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Análisis del Estado Mexicano UNIDAD 3: EL ESTADO MEXICANO EN LA ACTUALIDAD Autores: Mtra. Angélica Montellano García y Mtro. Salvado Alvarado Garibaldi Introducción En las últimas tres décadas México ha experimentado avances muy significativos en materia política, pero no hay unanimidad en relación con los alcances de los cambios. La polémica persiste; algunos estudiosos insisten en la transición democrática; otros señalan que ésta ha concluido y que nos encontramos en la instauración democrática; algunos más manifiestan – los menos, afortunadamente– que las transformaciones son limitadas y de alcances pírricos. Como quiera que esto sea, lo cierto es que se han modificado las funciones socioeconómicas y sociopolíticas del Estado, que el cambio ha sido accidentado y el avance democrático innegable, y eso ha sido posible porque el proceso de democratización no ha sido exclusivamente político, dado que también se manifiesta como un proceso con profundas repercusiones en los valores, las normas, las tradiciones, las interacciones entre los grupos y los sujetos, así como en las instituciones culturales, sociales, económicas y jurídico-políticas, producto de un activo papel de diversos actores sociales: partidos políticos, empresarios, iglesias, indígenas, organizaciones civiles, medios de comunicación, etcétera. Un cambio de tales dimensiones no puede ser sino un cambio cultural, ya que exige la internalización y socialización de valores y prácticas democráticas en el individuo. Así, la cultura política no se limita exclusivamente a la organización y a la participación en procesos electorales y partidos políticos, sino que implica también conciencia y participación, así como una explicación histórica de por qué se debe asumir una posición y actuar en consecuencia. No obstante, también es irrefutable que existe un desfase entre los logros democráticos y la elevación de los niveles de bienestar, ya que a nuestra sociedad la caracteriza una compleja y contradictoria interrelación social, en donde coexiste la ampliación de las libertades y la participación política con un agudo y prolongado proceso de pauperización, a la par que se cuestiona el papel del Estado y se redefinen sus alcances y funciones, toda vez que se muestra incapaz de atender las crecientes desigualdades sociales y su accionar se ve enmarcado en las exigencias que emanan de una creciente incorporación a la economía global, en donde se cuestiona todo tipo de regulación o protección, como obstáculos a la eficiencia, productividad y competitividad. En este sentido, observamos en nuestra sociedad una conflictividad que ya no puede ser regulada eficientemente por los marcos normativos y las instancias institucionales actuales, por lo que se hace imperativo un nuevo pacto social, a fin de construir o reconstruir el entramado social e institucional que le de viabilidad a la nación. Unidad 3/Pág. 1 Análisis del Estado Mexicano Temario 1. Funciones socioeconómicas y sociopolíticas del Estado 2. Neoliberalismo y Estado nacional 3. Reforma del Estado y relaciones del Estado con diferentes actores sociales Los partidos políticos Los empresarios Las iglesias Las organizaciones civiles y los movimientos sociales Los medios de comunicación Unidad 3/Pág. 2 Análisis del Estado Mexicano 1. FUNCIONES SOCIOECONÓMICAS Y SOCIOPOLÍTICAS DEL ESTADO El concepto de función se refiere a la actividad del Estado, es decir, al ejercicio de sus competencias. Tales funciones se ejecutan por medio de los órganos del Estado, que tienen esferas de competencia determinadas jurídicamente; esto es, el fin sólo puede realizarse o llevarse a la práctica por medio de la ejecución de las funciones por alguien responsabilizado para ello. Así, el ejercicio de las funciones del Estado, por sus diversos órganos, impone una necesaria repartición de las competencias, y de la forma en que se confieren tales responsabilidades se derivan las diferencias de organización constitucional y administrativa en los diferentes Estados. En virtud de tales planteamientos podemos inferir, por un lado, que las funciones del Estado deben estar siempre circunscritas a derecho, ya que la observancia de la norma acota la arbitrariedad y por lo tanto evita o sanciona los excesos del Estado en sus funciones; por otro lado, la división de las funciones responde más a la necesidad de encomendar su cumplimiento a una serie de órganos y por lo tanto a los responsables de su conducción, el ejercicio de la acción de gobierno, y no propiamente a que en la realidad dichas funciones puedan presentarse independientes unas de las otras. No hay una separación absoluta en el mundo fáctico entre las funciones de carácter político, jurídico, administrativo o de cualquier otro tipo; es decir, que la determinación de qué acto es específicamente administrativo o político, es más de carácter formal que real, pero igualmente necesaria su delimitación en términos formales y prácticos para el cumplimiento de la acción de gobierno en la realidad concreta, y consecuentemente para la realización de los fines del Estado. En la actualidad predominan las descalificaciones de la viabilidad del Estado de bienestar y simultáneamente se le califica como interventor, ineficiente, paternalista y autoritario; sin embargo, es pertinente exponer en su defensa que su creciente papel en la regulación de las relaciones económicas, como en la atención de los rezagos sociales, durante la mayor parte del siglo XX, gravitó favorablemente en la promoción del crecimiento económico y del desarrollo social, por medio de la generación de marcos normativos, condiciones y ambientes de estabilidad política, creación de infraestructura básica e instituciones de atención social; es decir, las instituciones y las políticas públicas se erigieron como instrumentos para responder a las demandas sociales y no sólo como la materialización de la preocupación populista o filantrópica de los grupos dominantes. Tradicionalmente, y de conformidad con la visión jurídica, se reconocen tres funciones esenciales del Estado para realizar sus fines: Unidad 3/Pág. 3 Objetivo del tema Distinguir los diferentes tipos de funciones del Estado, a partir de las características de cada uno, para delimitar los casos que se presentan en la intervención profesional. Análisis del