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Diego Gonzalez Hernán Cortés y la caída de Tenochtitlán Hernán Cortés, un conquistador español ambicioso y astuto, desempeñó un papel central en la caída de Tenochtitlán y la conquista de México. Desembarcando en Veracruz en 1519, Cortés se embarcó en una audaz expedición hacia el interior del país, desafiando las órdenes del gobernador de Cuba. Cortés y sus hombres establecieron alianzas con algunos grupos indígenas que estaban descontentos con el dominio azteca y avanzaron hacia Tenochtitlán, la magnífica capital azteca. Durante su estancia en la ciudad, Moctezuma II fue hecho prisionero por los españoles, lo que generó tensiones y levantamientos en la población. En 1521, después de un largo asedio y una serie de batallas, Tenochtitlán cayó ante las fuerzas de Cortés. La ciudad fue saqueada y destruida, marcando el final del imperio azteca. Cortés se convirtió en el gobernante de la Nueva España en nombre de la Corona española. La figura de Hernán Cortés es controvertida en la historia de México. Mientras que algunos lo ven como un valiente explorador y conquistador, otros lo consideran un símbolo de la opresión y el sufrimiento que sufrieron los pueblos indígenas de México durante la conquista española. Su legado sigue siendo objeto de debate y reflexión en la actualidad.
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