El desarrollo de nuevas formas de transporte y energía

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Universidad de Los Andes
Núcleo Universitario “Rafael Rangel”
Departamento de Ciencias Económicas,
Administrativas y Contables
Pampanito, Estado Trujillo
ANÁLISIS
El desarrollo de nuevas formas de transporte
y energía
Elaborado por:
Angelina Paredes
V- 31866214
Septiembre, 2023
El desarrollo de nuevas formas de transporte
y energía es un tema crucial en la actualidad,
ya que la dependencia de los combustibles
fósiles y los impactos ambientales asociados
han llevado a la necesidad de encontrar
soluciones más sostenibles y eficientes. En
este análisis, examinaremos el avance de dos
tendencias importantes: el transporte eléctrico
y las fuentes de energía renovable.
En primer lugar, el transporte eléctrico ha
experimentado un crecimiento significativo en
los últimos años. Los vehículos eléctricos
(EV) han ganado popularidad gracias a una
combinación de avances tecnológicos,
políticas gubernamentales favorables y una
mayor conciencia sobre los problemas
ambientales. Los EV utilizan baterías
recargables para almacenar energía y
alimentar un motor eléctrico, eliminando las
emisiones directas de carbono y reduciendo
la dependencia de los combustibles fósiles.
Empresas como Tesla han sido pioneras en
este campo, desarrollando vehículos
eléctricos de alto rendimiento y estableciendo
una infraestructura de carga a nivel mundial.
Además, muchos fabricantes de automóviles
tradicionales, como BMW, Audi y Nissan,
también han lanzado sus propios modelos de
vehículos eléctricos. A medida que las
tecnologías mejoran y los precios disminuyen,
se espera que la adopción de vehículos
eléctricos aumente aún más.
Sin embargo, a pesar de los avances, el
transporte eléctrico todavía enfrenta desafíos
significativos. La infraestructura de carga,
aunque en constante expansión, aún no es
tan amplia y conveniente como las estaciones
de combustible tradicionales. La autonomía
de las baterías también es un factor
importante: aunque ha mejorado
considerablemente, algunos consumidores
aún tienen preocupaciones sobre la
capacidad de viajar largas distancias sin tener
que recargar.
En cuanto a la energía, el desarrollo de
fuentes renovables ha experimentado un
rápido progreso en los últimos años. La
energía solar y la energía eólica son dos
tecnologías clave en este campo. La energía
solar utiliza paneles solares para convertir la
luz del sol en electricidad, mientras que la
energía eólica aprovecha la fuerza del viento
para generar energía a través de turbinas.
Ambas fuentes de energía tienen ventajas
significativas. Son limpias, renovables y no
generan emisiones de gases de efecto
invernadero. Además, han disminuido sus
costos de producción en los últimos años, lo
que ha permitido su adopción a gran escala
en muchos países. Por ejemplo, en 2020, la
capacidad de generación de energía solar
superó los 700 GW a nivel mundial.
No obstante, el desarrollo de fuentes
renovables también presenta desafíos. La
intermitencia es uno de los principales
problemas: la energía solar solo está
disponible durante el día y la energía eólica
depende de las condiciones climáticas. Esto
implica la necesidad de sistemas de
almacenamiento de energía eficientes y una
red inteligente que pueda equilibrar la oferta y
demanda en tiempo real.
Otro desafío es la infraestructura necesaria
para la generación y distribución de energía
renovable. La instalación de paneles solares y
turbinas eólicas requiere espacio y recursos,
y la conexión a la red eléctrica existente
puede ser costosa y compleja. Sin embargo,
a pesar de estos desafíos, se espera que las
fuentes de energía renovable desempeñen un
papel cada vez más importante en el futuro,
especialmente a medida que se implementen
avances en almacenamiento de energía y
tecnologías de red.
En conclusión, el desarrollo de nuevas formas
de transporte y energía es esencial para
abordar los desafíos ambientales y satisfacer
las crecientes demandas de una sociedad en
constante crecimiento. El transporte eléctrico
y las fuentes de energía renovable son dos
tendencias clave en esta área, y han
experimentado avances significativos en
tecnología y adopción. Sin embargo, todavía
existen desafíos importantes que deben
superarse para lograr una transición completa
hacia un sistema de transporte y energía más
sostenible. A medida que se desarrollan
soluciones innovadoras y se implementan
políticas efectivas, es probable que veamos
un futuro en el que el transporte y la energía
sean más limpios, eficientes y respetuosos
con el medio ambiente.