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2 do parcial: PSICOPATOLOGÍA:
MÓDULO III LECCIÓN N° 2 PSICOPATOLOGÍA GENERAL I:
¿Qué es lo normal y qué es lo anormal?
Definir que es la normalidad, nos centra de lleno en una posición poco cómoda, pero de
debate profundo. Se habla muchas veces de lo normal, como normalidad estadística, también
se habla de una normalidad ideal y se podría considerar una normalidad dentro de la
anormalidad. 
Tanto es así, que la psiquiatría plantea la existencia de una estructura psíquica que se
asemeja a la "perfección psicológica" y la denomina "neurosis normal".
No obstante, considera que toda persona posee aspectos inconscientes fuera de su voluntad,
que no deja de presentarnos inconvenientes, zonas oscuras que nuestro “yo” organizado
intenta equilibrar.
La normalidad, entonces, no existe, es una creación dentro de las posibilidades dadas y de las
adquisiciones conquistadas.
Clásicamente, la Psicopatología diferencia cuatro grandes cuadros: 
 Neurosis. 
 Psicosis. 
 Psicopatía.
 Cuadros neuropsiquiátricos.
1. Neurosis:
La persona neurótica plantea dos aspectos clínicos esenciales: Puede aparecer, por un lado,
como un ser débil, inhibido, inseguro, producto del malestar del yo que busca su unidad y su
identidad. Otras veces el yo neurótico aparece como un personaje complicado que se define a
sí mismo por medio de ideas y conductas paradójicas. De este modo, el neurótico es siempre,
o casi siempre, un ser cuyo carácter es patológico, con una disposición general a la angustia,
a la introversión, a los escrúpulos. 
Una de las características más importantes de las neurosis es que son trastornos originados
por "traumas" psicológicos. De acuerdo con el modelo teórico psicodinámico, las neurosis
surgen como consecuencia de conflictos intrapsíquicos que son reprimidos por inaceptables y
dolorosos para el sujeto. La angustia es el común denominador en todas las variantes en que
se presentan los cuadros neuróticos. De este modo, se convierte en “la fuente dinámica
común de las neurosis".
Para el neurótico, los problemas de la coexistencia con el otro son insolubles o por lo menos
no resueltos. Este malestar frente a sí mismo y frente a los otros, es experimentado como
angustia. En ella, se mezclan los sentimientos de vergüenza, de culpabilidad, el deseo de
castigarse, la frustración de las decepciones, los complejos de inferioridad, etc. 
Estos son los aspectos clínicos característicos del carácter neurótico, en que la persona se
debate consigo misma en una situación continua de conflicto interior. La defensas o
procedimientos destinados a neutralizar la angustia determinan diversos tipos de neurosis.
Según las defensas que utilicen los individuos contra la angustia, las neurosis se van a
clasificar de la siguiente manera:
Neurosis Histérica
Neurosis Obsesiva 
Neurosis Fóbica
1.1. Neurosis histérica:
La histeria se manifiesta a través de trastornos somáticos (pérdida o distorsión de una función
corporal), en cuya base no existe substrato orgánico alguno que los explique.
Ejemplo: El conflicto de distintas instancias psíquicas en la personalidad histérica se puede
resolver a través de la parálisis de una pierna, sin que haya una causa orgánica que justifique
esta sintomatología.
1.2. Neurosis fóbica:
La neurosis fóbica es definida como una alteración en la cual el rasgo psicopatológico esencial
es el miedo excesivo, persistente e irracional a un objeto.
Por ejemplo, el miedo a los animales (fobias simples o específicas) el miedo a una actividad
como hablar en público (fobias sociales) o el miedo a una situación específica como estar solo
en lugares públicos (agorafobia).
Las fobias conducen al individuo afectado a evitar el objeto, la actividad y la situación
temidos, imponiéndole al individuo una serie de limitaciones a su vida cotidiana. Dicho temor,
además, es reconocido por el propio sujeto como excesivo e irracional y produce cierto grado
de deterioro social y laboral.
1.2. Neurosis obsesivo-compulsiva:
La neurosis obsesivo-compulsiva (o trastorno obsesivo compulsivo) es una afección cuyos
síntomas predominantes son las obsesiones y compulsiones. Las obsesiones son ideas o actos
absurdos, indeseados, que se imponen a la conciencia del sujeto en contra de su voluntad y
que determinan intensas manifestaciones de angustia. Las compulsiones son actos repetitivos
que, al igual que las obsesiones, están fuera del control voluntario del sujeto.
Por ejemplo, una persona que se lava las manos antes de hacer algún acto, puede ser una
persona limpia, ahora si la persona dice:” Considero entupido lavarme las manos, porque
cuando tomé la servilleta pensé que la servilleta a su vez había sido traída por el mozo que la
toco y tal vez él no se lavó las manos, etcétera”, todo eso es lo obsesivo.
Para la teoría del aprendizaje, las neurosis son pautas patológicas de conductas, aprendidas
que surgen cuando el individuo se ve enfrentado a estímulos psicológicos dolorosos e
intolerables y, desde luego, se ve obligado a reaccionar ante ellos. 
En el DSM-IV, Manual de Clasificación de las Enfermedades Mentales de la Organización
Mundial de la Salud (OMS), la neurosis no es definida como enfermedad mental, aunque
incluye en este trastorno las siguientes enfermedades: crisis de angustia, trastorno de
ansiedad generalizada, fobias, trastorno obsesivo compulsivo, etc.
Es una afección de la personalidad, de naturaleza psicógena leve, sin base orgánica conocida.
Sin perturbación del sentimiento de realidad y sin desestructuración de la personalidad. Esta
última condición determina que la persona neurótica posea conciencia de enfermedad.
Consciencia de enfermedad y Situación ante la Ley:
De este modo, la neurosis no se considera una enfermedad mental que prive al individuo de
discernimiento para llevar a cabo sus acciones.
El neurótico posee consciencia de enfermedad. Por lo tanto, si la persona puede comprender
la criminalidad de sus actos y comete un hecho punible no se lo exime de responsabilidad
penal, es imputable ante la ley.
La responsabilidad jurídica se basa en la condición psíquica de un individuo. Esta condición
puede o no privar al individuo de discernir sus actos. 
Cuando comprende la criminalidad de sus actos el individuo es imputable ante la Ley. Cuando
a consecuencia de una enfermedad mental grave existe una perturbación de la conciencia
que le impide comprender la criminalidad de sus actos el individuo es inimputable.
2. Psicopatía:
En Psiquiatría se conoce esta entidad como Trastorno de la personalidad
antisocial.
Algunas teorías definen la psicopatía como una forma de ser, una mala forma de ser anormal.
Por consiguiente, no es una enfermedad. Al ser considerados “anormales” y no enfermos, su
tipificación corresponde a lo descriptivo y no al diagnóstico médico. En consecuencia, no son
pasibles de tratamiento, es decir, el psicópata no está psicópata, “es” psicópata.
¿Cómo reconocemos al psicópata?:
Hugo Marietán, uno de los psiquiatras contemporáneos que más ha trabajado este tipo de
afecciones, define la acción del psicópata en una familia como el efecto “sol negro”, porque
hace que todo el sistema familiar gire alrededor de él, como si fueran planetas alrededor de
un sol.
A diferencia del sol que da luz, da energía, da vida, y permite el desarrollo de los seres vivos,
el psicópata toma la energía de todos, impide el desarrollo de los miembros de la familia,
ejerciendo un poder intenso. Son como “vampiros energéticos” que desvitalizan a las
personas con las que se vinculan.
Por lo general, en las familias donde hay un Psicópata, en primera instancia se ve el
emergente, en segunda se ve que hay otros miembros de la familia que están con problemas
psicológicos o psicopatológicos y recién en tercera instancia con mucha investigación y la
mentalidad abierta, se ve al Psicópata, al sol negro.
Otra de las cuestiones que los profesionalesde la salud deben tener en cuenta a la hora de
atender personas de estas características, es que la psicopatía no se nota, no es visible como
una depresión o una neurosis. Permanece invisible y solo la podemos captar a través de los
efectos que producen en la familia o en quien trata con ellos. En los niños, por ejemplo,
suelen notarlo las maestras, los compañeros, como algo que no cierra en esta persona, que
no está bien, que no es normal. 
A veces el daño hacia los animales por parte de niños pequeños puede ponernos sobre la
pista de que esa conducta esta englobada en una situación psicopática.
Algunas cuestiones para destacar:
El psicópata puede suscitar un choque emocional importante, suscitando repugnancia y
reacciones afectivas negativas una vez conocida la acción psicopática como puede ser un
incesto, una perversión. El psicópata es un gran absorbedor de energía y ejerce un poder
especial sobre los otros. La imposibilidad de cambio en estos individuos es otro punto que
destacar, las personas que están a su alrededor suelen desgastarse deambulando de
frustración en frustración. 
Es un hábil manipulador, que capta las necesidades del otro, que seduce y ejerce un poder
irracional. Presentan una muy seria perturbación de las estructuras elementales de su
personalidad, pero encubren su enfermedad con una convincente máscara de salud. Es decir,
que para un observador exterior sus rasgos aparentan ser los de una persona absolutamente
sana y racional, lo cual los convierte en seres peligrosos al no poderse anticipar su
anormalidad.
Características de la personalidad psicopática:
  Impulsividad.
  Agresividad. 
 Se apartan de la cultura de la comunidad. 
 Comportan malestar o perjuicio para el sujeto o para los demás.
  Insensible al dolor ajeno.
  No manifiestan culpa ante el daño que infringen a otro.
Consciencia de enfermedad y Situación ante la ley:
No todas las personas poseen la misma posibilidad de captar o comprender el carácter de la
acción que realizan, ni de dirigirla conforme a dicha comprensión. Habíamos planteado
anteriormente que la psicopatía no es una enfermedad, sino una forma de ser, una mala
forma de ser anormal… Por lo tanto, el psicópata es un ser que comprende los actos que
realiza. 
Los mismos tienen una intencionalidad, a diferencia de otros cuadros clínicos como la
esquizofrenia que veremos más adelante. Las alteraciones se manifiestan en el terreno de la
afectividad dado que es un ser carente de empatía, pero no presenta falta de de
discernimiento en el campo de la consciencia. 
Es muy consciente de lo que se propone. Cuando un individuo de estas características
transgrede la Ley, cosa muy común en estos casos, se considera imputable dado que es un
ser que no está imposibilitado para comprender la criminalidad de su acto.
 MÓDULO III LECCIÓN N° 3 PSICOPATOLOGÍA GENERAL II
1-Las Psicosis:
La alienación de la persona consiste en una inversión de las relaciones de realidad del “yo”
con su mundo. Pero ese mundo no es tan solo el mundo físico, sino también, el mundo
humano que nos rodea y el mundo psíquico o interior del sujeto.
Esta inversión se manifiesta clínicamente por síntomas que constituyen para el sujeto una
especie de verdad y de ideal que no están de acuerdo con la realidad, ni se adaptan a la
coexistencia con los demás. Los síntomas psicóticos pueden ser:
 Positivos: Hacen alusión al brote psicótico, que es el momento en el que el paciente no
puede dirigir sus acciones y requiere internación. El brote es la eclosión máxima de la
enfermedad, donde aparecen la pluralidad de síntomas positivos: delirios, alucinaciones,
excitación, lenguaje desorganizado, distorsiones del lenguaje y la comunicación, neologismos
(creación de palabras nuevas), conducta desorganizada, etc. 
 Negativos: Se dan por defecto de las funciones psíquicas. Se caracterizan por la presencia
del afecto embotado (incapacidad emocional), retraimiento emocional, escasa capacidad de
contacto, pasividad, retraimiento social, apatía, dificultad en el pensamiento abstracto,
pensamiento estereotipado, Anhedonia (pérdida de la capacidad para sentir placer), deterioro
atencional, hipobulia (disminución de la voluntad), hipotimia (disminución del tomo afectivo),
etc.
Cuando una persona psicótica construye ideas delirantes, éstas pueden formar un sistema
(Paranoia), otras forman una concepción fantástica de la realidad (Parafrenia), y finalmente
otras forman un laberinto impenetrable (Esquizofrenia). De ahí surgen los diferentes tipos de
Psicosis:
PSICOSIS:
 ESQUIZOFRENIA
 PARANOIA
 PARAFRENIA
 TRASTORNO BIPOLAR
1.1. Esquizofrenia:
Son trastornos mentales crónicos y graves en personas con alteración en la percepción y el
contacto con la realidad.
El esquizofrénico está absorvido en una existencia autística, es decir, en un mundo
impenetrable y caótico que constituye un verdadero mundo al revés, su mundo es un
verdadero mundo sin matices.
Se observan importantes trastornos del pensamiento. La mente está dividida lo cual hace que
el afecto se divorcie del pensamiento haciendo que lo que se piense no se pueda sentir y lo
que se siente no se pueda pensar. Hay una profunda modificación del sistema de
comunicación, en la medida misma en que el sujeto construye un
mundo interior hermético utilizando neologismos (palabras inventadas), fórmulas
enigmáticas, palabras abstractas y vagas. Estos sujetos están gobernados por ideas
irreductibles, estas ideas constituyen para el sujeto una especie de verdad que no está de
acuerdo con la realidad. Tal es el caso del delirio. En la esquizofrenia, el delirio es polimorfo,
porque presenta varios núcleos delirantes, es decir que el sujeto puede elaborar una hipotesis
que le sirve por un tiempo, pero luego va a ir cambiando según sus sensaciones y elaborando
nuevos delirios.
1.2. Paranoia:
La paranoia generalmente empieza en los adultos, más allá de los 25 años. El
desencadenante de la enfermedad en general es de origen psíquico. Una vez que se pone en
marcha el delirio, éste se convierte en el eje de su vida. Toda gira alrededor del sistema
delirante.
Es una enfermedad que cursa con menos deterioro que la esquizofrenia y por lo general estos
sujetos no realizan consultas en el ámbito de la salud mental. Son personas hiperrazonantes.
Trabajan constantemente su delirio, si alguien que lo escucha por primera vez, intenta
refutarlo, como el paranoico tiene tan trabajadas sus argumentaciones, puede contestar
rápidamente con una buena fundamentación convenciendo al interlocutor.
El individuo paranoico, pueden funcionar socialmente bien en el resto de las cosas que no se
relacionan con su núcleo delirante.
¿Qué característica tienen el delirio paranoico?
 Es un delirio creíble, verosímil, bien sistematizado, monomorfo (no cambia). Siempre dice lo
mismo de la misma manera. El núcleo delirante siempre se arma alrededor de un solo tema,
cerrado, sólido y consistente. Al ser sistematizado, el delirio respeta las normas del
entendimiento, todo lo que interpreta (mal interpreta) a los ojos del observador, están dentro
del marco de lo posible, es decir que tiene una lógica interna, bien trabajada. 
Se arma una locura con argumentos racionales y bien argumentados. Son personas con
creencias sistemáticas pero desconectadas de la realidad y resistentes al cambio. En general
son personas excéntricas, desconfiadas, con una alta autoestima. Estas personas pueden
trabajar y ser útiles socialmente. Podemos decir que el contenido del delirio va a depender de
su biografía, generalmente es megalómano (ideas de grandeza) o persecutorio. Siempre se va
a tratar de algo autorreferencial. Todo lo incumbe a él.
El paranoico, no tiene alucinaciones, la alteraciónse produce en la interpretación de los
hechos, tiene necesidad de explicarlo todo, pero siempre son interpretaciones erróneas sobre
situaciones normales.
Ejemplo. Supongamos un hecho perceptivo cierto, real. Entra un gato negro y para el
paranoico eso significa una señal, un aviso, un mensaje “lo van a matar porque lo mandaron
para él”. Como vemos, las premisas son ciertas (el gato está alli donde él lo ve) pero las
conclusiones falsas, por eso la Paranoia también se conoce como Delirio interpretativo y al
igual que la Esquizofrenia es un cuadro crónico.
1.3. Parafrenia
Las personas parafrénicas, a veces pueden tener una vida bastante aceptable. El parafrénico
es como un “loco lindo”, vive en dos mundos: el real y el de fantasía, se manejan de manera
aceptable en el mundo real, el de todos, y a su vez tienen su mundo delirante, por eso
pueden enquistar su delirio y vivir en sociedad. Es como una combinación de la esquizofrenia
(por la presencia de alucinaciones) y la Paranoia. A diferencia de esta última, el delirio no es
creíble porque contiene muchos elementos fantásticos, con gran actividad fabulatoria. Como
hay ciertas fallas en la presentación de su delirio, el mismo está mal sistematizado.
Ejemplo. Un sujeto parafrénico puede decir que va a viajar a Marte para dar conferencias
sobre Antropología.
¿Por qué un delirante se aferra tanto a sus creencias?
Siguiendo el ejemplo del gato negro… Veo que pasa un gato negro en la facultad, entonces
hago un comentario en voz alta, porque me parece insólito que donde estoy aparezca un gato
negro. Entonces le pregunto a mis compañeros ¿vieron el gato negro? ¿Qué estoy haciendo yo
en este caso? Estoy cotejando con los otros si lo que pensé o vi es real. 
Es decir, les tengo confianza a las personas a las que me dirijo en búsqueda de una
respuesta. Hay una confianza en los otros. Hay una reciprocidad en cuanto a la confianza. La
confianza en los otros es lo que está deteriorada en el delirante. Un delirante diría: “yo veo un
gato negro y si ustedes me dicen que no lo ven, algo les pasa o están complotados para
hacerme creer que no lo ven”. El delirante perdió la confianza básica, para él no existe la
casualidad, todo es causal y esa causa por lo general es autorreferencial, tiene que ver con él.
1.4. Trastorno Bipolar:
La Bipolaridad es una alteración cíclica y recurrente del estado de ánimo, anteriormente
llamada enfermedad maniaco – depresiva. Afecta fundamentalmente la esfera afectiva. 
Las personas bipolares poseen un alto coeficiente intelectual. Oscilan entre dos polos: 
 el polo maníaco (exaltación) y el polo depresivo (tristeza profunda).
Polo Maníaco:
Los sujetos bipolares poseen un estado de ánimo psicológicamente inexplicable. Estando en la
fase maníaca tienen solo ideas de tonalidad placentera, nada puede entristecerlos. Todo es
visto a la luz más favorable. Hay impulsos exagerados a la actividad, y una acentuada
irritabilidad. El individuo manifiesta sentimientos de grandiosidad, euforia, autoestima
exagerada, disminución de la necesidad de dormir, atención flotante. En este estado de cosas
suelen tener conductas que implican riesgos para su vida.
Si el grado de excitación es muy importante aparece lo que se conoce como fuga de ideas o
pseudoincoherencia en el discurso. Esto sucede porque el sujeto no puede diferenciar lo
fundamental de lo accesorio, de modo que pierde la idea directriz del discurso que es la que
posibilita el encadenamiento coherente de lo que se está diciendo.
Polo Depresivo:
La tristeza del individuo es muy profunda cuando se encuentra en esta fase. Suelen
observarse pesimismo, aislamiento, inhibición psicomotriz, enlentecimiento en el modo de
hablar o de caminar.
Existen dos tipos de personas bipolares: 
- Tipo 1: Preponderancia de episodios maníacos sobre los episodios depresivos. 
- Tipo 2: Preponderancia de episodios depresivos sobre los episodios maníacos.
Hay un elemento que tienen en común todos los cuadros psicóticos y tiene que ver con el
grado de certeza que tienen sus ideas.
La consciencia de enfermedad en las Psicosis:
Cuando la consciencia está obnubilada impide el registro del mundo externo. La noción de
enfermedad mental está ligado al estado de independencia que le permite a un sujeto
reconocer o negar los síntomas que padece. La consciencia de estar enfermo existe
raramente en las psicosis y es una tendencia conocida del loco negar su locura. Algunos
enfermos tienen noción de enfermedad somática, pero niegan su enfermedad psíquica.
Debemos tener en cuenta que aquellos pacientes crónicos de muchos años de internado a
fuerza de que distintos profesionales les pregunten lo mismo terminan aprendiendo a decir
que están locos, pero eso no debe confundirse con creer que tienen consciencia de
enfermedad.
Situación ante la Ley en las Psicosis
El psicótico es una persona que no puede evaluar la realidad. No sabe lo que es bueno y lo
que es malo. De modo que no puede ser encontrado responsable y culpable de los actos que
realiza.
Cuando se encuentra en una situación estresante, puede tener un brote psicótico
experimentando delirios y alucinaciones, con la consecuente pérdida del juicio correcto de la
realidad. Entonces su “yo” parece desaparecer y cegarse para dar paso a impulsos
destructivos sin darse cuenta de la peligrosidad de sus actos. Un ejemplo serían los asesinos
en masa. 
Este tipo de personas disparan sus armas a una masa de gente sin discriminar a sus víctimas,
lo cual indica el nivel de obnubilación e impulsividad de su acto. Las alucinaciones
experimentadas pueden conducirlo a interpretar como peligro para su vida a las personas
circundantes y por ello querer lastimarlas. La locura o psicosis generalmente se desencadena
en situaciones que le impiden tolerar el estrés y la angustia como en embotellamientos,
lugares cerrados, estadios, escuelas, etc.
2. Cuadros Neuropsiquiátricos:
Cualquier enfermedad que tenga como correlato alguna lesión del cerebro y por consiguiente
determine en quien la padece alteraciones psiquiatricas o psicológicas, está comprendida en
ese apartado.
Los sujetos que presentan daño cerebral presentan una incapacidad, no solo en las
operaciones intelectuales, sino que de manera más global ven afectada otras áreas de su
vida, con los consiguientes trastornos psiquiátricos.
Existen profundas relaciones entre el retraso intelectual y el retraso afectivo. Esto hace que
las personas que padecen estos cuadros se vean desprovistas de personalidad, y aparezcan
con una ingenuidad y una concepción pueril del mundo poco usual. Poseen, a su vez,
trastornos del juicio, trastornos del carácter afectividad inmadura, falta de autonomía,
vulnerabilidad al estrés, fallo en las adquisiciones de habilidades sociales, baja autoestima,
dificultades en la comunicación, mecanismos de afrontamiento deficitarios. Son seres con un
alto nivel de dependencia también en su adultez, dada su constitución inmadura.
Vamos a hacer hincapié en las oligofrenias (oligos: poco, y frenein: mente), dado que hay un
sinfín de enfermedades que presentan variaciones que sería imposible abordar.
2.1-Oligofrenias Trastorno cuantitativo de la esfera intelectual que corresponde a una
subnormalidad mental debido a un déficit del desarrollo evolutivo del SNC:
a) Idiota: subnormalidad mental profunda.
 b) Imbécil: subnormalidad grave. 
c) Debilidad mental: subnormalidad intermedia. 
d) Fronterizo (borderline): subnormalidad leve.
2.2. Otras enfermedades, Por ejemplo: las epilepsias, demencias, y enfermedades
neurológicas también se engloban en esta categoría ya que implican una disfunción
transitoria o permanente del cerebro donde también son apreciables las manifestaciones
psiquiátricas citadas anteriormente. 
Al igual que las oligofrenias, estosindividuos se ven imposibilitados en mayor o menor grado
de dirigir sus acciones cuando el campo de la consciencia esta obnubilado.
La consciencia de enfermedad en los Cuadros Neuropsiquiátricos En estos casos el panorama
es relativo y variado con respecto a la consciencia de enfermedad que un individuo puede
tener. Siendo tan imprecisa esta categoría, dependerá en última instancia del grado de
afectación que padece el individuo.
Situación ante la Ley en los Cuadros Neuropsiquiátricos 
La imputabilidad tiene lugar siempre que la persona que realiza un acto antijurídico haya
tenido la aptitud física o psíquica para comprender y dirigir sus acciones. Las personas con
retraso mental de moderado a profundo son inimputables. Los casos de retraso mental leve
quedan a consideración de la Justicia, dado que tratándose de una situación límite, en cuanto
a la capacidad de comprensión del individuo, se debe determinar en caso de que la persona
cometa un delito, su eventual imputabilidad. 
El punto de inflexión que debemos tener en cuenta para valorar la situación ante la Ley, (ya
sea para las personas con retrasos mentales, epilepsias, etc.) es el grado de comprensión que
tiene el individuo sobre sus actos.
Glosario 
Introspección: es el conocimiento que el sujeto tiene de sus propios estados mentales. 
Estereotipias: Repetición involuntaria de expresiones verbales, gestos y movimientos que
tienen lugar en algunas enfermedades psiquiatritas y neurológicas. 
Epilepsias: Descarga sincrónica de naturaleza patológica de un grupo o de la totalidad de las
neuronas que modifican la personalidad, la conciencia y conducta de la persona.
Demencias: Enfermedad generalmente irreversible, de naturaleza orgánica que cursa con
detrimento de las funciones psíquicas especialmente las cognitivas. Es la pérdida progresiva
de las funciones cognitivas, debido a daños o desórdenes cerebrales más allá de los
atribuibles al envejecimiento normal. 
Enfermedades Neurológicas: Disfunción permanente o transitoria del cerebro con
manifestaciones psiquiatricas. Ej: Parkinson, Tics, Alzheimer.
 MÓDULO III
 LECCIÓN N° 4
 INTRODUCCIÓN A LA PSICOPATOLOGÍA
NUTRICIONAL
1. Clasificación de Trastornos Alimentarios
no
2. Características generales
Veamos cuáles son las características generales que comparten las personas con trastornos
alimentarios:
Comen independientemente de su hambre o saciedad.
Los patrones de alimentación incluyen desde una ingestión
constante hasta una dieta estricta, pasando por períodos de
abstinencia o el uso de laxantes o medicamentos destinados
a quitar el apetito.
Se sienten ignorados o demasiado controlados por personas
significativas para ellos.
Conductas de evitación, mostrándose ambiguos y negadores.
Tienen una autoimagen desagradable o insatisfactoria.
Reconocen su debilidad frente a la comida, desarrollan
conductas extrañas y anormales.
Hay un sentido de ineficacia personal que invade todos los
Clasificación de los TA según DSM IV (Manual Diagnóstico Y Estadístico de Trastornos Mentales):
 Anorexia Nerviosa: Tipo restrictiva. Tipo Compulsiva / Purgativa.
 Bulimia Nerviosa: Tipo Purgativa. Tipo no Purgativa.
 Trastorno de la Conducta Alimentaria especificado: Casos parciales, atípicos de Anorexia
Nerviosa. Casos parciales, atípicos de Bulimia Nerviosa. Trastorno Compulsivo (Trastorno por
atracón).
(*) Se consideran casos parciales y atípicos de Anorexia y Bulimia Nerviosa a aquellos casos que no
reúnen todas las condiciones clínicas que se requieren para diagnosticar Anorexia y Bulimia Nerviosa.
aspectos de la vida: familiar, laboral, etc.
Su identidad personal siempre está definida a través del
juicio de los otros, dado que existe una necesidad de
confirmación.
3. Funcionamiento familiar y el valor simbólico del alimento
Muchos alimentos poseen, además de sus cualidades alimenticias, un valor simbólico y
emocional por estar, muchos de ellos, asociados en nuestro cerebro a recuerdos buenos o
malos, a situaciones, personas, etapas de la vida, etc. 
Existen asociaciones más o menos compartidas por la mayoría de la población, como asociar
las tortas y postres a momentos de grata celebración de cumpleaños, a la experiencia de ser
agasajados por sacar buenas notas, los helados a vacaciones de verano, a momentos de
mayor libertad, etc. Pero hay asociaciones más individuales y de importantes consecuencias
cuando de trastornos se trata. 
Este valor simbólico puede aparecer unido a diferentes circunstancias: 
Desde las primeras horas de vida el ser humano se halla en contacto con los valores y las
texturas que hacen a su grupo de pertenencia y aunque biológicamente trae una sensibilidad
individual, ésta recibe desde ese momento el sello del grupo en que nace el individuo.
Los alimentos que se le ofrece al niño son un factor de integración social, pues la
alimentación nunca se corresponde con un acto solitario, la mesa es o pretende ser
tradicionalmente, un lugar de intercambio, de convivencia, de discursos, también puede ser
en ciertas familias un lugar de desencuentros.
Culturalmente, también se van modificando, las reglas internas de la mesa familiar. Hay cierto
tipo de educación que promueve la rapidez, la eficacia y la pulcritud a la hora de comer.
Nuevos hábitos van reemplazando el olor de la comida casera, el placer del tacto con que se
experimentaba la relación con el alimento. De modo que la relación corporal y afectiva con el
alimento se va modificando y nos va modificando.
En algunas familias, se va desdibujando cada vez más el ritual grupal de la mesa, que marca
pertenencia, cohesión e identidad entre sus miembros.
Por diversas cuestiones, hay casos donde también se va debilitando cada vez más los roles de
las figuras parentales. Se empiezan a desdibujar los referentes que tiene el individuo en
desarrollo, acortando la distancia generacional entre padres e hijos.
El hijo adolescente ve así dificultada la búsqueda de su identidad que es uno de los logros que
como habíamos visto anteriormente, debe poder alcanzar en esta etapa.
La etapa adolescente es un momento difícil en un desarrollo evolutivo normal. Cuanto más
será en aquellos adolescentes que transitaron la niñez con ciertas dificultades que no fueron
percibidas y en la adolescencia eclosionan nuevamente.
Tomando al adolescente como parte de la población más vulnerable a la hora de contraer este
tipo de patologías, se entiende el riesgo que conlleva que no exista una consulta precoz
cuando hay trastornos de la conducta alimentaria ya que la detención del crecimiento (posible
secuela) en las puertas de la adolescencia o al salir de la adolescencia deja sus huellas y no
se resuelve tan fácilmente.
 
