un agente reductor, normalmente hipofosfito de sodio, como un ion hidruro y se oxida, produciendo así una carga negativa en la superficie de la pieza. La solución acuosa dentro de la cual se da la deposición del metal contiene los iones de éste y la superficie de deposición actúa como catalizador para la reacción. El método de deposición química, o autocatalítica, más común es el niquelado, aunque también se pueden aplicar capas de plata, oro y cobre; sin embargo, por las particularidades del proceso, el universo de metales que pueden emplearse para esto están limitados a los anteriores. FIGURA 16.7 Disposición básica para realizar el recubrimientos mediante la deposición no electrolítica o química. Por ejemplo en el caso del niquelado ocupando esta técnica, usualmente se deposita una capa de una aleación de níquel-fósforo o de níquel-boro sobre una la pieza de trabajo, la cual como se ha venido mencionando es por lo general de metal pero también puede ser de plástico, para lo que se realizan algunas modificaciones al proceso. El procedimiento se basa en la presencia de un agente reductor, por ejemplo hipofosfito de sodio hidratado (NaPO2H2 · H2O) que reacciona con los iones metálicos para depositar metal; es posible obtener aleaciones con diferentes porcentajes de fósforo, las cuales van desde 2-5% (bajo fósforo) hasta 11-14 (alto fósforo), y donde las propiedades metalúrgicas de las aleaciones dependen de este porcentaje. Las ventajas con un niquelado de este tipo frente a lo que podría obtenerse mediante electrodeposición, son la nula LECTURA 14, MÉTODOS DE ACABADO SUPERFICIAL Y RECUBRIMIENTOS 13 existencia de problemas de densidad de flujo y de suministro de energía, proporciona un depósito uniforme independientemente de la geometría de la pieza de trabajo y con el catalizador de predeposición adecuado puede depositarse en superficies no conductoras. (a) (b) FIGURA 16.8 Comparación de los espesores obtenidos para elementos irregulares mediante (a) electrodeposición y (b) deposición no electrolítica o química. Finalmente la deposición por vapor puede ser física o química. En el caso de ser física se conoce como deposición física en fase de vapor (PVD por sus siglas en inglés -Physical Vapor Deposition-). Este término describe una variedad de métodos de deposición al vacío que pueden usarse para producir películas y recubrimientos delgados. Durante el proceso, el material con el que se realizará el recubrimiento pasa de una fase condensada a una fase vapor y luego de vuelta a una fase condensada de película delgada; se utiliza en la fabricación de artículos que requieren películas delgadas para funciones mecánicas, ópticas, químicas o electrónicas. Algunos ejemplos incluyen dispositivos semiconductores tales como paneles solares de película delgada, película PET aluminizada para envasado de alimentos y globos y herramientas de corte recubiertas para maquinado. Los procesos PVD más comunes son la pulverización catódica y la evaporación. Los recubrimientos industriales comunes aplicados por PVD son nitruro de titanio, nitruro de circonio, nitruro de cromo, nitruro de aluminio titanio. En el caso de la de tipo químico o deposición química en fase vapor (CVD por sus siglas en inglés -Chemical Vapor Deposition-), se utiliza a menudo en la industria de semiconductores para producir películas delgadas. MANUFACTURA I 14 En la CVD típica, el sustrato se expone a uno o más precursores volátiles, que reaccionan y/o se descomponen sobre su superficie para producir el depósito deseado. Con frecuencia, también se producen subproductos volátiles, que son eliminados en forma de gases a través de la cámara de reacción. Los generación de recubrimientos mediante esta técnica es capaza de depositar materiales en diversas formas, incluyendo monocristalino, policristalino o amorfo, por mencionar algunos. Estos materiales incluyen: silicio (SiO2, germanio, carburo, nitruro, oxinitruro), carbono (fibra, nanofibras, nanotubos, diamante y grafeno), fluorocarbonos, filamentos, tungsteno, nitruro de titanio y diversos dieléctricos. 