Descarga la aplicación para disfrutar aún más
Vista previa del material en texto
Centro de Investigaciones del Mar y la Atmósfera CIMA/CONICET-UBA Proyecto AIACC LA2G Informe CIMA/Oc-02-01 Septiembre 2002 C. Simionato, M. Nuñez y V. Meccia Estudio de la respuesta del Modelo HamSOM/CIMA a vientos intensos sobre el Río de la Plata Resumen: El objetivo del presente trabajo es estudiar la respuesta del conjunto de modelos oceánicos anidados unidireccionalmente HamSOM/CIMA a situaciones de viento intensas sobre el Río de la Plata. Con ese fin los parámetros del modelo fueron ajustado para reproducir adecuadamente la altura de la superficie libre observada en distintas estaciones del Río de la Plata cuando la superficie del océano es forzada con vientos de los reanálisis de NCEP/NCAR. Estos datos demostraron ser los más apropiados para los objetivos de este trabajo. Una vez logrado un ajuste adecuado, el modelo es utilizado para estudiar su respuesta a situaciones de viento intenso sobre el Río de la Plata. Se concluye que el conjunto de conjunto de modelos HamSOM/CIMA forzado por los reanálisis es apropiado para realizar estudios para la determinación de escenarios climáticos. Informe producido por: Dra. Claudia G. Simionato Dr. Mario N. Nuñez Srta. Virna Meccia i ÍNDICE 1. OBJETIVOS Y ORGANIZACIÓN DEL TRABAJO ..................................................... 1 2. DESCRIPCIÓN DEL MODELO..................................................................................... 4 3. DESCRIPCIÓN DE LA ESTRUCTURA DEL CONJUNTO DE MODELOS ANIDADOS..................................................................................................................... 8 4. EL FORZANTE DEL VIENTO..................................................................................... 15 5. AJUSTE DEL MODELO OCEÁNICO A LOS REANÁLISIS DE NCEP/NCAR ................................................................................................................. 29 6. SIMULACIÓN DEL EFECTO DE LOS VIENTOS INTENSOS EN LA ELEVACIÓN DE LA SUPERFICIE LIBRE EN EL RÍO DE LA PLATA .................. 37 7. RESUMEN DE CONCLUSIONES Y DISCUSIÓN..................................................... 46 8. REFERENCIAS............................................................................................................. 51 ii ÍNDICE DE FIGURAS Figura 1: Dominio de los tres modelos anidados que componen el sistema HamSOM/CIMA............................................................................................................. 10 Figura 2: Batimetría de los tres modelos anidados utilizados en las simulaciones....................... 13 Figura 3a: Comparación entre la evolución de la velocidad del viento a lo largo de la tormenta del 6 de diciembre de 1982 proporcionada por los reanálisis del NCEP/NCAR y el modelo anidado de alta resolución ETA. El panel superior muestra en rojo la componente zonal y en verde la componente meridional de la velocidad del viento derivada de los reanálisis a 35º S y 57º W, mientras que el panel inferior muestra las mismas variables en el mismo punto derivadas de las soluciones proporcionadas por el Modelo ETA. Ambos gráficos han sido realizados conservando la escala a fin de facilitar la comparación. ..................................................... 18 Figura 3b: idem Figura 3a para la tormenta del 6 de marzo de 1988 .......................................... 19 Figura 3c: idem Figura 3a para la tormenta del 11 de noviembre de 1989. ................................. 20 Figura 3d: idem Figura 3a para la tormenta del 30 de agosto de 1991. ....................................... 21 Figura 3e: idem Figura 3a para la tormenta del 16 de mayo de 2000.......................................... 22 Figura 4a: Comparación entre el seudo-esfuerzo del viento en el momento de máximo desarrollo de la tormenta del 6 de diciembre de 1982 proporcionada por los reanálisis del NCEP/NCAR y el modelo anidado de alta resolución ETA. El panel superior muestra el seudo-esfuerzo del viento derivado de los reanálisis, mientras que el panel inferior muestra la misma variable derivada de las soluciones proporcionadas por el Modelo ETA. Ambos gráficos han sido realizados conservando la escala a fin de facilitar la comparación. ..................................................... 23 Figura 4b: idem Figura 4a para la tormenta del 6 de marzo de 1988. ......................................... 24 iii Figura 4c: idem Figura 4a para la tormenta del 11 de noviembre de 1989. ................................. 25 Figura 4d: idem Figura 4a para la tormenta del 30 de agosto de 1991. ....................................... 26 Figura 4e: idem Figura 4a para la tormenta del 16 de mayo de 2000.......................................... 27 Figura 5a: Comparación entre la simulación de invierno realizada con el conjunto de modelos HamSOM/CIMA y observaciones en la Estación Palermo. ................................... 32 Figura 5b: Comparación entre la simulación de invierno realizada con el conjunto de modelos HamSOM/CIMA y observaciones en la Estación Oyarvide................................... 33 Figura 6a: Comparación entre la simulación de verano realizada con el conjunto de modelos HamSOM/CIMA y observaciones en la Estación Oyarvide................................... 35 Figura 6b: Comparación entre la simulación de invierno realizada con el conjunto de modelos HamSOM/CIMA y observaciones en la Estación San Clemente............................ 36 Figura 7. Comparación de las simulaciones realizadas con el conjunto de modelos HamSOM/CIMA y observaciones en las Estaciones Palermo y Oyarvide durante la tormenta de diciembre de 1982. Las observaciones se muestran en negro. En rojo se muestra la solución del modelo cuando el viento sólo se aplica sobre los dominios B y C, mientras que en rojo se indica la solución del modelo cuando el viento se aplica sobre los tres dominios, A, B y C. .................................................................................... 39 Figura 8. Comparación de las simulaciones realizadas con el conjunto de modelos HamSOM/CIMA y observaciones en las Estaciones Palermo, Oyarvide y San Clemente durante la tormenta de marzo de 1988. Las observaciones se muestran en negro. En rojo se muestra la solución del modelo cuando el viento sólo se aplica sobre los dominios B y C, mientras que en rojo se indica la solución del modelo cuando el viento se aplica sobre los tres dominios, A, B y C. ............................................. 40 Figura 9. Comparación de las simulaciones realizadas con el conjunto de modelos iv HamSOM/CIMA y observaciones en las Estaciones Palermo, Oyarvide, San Clemente y Montevideo durante la tormenta de noviembre de 1989. Las observaciones se muestran en negro. En rojo se muestra la solución del modelo cuando el viento sólo se aplica sobre los dominios B y C, mientras que en rojo se indica la solución del modelo cuando el viento se aplica sobre los tres dominios, A, B y C.............................................................................................................................. 41 Figura 10. Comparación de las simulaciones realizadas con el conjunto de modelos HamSOM/CIMA y observaciones en las Estaciones Palermo, Oyarvide y San Clemente durante la tormenta de agosto de 1991. Las observaciones se muestran en negro. En rojo se muestra la solución del modelo cuando el viento sólo se aplica sobre los dominios B y C, mientras que en rojo se indica la solución del modelo cuando el viento se aplica sobre los tres dominios, A, B y C. ............................................. 42 Figura 11. Comparación de las simulaciones realizadas con el conjunto de modelos HamSOM/CIMA y observaciones en las Estaciones Palermo, Oyarvide, San Clemente y La Plata durante la tormenta de mayo de 2000. Las observaciones se muestran en negro. En rojo se muestra la solución del modelo cuando el viento sólo se aplica sobre los dominios B y C, mientras que en rojose indica la solución del modelo cuando el viento se aplica sobre los tres dominios, A, B y C. ................................. 43 v ÍNDICE DE TABLAS Tabla I: Fechas de las situaciones asociadas a vientos intensos del sudeste analizadas en el presente trabajo. ........................................................................................................... 