Ahora bien, si todas las jóvenes se encuentran bajo las mismas presiones socioculturales,
¿Por qué solo algunas adolescentes presentan estos cuadros? 
Al no existir una respuesta clara y concisa, algunos trastornos alimentarios aparecen como
cuadros enigmáticos en tanto no existe consenso entre los especialistas sobre su etiología. 
Aunque parece no haber un patrón específico de funcionamiento familiar asociado a
trastornos de alimentación, los factores negativos dentro de la familia, tanto hereditarios
como ambientales una vez que los desórdenes alimentarios están en marcha cobran gran
importancia.
Algunas investigaciones han identificado ciertos estilos de funcionamiento en familias con
individuos con trastorno de la alimentación.
Uno de los factores que mejor refleja la dinámica en que se manejan las familias donde hay
personas con trastornos alimentarios es la “evitación de conflictos”.
Podemos pensar que, si se niega la existencia de problemasgenerando la apariencia de
“familia ideal”, resulta imposible el hecho de tomar consciencia de la problemática del
adolescente y en consecuencia se dificulta la ayuda profesional.
4. Evitación de conflictos y Alexitimia
Alexitimia es la ausencia de palabras para expresar los afectos. A su vez, la alexitimia hace
referencia a la dificultad para diferenciar sensaciones corporales de afectos o sentimientos.
También se la conoce como agnosia interoceptiva.
Existen muchas posturas para entender las causas de las patologías alimentarias. Muchas
concuerdan en considerar las patologías alimentarias como enfermedades psicosomáticas
emergentes de un sistema familiar disfuncional y de un sistema social que promueve un ideal de
belleza basado en la ultradelgadez. 
Las cinco características predominantes en las interacciones familiares que se han encontrado
son las siguientes:
 Aglutinamiento, es una extrema forma de proximidad e intensidad en las interacciones
familiares.
 Sobreprotección, reflejado en el alto grado de preocupación que los miembros de la familia
tienen del bienestar de los otros.
 Rigidez, caracterizado por una necesidad de mantener el statu quo.
 Involucrar al hijo/ hija en los conflictos parentales (maritales) a través de triangulación. 
 Evitación de conflicto.
La alexitimia históricamente estuvo ligada a los trastornos somáticos de ahí su inclusión para
comprender la patología alimentaria. 
¿Cómo relacionamos los trastornos alimentarios con el concepto de Alexitimia?
Habíamos dicho que una de las características predominantes en la interacción de familias
con miembros con trastorno de la alimentación era la “evitación de conflictos”. Al
respecto, a partir de ciertos modelos familiares, muchas personas aprenden a evitar hablar de
lo que sienten.
La creencia que subyace en el concepto de Alexitimia es que el sujeto puede pensar, actuar,
hablar e incluso reconocer las emociones, pero no puede conectar sus pensamientos con los
estados emocionales. Por consiguiente, el afecto no encuentra una vía de expresión verbal y
se expresa mediante actos con un alto nivel de impulsividad que se juega en distintos
ámbitos, como puede ser el ámbito de la alimentación.
Cuando personas alexitimicas presentan alguna patología y aparecen en los consultorios para
atender sus dificultades, se muestran con un discurso pragmático, desafectivizado, vacío de
todo sentimiento. Los pacientes alexitimicos tienen emociones, pero no pueden expresar sus
sentimientos, predominando respuestas fisiológicas y comportamentales muy características. 
La alexitimia, como rasgo de personalidad, se ha encontrado en sujetos con trastornos de
estrés postraumático, adicciones, trastornos alimentarios, asma, etc. 
Podemos pensar que la alexitimia, más que un problema individual, es el síntoma de una
familia que evita el conflicto y las tensiones emocionales.
5. Experiencias tempranas de abuso como generadoras de vulnerabilidad en el
individuo
Si bien no existe una relación lineal entre el trastorno alimentario y abuso sexual, en general,
hay consenso sobre el estado de vulnerabilidad que genera un abuso ocurrido en la infancia.
El abuso en sí mismo no sería un factor causal, ya que no todas las personas que tienen
trastornos alimentarios fueron abusadas sexualmente y no todas las que fueron abusadas
sexualmente desarrollan trastornos alimentarios. 
Las dificultades para verbalizar experiencias emocionales son debidas a que las emociones son
bloqueadas en estas familias, para evitar conflictos y mantener un "mito de armonía". El síntoma
somático sería el lenguaje de toda la familia. 
¿Causa o consecuencia?
Existe entre las mujeres con trastornos de la alimentación una incidencia mayor de
abuso sexual; los estudios han reportado tasas de abuso sexual de hasta un 35% en
las mujeres con trastornos alimenticios.
Haber padecido un abuso sexual es un factor de riesgo para desarrollar
posteriormente desórdenes de la alimentación, como anorexia o bulimia.
La anorexia supone la pérdida de deseo sexual, mientras que la bulimia induce
en muchos casos una promiscuidad insatisfactoria.
 