Estado Mexicano a) La función legislativa, que se remite al establecimiento de las normas jurídicas generales, ya que el Estado es el creador de su propio orden jurídico. b) La función administrativa, que se caracteriza por realizar la actividad concreta y tutelar del Estado como promotor del desarrollo económico y social de un país. c) La función jurisdiccional, que tiene por encomienda resolver las controversias en el marco del derecho, por lo que debe velar por la aplicación, preservación y observancia de la ley. Cabe destacar que no obstante la utilidad de tal división y de que tal separación obedece más a una cuestión formal para la organización y ejecución de las acciones de gobierno, es necesario resaltar que el Estado también tiene áreas de injerencia que no quedan lo suficientemente explicitadas en la división jurídica expuesta. Por ejemplo, el Estado cumple también con una destacada tarea pedagógica, cultural e ideológica, y asimismo es ámbito de su competencia la regulación de la lucha política, espacios que no se vislumbran con la debida nitidez en las funciones manifestadas, y particularmente tales ámbitos son fundamentales para la intervención profesional del trabajador social, por lo que consideramos necesario ensayar otro ordenamiento de las funciones del Estado que vislumbre con mayor precisión los posibles campos de intervención profesional en el ámbito público para el trabajo social. En consecuencia, las funciones generales del Estado, desdeuna perspectiva más acorde al trabajo social y con fines exclusivamente pedagógicos, pueden agruparse en tres grandes apartados: Unidad 3/Pág. 4 Figura 1. Funciones del Estado Análisis del Estado Mexicano Así, al identificar la existencia de funciones económico-jurídico-administrativas, nos permitimos plantear un campo de desarrollo profesional en la esfera estatal para el trabajo social, en donde el diseño y ejecución de políticas públicas, las tareas de planeación e investigación social, la realización de diagnósticos sociales y la atención de individuos o grupos humanos conflictivos o de alta vulnerabilidad son materia de su atención. Respecto a la función pedagógico-ideológica, se expande un amplio espacio de intervención profesional para el trabajo social, ya que la educación no se circunscribe a la de carácter formal y escolarizado. Al ser el trabajador social un especialista en educación social, y a partir de la vasta experiencia de trabajo en comunidades que posee, su labor es en extremo relevante para consumar la misión educativa del Estado. Tocante a las funciones políticas, su conocimiento de las relaciones sociales, su capacidad de penetración en las comunidades y su experiencia y formación en materia de organización y participación social, lo hacen un profesional con un enorme potencial por explotar en la materia. Como puede observarse, la ventaja que presenta la división propuesta es la de hacer más didáctica y comprensible la extensa gama de espacios de intervención profesional que en la esfera de lo público tiene el trabajo social. Unidad 3/Pág. 5 Análisis del Estado Mexicano 2. NEOLIBERALISMO Y ESTADO NACIONAL Las estrategias del Estado mexicano para impulsar el desarrollo a lo largo del siglo XX, estuvieron marcadas por proyectos políticos que operaron bajo una racionalidad que contribuyó a reproducir el subdesarrollo. El populismo y el desarrollismo son proyectos nacionales que incluyeron concepciones sobre el progreso afines a una acumulación subordinada a los centros hegemónicos del poder económico y político mundial. En estos proyectos el desarrollo se basó en la industrialización con sustitución de importaciones, vigente hasta finales de la década de los ochenta, en donde predomina una actuación del Estado activa en la esfera económica como promotor y capitalista colectivo. El modelo carecía de un impulso serio a las políticas en materia de ciencia y tecnología; no existía una vinculación con las necesidades de la producción local y la existencia de una burguesía nacional acostumbrada a cubrir las necesidades locales con el progreso generado en los países desarrollados; favoreció el subdesarrollo de México y su dependencia científica y tecnológica del extranjero. La implementación del modelo neoliberal a finales de los ochenta acrecentó esta situación. Bajo este modelo, el Estado se repliega de muchas de sus funciones económicas y desiste de las responsabilidades sociales adquiridas anteriormente. La política económica tiene como objetivo la acumulación capitalista en su forma subdesarrollada, y en consecuencia, una estrategia muy pobre en el renglón de impulso a la ciencia y la tecnología local y su aplicación a los procesos productivos. El neoliberalismo es una ideología económica que domina las políticas de la economía global. Su ideólogo principal es Milton Friedman, quien propuso que el Estado no interviniera casi nada en la economía nacional, es decir, que el control de la economía estuviera en manos del capital privado y ya no en manos del Estado. Criticaba los gobiernos nacionales por sus burocracias enormes e ineficientes que impedían el funcionamiento óptimo del mercado. Con el objetivo de permitir a las corporaciones e inversionistas operar libremente para maximizar sus ganancias en cualquier parte del mundo, se comenzaron a promover políticas de comercio libre, desregulación, privatización de empresas públicas, baja inflación, el movimiento libre de capital y presupuestos equilibrados. La política económica mexicana se ajustó a los requerimientos del neoliberalismo. La entrada de México al Acuerdo General de Aranceles y Comercio (GATT, hoy Organización Mundial de Unidad 3/Pág. 6 Objetivo del tema Analizar el papel del Estado mexicano en el neoliberalismo, en comparación con los proyectos que ha adoptado anteriormente, para contextualizar la problemática social de la actualidad. Análisis del Estado Mexicano Comercio) y la posterior firma del Tratado de Libre Comercio de América del Norte, terminaron por consumar la estrategia de apertura de la economía mexicana y la subordinación de la misma a los intereses del capital monopólico norteamericano. Desde entonces, la política económica se ha empeñado en lograr los equilibrios macroeconómicos, hacer funcionar libremente al mercado, abrir la economía a los flujos de capital y mercancías sin restricción alguna y