15 Tabla II: Estaciones utilizadas para validar las simulaciones de verano e invierno de ajuste del conjunto de modelos HamSOM/CIMA. .............................................................. 30 Tabla III. Observaciones directas de altura en el Río de la Plata durante las situaciones de tormentas con vientos intensos del sudeste utilizadas para comparar con las simulaciones. ................................................................................................................... 38 Estudio de la respuesta del modelo HamSOM/CIMA a vientos intensos sobre el Río de la Plata C. Simionato, M. Núñez y V. Meccia Pagina 1 1. OBJETIVOS Y ORGANIZACIÓN DEL TRABAJO Antes de que un modelo oceánico pueda ser utilizado para realizar simulaciones bajo diferentes escenarios climáticos, es necesario proceder a un adecuado ajuste del mismo y a su validación bajo situaciones conocidas. El modelo debe demostrar ser capaz de reproducir adecuadamente las observaciones no sólo bajo situaciones medias sino también bajo situaciones extremas. El objetivo del presente trabajo es, particularmente, estudiar la respuesta del conjunto de modelos oceánicos anidados unidireccionalmente HamSOM/CIMA durante situaciones de vientos intensos sobre el Río de la Plata, así como determinar el dominio necesario para una adecuada modelación de la propagación de las ondas de tormenta hacia el estuario. A tal efecto, cinco situaciones, ocurridas en diciembre de 1982, marzo de 1988, noviembre de 1989, agosto de 1991 y mayo de 2000, en las cuales se observaron intensas crecidas en el Río de la Plata fueron seleccionadas por el Proyecto para ser estudiadas. La evolución de estas situaciones en la atmósfera fue modelada utilizando el modelo regional ETA en el contexto del Proyecto y las soluciones fueron provistas al CIMA para ser utilizadas como forzante de su modelo oceánico. Dado que las soluciones del modelo ETA sólo se guardaron durante 72 horas, comenzando 24 horas antes del pico del evento atmosférico, tiempo claramente insuficiente para acelerar un modelo oceánico de gran escala, y además el dominio de estos datos es menor que nuestro modelo de mayor escala, fue necesario complementar estos datos con otros de alguna fuente adicional. Como el modelo ETA fue corrido tomando condiciones de Estudio de la respuesta del modelo HamSOM/CIMA a vientos intensos sobre el Río de la Plata C. Simionato, M. Núñez y V. Meccia Pagina 2 contorno de los reanálisis de NCEP/NCAR, esta última parece ser la fuente de datos complementaria más razonable. Como primer paso entonces, se procedió a una comparación entre ambos conjuntos de datos y se seleccionó la base más adecuada para nuestras simulaciones. Una vez conformada la base de datos de vientos, se realizó un ajuste del modelo oceánico a los mismos. El ajuste se realizó a través de una serie de experimentos de sensibilidad en dos simulaciones largas, una de invierno y otra de verano, efectuadas para años en los cuales se disponía de observaciones de elevación de la superficie libre del mar en el Río de la Plata con las que realizar comparaciones durante un período de tiempo significativamente largo y bajo diferentes condiciones de viento. Finalmente la respuesta del modelo HamSOM/CIMA a las cinco situaciones de vientos intensos seleccionadas fue estudiada. Con el fin de determinar el dominio necesario para una adecuada modelación de la onda de tormenta, el modelo se corrió en dos configuraciones diferentes. En la primera de estas configuraciones, el dominio sobre el cuál se aplica el efecto del viento empieza a los 42º S. En la segunda, el efecto del viento se aplica al norte de 56.5º S. Las soluciones proporcionadas por el modelo fueron finalmente comparadas con observaciones de la elevación de la superficie libre adquiridas en distintos puntos del estuario. Este trabajo está organizado de la siguiente manera. En la Sección 2, se describen las ecuaciones y la parametrización del modelo HamSOM/CIMA. En la Sección 3 se detalla la estructura del conjunto de modelos anidados y sus diferentes formas de funcionamiento. En La Sección 4 se comparan los vientos proporcionados por el Modelo ETA con los reanálisis Estudio de la respuesta del modelo HamSOM/CIMA a vientos intensos sobre el Río de la Plata C. Simionato, M. Núñez y V. Meccia Pagina 3 de NCEP/NCAR y se selecciona una base de datos adecuada para el forzado del modelo oceánico. En la Sección 5, se describe el ajuste del modelo HamSOM/CIMA a la base de datos de viento. En la Sección 6 se estudia la respuesta del modelo oceánico a las cinco situaciones de vientos intensos seleccionadas. Finalmente, en la Sección 7 se realiza una discusión y se resumen las conclusiones principales. Estudio de la respuesta del modelo HamSOM/CIMA a vientos intensos sobre el Río de la Plata C. Simionato, M. Núñez y V. Meccia Pagina 4 2. DESCRIPCIÓN DEL MODELO El modelo utilizado para realizar las simulaciones numéricas que se describen en el presente informe es el HamSOM/CIMA (Hamburg Shelf Ocean Model – Versión CIMA) Model), desarrollado por Backhaus (1983,1985) en el Institut für Meereskunde (IfM) de Hamburg, Alemania. Aunque este modelo ha sido descrito en muchas publicaciones (Backhaus, 1983, 1985; Backhaus y Hainbucher, 1987; Rodriguez y Alvarez, 1991; Rodriguez et al., 1991; Stronach et al., 1993; Alvarez et al., 1997), una breve reseña de las principales ecuaciones resueltas y de la parametrización se realiza a continuación. Se trata de un modelo tridimensional multinivel (coordenada z) en diferencias finitas, escrito en la grilla C de Arakawa. En su versión barotrópica, el modelo está basado en el siguiente conjunto de ecuaciones de Reynolds: zy v x vAfu y p z vw y vv x vu t v zy u x uAfv x p z uw y uv x uu t u y h x h ∂ ∂ + ∂ ∂+ ∂ ∂+−= ∂ ∂+ ∂ ∂+ ∂ ∂+ ∂ ∂+ ∂ ∂ ∂ ∂ + ∂ ∂+ ∂ ∂+= ∂ ∂+ ∂ ∂+ ∂ ∂+ ∂ ∂+ ∂ ∂ τ ρ τ ρ 2 2 2 2 2 2 2 2 1 1 (1) donde u y v son las componentes del vector velocidad; t es el tiempo; P es la presión; ρ es la densidad del agua; f la frecuencia de Coriolis; τx y τy las componentes del vector esfuerzo del viento y Ah es la viscosidad turbulenta horizontal. Siguiendo la aproximación de Alvarez et al. (1997), quienes utilizaron el mismo Estudio de la respuesta del modelo HamSOM/CIMA a vientos intensos sobre el Río de la Plata C. Simionato, M. Núñez y V. Meccia Pagina 5 modelo para estudiar la propagación de mareas en la costa española, el forzante astronómico es despreciado. La formulación se completa con las ecuaciones hidrostática y de continuidad: g z p z w y v x u ρ−= ∂ ∂ = ∂ ∂+ ∂ ∂+ ∂ ∂ 0 (2) donde g es la aceleración de la gravedad. HamSOM está escrito en coordenadas Cartesianas. A fin de tener en cuenta la convergencia de los meridianos debida a la esfericidad de la Tierra, todas las distancias a lo largo del eje horizontal se computan como una función de la latitud y la celda de volumen considerada de esta manera de distorsiona en la ecuación de conservación de masa. El código utiliza un esquema numérico temporal de dos niveles (presente y futuro). A fin de evitar inestabilidades, algunos términos de las ecuaciones son tratados de forma semi-implícita (el gradiente de presión y la difusión vertical) y el resto de los términos de forma explícita. El término de Coriolis es tratado utilizando la aproximación propuesta por Wais (1985). A fin de derivar y resolver las ecuaciones discretizadas del modelo, primero se integran verticalmentelas ecuaciones de conservación de la cantidad de movimiento en cada capa. De esta forma se encuentra una expresión para los transportes en cada capa, que contiene la elevación de la superficie libre desconocida (lo que hace que la ecuación para la primera capa sea no lineal) y el esfuerzo debido a la fricción vertical. Integrando en la Estudio de la respuesta del modelo HamSOM/CIMA a vientos intensos sobre el Río de la Plata C. Simionato, M. Núñez y V. Meccia Pagina 6 vertical nuevamente, a lo largo de la columna de agua, se cancela el esfuerzo debido a la fricción vertical y se obtiene una expresión para el transporte integrado verticalmente. Cuando se sustituye esta expresión en la ecuación de continuidad integrada verticalmente (aplicada a una celda en volumen) se obtiene una ecuación elíptica para el incremento del nivel del agua. Esta última ecuación se resuelve por medio de una