Descarga la aplicación para disfrutar aún más
Vista previa del material en texto
Título: Células madre pluripotentes inducidas (iPS) Las células madre pluripotentes inducidas (iPS) son células adultas que se han reprogramado para que sean pluripotentes, lo que significa que pueden convertirse en cualquier tipo de célula del cuerpo. Las iPS se crearon por primera vez en 2006 por un equipo de investigadores japoneses. Cómo se crean las iPS Las iPS se crean mediante un proceso llamado reprogramación. En este proceso, se introducen genes específicos en las células adultas, lo que hace que estas células vuelvan a un estado pluripotente. Hay dos métodos principales para crear iPS: ● El método de Yamanaka: Este método utiliza cuatro genes, llamados Oct4, Sox2, Klf4 y c-Myc, para reprogramar las células adultas. ● El método de Thomson: Este método utiliza un virus para introducir genes específicos en las células adultas. Usos potenciales de las iPS Las iPS tienen el potencial de ser utilizadas para una amplia gama de aplicaciones, incluyendo: ● Terapia celular: Las iPS se pueden utilizar para crear células madre que se pueden utilizar para tratar enfermedades. Por ejemplo, las iPS se podrían utilizar para crear células madre cardíacas para reparar corazones dañados. ● Investigación: Las iPS se pueden utilizar para estudiar el desarrollo y la enfermedad. Por ejemplo, las iPS se podrían utilizar para estudiar cómo se desarrollan las células cancerosas. ● Cultivo de tejidos: Las iPS se pueden utilizar para cultivar tejidos y órganos. Esto podría conducir al desarrollo de nuevos tejidos y órganos para trasplantes. Desafíos de las iPS Las iPS aún se encuentran en una etapa temprana de desarrollo. Hay una serie de desafíos que deben abordarse antes de que las iPS puedan ser utilizadas de manera segura y efectiva en el tratamiento de enfermedades. Uno de los desafíos es que las iPS pueden contener mutaciones que pueden provocar el desarrollo de cáncer. Otro desafío es que las iPS pueden no ser tan eficientes como las células madre embrionarias para regenerar tejidos y órganos dañados. A pesar de estos desafíos, las iPS tienen el potencial de revolucionar el tratamiento de enfermedades.
Compartir