Logo Studenta

Como Hacer tu Propio Horno Rustico

¡Estudia con miles de materiales!

Vista previa del material en texto

COMO HACER UN HORNO RÚSTICO, DE LOS DE LEÑA.
En primer lugar hay que elegir el tamaño del horno, ya que los moldes prefabricados de barro 
refractario, conocidos como de Pereruela, se fabrican en varias medidas. Estas son de diámetro 80, 
90, 100 y 120 centímetros. Por motivos de peso y de dificultad de fabricación, el precio va en 
aumento acorde con la medida.
En un horno de 90 cm. de diámetro caben perfectamente dos bandejas de cordero, suficiente para 
comer ocho o diez personas que suele ser lo habitual en una celebración. Dicho horno o molde de 
horno cuesta 240 € y es el material básico de partida ya que sin él es muy difícil (hay quien lo hace) 
construir la bóveda.
1. ELEGIR EL LUGAR PARA CONSTRUIR EL HORNO.
Difícil cuestión la de elegir sitio para colocar el horno, pero si que hay una serie de temas a tener en 
cuenta y que impiden ponerlo donde nos apetece. Lo primero es elegir un sitio al abrigo del viento, 
si es en el interior de un local hay que ponerle chimenea con lo que se complica la cosa y hay que 
informarse muy bien de cómo hacerlo. Nosotros hemos desistido de esa idea y está en la calle por lo 
que después de ver que el viento dominante es del norte se ha elegido el sitio con la puerta hacia el 
sur, en la parte de atrás de la casa. 
También es conveniente que junto al horno a la hora de utilizarlo haya una sombra ya que este se 
suele utilizar en verano y entre el calor del horno y el sol no hay quien pare. Un hueco para la leña, 
algún sentón o poyo corrido sirven de complemento para que todo marche bien. Alguna cervecita 
fría mientras se quema la leña también ayuda.
2. CIMENTACION
Aunque parezca mentira, cuando terminemos el horno puede pesar en torno a 1.200 kilogramos 
motivo por el cual hay que hacerle unos pequeños cimientos. Suponiendo el horno de 90 cm. Hay 
que excavar una losa de unos diez cms. De espesor con un poco mas de profundidad en los laterales 
(20 cms.) como si fuera un catamarán de medidas 130x130 cm.
Esta disposición evita que se abran las paredes y se venga abajo. Una vez realizada la excavación se 
rellena con hormigón de 150 kg de cemento por metro cubico de grava árido de 20 (cinco de grava 
y una de cemento si lo haces en la hormigonera de casa, ojo no os paséis con el agua)
3. PAREDES
Si ya sabéis el material del que queréis construirlas, adelante. Si no lo tenéis decidido a lo mejor os 
ayuda saber que si tenéis la casa en algún pueblo o ciudad pequeña tiene que haber alguna 
escombrera cercana de la que se puede extraer piedra suficiente, por que se necesita realmente 
poca y algunos maderos procedentes de derribo, completamente gratis. Estos maderos conviene que 
tengan alguna cara plana. Con estos materiales el horno cobra un aspecto realmente rústico y algo 
se economiza. Si vais a emplear algún otro tipo de material tened en cuenta el peso del horno (ni se 
os ocurra utilizar ladrillo hueco doble) por lo menos macizo o bloque de hormigón (faconor o 
similar).
La altura de las paredes debe ser tal que una vez terminado quede como la altura de una encimera 
de cocina ( unos 85 cms.) por lo que si se pone madera como en las fotos solo hace falta levantar las 
paredes unos 55 centímetros, ya que luego hay que poner un madero encima del cual descansen los 
maderos transversales que hacen de soporte al cajón que luego veremos, se rellena de hormigón.
Tenemos pues 55 de pared, 10 de los durmientes, 10 de los transversales y aprox 15 del cajón para 
hormigonar, un total de 90. En caso necesario la pared puede ser más pequeña (por ejemplo si los 
maderos que hemos cogido del vertedero son mas gordos)
Importante, si utilizáis madera como en las fotos, tened en cuenta que la madera (los transversales) 
debe descansar siempre sobre madera no sobre piedra o cemento directamente, por eso se pone un 
madero tumbado y otros a lo ancho, todos ellos clavados entre si. 
En el fondo hay que hacer una pared por dos motivos: el primero es porque si no se hace no tiene 
nada que contrarreste el esfuerzo al vuelco de todo el tinglado. El segundo es porque si no, con un 
fondo de 130 no hay quien coja lo del fondo, ya que siempre se utiliza lo de debajo para dejar algo 
(leña casi seguro). 
Por ultimo indicar que siguiendo las técnicas habituales de construcción hay que conseguir que las 
paredes queden sensiblemente aplomadas y los maderos de base de la plataforma nivelados. Por 
cierto, resulta bastante mas fácil jugar con la madera para nivelar que con la piedra, por tanto no 
os importe alguna diferencia entre las dos paredes en un principio, ya que luego con la madera se le 
puede comer de un lado si y de otro no y se queda bien (estamos hablando de diferencias de dos o 
tres centímetros).
4. REMATE DE LAS PAREDES LATERALES
Se pueden rematar colocando ladrillos de galleta entre los maderos
5. BASE DE SOPORTE DEL HORNO
Volvemos a la escombrera para ver si hay unas cuantas tablas viejas para confeccionar un 
entarimado, este debe ir encima de los maderos y no importa que quede un poco cutre porque luego 
no se ve. Si es importante que no queden huecos para que no se escape el hormigón que luego 
pondremos, por lo que si quedan huecos podemos taparlos con algún trozo de panel o cartón.
En los laterales de este entarimado hay que poner unas tablas, que esta vez si que es conveniente 
que tengan buena pinta porque se ven mucho, de manera que se forme un cajon de unos trece 
centímetros de altura. Dentro de este cajón colocaremos un mallazo ( de 3x20x20 es suficiente) y 
luego se hormigona igual que antes con hormigón de 150 o de 175. 
El asunto del mallazo, si tenéis que ir a comprarlo es un rollo, literalmente hablando, ya que te lo 
suministran normalmente en trozos mas grandes, que enrollados no caben en el coche (así que a 
pedir prestada una furgoneta). La otra solución, para no pedir la furgoneta, es comprar varilla de 
acero de la de encofrar de seis mm de diámetro y que te la cortan en trozos de 120 cms. Estos si 
caben en el maletero y luego con alambre y unas tenazas hacer la armadura dentro del cajón, Es 
mucho hierro pero no hay que pedir la furgoneta. El hierro debe quedar envuelto completamente 
en el hormigón y el espesor de este no debería ser menos de 8 o 10 cms. ya que si no, el hierro no 
sirve mas que para que no se raje el hormigón, pero no lo hace trabajar correctamente. Hay que 
dejar unos dos centímetros sin hormigon para luego rematar la encimera.
 