elevar las exportaciones no petroleras. La aplicación de esta política económica en México ha polarizado a la sociedad mexicana, porque el ingreso se ha concentrado en muy pocas manos, en tanto que la mayoría de la población no cuenta con ingresos suficientes para satisfacer sus necesidades. El número de mexicanos en extrema pobreza se ha incrementado, lo cual ha repercutido en el ámbito social. Aumentó el desempleo y subempleo, que ha provocado que aumente la economía informal. De acuerdo con el Instituto Mexicano de Contadores Públicos (IMCP), la economía informal representa el 60% de la Población Económicamente Activa (PEA) en nuestro país (CNN, 2013). De acuerdo con Enrique de la Garza, la implantación del neoliberalismo en México se caracterizó por el impulso de la maquila, que combinaba el toyotismo con la flexibilidad laboral. Esto tuvo consecuencias muy negativas para la economía, tales como la desarticulación de cadenas productivas existentes y la falta de sustitución por otras nuevas; déficit en la balanza de pagos; falta de Investigación y Desarrollo Experimental (IDE), tanto en el sector privado como en el público, que ha impactado en el incremento de la importación creciente de maquinaria y equipo; fracaso de las empresas productivas por el encarecimiento y la escasez de crédito; y la falta de una política de fomento industrial para mejorar las condiciones de inserción en el mercado internacional de aquellas empresas sujetas a la competencia exterior; y es que el toyotismo, hay que subrayarlo, es un régimen laboral basado en la intensificación del trabajo, no en la automatización de los procesos productivos, y es ahí en donde De la Garza encuentra los indicios del agotamiento del patrón neoliberal de crecimiento en México, que se manifiestan en los límites “físicos, sociales e incluso identitarios” de los trabajadores en relación con la productividad y la eficacia pretendidas por las empresas que lo implementan. La organización de las actividades en ciencia y tecnología es fundamental para el desarrollo de la relación capital-trabajo, y en esta tarea el Estado tiene una función central en la subvención de la ciencia básica y el fomento a la ciencia aplicada, en la socialización del conocimiento para ponerlo a disposición del capital, en la formación de investigadores, en la coordinación y colaboración de distintas áreas de la ciencia, etc. Pero de igual relevancia resulta la acción estatal en la vinculación de estos desarrollos a los procesos productivos, a través de una política económica que impulse, incentive y proteja el empleo de las capacidades tecnológicas locales, que a su vez estimule la generación de nuevos desarrollos científicos y tecnológicos aplicados a la producción; sin embargo, ni una cosa ni otra ocurrieron en nuestro país, porque el capitalista nacional no necesitó de una intervención estatal en tal sentido para seguir obteniendoganancias extraordinarias. Además del descuido en materia de ciencia y tecnología, el sector público ha buscado reducir sus gastos y aumentar sus ingresos sin importar los costos sociales, lo que ha provocado que baje el déficit público a costa del aumento de impuestos y precios de los bienes y Unidad 3/Pág. 7 http://www.cnnexpansion.com/mi-carrera/2012/12/06/economia-informal-explota-en-6-anos Análisis del Estado Mexicano servicios públicos, y de la baja del gasto social en educación, salud, vivienda, ecología e infraestructura. Con la aplicación del neoliberalismo en nuestro país, a finales de los noventa padecían desnutrición 24 millones de personas que representan el 26.3% de la población total, que era una de las principales causas de muerte en el país, aunque según otras investigaciones, 45 millones de mexicanos no contaban con capacidad para cubrir los requerimientos mínimos alimenticios; más de 20 millones de mexicanos estaban en pobreza extrema (Méndez, 2013, p. 71). Debido a la injusticia social se han desarrollado diferentes manifestaciones por parte de la sociedad contra las políticas neoliberales, lo que se traduce en marchas, mítines, paros, protestas, huelgas de hambre y otro tipo de manifestaciones. Podemos concluir entonces que las políticas en ciencia y tecnología en nuestro país, bajo el neoliberalismo, han carecido de apoyos reales por parte del Estado. Con el simple ejercicio de evaluar los rasgos generales de la política estatal en este rubro, podemos encontrar un desfase total entre los objetivos anunciados y los resultados palpables, lo que demuestra esta falta de compromiso del Estado y la burguesía nacionales para emprender un proyecto de desarrollo con progreso autogenerado. Esto ha llevado al agotamiento del patrón neoliberal de acumulación al finalizar la presente década, como resultado de la crisis mundial del capitalismo, y en este contexto cabe preguntarse cuáles son los retos para México ante este desafío. Unidad 3/Pág. 8 Análisis del Estado Mexicano 3. REFORMA DEL ESTADO Y RELACIONES DEL ESTADO CON DIFERENTES ACTORES SOCIALES Los partidos políticos Los empresarios Las iglesias Las organizaciones civiles y los movimientos sociales Los medios de comunicación La reforma del Estado es una estrategia crítica que plantea redefinir los objetivos, los ámbitos, los mecanismos y las formas de la regulación estatal a partir de una evaluación previa por parte del gobierno. La reforma del Estado en México inicia con una crítica detallada del modelo intervencionista del gobierno. En el nivel económico denuncia la ineficacia del aparato productivo, la ineficacia del proteccionismo, la crisis fiscal y sus secuelas de endeudamiento, inflación, devaluación y disturbios financieros. En materia política, los esquemas de control corporativo están anquilosados, limitada la participación electoral y la dirección partidaria de los asuntos públicos, desorganizado el potencial de la movilización popular y pervertidos los objetivos de la representación política. En el nivel social se lamenta la desarticulación de redes sociales, la insatisfacción de las demandas básicas y el bajo nivel de vida de la población. Los motivos que han llevado al gobierno a realizar estos cambios son variados, según opinan los analistas. Luis Aguilar considera que las reformas en el Estado están relacionadas con las crisis fiscales, económicas y políticas por las que ha atravesado México desde 1977. Otros investigadores, como Carlos Elizondo y Benito Nacif, consideran que el proceso de reforma es resultado del proceso de construcción de corte democrático, caracterizado por un cambio sin ruptura en el orden institucional establecido, desde donde se han promovido cambios sustanciales en el modelo de desarrollo económico y político del país. Independientemente de los motivos, las reformas se han concentrado en cuatro líneas de acción: Unidad 3/Pág. 9 Objetivo del tema Examinar el proyecto de reforma del Estado en México y el papel de los distintos actores sociales dentro de él, a partir de las condiciones que enfrenta y los retos que debe abordar, con el fin de establecer las posibles áreas de intervención para el trabajador social. Análisis del Estado Mexicano 1. La reforma democrática que busca una mayor estabilidad democrática y mayor inclu- sión política. 