http://es.wikipedia.org/wiki/Abuso_sexual
Lo cierto que el sujeto en este estado de vulnerabilidad puede desarrollar diversas patologías,
entre ellas desórdenes alimentarios.
Se les han otorgado a los síntomas tres significados diferentes: 
 Los síntomas en su función protectora y defensiva.
 Los síntomas en su función punitiva.
 Los síntomas en su función elaborativa.
A) Si tomamos el síntoma en su función protectora y defensiva, se ha postulado a la
Anorexia como un intento de evitar futuros encuentros sexuales afeando el cuerpo y
volviéndolo poco atractivo. De este modo, las victimas evitan pesos donde sus cuerpos se
verían más atractivos.
Esta hipótesis supone que el abuso durante la adolescencia puede llevar a la víctima a asociar
su maduración sexual con la vulnerabilidad al abuso sexual, por lo tanto, la persona intentará
inhibir o disimular su maduración sexual para protegerse. En este sentido, el trastorno
alimentario aparece como mecanismo de defensa dado que las pacientes tienen una
motivación explicita de desexualizarse. Hay una incapacidad para enfrentarse con las
demandas sexuales de la pubertad, de remover todo lo que se siente desde el cuerpo visto
como algo manchado y sucio.
B) La función punitiva de los síntomas es observable en la Bulimia, como una forma de
infligir en el propio cuerpo un abuso que había sido padecido en forma pasiva. Sería una
forma indirecta de expresar la bronca agrediéndose el mismo por lo sucedido. El sujeto se
castiga a si mismo por medio de su cuerpo, incurriendo en conductas promiscuas y
mostrando al mismo tiempo un mecanismo de identificación con el agresor o bien se culpa e
intenta castigarse o desaparecer.
C) La línea del trastorno alimentario en su función elaborativa da cuenta de la aparición
de trastornos alimentarlos como una forma de regulación de la personalidad, como un
esfuerzo para lidiar con estados afectivos que desbordan las capacidades de procesamiento
del individuo. Aparece el intento del sujeto de manejar y controlar (descontrolar) el cuerpo
cuando durante el abuso fue manejado y controlado por el abusador. 
 