técnica de sobre relajación iterativa, que se combina con un algoritmo de eliminación directa a fin de acelerar la convergencia. De este modo, después de una parametrización de los términos difusivos y de la fricción en el fondo, se pueden resolver las ecuaciones para la velocidad en cada una de las capas por eliminación directa. Siguiendo la analogía de la viscosidad turbulenta ‘eddy’, los esfuerzos debidos a la fricción vertical se parametrizan como una función de la velocidad de las capas; los coeficientes de mezcla turbulenta vertical ‘eddy’ se actualizan utilizando una expresión para la longitud de mezcla (Pohlmann, 1991). La fricción en el fondo se parametriza por medio de una ley cuadrática en términos de la velocidad de la corriente: bLbb uuC ρρρ =τ (3) donde bu ρ es el vector velocidad horizontal en la capa de fondo del modelo y Luρ es la velocidad horizontal promediada verticalmente en una capa friccional cercana al fondo. Cb es el coeficiente adimensional de arrastre o de fricción de fondo. Por razones de estabilidad, este término es tratado de forma semi-implícita, siendo buρ computado en el tiempo futuro y Lu ρ en el presente. A fin de evitar valores excesivamente grandes de la fricción en áreas donde la Estudio de la respuesta del modelo HamSOM/CIMA a vientos intensos sobre el Río de la Plata C. Simionato, M. Núñez y V. Meccia Pagina 7 profundidad de la capa de fondo es muy delgada, el transporte en el fondo es computado en una capa de espesor constante (30 m) en todos aquellos lugares en los que la profundidad total sea mayor a ese espesor (Rodriguez y Alvarez, 1991). Estudio de la respuesta del modelo HamSOM/CIMA a vientos intensos sobre el Río de la Plata C. Simionato, M. Núñez y V. Meccia Pagina 8 3. DESCRIPCIÓN DE LA ESTRUCTURA DEL CONJUNTO DE MODELOS ANIDADOS Debido a la carencia de observaciones directas que permitan proporcionar condiciones de contorno adecuadas a un modelo de pequeña escala del Río de la Plata, el modelo HamSOM/CIMA es trabajado como un conjunto de modelos anidados unidireccionalmente. De esta manera, el estuario del Río de la Plata es alcanzado a través de un conjunto de tres modelos. El ‘Modelo A’, de mayor escala cubre el área que se extiende entre 56.5º S y 23.5º S y 69.5º W y 45.5º W (Figura 1). La resolución horizontal es de 20’ en la dirección zonal y de 15’ en la meridional, lo que representa aproximadamente unos 27 Km. En la vertical se emplean diez capas, cuyos fondos se encuentran a 10, 20, 30, 60, 100, 200, 500, 1000, 3000 y 6000 m. Esta discretización vertical fue seleccionada a fin de proporcionar una buena resolución de las capas superiores y, por lo tanto, resolver apropiadamente la circulación forzada por el viento. La profundidad mínima permitida, a fin de evitar el vaciado de capas es de 5 m. Dado que los datos de batimetría ETOPO5 muestran características irrealmente muy someras sobre la Plataforma Continental Argentina, la topografía se construyó combinando este último conjunto de datos con datos proporcionados por el Servicio de Hidrografía Naval de Argentina (SHN, 1986) para profundidades menores de 200 m. La batimetría así obtenida se muestra en el panel izquierdo de la Figura 2, en la cual pueden apreciarse las características más relevantes de la amplia Plataforma Continental Argentina. El Modelo A proporciona condiciones de contorno a un modelo de mayor resolución del Estudio de la respuesta del modelo HamSOM/CIMA a vientos intensos sobre el Río de la Plata C. Simionato, M. Núñez y V. Meccia Pagina 9 Río de la Plata y la Plataforma Continental Argentina (‘Modelo B’, Figura 1). Este modelo cubre la región entre 42º S y 31.4º S, y 61.5º W y 51.5º W, con resoluciones de 6.66’ y 5’, aproximadamente 9 Km, respectivamente. En este caso de utilizan 13 niveles verticales, con fondos a 7, 10, 15, 20, 40, 60, 100, 150, 250, 500, 1000, 3000 y 6000 m. La profundidad mínima permitida en este caso es de 4 m. Aunque la profundidad de la primera capa es demasiado alta para resolver apropiadamente las regiones someras del Río de la Plata, ésta ha sido seleccionada para ser lo suficientemente profunda para resolver la primera capa en la parte sudoccidental del dominio del modelo, donde se sabe que las amplitudes de la marea son grandes. Finalmente, el Modelo B proporciona condiciones de contorno al ‘Modelo C’ de mayor resolución (Figura 1) del Río de la Plata. Este cubre la región entre 36.5º S y 34.0º S y 59.0º W y 54.5º W, con resoluciones horizontales de 1.8’ y 1.5’, aproximadamente 3 Km, respectivamente. Este modelo tiene 13 capas verticales con fondos a 2, 4, 6, 8, 10, 14, 18, 22, 26, 30, 35, 45 y 55 m. La elección de estos niveles permite una buena resolución vertical aún en las zonas muy someras del Río de la Plata superior. La profundidad mínima permitida en este dominio es de 1 m. Datos de batimetría de alta resolución para los modelos B y C fueron proporcionados por el SHN y provienen de digitalización de cartas (SHN, 1992, 1993, 1999a, 199b). Las topografías correspondientes se muestran en los paneles superior e inferior derechos de la Figura 2, respectivamente. Estudio de la respuesta del modelo HamSOM/CIMA a vientos intensos sobre el Río de la Plata C. Simionato, M. Núñez y V. Meccia Pagina 10 Figura 1: Dominio de los tres modelos anidados que componen el sistema HamSOM/CIMA. Estudio de la respuesta del modelo HamSOM/CIMA a vientos intensos sobre el Río de la Plata C. Simionato, M. Núñez y V. Meccia Pagina 11 Los grandes gradientes batimétricos presentes en la región de interés son evidentes en la figura. Aún el Modelo B, de relativamente pequeña escala, tiene profundidades del fondo que varían de los pocos centímetros en la parte superior del estuario a 5500 metros en la plataforma exterior. Este anidado de modelos es utilizado de dos maneras diferentes. En el caso en que el Modelo A sea necesario para proporcionar condiciones de contorno que incluyan tanto el efecto de la marea como el del viento al Modelo B y éste a su vez al Modelo C, salidas de la elevación de la superficie libre modelada son guardadas de forma automática cada media hora cuando se corren los modelos más grandes. Los modelos subsecuentes son entonces forzados en los bordes con estas salidas, que son automáticamente interpoladas espacial y temporalmente por el paquete de rutinas. En el caso en los que los dominios B y C son suficientemente extensos como para reproducir el fenómeno que interesa, el modelo de mayor envergadura, A, aún es necesario a fin de proporcionar adecuadamente la condición de borde asociada a la onda de marea en el Modelo B. Debido a la carencia de observaciones de la marea en áreas no costeras, éstas no pueden ser utilizadas para forzar directamente la marea en los bordes de los modelos excepto a través de aproximaciones groseras. Aunque los modelos globales de marea tienen suficiente grado de desarrollo como para proveer aproximaciones muy adecuadas a esta onda en aguasprofundas (Le Provost et al., 1995, 1998), su resolución es muy baja (del orden de 1º usualmente) lo que no permite una adecuada resolución de la marea en la Plataforma Continental Argentina, conocida como una de las áreas de mayor disipación y Estudio de la respuesta del modelo HamSOM/CIMA a vientos intensos sobre el Río de la Plata C. Simionato, M. Núñez y V. Meccia Pagina 12 resonancia de esta onda en el mundo (Andersen et al., 1995; Glorioso y Flather, 1997; Simionato et al., 2002). Por lo tanto, el forzante de marea debe ser introducido lo más lejos posible de la Plataforma Continental, procurando no atravesar la plataforma patagónica. En nuestro conjunto de modelos esto se hace en el modelo de mayor envergadura (A). Amplitudes y fases de las componentes armónicas derivadas del modelo global de mareas de Zahel (1997) que asimila observaciones de altura de la superficie libre del mar provenientes del altímetro de la misión Topex/Poseidón son utilizadas con este fin. Una rutina de interpolación bilineal se utilizó para convertir las soluciones del modelo de Zahel (1997) con 1º de resolución a amplitudes y fases a una resolución de 20’ X 15’ en los bordes abiertos del Modelo A. Las ocho componentes más importantes de la marea se incluyen en las simulaciones a fin de asegurar la calidad de las condiciones de borde que se aplican a los modelos B y C de mayor resolución. Estas