2. La reforma judicial que busca el desarrollo de sistemas independientes de justicia, eficaces, confiables, ágiles y accesibles, sin discriminaciones de género o raza. 3. La reforma económica y social que planea desarrollar instituciones y políticas públicas que proporcionen las condiciones indispensables y el sistema de incentivos apropiado para lograr un funcionamiento eficiente y competitivo dentro de la economía global y la inclusión de amplios sectores de la población. 4. La reforma de la gestión pública relacionada con la administración pública y la necesi- dad de construir la plataforma institucional para la elaboración e implantación de polí- ticas públicas que respondan a los intereses generales de la sociedad, con subordina- ción plena a la legalidad. La efectividad y eficacia de las reformas dependen de los niveles de profundidad manifestados en los cambios en el redimensionamiento del Estado, la transformación en la relación política entre sociedad y Estado, así como entre poderes y cambio en las leyes fundamentales en tres niveles: A. Las reformas constitucionales, como las reformas del marco jurídico en el que se ri- gen las acciones del Estado, son transformaciones que consuman la acción de las re- formas, debido a que este tipo de cambios requieren mayor consenso, compromiso y lealtad de los partidos en el parlamento, pero además se debe integrar la participa- ción de los ciudadanos en la implantación de instrumentos de democracia directa que den mayor legitimidad a los procesos. B. Las reformas administrativas se enfocan en mejorar los procesos al interior de la ad- ministración pública, lo que produce cambios en las estructuras administrativas, en los procedimientos de decisión, en los instrumentos de selección del personal, así como en las relaciones con los ciudadanos. La profundidad de este tipo de reformas es intermedia y la más polémica, por la visibilidad de los recortes presupuestarios, de personal, de programas y empresas públicas que son sometidas a la desregulación administrativa, al comportamiento de la administración o a la concesión de la misma; por ello, los pactos sociales (entre empresarios, sindicatos, organizaciones sociales, etc.) son fundamentales para promover los compromisos con los afectados y mante- ner el consenso social. C. La reforma política busca la mejora en la relación Estado-sociedad a través de la legi- timidad de las acciones del Estado en la búsqueda de la modernización. Este tipo de reforma intenta garantizar la gobernabilidad a través de la ideación institucional de la relación Estado-sociedad civil, así como la interrelación entre poderes. Al mismo tiempo trata de establecer mecanismos de rendición de cuentas, de vigilancia y con- trol entre los responsables políticos y burócratas. En este tipo de reformas los parti- dos políticos y los distintos sectores sociales son los principales actores, debido a que al desarrollar sistemas electorales competitivos, transparentes, eficientes, represen- tativos, entre otros, permiten que la formación de gobiernos sea legítima y cuente con mayorías estables y leales. En México se han venido realizando reformas desde la década de los setenta en cada una de estas diferentes materias. Los gobiernos priistas y los panistas han enfatizado ciertas reformas en detrimento de otras, dependiendo de la coyuntura política, social o económica que les ha tocado vivir. Unidad 3/Pág. 10 Análisis del Estado Mexicano Los actores sociales En las reformas del Estado han participado diferentesactores: los partidos políticos, los empresarios, la sociedad civil, la iglesia, ideólogos, intelectuales, etc. Son muchos los personajes que han contribuido a los cambios, pero en este caso sólo retomaremos a algunos de ellos para analizar su incidencia sobre el Estado y los cambios que se han dado en su relación con el mismo. Los partidos políticos Imagen 1. Partidos políticos en México Es a través de los partidos que se expresan tanto intereses nacionales como particulares; su función es por lo tanto indispensable en una sociedad plural en la que los distintos grupos e intereses requieren de participación y representación. Los sistemas políticos plurales en condiciones de una lucha política en igualdad de oportunidades son los mejores catalizadores, y garantes de la democracia. El cambio del modelo democrático representativo en México se ha caracterizado, a diferencia de otros procesos de transición y alternancia en el mundo, como un cambio en el gobierno que se logró mediante el sufragio en las urnas de forma pacífica y sin que se diera un rompimiento del marco institucional vigente, producto también de numerosos procesos de negociación entre las fuerzas políticas e instituciones electorales que permitieron que el poder se sometiera al veredicto ciudadano en las urnas, logrando relativamente comicios más transparentes que en el pasado. La alternancia remite hoy a la existencia del poder compartido que exige la convergencia, el establecimiento de acuerdos y la corresponsabilidad en la tarea de gobierno entre las diversas fuerzas políticas. Actualmente el sistema de partidos en México necesita resolver diversos problemas y subsanar vacíos para hacer gobernable esta democracia incipiente; en este contexto la gobernabilidad es débil aún. El camino a la consolidación democrática en México es sinuoso y Unidad 3/Pág. 11 Análisis del Estado Mexicano la actitud de los partidos políticos no ha sido la más adecuada, por lo que ha sido muy