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NeuRociRugíA / Basso620 V as cu la r P 2. Embolización venosa con cola (cianoacryla- to): Se ha realizado a través de un cateterismo retrógrado en algunos casos. 25, 26 Consiste en cateterizar el seno de drenaje y luego microca- teterizar la vena desde su origen en el seno, en forma retrógrada, hasta el sitio de la fístula. El objetivo es la oclusión del origen de la vena de drenaje, que produce la cura definitiva de la fístula. Por desgracia, este abordaje rara vez es posible. Puede realizarse en un shunt individual de fístulas tipos III o IV cuando las venas de drenaje permiten su acceso. Se ha propuesto el abordaje quirúrgico con embolización a través de una vena cortical. 63 Cirugía Se han descrito numerosas estrategias quirúrgicas. La técnica quirúrgica se adaptará al tipo de drenaje venoso. 18, 103 No está indicada la cirugía en las FDAV tipo I debido a su evolución benigna, evitándose todo tratamiento invasivo. En los tipos IIA con hipertensión intracraneana o deterioro cognitivo, la mejor opción es la vía endovascular. Para las del tipo IIb la exére- sis quirúrgica del segmento de seno fistuloso o em- paquetamiento quirúrgico directo del seno 29 puede representar una opción terapéutica definitiva si el seno no es funcionante. No obstante, la sola desconexión del reflujo venoso cortical ha sido propuesta como una opción para minimizar el riesgo quirúrgico en las del tipo IIb. 23 En los tipos III, IV, o V se indica la interrupción quirúrgica de las venas de drenaje. 1, 19, 21, 80, 99 De hecho se ha propuesto la exéresis agresiva del nido con coagulación extensa de toda la superficie dural, seguido de la resección de las venas asocia- das. 94, 95 Esta técnica efectiva presenta el alto riesgo asociado a la extensa craneotomía y la necesidad de resecar paredes del seno. Con el objeto de minimizar los riesgos, varios autores proponen la interrupción del drenaje venoso cortical. 19, 44, 99 El clipado de la vena, lo más cercano posible a la unión arteriovenosa, es probablemente la técnica más efectiva. Estas cirugías se indican en algunas FDAV en las que las técnicas endovasculares presentan mucho riesgo. Las mejores candidatas para la cirugía, en la actualidad, son las FDAV asociadas al seno petroso superior o peñasco, fosa anterior 72 y las tentoriales. (Figura 58.4) Todas ellas son del tipo III a V y con frecuencia drenan a una vena única. El abordaje arterial es peligroso, dado que las aferencias llegan por ramos meníngeos de la arteria carótida interna o de la oftálmica. En casos muy difíciles se ha descrito la combinación de abordajes endovascular y quirúrgicos. 35, 57, 62 Radiocirugía Se trata de una terapia poco recomendable para la entidad en estudio. 42, 56 Una revisión de 1 600 mal- formaciones arteriovenosas intracraneanas, tratadas entre 1978 y 2003 (25 años), de los que 58 casos eran FDAVs, con un seguimiento angiográfico por 2 años en 41 casos, y con 28 (68%) ocluidas en forma com- pleta, diez (24%) con disminución del flujo en forma significativa y tres casos sin cambios. Dos pacientes resangraron a nivel intracerebral a 2 y 6 meses. Un paciente presentó complicaciones relacionadas con la radiación a los 10 años del tratamiento. Los autores concluyeron que la mayor desventaja de este tratamien- to es el tiempo transcurrido hasta que la obliteración completa ocurra con el riesgo de la persistencia del shunt permeable. No obstante, pueden observarse ca- sos con obliteración temprana (se describe un caso de obliteración a las 10 semanas del tratamiento). 93 La tasa de oclusión más alta, de hasta el 80%, con menor riesgo fue observada en aquellos casos de radiocirugía en FDAVs de seno cavernoso. 37 Como conclusión, dado lo pequeñas y raras de la series reportadas con este tratamiento y debido al tiempo requerido para su obliteración, no es un trata- miento adecuado para las FDAVs con drenaje venoso cortical. Para estos casos, la embolización o la cirugía constituyen el tratamiento de elección. La radiociru- gía debe ser indicada sólo al fallar otras modalidades terapéuticas. La radiocirugía podría estar indicada en aquellos casos de tinnitus intolerable secundario a FDAVs benignas. No obstante, en esos casos a me- nudo la embolización disminuye el flujo reduciendo el síntoma y constituye quizá la mejor opción. Como conclusión, las FDAVs del seno cavernoso sin acceso endovascular posible son tal vez la mejor indicación para radiocirugía. Tratamientos indicados según la topografía FDAVs de la fosa anterior Presentan baja incidencia. Las arterias etmoidales ip- silaterales constituyen casi siempre la aferencia prin- cipal, en algunos casos con aferentes contralaterales o a través de ramos distales de la arteria meníngea Figura 58.3: RNM de cerebro T2 muestra persistencia de vena de drenaje no pasible de tratamiento endovascular.
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