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Arte, responsabilidad y acción social

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Arte, responsabilidad y acción social
Doris Sommer, humanista y autora del artículo, discute sobre la importancia de la capacitación práctica en el arte y cómo esta puede llevar a la creatividad a pesar de las limitaciones, a la par de tener relación con la toma de decisiones racionales en economía y política.
Antanas Mockus es considerado el agente cultural más destacado, es conocido como el "mago de Bogotá" y que es considerado un punto de referencia internacional para la administración creativa. Es filósofo y matemático, electo dos veces como alcalde. La autora menciona que Mockus piensa como artista y se le atribuye ser un alcalde que utiliza la creatividad como herramienta para abordar problemas sociales de diversos orígenes, generando la construcción de una sociedad más democrática. Su enfoque se basa en el valor de las respuestas creativas ante estos desafíos, lo cual ha llamado la atención tanto a nivel nacional como internacional.
La forma en que Mockus ha utilizado la creatividad y la cultura para abordar estos problemas ha generado admiración y ha inspirado a otros líderes y ciudades a preguntarse si los programas de cultura ciudadana podrían tener éxito en sus propias localidades. Su enfoque innovador y su capacidad para pensar "fuera de la caja" han sido reconocidos como ejemplos de cómo la creatividad puede superar la desesperanza y lograr resultados sorprendentes.
Inició un programa llamado "Cultura ciudadana", fue implementado en la ciudad de Bogotá con el objetivo de fomentar la convivencia pacífica y la responsabilidad cívica entre sus habitantes, a través de estrategias creativas que incluían juegos, performances y otras intervenciones artísticas. Los resultados
documentados del programa incluyen una notable reducción de homicidios y un sorprendente aumento en los ingresos fiscales. Estos logros superaron las expectativas de todos, incluido el alcalde y sus asesores. El programa demostró que la desesperanza no es realista y que el esfuerzo y la creatividad pueden generar resultados positivos.
Un ejemplo más sobre la gestión cultural creativa es el 'Teatro de los oprimidos' es una metodología teatral desarrollada por el brasileño Augusto Boal. Esta forma de teatro interactivo surgió como un acompañamiento a la "Pedagogía de los Oprimidos" de Paulo Freire. Boal se dio cuenta de que el teatro tradicional enfrenta riesgos éticos y estéticos al reemplazar los sujetos de la vida real en una obra por un guión escrito por alguien más y actuado luego por otros.
Con el 'Teatro de los oprimidos', busca romper con esta separación entre los actores y el público, alentando la participación activa de las personas, el objetivo es generar un espacio de reflexión y transformación social a través de la representación teatral, inició en Brasil y luego se extendió a todo el mundo.
A través de juegos y ejercicios teatrales, se invita a los participantes a explorar y representar situaciones que reflejen formas de opresión y injusticia social, así estos escenarios teatrales permiten a las personas experimentar y analizar las dinámicas de poder presentes en la sociedad, el objetivo es empoderar a los participantes, invitándolos a encontrar soluciones y alternativas a las situaciones de opresión que se representan en el escenario. Las obras teatrales no se limitan a ser una mera representación, sino que se convierten en un medio para el cambio social y la búsqueda de la emancipación.
El tema del hip-hop y el graffiti al estudio formal y la gestión en diversos espacios, es importante porque amplía nuestra comprensión del arte, desafía las nociones tradicionales de la cultura y la estética, aborda temas sociales y políticos importantes y promueve la inclusión y representatividad en el ámbito académico. Estas formas de expresión artística son relevantes y merecen ser estudiadas y valoradas en el campo académico.
Los humanistas pueden participar de estas prácticas creativas específicas, con ello se busca convertir estas prácticas en modelos inspiradores y en opciones para proyectos de investigación. De esta manera, se busca mostrar cómo las artes pueden contribuir a la construcción de una sociedad más activa y participativa.
En este sentido, los humanistas pueden desarrollar investigaciones con base en la identificación y formulación de temas relevantes, escogiendo textos, fenómenos o prácticas que merecen una mayor consideración en el ámbito académico. La finalidad de estas investigaciones es generar un mayor conocimiento y comprensión sobre el arte y su impacto en la sociedad.
Referencias
Sommer, D. (2008). “Arte y responsabilidad” en Letral: Revista electrónica de estudios transatlánticos de literatura, no. 1: 128–144., 48(S1), 129-139. doi:10.1353/lar.2013.0051

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