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Ciencias del comportamiento I Unidad 1: Las ciencias del comportamiento y la conducta organizacional Néstor CAROLA, Adriana DEVALLE, Guía de estudio de la Asignatura Ciencias del Comportamiento I. Instituto Universitario Aeronáutico. IUA año 2000 Arreglos: Lic. Constanza Buteler, Lic. Carina Tofful 3.3. Supuestos de Autoactualización Un cierto número de psicólogos que estudiaban la conducta humana en las organizaciones estaban de acuerdo con la proposición básica de Mayo respecto a que la vida industrial ha hecho perder su significado al trabajo. Sin embargo, esta pérdida de significado no se relaciona solamente con las necesidades sociales que las personas no pueden satisfacer en el mismo, sino con la necesidad inherente a los seres humanos de usar sus habilidades, autoafirmarse de modo creativo, autónomo, consciente y capaz de tomar decisiones. Para Argyris, Maslow, Mc Gregor, entre otros autores, el problema es que gran parte de los empleos de la industria moderna, junto al desarrollo tecnológico y sus repercusiones sobre la organización produce una mayor tecnificación del trabajo, y en muchos casos una mayor mecanización que empobrece y fragmenta el trabajo, lo hace más monótono, rutinario, dificulta las interacciones con otros trabajadores, no le permite a los trabajadores hacer uso de sus capacidades, ni tampoco pueden apreciar de qué modo se relaciona lo que hacen con la misión global de la organización. Un nuevo conjunto de principios, más globales en su mirada sobre la naturaleza humana, se bosquejan en estos supuestos de autoactualización. Y que si los expresamos en los mismos términos de D. Mc Gregor se identifican como "Teoría y" (contraponiéndose sustancial mente a la Teoría X o supuestos racionales- económicos) . Supuestos de la Teoría Y a. Las motivaciones humanas caen en una jerarquía de categorías. Empezando con la más básica, son ellas: 1. las necesidades fisiológicas básicas; 2. las necesidades de supervivencia, protección y seguridad; 3. las necesidades sociales y de afiliación; 4. las necesidades de autosatisfacción e importancia; 5. las necesidades de autoactualización, es decir, la necesidad de hacer uso máximo de su propio talento y recursos. A medida que se satisfacen las necesidades más básicas del individuo (de alimento, bebida y sueño) se empiezan también a satisfacer las necesidades de orden superior. Aún las personas que consideramos "sin talento" buscan un sentido de significado y de logro en su trabajo si otras necesidades ya se han podido satisfacer (Maslow, 1954; Hughes, 1958). b. El individuo trata de madurar en el trabajo y es capaz de hacerlo en el sentido de tener cierta autonomía e independencia, de adoptar una perspectiva a largo plazo, desarrollar capacidades y habilidades especiales, y de tener más flexibilidad para adaptarse a determinadas circunstancias (Argyris, 1964). c. La gente, por lo general, puede motivarse y controlarse a sí misma, los incentivos y controles externos a los que están expuestos pueden constituirse en una amenaza y reducir su capacidad de adaptación (Argyris, 1964). d. No existe un conflicto inherente entre la autoactualización y una efectiva actuación organizacional. Si al empleado se le da la oportunidad puede integrar sus objetivos con los objetivos de la organización (Mc Gregor, 1960). Para ampliar y ejemplificar puede ser útil reflexionar sobre la posición de Argyris, quien sostiene que las organizaciones laborales suelen crear situaciones de dependencia y de riguroso control, con un liderazgo directivo y una planificación detallada de las tareas que en muchos casos son poco enriquecedoras. De este hecho resulta una fuerte oposición entre el individuo y la organización y una falta de congruencia entre las necesidades individuales, (la aspiración al crecimiento, al logro, a nuevos desafíos), y las demandas de la organización formal. De lo que sigue, lo invitamos a reflexionar sobre el impacto de ciertas organizaciones formales, (a través de su estructura y reglas), en el comportamiento de los individuos. Chris Argyris desarrolló un interesante modelo para explicar la relación entre el desarrollo de la personalidad humana y la organización formal: Argyris1 sostiene que las etapas normales del desarrollo humano se inician cuando el infante depende de los demás para la satisfacción de sus necesidades y tienen una conducta pasiva, en contraste con los adultos, que son idealmente independientes, autónomos y tienen una conducta