 
Si tenemos en cuenta las series complementarias descriptas por Freud respecto de la
formación de síntomas, observamos que estos factores que hemos enumerado no alcanzan
para explicar la formación de síntomas alimentarios independientemente de otros factores.
Deben complementarse con otros factores (factor constitucional y factores desencadenantes)
para dar lugar a los síntomas.
 MÓDULO IV
 PSICOPATOLOGIA NUTRICIONAL: OBESIDAD Y TRASTORNO POR
ATRACÓN 
El adormecimiento emocional, la distracción del foco del trauma, la descarga activa de impulsividad
(comilonas, purgas, ejercido excesivo, irritabilidad, etcétera) son manifestaciones que el sujeto realiza
para controlar lo incontrolable de la angustia que no puede expresar por otros medios.
1. Obesidad
¿Cuáles pueden ser los factores psicológicos desencadenantes de la obesidad?
No existe un factor psicológico que por sí mismo explique la aparición de la obesidad.
No obstante, algunos autores ponen en relación la aparición de la obesidad con la pérdida de
un ser querido. Por ejemplo, algunos obesos bajan de peso cuando se enamoran y lo
recuperan cuando abandonan la relación. 
También encontramos el miedo a adelgazar en mujeres carentes de auténticas relaciones
satisfactorias, de proyectos. En general, son mujeres solas, de ánimo depresivo, mujeres que
se convierten en el objeto de sus propios cuidados. 
Al respecto, algunos autores han abordado la obesidad planteandoun estado emocional
relacionado con factores químicos, en las personalidades adictivas.
Desde este punto de vista, “la comida no sería adictiva, sino lo es la conexión del
individuo con ella”.
En algunos de estos casos, las familias cumplen un rol fundamental, ya que serían las
encargadas de fomentar la adicción hacia la comida que de este modo pierde su valor
nutricional para convertirse en un elemento tóxico que genera dependencia y enfermedad en
aquellos individuos con tendencia a las adicciones.
En otros casos, la obesidad aparece como excusa o justificativo para no lograr aquello que se
desea. De este modo, se relaciona con los miedos de la persona a la vida social, a mantener
relaciones sexuales, a entrar en una nueva etapa de desarrollo, a la intimidad psicológica y
afectiva, al temor de perder la preferencia de la madre o el padre, conseguida gracias a
limitarse la vida y estar pendientes de ellos. 
También, el sobrepeso puede ser un mecanismo evasivo, entonces, la comida es un medio
para no pensar en los problemas que se tienen. En lugar de enfrentarse a los problemas y
resolverlos, la persona se evade cambiando el foco de atención de sus problemas. 
Cuando la persona no posee una identidad sólida, la obesidad aparece como mecanismo de
identificación. En estos casos, la identificación se da con un modelo dentro del entorno más
inmediato.
Esto se puede ver en aquellos que han recibido de las personas con las que se han
identificado, cantidades importantes de cariño, consuelo, protección y desean seguir ese
modelo para no sentirse débiles o inseguros. De esta manera, las personas con esta patología
toman “prestados” los atributos de alguien a quien idealizan y los hacen sentir más fuertes o
menos vulnerables.
Dentro de esta diversidad de situaciones que motivan la obesidad, existen personas que no
están satisfechas con la figura femenina, no tienen una adecuada identidad sexual y se
resisten a adoptar el papel de mujer. Lo que se busca es destruir aquello que en su cuerpo
remita a la femineidad. 
¿Existe un tipo de personalidad en la persona obesa?
Así como no existe un factor psicológico que por sí mismo explique la aparición de la
obesidad, es difícil llegar a identificar un patrón de comportamiento entre los casos de
obesidad.
Ya sea que se trate de pérdidas, miedos, carencias afectivas, autocastigo,
evasión, falta de representa identidad, disconformidad con la identidad sexual,
etc., siempre tenemos que ver la singularidad del paciente, qué para cada persona
tener obesidad.
De todas maneras, lo que se ha observado son fallas parciales de ciertos aspectos
psíquicos en distintos tipos de personalidad.
Algunas alteraciones son específicas y pueden encontrarse con relativa frecuencia en
individuos obesos, aunque sin ser patognomónicas de la enfermedad. Pero también, existen
otras que pueden estar presentes y dificultar el tratamiento para quienes intentan adelgazar
y mantener un peso adecuado. 
Alteraciones 
Vamos a hacer hincapié en una de las alteraciones más frecuentes en estos trastornos:
Imagen Corporal Distorsionada.
La imagen corporal es una representación psicológica subjetiva que puede llegar a ser
diferente de la apariencia real.
Según Zukerfeld, la imagen corporal definida como la representación conciente e inconsciente
del propio cuerpo, se realiza a través de tres registros: Forma, Contenido y Significado.
 