criticada en la etapa de la transición, lo cual se relaciona con la ausencia de una cultura política sólida en el terreno de la competencia tan intensa que se vive en el país. En este nuevo escenario, los partidos, incluido el PRI, están transitando, aunque no necesariamente de buena manera, a una mayor maduración política. Pareciera que los partidos políticos no necesariamente son un actor en extinción, sino entes que se encuentran frente a un proceso de cambio, aun y cuando los votantes continúen dejando saber, de una manera u otra, que no están contentos con estos cambios. Se dice que los ciudadanos son leales a su partido, sólo con tal de que se sientan satisfechos con su desempeño; cuando dejan de estar satisfechos, pueden expresar su malestar con la intención de reformar el partido, pueden salir del partido, buscar otro partido que represente mejor sus ideas, o simplemente estar apáticos cuando no encuentran alternativa. Actualmente el mapa político mexicano muestra una clara tendencia de cambio en el poder; la alternancia tanto en elecciones a nivel federal como local es un hecho cotidiano. La diversidad de fuerzas e ideologías partidistas y la participación ciudadana ha sido el origen de este cambio, y lo que existe hoy es una clara situación de poder compartido, tanto en el ámbito local como en el federal en México; sin embargo, la democracia no puede reducirse al acto electoral: se trata de una forma de vida en colectividad, basada en el constante mejoramiento en todos los aspectos de la vida de una sociedad, lo que nos lleva a plantearnos nuevos horizontes con miras a mejorar la nuestra; es decir, un concepto nuevo que nos remita a la calidad de la democracia mexicana y con ello al papel de actores políticos fundamentales, como son los partidos políticos. Los empresarios Imagen 2. Empresas mexicanas Con la implementación del modelo neoliberal y el arribo de la tecnocracia al poder, se llevan a cabo reformas importantes en materia económica. Unidad 3/Pág. 12 Análisis del Estado Mexicano Se redefinieron los escenarios políticos para legitimar la reforma del Estado que hizo posible la instauración del modelo neoliberal. Este proceso fue respaldado por los empresarios. El nacionalismo, como se entendió en ese periodo, dejó de tener un efecto político en el discurso oficial, reflejando los preparativos para abrir las fronteras a la competencia internacional. Esto explica el carácter desnacionalizador, en la medida que el nuevo modelo económico descansa en la lógica que imponen los intereses del capital externo. El nuevo proyecto basado en el movimiento del capital privado y en la apertura económica que permite fluir libremente, no sólo las mercancías sino los capitales extranjeros. Por lo tanto, el nacionalismo del periodo anterior ha de ser adecuado al proceso de modernización que impone la reordenación de la cadena productiva a nivel internacional, rompiendo la lógica del proteccionismo económico. En México, la alianza tecnocracia-élites económicas, se sintetiza en un proceso de derechización que privó en los años ochenta y principios de los noventa. En 1975 la clase empresarial se rebeló contra el autoritarismo de la élite política. Será con el gobierno de Carlos Salinas de Gortari que la clase empresarial y el gobierno se reconcilien. Su decisión de consolidar el proyecto neoliberal le redituó la mayor fidelidad de las élites empresariales. En los noventa, esta clase es más madura y eso se nota en su presencia en el escenario político; apoya al gobierno cuando la coyuntura es favorable a la oposición y lo cuestiona cuando las decisiones gubernamentales, sobre todo económicas, no responden a la totalidad de sus demandas. Los empresarios son un actor político que cada vez tiene mayor presencia en el escenario nacional; son una fuerza social capaz de generar corrientes de opiniones favorables o negativas al sistema imperante, lo que los proyecta como un elemento político capaz de legitimar un modelo social desfavorable para las mayorías. Las iglesias Imagen 3. (s. a.). (s. f.). Ceremonia de bienvenida. Gobierno Federal [fotografía]. Tomada de http://www.opusdei.es/art.php?p=48169, consultada 13/06/2013 Las modificaciones a la constitución mexicana que forman parte del proyecto general de reforma del Estado, afectan las relaciones entre éste y la Iglesia. El proyecto, como se mencionó anteriormente, ha venido dándose desde mediados de la década de los ochenta, pero recibió mayor impulso en el gobierno de Carlos Salinas de Gortari. Unidad 3/Pág. 13 http://www.opusdei.es/art.php?p=48169 Análisis del Estado Mexicano Antes de las reformas, la Constitución negaba toda personalidad jurídica a las iglesias, privaba de derechos civiles y políticos a los ministros de culto, prohibía la crítica a las leyes y al gobierno, y toda injerencia del clero en la vida política del país. Afianzaba el laicismo en la educación, prohibiendo la enseñanza religiosa incluso en planteles educativos particulares. Ratificaba y ampliaba las disposiciones que impedían a la iglesia adquirir, poseer o administrar bienes raíces y capitales, y reiteraba prohibiciones en torno a manifestaciones externas del culto. Las reformas constitucionales modificaron los artículos 3º, 5º, 24, 27 y 130, lo que permitió: A las iglesias y agrupaciones religiosas que se constituyeran como asociaciones reli- giosas y se les reconoció personalidad jurídica. Desaparece la prohibición a las corporaciones religiosas o ministros de cultos de in- tervenir en planteles de educación primaria, normal y la destinada a obreros y cam- pesinos. Los ministros de cultos, como ciudadanos, tendrán derecho a votar, pero no a ser vo- tados. No podrán asociarse con fines políticos ni realizar proselitismo a favor o en contra de candidato, partido o asociación política alguna. Tampoco podránen reunión pública, en actos de culto o en publicaciones religiosas, oponerse a leyes del país y sus instituciones, ni rechazar los símbolos patrios. Podrán adquirir, poseer y administrar los bienes exclusivamente indispensables para sus fines. Mayor flexibilidad para las celebraciones y manifestaciones de culto externo. Con las reformas, el gobierno salinista buscó que la Iglesia fuera un aliado político y legitimador a nivel nacional. Estas reformas pueden verse como intento democratizador en el campo de las liber- tades