activa. Sin embargo, conforme las organizaciones formales crecen y se desarrollan, tienden a crear estructuras piramidales en las que la información se centraliza, el trabajo se divide y las tareas se especializan. La administración de este tipo de organizaciones requiere emisión de órdenes, evaluación del desempeño, recompensas y castigos, y esfuerzos para asegurar la conformidad y la perpetuación de la membresía. En efecto, conforme la organización se hace más formal, se requieren individuos que reflejen una conducta más consistente con las características del infante (dependiente y pasivo). Así pues, existe un conflicto entre el adulto luchador y saludable y la organización, ya que se requieren patrones de conducta inconsistentes a ciertos niveles. Esto conduce a la frustración y a las fallas psicológicas. Por ejemplo, cuanto más bajo esté situado el 1 HODGETTS y AL TMAN. ob. cit. pág. 89 empleado dentro de la jerarquía, menos control tendrá sobre sus condiciones de trabajo, y es menos probable que sea capaz de utilizar sus habilidades. Mientras más directivo sea el liderazgo, más dependiente se volverá el empleado, y es probable que ocurran respuestas que reducen la frustración. Algunos empleados lucharán contra la organización para obtener mayor control, otros pueden unirse a un sindicato. Algunos más abandonarán la organización en forma permanente, en tanto que otros la dejarán psicológicamente y tratarán de no verse involucrados en sus asuntos, mostrándose apáticos e indiferentes. Finalmente, otros más le restarán importancia al trabajo y sustituirán la paga más elevada como recompensa por un trabajo sin sentido. Frente a esta organización de tipo tradicional, Argyris va a señalar la necesidad de formular un nuevo modelo de organización, que fundándose en una concepción sobre la naturaleza humana como la que caracteriza a estos supuestos, facilitará la consecución de los objetivos y necesidades organizacionales y conjuntamente incrementará las posibilidades de desarrollo de sus miembros. Estrategia directiva implícita Si un dirigente tuviese supuestos como los que acabamos de mencionar, su preocupación primordial sería ver qué hace que la tarea sea intrínsecamente más significativa y apasionante, de modo que los empleados puedan encontrar en su trabajo sentido de autoestima, de orgullo y de realización. Si se cree que no existe conflicto esencial entre la autorrealización y un rendimiento eficaz en la organización, si además se piensa que las personas son capaces de dirigir su conducta (autodisciplina, autocontrolarse, ser responsable), buscando ejercer una cierta dosis de autonomía e independencia, entonces el rol o papel del dirigente se modifica substancial mente respecto a lo que sería un modo tradicional de ejercer la autoridad y/o sus prerrogativas tradicionales. El dirigente, lejos de constituirse en un mero agente de control, se encontrará por momentos "entrevistando" a un empleado tratando de conocer qué es lo que lo motiva y qué es lo que determina que el trabajo resulte más interesante. Funcionando principalmente como "catalizador" y "facilitador" de la tarea. Ampliando y alentando la participación en asuntos importantes, como así también la autodirección y el autocontrol en sus subordinados. Parte deldesafío será crear un medio ambiente en el que todos los miembros puedan contribuir hasta el límite de sus capacidades y posibilidades, delegando responsabilidad en las dosis que sus empleados puedan asumir. Haciendo uso de los términos de Schein, la motivación deja de ser "extrínseca", es decir la organización hace algo para motivar a la gente mediante recompensas económicas y sociales, y pasa a ser "intrínseca", en el sentido de que la Y bien...¿qué opinión le merece las ideas que sostiene este autor? organización proporciona las oportunidades suficientes para que los empleados con sus motivaciones ya existentes las polaricen hacia los objetivos organizacionales. Desde esta perspectiva se entreabre la puerta para que los individuos puedan satisfacer las diversas necesidades de las que son portadores y se incrementan las posibilidades tanto de mejoramiento en la eficiencia como de compromiso para con la organización. Del supuesto que los empleados desean y pueden comprometerse en la organización de la que forman parte, influyendo en las decisiones y utilizando sus talentos y capacidades en pos de las metas de la misma, se ha plasmado el concepto de "dirección participativa", es decir, la premisa de que los subordinados deben participar