El pueblo chino no tolerará la agresión - Sonia Flores

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El pueblo chino no tolerará la agresión
Traducido por la asociación Soong Ching-ling de
amistad con China 
 Traductor: Jaime Acosta Pozuelo 
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Escrito: octubre, 1950
Fuente: World News and Views, 14 de octubre de 1950, vol. 30, nº 41
Versio� n en lí�nea: Zhou Enlai Internet Archive, julio de 2005 
Transcripcio� n/Marcado HTML: Mike B.
Dominio pu� blico: Marxists Internet Archive (2005).
Ha pasado un an2 o desde la fundacio� n de la Repu� blica Popular China, el 1 de
octubre de 1949. Este ha sido un an2 o de grandes victorias y ra�pidos avances para el
pueblo chino.
Este u� ltimo an2 o hemos conseguido constantes victorias en la guerra de liberacio� n
popular. La guerra de liberacio� n del pueblo chino, que comenzo� en julio de 1946, ya
habí�a logrado una victoria crucial en ví�speras de la fundacio� n de la Repu� blica Popular
China en 1949. Pero, en esos tiempos, el remanente de los va�ndalos del Kuomintang
todaví�a ocupaba el a� rea del sur de China, la zona suroeste de China — con centros en
Guangzhou y Chungking respectivamente — y algunas islas.
El an2 o pasado, el Eje�rcito Popular de Liberacio� n libero� todo el sur de China y la
provincia de Fukien. Ma�s tarde libero� todo el suroeste de China — con la excepcio� n del
Tí�bet, las islas Choushan, las islas Tungshan y otras islas. Nuestro eje�rcito acabo�
completamente con 203 divisiones enemigas, compuestas por unos 2.180.000 hombres.
El pueblo chino ha aniquilado a los eje�rcitos de bandidos del Kuomintang
equipados por los estadounidenses a lo largo de todo el territorio continental chino y ha
obtenido esta gran victoria. ¿Que� podemos aprender de esto? La leccio� n ma� s importante
es lo siguiente: una victoria tan importante nunca podra� ser un feno� meno accidental de
la historia, sino el necesario resultado de las diversas luchas revolucionarias del pueblo
chino durante el u� ltimo siglo. Una victoria tan enorme, ra�pida y contundente no podrí�a
concebirse sin el abnegado apoyo de millones de personas.
China Unida
Esta victoria del pueblo chino es completamente diferente a todas las
«unificaciones» ocurridas a lo largo de la historia de China. Previamente han habido
distintos tipos de «unificacio� n», pero los unificadores eran los opresores del pueblo
desde el principio o se convertí�an en ellos despue�s. Por lo tanto, nunca pudieron lograr
una unificacio� n real, y tales unificaciones no podí�an sino colapsar despue�s de un tiempo.
A dí�a de hoy, ha surgido la primera unificacio� n del pueblo chino. Las gentes se
han convertido en los duen2 os de las tierras chinas y el gobierno de los reaccionarios en
China ha sido derrocado definitivamente.
Dado que el enemigo fulminado por el pueblo chino fue armado por el gobierno
de EEUU, podemos afirmar absolutamente que el pueblo chino no solo ha obtenido la
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victoria sobre el enemigo en casa, sino tambie�n sobre el enemigo en el exterior — es
decir, los intervencionistas imperialistas de Estados Unidos. Si los imperialistas
estadounidenses todaví�a quieren intervenir e invadir China, cualesquiera sean sus
nuevos medios y formas, entonces se encontrara�n con la misma derrota que sufrio� el
Kuomintang.
La lucha entre el pueblo chino y el remanente de los reaccionarios del
Kuomintang todaví�a no ha llegado a su fin. Esto se debe a que Taiwa�n, que esta� ocupada
por los remanentes reaccionarios, esta� actualmente bajo el control de la Armada y la
Fuerza Ae�rea estadounidenses.
El Eje�rcito Popular de Liberacio� n esta� decidido a liberar a Taiwa�n de las garras de
los agresores estadounidenses y a limpiar las guaridas de los bandidos reaccionarios de
China de una vez por todas. Se podra� observar que, en la guerra por la liberacio� n de
Taiwa�n, nuestra posicio� n estrate�gica es mucho mejor que la de nuestro enemigo.
Tenemos a la justicia de nuestro lado; nuestra retaguardia es estrecha, vasta y
consolidada y ahora redoblamos esfuerzos por la victoria final. El Eje�rcito Popular de
Liberacio� n tambie�n esta� decidido a marchar hacia el oeste para liberar al pueblo
tibetano y defender las fronteras de China. Estamos dispuestos a emprender
negociaciones pací�ficas para lograr este cometido, que es necesario para la seguridad de
nuestra patria. Los patriotas en el Tí�bet han acogido esta intencio� n con los brazos
abiertos, y esperamos que las autoridades locales del Tí�bet no duden en alcanzar una
solucio� n pací�fica a la cuestio� n.