componentes son: M2, S2, K2, N2, O1, P1, K1 y Q1. Rutinas que incorporan el cómputo de las constantes astronómicas fueron incorporadas al modelo a fin de realizar las correcciones a la fase y la amplitud (factor nodal) de la marea por fecha. El paso de tiempo utilizado en las simulaciones con el Modelo A fue de 5 minutos (300 segundos). Con este paso de tiempo relativamente pequeño se garantiza la estabilidad y la ausencia de difusión computacional o desfasajes computacionales que podrían ocurrir de ser éste mayor (Kowalik y Murty, 1993). La viscosidad turbulenta horizontal fue ajustada a un valor de 100 m2 s-1, aunque experimentos de sensibilidad indican que la solución es poco sensible a este parámetro (Simionato et al., 2002). Estudio de la respuesta del modelo HamSOM/CIMA a vientos intensos sobre el Río de la Plata C. Simionato, M. Núñez y V. Meccia Pagina 13 Figura 2: Batimetría de los tres modelos anidados utilizados en las simulaciones. Cuando el Modelo A es utilizado únicamente para proveer la marea al Modelo B, sólo se requiere del primero proporcionar valores adecuados de las constantes armónicas al segundo. Con este fin el Modelo A se corrió por un equivalente a 48 meses desde el reposo. Después de aproximadamente 10 días de simulación, la mayor parte de los transientes debidos a la aceleración del modelo se habían disipado. A fin de asegurar la estabilidad de la solución, el análisis se hizo descartando los primeros 4 meses de la simulación y Estudio de la respuesta del modelo HamSOM/CIMA a vientos intensos sobre el Río de la Plata C. Simionato, M. Núñez y V. Meccia Pagina 14 utilizando salidas semi-horarias de la elevación de la superficie libre del mar. El análisis se realizó por medio de rutinas de análisis que siguen la aproximación de Foreman (1977, 1978) para convertir las elevaciones de la superficie libre en amplitudes y fases de las ocho componentes de la marea consideradas. Una vez que las amplitudes y las fases fueron obtenidas para el Modelo A, se utilizaron técnicas de interpolación a fin de obtener condiciones de contorno de marea para el Modelo B. En el caso de este modelo, se eligió un valor de 50 m2s-1 para la fricción turbulenta horizontal. El paso de tiempo fue de 5 minutos (300 segundos), suficientemente pequeño para garantizar la estabilidad y la ausencia de problemas numéricos. Finalmente para el caso del Modelo C de alta resolución la viscosidad turbulenta horizontal fue ajustada a 50 m2s-1 y el paso de tiempo fue de 2.5 minutos (150 segundos). El efecto de la descarga de los ríos Paraná y Uruguay fue considerado en las simulaciones realizadas con los modelos de mayor resolución (B y C). A tal efecto, se utilizaron datos mensuales de estas descargas proporcionados por el INA (Instituto Nacional del Agua). Estudio de la respuesta del modelo HamSOM/CIMA a vientos intensos sobre el Río de la Plata C. Simionato, M. Núñez y V. Meccia Pagina 15 4. EL FORZANTE DEL VIENTO Para la elaboración del presente informe se trabajó sobre cinco situaciones asociadas a vientos intensos sobre la región del Río de la Plata seleccionadas por el Proyecto, que se resumen en la Tabla I. Cuatro de estas situaciones mostraron picos en la intensidad del viento que corresponden a las siguientes fechas: 6 de diciembre de 1982, 6 de marzo de 1988, 12 de noviembre de 1989, 31 de agosto de 1991. La última situación, ocurrida durante mayo de 2000, corresponde a una situación de vientos intensos del este sostenidos a lo largo de varios días. Situación Dia y Mes Año A 5 a 9 de Diciembre 1982 B 5 a 9 de Marzo 1988 C 10 a 15 de Noviembre 1989 D 29 de Agosto a 5 de Septiembre 1991 E 14 a 20 de Mayo 2000 Tabla I: Fechas de las situaciones asociadas a vientos intensos del sudeste analizadas en el presente trabajo. Datos de viento a 10 metros de altura provenientes de simulaciones de alta resolución realizadas con el Modelo ETA fueron proporcionadas por el Proyecto. En estos casos, el modelo regional fue anidado a los reanálisis del NCEP/NCAR (Escobar, Comunicación Personal). Detalles acerca del Proyecto NCEP/NCAR y el conjunto de datos se proporcionan en Kalnay et al., 1996 y discusiones acerca de su calidad sobre el Hemisferio Sur se proporcionan en Simmonds y Keay, 2000. Estudio de la respuesta del modelo HamSOM/CIMA a vientos intensos sobre el Río de la Plata C. Simionato, M. Núñez y V. Meccia Pagina 16 Debido a que la región en la cual se realizaron las simulaciones proporcionadas no cubre completamente el área correspondiente al Modelo HamSOM/CIMA y que sólo se recibieron datos correspondientes a 72 horas (tiempo insuficiente para acelerar correctamente un modelo oceánico de gran escala), resultó indispensable complementar estas simulaciones con otros datos en las regiones en las que hubiera información faltante. Dado que estas simulaciones fueron realizadas utilizando como condición de borde los reanálisis del NCEP/NCAR, este conjunto parece ser la fuente complementaria más adecuada. Como primer paso, a fin de estudiar la viabilidad de la superposición de ambos conjuntos de forzantes, se procedió a una comparación entre los mismos. Las Figuras 3 a-e muestran la evolución de la velocidad del viento a lo largo de la tormenta para cada una de las situaciones estudiadas según ambos conjuntos de datos. En cada uno de los gráficos el panel superior muestra en línea llena la componente zonal y en línea punteada la componente meridional de la velocidad del viento derivada de los reanálisis en 35º S y 57º W (un punto elegido arbitrariamente sobre el Río de la Plata), mientras que el panel inferior muestra las mismas variables en el mismo punto derivadas de las soluciones obtenidas del Modelo ETA. Ambos gráficos han sido realizados en la misma escala a fin de facilitar la comparación. Como puede apreciarse en las figuras, con excepción de la tormenta del 6 de diciembre de 1982, hay una importante diferencia en la evolución del viento proporcionada por ambos modelos. En varios de los casos, los vientos derivados del Modelo ETA son no sólo muy poco intensos sino que no alcanzan un pico acompañando el momento de máximo Estudio de la respuesta del modelo HamSOM/CIMA a vientos intensos sobre el Río de la Plata C. Simionato, M. Núñez y V. Meccia Pagina 17 desarrollo de la tormenta, como se observa en los reanálisis de NCEP/NCAR. Esta característica es notable, puesto que en general se cree que los vientos de los reanálisis son de por sí débiles. Dadoque el Modelo ETA ha sido forzado en los bordes con datos provenientes de los reanálisis, éstas últimas son características muy curiosas que parecen sugerir algún tipo de error en las simulaciones de alta resolución o en las soluciones archivadas. El océano es forzado por el esfuerzo del viento y no por el viento directamente. Este esfuerzo es proporcional al cuadrado de la velocidad del viento. Por lo tanto, el efecto de la subestimación en los campos de vientos sería multiplicado al utilizar los campos derivados del Modelo ETA. A fin de ilustrar el grado de diferencia en los forzantes que implica el uso de cada una de las alternativas (reanálisis de NCEP/NCAR y Modelo ETA), las Figuras 4 a- e muestran el seudo-esfuerzo del viento derivado de cada una de ellas para los momentos de máximo desarrollo de todas las tormentas bajo análisis. El seudo-esfuerzo del viento se define como el vector velocidad del viento multiplicado por el módulo de dicho vector y es proporcional al esfuerzo del viento a través del coeficiente de arrastre. Puede observarse en las figuras, que la solución del Modelo ETA no sólo subestima intensamente el principal forzante oceánico cuando se lo compara con los reanálisis, sino que además ambos conjuntos de datos presentan diferencias significativas en la ubicación del máximo de esta variable. Esta última diferencia es evidente, por ejemplo, en el caso de la tormenta de noviembre de 1989 (Figura 4c). Teniendo en cuenta tanto estas últimas figuras, como la Figura 3, los reanálisis parecen ser más representativos del desarrollo real de las tormentas. Estudio de la respuesta del modelo HamSOM/CIMA a vientos intensos sobre el Río de la Plata C. Simionato, M. Núñez y V. Meccia Pagina 18 Figura 3a: Comparación entre la evolución de la velocidad del viento a lo largo de la tormenta del 6 de diciembre de 1982 proporcionada por los reanálisis del