6. COLOCACION DEL HORNO
Muy importante este apartado. Una vez fraguado el hormigón de la base (tres o cuatro días) se 
puede colocar el horno encima. Hay que tener en cuenta que el horno se va a poner a muy alta 
temperatura, por lo que se dilata y se contrae bastante. Este movimiento de dilatación y 
contracción no debe ser impedido bajo ningún concepto, por lo tanto NO SE PUEDE SUJETAR 
CON CEMENTO NI HORMIGONAR EL HORNO PORQUE SE REVIENTA.
Realizada esta salvedad, vamos a colocar el horno sobre una capa de arena y ceniza de unos tres 
cms de espesor (puede ser mas gorda si lo necesitamos). La ceniza de la que hablamos tiene que 
estar muy bien quemada, completamente libre de piedrecitas, clavos y trozos de carbón. Lo mejor 
para conseguir esto es cribarla con una criba fina, si no tenéis la podéis hacer con cuatro listones y 
un trozo de tela mosquitera de esa verde que venden en las ferreterías. De este modo queda una 
ceniza finisima que hay que mezclar con arena mas o menos al 50% (sin agua, eh) se extiende la 
mezcla y se nivela. Después con cuidado se coloca el horno encima en la posición que nos parezca 
definitiva. Conviene efectuar algún ensayo de cómo meter una bandeja dentro, para ver si queda 
cerca o lejos ya que luego no se podrá mover. Cuidado con la espalda al colocar el horno en su sitio, 
con lo que pesa y el tamaño de la base hay que estirar los brazos bastante. Mejor que os ayude 
alguien (mínimo tres personas).
7. COBERTURA CON BARRO DEL HORNO
Otra vez a la escombrera, esta veza por barro. Cuando se derriba una casa vieja, debajo de las 
tejas se solía colocar barro, por tanto fijaos entre los escombros a ver si hay algún montón de tejas 
revueltas con barro, intentad recuperar con paciencia el barro lo mas limpio de tejas que podáis. Si 
tenéis hormigonera, mejor, si no os toca amasar el barro a mano, quitad las piedras y trozos de teja 
que hayan podido quedar y cuando esté bien amasado (sin grumos. Se necesita bastante agua 
porque parece como si se la bebiera) empezar a cubrir el horno con una capa de dos o tres 
centímetros mojando previamente el horno para que se pegue bien.
 Para que no se os tape el agujero de la puerta hay que cortar un trozo de aglomerado de 19 mms. 
Un poco más grande que la puerta pero siguiendo la forma de esta, de manera que nos sirva de 
molde y poder llevar el barro hasta el. De esta manera cuando se seca el barro quitamos el 
aglomerado y se nos queda el hueco a medida. Este trozo de aglomerado conservadlo apartado 
porque luego nos servirá de molde para dibujar la puerta en la chapa que utilicemos para puerta.
Por encima de esta primera capa de barro, sin esperar a que se seque, hemos colocado trozos de 
baldosa antigua de barro, que se quedan pegados como con pegamento, de este modo ganamos 
otros tres cms de espesor de barro, que es de lo que se trata.
 A continuación y de nuevo sin esperar a que se seque nada, le volvemos a dar otra capa de barro. 
En total el barro utilizado ha sido dos carretillas hasta arriba (dos hormigoneras de las pequeñas)
8. REMATE DE LA ENCIMERA
Después de mucho cavilar, y a la vista de que poner baldosas en el sobre de la encimera nos 
complicaba mucho las cosas y el resultado era dudoso nos hemos decidido a ejecutar la encimera 
con mortero de cemento blanco con arena roja lo que le dá un color crema muy agradecido.
9. REMATE DEL HORNO
Si el horno va a estar en la calle, sin tejadillo, hay que darle algo encima que lo proteja. Como no 
sabemos como se comportan determinados productos químicos para impermeabilizar y debido al 
uso alimentario que se va a dar al horno, le hemos dado con una brocha gorda una lechada de 
cemento blanco con un poco de arena roja para tapar las grietecillas que le han salido. Después de 
