Composición II- Fotografía I- UNC

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Composición II: Elementos básicos y evolución
Ubicación de los objetos
Para resaltar el punto de interés y guiar la mirada del espectador, lo más común
es hacer que el punto de interés predomine en el encuadre, teniendo cuidado de
que otros objetos no llamen la atención como este. Por esto, y porque resulta
incómodo a la vista, se busca que
un objeto de interés no tape a
otro, a menos que tenga un
sentido narrativo.
Hay que tener en cuenta que si
bien lo importante es la ubicación
de la parte esencial del objeto
(como en un personaje, su rostro),
también en importante las demás
direcciones que se pueda marcar
con el resto del cuerpo y objetos,
así como otros elementos o
personajes que tengan cierta preponderancia en la composición.
Ya sabiendo cuál es el punto de interés… ¿Cómo saber cómo ubicarlo?
Ley de la mirada: Nos señala que si el objeto o personaje está ubicado en un
extremo del cuadro, y se encuentra mirando hacia ese mismo lado, el resto del
espacio pierde importancia y nos deja una composición desbalanceada.
Sin embargo, si el personaje o el objeto estuviera a un lado del cuadro, pero se
encontrará mirando hacia el opuesto, el encuadre le estaría dando importancia
al espacio donde nuestro personaje observa y donde fija su interés, siendo esto
mucho más interesante. Nos da una composición más balanceada.
A veces, se opta por seguir al personaje u objeto cuando este gira o cambia de
dirección para mantener esta composición.
Un encuadre balanceado correctamente tanto vertical como horizontalmente, se
asegura de tener una buena cantidad y bien balanceada de espacio negativo.
Además, que le da a la imagen y al espectador espacio para respirar, evitando
transmitir una sensación indeseada de encierro.
Regla de los tercios: Técnica de composición visual pensada para crear una
imagen balanceada y placentera a la vista, evitando que el centro de interés
corte a la imagen por la mitad o quede en el centro del cuadro, dando una
sensación de simetría que no se está buscando.
Esta técnica consiste en dividir el espacio en tres tercios, verticales y
horizontales, generando lo que
denominamos los cuatro puntos de
interés (o intersección). Sobre estas
líneas, y sobre todo sobre estos
puntos, es dónde deberíamos ubicar
lo que queremos que se destaque en
la imagen.
Si tenemos dos objetos de interés, se suelen ubicar cada uno en un punto de
intersección e, idealmente en diagonal, para así distribuir el peso
equitativamente entre la mitad inferior y superior de la composición. También,
pueden agruparse los objetos de interés y ser tratados como uno solo a la hora
de componer el cuadro.
Estas líneas son guías y no es necesario que el objeto de interés coincida
religiosamente con las líneas y puntos de esta regla.
Sin embargo, algunos consideran que la regla de los tercios es demasiado
estática, y para esto utilizan la...
Simetría dinámica: Primero se traza una
línea diagonal entre las esquinas del
encuadre y a ésta se la atraviesa con una
línea perpendicular (a 90°) que se conecte
con una esquina del cuadro, y el resultado,
es un punto de interés en la intersección de
ambas.
Si hacemos lo mismo con la esquina restante, se obtiene otro punto de interés y
luego, es cuestion de repetir la misma operación con la diagonal principal
opuesta, obteniendo así los 4 puntos claves de la imágen (que no son los mismos
obtenidos en la ley de los tercios).
Estas no son composiciones perfectas y estables pero al apoyarse sobre las
líneas diagonales, llaman más la atención, marcan mejor la perspectiva, y
resultan más dinámicas a la hora de señalar la dirección de los elementos de la
composición.
Composición áurea: Creado a partir de un patrón de números y medidas
basados en el espiral áureo o espiral de fibonacci, la cual se asocia con una
imagen bella y puede encontrarse en varios objetos de la naturaleza.
La regla de los tercios, es una simplificación de la proporción áurea, a menos que
se siga el espiral de fibonacci muy marcadamente, en este caso, la composición
áurea suele dar un resultado muy distinto que no se puede obtener mediante la
regla de los tercios.
La regla de los impares: tener un único personaje en la imagen puede dar la
sensación de soledad o aislamiento y dos elementos pueden generar una
composición demasiado estática, donde ambos tengan un peso casi idéntico y
ninguno se destaque sobre el otro, pero si hay 3 elementos, se creará un centro
entre ellos.
Una mayor cantidad de elementos pares, puede ser difícil de distribuir en un
espacio ya que siempre será un número divisible y el cerebro tiende a formar
patrones y hará segmentaciones, dándonos como resultado una imagen dividida
y organizada conceptualmente de una manera que, tal vez el realizador no desea.
En cambio si se tienen un número impar de objetos de interés, esta división
conceptual no sucederá y la imagen se verá un poco más organizada y orgánica.
4 objetos de interés 3 objetos de interés.
Composición simétrica y centrar el objeto de interés: La simetría puede
emplearse de diferentes maneras:
-Wes Anderson: por ejemplo, la utiliza en toda su película como un recurso
estilístico y estético.
-Kubrick: decide emplearla sólo para aquellas tomas de preponderancia
narrativa.
Sin embargo, por más que no se esté empleando una composición simétrica
puede que se necesite ubicar el centro de interés en el centro de todos modos
pues así el punto de interés queda claro y el espectador no tiene que andarlo
buscando por el cuadro.
Ej: Secuencias de montajes de Edgar
Right.
Peso y Fuerza: Si un punto de interés queda bastante alejado de otros elementos
en el cuadro puede dejar un vacío en la escena entonces se opta por balancear la
imagen con otros objetos rellenando el espacio o “aire” que genera esa sensación
de vacío indeseada. Podemos recurrir a esto, también cuando un objeto está
llamando más atención de la necesaria, opacando al objeto de interés.
Utilizamos el recurso de equilibrar y balancear el peso de la composición para
que el punto de interés deseado tenga la fuerza y presencia que necesita para
destacar en el cuadro.
Los 4 esquemas de composición de Arnheim
-centrales: Poseen un único punto fuerte, y son el esquema más parecido al
clásico de figura y fondo. Puede referirse a algo tan sencillo como un retrato.
-binarios (simétricos): Presentan un dúo de figuras o grupos y son típicos de las
composiciones simétricas.
-jerárquicos: Constituidos por
acentos que van de fuerte a débil
relacionados de manera
subordinada.→→ejemplo:→→
-atonales: Podemos encontrar
muchos elementos de igual peso
que se homogeneizan creando una
unidad centrada en la textura.
Las leyes de la percepción de la Gestalt: Los psicologos de la Gestalt estudiaron
los distintos estímulos que generan las sensaciones y la percepción en la mente,
formando así las llamadas “leyes de la percepción”:
-ley de figura-fondo (ya hablado anteriormente).
-ley de simetría (ya hablado anteriormente).
-principio de proximidad: dice que la mente
agrupa perceptualmente los elementos que se
encuentran cerca unos de otros.
-principio de continuidad: los elementos que se agrupan de forma contínua, sea
en líneas rectas o curvas, tienden a percibirse también como una unidad.
-principio de identidad o semejanza: los elementos se agrupan por
características análogas, es decir, en base al color, tamaño. forma u otros
elementos visuales.
-repetición como elemento unificador.