NCEP/NCAR y el modelo anidado de alta resolución ETA. El panel superior muestra en rojo la componente zonal y en verde la componente meridional de la velocidad del viento derivada de los reanálisis a 35º S y 57º W, mientras que el panel inferior muestra las mismas variables en el mismo punto derivadas de las soluciones proporcionadas por el Modelo ETA. Ambos gráficos han sido realizados conservando la escala a fin de facilitar la comparación. Estudio de la respuesta del modelo HamSOM/CIMA a vientos intensos sobre el Río de la Plata C. Simionato, M. Núñez y V. Meccia Pagina 19 Figura 3b: idem Figura 3a para la tormenta del 6 de marzo de 1988 Estudio de la respuesta del modelo HamSOM/CIMA a vientos intensos sobre el Río de la Plata C. Simionato, M. Núñez y V. Meccia Pagina 20 Figura 3c: idem Figura 3a para la tormenta del 11 de noviembre de 1989. Estudio de la respuesta del modelo HamSOM/CIMA a vientos intensos sobre el Río de la Plata C. Simionato, M. Núñez y V. Meccia Pagina 21 Figura 3d: idem Figura 3a para la tormenta del 30 de agosto de 1991. Estudio de la respuesta del modelo HamSOM/CIMA a vientos intensos sobre el Río de la Plata C. Simionato, M. Núñez y V. Meccia Pagina 22 Figura 3e: idem Figura 3a para la tormenta del 16 de mayo de 2000. Estudio de la respuesta del modelo HamSOM/CIMA a vientos intensos sobre el Río de la Plata C. Simionato, M. Núñez y V. Meccia Pagina 23 Figura 4a: Comparación entre el seudo-esfuerzo del viento en el momento de máximo desarrollo de la tormenta del 6 de diciembre de 1982 proporcionada por los reanálisis del NCEP/NCAR y el modelo anidado de alta resolución ETA. El panel superior muestra el seudo-esfuerzo del viento derivado de los reanálisis, mientras que el panel inferior muestra la misma variable derivada de las soluciones proporcionadas por el Modelo ETA. Ambos gráficos han sido realizados conservando la escala a fin de facilitar la comparación. Estudio de la respuesta del modelo HamSOM/CIMA a vientos intensos sobre el Río de la Plata C. Simionato, M. Núñez y V. Meccia Pagina 24 Figura 4b: idem Figura 4a para la tormenta del 6 de marzo de 1988. Estudio de la respuesta del modelo HamSOM/CIMA a vientos intensos sobre el Río de la Plata C. Simionato, M. Núñez y V. Meccia Pagina 25 Figura 4c: idem Figura 4a para la tormenta del 11 de noviembre de 1989. Estudio de la respuesta del modelo HamSOM/CIMA a vientos intensos sobre el Río de la Plata C. Simionato, M. Núñez y V. Meccia Pagina 26 Figura 4d: idem Figura 4a para la tormenta del 30 de agosto de 1991. Estudio de la respuesta del modelo HamSOM/CIMA a vientos intensos sobre el Río de la Plata C. Simionato, M. Núñez y V. Meccia Pagina 27 Figura 4e: idem Figura 4a para la tormenta del 16 de mayo de 2000. Estudio de la respuesta del modelo HamSOM/CIMA a vientos intensos sobre el Río de la Plata C. Simionato, M. Núñez y V. Meccia Pagina 28 Por esta razón se decidió no proseguir el estudio utilizando los resultados provenientes de las simulaciones realizadas con el Modelo ETA y, a cambio, se lo realizó sobre la base de los reanálisis de NCEP/NCAR. Estudio de la respuesta del modelo HamSOM/CIMA a vientos intensos sobre el Río de la Plata C. Simionato, M. Núñez y V. Meccia Pagina 29 5. AJUSTE DEL MODELO OCEÁNICO A LOS REANÁLISIS DE NCEP/NCAR El ajuste de conjunto de modelos HamSOM/CIMA a los reanálisis de NCEP/NCAR y la prueba de su adecuado funcionamiento fue realizado a través de dos simulaciones largas, una de verano y una de invierno, para la cual se disponía de observaciones simultáneas de la elevación de la superficie en algunos puntos sobre el estuario para realizar comparaciones. Estas pruebas fueron realizadas utilizando los Modelos A, B y C, en la configuración en que el modelo A sólo proporciona la condición de contorno de marea a los otros modelos. La simulación de invierno cubre el período abril a septiembre de 1996. Para este caso se disponía de observaciones en las estaciones Oyarvide y Palermo (Buenos Aires). La simulación de verano cubre el período diciembre de 1999 a abril de 2000. En este caso las observaciones disponibles correspondían a las estaciones Oyarvide y San Clemente del Tuyú. La Tabla II muestra la posición geográfica de dichas estaciones. Los datos fueron proporcionados por el Servicio de Hidrografía Naval de Argentina. Aunque en general se sostiene que los vientos de los reanálisis de NCEP/NCAR son débiles respecto de los observados, se desconoce el grado de subestimación con precisión suficiente como para realizar un ajuste de los mismos. Por esta razón el ajuste se realizó en este caso de forma inversa, buscando el coeficiente necesario para que los vientos de NCEP/NCAR reproduzcan razonablemente las alturas observadas en el Río de la Plata. Se encontró que el mejor ajuste se obtiene cuando se utiliza un coeficiente de la forma Estudio de la respuesta del modelo HamSOM/CIMA a vientos intensos sobre el Río de la Plata C. Simionato, M. Núñez y V. Meccia Pagina 30 )/15/(1 smVe−+ , donde V es el módulo de la velocidad del viento. De esta manera el coeficiente adquiere un valor de 2 para vientos muy débiles y tiende a caer a 1 para vientos muy intensos. El ajuste de este coeficiente parece indicar que los reanálisis subestiman en un 100% los vientos más débiles, pero captan en forma más realistas los eventos de mayor intensidad. Resultados de la comparación entre la solución del conjunto de modelos HamSOM/CIMA y las observaciones correspondientes a la simulación de invierno se muestran en las Figuras 5 a (Estación Palermo) y b (Estación Oyarvide). El panel superior corresponde a una comparación directa entre los resultados de las simulaciones y las observaciones, a las cuales no se les aplicó ningún tipo de suavizado; la altura media de carta fue extraída de las observaciones. En ambos casos la comparación visual es sumamente satisfactoria, reproduciendoel modelo adecuadamente no sólo la evolución de la marea en el punto sino las excursiones asociadas al efecto del viento. El coeficiente de correlación entre el producto de la simulación y la altura resultó de 0.82 en Oyarvide y 0.86 en Palermo. Estación Latitud (S) Longitud (W) Buenos Aires 34° 34’ 58° 23’ Torre Oyarvide 35° 06’ 57° 08’ San Clemente 36° 21’ 56° 23’ Tabla II: Estaciones utilizadas para validar las simulaciones de verano e invierno de ajuste del conjunto de modelos HamSOM/CIMA. Estudio de la respuesta del modelo HamSOM/CIMA a vientos intensos sobre el Río de la Plata C. Simionato, M. Núñez y V. Meccia Pagina 31 A fin de evaluar la capacidad del modelo oceánico de reproducir el efecto del viento, de baja frecuencia respecto de la marea, promedios móviles con una ventana de 24 horas fueron aplicados a las series. Los resultados correspondientes se muestran en los paneles centrales de las Figuras 5 a (Palermo) y b (Oyarvide). Puede observarse que aunque el modelo no reproduce todos los detalles de la variabilidad observada, el ajuste entre las observaciones y las simulaciones es sumamente satisfactorio, sobre todo teniendo en cuenta que el modelo fue forzado en la superficie del mar con reanálisis y no con observaciones directas de viento. Las correlaciones, en este caso, resultaron de 0.88 para la Estación Oyarvide y 0.83 para la Estación Palermo. Finalmente, los paneles inferiores de las Figuras 5 a y b muestran la variabilidad de alta frecuencia, definida como la diferencia entre las series originales y las derivadas de aplicar promedios móviles. Estas series representan entonces esencialmente la variabilidad con períodos inferiores a las 24 horas. Esta variabilidad está ligada no únicamente a la marea, sino que representa además toda la variabilidad forzada por las altas frecuencias de la atmósfera (como por ejemplo el efecto de brisa) y el ruido de las observaciones . La comparación también resulta satisfactoria en este caso. En particular puede apreciarse que modelo demuestra ser capaz de reproducir con precisión la fase y el batido de la marea. Las correlaciones entre las series observadas y simuladas resultaron de 0.83 en ambas estaciones. Las Figuras 6 a (Oyarvide) y b (San Clemente) son análogas a las 5 a y b pero para el caso de la simulación de verano. Los resultados obtenidos son asimismo comparables. Estudio de la respuesta del modelo HamSOM/CIMA a vientos intensos sobre el Río de la Plata C. Simionato, M. Núñez