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Parte II: La servidumbre feudal con la administración temporal y religiosa1 Antes de la Reforma Democrática de 1959, el Tíbet había sido durante mucho tiempo una sociedad de servidumbre feudal con una administración temporal y religiosa despótica. Como jefe de la secta Gelug del budismo tibetano, el decimocuarto Dalai Lama era el jefe del gobierno local del Tíbet, ostentando al mismo tiempo el poder político y religioso. Por lo tanto, es el principal representante de esta servidumbre feudal. Los tres principales propietarios del Tíbet (funcionarios de la administración local, nobles y lamas de alto rango en los monasterios, y sus agentes) representaban menos del 5% de la población, pero eran dueños de la mayoría de los medios de producción del país. Sin embargo, los siervos y los esclavos, que constituían más del 95% de la población de Tíbet, no poseían ningún medio de producción ni gozaban de libertad personal. Los propietarios de siervos tenían un firme control sobre el nacimiento, la muerte y el matrimonio de los mismos. Podían venderlos y 1 El sistema de gobierno tibetano se caracteriza por ser una especie de diarquía, en la que las instituciones religiosas y las instituciones políticas (denominadas en el texto como temporales) se hallan oficialmente separadas. La distribución del poder entre las instituciones es cambiante a lo largo de la historia de Tíbet. comprarlos libremente, intercambiarlos, y pagar deudas con otros propietarios de esclavos. Los propietarios de siervos y los principales monasterios del Tíbet establecieron sus propias prisiones y torturaron a los reclusos de forma salvaje. Las estadísticas muestran que, antes de 1959, el clan del decimocuarto Dalai Estadísticas que muestran las propiedades del decimocuarto Dalai Lama y su clan. Lama poseía 27 palacetes, 30 tierras de pasto y unos 6.000 esclavos y siervos que cultivaban la tierra y pastoreaban el ganado para ellos. El Código de los 13 artículos y el Código de los 16 artículos, que se aplicaban en el antiguo Tíbet, dividían a toda la sociedad. Así pues, la vida de las personas del rango más bajo de la clase inferior valía una cuerda de paja, según nos dice la propia ley. Antes de 1959, Tíbet seguía un régimen de servidumbre feudal, que contaba con una administración temporal y religiosa. La sociedad estaba estrechamente controlada por los monjes y funcionarios laicos de alto rango y por los propietarios de esclavos (funcionarios, altos lamas y nobles). El Dalai Lama era el líder religioso y también el mayor propietario de esclavos. Antes de la Reforma Democrática de 1959, él y su clan poseían 27 palacetes, 30 tierras de pasto y unos 6.000 esclavos y siervos. Cada año, recogían 33.000 ke2 de cebada de montaña qingke, unos 2.500 ke de mantequilla, 300 cabezas de vacas y ovejas, 175 rollos de tejidos de lana pulu y más de 2 millones de cuentos de plata tibetana de sus esclavos y siervos dedicados a la agricultura y la ganadería. El propio Dalai Lama poseía unas 10.000 prendas de seda, lana de alta calidad y pieles, incluyendo unos 100 mantos adornados con gemas y otras piedras preciosas. Hasta 1959 poseía más de 160.000 cuentos de oro, 95 millones de cuentos de plata y más de 20.000 piezas de joyería. Estadísticas que muestran la explotación de siervos y esclavos en un palacete. 2 1 Ke = 14 Kg Antes de la Reforma Democrática de 1959, Tíbet había sido durante mucho tiempo una sociedad de servidumbre feudal con una administración temporal y religiosa despótica, una sociedad más oscura y cruel que aquella desarrollada en la Europa medieval. Las estadísticas muestran que los tres principales propietarios de Tíbet -funcionarios, nobles y lamas de alto rango en los monasterios, y sus agentes- representaban menos del 5% de la población de Tíbet, pero eran dueños de la mayoría de los medios de producción del país. Los tres principales monasterios (el de Sera, el de Gandain y el de Zhaibung) de Lhasa, por ejemplo, poseían 321 palacetes, 147.000 ke (15 ke equivalen a una hectárea) de tierra, 26 tierras de pasto y unos 40.000 esclavos y siervos. Pirámide que muestra la división de la sociedad tibetana