resumen teo2 parcial

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Fases de la acción humana
1. Deliberación: en esta fase interviene la inteligencia, responde a la pregunta qué debo hacer para perfeccionar mi naturaleza humana, para esto se recurre a un juicio de conciencia.
La conciencia es el juicio de la razón por la que el hombre evalúa la cualidad moral de un hecho en concreto, puede ser: 
Conciencia verdadera: cuando los fines y medios que utilizo perfeccionan mi naturaleza humana
Conciencia errónea: cuando no lo hacen pero yo creo eso.
La persona humana debe seguir siempre el juicio de conciencia, a veces este es erróneo por ignorancia, ignorancia que si conocemos debemos salir de ella y si estamos en duda del juicio, debemos recurrir a consejo.
2. Decisión: acto de determinación por el cual debo decidir algo entre varias opciones. En la deliberación tenemos tres fuentes: 
a) Objeto: es el bien al cual tiende la voluntad y la acción en sí.
b) Intención: el objeto subjetivo que le doy a la acción. El fin es un término de la intención. El fin no justifica los medios. Una intención mala corrompe un hecho que pudo ser bueno.
c) Circunstancias: son un elemento secundario y tienen menor importancia. Son las consecuencias de mi acción. Al igual que la intención, una circunstancia buena, no justifica un hecho que es malo.
	Proporcionalismo y consecuencialismo: en la actualidad se da mucho el juzgar por las consecuencias de las acciones, lo cual es completamente erróneo.
3. Ejecución: se refiere a luego de los procesos anteriores la acción de realiza.
Libertad
La libertad humana plena posee un gran valor porque solo ella hace posible el amor.
La libertad de coacción es la que goza la persona que puede realizar externamente lo que ha decidido hacer, sin imposición ni impedimentos de agentes externos.
En el sentido moral, la libertad se refiere a la capacidad de afirmar y amar el bien, que es el objeto de la voluntad libre, sin estar esclavizado por las pasiones desordenadas y por el pecado.
La libertad humana posee un gran valor porque solo ella hace posible el amor a Dios, acto con el que el hombre imita el amor divino y alcanza el fin para el que fue creado.
Se llama ley eterna al plan de sabiduría divina para conducir toda la creación a su fin.
Propiedades de la ley moral natural: universal, es inmutable y permanente, obligatoria (ya que para tender a Dios, el hombre debe hacer libremente el bien y evitar el mal, esto gracias a la luz de la razón natural).
El elemento principal de la ley de Cristo es la gracias del Espíritu Santo, también la ley escrita, que se puede resumir en el mandamiento del amor.
El comportamiento libre lo regula cada persona según el conocimiento que tiene del bien y del mal. Lo opuesto a la ley moral es el pecado, que es la negación al bien conocido.
La conciencia es cierta si emite juicio con la seguridad moral de no equivocarse, es probable cuando la probabilidad de equivocarse es mucho menor, dudosa si es mayor a acertar y perpleja si no se atreve a juzgar porque piensa que es pecado tanto realizar el acto como omitirlo.
La gracia y las virtudes
La gracia es la fuente de la obra de santificación, sana y eleva la naturaleza humana haciéndonos capaces de obrar como hijos de Dios. Es un don gratuito de Dios.
La primera obra de la gracia en nosotros es la justificación, que es pasar del estado de pecado al estado de gracia o de justicia, porque la gracia nos hace justos. Esta tiene lugar en el bautizo y en la penitencia.
La virtud es una disposición habitual y firme a hacer el bien.
Las virtudes teologales se refieren directamente a Dios, son 3: fe, esperanza y caridad ( por la cual amamos a Dios sobre todas las cosas y a nuestro prójimo).
Las virtudes humanas ordenan nuestras pasiones y guían nuestra conducta según la fe y la razón. Son 4 llamadas cardinales porque todas las demás se agrupan entorno a ellas: prudencia (dispone la razón práctica a discernir en toda circunstancia nuestro verdadero bien y elegir los medio rectos para realizarlo), justicia (constante y firme voluntad de dar a Dios y al prójimo lo que es debido), fortaleza (asegura en las dificultades la firmeza y la constancia en la búsqueda del bien, resistir a las tentaciones) y templanza (modera las atracción de los placeres y procura el equilibrio, asegura el dominio de la voluntad sobre los instintos).
La vida moral está sostenida por los dones del Espíritu Santo que son: sabiduría, entendimiento, fortaleza, consejo, ciencia, piedad y temor de Dios.
El pecado
El pecado es una palabra, un acto o un deseo contrarios a la ley eterna. Es una ofensa a Dios, que lesiona la naturaleza del hombre.
Se pueden dividir en mortales o graves y veniales, según que el hombre pierda totalmente la gracia de Dios o no. Uno es la muerte y el otro la enfermedad del alma.
El pecado mortal lo que tiene como objeto una materia grave y que, además, es cometido con pleno conocimiento y deliberado.
La distinción esencial y decisiva es que el mortal destruye la caridad y el otro no mata la vida sobrenatural, entre la vida y la muerte no existe una vía intermedia.
Pecado personal y pecado original (se contrae no se comete, enfermedad heredada que se cura con el bautismo).
Pecados externos e internos.
Pecados carnales y espirituales.
Pecados de comisión y omisión.
Pecados capitales, son los pecados personales que especialmente inducen a otros, pues son la cabeza de los demás pecados. Son la lujuria, soberbia, avaricia,ira, gula,envidia y pereza.
Tentación: incita al mal.
Las causas de las tentaciones se pueden reducir a tres: el mundo, el demonio y la carne.