Descarga la aplicación para disfrutar aún más
Vista previa del material en texto
ENSAYO La prostitución: un problema urbano de salud pública Prostitution: an urban public health problem Antonio Rengifo1 _______________________________________________________________________________________________ La prostitución pública no es un mal necesario sino una terapia social. La mismas “tiernas pajaritas de la noche” -como llama García Márquez a las meretrices- dicen que los hombres acuden donde ellas para desfogarse, y es cierto. Imagínense como sería nuestra sociedad si no hubiera ese desfogue de los impulsos sexuales represados. En la prostitución lo único de malo, si lo hubiera, es que entraña el riesgo del contagio de enfermedades de transmisión sexual, entre ellas el SIDA. En tal sentido, la prostitución es un problema de salud pública, sobre todo, cuando su ejercicio es callejero o informal. Siendo así que resulta incontrolable aún con una vigilancia epidemiológica especializada y con represión policial y municipal. En el mercado prostibulario hay que proteger tanto la oferta como la demanda. Sobre todo, a las tiernas pajaritas de la noche. Ellas se merecen una atención sanitaria de la mejor calidad en forma gratuita y oportuna; brindándoles todas las facilidades del caso. Tanto por ellas, como por todos nosotros que conformamos la sociedad. Ante una epidemia todos somos iguales. Ya no debe concebirse la prostitución como un problema policial, reprimible. Nunca más deben presentarse los cuadros de cacerías nocturnas de meretrices en la vía pública para luego conducirlas a las comisarías en jaulas motorizadas, similares a las perreras cuando se hacen campañas antirrábicas. Hasta los animales tienen una sociedad que los protege. En diversas sociedades y épocas se ha pretendido erradicar a las meretrices y nunca se ha logrado. Existen innumerables antecedentes, en Francia por ejemplo, por una ordenanza real en 1719 se lanzó una redada y se les desterró en barcos a la Louisiana y otras colonias en el Caribe. Hoy en día Paris es una ciudad cosmopolita y atractiva para las meretrices de diversa procedencia, especialmente de Europa del este y de África. Se prohíbe, especialmente el proxenetismo y la migración clandestina. Si se trata de instaurar zonas rosas en Lima, lo justificaría, sobre todo, por el control sanitario. Lima ahora es tan extensa que sugiero la ubicación en cada cono de Lima y en lugares de fácil acceso. Las llamadas “zonas rosa” serían una especie de enormes supermercados o templos fragantes y coloridos consagrados al placer, muy higiénicos con todos los servicios integrados, entre ellos el servicio de médicos con laboratorios bien equipados. En el diseño deben intervenir urbanistas, epidemiólogos, publicistas y sociólogos. La fisonomía del espacioso edificio debería ser carnavalesca. Hay que tener presente que sería un mercado de ilusiones en donde se permiten ciertas licencias necesarias y beneficiosas para la sociedad. Donde la vida en esos momentos sea exultante. La dignidad del megaproyecto de lupanar amerita un extraordinario arquitecto: Rodolfo Tisnado, uno de los peruanos de mayor éxito profesional en el extranjero con obras en diversas partes del mundo e integrante del equipo que diseñó el palacio del parlamento europeo en Estrasburgo. Eso no sería una novedad, puesto que en el siglo XVII ya hubieron visionarios utópicos que plantearon una especie de templo prostibulario con su reglamento de trabajo y funciones para controlar la difusión de la sífilis en Paris. Ellos fueron el escritor Nicolás Edme Restif de La Bretonne (1743-1806) y el arquitecto Claude-Nicolás Ledoux (1736-1806). El plano de Ledoux tiene la planta en forma de un falo. Para preservar su intimidad, a las tiernas pajaritas de la noche se les ornará con nombres alusivos a las flores; Magnolia, Hortensia, Azucena, etc.; estarán empadronadas y asociadas, con sus derechos sociales reivindicados. Los homosexuales, sin ningún tipo de discriminación, tendrán iguales derechos. Ah! por ultimo, que no se llame zona rosa, pues se sobreentiende que es una zona y tampoco rosa ni rojo, sino un nombre emblemático con la palabra verde. Porque después de cada desfogue, no necesariamente con una meretriz, todos reverdecemos. El verde está asociado a la alegría de vivir. Y no es para menos; “Ají verde” fue el nombre de un antiguo prostíbulo en el Callao regentado por una Madame, lo que le daba categoría. Ahí se bailaba con los discos de la inmortal orquesta cubana “Sonora matancera”. 1 Sociólogo, profesor invitado de la Maestría en Epidemiología, Facultad de Medicina, UNMSM. Lima-Perú. Correspondencia: rengifoantonio@yahoo.com Recibido: 08/junio/2009 Aprobado: 26/junio/2009 Rev. peru. epidemiol. Vol 13 No 2 Agosto 2009 1 de 2 Numeración no valida para citación Rengifo A. La prostitución: un problema de salud pública. ________________________________________________________________________________________________________________________ Finalmente, quiero dejar sentado que la prostitución es un asunto muy complejo y nadie tiene la última palabra. Pero eso sí, las enormes desigualdades sociales contribuyen a convertir, sobre todo, la prostitución infantil no en un asunto de interés familiar, sino en un problema público. El turismo sexual está en auge en el mundo y las víctimas propicias son las niñas y los niños de los países pobres de todo el mundo. Por deducción, ya sabemos quienes son los victimarios. Este problema hay que encararlo con un planteamiento político que escapa a los alcances del presente artículo. Mientras tanto, hay que tomar y desarrollar la iniciativa del pragmático ex-candidato a la alcaldía de Lima Humberto Lay, arquitecto y pastor evangélico, al proponer una zona rosa. Puesto que ello también implica una política de ordenamiento urbano. Un tema tan delicado como las inspecciones médicas semanales que tenían que pasar las prostitutas para ejercer su profesión es tratado con la mayor naturalidad por el pintor Toulouse-Lautrec (1864-1901).* _____________________________________________________________________________________________________________________________________________________________ * Pintura Dos mujeres en la inspección médica. 1894. Disponible en el libro “Henry de Toulouse-Lautrec. Galería fotográfica. Obras, lugares, modelos” http://www.aloj.us.es/galba/MONOGRAFICOS/LAUTREC/index.htm 2 de 2 Rev. peru. epidemiol. Vol 13 No 2 Agosto 2009 Numeración no valida para citación
Compartir