religiosas y los derechos humanos, pero la vía de negociación fue tradicional, vertical y autoritaria. El Episcopado nacional ha recuperado su posición como interlocutor privilegiado del Estado, pero las diferencias en su interior siguen actuando. Al parecer, la Iglesia está dispuesta a utilizar todos los espacios que la nueva legislación le otorga para orientar a la opinión pública y contar con una mayor presencia social y política. Las organizaciones civiles y los movimientos sociales Imagen 4. (s. a.). (s. f.) .SME [fotografía]. Tomada de http://www.militante.org/tras-paro-11-nov-por-mayor- unidad-del-movimiento-obrero, consultada: 13/06/2013 Unidad 3/Pág. 14 http://www.militante.org/tras-paro-11-nov-por-mayor-unidad-del-movimiento-obrero http://www.militante.org/tras-paro-11-nov-por-mayor-unidad-del-movimiento-obrero Análisis del Estado Mexicano Para analizar la situación y las perspectivas de la sociedad civil y de los movimientos sociales en el México del presente, así como su relación con la democracia, es necesario resolver una aparente paradoja que se traduce en el hecho de que la sociedad civil en nuestro país está altamente organizada, al tiempo que son cada vez más frecuentes los movimientos que se producen por fuera de los canales organizacionales: marchas, movimientos de rechazo a acciones de política pública, resurgimientos identitarios y movilizaciones espontáneas de reclamos al Estado, entre otros; lo que a todas luces indicaría que las organizaciones existentes no logran canalizar los conflictos, porque tienen escasa legitimidad o porque no logran traducir los proyectos y las necesidades de la población. Además de resolver esta aparente paradoja es necesario analizar por qué la mayoría de estos movimientos sociales parece tener una característica defensiva, reactiva, que explica su escasa capacidad de vincularse a otros movimientos, convertirse en organizaciones sociales más permanentes y eventualmente traducirse en proyectos políticos. La aparición y desarrollo de los movimientos sociales en México ha pasado por diferentes etapas. Con la denominada transición a la democracia, en el 2000, se dieron cambios que impactaron en la organización de la sociedad. Frente al declive de las organizaciones corporativas y de los obstáculos eficaces que imponía el Estado al surgimiento de organizaciones categoriales autónomas y representativas, aparecieron cada vez más acciones que se producían fuera de los canales institucionales. Este proceso se acentuó una vez que se produjo la alternancia en la presidencia de la república; no obstante, las acciones que surgieron en esta coyuntura resultaron crecientemente defensivas, locales y radicales. Ante la ausencia de canales institucionales, en algunos casos como Oaxaca y Atenco, parecen más insurrecciones que movimientos sociales. El primer gobierno panista enfrentó un movimiento de rechazo a su proyecto de construcción de un nuevo aeropuerto para la ciudad de México, por parte de un grupo de campesinos de San Salvador Atenco. Hacia mediados del año 2001, luego de tomar la decisión de construir un aeropuerto en el valle de Texcoco, estado de México, el gobierno expidió un decreto para expropiar los terrenos necesarios para la obra, la mayoría de los cuales se encontraban en San Salvador Atenco, un municipio pobre del estado de México. Se pretendía expropiar 4550 hectáreas, pagando a los ejidatarios siete pesos por cada una. En contra de esta medida surgió el Frente de los Pueblos en Defensa de la Tierra (FPDT), que en un principio protestó por el bajo precio establecido para pagar por los terrenos, pero que pronto derivó en un movimiento de defensa de la tierra como medio de vida y como bien cultural, así como de autonomía política del municipio de Atenco. Después de varios meses de marchas y manifestaciones que costaron la vida a un militante, además de la expulsión del presidente municipal priista que se había mostrado dispuesto a negociar con las autoridades federales y del estado de México sin consultar a los habitantes, el gobierno federal canceló el proyecto. En las últimas dos décadas ha surgido con vigor otro tipo de organización social que no representa a un grupo, sector o intereses específicos de la sociedad, sino que se aboca al trabajo social y político en muy diversos ámbitos. Mientras que las organizaciones sociales categoriales permiten que la sociedad civil se exprese por medio de ellas, y los movimientos sociales definen una identidad con base en una acción sobre la sociedad, las Organizaciones de la Sociedad Civil (OSC) son formas de acción sobre la sociedad que no generan ni una identidad ni un proyecto de acción alternativo, sino que responden a necesidades de diversos grupos sociales, como mujeres, niños, ancianos, poblaciones marginadas, entre otros. Algunas de ellas se han orientado a la vigilancia electoral, a la del gasto público o a las políticas públicas. Unidad 3/Pág. 15 Análisis del Estado Mexicano Como resultado, las OSC fueron integradas en funciones gubernamentales en diversos sectores, como la educación, la salud, atención a mujeres y a los grupos marginados, y una cantidad considerable de dirigentes de estas organizaciones fue incorporada en funciones gubernamentales. En los últimos años ha surgido la idea de que ante la decadencia de la democracia representativa que se vive en prácticamente todos los países, y que se traduce en la baja representatividad de los partidos políticos y de los parlamentos, está surgiendo un nuevo tipo de democracia: una de tipo participativo, pero que no se expresa mediante la participación permanente de los ciudadanos en organizaciones sociales o políticas, sino como una participación puntual en tres dimensiones: en una práctica efectiva de contestación permanente, que se expresa como una presión difusa pero continua sobre los funcionarios electos. Surge un pueblo que vigila constantemente lo que hacen los políticos. Por otra parte, frente a la idea de democracia positiva, de propuestas, se ha instalado un tipo de democracia de veto, de rechazo, una soberanía social negativa, mediante la cual un sector o una parte del pueblo expresa su rechazo a un político o a una política. Finalmente, la democracia deviene cada vez más en la del pueblo juez, que se expresa crecientemente en términos jurídicos, por medio de la censura, ante