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FUNCION Y ESTRUCTURA DEL CUERPO HUMANO (49)

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Capítulo 2 Química de la vida 21
Si desea aprender más sobre la formación 
de moléculas, consulte studentconsult.es 
(contenido en inglés).
REPASO RAPIDO
1. ¿Qué tipos de partículas forman la materia?
2. ¿Qué es un compuesto? ¿Y un elemento?
3. Describa un nivel de energía.
ENLACES QUIMICOS
Los enlaces químicos se forman para hacer más esta­
bles los átomos. Se dice que un átomo es química­
mente estable cuando su nivel externo de energía está 
«completo» (es decir, cuando sus capas de energía 
tienen el número máximo de electrones que pueden 
contener). Casi todos los átomos tienen espacio para 
más electrones en su nivel más externo de energía. 
Un principio químico básico establece que los átomos 
reaccionan entre sí de forma que se complete su capa 
más externa de energía. Para ello los átomos pueden 
compartir, donar o tomar prestados electrones.
Por ejemplo, un átomo de hidrógeno tiene un elec­
trón y un protón. Su capa única de energía tiene un 
electrón, pero puede mantener dos; por tanto, no está 
completo. Si dos átomos de hidrógeno «comparten» 
su electrón único, ambos tendrán capas completas de
IH E 1
Isótopos radiactivos
Cada elemento es único en función del número de protones 
que posee. En resumen, cada elemento tiene su propio número 
atómico. Sin embargo, los átomos del mismo elemento pueden 
tener distinto número de neutrones. Dos átomos con el mismo 
número atómico pero distintas masas atómicas son isótopos 
del mismo elemento. Un ejemplo es el hidrógeno. El hidrógeno 
tiene tres isótopos: 1H (el isótopo más frecuente), 2H y 3H. La 
figura muestra que cada isótopo distinto tiene solo un protón, 
pero distinto número de neutrones.
Algunos isótopos tienen núcleos inestables que irradian (o 
emiten) partículas. Las partículas de radiación son protones, 
neutrones, electrones y versiones alteradas de estas partículas 
subatómicas normales. El isótopo que emite radiación se llama 
isótopo radiactivo.
Los isótopos radiactivos de elementos comunes se utilizan a 
veces en la medicina nuclear para valorar la función de algunas 
partes del cuerpo. El yodo radiactivo (125l) introducido en el 
cuerpo y captado por la glándula tiroidea emite una radiación 
que puede medirse fácilmente. Así pues, puede determinarse el 
grado de actividad tiroidea. Mediante analizadores de radiación 
que valoran la localización de los isótopos radiactivos inyectados
energía haciéndolos más estables como molécula de 
lo que sería cada uno de ellos como átomo. Este es un 
ejemplo de cómo se unen los átomos para formar 
moléculas. Otros átomos pueden donar o tomar pres­
tados electrones hasta que la capa más externa de 
energía está completa.
Enlaces iónicos
Una forma habitual de completar la capa más externa 
de energía es formar enlaces iónicos con otros átomos. 
Este tipo de enlace se forma entre un átomo que tiene 
solo uno o dos electrones en su capa más externa (que 
normalmente tendría ocho) y otro que solo necesita 
uno o dos electrones para completar su nivel externo. 
El átomo con uno o dos electrones simplemente «dona» 
su capa externa de electrones al otro que necesita uno 
o dos.
Por ejemplo, como puede ver en la tabla 2-1, el 
átomo de sodio (Na) tiene un electrón en su capa 
externa y el cloro (Cl) tiene siete. Ambos necesitan tener 
ocho electrones en la capa externa. En la figura 2-3 se 
muestra cómo el sodio y el cloro forman un enlace 
iónico cuando el sodio «dona» al cloro el electrón 
de su capa externa. Ahora, ambos átomos tienen com­
pleta la capa externa (aunque la del sodio está un nivel 
de energía más abajo). Como el átomo de sodio ha 
perdido un electrón, tiene un protón más que los elec­
trones que contiene. Esto hace de él un ion positivo,
o ingeridos pueden formarse imágenes de los órganos internos. 
Por ejemplo, el tecnecio radiactivo {"Te) se usa a menudo para 
obtener imágenes del hígado y del bazo. Los isótopos radiacti­
vos 13N, 150 y 11C se utilizan con frecuencia para estudiar el 
cerebro mediante una técnica llamada tomografía por emisión de 
positrones (TEP).
La radiación puede lesionar las células. La exposición a altos 
niveles de radiación puede hacer que las células se transformen 
en cancerosas. Niveles mayores de radiación destruyen com­
pletamente los tejidos, produciendo la enfermedad por radiación. 
A veces se administran dosis bajas de sustancias radiactivas a los 
enfermos de cáncer para destruir las células cancerosas. Los 
efectos adversos de estos tratamientos son consecuencia de la 
destrucción de las células normales junto con las cancerosas.
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