a) Forma
Cuando tiene lugar la alteración de las percepciones relacionadas con el tamaño y los límites
corporales el cuerpo es percibido en dimensiones inferiores a las reales, a esto se lo conoce
como subestimación. 
b) Contenido
Los trastornos a nivel de la percepción interoceptiva (contenido), se expresan como
dificultad en percibir, discriminar y nominar diversos registros fundamentalmente los registros
de hambre y saciedad. 
Esta dificultad se relaciona con un tipo de vínculo en la temprana infancia, donde se produce
una exclusión de las necesidades corporales del niño en la relación precoz madre-hijo.
Se trata de madres que tienen dificultades para cualificar adecuadamente las necesidades del
bebé. En este caso, las madres alimentan a sus hijos según sus propios deseos y no esperan
los signos de inquietud del bebe, prevaleciendo arbitrariamente las emociones corporales de
la madre por sobre las del niño. 
c) Significado 
La persona obesa puede comer como respuesta a las emociones más diversas. Una de las
características que plantea esta situación, es la dificultad que encuentra el individuo para identificar sus
propias sensaciones, no pudiendo distinguir hambre de saciedad, ni hambre de otras emociones con
que convive cotidianamente.
IMAGEN CORPORAL
SIGNIFICADOCONTENIDOFORMA
La persona con obesidad es juzgada como físicamente menos atractiva, carente de voluntad y
conducta. Esto lleva a que muchas personas con sobrepeso experimenten:
 Autovaloración negativa debido a la apariencia:
Al tener baja autoestima, en algunos casos, la persona ve afectada las relaciones
interpersonales y la seguridad a la hora de emprender proyectos. 
Dado que las personas obesas no suelen estar satisfechas con su imagen corporal, se aíslan
del contacto social, temen el rechazo viendo reducida su vida social
De este modo evitan actividades por vergüenza en relación con la apariencia física.
 Ansiedad: 
Si el comer o exactamente masticar, desgarrar y triturar, se
transforma en una forma de reducir la ansiedad,
comienza un círculo vicioso con la ansiedad que se
reduce comiendo, por ende, engordando y este
aumento genera un motivo de preocupación, por lo que
nuevamente aparece la ansiedad y una vez más se
come como mecanismo compensador. 
 
 
 Depresión:
Al igual que sucede con la ansiedad, se puede establecer
un círculo vicioso, donde el comer se transforma
en un acto para reducir la insatisfacción y la amenaza de
depresión. 
 
Cuando en una persona obesa se instala la depresión,
aparece una pérdida de interés por las actividades
o situaciones que anteriormente resultaban
 Ansiedad
 Comida
 Aumento de peso
Aumento de preocupación
 Ansiedad
 Más comida
 Insatisfacción
 Comida
 Aumento de peso
 Angustia
 Aislamiento
gratificantes. Podemos pensar que esta pérdida de interés también contribuye a limitar la
vida social de la persona con obesidad.
 
 
Aunque la obesidad está incluida en la Clasificación Internacional de Enfermedades (CIE)
como una enfermedad médica, en el DSM-IV no aparece, ya que no se ha establecido su
asociación consistente con síndromes psicológicos o conductuales.
2. 
Síndrome de Atracón Alimentario
Si bien actualmente se considera una entidad autónoma cuyos criterios diagnósticos se
especifican en el Manual diagnóstico y estadístico de los trastornos mentales DSM IV, es un
síndrome que puede o no estar en las modalidades de conducta alimentaría de los
obesos. 
Este trastorno tiene algunos de los comportamientos de la Bulimia nerviosa como el "hambre
voraz", con la diferencia de que la persona afectada, aunque se siente culpable luego de
tener un atracón no hace nada para contrarrestarlo, como, por ejemplo, realizar una
La insatisfacción con la imagen corporal en la obesidad no sólo es una motivación frecuente para
intentar bajar de peso, sino también puede ser motivo de un importante y significativo impedimento y
malestar crónico, ya que influye en los pensamientos, sentimientos y conductas repercutiendo además
notablemente en la calidad de vida de quien la padece.
autoinducción del vómito, abusar de laxantes u otros fármacos, ayunar o realizar ejercicio
físico excesivo.
Para que haya un Síndrome de Atracón, uno de los criterios clínicos exigeque el mismo se
presente por lo menos dos veces por semana durante seis meses. 
La persona afectada ingiere grandes cantidades de comida, generalmente en menos de dos
horas, con una sensación de pérdida de control sobre que se come y cuanto se come, seguido
por sentimientos de culpa y por una sensación de enojo, desesperación y decepción por no
poderse controlar. Esta es una de las principales características.
La causa precisa de por qué se origina el SDA es aún desconocida. Sin embargo, al igual que
en otros desordenes de alimentación, existen ciertos factores psicológicos que pueden
predisponer a la persona a sufrir estos episodios. Entre los más importantes, se pueden
destacar:
 Relaciones disfuncionales, especialmente con miembros de la familia.
 Baja autoestima.
 Depresión. 
 Problemas en manejar emociones: estrés, enojo, tristeza, aburrimiento, soledad,
preocupación, etc.
 Personalidad impulsiva.
 Sentimientos de falta de control sobre sus acciones.
 Sentimientos de aislamiento. 
 