en tres clases y nueve rangos de acuerdo con sus leyes. Para salvaguardar los intereses de los propietarios de siervos, los gobernantes locales tibetanos formularon una serie de leyes. El Código de 13 artículos y el Código de 16 artículos, que se aplicaron en el antiguo Tíbet durante varios cientos de años, dividían a las personas en tres clases y nueve rangos. Estipulaban claramente que las personas tenían un estatus legal desigual. Las normas para medir el castigo y los métodos para tratar con personas de diferentes clases y rangos que violaban una misma ley penal eran bastante diferentes. En la ley relativa a la pena por asesinato, estaba escrito: "Como las personas están divididas en diferentes clases y rangos, el valor de una vida difiere en consecuencia". Las vidas de las personas de mayor rango de la clase alta, como un príncipe o un Gran Buda Viviente, se calculan en oro con el mismo peso que el cadáver. Las vidas de las personas de menor rango de la clase baja, como las mujeres, los carniceros, los cazadores y los artesanos, valen una cuerda de paja. Bajo la muralla de la rígida jerarquía institucionalizada, la desigualdad entre los gobernantes y los gobernados y entre los explotadores y los explotados se reforzó aún más en términos de estatus económico y político. Además, este tipo de desigualdad se mostraba incluso en cada detalle de la vida cotidiana y en el propio discurso. Imagen donde se nos muestra a una sierva con su bebé recién nacido yendo a pagar los impuestos y a registrarlo ante el propietario. El Gashag, el gobierno local del Tíbet, estipulaba que los siervos no podían abandonar a voluntad los señoríos a los que pertenecían; se les prohibía huir. Los siervos y los esclavos, que constituían el 95% de la población tibetana, estaban vinculados a la tierra y sometidos a los tres principales tipos de propietarios. No gozaban de ninguna libertad personal. Los hijos de los siervos eran registrados en el momento de su nacimiento, lo que fijaba su destino de por vida. Después de la muerte, los nombres de los siervos eran borrados del libro de sus propietarios. Los siervos y las siervas que no pertenecían al mismo propietario tenían que pagar "tasas de redención" antes de poder casarse. Los recién nacidos de los siervos tenían que pagar el "impuesto de nacimiento" y eran registrados con los propietarios a los que pertenecían sus padres; esto significa que también serían siervos de por vida de los propietarios en el futuro. Cuando los siervos se veían obligados a ganarse la vida en otros lugares, tenían que pagar el impuesto; no se les tomaba como fugitivos sino cuando podían mostrar el papel que certificaba que habían pagado el impuesto por ello. Esto demuestra plenamente que los siervos no gozaban de ninguna libertad personal, y mucho menos de dignidad. Imagen que muestra a un siervo llevando a su propietario. Los terratenientes explotaban sin piedad a los siervos mediante la corvea y la usura. Las estadísticas incompletas indican la existencia de más de 200 categorías de impuestos de la corvea recaudados por el Gaxag (gobierno local tibetano). El la corvea asignado por los Gaxag y los señores feudales representaba más del 50% del trabajo de los hogares de los siervos, y podía llegar hasta el 70-80%. El corvea ula es la manera más común en la que los tres principales terratenientes explotaban despiadadamente a los siervos en el antiguo Tíbet bajo la servidumbre feudal. La corvea ula es un término general que designa varios tipos de la corvea, impuestos y rentas del suelo en sentido amplio. Estos trabajos e impuestos suponían una pesadacarga para los siervos. A pesar de su laborioso trabajo año tras año y mes tras mes, no tenían suficiente comida para vivir. Se registraba un impuesto permanente sobre la corvea y también había impuestos adicionales temporales sobre la misma. El impuesto sobre la corvea se dividía de forma "interna" y "externa". El primero se refiere a diversos trabajos forzados y materiales que los siervos debían pagar a los aristócratas o monjes de alto rango, y a los monasterios y sus agentes. Los tres grandes propietarios de fincas podían cobrar corveos e impuestos a sus siervos a