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018 Manejo del estrés

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MANEJO DEL ESTRÉS 
Definición 
Se define el estrés como una sensación de tensión tanto física como 
emocional, que puede ocurrir en situaciones específicas difíciles o 
inmanejables, por lo tanto las personas perciben diferentes situaciones como 
estresantes. 
El estrés físico se refiere a la reacción fisiológica del cuerpo a diferente 
elementos desencadenantes, como el dolor que se siente después de una 
cirugía. Este tipo de estrés a menudo lleva al estrés emocional y, a su vez, el 
estrés emocional se experimenta frecuentemente como un malestar físico 
(ejemplo, cólicos estomacales). 
El manejo del estrés se refiere al esfuerzo por controlar y reducir la tensión que 
surge cuando la situación es considerada difícil o inmanejable. (Ver también 
Estrés en la infancia). 
Información 
El manejo del estrés requiere de cierto esfuerzo por parte de la persona para 
hacer cambios emocionales y físicos. El grado de estrés y el deseo de cambiar 
determinan el nivel de cambio que ha de realizarse. 
EVALUACIÓN DE LA EXISTENCIA DEL ESTRÉS 
Actitud: la actitud de un individuo puede influir en que una situación o una 
emoción, sea estresante o no. Una persona con una actitud negativa suele 
percibir muchas situaciones como estresantes pues es un tipo de persona que 
con frecuencia responde con más estrés de lo que lo haría una persona con 
una actitud positiva. 
Bienestar físico: si el estado nutricional de una persona es deficiente, el cuerpo 
está estresado y la persona no es capaz de responder ante una situación 
estresante, lo que la hace más propensa a infecciones. Un mal estado 
nutricional puede estar relacionado con elección de alimentos poco saludables, 
consumo alimenticio inadecuado y horario de comidas errático. Un patrón 
alimentario con un desequilibrio nutricional puede traer como consecuencia un 
consumo inadecuado de nutrientes. 
Esta forma de estrés físico también disminuye la capacidad para enfrentar 
situaciones que se perciben como difíciles o inmanejables (estrés emocional), 
ya que la desnutrición afecta la forma como el cerebro procesa la información. 
La actividad física: la actividad física inadecuada puede provocar un estado 
estresante para el organismo. La actividad física tiene muchos beneficios 
fisiológicos y un programa de actividades físicas consistente puede contribuir a 
disminuir la depresión, si la hay, además de mejorar la sensación de bienestar. 
Los sistemas de apoyo: la mayoría de las personas necesitan de alguien en 
sus vidas en quien confiar en un momento difícil. Una cantidad mínima o la 
ausencia total de sistemas de apoyo hace que las situaciones estresantes sean 
más difíciles de manejar. 
La relajación: cuando una persona carece de intereses externos, pasatiempos 
o de un medio de relajación, es posible que no tenga capacidad para manejar 
una situación estresante porque no tiene una manera de liberar el estrés. 
UN PROGRAMA INDIVIDUAL PARA EL MANEJO DEL ESTRÉS: 
• Pensar positivamente 
• Reenfocar lo negativo en positivo 
• Planificar diversiones y tomarse un descanso 
• Hacer un esfuerzo por eliminar los pensamientos negativos 
Actividad física: 
• Comenzar un programa individualizado de actividad física. La mayoría 
de los expertos recomiendan hacer 20 minutos de ejercicios aeróbicos 3 
veces por semana. 
• Decidir un momento específico y el tipo, frecuencia y nivel de actividad 
física. Se debe planear este momento para que encaje dentro del horario 
y pueda ser parte de la rutina diaria. 
• Buscar un compañero con quien practicar los ejercicios, ya que es más 
divertido y motiva a la persona a no abandonar la rutina de ejercicios. 
• No necesariamente se debe ir a un gimnasio: 20 minutos de caminata 
vigorosa en campo abierto serán suficientes. 
Nutrición: 
• Escoger alimentos que mejoren la salud y bienestar. Por ejemplo, se 
debe incrementar la cantidad de frutas y vegetales. 
• Usar la guía de grupos básicos de alimentos para ayudar a seleccionar 
alimentos saludables 
• Comer cantidades apropiadas de alimentos dentro de un horario 
razonable 
Apoyo social: 
• Hacer un esfuerzo por interactuar socialmente con las personas, ya que 
aunque la persona se sienta estresada, será divertido salir y encontrar 
amigos, así sea sólo para liberar la mente de preocupaciones. 
• Acercarse a otras personas. 
• Cuidarse a sí mismo y a los demás. 
Relajación: 
• Usar técnicas de relajación. Existen muchas técnicas de relajación 
(imágenes guiadas, escuchar música, etc.); aprender sobre las 
diferentes técnicas, probarlas y elegir una o dos que funcionen para 
cada persona. 
• Tomarse tiempo para los intereses y pasatiempos personales. 
• Escuchar al propio cuerpo. 
• Tomar un pequeño retiro 
RECURSOS: 
Si el manejo del estrés no funciona a nivel personal, hay profesionales como 
los licenciados en trabajo social, psiquiatras y psicólogos que pueden ayudar. 
Un programa de sesiones con estos profesionales puede ayudar a aprender las 
estrategias para el manejo del estrés, que incluyen técnicas de relajación. Hay 
distintos tipos de grupos de apoyo disponibles en la comunidad.

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