Política Exterior de la China Popular
La polí�tica exterior de la Repu� blica Popular China se ha establecido claramente en
el Programa Comu� n aprobado por la Conferencia Consultiva Polí�tica del Pueblo Chino. El
Programa Comu� n estipula:
«El principio de la política exterior de la República Popular China es la
protección de la independencia, la libertad, la integridad y la soberanía del país, la
defensa de la paz internacional y la cooperación amistosa con los pueblos de todos
los países, y la oposición a la política imperialista de agresión y guerra».
Sobre la cuestio� n de establecer relaciones diploma� ticas y comerciales con paí�ses
extranjeros, el Programa Comu� n estipula:
«El Gobierno Central Popular de la República Popular de China podrá, sobre
la base de la igualdad, el beneficio mutuo y el respeto mutuo del territorio y la
soberanía, negociar con gobiernos extranjeros que hayan roto relaciones con la
camarilla reaccionaria del Kuomintang y que adopten una actitud amistosa hacia
los pueblos de China, y puedan establecer relaciones diplomáticas con ellos».
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«La República Popular de China puede restablecer y desarrollar relaciones
comerciales con gobiernos y pueblos extranjeros sobre la base de la igualdad y el
beneficio mutuo».
Los asuntos exteriores del Gobierno Popular Central en el u� ltimo an2 o se llevaron
a cabo teniendo en cuenta estos principios ba� sicos.
Desde la fundacio� n de la Repu� blica Popular de China, diecisiete paí�ses han
establecido relaciones diploma� ticas formales con nuestro paí�s. Ellos son la Unio� n
Sovie�tica, Bulgaria, Rumaní�a, Hungrí�a, Corea, Checoslovaquia, Polonia, Mongolia,
Alemania, Albania, Birmania1, India, Vietnam, Dinamarca, Suecia, Suiza e Indonesia.
Otros ocho paí�ses — Pakista�n, Gran Bretan2 a, Ceila�n2, Noruega, Israel, Afganista�n,
Finlandia y los Paí�ses Bajos — tambie�n han expresado su voluntad de establecer
relaciones diploma� ticas con nuestro paí�s. Entre ellos, cuatro paí�ses — Gran Bretan2 a,
Noruega, Holanda y Finlandia — continu� an en conversaciones para el establecimiento
de relaciones diploma� ticas con nuestro paí�s.
Amistad con la URSS
La Repu� blica Popular de China esta� decididamente a favor del lado de la paz
mundial y la democracia encabezado por la Unio� n Sovie� tica y ha establecido las
relaciones fraternales ma�s estrechas con la Unio� n Sovie� tica. Durante la visita del
presidente Mao Tse-tung a la Unio� n Sovie� tica, China y la Unio� n Sovie� tica firmaron el
Tratado sino-sovie� tico de amistad, alianza y ayuda mutua, que tiene un gran significado
histo� rico mundial. Debido a este tratado, grandes pueblos de los continentes de Europa y
Asia, en nu� mero de casi 700 millones, se han unido en una estrecha alianza militar,
econo� mica y cultural, y han fortalecido así� en gran medida el poder de los dos paí�ses
para protegerse contra la agresio� n en el este.
Simulta�neamente a la firma de este tratado, o un poco ma� s tarde, China y la Unio� n
Sovie�tica firmaron adema� s los acuerdos sobre el Ferrocarril Chino de Changchun, Port
Arthur y Dairen, el acuerdo sobre la concesio� n de cre�dito al Gobierno Central Popular de
la Repu� blica Popular de China y otros cinco acuerdos econo� micos y comerciales.
En estos acuerdos, nuestro buen vecino brinda una asistencia muy generosa a
China en la fase en la que se recupera de sus heridas de guerra. Todo el pueblo chino
esta� muy entusiasmado con la firma e implementacio� n del tratado y los acuerdos entre
China y laUnio� n Sovie� tica y expresa su agradecimiento ilimitado por la amistad que le
brindo� el lí�der de la Unio� n Sovie� tica, el Generalí�simo Stalin, y el Gobierno y el pueblo de
la Unio� n Sovie� tica.
China tambie�n ha firmado contratos y acuerdos comerciales con Polonia,
Checoslovaquia y Corea. Se esta�n llevando a cabo negociaciones comerciales con
Alemania y Hungrí�a.
1 Actual Myanmar.
2 Actual Sri Lanka.
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Las relaciones comerciales tambie�n se han desarrollado entre China y ciertos
paí�ses capitalistas. Se estima que la cantidad total del comercio exterior de China no solo
alcanzara� , sino que superara� los planes originales.
Relaciones con los estados capitalistas
Los problemas que se generan al establecer relaciones diploma� ticas con paí�ses
capitalistas son ma�s complicados que los generados al establecer relaciones comerciales.