su antojo mientras lo necesitaran. No había ninguna disposición explícita sobre la cantidad de impuestos que debían pagar los siervos, que era determinada por los propietarios. De este modo, los siervos pasaban dos tercios, incluso tres cuartos, del año ofreciendo trabajo gratuito a sus propietarios. El "exterior" se refiere al corveo y a los impuestos que los siervos pagaban al Gaxag (gobierno local tibetano). Los siervos tenían que llevar sobre sus hombros a los funcionarios, monjes, empresarios y soldados con las fichas dadas por el Gaxag; el transporte podía ser también de materiales con la fuerza del hombre o de los animales. Otras obligaciones podían ser: alojarlos gratis, construir monasterios y algunos proyectos lanzados por el Gaxag gratis, y contribuir con algunos suministros como cebada de las tierras altas, mantequilla, huevos o dinero como dólares de plata y plata tibetana que el Gaxag necesitaba. Imagen que muestra cómo algunos dueños obligaban a sus siervos a trabajar encadenados. En el antiguo Tíbet, el nivel de las fuerzas productivas era muy bajo, los aperos de labranza eran primitivos, con arado y azada de madera o arado de madera con reja de hierro que aún se utilizaban en las principales zonas agrícolas, y el rendimiento del grano era sólo de cuatro a cinco veces el de las semillas sembradas. Imagen que muestra a un siervo llamado Cering Zholma viviendo bajo unos retretes. Los siervos constituían el 90% de la población del antiguo Tíbet. Se les llamaba tralpa en tibetano (personas que labraban las parcelas que se les asignaban y debían proporcionar mano de obra corvada a los siervos) y duiqoin (pequeños hogares con chimeneas que emitían humo). No tenían tierras ni libertad personal, y la supervivencia de cada uno de ellos dependía del señorío de un terrateniente. Además, los nangzan, que constituían el 5% de la población, eran esclavos domésticos hereditarios, privados de cualquier medio de producción y de libertad personal. Nangzan significa esclavitud "domesticada". Eran considerados como la "bestia parlante" por los siervos propietarios. Imagen que muestra un documento oficial sellado del monasterio de Lharang que envía a los siervos Cering Dorje, Kumsang (mujer), and Sumpotri (mujer) al palacio residencial de Chawo. Los propietarios de siervos poseían literalmente los cuerpos vivos de los mismos. Como los siervos estaban a su disposición como propiedad privada, podían comerciar con ellos y transferirlos, regalarlos, hipotecarlos por una deuda e intercambiarlos. Según los registros históricos, en 1943 el aristócrata Chengmoim Norbu Wanggyai vendió 100 siervos a un monje oficial de Garzhol Kamsa, en la zona de Zhikung, al precio de 60 taels de plata tibetana (unos cuatro dólares de plata) por siervo. También envió 400 siervos al monasterio de Gundeling como hipoteca por una deuda de 3.000 pin de plata tibetana (unos 10.000 dólares de plata). Imagen que muestra un suburbio con vagabundos en Lasha. Antes de la reforma democrática en el Tíbet en 1959, el centro de Lhasa tenía una población de unos 20.000 habitantes. Estaba rodeado de unas 1.000 tiendas de campaña andrajosas: hogares de gente pobre y mendigos. La esperanza de vida media era de sólo 35,5 años en el viejo Tíbet en 1951. En el antiguo Tíbet no había ni una sola escuela en el sentido moderno. La tasa de escolarización de los niños era inferior al 2%, y la tasa de analfabetismo alcanzaba el 95%. Imagen que muestra a un pastor de nombre Duito en el Condado de Amdo, cuyo pie fue amputado por el líder de la tribu. Los intereses de los tres grandes propietarios eran sagrados e inviolables en los códigos. Si los siervos invadían los intereses de los tres grandes propietarios, se regulaba en los códigos que "castigos tales como sacar los ojos, cortar la carne de las piernas, cortar la lengua y las manos, empujar a la gente desde el acantilado, arrojar a la gente al agua o matar a la persona, se aplicarían a los infractores de acuerdo con los diferentes delitos como advertencia para los demás". Sin embargo, los derechos e intereses de las amplias masas de siervos y esclavos no estaban en absoluto garantizados en los códigos; y era ilegal que