varios meses de uso le tenemos que volver a dar una segunda capa ya que se ha descascarillado en 
algunos puntos.
10. LA PUERTA DEL HORNO
Muchas vueltas le hemos dado al tema, en la duda de si colocar una puerta con bisagras. Incapaces 
de resolver el tema de una manera fiable, nos hemos decantado por lo mas sencillo, ya que nos ha 
dado miedo el asunto del avance necesario para que la puerta esté vertical. Esto dificulta el tiro del 
horno. Por lo tanto con el aglomerado que a servido de molde para dar el barro sin tapar la puerta 
se copia la figura sobre una chapa de hierro de 1 mm de espesor (galvanizado o no dependiendo de 
lo que tengáis mas a mano), se pinta de negro forja (oxirón o consolán) que hasta ahora a dado 
buen resultado si bien no tardando habrá que darle una segunda mano de pintura. Se le coloca un 
tirador de madera para no quemaros y listo.
11. PRIMERA UTILIZACION DEL HORNO
Llegados a este punto hay que tener la paciencia que nosotros no hemos tenido. Pensad en la 
cantidad de agua que habéis empleado para amasar el barro e imaginad cuanto tiempo puede 
tardar eso en secarse. Pues bien, tarda más, bastante más. Por este motivo hay que esperar dos 
semanas para hacer el primer fuego dentro del horno. ESTE PRIMER FUEGO DEBE SER MUY 
PEQUEÑO, CON CUATRO PAPELES Y CUATRO PALITOS COMO LAPICEROS. Después de 
este primer fuego progresivamente se pueden encender otros añadiendo algún palito mas, pero 
repito, paciencia, poco a poco. Notareis que con poco fuego dentro, si colocáis la mano encima del 
horno se calienta bastante rápido, esto es debido a que esta todavía empapado de agua y el calor se 
transmite a través de esta, incluso puede soltar algo de vapor por alguna grietecilla NO METER 
MAS LEÑA EN ESTE CASO, dejarlo que se apague y la próxima vez encenderlo y meter menos 
leña. Este proceso se debe repetir hasta que no suelte vapor por ninguna grieta ni se caliente 
rápidamente por fuera, si esto último sucede todavía tiene agua. Para calentarse (templado) por 
fuera una vez seco puede tardar con buen fuego dentro, cerca de una hora.
12. TEMPERATURA DEL HORNO
Ya que se trata de un horno rústico no parece muy propio utilizar un pirómetro láser para saber a 
que temperatura se encuentra por lo tanto y ante la falta de tan útil dispositivo procederemos a 
encender la lumbre y nos dispondremos a esperar cuarenta minutos metiendo palitos en el horno en 
tres o cuatro veces. Es mejor meter palitos finos que no tarugos.
Al principio el horno se pone todo negro por dentro, a causa del humo, pero después de ese tiempo 
se empieza a poner blanco, primero por arriba y luego poco a poco va bajando. En función de lo 
blanco que está se puede intuir con un poco de practica la temperatura, si solo esta blanco por 
arriba el horno esta flojo, si va por la mitad, medio y si va por abajo fuerte o muy fuerte. Se 
empujan las ascuas al fondo con un hierro de atizar y adentro con el futuro asado.
13. CONSEJOS
Dado que se trata de una obra durante la cual se van a emplear distintas herramientas, no olvidéis 
los detalles de seguridad. Utilizar calzado apropiado, guantes, etc. Ojo con las alargaderas de los 
enchufes que no estén picadas. Si empleáis la radial para cortar algo cuidado con los ojos que para 
eso están las gafas de protección. Seguramente tendréis algún niño mirando, que alguien lo vigile, 
hay momentos que es mejor parar la obra que seguir allí con la criatura. En suma que esto es para 
pasar el rato, no merece la pena accidentarse. Otra cosa importante, cuidado con el hormigon, es 
extremadamente alcalino y en caso de contacto prolongado con la piel provoca quemaduras que 
pueden ser muy serias. No dejeis que suceda, protejeros y si es necesario lavaros con abundante 
agua.
BUENA SUERTE Y BUEN ASADO, UN ABRAZO A TODOS

Continuar navegando