Desde el punto de vista psicológico, el síndrome de atracón tiene un gran simbolismo. Es,
sin duda, un acto no pensado, sino actuado irreflexivamente, que busca tramitar un conflicto
de forma inadecuada.
Los pacientes con SDA tienen mayor preocupación por el peso y la forma corporal que
quienes no tienen el síndrome SDA, utilizan el atracón como una forma de esconderse y de
huir de sus emociones, para llenar un vacío interno y para manejar y evadir el diario estrés, la
angustia y el dolor.
Criterios diagnósticos según el DSMIV 
A. Episodios recurrentes de atracones. Un episodio de atracón se caracteriza por las dos
condiciones siguientes: 
1. Ingesta, en un corto período de tiempo, de una cantidad de comida
definitivamente superior a la que la mayoría de las personas podría consumir en el
mismo tiempo y bajo circunstancias similares. 
El síndrome de atracón (SDA) aparece principalmente en personas obesas en tratamiento en un
porcentaje mayor que en los obesos sin tratamiento. Esto genera problemas en los sistemas
digestivos y endocrinos con consecuencias físicas que incluyen obesidad, diabetes, hipertensión,
problemas cardíacos, daño o pérdida del riñón, artritis, deterioro del sistema óseo e incluso la muerte.
2. Sensación de pérdida del control sobre la ingesta durante el episodio (por
ejemplo: sensación de que uno no puede parar de comer o controlar qué o cuánto
está comiendo). 
B. Los episodios de atracón se asocian a tres o más de los siguientes síntomas: 
1. Ingesta mucho más rápida de lo normal. 
2. Comer hasta sentirse desagradablemente lleno. 
3. Ingesta de grandes cantidades de comida a pesar de no tener hambre. 
4. Comer a solas para esconder su voracidad. 
5. Sentirse a disgusto con uno mismo, depresión, o gran culpabilidad después del
atracón.
C. Profundo malestar al recordar los atracones. 
D. Los atracones tienen lugar al menos dos días a la semana durante seis meses. 
E. El atracón no se asocia a estrategias compensatorias inadecuadas (p.ej. purgas, ayuno,
ejercicio físico excesivo) y no aparecen exclusivamente en el transcurso de una Anorexia
Nerviosa o una Bulimia Nerviosa. 
 MÓDULO IV
 LECCIÓN N° 2
 PSICOPATOLOGÍA NUTRICIONAL - ANOREXIA 
 1. Anorexia Nerviosa
¿Qué es la anorexia nerviosa?
La anorexia nerviosa es un trastorno del comportamiento alimentario caracterizado por una
pérdida significativa del peso corporal (superior al 15%), habitualmente fruto de la decisión
voluntaria de adelgazar. El adelgazamiento se consigue suprimiendo o reduciendo el consumo
de alimentos, especialmente los que “engordan”, y con cierta frecuencia mediante vómitos
autoinducidos, uso indebido de laxantes, ejercicio físico desmesurado, consumo de
anorexigenos y diuréticos.
El trastorno suele iniciarse entre los 14 y 18 años, pero en los últimos tiempos se está
constatando el descenso de la edad de inicio. El paciente anoréxico experimenta un intenso
miedo al aumento de peso a pesar de que éste disminuye de manera alarmante.
Factores predisponentes: Biológicos, Psicológicos, Familiares y Socioculturales
Las causas de la anorexia nerviosa son múltiples, interviniendo unas u otras de modo
diferencial en distintos pacientes.
 Etiopatogenia: El origen de la Anorexia Nerviosa es multideterminado donde los factores
psíquicos, biológicos y socioculturales están en un entrecruzamiento tanto para
desencadenar como para mantener la enfermedad. 
 Factores Biológicos:
Podemos entender la aparición de estos cuadros teniendo en cuenta desde lo biológico, cierta
predisposición genética hacia la Anorexia Nerviosa. La vulnerabilidad neuroendocrina es uno
de los posibles factores biológicos involucrados.
 Factores Psicológicos:
Por otro lado, existen ciertas características o rasgos de la personalidad, que podrían
favorecer la aparición de Anorexia Nerviosa.
Vamos a introducirnos en el perfil del sujeto anoréxico que podemos hacer equivaler con el
sujeto patológico de nuestra época.
El sujeto anoréxico es un sujeto que no pide nada, no demanda nada, no quiere nada, o
podemos decirlo afirmativamente quiere nada. Y esto llevado a su máxima expresión.
Es eso sí, es un sujeto que se exige, hiperresponsable, con una necesidad acentuada de
aprobación. 
Lo que se ha observado en este tipo de personalidades es un tipo de razonamiento
dicotomizado, vale decir que en estas personas no existen términos medios, es el “todo o
nada”. 
Poseen además una escasa respuesta a sus necesidades internas. Los pacientes con Anorexia,
generalmente, despliegan sus actividades en forma normal o sobreadaptada. El
perfeccionamiento y la rigidez suelen ser la norma con la que juzgan la realidad personal. 
Por lo dicho anteriormente, existe en la persona con anorexia, una cierta labilidad emocional
que la torna inestable y proclives a contraer este cuadro.
 Factores familiares:
Puede afirmarse que la familia como tal y sus disfunciones y conflictos en particular no
pueden considerarse como agentes causales específicos de ese trastorno. 
Lo que sí se ha observado es que suele haber un predominio de estilo sobreprotector en la
crianza.
No obstante, no son sino factores de riesgo inespecíficos, ya que pueden asociarse a muchas
otras patologías que no son alimentarias. 
De todas formas, una vez que el proceso anoréxico está en marcha, los conflictos familiares
cobran una importancia muy notable.
La conflictividad familiar, en la mayor parte de los casos es secundaria a la aparición del
trastorno.
 Factores socioculturales:
Los factores socioculturales forman una parte indiscutible de la etiopatogenia de la Anorexia
Nerviosa. La edad puberal y adolescente es, sin duda, el principal factor individual de riesgo,
ya que los cambios corporales obligan en esta etapa a fijar la atención sobre el propio cuerpo.
La imagen corporal es una construcción psíquica, social y cultural. Por lo tanto, los factores
sociales son prioritarios para entender la anorexia. La influencia de los medios de
comunicación promueve un ideal de delgadez que tiene complejas resonancias en el
psiquismo de aquellas poblaciones consideradas de riesgo.
Las discrepancias entre el propio cuerpo y el modelo oficial suelen interpretarse en contra del
propio cuerpo. En la adolescencia, más que en cualquier otra época, la imagen corporal es
autoimagen. De este modo, las críticas referidas al cuerpo, los fracasos amorosos, el temor a
acabar teniendo un cuerpo como el del padre o la madre (obesos) y mil cosas más pueden
poner en marcha la decisión de adelgazar y, a partir de ésta, el proceso anoréxico.
Nuestro mundo favorece quelas personas encuentren satisfacción
creando un cuerpo que funcione como un objeto que se intenta cultivar y embellecer. De este
modo, el culto al cuerpo joven y bello es uno de los valores de la sociedad occidental actual.
Como si se tratara de las apariencias y “del dar a ver”.
Todo esto, va configurando las formas de sentir, de pensar, inclusive las formas de padecer
actuales. Algunos autores relacionan el padecimiento de la persona con anorexia como un
padecimiento “autista”, donde no se requiere de otras personas, porque como decía
anteriormente “se demanda nada”.
Por este motivo, son casos que, cuando llegan a la consulta, lo hacen por la demanda de los
padres o educadores, pero ellos no están preocupados por la situación, ni tienen “nada” que
decir.
Alteraciones Psicológicas
A partir de estos factores se observan las siguientes pautas de comportamiento:
Factores Biológicos Factores
Psicológicos
 Insatisfacción corporal.
Importancia al cuerpo delgado.
Distorsión de la imagen corporal.
Baja autoestima.
Depresión.
Factores Sociales 
Factores Familiares
La distorsión de la imagen corporal es casi siempre una constante, sobrevalorándose las
dimensiones de la silueta corporal, lo que obliga a mantener la restricción alimentaria. 
La autoimagen está sumamente determinada por la imagen corporal y acostumbra a ser
sumamente negativa.
Todas las personas con anorexia nerviosa sienten fobia a engordar. Existe una especie de
paranoia acerca del cuerpo que se manifiesta con Ideas delirantes de gordura y flacidez.
También, existe en estos pacientes, un interés por dietas y conocimientos minuciosos del
valor calórico de los alimentos. Hay prácticas extravagantes en relación con la comida, ya que
los alimentos pueden no ingerirse, pero en cambio sí pueden ser trozados, exprimidos,
almacenados, es decir sometidos a cualquier tipo de manipulación. De esta manera, las
preocupaciones alimentarias van haciéndose cada vez más obsesivas y los pensamientos y
actitudes relacionados con el cuerpo, el peso y la alimentación distorsionan hasta convertirse
en absurdos e irracionales.
Las relaciones interpersonales siempre están alteradas. La persona con anorexia empieza a
aislarse socialmente, se hace cada vez más egocéntrica, consumiéndose emocionalmente
entre sus miedos, obsesiones y rituales. Esta situación provoca cada vez más tristeza,
irritabilidad, aislamiento social progresivo, ideas de muerte y suicidio
 Alteraciones Físicas
La malnutrición una vez establecida produce alteraciones de todo orden, especialmente en el
eje hipotálamo-hipofisiario-gonadal, lo que da lugar a amenorrea en las mujeres y a perdida
de interés y potencia sexual en los varones.
El peso extremadamente bajo da lugar a que la piel presente una apariencia seca y agrietada.
Las manos y los pies están fríos, debido a una vasoconstricción generalizada.
La malnutrición también genera síntomas como hipotermia, hipotensión, anemia,
osteoporosis, alteraciones de la piel, caída del cabello, las uñas se vuelven quebradizas,
aparición de lanugo (vello corporal muy fino) trastornos gastrointestinales y amenorrea. 
 Hipotensión / Hipotermia
 Anemia Lanugo
 Amenorrea Uñas
quebradizas
 
 Piel seca Amenorrea
 Trastornos Gastrointestinales
Anorexia Nerviosa (DSM IV)
A) Rechazo a mantener el peso corporal o por encima del valor mínimo normal
considerando la edad y la talla (peso inferior al 85 % esperable).
B) Miedo intenso a ganar peso o a convertirse en obeso, incluso estando por
debajo del peso normal.
C) Alteración de la percepción del peso o de la silueta corporal, exageración de
su importancia o negación del peligro que comporta el bajo peso corporal.
D) En las mujeres pospuberales presencia de amenorrea (ausencia de tres ciclos
menstruales consecutivos).
 