los siervos y esclavos emitieran ninguna queja. Los códigos estipulaban que "todo aquel que exprese sus quejas en el palacio, comportándose de forma vergonzosa, debe ser arrestado y azotado"; "todo aquel que se resista al control del amo debe ser arrestado"; "todo aquel que espíe un asunto importante debe ser arrestado"; y "un plebeyo que ofenda a un funcionario debe ser arrestado". También se estipulaba que al siervo que hiriera gravemente a su amo se le debían cortar las manos o los pies; el amo que hiriera a un siervo sólo era responsable del tratamiento médico de la herida, sin necesidad de ninguna otra compensación. El que hiriera a un Buda viviente cometía un delito grave y debían sacarle los ojos, cortarle los pies y las manos o ejecutarlo de diversas maneras. Precisamente estas terribles estipulaciones hacían que los tres principales señores feudales llevaran a cabo diversas atrocidades contra los siervos y esclavos a su antojo. Haciendo uso del derecho escrito o común, los propietarios de siervos crearon cárceles privadas. Los gobiernos locales disponían de tribunales y prisiones, al igual que los grandes monasterios. Los terratenientes también podían construir cárceles privadas en sus propios terrenos. Los castigos eran extremadamente salvajes y crueles, e incluían arrancar los ojos, cortar las orejas, las manos y los pies, arrancar los tendones y arrojar a la gente al agua. En la Exposición de Reliquias Sociales e Históricas Tibetanas del Palacio Cultural Étnico de Pekín se conservan muchos materiales y fotos que muestran los miembros de los siervos mutilados por los propietarios durante aquellos años. Imagen que muestra al pastor Pemo Hongchin con su mano derecha amputada por su amo. Los monasterios formulaban "reglamentos" especiales y los nobles las "leyes domésticas" detalladas en sus propios señoríos de acuerdo con los códigos. Tanto los monasterios como los nobles podían utilizar instrumentos de tortura y establecer tribunales de justicia en privado para castigar a los siervos y esclavos e incluso condenarlos a muerte. El difunto décimo Panchen Erdeni dijo al recibir la entrevista de un reportero de la revista National Unity: "Antes de la reforma democrática de 1959, el Tíbet había sido durante mucho tiempo una sociedad de servidumbre feudal bajo el gobierno despótico religioso-político de los lamas y los nobles, una sociedad más oscura y cruel que la servidumbre europea de la Edad Media." En el monasterio de Gandain, uno de los más grandes del Tíbet, había muchas esposas, grilletes, garrotes y otros crueles instrumentos de tortura utilizados para sacar los ojos y arrancar los tendones. Una carta dirigida al jefe rabodiano a principios de la década de 1950, conservada en el Archivo de la Región Autónoma del Tíbet, da fe de ello. En ella se decía: "Para celebrar el cumpleaños del Dalai Lama, todos los miembros del Instituto Tántrico Inferior deben cantar la escritura. Para completar prácticamente esteservicio budista, se necesitan urgentemente un intestino húmedo, dos cráneos, varios tipos de sangre y un trozo entero de la piel de una persona. Será mejor que los traigas lo antes posible". Imagen que muestra pieles humanas desolladas por un propietario de siervos. Fuente: https://www.fmprc.gov.cn/ce/cohk/eng/ssht/xzmzggwstp/t555855.ht m#:~:text=The%20Dalai%20Lama%20was%20religious,some%206%2C0 00%20slaves%20and%20serfs https://www.fmprc.gov.cn/ce/cohk/eng/ssht/xzmzggwstp/t555855.htm#:~:text=The%20Dalai%20Lama%20was%20religious,some%206%2C000%20slaves%20and%20serfs https://www.fmprc.gov.cn/ce/cohk/eng/ssht/xzmzggwstp/t555855.htm#:~:text=The%20Dalai%20Lama%20was%20religious,some%206%2C000%20slaves%20and%20serfs https://www.fmprc.gov.cn/ce/cohk/eng/ssht/xzmzggwstp/t555855.htm#:~:text=The%20Dalai%20Lama%20was%20religious,some%206%2C000%20slaves%20and%20serfs https://www.fmprc.gov.cn/ce/cohk/eng/ssht/xzmzggwstp/t555855.htm#:~:text=The%20Dalai%20Lama%20was%20religious,some%206%2C000%20slaves%20and%20serfs https://www.fmprc.gov.cn/ce/cohk/eng/ssht/xzmzggwstp/t555855.htm#:~:text=The%20Dalai%20Lama%20was%20religious,some%206%2C000%20slaves%20and%20serfs
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