en aquellas decisiones que los afectan. (Dicho concepto se ha implementado bajo diferentes modalidades en los últimos años). Evidencia para los supuestos de autoactualización Los postulados aquí subyacentes ponen énfasis en el accionar con cierta autonomía e independencia, en el sentido de aventura, en afrontar desafíos, en el afán de crecimiento, en hacer pleno uso de los recursos que cada uno posee, y en última instancia, en actualizar lo que aún está en estado potencial. Se presupone que son tendencias presentes en todos los individuos, y que sólo pueden manifestarse en la medida en que se logra cubrir o satisfacer las necesidades de índole inferior (fisiológicas, de seguridad, sociales). Según Schein, la evidencia respalda la importancia de estas necesidades en los niveles directivos y en profesionales, pero aún no ha logrado elucidarse qué relevancia tienen las mismas en los niveles inferiores de la organización. F. Herzberg y sus colaboradores pusieron de manifiesto la importancia de estas necesidades en estudios efectuados con contadores e ingenieros, estos últimos señalaron como factores motivadores la posibilidad de asumir responsabilidades, la naturaleza de la tarea realizada, el logro, las posibilidades de progreso y crecimiento (motivad ores intrínsecos), mientras que factores tales como remuneración, condiciones de trabajo, seguridad en el empleo, la naturaleza de la supervisión, etc. pueden generar insatisfacción y reducir la moral si son inadecuados. Pero si al modificar estas condiciones se subsana tal déficit o inadecuación, tal mejoría no incrementa la motivación. Expresado en otros términos esto significa que si un individuo no alcanza un mínimo de condiciones experimentará malestar, no obstante cuando tales factores mejoran y son evaluados favorablemente, a pesar de ello, por sí mismos son insuficientes para generar una alta motivación y un sentimiento de bienestar en el trabajo, para que esto acontezca se requiere de la concurrencia de los motivadores intrínsecos. En la medida en que se incrementaban las personas con mayor capacitación y profesionales que se incorporaban a las organizaciones, también se ha incrementado el interés por conocer de qué manera operan estos factores por los elevados costos que implica tener individuos que no son plenamente eficaces en los niveles superiores de la organización. Mencionábamos que la evidencia no era conspicua en lo que se refiere a la búsqueda de satisfacción de las necesidades más elevadas en los empleados de los niveles bajos de la estructura organizacional. Al respecto Schein plantea que es factible pensar que el trabajador que no está buscando activamente esa autoactualización en su lugar de trabajo no tiene esa necesidad (por ejemplo, si el trabajo otorga seguridad económica entonces el interés y el significado se puede canalizar en actividades de índole familiar, en hobbies, etc.), o bien puede suceder que sencillamente no ha tenido la oportunidad de expresarla. Esto puede suceder porque aún está luchando por suplir necesidades inferiores, o bien porque la organización le "ha enseñado" al trabajador a "no" esperar que puede encontrar sentido o significado en su trabajo. Es muy probable que usted se encuentre con que es harto dificultoso dar una respuesta contundente a los interrogantes planteados. La dificultad reside en que la naturaleza humana no puede ser reducible, ni tan ligera ni fácilmente, a alguno de estos postulados. Piense en usted mismo, ¿acaso puede incluirse en alguna de estas categorizaciones en forma excluyente? En el último conjunto de supuestos que abordaremos, E. Schein trata un conjunto de principios, hipótesis, resultados empíricos que todavía no están sistematizados como para constituir una teoría unificada, pero que intentan hacer justicia a la complejidad humana, de igual manera, ayudan a que pueda entenderse mejor cómo se comportan los individuos en las organizaciones. A los mismos se los desarrolla bajo la denominación de "supuestos complejos". Reflexione y responda: ¿Cuáles de los supuestos expuestos son los que mejor dan cuenta de la naturaleza humana? ¿Cuál de estos supuestos puede hacerse extensivo y aplicable a todos los individuos? Por lo que usted ha observado en nuestras organizaciones, (por ejemplo en el modo en que se dirige a la gente), ¿desde qué supuestos parecen funcionar estas organizaciones? ¿Cuál de las estrategias directivas implicadas en los diferentes supuestos será la correcta?
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