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Contreras Servín Natalia Ensayo sobre la ceguera Ensayo sobre la ceguera escrito en 1995 por José Saramago, ganador al Nobel 3 años después. Una ceguera blanca inexplicable ha invadido una ciudad, esta obra se considera que hace una crítica a la fragilidad de cohesión de la sociedad, sin embargo desde mi perspectiva, apunta a que la emoción más primitiva del hombre, deslinda a este mismo de su propia humanidad; es el miedo el que ha impulsado cada una de las acciones de las personas, llevándolas a sobre pasar sus límites y constituirse. Con personajes destacados por rasgos pero sin conocer su verdadera identidad, se mantienen desde al anonimato mientras protagonizan la obra, tenemos a un selecto grupo, podemos mencionar al médico y a su esposa, al taxista, al primer ciego y su mujer, al hombre del parche, a la mujer de los lentes negros y al niño. Personas diferentes que se vieron orilladas a convivir dentro de un espacio cerrado por precaución de los demás ciudadanos, aunque el final fue inevitablemente el mismo para todos. El grupo empieza perdiendo su humanidad con la siguiente pauta, son encerrados como animales, sin organización interior que les dé un orden, a la espera de ser alimentados, sin propósito alguno. De primera instancia, es el gobierno el que ha puesto en tal lugar, ejerciendo su poder y prestigio, sus acciones no fueron premeditadas, fueron esporádicas para mantener la fragilidad de cohesión entre sus ciudadanos, y preservar el respeto. Se les ha impuesto un reglamento que es repetido a todas horas, no se justifican las órdenes; hasta este punto hemos perdido el propósito del hombre y el diálogo. Al estar dentro del centro de reclusión, han perdido su identidad y sus principios, ya no son más aquellas personas que solían ser, y serán capaces de cometer toda clase de actos con tal de sobrevivir, entonces ¿dónde ha quedado la moral y la ética de cada uno de los individuos?, ya se han alejado un poco más de su humanidad. Contreras Servín Natalia Llegando a amenazar a los otros, ejercer violencia física e insultos, a manipular y a extorsionar de cierta medida; tal es el caso de los “malvados”, que han cometido toda serie de actos contra los demás, no podemos decir que se establecido una sociedad, es más una tiranía. El miedo a no sobrevivir, encamino a los ciegos a obedecer a los malvados, que anteriormente por ese mismo miedo, ejercieron su poder sobre los demás. Podemos ligar la humanidad a otra brecha, a la justicia y la opinión externa, desde el extremo más evidente que es el homicidio y violación que suceden dentro de la novela, se llevan a cabo por los sujetos con más poder, al no haber alguien que los confronte, ellos siguieron pasando de largo con sus actos, al no tener un futuro claro, la humanidad deja de preocuparse por el presente, llegando a perderse, “Sin futuro, el presente no sirve para nada, es como si no existiese”. (Saramago, 1995) Cada quien rige sus acciones por el egoísmo y el miedo, todos se encuentran en un lugar desconocido, lejos de su zona de confort, expuestos a otros y sin poder de defenderse; privados de un sentido que es primordial, la vista, qué más queda que seguir los instintos, en esas circunstancias no pueden saciar sus necesidades más básicas por ellos mismos, entonces buscan el apoyo de otros, pero siempre encaminados a conseguir el máximo beneficio para ellos; vemos cuando los malvados solicitan mujeres, y los hombres aceptan, porque al final el beneficio será reflejado en ellos también. “La consciencia moral, a la que tantos insensatos han ofendido y de la que muchos más han renegado” (Saramago, 1995), perder la vista ha limitado el alcance de conciencia de todos los presentes, pero inclusive aquellos que aún veían estaban igual de cegados; haciendo referencia a los policías o militares que se encontraban cuidando la entrada de los ciegos, podían observar las injusticias que ocurrían, el abuso de poder y lo atemorizados que resultaban, nuevamente reparo en su pérdida de consciencia, entonces de nada sirvió que pudieran observar aquellos actos, su miedo a terminar en la misma situación les impidió ver, estaban igual de ciegos. “De esa masa estamos hechos, mitad indiferencia y mitad ruindad” (Saramago, 1995). Contreras Servín Natalia Se establece que nuestra capacidad cognitiva es lo que nos diferencia de los animales, pero hasta ese punto, ya no se puede vislumbrar la delgada y a la vez abismal diferencia que hay entre humanos y animales, luchando por la supervivencia, sin poder satisfacer las necesidades básicas, sin diálogo alguno, sin sentido de moral o normativo, sin propósitos, son simplemente masas varadas encerradas en un manicomio. “Ninguna otra especie aspira a ser más de lo que es” (Gazzaniga, 2015) entonces, aquella masa por miedo ha perdido su humanidad. Una obra narrada de manera irregular, sin dejar de ser objetiva. Es complicado concluir, puesto que fue una obra que apunto en varias direcciones, siguiendo el orden de ideas presentadas inicialmente; entonces, en ningún momento nuestros personajes se quedaron ciegos, siempre lo estuvieron, perdieron su humanidad cuando fingían no ver lo más evidente, posteriormente al quedarse a la deriva, sintieron miedo, que los impulsó a sobrevivir costosamente; su identidad se perdió antes de que perdieran sus nombres, se perdió con la frágil consciencia de cada uno. Una excelente e irónica crítica a la ceguera voluntaria de la sociedad. La única persona que no fue invadida por la ceguera blanca, fue la esposa del médico, porque tenía plena consciencia y estaba dispuesta a jugar su papel, sin embargo al final cuando todos recuperan la vista, ella ha perdido protagonismo; metafóricamente, la única persona que veía la realidad objetivamente volvió a quedar en la sombra. Los ciegos perdieron el miedo y volvieron a su humanidad. BIBLIOGRAFÍA: Saramago, J. (1995).Ensayo sobre la ceguera. Ciudad de México. México Gazzaniga, M. (2005). El cerebro ético. California. Estados Unidos
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