Membrana plasmática o celular

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Membrana plasmática o celular 
 
La membrana plasmática, también conocida como membrana celular, es una 
estructura fundamental presente en todas las células. Es una delgada capa 
compuesta principalmente de fosfolípidos y proteínas que rodea y delimita la célula, 
separándola del entorno externo. La membrana plasmática tiene varias funciones 
esenciales para el funcionamiento celular: 
• Barrera selectiva: La membrana plasmática regula el paso de sustancias 
dentro y fuera de la célula. Actúa como una barrera selectiva que controla el 
intercambio de moléculas y iones, permitiendo que algunas sustancias 
atraviesen libremente, mientras que otras requieren proteínas 
transportadoras o canales específicos. 
• Homeostasis: La membrana plasmática contribuye a mantener el equilibrio 
interno de la célula, controlando la concentración de iones y moléculas 
esenciales. Mantiene un gradiente de concentración entre el interior y el 
exterior celular, lo que es fundamental para procesos como el transporte 
activo y el potencial de membrana. 
• Comunicación celular: La membrana plasmática contiene receptores de 
superficie y proteínas de unión que permiten la comunicación entre células 
adyacentes o con el entorno extracelular. Estos receptores pueden reconocer 
y unirse a moléculas específicas, transmitiendo señales y desencadenando 
respuestas celulares. 
• Transporte de sustancias: La membrana plasmática facilita el transporte de 
moléculas y nutrientes necesarios para la célula. Puede realizar transporte 
pasivo, como la difusión simple y facilitada, así como transporte activo, 
utilizando energía para mover sustancias en contra de su gradiente de 
concentración. 
• Protección y soporte: La membrana plasmática proporciona protección física 
a la célula, manteniendo su integridad estructural. También puede contener 
proteínas especializadas, como proteínas de anclaje y proteínas 
estructurales, que ayudan a mantener la forma y estabilidad de la célula. 
 
En resumen, la membrana plasmática es una estructura vital en las células, que 
actúa como una barrera selectiva, permite la comunicación celular, facilita el 
transporte de sustancias y contribuye a la homeostasis y protección celular. Es una 
característica común a todas las células y desempeña un papel fundamental en su 
funcionamiento adecuado.