16.4 RECUBRIMIENTOS CERÁMICOS En este caso se trata sobre todo de los recubrimientos a base de porcela, pudiendo también ser de algún otro tipo de cerámica, sobre sustratos metálicos como por ejemplo acero, fundiciones de hierro o aluminio, y que son ampliamente vistos, por ejemplo, en instrumentos de cocina. En México y gran parte de América, el tan conocido peltre se define como un elemento de acero que ha sido vitrificado (o porcelanizado) con un recubrimiento a base de boro, aluminio o silicatos, y que son obtenidos por fundición a alta temperatura, en una o varias capas, de una mezcla de óxidos de carácter ácido o básico. En otros países la connotación que se da al término peltre es al de una aleación compuesta por estaño, cobre, antimonio y plomo, por lo que hay que tener especial cuidado con este término. https://es.wikipedia.org/wiki/%C3%93xido https://es.wikipedia.org/wiki/Aleaci%C3%B3n https://es.wikipedia.org/wiki/Esta%C3%B1o https://es.wikipedia.org/wiki/Cobre https://es.wikipedia.org/wiki/Antimonio https://es.wikipedia.org/wiki/Plomo LECTURA 14, MÉTODOS DE ACABADO SUPERFICIAL Y RECUBRIMIENTOS 15 FIGURA 16.9 El uso del acero porcelanizado está ampliamente difundido en México para emplearse en instrumentos de cocina. Estos son apreciados por su estética, facilidad de limpieza, nula reactividad química y durabilidad en general. Las composiciones de los cerámicos empleados varían en función de los requerimientos del producto, pudiendo ser formuladas por su color y atractivo visual mientras que otros se diseñan buscando la resistencia a productos químicos, al ambiente, soportar altas temperaturas de servicio, aumentar la dureza, mejorar la resistencia a la abrasión o tener mayor resistencia eléctrica. Por ejemplo, los recubrimientos con alto contenido de alúmina son más convenientes para aplicaciones refractarias. Para generar un recubrimiento cerámico es necesario preparar el material que generará el revestimiento, de tal manera que se obtenga partículas finas, cuyo tamaño irá en función de la funcionalidad que se pretenda para éste. En seguida se aplica, mediante técnicas como la aspersión, la aspersión electroestática, el recubrimiento por flujo, la inmersión o la electrodeposición. Una vez que se ha aplicado, y en caso de ser necesario, se realiza su secado. Por último se procede a su cocimiento, durante el cual se da lugar a las reacciones químicas que generan las determinadas fases de interés que conformarán al recubrimiento. Este proceso de sinterizado de los elementos que conforman al revestimiento se da por lo general a temperaturas alrededor de los 800°C, obteniéndose al finalizar esta etapa una capa cerámica prácticamente libre se porosidad. 16.5 RECUBRIMIENTOS DE CONVERSIÓN QUÍMICA Los recubrimientos de conversión son revestimientos para metales, en los que la superficie de la parte a cubrir es convertida en el recubrimiento mismo a través de un proceso químico o electroquímico. Los ejemplos incluyen recubrimientos de conversión de cromato, recubrimientos de conversión de fosfato, recubrimientos en azul, recubrimientos de óxido negro sobre acero y anodización. Se utilizan para la protección contra la corrosión, para añadir color decorativo y como primarios de pinturas. Por ejemplo en el caso de formación de un recubrimiento de óxido negro (magnetita)sobre acero, mejor conocido como pavonado, se trata de un proceso de pasivación del material (es decir se genera una capa de óxido sobre el metal, en este caso a voluntad), resultando en un recubrimiento de conversión electroquímica, producto de una reacción química oxidante con hierro sobre la superficie, formando selectivamente magnetita (Fe3O4); el óxido negro de hierro MANUFACTURA I 16 proporciona una protección mínima contra la corrosión, a menos que también sea tratado con un aceite, el cual desplaza el agua para reducir el mojado y por tanto la acción galvánica. La diferencia entre este óxido negro y el típico de color rojizo asociado al hierro y sus aleaciones (Fe2O3), mejor conocido como herrumbre, es que este último experimenta un cambio de volumen extremadamente grande al hidratarse y dando como resultado un fácil desprendimiento, además de ser