Especificar el tipo:
a) Tipo restrictivo: Durante el episodio de AN no recurre regularmente a
atracones o purgas (ej: provocación del vómito o uso excesivo de laxantes,
diuréticos o enemas).
b) Tipo compulsivo / purgativo: Durante el episodio de AN, el individuo recurre
regularmente a atracones o purgas.
El grupo de la anorexia nerviosa tipo restrictiva estaría formado por aquellas
personas que utilizan únicamente la restricción alimentaria o el ejercicio excesivo
para bajar de peso y no tienen atracones en forma regular, ni utilizan métodos
purgativos.
Tratamiento
La AN debe ser abordada por equipos interdisciplinarios. 
Cuando se trata de casos leves, puede ser tratada de manera ambulatoria; de lo
contrario, los casos más severos, requieren de internación.
ANOREXIa 
Es importante tener en cuenta como uno de los aspectos prioritarios del abordaje
terapéutico, la toma de conciencia de la enfermedad, el trabajo sobre la imagen
corporal de manera de que sea congruente con la realidad.
Asimismo, tener en cuenta el tratamiento de la familia y en caso de ser necesario el
uso de medicación (neurolépticos (para tratar la psicosis) y antidepresivos
tricíclicos)
Diagnóstico diferencial
Una posible dificultad a la hora de establecer un diagnóstico es el
sobrediagnóstico.
Es bastante común encontrarse con adolescentes que acuden a la consulta con un
diagnóstico de Trastorno de la Alimentación cuando en realidad sólo están
realizando alguna dieta o practicando alguna actividad física para controlar el
peso.
 
La búsqueda de delgadez y la pérdida significativa de peso no alcanzan para
originar un trastorno de la alimentación. Es necesario considerar otras causas
posibles de pérdida de peso. Esta última también puede estar presente en
patologías gastrointestinales, depresión, sida, tumores cerebrales, etc., pero falta
en dichos cuadros la condición o el criterio requerido para el diagnóstico de
Anorexia Nerviosa y que se relaciona con la distorsión de la imagen corporal y el
terror a aumentar de peso.
En personas con el Trastorno Depresivo Mayor también suele haber una pérdida de
peso importante, pero no existen en estos individuos el miedo a ganar peso o el
deseo de adelgazar. 
En la esquizofrenia, se observan patrones de alimentación bastante raros, los
enfermos adelgazan en ocasiones de forma significativa, pero rara vez temen ganar
peso, ni presentan alteración de la imagen corporal (necesarias para establecer el
diagnóstico de anorexia).
 Al igual que en el trastorno dismórfico los individuos con anorexia pueden estar
muy preocupados por un defecto corporal imaginario, pero no se diagnostica
anorexia si la alteración no está relacionada con la silueta y el tamaño corporales.
En la bulimia nerviosa los individuos presentan atracones recurrentes y conductas
encaminadas a no ganar peso (por ejemplo: vómitos), y se encuentran
excesivamente preocupados por la silueta y el peso corporales. Sin embargo, a
diferencia de los enfermos con anorexia nerviosa (tipo compulsivo / purgativo), las
personas con bulimia nerviosa son capaces de mantener el peso igual o por encima
de un nivel normal mínimo. 
 
 MÓDULO IV
Hacer una dieta es una condición necesaria pero no suficiente
para llegar a un Trastorno Alimentario.
 LECCIÓNN° 3
 PSICOPATOLOGÍA NUTRICIONAL - BULIMIA
1. Bulimia Nerviosa
La Bulimia Nerviosa es uno de los trastornos alimentarios más frecuentes, junto
con la Anorexia Nerviosa que se encuentran dentro de los fenómenos
psicopatológicos de la época.
Todos estos trastornos comparten varios síntomas en común: desear una imagen
corporal perfecta y distorsionar la realidad frente al espejo. Esto ocurre porque, en
las últimas décadas, ser físicamente perfecto se ha convertido en uno de los
objetivos principales de las sociedades desarrolladas. Es una meta impuesta por
nuevos modelos de vida en los que el aspecto parece ser el único sinónimo válido
de éxito, felicidad e incluso salud.
¿Qué es la Bulimia nerviosa? 
Su nombre deriva del término griego “comer como buey”. Es un desorden
alimentario que se caracteriza por episodios en los que el individuo come
excesivamente y después intenta compensar por métodos inapropiados para no
aumentar de peso. Además, la autoevaluación de los individuos con esta
enfermedad se encuentra excesivamente influida por la silueta y el peso
corporales.
Es necesario, como veremos más adelante, que estas conductas tengan lugar un
promedio de dos veces por semana durante un período de tres meses para
diagnosticar Bulimia Nerviosa. 
Se define el atracón como el consumo a lo largo de un período corto de tiempo de
una cantidad de comida muy superior a la que la mayoría de los individuos
comerían en el mismo lapso. 
Esta voracidad va acompañada por una sensación de falta de control sobre la
cantidad o el tipo de comida que ingieren. Por este motivo, la persona recurre a
conductas compensatorias para no aumentar de peso: como vómitos
autoprovocados, uso de laxantes, diuréticos, enemas u otras medicaciones, ayuno
o ejercicio excesivo. 
La característica central de la Bulimia Nerviosa es la presencia de atracones
acompañado de un sentimiento de pérdida de control. Estas situaciones de 
descontrol suelen ser el origen de conductas purgativas para neutralizar los
efectos del atracón sobre el peso. Erróneamente, estos pacientes suponen que las
calorías no se absorben si utilizan conductas purgativas. Al no tener resultado en la
pérdida de peso, es que continúan en un círculo vicioso del que les resulta difícil
salir:
Atracón Purga Aumento de Peso Preocupación Atracón
 
 
La causa de la Bulimia suele ser resultado de múltiples factores, sin que ninguno
de ellos por sí mismo puede explicar la aparición de estas patologías. 
Factores predisponentes biológicos
Se ha observado una vulnerabilidad genética. A su vez, diversos estudios de
investigación asocian la bulimia nerviosa con alteraciones en diversos
neurotransmisores cerebrales, que son las sustancias mensajeras que usan las
neuronas para comunicarse entre sí, como la noradrenalina, la serotonina o las
endorfinas. 
Factores psicológicos
Las personas bulímicas, en general, presentan cierta labilidad emocional, tienen
baja autoestima, pudiendo aparecer este cuadro con más frecuencia en personas
con trastornos depresivos y de ansiedad. Algo que se observa con frecuencia es un
déficit en el control de los impulsos que acrecienta las posibilidades de incurrir en
conductas adictivas. También, podemos mencionar como factor predisponente los
antecedentes individuales de obesidad. 
Factores familiares
Las familias de estos pacientes, en algunos casos, comen en forma excesiva. La
convivencia con personas que le dan mucha importancia al peso y a la comida
puede influir en el desarrollo de la bulimia. Los estudios reportan que las personas
con cualquiera de los trastornos alimentarios tienen mayor probabilidad de tener
padres que sufren de alcoholismo o abuso de sustancias que la población en
general. 
Algunas bulímicas refieren contactos tempranos con figuras parentales distantes y
frías. Por otra parte, con frecuencia, los padres tienen entre sí relaciones
tormentosas conflictivas. Parece existir una cierta tendencia a que los miembros de
familias de bulímicos expresen manifestaciones de hostilidad y no siempre tengan
presentes las necesidades afectivas de los hijos.
 Etiopatogenia: El origen de la Bulimia es multifactorial: Factores
biológicos asociados (alteraciones en neurotransmisores), factores
psicológicos, familiares y socioculturales.
 
