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Licenciatura en Educación Infantil Bolívar Bojanini Antuaneth Paola Buzón Valencia Karolayn Mejía Fonseca Marianys Rambao Pacheco Hernando José Trastornos Específicos del Aprendizaje Bases Neuropsicopedagogicas del Aprendizaje Profesor: José Manuel Floyd Quintero Noviembre, 29 del 2022 Los trastornos específicos del aprendizaje (TEA) están catalogados en los manuales de identificación de condiciones de salud mental, como trastornos del neurodesarrollo. Se entiende que los trastornos del neurodesarrollo son condiciones que tienen un origen biológico que explica el origen de las dificultades a nivel cognitivo y/o conductual. Cuando se habla de trastornos específicos del aprendizaje claramente se aplica de forma general a todos los problemas que plantean obstáculos al rendimiento académico o escolar. Un niño que presenta “problemas escolares” cuando sus resultados pedagógicos están por debajo de sus capacidades intelectuales. Cuando la inteligencia de los niños es promedio, pero el rendimiento en los test que miden la lectura, las matemáticas o la escritura, está por debajo del nivel esperado, por inteligencia, edad y escolaridad, estamos ante trastornos específicos del aprendizaje. Los TEA pueden manifestarse en al ámbito de la lectura, matemáticas y escritura y son típicamente llamados dislexia, discalculia y disgrafía, respectivamente. Están presentes en alrededor del 5 al 17% de los niños en edad escolar4-6. Su presencia en adultos no es menor reportándose una prevalencia aproximada del 15 al 23% en esta población. Su impacto no se limita al ámbito escolar pues repercuten en numerosas áreas de la vida cotidiana, con efecto sobre las oportunidades laborales y educativas de las personas. Por lo tanto, es necesario comprender cómo se manifiestan, así como las estrategias de identificación e intervención tempranas para disminuir su impacto. Estos trastornos tienen una afectación directa en áreas de aprendizaje relevantes en términos educativos, cuando hablamos del trastorno específico de la lectura, nos estamos haciendo referencia a la dislexia y esta se ve reflejada cuando afecta la capacidad de comprensión de lectura, el reconocimiento de palabras leídas, la capacidad de leer en voz alta y el rendimiento en actividades que requieren leer. Por otro lado encontramos un trastorno específico del aprendizaje llamado disgrafía cuya característica principal es un déficit específico y significativo del dominio de la ortografía destacando que puede ser en ausencia de antecedentes de un trastorno específico de la lectura y que no es explicable por un nivel intelectual bajo, por problemas de agudeza visual o por una escolarización inadecuada, pues en este se ven afectadas la capacidad de deletrear en voz alta y de escribir las palabras correctamente. Por último, se sitúa aquellas capacidades de orden aritmético o, dicho de otro modo, matemático. Este trastorno caracterizado y/o llamado discalculia se da por una alteración específica de la capacidad de aprendizaje de la aritmética, enfatizado en los conocimientos aritméticos básicos de adición, sustracción, multiplicación y división Su etiología no es conocida, pero se acepta el predominio de los factores biológicos, en interacción con otros como las oportunidades para aprender y la calidad de la enseñanza. La escuela es un factor para considerar, los trastornos no pueden reducirse puramente a errores pedagógicos. Si bien es cierto, la lectura, escritura, matemáticas resultan ser unas estrategias y grandes beneficios dentro del estudio, por lo que son claves fundamentales necesarias en el entorno escolar y vida cotidiana, pero es válido afirmar que estás pueden llegar a convertirse en un intrincado laberinto para los niños, por lo demás normales en otros aspectos de su desarrollo evolutivo. Es por ello que muchas veces dentro de la escuela convergen muchos términos, habilidades, competencias, metodologías, paradigmas, ¿Pero en qué momento se habla de los trastornos tan fácilmente como los anteriormente mencionados? Ciertamente debería tener la misma o igual relevancia en el vocabulario educativo. Sin embargo, se habla de inclusión y de diversidad ¿pero que se está haciendo desde el ámbito educativo se pueda transformar esta dificultad en una posibilidad?, es que hablar de un trastorno es referirnos a una perturbación o desorden que altera el funcionamiento normal de una persona o de una situación. Desde este punto es considerable hablar de los trastornos específicos del aprendizaje, una situación que está presente en las aulas de clase, pero también inmersa en nuestra sociedad de manera silenciosa, es tan habitual acercarnos a un aula de clase y notar un mundo de saberes en el cual cada mundo es un niño, por lo tanto es la docente esa guía de esa exploración en la cual los niños sacarán a luz sus más grandes tesoros, todo esto suena muy lindo pero la realidad desde otro punto es ¿ Que sucede cuando el niño (a) no responde a lo que el docente espera?. Todo docente debería aprender a leer los comportamientos de sus estudiantes, pues muchas veces al ignorar comportamientos, características diferentes o fuera de lo habitual estás pueden llegar a concluirse cómo distraídos o que no rinden académicamente y por ende se ve reflejado en sus calificaciones. Esto debería alarmar a un docente no podemos calificar siempre de desanimados o ausentes a los estudiantes sin tocar un tema tan importante como los son los trastornos de aprendizaje Roselli los define como las dificultades que suelen manifestarse en los procesos de aprendizaje de aquellos individuos que no mantienen el ritmo promedio de sus semejantes; cabe resaltar que este tipo de problemas no son exclusivos de los niños y niñas en edad escolar, sino que también se pueden presentar en cualquier momento de la vida. Aprender puede significar algo complejo para muchos estudiantes, es por ello que como docentes debemos reconocer los ritmos de aprendizajes que lleva cada uno de ellos, se requiere de dedicación y paciencia, de crear estrategias que permitan desarrollar el interés en los estudiantes y que para ellos no sea complejo ni parezca una limitación el llevar a cabo actividades que serán favorables y de gran ayuda para la estimulación y así puedan desarrollar habilidades y confianza en ellos mismos. En conclusión, el papel desde la educación y la tríada educativa como lo son la familia, escuela y sociedad es aliarse desde la labor docente innovar, evaluar y prepararse para tener las herramientas necesarias y fortalecer estás dificultades en sus estudiantes y por parte de la familia apoyar en las actividades o propuestas desde la educación para generar interés en los hogares, de ser así seguramente se logrará en estos niños un desarrollo en su parte emotiva y cognitiva positiva. No se debe olvidar que antes que impartir conocimientos, la escuela debe procurar que sus educandos sean felices, y esa felicidad radica en el apoyo que desde ella se les brinde a aquellos con problemas en su aprendizaje. Bibliografía - José Pablo Escobar y Marcela Tenorio (2022) Trastornos específicos del aprendizaje: origen, identificación y acompañamiento. - Ramírez, C. (2011) Problemáticas de Aprendizaje en la Escuela. Corporación Universitaria Iberoamericana. Volumen 13. Nº 1. págs. 43-51
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