Actividad 3 - Andrea Lozano (1)

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Conceptualización del diagnóstico en el trabajo social 
• Definición de diagnóstico social: 
El diagnóstico social es un proceso que consiste en sintetizar, interpretar y conceptualizar 
la naturaleza y magnitud de las necesidades sociales, incluyendo sus efectos, génesis y 
causas personales y sociales. Es esencial en el proceso metodológico del Trabajo Social, 
ya que las intervenciones y resultados dependen de una adecuada interpretación y 
definición conceptual de las causas de las necesidades sociales. 
• Objeto del diagnóstico social: necesidades sociales básicas: 
El objeto del diagnóstico social es considerar tanto los aspectos individuales como 
estructurales que pueden generar y configurar situaciones de necesidad social. La teoría 
de las necesidades sociales básicas es un concepto teórico que permite integrar los 
aspectos individuales y estructurales, y así se puede conceptualizar situaciones sociales 
concretas. Las necesidades sociales básicas se dividen en cuatro categorías: integridad y 
supervivencia, integración social, autonomía personal e identidad personal y social. 
• Categorías de las necesidades sociales básicas: 
La primera categoría de necesidades sociales básicas se refiere a la integridad o 
supervivencia, que son aspectos materiales esenciales para la reproducción de la vida 
humana, como la alimentación, el abrigo, la salud, la suficiencia económica y la seguridad. 
La segunda categoría es la inclusión o integración social, que se refiere a la integración en 
la sociedad a través de la estabilidad laboral y relaciones sólidas con la familia y la 
comunidad. La falta de inclusión lleva a la exclusión social, que es la incapacidad de encajar 
en las formas dominantes de organización del trabajo y pertenencia comunitaria. La tercera 
categoría es la autonomía personal, que se refiere a la capacidad de controlar y tomar 
decisiones sobre la propia vida. Finalmente, la cuarta categoría es la identidad personal y 
social, que se refiere a la capacidad de tener una identidad coherente y positiva en relación 
con uno mismo y con la sociedad. 
Diagnóstico social. 
El diagnóstico social es un proceso que se utiliza para entender y analizar la realidad social 
de un determinado contexto, a través de la recopilación y análisis de información cualitativa 
y cuantitativa. Este proceso busca identificar las necesidades, problemas y potencialidades 
de una comunidad o grupo social, con el fin de diseñar e implementar políticas y programas 
que respondan de manera efectiva a las demandas y necesidades de la población. 
 
El diagnóstico social es una herramienta clave para el trabajo de los profesionales del área 
social, ya que les permite obtener una visión más completa y precisa de las problemáticas 
que afectan a una determinada población. Además, permite diseñar estrategias y 
programas de intervención más eficaces y adecuados, que se ajusten a las necesidades 
específicas de cada comunidad o grupo social. 
 
El proceso de diagnóstico social consta de varias etapas, que incluyen la recolección de 
información, el análisis de datos y la identificación de las principales necesidades y 
demandas de la población. En la primera etapa se lleva a cabo la recopilación de 
información, a través de diferentes técnicas como encuestas, entrevistas, grupos focales y 
observación directa. Esta información es procesada y analizada en la segunda etapa, con 
el objetivo de identificar las principales problemáticas y demandas de la población. En la 
última etapa se elabora un informe de diagnóstico, que incluye las conclusiones y 
recomendaciones para la elaboración de políticas y programas de intervención. 
 
El diagnóstico social puede ser utilizado en diferentes ámbitos, como la salud, la educación, 
la vivienda, el trabajo social, entre otros. En cada uno de estos ámbitos, el diagnóstico social 
tiene un enfoque específico, pero su objetivo fundamental es siempre el mismo: identificar 
las necesidades y demandas de la población, y diseñar estrategias y programas de 
intervención que respondan a esas necesidades. 
 
Uno de los mayores beneficios del diagnóstico social es que permite a los profesionales del 
área social trabajar de manera más efectiva y eficiente, ya que les proporciona una visión 
más completa y precisa de la realidad social de una determinada población. Además, el 
diagnóstico social contribuye al fortalecimiento de la participación ciudadana, ya que implica 
la consulta y el involucramiento de la población en el proceso de diagnóstico y en la toma 
de decisiones en la implementación de políticas y programas. 
 
En conclusión, el diagnóstico social es una herramienta fundamental para el trabajo de los 
profesionales del área social, que les permite comprender la realidad social de una 
determinada población y diseñar estrategias y programas de intervención que respondan a 
las necesidades y demandas de la población. El uso del diagnóstico social contribuye a 
fortalecer la participación ciudadana y a mejorar la eficacia y eficiencia de las políticas y 
programas de intervención social. Por lo tanto, el diagnóstico social es una práctica esencial 
para el desarrollo de una sociedad más justa y equitativa.