tribunales, hacia ciertas decisiones de los gobernantes (Bizberg, 2013, p. 40). Los medios de comunicación Imagen 5. Medios de comunicación Con la presencia de los medios de información y las nuevas capacidades tecnológicas que han conquistado México a lo largo del siglo XX, con su amplia cobertura informativa, su gran penetración mental, su rápida capacidad de difusión, su enorme versatilidad semiótica, su gran perfeccionamiento técnico, etc., estos se han convertido en el centro del poder contemporáneo de nuestra nación. El funcionamiento de los medios ha atravesado la operación práctica de todas las instituciones sociales básicas para la dirección del país, al grado que ha substituido en algunos periodos o reubicado en otros a los órganos de administración social más débiles o que están en crisis de funcionamiento y legitimación. Unidad 3/Pág. 16 Análisis del Estado Mexicano Por ejemplo, ante la baja de credibilidadde la población en los partidos políticos, los órganos públicos y la Iglesia, la capacidad persuasiva y seductora de los medios ha construido nuevas credibilidades y hegemonías basadas en estrategias de mercado a partir del rating. Ante el panorama de creciente globalización cultural que ha experimentado la sociedad mexicana, debemos tener presente que por la irresponsabilidad que se mostró al no planificar con fines colectivos el uso de los medios electrónicos en las últimas tres décadas, la falta de voluntad política para formar desde los canales masivos una cultura para el desarrollo, la debilidad de los gobiernos poscardenistas para defender la cultura nacional, la complicidad de las autoridades públicas ante la penetración del proyecto transnacional en el terreno psíquico, la desarticulación global que vive el proyecto cultural gubernamental y el retiro sustancial de la presencia del Estado del campo de la comunicación colectiva para que ésta sea conducida mayoritariamente por el mercado, hoy el Estado mexicano ha perdido un enorme terreno para formar, a través de las industrias electrónicas, un fuerte nacionalismo, una sólida identidad y cohesión nacional que sirvieran como punto de despegue para el proyecto de crecimiento interno. Ante la privatización progresiva y el financiamiento crecientemente mercantil de los medios de comunicación públicos, hoy somos cada vez más testigos de la derrota del proyecto cultural del Estado y de la sociedad civil en el terreno cerebral para mantener y ampliar el programa de identidad y democratización nacional a través de la superestructura audiovisual de la república. La revolución tecnológica dirigida por el mercado ha sido gigantesca y la transformación jurídica sobre el marco comunicativo ha sido mínima, quedando enormemente retrasada frente al avance de la transformación informativa. El actual marco normativo con el que cuenta la sociedad mexicana en materia de comunicación corresponde a un contexto de realidad mediática de principios de siglo o, al menos, de la década de los cuarenta. De esta manera, las instituciones socializadoras más importantes de toda la estructura cultural del país para la formación, organización y movilización de las conciencias nacionales, han funcionado durante varias décadas en enormes lagunas jurídicas que han propiciado la realización de todo tipo de abusos, violaciones y deformaciones culturales, económicas, políticas, sociales, informativas y espirituales, desde los medios de comunicación electrónicos. Una de las principales deformaciones ha sido la práctica del Poder Ejecutivo para otorgar discrecionalmente las concesiones de radio y televisión nacionales o para el manejo de la información comunitaria que equivale a casi un poder virreinal. La sociedad civil se ha organizado vía foros, seminarios y consultas públicas, para realizar las propuestas de reforma al Estado, pero han sido menospreciadas o desconocidas por él. Con ello, una vez más, vuelve a surgir la profunda desilusión y desencanto de la sociedad civil para considerar que los espacios de “apertura” que ha creado el Estado sean los conductos viables para la transformación de los medios de comunicación nacionales. Ante este horizonte de cerrazón estatal para la democratización informativa, nos enfrentamos al delicado panorama político, en el que los grandes grupos sociales no cuentan con espacios de expresión para dar a conocer sus necesidades, problemáticas, demandas y soluciones. Frente a ello, se observa la tendencia creciente de que los movimientos sociales en emergencia continúan creando sus propios procesos clandestinos de comunicación colectivos, que derivarán, tarde o temprano, en la construcción de un nuevo Estado Unidad 3/Pág. 17 Análisis del Estado Mexicano ampliado paralelo al oficial, con el consecuente acrecentamiento de nuestra crisis de hegemonía nacional. Resumen Los cambios experimentados en el país en los últimos 30 años han generado profundas transformaciones estructurales, económicas, políticas y culturales en el México de hoy. Es importante mencionar que los cambios realizados en la esfera económica fueron efectuados por las élites gobernantes sin el concurso de la sociedad, en tanto que los relativos al mundo de la política han sido el resultado de un lento pero consistente proceso de participación y reclamo ciudadano. Así, el viraje de un modelo económico basado en el proteccionismo y la intervención del Estado, a uno cuyo eje articulador es el mercado mundial y la disminución de la competencia del Estado, fue una imposición; mientras que el tránsito de un sistema político de partido oficial casi monopólico a uno multipartidista de competencia real, fue una conquista a partir de una creciente organización y participación de diversos actores sociales. Sin embargo, el punto de convergencia de dichos cambios –los impuestos y los conquistados– es la poca o nula incidencia en la elevación de los niveles de bienestar de la población, lo que ha generado una gran irritación social por las injusticias y el aumento de la pobreza por un lado, y por otro un creciente desencanto, porque la democracia no vino aparejada con beneficios materiales y certidumbres existenciales. En este sentido, el papel desempeñado por los partidos políticos ha sido cuestionado por amplios sectores sociales, y el entramado de relaciones entre el Estado y diversos actores de la sociedad se diversificó: los