y V. Meccia Pagina 32 Figura 5a: Comparación entre la simulación de invierno realizada con el conjunto de modelos HamSOM/CIMA y observaciones en la Estación Palermo. Estudio de la respuesta del modelo HamSOM/CIMA a vientos intensos sobre el Río de la Plata C. Simionato, M. Núñez y V. Meccia Pagina 33 Figura 5b: Comparación entre la simulación de invierno realizada con el conjunto de modelos HamSOM/CIMA y observaciones en la Estación Oyarvide. Estudio de la respuesta del modelo HamSOM/CIMA a vientos intensos sobre el Río de la Plata C. Simionato, M. Núñez y V. Meccia Pagina 34 Cuando se considera toda la variabilidad, tanto la de alta como la de baja frecuencia, los coeficientes de correlación obtenidos resultan de 0.84 y 0.83 para las Estaciones Oyarvide (panel superior de la Figura 6 a) y San Clemente (panel superior de la Figura 6 b) respectivamente. La variabilidad de baja frecuencia es también bien representada por el modelo como indican los paneles centrales de las Figuras 6 a (Oyarvide) y 6 b (San Clemente). Los coeficientes de correlación resultaron para estas frecuencias de 0.89 y 0.79 en Oyarvide y San Clemente respectivamente. Finalmente, los paneles inferiores de las Figuras 6 a y b muestran la variabilidad de alta frecuencia para ambas estaciones. Los coeficientes de correlación resultaron en este caso de 0.78 en Oyarvide y 0.88 en San Clemente. El valor relativamente bajo de la correlación en la comparación de estas frecuencias en la Estación Oyarvide con respecto al caso de invierno podría estar asociada al hecho de que en verano el efecto de la brisa es especialmente importante cerca de las costas Uruguayas, como es el caso de esta estación. El efecto de la brisa está claramente ausente en el forzante, si se utilizan los reanálisis de NCEP/NCAR. Sobre la base de lo expuesto se concluye que el conjunto de modelos HamSOM/CIMA forzado por los reanálisis de NCEP/NCAR es apropiado para reproducir las características de la variabilidad de la altura de la superficie libre debidas a los efectos conjuntos del viento y la marea. Estudio de la respuesta del modelo HamSOM/CIMA a vientos intensos sobre el Río de la Plata C. Simionato, M. Núñez y V. Meccia Pagina 35 Figura 6a: Comparación entre la simulación de verano realizada con el conjunto de modelos HamSOM/CIMA y observaciones en la Estación Oyarvide. Estudio de la respuesta del modelo HamSOM/CIMA a vientos intensos sobre el Río de la Plata C. Simionato, M. Núñez y V. Meccia Pagina 36 Figura 6b: Comparación entre la simulación de invierno realizada con el conjunto de modelos HamSOM/CIMA y observaciones en la Estación San Clemente. Estudio de la respuesta del modelo HamSOM/CIMA a vientos intensos sobre el Río de la Plata C. Simionato, M. Núñez y V. Meccia Pagina 37 6. SIMULACIÓN DEL EFECTO DE LOS VIENTOS INTENSOS EN LA ELEVACIÓN DE LA SUPERFICIE LIBRE EN EL RÍO DE LA PLATA A fin de estudiar la capacidad del modelo HamSOM/CIMA de reproducir la elevación de la superficie libre observada durante situaciones de vientos intensos, se llevaron a cabo un conjunto de simulaciones que corresponden a las tormentas discutidas en la Sección 3 y resumidas en la Tabla 1. Las soluciones proporcionadas por el modelo fueron comparadas con observaciones directas de la elevación de la superficie libre en el Río de la Plata proporcionadas por el Servicio de Hidrografía Naval (SHN) de Argentina y el Servicio de Oceanografía e Hidrografía de la Marina (SOHMA) de Uruguay. Los datos disponibles para cada una de las situaciones, indicando la Estación y la extensión de las series se muestra en la Tabla 3. Para evaluar la extensión del dominio necesario para simular apropiadamente las situaciones, el conjunto de modelos oceánicos fue corrido en cada caso en dos maneras: 1. Sólo se simula el efecto del esfuerzo del viento sobre el océano en los dominios B y C (Figura 1). En este caso el Modelo A sólo proporciona la condición de contorno de marea al Modelo B. 2. Se simula el efecto del esfuerzo del viento sobre el océano en los tres dominios, A, B y C. En lo que sigue nos referiremos al primero de los modos como ‘Dominio B’ y al segundo de los modos como ‘Dominio A’. Estudio de la respuesta del modelo HamSOM/CIMA a vientos intensos sobre el Río de la Plata C. Simionato, M. Núñez y V. Meccia Pagina 38 Para asegurar la estabilidad de las soluciones y la apropiada propagación de la señal debida al viento en el océano, en todos los casos las simulaciones fueron comenzadas un mes antes del inicio del evento atmosférico. Situación Estación Latitud (S) Longitud (W) Período A - 1982 Oyarvide 35° 06’ 57° 08’ 5 al 9 de Diciembre Palermo 34º 34’ 58° 23’ 5 al 9 de Diciembre B – 1988 Oyarvide 35° 06’ 57° 08’ 5 al 9 de Marzo Palermo 34º 34’ 58° 23’ 5 al 9 de Marzo San Clemente 36° 21’ 56° 23’ 5 al 9 de Marzo C – 1989 Oyarvide 35° 06’ 57° 08’ 10 al 14 de Noviembre Palermo 34º 34’ 58° 23’ 10 al 14 de Noviembre San Clemente 36° 21’ 56° 23’ 10 al 14 de Noviembre Montevideo 34° 55’ 56° 13’ 10 al 11 de Noviembre D – 1991 Oyarvide 35° 06’ 57° 08’ 29 de Agosto – 4 de Septiembre Palermo 34º 34’ 58° 23’ 29 de Agosto – 4 de Septiembre San Clemente 36° 21’ 56° 23’ 29 de Agosto – 4 de Septiembre E – 2000 Oyarvide 35° 06’ 57° 08’ 14 al 19 de Mayo Palermo 34º 34’ 58° 23’ 14 al 19 de Mayo San Clemente 36° 21’ 56° 23’ 14 al 19 de Mayo La Plata34° 50’ 57° 53’ 14 al 19 de Mayo Tabla III. Observaciones directas de altura en el Río de la Plata durante las situaciones de tormentas con vientos intensos del sudeste utilizadas para comparar con las simulaciones. Una vez obtenidas las soluciones, se extrajeron series temporales correspondientes a cada uno de los puntos en los cuales se dispone de observaciones para comparar (Tabla III). El resultado de las comparaciones para las situaciones A a E (Tabla I) se muestran en las Figuras 7 a 11 respectivamente. En todos los casos, se ha dibujado en negro los datos, en rojo la solución del modelo utilizando el ‘Dominio B’ y en azul la solución del modelo utilizando el ‘Dominio A’. Todos los gráficos fueron realizados en la misma escala para facilitar la comparación. Estudio de la respuesta del modelo HamSOM/CIMA a vientos intensos sobre el Río de la Plata C. Simionato, M. Núñez y V. Meccia Pagina 39 Figura 7. Comparación de las simulaciones realizadas con el conjunto de modelos HamSOM/CIMA y observaciones en las Estaciones Palermo y Oyarvide durante la tormenta de diciembre de 1982. Las observaciones se muestran en negro. En rojo se muestra la solución del modelo cuando el viento sólo se aplica sobre los dominios B y C, mientras que en rojo se indica la solución del modelo cuando el viento se aplica sobre los tres dominios, A, B y C. Estudio de la respuesta del modelo HamSOM/CIMA a vientos intensos sobre el Río de la Plata C. Simionato, M. Núñez y V. Meccia Pagina 40 Figura 8. Comparación de las simulaciones realizadas con el conjunto de modelos HamSOM/CIMA y observaciones en las Estaciones Palermo, Oyarvide y San Clemente durante la tormenta de marzo de 1988. Las observaciones se muestran en negro. En rojo se muestra la solución del modelo cuando el viento sólo se aplica sobre los dominios B y C, mientras que en rojo se indica la solución del modelo cuando el viento se aplica sobre los tres dominios, A, B y C. Estudio de la respuesta del modelo HamSOM/CIMA a vientos intensos sobre el Río de la Plata C. Simionato, M. Núñez y V. Meccia Pagina 41 Figura 9. Comparación de las simulaciones realizadas con el conjunto de modelos HamSOM/CIMA y observaciones en las Estaciones Palermo, Oyarvide, San Clemente y Montevideo durante la tormenta de noviembre de 1989. Las observaciones se muestran en negro. En rojo se muestra la solución del modelo cuando el viento sólo se aplica sobre los dominios B y C, mientras que en rojo se indica la solución del modelo cuando el viento se aplica sobre los tres dominios, A, B y C. Estudio de la respuesta del modelo HamSOM/CIMA a vientos intensos sobre el Río de la Plata C. Simionato, M. Núñez y V. Meccia Pagina 42 Figura 10. Comparación de las simulaciones realizadas con el conjunto de modelos HamSOM/CIMA y observaciones en las Estaciones Palermo, Oyarvide y San Clemente durante la tormenta de agosto de 1991. Las observaciones se muestran en negro. En rojo se muestra la solución del modelo cuando el viento sólo se aplica sobre los dominios