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Tratamiento quirúrgico de las malformaciones... 599 Conclusiones Las MAVs cerebrales son una de las enfermedades neuroquirúrgicas más complejas de tratar y deben ser evaluadas siempre en centros de referencia que puedan brindarle al paciente todas las opciones terapéuticas posibles. La cirugía permite la curación inmediata en la mayoría de los casos. En aquellos pacientes con MAVs, Spetzler grado I y II preferentemente, se re- comienda cirugía sin embolización previa. Las MAVs grado III superficiales son tratadas por cirugía con o sin embolización previa, dependiendo de su tamaño. En las MAVs grado IV y V se adopta conducta conser- vadora, exceptuando a aquellas lesiones con múltiples sangrados, asociadas a déficit neurológico progresivo o epilepsia refractaria. Referencias 1. Al Shahi R, C Warlow. “A systematic review of the frequency and prognosis of arteriovenous malforma- tions of the brain in adults”. Brain 2001; 124: 1900-26. 2. Albert, P. “Personal experience in the treatment of 178 cases of arteriovenous malformations of the brain”. Acta Neurochir, 1982; 61:207-26. 3. Batjer H, Devous M, Seibert G, Purdy PD, Ajmani AK, Delarosa M, et al. “Intracranial Arteriovenous malforma- tions: Relationships between clinical and radiographic factors and ipsilateral steal severity”. Neurosurgery, 1988; 23:322-8. 4. Batjer H, D Samson. “Arteriovenousmalformations of the posterior fossa: Clinical presentation, diagnostic evaluation, and surgical treatment”. J Neurosurg, 1986; 64 (6): 849-56. 5. Batjer H, Suss R, Samson D. “Intracranial arteriovenous malformations associated with aneurysms”. Neurosur- gery,1986 Jan; 18(1): 29-35. 6. Courville, CB. “Pathology and natural history of angio- mas of the central nervous system”. 2nd ed. Mountain View, CA: Pacific Press Publishing Association, 1945; 21. 7. 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Graf CJ, Perret GE, Torner JC. “Bleeding from verebral arteriovenous malformations as part of their natural his- tory”. J Neurosurg, 1983; 58: 331-7. sección de una MAV constituye un paso fundamental para prevenir el sangrado posoperatorio. En general, los hematomas secundarios a hemostasia insuficiente ocurren dentro de las primeras 8 horas posteriores a la cirugía, con aumento significativo de la morbilidad y la mortalidad quirúrgica. Una de las causas más fre- cuentes de hemorragia posoperatoria es la presencia de MAV residual. Estos episodios ocurren típicamente dentro de las primeras 12 a 24 hs., y están asociadas a empeoramiento clínico con indicación de cirugía para evacuación de la colección. Epilepsia Las convulsiones pueden ocurrir en el período poso- peratorio inmediato, a pesar del uso de anticomicia- les. Dado que las convulsiones constituyen el primer signo de hematoma cerebral, es necesario realizar una tomografía cerebral ante un episodio comicial. Por lo general, las convulsiones son bien controladas con medicación, presentan buen pronóstico y no repre- sentan un factor de riesgo para el desarrollo de epi- lepsia a largo plazo, a diferencia de los pacientes con convulsiones previas a la cirugía. 23, 28. Heros y col. informaron una prevalencia de epilepsia del 7,1% en la población de pacientes con cirugía de MAV. La mitad de los pacientes con convulsiones preoperatorias no presentaron nuevos episodios luego de la cirugía y no requirieron anticomiciales al final del seguimiento. 15 Evolución Las tasas de morbilidad y mortalidad del cirujano deben ser tenidas en cuenta al decidir el tratamiento quirúrgico de una MAV. En la mayoría de los casos en los que las MAVs son tratadas por cirujanos experimen- tados, la mortalidad es menor al 5% y la morbilidad es menor al 10%. No obstante, es difícil extrapolar estas cifras debido a la gran variabilidad de las lesiones y de los pacientes. Obviamente, las MAVs más grandes y complejas se asocian a mayor morbilidad y mortali- dad y este hecho debe ser explicado al paciente antes de optar por la cirugía como tratamiento. Las MAVs superficiales pequeñas o medianas, localizadas en áreas no elocuentes, pueden ser resecadas con facili- dad por cirujanos experimentados. Por otro lado, la resección de MAVs profundas de tamaño moderado, con localización cercana a la cápsula interna y al tá- lamo, se asocian a mayor riesgo de déficit posopera- torio importante. Nuestra serie retrospectiva, de 468 pacientes operados entre los años 1980 y 2004, que ordenamos de acuerdo a la clasificación de Spetzler- Martin (Tabla 56.3), reveló los siguientes resultados: mortalidad global 2,2% y tasa de incidencia de déficit neurológico mayor y menor de 3,8% y 9,2%, respec- tivamente. Los pacientes con MAVs grado I y II han tenido excelente evolución, con una incidencia de déficit neurológico menor posoperatorio de 2,8% y con 0% de mortalidad.
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