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El plan de Ayala

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Efemérides del Mundo del Trabajo
Un día en la vida.
Por: Raúl Jiménez Lescas
Voz: José Antonio Ávila
Mes: Noviembre
Cápsula 5.
Proclamación del Plan de Ayala por Emiliano Zapata. 25 de noviembre de 1911.
La Revolución Mexicana, iniciada el 20 de noviembre de 1910, bajo los postulados del “Plan de San Luís Potosí” de Don Francisco I. Madero avanzaba por todo el país, pero las demandas sociales de los campesinos, obreros y gente del pueblo, no se veían resolver con prontitud.
En el estado de Morelos, Emiliano Zapata se levantó en armas el 10 de marzo de 1911 en Villa de Ayala, formando una guerrilla de 70 hombres. Su primer triunfo fue la toma del pueblo de Jojutla y, para el 29 de marzo, Zapata asumió el mando de las fuerzas maderistas y estableció su Cuartel General en Cuautlixco.
Zapata presentó su plan de entrega de la tierra a Madero, el 24 de junio de 1911, quien, tratando de resolver el problema, inició una gira por Morelos, llegando a Cuautla el 18 de agosto. Ahí lo recibió Emiliano Zapata. Por su parte, Madero, en un acto público, reprobó los ataques que la prensa y los terratenientes lanzaban contra Zapata y, dijo, que cumpliría con las promesas de la Revolución. Por su parte, Zapata concentró sus fuerzas en Villa de Ayala, y lanzó un Manifiesto al Pueblo de Morelos, donde exponía la gravedad de la situación tras el derrocamiento de Porfirio Díaz. En respuesta, el presidente interino, León de la Barra, el 29 de agosto, acordó con el Consejo de Ministros, que el general Victoriano Huerta, reactivara la persecución de Zapata hasta lograr su exterminio.
En el pueblo de Ayoxustla, municipio de Huehuetlán el Chico, Emiliano Zapata y Otilio Montaño redactaron el Plan de Ayala. Después, los coroneles Severiano Gutiérrez y Santiago Aguilar recorrieron los campamentos comunicando la orden de Zapata para una reconcentración en el pueblo de Ayoxustla. Zapata proclamó su Plan de Ayala, el 25 de noviembre de 1911, con el lema: “¡Tierra, Justicia y Ley!” y, perfiló sus armas contra el golpe de estado del general Victoriano Huerta. El punto esencial agrario del Plan es el Sexto, donde se hablaba de la devolución de terrenos, montes y aguas a los pueblos o ciudadanos que habían sido despojados de ellos.
El 19 de junio de 1914, se hicieron agregados al Plan de Ayala, entre la que destacamos:
“Tercero.- La Revolución consideraría concluida su obra cuando se derrocara a Victoriano Huerta, y se estableciera un gobierno con hombres leales al Plan de Ayala, y se llevaran a la práctica las reformas agrarias.”.
Al conmemorarse los 50 años de la promulgación del Plan Agrario de los Zapatistas, el orador oficial, desde el Monumento a la Revolución dijo:
“Del análisis del Plan de Ayala se destaca la firme voluntad de quienes lo redactaron, por evitar la explotación del hombre por el hombre y terminar para siempre con la oprobiosa situación social y económica en que se encontraban nuestros campesinos, como consecuencia de los sistemas feudales y esclavistas vigentes en la primera década del presente siglo y el propósito inquebrantable de los zapatistas, de destruir los sistemas de opresión usados por las clases privilegiadas, para poder entregar la tierra a quienes tenían derecho a ella y así lograr la independencia, dignidad y libertad de la persona humana: único valor permanente.
“Pero el Plan de Ayala y la obra revolucionaria de Emiliano Zapata, no deben ni pueden ser analizados en forma aislada y desvinculados del gran movimiento humanista que se inicia en 1810 y culmina en violento estallido, un siglo más tarde”.
El Plan de Ayala, sin duda, fue el pronunciamiento fundamental para la Reforma Agraria de la Revolución Mexicana.

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