empresarios, las iglesias, la sociedad civil organizada y los medios de comunicación, juegan actualmente un papel cada vez más protagónico. Unidad 3/Pág. 18 Recuerda revisar los materiales que se indican en las instrucciones para realizar tus actividades de aprendizaje. Recuerda revisar los materiales que se indican en las instrucciones para realizar tus actividades de aprendizaje. Análisis del Estado Mexicano Glosario Alianza Estado en que se encuentran dos o más individuos o grupos que se unen generalmente frente a una oposición actual o potencial. Anarquía Designa en primer lugar la situación de un pueblo que no tiene gobierno o cuyo gobierno no tiene o ha dejado de tener autoridad necesaria para ser el árbitro de los antagonismos políticos, económicos y sociales. En su límite, este estado social se define por la ausencia de toda ley y de todo gobierno (Alvarado, 2008, p. 209). Ciudadanía Puede ser definida como un conjunto de derechos y deberes que hacen del individuo miembro de una comunidad política, a la vez que lo ubican en un lugar determinado dentro de la organización política, y que finalmente inducen a un conjunto de cualidades morales (valores) que orientan su actuación en el mundo público. Visto así, comprende tres dimensiones: una procedimental, que se refiere al conjunto de derechos y mecanismos para su ejercicio; una de carácter situacional (o locativa), que implica a la vez un aspecto relacional; y una moral, que tiene que ver con el conjunto de ideas acerca de la vida pública y con los valores que orientan el comportamiento (Alvarado, 2008, p. 209-210). Consenso Grado de aceptación de las reglas comunes y de la voluntad de resolución de los conflictos. Toda la sociedad supone un consenso mínimo para perpetuarse, pero algunas se caracterizan por un grado de consenso más o menos elevado. Por debajo de cierto nivel de consenso hay desintegración social (Alvarado, 2008, p. 210). Institución Es un conjunto de actos, o de ideas y de creencias, que los individuos ven que se les imponen en una sociedad dada. Administrativamente, toda institución tiene normas, actividades propias, personal y aparato material. Todas estas nociones implican la función, porque la institución está destinada a satisfacer una necesidad (Alvarado, 2008, p. 211). Participación social y política Se refiere al hecho de que determinados sujetos tomenparte de manera consciente en la interacción político-social. Puede hacer alusión a los grupos informales o a las agrupaciones constituidas. En estos últimos existe una identificación más completa de la personalidad con el grupo, debido a los sentimientos compartidos de afección, lealtad, responsabilidad mancomunada o tradición (Alvarado, 2008, p. 211-212). Pluralismo Concepción que sostiene la existencia de una multiplicidad de totalidades, de ideas, de valores y de escalas estimativas irreductibles entre sí y equivalentes, así como la de las experiencias en que se captan. Es uno de los principios fundamentales de la vida democrática, porque implica el reconocimiento de la diferencia (Alvarado, 2008, p. 212). Unidad 3/Pág. 19 Análisis del Estado Mexicano Reforma Movimiento general que trata de eliminar o mitigar los males derivados del funcionamiento defectuoso del sistema político-social o de cualquier parte de él (Alvarado, 2008, p. 212). Reformismo Defensa del cambio social por medio de mejoras graduales y fragmentarias, de tal naturaleza que conserven y fortifiquen el status quo (Alvarado, 2008, p. 212). Representación Es la expresión de la voluntad general a través del depositario del poder. En las sociedades modernas la democracia no puede ejercerse de manera directa; por ello, el poder se ejerce a través de representantes, y actualmente la representación política advierte como necesidad establecer un vínculo mayor y más concreto entre gobernantes y gobernados. Este vínculo se entiende como adecuación y correspondencia entre una sociedad y su régimen político. De ahí la idea de que las acciones de gobierno reflejan las demandas sociales (Alvarado, 2008, p. 212). Ricardiano Es un término relativo al economista británico David Ricardo, que evoca su teoría de los costos comparados, la cual señala que los países disponen de recursos de manera desigual, por lo que deben especializarse en la producción de aquello para lo que están mejor dotados, a fin de concurrir libremente al mercado mundial. Transición Hace referencia a un proceso de cambio, mediante el cual un régimen preexistente, político y/o económico, es remplazado por otro, lo que conlleva a la sustitución de valores, normas, reglas de juego político e instituciones asociadas a éste. Ello implica que las transformaciones no siempre se circunscriben a transformaciones políticas, sino también pueden afectar otros ámbitos (Alvarado, 2008, p. 213). Unidad 3/Pág. 20 Análisis del Estado Mexicano Fuentes de información BÁSICAS Alvarado, S. (2008). Apuntes para el análisis del Estado. Una introducción al estudio del Estado. México: UNAM/Porrúa. COMPLEMENTARIAS Aziz, A. y Alonso, J. (Coords.). (2005). El Estado mexicano. Herencias y cambios (tomo I y III). México: Porrúa/CIESAS. Bizberg, I. (2014). Una democracia vacía. Sociedad civil, movimientos sociales y de- mocracia. México: Colegio de México. Consultado el 03 de marzo de 2014 de http://cei.colmex.mx/PDFs/Prof%20Bizberg/Movimientos.pdf Bizberg, I. y Zapata, F. (Coords). (2010). Los movimientos sociales. En Los grandes problemas de México. México: Colegio de México. Consultado el 03 de marzo de 2014 de http://2010.colmex.mx/16tomos/VI.pdf CNN Expansión. (2013, 20 de marzo). Economía informal ‘el coco’ de reformas. Con- sultado el 03 de marzo de 2014 de http://www.cnnexpansion.com/economia/2013/03/20/economia-informal-el-coco-de- reformas Esteinou, J. (2000). Globalización, medios de comunicación y cultura en México a principios del siglo XXI. Ámbitos, 5, 7-49 (2º semestre de 2000). Consultado el 03 de marzo de 2014 de http://grupo.us.es/grehcco/ambitos05/esteinou.pdf Méndez, J. S. (2014). El neoliberalismo en México: ¿éxito o fracaso? México: UNAM. Consultado el 03 de marzo de 2014 de http://www.ejournal.unam.mx/rca/191/RCA19105.pdf Preston, J. y Dillon, S. (2004). El despertar de México. Episodios de una búsqueda de la democracia. México: Océano. Unidad 3/Pág. 21
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