Aquí� puedo mencionar, principalmente, nuestras prolongadas negociaciones con Gran
Bretan2 a, de las cuales todaví�a no ha habido resultados. La razo� n de la infructuosidad de
las negociaciones es que el Gobierno brita�nico ha hecho oficial su reconocimiento de la
Repu� blica Popular de China, a la vez que permite que los autoproclamados
«representantes» de la camarilla reaccionaria del Kuomintang chino continu� en la
ocupacio� n ilegal del asiento de China en las Naciones Unidas. Esto dificulta el inicio de
relaciones diploma� ticas formales entre China y Gran Bretan2 a.
A lo largo de la guerra de liberacio� n del pueblo chino, el Gobierno de los Estados
Unidos se puso del lado del enemigo del pueblo chino, ayudando a los reaccionarios del
Kuomintang con todas sus fuerzas en sus ataques contra el pueblo chino. La enemistad
que alberga el gobierno de los Estados Unidos contra el pueblo chino ha aumentado
desde la creacio� n de la Repu� blica Popular de China.
A pesar de las acertadas crí�ticas de la Unio� n Sovie� tica, India y otros paí�ses,
Estados Unidos impide tercamente a los representantes de la Repu� blica Popular de
China a asistir a las Naciones Unidas y sus diversos o� rganos, y protege descaradamente
la sede de los llamados «representantes» de la camarilla reaccionaria del Kuomintang.
De manera similar, EEUU impide que los representantes chinos asistan al Consejo Aliado
para Japo� n y conspira para excluir a China y a la Unio� n Sovie� tica en la resolucio� n de un
tratado de paz con Japo� n, para rearmar a Japo� n y retener las tropas de ocupacio� n y las
bases militares estadounidenses en Japo� n.
Estados Unidos invento� deliberadamente el asalto de la pandilla Syngman Rhee
contra la Repu� blica Popular Democra� tica de Corea para expandir su agresio� n en el este y
luego, con el pretexto de la situacio� n en Corea, envio� sus fuerzas navales y ae�reas para
invadir Taiwa�n, una provincia de China, y anuncio� que el supuesto problema del estatus
de Taiwa�n deberí�a ser resuelto por unas Naciones Unidas controlada por Estados
Unidos. Adema� s, una y otra vez, envio� su fuerza ae�rea, que esta� invadiendo Corea, para
invadir el espacio ae�reo sobre la provincia china de Liaotung, ametrallando y
bombardeando, y envio� sus fuerzas navales, que esta�n invadiendo Corea, para
bombardear la marina mercante china en alta mar.
Mediante estos actos frene� ticos y violentos de agresio� n imperialista, el gobierno
de EEUU se ha mostrado como el enemigo ma� s peligroso de la Repu� blica Popular de
China. Las fuerzas agresivas de EEUU han invadido las fronteras de China y pueden
aumentar su agresio� n en cualquier momento. MacArthur, comandante en jefe del ataque
estadounidense contra Taiwa�n y Corea, revelo� hace mucho tiempo el agresivo disen2 o del
gobierno de EEUU y continu� a creando nuevas excusas para extender su agresio� n.
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Contra la agresión estadounidense
El pueblo chino se opone firmemente a las brutalidades agresivas de Estados
Unidos y esta� decidido a liberar Taiwa�n y otros territorios chinos de las garras de los
agresores estadounidenses.
El pueblo chino ha observado de cerca la situacio� n en Corea desde que fue
invadida por EEUU. El pueblo coreano y su Eje�rcito Popular son resolutivos y valerosos.
Dirigidos por el primer ministro Kim Jr. Sen, han obtenido logros excepcionales en la
resistencia a los invasores estadounidenses y se han ganado la simpatí�a y el apoyo de
personas de todo el mundo. El pueblo coreano seguramente pueda superar sus diversas
dificultades y obtener la victoria final sobre el principio de la resistencia perseverante y
a largo plazo.
Los chinos son personas amantes de la paz. Ciento veinte millones de chinos ya
han firmado sus nombres en el solemne Llamamiento de Estocolmo y este movimiento
continu� a fomenta�ndose entre el pueblo chino. Es obvio que el pueblo chino, despue�s de
liberar todo el territorio de su propio paí�s, quiere rehabilitar y desarrollar su produccio� n
industrial y agrí�cola y su trabajo cultural y educativo en un ambiente pací�fico, libre de
amenazas. Pero si los agresores estadounidenses toman esto como una sen2 al de
debilidad del pueblo chino, cometera�n el mismo fatí�dico error que cometieron los
reaccionarios del Kuomintang.
El pueblo chino ama con entusiasmo la paz, pero nunca ha tenido ni tiene miedo
de oponerse a guerras violentas para poder defenderla . El pueblo chino no tolerara� en
absoluto la agresio� n extranjera, ni tolerara� de manera impasible que sus vecinos sean
invadidos salvajemente por los imperialistas. Quien intente excluir a los casi 500
millones de chinos de la ONU y quien menosprecie y viole los intereses de esta cuarta
parte de la humanidad en el mundo y pretenda en vano resolver arbitrariamente
cualquier problema oriental directamente relacionado con China, se rompera� el cra�neo
con total seguridad.
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