Factores socioculturales 
De todos ellos, el factor sociocultural, resulta ser uno de los factores más
determinantes. El consumo de objetos es una actividad a la que el hombre se aboca
afanosamente, tanto que, aunque aparentemente es el hombre el que consume los
objetos, no está claro si finalmente no son éstos los que lo consumen a él. 
Todos quienes han investigado el tema de los trastornos alimentarios reconocen la
presión que ejerce la cultura en relación con el ideal de las formas delgadas como
sinónimo de éxito, aprobación y belleza.
Al igual que en la anorexia, vemos cómo facilita la aparición de estas patologías el
querer realizar un ideal corporal.
En la adolescencia el cuerpo se constituye en un terreno propicio para que los
jóvenes desplieguen sus conflictos en relación con el culto dedicado a la imagen.
Alteraciones Psicológicas
Los trastornos de la alimentación rara vez se presentan en forma aislada.
Frecuentemente, se asocian a ciertas alteraciones de la personalidad. 
Las pautas de comportamiento que se observan son
Factores biológicos 
Factores psicológicos
 
 
 
 Factores sociales
Factores familiares 
Podemos decir que las características cognitivas de los pacientes bulímicos son muy
semejantes a las observadas en pacientes anoréxicos, en lo que concierne a sus
pensamientos y actitudes relacionados con el peso el cuerpo y la alimentación. 
La diferencia más notable radica en que la persona bulímica suele experimentar dificultades
en el control de sus impulsos en general, no solamente en lo relativo en el área alimentaria,
por eso con frecuencia se observa el abuso de sustancias, la promiscuidad sexual, frecuentes
cambios de pareja e incluso robos y mentiras. Por el contrario, la persona anoréxica peca de
hipercontrol.
Síntomas Físicos 
Las personas bulímicas pueden presentar entre otros síntomas las siguientes manifestaciones
sintomáticas: Inyección de las conjuntivas(ojos rojos), mareos, callos en el dorso de los dedos
por provocarse el vómito con éstos (Signo de Russe), pérdida del esmalte dental, caries,
pérdida de piezas dentarias (por efecto del ácido proveniente del vómito), inflamación de las
encías (gingivitis), reflujo, aumento de tamaño de las glándulas parótidas, lastimaduras en la
faringe, lesiones esofágicas, úlceras, neumonía (por la aspiración del vómito) pérdida de
potasio, debilidad muscular, deshidratación, daño renal, constipación, osteoporosis, colon
irritable. 
 Pérdida del esmalte dental
 Hipertrofia parotidea 
Hipotensión
 Esofagitis 
Perdida de potasio 
 
 Dilatación gástrica Callos en
los dedos
 Constipación
Bulimia Nerviosa según el DSMIV
1-Presencia de atracones recurrentes:
Un atracón se caracteriza por: 
1) Ingesta de alimentos en pocoespacio de tiempo (Por ej: 2hs.) en cantidad
superior a lo que es habitual en otras personas en el mismo tiempo y en las mismas
circunstancias.
 2) Sensación de pérdida de control sobre la ingesta de alimentos. (Por ej:
sensación de no poder parar de comer o no poder controlar el tipo o la cantidad de
comida que se está ingiriendo).
 
2-Conductas compensatorias inapropiadas de manera repetida con el fin de no
ganar peso (provocación del vómito, uso excesivo de laxantes, diuréticos, enemas,
ayunos, ejercicio excesivo, etc.).
1.Los atracones y las conductas inapropiadas tienen lugar al menos dos veces a la
semana, durante un período de tres meses.
2-La autoevaluación está exageradamente influida por el peso y la silueta
corporales.
3.La alteración no aparece exclusivamente en el transcurso de la AN.
Especificar el tipo: 
a) Tipo purgativo: El individuo se provoca regularmente el vómito o usa laxantes,
diuréticos, o enemas en exceso.
b) Tipo no purgativo: El individuo utiliza otras condiciones compensatorias
inapropiadas (Por ej: ayuno, ejercicio intenso) pero no recurre a provocarse el
vómito, ni usa laxantes, diuréticos, ni enemas en exceso. 
Tratamiento
Las patologías alimentarias deben ser abordadas por equipos interdisciplinarios,
incluyendo médicos clínicos, especialistas en Nutrición y psicoterapeutas. 
El objetivo del tratamiento es que la paciente pueda controlar el impulso que la
lleva a comer en exceso para evitar el atracón. Para esto hay que reforzar su
autoestima y enseñar a las pacientes a enfrentar los problemas sin tener conductas
autodestructivas. 
 La exploración de los trastornos alimentarios supone un interrogatorio que releve
información acerca de la cantidad, frecuencia y tipos de alimentos ingeridos. Se
puede pedir al paciente o a la familia que realicen anotaciones de lo ingerido
durante el día para obtener información más precisa
La dificultad que presentan estos tratamientos es que en general no se consulta y
cuesta mucho conseguir la adhesión al tratamiento por parte de las pacientes.
Cuando las complicaciones son graves requieren intervención clínica y en ocasiones
internaciones (perforación esofágica, alteración hidroelectrolítica severa, etc.). 
Evolución y pronóstico
El pronóstico a largo plazo es desconocido. Aunque se sabe que algunas personas
mejoran con los años, otras pueden hacerse persistentes y presentar trastornos
depresivos o conductas adictivas.
 
Diagnóstico diferencial
Con Anorexia Nerviosa…
La Bulimia Nerviosa y la Anorexia Nerviosa comparten ciertas características:
 Miedo a ganar peso.
 Deseo de adelgazar.
 Insatisfacción respecto al propio cuerpo.
Sin embargo… 
 Las personas con bulimia nerviosa son capaces de mantener el peso igual o
por encima del nivel normal mínimo. 
 El inicio de la enfermedad generalmente es más tardío en la bulimia, siendo
la evolución de la bulimia más optimista que la de la anorexia nerviosa.
Con el Síndrome de Atracón….
Con respecto al diagnóstico diferencial con el Trastorno por Atracón, se debe tener
en cuenta que, si bien ambos cuadros presentan recurrentes episodios de
atracones, en la Bulimia existen conductas compensatorias inadecuadas como
vómitos autoinducidos, uso de laxantes, diuréticos, ayunos, ejercicio físico
excesivo, etc., mientras que en el Síndrome de Atracón alimentario no hay
presencia de conductas compensatorias para neutralizar los atracones.
 MÓDULO III LECCIÓN 1 INTRODUCCIÓN A LA
PSICOPATOLOGÍA
Así como la anorexia nerviosa es una distorsión en la imagen corporal, la
Bulimia Nerviosa es un trastorno del control de los impulsos respecto de
la alimentación.
El área intelectual:
Está dada por el coeficiente intelectual. 
Se mide con diferentes tests.
Cuando se produce alguna alteración del área intelectual estamos en presencia de
retrasos mentales. En este caso el cociente intelectual, medido con pruebas
estandarizadas y de aplicación individual, debe estar por debajo de 70. Las
personas con retrasos mentales tienen además importantes problemas
adaptativos.
Las causas de los retrasos mentales pueden ser:
  Factores genéticos (síndrome de Down, síndrome de fragilidad del cromosoma X,
etc.).
  Errores congénitos del metabolismo (fenilcetonuria, etc).
  Alteraciones del desarrollo embrionario (lesiones prenatales, etc.). 
 Enfermedades infantiles (traumatismos, infecciones). 
 Graves déficits ambientales.
El área afectiva:
En esta área encontramos las pasiones, emociones y sentimientos que el individuo
experimenta según las situaciones de la vida. Las personas que no presentan
problemas en esta área tienen Eutimia. 
También, encontramos otros individuos que piensan que está “todo bien”, todo les
parece buena noticia. Entonces, decimos que la afectividad está elevada hacia el
polo positivo, a esto se llama Hipertimia placentera y es característica de las
personalidades maníacas, como veremos más adelante. 
Otra posibilidad se plantea en los casos de Hipertimia displacentera y se
caracteriza por que el individuo piensa que está “todo mal”, todo lo angustia. En
estos casos, la afectividad está elevada hacia el polo negativo y es característico
del individuo depresivo. La Hipotimia se encuentra en aquellos individuos que
presentan aplanamiento afectivo, nada les importa ni los motiva y podemos
encontrarlo en sujetos esquizofrénicos.
Afectividad (timia) Característica principal 
Eutimia No presenta patología 
Hipertimia Placentera Todo es buena noticia, todo está
bien.
Hipertimia Displacentera Todo está mal y es angustiante. 
Hipotimia Aplanamiento afectivo
El área afectiva comprende Sentimientos
 Emociones
 Pasiones
Los sentimientos son estados afectivos de carácter duradero y de moderada
intensidad. Se hallan relacionados con la vida psíquica y con los valores más
sólidos de cada individuo. Las emociones son estados afectivos pasajeros que
surgen de manera brusca e intensa. 
Cuando la reacción emocional es violenta y adopta las formas de crisis, hablaremos
de shock emocional. Las emociones se aprecian exteriormente por la expresión
facial, las actitudes y movimientos del cuerpo, gesticulaciones, emisión de la voz,
etc. 
Interiormente aumentan los latidos del corazón, tensión muscular, sequedad de la
boca, etc. Por último, las pasiones participan de la intensidad de las emociones y
de la duración y estabilidad de los sentimientos. De aquí su carácter dominante y
permanente: pasión por el dinero, el poder, la verdad o la justicia.
LA AFECTIVIDAD EN TODAS ESTAS MODALIDADES AFECTA A LOS CONTENIDOS DEL
CONOCIMIENTO, A NUESTRAS PERCEPCIONES, DECISIONES Y ACCIONES EN
CUALQUIERA DE LOS DOS POLOS: PLACER/DOLOR. ENTRE EL AGRADO Y EL
DESAGRADO SE PRESENTA UNA SERIE DE ESTADOS AFECTIVOS DIFÍCILES DE
PRECISAR.
El área volitiva:
Voluntad, bulia: Está relacionada con el deseo de realizar cosas, y la capacidad de
proyectarse hacia el futuro. Al igual que cuando hablamos del área afectiva,
también aquí encontramos diferentes manifestaciones de la voluntad según ésta se
exprese en más o en menos.
Voluntad (bulia) Característica principal
Eubulia No presenta patología 
Hiperbulia El individuo empieza muchas cosas, pero nunca logra
finalizar nada. 
Hipobulia El individuo no tiene ganas de hacer nada
La voluntad es el potencial que traduce en actos nuestro pensamiento. Es

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