Descarga la aplicación para disfrutar aún más
Vista previa del material en texto
Capítulo 96: Lesiones del plexo braquial en adultos. Timing quirúrgico y técnicas de reparación mARio giLbeRto SiqueiRA, RobeRto mARtinS, mARiAno SocoLovSkY Introducción Debido a su complejidad, el tratamiento quirúrgico de las lesiones traumáticas del plexo braquial constituye el mayor desafío entre las patologías tratadas por los cirujanos de nervios periféricos. Aunque los resultados quirúrgicos no siempre son excelentes, es notorio que a partir de finales de la dé- cada del 60 e inicios de la del 70 44, 47, momento en el que los principios de la microcirugía comenzaron a ser aplicados en estos procedimientos, surgieron nume- rosos refinamientos diagnósticos y técnicos que han mejorado sensiblemente los resultados generales. De manera concomitante a estos avances técnicos, Kline y col. introdujeron los potenciales de acción neural, obtenidos en el intraoperatorio, para la evaluación de las lesiones en continuidad. 26, 27 En los casos de lesiones completas, esa evolución técnica fue aún más significativa, lo que se ejemplifica por la indicación de amputación como tratamiento usual en la década del 60, hoy caída en desuso en detrimento de las modernas transferencias nerviosas y tendinosas, que permiten que muchos pacientes recuperen un nivel de motrici- dad adecuado para su reintegración a la sociedad. Las lesiones traumáticas más comunes del plexo braquial son provocadas por tracción o estiramiento, lo que suele asociarse a afectación de más de un elemento del plexo en forma simultánea, y a lesiones en más de un nivel a lo largo de un mismo elemento. La mayor parte de este capítulo está dedicada a la descripción de estas lesiones y su tratamiento. Conforme ha sido expresado en el capítulo an- terior, el objetivo de la evaluación preoperatoria es la determinación, lo más precoz que sea posible, de cuáles lesiones deben ser exploradas para su repa- ración, y cuáles deben ser observadas clínicamente y enviadas a rehabilitación como único tratamiento. Lamentablemente, debido a la relativa infrecuencia y complejidad de estas lesiones, muchos clínicos y cirujanos asumen una actitud pasiva de esperar a la recuperación espontánea de los movimientos, sin una idea adecuada del límite de tiempo prudencial que debería ser impuesto en esta estrategia. En principio, todos los pacientes con alguna lesión traumática del plexo braquial sin recuperación espontánea, deberían ser considerados candidatos a un tratamiento quirúr- gico. Es más, la única contraindicación que existe para la cirugía es que haya transcurrido un período de tiempo muy prolongado desde la lesión. Dado que la atrofia muscular por denervación co- mienza de inmediato luego del trauma, y que para lograr un restablecimiento exitoso de la función mus- cular los axones motores deben alcanzar las placas motoras como máximo dos años luego de instalada la lesión, existe una tendencia en la literatura a favor de realizar una cirugía precoz, en especial en los casos de lesión preganglionar confirmada. 3 Sin embargo, debe ser tenido en cuenta que cerca del 15% de los pacientes con lesiones plexuales también presentan heridas severas en cráneo, tórax o abdomen. 3 En la práctica, rara vez la cirugía de plexo es indicada en forma inmediata, no sólo por las lesiones concomi- tantes descritas, sino porque una cicatrización más tardía, de tres semanas o un mes, permite la delimita- ción de la extensión de la lesión con mayor precisión. Excepciones a este hecho son las heridas penetrantes por arma blanca, cuando existe una lesión vascular asociada a la lesión neural, cuando ocurren ambas en forma simultánea, o en los casos de lesiones iatrogé- nicas, como por ejemplo una lesión plexual durante una resección de la primera costilla en un paciente con un síndrome del desfiladero torácico. Cuando la lesión plexual se asocia a altos niveles de energía, o Figura 96.1: Incisión para el acceso anterior supraclavicular al plexo braquial
Compartir