sumamente poroso. FIGURA 16.10 Una pieza en acero antes y después de un tratamiento de pavonado. Otro proceso de recubrimiento de este tipo es el fosfatado, el cual involucra la formación de una capa por pasivación del material, el cual se aplica por lo general sobre aleaciones ferrosas aunque pueden ser aplicados también en otros metales, como aluminio, zinc, cadmio, plata y estaño. Estos se utilizan en las superficies de piezas de acero para prevenir la corrosión, mejorar la lubricación en procesos de conformado o embutición, o como base para recubrimientos o pintados posteriores. A través de la aplicación, mediante pulverización o inmersión, de una solución diluida de ácido fosfórico y sales de fosfato, se obtiene una reacción química con la superficie de la parte que se está recubriendo para formar una capa de fosfatos cristalinos insolubles. Los principales tipos de recubrimientos de fosfato son el manganeso, hierro y zinc. Los fosfatos de manganeso se utilizan tanto para la resistencia a la corrosión como para la lubricidad y se aplican únicamente por inmersión. Los fosfatos de hierro se usan típicamente como base para revestimientos o pinturas adicionales y se aplican por inmersión o por pulverización. Los fosfatos https://es.wikipedia.org/wiki/Pasivaci%C3%B3n https://es.wikipedia.org/wiki/Aluminio https://es.wikipedia.org/wiki/Cinc https://es.wikipedia.org/wiki/Cadmio https://es.wikipedia.org/wiki/Esta%C3%B1o https://es.wikipedia.org/wiki/Corrosi%C3%B3n https://es.wikipedia.org/wiki/Lubricaci%C3%B3n LECTURA 14, MÉTODOS DE ACABADO SUPERFICIAL Y RECUBRIMIENTOS 17 de zinc se utilizan para la resistencia a la corrosión (fosfato y aceite), con una capa base de lubricante y también se pueden aplicar por inmersión o pulverización. FIGURA 16.11 Ejemplo del fosfatado por inmersión de la carrocería de un automóvil. En el caso del anodizado, se trata también de un proceso electrolítico de pasivación a través del cual se incrementa el espesor de la capa natural de óxido que se generaría en la superficie de piezas metálicas, siendo por lo general en aluminio y sus aleaciones. En éste se genera una capa de alúmina 2 3Al O , mediante la cual se busca brindar una protección, especialmente contra la corrosión, pero también proporciona una mayor resistencia y durabilidad del aluminio. La protección dependerá en gran medida del espesor de esta capa que van desde las 5 µm hasta las 20 µm dependiendo del ambiente en que se vayan a utilizar. El nombre del proceso deriva del hecho que la pieza a tratar con este material hace de ánodo en el circuito eléctrico de este proceso electrolítico. La capa de anodizado además permite proteger contra la abrasión, prevenir el agrietamiento de componentes roscados y la corrosión, por mencionar algunos, permite también su tinte en una amplia variedad de colores. Aunque el anodizado se aplica más comúnmente para proteger las aleaciones de aluminio, también existen procesos para el titanio, el zinc, el magnesio, el niobio, el zirconio, el hafnio y el tantalio. https://es.wikipedia.org/wiki/Pasivaci%C3%B3n https://es.wikipedia.org/wiki/%C3%81nodo https://es.wikipedia.org/wiki/Circuito_el%C3%A9ctrico https://es.wikipedia.org/wiki/Electr%C3%B3lisis https://es.wikipedia.org/wiki/Abrasi%C3%B3n https://es.wikipedia.org/wiki/Corrosi%C3%B3n MANUFACTURA I 18 FIGURA 16.12 Algunas elementos en aluminio que han pasado por un anodizado. Referencias https://en.wikipedia.org/wiki/Electroless_nickel_plating https://en.wikipedia.org/wiki/Bluing_(steel) https://en.wikipedia.org/wiki/Coating https://www.thomasnet.com/articles/chemicals/ceramic-coating-metals https://en.wikipedia.org/wiki/Chromate_conversion_coating https://www.uv.es/uimcv/Castellano/ModuloMatCeramicos/Unidad%201.pdf https://en.wikipedia.org/wiki/Electroless_nickel_plating https://en.wikipedia.org/wiki/Bluing_(steel) https://en.wikipedia.org/wiki/Coating https://www.thomasnet.com/articles/chemicals/ceramic-coating-metals https://en.wikipedia.org/wiki/Chromate_conversion_coating https://www.uv.es/uimcv/Castellano/ModuloMatCeramicos/Unidad%201.pdf
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