B y C, mientras que en rojo se indica la solución del modelo cuando el viento se aplica sobre los tres dominios, A, B y C. Estudio de la respuesta del modelo HamSOM/CIMA a vientos intensos sobre el Río de la Plata C. Simionato, M. Núñez y V. Meccia Pagina 43 Figura 11. Comparación de las simulaciones realizadas con el conjunto de modelos HamSOM/CIMA y observaciones en las Estaciones Palermo, Oyarvide, San Clemente y La Plata durante la tormenta de mayo de 2000. Las observaciones se muestran en negro. En rojo se muestra la solución del modelo cuando el viento sólo se aplica sobre los dominios B y C, mientras que en rojo se indica la solución del modelo cuando el viento se aplica sobre los tres dominios, A, B y C. Estudio de la respuesta del modelo HamSOM/CIMA a vientos intensos sobre el Río de la Plata C. Simionato, M. Núñez y V. Meccia Pagina 44 Una primera e interesante observación es que las soluciones modeladas, con excepción de la correspondiente a mayo de 2000, reproducen adecuadamente los tiempos de comienzo y fin de la onda de tormenta en el estuario, indicando que el timing de los vientos es correcto en los reanálisis. En el caso de la última tormenta (mayo de 2000), el modelo adelanta ligeramente la crecida en Palermo y por varias horas las crecidas en La Plata y Oyarvide. En este caso es también notable que, como indican los datos, el pico de la crecida se produce antes en Palermo que en Oyarvide y La Plata, lo cual no se observa en ninguna de las otras situaciones analizadas. Se observa, además, que una importante mejora en la predicción de la altura máxima se consigue utilizando el ‘Dominio A’ (azul en las figuras) respecto del ‘Dominio B’ (rojo) en casi todos los casos. Respecto de la altura máxima, en tres de los cinco casos (1988, 1991 y 2000, Figuras 8, 10 y 11, respectivamente) el modelo provee una predicción de excelente calidad. En el caso de la tormenta de diciembre de 1982 (Figura 7), el modelo subestima la altura máxima de la onda de tormenta tanto en la estación Palermo como en la Estación Oyarvide. Una posible explicación para esta discrepancia puede obtenerse del análisis de la Figura 3a, que muestra la evolución de la intensidad del viento a lo largo del tiempo durante esta situación. Puede verse en esta figura, que el evento atmosférico alcanzó según los reanálisis un pico alrededor de las 12z del 6 de diciembre, con una rápida caída inmediatamente después, a diferencia de todas las otras situaciones analizadas (figuras 3b a 3e) que corresponden a situaciones de viento más sostenidas a lo largo del tiempo. Es posible que la resolución temporal de los reanálisis no sea suficiente para definir apropiadamente la Estudio de la respuesta del modelo HamSOM/CIMA a vientos intensos sobre el Río de la Plata C. Simionato, M. Núñez y V. Meccia Pagina 45 duración del pico. Otra explicación es que, sencillamente, los reanálisis subestimen la intensidad de la tormenta más que en las demás situaciones analizadas. Finalmente, para el caso de 1989 (Figura 9), el modelo reproduce adecuadamente la onda de tormenta en Oyarvide, San Clemente y Montevideo, pero subestima la altura en Palermo. Es notable que en este caso la altura máxima observada en Palermo fue intensamente mayor que en Oyarvide; esto parece sugerir la presencia de un fuerte efecto local en los vientos no reflejado por los reanálisis. Estudio de la respuesta del modelo HamSOM/CIMA a vientos intensos sobre el Río de la Plata C. Simionato, M. Núñez y V. Meccia Pagina 46 7. RESUMEN DE CONCLUSIONES Y DISCUSIÓN El objetivo del presente trabajo fue estudiar la respuesta del conjunto de modelos oceánicos anidados unidireccionalmente HamSOM/CIMA durante situaciones de vientos intensos sobre el Río de la Plata, así como determinar el dominio necesario para una adecuada modelación de la propagación de las ondas de tormenta hacia el estuario. A tal efecto, cinco situaciones, ocurridas en diciembre de 1982, marzo de 1988, noviembre de 1989, agosto de 1991 y mayo de 2000, en las cuales se observaron intensas crecidas en el Río de la Plata fueron seleccionadas por el Proyecto para ser estudiadas. La evolución de estas situaciones en la atmósfera fue modelada utilizando el modelo regional ETA en el contexto del Proyecto y las soluciones fueron provistas al CIMA para ser utilizadas como forzante de su modelo oceánico. Dado que las soluciones del modelo ETA sólo se guardaron durante 72 horas, comenzando 24 horas antes del pico del evento atmosférico, tiempo claramente insuficiente para acelerar un modelo oceánico de gran escala, y además el dominio de estos datos es menor que nuestro modelo de mayor escala, fue necesario complementar estos datos con otros de alguna fuente adicional. Como el modelo ETA fue corrido tomando condiciones de contorno de los reanálisis de NCEP/NCAR, estaúltima parece ser la fuente de datos complementaria más razonable. Como primer paso entonces, se procedió a una comparación entre ambos conjuntos de datos. Se encontró que hay una importante diferencia en la evolución del viento proporcionada por ambos modelos. Los vientos derivados del Modelo ETA son no sólo muy poco intensos sino que no alcanzan un pico Estudio de la respuesta del modelo HamSOM/CIMA a vientos intensos sobre el Río de la Plata C. Simionato, M. Núñez y V. Meccia Pagina 47 acompañando el momento de máximo desarrollo de la tormenta, como se observa en los reanálisis de NCEP/NCAR. Esta característica es notable, puesto que en general se cree que los vientos de los reanálisis son de por sí débiles. Dado que el Modelo ETA ha sido forzado en los bordes con datos provenientes de los reanálisis, estas últimas son características muy curiosas que parecen sugerir algún tipo de error en las simulaciones de alta resolución o en las soluciones archivadas. El océano es forzado por el esfuerzo del viento y no por el viento directamente. Este esfuerzo es proporcional al cuadrado de la velocidad del viento. Por lo tanto, el efecto de la subestimación en los campos de vientos sería multiplicado al utilizar los campos derivados del Modelo ETA. Teniendo en cuenta este análisis se concluye que los reanálisis parecen ser más representativos del desarrollo real de las tormentas. Por esta razón se decidió no proseguir el estudio utilizando los resultados provenientes de las simulaciones realizadas con el Modelo ETA y, a cambio, se lo realizó sobre la base de los reanálisis de NCEP/NCAR. Una vez conformada la base de datos de vientos, se realizó un ajuste del modelo oceánico a los mismos. El ajuste se realizó a través de una serie de experimentos de sensibilidad en dos simulaciones largas, una de invierno y otra de verano, efectuadas para años en los cuales se disponía de observaciones de elevación de la superficie libre del mar en el Río de la Plata con las que realizar comparaciones durante un período de tiempo significativamente largo y bajo diferentes condiciones de viento. Aunque en general se sostiene que los vientos de los reanálisis de NCEP/NCAR son débiles respecto de los observados, se desconoce el grado de subestimación con precisión suficiente como para Estudio de la respuesta del modelo HamSOM/CIMA a vientos intensos sobre el Río de la Plata C. Simionato, M. Núñez y V. Meccia Pagina 48 realizar un ajuste de los mismos. Por esta razón el ajuste se realizó en este caso de forma inversa, buscando el coeficiente necesario para que los vientos de NCEP/NCAR reproduzcan razonablemente las alturas observadas en el Río de la Plata. Finalmente la respuesta del modelo HamSOM/CIMA a las cinco situaciones de vientos intensos seleccionadas fue estudiada. Con el fin de determinar el dominio necesario para una adecuada modelación de la onda de tormenta, el modelo se corrió en dos configuraciones diferentes. En la primera de estas configuraciones, el dominio sobre el cuál se aplica el efecto del viento empieza a los 42º S. En la segunda, el efecto del viento se aplica al norte de 56.5º S. Las soluciones proporcionadas por el modelo fueron finalmente comparadas con observaciones de la elevación de la superficie libre adquiridas en distintos puntos del estuario. La comparación resulta exitosa, sobre todo teniendo en cuenta las limitaciones en los forzantes utilizados, puesto que los vientos a 10 metros de altura de los reanálisis no provienen directamente de observaciones sino que son un producto derivado de modelo. Las soluciones modeladas, con excepción de la correspondiente a mayo de 2000, reproducen adecuadamente los tiempos de comienzo y fin de la onda de tormenta en el estuario, indicando que el timing de los vientos es correcto en los reanálisis. En el caso de la última tormenta (mayo de 2000), el modelo adelanta ligeramente la crecida en Palermo y por varias horas las crecidas en La Plata y Oyarvide. En este caso es también notable que, como indican los datos, el pico de la crecida se produce antes en Palermo que en Oyarvide y La Plata, lo cual no se observa en ninguna de las otras situaciones analizadas. Se observa, además, que una importante mejora en la predicción de la altura Estudio de la respuesta del modelo HamSOM/CIMA a vientos intensos sobre el Río de la Plata C. Simionato, M. Núñez y V. Meccia Pagina 49 máxima se consigue utilizando el ‘Dominio A’ respecto del ‘Dominio B’ en casi todos los casos. Respecto de la altura máxima, en cuatro de los cinco casos (1988, 1991 y 2000) el modelo provee una muy buena predicción para todas las estaciones comparadas. En el caso de la tormenta de diciembre de 1982, el modelo subestima la altura máxima de la onda de tormenta tanto en la estación Palermo como en la Estación Oyarvide. Es posible que la resolución temporal de los reanálisis no sea suficiente para definir apropiadamente la duración del pico. Otra explicación es que, sencillamente, los reanálisis subestimen la intensidad de la tormenta más que en las demás situaciones analizadas. Finalmente, para el caso de 1989, el modelo reproduce adecuadamente la onda de tormenta en Oyarvide, San Clemente y Montevideo, pero subestima la altura en Palermo. Es notable que en este caso la altura máxima observada en Palermo fue intensamente mayor que en Oyarvide; esto parece sugerir la presencia de un fuerte efecto local en los vientos no reflejado por los reanálisis. Podrían conseguirse mejoras importantes en la calidad de las predicciones realizadas con nuestro modelo en caso de disponer de datos de viento de mejor calidad que los utilizados en este caso. Sería importante repetir las simulaciones atmosféricas de alta resolución corrigiendo los errores que puedan haberse cometido, o utilizando otro modelo atmosférico. También podrían conseguirse resultados más realistas, mejorando la parametrización de la transferencia de cantidad de movimiento entre el océano y la atmósfera en el modelo oceánico a través de la incorporación de un submodelo de olas. Este trabajo se encuentra en etapa de desarrollo en el CIMA. No obstante lo expuesto, el conjunto de modelos oceánicos HamSOM/CIMA Estudio de la respuesta del modelo HamSOM/CIMA a vientos intensos sobre el Río de la Plata C. Simionato, M. Núñez y V. Meccia Pagina 50 forzado con los reanálisis de NCEP/NCAR ha probado ser suficientemente realista como para ser utilizado para estudios climáticos o de escenarios. Estudio de la respuesta del modelo HamSOM/CIMA a vientos intensos sobre el Río de la Plata C. Simionato, M. Núñez y V. Meccia Pagina 51 8. REFERENCIAS Alvarez Fanjul, E. A., B. Pérez Gómez and I. Rodríguez Sanchez-Arévalo, 1997. A description of the tides in the Eastern North Atlantic. Progress in Oceanography, 40, 217-244. Andersen O. B., P. L. Woodworth and R. A. Flather, 1995. Intercomparison of recent ocean tide models. Journal of Geophysical. Research, 100(C12), 25261-25282. Backhaus, J. O, 1985. A three dimensional model for simulation of shelf sea dynamics. Deutsche Hydrographische Zeitschirft. 38(H.4), 164-187. Backhaus, J. O. and D. Hainbucher, 1985. A finite difference general circulation model for shelf sea and its applications to low frequency variability on the North European Shelf. In: Three dimensional model of marine and estuarine dynamics. J. C. Nihoul and B. M. Jamars, (Eds.). Elsevier Oceanographic Series. 45, Amsterdam, 221-244. Backhaus, J. O., 1983. A semi-implicit scheme for the shallow water equations for application to shelf sea modelling. Continental Shelf Research, 2(4), 243-254. Foreman, M.G.G.,1977. Manual for tidal heights analysis and prediction. Pac. Mar. Sci. Rep. 77-10, Inst. of Ocean Sci., Patricia Bay, Sidney, B. C., Canadá, 97 pp. Foreman, M.G.G.,1978. Manual for tidal heights analysis and prediction. Pac. Mar. Sci. Rep. 78-6, Inst. of Ocean Sci., PatriciaBay, Sidney, B. C., Canadá, 70 pp. Glorioso P.D. and J.H. Simpson, 1994. Numerical modelling of the M2 tide on the northern Patagonian shelf. Continental Shelf Research, 14, 267-278. Glorioso P.D. and R.A. Flather, 1995. A barotropic model of the currents off SE South Estudio de la respuesta del modelo HamSOM/CIMA a vientos intensos sobre el Río de la Plata C. Simionato, M. Núñez y V. Meccia Pagina 52 America. Journal of Geophysical Research, 100, 13427-13440. Glorioso P.D. and R.A. Flather, 1997. The Patagonian Shelf tides. Progress in Oceanography, 40, 263-283. Glorioso, P., 2000. Patagonian Shelf 3-D tide and surge model. Journal of Marine Systems, 24, 141-151. Kalnay, E. and Coauthors, 1996. The NCEP/NCAR 40-Year reanalisis project. Bulletin of the American Meteorological Society, 77, 437-471. Kowalik, Z. and T. S. Murty, 1993. Numerical modeling of ocean dynamics. Advanced Series of Ocean Engineering. Vol. 5. World Scientific, 481pp. Le Provost, C., A. F. Bennet and D. E. Cartwright, 1995. Ocean tide for and from TOPEX/POSEIDON. Science, 267, 639-642. Le Provost, C., F. Lyard, J. M. Molines, M. L. Genco and F. Rabilloud, 1998. A hydrodynamic ocean tide model improved by assimilating satellite altimeter-derived data set. Journal of Geophysical Research, 103(C3), 5513-5529. Pohlmann, T., Untersuchung hydro- und thermo-dynamischer Prozesse in der Nordsee mit einem dreidimensionalen numerischen Modell. PhD. Thesis, Hamburg University, 1991. Rodriguez, I. and E. Alvarez, 1991. Modelo tridimensional de Corrientes. Condiciones de aplicación a las costas españolas y análisis de resultados para el caso de un esquema de mallas anidadas. Clima Marítimo Report, 42, 65 pp. Rodriguez, I., E. Alvarez, E. Krohn and J. Backhaus, 1991. A mid-scale tidal analysis of waters around the north western corner of the Iberian Peninsula. Proceedings of a Computer Modelling in Ocean Engineering 91, Balkema, 568 pp. Estudio de la respuesta del modelo HamSOM/CIMA a vientos intensos sobre el Río de la Plata C. Simionato, M. Núñez y V. Meccia Pagina 53 SHN, 1986, Mar Argentino, de Río de la Plata al Cabo de Hornos, Carta Náutica 50, 4th ed., Servicio de Hidrografia Naval, Armada Argentina. SHN, 1992, Acceso al Río de la Plata, Carta Náutica H1, 5th ed., Servicio de Hidrografia Naval, Armada Argentina. SHN, 1993, El Rincón, Golfo San Matías y Nuevo, Carta Náutica H2, 4th ed., Servicio de Hidrografia Naval, Armada Argentina. SHN, 1999a, Río de la Plata Medio y Superior, Carta Náutica H116, 4th ed., Servicio de Hidrografia Naval, Armada Argentina. SHN, 1999b, Río de la Plata Exterior, Carta Náutica H113, 2nd ed.,Servicio de Hidrografia Naval, Armada Argentina. Simionato, C.G., W. Dragani, M.N. Nuñez and M. Engel, 2002. A set of 3-D nested models for tidal propagation from the Argentinean Continental Shelf to the Río de la Plata Estuary – Part I M2. Submitted to Continental Shelf Research. Simmonds, I and K. Keay, 2000. Mean Southern Hemisphere extratropical cyclone behavior in the 40-year NCEP-NCAR Reanalysis. Journal of Climate, 13, 873-885. Simionato, C.G., M. N. Nuñez and M. Engel, 2001. The Salinity Front of the Río de la Plata - a numerical case study for winter and summer conditions. Geophysical Research Letters. 28(13), 2641-2644. 2001. Stronach, J. A., J. Backhaus and T. S. Murty, 1993. An update on the numerical simulation of oceanographic processes in the waters between Vancouver Island and the mainland: the GF8 model. Oceanography and Marine Biology: An annual Review 31, 1-86. Wais, R., 1985. On the relation of linear stability and the representation of Coriolis term in Estudio de la respuesta del modelo HamSOM/CIMA a vientos intensos sobre el Río de la Plata C. Simionato, M. Núñez y V. Meccia Pagina 54 the numerical solution of the shallow water equations. PhD thesis. Hamburg University. Zahel, W., 1997. Ocean Tides, in Lecture Notes in Earth Sciences 66, Springer 1997: Tidal Phenomena, Helmut Wilhelm, Walter Zürn, Hans-Georg Wenzel (Eds.)
Compartir